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Las palabras de la memoria

Raúl Gálvez Macián

Edita IVACInstitut Valencià de l’Audiovisual

i de la Cinematografia “Ricardo Muñoz Suay“Edifici Rialto· Plaça de l’Ajuntament, 17E–46002 València· Tel. (+34) 963 539 300

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© dEl GuiÓ Raúl Gálvez

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i per escrit de l’autor.

las palabrasde la memoria

Raúl Gálvez

GÈNERE Drama

SiNOpSi Las palabras de la memoria és una història d ’amistat i de melancolia pel temps viscut.

Transcorre en la localitat de Port de Sagunt, entre les dècades dels seixanta i els norant, i té com a teló de fons l’auge i el declivi dels Alts Forns del Mediterrani. Els seus

protagonistes són dos amics, el destí dels quals els obliga a separar-se quan són adolescents,

per a trobar-se anys després en difícils circumstàncies. Las palabras de la memoria és també la història d ’una societat, que tira la

vista arrere, per a comprovar si, després de tot, la seua lluita ha merescut la pena.

MERCat OBJECtiu Tots els públics.

CONtaCtE dE l’autOR larraju@hotmail .com

BLOQUE 1

1. NEGRO

Con la pantalla en negro leemos: MANUEL Y JOSÉ

Fundido a:

2. ENTRADA ESCUELAS.EXT/DÍA.

Nos situamos en el año 1955. La historia sucede en Puerto de Sagunto. A simple vista parece un pueblo rodeado de fértil huerta, pero si desviamos la vista hacia la playa descubrimos unas altas chimeneas vomitando un intenso humo negro. Pertenecen a la industria siderometalúrgica de los altos hornos del Mediterráneo.

Una mañana, como cualquier otra, los niños se dirigen al colegio. Las niñas llevan vestiditos con lazo atrás y los niños pantalón corto y calcetines subidos hasta las rodillas. El Colegio es un edificio de gruesos muros. Pintada sobre la fachada hay una bandera nacional y una inscripción donde se lee “Escuelas nacionales”.

JOSÉ (OFF) (VOZ ADULTO) Era una mañana fría de Marzo de 1955 en Puerto de Sagunto. Era primavera y los niños, entre gritos y alborozos corrían hacia la escuela, anunciando que un nuevo día empezaba a ser vivido…

3. CLASE.INT/DÍA.

El aula es pequeña y luminosa. Una cruz sobre la pizarra y una foto del generalísimo la presiden. Los alumnos, aproximadamente, una docena, están sentados, de dos en dos, en pupitres de madera. En la pizarra cuelga un gran mapa físico de España. Don Luis, el profesor, 50 años, moreno con gafas y barba delineada con esmero, repasa la lección.

DON LUIS Ricardo, ¿Ríos de la vertiente del mediterráneo?

RICARDO Son, de la vertiente del mediterráneo: el Ter, el Llobregat, el Francolí, el Ebro, el Mijares,

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el Turia, el Júcar, el Segura, el Almanzora y el Guadalhorce...

DON LUIS

Continúe, Fernando.

FERNANDO El Ter pasa por Gerona y desemboca en el golfo de Rosa. El Llobregat nace en la sierra de Cadí, corre de Norte a Sur y desemboca al sur de Barcelona. El Francolí pasa por Tarragona.

Manuel y José se sientan en la última fila, al lado de una de las ventanas. Manuel es un chico blanco de piel, bajito, de complexión débil y cara de enfermizo. José su compañero de mesa y amigo es moreno, de cejas espesas, corpulento y bastante desarrollado para su edad. Ambos tienen 11 años. Manuel pega un codazo a José y le incita a que mire por la ventana. Es la hora del recreo y las chicas de la clase de enfrente están jugando en el patio. José observa a Pilar, 12 años, la hija de la tendera del pueblo, como juega a la comba con sus amigas. En ese momento Luís hace callar a los alumnos y señala con la regla a José.

DON LUIS Silencio (Autoritario)... José Bergamín...

Éste vuelve a la realidad, ipsofacto y se levanta de su asiento.

DON LUIS ... Siga.

JOSÉ

Me he perdido Don Luís...

DON LUIS ¿Qué cosa hacía que era más importante que seguir la lección?... Conteste.

JOSÉ Miraba por la ventana, Don Luís.

DON LUIS

Muy bonito... Manuel Sánchez, dígale a su amigo por donde nos hemos quedado.

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Manuel se pone de pié.

MANUEL

Yo también estaba mirando por la ventana Don Luís.

Risas contenidas del resto de los alumnos.

DON LUIS

Pueden sentarse, más tarde hablaremos. Ramón continúe.

RAMÓN

El Ebro, 928 kilómetros. Se origina en la Peña Labra, en Fontibre, cerca de Reinosa (Santander), pasa por Miranda, Haro, Logroño, Tudela, Zaragoza y desemboca cerca de Tortosa. No lejos de su desembocadura se divide en dos brazos que encierran la isla de Buda.

DON LUIS

Muy bien, pueden salir al recreo.

Los alumnos cogen el almuerzo y salen de clase.

DON LUIS Ustedes no... Manuel y José, vengan aquí.

Los alumnos dócilmente se presentan ante el maestro y extienden las manos hacia él intuyendo el castigo que recibirán. Don Luís las acaricia suavemente y a continuación les arrea con la regla de madera un golpe seco en cada palma de la mano.

DON LUIS A la escuela se viene a aprender y no a perder el tiempo.

4.CALLE.EXT/DÍA.

José y Manuel paseando por las calles, a la salida del colegio.

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MANUEL

¿Tú crees que a Don Luís le gustan las mujeres?

JOSÉ

Pues claro...

MANUEL Entonces ¿por qué no está casado?

JOSÉ

Yo que sé Manuel, vaya preguntas haces.

MANUEL

Tú has visto como nos mira, siempre pendiente de lo que hacemos. Yo creo que es marica...

JOSÉ

Pero ¡Qué dices!... si es una persona normal.

MANUEL

Te crees que los maricas no lo son, que tienen rabo y cuernos como los rojos... son gente normal como tú y yo.

JOSÉ

Y tú ¿cómo lo sabes? ¿Has visto alguno?

MANUEL

No, me lo ha dicho mi tío. La conversación es interrumpida por el paso de una vieja camioneta destartalada que pasa por delante de ellos... Pegada en la chapa oxidada del lateral del vehículo hay una pintada descolorida donde se lee “Cine”.

MEGÁFONO (OFF) Niños y niñas, hombres y mujeres, el mayor espectáculo del mundo, el cine, ha llegado. En honor a las fiestas patronales se comunica que el sábado día 19 se proyectará en la plaza de la iglesia, la película “El hombre tranquilo” una película en la que trabajan los famosos

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artistas de Hollywood, Llon Guaine y la guapísima Maduren Ojara. La entrada será de una peseta para los mayores y media para los niños. No olvidéis traeros las sillas de casa...

Los dos amigos se unen al resto de niños que corren detrás de la camioneta.

5.CASA PADRE JOSÉ- COCINA.INT/DÍA.

José está en la cocina leyendo un libro de aventuras “La isla del tesoro”. La casa tiene un aspecto lúgubre. Está sentado en una mesa, cerca del fuego. Su madre, Asunción, 35 años, está pelando unas patatas. Sobre el fuego, hay un recipiente con agua que se está calentando.

ASUNCIÓN ¿Qué os han enseñado hoy en el colegio?...

JOSÉ

Los ríos y los afluentes de España.

ASUNCIÓN ¿Cuál es el río más largo?

JOSÉ

Entre los ríos de España, el de mayor curso es el Tajo, que mide 1008 Km. de longitud. Siguen el Duero, el Ebro, el Guadiana el Guadalquivir, el Júcar, el Miño y el Segura; este mide 340 Km.

ASUNCIÓN

(Con orgullo maternal) Pero que chico más listo nos ha salido.

JOSÉ

Madre.

ASUNCIÓN ¿Qué?, hijo.

JOSÉ

¿Conoces a algún marica?

ASUNCIÓN

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Pero José, ¿Qué cosas dices? (Riéndose)

JOSÉ

...¿Cómo se sabe si una persona lo es?

Asunción ve a través de la ventana como su marido se aproxima a casa. Se levanta, tira las pieles a una bolsa y lava bajo el grifo las patatas peladas.

ASUNCIÓN

Anda quita tus trastos de la mesa que viene tu padre y llena la palangana.

José padre (40 años) entra en casa. Es moreno, de complexión fuerte. Llega pringado de carbón. Se sienta en la mesa. José le trae la palangana con el agua. Él se lava.

ASUNCIÓN ¿Qué tal el día?

JOSÉ (PADRE)

Como siempre, en los altos hornos todos son iguales. (Con resignación)

Su padre observa la marca que le ha propinado el profesor a su hijo.

JOSÉ (PADRE) Esto, ¿Quién te lo ha hecho? (Sujetándole la mano)

JOSÉ

Don Luís me ha castigado.

JOSÉ (PADRE) Algo habrás hecho, seguro.

Asunción llama a José.

ASUNCIÓN José, ves corriendo a la tienda de la Manola, antes de que cierre y dile que te dé un bacalao, que es para ponerlo con las patatas a

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cocer. Ah, y tráete también un kilo de arroz. Ah y dile que lo apunte en la cuenta, que mañana se lo pagaré.

Asunción le da un cesto de la compra y José sale de casa.

6. COMERCIO. INT/DÍA.

José entra en la pequeña tienda de comestibles. No hay nadie. Mira a todos lados buscando a alguien que le atienda. No sabe si gritar o marcharse y volver luego. Finalmente emite un tímido grito.

JOSÉ Tía, tía Manola. ¿Hay alguien?

Se oye un ruido de pasos. Tras varios segundos de espera, Pilar, la chica que saltaba a la comba, sale a despacharle. Los dos se muestran tímidos.

PILAR Hola José.

JOSÉ

Hola Pilar.

PILAR Mi madre no está ¿querías alguna cosa?

JOSÉ

Un bacalao y un kilo de arroz, apúntalo en la cuenta, que mañana vendrá mi madre a pagar.

Pilar coge un bacalao y lo coloca en el peso.

PILAR ¿Así te va bien? (Mirando el peso)

JOSÉ

Sí (No muy seguro) PILAR

Toma.

José levanta la cesta de su madre. Pilar deposita el bacalao y el arroz en la cesta. En la operación las manos de Pilar y José se rozan suavemente, ruborizándose ambos.

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JOSÉ Gracias.

José sale del comercio a toda prisa.

7.PLAYA EXT/DÍA.

Manuel y José están en la orilla de la playa, pescando con unas rudimentarias cañas.

JOSÉ ...y salí corriendo de la tienda como un cobarde.

MANUEL

Tienes que hablar con ella y decírselo.

JOSÉ

No puedo, cuando la miro me pongo rojo como un tomate.

MANUEL

No se trata de decirle de buenas a primera, cásate conmigo... Hay que acercarse al enemigo sin que se dé cuenta y cuando esté desprevenido. ¡Zas! te lanzas a por él.

En ese momento Manuel levanta la caña. Ha pescado un lenguado. Manuel lo mete en una cesta.

MANUEL Mira qué grande, por este seguro que me dan 2 pesetas.

Manuel vuelve a tirar la caña.

MANUEL Cuando te cases con Pilar, ¿te quieres quedar a vivir aquí?

JOSÉ

No lo sé, viviré donde pueda escribir mis novelas de aventuras.

MANUEL

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Yo quiero vivir en Madrid. Es la ciudad más bonita del mundo. Está llena de chicas guapas. Mira.

Manuel saca del bolsillo una foto-postal de una joven en bikini. José observa sus senos

JOSÉ ¿De dónde la has sacado?

MANUEL

Del baúl de mi tío. Las guarda, con un montón de cosas que tiene de cuando vivía en Madrid. Se las he cogido sin que se dé cuenta.

JOSÉ

¿Y tu tío que hacía en Madrid?

MANUEL Era músico.

JOSÉ

¿Y tú dices que quieres vivir allí?

MANUEL. Pues claro. Seré abogado, tendré dos secretarias, una rubia y una morena, e iré al cine todos los días, dice mi tío que los cines no cierran ningún día del año.

JOSÉ

¿Y un lunes, la gente va al cine? ¿No se trabaja?

MANUEL

Pues claro que no. En Madrid todos son ricos.

A Manuel se le ilumina la cara.

MANUEL ¡José, José!, ya lo tengo, ya lo tengo (Ansioso)

JOSÉ

¿Qué?

MANUEL

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¿Por qué no invitas a Pilar a ir al cine, el sábado?

JOSÉ

¿Yo?

MANUEL Pues claro, hay que ser valientes como dice mi padre Si eres cobarde acabas perdiendo, como les pasó a los rojos.

Unos segundos de silencio. José medita los consejos de Manuel. Lanza piedras al mar, que rebotan sobre el agua.

JOSÉ.

Si consigues que de tres botes sobre el agua se cumplen los deseos.

MANUEL

Eso son tonterías, juego de niños.

Varios segundos de silencio. Manuel deja la caña de pescar, saca del bolsillo un paquete de tabaco y enciende un pitillo.

JOSÉ

¿Qué haces?

MANUEL ¿Quieres?

José niega con la cabeza.

JOSÉ

¿Quién te ha enseñado a fumar?

MANUEL Mi tío...

JOSÉ

Estoy de tu tío hasta las narices, seguro que no existe y te lo inventas tú.

MANUEL

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Ya te lo he dicho mil veces, vive en mi casa, pero nunca sale. Mis padres no quieren que hable de él a nadie. Si quieres un día, cuando no estén te lo presento. ¿Trato?

JOSÉ

Trato.

Los dos amigos se dan la mano.

MANUEL

Fuma. (Exhortando)

José dice que no con la cabeza

MANUEL

Tienes que aprender, si no Pilar nunca te verá como un hombre. Ten. (Le ofrece el cigarro)

JOSÉ

Está bien.

Manuel le pasa el pitillo. José decidido le da una calada y sufre un ataque de tos.

8.FACHADA COMERCIO.EXT/DÍA.

Manuel y José están escondidos detrás de una casa, en la que desde su esquina se tiene una visión de la fachada de la tienda de comestibles. Manuel observa a los clientes que entran y salen de la tienda, José da pasos cortos de un lado a otro con nerviosismo. Manuel le hace un gesto, reclamando su atención. José sale decidido al encuentro de Pilar, disimulando ser un encuentro fortuito.

JOSÉ

Pilar... Hola.

PILAR Hola José. ¿Adónde vas?

JOSÉ

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Yo, ah... bueno... sí, es que, verás... te quería preguntar... si el sábado... si quieres eh... es que yo... en el cine ponen... toma lo he escrito para ti.

José saca de su bolsillo un papel, lo desdobla y se lo da a leer a Pilar.

JOSÉ

¿Qué dices?

PILAR De acuerdo.

Pilar le da un beso en la mejilla y se va corriendo. José se queda perplejo. Luego busca con la mirada a Manuel que sales de su escondite y los dos se hacen un guiño de complicidad. Manuel levanta el puño en señal de victoria.

9. CASA PADRE JOSÉ- COMEDOR. INT/DÍA.

Manuel entra en casa de José. Asunción está despellejando una gallina. José está haciendo los deberes.

ASUNCIÓN

¿Quién anda ahí?

MANUEL Soy Manuel, el amigo de José.

ASUNCIÓN

Pasa Manuel, menudo susto me has dado.

MANUEL

¿Está José?

ASUNCIÓN Sí, ahí lo tienes.

JOSÉ

Hola Manuel

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MANUEL Hola José. ¿Puedes salir un rato?

José pregunta con la mirada a su madre.

ASUNCIÓN

Bueno, un rato, pero ven antes de que tu padre vuelva. Ya sabes que no le gusta que le hagan esperar a la hora de la cena.

José cierra el libro. Los dos amigos salen de casa.

10. CALLE SAGUNTO. EXT/DÍA

Manuel y José cruzan el pueblo.

JOSÉ

¿A qué viene tanta prisa?

MANUEL Mis padres se han ido de casa. Han ido a ver el colegio donde voy a estudiar el año que viene. He hablado con mi tío. Quiere conocerte.

Se detiene frente a la taberna-estanco de Benito.

MANUEL Espera, antes vamos a comprar tabaco y esta vez lo pides tú.

Manuel entra decidido, José le sigue sus pasos resignado

11.TABERNA-ESTANCO BENITO.INT/DÍA.

La taberna tiene un aspecto añejo, la madera oscura y envejecida de mesas, sillas, barra y contraventanas han sido testigos de las borracheras de varias generaciones. Dos barriles de vino franquean la entrada. Sobre la barra, pintada en la pared, el logotipo de tabacalera española. Al lado de una de las ventanas, sobre una balda, hay una radio, siempre en marcha, en el dial de Radio Nacional de

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España. En estos momentos se escucha un serial radiofónico. Son las 6 de la tarde, todavía no hay clientela. Benito, 30 años, regordete, extrovertido, sin enemigo reconocido en el pueblo, sigue con atención la trama del culebrón, cuando Manuel y José entran en la taberna. Benito les hace callar llevándose el dedo índice a la boca y señalando con la otra mano la radio. El serial está a punto de acabar. Segundos después todo vuelve a la normalidad.

MANUEL

Hola Benito.

BENITO Hola chavales ¿Qué queréis?

JOSÉ

Dos regalices y un paquete de ideales para mi padre.

BENITO

Dos pesetas.

12.CASA MANUEL. VESTÍBULO/ESCALERAS/BUHARDILLA. INT/DÍA.

La casa de Manuel es suntuosa, propia de una familia adinerada. Manuel lo guía, hasta la buhardilla. Manuel abre la puerta. Allí está el tío Paco (50 años). José se queda anonadado al descubrir su secreto. El tío Paco está sentado en una silla de ruedas, tiene amputadas las dos piernas. La buhardilla es claustrofóbica; una cama, un armario carcomido y un ventanuco por donde entra algo de luz.

MANUEL Hola tío, este es mi amigo José.

Tío Paco se maneja bien con la silla. Se acerca a José y se dan la mano.

TÍO PACO

Hola, José... mi sobrino me ha hablado mucho de ti... dice que quieres ser escritor.

MANUEL

(Apostillando) de novelas de aventuras.

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JOSÉ

Me gustaría.

TÍO PACO ¿Conoces al maestro?

JOSÉ

¿A quién?

El Tío Paco da media vuelta con la silla. Se dirige al armario, abre al cajón y saca un libro. Manuel mientras tanto ha encendido un pitillo. El Tío Paco le da el libro. José lee la portada. “Campos de Castilla” de Antonio Machado.

TÍO PACO

A Antonio Machado.

JOSÉ No.

TÍO PACO

Pero... ¿Qué os enseñan hoy en día en la escuela?... quédatelo.

JOSÉ

Gracias. (Avergonzado)

TÍO PACO Bueno contadme, ¿Cómo se presentan las fiestas del pueblo?

MANUEL

Esta noche hay cine, y mañana baile en la plaza.

TÍO PACO

Pues divertidos, vosotros que podéis, que esta vida son cuatro días. Pero bueno no quiero meteros ningún sermón... ¿Pongo algo de música?

MANUEL

Vale.

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El Tío Paco pone el disco Louis Armstrong From the orginal Okek´s en un gramófono. Suena Jazz de los años 20.

TÍO PACO

Louis Armstrong, escuchad, No es fantástico, la música nos transporta a donde queramos. Cerrad los ojos. Estamos en un club en Nueva Orleáns.

José cierra los ojos y los abre a los pocos segundos, extrañado mira a su alrededor, A pesar de lo que ha dicho tío Paco, él sigue en casa de Manuel. El Tío Paco sirve tres copas de Pacharán. Manuel pasa el cigarro a José y éste le da una calada.

TÍO PACO

Brindemos... Por el jazz... la música de los pobres, la música de los perdedores.

Chocan sus copas.

MANUEL

Estamos planeando vivir en Madrid, cuando seamos mayores. José no se cree nada de los que le cuento de Madrid.

JOSÉ

Yo no he dicho eso (Cortante)

MANUEL Tío, cuéntale cuando eras músico en Madrid.

TÍO PACO

No quiero aburriros. José que está pegando un trago al Pacharán, realiza un gesto afirmativo con la cabeza.

MANUEL Cuéntalo, verdad José.

JOSÉ

Sí, sí, por favor.

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Manuel comienza a relatar sus vivencias en Madrid. A medida que se sumerge en los recuerdos un halo de felicidad invade su rostro.

TÍO PACO

Como supongo que ya te habrá dicho Manuel, yo era trompetista en el metropolitano, una sala de fiestas muy cerca de la Gran Vía. Fueron unos años felices. En Madrid la gente reía y bailaba a todas horas. En los cafés se organizaban tertulias, se hablaba de todo, de literatura, de cine, de música, pintura. A través de amigos conocí a los grandes poetas de la república: a Federico García Lorca, a Dalí, al maestro Antonio Machado...

MANUEL

Cuéntale lo del otro poeta.

TÍO PACO Con quien más amistad tuve fue con Luís Cernuda, se pasaba las noches escuchando jazz.

El Tío Paco traga saliva.

TÍO PACO

Él me hizo descubrir que se puede querer con la misma fuerza a un hombre que a una mujer. Fue todo muy bonito, hasta que llegó la guerra.

El Tío Paco mira con resignación su cuerpo incompleto. José está boquiabierto. En ese instante el clima de confianza es roto bruscamente por la presencia de Felipe, el padre de Manuel (40 años), corpulento, con cara de mala leche. Que entra inesperadamente en la buhardilla. Monta en cólera.

FELIPE

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¡Me cago en Dios!, ¡Qué coño hacéis aquí!... ¿y qué hace este? (Mirando a José). ¡Fuera!

José no sabe que hacer.

FELIPE

(A TÍO PACO) Te tengo dicho, que no quiero que nadie te vea. Te lo advierto, a la próxima, te echo de casa, a ver como coño se las arreglas un rojo inútil como tú. Y quita esa puta música que me da dolor de cabeza.

Asustada por los gritos, Nieves, (36 años) con cara de sufridora, la madre de Manuel entra en la habitación.

FELIPE

Me cago en la sota de bastos, bien sabe Dios, que si no fuera tu hermana, (la señala con el dedo) a menudas horas ibas a estar a la sopa boba.

Felipe sale indignado no sin antes dirigirse a su hijo.

FELIPE

Y no te creas que te has escapado, luego arreglaré cuantas contigo.

13. TABERNA-ESTANCO BENITO.INT/NOCHE

José, padre entra al estanco.

JOSÉ, PADRE

Vaya tinglado tienen montado ahí fuera.

BENITO

Esta noche hay cine. Echan “El hombre tranquilo” de Jon Ford, gran director que ha hecho las grandes

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películas del Oeste como La Diligencia, Fort Apache, Pasión de los Fuertes, El hombre que mató a Liberty Valance...

JOSÉ, PADRE

Como se nota que te aburres... Anda, dame un paquete de Ideales.

BENITO

Qué pasa que vas repartiendo tabaco a los amigos. Es el segundo de la tarde.

JOSÉ, PADRE

Lo que yo digo, cada día estás peor.

BENITO

Pero si ha venido tu hijo, con el hijo del alcalde esta tarde.

José pone cara de póquer. Sabe a ciencia cierta que no ha mandado a su hijo a por tabaco, pero disimula. Le paga el tabaco.

JOSÉ, PADRE

Ah... bueno... sí, sí, se me olvidaba, oye Benito... algún vicio hay que tener. ¿No?

José coge las vueltas y sale del estanco.

BENITO

Adiós José, y a cuidarse la memoria.

14.CASA PADRE JOSÉ-COCINA. INT/NOCHE

Asunción, José padre, y José están cenando un par de huevos fritos con chorizo

JOSÉ, PADRE

Bueno, cómo ha ido el día, ¿qué has hecho hoy?

JOSÉ

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Lo de siempre. La escuela y luego he ayudado a madre a dar de comer a los animales.

JOSÉ, PADRE

No me gusta que vayas con el hijo del alcalde. A esa gente es mejor no arrimarse ni para bien ni para mal.

José asiente con la cabeza.

JOSÉ, PADRE

Enséñame las manos.

José se levanta. Su padre olfatea la yema de los dedos. Inmediatamente le suelta un bofetón.

JOSÉ, PADRE

Huelen a tabaco, (A Asunción) tu hijo se cree que soy tonto, ahora se dedica a fumar a escondidas ¿qué te creías que no me iba a enterar?

JOSÉ

No padre.

JOSÉ, PADRE Ya puedes subirte a tu habitación. Las fiestas del pueblo se han acabado este año para ti.

José toma el camino de las escaleras que comunican con la planta superior. Da media vuelta y habla en un tono de servidumbre.

JOSÉ

Por favor, padre... empiezo mañana el castigo... déjame ir al cine esta noche.

JOSÉ, PADRE

Pero tendrás poca vergüenza, arrea, sube.

JOSÉ

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Por favor, padre, te lo suplico.

ASUNCIÓN Bueno. Al cine sí, pero luego enseguida a casa, nada de quedarte por ahí.

JOSÉ, PADRE

¡Ni cine, ni hostias! Súbete ahora mismo, si no quieres que me caliente más.

José sube las escaleras.

15.CASA PADRE JOSÉ-HABITACIÓN JOSÉ.INT/NOCHE.

José está en su habitación, cumpliendo el castigo, la noche más importante de su vida. Lleva el pijama puesto. Escribe compulsivamente en su diario. Unos golpes insistentes en la ventana le sacan de la escritura y lo devuelven a la realidad. Se asoma a la ventana. Abajo está Manuel.

MANUEL

Qué haces así, la película está a punto de empezar.

JOSÉ

No puedo salir, estoy castigado. Mi padre se ha enterado que fumamos.

MANUEL

¿Y te vas a quedar ahí? No seas tonto. Salta. Seguro que no se dan cuenta.

JOSÉ

No puedo, si se entera mi padre, me mata.

MANUEL

Pilar no para de preguntar dónde estás. Si no vas no te tomará en serio. Creerá que no eres un hombre de palabra y nunca más te hará caso.

José se lo piensa unos instantes.

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JOSÉ

Bueno, vale, espera que me cambie.

José se cambia de ropa y salta por la ventana. Bajando tiene un mal apoyo y está a punto de desplomarse. Finalmente llega al suelo. Los dos amigos huyen corriendo.

16. CASA PADRE JOSÉ-DORMITORIO PADRES. INT/NOCHE

Asunción está en la cama, José se está desvistiendo.

ASUNCIÓN

¿No crees que has sido muy duro con José?

JOSÉ (PADRE)

Tiene que aprender.

ASUNCIÓN Sabes lo que le gusta el cine.

JOSÉ (PADRE)

Un hijo tiene que aprender a respetar a su padre.

ASUNCIÓN

Está en la edad, qué quieres que haga. Todos hemos hecho lo mismo de jóvenes. Vamos José, que son las fiestas del pueblo. Anda sube y levántale el castigo.

JOSÉ (PADRE)

Vale, pero que conste que lo hago por...

ASUNCIÓN

…Por nada, por que lo estás deseando igual que yo.

17. PLAZA DE LA IGLESIA. INT/NOCHE

La plaza se ha transformado en una sala de cine. La fachada trasera del ayuntamiento es utilizada como improvisada pantalla. Proyectan una copia llena de saltos de “El hombre tranquilo”. Medio pueblo la sigue, unos

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sentados en sillas y otros, los más pequeños sentados en el suelo cerca de la pantalla. José está junto a Pilar. En la secuencia en que los dos protagonistas se besan, bajo una intensa lluvia, José y Pilar aproximan tímidamente sus manos, hasta que ambas se entrelazan con suavidad.

18. CASA PADRE JOSÉ-HABITACIÓN JOSÉ. INT/NOCHE.

José trepa hasta llegar a la habitación. Allí le espera su padre con cara de pocos amigos. Sin mediar palabra le cruza la cara.

JOSÉ (PADRE)

Me cago en Satanás, te crees que puedes hacer todo lo que te venga en gana. Me sacrifico por ti, para que tú hagas de tu capa un sayo.

José intenta aguantar el llanto pero dos lágrimas surcan pausadamente su cara. En ese momento se lleva las manos a los oídos, tapándoselos y se llena de rabia contra su padre.

JOSÉ

Te odio, te odio, te odio, te odio, te odio, muérete, muérete.

José (padre) le cruza nuevamente la cara. Del impacto José cae al suelo. Su padre sale de la habitación.

19. ALTOS HORNOS. EXT/DÍA.

Como cada mañana, José (padre) entra en el complejo de los altos hornos. Su figura es pequeña comparada con las altas chimeneas que lo rodean.

20. CLASE – PASILLO.INT/DÍA.

A. CLASE

Clase de geografía con Don Luís. Afuera llueve a cántaros. Los alumnos repasan las provincias Españolas, mientras Don Luís las señala con la regla, sobre un mapa político de España

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DON LUIS

Castilla la Vieja.

ALUMNOS Santander, Burgos, Logroño, Soria, Segovia, Ávila, Valladolid y Palencia.

DON LUIS

Vascongadas.

ALUMNOS Álava, capital Vitoria, Vizcaya, capital Bilbao y Guipúzcoa, capital San Sebastián.

DON LUIS

Aragón.

ALUMNOS Zaragoza, Huesca y Teruel.

De improvisto un cura (60 años) irrumpe en clase. Se hace el silencio. Como un resorte todos los alumnos se levantan como militares formando delante de un superior.

CURA

Buenos días Don Luís.

DON LUIS Buenos días señor Párroco.

CURA

¿José Bergamín?

JOSÉ Presente.

CURA

Recoja sus cosas y acompáñeme.

José cierra la “Enciclopedia Álvarez”, guarda sus bártulos en la mochila y sale de la clase.

B. PASILLO

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José sigue al cura por el pasillo. Al pasar por delante de la clase de las chicas Pilar que está sentada en primera fila levanta la vista y le hace un gesto de interrogación. José responde con cara de no comprender nada, como queriendo decir, no sé por qué me llevan, no he hecho nada.

CURA

Vamos hijo.

21.DESPACHO DEL CURA.INT/DÍA.

Es un pequeño despacho, presidido por una foto del Generalísimo y una cruz. Dentro le espera su madre. Tiene los ojos enrojecidos y viste de luto. Cuando la ve, José acude a su regazo. Intuye que algo malo ha pasado.

JOSÉ Madre, ¿Qué ha pasado?

ASUNCIÓN

¡Hijo mío! (Afligida)

CURA Hijo, tengo malas noticias. Se ha producido un accidente en los altos hornos. Tu padre ha muerto.

Asunción llora en silencio. José está a punto de llorar, pero tensa la cara y consigue aguantar el llanto.

22. CEMENTERIO.EXT/DÍA.

Vemos el entierro del padre de José. José viste por primera vez como un adulto, de largo, con un traje negro. Todos los vecinos asisten al entierro. Uno a uno los compañeros de trabajo del padre de José y después el resto del pueblo se acerca a Asunción y a José para darles el pésame. El último en hacerlo es Manuel.

MANUEL Te acompaño en el sentimiento.

Ambos se abrazan no como niños, sino como personas mayores.

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BLOQUE 2

23. NEGRO.

Con la pantalla en negro leemos: MANUEL

Fundido a:

24.PLAZA IGLESIA.EXT/NOCHE.

Las manecillas del reloj de la torre marcan las 12. La gente agolpada en la plaza de la iglesia toma las uvas, al son de las campanadas. Un modesto castillo de fuegos artificiales ilumina por momentos la noche en Sagunto. A los pocos segundos, se enciende unas letras de fuego, donde leemos Bienvenido 1964. En la plaza, Manuel, Pilar y José se felicitan por la entrada del año nuevo. Manuel se ha dejado el pelo largo y grandes patillas, viste a la moda, con un pantalón acampanado a juego con una camisa psicodélica y una chaqueta de puños anchos. José viste con la muda de los domingos y Pilar un vestido ancho. Ella está en avanzado estado de gestación.

JOSÉ Feliz año 1964.

PILAR

Feliz año.

MANUEL Feliz, mil novecientos sesenta y cuatro.

Manuel descorcha una botella de champán.

25.BAILE.INT/NOCHE.

Fiesta de entrada de año, en la sala de baile del pueblo. Una modesta orquesta ameniza la velada con música de todo tipo. La gente baila animada. José con dos copas en la

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mano, se dirige al rincón donde está sentado Manuel. Parece que es el único que no se divierte en la fiesta.

JOSÉ Anímate, Manuel.

MANUEL

Estoy un poco cansado.

JOSÉ Que no sé diga que no vives en Madrid. Tienes que mantener la leyenda de que en Madrid os pasáis el día de fiesta. ¿Te acuerdas?

MANUEL

Claro que me acuerdo.

JOSÉ Ya sé que esto no es la capital, pero aquí también hay mujeres guapas.

Manuel no contesta, le da un trago a la copa.

JOSÉ

¿Pero qué te pasa?

MANUEL No sé, José. No es el momento para amargarte la noche.

JOSÉ

Pero tú estás tonto.

José se sienta a su lado.

MANUEL José, ¿tú nunca has tenido la sensación de que no perteneces a ningún sitio?

José no sabe que contestar.

MANUEL

Es que estoy aquí en mi pueblo y todo me parece extraño, y me siento culpable.

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JOSÉ

Culpable, ¿de qué?

MANUEL De abandonaros a todos a ti, a mi madre, a mi tío...

JOSÉ

Cada uno tiene que vivir la vida que le ha tocado.

MANUEL

Supongo que sí.

JOSÉ Yo no entiendo de letras como tú, lo único que te digo es que tú eres de Puerto de Sagunto Y eso nunca se ha de olvidar, además hoy es un día feliz, estamos todos juntos, como antes.

Varios segundos de reflexión.

MANUEL.

Es verdad, dejemos de filosofear... ¿Cuándo publicas tu primera novela de aventuras?

JOSÉ

(Bromeando) Lo que me va ahora es la novela naturalista, ya sabes todo el día metido en los altos hornos. Mi vida parece un personaje de Zola.

MANUEL.

Te sienta bien el matrimonio.

JOSÉ Pilar y yo somos muy felices, además tú vas a ser el primero en saber la gran noticia.

MANUEL

No me dirás que...

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Manuel hace un gesto con sus manos dibujando en el aire una barriga.

JOSÉ

Si, de tres meses.

Manuel y José estallan de alegría. Echan bebida a las copas para brindar.

MANUEL

¿Ya tenéis pensado el nombre?

JOSÉ Si sale chico la cosa no tiene discusión. Se llamará José, como su padre.

MANUEL (Bromeando) Vaya, que original…

Ríen.

MANUEL Venga, vamos a por otra copa

26. ESTACIÓN AUTOBÚS MADRID. EXT/NOCHE.

Manuel regresa a Madrid. Son las 11 de la noche. La estación parece desierta. Manuel desciende por las escalerillas del autobús, recoge su equipaje. En el andén le espera Elena, su nueva conquista, una compañera de la facultad. Es alta, de silueta esbelta, pelo largo, morena, melena al aire y ojos negros. Parece una niña ñoña, de padres ricos. Ella se esconde, para no ser vista por él. Luego, cuando él esta de espaldas, se acerca a Manuel, tapándole los ojos con sus manos.

ELENA ¡Sorpresa! ¿Quién soy?

Manuel da media vuelta y le quita las manos.

MANUEL

¡Elena!... Pero ¿Qué haces aquí?

ELENA

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Si quieres me voy (Desilusionada)

MANUEL No, tonta. ¿Cómo sabías que llegaba a esta hora?

ELENA

No lo sabía, llevo toda la tarde esperando el autobús que viene de Valencia.

Elena se hace la mimosa. Manuel le da un beso furtivo en la boca, como señal de agradecimiento. Los dos andan hacia la salida. Manuel se da cuenta que Elena lleva una maleta consigo.

MANUEL

¿Y eso? (Señalando la maleta)

ELENA Una maleta, ¿Nunca has visto una? (Irónica)

MANUEL

Sí, pero se supone que el que vuelve de viaje soy yo, no tú.

ELENA

Y la que se supone que se queda esta noche a dormir en tu casa soy yo. O es que no te acuerdas. Ahora no puedes volverte atrás, le he dicho a mis padres que me quedaba a dormir en casa de una amiga.

MANUEL

Nunca entenderé a las mujeres. Para una noche, ¡una maleta! ¿Qué escondes? ¿Una bomba? (Irónico)

27. ESCALERAS EDIFICIO MANUEL.EXT/NOCHE.

Manuel y Elena suben las escaleras de la finca en silencio, descalzos para evitar hacer ruido. Hablan en voz baja.

MANUEL

Sssf. No hagas ruido.

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ELENA

¿Por qué?

MANUEL A Milagros, la portera no le gusta que sus inquilinos lleven compañía a casa.

ELENA

¿Pero por qué? Tú pagas un alquiler, es tu casa.

Manuel no quiere seguir conversando y se lleva el dedo índice a la boca en señal de silencio.

ELENA

Parecemos ladrones.

A los pocos segundos a Elena se le escapa una carcajada. Manuel la mira inquisitoriamente. Una puerta se abre, en el bajo. Por el hueco de la escalera se asoma Milagros, 65 años, la arrendataria y propietaria del inmueble, una vieja con muy malas pulgas.

MILAGROS Manuel no se crea que soy tonta, le he visto con esa señorita. He dicho mil veces que no quiero que esto se convierta en la casa de tócame Roque.

Manuel y Elena suben corriendo el último tramo de escalera y entran en casa.

28. CASA MANUEL – DORMITORIO/ BAÑO.EXT/NOCHE.

La casa de Manuel es muy pequeña, una cocina-salón, un dormitorio y un baño. Manuel está en la ducha y Elena en la habitación. Elena registra los cajones del armario. En uno de ellos encuentra un taco de octavillas bajo el epígrafe, libertad en la universidad. La lee, por encima, finalmente saca todos los cajones del armario. Inmediatamente, abre la maleta. De entre la ropa y libros, saca un dispositivo parecido al de un reloj y una caja de zapatos cerrada herméticamente y perfectamente precintada. Manuel tararea una canción de la infancia. Bruscamente para de cantar.

MANUEL

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Elena, Elena, por favor, tráeme la toalla.

ELENA

¿Dónde está?

MANUEL Colgada detrás de la puerta.

Elena coge la toalla, entra en el baño y se la da a Manuel. Éste está completamente desnudo y con ánimo de que Elena también lo esté. La coge por la cintura e intenta besarla, pero ella se deshace de sus garras.

ELENA

Déjame Manuel, déjame, mira como me estás poniendo. Me estás mojando (Enfadada)

Manuel la suelta.

MANUEL

Vale, vale. Usted perdone.

ELENA Cada cosa a su tiempo Manuel. No seas impaciente (Conciliadora)

Ella sale del baño. Vuelve a la habitación. A toda prisa saca los cajones del armario, Mete en una bolsa el reloj y la caja y la coloca en el fondo del armario, luego vuelve a colocar los cajones en su sitio. Se desnuda y se pone el camisón. Se tumba sobre la cama. Manuel que ya está seco entra en la habitación, con una toalla puesta sobre la cintura.

MANUEL

¿Te parece así bien o me seco más?

Se pasa el dedo por el pecho, está totalmente seco.

ELENA

Perfecto.

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Manuel se abalanza sobre ella, quedando los dos tendidos sobre la cama, iniciando los preámbulos amorosos.

29. PASILLOS FACULTAD DERECHO.INT/DÍA.

Rótulo: 22 Enero de 1969.

Faltan pocos minutos para que comiencen las clases. Manuel y Elena suben las escaleras que les conducen al aula. Elena se encuentra de casualidad con Jon, 22 años, un tipo greñudo, con cara de palo y mirada penetrante. Tiene cara de haber nacido enfadado.

ELENA

¡Jon, cuánto tiempo sin verte! (Sorprendida), ¿Cómo va todo? Manuel, este es Jon, un primo de mi pueblo. Jon, Manuel, un compañero de la facultad.

MANUEL

Encantado.

Manuel se queda con la palabra en la boca y con la mano extendida al aire. Jon simplemente arquea las cejas en señal de saludo.

JON

¿Tienes noticias del pueblo? ¿Sabes algo de la tía María?

ELENA

Salió del hospital, ya está en casa, el doctor ha dicho que no hay ningún peligro.

Jon se despide levantando la mano y se va. Elena y Manuel retoman su camino hacia la clase.

MANUEL

Un tipo curioso tu primo. No gasta mucho en saliva. ¿Qué estudia?

ELENA

Psicología.

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MANUEL

Dios, otro loco suelto por el mundo (Bromeando)

30.AULA UNIVERSIDAD.INT/DÍA.

El aula de tercer curso de Derecho es enorme, tiene dimensiones de teatro romano, con gradas pobladas de jóvenes estudiantes. Elena y Manuel se sientan juntos. Un arcaico profesor está dando una clase magistral de Derecho Romano cuando varios alumnos irrumpen en clase, uno de ellos le arrebata el micrófono al profesor y lee un panfleto.

ALUMNO Compañeros, Enrique Ruano, militante revolucionario y compañero de 5 curso de Derecho ha muerto. Lo ha asesinado la policía por defender la libertad. Compañeros, muchos de vosotros lo conocisteis, no podemos dejar que este asesinato quede impune. Nos tienen que oír y nos van a oír. Se ha convocado una manifestación en las calles de Ciudad Universitaria, ahora más que nunca necesitamos el apoyo de todos los que defendemos la libertad.

31.CALLES CIUDAD UNIVERSITARIA.EXT/DÍA.

Los estudiantes gritan lemas en contra de la policía y a favor de la libertad y la revolución. Varias furgonetas antidisturbios, rodean a los manifestantes y cortan las posibles salidas. De ellas salen como fieras enrabietadas, un centenar de grises que golpean sin piedad a todo aquel que se encuentran a su paso. Los estudiantes, acorralados, son objeto de brutales palizas. Manuel ve como dos policías se abalanzan sobre él. Intenta protegerse, colocándose en posición fetal pero recibe un fuerte impacto con la porra en la cabeza. Cae inconsciente al suelo.

32.CELDA-DIRECCIÓN GENERAL DE SEGURIDAD.INT/NOCHE.

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Manuel despierta en una oscura celda de incomunicación de la Dirección General de Seguridad. Se echa la mano a la cabeza. Le han afeitado un rodal para coserle la herida. Se abre la puerta de la celda.

POLICÍA

Acompáñeme por favor.

Manuel se incorpora y sigue al policía

33.SALA DE INTERROGATORIOS.INT/NOCHE

Manuel es conducido hasta una oscura sala de interrogatorios. Es una habitación sin ventanas. Una lámpara que emite un duro haz de luz cenital alumbra la parte central de la habitación. Allí hay una mesa y tres sillas. Dos a una parte de la mesa donde se sientan los policías y otra sin respaldo donde se sienta el detenido. Sobre la mesa hay una máquina de escribir.

Manuel se sienta. Lo dejan solo durante unos segundos. Mira nervioso a todos lados. Sabe que lo observan, pero no puede adivinar desde donde. Luego se abre la puerta. Entran dos hombres. El primero es el inspector Valdivia, 50 años, calvo, bajito, gordo. Lleva puestas gafas negras. Viste elegantemente con un traje de chaqueta y corbata. Le da la mano. El segundo Antonio, 30 años, es el mecanógrafo. Tiene cara de buena persona. Viste con el uniforme de la policía.

INSPECTOR VALDIVIA

Buenas tardes. Soy el inspector Valdivia. Y este es Antonio, mi ayudante, él transcribirá su declaración.

Manuel se levanta y le da la mano al Valdivia.

INSPECTOR VALDIVIA

Siéntese por favor ¿Quiere un cigarrillo?

MANUEL

No, gracias.

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Manuel se sienta de nuevo. Antonio toma posición frente a la máquina de escribir. Valdivia enciende un cigarro y permanece de pie, oculto en la penumbra, en el fondo de la habitación. Manuel no lo ve, tan solo adivina su posición, por el ascua de su cigarro.

INSPECTOR VALDIVIA

Si colabora, no creo que estemos aquí más de 15 minutos. Ahora Antonio le tomará declaración de sus datos. Nombre, dirección… Ya sabe esas cosas rutinarias y luego empezamos.

ANTONIO

¿Nombre?

MANUEL Manuel Sánchez Aguirre.

ANTONIO

Fecha de nacimiento.

MANUEL 18 de Mayo de 1947.

ANTONIO

¿Lugar de nacimiento?

MANUEL Puerto de Sagunto. Valencia

ANTONIO

Profesión.

MANUEL Estudiante de Derecho.

ANTONIO

Dirección en Madrid.

MANUEL Pensión “Atocha”. Plaza Antón Martín 5.

El inspector Valdivia corta este rutinario procedimiento.

INSPECTOR VALDIVIA

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Bueno Manuel, Manuel, Manuel, así que estudiante de Derecho. ¿Quiere ser abogado, Manuel?

MANUEL

Sí.

INSPECTOR VALDIVIA Es una carrera difícil. Yo empecé a estudiarla, pero me la dejé al segundo año. Tengo un defecto y es que se me agota la paciencia enseguida. Empecé a suspender y me desanimé. ¿Qué tal estudiante es usted?

MANUEL

Normal.

INSPECTOR VALDIVIA Puede contestar libremente lo que quiera, aquí nadie le va a pegar por hablar.

Silencio.

INSPECTOR VALDIVIA Bueno Manuel, sabe por qué está aquí.

MANUEL

Lo supongo.

INSPECTOR VALDIVIA Ah sí, chico listo. ¿Por qué?

MANUEL

Por mi implicación en la manifestación de esta mañana.

INSPECTOR VALDIVIA

Se equivoca Manuel. Los de la policía tenemos mala fama, pero no somos tan malos. Si te digo la verdad, entiendo perfectamente vuestras protestas y vuestro inconformismo. Yo también he sido joven Manuel. En el fondo os admiro. Tenéis agallas y eso es

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bueno. Pero no, no es por lo que estas aquí.

Antonio saca de una carpeta una foto y se la da a Manuel. Es una foto de Elena. Manuel no se inmuta al reconocerla.

INSPECTOR VALDIVIA Esto te refresca la memoria, ¿la conoces?

MANUEL

Sí, es una compañera de clase. Se llama Elena.

INSPECTOR VALDIVIA

Correcto. Cuéntame algo de ella.

MANUEL No sé más, en clase somos más de 100 personas. Ella es una más.

INSPECTOR VALDIVIA

Y si te digo, que es un terrorista, que ha matado ha honrados policías, que ha robado hace menos de un mes 100 kilos de explosivos y que está planeando con su grupo un atentado a gran escala en Madrid, donde puede morir mucha gente inocente ¿te refresca la memoria?

MANUEL

No sé de lo que me está hablando.

INSPECTOR VALDIVIA Manuel esto no es un juego de niños. Tengo mucha experiencia en este tipo de interrogatorios. No conozco a nadie que me haya engañado todavía. Perdona que te tutee, pero me caes bien Manuel. Pareces un tipo inteligente. Te aconsejo por tu bien que si sabes algo lo digas ahora mismo. Ahórrate el sufrimiento.

Manuel se pone nervioso.

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MANUEL No sé más de lo le he dicho. Es una compañera de la facultad.

INSPECTOR VALDIVIA

Pues un pajarito me ha dicho que os sentáis al lado y que en la facultad vais juntos a todas partes.

Manuel se lo piensa.

MANUEL

(A punto de llorar). La conocí en este curso. Me líe una vez en una fiesta. Pero no tengo más relación con ella. No sé donde vive, ni nada de su vida fuera de la facultad. Se lo juro por lo que más quiero.

INSPECTOR VALDIVIA

Manuel, lo siento pero no te creo. Creo que perteneces a ese grupo, que eres un colaborador. Te doy una última oportunidad. ¿Dime tan solo dónde están escondidos los explosivos y cuál es la dirección del piso franco donde se esconde el comando? No tengas miedo a las represalias de tus compañeros, te doy mi palabra de honor de que ellos jamás sabrán que has sido tú quien nos ha dado la información.

MANUEL

(Llorando). No sé de qué me está hablando, se lo juro por mi madre.

INSPECTOR VALDIVIA

Se lo advertí Manuel, soy un hombre de poca paciencia ¡Vamos, Antonio!... Ahora vendrá Luís. Es boxeador profesional. Necesita sparrings para entrenarse. No te importa verdad.

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El inspector tira el cigarro al suelo y acompañado de Antonio sale de la sala. Manuel se queda solo, totalmente a oscuras, en un tenso silencio, preámbulo de la tortura.

34. CALLE MADRID.EXT/NOCHE.

Manuel deambula por las calles de Madrid, está magullado, con moratones por toda la cara, sucio y tiene barba de varios días. Un desconocido se choca con él, fortuitamente.

MANUEL

Perdón.

PASEANTE Manuel, rápido, cruza la calle y súbete en el coche negro que hay aparcado en el semáforo. No hagas ningún gesto extraño.

Manuel obedece desconcertadamente las órdenes del extraño. Se sube en el coche y éste se pone en marcha de inmediato.

35.COCHE.INT/NOCHE

Dos hombres delante, y uno detrás son los extraños compañeros del viaje nocturno de Manuel por las calles de Madrid. Tienen mediana edad, entre 30 y 40 años.

MANUEL

Que alguien me explique lo que está pasando por favor.

COPILOTO

No te preocupes Manuel, con nosotros estás a salvo.

MANUEL

¿Quiénes sois?

COPILOTO Pronto lo sabrás.

El acompañante que está sentado en la parte de atrás le coloca la venda en los ojos.

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MANUEL ¿Por qué me ponéis una venda?

COPILOTO

Por tu bien es mejor que no sepas nada, ya habrá tiempo de explicaciones.

36. PISO FRANCO.INT/NOCHE.

A Manuel le quitan la venda. Está en el interior de un piso. Frente a él, en un salón no muy grande, hay 6 personas; los tres acompañantes del coche, el desconocido que se tropezó con él en la calle, Jon y Elena. Ella le abraza. Elena ya no habla como la pija que era. Habla con firmeza y con autoridad.

ELENA

Manuel, pero qué te han hecho.

MANUEL Elena, por Dios, esto es una pesadilla. ¿Qué está pasando?

ELENA

Siento haberte metido en este lío, pero ahora nos tienes que ayudar.

MANUEL

¿Quién eres?, la policía me enseñó fotos tuyas.

ELENA

¿Qué les dijiste?

MANUEL La verdad, que no sabía nada de ti.

ELENA

¿Qué dijeron de mí?

MANUEL Que pertenecías a un grupo terrorista y que habías robado unos explosivos. ¿Es cierto?

ELENA

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Estamos planeando un gran golpe al Régimen. Pero alguien se ha ido del pico.

MANUEL

¿Y que pinto yo en todo esto?

ELENA Te utilicé. Escondí los explosivos y el temporizador en tu casa. Pensé que era el lugar más seguro. De ti nadie sospecharía. Ahora estás metido en el juego. Nos tienes que ayudar. El plan sigue adelante. En cuanto nos den la orden desde Francia, el mecanismo se pondrá en marcha.

MANUEL

¿Y si decido no ayudaros e ir a la policía corriendo?

Un compañero le muestra una pistola

ELENA

No lo harás, tú defiendes las mismas ideas que nosotros, leí las octavillas que escondes en tu habitación.

MANUEL

¿Qué debo hacer?

ELENA Ellos te van a vigilar constantemente. Debes realizar vida normal, como antes. Ir a clase y todo eso. De momento el explosivo seguirá en tu casa. Ahora que creen que realmente no sabes nada, es el lugar más seguro. Lo tendrás allí hasta que se active el plan.

MANUEL

¿Y cómo sabré cuando es eso?

ELENA Jon será tu intermediario. Todavía no está fichado. Él te dirá dónde y

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cómo se realizará la devolución. ¿Entendido?

MANUEL

Entonces, me has utilizado desde el primer momento. ¿Lo nuestro ha sido todo mentira?

Elena no contesta, simplemente se acerca y le da un beso en la boca.

37.CASA MANUEL.INT/NOCHE.

Manuel saca del escondite de su armario el detonador. Está envuelto en una bolsa. La abre, lo coloca sobre la cama y lo examina con curiosidad. Suena el timbre de casa. Manuel se acelera, no atina a esconder de nuevo el explosivo. Insisten. Manuel abre la puerta con temor. Al otro lado está Milagros, la casera.

MANUEL

Lo siento Milagros, de verdad, no crea que no quiero pagarle el mes, es que he estado fuera unos días y se me ha juntado con los exámenes y... (Excusándose)

MILAGROS

Para, para Manuel. El otro día unos señores de traje preguntaron por usted y me enseñaron la foto de la chica que trajo usted aquella noche. Les dije que no la conocía y que nunca había pisado este edificio.

Milagros le guiña el ojo.

MANUEL

Gracias Milagros.

MILAGROS Ah... y lo del alquiler, a ver si ya vamos pagando que esto no es la casa de la caridad.

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Manuel cierra la puerta y suspira aliviado.

38. AULA UNIVERSIDAD.EXT/DÍA.

Primera hora de la mañana, los estudiantes toman posiciones en sus pupitres entre el típico murmullo de saludos, sillas que chirrían y cremalleras de mochilas que se abren y cierran continuamente. Manuel se sienta y saca sus bártulos, cuando un individuo le deja un papel doblado en su mesa. Rápidamente lo lee, es un mensaje cifrado: “La tía Elena de Valencia llegará a Madrid el Martes en el tren de las 17 30” Manuel levanta la cabeza, reconoce al portador del mensaje. Es Jon. Los dos cruzan la mirada con complicidad.

39. ESTACIÓN ATOCHA.INT/DÍA.

Manuel está en el vestíbulo de la estación de Atocha. Lleva una maleta de viaje. La guarda en una taquilla de la estación. Mira el reloj de pared. Son las cinco y media. Parece sereno. La megafonía anuncia la llegada del tren procedente de Valencia. Un tumulto de gente invade el andén. El tren de Valencia ha llegado. Manuel busca con su mirada alguna cara familiar. Ve a Elena bajarse de uno de los vagones, recoger su equipaje y acercarse a él. Viste una falda recta por debajo de las rodillas, tapada casi en su totalidad por un elegante abrigo de piel. Lleva el pelo recogido con moño atrás y un sobrero ladeado. Aparenta ser una distinguida señora de clase alta. Cuando llega a su altura le habla como si fuera una perfecta desconocida.

ELENA

Podría indicarme dónde está la salida.

MANUEL

Por allí, ve aquel pasillo pues siga recto y después gire a la derecha.

En ese intervalo de tiempo, él deposita la llave de la taquilla en la mano de ella.

ELENA

Gracias.

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Manuel suspira, sigue con la mirada como ella desaparece entre la maraña de gente. Cuando parece que ha pasado el peligro, ve como dos hombres de paisano la detienen, y le piden la documentación. Dos más le miran y corren hacia él. Manuel echa a correr como nunca lo ha hecho en su vida.

POLICÍA 1

¡Alto, deténgase inmediatamente!

POLICÍA 2 ¡Alto o disparo!

Se produce una persecución entre vías y andenes. Manuel logra huir subiéndose en marcha a un vagón.

40. CASA JOSÉ.INT, EXT/NOCHE.

A. HABITACIÓN JOSÉ.

Noche cerrada. El matrimonio duerme a pierna tendida. Alguien tira piedras a la ventana. José se desvela. Entonces otra piedra impacta en la ventana. Despierta a Pilar.

PILAR

José, despierta, despierta.

JOSÉ ¿Qué pasa?

PILAR

Alguien está tirando piedras a la ventana.

JOSE

Bajo a ver.

José coge la escopeta.

PILAR

Ten cuidado.

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B. ESCALERAS, ENTRADA, CALLE.

Baja las escaleras, sale a la calle y descubre una silueta en la noche. Se acerca y le apunta por la espalda.

JOSÉ

¿Quién anda ahí?, me cago en Dios...

MANUEL

No dispares José, soy yo, Manuel.

JOSÉ Manuel, pero por todos mis muertos, que susto me has dado.

Manuel se acera a José. Esta sucio, tiene barba de tres días, las ropas rasgadas y está muy nervioso.

MANUEL

Por Dios José, déjame dormir esta noche en tu casa.

JOSÉ

Pero Manuel, ¿Qué te ha pasado?

41. CASA JOSÉ- COCINA.INT/NOCHE.

Pilar, en avanzado estado de gestación, está calentando un tazón de leche. Manuel se lava las manos y la cara en una palangana, mientras explica su odisea.

MANUEL

... y cuando pensaba que ya me tenían pillado, me subí a un tren en marcha. Yo creo que fue un Milagro José. El tren iba a Murcia. Cuando vi que el paisaje me era familiar me tiré. Llevo dos días vagando, escondiéndome de todo el mundo. Tengo miedo José. No van a parar hasta encontrarme. Si voy a casa, mi padre es capaz de delatarme.

JOSÉ

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Aquí puedes estar tranquilo, puedes estar el tiempo que quieras, hasta que las cosas se calmen.

MANUEL

Gracias José, gracias no sé como agradecértelo. Me estas salvando la vida.

JOSÉ

No tienes nada que agradecerme. Somos amigos. ¿O es que tú no harías lo mismo por mí?

MANUEL

Claro José.

42. PUERTO SAGUNTO -PLAZA DE LA IGLESIA.EXT/DÍA

José atraviesa la plaza de la iglesia en dirección al estanco de Benito. Dos coches de la guardia civil y varios agentes se cruzan en su camino.

43. TABERNA-ESTANCO BENITO.INT/DÍA.

José entra en la taberna de Benito. Deja el abrigo en una percha.

JOSÉ

Buenas tardes, Benito.

Sentado en una de las mesas, tomándose unos vinos está Antonio, (50 años) sargento del cuartelillo de la guardia civil, un bigotudo, con cara de mala leche, acompañado por varios compañeros de rango inferior. En la taberna la radio ha sido sustituida por una televisión en blanco y negro.

BENITO

¿Qué hay José?

JOSÉ Dame un paquete de celtas... Y un ponme un carajillo.

Benito, le da el paquete y se va a la cafetera. José enciende un cigarro. Observa por un momento a Antonio. Éste

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se le queda mirando a la cara. José desvía su mirada. Al momento llega Benito con el carajillo.

JOSÉ

¿Qué pasa hoy en el pueblo, que están todos estos aquí? (Señalando con la vista la mesa donde están los guardias civiles)

BENITO

No te has enterado, andan buscando a Manuel, el hijo del alcalde. Dicen que ayer por la noche lo vieron por el pueblo.

JOSÉ

¿Qué ha hecho?

BENITO Por lo visto ha salido a su tío. Dicen que es terrorista. Menudo cabreo debe tener el señor alcalde... por cierto, ¿Manuel no era amigo tuyo?

JOSÉ

Sí, sí. Éramos muy amigos de pequeños, luego ya sabes con el tiempo... él en Madrid y yo aquí, se va perdiendo.

BENITO

¿Cuándo fue la última vez que lo viste?

A José le incomodan las preguntas de Benito y baja la voz, ante la intuición de que Antonio, el sargento, haya puesto el oído en la conversación. Se toma el carajillo a toda prisa.

JOSÉ

En nochevieja, parecía normal, como siempre.

José acaba el carajillo y apaga el cigarro.

JOSÉ

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...Bueno dime lo que te debo.

44. COMPLEJO ALTOS HORNOS/ EXPLANADA.EXT/DÍA.

Acaba el turno de trabajo. Los trabajadores en masa salen del complejo. En la explanada contigua a los altos hornos hay un trasiego de grúas que cargan enormes planchas de acero a unos camiones José y Félix (30 años) con amplias entradas en la frente, cruzan la explanada en dirección a la salida.

JOSÉ ¿Adónde se llevan todo esto?

FÉLIX

A Francia, por lo visto están cargando un barco enorme.

JOSÉ

¿Quién es el responsable de la carga?

FÉLIX

Roberto, míralo, ahí está.

Félix señala con el dedo a Roberto, 40 años, moreno, regordete, no muy alto y cara de bonachón. Roberto está al otro lado de la explanada dirigiendo las operaciones de carga de un camión. José se echa mano a la cabeza.

JOSÉ

¡Vaya!, no estoy seguro de haber guardado el casco en el vestuario, voy a mirarlo.

FÉLIX

Te acompaño.

JOSÉ No, no, vete a casa, no hace falta.

FÉLIX

No si da igual.

JOSÉ De verdad, vete, vete, si no tardo nada.

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FÉLIX Bueno, bueno, como quieras, mañana nos vemos entonces.

JOSÉ

Hasta mañana.

José se dirige hasta donde está Roberto. El ruido del motor de la pala y los camiones es ensordecedor. Ambos gritan para hacerse entender.

ROBERTO

Hombre, José... ¿Qué te trae por aquí?

JOSÉ

¿Cuándo sale el cargamento?

ROBERTO Dentro de dos días, ¿Por qué?

JOSÉ

Necesito hablar contigo.

ROBERTO Dime.

JOSÉ

A Solas, necesito que me hagas el favor más importante de mi vida. ¿Puedo confiar en ti?

ROBERTO

Claro que sí, José.

JOSÉ Me tienes que prometer que no debes contar nada a nadie.

Roberto asiente con la cabeza

ROBERTO

¿En qué lío te has metido?

JOSÉ Vamos a la cantina y te lo cuento.

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45. CASA JOSÉ –COMEDOR/ESTABLO.INT/NOCHE.

A. COMEDOR

Pilar sirve la cena, huevos fritos, y patatas con chorizo.

PILAR Comed un poco, lleváis toda la tarde hablando de lo mismo.

JOSÉ

Lo mires, por donde lo mires es perfecto, una vez dentro del barco ya no te pueden pillar.

MANUEL

¿Y ese Roberto es de fiar?

JOSÉ Pondría la mano en el fuego por él.

MANUEL

Y, ¿Cuándo dices que sale el barco?

Suena el llamador de la puerta. Manuel se levanta bruscamente de la mesa. Pilar le hace un gesto para que no haga ruido. José se levanta a abrir.

JOSÉ

¿Quién es?

ANTONIO (OFF) La Guardia civil.

JOSÉ

¡Ya va! (Gritando)

Pilar abre la puerta del establo y hace señas a Manuel para que se oculte allí. Una vez escondido, Pilar retira los cubiertos y un plato de la mesa, para hacer ver a los guardias civiles que solamente hay dos personas en casa. José abre la puerta de la calle con temor. Antonio entra acompañado de dos guardias civiles.

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JOSÉ Buenas noches.

ANTONIO

Buenas noches. Estamos buscando a Manuel Sánchez Aguirre. ¿Lo conocen?

JOSÉ

Sí, es amigo mío.

ANTONIO Anda fugado. Un vecino nos ha dicho que lo tienen escondido aquí.

JOSÉ

Con todos mis respetos, he de decirle que no.

ANTONIO

Eso espero, por su bien, vamos a registrar la casa.

José asiente con la cabeza

ANTONIO

(Voz de mando) Romero, Sánchez, suban a los pisos y regístrenlo todo, de arriba abajo. Usted, José, acompáñelos que yo me quedo aquí hablando con su mujer.

Pilar queda a solas con Antonio. Antonio se fija en los dos platos y en las copas de vivo que hay sobre la mesa.

ANTONIO No debería usted beber vino, si está a punto de parir.

Pilar no tiene respuesta.

ANTONIO

¿Conocía su marido lo que hacía Manuel en Madrid?

PILAR Que sepamos, estudiar la carrera.

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ANTONIO

¿Qué relación mantenía con su marido?

PILAR

De pequeños eran muy amigos, pero desde que Manuel se fue a estudiar fuera... poco a poco se fueron separando.

José y los dos guardias entran de nuevo al comedor.

ROMERO

Mi sargento, lo hemos registrado todo. Sin novedad.

ANTONIO

¿Adónde da a parar esa puerta?

Antonio señala la puerta de madera roída que comunica con el establo.

PILAR

Al establo, tenemos conejos y gallinas para las paellas de los domingos.

ANTONIO

Regístrenlo.

José hace ademán de acompañar nuevamente a los agentes.

ANTONIO Usted no José, Usted se queda conmigo, que vaya su mujer.

Antonio y José quedan solos.

ANTONIO

¿Cuándo fue la última vez que vio a Manuel Sánchez?

JOSÉ

En la fiesta de fin de año.

57

ANTONIO

¿Qué le contó aquella noche?

JOSÉ Lo de siempre, que estudiaba mucho, pero que estaba contento allí, con la gente que conocía.

ANTONIO

¿A su mujer le gusta el vino?

JOSÉ No mucho.

Antonio mira las dos copas que hay sobre la mesa, José observa también las copas, temeroso de que haya podido meter la pata. Pilar y los agentes vuelven del establo sin Manuel.

ROMERO

No hay nada, están limpios.

Antonio contrariado ordena el fin del registro.

ANTONIO

Vámonos.

Pilar y José los acompañan hasta la puerta.

PILAR

Vayan con Dios.

Respiran aliviados. José ve se asoma a la ventana y ve como se alejan los guardias.

PILAR

Ha sido un milagro.

B. ESTABLO

El matrimonio entra en el establo.

58

JOSÉ

Manuel, Manuel... ya puedes salir, pero ¿dónde cojones te has metido?

Manuel asoma la cabeza. Estaba sumergido, aguantando la respiración en el abrevadero.

MANUEL

Por Dios, de poco me ahogo.

46. CALLES PUERTO DE SAGUNTO. EXT/DÍA.

Está amaneciendo en puerto de Sagunto. Como todas las mañanas José sale temprano de casa, dirección a los altos hornos. Sin embargo, hoy cojea levemente y parece un poco más bajo y delgado. Se trata de Manuel con el mono de trabajo de José. Cruza delante de un puesto de la guardia civil, sin que estos se percaten de su auténtica identidad.

GUARDIA CIVIL

Buenos días.

MANUEL Buenos días.

A los pocos metros del control, Manuel se cruza con su madre. Cruzan la mirada, ella disimula. A él se le escapa una palabra, apenas un susurro

MANUEL

¡Madre!

47. EXPLANADA ALTOS HORNOS -TERMINAL DE CARGA.EXT/DÍA.

Manuel llega hasta la terminal de carga. Faltan varios minutos para que el primer turno de trabajadores se incorpore a trabajar. Detrás de un camión lo esperan impacientes José y Roberto. El reloj marca las 6, 45 minutos de la mañana.

JOSÉ

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¿Algún problema?

MANUEL Ninguno, no se han dado ni cuenta.

JOSÉ

Perfecto.

Roberto habla entrecortado, afectado por el frío matinal y por los nervios

ROBERTO

Basta de chácharas, cambiaros rápido. Quedan 10 minutos para el cambio de turno, acabemos antes de que esto se llene de gente.

Roberto, apoyado en la cabina del camión, vigila alguna presencia extraña en la explanada, mientras José y Manuel se intercambian la ropa.

JOSÉ Ya está Roberto.

Roberto se acerca a José y Manuel. Intenta disimular su miedo, hablando claro y pausado.

ROBERTO Vamos, súbete al remolque y por lo que más quieras no te muevas pase lo que pase. He hablado con el camionero. El camión entra directamente a las bodegas del barco. Allí dispones de cinco minutos para saltar del remolque y esconderte en cualquier lado. ¿Entendido?

MANUEL

Sí.

ROBERTO Pues venga. Sube.

MANUEL

Gracias, gracias, os debo la vida.

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ROBERTO

De nada, pero por lo que más quieras, sube ya.

MANUEL

Gracias José, nunca olvidaré lo que estas dos semanas has hecho por mí. Juro por Dios, que no lo olvidaré.

JOSÉ

Que te vaya bien.

MANUEL Una última cosa te pido.

JOSÉ

Lo que quieras

MANUEL Cuida de mi madre y de mi tío.

JOSÉ

Descuida.

Los dos amigos se abrazan emotivamente. A continuación Manuel trepa por el lateral del camión. Antes de esconderse en el remolque saluda a José y a Roberto con el puño alzado.

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BLOQUE 3

48. NEGRO

Con la pantalla en negro leemos: JOSÉ

49. CEMENTERIO.EXT/DÍA.

Estamos en el entierro de Felipe, el padre de Manuel. En la lápida se lee Felipe Sánchez Díaz, 23 Abril 1916 - 9 de Enero de 1983. En primera fila está Manuel, elegantemente vestido de luto, gafas oscuras, varios kilos de más y pelo de menos. A su lado, Nieves, su madre, de riguroso negro y su tío Paco, envejecido, sentado en una moderna silla de ruedas. Los vecinos como es costumbre esperan el turno para dar el pésame a los familiares del difunto.

VECINO. 1

Te acompaño en el sentimiento.

MANUEL Gracias.

VECINA 2

A todos nos llega la hora.

MANUEL Gracias.

Los últimos son Pilar y José. Ambos acusan el paso de los años.

PILAR Ánimo.

MANUEL

Gracias Pilar.

José no dice nada, simplemente le da un fuerte abrazo.

MANUEL

Gracias José.

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50. CAMINO DEL CEMENTERIO. EXT/DÍA.

La comitiva del entierro se dirige al pueblo. Manuel y José se han quedado solos. Más adelante caminan Pilar y Nieves con el tío Paco. El paisaje ha cambiado, junto a las casas tradicionales del pueblo se ha edificado un nuevo barrio obrero, decenas de bloques de viviendas ennegrecidas por la humedad y la suciedad del humo de las chimeneas del Puerto de Sagunto.

JOSÉ ¿Tú crees que tu madre se acostumbrará al cambio?

MANUEL

Yo sé que es duro para una mujer de su edad, acostumbrarse a una gran ciudad y a no ver el mar, pero creo que es lo mejor. En ninguna parte van a estar mejor atendidos que conmigo.

JOSÉ Si antes no se te veía el pelo, ahora vamos a tener que pedir audiencia para verte.

MANUEL

Las cosas no son fáciles, ahora me han ascendido en el ministerio, tengo más responsabilidad y menos tiempo libre. Pero eso no significa que me olvide de vosotros y del pueblo.

JOSÉ

Y tu tío... ¿Qué dice del cambio?

MANUEL Parece un niño, está ilusionado con la idea de volver a Madrid... ¿Y tu hijo, qué?, Ya será un tiarrón, hace mucho que no lo veo.

JOSÉ

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Con ese ya no hay quien pueda. Está en el instituto, pero a este paso antes hace la mili que lo acaba. No le gusta ni estudiar, ni trabajar, sólo esa música que da dolor de cabeza.

MANUEL

Cosas de la edad, ya espabilará... bueno y tú ¿qué? ¿Cuándo te jubilas?

JOSÉ

Calla, calla. Aún queda altos hornos para rato.

MANUEL

Bueno, tú ya sabes donde estoy para lo que sea.

JOSÉ

Oye Manuel, ha habido una cosa que no te he preguntado en estos años.

MANUEL Dispara.

JOSÉ

¿Qué fue de aquella chica?, ¿Cómo se llamaba?, la que te metió en aquel fregao...

MANUEL

¿Elena?

JOSÉ Elena, sí.

MANUEL

Nunca supe de ella, ni quise saber. El pasado es mejor no removerlo.

51. CASA JOSÉ- SALÓN.INT/NOCHE.

José, Pilar y su hijo, José (jr.), 18 años, están cenando. José (jr), fiel seguidor de la música heavy, lleva el pelo largo y viste con pantalones vaqueros negros ajustados y

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camisetas de grupo de música. Ahora no es el fuego, sino la televisión el nuevo centro de atención del hogar. Son las 9 de la tarde y de fondo oímos las noticias del telediario.

JOSÉ (JR)

Papá, el sábado hay un concierto en Valencia... ¿me dejas el coche?

JOSÉ

Otra vez sopas, ya te lo he dicho, ni hablar.

JOSÉ (JR)

Papá, a todos mis amigos les dejan el coche, menos a mí.

JOSÉ

Te lo dejo cuando lo necesites. No para irte con tus amigos de juerga.

PILAR

No sé que manía os ha dado con iros por la noche fuera del pueblo, con lo bien que se está aquí.

JOSÉ (JR)

Si no confiáis en mí me lo decís, pero no me vendáis la moto de que en el pueblo te lo pasas bien. Todo el mundo se va los sábados por la tarde.

PILAR

Pues nosotros de jóvenes nunca nos hemos aburrido y eso que no había tantas cosas como hay ahora.

JOSÉ (JR)

Joder mamá, no agobies con tus historias...

JOSÉ

Oye, no hables así a tu madre o te cruzo la cara. (Amenazante)

JOSÉ (JR)

Pero ¡quién cojones os habéis creído! ¡porque me deis de comer no tengo que aguantar vuestras

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estupideces! No hay coche, pues no hay coche, y punto.

José (jr) tira la servilleta al plato, se levanta airoso y sale del salón.

JOSÉ

Vuelve aquí o te caliento.

JOSÉ (JR) Iros al cuerno.

José hace ademán de levantarse, pero su mujer lo retiene.

PILAR

Déjalo, ya se le pasará.

52. COMPLEJO SIDERÚRGICO.EXT/DÍA.

Suena la sirena que anuncia el fin de la jornada laboral. José y sus compañeros dejan de trabajar y se marchan.

53. COMPLEJO ALTOS HORNOS/VESTUARIO. INT/DÍA.

En el vestuario se distinguen dos ambientes: las duchas, de las que emerge una densa neblina y las taquillas. Bajo las taquillas hay banco de madera alargado, que utilizan los trabajadores para vestirse. Al lado de las taquillas están los lavabos. Sobre ellos, hay un gran espejo, cubierto casi totalmente por una fina capa de vaho. Es la hora del cambio de turno. La actividad es continua. José sale de la ducha de la ducha y se dirige a su taquilla. Allí está Félix, a medio vestir.

FÉLIX

¿Te has enterado? Esta tarde la dirección ha convocado una reunión, ¿Vas a ir?

JOSÉ

Supongo, ¿Qué crees que nos dirán?

FÉLIX

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No sé, pero todo el mundo está con la mosca detrás de la oreja.

JOSÉ

Una cosa está clara, para felicitarnos por lo bien que trabajamos, no creo que sea.

Roberto, con una toalla anudada a la cintura sale de la ducha y se dirige a su taquilla. Ha oído parte de la conversación.

ROBERTO

Pues no estaría mal. Nosotros tres llevamos más de 20 años trabajando y todavía nadie nos ha reconocido nuestro mérito.

JOSÉ

Pues yo prefiero que sigan así, que no se acuerden de mí, ni para bien, ni para mal. Yo hago mis horas, me pagan y san se acabó.

Félix ya está vestido, se dirige a peinarse frente al espejo.

FÉLIX

José, déjame el peine. No sé que he hecho del mío.

Andrés, 35 años, cara de bromista, otro compañero que se está peinando al lado de Félix le deja su peine.

ANDRÉS

Toma Félix.

FÉLIX Gracias Andrés.

JOSÉ

Desde luego, para cuatro pelos que te quedan, que bien te los cuidas.

José y Andrés ríen.

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54. ALTOS HORNOS - SALA DE REUNIONES.INT/DÍA.

La sala de reuniones está abarrotada, decenas de trabajadores ni siquiera tienen sitio para sentarse. El ambiente está caldeado. Frente a ellos, dos portavoces del equipo de dirección, sentados detrás de una alargada mesa de madera, perfectamente trajeados y peinados. José, Félix, Andrés y Roberto, siguen atentos la reunión con cara de preocupación.

PORTAVOZ

La situación no quiero engañaros, es preocupante. El estado no puede seguir realizando una política paternalista sobre empresas que son claramente deficitarias.

FÉLIX

(Voz baja) Sólo saben decir palabras, todo bla, bla bla.

PORTAVOZ

Aquí no se trata de buscar culpables. Ni nosotros, ni vosotros tenéis la culpa. Estamos hablando de un problema estructural que tenemos que resolver todos juntos.

TRABAJADOR 1

Dejaros de gilipolleces, al grano.

PORTAVOZ Compañero, las cosas hay que explicarlas para entenderlas.

TRABAJADOR 2

No te confundas, tú no eres mi compañero.

PORTAVOZ

La empresa ha elaborado un plan de medidas para lograr la viabilidad económica en concordancia con el plan de reconversión para la siderurgia española. Se trata de medidas, que por favor ruego que escuchéis con la máxima atención...

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JOSÉ (Voz baja) A ese le ponía yo a picar piedra.

PORTAVOZ

...Las medidas, quiero recordar, están en fase de propuesta, serán discutidas y negociadas por vuestros interlocutores, para lograr el máximo consenso y la satisfacción plena de todas las partes.

ANDRÉS

¿Por qué no os echáis vosotros mismos a la calle? Así ahorrándonos vuestros sueldos se acababa de un plumazo con el déficit.

Risas.

VOCES TRABAJADORES Ay, Andrés... tú sí que sabes... dale, dale.

PORTAVOZ A continuación os presento a Rodolfo Castro, asesor de los Altos hornos del Mediterráneo. Os explicará al detalle al plan de viabilidad.

Le pasa el micrófono. Murmullo en la sala.

RODOLFO

Ante todo buenas tardes a todos. Iremos al grano como pedís. Dos cosas previas. La propuesta supone un sacrificio económico tanto vuestro como nuestro. Se ha intentado, que aunque haya recortes de personal, estos se hagan de la manera más racional pensando en que ninguno de los que dejen esta empresa, la dejen con mal sabor de

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boca, ni se encuentren luego desorientados en su nueva etapa laboral.

TRABAJADOR 3

Cuenta el cuento de caperucita a otros, que nosotros ya nos lo sabemos.

Alboroto en la sala, silbidos y abucheos a los portavoces de la empresa.

PORTAVOZ

Silencio, por favor, ruego silencio.

Los ánimos se calman y Rodolfo retoma la palabra.

RODOLFO

Los afectados por el recorte tendrán indemnizaciones en proporción a su antigüedad. Aquellos que lo deseen y hayan cotizado los años obligatorios en la seguridad social y sean mayores de 50 años podrán acogerse a un plan de jubilaciones anticipadas.

TRABAJADOR 2

¡Que se jubilen vuestros padres. Hijos de puta!

PORTAVOZ

No vamos a caer en ningún tipo de provocación y menos proveniente de ti, Anselmo, que aquí todos nos conocemos.

Nuevos gritos.

FÉLIX

Queréis callaros todos, que parecemos borregos. Dejadles que acaben, luego hablaremos nosotros.

PORTAVOZ

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Gracias Félix.

TRABAJADOR 1 Félix, eres un pelota.

Risas.

RODOLFO

Estas medidas en un plazo de 2 años afectarán aproximadamente al 50 % de la plantilla.

VOCES TRABAJADORES

Sinvergüenzas... fascistas... hijos de puta... meteros la reducción de plantilla por el culo... Fuera, fuera...

Silbidos, gritos, insultos. El caos se apodera de la reunión.

55. PORTAL CASA JOSÉ.EXT/DÍA.

José y Félix caminan juntos. En la acera, frente a la fachada de la casa de José está aparcado su coche, un Seat Ronda de color gris.

FÉLIX

A mí esto me huela muy mal, pero que muy mal.

JOSÉ

Querrán meternos miedo, como siempre.

FÉLIX

Esta vez va en serio. La industria no interesa. Ahora lo importante es que los guiris vengan a tomar el sol a la playa.

JOSÉ

Mañana llamaré a mi amigo Manuel que trabaja en el ministerio a ver que sabe él. Si la cosa de verdad se pone mal, seguro que puede echarnos una mano.

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Félix se queda mirando el coche de José.

FÉLIX

Ese es tu coche ¿verdad?

JOSÉ A medias con el banco.

FÉLIX

Menudo golpe, ¿dónde fue?

Félix señala, la parte trasera del vehículo.

JOSÉ

¿Cómo?

Los dos se aproximan al vehículo. Tiene la puerta trasera izquierda abollada y un gran rascón a la altura del retrovisor en la puerta del piloto. A José, le cambia la cara.

FÉLIX

Mira. Algún cabrón, que te ha pegado y se ha largado.

56. CASA JOSÉ- HABITACIÓN JOSÉ (JR).INT/DÍA.

A. ESCALERAS, PASILLO

José sube como una furia las escaleras de su casa.

JOSÉ

Se va enterar éste, ya está bien de tomarnos el pelo.

B. HABITACIÓN JOSÉ (jr)

José (jr) está escuchando música con los cascos de la cadena musical puestos, está sentado sobre la cama y quemando una piedra de hachís. Escucha música heavy. José

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entra de golpe. José (jr) tiene el tiempo justo para tirar por la ventana el hachís.

JOSÉ

Quita esta puta música que me da dolor de cabeza.

José (jr) apaga la cadena.

JOSÉ

¿Cogiste el coche el sábado, sin mi permiso?

JOSÉ (JR)

No.

JOSÉ Mentira.

Le suelta una bofetada, que le gira la cara.

JOSÉ (JR)

Pero, ¿De qué vas?

JOSÉ Cogiste el coche sin mi permiso el sábado, has abollado la puerta. Te crees que soy gilipollas, que no me iba a enterar.

JOSÉ (JR)

No me agobies, además he hablado con un colega chapista, que lo arregla, así que no problem.

JOSÉ

A mi no me hables con chulerías que soy tu padre

JOSÉ (JR)

Tengo 18 años, ya soy mayorcito para hablar y hacer lo que quiera y como me vuelvas a poner la mano encima (Amenazante)

JOSÉ

¿Qué?

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JOSÉ (JR)

Me voy de casa.

JOSÉ La puerta la tienes abierta. A ver cuánto duras.

José sale de la habitación.

57. DESPACHO MINISTERIO- CASA JOSÉ/ SALÓN.INT/DÍA.

A. DESPACHO MINISTERIO

Manuel tiene un amplio despacho, con muebles de diseño, en el Ministerio de Industria. Las ventanas tienen vistas al Paseo de la Castellana. Viste con un elegante traje y está sentado en una silla giratoria acolchada y forrada de cuero negro. Suena el teléfono.

SECRETARIA (OFF)

(Voz telefónica) Tiene una llamada de un tal José de Sagunto.

MANUEL

Pásemela...José, pero que alegría oírte. ¿Cómo estás?... bien, bien, bien, me alegro... bueno cuéntame.

B. CASA JOSÉ. SALÓN

JOSÉ No sé si estás enterado, pero en los altos hornos la cosa está jodida. Han amenazado con echarnos a la calle. La gente tiene miedo y yo la verdad un poco.

A. DESPACHO MINISTERIO

MANUEL No tienes que justificarte, José, y menos ante mí. No te preocupes por nada. Yo personalmente me ocuparé del caso.

B. CASA JOSÉ. SALÓN

JOSÉ

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Y si puede ser también me gustaría que te ocuparas de mis compañeros, Félix Casas Ruiz, Roberto Espinosa Núñez y Andrés Tapia Jirón.

A. DESPACHO MINISTERIO

MANUEL Eso está hecho.

B. CASA JOSÉ. SALÓN

JOSÉ Gracias Manuel, te lo agradezco.

A. DESPACHO MINISTERIO

MANUEL No tienes nada que agradecerme. Somos amigos, recuerdas. O es que tú no harías lo mismo por mí.

58. MERCADO. INT/DÍA

El mercado está concurrido. Hay gente en todos los puestos. Pilar, como todos los días, hace la compra. Arrastra un carrito con ruedas para evitar cargar con peso. Está frente al mostrador de la carne. Antonia, la dependienta, 50 años, rubia, con el pelo cardado, gafas, y mandil blanco le atiende. Pesa unos filetes.

ANTONIA

Y medio kilo de filetes de ternera. ¿Algo más, Pilar?

PILAR

Nada más, por hoy ya hemos hecho suficiente gasto.

ANTONIA

En total serán 2.500 pesetillas de nada.

Antonia le da por encima del mostrador la compra. Pilar saca el monedero, lo abre y pone cara de extrañeza.

PILAR

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No te lo vas a creer, Antonia, pero no tengo dinero y yo juraría que he metido un billete esta mañana en la cartera.

ANTONIA

No te apures mujer, ya me lo pagarás mañana.

PILAR

¡Qué vergüenza!

ANTONIA Que hay confianza mujer, vete tranquila.

PILAR

Gracias Antonia, mañana vengo y te lo pago.

ANTONIA

No hay prisa.

Pilar coge la compra, la deposita en su carro y se va.

59. DESCAMPADO.EXT/DÍA

Lindante con la parte trasera del instituto de Sagunto hay un gran solar donde yacen varios coches abandonados y donde los niños juegan al fútbol. En el lugar más apartado del mismo, hay una desvencijada y oxidada furgoneta. En su interior hay dos gitanos. Uno con el volante en la mano, dispuesto a arrancar la furgoneta en cualquier momento, y otro, en el asiento de copiloto. Los dos llevan abalorios de oro por todo su cuerpo. José (jr) y un amigo, con aspecto de yonqui, se aproximan a la furgoneta. Tocan el cristal. El segundo de ellos baja la ventanilla, y se asoma.

GITANO

Primo, ¿Cómo va eso?

AMIGO JOSE (JR) Aquí estamos, ¿Qué traes hoy?

GITANO

De lo mejor, me han pasado un caballo del bueno, rico, rico.

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AMIGO JOSE (JR)

¿Por cuánto?

GITANO A ti y a tu amigo por ser de confianza os lo dejo a como siempre, ni patí, ni pa mi, pa que luego digan que si los gitanos esto, que si los gitanos lo otro.

AMIGO JOSE (JR)

Dale el dinero.

José saca un billete de cinco mil del bolsillo.

JOSÉ

Toma.

El gitano les da una bolsa de plástico que contiene heroína. José (jr) y su amigo, cruzan de nuevo el solar. Al otro lado, en la calle contigua al solar camina Pilar, arrastrando el carrito de la compra.

AMIGO JOSE (JR)

Esa que anda por ahí con el carrito, no es tu vieja.

Se esconden detrás de un coche abandonado.

JOSÉ (JR) Anda joder, ¿Qué coño hará por aquí?

AMIGO JOSE (JR)

Igual viene a comprar un poco de caballo al gitano, para que la paella coja sabor.

JOSÉ (JR)

Oye, no te pases ni un pelo con mi madre.

Una pelota de unos niños que juegan al fútbol llega hasta ellos. El amigo la coge.

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NIÑO 1. Tírala.

NIÑO 2

A él no, dámela a mí.

NIÑO 1 Ha sido fuera tuya, saco yo.

NIÑO 2

Aquí no hay fueras.

AMIGO JOSE (JR) El que la coja para él.

El amigo de José (jr) tira la pelota al aire. Los niños corren detrás de ella.

60.COMPLEJO SIDERÚRGICO.INT/DÍA.

José, Félix, Roberto y Andrés y el resto de compañeros están trabajando en las calderas de lo altos hornos. El ruido es ensordecedor. Roberto y Andrés se acercan a Félix y le dicen algo al oído. Félix deja de trabajar. Se acerca a José.

FÉLIX ¡José, José, para, para! (Gritando)

José hace una pausa en su trabajo.

JOSÉ ¿Qué pasa?

FÉLIX

¿Te has enterado de lo que pasa?

JOSÉ No

ANDRÉS

Estamos en la puta calle.

JOSÉ ¿Cómo?

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ROBERTO Han salido las listas. A Félix, a Andrés y a mí, nos echan, tú te quedas.

JOSÉ

Pero eso no puede ser, Hablaré con Manuel, debe de haber sido un error.

ANDRÉS La gente se ha rebotado. Han apedreado los coches de los jefes, están quemando neumáticos y han cortado la carretera. Esto es la guerra.

FÉLIX

¿Y qué hacemos aquí, perdiendo el tiempo? vayamos.

JOSÉ

Calma. No nos precipitemos. Esta tarde llamaré a Manuel y se solucionará todo.

ROBERTO

Ese amigo tuyo es otro vendido...

JOSÉ No, él lo solucionará, pero si abandonamos ahora nuestro puesto de trabajo, sólo complicamos más las cosas. Tened paciencia.

FÉLIX

¡Paciencia!. Llevo toda la vida teniendo paciencia, ya es ahora de que nos oigan.

ANDRÉS

Vámonos, aquí estamos perdiendo el tiempo.

JOSÉ

Pues yo me quedo. Todavía no ha acabado mi turno.

FÉLIX

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No esperaba menos de un gallina como tú.

Félix, Roberto y Andrés toman el camino de salida.

61.CASA JOSÉ.INT/DÍA

José está colgado al teléfono. Tiene cara de pocos amigos.

JOSÉ

Es la tercera vez que llamo. Quiero hablar con Manuel Sánchez Aguirre, dígale que soy José de Sagunto.

SECRETARIA (OFF)

Ya se lo he dicho, está en una reunión, le he dado el recado, en cuanto acabe se pondrá en contacto con usted.

José cuelga el teléfono violentamente.

JOSÉ ¡Mierda!

De inmediato suena de nuevo el teléfono. José se pone al habla.

JOSÉ ¿Manuel?

DIRECTORA (OFF)

No, Buenas tardes, soy la directora del colegio de su hijo, llamaba para preguntarle como se encuentra.

JOSÉ

¿Mi hijo? bien, gracias.

DIRECTORA (OFF) Como lleva una semana sin venir por aquí pensaba...

JOSÉ

¡Cómo! no puede ser, si ahora mismo está en el instituto.

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DIRECTORA (OFF) No.

JOSÉ

Pues si lo he visto salir yo mismo, con la mochila.

DIRECTORA (OFF)

Pues le puedo asegurar por aquí no ha aparecido.

José (jr) entra por la puerta, con la mochila al hombro.

JOSÉ

Gracias, gracias por informar, en cuanto lo vea, la llamo. Gracias.

José (jr) cruza el salón.

JOSÉ

¿De dónde vienes?

JOSÉ (JR) Del instituto.

José padre le mete un bofetón a su hijo, que lo tumba.

JOSÉ

¡Y una mierda!

José (jr) se pasa la mano por la nariz. Comprueba que tiene el labio partido.

JOSÉ (JR)

¡Qué no me pegues!

JOSÉ Sube a tu habitación, estás castigado, sólo saldrás de casa para ir a clase.

Las palabras de José, provocan en su hijo un ataque de histeria, mezclado con risa irónica.

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JOSÉ (JR) (DESAFIANTE) ¿Qué pasa? ¿que con el único que te atreves a enfrentarte es conmigo?

62.DESPACHO MANUEL.INT/DÍA

Manuel habla por teléfono.

MANUEL

Soy Manuel, mi secretaria me ha puesto al corriente... no debo mentirte José, la cosa está difícil. He hecho lo que he podido. Tú no corres ningún peligro. Ahora no hagas ninguna tontería que te pueda perjudicar.

JOSÉ (OFF)

Y mis compañeros, Andrés, Roberto y Félix.

MANUEL

Me ha sido imposible, de verdad.

JOSÉ (OFF) O todos o ninguno, Manuel.

MANUEL

He hecho lo que he podido, te lo prometo.

JOSÉ (OFF)

No te reconozco, cuando quieres hablas como un político.

José corta la comunicación violentamente. Manuel cuelga el teléfono y se queda pensativo con la mirada perdida.

63.CASA JOSÉ- SALÓN.INT/DÍA.

Pilar sirve los platos de la cena. José está atento a los titulares de las noticias del telediario donde hablan de la crisis de la siderurgia.

JOSÉ

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Dile a tu hijo, que baje a cenar, sabe que no me gusta esperar a nadie en la mesa.

Pilar obedece.

64.CASA JOSÉ- HABITACIÓN JOSÉ (JR).INT/DÍA.

Pilar entra en la habitación. La ventana está abierta. No hay rastro de José (jr). Ha dejado una nota sobre la mesilla de noche. Pilar le lee. Dice: “No me busquéis”

PILAR

¡Ahhhhh!, ¡Dios Mío! Se ha ido, se ha ido.

Entra José, rápido como el rayo.

JOSÉ

¿Qué pasa?

PILAR Se ha ido, se ha ido de casa. Lee.

PILAR

¿Y ahora qué vamos a hacer?

JOSÉ Nada, cuando tenga hambre ya volverá.

65. COMPLEJO ALTOS HORNOS-ENTRADA.EXT/DÍA.

Un piquete de trabajadores intenta bloquear la entrada a los altos hornos. La policía, que ha colocado unas vallas para habilitar un pasillo de entrada a los trabajadores que no secundan las huelgas, contiene a duras penas a los manifestantes más radicales. Entre ellos, están Félix, Andrés y Roberto. José que entra a trabajar es abucheado e insultado por sus compañeros. Éste cabizbajo y avergonzado, sin ánimo de mirarles a la cara, no responde a las provocaciones.

MANIFESTANTES

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Esquiroles, Esquiroles, Esquiroles, Esquiroles.

FÉLIX

Esquirol de mierda

66. COMPLEJO ALTOS HORNOS/VESTUARIO. INT/DÍA.

José se está vistiendo. El vestuario parece desierto. Apenas unos pocos trabajadores están allí. Un joven, 25 años, alto, con gafas, vestido de corbata entra al vestuario.

JOVEN

¿José Bergamín?

JOSÉ Sí, Soy yo.

JOVEN

El departamento de personal quiere verle.

67.COMPLEJO ALTOS HORNOS. DESPACHO JEFE.INT/DÍA.

José está sentado frente al director del departamento de personal.

DIRECTOR PERSONAL

José Bergamín, lamentablemente debo comunicarle su baja en la empresa.

JOSÉ

No puede ser, debe tratarse de un error.

68. CASA JOSÉ- SALÓN / DESPACHO MANUEL.INT/DÍA.

A. CASA JOSÉ-SALÓN.

José está en el salón colgado al teléfono. Está enfadado.

JOSÉ

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Oiga señorita, quisiera hablar con el señor Manuel. Soy José Bergamín de Sagunto.

B. DESPACHO SECRETARIA MANUEL.

SECRETARIA

Lo lamento, el señor Manuel no se puede poner. Está de viaje fuera de España, pero dígame de qué se trata y a su regreso se lo comunicaré yo misma.

A. CASA JOSÉ-SALÓN.

JOSÉ No es nada, gracias... entiendo perfectamente.

69. CASA JOSÉ.EXT/NOCHE

Pilar y José están cenando, cuando suena el teléfono. Pilar lo coge.

PILAR

Diga.

ENFERMERA (OFF) Buenas noches, la madre de José Bergamín.

PILAR

Sí, dígame.

ENFERMERA (OFF) Le llamo del hospital de Valencia. Su hijo ha sido internado en urgencias por sobredosis esta noche en nuestro hospital.

70. HOSPITAL.INT/NOCHE

José (Jr) está en una sala de observación. Tiene conectada una máquina de respiración asistida. En una sala contigua, separada por un amplio ventanal, desde el que se puede observar a José (jr), están sus padres, acompañados de un doctor, 35 años, ataviado con su correspondiente bata

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blanca. Pilar con la cara pegada al cristal, mira fijamente a su hijo. Ella y José tienen aspecto cansado.

DOCTOR Ánimo, señora, su hijo está fuera de peligro. Si no hay complicaciones podremos darle el alta la próxima semana.

PILAR

Gracias doctor

DOCTOR Lo que sí que quería es hablar con ustedes más profundamente acerca del alcance de la enfermedad de su hijo.

JOSÉ

Diga.

DOCTOR

Como sabrán, su crisis ha sido provocada por su adicción a la heroína.

José asiente con la cabeza.

DOCTOR

La adicción a las drogas es algo relativamente nuevo en nuestra sociedad pero hemos de asumirlo como una enfermedad más, como el que tiene apendicitis o bronquitis. E igual que todas, necesita un proceso de curación.

PILAR

Díganos, ¿qué debemos hacer?

DOCTOR Lo primero que deben hacer es hablar con su hijo y concienciarlo de que está enfermo. Sólo si él quiere podrá curarse.

JOSÉ

¿Usted cree que se curará?

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DOCTOR

Hay centros de desintoxicación con un alto grado de curaciones. Pero antes quería hablarles de una segunda cuestión más importante.

JOSÉ

Usted dirá.

DOCTOR En los análisis de sangre practicados hemos descubierto que su hijo es seropositivo.

PILAR

¿Qué significa eso?

DOCTOR ¿Han oído hablar del SIDA?

La palabra suena en los oídos de Pilar y José como una sentencia a muerte.

PILAR

¡Ay, Dios Mío!, Ay, ¡Virgen de la Cueva Santa!

DOCTOR

Tranquilícese señora.

JOSÉ Perdone nuestra ignorancia doctor.

José no puede acabar la frase, la última palabra la pronuncia ahogado en lágrimas.

PILAR

Se morirá.

DOCTOR. José es seropositivo. Se ha contagiado del virus, pero eso no significa que ahora mismo esté enfermo. Puede desarrollar la enfermedad de aquí un año, o de aquí 20. Eso no se sabe con

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certeza. Deberá someterse a revisiones periódicas para ver su evolución, pero de verdad, se lo digo la primera enfermedad que debe superar es su adicción a las drogas.

71. SALÓN DE ACTOS.INT/DÍA.

José entra en la reunión sindical. El salón de actos está a rebosar. La abogada del sindicato es Elena, aunque su nombre verdadero es Cristina. Aunque han pasado 19 años, conserva su belleza y el espíritu inconformista de antaño. Únicamente afea su rostro una pequeña cicatriz localizada en el cuello y que recorre su piel hasta la barbilla, Cuando entra José, sus ex-compañeros le ignoran y le niegan el saludo. Sólo Félix educadamente le invita a sentarse en un banco junto a él.

FÉLIX

(Voz baja) Bienvenido, siéntate, está libre.

JOSÉ

(Voz baja) Gracias.

ELENA (CRISTINA) (Arenga)Ya está bien de tomarnos el pelo. Desenmascaremos a un gobierno que se hace pasar por obrero y que está vendido al capital. Que nos devuelvan lo que es nuestro, que nos devuelvan el puño, que nos devuelvan la rosa y que nos devuelvan nuestros trabajos.

Aplausos.

ELENA (CRISTINA)

Ya está bien de pagar los platos rotos siempre los mismos. Pero esta vez no. Altos hornos de Sagunto no se rinde, lucharemos hasta el final.

Vítores y muestras de apoyo al discurso de Elena (Cristina)

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ELENA (CRISTINA) Como sabéis, el próximo viernes, hay convocada una manifestación en Madrid. El sindicato quiere fletar varios autobuses especiales para los que quieran asistir. ¿Cuántos de los que estáis aquí, estaríais dispuestos a ir?

Casi la totalidad de los asistentes alzan la mano.

ELENA (CRISTINA)

Pues entonces lo tiene claro, porque todos unidos, seremos uno, con una sola voz: la voz del obrero, la voz de la verdad, la voz de la justicia.

Los obreros se ponen de pie, unos con el puño levantado, otros aplaudiendo.

72. SALÓN DE ACTOS.INT/DÍA.

Elena (Cristina) recoge sus cosas y José se acerca hasta ella.

JOSÉ

Buenas tardes.

ELENA (CRISTINA) Buenas tardes ¿nos conocemos?

JOSÉ

Es la primera vez que vengo. Me llamo José Bergamín.

ELENA (CRISTINA)

Encantada. Yo soy Cristina Alonso, la delegada del sindicato. Yo también soy nueva, llevo dos meses aquí en Sagunto.

JOSÉ

¿Conocía Sagunto?

ELENA

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Lo conocía de oídas. De joven tenía un amigo que era de por aquí... Bueno, usted dirá

JOSÉ

Quisiera apuntarme al sindicato. Hasta ayer trabajaba en los altos hornos, pero me han echado... Usted pensará que soy un oportunista, y que me uno al sindicato ahora que...

ELENA (CRISTINA)

... Aquí todos somos iguales, cuanto más gente, mejor.

Los sentimientos reprimidos impiden que José se exprese con fluidez. A medida que revela su secreto su voz se torna tenue y temblorosa, su rostro enrojece de dolor y de vergüenza.

JOSÉ

Ya, pero yo quería explicarle el porqué de mi actitud. Necesitaba el trabajo, sabe. No sé como explicárselo. Mi hijo es heroinómano y tiene SIDA, sabe. Tenemos que pagar el internado para que se desintoxique. A la gente le hemos dicho que se ha ido a estudiar fuera, todo menos la verdad. La verdad duele mucho sabe... No sé si usted tiene hijos.

ELENA (CRISTINA)

No.

JOSÉ Pues es muy duro, se lo aseguro yo, saber que un hijo, lo que más quiere uno en este mundo, se va a morir. Ojalá yo pudiera estar bajo tierra, a cambio de que alguien, le devolviera a mi hijo el derecho a vivir. Por eso necesito trabajar sabe, necesito el dinero para que mi hijo se ponga bien.

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José rompe a llorar como un niño sin consuelo.

73. FACHADA MINISTERIO MADRID.EXT/DÍA.

Imágenes de informativos.

Los trabajadores de los Altos hornos, vestidos con el mono de trabajo se manifiestan por las calles de Madrid. La marcha llega hasta las puertas del Ministerio de Industria. Las fuerzas de orden público impiden que los manifestantes traspasen las vallas de protección. Se produce un forcejeo que termina en carga policial y batalla urbana entre policías y manifestantes.

José y otros manifestantes rodean a un policía, lo desarman y lo apalean sin piedad. Rápidamente una decena de policías acude al auxilio de su compañero y reducen a golpe de porra a los agresores. José y el resto de participantes en la revuelta son esposados y conducidos en “lecheras” a la comisaría.

PERIODISTA (OFF)

Esta mañana, trabajadores de los Altos Hornos de Sagunto han participado en una manifestación multitudinaria, que ha recorrido las calles de Madrid en contra del plan de reconversión industrial del gobierno. La marcha ha llegado hasta las puertas del Ministerio de Industria, donde se ha leído un comunicado de protesta. Un centenar de trabajadores ha intentado, en ese momento, traspasar el cordón policial y acceder al edificio. Las fuerzas de orden público han intervenido para disolver a este grupo. Durante el forcejeo, varios trabajadores han desarmado y rodeado a un policía que ha sido víctima de un brutal linchamiento. Un grupo de antidisturbios ha acudido al rescate de su compañero. La reyerta ha acabado con dos policías y tres trabajadores heridos leves. El policía apaleado ha sido internado en el Hospital de la Paz, sufre traumatismo craneoencefálico. Su pronóstico es

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grave, aunque su vida no corre peligro. Siete trabajadores han sido detenidos y puestos a disposición judicial.

74. CALABOZO JEFATURA DE POLICÍA.INT/DÍA.

José está encerrado en un calabozo, junto con él, el resto de los detenidos en la manifestación. Un policía grita su nombre en voz alta.

POLICÍA

¿José Bergamín?

JOSÉ Soy yo.

POLICÍA

Puede salir. Está libre sin cargos.

El policía abre la celda. José abandona el calabozo.

75. VESTÍBULO JEFATURA DE POLICÍA. INT/DÍA.

En el vestíbulo lo espera Manuel. Nada más verlo se levanta y se adelanta hacia él unos pasos con mirada autoritaria y protectora, como la de un padre que acude al rescate de su hijo.

MANUEL

¿Pero no te das cuenta del lío en que te has podido meter?

José pasa de largo, ignorando a su amigo.

MANUEL

Te estoy hablando José.

Cuando José tiene un pie en la calle, se gira hacia Manuel.

JOSÉ

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Yo no hablo con traidores.

José sale de la jefatura de la policía.

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BLOQUE 4

76. NEGRO

Con la pantalla en negro leemos: JOSÉ y MANUEL

Fundido a:

77. LOCAL SINDICAL-DESPACHO ELENA (CRISTINA).INT/DÍA

Estamos en 1992.

José, que ahora tiene 45 años está mirando listas de empleos en un tablón que hay colgado en la antesala del despacho de Elena (Cristina) Del despacho sale un hombre. A continuación entra él. El despacho tiene un aspecto de pequeño caos, papeles aparentemente desordenados por todos lados. Las paredes están empapeladas de carteles del sindicato.

ELENA (CRISTINA)

Buenos días José, siéntate por favor.

JOSÉ

¿Cómo va lo mío?

ELENA (CRISTINA) De momento no hay nada, si te interesa, están buscando gente para un restaurante que han abierto, se requiere experiencia en hostelería.

JOSÉ

Aprendo rápido.

Elena rellena una ficha.

ELENA (CRISTINA)

Está bien, si te parece diremos que tienes 2 años.

JOSÉ

Perfecto ¿Cuándo empiezo?

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ELENA (CRISTINA) Pásate por allí el lunes, aquí tienes la dirección.

Elena (Cristina) le da un papel escrito.

78. HOSPITAL.INT/DÍA.

José (jr) está sometiéndose a una revisión médica. Está conectado a un aparato que le extrae sangre. Ha perdido el pelo y se mueve con dificultad. Con él está una enfermera. Tras el cristal, Pilar observa a su hijo. El Doctor se acerca a ella.

DOCTOR Buenos días Pilar.

PILAR

Doctor. Tiene los resultados de los análisis.

DOCTOR

Los tengo aquí.

PILAR ¿Y qué ha salido?

DOCTOR

Lamentablemente no son muy buenas noticias. José ha sufrido un retroceso desde la última revisión. Está muy bajo de defensas.

PILAR

¿Cuánto calcula usted que le queda de vida, doctor?

La enfermera le retira la aguja a José y le ayuda a sentarse en una silla de ruedas. Luego ambos salen de la sala.

DOCTOR

Eso nunca se sabe Pilar. Es posible que la enfermedad se estanque o que continúe su proceso.

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PILAR

En el peor de los casos.

DOCTOR Todo depende de la voluntad de vivir de cada uno, no sé Pilar, un año, dos, pero no más.

Pilar llora.

PILAR

¿Existe algún otro tratamiento doctor?

DOCTOR

En Estados Unidos se está experimentando con un nuevo fármaco. Dicen que sin ser un antídoto total, es bastante efectivo, alargando la esperanza de vida del paciente de forma espectacular.

PILAR

¿Y qué se puede hacer para que mi hijo se cure allí?

DOCTOR

Es imposible de momento, el fármaco está en período de experimentación, además la curación en Estados Unidos sólo está al alcance del bolsillo de unos pocos. Desgraciadamente la seguridad social no puede acarrear con ese gasto. Pero no se preocupe si es verdaderamente útil, pronto se exportara al resto de los países.

PILAR

Sí, pero igual para cuando venga a España, ya no lo necesitamos.

79. DESPACHO MANUEL-MINISTERIO. INT/DÍA

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Manuel está en su despacho de la Castellana. Suena el teléfono. Al otro lado, la voz servicial de su secretaria.

MANUEL

Dígame.

SECRETARIA (OFF) Tiene una llamada de un periodista, quiere hacerle unas preguntas sobre su relación con una empresa. No me ha querido concretar nada más.

MANUEL

Dígale que estoy reunido.

SECRETARIA De acuerdo.

Manuel se queda pensativo.

80. CASA JOSÉ – SALÓN.INT/DÍA.

Pilar y José están cenando. La incomunicación entre ellos es evidente. Los silencios son continuos y difícilmente rellenables con conversaciones insulsas. En la tele hay un resumen de la jornada de los juegos olímpicos de Barcelona.

PILAR El médico ha dicho que en Estados Unidos se está experimentando con una nueva medicación.

Silencio.

PILAR

Dice que tiene mucho éxito... Silencio.

PILAR ...que los enfermos consiguen alargar bastantes años de su vida.

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Silencio.

PILAR

¿Me estás escuchando José?

JOSÉ Sí Pilar te estoy escuchando.

PILAR

Pues di algo.

JOSÉ ¿Qué quieres que diga?

PILAR

Pues que te alegras.

JOSÉ Pero no te das cuenta de que todo es mentira. Ya no me hago ilusiones y tú tampoco deberías hacértelas, luego es peor. ¿Cuántas veces nos han dicho que había una medicina nueva o que pronto saldría una vacuna? ¿Cuántas? Y luego, ¿qué?

PILAR

Pero esto es diferente, estoy segura. Hazme caso José, el doctor me ha dicho que hay gente que va a Estados Unidos a curarse pero es caro. Pídele dinero a Manuel, seguro que te lo dará.

El nombre Manuel produce el mismo efecto en José que si le hubieran marcado la piel con un hierro incandescente.

JOSÉ

Hasta que nos quede una peseta, en esta casa no se mendiga a nadie. Además el lunes me pongo a trabajar, y se han acabado los problemas.

PILAR

Pero tienes que pedirle el dinero, ir a Estados Unidos es muy caro.

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JOSÉ Ni Estados Unidos, ni hostias. Hay que ser realistas Pilar. Nuestro hijo se va a morir y hay que admitirlo.

Pilar grita desde el fondo de sus entrañas.

PILAR

Hay que tener fe, José, hay que tener fe.

JOSÉ

A estas alturas, yo ya soy mayorcito para creer en milagros.

81. RESTAURANTE PLAYA. EXT/DÍA.

Típico restaurante de playa, plagado de detalles marineros. Ángeles, 35 años, le está enseñando el restaurante a José y explicándole cual será su trabajo.

ÁNGELES Este es el salón, está preparado para 50 personas. Como ves lo hemos decorado con motivos marineros. ¿Te gusta?

JOSÉ

Es muy bonito.

Pasan a la cocina.

ÁNGELES

La cocina, es amplia, tiene de todo, sobre todo, lo que más me gusta es que es lo suficientemente grande, como para trabajar todos a gusto.

José hace un gesto de afirmación

ÁNGELES

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Bueno, y ya está, ahora cuéntame tú, ¿dónde has trabajado?

JOSÉ

¿Cómo?

ÁNGELES Tienes dos años de experiencia ¿verdad? me lo han dicho en el sindicato.

JOSÉ

Lo siento, le mintieron. No sé freír un huevo.

ÁNGELES

Ya… entiendo.

JOSÉ Siento haberle hecho perder el tiempo.

ÁNGELES

No importa.

JOSÉ Lo siento de veras.

ÁNGELES

¿Pero tú sigues queriendo el trabajo?

JOSÉ

Sí.

ÁNGELES Pues es tuyo, se te ve responsable y con ganas de trabajar.

JOSÉ

Gracias.

ÁNGELES Vente mañana a las diez.

82. PLAYA.EXT/DÍA.

José está pescando en la playa, Elena (Cristina) que pasea por allí se acerca hasta donde está José.

100

ELENA (CRISTINA)

Buenas tardes, José

JOSÉ Buenas tardes, ¿qué haces por aquí?

ELENA (CRISTINA

Un paseo, me puedo sentar un ratito contigo a descansar.

JOSÉ

Claro.

Se sienta a su lado

ELENA (CRISTINA)

Está parte de la playa es muy bonita y está muy escondida.

JOSÉ

Ya lo creo, espero que los madrileños no la descubran y la echen a perder. Aquí vengo yo a relajarme y a pescar lo que se puede.

ELENA (CRISTINA)

¿Y pican?

Gesto de contrariedad.

JOSÉ

Esto no es lo que era. De pequeño sí que me iba a casa con la cesta llena. Aquí venía con mi amigo Manuel. Lo tenías que haber conocido, era un fiera de la pesca.

Elena sonríe.

83. PARQUE DE RETIRO/LAGO. EXT/DÍA

Un niño lanza una piedra en el lago del parque del retiro y da tres botes sobre el agua. A su lado disfrutando del sol dominguero está Manuel y su tío Paco, ya muy envejecido.

101

TÍO PACO

¿En qué piensas, Manuel?

MANUEL En el pueblo, cuando éramos pequeños y pescábamos en el mar.

TÍO PACO

Parece que fue ayer, ¿verdad?

MANUEL José y yo imaginábamos una vida mejor, lejos del pueblo.

TÍO PACO

Parece que al menos uno de los dos lo consiguió.

MANUEL

¿Y de qué me ha servido tío?

TÍO PACO ¿Estás descontento con lo que haces? con tu trabajo.

Manuel no contesta.

TÍO PACO ¿Y por qué no lo dejas?

MANUEL

No puedo tío.

TÍO PACO Nadie te obliga. Todos somos libres de hacer lo que queramos con nuestra vida.

Manuel no tiene respuesta.

TÍO PACO

Sólo se vive una vez, Manuel.

84. RESTAURANTE PLAYA. EXT/DÍA.

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José es voluntarioso, pero torpe. Está sirviendo sopa a una familia, un matrimonio de clase media-alta con dos hijos adolescentes, niño y niña. José está concentrado mirando la sopa, intentando mantener el pulso para no derramarla. Cuando llega a la mesa los dos jóvenes paran su reloj-cronómetro.

HIJA

56 segundos. (A su hermano)

HIJO Y sin caérsele el plato. Ha batido el record.

JOSÉ

¿Quieren alguna cosa más?

PADRE Sí, el vino. Ése que le hemos pedido hace media hora.

JOSÉ

Ustedes perdonen, lo traigo inmediatamente.

HIJO

Tres, dos, uno. ¡Ya!. Yo digo que tarda más de 5 minutos

HIJA

3 minutos.

Los dos niños ponen el cronómetro de su reloj en marcha. José da media vuelta en busca del vino.

MADRE

Ya está bien, un poquito de educación.

PADRE

(Bromeando) Yo digo que después de traer la botella se le olvida el abridor.

Todos ríen menos la madre.

85. CAMINO AFUERAS DE SAGUNTO. EXT/DÍA.

103

Pilar y José pasean por un camino a las afueras del pueblo. Pilar empuja la silla de ruedas. Se detienen en una fuente. Hace una tarde otoñal.

PILAR

¿Quieres un poquito de agua, hijo?

JOSÉ (JR) No, no tengo sed, mamá.

Pilar se amorra al caño y bebe. Siguen paseando. Por el camino se encuentran con varios vecinos del pueblo con los que se saludan con la mano.

PILAR

Dicen que esta agua es muy buena para el riñón. Mi madre me mandaba siempre a por agua a esta fuente.

JOSÉ (JR)

Nunca me has contado nada de cuando eras pequeña.

PILAR

¿Qué quieres que te cuente?

JOSÉ (JR) No sé, cuando conociste a Papá.

PILAR

Ay hijo, tienes unas cosas.

JOSÉ (JR) ¿Cómo os enamorasteis?

PILAR

Tu padre era muy tímido, nos mirábamos en la escuela pero él nunca se atrevía a decir nada.

JOSÉ (JR)

¿Y por qué no te lanzabas tú?

PILAR Eran otros tiempos. Estaba mal visto que las mujeres tomaran la iniciativa.

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JOSÉ (JR) Pues yo creo que muchas veces os conviene, así nunca os arriesgáis.

PILAR

Y lo que se sufre, ¿qué?, sobre todo si el chico que quieres es un tontaina como tu padre.

JOSÉ (JR)

Bueno, continúa.

PILAR Finalmente, un día me esperó a la salida de la tienda de mi madre y me dio un papel para que lo leyera. Era una poesía muy bonita dedicada a mí y una invitación para que fuera con él al cine del pueblo.

JOSÉ (JR)

La verdad es que no os imagino a los dos de pequeños y menos a mi padre suspirando por una mujer.

PILAR

Pues créetelo. Además ¿quieres que te cuente una cosa que no sabe nadie?

JOSÉ (JR)

¿Qué?

PILAR Se meó.

JOSÉ (JR)

¡Cómo que se meó!

PILAR Cuándo me invitó al cine y me dio la poesía, yo me acerqué a él y le di un beso en la mejilla. Tenía el pantalón mojado.

A José le entra un ataque de risa.

PILAR

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Hasta después de muchos años, no me reconoció que de los nervios no puedo contenerse.

El ataque de risa de José se mezcla con un repentino ataque de tos. Se pone colorado, le falta el aire para respirar.

PILAR

¡José, José!, hijo, ¿qué te pasa?... ¡Dios mío!

JOSÉ (JR)

Llévame a casa, mamá.

86. CASA JOSÉ-HABITACIÓN JOSÉ (JR).INT/NOCHE.

José está acostado en su cama, arropado hasta la cintura. Tiene la camisa del pijama desabrochada y el pecho descubierto. Está pálido, pero sereno. Respira con dificultad, emitiendo un sonido ronco, gutural, de aire intentando entrar y salir de unos pulmones, obstruidos. El doctor le ausculta. Pilar y José, de pie, al otro lado de la cama, observan el reconocimiento médico.

DOCTOR

Tose.

José provoca una tos forzada. El doctor explora los pulmones.

DOCTOR

Ahora José, cuando te diga, quiero que inspires profundamente, todo lo que puedas. ¿De acuerdo?

JOSÉ (JR) Sí.

DOCTOR

Ahora.

José hincha sus pulmones

DOCTOR

106

Ahora.

José toma aire nuevamente, pero la operación es abortada por un repentino ataque de tos.

87. CASA JOSÉ-SALÓN.INT/NOCHE.

Sentados en la mesa del salón vemos a José, Pilar y el médico. Las caras de los tres reflejan preocupación.

DOCTOR

José sufre una fuerte bronquitis.

JOSÉ ¿Es grave, doctor?

DOCTOR

Tiene las defensas muy bajas.

PILAR ¿Se recuperará?

DOCTOR

Con medicación y mucho reposo sí, pero de ahora en adelante no es aconsejable que salga a la calle. En su situación, un mal aire no es bueno.

JOSÉ

¿Qué podemos hacer nosotros?

DOCTOR Ante todo no decaer en el ánimo, estar unidos y mantener la ilusión, que él no vea que ustedes flaquean.

El doctor coge su maletín y se dirige a la puerta.

DOCTOR

Deben ser fuertes y aguantar lo que venga.

JOSÉ

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¿Y de dónde sacamos las fuerza, doctor, si nuestro hijo se nos muere?

DOCTOR

Esa respuesta la debe encontrar cada uno.

PILAR

Gracias doctor por todo.

DOCTOR A ustedes, es mi trabajo. Si observan cualquier anomalía no duden en llamarme.

PILAR

Gracias.

DOCTOR Adiós.

El doctor sale.

88.TABERNA-ESTANCO BENITO. INT/NOCHE.

José entra nervioso en la taberna de Benito. La taberna está llena, pero no hay nadie conocido.

JOSÉ

Benito, ponme un güisqui.

Benito le sirve el güisqui. José se lo bebe de un trago.

JOSÉ

Ponme otro.

BENITO Lo siento José, hoy no te sirvo más.

JOSÉ

(Agresivo) El cliente soy yo, ponme otra.

BENITO

108

No. Estoy harto de que este pueblo se haya convertido en un pueblo de borrachos.

José se levanta y se dirige a la salida.

89. PLAZA DE LA IGLESIA. EXT/NOCHE.

José camina solitario por las calles. Lleva las solapas del anorak levantadas y las manos en los bolsillos para guarecerse de un viento que ruge con fuerza por las calles desiertas. La noche invita a no salir de casa. José cruza la plaza y entra en la iglesia.

90. IGLESIA.INT/NOCHE.

José entra con temor, avergonzado por el chirrido que la puerta, de madera húmeda y roída por los años, provoca al cerrarse y que resuena en la iglesia como un eco infinito. No tiene costumbre de visitar lugares sacros y se le ve fuera de lugar. La iglesia está vacía. Se arrodilla en unos de los últimos bancos, como si tuviera pudor de avanzar hacia el altar. Mira fijamente a la figura de Jesús crucificado, con los ojos enrojecidos. Farfulla palabras ininteligibles que suenan a rezo y plegaria.

91. CASA JOSÉ-HABITACIÓN MATRIMONIO.INT/NOCHE.

Pilar está tumbada en la cama, tiene los ojos abiertos como platos, no puede dormir. José entra. Se pone el pijama y se acuesta. Tampoco duerme. Ninguno de los dos se mira, ni si quiera se hablan. Los dos solos en su soledad.

92. CASA MANUEL/ DORMITORIO.INT/NOCHE

Suena el teléfono. Se enciende la luz. Estamos en el dormitorio de Manuel. Adormecido contesta.

MANUEL

Dígame.

SECRETARIA (OFF) Señor Manuel.

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MANUEL

Dígame Lourdes.

SECRETARIA (OFF) Perdone que le moleste a estas horas, pero ha pasado algo grave.

MANUEL

Dígame.

SECRETARIA (OFF) Su nombre aparece en primera página de los periódicos de mañana, relacionado con un asunto de corrupción en el ministerio.

MANUEL

Gracias por avisarme.

93. CASA JOSÉ-HABITACIÓN JOSÉ (JR).INT/DÍA.

Pilar entra en el dormitorio de su hijo, se sienta en el borde de la cama. José está incorporado sobre la misma, utilizando la cabecera como respaldo. Sobre sus piernas tiene una bandeja, con la comida del medio día, un plato de sopa, un vaso de agua y algo de fruta. Está comiendo un yogur. Las cortinas están abiertas. Afuera hace un día radiante. Un rayo de luz se cuela en la habitación y la ilumina como si fuera un gran haz de luz celestial, tiñéndola de un color cálido y vivo, que contrasta con la palidez de José. Pilar trata a su hijo con mucho mimo.

PILAR

¿Cómo va esa comida?

JOSÉ (JR) Bien.

PILAR

¿Quieres más agua hijo?

JOSÉ (JR) No.

José toma la última cucharada de yogur y lo deposita en la bandeja.

110

JOSÉ (JR) ...No quiero nada más.

PILAR

¿No te vas a comer la pera?

JOSÉ (JR) No puedo.

PILAR

Pero si la fruta se come sin hambre.

JOSÉ (JR)

Mamá, por favor, no quiero más.

Pilar se levanta y le retira la bandeja, se encamina hacia la puerta.

PILAR

Bueno, bueno. No te obligo.

JOSÉ (JR) Espera mamá.

PILAR

Dime hijo.

JOSÉ (JR) ¿Me puedes hacer un favor?

PILAR

Claro hijo.

JOSÉ (JR) ¿Puedes ir al armario, abrir el último cajón y sacar el cofre que esta en el fondo, debajo de todos los trastos?

Pilar deja la bandeja provisionalmente sobre la mesita y obedece a su hijo.

JOSÉ (JR)

La llave debe estar también por ahí.

111

PILAR Sí ya lo veo.

JOSÉ (JR)

Me lo puedes traer, por favor.

PILAR ¿Qué guardas aquí?

Pilar le da el cofre y se sienta a un lado de la cama, junto a su hijo.

JOSÉ (JR)

Ahora verás.

Abre el cofre y saca un libro viejo con las páginas amarillentas, el lomo y las tapas desconchadas y las puntas redondeadas.

PILAR

¿Qué es esto?

JOSÉ (JR) Es el diario de papá de cuando era pequeño.

José (jr) abre el libro y lee.

JOSÉ (JR)

20 de Marzo de 1958. “Madre, me ha enviado a comprar a la tienda de la tía Manola, pero no estaba ella, estaba Pilar. Manuel dice que en Madrid, todas las chicas son tan guapas o más que Pilar, pero yo no me lo creo”

Pilar escucha ensimismada la lectura del diario, como si su mente se hubiera transportado a otro lugar y a otra época, un tiempo delicioso en el que los recuerdos emergen de su mente, suscitando en ella emociones que creía olvidas.

JOSÉ (JR)

112

26 de Marzo. “Hoy es el día más feliz de mi vida. La he invitado a ir al cine y me ha dicho que sí y luego me ha dado un beso. Yo creo que le gusto. Ojalá pudieras leer estas palabras, pero te prometo, Pilar, que si te casas conmigo te voy a hacer la mujer más feliz del mundo”

Pilar intenta mantener la compostura ante su hijo, pero no puede. Dos lágrimas brotan de sus ojos.

PILAR ¿De dónde lo has sacado?

JOSÉ (JR) Lo encontré una de esas tardes que vosotros no estabais y yo ponía la casa patas arriba, buscando dinero para drogas…Quiero que te lo guardes y se lo des al papá cuando... Sé que me queda poca vida.

PILAR

No, hijo.

JOSÉ (JR) Sí, mamá, y ahora me arrepiento de todo lo que os he hecho sufrir.

PILAR

Tú no has hecho sufrir a nadie, tú eres lo mejor que nos ha pasado a tú padre y a mí.

JOSÉ (JR)

Le escrito en la última página una dedicatoria para que me perdone por todo el daño que le he hecho.

Pilar abraza a su hijo con todas sus fuerzas. José (jr) se cobija en el regazo de su madre buscando su protección.

94. RESTAURANTE PLAYA. EXT/DÍA.

113

José está en la cocina lavando platos. Suena el teléfono del despacho. Escuchamos a Ángeles responder la llamada.

ÁNGELES (OFF)

Restaurante Neptuno, dígame... sí, sí... no se preocupe... ahora mismo se lo digo.

Ángeles entra en la cocina.

ÁNGELES

Era tu mujer, que vayas inmediatamente a casa... es muy urgente.

José sale corriendo del restaurante. Está tan nervioso que no acierta a quitarse el delantal.

95. DESPACHO MINISTERIO.EXT/DÍA

La secretaria de Manuel, le pasa una llamada.

MANUEL

Sí.

SECRETARÍA Tiene una llamada de Pilar de Sagunto.

MANUEL

Pásemela, por favor.

Manuel comienza afable, pero ante el cariz de la noticia que le comunica Pilar, su voz se torna triste.

MANUEL

Pilar, ¡cuánto tiempo!... qué ha pasado... ¡Dios Mío!, Lo siento Pilar, lo siento, pero ¿cómo no me lo habéis dicho antes? Claro que iré.

114

Manuel avisa a su secretaria. Habla decidido.

MANUEL

Por favor, Lourdes ¿puede venir un momento a mi despacho?

Lourdes entra en el despacho. Manuel se levanta de su silla, coge la chaqueta y se dispone a salir del despacho de manera acelerada.

MANUEL

Anule todas las citas de hoy. Debo salir inmediatamente de Madrid.

PILAR

Pero eso es imposible, esta tarde tiene una reunión con el ministro.

MANUEL

A la mierda el ministro, ponga cualquier excusa.

Manuel sale del despacho, Lourdes, su secretaria, se queda con cara de palo.

96. COCHE MANUEL.INT, EXT/DÍA.

Manuel conduce un lujoso BMW. Pasa una indicación de Sagunto 2 Kilómetros. Mira el paisaje con la misma curiosidad que la de un niño, recreándose en todos los detalles como si fuera la primera vez que transita por allí.

97. IGLESIA.INT/DÍA.

Manuel llega al funeral varios minutos tarde. La iglesia está abarrotada. Encuentra un hueco para sentarse en los últimos bancos. A su lado está Elena (Cristina). Manuel la mira. Cree reconocer su cara.

MANUEL

Perdona, ¿nos conocemos?

115

ELENA (CRISTINA)

No, creo que no. Pero ella le sonríe.

98. CEMENTERIO. EXT/DÍA.

Pilar y José reciben el pésame de los vecinos del pueblo. En respetuoso orden y silencio se acercan al matrimonio Félix, Benito, Elena, Andrés, Roberto. Él último es Manuel.

MANUEL

Lo siento Pilar, lo siento de veras.

PILAR

Gracias Manuel, me alegra que hayas podido venir.

Manuel avanza y queda enfrentado cara a cara con José. Los dos amigos se miran a los ojos. La emoción les impide articular palabra. Tras unos segundos se funden en un emotivo abrazo. José, que hasta ese momento no ha perdido la compostura, llora como un niño pequeño en los brazos de Manuel.

99. COCHE MANUEL. INT, EXT/DÍA.

Manuel sale del pueblo dirección Madrid. Detiene el coche en el arcén, sale del mismo y se encamina hacia la playa.

100. PLAYA. EXT/DÍA.

Manuel llega hasta la playa donde solía pescar con José. Se queda embelesado mirando un trocito del paisaje de su infancia. El tiempo parece detenido. El mismo cielo azul, las mismas torres de los altos hornos. Todo parece tal y como lo dejó 30 años atrás. Coge varias piedras y las lanza contra el mar. La última de ellas da tres saltos sobre el agua antes de sumergirse.

116

101. CASA JOSÉ- COMEDOR. INT/NOCHE.

José está ojeando un álbum de fotos de su hijo. Pilar entra en el salón. El luto la envejece 10 años. Lleva una maleta en la mano y el diario de José en la otra.

PILAR Me voy José.

José permanece en silencio.

PILAR Me quedaré unos días en casa de mi hermano... necesito estar sola.

Pilar se acerca a José y deja su viejo diario sobre la mesa.

PILAR

¿Te acuerdas? Es tu diario. José lo encontró perdido en casa y me pidió que te lo diera. Lee la última página. Te ha escrito una cosa. Quería despedirse a su manera.

José coge el diario con precaución como si tuviera miedo de enfrentarse con sus recuerdos. Lee la última página.

JOSÉ. JR (OFF)

Padre, perdóname por todo lo que te he hecho sufrir, perdóname por no haberme atrevido a decírtelo a la cara. Lo único que deseo es que hagas realidad tus sueños. Hazlo por mí. Por favor, escribe muchas, muchas novelas de aventuras. Desde donde esté te aseguro que voy a ser tu más fiel lector.

José llora en silencio. Pilar hace ademán de marcharse. José le estrecha la mano, con la misma ternura que 34 años atrás, cuando en las fiestas del pueblo proyectaron El hombre tranquilo y él se atrevió a tocarla.

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JOSÉ No te vayas.

Pilar separa su mano. Visiblemente afectada coge de nuevo su maleta y se marcha de la casa.

JOSÉ (OFF)

Era una mañana fría de Marzo de 1955 en Puerto de Sagunto. Era primavera y los niños, entre gritos y alborozos corrían hacia la escuela, anunciando que un nuevo día empezaba a ser vivido…

102. ENTRADA ESCUELAS.EXT/DÍA.

Se repite la primera secuencia de la película. Estamos en 1955. Los niños entran correteando a la escuela.

(CONTINUACIÓN OFF JOSÉ) La mayoría corría para no llegar tarde y evitar la reprimenda de Don Luís, el profesor, pero yo siempre corría porque tenía frío. No sé porque mi madre se empeñaba en vestirme siempre de la misma manera, pantalón corto y calcetines que yo me subía hasta donde daba de sí la goma. Recuerdo como si fuera hoy el vaho de mi respiración y las venas marcadas en mis piernas moradas... Así comienza mi historia, estas son mis palabras, las palabras de la memoria.

Fin.

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E-GUIONSprêt-à-�lmer

E-GUIONS és un projecte de l’àrea de Foment i Promoció de l’IVAC per a la difusió dels guions que han rebut l’ajuda a desenrotllament de guió de l’Institut

des de 2004. Els guions publicats han passat ja per diversos filtres de lectors professionals que han considerat que estes idees mereixen

ser portades a la gran pantalla.