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Características históricas y arqueológicas de las murallas y el palacio arzobispalEl recinto amurallado medieval del alcázar de Alcalá, convertido en palacio arzo-bispal a partir del siglo XVI, se encuentra situado en el cuadrante noroccidental del casco histórico de Alcalá la Vieja. Se trata de una gran superficie de unos 50.000 m2, que ha acogido una intensa historia de más de 800 años durante los que este lugar ha sido una fortaleza medieval, un palacio renacentista, el Archivo General de la Administración y, en todo caso, un espacio simbólico de la rica historia de Alcalá.

En 1118 Bernardo de Sedirac conquistaba de forma definitiva la ciudad is-lámica de Qala’t abd al Salam (con el tiempo renombrada como Alcalá de He-nares), situada en los cerros que dominaban el río Henares. Alfonso VII dona entonces la recién conquistada villa a los arzobispos de Toledo en calidad de señorío, y desde ese momento se potencia un barrio mozárabe, ubicado en la llanura del río y desarrollado alrededor de una serie de edificios cristianos tardoantiguos, un martyrium y una basílica vinculados al culto de los mártires complutenses Justo y Pastor. Uno de los elementos urbanos más importantes de ese núcleo, denominado primeramente burgo de Santiuste, y después Alca-lá de Henares, va a ser la fortaleza de los arzobispos. A partir del siglo XIII, el arzobispo Ximénez de Rada (1209-1247) construye unas “casas arzobispales”, que serán el germen de un importante alcázar constituido por la fortaleza y su recinto amurallado, que a su vez encierra un albácar, gran espacio abierto don-de la población civil se refugia en caso de ataque. Nuevos arzobispos (fig. 1) refuerzan y engrandecen la fortificación, entre otros Pedro Tenorio (1377-1399), que reforma o construye todo el lienzo Sur, el que se ofrecía a la villa, Carrillo

1 Universidad Autónoma de Madrid2 Ayuntamiento de Alcalá - ICCA/UAM

El Antiquarium y otras actuaciones para la valorización del Alcázar y Palacio de los Arzobispos de Toledo

en Alcalá de Henares

ANA LUCÍA SÁNCHEZ MONTES1 y SEBASTIÁN RASCÓN MARQUÉS2

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de Acuña (1446-1482) y Pedro González de Mendoza (1482-1495). Con Carrillo prácticamente culmina la configuración militar de este espacio, pues desarro-lló una considerable actividad militar y política en contra de la reina Isabel de Castilla, y su fracaso implicó prácticamente la desaparición de la función mili-tar de nuestro recinto amurallado. Por otro lado, las fases más antiguas de las construcciones militares que la arqueología ha podido recuperar se fechan en el siglo XIV, y la fisonomía del recinto antes de Tenorio permanece oscura para la investigación (1).

Fig. 1.- Hipótesis de evolución histórica del alcázar y palacio de los arzobispos; arriba, hacia 1390; abajo, hacia 1534.

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Los siguientes arzobispos que intervengan lo harán inmersos en la nueva y moderna cultura del Renacimiento, y su objetivo será reconvertir la vieja fortale-za en un moderno palacio renacentista urbano. Una transformación, de castillo a palacio, que principalmente se debe a Alonso de Fonseca (1524-1534) y Juan Pardo Tavera (1534-1545).

Durante el siglo XIX el palacio conoció un progresivo declive, parejo al dete-rioro general de la ciudad de Alcalá, y sólo paliado por su reconversión en Archi-vo General Central del Reino, en 1858. Un incendio lo asoló en 1939, sufriendo un severo expolio en los años inmediatos (2).

Planteamiento de la valorizaciónLa acción que presentamos se enmarca en una compleja operación cuyo obje-tivo ha sido la restauración integral de las murallas, su conocimiento histórico y su valorización, así como una primera valorización del palacio arzobispal (fig.2). Debe aclararse que sin embargo hasta la fecha la ciudad no tiene definidos los usos concretos, ni planes específicos determinados y de conjunto, para el total de este complejo espacio inserto en el casco histórico.

Planteamiento generalEl Antiquarium y paseo arqueológico de las murallas y del palacio arzobispal se concibieron como un mecanismo de difusión del magnífico espacio histórico en que se encuentran, sirviendo a la vez para presentar al público las importantes restauraciones acometidas entre 2006 y 2011, así como algunos de los magnífi-cos materiales decorativos procedentes de las ruinas del palacio. El Antiquarium se concentra en la zona Sur de este espacio, y es desde aquí donde se explican estos lugares arqueológicos y las labores de restauración a las que se les ha sometido.

Otras acciones en la murallaEl elemento más significativo en esta operación ha sido el Antiquarium y paseo arqueológico, pero el recinto amurallado ha sido objeto de significativas inter-venciones, y en paralelo a esta actuación el Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha realizado entre 2006 y 2011 otra serie de acciones muy relevantes. Así, la res-tauración general de la muralla entre los torreones III y XVI, con una importante aportación de los fondos FEDER, entre 2006 y 2009 (DE LA HOZ, 2010); también la recuperación de la puerta de Burgos en 2009 (GONZÁLEZ SÁNCHEZ, 2010); diversas excavaciones y prospecciones arqueológicas dentro del recinto; y la recuperación y catalogación de elementos constructivos desplazados del an-tiguo palacio. Íntimamente ligada con esta restauración, desde la concejalía de Patrimonio Histórico Artístico se realizó el Centro de Interpretación del Burgo de Santiuste, abierto al público el 3 de marzo de 2010 en la Calle Cardenal Sando-val y Rojas, frente a la torre XIV de la muralla.

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El AntiquariumEl Antiquarium y paseo arqueológico se desarrolla en el lienzo sur de la muralla, entre las torres XIV y XVI. En esta zona del recinto amurallado podemos apreciar interiormente una intervención que realizó el Ministerio de Cultura, según el pro-yecto de Ramón Engel, en el último tercio del siglo XX, dando como resultado la recuperación de las torres XV y XVI y la construcción en el lugar de los lienzos originales de una serie de arcadas de ladrillo, ajenas a la obra medieval, o a cualquier otro elemento histórico; aquí es donde se proyecta nuestra actuación, pues estas arcadas, muy cuestionables desde el punto de vista de la restau-ración, sin embargo sí que eran muy aptas para un uso museográfico. Debe decirse que a las dificultades habituales en este tipo de intervenciones se suma que no todo el recinto es municipal, sino que una parte importante pertenece al Obispado de Madrid-Alcalá, que lo mantiene en uso.

Así, la actuación del Antiquarium propiamente dicha se llevó a cabo en el marco de la colaboración del Ayuntamiento de Alcalá y la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid (3). Se planteó sobre los siguientes elementos:

— La existencia de un espacio arquitectónico de difícil adaptación: una restau-ración del lienzo Sur de la muralla, realizada en los años 80.

— Los datos aportados por diversas excavaciones y prospecciones arqueológicas.

— La existencia de importantes elementos arquitectónicos desplazados del an-tiguo palacio, que el Ayuntamiento a través de su Servicio de Arqueología ha ido recuperando y cuidando después del incendio de 1939 y posterior expolio de los años 40, y que se han procesado para su recuperación y ca-talogación.

— La recuperación de las murallas medievales propiamente dichas, concreta-mente del adarve entre las torres XIV y XVI, y el interior de las torres XIV, XV y XVI.  

El Antiquarium. Recorrido general El recorrido (SÁNCHEZ MONTES, 2011) parte frente al Centro de Interpretación del Burgo de Santiuste, y accede al recinto amurallado por la entrada histórica desde la villa, la puerta de la torre XIV. A continuación, y recorriendo el lienzo hacia el Este, se visita el Antiquarium y los restos arqueológicos asociados. La cartelería incorpora información muy precisa sobre el edificio, su evolución histórica y arquitectónica: por ejemplo, los aspectos constructivos. También, y dado que existe documentación fotográfica de los últimos años de este monu-

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mento, esta se ha incorporado como información en los diversos carteles, muy especialmente en los que explican el Antiquarium propiamente dicho.

La torre XIV tiene el excepcional interés de conservar una buena parte de su estructura, y especialmente su interior, tal y como era tras su construcción a finales del siglo XIV. El relleno que la colmataba desde el siglo XIX tenía oculta esta pequeña joya de la arquitectura militar medieval: una construcción sobre zócalo de sillares, por encima de los que se emplean casetones de mamposte-ría encintados con ladrillo, revocándose el conjunto. También se conservan los mecanismos de la puerta, el pavimento, la buharda, incluso la bóveda con los enlucidos originales.

De las zonas excavadas junto al lienzo sur se ha optado por presentar al pú-blico sólo una de ellas: la que se encuentra junto a la entrada de la torre XIV. Se trata de restos de dos edificaciones que debían constituir un cuerpo de guardia para controlar el acceso desde la villa.

El Antiquarium propiamente dicho está compuesto por tres unidades expo-sitivas, cada una de las cuales expone de forma comprensible decoraciones arquitectónicas significativas. Cada una de ellas se emplaza en uno de los arcos construidos en el lienzo Sur de la muralla: Patio de Armas, Galerías del Ave Ma-ría y del Aleluya, Patio de Columnas o Fonseca.

El Patio de ArmasSe localizaba en el extremo Suroriental del conjunto. Originalmente era un gran patio con cuatro crujías cubiertas, de las que nos quedan la Norte y la Este.

Fig. 2.- Vista aérea del palacio Arzobispal y sus murallas, mostrando los principales espacios referidos en el texto: 1, torre XIV. 2, Antiquarium. 3, torre XVI. 4, albácar. 5, Palacio Arzobispal. 6, Centro de Interpretación del Burgo de Santiuste.

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Como el resto del Palacio, responde al modelo de arquitectura renacentista cas-tellana donde los ornamentos se concentran en los aleros, huecos y galerías.

La fachada de la crujía Norte es de gran sencillez, formada por tres pisos, dos plantas más la galería o logia superior. Sobre una base de sillares de piedra, se levanta el alzado de mampostería con la decoración limitada a los vanos, puerta central y ventanas, agrupadas estas en grupos de tres en tres, y con un balcón central en la planta primera. Adinteladas las de la planta inferior y con arcos de medio punto las de la superior, la decoración se limitaba a un copete con medallones con cabezas de gran expresividad. Como decoración apare-cen además los escudos del Arzobispo Fonseca (1524-1534), artífice principal de la configuración definitiva, sobre la puerta de acceso y laterales de planta primera, más un barroco escudo del Cardenal Luis Antonio Jaime de Borbón (1735-1754).

En la crujía Este se localizó el salón de Concilios con ricos artesonados res-taurados por Manuel Laredo en el siglo XIX. En su exterior y también en estas fechas, se colocaron un antepecho calado y quimeras de piedra, perdidas tras el incendio de 1939 y restituidas de nuevo en 1995. De aquellas reformas es también la verja de hierro fundido del Sur del patio.

Fig. 3.- Antiquarium. Vista general.

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Galerías del Ave María y del Aleluya

Galería del Ave MaríaLocalizada entre la crujía Sur del patio de Columnas al cual se adosa, y el lla-mado jardín del Vicario, hacia donde se abría. Se trataba de una galería de dos plantas con arcos de medio punto que apoyan sobre pilares cuadrangulares en la planta baja, y arcos rebajados en la primera con capiteles con decoración fantástica y vegetal y escudos en las enjutas. Fue construida entre los siglos XIII y XIV, adquiriendo su principal configuración de galería abierta en el siglo XVI con el arzobispo Alonso de Fonseca (1524-1534), el cual dejó su impronta en los escudos que decoraban la primera planta. La última y definitiva trans-formación, antes de su destrucción, se debió al arzobispo Pascual de Aragón (1666-1677) y fue llevada a cabo por Jacobo A. Sopeña, arquitecto mayor de la diócesis toledana que la terminó en 1675. En esta intervención se tapió la galería de la primera planta, se sustituyeron las columnas de la planta baja por pilares cuadrangulares y se rehicieron las torres colocándoles chapiteles de es-tilo herreriano, entre otras reformas, y utilizándose ampliamente el granito como material constructivo.

Fig. 4.- Antiquarium. Espacio expositivo del Patio de Armas y piezas descontextualizadas

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Galería del AleluyaLocalizada al Norte de la crujía donde se ubicaba la Contaduría Mayor de Ren-tas. Se trataba de una galería de dos plantas con arcos de medio punto apoya-dos sobre columnas. Destaca por la rica y delicada decoración de los pedes-tales de las columnas, la celosía calada de la logia superior, los capiteles y los escudos del arzobispo Fonseca y los medallones con cabezas casi de bulto redondo ubicados en las enjutas de los arcos. Se construyó en la primera mitad del siglo XVI, y parece que se destruyó en el último cuarto del siglo XIX.

Patio de Columnas o FonsecaSe localizaba al Suroeste del palacio y estaba formado por un espacio interior cuadrangular de dos alturas y cuatro crujías, en el que se encuentran los ele-mentos imprescindibles de un palacio urbano renacentista: salas espaciosas, escalera amplia y logias que se abrían a los jardines, de la Fuente al Norte y del Vicario al Sur.

Es esta la mejor obra del genial arquitecto y escultor español Alonso de Co-varrubias (1488-1570), destacando en él la ornamentación plateresca, la inferior

Fig. 5.- La galería del Ave María desde el Jardín del Vicario, en una foto de Max Junghändel, de la década de 1880 y conservada en la Biblioteca Nacional.

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Fig. 6.- Antiquarium. Espacio expositivo de las galerías del Ave María y el Aleluya.

Fig. 7.- Antiquarium. Espacio expositivo del patio de Columnas o de Fonseca.

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con arcos de medio punto sobre treinta y cuatro columnas, con capiteles vege-tales y grutescos de tipo florentino, y los escudos del arzobispo Fonseca en las enjutas. El piso superior era arquitrabado con friso decorado con medallones en los que se tallan cabezas y flores sobre capiteles y zapatas decoradas, y un antepecho que reproduce una celosía calada con decoración fitomórfica.

En el conjunto destacaba la llamada escalera de Covarrubias, inspirada en la de Santa Cruz de Toledo, caracterizada por la ostentosa decoración plateres-ca, que se localizaba en los arcos escarzanos de planta baja y primera, en las zancas que sujetaban los balaustres escorzados y los peldaños y, sobre todo, en los sillares, todos diferentes, y en los que se pueden ver representaciones fantásticas y mitológicas, todo ello con un ritmo vivo y refinado. 

Aunque construido entre los siglos XIII y XIV, adquiere su configuración defi-nitiva entre 1524 y 1545. Será objeto de reformas en el siglo XIX, se sustituyen balaustres y escalones de la escalera, se arreglan columnas, y la parte elevada y saliente que compone el entablamento se retalla convirtiéndolo en un tipo dórico denticular.

Notas del texto

1 Para la evolución de la ciudad desde el Complutum romano al burgo de Santiuste, pasando por la ciudad islámica de Qala’t abd al Salam, ver SÁNCHEZ MONTES, RASCÓN MARQUÉS y BONOR VILLAREJO, 2011.

2 Para el siglo XVI y sucesivos, ver SÁNCHEZ MONTES, 2011 y VVAA, 1996. Para la restauración del XIX y el expolio, LLULL, 2007.

Fig. 8.- Patio de Columnas. Detalle: zanca decorada con grutescos de la escalera de Honor o de Covarrubias.

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3 La dirección de la acción museográfica del Antiquarium corrió a cargo de Ana Lucía Sánchez Montes. Debe destacarse también la participación de otros profesionales en estas acciones y las inmediatamente relacionadas, del Ayuntamiento (Sebastián Rascón, Cristóbal Vallhonrat, José Vicente Pérez, José Luis Vigara ), de la DGPH (Inmaculada Rus, Luis Serrano, Concha Alcalde) y profesionales libres (Juan de Dios de la Hoz). Las actuaciones arqueológicas y museográficas del Antiquarium han sido ejecutadas por el Taller de Empleo Murallas de Alcalá y la empresa Monjes Horche.

BIBLIOGRAFÍA

DE LA HOZ MARTÍNEZ, J. de D. (2010): El recinto amurallado de Alcalá de He-nares. Torreones III al XVI. Restaurando el Patrimonio Histórico de Alcalá, vol. 5. Servicio de Arqueología. Ayuntamiento de Alcalá de Henares. Alcalá de Henares.

GONZÁLEZ SÁNCHEZ, J. L. (2010): Restauración de la Puerta de Burgos. Recinto amu-rallado del Palacio Arzobispal. Restaurando el Patrimonio Histórico de Alcalá, vol. 6. Servicio de Arqueología. Ayuntamiento de Alcalá de Henares. Alcalá de Henares.

LLULL PEÑALBA, J. (2007): “La restauración del Palacio Arzobispal de Alcalá de Henares en el siglo XIX”. Anuario del Departamento de Historia y Teoría del Arte, 19. Univer-sidad Autónoma de Madrid, pp. 133-158.

SÁNCHEZ MONTES, A.L. (2011): “Antiquarium y Paseo Arqueológico del Palacio Arzo-bispal”. En Centro de Interpretación del Burgo de Santiuste y Antiquarium del Pala-cio Arzobispal, pp. 75-107. Guías Arqueológicas de Alcalá de Henares, 2. Ministerio de Cultura. Ayuntamiento de Alcalá de Henares. Alcalá de Henares.

SÁNCHEZ MONTES, A.L., RASCÓN MARQUÉS, S. y BONOR VILLAREJO, J.L. (2011): Centro de Interpretación del Burgo de Santiuste y Antiquarium del Palacio Arzobis-pal. Guías Arqueológicas de Alcalá de Henares, 2. Ministerio de Cultura. Ayunta-miento de Alcalá de Henares. Alcalá de Henares.