Instituto de Psicologa Paranormal

E-BOLETN PSI. Vol.5, No.2, Mayo 2010

Indice:

Desde el escritorio del editor...

Historia NOTAS HISTORICAS SOBRE EL ROL DE LA MEDIUMNIDAD EN LA PARAPSICOLOGIA por Carlos S. Alvarado.

Modelos Tericos CAPULLOS DE LUZ: LA EXPERIENCIA DE VER EL AURA por Alejandro Parra

Ensayos MARCELO ACQUISTAPACE: UN DETECTIVE PSQUICO EN LAS PUERTAS DEL LABORATORIO por Juan Gimeno

Debate PODEMOS TOMAR UNA FOTOGRAFIA AL "GATO NEGRO"?: EN BUSCA DE PSI MEDIANTE NEUROIMAGENES por Alejandro Parra

EXPERIMENTOS DE NEUROIMAGEN CEREBRAL ENCUENTRAN "EVIDENCIAS CONTRA LA EXISTENCIA DE LA

PERCEPCION EXTRASENSORIAL... O NO? Por Kendrick Frazier GANARSE A LA COMUNIDAD CIENTFICA por John Palmer

Breves PARAPSICOLOGIA CLINICA Y SUEOS: CONFERENCIAS EN CIUDADES EUROPEAS por Alejandro Parra

Revista de libros Revisados por Jorge Villanueva

Noticias

Revistas recibidas Ver los ttulos

DESDE EL ESCRITORIO DEL EDITOR

Bienvenidos a una nueva edicin de nuestro e-boletn Psi. En este nmero

contamos con la cooperacin de varios colaboradores que han enviado artculos de gran inters y actualidad. Carlos S. Alvarado escribe sobre el rol del mdium como un inspirador de nuevos diseos de investigacin para comprender la actividad

mental de la mediumnidad, tanto en mdiums de efectos fsicos como mentales. Desde su perspectiva, el medium permiti explorar la naturaleza de la mente "inconsciente" en psicologa, as como tambin formular teoras acerca de los

fenmenos parapsicolgicos, e incluso sobre la supervivencia despus de la muerte.

Alejandro Parra revisa la experiencia de ver el aura como un fenmeno psicolgico, pero tambin su naturaleza presuntamente paranormal, a travs de un circuito histrico y cultural. A lo largo de la historia, ha habido fuertes discusiones acerca

de su naturaleza fsica, y sus implicaciones en campos como medicina y psicologa. En particular, Parra explora los estudios recientes para determinar si la experiencia

de ver el aura es imaginal o alucinatoria y qu variables psicolgicas influyen en su percepcin.

Juan Gimeno adelanta su propia experiencia personal con el psquico uruguayo

Alejandro Parra, Editor rapp@fibertel.com.ar

Mayo 2009

Marcelo Acquistapace, y describe experiencias personales as como estudios piloto

llevados a cabo para determinar el modo en que Acquistapace acta. En su descripcin, Gimeno advierte acerca de la importancia de investigar con sujetos especiales, la necesidad de seguir estos casos cercanamente, y la dificultad

implcita de cooperar recprocamente en futuros estudios, en especial los abordajes "ecolgicos", que permitan disear experimentos confiables y rigurosos en el contexto natural en el que el psquico opera, en lugar de someterlo a condiciones

experimentales antinaturales, o que desentonan con su estilo de tarea y puede inducir a un artificio de sus condiciones y garantas de xito psi.

Finalmente, presentamos en esta edicin la controversia generada por dos autores que sostienen "haber encontrado la mayor evidencia contra la existencia de psi" en un experimento de percepcin extrasensorial empleando neuroimgenes, publicado

en un reciente nmero de una reconocida e influyente revista de neurociencia. Reproducimos al espaol a dos comentaristas, Kendrick Frazier, un escptico de psi editor de la revista The Skeptical Inquirer y a un defensor de psi John Palmer,

editor del Journal of Parapsychology quienes formulan un juicio crtico del estudio, y abren un debate sobre la urgencia de aplicar tecnologas convencionales para explorar funciones mentales de la complejidad del fenmeno psi.

Entre otras secciones, Revisiones de Libros y Noticias y un reporte de la visita de Parra a varias capitales europeas, cerramos esta edicin del e-boletn. Espero que

este material sea de inters. Hasta el prximo nmero.

Alejandro Parra

Editor

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Historia

NOTAS HISTORICAS SOBRE EL ROL DE LA MEDIUMNIDAD EN PARAPSICOLOGIA

Por Carlos S. Alvarado* Desde el punto de vista histrico, el mdium fue una figura importante para el desarrollo de la investigacin psquica por

varias razones, lo cual incluye la produccin de fenmenos, as como el contexto y la oportunidad para el avance metodolgico y conceptual del fenmeno psi, tema que brevemente profundizar en este artculo.

El Mdium en el Espiritismo

Si bien la aparicin del mdium practicante en los Estados Unidos a mediados del siglo XIX precedi a muchas manifestaciones que pueden ser consideradas como medimnicas (Ogden, 2001; Paton, 1921), me concentrar aqu en la evolucin de la mediumnidad a partir del siglo XIX en adelante. Los orgenes de la mediumnidad como profesin se ubican

con los misteriosos raps (golpes) que tuvieron lugar en la casa de la familia Fox en Hydesville, New York, en 1848 (Capron, 1855, Cap. 2). Las manifestaciones centradas en torno a las hermanas Fox, Margaretta (circa 1833-1893) y Catherine (circa 1837-1892) (las fechas de nacimiento no son seguras), parecen implicar comunicaciones inteligentes por

medio de golpes (para una biografa reciente de las hermanas Fox, ver Weisberg, 2004). Sus conocidas actuaciones y las controversias que generaron condujeron a lo que la mdium e historiadora estadounidense del espiritismo americano Emma Hardinge (ms tarde Britten, 1823-1899) describi en su libro Modern American Spiritualism (Espiritismo

Americano Moderno) como "la formacin de crculos en todas las casas de familia de la ciudad, y el rpido desarrollo de los mdiums en cada familia" (Hardinge, 1870, p. 65).

Los comportamientos del mdium contribuyeron a crear la opinin del pblico acerca del rol de mdium, como las acusaciones de fraude de las hermanas Fox.

Hubo un gran nmero de mdiums profesionales. Cuatro aos despus del comienzo de la carrera de las hermanas Fox, el renombrado juez y espiritista norteamericano John W. Edmonds (1799-1874) escribi: "Por entonces se poda contar a los mdiums por unidades, pero ahora por miles..." (Edmonds & Dexter,

1854, p. 78). Hacia 1853, se estimaba que haba 30.000 mdiums en los Estados Unidos (Howitt, 1863, Vol. 2, p. 196). Despus del siglo XIX, los mdiums incluyen Cora L.V. Hatch (1840-1923), conocida por su mediumnidad que giraba en torno a presentar discursos sobre problemas sociales, cientficos y literarios, o a Daniel Dunglas Home (1833-1886), cuya mediumnidad fsica asombr a muchos.

Carlos S. Alvarado

Csa3m@virginia.edu

Eusapia Palladino (1854-1918) fue una importante catalizadora para la investigacin de los fenmenos mdiumnicos. Varios cientficos y expertos quedaron impresionados con ella.

No slo el espiritismo se desarroll en gran medida por los fenmenos de mediumnidad, sino que estos fenmenos, as como los comportamientos del mdium, contribuyeron a crear la opinin del pblico acerca del rol de mdium. algnas de estos comportamientos fueron negativos, como puede verse en las frecuentes acusaciones de fraude que afectaron al desarrollo de la investigacin psquica. Esto comenz en relacin a los raps de las hermanas Fox (Flint, 1851), una situacin

complicada provocada por una controvertida confesin de fraude de una de las hermanas Fox (Done with the Big Toe ["Se haca con el dedo gordo del pie"], 1888; ver tambin Weisberg, 2004, Cap. 17).

La historia del espiritismo y de la investigacin psquica est repleta de todo tipo de fraudes mediumnicos, la mayora de stos relacionados con fenmenos fsicos. En la Tabla 1 se presentan algnos de los fraudes. Aunque hay que ser cauto de no condenar a todos los mdiums por igual, no hay duda de que muchos de estos fraudes perpetuaron la mala reputacin de los mdiums en la sociedad.

Tabla 1: EJEMPLOS DE FRAUDE EN MEDIUMNIDAD FSICA

Incidente fraudulento Fuente

Materializacin de "Marie" con la mdium Corner (Florence Cook). Se analiz y se comprob que era la mdium.

Sitwell & Von Buch (1880)

Una de las hermanas Bangs estaba disfrazada con una mscara que simulaba ser una materializacin. Se encontraron pelucas, tela de muselina, y maquillaje inspeccionando en los alrededores de la sala de sesin.

Bogus Spiritualists Exposed (1888)

Materializacin de la Sra. Williams. Se comprob que era la mdium. Dariex (1894) Se encontr al mdium Charles Eldred usando una silla especial con un compartimiento secreto lleno de parafernalia para materializaciones falsas.

Exposure of Mr. Eldred (1906)

Se descubri que Charles Bailey (1857-1947) haba comprado dos aves que ms tarde usara como "aportes."

Reichel (1910)

Ladislao Lasslo confes que todas sus materializaciones se producan de manera fraudulenta. Un asistente result ser el cmplice del mdium.

Schrenck-Notzing (1924)

Se fotografi a la mdium Stanislawa Popielska en la oscuridad agarrando un objeto que pareca haber sido desplazado telekinticamente.

Osty (1930)

El Mdium en la Investigacin Psquica La historia del fraude por parte de los mdiums ha afectado negativamente a la investigacin psquica. Pero hay otras formas mediante las cuales los mdiums han

cooperado en las investigaciones. La mediumnidad ha sido fundamental para el desarrollo de la investigacin psquica. Debido a que los mdiums presentaban la posibilidad de observar fenmenos en varias ocasiones, bajo condiciones de cierto control, stos fueron un importante catalizador para el desarrollo de la investigacin psquica. Es decir, en lugar de depender exclusivamente de fenmenos espontneos difciles de observar, como las experiencias de percepcin extrasensorial,

poltergeists, y apariciones de los muertos, en la mediumnidad los investigadores psquicos tena una fuente recurrente de fenmenos observables que les permiti imponer condiciones semi-experimentales bajo las cuales se pudieron hacer observaciones de una manera bastante ms sistemtica.

Aos ms tarde, una buena parte de la investigacin psquica se llev a cabo en gran parte debido a las repetidas actuaciones de un gran nmero de mdiums que parecan ser capaces de producir fenmenos en forma repetida. Para explorar este punto, se puede contar el nmero de artculos sobre mediumnidad publicados en las revistas de investigacin psquica. Una de las revistas ms importantes fue el Proceedings de la Society for Psychical Research de Londres. Tanto la mediumnidad

mental como la fsica eran discutidas en los Proceedings. En el perodo 1882 a 1900, de los 204 artculos publicados en esta revista, el 23% se destin a sesiones espiritistas, sin contar aqu los debates conceptuales y metodolgicos de la mediumnidad, que tambin se publicaron en los Proceedings.

Como puede verse en Tabla 2, varias revistas importantes de investigacin psquica, en perodos posteriores, tambin publicaron numerosos trabajos acerca de fenmenos de mediumnidad.

Tabla 2: ARTCULOS SOBRE MEDIUMNIDAD EN REVISTAS DE INVESTIGACIN PSQUICA 1921-1930*

Revistas Lugar de Publicacin Total de artculos %

Proceedings of the Society for Psychical Research

Inglaterra 67 57

Revue mtapsychique Francia 284 25

Proceedings of the American Society for Psychical Research

Estados Unidos 12 58

* Se eligi el ao 1921 porque fue el primer ao de la publicacin de la Revue Mtapsychique, aunque con un ttulo diferente. Los Proceedings of the American Society for Psychical Research consultados aqu llegan hasta 1927 y luego reinici su publicacin en 1933. No se cuentan aqu obituarios, notas breves de las organizaciones

que publicaban las revistas y noticias varias de la sociedad.

Quiz no hubo ningn otro mdium en el siglo XIX que fuera tan influyente para el estudio cientfico de la

mediumnidad mental en Amrica como la mdium Leonora E. Piper (1857-1950) y la mdium de efectos fsicos italiana Eusapia Palladino (1854-1918). La Sra. Piper fue estudiada por William James (1842-1910) (James, 1890b). En representacin de la SPR, Richard Hodgson (1855-1905) comenz a estudiar la Sra. Piper en 1887, y

termin la publicacin de un estudio aos despus en los Proceedings de la SPR en la que Hodgson acept el carcter verdico de algnas de sus comunicaciones (Hodgson, 1892a).

La disposicion de la Sra. Piper para ser investigada nos provee por primera vez en la historia de la investigacin psquica, con una gran cantidad de estudios a largo plazo, sistemticamente y en forma controlada, de un caso de mediumnidad mental. La Sra. Piper viaj a Inglaterra en 1889 para ser investigada por la SPR. Los informes de

Hodgson mostraron que algnas de sus comunicaciones no se podan explicar de manera normal, o producto de un fraude (Leaf, 1890; Lodge, 1890). Otros estudios a posteriori examinaron cuidadosamente a la Sra. Piper, contribuyendo a la presunta evidencia de elementos verdicos en el trance mediumnico (por ejemplo, Hodgson,

1898; Hyslop, 1901). Palladino, por otra parte, como medium de telequinesia y materializacin, fue una importante catalizadora para la

investigacin de los fenmenos medimnicos. Varios cientficos quedaron impresionados con ella, incluyendo el filsofo alemn Carl du Prel (1839-1899), el psiclogo polaco Julin Ochorowicz (1850-1917), el diplomtico y estudioso ruso Alexandre Aksakof (1832-1903), el fsico britnico Oliver Lodge (1851-1940), as como el

mencionado fisilogo francs Charles Richet y el psiquiatra y criminlogo italiano Cesare Lombroso (1835-1909). Una investigacin anterior realizada en Miln en 1892 marc el principio del inters cientfico en general y produjo

una gran controversia acerca de la mediumnidad (Aksakof et al., 1893; ver tambin La polmica degli Scienziati sullo Spiritismo, 1892). Despus de estas sesiones, Palladino atrajo la atencin de muchos investigadores en toda

Europa, como puede verse en la literatura publicada de la poca (por ejemplo, Courtier, 1908; Morselli, 1908). Ningun mdium antes de Piper y Palladino, ni siquiera las hermanas Fox ni D.D. Home, habian sido investigados

por tantos cientficos y acadmicos bajo condiciones controladas. Aunque Piper y Palladino estimularon el desarrollo de la investigacin psquica con los mdiums, otros mdiums indirectamente tambin estimularon un tipo diferente de investigacin. Las actuaciones de la controvertida medium estadounidense Margery (Mina)

Stinson Crandon (1888-1941; Tietze, 1973); y los estudios con mediums mentales de John F. Thomas (1874-1940; Thomas, 1937) influyeron el desarrollo inicial de los experimentos de percepcin extrasensorial (PES) llevados a cabo por Joseph Banks Rhine (1895-1980).

Las actuaciones de la controvertida medium estadounidense "Mina" Crandon y los estudios con John F. Thomas influyeron en el curso de los experimentos de percepcin extrasensorial llevados a cabo por Joseph Banks Rhine (1895-1980) y su esposa

Louisa.

Rhine junto a su esposa y colega Louisa E. Rhine (1891-1983), haban tenido una sesin de espiritismo con Margery que les convenci que la mdium era fraudulenta (Rhine y Rhine, 1927). Aunque en su trabajo sobre mediumnidad mental con Thomas, los Rhine obtuvieron comunicaciones verdicas, finalmente permanecieron

dudosas, y hubo algo que las sesiones con la mdium no pudieron resolver. La pregunta era la siguiente: Las impresiones verdicas de los mdiums slo pueden ser explicadas mediante la influencia de un espritu, u otra mejor explicacin poda ser que haba algna forma de PES entre el mdium y los asistentes? Cuando J.B. Rhine

public su ya clsico libro Extra-sensory Perception en 1934, ya haba decidido centrar su programa de investigacin en el estudio de las habilidades psquicas de los vivos, lo que implica que estas habilidades necesitaban ser comprendidas en sus propios trminos y en relacin con otros fenmenos antes de que el problema de la influencia de un agente desencarnado pudiera ser investigado cientficamente (Rhine, 1934a, p. 147).

En un artculo publicado ese mismo ao, Rhine (1934b) escribi que "mientras los poderes naturales del sensitivo sean desconocidos e inmensurables, solo pueden haber conjeturas o creencias inciertas sobre la hiptesis de la supervivencia" (p. 92). Finalmente, el matrimonio Rhine volvi a los estudios experimentales de la PES

(y ms tarde a la psicokinesis), que hizo famosa a la Universidad de Duke y cambi el curso de la investigacin psquica (particularmente en los pases anglosajones). Lo que fue en gran medida el estudio de los mdiums en las sesiones, ahora se haba convertido en un laboratorio que estudiaba a participantes voluntarios, tales

como estudiantes universitarios.

El estudio de la mediumnidad luego comenz a disminuir a medida que creci el paradigma experimental promovido por el matrimonio Rhine. Sin embargo, esto no significa que no se hayan realizado estudios con los mdiums a partir de la dcada del 30, por ejemplo, los casos de mediumnidad con Gladys Osborne Leonard

(Irving, 1943), Eileen J. Garrett (Birge y Rhine, 1942), Caroline Chapman (Schmeidler, 1958), y con Hafted Bjrnsson (Haraldsson & Stevenson, 1974). En cuanto a los efectos fsicos, la lista de las investigaciones incluye el trabajo con el mdium Rudi Schneider (Osty & Osty, 1931-1932) u otros (por ejemplo, Hamilton, 1934).

Durante la dcada de 1930, Margery produjo fenmenos psquicos y fsicos que fueron lo suficientemente interesantes como para mantener interes en su mediumnidad en algnos crculos de investigacin psquica (por ejemplo, Thorogood, 1933).

Han habido unas pocas investigaciones sobre mdiums mentales en los ltimos aos (por ejemplo, Beischel & Schwartz, 2007; Roy & Robertson, 2001). Pero no hay duda de que los parapsiclogos contemporneos en

general ignoran la mediumnidad como un tema de investigacin. Hay muy poca investigacin sobre el tema presentado en congresos y publicado en revistas. Sin embargo, la antigua investigacin ha tenido gran influencia en el campo, especialmente en trminos de problemas metodolgicos y conceptuales, como se ver en las

siguientes secciones.

ASPECTOS METODOLGICOS EN EL ESTUDIO DE LA MEDIUMNIDAD

Control de los mdiums

Las crticas y acusaciones de fraude de los mdiums, principalmente de tipo fsico, aument la sensibilidad de muchos a causa de los problemas de fraude, y lo ms importante, de errores de observacin, como se ve en el intento de S.J. Davey de demostrar la debilidad de algnos testimonios en favor de la mediumnidad fsica bajo

determinadas condiciones (Davey, 1887; Hodgson, 1887, 1892b). Davey mostr que los testigos de un simulacro de sesin de espiritismo no eran capaces de recordar los procedimientos de seguridad con precisin. Este tema fue tambin examinado en trabajos posteriores (Besterman, 1932). No estoy diciendo que los resultados de estos

estudios se puedan generalizar a todos los contextos de sesiones espiritistas, pero no hay duda de que estas cuestiones no slo contribuyeron a mejorar los estndares de evidencia de la mediumnidad fsica, sino tambin a

aumentar de manera simultnea el escepticismo acerca de la mediumnidad fsica.

Para Charles Richet (1850-1935) los mdiums "cambian sus pensamientos involuntaria e inconscientemente, en

los movimientos de la mano... Los movimientos demostraban que aparte del pensamiento del medium,

existe simultneamente otro pensamiento casual que sigue sus propios ciclos."

A medida que creci el paradigma experimental

impulsado por el matrimonio Rhine, el estudio de la mediumnidad comenz a disminuir, pero los estudios con los mediums continuaron a partir de la dcada del

30, por ejemplo, con Gladys Osborne Leonard.

Con el tiempo, algnos mdiums, entre ellos Eusapia Palladino, que fuera capturada en varias ocasiones haciendo

fraudes (por ejemplo, Flammarion, 1907, pp. 110, 203), di la oportunidad para desarrollar mejores controles cientficos. Un informe de Oliver Lodge (1894), criticado por Richard Hodgson (1895), se refiri a los posibles indicios de fraude y subray la importancia de una vigilancia continua cuando los investigadores trabajaban con

mdiums como Palladino, conocida por haber hecho trampas. Este hbito en ella condujo a los investigadores al desarrollo de tcnicas para el control de tales acciones en investigaciones subsiguientes (por ejemplo, en Feilding al., 1909).

Palladino tambin ofreci el contexto para desarrollar investigaciones usando instrumentos de grabacin y experimentacin de fenmenos fsicos, una tendencia que haba comenzado con otros mdiums a principios del

siglo XIX (ver Crookes, 1874). Por ejemplo, el fisilogo italiano Filippo Bottazzi (1867-1941; Bottazzi, 1907) obtuvo registros de accin telekintica en sesiones espritas mediante diversos tipos de instrumentos, como lo hicieron los investigadores de las sesiones llevadas a cabo en el Institut Gnral Psychologique en Pars (Courtier,

1908). En este ltimo estudio, se emple una mesa de cuatro patas especialmente diseada de manera que si el mdium levitaba cualquiera de sus patas, un circuito cerrado activaba una aguja, permitiendo registrar cada elevacin.

Aunque el estudio llevado a cabo con la Sra. Piper ciertamente no era perfecto, no obstante plante ciertas normas metodolgicas. Se realizaba bajo condiciones controladas destinadas a prevenir el fraude, lo cual incluia la

intervencin de extraos como participantes (Lodge, 1890). Adems, Lodge deca haber examinado la correspondencia de la Sra. Piper para controlar las fuentes normales de informacin.

Antes de los estudios con la Sra. Piper, la mayora de las sesiones se escriban de memoria y no se registraban textualmente en el momento (para una excepcin ver a Simon, 1923). Los registros recopilados de memoria

estaban abiertos a crticas por omisin o exageracin. Al inicio de la carrera de la Sra. Piper, William James (1886) defendi la importancia de tener un taqugrafo para tomar notas literales que luego podran convertirse en registros permanentes de las sesiones. James us ese mtodo para grabar algnas de sus sesiones con la

mdium. En sus estudios iniciales, Hodgson (1892) tambin utiliz registros taquigrficos, amplindolos con notas hechas despus de las sesiones. Hay tambin ejemplos de notas durante las sesiones (Hyslop, 1901; Lodge, 1890). La grabacin de las sesiones se convirti en un procedimiento estndar en investigaciones posteriores

(Tanner, 1910; J.F. Thomas, 1937) y mejor considerablemente la fiabilidad de los registros.

Anlisis Cuantitativo y Cualitativo de la Mediumnidad El estudio de las declaraciones de los mdiums mentales ha beneficiado metodolgicamente a la investigacin psquica porque ha dado un impulso al desarrollo de

herramientas para analizar el material verbal. Las caractersticas de las lecturas de los mdiums hizo a los investigadores darse cuenta desde el principio lo difcil que era evaluar el azar como una posible explicacin para la veridicabilidad de las declaraciones del mdium. Varios estudios iniciales -desde los trabajos de Hyslop (1919) a los de Prince (1923), Sidgwick (1921), Saltmarsh (1929), Saltmarsh y Soal (1930), Pratt (1936) y J.F. Thomas (1937)- son ejemplos de posibles explicaciones

acerca del papel del azar en las declaraciones de los mdiums. Por ejemplo, el investigador ingls Herbert Francis Saltmarsh (1881-1943) ide un sistema de puntuacin para evaluar la informacin presentada por la mdium mental Warren Elliott (Saltmarsh, 1929). Saltmarsh asign una puntuacin de uno a declaraciones de carcter general, o sea, que pudieran aplicarse a muchas personas, una puntuacin de cinco a declaraciones ms especficas que eran menos importantes para un

gran nmero de personas, y una puntuacin de 20 a declaraciones que eran particularmente especficas. Despus de Hyslop (1919), Saltmarsh intent excluir la posibilidad de coincidencia comparando las puntuaciones de las comunicaciones de los asistentes con las

puntuaciones obtenidas de otras personas "control", es decir, que no haban estado con el mdium y no guardaban relacin con el estudio. Independientemente de la validez de estas tcnicas, debemos considerarlas una parte importante de la historia del anlisis cuantitativo en parapsicologa. Luego,

basados en estos esfuerzos, los investigadores desarrollaron tcnicas estadsticas que permitieran el estudio de la PES en personas que no son mdiums. Pratt y Birge (1948) adoptaron esta perspectiva cuando presentaron una breve revisin de la literatura en su influyente artculo sobre la evaluacin del material verbal libre en

parapsicologa.

A pesar de estos intentos de evaluacin cuantitativa, la mayora de los estudios con los mdiums del pasado es cualitativa. Muchos de estos estudios iniciales no se han repetido ni con el mismo detalle o profundidad ni

agudeza hasta el presente. Un ejemplo es el estudio del psiclogo suizo Thodore Flournoy (1854-1920) de la ya mencionada medium Hlne Smith (Flournoy, 1900). Flournoy analiz la historia de vida de la mdium, experiencias disociativas y alucinatorias en su vida cotidiana, del control de su funcionamiento sensorial y motor,

y de los diferentes automatismos que caracterizaban su mediumnidad, as como una detallada descripcin y anlisis de sus declaraciones mdiumnicas. Los anlisis psicolgicos detallados de la gnesis, manifestacin y desarrollo de los fenmenos de Smith aparecen mencionados en la monografa de Flournoy, que hoy en da es

uno de los ejemplos ms influyentes de la psicologa de la mediumnidad de caso nico. Otros estudios importantes son aquellos que analizaron las representaciones mentales del mdium, y las declaraciones verdicas. algnos eran anlisis de sus producciones literarias (Prince, 1927), pinturas (Deonna, 1932), e impresiones, o sus

imgenes mentales (Balfour, 1935). Muchos estudios de mediumnidad fsica eran muy ricos, no slo en la descripcin de los fenmenos, sino tambin

en el uso de diferentes tipos de instrumentacin. Un ejemplo muy conocido de estos estudios fueron los realizados por William Crookes (1874) con D.D. Home, quien tuvo la habilidad de aplicar una variedad de dispositivos para explorar las propiedades de la "fuerza psquica" que crea que Home proyectaba de su cuerpo

durante estos eventos. Hay una descripcin de todas las pruebas destinadas a determinar cunta fuerza poda producir Home, y si esta fuerza poda operar a travs del agua.

Otro ejemplo de estudios instrumentales era la utilizacin de balanzas para pesar las mesas y al mdium en los

estudios de levitacin de mesas llevados a cabo por William J. Crawford (1881-1920) con Kathleen Goligher y su familia (Crawford, 1916/1918). Se utilizaron una variedad de ingeniosos aparatos para estudiar la telekinesis (por ejemplo, Grunewald, 1920; Osty & Osty, 1933-1932); otros hicieron hincapi en el uso de la fotografa con

diferentes propsitos. algnos investigadores emplearon fotografias para obtener un registro instrumental de varios fenmenos fsicos, como se hizo con la mdium Eva C. (Schrenck-Notzing, 1920). Otros usaron placas fotogrficas como objetivos, como Ochorowicz (1912) en el caso de la fotografa del pensamiento de la mdium

Stanislawa Tomczyk.

Otros estudios consistieron de anlisis de los materiales publicados. En un estudio interesante, la seora E. Sidgwick (1915) examin un gran nmero de observaciones publicadas con la Sra. Piper. Sidgwick describi y analiz a los espritus control y comunicadores especficos, los diferentes estados de conciencia de la medium, el

efecto de los asistentes de las sesiones sobre los fenmenos observados, los comunicadores ficticios, la relacin de los espritus control con la Sra. Piper, y si el mdium recordaba o no los acontecimientos pasando de un estado de conciencia a otro.

Los informes de Hodgson mostraron que algnas de sus

comunicaciones no se podan explicar de manera normal, o ser producto de un fraude.

Thodore Flournoy (1854-1920) examin a la mdium

Hlne Smith, la historia de vida de la medium, sus experiencias disociativas y alucinatorias en su vida

cotidiana, el control de su funcionamiento sensorial y motor, y escribi una detallada descripcin de sus

declaraciones mdiumnicas.

Se llevaron a cabo varios estudios instrumentales con

balanzas con Kathleen Goligher para pesar las mesas y al mdium en los estudios de levitacin de mesas.

Se fotografi a la mdium Stanislawa Popielska en la oscuridad agarrando un objeto que pareca haber sido desplazado telekinticamente.

ASPECTOS CONCEPTUALES DE LA MEDIUMNIDAD

Supervivencia despus de la muerte

Una buena parte de la motivacin en el inters por el estudio de los mdiums entre los investigadores psquicos estaba relacionada con el inters en la supervivencia despus de la muerte. Los primeros estudios de la SPR con

la Sra. Piper, por ejemplo, eran un ejemplo de ello. Otro ejemplo fue el estudio de las famosas correspondencias cruzadas: las comunicaciones de diferentes mdiums que utilizan las frases de la literatura clsica pero slo comprensibles cuando se ponen juntos. En opinin de algnos investigadores, la correspondencias cruzadas

indican la accin de la organizacin de una conciencia desencarnada (para ms informacin ver Saltmarsh, 1938). Las opiniones estaban divididas entre si el agente desencarnado o la PES, eran la mejor explicacin. Respecto a la

seora Piper, Walter Leaf (1852-1927), un estudioso britnico de la literatura clsica y banquero estaba a favor de la telepata; mientras que el filsofo e investigador psquico James H. Hyslop (1854-1920), defenda la teora de la intervencin de espritus desencarnados (Hyslop, 1901; Leaf, 1890). Se pueden encontrar diferencias de

opinin en muchos otros autores, pero estas dos posiciones han quedado virtualmente empatadas ya que todava no se ha resuelto siquiera dentro de la comunidad parapsicolgica hasta el da de hoy.

El subconsciente medimnico

Los fenmenos de la mediumnidad, en particular sus manifestaciones mentales, contribuyeron al desarrollo de ideas acerca de la mente subconsciente. Me centrar aqu solamente en algnas de estas ideas. Charles Richet (1886) afirmaba que los mdiums "cambian sus pensamientos involuntaria e inconscientemente, en los

movimientos de la mano... " (p. 86). Los movimientos, dice Richet, demostraban que "fuera del pensamiento consciente normal y regular del medium, existe simultneamente otro pensamiento casual que sigue sus propios

ciclos..." (p. 87).

Frederic W.H. Myers (1843-1901), un estudioso britnico de la literatura clsica e investigador psquico ingls crea en la existencia de un subconsciente, o mente subliminal, en relacin a la mediumnidad y a otros

fenmenos. Myers crea que "algnos de los efectos que los espiritistas atribuyen a los espritus pueden ser tambin atribuibles a la accin inconsciente de la propia mente del medium escribiente" (Myers, 1884, p. 237). Thalbourne lleg a creer que una comprensin de estos fenmenos requera postular la existencia de un ser

secundario. El ser secundario, escribi Myers (1885), tena el dominio de la informacin teleptica. Ampliando su anlisis psicolgico, Myers sostena que los automatismos sensoriales y motores podan ser portadores de los mensajes del subconsciente a la mente supraliminal (consciente). En su conocido libro Human Personality and Its

Survival of Bodily Death (Personalidad humana y su supervivencia de la muerte corporal) se refiri a la Sra. Piper como un ejemplo en el que los espritus desencarnados utilizan la mente subconsciente del mdium para comunicarse (Myers, 1903, vol. 2, p. 250) aunque reconoci la posibilidad de que un espritu desencarnado tome

posesin directa del mdium. Otros autores que relacionaban el subconsciente con la mediumnidad asumieron que las comunicaciones eran

creaciones psicolgicas de diferente tipo procedentes de la mente subconsciente del mdium. El psiquiatra francs Pierre Janet (1859-1947) declar que, al igual que la histeria y el sonambulismo hipntico, la mediumnidad mostraba la "disgregacin de la percepcin personal y... la formacin de varias personalidades que se desarrollan

en forma sucesiva y simultnea" (Janet, 1889, p. 389). El trabajo de Thodore Flournoy con las comunicaciones medimnicas de Hlne Smith fue particularmente

importante a este respecto (Flournoy, 1900). Desde la perspectiva de Flournoy estos fenmenos eran creaciones subconscientes que no mostraban evidencia algna de influencia espiritual. Respecto al espritu control de la mdium "Leopold", Flournoy seal que era un personaje secundario, que actuaba como un "espritu-gua, dando

buenos consejos con respecto a la manera de actuar hacia el mdium; de un intrprete complaciente dispuesto a eliminar explicaciones de todo lo que es oscuro; del censor de la moral;... de mdicos comprensivos... " (p. 12).

El subconsciente del mdium, crea Flournoy, era muy maleable y Leopoldo no era "sino una forma favorita de cristalizacin temporal..." (Flournoy, 1901, p. 121).

Adems de la creencia de que slo la personificacin poda explicar algnas de las comunicaciones medimnicas, otros investigadores argumentaron que la personificacin poda combinarse con declaraciones verdicas, en particular, actuaciones del mdium (ver por ejemplo, Leaf, 1890; Sudre, 1926).

Conclusiones

No cabe duda que los mdiums han influenciado en el desarrollo de la investigacin psquica de diversas maneras. Si bien la cuestin del fraude ha obstaculizado los intentos por llevar a cabo una investigacin sobre la naturaleza

de la mediumnidad honesta, tambin ha habido una evolucin positiva. Los mdiums han proporcionado un considerable nmero de fenmenos mentales y fsicos, y por lo tanto han aportado mucho para el estudio de los investigadores. Pero los mdiums han sido importantes ms all de su papel de productores de fenmenos. Sus

actuaciones e interacciones con los investigadores han dado el contexto para una variedad de metodologas, como las tcnicas de control y mediciones instrumentales.

Estas contribuciones pueden extenderse a los desarrollos tericos como la idea de la supervivencia despus la muerte, y el papel de la mente subconsciente en la mediumnidad. La literatura acerca de estos temas apoya la idea de que los mdiums han sido agentes importantes en la historia de la investigacin psquica.

Referencias

Aksakof, A., Schiaparelli, G., du Prel, C., Brofferio, A., Gerosa, G., Ermacora, G.B., Finzi, G., Richet, C., & Lombroso, C. (1893). Rapport de la commission runie Milan pour l'tude des phnomnes psychiques. Annales des sciences psychiques, 3, 39-64. Balfour, G.W. Earl of. (1935). A study of the psychological aspects of Mrs. Willett's mediumship, and

Una parte de la motivacin por el estudio de los

mdiums entre los investigadores psquicos estaba relacionada con el inters en la supervivencia despus de la muerte. Los primeros estudios de la SPR con la

Sra. Piper, por ejemplo, eran un ejemplo de ello.

Para Myers, los espritus desencarnados pueden utilizar la mente subconsciente del medium para comunicarse,

aunque tambin reconoci la posibilidad de que un espritu desencarnado tome posesin directa del

medium y se refiri a la Sra. Piper como un ejemplo de ello.

Modelos tericos

CAPULLOS DE LUZ: LA EXPERIENCIA DE VER EL AURA Por Alejandro Parra*

Tradicionalmente, la experiencia de ver el aura ha estado relacionada con la percepcin de cuerpo etreo sutil, y como una forma de evaluar el estado de salud de una persona. De acuerdo con las sabiduras esotricas occidentales, se cree

que cada color del aura tiene un significado que indicara un estado emocional especfico. Otros identifican al aura, con un campo electromagntico que rodea a todos los seres vivos y a otros objetos inanimados. Si bien el fenmeno del aura est presente en campos tales como la religin, el ocultismo, y la parapsicologa, todava es controvertido saber si lo humanos

podemos ver o no estos campos, quiz como colores, o a simple vista.

Iconografas chinas del aura de sabios confucianos, y otras expresiones en Nepal e India.

Su existencia ha sido reconocida universalmente desde la antigedad, siendo designada con los ms diversos nombres. As, por ejemplo, los hindes la llaman prana; los polinesios y hawaianos, mana; los chinos, qi; y los japoneses, ki. Hipcrates la llamaba vis medicatrix naturae, y Galeno, pneuma, y Hermes Trismegisto telesma. El alquimista Robert Fludd se refera a ella como el spiritus, en tanto que los kabbalistas la reconocen como luz astral. Franz Anton Mesmer la llamaba fludo magntico

y el psiquiatra Wilhelm Reich, energa orgnica, o ms recientemente, como bioenerga. Independientemente de como se la llame, las caractersticas que designan todos esos nombres son comunes. En casi todas estas tradiciones, el aura, o una parte de sta, puede ser controlada y manejada para mejorar la salud y curar a las

personas, alcanzar la longevidad y ejercer influencia a distancia.

Se pueden encontrar antecedentes de la experiencia de ver el aura en una variedad de contextos, tanto en el campo de la hipnosis, en donde el sujeto

hipnotizado a veces dice ver un "fludo luminoso en los ojos y rodeando los dedos, la nariz, y las orejas del magnetizador y de las personas que lo rodean" hasta los relatos anecdticos de varios efectos luminosos en torno a msticos y

santos, o la descripcin del aura en individuos dotados o psquicos. Otros autores han relacionado el aura con la cognicin paranormal (clarividencia) y los estados emocionales como "emanaciones".

Otras observaciones anecdticas sugieren que la "lectura del aura" puede ser de importancia para el diagnstico no convencional, quiz como un vehculo

imaginario para la expresin de informacin adquirida por va paranormal o informacin adquirida a travs de los sentidos normales. La experiencia de ver el aura tambin parece estar asociada al desarrollo de la sensibilidad parapsquica

despus de una experiencia cercana a la muerte, as como tambin estar relacionadas con otros eventos paranormales, como percibir apariciones o tener experiencias fuera del cuerpo.

Desde la poca de Mesmer, numerosos investigadores han intentado demostrar la existencia de este fluido etreo o psquico. Entre 1845 y 1868, el qumico

alemn Karl von Reichenbach, quien descubri varias sustancias qumicas, como la parafina en 1830 y la creosota en 1833, public varios estudios que pretendan demostrar la existencia, en toda la materia y en todos los

organismos, de una energa natural al que llam "fuerza dica" (del dios Odn), de la cual provendran la electricidad, el magnetismo y el calor. Como prueba, propuso el testimonio de varios "sensitivos" que, mantenidos en un lugar

totalmente a oscuras durante una hora o ms, vean destellos flamgeros emanados por los polos de un imn, por cristales y en algnos casos por los

dedos de una mano humana. Asimismo, esas luces iban acompaadas de sensaciones de calor y fro.

En 1891, el Coronel Albert de Rochas y el doctor Luys iniciaron una serie de

experimentos en Pars, ampliando los trabajos de Reichenbach y utilizando la hipnosis. En 1912 el mdico ingls Walter Kilner, del St. Thomas Hospital de Londres, public los resultados de diversos experimentos. Observando una serie

de cuerpos a travs de lentes coloreadas descubri, alrededor de la mayora de ellas, un borde o aura radiante de unos quince centmetros de ancho. Este aura visible se presentaba en tres capas perfectamente diferenciadas, variando sus

caractersticas de acuerdo con la edad, el sexo, la aptitud mental y la salud del sujeto. Kilner estim que este procedimiento resultara til para la formulacin de diagnsticos.

Kilner poda ver el aura mediante el uso de una pantalla especial que contiene una solucin de dicyanin, cundo ve a travs de la pantalla, a la luz del da, por

30 segundos. Ahora se pueden comprar las gafas especiales para ver el aura (aura-gafas) y los filtros de color basados en la idea de Kilner de aumentar la

sensibilidad ocular a partes del espectro de luz (www.auragoggles.com). En 1962, el fsico Arthur Ellison midi los

caracteres de transmisin lumnica de las gafas de Kilner, y descubri que las gafas slo cortan casi completamente la luz en medio del espectro visible que normalmente vemos.

En 1921 un investigador francs, Du Bourg de Bozas, present pruebas fotogrficas demostrativas de que las manos de ciertos sujetos psquicos emitan un "tubo de fuerza fludica", capaz de traspasar una lmina de plomo de cinco centmetro de espesor. Otro filsofo francs, Emile Boirac, anestesiaba zonas seleccionadas del cuerpo

humano, simplemente sealndolas con una mano. El sujeto, con los ojos vendados, poda describir sensaciones tctiles en cualquier parte de su anatoma, excepto en la sealada por la mano del investigador.

Para el clrigo ingls Charles W. Leadbeater, una figura destacada de la Sociedad Teosfica y amigo ntimo de su

fundadora, Helena Petrovna Blavatsky (1831-1891), el mundo era un lugar maravillosamente complejo, provisto de muchas ms cosas de las que podan apreciarse a simple vista. Alentado por sus propias experiencias

psquicas, Leadbeater creia en el posible acceso de todo el gnero humano a una realidad coherente, y la amplitud de esta realidad se demostraba por el aura que rodeaba a cualquier persona.

Leadbeater afirmaba que esa aura, emanacin del cuerpo astral e indicativa del grado de perfeccionamiento espiritual del individuo, poda ser percibida por cualquier clarividente. El hombre salvaje o tosco posea un aura dbil y de coloracin plida; pero la del hombre y la mujer evolucionados -los buscadores de la suprema verdad-

mostraba un color ntido y bello. Estas personas disponan de la aptitud necesaria para canalizar las fuerzas supremas. Posean una corona de chispas refulgentes, que surga de la parte superior del cuerpo y les confera gran dignidad. Aquella corona de chispas en ningn momento se separaba de sus personas.

Ver el aura, una forma de canal psi?

algnos individuos que han demostrado sus habilidades psquicas en los contextos experimentales tambin dicen poder ver el aura como parte de su patrn de experiencias psquicas. Tambin hay casos en la literatura en donde

se ha visto colectivamente un "brillo" anmalo alrededor del cuerpo de msticos y gures en India y Nepal. La visin del aura tambin se ha relacionado con la investigacin de presuntas radiaciones humanas en la historia de la investigacin psquica, como el estudio de un "fluido mesmrico" y la "fueza dica", entre otros conceptos de

hiptetica fuerza, como un posible agente causal para los fenmenos extrasensoriales y la psicokinesis.

Sin embargo, la experiencia de ver el aura no parece estar limitada a mdiums, santos o psquicos, sino que parece ser comn en muchas personas de forma espontnea. Un caso interesante de una mujer asociado a una

experiencia premonitoria, es el siguiente, del archivo de experiencias paranormales del Instituto de Psicologa

Alejandro Parra*

rapp@fibertel.com.ar

Caja orgnica creada por W. Reich.

El Coronel Albert de Rochas y el doctor Luys iniciaron

una serie de experimentos en Pars, ampliando los trabajos de Reichenbach y utilizando la hipnosis.

Ensayos

MARCELO ACQUISTAPACE: UN DETECTIVE PSQUICO EN LAS PUERTAS DEL LABORATORIO Por Juan Gimeno*

Un momento cumbre para la parapsicologa latinoamericana se produjo cuando la Revista Argentina de Psicologa Paranormal (RAPP) edit un nmero monogrfico dedicado a discutir la propuesta de Carlos Alvarado (1996) de enfocar mayores esfuerzos hacia la

investigacin, ya fuera con estudios de laboratorio o de casos, en detrimento de las frecuentes tareas histricas, didcticas o conceptuales. En su artculo acentuaba que "lo que define a la ciencia es la investigacin que observa al fenmeno empricamente para aprender algo de ste y para poner a prueba nuestras hiptesis" (p. 224); para ms adelante alentarnos: "Muchos de nosotros podemos

cambiar el aspecto de la parapsicologa si nos convencemos de que podemos llevar a cabo investigaciones. A pesar de limitaciones econmicas y de otra ndole es posible hacer trabajos. No siempre es necesario tener miles de dlares, pesos o reales para poder hacer investigacin. Lo que es necesario es tener ideas, ser crticos y saber cmo implementar la investigacin."

Aunque con matices, hubo un saludable consenso de parte de los doce parapsiclogos llamados a opinar sobre el artculo. Alfonso Martnez Taboas remarc (p. 235): "Esta aseveracin de Alvarado me parece cierta y, a la vez, nefasta. Empleo la palabra nefasta,

porque una disciplina como la parapsicologa, la cual en esencia necesita demostrar la credibilidad de los fenmenos bajo estudio y auscultar el modus operandi de los mismos, no podr impactar a la comunidad cientfica con un discurso que no est complementado por la investigacin rigurosa de sus parmetros" (Martnez Taboas, 1996). Y Jos Mara Feola, con su habitual lenguaje desacartonado,

propuso un camino directo: "Lo que necesitamos es un sujeto de efectos fsicos, capaz de producir los efectos con regularidad, o un telpata o un clarividente extraordinario, capaz de leerle la mente al Presidente o al Ministro de Defensa y recitarle lo que dijo en una reunin secreta. Entonces, la etapa preliminar es buscar estos sujetos, quienes no tengo dudas existen, aunque en muy baja proporcin"

(Feola, 1996, p. 242).

El objetivo de este artculo es informar de las actividades llevadas a cabo en concordancia con el espritu de los textos subrayados. Mi proyecto consisti en profundizar en las vidas de numerosos psquicos argentinos, que slo eran citados brevemente en los textos especializados. El propsito manifiesto era publicar sus biografas; pero exista un objetivo latente ms importante: llegar hasta los que estuvieran vivos y convencerlos de la importancia de retomar la investigacin; y en caso contrario, encontrar algn hilo conductor que me

acercara a discpulos o amigos con capacidades parecidas a las suyas. Despus de varios aos de trabajo, los resultados fueron paradjicos. Pude al menos preparar informes provisorios sobre la vida de una docena de ellos, plasmados en varios artculos (Gimeno, 2007a; Gimeno, 2007b; Gimeno, 2008), un libro de edicin privada (Gimeno, 2006) y otro aun indito (Gimeno, 2009). Sin embargo no fue posible acercarme a ningn psquico en actividad dispuesto a trabajar; por lo que en lo esencial, este largo recorrido me devolva al

punto de partida, aunque con muchas ancdotas para narrar.

El Taller sobre Psquicos La evaluacin de todo aquel esfuerzo me hizo volver a colocar la mira en el presente. A principios de 2009 ide un "Taller sobre Psquicos Argentinos" (Noticias, 2009), que tendra

una modalidad semi presencial, con encuentros espaciados en Buenos Aires y el resto de la tarea para desarrollar a travs del correo electrnico o el messenger. La idea era, por un lado preparar herramientas para optimizar las posibilidades de experimentacin con psquicos, y por otro idear estrategias originales que permitieran acercarse a ellos. El taller an no termina de organizarse por falta de integrantes. Muchos envan una primera consulta entusiasmados, pero el inters se eclipsa pronto; mi experiencia me indica que existen muchos

interesados en la parapsicologa, pero slo dispuestos a realizar cursos convencionales; al enterarse que la propuesta prioriza actividades ms participativas, como las tareas de campo o la experimentacin, la motivacin desaparece. En cambio pude al menos establecer algnos contactos enriquecedores; y tambin fui sorprendido con el ofrecimiento de colaboracin de varias personas que se consideraban psquicos. Uno de ellos, llamado Marcelo Acquistapace, me permiti iniciar una labor ms extensa y prometedora, todava sin

logros formales ni conclusiones definitivas pero que me anim a presentarlo a la comunidad parapsicolgica, ms aparte de otros informes en revistas de divulgacin general (Parra, 2008); de algna manera como si un modesto msico de pueblo descubriera un instrumento que considera prodigioso, y lo ofreciera a los talentosos para que intentaran arrancarle los mejores sonidos.

El detective psquico

Acquistapace es uruguayo, vive en Montevideo y actualmente tiene 43 aos. Es casado, tiene tres hijos pequeos y ejerce su profesin de publicista en forma independiente; tambin es artista plstico. Desde los 17 aos, despus de participar en un espectculo de hipnotismo teatral como voluntario, comenz a experimentar situaciones de percepcin

extrasensorial. Sus primeros xitos los consigui al anticipar las preguntas que le haran en los exmenes, tal vez la tarea de mayor motivacin para un adolescente. Con el tiempo se especializ en la bsqueda de personas desaparecidas o en la resolucin de crmenes, convocado tanto por la polica como por los propios familiares de los damnificados. Incluso

trabaj de manera semi oficial en la Comisin de Personas Ausentes del Ministerio de Interior del Uruguay, a cargo del Comisario psiclogo Roberto Parrado. Su mtodo de trabajo combina las clsicas videncias obtenidas a partir de objetos o datos personales del buscado, con la informacin recibida luego de despertar compulsivamente en medio de la noche, al estilo de la escritura automtica de los espiritistas, aunque no pertenezca a esa doctrina.

A partir de 1991 comenz a ser popular en su pas, al revelar el paradero del nio Jonathan Viera, de la ciudad de Salinas, que llevaba tres semanas desaparecido. Al ser consultado por la polica, describi con gran cantidad de detalles la ltima actividad conocida del nio, aunque no su destino final. Pero a los pocos das despert percibiendo la imagen de dos

grandes tanques de agua de la empresa estatal OSE junto a una laguna, con la particularidad de que la imagen le llegaba invertida respecto del eje vertical; adems sinti una congoja particular, que le indicaba que el nio estaba muerto. La polica relacion sus dichos con la Laguna del Cisne, un lugar cercano a la desaparicin; y a pesar de haber dragado con anterioridad sin resultados, volvi al lugar y encontr el cadver semienterrado cabeza abajo en una de las mrgenes, como si la visin nocturna hubiese coincidido con la

perspectiva final del fallecido (ver http://acquistapace.blogspot.com/2009/10/mi-primer-caso-oficial-jonathan.html). Una primera diferencia entre Acquistapace y los dems psquicos que he investigado, es que su profesin le permiti organizar un blog en donde pueden encontrarse pginas de

diarios, esquemas, videos, fotografas y todo tipo de material, que sirve de evidencia en cada caso que intervino. En cualquier investigacin que remita a ms de dos dcadas, uno puede festejar la aparicin de un recorte de diario que haya guardado accidentalmente el familiar de un psquico; en cambio hoy el desafo es inverso: la informacin est delante nuestro, abrumadora y contradictoria, y la tarea ser poder separar la relevante de la intrascendente o equvoca.

Figura 1: A la izquierda, dibujo realizado por Marcelo Acquistapace con la figura de un canguro; segn l relacionado con la aparicin de Mara Victoria Williams. A la derecha, foto del

transente que encontr su cadver, con un dibujo casi idntico en su gorro.

Por supuesto que Acquistapace conserva en sus archivos gran cantidad de casos sin resolver, ya sea porque la informacin obtenida es inconducente, o porque obligara a diligencias

y peritajes que la polica no est dispuesta a realizar. El caso paradigmtico para poder observar su manera de actuar es el de Mara Victoria Williams, una joven que desapareci una maana de febrero de 1993 mientras recorra el breve trayecto entre su casa, en la ciudad de Carrasco, y la parada del mnibus que deba llevarla hasta su trabajo. Dos das despus, Acquistapace recorri ese mismo camino y luego subi a su auto para concentrarse: "Comenc dibujando una cara de una persona de unos cincuenta aos, con una frente

prominente, ojos pequeos, medio calva. Inmediatamente me vino la imagen de un canguro, no era un animal en s, sino una silueta como si fuera un smbolo o un dibujo del mismo. Casi en forma simultnea una sensacin de angustia y soledad invadi mi cuerpo (es la imagen y olor de la muerte), y una frondosa acacia y un entorno boscoso con una alfombra de hojas amarillas ilustraban esttica esa extraa sensacin. Intent posicionarme desde la altura para descifrar la ubicacin de esa imagen y percib una zona, cercana al Arroyo

Carrasco, pero del lado de Canelones bastante cercana a la costa del Ro de la Plata. Luego de ubicar junto con la polica la zona, que ya haba sido rastrillada sin novedad, se acost en un lugar y dijo sobre la desaparecida:- "La veo tirada as de esta manera y bajo

Juan Gimeno

jgimeno54@yahoo.com.ar

esta acacia" (ver http://acquiestapac.blogspot.com). Dos das despus Mara apareci asesinada en ese lugar, encontrada accidentalmente por un transente, con la particularidad de

que apareci su foto en los diarios mientras haca declaraciones, con una gorra de visera con la publicidad de Kangaroos, una empresa de calzado britnica que incluye en su logo la silueta de un canguro, idntica a la realizada por Acquistapace (ver figura 1). Por ltimo, la polica se sorprendi al descubrir en el cesto de residuos de la vctima el dibujo de una cara muy similar a la trazada por Acquistapace, aunque no se pudo relacionar con ninguna circunstancia ligada al crimen.

La manera de operar de Acquistapace coincide con el de muchos otros psquicos considerados autnticos, que anan aciertos extraordinarios que no siempre son relevantes para la resolucin del caso, con errores considerados decepcionantes por quien no est habituado a la forma de manifestacin de la percepcin extrasensorial. Si bien no pretendo realizar

una tarea comparativa, surge inevitable el recuerdo de Grard Croiset, por ejemplo en el caso de un nio desaparecido en febrero de 1951: "Veo claramente al nio -dijo al ser consultado por la polica-. Veo un cuartel y un campo de tiro. Hay hierba alrededor. En la hierba hay una pequea colina. Veo tambin agua en ese lugar. El nio cay al agua y se ahog. All se encuentra actualmente. Su cuerpo ser hallado por un hombre en un barco pequeo. Ese hombre lleva una gorra con una cinta de color. Yendo de Enschede a Utrecht,

est a la izquierda de la carretera" (Pollack, 1980, pp. 93-94). Diez das despus el cuerpo fue encontrado donde deca, por un encargado de la limpieza del canal de agua, que llevaba una gorra con una cinta de color.

El caso Luna y la visin remota

Consultando a Acquistapace sobre casos que no hubiesen sido cubiertos por los medios de comunicacin, tuve acceso a uno elegante de visin remota. El 13 de agosto de 2008 Acquistapace estaba chateando con su amigo Leo, que vive en la ciudad de Rivera, 500 Km. al norte de Montevideo, a donde haba realizado una corta visita dos aos antes. En la conversacin textual a travs del programa messenger que me envi puede leerse que, luego de algnos saludos y bromas informales, Leo le cuenta que la noche anterior le haban

robado su perra Luna, lo que constitua un pequeo drama familiar. A los pocos segundos, sin que se lo pidiera expresamente, Acquistapace comenz a describir el lugar donde visualizaba al animal: "Est en una parte ms alta que tu casa, como al final de la calle, tierra colorada, si mirs al sur desde la puerta de tu casa como a la derecha, como si terminara la calle ah pero ms abajo sigue. La perra la tiene atada, cerca hay una antena de comunicaciones. Est cerca de tu casa, a unos seiscientos metros" (Comunicacin

personal via Messenger, Agosto 13, 2008).

Figura 2: Mapa areo obtenido mediante Google Earth, donde pueden confirmarse los datos aportados para llegar hasta el lugar donde se encontraba Luna.

Marcelo me cedi gentilmente el correo electrnico de su amigo, quien confirm la comunicacin. Agreg que con esos datos, al da siguiente pudo volver con Luna a su casa, para alegra de todos. Me confirm que la perra la encontr atada, y que todos los datos topogrficos entregados por su amigo eran ciertos. La distancia entre su casa y el lugar donde estaba Luna pudo medirla mediante el programa Google Earth, y era de 555 m. Me confirm que la casa estaba en un sitio elevado, y en la misma manzana donde acababan de

levantar una torre de telefona celular; el resto de los detalles pueden compararse con el mapa areo adjunto (ver figura 2).

Acquistapace tambin pudo visualizar otros datos complementarios sobre el lugar ("hay un almacn cerca [...] de noche se escuchan tambores [...] en el frente hay elementos como que fueran una baera antigua y barriles o cosas color azul") y sobre la identidad del ladrn ("de unos treinta aos, morochn, poco pelo, trabaja en una panadera, pasa muy temprano frente a tu casa, pasa en una bicicleta verde con un bolso colgado atravesado, [...] nombre corto de origen portugus, [...] tiene un nene chiquito y su mujer trabaja de

ayudante en una panadera o similar"). A pesar de mi insistencia Leo no me pudo certificar esos datos ni mostr voluntad de colaborar para conseguirlos. Slo me dijo: "Me limit a tomar la informacin que para m era de ms relevancia, si bien la persona que trataba de ocultar mi perra poda encajar con la descripcin en cuanto a los rasgos fsicos". Era evidente que el principal objetivo era el de encontrar la perra sana y salva, y ya estaba cumplido. Fue intil explicarle que con muy poco esfuerzo podra certificar una serie de datos

de gran valor. Su respuesta final fue invitarme a visitar su ciudad cuando quisiera. As que deb suspender la investigacin, con la desventaja de que los indicios se iran diluyendo con el correr del tiempo.

El caso Luna me inst a proponerle un ensayo controlado de visin remota. Mis dudas basadas

en la resistencia clsica de los psquicos a participar de este tipo de experiencias desaparecieron de inmediato, ya que mi invitacin fue aceptada con entusiasmo. Pronto acordamos realizar una prueba piloto. A los pocos das, estuve durante media hora en un lugar de la ciudad, sacando

fotos y grabando en audio todo lo que ocurra, mientras Marcelo en su casa anotaba sus videncias y se filmaba. Por la noche estaba recibiendo un correo con el resultado, y debo confesar que a pesar de la precariedad del ensayo, qued sorprendido.

La idea general del lugar pareca ser correcta. Mi ubicacin haba sido sobre un viejo puente que cruzaba un ro, de manera que delante vea el agua y la vegetacin de la orilla, mientras que

detrs quedaban todas las construcciones y el ruido de la ciudad. El texto de Marcelo deca al respecto: "Est entre el verde pasto y material gris. Se aproxima a un espejo de agua. Un espacio bien grande con avenidas donde conjugan reas verdes y movimiento vehicular". Pero

lo ms interesante fueron los detalles. Habamos decidido trabajar con la mayor cantidad de percepciones posibles, as que antes de llegar compr unos caramelos de menta para degustar durante la experiencia. Al llegar me acod sobre la baranda de cemento spera y estuve buena

parte del tiempo tocndola con la yema de mis dedos. Me qued all todo el tiempo, ya que no poda cruzar al otro lado porque el puente estaba en reparacin y se interpona una gigantesca chapa a modo de pared. Me qued observando y fotografiando las aves y algnos objetos que

arrojaban los operarios, que producan las clsicas ondas concntricas al tocar el agua. A todo esto Marcelo escriba: "Tocs el granito, es fro y rugoso. Hay menta en tu boca. Mira el cielo; ve un ave pasar. Est cerrado y hay una chapa con un nombre y una esfinge".

Mezclada con esta informacin haba otras incorrectas, o que no mencion en mi desgrabacin y

despus relacion tardamente al leer sus declaraciones. Quiero mencionar un ltimo detalle que me parece de una gran riqueza a la hora de analizar el valor didctico de los errores en percepcin extrasensorial. Al ir hacia mi objetivo, levant del suelo una hoja de publicidad, entre

las muchas iguales que haba tiradas, que me pareci interesante y rara. Se trataba del dibujo de una mano amarilla muy estilizada, que guard en el bolsillo para observar y fotografiar al llegar. Poco despus, Marcelo deca: "Agarra una hoja; es un roble. Hay ms hojas amarillas, no

tienen mucho olor o tens mal olfato" (ver figura 3). A pesar de no contar con jueces para la evaluacin, consider el resultado auspicioso, y me

anim a organizar un verdadero experimento de visin remota. Para ello coordin un equipo de trabajo, con encargados de elegir y administrar los objetivos, recibir las declaraciones de sujeto y agente y completar la evaluacin, siempre garantizando la ausencia de filtracin sensorial y la

condicin de doble ciego. Se visitaron ocho lugares de la Ciudad de Buenos Aires, una vez por semana, los das martes entre las 15 y las 15:15hs. Tres jueces debieron confrontar los datos de los lugares visitados contra cada una de las declaraciones de Marcelo, utilizando rangos de 1

(uno) para el ms parecido, hasta 8 (ocho) para el menos parecido. La evaluacin estadstica se hizo de acuerdo a la frmula conocida como Pratt-Birge (Pratt & Birge, 1948). Los resultados an no fueron publicados, pero puedo adelantar que la probabilidad de acierto estuvo dentro de

lo esperable por azar. De todas maneras, hubo un detalle interesante: si bien siete de las declaraciones hechas por Marcelo abundaban en detalles difciles de asociar con el objetivo, en un caso, que fue el objetivo visitado en tercer trmino, los niveles de acierto fueron similares a

los obtenidos conmigo en la prueba preliminar, tanto que los tres jueces puntuaron ese objetivo en el primer lugar, entre los ocho a elegir.

Los ensayos de clarividencia y telepata

El viaje a Uruguay de un amigo comn, el psiclogo Carlos Scardulla, me tent para organizar otra experiencia, con las limitaciones del caso. Visit a Scardulla unos das antes de su viaje y lo

entusiasm para que administrara una prueba de clarividencia. Le entregu cuatro sobres que contenan cada uno una fotografa de un cuadro, tabicada con dos cartulinas negras para evitar la transparencia. Antes de elegir los objetivos haba convencido a Marcelo de intentar la prueba

y lo haba instruido de cmo comportarse. A su regreso, Scardulla me devolvi los sobres utilizados y una filmacin de todo el ensayo, que se haba realizado luego de una cena en la que

participaron otros amigos y familiares. All se puede ver claramente cmo trabaja Marcelo, tomando el sobre, palpndolo suavemente con la yema de sus dedos y luego cerrando los

ojos y frotndolo contra su pecho, antes de comenzar a verbalizar y dibujar lo que le pareca que contena cada sobre (ver http://acquistapace.blogspot.com/2009/12/experiencias-con-reproducciones-de-arte.html).

Figura 4: A la izquierda, cuadro utilizado como objetivo en la experiencia de clarividencia. A la derecha, dibujo realizado por el psquico.

Yo ya haba recibido un informe preliminar por correo electrnico y estaba muy contento con el resultado. Sin embargo, al vernos con Scardulla me recibi preocupado y me dijo:

"Mir Juan, yo creo que hubo aciertos, pero a m me parece que hay algo que no entiendo. No s si vos lo podrs explicar". Marcelo emple no ms de diez minutos para completar el trabajo con los cuatro objetivos. Inmediatamente despus se abrieron los sobres y se realiz una evaluacin informal en la que participaron todos los presentes. Puede verse en la filmacin la incertidumbre general, ya que si bien cada objetivo poda aparearse cmodamente con una de las respuestas, el orden resultaba equivocado. Lo que haba ocurrido era

que la percepcin extrasensorial posiblemente hubiese funcionado, aunque a costa de una travesura desconcertante para los nefitos: las respuestas se haban ido adelantando a los objetivos, de manera que la respuesta 1 coincida con el objetivo 2, la respuesta 2 con el objetivo 3 y as sucesivamente. Tcnicamente se haba producido un efecto de desplazamiento (-1), tal vez similar al que lo haba llevado hasta el lugar donde crea que se encontraba el cadver de Mara Victoria William, el que apareci dos das despus.

Para confirmar estas presunciones que surgan a primera vista, realic una evaluacin cuantitativa. Cinco jueces debieron puntuar la semejanza de cada respuesta, teniendo delante el objetivo mezclado con otros cuatro seuelos. En la primera parte, en la se respet la correspondencia original de respuestas y objetivos, el resultado estuvo de acuerdo a lo

esperado por azar. En cambio, cuando se adelantaron las respuestas respecto de los objetivos, el valor de probabilidad obtenido por otros cinco jueces fue de p = 0,036. Estos ltimos valores se justifican al observar sobre todo la respuesta de Marcelo para el objetivo 3, donde dibuj el esquema de una mujer con los mismos detalles que la que contena el

Figura 3: Uno de los elementos utilizados durante la experiencia de visin remota, mientras el psquico declaraba: "Agarra una hoja; es un roble. Hay ms hojas amarillas, no tienen mucho

olor o tens mal olfato."

sobre (ver figura 4); y la respuesta final, que fue ms asombrosa an: luego de tomar el sobre en sus manos, comenz diciendo: "Cmo se escribe Van Gogh?", para luego dibujar

un esquema muy similar al cuadro Trigal con Cuervos del pintor holands Vincent Van Gogh, que era precisamente el objetivo, y escribir las palabras aclaratorias: "Cuervos-color-maizal-rboles" (ver figura 5).

Figura 5: Trigal con Cuervos, pintura del pintor holands Vincent Van Gogh, junto al dibujo que realiz el psquico, mientras preguntaba: Cmo se escribe Van Gogh?

Del otro lado del ro

El resultado de la experiencia con los cuatro cuadros aceler mi visita a Montevideo. Cuando llegu a casa de Marcelo nos abrazamos como viejos amigos, a pesar de que era la primera vez que estbamos frente a frente. Vive a media hora del centro de la ciudad, en un barrio de clase media tranquilo. Su casa es amplia y luminosa aunque no est terminada todava. La crisis econmica del ao 2001 lo oblig a cerrar una pequea empresa de publicidad y hacerse cargo de los juicios laborales de sus empleados. A esto se suma su

modalidad irrestricta de no cobrar por sus servicios de detective psquico, que le quitan tiempo para otras actividades lucrativas. Al visitar su atelier, en el primer piso, pude ver yuxtapuestos sus cuadros a medio terminar con infinidad de elementos (ropas, algnas ensangrentadas, mechones de cabellos, fotografas) utilizadas para sus bsquedas. Lo ms llamativo era la cantidad de carpetas con recortes de diarios, anotaciones, dibujos y fragmentos de programas de radio y televisin en los que se haban difundido sus casos.

Sin embargo, los casos que ms me llamaron la atencin fueron dos ocurridos en la intimidad, sin cmaras ni periodistas, aunque con testigos. El primero se desarroll durante una

reunin en su casa, con motivo del regreso de sus padres de un viaje de placer por Europa. Durante toda la noche varios hermanos y sobrinos haban intentado abrir un candado de combinacin de cuatro dgitos, que su padre haba encontrado en la Plaza San Marcos de Venecia, y que durante el resto del viaje haba intentado en vano revelar la combinacin. Cuando todos se haban rendido, Marcelo pidi que le dieran una oportunidad: "Tom el candado entre mis manos, cerr los ojos e intent dejar la mente en blanco (...). De pronto

visualizo un hombre cercano a los cincuenta y pocos aos, me da la sensacin que es un francs, pelado, con bigotes, lentes gruesos y una boina cuadriculada; un turista ms, pero esa imagen me vena relacionada a su edad o ao de nacimiento. As que inmediatamente calcul, estando en el 2005, su fecha aproximada de nacimiento sera de 1950 en adelante; as que prob delante de todos, que me miraban con cierto recelo (...) Mil novecientos cincuenta... nada. Mil novecientos cincuenta y uno... nada. Mil novecientos cincuenta y dos...

nada. Mil novecientos cincuenta y tres... clic!!! Haba logrado abrirlo en tres intentos, no estaba nada mal" (ver http://acquistapace.blogspot.com/2009/12/el-candado-de-combinacionsimple-y.html).

El segundo caso no estaba ni siquiera escrito, y era imposible de aceptar a priori. En marzo de 2003 el matrimonio Acquistapace haba decidido pasar un da de playa junto con sus hijos, hermanos y varios sobrinos adolescentes. Al llegar al mar, Marcelo se acost en la arena a dormir, mientras el resto se internaba en el agua revuelta por un oleaje intenso. Al rato lo despiertan unos gritos, y al incorporarse observa a su esposa Adriana llorando porque haba perdido un diente postizo, mientras los dems, con el agua hasta la cintura y sin

posibilidades de ver el fondo, se zambullan tratando de rescatarlo. Pareca una tarea imposible; sin embargo Marcelo se atrevi a intentarlo: "Entr al agua, me calm, cerr los ojos y me dej guiar por mis instintos. De pronto visualizo una pequea luz roja, como latiendo, y sin abrir los ojos me sumerjo hacia la luz e intento agarrarla con la mano. Atrapo un montn de arena y salgo a la superficie. Comienzo lentamente a abrir los dedos descartando lo inservible, hasta que comenc a sonrer: tena el diente en la palma de la mano!".

La segunda tarde que nos vimos era para m la fundamental. Habamos acordado destinarla a las experiencias prcticas, ya que no estaban los nios en la casa. Llev dos carpetas con cuatro sobres en cada una, similares a los administrados por Carlos Scardulla. La idea era repetir aquella experiencia; primero de manera idntica, tratando de que percibiera el

contenido por clarividencia; y despus actuando un emisor, en ese caso mi esposa, observando las lminas desde otra habitacin. Al llegar encontr a Marcelo desmejorado. Me dijo que se senta engripado y que an no haba probado el almuerzo. Le ofrec postergar los ensayos pero no acept. As que comenzamos a trabajar, pero la expectativa de semanas se diluy en pocos minutos. Las dos experiencias resultaron negativas. A tal punto que se neg a completar las evaluaciones al observar que ninguna de las cuatro imgenes

presentadas, el objetivo y sus tres seuelos, tena ningn parecido ostensible con lo que l haba dibujado (despus en Buenos Aires, otros tres jueces confirmaron la ausencia de cualquier resultado anmalo).

La ltima tarde deba acompaarlo hasta el escenario de un crimen. La familia de una mujer asesinada le haba pedido que visitara el lugar de la tragedia para ver si poda encontrar indicios que dinamizaran la causa. Pero cuando estbamos a mitad de camino, recibi una llamada en la que le decan que el juez no haba autorizado su visita, por lo que tuvimos que regresar con una nueva decepcin. Quise cambiar el clima y brome, al recordar el artculo de Carlos Alvarado ya citado, con que se trataba de una conjura de las fuerzas de la

historia en contra de cualquier forma de experimentacin, que slo nos permita recordar sucesos vetustos. Pero la ocurrencia no surti el efecto esperado, ya que para Marcelo aquella era la jornada fundamental: quera que lo viera actuar como detective psquico, en el rol que ms seguro se senta.

Terminamos todos en su casa, donde finalmente conoc a Adriana. Esa noche, cuando los nios se fueron a dormir, los dos matrimonios pudimos conversar a gusto y recordar viejas ancdotas. Durante la maana previa le haba pedido a mi esposa que intentara mencionar delante de Adriana la ancdota del diente perdido en el mar. As lo hizo, y dio lugar a que

la beneficiada directa contara su versin con todo tipo de detalles, que no difiri en absoluto de la escuchada el da anterior. La conversacin iba y vena sin un orden, hasta que en un momento se estableci un tema que me pareci destacable. Aquellos primeros aciertos de Marcelo durante su adolescencia,

que le haban permitido conocer anticipadamente las preguntas de un examen escolar, los repeta cada tanto con otros miembros de su crculo, que lo consultaban reiteradamente. Creo haber escuchado cinco o seis casos de este tipo bastante interesantes, todos con alumnos de la carrera de medicina. El que decido contar aqu no es el ms ampuloso, pero s el de mejores posibilidades de ser documentado. El 24 de julio de 2009 Maringel deba rendir un examen parcial de Anatoma Patolgica, y unos das antes solicit los "servicios" de su

to preferido. Luego de aprobar el examen lo llam para agradecerle, y Marcelo le pidi que le enviara un mail relatando lo sucedido para guardarlo como evidencia, que es el que ahora tengo delante de m. La prueba consista en elegir al azar un microscopio de los que estaban en el aula, observar el preparado y decir de qu se trataba. Maringel detalla en el mail: "Tus palabras fueron "glndulas" y "benigno" cuando te pregunt qu tema poda tocarme. Cuando me sent enfrente al microscopio no lo poda creer, haba un adenoma

folicular de tiroides, esto es un tumor benigno de esta glndula, o sea que se cumpli tal cual lo que me dijiste!! Me dio hasta miedo responder que era eso".

Marcelo Acquistapace, por detrs, una de sus obras

Reflexiones Finales En la actualidad estoy participando de un experimento para replicar otro realizado en 1951 por el mdico argentino Orlando Canavesio, quien logr identificar un trazado particular en

los electroencefalogramas de psquicos en actividad, titulndolo "estado metapsquico" (Canavesio, 1951). En nuestro caso se est registrando la actividad cerebral de Marcelo mientras desarrolla prcticas de psicometra. El experimento se est realizando en una clnica de Buenos Aires, cedida gentilmente por sus dueos, y an se est en la etapa inicial, de modo que no puedo informar ms al respecto. Adems estoy a la espera del "caso perfecto". Con esto me refiero a estar preparado para aprovechar la oportunidad de poder

acompaar a Marcelo en una de sus incursiones como detective psquico, para recolectar las evidencias necesarias en el campo, que sean suficientes como para tener un grado alto de certeza sobre sus habilidades.

Este informe no pretende la exposicin de grandes conclusiones. Slo mostrar un estado general de la situacin, aprovechando para destacar las limitaciones y las posibilidades del trabajo con psquicos. En buena medida confirm las previsiones de Carlos Alvarado, en el sentido de que es posible investigar an sin dinero, cuando el entusiasmo es lo que abunda. Fue posible completar un experimento de visin remota an indito, tambin realizar otros ensayos exploratorios con suerte diversa, y acercarme a los casos de bsqueda de

personas; quedando para ms adelante completar muchos de ellos con visitas a los lugares, entrevistas a los testigos y participantes, y la realizacin de peritajes particulares. Una de las novedades metodolgicas ms auspiciosas, aunque para muchos jvenes parezca una obviedad, es el impulso que recibe cualquier investigacin con el uso de Internet y

de los sistemas de digitalizacin de archivos. El experimento de visin remota se realiz prcticamente en tiempo real, con el envo no slo de textos sino tambin de imgenes, filmaciones y archivos de audio, a pesar de la distancia que separaba a los participantes. Recuerdo las peripecias que me relatara uno de los organizadores de otro experimento a distancia, realizado en el pas hace menos de cuatro dcadas, entre las ciudades de Buenos Aires y Crdoba, separadas por setecientos kilmetros. Se trataba de un experimento de

telepata con cartas Zener como objetivos (Di Liscia, 1974), envindose los resultados de cada jornada por correo terrestre que demoraba varios das en llegar, si es que llegaba... Tambin la Web se convierte en una aliada inestimable a la hora de ubicar y entrevistar testigos, y hasta de reconocer lugares, como qued evidenciado en el caso Luna; aunque creo

que en parapsicologa, donde se trata con denuncias tan aberrantes, es necesario completar cualquier indagacin a distancia con visitas personales que alejen hasta las ms improbables suspicacias. Otra ventaja es la de poder ver en accin a los psquicos, observar sus movimientos y sus pequeos rituales; datos estos que quedarn registrados para siempre, y tal vez en el futuro algn investigador pueda terminar de desentraar sus misterios apelando a esas filmaciones. Cunto daramos por ver, aunque fuera unos pocos

segundos, a Eusapia Paladino o a Daniel Home en accin, como ahora podemos hacerlo durante horas con Marcelo tratando de adivinar el contenido de sobres o trabajando en el experimento de visin remota.

Las consecuencias ms interesantes de este ao cerca de Marcelo fueron confirmar a travs de la experiencia personal, los problemas y posibilidades que se presentan en la investigacin con psquicos, ya conocidas a travs de los textos clsicos. Una de las principales dificultades consiste en lo que podra denominarse "la construccin del caso". El primer relato al que se accede pertenece al mismo protagonista, generalmente complementado por algno de los testigos. La clave radica en abreviar, ya que es imposible reducir a cero, la

distancia existente entre el discurso y lo realmente ocurrido. Esa distancia comienza a ampliarse con la negacin de pequeos detalles, la magnificacin de otros no tan importantes, y por ltimo con el relleno arbitrario de las zonas oscuras. De manera que, muchas veces de una manera inconsciente, un caso que podra explicarse por una combinacin de factores habituales, se transforma en un gran caso slo explicable a travs de psi. Aqu es donde debe hacerse presente la sagacidad del investigador, para ejercitar su pensamiento crtico

hasta las ltimas consecuencias. De todas maneras, hasta donde me fue posible llegar, no pude observar esta distancia excesiva en los casos en los que intervino Marcelo. Slo podra reclamrsele que en su blog incluya tambin otros casos en los que no pudo conseguir resultados, pero todos conocemos la mxima judicial que asegura que nadie est obligado a declarar en su contra; esa tarea debe quedar en manos de la parapsicologa, que ya aprendi a no dejar sin publicar ningn experimento ms all de los resultados obtenidos.

Otra de las inquietudes surgidas, tambin muy poco original, es preguntarse cmo conseguir mejorar la eficiencia de un psquico. Trazando una lnea continua entre un fenmeno espontneo y otro deliberado, el psquico ser aquel que est ms cerca de este ltimo, pero nunca en ese extremo de manera permanente. Siempre se trata de relmpagos en mitad

de la noche, ms o menos extensos, ms o menos demorados, interrumpidos la mayora de las veces por causas desconocidas. El problema se incrementa cuando se decide introducir al psquico en el laboratorio. Creo que la solucin debe buscarse, no tanto "educando" al psquico para que pueda trabajar en un ambiente impoluto, sino que, por el contrario, abriendo las puertas del laboratorio, cargando con mtodos e instrumentos a cuestas y encontrando el modo de trabajar junto a l sin incomodarlo; de algna manera como esos

ornitlogos, que en lugar de enjaular al ave se trepan a los rboles con sus cmaras y esperan camuflados a que aparezca. Me alienta recomendar esta estrategia por los excelentes resultados obtenidos en un experimento con objetivo humano reciente, realizado con mediums espiritistas, en el mismo recinto de su sociedad y durante el transcurso de sus sesiones medimnicas ordinarias (Gimeno, Corbetta, & Savall, 2009).

Por ltimo, pude confirmar a medias las previsiones de Feola, en el sentido de que existen, aunque en muy baja proporcin, y pueden encontrarse, sujetos con capacidades extraordinarias. Quin conozca la historia de la parapsicologa podr esperanzarse con que Acquistapace puede estar en ese camino, siempre y cuando sea posible optimizar sus

recursos y acotar sus limitaciones. Como sucede con aquellos buscadores de diamantes, que expresan su alegra al descubrir una piedra que ningn improvisado festejara, porque slo ellos saben cmo llegar a brillar a poco de eliminar la escoria y pulir su superficie. Ser cuestin de utilizar, o de disear si fuera necesario, las herramientas apropiadas.

Referencias

Alvarado, C. (1996). Hacia una parapsicologa cientfica en Amrica Latina. Revista Argentina de Psicologa Paranormal, 7, 223-233.

Canavesio, O. (1951). Electroencefalografa en los estados metapsquicos. Tesis de doctorado. Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Crdoba. [Biblioteca UCN # 9052]. Di Liscia, J.C. (1974). El efecto de retroalimentacin en experimentos de ESP. Cuadernos de Parapsicologa, 7, 10-15.

Feola, J.M. (1996). La parapsicologa en Amrica Latina. Revista Argentina de Psicologa Paranormal, 7.

Gimeno, J. (2006) Augusto Frin, pionero de Domnico. Edicin del Autor: Buenos Aires. Gimeno, J. (2007a). Enrique Marchesini: Un clarividente diplomado. E-Boletn Psi, 2(2).

Gimeno, J. (2007b). Valentn Armando King, Radiestesista del Estado. E-Boletin Psi, 2(3).

Gimeno, J. (2008). Mischa Cotlar, un hombre desmesurado. Comunicaciones de Parapsicologa, 18, 5-27. Gimeno, J. (2009). Vidas Asombrosas. Indito.

Gimeno, J. Corbetta, J. y Savall, F. (2009). Transferencia anmala de informacin: Evaluacin de un grupo de mediums espritas. E-Boletn Psi, 4(3).

Martnez Taboas, A. (1996). La Parapsicologa en Amrica Latina. Revista Argentina de Psicologa Paranormal, 7. Noticias (2009). Taller sobre Psquicos Argentinos. E-Boletn Psi, 4(1), Enero 2009.

Parra, A. (2010). Las experiencias psquicas del vidente Marcelo Acquistapace. Ms All, 21(251), 90-93.

Pollack, J.H. (1980). La clarividencia probada. Bilbao: Mensajero.

Pratt, J.G. & Birge, W.R. (1948). Appraising verbal test material in parapsychology. Journal of Parapsychology, 12, 236-256. * Investigador en parapsicologa y miembro del Instituto de Psicologa Paranormal. Actualmente es parte del equipo de investigacin "El Espiritismo en la Voz de los Espiritistas" coordinado por el Museo

Roca -Instituto de Investigaciones Histricas y el IPP. Tambin se ocupa del rea de Investigacin Histrica del IPP. Ha escrito numerosos artculos en la Revista Argentina de Psicologa Paranormal y Cuadernos de Parapsicologa. Sus reas de inters son la historia de la parapsicologa, investigacin de la supervivencia, y los efectos fsicos de la mediumnidad. Actualmente est llevando a cabo un estudio biogrfico de psquicos y mdiums argentinos, entre ellos Osvaldo Fidanza, Augusto Frin, Enrique Marchesini, y Benjamn Solari Parravicini. Recientemente public Augusto Frin: Pionero de

Domnico.

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Debate

PODEMOS TOMAR UNA FOTOGRAFIA AL "GATO NEGRO"?: EN BUSCA DE PSI MEDIANTE NEUROIMAGENES

En un reciente numero del Journal of Cognitive Neuroscience (20:1, 2008), una de las revistas cientficas ms influyentes para los lectores en el campo creciente de las neurociencias, dos autores de la prestigiosa Universidad de Harvard, Samuel T. Moulton y

Stephen M. Kosslyn, publicaron un artculo cuyas conclusiones sealaban la ausencia de un efecto como una evidencia de su no existencia. Especficamente, el experimento intentaba observar algn cambio en las imgenes de un cerebro vivo empleando tecnologa de alta complejidad, en este caso, la resonancia magnetica nuclear, con el objeto de obtener una evidencia "fisica" del

fenmeno psi. Los objetivos de los autores no se cumplieron, en otras palabras, no hubo una diferencia significativa entre los cerebros de individuos "emisores" en comparacin con un grupo "control". Sus resultados produjeron no solo un debate interno en la comunidad parapsicolgica, sino tambin gan una repercusin en publicaciones de divulgacin cientfica y en muchos cientficos

nefitos en parapsicologa (yo mismo fui entrevistado en Argentina en un par de ocasiones sobre este asunto) a causa del impacto que produjo, no solo sus resultados negativos, sino especficamente la conclusin de sus autores.

La metfora del "gato negro" surge de una expresin comn entre muchos parapsiclogos experimentalistas quienes comparan la dificultad de medir y detectar a psi con "cazar a un gato negro en una habitacin oscura". Esta irnica aunque real expresin tiene su equivalente en este experimento: los dos autores intentaron fotografiar, en lugar de cazar al gato negro, pero en esta ocasin no dispar el flash! A consecuencia de este experimento, no slo se abri el debate en torno a la eficacia en el uso de neuroimgenes para capturar psi

(un equivalente funcional en psicoanalisis, por ejemplo, sera el intento de obtener la neuroimagen de una "pulsin" o fotografiar el "inconsciente"). Pero parece que el fenmeno psi, en contraste, es una propiedad de la mente mucho ms controvertida y subversiva

que cualesquiera otras hiptesis que se pueden plantear en otras epistemologias acerca del funcionamiento psquico.

Finalmente, en medio de toda la controversia publicada, encontr dos artculos en los extremos del debate que me parecieron equilibrados y que decid reproducir en este nmero del e-boletin. El primero es de Kendrick Frazier, editor de la revista escptica a lo

paranormal The Skeptical Inquirer, que podra haberse servido de estos resultados para poner en evidencia una vez ms la inexistencia de psi. Sin embargo, con sorpresa encontr dos opiniones crticas sobre el experimento sumamente sugestivas. El segundo comentario fue publicado en el Editorial del Journal of Parapsychology escrito por John Palmer (su editor), quien proporciona

detalles acerca del estudio y uno de los autores que merece la pena tener presente; en particular, coincido con Palmer de que es un error considerar que este artculo cierra el debate concluyendo que los resultados demuestran finalmente la no-existencia de psi.

Amigos, el debate est abierto

-El Editor1

1 Agradezo a Jorge Villanueva la traduccin al espaol de ambos artculos.

EXPERIMENTOS EN NEUROIMAGEN CEREBRAL REVELAN "EVIDENCIAS CONTRA LA EXISTENCIA DE LA PERCEPCION

EXTRASENSORIAL..." O NO?

Por Kendrick Frazier*

Pueden las neuroimgenes ayudar a resolver el debate sobre si existe o no la percepcin extrasensorial (PES)? Dos investigadores de la Universidad de Harvard creen que

pueden, y de hecho ahora han publicado los resultados donde dicen que la neuroimagen "es la evidencia ms fuerte obtenida hasta ahora contra la existencia de los fenmenos paranormales".

Los investigadores sealan que a pesar de la creencia generalizada del pblico en fenmenos paranormales, como la telepata o la transmisin del pensamiento, tambin

conocido como psi, no hay pruebas convincentes de que psi exista." En la comunidad acadmica, los psiclogos especialmente tienden a ser ms escpticos a

la PES, en particular al tipo anecdtico que impresiona a la gente que no est consciente de todos los sesgos psicolgicos que permiten tan fcilmente malinterpretar esta experiencia: ilusin de agrupacin, propensidad al error, sesgo de confirmacin, ilusin

de control, y muchos otros. Pero, si los procesos psi existen, son stos una actividad mental? Hay algna manera

de detectar la actividad en el cerebro mediante tcnicas de neuroimgen? Samuel T. Moulton y Stephen M. Kosslyn del Departamento de Psicologa de Harvard creen firmemente que con estas sofisticadas tcnicas, la psicologa est en condiciones de avanzar en el debate psi, que "ha generado ms oscuridad que luz." Ambos investigadores

disearon experimentos mediante resonancia magntica nuclear funcional (RMNf) del cerebro para tratar de registrar la existencia de psi.

Tambin buscaban determinar si el cerebro puede responder de forma selectiva a supuestos estmulos psi. Por "estmulos psi" quisieron decir estmulos presentados no a travs de los sentidos habituales, sino por medio de telepata, clarividencia, y

precognicin. Disearon el experimento para producir resultados positivos como si tales fenmenos existieran. Hicieron presunciones mnimas acerca de psi y piensan que tienen la prueba ms contundente acerca de la hiptesis psi.

Los investigadores utilizaron dieciseis pares de voluntarios (pagados), treinta y dos personas en total. algnos eran parejas, otros compaeros de cuarto o amigos, pero todos de algna manera relacionados emocionalmente. Haba una dada madre-hijo, dos hermanas, y dos pares de gemelos idnticos. Catorce eran hombres, dieciocho mujeres.

Para cada par se design a uno como "emisor" y al otro como "receptor". Los estmulos del test consistieron en 240 pares de fotografas que cubran una gama de contenidos, desde imgenes emo