EL DUENDE TRAVIESO

Cuenta una antigua leyenda que existió en un cierto tiempo una aldea de duendes y pequeñas hadas

Todo transcurría muy tranquilamente, pero…..

Dentro de la pequeña aldea vivía un duende tan travieso, tan travieso, que se dedicaba a molestar a sus vecinos desapareciendo todos sus materiales de trabajo

Cansados ya de las constantes burlas del duende, los pobladores fueron a a hablar con el jefe de la aldea.

–Ese duende nos tiene cansados, no podemos trabajar en paz. Estamos hartos. Tienes que hacer algo para que cesen sus travesuras que no nos parecen nada graciosas- dijeron todos los habitantes de la aldea.

Yo lo puedo encerrar, pero no puedo controlar sus hechizos. Sin embargo, mi amigo Lulac, el gran hechicero del bosque tal vez nos pueda ayudar.

Sinux ya no sabía que hacer y le relato toda la historia al hechicero. Lamentablemente yo no tengo ninguna magia para los duendes bromistas y holgazanes, pero mi amiga danzarina tal vez me pueda ayudar.

El pequeño duende que había escuchado toda la conversación de Sinux y el hechicero decidió huir de la aldea y después de una gran travesía llego a un bello valle en donde habitaba un Unicornio y un cabaliito volador

Linux se había encariñado tanto con el caballito volador que decidió mudarse en compañía de su nuevo amigo

Lulac, quién ya sabía de la huída de Linux fue a buscar a su amiga danzarina.

– Hola danzarina, necesito tu ayuda. Hay un duende molestando a toda una población y utiliza una magia que yo desconozco. Tal vez tu puedas ayudarme –

- Ese debe ser el duende que se mudo al valle del unicornio. Ya sé que vamos hacer, vamos a buscarlo

Después de caminar una gran jornada llegaron a un gran valle. Ya casi iba a atardecer.

– Creo, danzarina que nos perdimos y ahora, ¿Qué hacemos?

Hola amigos, yo me llamo luz plateada y soy el protector de este gran valle. ¿a dónde se dirigen ? iParecen Perdidos!

Vamos en busca del valle del unicornio, pero al parecer perdimos el rumbo- dijo el mago con preocupación.

–No están muy lejos, el valle del unicornio se encuentra detrás de esa montaña, pero tengan cuidado,allí habita un fiero dragón- dijo la pequeña hada.

iMenos mal que era nada mas que un dragón, es una familia de dragones ! Y mi varita mágica no tiene ya magia porque se me mojó en el último río que atravesamos-dijo el hechicero ya muy asustado.

Y, de repente.... Allí estaba cerca de los dragones una extraña llama y además hablaba.

–¿Quienes son uds? ¿Y qué vienen hacer a mi valle ? Les preguntó con curiosidad. Me llamo candelita y yo vivo con mis amigos los dragones, tenemos algo en común a nosotros nos gusta escupir fuego, así que no nos molesten

-No seas tan odioso Candelita, no te das cuenta que están perdidos -dijo una pequeña hada que volaba en su mariposa.

Esta bien, es que no me gusta los visitantes que vienen a este valle, asustan a mis pobres dragones- respondió candelita a regañadientes. Si están perdidos, suban por la montaña y por detrás de la colina vive un pequeño duende con su caballito volador. Y por cierto no quiero saber nada de él, me desapareció uno de mis dragones, solo por que se encontraba cerca del valle del unicornio.

Entonces, así fue como Danzarina y el hechicero llegaron al valle del unicornio. Entonces Danzarina le hecho un gran hechizo al pequeño caballito volador y lo desaparecio.

-Dónde esta mi amiguito? ¿Que le han hecho? dijo furioso Desapareciendo y apareciendo

– Eso te pasa por molestar tanto a tus vecinos- dijo Danzarina. Si quieres volver a ver a tu amigo tienes que disculparte con tus vecinos, y si es que te perdonan.

-Esta bien – dijo a regañadientes, pensando que era la única manera de recobrar a su amigo.

-Como tu poblado esta muy lejos nos iremos con el unicornio, quién podía desplazarse a grandes velocidades- dijo el buen hechicero

Y así fue como llegaron a la aldea

–¿Qué haces tu por aquí? iVéte!, no te queremos aquí- dijeron con disgusto todos los duendes a Linux.

-Sé que he sido muy desconsiderado y estoy dispuesto a reparar el daño que he hecho

-Tendrás que trabajar conmigo muy duro en la agricultura y dar toda la cosecha que produzcas a todos tus vecinos si quieres seguir viviendo aquí- dijo el mas viejo de la aldea

-Estoy de acuerdo- pensando en su amigo que dejo en las lejanas tierras.

Y fue así como Linux no solo se convirtió en el mejor agricultor productor de hortalizas y frutas de toda la comarca sino que disfruto también de la amistad y compañía de su pequeño amiguito. Y colorín colorado, esta historia ha terminado