El Embrion en Nos Otros

12 ATHANOR, 89 (SEPT. - OCT. 2011) 13ATHANOR, 89 (SEPT. - OCT. 2011)

Los neurofilsofos modernos cometen el siguiente error fi-losfico y metodolgico: la realidad primaria en la que vi-vimos no es la que pensamos o podemos observar, sino la que experimentamos.

por Jaap van der Wal*

a r t c u l o . C i e n c i a y C o n c i e n c i a

ELEMBRIN ENNOSOTROSUna bsqueda fenomenolgicadel Alma y la Consciencia en elcuerpo prenatal

ELEMBRIN ENNOSOTROSUna bsqueda fenomenolgicadel Alma y la Consciencia en elcuerpo prenatal

12 ATHANOR, 89 (SEPT. - OCT. 2011)

Un enfoque evolucio-nado de la embriolo-ga que dignifica al embrin frente a la

postura cientfica do-minante, que lo relega

a una especie de es-tadio prehumano por no poseer una mente

funcional. Frente a ello Jaap van der Wal

defiende que el em-brin es ya un ser, un

ser humano en una determinada etapa

evolutiva, y merece que nos aproximemos a l

como tal.

El vino se embriag con nosotros, y no al revs.El cuerpo se desarroll a partir de nosotros;no nosotros a partir del cuerpo.Somos abejas y nuestros cuerpos son los panales.Hemos hecho el cuerpo, clula a clula.

Rumi (1207 - 1273)

El cuerpo perdido

En las ltimas dos dcadas, un tsunami de pseu-dodualismo y materialismo ha ido floreciendo en el campo de la biologa, la psicologa y la filoso-fa. resumiendo, el evangelio de la neurofisiolo-ga moderna dicta que es nuestro cerebro el que domina nuestra mente. para los modernos filso-fos del cerebro todo lo que sentimos, pensamos o hacemos es cerebral. En este paradigma, todo aquello que seamos capaces de experimentar en tanto actividad consciente como inconsciente de nuestra mente o alma es atribuido y reducido a nada ms que la actividad del hipocampo, a reas corticales del cerebro, etc. Los neurofilsofos afirman que el dualismo cartesiano del cuerpo y la mente queda invalidado por la evidencia de que el cerebro es el sustrato indiscutible de nuestra consciencia, nuestra habla y nuestra mente.

sin embargo, implcitamente y sin ningn tipo de cautela se introduce un nuevo falso dualismo en forma de cuerpo-cerebro. El cerebro es un rga-no especial en el cuerpo; all tiene lugar nuestra consciencia y es ejecutada por una neuromaqui-naria. El neurocientfico holands swaab asevera que el cuerpo slo sirve para tres fines: alimentar, mover y reproducir nuestros cerebros. El mensa-je es que nosotros somos nuestros cerebros: de-bes considerar que todo lo que sientas o experi-mentes como una realidad no-corporal o impon-derable en tu cabeza o en tu cuerpo (por ejemplo, un dolor en tu dedo) son ilusiones producidas por el cerebro.

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Soy un embrilogo en busca del espritu, de un principio activo detrs de los rganos formados y del cuerpo. Busco el principio en acto (el espritu) que intenta realizarse a s mismo mediante y a travs de la dimensin ex acto del cuerpo.

El alma perdida

Hay una alternativa al materialismo puro y reduccio-nista, y es ser fenomenlogo. no adoptes la postu-ra del observador cientfico (un mero espectador); adopta en cambio la postura primaria del participante y toma por verdadero aquello que sientes y experi-mentas dentro y fuera de tu cuerpo. Esa es tu realidad primaria. El enfoque fenomenolgico de esta forma no solo supera sino que tambin incluye a la realidad virtual y secundaria de los factores cerebrales.

Los neurofilsofos modernos cometen el siguiente error filosfico y metodolgico: la realidad primaria en la que vivimos no es la que pensamos o podemos ob-servar mediante toda la gama de instrumentos de que disponemos para el anlisis del espectador; la realidad primaria es la realidad que experimentamos. La cons-ciencia y el alma son realidades experimentadas. nadie puede medir lo que percibes cuando realizas experi-mentos mentales bajo la observacin de un cientfico. l/Ella registra la condicin de un fenmeno y no el fenmeno en s mismo. no puede siquiera registrarlo, porque slo t eres quien sabe, quien se da cuenta de lo que es pensar esos pensamientos, vivir en ese cuer-po en particular, experimentar esa consciencia dada. En la realidad del cuerpo que vives, mente y cuerpo, espritu y materia, nunca se separan. Establecer una separacin entre la mente y el cuerpo, el espritu y la materia, como una reduccin metodolgica y prctica, es un paso en general aceptable. pero negar sistem-ticamente la realidad de la mente y concebir que esta es una ilusin creada por un rgano del mismo cuerpo (el cerebro) resulta un accidente filosfico intolerable y fatal, una reduccin de nuestra realidad.

No tenemos un alma;somos un alma

Los neurofisilogos en realidad estudian el sustrato del alma, de la consciencia; pero cada vez que encuen-tras un fenmeno anatmico, fisiolgico o gentico (el cuerpo) aparentemente conectado y asociado con una cierta actividad mental (el alma) esto no significa que hayas encontrado el ltimo fenmeno en s. apa-rentemente, la actividad cerebral es una condicin ne-cesaria pero no suficiente para una cualidad como la consciencia. incluso es arriesgado considerar la con-dicin de una determinada materia (cuerpo, cerebro, gen) por la materia en s (alma, mente, rasgo).

Hoy en da prevalece en Gentica una visin reduc-cionista similar. como bilogo, nunca he percibido

los genes (me refiero al concepto moderno de gen como una estructura de adn formulada) como prin-cipio activo y causativo en un organismo viviente. s, los genes juegan un papel importante en el aspecto fenotpico de los organismos; esto es una condicin necesaria (aparentemente), aunque no suficiente. Los organismos tienen determinados rasgos y pro-piedades, o bien estn enfermos, y yo nunca he vis-to un gen enfermo o con una determinada propie-dad como el ser capaz de moverse o digerir. pero sin duda casi todo el mundo tiende a creer en el concepto de que los genes son principios activos y engendran organismos. como embrilogo (fenome-nolgico), debo rechazar completamente esa visin. solo en condiciones patolgicamente anormales y manipuladas experimentalmente (por supuesto en el proceso evolutivo de cambios mutacionales en el genoma) parece ser la desviacin del patrn normal lo que causa el nuevo fenotipo o fenmeno. sin em-bargo, en la situacin normal entera e integrada del organismo en funcionamiento no son los genes los que causan los fenmenos sino que el propio orga-nismo realiza sus actividades biolgicas y funciones que lo caracterizan (se mueve, digiere, enferma).

La gentica moderna y la neuropsicologa intentan convencernos de lo contrario: pensar es sinnimo de actividad cerebral, la herencia es sinnimo de gen, la memoria es ni ms ni menos que el proceso del hi-pocampo. conceptos como el proceso y la estructu-ra, el fenmeno y la condicin se confunden aqu. nos volvimos cerebros caminantes, genes competitivos. despus de cuatro siglos de reduccionismo postcar-tesiano, esto es en lo que ha devenido nuestra alma.

Mente en un embrin?

Qu pasa con el embrin? En la visin moderna de la neuropsicologa, el embrin no tiene muchas opciones de ser aceptado como un ser con una mente, un alma.

1 Los trminos en acto y ex acto derivan del trmino latino acto o actum, que significa accin y hecho. Ex acto es lo que ha sido hecho, realizado; en acto es lo que se hace o realiza (a s mismo).

En un embrin, la ms mnima manifestacin de una mente funcional est ausente por completo. despus de varias semanas, en el embrin se puede discernir una primera organizacin cerebral. debes esperar a la fase fetal para ver algn sustrato de fisiologa cere-bral, que pueden ser movimientos o la deduccin de que tiene lugar alguna actividad bioelctrica cerebral. as como tu cuerpo en la filosofa moderna somtica ha sido vaciado y difuminado (no ests presente en tu cuerpo, sino que tus sensaciones corporales son proyecciones ilusorias de tu cerebro, no hay un ser o alma viviendo en tu cuerpo), el embrin ha sido de-clarado como descerebrado y por tanto rebajado a un ser inconsciente.

me gradu como embrilogo en los aos sesenta y setenta del siglo pasado. En aquel entonces, el debate sobre el alma y la mente an estaba abierto; an no haba sido apartado y destruido por los pensadores neurofisilogos daltnicos y tuertos. En este contex-to, me encontr con el trabajo del embrilogo alemn Erich Blechschmidt (1904-1992). muchos ostepatas y terapeutas craneosacrales consideran el modelo bioquintico de desarrollo embrionario expuesto por Blechschmidt como una buena explicacin de los pro-cesos que rigen la formacin del cuerpo y los rga-nos. sin embargo, como fenomenlogo no estoy muy interesado en las causas y explicaciones, sino en el entendimiento y la finalidad. soy un embrilogo en busca del espritu, de un principio activo detrs de los rganos formados y del cuerpo. Busco el principio en acto (el espritu) que intenta realizarse a s mismo mediante y a travs de la dimensin ex acto del cuer-po1. concibo el cuerpo como acto y la entidad psico-somtica que tambin somos como el actor. El rea-lizador (hacedor) y lo realizado. considero el cuerpo como el resultado aparente de un acto formativo, un acto creativo, si se quiere.

Un embrin con alma

para m las preguntas importantes para entender el embrin humano eran por ejemplo: quin o qu se realiza a s mismo all? Qu estamos realmente ha-ciendo cuando somos un embrin? de qu manera existimos all y en ese perodo? pues existimos, por supuesto, como un ser de alma y cuerpo, porque as es como me experimento a m mismo en cada segun-do de vida. no es que mis msculos me muevan; soy yo quien muevo mi brazo. aparentemente lo hago con

mi cuerpo (un aparato de locomocin como condicin necesaria pero no suficiente), pero mi cuerpo no me mueve a m. se pueden ampliar los conceptos de E. Blechschmidt al reconocer que un embrin presen-ta conductas. Est (an) dando forma a su cuerpo, se mueve, acta (literalmente). La primera manifes-tacin de conducta que mostramos, como el ser de cuerpo-mente psicosomtico que somos, es nuestra conducta morfolgica; nuestra primera manifesta-cin de conducta es, de hecho, nuestro cuerpo mis-mo. a nivel fisiolgico realizamos gestos que son el equivalente a nuestras conductas. ir erguido, encon-trar tu equilibrio, centrarte, son actos del alma, del ser humano o espritu; pero antes de que puedas hacer eso a un nivel psicolgico realizas el gesto a un nivel fisiolgico cuando tienes un ao de vida, intentando ponerte de pie dentro de tu pequeo parque. E incluso esa no es la primera vez. La primera vez que encon-traste tu equilibrio fue cuando, como embrin, dise-aste y preparaste la organizacin corporal que es un prerrequisito para el equilibrio y para estar erguido. El cuerpo humano es el nico cuerpo primate y ma-mfero donde el centro de gravedad est organizado en el interior y dentro del cuerpo. para convertirte en un ser humano necesitas organizacin. por ejemplo, necesitas un cuerpo (no solo un cerebro) que pueda hacerlo. Esto es exactamente lo que haces durante el crecimiento y diseo de tu cuerpo como embrin: er-guirte y equilibrarte de una forma morfolgica.

El alma se preejercita en el cuerpo es mi reformu-lacin de los conceptos de Blechschmidt. nuestro cuerpo es comportamiento, comportamiento huma-no, para ser ms explcito. El cuerpo no es una cosa, un sustrato anatmico, sino que es una ejecucin, una funcin, un comportamiento. El alma no tiene un cuer-po; es el cuerpo. El cuerpo no tiene un alma; es alma. incluso tu esqueleto y tu cerebro estn en movimien-

En la visin moderna de la neu-ropsicologa, el embrin no tiene muchas opciones de ser acep-tado como un ser con una men-te, un alma. En un embrin, la ms mnima manifestacin de una mente funcional est ausen-te por completo.


to, son procesos. aprend del embrin que el movi-miento es primario y la forma es secundaria. Las for-mas vienen del movimiento (y no lo contrario, como proclaman siempre los pensadores reduccionistas), y en ese movimiento tiene lugar la conducta. La trans-parencia de los cristalinos de tus ojos no es una pro-piedad material; es una actividad de por vida ejercida por las clulas que constituyen dichos cristalinos. Tu cuerpo es un acto y, en la fase embrionaria en la que actas, tu cuerpo es un preejercicio de lo que ms tar-de ser una capacidad fisiolgica y psicolgica.

Existencia centrpeta

dentro de la forma de vida embrionaria, la forma y la funcin estn an relacionadas y fuertemente ligadas. El hecho de que la forma y la funcin del brazo de la persona, por ejemplo, estn sintonizadas tan perfec-tamente y tan armnicamente se debe al fenmeno de que la funcin del brazo como instrumento que sirva para sujetar ha sido preejercitada embrionariamen-te mientras creca. En el organismo adulto, donde las formas son estticas, la funcin es cedida (liberada) a un nivel ms alto: la funcin fisiolgica como gesto de crecimiento liberado. Erich Blechschmidt an va un paso ms all y aplica el principio de la funcin li-berada de la estructura de crecimiento al nivel de los gestos y funciones psicolgicos: las funciones corpo-rales, o fisiolgicas, son preejercitadas en el embrin

como gestos y movimientos de crecimiento. En este sentido, un ser humano ya ha respirado lar-gamente antes de haber tomado la primera bocanada de aire al nacer. Las dinmicas con que los pulmones, el trax y el diafragma se desarrollan y despliegan pue-den considerarse como un tipo de respiracin, ya que son mo-vimientos respiratorios. visto de este modo, un embrin mira, su-jeta, camina, y todo ello es com-portamiento morfolgico.

consideraciones como las ante-riores dan una nueva perspecti-va a la direccin y orientacin de la existencia embrionaria. Gene-ralmente, la existencia embrio-naria est considerada como un

proceso biolgico que produce o da como resultado el comportamiento humano. pensamos, por as decirlo, desde dentro hacia afuera, desde el centro hacia la pe-riferia. En otras palabras: de modo centrfugo. desde esta perspectiva, hay una clula huevo que primero est fertilizada2, que seguidamente crecer para for-mar un cuerpo humano individual y luego un individuo psicolgico: el hombre con su mente y alma es un pro-ducto de este proceso. La mente es una consecuencia del cuerpo y la formacin de este. En este sentido, el embrin tambin merece ser considerado algo as como un estado general humano no individualizado; pero en la fase embrionaria no se habla an de indivi-dualidad o existencia personal.

sin embargo, la existencia embrionaria puede ser ca-racterizada como la orientacin desde afuera hacia adentro, esto es de forma centrpeta (ver FiGura 1). como adultos, nos expresamos mediante nuestro cuerpo: el mundo es nuestra meta y el cuerpo es el instrumento para este propsito. El embrin, por el contrario, an est abocado a la organizacin corpo-ral. por tanto, la existencia embrionaria es un tipo de existencia silenciosa e introvertida. La idea de que un embrin an no est haciendo nada y no est actuan-do es un gran malentendido y una desvalorizacin. Lo que ocurre es que su accin est dirigida hacia s mismo, hacia dentro de s. desde esta ptica los ac-tos del embrin tambin representan, ante todo, la expresin de un ser humano y su alma. El ser humano

2 Esto es un sinsentido, ya que no somos clula en primer lugar. no ests hecho de clulas o por ellas. La unidad de la vida no es la clula o partcula, sino el organismo, el todo. El embrin se organiza en clulas y mediante estas en rganos y tejidos; no al contrario. Tu primer aspecto es un cigoto, un cuerpo unicelular.

Figura 1.

Revolucin de las orientaciones del ser entre un adulto (a) y un embrin (b). Fuente: dynamische morphologie, O.J. Hartmann, Frankfurt/M. (1959).

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Hay una clula huevo que pri-

mero est fertili-zada, que segui-damente crecer

para formar un cuerpo humano individual y lue-go un individuo

psicolgico.


se manifiesta en primer lugar mediante gestos de crecimiento y mo-vimientos morfolgicos; despus, mediante procesos fisiolgicos; finalmente, mediante comportamientos y gestos psicolgicos.

El embrin an est en ti

En la FiGura 2 est representado el llamado gradiente craneocaudal del desarrollo embrionario. con esta nocin se indica habitualmente que en el polo craneal el desarrollo est siempre por delante de los procesos de desarrollo que se dan en el polo caudal, o mbito del cuerpo. Esto tambin se relaciona con el hecho de que en el polo cra-neal el desarrollo de los rganos tiende a alcanzar antes el estado final ms o menos adulto, o la organizacin, que en el mbito caudal del

cuerpo. Tu cabeza, por as decirlo, se vuelve vieja, o adulta, mientras que tus vsceras permanecen jvenes, o embrionarias. En la FiGura 2 se pue-de observar por ejemplo que el desa-rrollo del brazo y la mano (siempre) est por delante del desarrollo del pie y la pierna. Este fenmeno tambin se har manifiesto y se repetir en la maduracin fisiolgica y psicolgica de los miembros y movimientos. otro eje corporal donde se puede obser-var dicho gradiente es el gradiente prximo-distal de las extremidades: las manos y los pies estn ms vie-jos que la regin de hombros y pelvis, siendo la ltima por ejemplo una zona que contina creciendo y formndose ms all de la niez.

se podra describir el gradiente cra-neocaudal como la polaridad entre movimiento y forma, entre embrin y adulto, entre proceso y estructura. de hecho, en el polo caudal del cuerpo los procesos ms o menos tienden a continuar el tipo de vida embrionaria como se describi anteriormente, es-to es mostrando un comportamiento morfolgico en que el cuerpo fsico est an siguiendo su proceso, llevan-do a cabo su metamorfosis.

Las funciones corporales, o fisio-lgicas, son preejercitadas en el embrin como gestos y movi-mientos de crecimiento. Visto de este modo, un embrin mira, su-jeta, camina, y todo ello es com-portamiento morfolgico.

La idea de que un embrin an no est haciendo nada y no est actuando es un gran malentendido y una desvalorizacin. Lo que ocurre es que su accin est dirigida hacia s mismo, hacia dentro de s. Desde esta ptica los actos del embrin tambin representan, ante todo, la expresin de un ser humano y su alma.

Perodos embrionarios del embrin humano. En series: edad de 26 das (g), alrededor de 4 semanas (h), alrededor de 5 semanas (i), alrededor de 6 se-manas (k), alrededor de 7 semanas (l) y 3 meses (m). Fuente: The Human Embryo, E. Blechschmidt, Stuttgart (1963).

Figura 2.

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por el contrario, se puede observar en los rganos la tendencia a volverse cada vez ms una estructura y una anatoma, por decirlo de algn modo. En los r-ganos (el cerebro, el sistema nervioso por ejemplo) la funcin se vuelve realmente ms liberada respecto de la actividad morfolgica (el crecimiento y la meta-morfosis). un buen modo de identificar este gradien-te o polaridad es comparando por ejemplo un hgado (caudal) con un rgano craneal tpico como es el ce-rebro. En el hgado, la funcin y la forma estn an en movimiento, mientras que en el cerebro la anatoma y la estructura se vuelven esenciales para la funcin fisiolgica. al igual que en la fase embrionaria, en el hgado la dimensin en acto an permanece activa en un proceso morfolgico, profundamente involucrada e interrelacionada con la materia; mientras que a ni-vel craneal la posibilidad para la mente, el en acto, es llegar a liberarse del proceso de la materia corporal y funcionar ms libre del cuerpo. piensa en la movi-lidad imponderable que tiene lugar en tu mente. sin embargo, esto significa que la forma de ser embrio-naria no es parte exclusiva del pasado, no es una fase

en nuestra vida que hemos dejado atrs. Es actual, y en gran parte de nuestro cuerpo la interaccin entre cuerpo y mente an es centrpeta.

El regreso del alma

podra ser esta la expresin de una polaridad en nuestro organismo como interaccin entre las di-mensiones en acto y ex acto de nuestro ser psico-

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hristian Darkin | Shutterstock


La forma de ser embrionaria no es parte exclusiva del pasado, no es una fase en nuestra vida que hemos dejado atrs. Es actual, y en gran parte de nuestro cuerpo la interaccin entre cuerpo y mente an es centrpeta.

somtico? En la dimensin caudal (visceral) de nues-tro cuerpo, nuestra mente parece estar conectada e interconectada con el cuerpo (la materia) ya que es el gesto general en la fase embrionaria. En el polo opuesto, el cuerpo tiende a volverse ms estructura-do, a volverse lo que se llama anatoma. aqu la men-te y el cuerpo estn ms o menos desconectados y se desconectan para permitir que la mente funcione cada vez ms libre del cuerpo, desde el punto de vista fisiolgico, psicolgico y de la consciencia? podra ser que la forma de ser embrionaria sea la manera de actuar del cuerpo (o de la vida) cuando la consciencia est dormida?

Y es posible que tenga lugar un despertar de la cons-ciencia en todas las partes del cuerpo en que el pro-ceso tiende a volverse estructura y anatoma, en cuyo caso la vitalidad embrionaria y el poder de regenera-cin disminuye e incluso a veces desaparece (muere)? Qu idea tan fantstica!: la vitalidad y la consciencia como en oposicin! cuanto mayor es la vitalidad, ms dormimos; cuanto mayor es la muerte y la estructura, ms despertamos! desde esta perspectiva, la mente est en todos los sitios del cuerpo como principio que acta, pero los niveles de consciencia tienen lugar en relacin al grado en que los procesos embrionarios se someten a la tendencia estructural. El cuerpo entero es una manifestacin psicosomtica de mente y cuerpo con una amplia gama de niveles de consciencia. Tu voluntad duerme en tu polo caudal, en tus miembros y msculos? Tu alma cognitiva se despierta en los rga-nos de la cabeza y de los sentidos?

Todo esto puede sonar como un concepto dema-siado global, pero puedo describir el gradiente con el que tratamos no solamente en la direccin craneocaudal sino en ms de ocho dimensiones corporales distintas. por ejemplo, las dimensiones dorsoventral, parietovisceral, proximodistal en los miembros, la centrpeta y la centrfuga. En realidad, este gradiente est en todos los sitios. Y en ningn sitio: es un principio fundamental de la polaridad que rige la organizacin psicosomtica en todas las

direcciones, niveles y dimensiones. suelo llamar a esto el imn o principio hologrfico del gradiente craneocaudal que ayuda a superar el error cartesia-no relativo a la localizacin del alma, la psiquis o la consciencia en un rgano o zona determinados. El mbito del alma, la mente o la psiquis no es solo el cerebro: adems de su funcin de control (como la tienen muchos otros rganos centrales tales como el hgado, el corazn o los riones), representa slo la posibilidad funcional de un nivel alto de despertar de la (auto)consciencia.

Este enfoque transforma al cuerpo nuevamente en lo que es: no un apndice del cerebro sino un instrumento del alma, desde el primer da de tu vida. La consciencia no es un sinnimo de alma, o algo congruente con el alma. Es una funcin, una actividad de la mente. El to-tal alcance y el abanico de la consciencia muestra que nuestra alma no es algo conceptual e ilusorio, rosado y turbio, sino un cuerpo alma igual de complicado que nuestro cuerpo fsico. ningn rgano est especializa-do en la psique; tal vez algunos rganos, como el cere-bro y los rganos de los sentidos, funcionan ms en la consciencia que otros, pero la mente est en todos. Las capas germinales3 por ejemplo no son solamente prin-cipios morfolgicos fsicos, sino que adems son ges-tos y funciones fisiolgicos y psicolgicos. El cuerpo no es una mquina que funciona; es funcin, una funcin de la mente. describir esta morfologa psicosomtica ampliamente implica ir mucho ms all de este artcu-lo, pero es posible. Lo ms importante es que tal ana-toma nos da el cuerpo que somos, que vivimos, donde no tenemos ningn hipocampo en nuestras cabezas; un cuerpo, sin embargo, donde pensamos con nuestras cabezas, sentimos tambin en nuestro corazn y sufri-mos dolor en los dedos de los pies. Somos consciencia y tenemos un cuerpo.

*Jaap van der Wal es mdico es-pecializado en anatoma y embrio-loga. Da conferencias, cursos y talleres sobre su embriologa es-piritual o fenomenolgica. Pue-des invitarle a impartir un curso. Visita www.embryo.nl (tambin en ingls, con algunas pginas en espaol).

3 una capa germinal es un conjunto de clulas formadas durante el desarrollo embrionario a partir de las cuales se originarn los tejidos y rganos del adulto. (Fuente: Wikipedia)

e n t r e v i s t aS a l u d y B i e n e s t a r .

Salud IntegralYusuf, llevas muchos aos velando por la salud propia y la de los dems

La salud es el segundo valor ms impor-tante que tengo. La salud empezando por m y por mi casa: tomo agua de la manera adecuada, superalimentos, comida biol-gica, hago ejercicio, procuro mantener la mente despierta, energtica y flexible

como terapeuta, me rijo por cuatro princi-pios. El primero es la intencin holstica de ayudar y de encontrar por qu la persona est enferma. despus, la intuicin. En ter-cer lugar, la ciencia, que se apoya recpro-camente con la intuicin. En cuarto lugar, el amor, el amor por uno mismo, por lo que uno hace, por los resultados, por la persona enferma, por la familia, por la humanidad; cuanto ms das ms tienes. mucha gente que ha sido humanista tira la toalla hacia los 40 los 50 aos de edad, decepcionada. Tiran la antorcha, y cuando viene la genera-cin siguiente tienen que recoger la antor-cha del suelo y encenderla de nuevo. cun-to tiempo y energa desaprovechados! Te-nemos que pasar la antorcha en la mano a la siguiente generacin, encendida. Esto lo digo a mis 72 aos de edad.

Puede ser que las dificultades se in-crementen prximamente, bien sean

de ndole econmica o climtica, bien tengan que ver con el cambio de vi-

bracin que el planeta experimenta conforme avanzamos hacia el 2012.

Hay quienes han conseguido ya vivir sin comer, del prana, pero podemos hacer un planteamiento favorable a la salud con pocos recursos que est

al alcance de la mayora de la pobla-cin? Podemos mejorar muchas cosas e incluso erradicar patologas a par-tir de unas pautas muy sencillas. Ha-blamos de ello con Yusuf Cabr, natu-rpata de prestigio afincado en Ibiza.

Entrevista a Yusuf Cabr

SUPERVIVENCIAY SALUD

Qu pueden hacer por tilos superalimentos y el agua

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