Facilitador: Dr. Oscar A. Martínez Molina

1

EDITORIAL

En la historia de la humanidad los cambios han sido una constante, desde el

momento mismo de la creación, el mundo comenzó su indetenible evolución. El

hombre ha influido y promovido, mucho de los acontecimientos generadores de

transformación. Todo cambio nace de una idea, que la mayoría de las veces es

individual, alguien se propone, sueña o desea algo, luego con entusiasmo comienza a

buscar y experimentar todas las formas posibles de realización y concreción, en ese

recorrido va contagiando a otros para que compartan su iniciada empresa, a esto se le

llama liderazgo.

El liderazgo es objeto de estudio en diferentes áreas del conocimiento, pues

está vinculado a todas las transformaciones vertiginosas que ocurren en el mundo.

Motivados por el interés de profundizar en las teorías sobre el liderazgo

(conceptualización, características, competencias, implicaciones sociales y

psicológicas) nace este libro colaborativo titulado “LIDERAZGO EN LA

POSMODERNIDAD” como propuesta inicial por parte del Dr. Oscar Martínez,

facilitador de la sección no 1 del seminario “Teoría y Orientación de los Fenómenos

Sociales” enmarcado dentro del currículo de la Maestría en Orientación Educativa, de

la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, Núcleo Barinas – Venezuela.

El libro en sí mismo es una experiencia de trabajo en equipo, pues se

evidencia en él, los aportes de 24 cuerpos, mentes y corazones, compartiendo una

meta, estructurado en IV capítulos, aborda de forma amena y sencilla las

interpretaciones que sus autores han realizado de los estudiosos más destacados sobre

la temática. Sin pretender convertirse en la versión más excelente del tópico, es el

humilde aporte que se realiza para contribuir en la comprensión de los fenómenos

sociales y muy especialmente del liderazgo y la influencia de éste en la

transformación en un primer momento personal para luego convertirse en colectiva.

Es la invitación a los demás maestrantes, para que se atrevan a crear nuevas

2

interpretaciones y a experimentar por sí mismo, el significado del trabajo en equipo

para alcanzar una meta compartida.

Profesora Yesenia Rondón

3

Introducción

Hablar de liderazgo ha sido motivo suficiente para los diferentes autores hacer

un recorrido histórico de los comportamientos de los individuos al estar en posiciones

de jefatura; también para abordar las formas de proceder de las personas que eligen a

sus líderes en las distintas situaciones y circunstancias que rodean la necesidad de

hacerlo. En ello ha habido similitudes importantes en cuanto a los resultados

obtenidos; los cuales se han venido ordenando para beneficio social de las

generaciones que han ido ingresando con desarrollo de mayores tecnologías,

principios y muchos otros aspectos que en cada área; social, económica, política,

laboral o institucional se aplican.

En los tiempos posmodernos la exigencia de un buen liderazgo se hace cada

vez más específica en cuanto al tipo de trabajo se refiere, pero no en el tipo de

personas que se desearía. La mayoría de los escritores hacen referencia a las

definiciones de liderazgo y muchos de ellos coinciden en decir que “un líder es aquel

que tiene seguidores”; de allí se desprenden los extraordinarios comentarios y

principios que explican las diferentes tendencias de liderazgo existente, los

considerados nocivos o equivocados tanto en su carácter como en su funcionalidad,

así también los potenciadores y acertados, quienes con cuyo carácter y conducta

inspiran e influyen en beneficio de sus seguidores.

Será interesante la exploración del material presentado a continuación, en el

que una variedad de autores y pensamientos contribuirán a la ampliación y

refrescamiento de los principios fundamentales de un liderazgo agradable,

comunicativo, confiable, honesto y productivo entre otros aspectos de importancia en

este extenso ámbito de la disertación intelectual posmoderna que busca dar aportes a

la necesidad de líderes influyentes e inspiradores.

Licenciado Miguel Tonino Muscarneri Forte

4

Capítulo I

Liderazgo Directivo: Desarrollar Equipos y Organizaciones

Loida E. Rodríguez H. muscarlois@gmail.com Miguel T. Muscarneri F. pastormuscarforte@gmail.com David A. Castillo S. davidendogeno@hotmail.com

Carmen G. Crespo V. grachy_amor@hotmail.com José H. Contreras johercop16@hotmail.com

5

1. El Líder...

Autor: Miguel T. Muscarneri F.

Ser líder es una de las aspiraciones que se

convierte en la meta principal de muchos trabajadores,

tanto de empresas, compañías como también de

organizaciones de cualquier tipo. Sin embargo existen

temores en muchos de los aspirantes que no les permiten avanzar y se quedan en el

camino del simple deseo y no de por lo menos el intento; entendiéndose que el líder

es la persona capaz de mantener en alto todo lo referente al ámbito de su labor

empresarial, incluyendo la dirección oportuna y precisa de quienes están a su cargo.

Maxwell (2007) hace una referencia interesante en su libro titulado Desarrolle

el Líder que está en Usted. En la introducción de dicho trabajo escrito el autor

expresa lo siguiente:

Hace poco leí...las palabras del presidente de Hyatt Hotels: si hay algo que he aprendido durante mis veintisiete años en la industria del servicio, es esto: el noventa y nueve por ciento de los empleados quiere hacer un buen trabajo. La manera como lo realizan es simplemente un reflejo de aquel para quien trabajan. (p. X)

Es notable que estas palabras son el resultado de una realidad a la que

posiblemente no se podrá hacer una definición precisa, ya que, quienes están en

puestos de liderazgo, generalmente saben culpar a sus empleados de sus fracasos

empresariales y de eficacia y eficiencia en la producción de los servicios de la que es

responsable. Definitivamente se hace posible inferir que un líder no es el que

manipula ni maneja a sus empleados a su antojo; sino aquel que es capaz de dirigir a

un grupo de personas de tal manera que éstos lo siguen y durante el camino producen

con efectividad y eficacia lo esperado.

Maxwell (2007) también, citando a James C. George de la Par Training

Cooperation, hace una conceptualización importante que dice: “El liderazgo es la

capacidad de conseguir seguidores. Hitler fue un líder, también lo fue Jim Jones.

6

Jesús de Nazaret, Martin Luther King, Wiston Churchill y John F. Kennedy, fueron

todos líderes. Aunque sus sistemas de valores y capacidades directivas fueron muy

diferentes, cada uno tuvo seguidores.” (pp. 1,2)

No se trata entonces de definir a un líder por sus logros universitarios o por

las posiciones que escala en su carrera, sino en la capacidad de dirigir a las personas

que decidan seguirlo porque creen que su influencia los beneficiará y los hará crecer

como personas. Los seguidores entienden que su líder comenzó su liderazgo en el

corazón, no en su cabeza y en consecuencia la interacción que se genera se convierte

en una relación significativa que no se alimenta de las reglas o normas establecidas

sino de la amistad laboral que se desarrolla mutuamente. Un líder, es entonces, el que

también, además de tener seguidores, el que los mantiene agradados del trabajo que

realizan junto a él; siendo notorio que en algunos momentos se hace difícil separar el

concepto de las funciones del líder.

Por otro lado, los individuos que se convierten en líderes son los que llegan a

amar a las personas que dirige. Pero esto es algo que debe ser explicado de mejor

manera. Maxwell (2007) en su libro Desarrolle el Líder que Está en Usted, señala

una frase muy interesante al respecto. Él dice que “Las personas incapaces de

construir relaciones sólidas y duraderas, pronto descubrirán que son incapaces de

sostener un liderazgo efectivo y permanente...Sabemos que usted puede amar a las

personas sin dirigirlas, pero no puede dirigirlas sin amarlas.” (p. 9)

El párrafo anterior habla a profundidad acerca de la estrecha relación de

amistad genuina que existe entre el líder y su discípulo; porque un discípulo o

seguidor es lo que un verdadero líder tiene. Toda persona siente amor por un sin

número de individuos, pero no por todos de la misma manera o intensidad. Hay una

diferencia en amar a alguien como ser humano y como persona que amar a alguien

con quien se tiene una relación más cercana; bien tiene razón la expresión popular:

“Lloramos por los que amamos cuando estos mueren o sufren, pero no lo hacemos

cuando nos enteramos que a los desconocidos para nosotros les sucede lo mismo.”

7

En consecuencia, el líder dirige bien a quienes ama, porque desea enseñarlos,

prepararlos, que se apoyen en un buen modelo, entre otras cosas. A este tipo de líder

lo siguen personas que no tienen temor a abrirse paso por los senderos del liderazgo,

y si les corresponde serlo; harán, sin duda, un buen trabajo.

2. Líder potenciador versus líder nocivo

Autor: Loida E. Rodríguez H.

Pretender liderar es en realidad algo osado; pero al

mismo tiempo retador, inspirador, una decisión

concienzuda y honesta que reta a quien ha decidido ser un

líder, a cuidar de sí mismo con integridad. En la mente de

un líder honesto está la idea de guiar a los demás porque ya ha liderado su propia

vida como dueño de sí mismo. Hay un proverbio bíblico interesante que refiere este

hecho de la siguiente manera: “Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el

que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.” (Proverbios 16:32).

Este párrafo divino expresa la esencia completa de quien se convierte en líder; tiene

control de sí mismo, domina y conduce el rumbo de su interior; por lo tanto está

preparado en gran manera para liderar a otros. Esto es lo que se puede llamar un líder

potenciador; uno que se ha potenciado a sí mismo, uno que ha controlado y dirigido

las soluciones de sus propias situaciones de vida y de familia, uno que no pierde la

perspectiva de su camino, uno que puede, sin duda, potenciar con su liderazgo, la

vida de otros. Con mucha razón también lo pronunció el gran Platón, famoso filósofo

de otrora cuando dijo: “La primera y gran victoria es conquistarse a uno mismo”.

En ese orden de ideas, Arana (2007) en su artículo en línea titulado El Valor

del Autoconocimiento del Líder comenta que: “El liderazgo, entonces, se desarrolla

de adentro hacia afuera, desde las cualidades del carácter de las personas...Sin

madurez de carácter no hay liderazgo efectivo.” Enfatiza en este párrafo lo que se ha

explicado en relación a la necesidad imperante de un trabajo de liderazgo que

8

potenciará a sus seguidores en la misma medida que su misma vida esté potenciada

con un alto grado de madurez mostrada en la buena conducción de su propia vida.

Los líderes potenciadores no son los que pregonan sus bondades e influencias

sobre los demás; son los que la viven naturalmente y su influencia transforma su

entorno; en concordancia con este pensamiento está Day (2005) quien refiriéndose a

las labores docentes en su libro titulado Formar Docentes: Cómo, Cuándo y en qué

Condiciones Aprende el Profesorado, dice hablando del liderazgo potenciador lo

siguiente: “Este tipo de liderazgo se basa en las tradiciones de participación, equidad

y justicia social. Su meta no consiste en mejorar la moral del docente, sus decisiones

y el rendimiento del alumno, sino en `erradicar las diferencias de poder y reconstruir

el lugar de trabajo como una comunidad justa y democrática 6” (p. 114). Aun cuando

estos comentarios los hace el autor con respecto a los docentes, éstos son referidos

como los líderes de sus aulas en los cuales es necesario que modelen con tal

influencia moral que puedan potenciar el carácter que se está formando en sus

alumnos. Eso mismo ocurre con el líder que vive y cumple sus responsabilidades

potenciando natural y moralmente a todo el colectivo que se encuentra a su

alrededor.

Por el contrario, quien se presenta como líder sin estas características, se

presenta con una alta carencia de criterios ante sus propias necesidades, su condición

emocional y de lo que el proverbista llama señorío de su espíritu. Se está entonces

ante un líder que no tardará en traer un ambiente nocivo en el lugar donde trabaja y

en consecuencia de los individuos que están a su alrededor. Pronto cederán ante la

tentación de hacer las cosas para ganar aceptación de los más poderosos para

aparentar fuerza, a costa del daño que sufren los suyos. El liderazgo que se aleja del

tratamiento interior del líder, se aleja también de ser potenciador y se acerca a los

límites de lo peligroso y perjudicial.

En consecuencia es oportuno hacerse eco de los comentarios de Carrión

(2007) en su libro Estrategia: De la Visión a la Acción, en el que refiere una

importante cantidad de información útil para conceptualizar y describir al líder

9

nocivo. Entre los comentarios que este autor hace expresa que “Un líder nocivo, por

definición no es un líder. Simplemente es un directivo con poder formal suficiente

como para tener subordinados (que no seguidores) y maltratarlos.” Es simplemente

un ser que aprovechándose de su posición y/o sus títulos, agravia a los empleados a

su cargo como una estrategia que sólo en su mente cree que dará mejores resultados.

Sin embargo hacer corrección de los errores por la vía de la ira y el reproche, siempre

será incómodo y contraproducente tanto para quien trata de corregir como para quien

recibe la corrección.

El mismo autor, referido en el párrafo anterior, señala también que “El líder

nocivo consigue sus objetivos destrozando a otros y encuentra el éxito protegiendo

su territorio, combatiendo y controlando...creador de miedos... de ambientes

tóxicos...solo saben exigir y no saben recompensar...el clima que genera es

siempre...estrés, depresión, rotación, continuismo...falta de esperanza, problemas de

salud, desconfianza...” Un líder de esta naturaleza representa un camino seguro al

desastre y la desolación personal de los individuos que solo se sienten obligados a

soportar su mala conducción y en muchos casos a soportar una situación como esa en

razón de la necesidad económica cubierta por el salario que reciben.

Finalmente Carrión (2007) en el libro Estrategia: De la Visión a la Acción,

citando a Reed G. A. (2005) escritor del libro Liderazgo Nocivo, refiere que “Los

tres elementos claves del liderazgo nocivo son: despreocupación por los

subordinados, habilidades sociales nulas...y egoísmo...” Se explica entonces que

este tipo de líderes afecta con sus procedimientos y forma de gerenciar, el ambiente

laboral y se muestra interesado solo en lo concerniente a su persona. Se hace

incuestionable que el líder nocivo destruye las esperanzas de las personas que están a

su cargo.

En conclusión, existe un gran abismo entre ser un líder potenciador y ser un

líder nocivo. El nocivo se atribuirá lo positivo a su actuación y los fracasos a la

actuación de sus empleados. A su diferencia el líder potenciador irá junto a sus

10