Der. Hum 2000-2006

207

Transcript of Der. Hum 2000-2006

Derechos incumplidos, violaciones legalizadasLos derechos humanos en el sexenio 2000-2006 Centro de Derechos Humanos Miguel Agustn Pro Jurez, A.C.

Director del Centro Prodh Luis Arturo Macas Medina, sj.

Captulo V La defensa de derechos humanos y el periodismo: profesiones de alto riesgo Tzitzi Santilln Hernndez Captulo VI Derechos Colectivos de los Pueblos Indgenas: La legalizacin del despojo David Velasco Yez, sj Contribucin Lilia Moreno Silva Captulo VII La pobreza, las polticas pblicas y los derechos humanos en el sexenio de Fox Mireya Del Pino Pacheco Contribucin Patricia Fernndez Salazar Diseo editorial y de portada Tania Tamara Gmez Gmez Consejo editorial David Velasco Yez, sj Santiago Aguirre Espinosa Luis Arriaga Valenzuela, sj Tania Tamara Gmez Gmez Isabel Urirarte Borneo

Consejo Consultivo del Centro Prodh Magdalena Gmez Rivera Rafael Moreno Villa, sj Alberto Arroyo Picard Maria Luisa Aspe Armella Coordinacin general del Balance 2000-2006 David Velasco Yez, sj Captulo I Impunidad en casos emblemticos de violaciones a derechos humanos Santiago Aguirre Espinosa Captulo II Sistema de Justicia Penal en el sexenio de Vicente Fox Eduardo Reyes Lara Contribucin Santiago Aguirre Espinosa Luis Arriaga Valenzuela, sj Captulo III Represin, violencia poltico-social y derechos humanos en el sexenio de Vicente Fox Tzitzi Santilln Hernndez Captulo IV La Polica Federal Preventiva y los Derechos Humanos Eduardo Reyes Lara

Agradecemos el apoyo de Jocelyn Cervantes Gonzlez

El contenido de este documento puede ser reproducido total o parcialmente, citando la fuente y enviando copia de lo publicado al Centro de Derechos Humanos Miguel Agustn Pro Jurez AC. ISBN 968- 5521-10-1 Primera edicin: Mxico, DF, noviembre de 2006. Serapio Rendn 57b, Colonia San Rafael, CP 06470, Ciudad de Mxico, Distrito Federal. Impresin: Overprint / 5556 8296 Este informe fue posible gracias al apoyo financiero de las siguentes fundaciones y agencias con el apoyo de la Coordinacin Administrativa del Centro Prodh

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

ndiceIntroduccin general7

Captulo I Impunidad en casos emblemticos de violaciones a derechos humanosIntroduccin 1. Planteamiento del problema 1.1 Impunidad y derechos humanos 1.2 La impunidad en las graves violaciones a derechos humanos durante el sexenio 2000 - 2006 2. La Femospp: un caso paradigmtico 2.1 Supremaca de la jurisdiccin militar sobre la civil 2.2 Ausencia de reparacin integral a vctimas y familiares 2.3 Irregularidades administrativas 2.4 Desconocimiento del derecho internacional de los derechos humanos 2.5 Ausencia de resultados 3. Recomendaciones del Centro Prodh y conclusiones Anexo 15 16 18 20 27 28 29 30 32

Captulo II Sistema de Justicia Penal en el sexenio de Vicente FoxIntroduccin 1. Estado de la Cuestin 2. El endurecimiento del sistema de justicia penal: datos histricos 3. La reforma parcial: avances y retrocesos 3.1 Reformas inconclusas 3.2 El Sistema acusatorio a debate 4. Una mirada a la injusticia: el caso Martn Barrios 4.1 Contexto 4.2 Violaciones a sus Derechos Humanos 5. Recomendaciones de Organismo Internacionales de derechos humanos al Estado mexicano 6. Recomendaciones del Centro Prodh 39 40 42 44 45 50 51 52 55 57

Captulo III Represin, violencia politico-social y derechos humanos en el sexenio de Vicente FoxIntroduccin 1. Patrones de aplicacin de la violencia del 62 Estado y casos relevantes en el periodo 1.1 Comunidades en resistencia 1.2 La represin como respuesta a los esfuerzos de organizacin, el activismo y los reclamos de derechos 1.3 Represin sindical 1.4 La criminalizacin de la protesta 1.5 La impunidad 2. Marco jurdico nacional e internacional 61 62 64 72 73 75

3

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

2.1 Sobre la libertad 2.2 Sobre la libertad de reunin y de asociacin 2.3 Sobre la libertad de asociacin en materia laboral 2.4 Sobre la integridad personal y comunitaria 2.5 Sobre la tortura 2.6 Sobre el empleo de la fuerza y armas de fuego 2.7 Sobre las ejecuciones extrajudiciales 3. Recomendaciones al Estado Mexicano

76 77 78

Captulo IV La Polica Federal Preventiva y los Derechos HumanosIntroduccin 1.- Marco Constitucional de la Seguridad Pblica en Mxico 1.1 La creacin de la Polica Federal Preventiva 2. La Polica Federal Preventiva: una polica militarizada 3. Casos que muestran violaciones a los derechos humanos cometidos por elementos de la Polica Federal Preventiva 3.1 Ejecuciones extrajudiciales 3.2 Tortura 3.3 Libertad de reunin y de asociacin 4. El derecho internacional de los derechos humanos 4.1 Sobre el derecho a la vida 4.2 Sobre el derecho a la integridad personal 4.3 Sobre la libertad de reunin y de asociacin 5. Conclusiones 6. Recomendaciones 83 84 85 87 89 91 93 94 95

96

Captulo V La defensa de derechos humanos y el periodismo: profesiones de alto riesgoIntroduccin 1. Defensores de derechos humanos 1.1 Patrones de violacin al derecho a defender los derechos humanos 1.2 Marco jurdico de proteccin a defensoras y defensores de derechos humanos 2. Periodistas 2.1Patrones de violacin 2.2 El marco jurdico internacional y nacional 2.3 Reforma a la Ley General de Radio y Televisin 3. Recomendaciones de organismos internacionales y nacionales 101 102 103 111 112 113 119 120 122

Captulo VI Derechos Colectivos de los Pueblos Indgenas: La legalizacin del despojoIntroduccin 1. En qu radica la violacin sistemtica y estructural de los derechos colectivos de los pueblos indgenas en Mxico? 2. Casos concretos y patrn de violaciones 2.1 La reforma constitucional en materia de derechos y cultura de los pueblos indgenas 2.2 Relacin de casos y situaciones ms relevantes de despojo de los recursos naturales de comunidades indgenas 2.3 La disputa por el control de la biodiversidad en Montes Azules 125 126 132 133 140 143

4

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

3. Instrumentos internacionales del derecho internacional que protege los derechos colectivos de los pueblos indgenas 4. Recomendaciones de los organismos internacionales al Estado mexicano, sobre la situacin de los derechos colectivos de los pueblos indgenas 5. Recomendaciones del Centro Prodh

145 150 156

Captulo VII La pobreza, las polticas pblicas y los derechos humanos en el sexenio de FoxIntroduccin 1. La pobreza del libre mercado 1.1 El modelo econmico global y el contexto mexicano 1.2 Algunas referencias sobre la pobreza y la desigualdad en las que tiene responsabilidad el Estado mexicano 1.3 Desempleo, migracin, subempleo 1.4 Conflictividad social 2. El sexenio 2000-2006: las formas de la continuidad en la poltica econmica y social 2.1 Algunos ejemplos en programas, leyes y acciones de gobierno 3. Conclusiones en base al derecho internacional de los derechos humanos 4. Informes y recomendaciones del Sistema Interamericano y el Sistema Universal 5. Recomendaciones del Centro Prodh 161 162 166 170 174 176 189 194 197

Conclusiones y Recomendaciones

201

5

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

Captulo Introduccin general

Hacia el final de cada ao, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustn Pro Jurez, AC (en adelante, Centro Prodh), da a conocer un informe anual sobre la situacin de lo que, en nuestra opinin, son las violaciones a los derechos humanos ms relevantes y que, por su importancia, generan las condiciones para una mayor violacin a diversos derechos. El final del ao 2006 coincide con el fin de un sexenio, el del presidente Vicente Fox Quesada, y el inicio de otro, el del presidente electo Felipe Caldern Hinojosa. Los dos pertenecen al mismo partido poltico, el Partido Accin Nacional. Por esta ocasin, como ya se haba hecho en el ao 2000, nos propusimos hacer una valoracin de los aspectos ms crticos en cuanto a la violacin de algunos derechos humanos a lo largo del sexenio de la alternancia. Aunque siempre nos referimos en el grupo de trabajo del Centro Prodh a este informe, como el balance sexenal, expresamente decidimos llamar la atencin ms sobre las sombras que sobre sus luces. De stas se ha encargado de manera especial y con particulares xitos, la Secretara de Relaciones Exteriores y la Unidad para la Promocin y Defensa de los Derechos Humanos, de la Secretara de Gobernacin. A lo largo de este ao 2006, y en medio de la agitada campaa electoral y poselectoral que de por s representan una de las ms masivas y sistemticas violaciones de los derechos civiles y polticos realizamos reuniones de trabajo en las que fuimos afinando el foco sobre el mayor y ms grave patrn de violaciones y determinar las situaciones que ms nos llaman la atencin y que, de alguna manera, el Centro Prodh ha venido trabajando en este periodo sexenal. Los hechos ms recientes, dada su enorme relevancia y trascendencia, no los tomamos en cuenta, por ahora, y sern materia de anlisis en alguno de nuestros informes especiales que publicaremos durante el prximo ao.

7

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

El hilo conductor que fuimos tejiendo a lo largo del ao, lo colocamos en torno al incumplimiento del Estado mexicano a sus obligaciones contradas al firmar convenios y tratados internacionales que protegen los derechos humanos y son ley suprema para nuestro pas, segn lo que seala el Artculo 133 de la Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos. Por ser ley, analizamos desde el incumplimiento, sealado en cada captulo al recordar las recomendaciones de diversos mecanismos internacionales de proteccin de los derechos humanos; hasta la legalizacin de algunas violaciones a los derechos humanos, como en el caso de los derechos indgenas, pasando por algunos vacos legales y ausencias notables que permitan la efectiva proteccin y garanta de los derechos humanos. En este sentido, el sexenio de la alternancia que us el discurso de los derechos humanos como una de sus principales divisas durante la campaa electoral del ao 2000, deja un saldo de violaciones sistemticas a los derechos humanos, muchas de ellas con respaldo legal y que ahora hereda a un compaero de partido poltico que anunci durante su campaa, no precisamente el respeto de los derechos humanos, sino la mano firme. De esa manera, iniciamos nuestro informe con el captulo uno, Impunidad en casos emblemticos de violaciones a derechos humanos, en el que centramos el anlisis en el desempeo de la Femospp, no sin antes establecer la problemtica que est en su entorno y en la base de su actuacin. Se trata de un conjunto de masacres Acteal, Aguas Blancas y El Charco, entre otras que han quedado en la impunidad y no hay ninguna seal de que se quiera hacer justicia integral a las vctimas de la violencia del Estado, con todo y las investigaciones especiales que realiz la Suprema Corte de Justicia de la Nacin, que no fueron retomadas por la Procuradura General de Justicia. Ah se inscribe el caso de la Femospp, como un caso emblemtico del uso poltico de la creacin de diversas fiscalas que tienden a adolecer de las mismas debilidades, entre la negligencia y la corrupcin. En seguimiento a un esquema general que nos dimos en el grupo de trabajo, el primer captulo presenta las recomendaciones que los mecanismos internacionales de proteccin a los derechos humanos le han hecho al Estado mexicano, en particular las de la Relatora Especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales. Finalmente, el captulo termina con las recomendaciones que hacemos en el Centro Prodh en esta materia. El segundo captulo, en continuidad con el anterior, aborda algunos aspectos del conjunto de propuestas para reformar el sistema de justicia penal y la estrecha relacin que guardan con la violacin a los derechos humanos. Hicimos un anlisis con mucho detalle para sealar como problemtica, que el endurecimiento de las penas no ha logrado disminuir el ndice delictivo y s, por el contrario, se ha convertido en un mecanismo de represin. Para centrarnos en el anlisis de las reformas impulsadas durante el sexenio foxista, el captulo destaca primero el proceso de reformas penales en los ltimos 20 aos, para luego exponer aquellas que propiamente se realizaron durante el actual sexenio, lo que, en conjunto nos permite ubicar con mayor criticidad la propuesta de reforma al sistema de justicia penal del presidente Vicente Fox Quesada. Una secuencia casi lgica, nos lleva al tercer captulo dedicado al anlisis de los hechos ms relevantes de represin poltica, durante el sexenio de quien proclamara su espritu democrtico, abierto al dilogo y que, en el discurso, fue reiterativo para sealar que nunca reprimira. El anlisis de los hechos lo contradice, aun cuando no dependan de manera directa de una responsabilidad presidencial. La problemtica, por tanto, es la continuidad de la represin en los diversos

8

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

niveles de gobierno. En este captulo, recopilamos un conjunto de casos que, sin ser emblemticos cada uno de ellos, nos hacen derivar el patrn generalizado de violacin a diversos derechos, civiles y polticos en particular, pero que son violaciones a otros derechos que tienen que ver con derechos laborales o derechos a la salud, la vivienda y otras demandas sentidas por la gente. De ah que el conjunto del captulo tres, sea una recopilacin del amplio panorama nacional de la represin que se caracteriza por criminalizar las luchas sociales y la fabricacin de delitos, como en el caso emblemtico de San Salvador Atenco, ahora llevado a mecanismos internacionales de proteccin de los derechos humanos de las mujeres, como el informe Violencia de Estado contra mujeres privadas de la libertad en Mxico. El caso de San Salvador Atenco. En este captulo, como en todos los dems, queremos insistir en que el derecho internacional de los derechos humanos, del que se da cuenta en los temas sealados, son ley vigente en Mxico salvo algunos casos de los derechos laborales, en los que Mxico no ha firmado ms de 60 convenios de la Organizacin Internacional del Trabajo y, adems, tiene una reserva al artculo 8 del Pacto Internacional de los Derechos Econmicos, Sociales y Culturales y, por lo tanto, son leyes que no se cumplen o ante las cuales, hay vacos legales y ausencia de recursos para lograr plena justicia para las personas que han sido vctimas de dichas violaciones a sus derechos y sus familiares. Las recomendaciones de este captulo, recogen algunas de las propuestas por el Diagnstico de la situacin de los derechos humanos en Mxico (en adelante el Diagnstico), coordinado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Mxico (OACNUDH Mxico) y precisamos las que hacemos como Centro Prodh. El captulo cuatro aborda un aspecto de la seguridad pblica y se concentra en la creacin y el desempeo de la Polica Federal Preventiva (PFP). El problema queda planteado a la luz de otros informes especiales del Centro Prodh, en el que ha denunciado de manera reiterada la creciente tendencia a militarizar los cuerpos policacos, del que la PFP es un caso emblemtico, pero no el nico, dado que, como sealamos en los informes especiales sobre seguridad pblica, buena parte de las policas estatales y municipales se encuentran al mando de un militar. El contraste de este anlisis con el derecho internacional de los derechos humanos, arroja diversas luces que, por cierto, no se reducen ni se aplican al caso concreto de la PFP, sino que conforman una serie de criterios en torno a la seguridad pblica. Finaliza el captulo con las recomendaciones de los organismos internacionales al Estado mexicano y las que explcitamente hacemos como Centro Prodh. Siguiendo una lnea de continuidad entre los captulos, en el captulo cinco abordamos la violacin a los derechos humanos de defensores y defensoras y de periodistas, dos de los oficios que, en este sexenio del cambio y la alternancia han sido particularmente riesgosos. Durante 2005, el Centro Prodh elabor dos informes especiales, uno sobre asesinato de periodistas, en el que destacamos que Mxico rebas a Colombia en el nmero de asesinatos a periodistas; el otro, lo dedicamos a defensores y defensoras y expusimos los graves riesgos a los que nos vemos sometidos. El problema en comn que compartimos periodistas y defensores, es que los dos nos dedicamos a la denuncia de diversas injusticias y a la exigencia porque se protejan y garanticen diversos derechos violentados. En la prctica, los defensores necesitamos de los periodistas, son los que nos permiten visibilizar diversas violaciones a los derechos humanos; los periodistas acuden a nosotros, no slo por la nota y la opinin de los defensores de derechos humanos sobre situaciones crticas o en debate pblico. Tambin nos buscan para su propia proteccin, cuando reciben amenazas o son intimidados. As, defensores y periodistas vamos de la mano.

9

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

El captulo est desarrollado en dos partes, siguiendo el mismo esquema general de todos los captulos. La primera parte dedicada a los defensores y defensoras de los derechos humanos, los casos y situaciones emblemticas, el derecho internacional que protege el derecho a defender los derechos humanos, las recomendaciones de los organismos internacionales, en particular destacamos el reciente informe de la CIDH sobre defensores en el continente americano, y las recomendaciones del Centro Prodh. Otro tanto se expone en la segunda parte, situaciones y casos emblemticos de periodistas, el patrn de violaciones a sus derechos, el derecho internacional que los protege y las recomendaciones de organismos y mecanismos internacionales y las recomendaciones del Centro Prodh. Desarrollamos en el captulo seis, un esfuerzo de memoria reciente que actualiza la actividad del Centro Prodh en torno a la contrarreforma indgena, y una visin actual de la problemtica indgena. Este captulo retoma la problemtica que enfrentan los pueblos indgenas en Mxico, desde una perspectiva que, si bien no es exclusiva del actual sexenio foxista, s contina y profundiza las polticas que tienden a consumar el despojo de los recursos naturales de los pueblos indgenas y a fomentar lo que muchos especialistas llaman simple y llanamente etnocidio, tanto material como simblico. El primero, por hambre o eliminacin fsica; el segundo, por la emigracin o la desaparicin de las culturas indgenas, comenzando por su vestimenta y, sobre todo, su lengua. El problema queda planteado en trminos de una legalizacin del despojo, siguiendo diversos anlisis de especialistas, como la abogada Magdalena Gmez y la investigadora Silvia Ribeiro, quienes ha dado puntual seguimiento a las legislaciones recientes que tienden a legalizar el despojo. La segunda parte del captulo se centra en dos casos emblemticos, la contrarreforma indgena y la disputa por la reserva de la bisfera de Montes Azules. Entre uno y otro caso emblemtico, establecemos un conjunto de situaciones ms relevantes de disputa o despojo de recursos naturales de pueblos indgenas. Siguiendo el esquema general propuesto para cada captulo, en la tercera parte, establecemos los aspectos ms fundamentales del derecho internacional que protege los derechos de los pueblos indgenas, en especial el Convenio 169 de la Organizacin Internacional del Trabajo; la siguiente parte, recoge algunas recomendaciones de ste organismo, para un caso particular de los pueblos wixrika, para luego retomar diversas recomendaciones de otros mecanismos de proteccin de los derechos indgenas. Finalmente, en las recomendaciones que hacemos en el Centro Prodh, ratificamos las que en 2001 hiciramos, y actualizamos su vigencia en torno a la revisin de la reforma constitucional en materia de derechos indgenas. Finalmente, el captulo siete hace un aborde a la problemtica que implica la relacin de la pobreza con los derechos humanos, en particular desde la perspectiva del efecto que han tenido los diversos tratados comerciales en el crecimiento e intensificacin de la pobreza en Mxico. Es un aborde inicial que subraya la perspectiva de los derechos humanos. Estudios sobre la pobreza en Mxico abundan, lo mismo el debate entre expertos y estudiosos de la pobreza. Pero siempre queda de lado, o es francamente ignorada, la perspectiva de los derechos humanos, en particular, la problemtica que implica el ejercicio pleno de los Derechos Econmicos, Sociales, Culturales y Ambientales (DESCA). En este captulo, retomamos diversos abordes de especialistas que nos proponen una visin general del impacto de la globalizacin neoliberal en nuestro pas y la disminucin o casi anulacin del papel del Estado como garante del conjunto de los derechos humanos. El sexenio foxista es visto, desde esta perspectiva, como un sexenio de continuidad y profundizacin de las polticas de ajuste, de equilibrio macroeconmico y que, a pesar de los programas de combate a la

10

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

pobreza, los resultados finales dan cuenta de un crecimiento del nmero de pobres y de mayor pobreza, a pesar de las cuentas alegres de los nmeros oficiales y la metodologa oficial de medicin de la pobreza, una metodologa para justificar y publicitar su aparente disminucin. El problema mayor que plantea este captulo, dicho en pocas palabras, es la preeminencia que se le ha dado a los tratados comerciales, que tambin son ley en Mxico, por encima de los convenios, tratados, convenciones y declaraciones que constituyen el derecho internacional de los derechos humanos. Es decir, al privilegiar el supuesto libre comercio, se legisla de tal manera que, no slo se ignora el derecho humanitario y el conjunto de los derechos humanos, sino que se violentan particularmente los derechos econmicos, sociales, culturales y ambientales, conocidos como DESCA. Con todo y que no es una problemtica exclusiva de Mxico, ni reducida al sexenio del presidente Vicente Fox, llamamos la atencin sobre la profundizacin en situaciones que slo se enuncian y que nos colocan ante un pas siniestrado marcado por la prdida del empleo, la cada sostenida del poder adquisitivo del salario, el crecimiento de la emigracin, la privatizacin de derechos sociales, como la salud y la vivienda, por no sealar la educacin. Esta situacin es tanto ms grave, cuanto que el pleno respeto de los derechos humanos fue una de las principales banderas enarboladas por el candidato Vicente Fox durante el ao 2000. Si nuestro Balance Sexenal 2000 2006 inicia con un captulo dedicado a la impunidad, cerramos con otro captulo que expresa otro tipo de impunidad, ms velado y ms invisible. Es la que se comete con la violacin sistemtica y estructural de los DESCA, en perjuicio del 80% de mexicanos y mexicanas que han visto frustradas sus esperanzas de una mejora sustancial en sus niveles y calidad de vida. En contraste con el conjunto de recomendaciones de los organismos internacionales al Estado mexicano, en este captulo retomamos las que, casi de manera reiterada ha hecho el Comit DESC y que son las mismas recomendaciones hechas en sexenios anteriores y hoy ratificadas en la pasada reunin del Comit en mayo de 2006. La inminencia de la apertura plena al mercado del maz y del frijol para enero de 2008, nos hacen prever una serie de recomendaciones que tomen en consideracin, no slo la revisin del Tratado de Libre Comercio de Amrica del Norte (TLCAN), sino el conjunto de la poltica de intercambio comercial y el pleno respeto de los derechos humanos. Finalmente, un captulo ocho de conclusiones y recomendaciones. En el Centro Prodh trabajamos lo que, desde nuestro punto de vista, consideramos debiera ser la agenda estratgica en materia de derechos humanos para los prximos aos, no slo para el sexenio que encabezar el presidente electo Felipe Caldern Hinojosa, con toda la carga de ilegitimidad que conlleva una declaracin legal del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin y la crisis poltica en la que nos enfrentamos y que nos permite ampliar a nuestros interlocutores en tres estrategias polticas claramente diferenciadas: La estrictamente formal constituida por las instituciones del Estado mexicano, parte obligada por el derecho internacional de los derechos humanos, reconocida jurdica y legalmente, aun cuando se encuentre en crisis de legitimidad y credibilidad. Ante la comunidad internacional y los organismos internacionales de proteccin de los derechos humanos, son estas instituciones las que tienen que rendir cuentas. Aqu entra tanto el nuevo gobierno federal encabezado por Felipe Caldern

11

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

Hinojosa, como la LX Legislatura del Poder Legislativo, a quien corresponder hacer las adecuaciones y reformas necesarias para armonizar nuestra legislacin con el derecho internacional de los derechos humanos. En el Centro Prodh no dejamos de lado, como interlocutores, al movimiento generado en la Convencin Nacional Democrtica, en la medida en que haya inters y voluntad poltica para incorporar en su programa una agenda especfica de respeto y garanta de los derechos humanos. Finalmente, no hay que olvidar, que desde el silencio y en la sombra, contina la marcha de La Otra Campaa, integrada mayoritariamente por pueblos indgenas y que aportan desde su cultura, una nueva manera de hacer poltica y, tambin, una manera propia de entender una agenda propia de los derechos humanos. Como Centro de Derechos Humanos, en el Centro Prodh somos conscientes de sumar nuestros pequeos esfuerzos a los esfuerzos de otros y otras que, desde la indignacin que produce tanta injusticia estructural y legalizada, impulsamos el pleno respeto de todos los derechos humanos para todos y para todas.

Dr. David Velasco Yez, sj Coordinador del Balance Sexenal 2000 2006

12

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

Captulo IImpunidad en casos emblemticos de violaciones a derechos humanosPese al discurso oficial, durante el sexenio 20002006 la alternancia en el Ejecutivo Federal no contribuy a revertir significativamente la impunidad que prevalece en los casos ms emblemticos de graves violaciones a derechos humanos1. Para dar sustento a este juicio sin caer en el lugar comn y tomando en cuenta la ubicuidad de esta problemtica en Mxico, en este Balance mostramos cmo operan en nuestro pas los mecanismos que perpetan la denegacin de justicia a partir del estudio de una instancia en especfico: la Fiscala creada por el Gobierno de Vicente Fox para investigar y procesar los crmenes cometidos en el pasado reciente. Aunque a primera vista podra pensarse que el anlisis del funcionamiento de esta Fiscala arrojara conclusiones acotadas slo a los casos por ella investigados, en el Centro Prodh creemos que la evaluacin rigurosa de esta experiencia permite sealar algunas de las deficiencias de un sistema de imparticin y procuracin de justicia cuyo diseo y prctica impiden el acceso a la justicia a las vctimas de violaciones a derechos humanos. Como argumentamos en este captulo, el fracaso de dicha instancia es paradigmtico del fracaso de las instituciones del Estado Mexicano en la investigacin y en el esclarecimiento de las violaciones a derechos humanos2. Bajo esta lgica, en el captulo comenzamos por abordar la impunidad desde el derecho internacional de los derechos humanos, para despus establecer el estado de la cuestin en Mxico. Enseguida, analizamos el desempeo de la Femospp para ejemplificar las deficiencias del sistema de procuracin y administracin de justicia3. Finalmente, proponemos algunas lneas de accin que, desde la ptica del Centro Prodh, contribuiran a revertir la situacin actual.

1 Normalmente, se califican como graves violaciones a derechos humanos los actos que atentan contra los Convenios de Ginebra de 12 de agosto de 1949 y su Protocolo Adicional de 1977, as como otros que vulneren normas de derecho humanitario o de derecho internacional de derechos humanos. Tal calificacin es pertinente para el genocidio, la tortura, las desapariciones forzadas y las ejecuciones extrajudiciales. 2 Con ello abonamos a lo sostenido en otro captulo de este Balance: en Mxico, el derecho penal se aleja de una concepcin democrtica y garantista y con facilidad se presta a legalizar la represin y el autoritarismo. Cfr. Captulo 2. 3 No pasamos por alto que un anlisis cabal de las responsabilidades del Estado debera evaluar las acciones y omisiones no slo dentro del mbito del Poder Ejecutivo, sino tambin dentro del mbito de los poderes Judicial y Legislativo. Sin embargo, en cuanto hace a los alcances de este captulo, remitimos a otros informes circulados para una evaluacin de tal complejidad. Cfr. nota 24.

15

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

1. Planteamiento del problema1.1 Impunidad y derechos humanos La lucha contra la impunidad ha sido una de las preocupaciones centrales del movimiento internacional de derechos humanos. Parte de la experiencia acumulada en este caminar fue recabada recientemente, en el mbito de la ex Comisin de Derechos Humanos de la Organizacin de las Naciones Unidas, en un Conjunto de principios actualizado para la proteccin y la promocin de los derechos humanos mediante la lucha contra la impunidad4. Ah, la impunidad es definida como:La inexistencia, de hecho o de derecho, de responsabilidad penal por parte de los autores de violaciones, as como de responsabilidad civil, administrativa o disciplinaria, porque escapan a toda investigacin con miras a su inculpacin, detencin, procesamiento y, en caso de ser reconocidos culpables, condena a penas apropiadas, incluso a la indemnizacin del dao causado a las vctimas5.

A partir de esta definicin, el principio nmero uno enuncia:La impunidad constituye una infraccin a las obligaciones que tienen los Estados de investigar las violaciones, adoptar medidas apropiadas respecto de sus autores, especialmente en la esfera de la justicia, para que las personas sospechosas de responsabilidad penal sean procesadas, juzgadas y condenadas a penas apropiadas, de garantizar a las vctimas recursos eficaces y las reparacin de los perjuicios sufridos de garantizar el derecho inalienable de a conocer la verdad y de tomar las medidas necesarias para evitar la repeticin de dichas violaciones.

As, en los Principios quedan implcitos los dos derechos desde los cuales, en el mbito de los derechos humanos, se articula la lucha contra la impunidad: el derecho a la justicia y el derecho a la verdad. El Estado Mexicano se encuentra obligado a respetar el derecho a la justicia en favor de los ciudadanos y las ciudadanas. Adems de las normas internas relativas6, esta obligacin es consecuencia de la firma y ratificacin de diversos tratados internacionales que aluden a este derecho, tales como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos7, y la Convencin Americana sobre Derechos Humanos8. Refirindose a su contenido, los rganos encargadas de interpretar la Convencin Americana han establecido los estndares ms avanzados, mismos que sirven como parmetro al evaluar la vigencia en Mxico de este derecho. De acuerdo con stos, en los casos de violaciones a derechos humanos debe emplearse un concepto integral de la nocin justicia, en la que la sancin penal de los responsables es slo un componente al que deben acompaar el esclarecimiento de los hechos, la reparacin integral del dao y el establecimiento de medidas de no repeticin9.

4 Informe rendido por Diane Orentlicher a la Comisin de Derechos Humanos de la Organizacin de Naciones Unidas, experta independiente encargada de actualizar el conjunto de principios para la lucha contra la impunidad (E/CN. 4/2005/102/Add.1). 5 bid., Definiciones. 6 Artculo 17 de la Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos. 7 Artculos 2 y 14. 8 Artculos 8 y 25. 9 Corte Interamericana de Derechos Humanos, casos Barrios Altos (Fondo), sentencia del 14 de marzo de 2001 y Velsquez Rodrguez (Fondo) sentencia del 29 de julio de 1988.

16

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

En cuanto al derecho a la verdad, pese a que ste no se encuentra expresamente reconocido en instrumentos internacionales, el Estado Mexicano tambin est obligado a garantizar su plena vigencia. Esto en virtud de que el derecho a la sin esclarecimiento verdad se encuentra subsumido en el derecho de las vctimas y de sus familiares de los hechos y no a obtener de los rganos del Estado el esclarecimiento de los hechos y el deslinde hay verdad sin un de las responsabilidades correspondientes, mediante la investigacin y el deslinde claro de juzgamiento al que se refieren los artculos 8 y 25 de la Convencin Americana responsabilidades. de Derechos Humanos y los artculos 2 y 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos10, instrumentos ambos de carcter vinculatorio; es decir, se trata de un derecho implcito en las obligaciones internacionales del Estado Mexicano. El derecho a la verdad, como se ha entendido en el contexto latinoamericano, implica el acceso individual y colectivo a la informacin esencial sobre violaciones graves a derechos humanos, de manera tal que stas se esclarezcan y pueda conservarse, as, la memoria histrica.

No hay justicia

En la lucha contra la impunidad, la defensa del derecho a la verdad y del derecho a la justicia se ha considerado particularmente relevante en contextos de transicin a la democracia o de cambio de rgimen poltico. En tales situaciones -de alguna manera anlogas a la que la sociedad mexicana enfrent durante el 2000- justicia y verdad suelen mirarse desde el prisma de la justicia de transicin11. Segn este enfoque interdisciplinario, cuando una sociedad con pasado autoritario decide hacer frente a su legado de atentados contra la dignidad humana, inician procesos en los que se requiere desplegar estrategias mltiples para garantizar justicia y verdad e iniciar, al mismo tiempo, transformaciones de orden social y poltico. Ms que de contenidos sustantivos especficos, hablar de justicia de transicin implica aludir a una categora que agrupa distintas experiencias y modos -exitosas algunas, otras fallidas- de afrontar las secuelas de largos perodos de represin. Justicia y verdad forman un binomio inseparable en procesos de transicin y consolidacin de la democracia: no hay justicia sin esclarecimiento de los hechos y no hay verdad sin un deslinde claro de responsabilidades. Para el Centro Prodh, desde este marco debe evaluarse lo que en el sexenio 20002006 ocurri en relacin a las graves violaciones a derechos humanos cometidas en el pasado reciente en Mxico12.

10 Cfr. Corte Interamericana de Derechos Humanos, caso Castillo Pez (Fondo), sentencia del 3 de noviembre de 1997, prrs. 86-87. 11 La justicia de transicin se refiere al desarrollo, el anlisis y la aplicacin prctica de estrategias para confrontar experiencias histricas de violaciones sistemticas a derechos humanos, con el fin de alcanzar justicia integral y sentar las bases para un futuro ms democrtico. La denominacin justicia de transicin o transicional no supone una sola manera de llevar a cabo este proceso, sino que se trata de una categora til para agrupar distintas experiencias similares. Vase: Memoria del Seminario internacional Comisiones de verdad: tortura, reparacin y prevencin, y del Foro Pblico de Comisiones de la Verdad: perspectivas y alcances, editado conjuntamente por la Comisin de Derechos Humanos del Distrito Federal, la Asociacin para la Prevencin de la Tortura (Suiza), la Corporacin de Promocin y Defensa de los Derechos del Pueblo (Chile) y el Centro Prodh, Mxico, 2003. 12 Adems de los ya sealados Pacto Internacional y Convencin Americana, la denegacin de justicia y verdad supone el incumplimiento de otros instrumentos de derecho internacional de los derechos humanos, tales como la Convencin sobre la Imprescriptibilidad de los Crmenes de Guerra y de los Crmenes de Lesa Humanidad, la Convencin contra la Tortura y otros tratos o Penas Crueles Inhumanos o Degradantes, la Convencin Americana sobre Derechos Humanos, Convencin Interamericana sobre Desaparicin Forzada de Personas y Convencin Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura. Cfr. nota 27.

17

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

1.2 La impunidad en las graves violaciones a derechos humanos durante el sexenio 2000 - 200613. Al perder la presidencia de la Repblica en el 2000 el partido hegemnico, pareci posible un nuevo impulso a las investigaciones abiertas en los casos ms representativos de las violaciones graves a derechos humanos del pasado reciente. La expectativa fue alentada por el propio Vicente Fox quien durante su campaa se comprometi a hacer frente a la impunidad. Ratificando el compromiso, Fox aludi a esta cuestin en su discurso de toma de posesin en los siguientes trminos:Ninguna relacin con el pasado es saludable si no est fincada en la verdad. Sin sustituir a las instancias de procuracin e imparticin de justicia, me propongo abrir lo que ha permanecido cerrado en episodios sensibles de nuestra historia reciente e investigar lo que no ha sido resuelto, mediante una instancia que atienda los reclamos por la verdad de la mayora de los mexicanos [...]. No habr piadoso olvido para quienes delinquieron; tampoco habr tolerancia para quienes pretendan continuar con privilegios hoy inaceptables [...]14.

Sin embargo, a pesar de estos compromisos, observamos con desilusin que la alternancia partidista en el Ejecutivo Federal no contribuy a revertir la impunidad que prevalece en los casos ms emblemticos de violaciones y abusos. Un breve recuento as lo muestra: Masacre de Acteal Perpetrada el 22 de diciembre de 1997 en la comunidad de Acteal del Municipio de Chenalh, Chiapas. 45 indgenas tzotziles, pertenecientes a la Organizacin Civil Las Abejas, fueron asesinados a manos de un grupo paramilitar. Para investigar los hechos, la Procuradura General de la Repblica cre, el 1 de abril de 1998, la Fiscala Especial para la atencin de los Delitos cometidos en el Municipio de Chenalh. En el 2000 dicha fiscala desapareci luego de obtener cerca de 20 sentencias condenatorias, aun cuando inicialmente haba consignado a 124 personas y sin importar que varias de las rdenes de aprehensin obtenidas no hubieran sido ejecutadas. A la postre, algunas de las sentencias condenatorias fueron impugnadas y quedaron sin efectos. Actualmente, aunque los hechos no han sido plenamente esclarecidos, las investigaciones se encuentran bajo la responsabilidad de una agencia ordinaria del ministerio pblico que no ha logrado reportar avances relevantes en la investigacin de las actividades de los grupos paramilitares en el estado de Chiapas15. El 27 de julio de 2005, fueron dictadas sentencias condenatorias a 32 personas identificadas como autores materiales de la masacre; sin embargo, en la resolucin se desestim la relacin de stos con grupos paramilitares, dndose al caso Acteal el tratamiento de conflicto intercomunitario, sin ninguna consideracin al contexto socio-poltico en que ocurri la masacre. El fallo, adems, fue omiso en cuanto a la reparacin del dao. Masacre de Aguas Blancas El 28 de junio de 1995 en Guerrero, elementos de diversas corporaciones policacas asesinaron a 17 campesinos de la Organizacin Campesina de la Sierra del Sur (OCSS) e hirieron a otros 25. Por la gravedad del caso, el 14 de agosto de 1995 la CNDH recomend la creacin de una fiscala especial. Dicha fiscala fue adscrita a la Procuradura13 Una versin de este apartado se integr al informe presentado por las organizaciones civiles mexicanas a la Comisin Interamericana de Derechos Humanos en marzo de 2006, durante su 124 perodo de sesiones, en audiencia temtica sobre la situacin general de los derechos humanos en Mxico. 14 Discurso de toma de posesin del Presidente Constitucional de Mxico, Vicente Fox Quesada. 1 de diciembre de 2000. Portal de internet de Presidencia de la Repblica. Consulta en mayo de 2005.

18

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

General de Justicia del Estado de Guerrero y pronto evidenci su falta de autonoma: slo actu penalmente contra algunos de los autores materiales y no contra los funcionarios de alto nivel jerrquico del estado de Guerrero, an cuando eran sealados como autores intelectuales de la masacre. Ante esta situacin, la Suprema Corte de Justicia de la Nacin inici un procedimiento de investigacin al cabo del cual seal responsabilidades a varios funcionarios; entre ellos, a Rubn Figueroa Alcocer, ex gobernador del estado. No obstante, la Procuradura General de la Repblica se neg a investigar los hechos. Las vctimas recurrieron a la Comisin Interamericana de Derechos Humanos (caso 11.520), instancia que en su informe 49/97 recomend completar una investigacin seria, imparcial y efectiva de los hechos, que incluyera el ejercicio de la accin penal correspondiente contra altos funcionarios del gobierno de Guerrero; as como reparar integralmente el dao a las vctimas. A la fecha, ninguna de estas recomendaciones ha sido cumplida pese a que al inicio de la gestin foxista continuaba el dilogo con los familiares de las vctimas. Recientemente, trascendi en medios de comunicacin que el actual Gobierno del Estado de Guerrero, en vez de reparar integralmente el dao, dara una ayuda humanitaria a las vctimas por nica y ltima vez16. Masacre en El Charco, Guerrero El 7 de junio de 1998, elementos del Ejrcito dispararon contra una escuela primaria en la comunidad de El Charco, en Ayutla, Guerrero, donde se encontraba reunido un grupo de campesinos. 11 fueron asesinados y 5 heridos de gravedad; otras 22 personas fueron detenidas y trasladadas a instalaciones castrenses. De las personas acribilladas, varias mostraron signos de haber recibido tiro de gracia. En la investigacin de lo ocurrido, la jurisdiccin militar se impuso sobre la civil, propiciando el nulo esclarecimiento de los hechos que hasta ahora ha prevalecido. En todos estos casos, las instancias nacionales se han mostrado incapaces para procurar justicia integral: los hechos no han sido esclarecidos; la identificacin y sancin de los responsables no ha ocurrido; la reparacin del dao ha sido eludida y las medidas de no repeticin, ignoradas. En varios de ellos, las fiscalas especiales que fueron creadas mostraron carencias similares17. La impunidad que prevalece en los casos Acteal, Aguas Blancas y El Charco, no es muy distinta de la que a poca distancia ya se vislumbra en la investigacin de la represin del 28 de mayo de 2004 en Guadalajara, Jalisco18; o a la que rodea a los asesinatos de mujeres que sistemticamente se han cometido en Ciudad Jurez a lo largo del sexenio19. Tampoco es diferente de la que podra librar de sanciones a los responsables de la toma de Atenco, ocurrida el 03 y 04 de mayo de 200620.15 Cfr. Centro de Derechos Humanos Fray Bartolom de las Casas, La poltica genocida en el conflicto armado en Chiapas. Reconstruccin de hechos, pruebas, delitos y testimonios, San Cristbal de las Casas, febrero de 2005. Del mismo Centro, ver tambin: Boletn 18, del 27 de julio de 2006. 16 Cfr. De la Cruz, Teresa, Resuelve el gobierno dar 50 mil pesos como ayuda humanitaria a afectados de Aguas Blancas, Peridico El Sur, 10 julio de 2006. 17 Cfr. Barajas, Abel, Crecen con fiscalas especiales. Ofrecen pobres resultados, Peridico Reforma, 8 de mayo de 2006. En la nota, el periodista apunta: Pese a que fueron creadas para agilizar la procuracin de justicia en temas especficos, los resultados que han reportado las fiscalas especiales no han cubierto hasta ahora las expectativas que generaron. 18 Cfr. Captulo 3. 19 Cfr. CIDH, Situacin de los derechos de la mujer en Ciudad Jurez, Mxico: el derecho a no ser objeto de violencia y discriminacin (OEA/ Ser.L/V/II.117), 2003. Puede consultarse en www.cidh.org. Por su complejidad y su extensin, no abordamos este tema en el Balance.

Fox en su discurso de toma de posesin.

es saludable si no est fincada en la verdad.

relacin con el pasado

Ninguna

19

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

Ante este panorama, no ha perdido vigencia lo que despus de visitar nuestro pas en 2000 sealara la Relatora Especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales de las Naciones Unidas, cuando observ: problemas profundamente arraigados con respecto a la impunidad de los infractores de los derechos humanos, la total ineficiencia del sistema judicial y una falta de transparencia en el funcionamiento de las instituciones estatales, que afectan al pas y a toda su poblacin21. Precisamente, son estos problemas profundamente arraigados los que salen a relucir al evaluar la actuacin de la Femospp durante el sexenio. Su fracaso no puede atribuirse slo a la errtica conduccin de su titular o a las dificultades implcitas en la investigacin de hechos ocurridos varias dcadas atrs; por el contrario, los exiguos resultados que arroja a varios aos de su creacin son sntoma de la descomposicin de un sistema que reiteradamente se ha mostrado incapaz y negligente cuando debe procurar justicia en los casos de violaciones graves a derechos humanos. Vista a la luz de los casos enumerados, la incapacidad de la Femospp para garantizar justicia y verdad no supone slo la concesin de una amnista de facto en beneficio de los responsables de los delitos de lesa humanidad cometidos en el pasado; sino que adems constituye un nuevo eslabn en la larga cadena de denegacin de justicia para quienes han sido vctimas de los ms graves atentados en contra de la dignidad humana en nuestro pas.

2. La Femospp: un caso paradigmticoLa Fiscala Especial para la atencin de hechos probablemente constitutivos de delitos federales cometidos directa o indirectamente por servidores pblicos en contra de personas vinculadas con movimientos sociales y polticos del pasado -conocida por sus siglas como Femospp- fue la respuesta del Gobierno de Vicente Fox al legado de crmenes cometidos contra la disidencia poltica en los aos sesenta, setenta y ochenta. Creada por Acuerdo Presidencial el 27 de noviembre del 2001, la Femospp apareca en el escenario poltico nacional tras no pocos debates en torno a la conveniencia de conformar una Comisin de la Verdad. Quienes desde la sociedad civil impulsaban esta propuesta anticipaban que una agencia del Ministerio Pblico, con sus consabidas falencias, difcilmente podra enfrentar una tarea de semejante envergadura. La decisin presidencial, sin embargo, fue unilateral: la Fiscala se cre al trmino del primer ao del sexenio, sin que este acto fuese precedido de una discusin amplia entre los sectores ms directamente implicados. La unilateralidad de la medida qued confirmada con la designacin, ajena a toda consulta, del Doctor Ignacio Carrillo Prieto como su responsable; pese a su trayectoria acadmica, el Fiscal careca del reconocimiento entre los actores involucrados en el tema, lo que resultaba imprescindible para una labor como la que a partir de ese momento quedaba a su cargo. La Femospp fue adscrita a la Procuradura General de la Repblica, dirigida en ese entonces por un militar en activo, el Gral. Rafael Macedo de la Concha, quien a la postre sera relacionado con personajes implicados en la represin de la dcada de los setentas22. Por sta y otras razones, la Femospp enfrent diversas descalificaciones desde el momento

20 Cfr. Captulo 3. Tambin, Centro Prodh, Informe Atenco: Estado de Derecho a la Medida, 10 de mayo de 2006. Puede consultarse en www.centroprodh.org.mx 21 Relatora Especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales de Naciones Unidas (E/CN.4/2000/3/Add.3 prr. 23). 22 Con relacin a este punto, Sergio Aguayo Quezada document las relaciones del entonces Procurador General de la Repblica, Gral. Rafael Macedo de la Concha, con funcionarios investigados por delitos del pasado. Cfr. Conflicto de intereses, artculo publicado por Sergio Aguayo en el peridico Reforma, 30 de abril de 2003.

20

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

mismo de su creacin: se critic la ambigedad de su mandato; el escaso y poco calificado empleo del derecho internacional de los derechos humanos; la falta de capacitacin del personal; y la ausencia de una estructura interdisciplinaria ad hoc para investigar crmenes ocurridos varias dcadas atrs23. Con este inicio, era previsible que el rumbo de la Femospp sera accidentado. Sin embargo, pocos podan pronosticar un fracaso tan estrepitoso como el que se observa al final del sexenio. Sergio Aguayo, especialista en el tema, ha insistido en que la Femospp sirvi para decretar una amnista de facto24 en detrimento de los derechos, individuales y colectivos, a la justicia y a la verdad. Tras varios aos de actuar como coadyuvantes en investigaciones ministeriales a cargo de la Femospp, la valoracin del Centro Prodh no es diferente. En las investigaciones concernientes a las desapariciones forzadas de cinco miembros de la familia Guzmn Cruz, de Alicia de los Ros, de David Jimnez Fragoso y a la ejecucin extrajudicial de Diego Lucero, la justicia integral no ha llegado (ver Anexo). En el proceso, hemos podido documentar ampliamente las limitaciones de la Femospp, constatando que muchas de ellas repiten los patrones de otras instancias con las que el sistema mexicano de procuracin y administracin de justicia intent investigar y procesar, infructuosamente, graves violaciones a derechos humanos25. No obstante, el Fiscal en reiteradas ocasiones ha querido mostrar lo contrario, contando con el aval del Procurador General de la Repblica26. El gobierno foxista ha insistido en que la Fiscala ha cumplido sus objetivos, y Carrillo Prieto se ha ufanado de lo que llama los seis logros principales de la Femospp27. Para dar mayor sustento a este balance y mostrar al mismo tiempo las similitudes que el fracaso de la Femospp presenta con otros casos en los que ha prevalecido la impunidad, hemos querido contrastar nuestra evaluacin con los seis resultados que la propia Femospp presenta a finales de sexenio. Enseguida, los transcribimos junto con nuestra valoracin de cada uno de ellos y agregamos, al final de esa enumeracin, un desglose de los puntos de coincidencia que el Centro Prodh encuentra con otros casos de denegacin de justicia.

A las desapariciones forzadas de cinco miembros de la familia Guzmn Cruz, de Alicia de los Ros, de David Jimnez Fragoso y a la ejecucin extrajudicial de Diego Lucero, la justicia

integral no ha llegado.

Primer resultado La consignacin de las averiguaciones previas relativas a los casos del 10 de junio de 1971 y al 02 de octubre de 1968. Como parte de su mandato, la Femospp inici la investigacin de las represiones a estudiantes ocurridas el 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco y el 10 de junio de 1971 en San Cosme. Desde el inicio se hicieron crticas a la estrategia jurdica de23 En teora, la estructura de la Femospp buscaba ser flexible y, por este motivo, se decidi en funcin de tres ejes: 1) el eje jurdico ministerial, integrado por el programa ministerial A, encargado de investigar las desapariciones forzadas; el programa ministerial B, encargado de investigar las masacres del 2 de octubre y del 10 de junio; y el programa ministerial C, encargado de investigar las denuncias que no fueran competencia de los otros dos programas; 2) el eje de anlisis de informacin e investigacin documental, encargado del esclarecimiento histrico; y 3) el eje de cooperacin, de participacin ciudadana y vinculacin institucional, encargado de los enlaces con la sociedad civil. En la prctica, sin embargo, el eje ministerial se impuso sobre los otros, adquiriendo la perspectiva jurdica un peso especfico preponderante en la toma de decisiones. Al quedar las decisiones de relevancia en manos de profesionistas del derecho formados en los estrechos criterios de la PGR, se perdi la posibilidad de impulsar un verdadero trabajo interdisciplinario. 24 Aguayo, Sergio y Trevio Rangel, Javier, Ni verdad ni justicia, Revista Proceso, Noviembre 12 de 2005.

21

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

la Femospp, consistente en integrar y presentar ambos casos como genocidio. La crtica no era, en la mayor parte de las ocasiones, malintencionada: la dificultad de acreditar plenamente todos los elementos necesarios para calificar un hecho represivo como genocidio fue sealada en su momento por expertos cuyo inters dista de ser asimilable al de quienes buscaban perpetuar la impunidad28. Independientemente de ello, el 24 de febrero del 2005, la Suprema Corte de Justicia determin que el delito de genocidio por el cual la Femospp haba consignado la averiguacin previa de los hechos ocurridos el 10 de junio de 1971, ya haba prescrito29. Sin embargo, mantuvo abierta la posibilidad de sancionar a ex funcionarios de alto nivel, como al ex presidente Luis Echeverra y a su secretario de Gobernacin, Mario Moya Palencia. A pesar de ello, el 26 de julio de 2005, un Tribunal Unitario del Distrito Federal exoner a ambos ex funcionarios al considerar que la Femospp no haba aportado elementos para configurar el delito de genocidio. Respecto a los hechos cometidos el 02 de octubre de 1968, la Femospp consign su investigacin el 19 de septiembre del 2005 tambin por el delito de genocidio, sin considerar el precedente. Como era de esperarse, el juez neg las rdenes de aprehensin. La Femospp se inconform e interpuso el recurso de apelacin, solicitando a la Suprema Corte que conociera del asunto. Sin embargo, el 11 de enero del 2006 el Mximo Tribunal determin no ejercer su facultad de atraccin para conocer del caso, bajo el cuestionable argumento de que el asunto no revesta trascendencia ni importancia jurdica. Meses ms tarde, el Magistrado al que le fue remitido el caso consider que existan suficientes pruebas para considerar a Luis Echeverra como probable responsable de genocidio por los hechos de Tlatelolco y dict una orden de aprehensin en contra del ex presidente. Aunque la Femospp intent magnificar esta decisin30, lo cierto es que el logro fue fugaz: unos

25 Junto con otras organizaciones, en el Centro Prodh presentamos a lo largo del sexenio informes peridicos en los que analizamos a detalle el mal funcionamiento de la Femospp. Entre estos documentos, podemos citar los siguientes: La verdad y la justicia: archivos pendientes en la Fiscala Especial, presentado en febrero de 2003 y realizado en coordinacin con la Fundacin Diego Lucero A.C., el Comit de Madres de Presos Polticos y Desaparecidos de Chihuahua, la Asociacin de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Vctimas de Violaciones a los Derechos Humanos, el Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria A. C., Comisin Mexicana de Promocin y Defensa de los Derechos Humanos, A.C. y Servicio y Asesora para la Paz A.C.; el informe Desapariciones Forzadas en Mxico durante las dcadas de los sesenta, setenta y ochenta realizado en coordinacin con las mismas organizaciones y presentado en octubre de 2003 durante el 118 perodo de sesiones de la Comisin Interamericana de Derechos Humanos (CIDH); el informe La responsabilidad del Estado mexicano frente a los familiares y vctimas de la denominada Guerra Sucia presentado ante la CIDH en marzo de 2004; y el informe Los delitos del pasado, el acceso a la justicia y a la verdad: una cuenta pendiente del Estado mexicano. Balance anual de la actuacin de la Fiscala Especial para Movimientos Sociales y Polticos del Pasado presentado ante la CIDH en su 122 perodo de sesiones. La FEMOSPP ha recibido copia de cada uno de estos informes y muchos de ellos pueden consultarse en: www.centroprodh.org.mx. 26 El 18 de abril de 2006, Daniel Cabeza de Vaca, Procurador General de la Repblica anunci la desaparicin de la Femospp, argumentando que esta ya haba cumplido su objetivo. Cfr. Otero, Silvia, Desaparecen la fiscala contra guerra sucia, Peridico El Universal, 19 de abril de 2006. 27 Cfr. Desplegado aparecido en el peridico La Jornada el 27 de enero del 2006. Para un informe oficial de los logros de la Femospp, vase: Informe de rendicin de cuentas de la Administracin Pblica Federal 2000 2006, Procuradura General de la Repblica, 2006. Consulte en lnea hecha en septiembre de 2006 en el sitio: www.pgr.gob.mx. 28 Amnista Internacional, Human Rights Watch y el Centro Internacional por la Justicia Transicional (ITCJ) sealaron en su momento la inconsistencia de esta estrategia. Sergio Aguayo resumi las crticas de la siguiente manera: De acuerdo con la Convencin para la Prevencin y la Sancin del Delito de Genocidio, para que exista genocidio debe haber la intencin de destruir a un grupo nacional si, y slo si, ste comparte vnculos de tipo tnico, racial o religioso. El Fiscal Ignacio Carrillo Prieto argument que el asesinato de los estudiantes tena como intencin ltima la de destruir un grupo nacional. En su opinin, los 25 estudiantes podan ser considerados un grupo nacional porque compartan un complejo de vnculos materiales y espirituales; un pasado histrico comn, una cultura semejante y costumbres reconocidas. Para resolver la ausencia de vnculos tnicos, raciales o religiosos, Carrillo Prieto ampli el concepto de genocidio afirmando que en la civilizacin contempornea, los motivos de persecucin ms frecuentes no son ya los religiosos, sino los polticos e ideolgicos. Si Carrillo Prieto fuera experto en ciencia poltica podra defender su razonamiento en algn seminario; como fiscal se equivocaba porque el genocidio poltico carece de sustento jurdico. Aguayo, op.cit. 29 Las crticas a la estrategia seguida por el Fiscal no deben, a nuestro juicio, dejar al margen las que deben orientarse a las omisiones de los otros poderes del Estado. En este sentido, el fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin en materia de genocidio volvi a mostrar un Poder Judicial poco comprometido con los ms urgentes temas de la agenda de derechos humanos. En una deficiente

22

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

das despus, el Juez Federal responsable del proceso dict un auto de libertad a favor de Echeverra quien, por lo dems, permaneci todo momento en la comodidad de su domicilio. La proximidad entre estos avatares procesales y la eleccin presidencial levantaron la suspicacia de varios conocedores del tema quienes no dudaron en establecer nexos entre uno y otro asunto31. Hasta la fecha de redaccin de este Balance, las matanzas del 02 de octubre de 1968 y del 10 de junio de 1971 siguen en la impunidad. Por si mismas, las consignaciones de ambos casos no pueden presentarse como resultados pues no se han traducido en justicia integral para las vctimas. Segundo resultado El fallo favorable de la Suprema Corte de Justicia sobre el cmputo correcto de la prescripcin del delito de privacin ilegal de la libertad que permite procesar a los responsables de la llamada guerra sucia. Durante el 2003, la Suprema Corte resolvi que el cmputo para determinar la prescripcin del delito de privacin ilegal de la libertad comienza a partir de que se determina el paradero de la vctima, y no a partir del momento en que se suscita el ilcito32. Como la propia Femospp seal en su momento, el fallo abra el camino para que la estrategia jurdica seguida en los casos de desapariciones tuviera viabilidad. Sin embargo, la Femospp no supo distinguir que esta estrategia presentaba limitaciones de inicio; a ella le iba implcita la caracterizacin de estos hechos como privaciones ilegales de la libertad y no como desapariciones forzadas de personas. La diferencia es relevante: el delito de privacin ilegal de la libertad se encuentra legislado en el artculo 366 del Cdigo Penal Federal mexicano como un delito comn, mientras que la desaparicin forzada es considerada a nivel internacional como un delito de lesa humanidad, cuando se comete en contextos de ataques sistemticos a la poblacin civil. La desaparicin forzada33 es una conducta pluriofensiva, que afecta no slo la libertad sino tambin derechos como la integridad y seguridad personales, el debido proceso y el derecho a la vida; adems, en este tipo de crmenes la responsabilidad es atribuible siempre a agentes estatales, no solo en tanto autores materiales sino tambin en cuanto responsables de negar sistemticamente informacin sobre el paradero de las vctimas. Siendo tan sustantiva la diferencia entre una acusacin por privacin ilegal de la libertad y una por desaparicin forzada, el fallo de la Corte difcilmente puede considerarse progresista desde la perspectiva de derechos humanos.

interpretacin, el Mximo Tribunal estableci que la Convencin sobre imprescriptibilidad de los crmenes de guerra y de los crmenes de lesa humanidad, no era aplicable en el mbito nacional a hechos denunciados antes de la entrada en vigor este instrumento; es decir, que la imprescriptibilidad de los delitos de lesa humanidad no opera en nuestro pas. Santiago Corcuera Cabezut, especialista en derechos humanos y actual Presidente del Grupo de Trabajo de la Organizacin de Naciones Unidas sobre Desapariciones Forzadas, calific la decisin de la SCJN como una vergenza (Cfr. La Jornada, 5 de marzo de 2006). 30 En una insercin pagada que apareci en la prensa escrita del 10 de julio de 2006, la Femospp manifest con grandilocuencia: Nadie puede ignorar ni erradicar de nuestra memoria colectiva, que un presidente de la Repblica, acusado de genocidio fue aprehendido y que permaneci en dicha situacin, hasta que el da de ayer, el pasado sanguinario y corrupto volvi por sus fueros. Cfr. La Jornada, 10 de julio de 2006. 31 Cfr. Carrasco Araizaga, Jorge. Justicia Electorera, Proceso, 4 de julio de 2006. 32 Recurso de apelacin 174/2003, resuelto por la Suprema Corte de Justicia de la Nacin, en ejercicio de su facultad de atraccin, luego de que fuera interpuesto por el Procurador General de la Repblica en contra de una decisin del Juzgado Cuarto de Distrito en materia penal del estado de Nuevo Len. 33 Para mayor referencia, ver: Convencin Interamericana sobre Desaparicin Forzada de Personas.

23

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

No ocurri lo mismo con el criterio sostenido por la Suprema Corte de Justicia en la Controversia Constitucional interpuesta por el Jefe de Gobierno del Distrito Federal. Ah, el Mximo Tribunal consider que la aplicacin de la Convencin Americana en materia de desaparicin forzada no atentaba contra el principio constitucional de irretroactividad de la ley, puesto que por su propia naturaleza una desaparicin segua cometindose a lo largo del tiempo en tanto el paradero de la vctima no fuese determinado. Bien leda, la tesis posibilitaba a la Femospp para dejar de investigar secuestros y empezar a investigar desapariciones34. Sin embargo, el fallo nunca fue retomado por la Femospp como parte fundamental de su argumentacin, lo que no impidi al Fiscal seguir hablando de que los agentes ministeriales a su cargo investigaban desapariciones forzadas. Lo dicho sirve para mostrar que en la actuacin de la Femospp la argumentacin desde el derecho internacional de los derechos humanos ha sido escasa y pobre: los delitos del pasado no son investigados como delitos de lesa humanidad sino como delitos comunes. Por otra parte, si se considera tambin que hasta la fecha no existe ninguna sentencia condenatoria en contra de alguno de los responsables de los cientos de desapariciones forzadas, el resultado tal y como lo presenta la Fiscala falta a la verdad. Tercer resultado La localizacin en Washington D.C. de Lucio Antonio Gallangos Vargas (Juan Carlos Hernndez Valadez), desaparecido desde 1975. La Femospp ha ostentado como uno de sus principales logros la localizacin de Lucio Gallangos, quien tras la desaparicin forzada de sus padres Roberto Gallangos Cruz y Carmen Vargas Prez, fue adoptado por otra familia en 1975. Tal resultado parece justificado: de las casi 600 desapariciones que la Femospp conoci, el de Gallangos es el nico caso en el que se logr la determinacin del paradero de una vctima. Sin embargo, la versin de los familiares ms involucrados en la bsqueda hace dudar de la ostentacin de la Femospp. De acuerdo con Aleida Gallangos, hermana de Lucio, fueron sus propios esfuerzos -y no los del Estado- los que permitieron la ubicacin del desaparecido. En medios de comunicacin, Aleida Gallangos ha sostenido que su bsqueda no fue apoyada por la Femospp y que ms til result para este fin el auxilio de quienes fueron compaeros de sus padres; inclusive, ella ha llegado a sealar que la Femospp entorpeci su bsqueda35. Se trata, pues, de un logro ajeno al trabajo del Fiscal. Cuarto resultado La consignacin de los ex titulares de la Direccin Federal de Seguridad, polica poltica del autoritarismo, Miguel Nazar Haro y Luis de la Barreda Moreno. La Femospp presenta como uno de sus principales logros las consignaciones de dos ex directores del rgano que control la polica poltica mexicana, la Direccin Federal de Seguridad (DFS). Sin embargo, hasta ahora ha fracasado en lograr procesamientos exitosos contra estos funcionarios por lo que las consignaciones difcilmente pueden presumirse como logros. Luis de la Barreda Moreno, despus de evadir la justicia por varios aos, se entreg a finales de junio de

34 Cfr. Controversia Constitucional 33/2002.- Jefe de Gobierno del Distrito Federal.- 29 de junio de 2004.- Unanimidad de nueve votos (Ausente Guillermo I. Ortiz Mayagoitia).- Ponente: Juan Daz Romero.- Tesis Jurisprudencial 48/2004 35 Cfr. Aleida y Lucio: historia de un reencuentro, Noticieros Televisa, enero 11 de 2005.

24

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

2006 a sus captores cuando su estado de salud no le permiti continuar en calidad de prfugo36; casi en el acto, le fueron dictados autos de libertad en al menos nueve cargos que la Femospp no pudo sustentar. Por su parte, Miguel Nazar Haro enfrenta los procesos penales que se le siguen desde su domicilio particular37. Por si esto no fuera poco, se le dict un auto de libertad que lo exoner de responsabilidades en uno de los casos con mayor carga simblica de la represin de los aos setenta: el de Jess Piedra Ibarra, hijo de doa Rosario Ibarra de Piedra quien, como parte del Comit Eureka, durante muchos aos ha representado la voz de las madres que exigen justicia para sus hijos desaparecidos. Entrevistada por la prensa tras la absolucin de uno de los responsables de la desaparicin de su hijo, la activista declar: Desde la creacin de la Fiscala Especial para Movimientos Sociales y Polticos del Pasado (Femospp) nos dimos cuenta del contubernio del Fiscal Carrillo Prieto con el inters del gobierno foxista de que solamente se supiera a escala internacional que Mxico estaba haciendo cosas por castigar a ex represores; pero hoy ha quedado al descubierto esa farsa38. Quinto resultado La obtencin de veinte rdenes de aprehensin, de las cuales la Agencia Federal de Investigacin de la Procuradura General de la Repblica (PGR), slo ha cumplido doce. La Femospp presenta como resultado la obtencin de veinte rdenes de aprehensin, sin mencionar si stas se han cumplido o no. Al respecto, cabe recordar que en reiteradas ocasiones, sin dar mayores pruebas y sin presentar las denuncias correspondientes, el Fiscal Carrillo Prieto manifest que debido a un conflicto de intereses la Agencia Federal de Investigaciones, instancia encargada de cumplimentar las rdenes de aprehensin, haba realizado su labor con negligencia y haba propiciado la evasin de la justicia de quienes la Fiscala acusaba. Con ello, Carrillo Prieto puso en tela de duda la voluntad poltica de la PGR para facilitar las labores de la Femospp39. De ser ciertas las acusaciones, en su afn por deslindarse, el Fiscal pas por alto que en tanto responsable ltimo de la Femospp y en tanto funcionario pblico adscrito a la misma Procuradura, es corresponsable del cabal procesamiento de las personas a las que seale como probables responsables de los delitos que investiga. Independientemente de esto, resulta sintomtico que la Femospp se ufane de haber obtenido veinte rdenes de aprehensin cuando slo doce de estas se han cumplimentado, y cuando hasta ahora ninguna de ellas ha derivado en un deslinde de responsabilidades penales en contra de los detenidos.36 Cfr. Gmez, Francisco, Se entrega De la Barreda, ex director de la DFS, El Universal, 30 de junio de 2006. La nota consigna: El exdirector de la extinta Direccin Federal de Seguridad (DFS), Luis de la Barreda Moreno, se entreg a elementos de la Agencia Federal de Investigaciones (...) Su entrega se debi al deteriorado estado de salud, que se vio complicado por su avanzada edad. 37 Nazar Haro, como otros funcionarios sealados por la Femospp por su participacin en los delitos del pasado, fue beneficiado por una reforma legislativa que permite a los mayores de setenta aos enfrentar sus procesos penales en prisin preventiva domiciliaria. La iniciativa, que en el proceso legislativo fue presentada como una reforma humanitaria, era aparentemente guiada por un propsito menos noble: al no exceptuar del beneficio a quienes son acusados por la comisin de crmenes de lesa humanidad, los legisladores mostraron su intencin de evitar a toda costa que algunas de las personas sealadas como presuntos responsables de delitos de lesa humanidad durante la guerra sucia -particularmente el ex presidente Luis Echeverra- llegaran a prisin. Aunque sobra decir que no hay posibilidades de probar fehacientemente el dolo de los legisladores para beneficiar a los violadores de derechos humanos del rgimen prista, lo cierto es que todo apunta a que as fue. Analistas como Sergio Aguayo han calificado esta reforma como una proteccin jurdica adicional para los violadores de derechos humanos y han responsabilizando directamente a las fracciones del PRI y del PAN por su aprobacin. Cfr. Ni verdad ni justicia, op. cit. 38 Cfr. Mndez Ortiz, Alfredo, Seguir la bsqueda de mi hijo, pese a cerrarse la va judicial: Rosario Ibarra, La Jornada, 14 de junio de 2006. 39 Entrevista con Dr. Carrillo Prieto: por los conflictos de intereses que hay en el interior del gobierno, y porque en el Poder Judicial federal existe un reducto de resistencia al cambio. Ah, se ubican los focos rojos. En las zonas del Poder Judicial federal. Ah est el reducto de la resistencia al cambio, prevalece el conflicto de inters, por ms que se han modernizado el nombre y sus instalaciones. Peridico La Jornada, 07 de octubre de 2005. En medios de comunicacin se difundi que el comandante Luis Crdenas Palomino, director de Investigacin Policial de la Agencia Federal de Investigacin (AFI), era el principal responsable de la bsqueda de Luis de

25

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

Sexto resultado El Informe Histrico a la sociedad mexicana, sobre los movimientos sociales y polticos del pasado, que el presidente Vicente Fox presentar para emprender el proceso de reconciliacin nacional. Como sealamos prrafos arriba, el diseo institucional de la Femospp prevea un eje de anlisis de informacin. Con el paso del tiempo, ste deriv en una Direccin de Investigacin y Anlisis Documental. Inicialmente, el mandato de esta rea fue tan vago como el de la propia Fiscala, pero despus de varias vicisitudes ms relacionadas con lo penosamente anecdtico que con el trabajo sustantivo de esclarecimiento histrico del pasado autoritario40, el trabajo de la Direccin fue decantndose hacia la elaboracin de un informe histrico sobre los crmenes de lesa humanidad cometidos en el pasado inmediato. A partir de 2005, los esfuerzos de su personal se encaminaron a la elaboracin de lo que el Fiscal en algn momento llam el libro blanco de la represin en Mxico41. Sin embargo, adems de que quien qued a cargo del rea no contaba con especializacin en el tema42, las condiciones de trabajo del personal contratado para este fin fueron adversas. Los investigadores de la Fiscala denunciaron que laboraron sin contratos, sin sueldos y con la animadversin permanente del Programa Ministerial43. Por si esto no bastara, el trabajo lo llevaron a cabo sin asesora externa y sin buscar el respaldo de actores relevantes en el tema; el sigilo no fue muy diferente al que rode a las averiguaciones ministeriales de la Femospp. No obstante, en medio de las condiciones ms adversas, gracias al tesn de una parte del equipo de investigadores, la Direccin de Investigacin termin redactando un borrador de informe histrico en diciembre de 2005, al que titularon Qu no vuelva a suceder!. En sus declaraciones pblicas, el Fiscal se refera al informe con grandilocuencia y sostena que su presentacin dara pie a la reconciliacin nacional44; sin embargo, al interior de la Femospp, comenz a entorpecer su publicacin45.

que los hechos por

pasado por altoella investigados

La Fiscala ha

constituyen delitos de lesa humanidad.

la Barreda Moreno y se supo que est emparentado con el abogado Marcos Castillejos, quien forma parte del equipo de defensa de De la Barreda. Noticieros Televisa, 03 de mayo del 2005. 40 Entre estas, el auge y la cada de la titular del rea, ngeles Magdaleno, quien termin por dejar la Femospp en medio de descalificaciones personales mutuas entre ella y el Fiscal Carrillo Prieto, sin haber realizado los aportes que se habran esperado de su gestin. Carlos Montemayor, Fiscala especial: un balance I, La Jornada, 29 de abril de 2006. 41 En oposicin al libro negro, como se conoci el manual escrito por el Gral. Mario Arturo Acosta Chaparro: Movimiento subversivo en Mxico. Manual de ambientacin contrainsurgente del Ejrcito Mexicano, publicado por la Secretara de la Defensa Nacional en 1990. 42 El Dr. Jos Sotelo Marbn, quien profesionalmente se ha desempeado en le CNDH y en la PGR, sin contar en su haber con publicaciones historiogrficas especializadas. Cabe mencionar que el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolom de las Casas lo ha responsabilizado por omisiones en la investigacin de las actividades de los grupos paramilitares en el Estado de Chiapas, mientras el Dr. Sotelo fungi como Coordinador de la Unidad Especializada para la Atencin de Delitos Cometidos por probables Grupos Civiles Armados de la PGR. Con su silencio, ha sealado el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolom de las Casas, Sotelo ha sido cmplice de los delitos de lesa humanidad cometidos contra la poblacin indgena en el conflicto armado en Chiapas. Cfr. Correo Ilustrado de La Jornada del 17 de marzo de 2006, carta de Blanca Martnez, Directora de ese Centro. 43 Mosso, Rubn, Demandan a Fiscala del Pasado, Milenio, 3 de marzo de 2006. Tambin: Mndez Ortiz, Alfredo, Ex investigadores acusan a Carrillo Prieto de violar sus derechos laborales, La Jornada, 3 de marzo de 2006. 44 En el documento institucional Resultado principales 2002 2004, la Femospp hablaba de ir por las tres erres: la resolucin jurdica, la reconstruccin histrica, y la reconciliacin nacional. 45 Medelln, Jorge, Informe sobre guerra sucia circula en internet, El Universal, 28 de febrero de 2006. En el encabezado se lee: Acusa al Estado de genocidio; el fiscal intenta limpiar el texto, segn ong.

26

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

Finalmente, despus de meses de incertidumbre, en febrero del 2006 una versin preliminar del informe fue filtrada a prensa y publicada por diversos medios de comunicacin nacionales e internacionales. Aunque el borrador presentaba las limitaciones propias de un trabajo en ciernes, el trabajo de documentacin sentaba las bases para el reconocimiento de la responsabilidad estatal en la comisin de crmenes de lesa humanidad en los aos sesenta, setenta y ochenta46. No obstante, hasta la fecha de redaccin de este Balance, el informe no ha sido presentado pblicamente por ninguna instancia oficial y su destino permanece incierto. Organizaciones internacionales, como la estadounidense National Security Archive, han advertido que el rezago de la presentacin oficial del informe puede obedecer a un intento, orquestado por la Procuradura General de la Repblica y la propia Femospp, de limpiar el documento; es decir, de eliminar del documento los sealamientos ms contundentes sobre las violaciones a derechos humanos cometidas en la poca, particularmente en lo que concierne al papel del Ejrcito mexicano. Para Human Rights Watch (HRW), el borrador de informe circulado en medios es quiz el logro ms sustancial47 de la Femospp en el sexenio. No obstante como la propia organizacin observa, el informe es tambin la muestra ms clara de que la Fiscala podra haber hecho mucho ms48. La oscuridad en la que se han tomado las decisiones sobre su publicacin, as como el probable intento de suavizar su contenido, bastan para situar en su justa dimensin este resultado de la Femospp. Como este recuento hace ver, los resultados que la Femospp ha presentado a la opinin pblica distorsionan lo que en los ltimos aos ha ocurrido; uno a uno, los resultados oficiales caen por su propia falta de contenido cuando se observa a detalle el escaso avance en la vigencia de los derechos a la verdad y a la justicia en los casos de delitos de lesa humanidad. De ah que una especialista en el tema como Kate Doyle plantee: Los mexicanos mirarn retrospectivamente hacia la oficina del fiscal especial, creada por el Presidente Fox para investigar los crmenes de la guerra sucia, y se preguntarn si estaba predestinada al fracaso desde su diseo49. Qu queda del trabajo de la Femospp despus de desvirtuar uno por uno sus supuestos resultados? Un cmulo de deficiencias, muchas de ellas estructurales, que perpetan la impunidad; falencias similares a las de otras fiscalas especiales que, como supo observar la Relatora Especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales de las Naciones Unidas, evidencian problemas profundamente arraigados con respecto a la impunidad. Entre estos, destacamos los siguientes: 2.1 Supremaca de la jurisdiccin militar sobre la civil La Femospp ha sido complaciente con los mandos castrenses, omitiendo investigar a fondo su responsabilidad en los delitos del pasado. A pesar de los indicios que los sealan como responsables de graves violaciones a derechos humanos, la Femospp no ha logrado que ningn militar sea llevado ante tribunales civiles ni ha logrado acceder plenamente a los archivos militares. El propio Fiscal ha dado su respaldo pblico a las fuerzas armadas50, secundando una Ley de Amnista propuesta por Clemente Ricardo Vega, Secretario de la Defensa Nacional51. Las declaraciones del Fiscal perpetan la46 Desde febrero del 2006 el informe Qu no vuelva a suceder! puede consultarse en el sitio: http://www.gwu.edu/~nsarchiv/NSAEBB/ NSAEBB180/index.htm 47 HRW, El cambio Inconcluso. Avances y desaciertos en derechos humanos durante el gobierno de Fox, 2006, p. 70. 48 Ibid. 49 Doyle Kate, Una verdad en construccin, Proceso, 11 de junio de 2006. 50 El Ejrcito fue utilizado por el poder civil para lograr sus propsitos, para destruir a la disidencia armada y lo relacionado con ella en los aos setenta. El Ejrcito como institucin, penalmente no puede tener responsabilidades, porque ni histrica ni orgnicamente particip en todo como una institucin. Una parte del Ejrcito fue utilizada por el poder civil para conseguir esos propsitos. Hay que

27

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

incapacidad que histricamente ha mostrado el estado mexicano para sancionar a los militares responsables de violaciones a derechos humanos. Como ocurri en la masacre de El Charco, la imposicin de la jurisdiccin militar por encima de la civil en investigaciones concernientes a violaciones graves a derechos humanos conlleva la exoneracin de los perpetradores. 2.2 Ausencia de reparacin integral a vctimas y familiares

necesita rendir cuentas volvi a triunfar, a reafirmarse ya mostrar las debilidades de nuestrademocracia...

...el Mxico que no

La obligacin a cargo del Estado de reparar el dao ha sido afrontada Lorenzo Meyer errticamente. La Femospp se ha limitado a proponer, entre algunos de los afectados, una indemnizacin pecuniaria -sin la prudencia que una propuesta de esta naturaleza requerira-, dejando de lado otros aspectos como el reconocimiento de la responsabilidad estatal52. La propuesta de la Fiscala, publicitada en abril de 2005, no toma en cuenta el lucro cesante ni el dao emergente para determinar el dao material53; tampoco incluye medidas de no repeticin. Mucho menos considera una indemnizacin justa para establecer el dao moral en cada caso particular. De acuerdo con los estndares internacionales, dichos aspectos son indispensables en una reparacin integral del dao. Familiares, organizaciones y vctimas manifestaron su rechazo, sealando que la propuesta de indemnizacin muestra que el presidente (Vicente) Fox no tiene un verdadero compromiso con la justicia ni intencin de acabar con la impunidad y en cambio quiere liquidar el asunto para presentarlo como logro del sexenio, comprando, sobornando, repartiendo puestos y dinero para callar la dignidad de nuestra lucha54. Como en el caso Aguas Blancas, la asuncin de la responsabilidad estatal a travs de la reparacin integral del dao se escamotea y, como magro sustitutivo, se recurre a indemnizaciones o ayudas humanitarias cuyo propsito dista de ser la procuracin de justicia. 2.3 Irregularidades administrativas Reiteradamente se ha sealado en prensa una posible malversacin del presupuesto de la Femospp. Hasta ahora, no han sido desmentidas las versiones que afirman la existencia de cinco procedimientos abiertos en la Secretara de la Funcin Pblica contra cerca de 90 funcionarios de de la Fiscala por el uso de 50 millones de pesos destinados a actividades de seguridad nacional que presuntamente habran sido gastados en otros rubros55. La documentacin de estas irregularidades

tener muy claro que el Ejrcito no dise, no invento, no promovi, no provoc; esto es, hasta ahora lo que aparece de las investigaciones. Peridico La Jornada, 30 de enero de 2003. Entrevista con el Fiscal. 51 El da 26 de mayo del 2004 el Fiscal Ignacio Carrillo Prieto afirm que la propuesta de una Ley de Amnista respecto de lo sucedido, desde 1968 y hasta los aos 80, era un esfuerzo loable de parte del Titular de la Secretara de la Defensa Nacional ya que bajo sus propias palabras Mxico requiere de la reconciliacin de sus ciudadanos con el Ejercito. 52 El Fiscal Especial anunci que solicitara a la Secretara de Hacienda y Crdito Pblico 200 millones de pesos para indemnizar pecuniariamente a familiares y vctimas. Para los casos de desapariciones forzadas, propuso 365 mil pesos para cada caso; para quienes fueron presos polticos, 219 mil pesos para cada caso; para las ejecuciones extrajudiciales, 365 mil pesos para cada caso. El Fiscal identific tambin a 50 vctimas de genocidio que recibiran 365 mil pesos. 53 De acuerdo con la jurisprudencia del sistema interamericano, el dao material en las desapariciones forzadas es de carcter propiamente pecuniario, y lo integran el lucro cesante y el dao emergente. El primero se determina con clculo de los ingresos que la vctima proyectivamente debi haber percibido de no ser desaparecida; el segundo, con los perjuicios causados a familiares partir de la desaparicin. 54 Gonzlez Ruiz, Enrique. Revista Proceso, 29 de junio del 2005. 55 Gutirrez Vega, Mario, Un fiscal en apuros, Reforma, 11 de junio de 2006. El encabezado de la nota es sugerente: Slo le quedan dos pendientes: resolver el pasado y esclarecer el presente.

28

Derechos incumplidos, violaciones legalizadas

ha sido una preocupacin constante de la opinin pblica y, lamentablemente, ha distrado la atencin de los aspectos centrales del mandato de la Femospp: justicia y verdad para las vctimas de los delitos del pasado. Al respecto, el historiador y analista Lorenzo Meyer seal hace poco: La razn de dar vida a la nueva fiscala era fincar responsabilidades a Luis Echeverra y al resto de los responsables de los crmenes de Estado antidemocrtico de los 1960 y 1970. Al final, y tras gastar ms de 100 millones de pesos en ese aparato burocrtico slo en los dos ltimos aos, la Femospp no logr nada, absolutamente nada positivo y s algo negativo, pues el Mxico que no necesita rendir cuentas volvi a triunfar, a reafirmarse y a mostrar las debilidades de nuestra democracia56. Como haba ocurrido antes con otras fiscalas especiales, las irregularidades administrativas de la Femospp ensombrecieron ms su menguada actuacin. 2.4 Desconocimiento del derecho internacional de derechos humanos Como sealamos arriba, la actuacin de la Femospp, sobre todo en cuanto a las desapariciones forzadas, se ha caracterizado por un conocimiento pobre del derecho internacional de los derechos humanos. La Fiscala se cie, en lo fundamental, al marco del derecho penal mexicano y deja de aplicar los estndares ms altos de proteccin a los derechos humanos, tal y como se establecen en la Declaracin Universal de los Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos, la Convencin Americana sobre Derechos Humanos, la Convencin Americana para Prevenir y Sancionar la Tortura, la Convencin Americana sobre Desaparicin Forzada de Personas, la Declaracin sobre los Principios Fundamentales de Justicia para las Vctimas de Delitos y de Abuso de Poder, entre otros. La Fiscala ha pasado por alto que los hechos por ella investigados constituyen delitos de lesa humanidad y que, siendo esta su naturaleza, requieren una argumentacin cimentada en el derecho internacional de los derechos humanos. Otras experiencias, ignoradas por la FEMOSPP, muestran que la investigacin de violaciones sistemticas a los derechos humanos en contextos de represin poltica requiere una argumentacin internacionalista para su conceptualizacin, investigacin y sancin. Ejemplos claros de las fallas en las estrategias jurdicas de la FEMOSPP son las consignaciones por el delito de privacin ilegal de la libertad en su modalidad de plagio o secuestro, establecido en el Cdigo Penal Federal, y no por desaparicin forzada de personas, tal y como lo faculta la Convencin Interamericana sobre Desaparicin Forzada de Personas, la legislacin nacional vigente, y la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin. Con esta omisin, la Femospp se asimila an ms a otras fiscalas similares que, en su renuencia por acudir a fuentes de derecho ms adecuadas para la investigacin de violaciones graves a derechos humanos, terminan adoptando criterios formalistas que facilitan el trabajo de la defensa de los perpetradores y encubren la responsabilidad de los mandos altos. 2.5 Ausencia de resultados Hacia el final del sexenio, sectores amplios y actores representativos coinciden en la percepcin de que la Femospp no ha alcanzado avances sustantivos en la vigencia de los derechos a la justicia y a la verdad con respecto de los delitos de lesa humanidad cometidos en el pasado. Para activistas como Rosario Ibarra de Piedra la conclusin es clara: La Fiscala Especial para Movimientos Sociales y Polticos del Pasado siempre fue una farsa, una maniobra de mercadotecnia57. De igual manera, especialistas como Sergio Aguayo subrayan que Hay un problema de percepcin muy agudo, porque el56 Meyer, Lorenzo. Muere lo valioso, subsiste lo indesaeable. Reforma, Agenda ciudadana, 26 de enero del 2006. 57 Madrid, Lemic, Liberan a dos implicados en el caso Piedra Ibarra, Exclsior, 22 de mayo de 2006.

29

Los derechos humanos en el sexenio 2000-2006

fiscal hizo sus declaraciones, textos, desplegados y cartas, donde insiste en lo mucho que ha logrado, mientras que los familiares de las vctimas, ex lderes estudiantiles y analistas, adems de organismos internacionales, tenemos una visin que oscila entre la frustracin, la sorpresa y el escepticismo por lo que no se hizo y por los razonamientos del fiscal [...]58.

Luego de desvirtuar uno por uno los supuestos

Quiz es este aspecto el que mejor muestra las similitudes entre la Femospp slo queda y otros intentos anlogos, con respecto de los problemas profundamente arraigados con respecto a la impunidad de los infractores de los derechos -muchas de ellas humanos. La Fiscala para los delitos del pasado no logr revertir la estructuralesimpunidad de manera significativa como tampoco lo hicieron, en su momento, las fiscalas especiales para los casos Acteal y Aguas Blancas, que o la Fiscala especial para la atencin de delitos cometidos contra las mujeres en Ciudad Jurez. Se trata, como hemos dicho, de un eslabn ms en la larga cadena de impunidad que arrastra el sistema mexicano de procuracin e imparticin de justicia. El fracaso de la Femospp hoy es el fracaso de quienes investigaron Aguas Blancas ayer y, de no ser corregido el rumbo, de quienes maana investigarn la toma de Atenco. No en vano Lorenzo Meyer ha sostenido: Como colectividad, tenemos la necesidad y el deber de conocer y difundir lo que ocurri hace tres y cuatro decenios y pasar un juicio tico y poltico contundente sobre ello. Mientras no lo hagamos, los grandes crmenes del Estado mexicano sern crmenes sin castigo y sus fantasmas nos seguirn acompaando e intranquilizando59.

resultados, un cmulo de deficiencias

perpetan la impunidad.

3. Recomendaciones del Centro Prodh y conclusionesAl trmino del sexenio, es posible afirmar que ni la alternancia en el Ejecutivo Federal ni la creacin de la Femospp contribuyeron a revertir significativamente la impunidad que prevalece en los casos ms emblemticos de graves violaciones a derechos humanos en Mxico. Los pobres resultados que arroja a varios aos de su creacin la Fiscala son la muestra ms reciente de un sistema que reiteradamente se ha mostrado incapaz y negligente cuando debe procurar justicia en favor de quienes han sido vctimas de los ms condenables atentados en contra de la dignidad humana. Con ello, permanecen en estado de incumplimiento las recomendaciones que en el pasado distintas instancias internacionales de derechos humanos han hecho al Estado Mexicano. En el tema que nos ocupa, basta con sealar las recomendacio