División Del Trabajo
-
Upload
cesitar-antonio-contre -
Category
Documents
-
view
9 -
download
0
description
Transcript of División Del Trabajo
UNIVERSIDAD FERMIN TORO
VICERECTORADO ACADEMICO
FACULTAD DE CIENCAS ECONOMICAS Y SOCIALES
ESCUELA DE RELACIONES INDUSTRIALES
DIVISIÓN DEL TRABAJO Y TIPOS DE PROPIEDAD
Integrantes:
Cesar Contreras 24.777.526
CABUDARE, SEPTIEMBRE DE 2015
Adam Smith, el primero en realizar un tratamiento del concepto en su
obra la riqueza de las naciones, confunde la causa con la intencionalidad de
la división del trabajo; pues asevera que la división del trabajo es producto de
los países que tienen mayor grado de “industria y cultura”, ya que en las
sociedades rudas y salvajes no hay una división del trabajo claramente
definida y los hombres deben enfocarse a diversas actividades. La división
del trabajo en Smith, aparece como un producto creado históricamente, pues
ésta no surge como una creación deliberada, con la intencionalidad de
optimizar, sino que surge, y se inserta en los procesos productivos, por la
propensión por intercambiar productos en busca de la satisfacción del interés
individual.
En ese sentido, cuando surgen nuevas necesidades en el mercado;
pues el mercado es el foco de transmisión de la información, estas
necesidades son canalizadas por individuos, manufacturas o industrias; las
cuales se especializaran en el oficio que satisfaga la necesidad, y así se van
organizando los procesos productivos. En efecto, para Smith, el mercado
circunscribe la extensión operacional de la división del trabajo. Smith,
concibe la división del trabajo como un factor de potenciación del proceso de
producción, un factor que permite potenciar las destrezas de los operarios al
especializarse en una labor (que se derivaría en una mayor productividad) y
potenciar los procesos productivos.
Éstos últimos, por direccionarse hacia la optimización de los recursos
y hacer un uso eficiente del tiempo de producción. Dicho proceso; al estar
ramificado por la especialización de la persona en una labor, trae consigo la
ventaja operacional de seguir potenciando la división del trabajo; pues el
oficio, que Smith reconoce como función de una persona en una actividad
específica, genera diferencias en el proceso productivo por la finalidad a la
cual ha sido abocado.
Bajo la premisa de la ramificación, y aunando la premisa de la
extensión operacional, Smith determina que, si el proceso de producción es
prolijo, se requiere de mayor número de operarios, también de varios lugares;
por los cuales la materia ha de transitar para ser procesada; en su defecto, si
éste no es prolijo, desciende el número de operarios y el proceso puede
efectuarse en un solo lugar. En tales determinaciones, Smith, hace alusión a
una separación de los oficios, tráficos y empleos; según las
especializaciones que se efectúen en una territorialidad específica partiendo
de las potencialidades inherentes del suelo y su ubicación estratégica para el
intercambio.
Antes de la propiedad privada, la única regla para determinar el valor
de cambio de las cosas era la cantidad de trabajo que la producción del
objeto había requerido. El producto íntegro del trabajo correspondía al
trabajador.
Con la propiedad privada y la acumulación de capital, fue necesario
que el precio real comprendiera, además de la remuneración del trabajador,
el interés del capital y la renta de la tierra. Se resuelve en dos partes: “una de
ellas para el salario de los obreros y la otra para las ganancias del
empresario”.
En Adam Smith coexisten dos teorías distintas: el trabajo es la única
causa del valor, el trabajo es la medida y causa del valor. Y segundo, el
capital y la tierra son también fuentes de nuevos valores que vienen a
añadirse a los formados por el trabajo.
Precio natural: es el que está formado por todas las tasas corrientes
de cada uno de sus elementos: salario, renta y beneficios; Precio comercial:
viene dado por la relación de la oferta y la demanda para cada mercancía en
un momento determinado.
El precio comercial debe tender a igualarse con el natural. Si el precio
comercial es más alto, la inversión en ese producto crece y con ella, la
producción. Así el precio comercial baja y se estabiliza con el precio natural.
Pasa lo mismo en el caso contrario.
Demanda absoluta o potencial: vendría dada por las necesidades,
por el deseo de compra; Demanda efectiva: añade al deseo los medios de
compra, es decir, el respaldo monetario del deseo.
En Herbert Spencer; si bien no se desarrolla la división del trabajo en
función del proceso de producción, encontramos el desarrollo del concepto
„división del trabajo‟ desde una perspectiva netamente biológica. En
concordia con Smith, Spencer reconoce que la división del trabajo surge
espontáneamente; en función de satisfacer deseos humanos y las
actividades derivadas de éstos deseos, siendo éste (la división del trabajo)
un movimiento natural, pues es un momento de constitución de un órgano
especializado en determinada función que configurará un orden espontaneo.
Este orden espontaneo permitirá garantizar la adaptación del órgano a través
de la naturalización del hacer.
En ese sentido, dicho orden espontaneo, también es natural porque
surge inconscientemente; es decir, no ha sido un movimiento suscitado por la
deliberación, no ha sido un movimiento artificial, sino que es un movimiento
espontaneo que permite reorganizar la distribución de las profesiones a partir
de su función.
Para Spencer, la diferenciación; es decir, sectores especializados en
una función que se integran a, y son una etapa de, ese orden espontaneo, es
un factor constitutivo del progreso; al ser la especialización de un sector, y
diferenciarse por hacer eso (determinada por la función) y no otra cosa, dicha
diferenciación también recae en el ambiente en el cual se desenvuelve el
sector, pues éste (el sector) opera en este ambiente externo y no en otro, por
lo que Spencer reconoce, en una de sus máximas, que: “todas las
estructuras de la sociedad, resultan de especializaciones de una masa
relativamente homogénea”.
Por ello, se concibe que, los movimientos naturales, tiendan a la
evolución; pues es un tránsito de lo homogéneo simple a lo heterogéneo
complejo; donde la estructura ha sido diversificada, presentando
redistribuciones de ocupación y función; donde hay una diferenciación
progresiva, a medida que se presentan una diversidad de matices para el
hacer; donde se transita de la uniformidad a la multi formidad; donde la
organización, es una reducción de concentración. Esta reducción de
concentración es de vital importancia para la intelección del momento
evolutivo; donde surgen especializaciones de órganos o sectores; donde se
diferencian unos de otros y, consigo, sus ambientes; donde se complejiza la
relación estructural y todo su proceso de funcionamiento.
En términos de Spencer, esta reducción de concentración es: “El paso
de un estado difuso imperceptible, a un estado concreto perceptible; es una
integración de la materia y una disipación concomitante del movimiento; por
el contrario, el paso de un estado concreto perceptible a un estado difuso
imperceptible, es una desintegración de la materia, acompañada dicha
desintegración de una producción de movimientos”.
La cooperación de Spencer descansa simplemente sobre el beneficio
e interés mutuo y se plasma en el contrato. El prerrequisito para ello es que
el Estado garantice el cumplimiento de los contratos y el derecho de
propiedad. A partir de esa definición tan sucinta del “individuo humano
interesado” y de esa apelación minimalista al Estado, Spencer formula diez
principios muy sencillos, inducidos de la observación del proceso de cambio
histórico.
La postura naturalista de Marx para desarrollar el concepto „división
del trabajo‟, se explicita en su definición de la división fisiológica del trabajo,
donde todo el proceso de producción en conjunción con el obrero-total, es
concebido como el organismo productivo total; el cual se haya dotado de
órganos especializados, es decir; de un obrero parcial, que ejecuta
operaciones parciales especiales; y de funciones parciales, que contribuyen
a la producción del objeto. Con la intencionalidad de optimizar el tiempo que
toma la producción de un artículo, el trabajo se distribuye; pero dicha
distribución no es indiscriminada, ésta se da a través de una distribución de
oficios que serán realizados por obreros especializados en una operación
parcial distinta.
Éste obrero, que es parcial, asimila funciones exclusivas. En ese
sentido, este obrero parcial, que es un grupo de personas que ejecuta una
función parcial, “está integrado por elementos homogéneos y forman un
órgano especial dentro del mecanismo colectivo”. El proceso de
diferenciación, que es inherente al proceso de producción, se da a través de
la puesta en práctica, por parte del obrero parcial, de su forma específica y
exclusiva de operar, con una intencionalidad y finalidad, la herramienta; pues
ésta tiene formas fijas y especiales en su aplicación concreta,
correspondientes a la posición que ocupe en la gradación jerárquica del
proceso de producción.
Dicho proceso de diferenciación, permite organizar también una
división territorial del trabajo, pues los suelos también se destinan para una
aplicación concreta, aprovechando su especialización en la vocación
productiva. En ese sentido, en Marx, se conciben diversas fases del proceso
del trabajo; el cual es complejo por su ramificación en divisiones y
subdivisiones (división del órgano; es decir, del proceso interno de un grupo
de obreros parciales), efectuando su labor específica en simultaneidad. Esto
permite extender el radio de acción del trabajo, porque ya el proceso de
producción no se ha de concentrar en un taller o en un solo y único espacio;
todo lo contrario, el trabajo se podrá desarrollar en distintas espacialidades
concatenadas por la producción de una parte del objeto.
En cuanto a las distinciones entre el obrero, se dan dos: - Obrero total:
el cual es la sumatoria de los obreros que intervienen en el proceso de
producción. - Obrero parcial: el cual interviene en una parte específica,
concreta y especial; dado su capacidad para asumir funciones exclusivas;
por ello es un obrero parcial especializado. Como hacíamos alusión con
antelación, el obrero parcial; no es una sola persona concreta, son un grupo
de obreros que intervienen en determinado tramo de la producción del
objeto; por lo que, desde la perspectiva de Marx, éste grupo es un órgano
que es regulado por los agentes directores del capital; los cuales, dice Marx,
que son un ejército de obreros en tanto que su función es controlar y
preservar la ejecución del proceso de producción.
Marx distingue la división técnica del trabajo, referida a la distribución
de tareas dentro de un mismo proceso productivo, de la división de la
producción social, compuesta por diferentes ramas o sectores y de la división
social del trabajo. Esta última tiene su origen histórico en la separación entre
el trabajo manual y el intelectual, y refleja el reparto de actividades en función
de la posición que el individuo ocupa dentro de la estructura social.-
Reconoce cuatro tipos de propiedad: la tribal, la comunal y estatal
(característica de la antigüedad), la feudal o corporativa, y la privada
moderna.- La propiedad tribal corresponde a una división del trabajo
primitiva, un casi inexistente desarrollo tecnológico, niveles de subsistencia,
pueblos que viven de la caza, la pesca, la cría de ganado y la agricultura. Su
estructura social se basa en un sistema patriarcal establecido a través del
gobierno de los ancianos o jefes de tribu, a medida que las necesidades de
la población aumentan, se amplían las relaciones con el exterior de las
comunidades mediante el trueque y las guerras.
La propiedad comunal y estatal, es la predominante durante la Edad
Antigua, resultante de la reunión de varias tribus en ciudades, en esta
instancia, al producirse un cierto avance tecnológico, se extiende la vigencia
de la propiedad privada, mobiliaria e inmobiliaria. Se establecen autoridades
estatales y la esclavitud, forma generalizada de explotación de la fuerza de
trabajo en esa era. Se genera un antagonismo de clase entre ciudadanos
libres y esclavos.
El tercer tipo, la propiedad feudal o corporativa, aparece en el
medioevo. En cuanto a las relaciones de producción, se basa en la
servidumbre de la clase trabajadora, conformada mayoritariamente por
siervos de la gleba. En las ciudades se configura la propiedad corporativa,
mediada por la organización del artesanado. La división del trabajo resulta
escasamente significativa, teniendo en cuenta que se trataba de una
sociedad rural y con reducido nivel de desarrollo productivo.
A través la aparición de la civilización urbana, aparece un nuevo tipo
de propiedad, expresada mediante la tenencia de capital. La división del
trabajo propiamente capitalista se va definiendo simultáneamente con la
separación de la producción y el comercio y con la formación de una clase de
comerciantes que colabora con la generalización de las relaciones
interurbanas e interregionales. Las innovaciones técnicas determinan una
nueva división del trabajo; cada ciudad se especializa en alguna rama
industrial. De esta manera evoluciona una nueva clase social, la burguesía,
la clase burguesa nace poco a poco, a partir de las burguesías de diferentes
ciudades.
Según Marx, “los individuos solo forman una clase social en la medida
en que son llevados a una lucha contra otra clase; por otra parte, ellos mismo
se enfrentan como enemigos, en la competencia.”
BIBLIOGRAFÍA
- Smith, Adam – Investigación de la naturaleza y causas de la riqueza
de las naciones (tomo I); versión pdf; e-book; 1794.
- Spencer, Herbert – Origen de las profesiones; versión pdf.
- Spencer, Herbert – Los primeros principios; versión pdf.; e-book;
1862.
- Marx, Karl – El capital (crítica de la economía política) (tomo I);
editorial Fondo de Cultura Económica; 1973.
Página web:
http://html.rincondelvago.com/adam-smith.html
http://www.asuntoscapitales.com/puntoi.asp?idp=274
http://www.aporrea.org/internacionales/a73526.html