DYA_Las canciones a los animales.pdf

10
 . emorias J ornadas Andinas de Literatura Latino Americana ] LL L a Paz 1 993 ) olección cademia úmer o tres plur l editores Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación · UMS La Paz  1995

Transcript of DYA_Las canciones a los animales.pdf

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 1/10

  .

emorias

Jornadas

Andinas

de

Literatura Latino Americana

] LL La

Paz

1993

)

olección cademia

número tres

plur l editores Facultad

de Humanidades yCiencias de la

Educación · UMS

La

Paz

 

1995

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 2/10

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 3/10

88

DENJSE

Y ARNOLD

ni

se

debe separar; se tiene que observar y analizar ambos simultáneamente

(Arnold, 1992).

Por lo

tanto, quiero exami

nar

aquí otra manera

de

poner los vari9s

géneros literarios andinos

en

un contexto más amplio. Esto es escuchar las

voces de los actores sociales acerca de su arte en su propio etno-comentario ,

algo que hemos comenzado hacer en nuestro libro: acia un orden andino de

l s cos s

(Arnold, Jiménez y Yapita, 1992). Voy a examinar específicame

nt

e

la terminología usada por algunas mujeres andinas para sus canciones a sus

animales, tanto en los distintos géneros nombrados o las entidades

más

amplias

de

que elJos forman parte.

Llenar estos vacíos en nuestro conocimiento es aún más importante

si

vamos a tomar

en

serio la contención de Bruce Mannheim que tal poesía es la

gramática de

la

s lenguas no escritas (Mannheim, 1986). Mannheim ha argüi

do que la noción Chomskyana de una comunidad de habla

comp

letamente

homogénea  es, más bien, la fantasía de los estudiosos y movimientos de

estandarización en el Oeste. El sugiere que en los Andes,

por

contraste, no hay

comunidades de habla de veras sin variación. Y a diferencia de

la

tradición

Occidental, donde el arte verbal

es co

nsiderado

como

un accesorio

de

corativo

a la gramática, como estética antes que instrumental, y

como

una forma

primaria de habla expresiva, Mannheim arguye que una de las múltiples

funciones del arte verbal, arte que

él

insiste filtra aún al lenguaje de lo

cotidiano, es crear contextos naturales enriquecidos para internalizar

el

habla

como

gramá

tica

 ,

esto es,

por

la adquisición y compartimiento de las repre

sentaciones lingüísticas entre los hablantes.

Quisiera explorar aquí las implicaciones de la contención de Mannheim

en

relación

con

el canto

de

las mujeres en un ayllu boliviano, Qaqachaka,

ubicado

en el

linde entre los departamentos modernos

de

Oruro y

de

Potosí.

Juan de Dios Yapita y yo hemos estudiado su canto, especialmente sus cancio

nes a los animales, a lo largo de los años, tratando de entenderlas dentro de su

contexto social y cultural. El cuerpo

de

canciones a sus animal

es es un

género

literario importante de las mujeres aymarahablantes de Qaqachaka. Forman

parte

de

la división de labor

por

sexo.

La

s canciones más elaboradas son

cantadas a las llamas, alpacas y ovejas que constituyen sus manadas, son la

fuente de sus tejidos, su herencia matrilineal y una forma de riquez a femenina

(ver también Arnold, 1988). Las canciones sin acompañamiento, cantadas

por

las mujeres tejedora-pastoras a sus animales, comprenden ciclos enteros de

canción que expresan las múltiples dimensiones

de

su mundo.

4

4 Para algunos estudios comparativos de las canciones a los animales en el mundo andino véase Flores

Ocboa, 1988

y

Tomoeda, 1985.

LAS CANCIONES A

LOS

ANIMALES POR LAS MUJERES

DE

QUEAQCHAKA

89

El contexto

Lo

s Qaqas

son

mayormente aymarahablantes, aunque los hombres quie

nes

viajan intermitentemente durante

la

época más fría y

seca

del año a los

valles templados de

Ch

uquisaca también hablan quechua. Las mujeres tienden

a ser monolingües en aymara,

au

nque cantan ocasionalmente

en

quechua. Los

Qaqas son agricultores y pastores.

En

las alturas

se

encuentran todavía rebaños

grandes

de

los camélidos andinos, de llama y alpaca, mientras que

en

los pisos

más bajos, donde está ubicado el pueblo principal

de

Qaqachaka, están las

manadas de ovejas, y más abajo todavía están las manadas

de

cabras. Las

mujeres y niños son los pastores principales de los animales y entienden más

sobre ellos. Las mujeres no viajan mucho porque su labor

como

pastoras

demanda su presencia en

el

ayiJu a lo largo del año.

Hasta las

n

uevas cholitas' - las

machaq chulitas

que se dice- las

jóvenes que van a trabajar unos o dos años como empleadas domésticas lejos

de sus ayllus

en

las ciudades grandes de Oruro, Cochabamba y La Paz, todavía

recuerdan sus manadas. Mandan a la casa cualquier ahorro para

ser

usado en la

compra de algunos animales

nue

vos, o quizás un burro o dos que

se

pueden

vender posteriormente a fin de comprar

más

animales para la manada.

Por

razones que aún no están claras, Qaqachaka ha retenido su tradi

ción de cantar a l

os

animales, una tradición de canción ya perdida en los ayllus

vecinos corno Macha. Pero no es nada fácil entenderlas. Juan de Dios y yo

hemos grabado los diferentes géneros de canción sin acompañamiento a los

desde 1984. Transcribí algunas de ellas en mi tesis doétoral, pero

tuve tiempo solamente en los últimos meses para volver a estudiarlas más

seriamente (Amold, 1998 y en preparación). Una

de

las razones para esta larga

demora es que sus significados profundos y esotéricos son frecuentemente

algo i_mpenetrables para l a

gente

de afuera. Para aprenderlas bien, tuvimos que

estudiar

con las

mujeres de Qaqachaka en varios niveles. No

es

noticia d ecir

que el conocimiento de las canciones va

con

el conocimiento de las manadas.

Desde que la mayoría de

las

manadas son guardadas

en

las alturas del ayllu,

hemos tenido que visitar algunos de estas estancias remotas para encontrar a

las ancianas que todavía recuerdan las canciones en detalle. Luego, después de

gra?ar transcribir los ciclos de canciones, hemos tenido que estudiar

con

las

hlUJeres pastoras para chequear nuestras transcripciones y, al mismo tiempo,

explorar sus propias clasificaciones

de

sus canciones y exégesis acompañantes

SObre las canciones. Sólo

así

podemos comenzar a entender

la

relación

más

~ p ~

entre las líneas de las canciones y sus alrededores:

la

ecología del

paisaJe y

las

varias sendas que las conectan.

Dicho

de

otra manera, hemos tenido que educarnos paulatinamente

en

significados de las canciones.

Un

aspecto más mítico

de

las canciones

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 4/10

90

DENISE Y. ARNOLD

menciona los lugares de origen mágico de los animales en los cerros: los

manantiales y bofedales aguosos donde se cree que los animales han emergido

del mundo de adentro. Casi todas las canciones mencionan repetidamente la

semejanza entre la apariencia de las llamas y las aves acuáticas de estos

mismos lugares de origen,

5

y esto nos llevó a un estudio detallado de la etno

omitología de la región. Desde luego, hemos tenido que explorar no sólo los

tonos y melodías de las canciones, sino

el

rol del sonido (ambos humano como

no-humano) en términos más amplios, dentro de su contexto social

Y

cultural.

6

Todo esto nos ha implicado en caminatas largas hasta los cerros más

altos y rincones remotos de Qaqachaka para visitar las diferentes toponimias

mencionadas en las canciones con sus distintas faunas, avefaunas y flora

s

Hemos caminado acompañados de nuestras amistades allá, como de mujeres y

de niños, quienes nos han mostrado estos lugares con orgullo describiendo su

relevancia y sus manadas. También hemos comenzado a

e ~ t e ~ d e r

cómo las

canciones son artificios mnemónicos de una manera muy practtca de la vtda.

Por ejemplo, mencionan las clases de caito usadas por las mujeres para tejer,

como también las hierbas que crecen en las colinas que ellas usan para sus

teñidos. El conjunto de ideas expresadas en las canciones revelan cómo las

mujeres andinas recuerdan y reproducen ciertos aspectos del delicado ecosistema

andino: de la taquia fertilizante que se tiene que retomar a las chacras para

hacer crecer los productos, más los indicadores astronómicos de los cambios

de estación del año. Para apreciar estos elementos de las canciones, tuvimos

que educarnos nosotros mismos en el ciclo de actividades en la producción Y

ejecución de los tejidos (Arnold, en prensa), como m b i é ~ la x o n o ~ de

aves, animales y plantas en el ayllu. Todo esto es un

trabaJO

que da t l s f c c t ~ n

pero, al mismo tiempo, quita mucho tiempo. Implica un diálogo necesano

entre nosotros mismos y las mujeres y niños de Qaqachaka, luego entre Juan

de Dios y yo misma, y luego un chequeo y rechequeo de las ideas preliminares

que surgen de estas conversaciones en la literatura etnográfica y en más

conversaciones con nuestras colegas aquí y afuera.

Las cantantes

La parte más importante de estos años de investigación ha sido nuestras

conversaciones con las mencionadas mujeres cantantes, tejedoras y pastoras

como Doña Lucía Quispe Choque y Doña María Ayka Llanque, ambas

septuagenarias , quienes son reconocidas por todos en el ayllu como expertas

5

Ver también

el

importante trabajo de Flores Ochoa, 1981. .

6 Ver para un estudio comparativo Feld, 1982 que explora los sonidos de una isla dePapua Nueva Gumea.

LAS CANCIONES A LOS ANIMALES

POR LAS MUJERES DE

QUEAQCHAKA

91

en el canto. Hasta Doña María tiene por apodo la Madre de la Canción

(Tayka Kirla).

Algunas mujeres más jovenes, como Doña As unta Arias Tarki y

Doña Bernalidita Colque Quispe, son también buenas cantantes y comentaris

tas sobre el significado de s

us

canciones. Y una generación aún más joven de

cantantes, como Elvira Espejo Ayka con sus once años, y la hija de Doña

Asunta, Flora, que tiene catorce años, tienen para su edad un amplio repertorio

de canciones

7

• Nuestra recolección de, y interés en, las canciones ha estimula

do aún a las empleadas del hogar en La Paz las

machaq chulitas-

engañadas

por años de escuela en rechazar sus raíces culturales. Nunca han escuchado

seriamente las canciones de sus abuelas, y quieren venir a nuestra casaen fines

de semana para escuchar con interés, hasta con una cierta nostalgia, nuestras

grabaciones de las canciones a los animales.

La taxonomía de doña Lucía de las canciones

Hemos trabajado mayormente con Doña Lucía Quispe Choque en la

taxonomía de los varios géneros de canción a los animales. Doña Lucía tiene

su propia clasificación para las canciones. Todavía conoce la mayoría de las

canciones, aunque admite que ya olvidó algunas que

le

cantó a ella su madre;

de hecho menciona a su madre como un punto de referencia continua para el

aprendizaje de las canciones. Pide disculpas que ella misma se ha vuelto

corazón perdido

(chuyma ch aqa).

Pero, aparte de las dudas de la vejez,

sugiere otra razón más práctica porque la gente mayor aún recuerda las cancio

nes, mientras que las jóvenes ya no las saben: simplemente ya no tienen más

manadas de llamas. Las canciones van con las manadas. Doña Lucía en su

época, tenía manadas de llama pero no alpacas; por ésto conoce las canctones a

las llamas pero no a las alpacas. Ella comenta que solamente la gente mayor

que vive en los rincones alejados del ayllu todavía sabe todas las canciones:

Los rincones pues saben esto .

Doña Lucía clasifica los diferentes géneros de canción a los animales

' ' ' ' ~

en termmos generales o m ~

ktrki,

término genérico que incluye canciones de

la estación lluviosa, canciones sin acompañamiento y aquéllas acompañadas

por guitarras grandes y flautas durante el ciclo de las fiestas patronales Ella

describe el ritmo de los

kirki

como

qara qa qa qara qa qa qa.

Sin embargo,

nota que la variedad de

kirki

cantada a los animales es especial y que forma

parte del género de canto triste llamado

warart'aña:

llorar o gritar'', como

aquellos cantos en las ceremonias importantes del marcado de los animales,

7 Ver m b i ~ n Espejo Ayka, 1994: una colección de doc e cuentos narrados por la niña El vira.

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 5/10

92 DENISE Y ARNOLD

cuando las mujeres se emborrachan. Además, el hecho de que estas canciones

a los animales siempre sean cantadas en aymara les da su tercer nombre

genérico de aymart'aña: cantar en aymara''. Aparte de estos términos genéri-

cos, Doña Lucía nos dijo que son canciones del espíritu (ispiritu kirki).

Luego, cuando nosotros insistimos que Doña Lucía sea más precisa,

ella formaba un segundo nivel de categorías nominales más detalladas con

términos compuestos; de manera que las canciones a los animales domésticos

como un todo son llamadas canciones a los animales criados (uywa kirki). Y,

otra vez, cuando preguntamos sobre las funciones más prácticas de las cancio-

nes, ella nos dio otra serie de términos compuestos. Doña Lucía nos describió

cómo ella canta a sus animales para que se produzca

(puquñpataki),

en el

sentido de su crecimiento y madurez. Dice también que canta para la Tierra

Virgen

(Wirjinataki),

quien, según ella, cría a las manadas. Y que canta en

aymara porque este es el lenguaje en que la virgen recibe y entiende .

Se puede cantar a los animales todos los días, pero las actuaciones más

formales ocurren en la ceremonia del marcado de los animales, o en la Fiesta

de los Difuntos , cuando una variedad de canciones para suerte (surtí) son

cantadas. En cada ocasión, hemos notado que las canciones son ejecutadas en

cierto orden.

La gente de Qaqachaka, como Doña Lucía, tiene su propia razón

para este orden clasificatorio, que tiene que ver con una serie de analogías

entre las diferentes clases de animal y diferentes clases de flor. Así, ellos

describen cómo las muchas diferentes clases de animales son llamadas flor

(p aqara),

en su lenguaje ritual de brindar y cantar. Y así, el orden de las

eh'alias y canciones en estas ocasiones siemprepasa desde las flores grandes

(jach a paq ara), nombre ritual para los animales de porte más grandes como

los animales de yunta: vacas, toros o bueyes, a las mulas y burros, y luego a las

llamas y alpacas, bajando hasta las flores pequeñas (jisk'a

paq

ara), los

animales de porte pequeño, tales como las ovejas y cabras. Podemos notar aquí

que las canciones a los animales domésticos incluyen tanto aquellos introduci-

dos por los españoles como también las variedades andinas.

De

hecho, en Qaqachaka, uno de los más elaborados géneros se canta a

las ovejas, que son comunes y muy estimadas allá, en un ciclo de tres diferen-

tes clases de canción, con el aumento de una clase más cuando se la sacrifica.

Como contraste, hay sólo un tipo de canción a las alpacas: llamada

alpach

kirki. Alpachu

es término aymara usado en Qaqachaka para la alpaca. Doña

Lucía nos describía cómo las alpacas son marcadas mayormente en la fiesta de

Santa Wara Wara

(Santa Bárbara), en diciembre, y en esta ocasión se las

cantan. Las ovejas, por otro lado, son marcadas mayormente en Carnavales o

en San Juan, e igualmente se las cantan en su día. Empero, el ciclo más

elaborado de todas las canciones en Qaqachaka son cantadas a las llamas. Las

llamas se marcan en Año Nuevo (Niñu) o en Carnavales (Anata), cuando se las

LAS CANCIONES A LOS ANIMALES POR LAS MUJERES

DE

QUEAQCHAKA

93

cantan también. Comúnmente se dice que hay doce canciones a las llamas en

un ciclo entero, aunque la mayoría de las mujeres solamente conoce partes.

Las canciones a las llamas

Doña Lucía también tiene su propia taxonomía para las canciones a las

llamas Describiré primero sus categorías, con algunos de sus comentarios acerca

de ellas, antes de mencionar sus razones para clasificarlas en t l forma. Luego voy

a retomar a la taxonomía de Doña Lucía para las cuatro canciones a la oveja.

Doña Lucía nombra a las canciones a la llama en términos generales

qarwa kirki: literalmente canciones a la llama  . Ella categoriza las doce

clases en más detalle en la siguiente forma:

1. Canción a las llamas hembras: llamadas Piñama kirki. Piñama es nombre

ritual para la llama hembra. Alude a su capacidad de generar crías desde dentro

de

ella, como la plata pura, llamada piña , encontrada en las minas. Esta clase

de canción también se llama

Tayka kirki:

Canción a las madres .

2 Cancwn a las llamas machos: llamada Tilatir kirki. Tilantiru es préstamo

del castellano

de

lantero , nombre ritual para las llamas machos que guían a

la

s demás, entonces el género es más específicamente a Canciones a los

machos guías . Este género también se llama

Urqu warari:

Llorar de los

machos , en alusión

al

sonido que ellos hacen.

3 Canción a las hembras jóvenes que no tienen crías. Estas hembras son

llamadas urqu p ank' imill kirki: que quiere decir algo como la hembra joven

coqueta que brilla a los machos .

Urqu

p ank'

imilla

es nombre dado a las

hembras que no tienen crías o las mujeres jóvenes que no tienen guaguas. El

género de canción lleva este nombre o, sino, el nombre de Jan wawachiri:

Que no hace crías .

4 Canciones de llevar

que también son canciones de cruzar. Son llamadas

Apasiñ kirki:

Canción de llevarse .

S

Cancwn

a la hembra que

pare

, llamada Qarwa qallu wawachaña: que

quiere decir literalmente Parir a una llama cría .

6

Canción para envolver a las llamas crías, llamada Qarwa qallu k 'iruña:

Envolver a una llama cría .

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 6/10

94

DENISE

Y.

ARNOLD

7

Canción a las Uamas machos jóvenes,

llamada

Ankut kirki. Ankuta

es

nombre para los machos que son delicados todavía tienen piernas frágiles.

Anku

es aymara para tendón .

Luego, el próximo grupo de géneros de canción se defme con derivacio

nes del verbo aymara

anaña:

arrear ganados .

8

Canción cuando se llevan a las Uamas

fuera

del corral: Uyut ansuña.

El

nombre para este primer grupo

de

canciones dentro de la categoría de cancio

nes de arrear , está compuesto así:

uyu

es aymara para corral  , seguido por el

sufijo nominal

-ta-

que indica el movimiento de la manada fuera de los

corrales. En el verbo, el sufijo completivo

-su-

indica el movimento fuera  ,de

llevar los animales desde dentro del corral para afuera.

9

Canción cuando

se

deja las llamas: Anxataña

 

• Aquí, el nombre aymara

lleva sufijo adicional

-xata-

que indica la acción de dejar la manada sobre el

pasto en las colinas.

10. Canción cuando se trae

las

llamas desde las colinas: Sirkat antaniña.

En

este gmpo, el nombre está compuesto de

sirka,

el aymara para colina  más el

sufijo nominal

-ta-

que marca un desprendimiento desde las colinas. En el

verbo que sigue, el sufijo nominal

-ta-

marca el comienzo del movimiento de

arrear los animales hacia la casa, mientras que el sufijo direccional adicional -

ni-

indica aún más específicamente el movimiento hacia la casa y los

corrales donde las llamas van a pasar

la

noche.

11

Canción cuando

se

pone los animales en sus corrales,

y duermen allá:

Jip iñar kirkt'aña ojip iñar anantaña. Jip iña es el verbo dormir , pero con

las patas dobladas que se refiere a los animales y los diferencia de la gente.

Jip iña

también es otro término para

el

corral cerca de la casa, o alternativa

mente para un lugar abrigado en los cerros, por el hecho de que las llamas

duermen

allá.

El sufijo direccional adicional

-ru-

marca el movimiento a, o

hacia . En el verbo

anantaña,

el sufijo verbal

-nta-

indica el movimiento para

adentro al lugar abrigado.

2

. Canciones cuando se pierde

una

llama cría: Qarwa qallu anamuchaña.

Anamuchaña

es el verbo aymara para abandonar  . Esta clase de canción es

otra vez una de las variedades de llorar llamada

warart'aña. Doña

Lucía

conocía sólo

la

líneas introductorias de este género pero nos describió cómo

alguien que ha perdido una llama cría tiene que caminar en las noches cantan-

8 C

f

el verbo ankataña usado en la variante regional de La Paz.

LAS

CANCIONES A LOS ANIMALES POR LAS MUJERES DE QUEAQCHAKA

95

do este género de canción, y al cantarla puede encontrar de nuevo su animal

perdido. Las líneas introductorias siempre aluden

al

hecho de que la llama cría

se ha llevado a un lugar llamado río diabólico

(saxra q'awa).

Hacia una taxonomía preliminar

El contenido detallado de las doce canciones del ciclo a la llama es algo

que estamos investigando ahora. Alaban a los machos como bestias de carga, a

las hembras como creadoras a las recién nacidas. Siguen los ritmos cotidia

nos y estacionales de la labor de pastoreo: llevar las llamas fuera de sus

corrales en la manaña, caminar de un lado a otro en los cerros durante el día, y

regresar

en

las tardes, cruzarlas

en

el Año Nuevo, parir las crías

en

diciembre y

envolverlas con textiles especiales, buscar una cría perdida, o sacrificar una

llama para una ocasión especial. Aunque existen canciones adicionales canta

das a los animales en la ceremonia de tasa llamada cabildo y otra clase de

canción de llorar para suerte, llamada q 'asaña, cantada a los animales en la

Fiesta de los Difuntos estas variedades adicionales parecen ser nada más que

variaciones sobre estas doce clases básicas.

Surgen

la

s preguntas: ¿Por qué hay doce canciones a las llamas? y ¿Por

qué Doña Lucía las clasifica de esta manera? En términos generales, el número

doce en la cultura aymara tiene el significado de completar. Se dice, por

ejemplo, y probablemente con la influencia cristiana, que hay doce milagros en

la región, aunque la importancia del número doce en las culturas andinas

parece mucho más antiguo todavía. Así el número doce parecería incluir todos

lo

s tipos de canciones posibles a la llama. Sin embargo, el principio más

importante de organización que Doña Lucía misma nos dio para la división en

doce clases distintas tiene que ver con su diferenciación

de color.

Las mujeres

de Qaqachaka mencionan con frecuencia que existen doce colores posibles:

tunka piin kulura,

que ellas usan en sus textiles. Usan aquí un préstamo,

kulura,

aunque existía el término

sama

en aymara para color . De hecho, ellas

están hablando de los colores cocidos, teñidos antaño con las hlerbas y rocas

que todavía mencionan

en

sus canciones: los rojos, guindos, anaranjados,

~ r l l o verdes, azules, violetas, etc. Pero, de igual manera, Doña Lucía nos

~ l O que existen doce canciones a las llamas por el simple hecho de que son

como los doce colores de llamas , aquí ella está refiriéndose claramente a

los colores naturales de su tusón, o pelo.

En contraste a la llama con sus doce canciones, Doña Lucía clasifica

sólo tres canciones a las ovejas. Esto es por la manera en que ella clasifica los

colores de los dos animales. Ella insiste que las llamas tienen todos los colores

en sus tusones: negro

(ch'iyiira),

blanco

(janq'u),

marrón

(paqu),

pardo o café

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 7/10

96

DENISE Y ARNOLD

(kap iya), castaño (ch'umpi) gris (uqi), que con el mezclado de los tonos

más claros, oscuros de color, forman los colores de "toda clase"

(taqi layu

),

englobado por el número inclusivo de doce. Sin embargo, ella dice, las ovejas

tienen solamente tres colores: blanco (janq'u), negro (eh iyiira) y aquellas

"mezcladas" o

de

un color sucio (sañi).

Las canciones a

la

s ovejas

Las tres clases de canción que Doña Lucía nos describió para las ovejas

son las siguiente

s:

l. Las ca

nciones a

úls

ovejitas llamada Uwis qallu wawachaña, o más simple

mente Wawachaña, o sólo Qalluchaña.Lite

ral

mente quiere decir "Parir

ovejitas". ste género de canción es relacionado con un solo color, un tono

rojo: el carmesí claro llamado panti, que nos recuerda el color

de

nacimiento:

wawachañ panti. Panti como término

de

color es reservado por el color rojo de

la

sangre del nacimiento.

2. Canciones de Uevar al pastizal. Son llamadas simplemente Puntiru, desde

que las canciones son dirigidas a los animales-guías, llamados puntiru, aque

llos que guían a los demás

de

la manada. Puntir imilla: "la muchacha guía",

por ejemp

lo

,

es

el término

de

cariño

para

la oveja hembra que guía a la

manada. Puntiru parece ser préstamo al aymara del castellano punta, desde

que los animales a los cuales se dirigen las canciones "apuntan el camino" para

los demás. Otro término para este género es sikjarpiita: "cinta desplegada",

puesto que las canciones tratan del tema del despliegue

de

cintas

de

color

realizado por

lo

s animales cuando caminan en fila. Sinta, entra aquí como

préstamo al aymara del castellano "cinta". Este género de canción alude a tres

diferentes colores:

el

negro, blanco y colorado de los

an

imales. El verbo

sikjarpiiña, que aparece a lo largo de las canciones, describe un nivel el

despliegue de unas cintas de

co

lor aparentemente continuas cuando los n i m ~

les caminan en los cerros. Las ovejas se llevan de día y de noche y la canción

trata de estos temas de la vida cotidiana también.

Para Doña Lucía, se

identifica este género por sus líneas características:

Ch'iyar sinra sikjarpiita,

Wila sinra sikjarpiita,

Janq 'u sinra sikjarpiita

o, a lternativamente, la línea:

Puntir imill kawkrii sarjta

Cinta negra desplegada

Cinta roja desplegada

Cinta blanca desplegada

Muchacha punta ¿dónde estás yendo?

J .AS CAN

CIONES

A

LOS ANIMALES

POR

LAS MUJERES

DE QUEAQCHAKA

97

3.

[ ter

cera c'úlse es

úl

canción de coc

inar

,

llamada K

ariña:

"cortar o

desOllar". Estas canciones describen con gusto el cocinar de la carne

de

corderodentro

de

la olla para comer. Sin embargo, las canciones, en su función

de didáctica mnemónica, también aluden a los

di

stintos colores

de

las ovejas

utilizadas para propósitos rituales,

ta

l

es

como el uso

de

ciertos colores

de

animal para sacrificarlo. Por ejemplo, un pasante

de

fiesta siempre desolla una

oveja blanca para los ritos

de

buena salud y como ofrenda a los cerros

protectores de los animales (uywiri). Se dice que el color blanco tiene la

capacidadde dejar limpio, se considera que es buena medicina. Ella continuó

con la descripción de una línea típica de este género:

Junt' umar aquntii.

Pondré al agu a caliente.

Luego Doña Lucía nos cantó algunas líneas típicas del primer género de

canción: Uwis qallu wawachaña: "Parir la ovejita":

lwis qallu wawachasta

Mama/a paw paw

Kunakamak wawachasta

Mama a

paw paw

Sik'imiritknmak wawachasta

Mama a paw paw

Kinsa pilknmak wawashta

Mama/a

paw paw

Yanan chulakita

Mama/a paw paw

Yanan axarit a

Mama/a

paw paw

Kinsa pil wawachasta

Mama a

paw paw

Taykay tayka

Mama/a

paw paw

..

Has parido una ovejita

Mamala baa baa

Puramente ¿qué nomás has parido?

MamaJa baa baa

Puramente hormiguitas nomás has parido

Mamala baa baa

Puramente de tres pelos nomás has parido

Mamala baa baa

Un par de blancos

Mamala baa baa

Un par de grises

Mamala baa baa

Tres pelos has parido

Mamala baa baa

Madre, madre

Mamala baa baa ..

Yalgunas líneas típicas del segundo género, Sikjarpiita: "Desplegar una cinta":

Mama a

paw paw

Uwisha uwisha

M01na/a paw paw

Sarmay sannaya

Mama/a paw paw

T  ak it ak i

Janq'u palumiim sikjarplita

Mama/a paw paw

Mama/ita

Mama/a paw paw

Mamala baa baa

Oveja, oveja,

Mamala baa baa

¡Anda pues ¡Anda

Mamala baa baa

Senda, senda,

como una paloma blanca desplegada

Mamala baa baa

Mamalita

Mamala baa baa

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 8/10

98

Ch'iyar sinta sikjarpata

Mama/a paw paw

Mama/a puntir imilla

Mama/a

paw

paw

Mama/ita

Mama/a paw paw ..

Una cinta negra desplegada

Mamala baa baa

Mamala muchacha-punta

Mamala baa baa

Mamalita

Mama a baa baa ..

DENlSE Y. ARNOLD

más algunas líneas del tercer género:

K ariña:

"Canción de cortar o desollar":

Mama ita

Mamalapaw paw

Janiw uk ama

Mama/a paw paw

Junt ' umaru m urusa

T'impkir umarujaquntsma

Mama/a paw paw

Jumapini taykiíata

Mama/a

paw paw

Jan taykanin taykpa

Mama/a paw paw

Jan awkinin awkpa

Mama/a paw paw

Uwish uwisha

Mama/a paw paw

Junt ' umar jaquntatas

jaquntatakitaw

Mama/a

paw

paw ..

«Apura apura saltasma» sakista

Mamola paw paw

Mama/ita

Mamala

paw

paw ..

Mamalita

Mamala baa baa

No así

Mamala baa baa

Hasta un día

en

agua caliente,

te be arrojado al agua hirviendo

Mamala baa baa

Tú siempre eres mi madre

Mamala baa baa

Madre de las que no tienen madre

Mamala baa baa

Padre de las que no tienen pad re

Mamala baa baa

Oveja, oveja.

Mamala baa baa

Aunque arrojada

al

agua caliente,

arrojada nomás

es

tás

Mamala baa baa ..

"¡Apura apura. camine " me dices nomás

Mamala baa baa

Mamalita

Mamala baa b aa ..

Alguna vez como en las canciones a las llamas, podemos notar que los

mismos tres

c o l o r e ~

blanco, negro y rojo o mezclado, son

r e l a ~ i o n a d o

a los

colores de ciertas aves. Por ejemplo, Doña Lucía canta a sus o v e J ~ S como a

· ·n "de tres pelos": una el color de

chulankita,

ave acuática blanca (

mu a d h - k t el ave

alternativamente de una paloma blanca), otra el color e

e

u ~ a .

'.a.

as

negra llamada "viuda", y la otra un color mezclado: axarita mtstlSlta. E ~ d ~ r

canciones a las llamas, el ave más m e n c i ~ n a d a es ~ h u l l u m p t zambulli ro

no sólo por sus distintas marcaciones, smo tambtén por su l _ f f i p o r t r u ~ t a

de

mediador entre los mundos de adentro, en el fondo del agua Y arnba, enc1m

la tierra. . de

Preguntamos más acerca de estas diversas a l u s w ~ e s a los

c ~ l o r e s

de

1

· 1

L

0

hemos encontrado algo parecido en d1ferentes mveles

os amma es. ueg , . ·d·

1

·

es

ordenamiento en importancia de los colores.

En

un ruvel cou Iano, as mujer

LAS CANCIONES A LOS ANIMALES POR LAS MUIERES DE QUEAQCHAKA 99

dicen que los animales de diferentes colores cuando pasan en fila son "como el

despliegue de cintas de color, de blanca, negra y roja". O, alguna vez, pueden

decirnos que el despliegue de una cinta blanca "se refiere a su pelo blanco,

mientras que la cinta roja se refiere a sus aretes de lana roja". U, otra mujer,

puede decimos que el despliegue de una cinta blanca

se refiere a su pelo

blanco, mientras que la cinta roja se refiere al polvo colorado que los animales

cocean en la estación seca".

Y

aún otra mujer, puede decir que la cinta roja "es

el camino fertilizante de la taquia que los animales botan para atrás cuando

caminan".

En otras ocasiones hemos escuchado decir que la categoría de color

"blanca" se refiere sólo a los animales blancos, mientras que la categoría

"roja" engloba todos los demás colores juntos, incluyendo así a todos los

colores de los animales: castaño, gris, negro etc. Las mujeres insisten, una vez

más, que los colores de los pelos incluyen a todos los colores que existen, y que

por esta razón los textiles usados tanto en los ritos para los animales, como en

las labores de trabajo y carga, no utilizan colores teñidos, sino se dejan en sus

colores naturales. Aquí, el color rojo toma un poder generativo mayor que el

blanco. Aquellos animales que son blancos son "sólo una variedad" dicen,

mientras que el color rojo "incluye a todos los colores que existen".

El sonido de color, el color del sonido

Finalmente podemos preguntamos: "¿Por qué dan tanta importancia al

color en la taxonomía de las canciones a las llamas y a las ovejas, así como en

sus líneas claves? No hay tiempo aquí para desarrollar ampliamente este tema.

Pero

podemos referirnos a unas pistas que están más allá. En Hacia un orden

andino de las cosas hemos analizado un ciclo de canciones a los productos y

hemos llegado a la conclusión de que las canciones de las mujeres juegan un

vital dentro de la metafísica

de

las creencias andinas acerca de la produc

e t ó ~ la reproducción de las plantas. Parece que, en el mezcladode su aliento

fertilizante con las semillas que ellas imbuyeron como chicha en las fiestas,

CUando cantan a los productos, las mujeres literalmente derraman, de manera

analógica, las semillas nuevas, mojadas para su futura germinación en la tierra.

. Basta decir que parece existir un rango semántico semejante en las

Clnciones a los animales. Doña Lucía nos explicaba antes cómo sus canciones

S animales ayundan al aumento de peso y desarrollo a la madurez de las

lbanadas.

Quizás podemos concluir que la técnica andina para hacerlo consiste

derramar, por medio de las canciones el líquido de la voz borracha,

con el aliento que produce los sonidos de color.

Y

así, nos parece que

función de la gramática andina del arte verbal de las canciones a los

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 9/10

lOO

DENISE Y. ARNOLD

animales consiste en enseñarnos los elementos del lenguaje de color. Es cierto

que los versos de las canciones aluden a los espíritus de aliento: las piedras

mágicas, llamadas

illas y samiris, derramadas en los cerros, que se cree que

tienen el poder de brillar en las noches de luna llena y en la oscuridad de

la

luna. engendrando a las manadas sólo por su poder de aliento:

sama

na o sami.

Y con cada aliento de estas piedras mágicas, se cree que surgen los diferentes

colores: los

sama

de los animales. Hasta existe un aspecto especial de los

espíritus

samiris

que se creen que tienen el poder

de

generar todos los colores

de los pelos de los animales. Se los llama churir k uyiri, o alternativamente

piluchiri, pilu

siendo un préstamo del castellano pelo''. Otro importante

aspecto del espíritu encajonado en las canciones tiene que ver con el canto de

los nombres

y

colores de ciertas aves acuáticas. En Qaqachaka, se cree qu e

todas las aves son relacionados con espíritu (Amold, Jiménez y Yapita,

1992: 179). Además, las canciones a los animales son

c

anciones del espíritu

-como dice Doña Lucía- por el hecho de que los pelos

de

los animales son

análogos con las plum as de las aves.

Aquí podemos mencionar otro nivel de significado de las üneas de las

canciones. Otro término para el despliegue de las cintas coloradas es

t

ak :

una senda . H

ay

sugerencias que las señales

y

aretes de los animales tienen

asociaciones astronómicas y que, como flores tienen que ver con algunas

formaciones estelares. Así parece que las sendas de Los animales de color

blanco y rojo no son solamente terrenales pero también celestiales. Nos dicen

las mujeres que la cinta blanca pasa a través del cielo, en la blancura del Río

Grande (Jach 'a Jawira) , que nosotros llamarnos la Vía Láctea. Y nos dicen

que la cinta roja es hecha por los lagos negros  (eh iyiir quta), encajonados en

el trasfondo de la Vía Láctea, contra la blancura de las estrellas.

9

Y nos

muestran, entre los lagos negros, a la Llama Negra, la madre de todas

las

llamas, ligada por la cuerda del ombligo con su cría. Hemos observado

la

Llama Negra bajar al horizonte cada año, en el tiempo de los milagros en

septiembre y octubre, un poco antes de las lluvias, cuando ella pare a

las

manadas terrenales después de soltar sus aguas amnióticas con las lluvias.

¿Están invocando las mujeres de Qaqachaka a este contraparte celestial

de sus manadas en sus canciones? Creemos que sí, porque tanto hoy en día,

como hemos grabado en máquina, así como en el siglo XVIT cuando estaba

escrito sobre papel por primera vez el mito de Waruchiri acerca de la constela

ción Yakana,

10

se cree que la Llama Negra da los colores a todos los animales.

Hacia arriba, así abajo. Pero, habría que notar que lo que pasa arriba no es una

9 Ver para un estudio comparativo

de

los .. agos negros

 

en Misminay, una comunidad de quechuJ

hablantes en los alrededores de Cusco: Unon, 1981. Ver también Zuidema y Urton. 1976.

10 En el capítulo 29. de la edición de Taylor, 1987.

[.AS CANCIONES A LOS ANIMALES

POR

LAS MUJERES DE QUEAQCHAKA

101

simple analogía de lo que pasa abajo. En la división de labor por sexo, las

mujeres mismas deben participar, generación tras generación, con el poder de

su canto en la producción

y

reproducción de sus manadas, sólo fomentando así

los elementos necesarios para a

li

mentara los anim

al

es, cultivar su lana y

brindarles su color.

Al desplegar algunas de las funciones gramaticales encajonadas en las

calidades literarias, mnemónicas

y

prácticas de estas g

as cantadas a una

antigua manera de vida, actualmente

en

el proceso de desaparecer, las cancio

ne

s a los animales

e b e ~ í a n

dar los educadores

y

desarrollistas una pausa para

pensar sobre una

re

lactón andina entre la gente, sus animales

y

sus tierras,

mediada por las voces de las mujeres.

Bibliografía

ALBO, Xavier y Félix LAYME,

1992

Literatura Aymara: amología.

La Paz:

CIPCNHISBOUJAYMA.

ARNOLD D. Y.

198

8 Malrilineal

p r a c t i ~ e

in a patrilineal

se

tting: rituals and metaphors

of

kinship

in

an

Andean ayllu. Tes1s de Ph.

D

. Universidad de Londres.

1992

En

el corazón

de

la plaza tejida: el wayñu en Qaqachaka. En: Reunión Anual de

E t n o ~ r a f f a 1 9 9 ~ .

MUSEF,

Tomo

.

La Paz, Bolivia: 17-70. Versión inglés en:

Jbero-

a m e r ¡ ~ a n ~ , lnsutut fúr lberoamerika-Kunde, Hamburg, en colaboración con el Jbero

A m . e r i k a n ~ s c h e s Institut, Berlin, número especial: Literaturas autóctonas en América

Latina, edJtado por Martfn Leinhard, Vervuert Verlag, Frankfurt, 16.

Jahrgang (1992) Nr. 3/4 (47/48): 21-66.

En prensa Hacer los hombres

en

su propia imagen de ella: aspectos del género

en

los textilesde

g ~ ¡ : ~ h a k a Para publicación en la Revista Chungará, Universidad de Tarapacá. Arica,

En e p a r a c i ó ~ W a t ~ r i n g t h ~ A ~ 1 i m a l ~ : songs to their animals byAndean women, bajo trato con

el Sllllthsoman.Senes m Nauve American Literatures, Washington

D.

C .

ARNOLD D. Y., Dolll1Dgo JlMENEZ y Juan de Dios YAPITA

1992 1{ . .

r : c ~ a

un

orde n

andmo de las cosas: tres pistas de los Andes meridionales.

Serie:

Biblioteca andma No. 12. LA Paz: Hisbol e ILCA.

BRIGG

s

Lucy Therina

1986 . '

Con. Dommgo. Llanque Chana: ''El humor en el cuento aymara . En:

Jdemidades

Andmas

y

L6g1cas del Campesinado. Lima: Mosca Aul

1988

'

'T

aJkj . .

n.g Foxes or

othe

Dog that Speaks Latin: two expressions

of

Andean myth  .

1994

~ o n e ? c • ~ _ 7fd.a al 46 Congreso lnternacional de Americanistas, Amsterdam, 1988.

El k

a n ~ .an

en dos textos de lengua aymara: análisis morfosintáctico y del discurso .

En: T ~ a d 1 C 1 o n e s Orales Andinas: discurso y literatura. Editado por Margot Beyersdorff

Y Sabme Dedenbach-Salazar Sáenz (eds.). BAS 24. Estudios Americanistas de Bonn

Holos, 1994. '

A YKA, Elvira,

i c h ~ nli parlt'ii: h o r a les voy a narrar.

Editado por Denise Y. Arnold y Juan de Dios

Yap1ta. La Paz: Urucefy Casa de las Américas.

7/18/2019 DYA_Las canciones a los animales.pdf

http://slidepdf.com/reader/full/dyalas-canciones-a-los-animalespdf 10/10

1 2

DENISE Y. ARNOLD

PELO, Steven,

1982 Sound and Sentiment: birds, weeping, poetics and song

in

Kaluli expression. University

of Pennsylvania Press.

FLORES OCHOA, Jorge,

1981 Clasificación y nominación

de

camélidos sudamericanos ( 1978). En: Heather

Lechtman y Ana María Soldi (eds.) Runakunap kawsayninkupaq rurasqankunaqa. a

tecnologfa en el mundo andino. Tomo

l

Universidad Nacional Autónoma de México:

Instituto de Investigaciones Antropológicas. (Serie Antropológica, 36, Arqueología),

México: 195-2 15.

1988 Mitos y canciones ceremoniales en comunidades

de

puna . En: Jorge Flores Ochoa

(comp.) Uamichos y paqocheros. Pastores de llamas y alpacas, Cuzco: 237-251.

GEMIO, Lucy,

1986 Literatura oral aymara: estudio del cuento Jamp'atuta. Tesis de Licenciatura, Universi-

dad Mayor d San Andrés, La Paz.

HUANCA, Tomás,

1989 El yatiri en la comunidad aymara. Ediciones CADA, La Paz.

LEINHARD, Martín,

1992 Nota del coordinador . En: lberoamericana,lnstitut für lberoamerika-Kunde, Hambu

rg

en colaboración con

el

Ibero-Amerikanisches Institut, Berlin, Vervuert Verlag, Frankfurt,

16. Jahrgang (1992) Nr. 3/4 (47/48): 3-5.

MANNHEIM, Bruce,

1986 Popular song and popular grammar, poetry and metalanguage . En:

Word,

Vol. 37,

Nos. 1-2, abril-agosto, 1986: 45-75.

PAREDES J ., Nancy,

1981 La literatura oral a través del cuento aymara. Análisis del cuento: Ma Condorampi Mli

Tawakompi. Tesis de Licenciatura, Universidad Mayor de San Andrés, la Paz.

Rodríguez, Rosario,

1994 Desde las prácticas textuales aymaras . Ponencia leída

en la

presentación del libro:

Jichha nii parlt li: Ahora les voy a narrar, por El vira Espejo Ayka. La Paz: Unicef y

Casa de las Américas.

TA

YW R, Gerald,

1987

Ritos y Traditiones de Huarochiri.

Instituto de Estudios Peruanos, Lima.

TOMOEDA, H.,

1985 'The Llama is my chacra: metaphor

of

Andean pastoralists . En: Andean Ecology and

Civiliwtion. Eds. S. Masuda, l . Shimada y C. Morris. University

of

Tokyo Press. 1985:

277-300.

URTON, Gary,

1981

t

the Crossroads of he Earth and the Sky: An Andean Cosmology. Latin American

Monographs series no. 55. Austin: University ofT exas Press.

YAPITA, Juan de Dios,

1992 Kunturinti liq'uchinti: análisis lingüístico de un sallqa de Oruro . En: lAtin American

Literatures Journal , Pennsylvania State University, edición dedicada a la literatura

aymara, editada por Lucy Briggs, Vol. 8, No. 1, primavera, 1992: 36-68.

1993 Prácticas textuales andinas: nuevas direcciones en la literatura aymara  .

Ponencia lefda

al Simposio de Literatura Boliviana, Universidad Mayor

de

San Andrés. Julio, 1993.

ZUIDEMA, R. T., y Gary URTON,

1976 La Constelación de la llama en los Andes peruanos . Allpanchis Phuturinqa : 59-119.