EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del...

12
1|2011 81 Ketzalcalli EL PODER DE LOS DHIMANES. BRUJERÍA ENTRE LOS TEENEK DE LA HUASTECA POTOSINA Imelda Aguirre Mendoza El Colegio de San Luis, México [Ketzalcalli 2|2011: 81–92] Resumen: Objetivo de este artículo es el análisis pragmático de una plega- ria pronuncEntre las poblaciones teenek de la Huasteca potosina los dhima- nes (brujos) son seres humanos dotados de capacidades particulares debi- do a un pacto de reciprocidades que han hecho con el Diablo y otras divini- dades, quienes los han provisto de poderes a cambio de su alma. En el pre- sente artículo se exponen algunas características que se le atribuyen al dhi- man y lo configuran con una entidad de amplia agencia capaz de interferir en las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos de vasto conocimiento sobre el universo y sus moradores, especialistas en el tratamiento del cuerpo humano y las almas. Palabras clave: Tennek, Huasteca, chamanes, poder ritual y social INTRODUCCIÓN Los teenek, también llamados huastecos, son un pueblo que habita en los estados de Vera- cruz, Querétaro y San Luis Potosí–principalmente–, en esta última entidad cuentan con una vasta presencia en los municipios de Tanlajás, Tampacán, Ciudad Valles, Huehuetlán, San Antonio, Tancanhuitz de Santos y Aquismón. El presente trabajo toma como base las evidencias etnográficas registradas en Tamapatz, Aquismón, S.L.P. y en comunidades ale- dañas de la Sierra Gorda de Querétaro del año 2006 a la fecha. En estas localidades los brujos son sujetos con un vasto conocimiento sobre el universo, especialistas en el trata- miento del cuerpo humano y las almas; diestros en el funcionamiento de los ciclos astrales y vitales, manipuladores de objetos, tiempos y espacios específicos; expertos de la geograf- ía sagrada y de los puntos intersticiales que conectan a éste con otros mundos. Los brujos [dhimanes] teenek son dominadores de un compendio de técnicas en las que expresan el control que ejercen sobre animales, plantas y espíritus; realizadores de costumbres, demandantes de ofrendas, elaboradores de escenografías rituales. Por todo ello se conciben como hombres de poder que con su hacer dinamizan y dan continuidad a la vida en el cosmos. En la primera parte del texto se expondrán algunas características que se le atribuyen al dhiman y lo configuran como un ser con amplias cualidades de agencia, capaz de inter-

Transcript of EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del...

Page 1: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

1|2011 81

Ketzalcalli

EL PODER DE LOS DHIMANES.

BRUJERÍA ENTRE LOS TEENEK

DE LA HUASTECA POTOSINA

Imelda Aguirre Mendoza

El Colegio de San Luis, México

[Ketzalcalli 2|2011: 81–92]

Resumen: Objetivo de este artículo es el análisis pragmático de una plega-

ria pronuncEntre las poblaciones teenek de la Huasteca potosina los dhima-

nes (brujos) son seres humanos dotados de capacidades particulares debi-

do a un pacto de reciprocidades que han hecho con el Diablo y otras divini-

dades, quienes los han provisto de poderes a cambio de su alma. En el pre-

sente artículo se exponen algunas características que se le atribuyen al dhi-man y lo configuran con una entidad de amplia agencia capaz de interferir

en las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos

de vasto conocimiento sobre el universo y sus moradores, especialistas en

el tratamiento del cuerpo humano y las almas.

Palabras clave: Tennek, Huasteca, chamanes, poder ritual y social

INTRODUCCIÓN

Los teenek, también llamados huastecos, son un pueblo que habita en los estados de Vera-

cruz, Querétaro y San Luis Potosí–principalmente–, en esta última entidad cuentan con

una vasta presencia en los municipios de Tanlajás, Tampacán, Ciudad Valles, Huehuetlán,

San Antonio, Tancanhuitz de Santos y Aquismón. El presente trabajo toma como base las

evidencias etnográficas registradas en Tamapatz, Aquismón, S.L.P. y en comunidades ale-

dañas de la Sierra Gorda de Querétaro del año 2006 a la fecha. En estas localidades los

brujos son sujetos con un vasto conocimiento sobre el universo, especialistas en el trata-

miento del cuerpo humano y las almas; diestros en el funcionamiento de los ciclos astrales

y vitales, manipuladores de objetos, tiempos y espacios específicos; expertos de la geograf-

ía sagrada y de los puntos intersticiales que conectan a éste con otros mundos.

Los brujos [dhimanes] teenek son dominadores de un compendio de técnicas en las

que expresan el control que ejercen sobre animales, plantas y espíritus; realizadores de

costumbres, demandantes de ofrendas, elaboradores de escenografías rituales. Por todo

ello se conciben como hombres de poder que con su hacer dinamizan y dan continuidad a

la vida en el cosmos.

En la primera parte del texto se expondrán algunas características que se le atribuyen

al dhiman y lo configuran como un ser con amplias cualidades de agencia, capaz de inter-

Page 2: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

82 1|2011

Ketzalcalli

ferir en las diferentes esferas del cosmos; en la segunda parte se describen varias acciones

rituales mediante las cuales envían infortunios.

EL ORIGEN DEL PODER

Retomando los planteamientos de Alfred Gell (1998), un agente es quien hace que los

acontecimientos ‘sucedan’; éste tiene la capacidad de iniciar eventos causales en su entor-

no, los cuales no se pueden atribuir al cosmos físico sino a estados mentales, es decir, a

intenciones (Gell 1998: 19). En este sentido, el brujo entre los teenek, es un agente en la

medida que provoca sucesos cargados de voluntad e intencionalidad expresados en fenó-

menos naturales aparentemente comunes, enfermedades y males que en primera instancia

carecen de una explicación lógica.

El poder de los dhimanes puede ser producto de designios cósmicos, factores heredita-

rios, preparación ritual o de una negociación que establece con potencias malévolas me-

diante la presentación de ofrendas.

Para los que “ya vienen así”–los que nacen con el poder–, intervienen elementos como

los ciclos lunares, los eclipses y los días. Los teenek conciben que los brujos nacen en lu-

nas menguantes o “lunas malas”, fase en que el astro se torna menos visible y se llena de

oscuridad, propiedad que también se les confiere a estos hombres siendo seres nocturnos

y tenebrosos.

Figura 1. Mapa de la Huasteca potosina, localización de la comunidad de estudio

Fuente: Padrón de comunidades del COLSAN (2005)

Page 3: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

1|2011 83

Ketzalcalli

En este mismo sentido, los eclipses, fenómenos que marcan la intrusión de un tiempo

caótico que repercute en la vida de humanos, plantas y animales, permite la llegada de

seres como los dhimanes, con capacidades sobrenaturales otorgadas por la luna eclipsada

ya sea en el momento de su concepción o de su alumbramiento.

Los días son otros de los elementos que influyen en el nacimiento de un brujo ya que

éstos contienen implícita una carga cósmica que surte efecto en el destino y temperamen-

to de los seres humanos. Para los teenek de El Zopope, barrio de Tamapatz, hay días débi-

les y días fuertes, los primeros identificados con lunes, sábado y domingo; los segundos

correspondientes al martes, miércoles, jueves y viernes. Quienes nacen en un día débil son

vulnerables a embrujos y enfermedades pues no tienen suficiente fuerza para soportar este

tipo de adversidades. Por el contrario, los hombres que llegan al mundo en un día fuerte

gozan de buena salud, son resistentes a espantos, males y todo tipo de peligros pero a su

vez, pueden ser “personas malignas”.

Por otro lado, hay quienes piensan que el poder de los dhimanes se obtiene mediante

herencia consanguínea por línea paterna, es decir, ha sido legado por sus padres o abuelos

también brujos, que les donaron una percepción extrasensible del cosmos, relaciones de ali-

anza ya consolidadas con animales y varias potencias malévolas, conocimientos de hechice-

ría, y en algunos casos, sus habilidades para transformarse en una gama de seres perversos.

Otras personas consideran que el talento de los dhimanes se adquiere estudiando con

maestros, en un principio más poderosos que ellos, quienes los dotan de “libros antiguos”,

les enseñan palabras mágicas para gene-

rar infortunios, los introducen en el co-

nocimiento de plantas medicinales, ani-

males y objetos que pueden manipular

para sus maleficios, les indican cuevas,

cerros, camposantos y varios sitios en

donde pueden llevar a cabo sus prácti-

cas, entre otros saberes. Este conoci-

miento es transmitido a cambio de dine-

ro, tierras, ofrendas de aguardiente, boli-

mes o intercambio de favores personales.

Finalmente hay quienes mencionan

que los brujos obtienen su poder median-

te pactos que entablan con el diablo,

entidad que les otorga facultades sobre-

naturales a cambio de su alma y de la

presentación de ofrendas depositadas en

cavidades subterráneas o elevaciones

montañosas donde se encuentran piedras conocidas como ul taláb–llegadas o mesas–, en

las cuales se colocan como elementos votivos bolimes, kwitomes, tamales pequeños, arcos

miniatura (elaborados con flores de cempasúchil y hojas de naranjo) y aguardiente.

Se dice que entre dhimanes existen jerarquías. Los teenek de Tamapatz mencionan

que los brujos más maléficos se encuentran en localidades como Tanchanchin, lugar al

que acuden los de menor rango para pedir consejos y solicitar apoyo en sus acciones. En

este sentido se puede argumentar que esta clase de especialistas han configurado un siste-

ma de cooperación y competencia, lo primero para unir fuerzas ante los curanderos que

busquen contrarrestar sus daños y lo segundo para desacreditar el talento de otros dhima-

Figura 2. Ofrenda ritual. Tamapatz, S.L.P.

Foto. Aguirre Mendoza (2010)

Page 4: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

84 1|2011

Ketzalcalli

nes, pues como lo señalan varias personas: “hasta entre los mismos brujos están las envi-

dias”, uno de los principales móviles para emitir males.

LOS VIGILANTES DEL UNIVERSO

De acuerdo con un curandero teenek, en el mundo existen vigilantes benévolos y malévo-

los, ambos son seres humanos expectantes de todo lo que acontece en la comunidad y

cuentan con autorización de alterar el cosmos. Los primeros son los curanderos, hombres

con poder para sanar a las personas y defenderlas de los peligros enviados por los dhima-

nes y otras entidades perversas. Al igual que los brujos, gran parte de sus cualidades le son

conferidas por el destino, los astros, la herencia o el aprendizaje, pero su poder más im-

portante radica en la energía contenida en su corazón, la cual se moviliza y propaga al

realizar sus curaciones y combatir las fuerzas nefastas del universo.

Los vigilantes malévolos, también llamados “guardianes de lo falso”, son precisamente

los dhimanes y entre ellos se distinguen dos clases: los que mandan enfermedades letales

y sorpresivas, como lo indica aquel curandero Tomás: “nada más te va a dar un ataque, se

te va a parar el corazón y te vas a morir”; y por otro lado se encuentran los que remiten

daños dosificados manifestados en padecimientos psicosomáticos, accidentes, falta de tra-

bajo, escasez en la cosecha, muerte del ganado que se posee, entre otros eventos que per-

judican la estabilidad de las personas. La fuerza ostentada por curanderos y brujos, se en-

cuentra en constante confrontación, ambos emprenden una suerte de batalla en la que

tratan de ejercer su potestad sobre la comunidad y el cosmos entero.

Los teenek contemporáneos reconocen que desde “tiempos antiguos”, cuando el mundo

se comenzó a conformar como se conoce actualmente, la presencia de los brujos era de su-

ma relevancia para la vida en sociedad. Existen mitos en donde se menciona que fueron los

dhimanes quienes mediante sus conjuros y hechizos pudieron aliarse con los dioses de la

lluvia para alejar a los españoles de su territorio en los tiempo de la conquista, tal y como lo

señala la siguiente narrativa, relacionada también con la morfología actual del sótano de las

golondrinas, abismo natural ubicado en el barrio de Unión de Guadalupe, Tamapatz:

Hace millones de años el sótano era un cenote, había agua. Para ese tiempo

ya había gente en Tamapatz, porque Tamapatz es un pueblo viejo; había

huastecos y mulatos. Esa gente cada que hacía fiesta para su dios, se venían

por la vereda y llegaban al sótano, aquí venían a aventar a una muchacha que

era virgen, se la ofrecían a dios. Pero una vez quisieron engañarlo y aventa-

ron a una muchacha que no era virgen. Entonces dicen que el dios se enojó y

como castigo mandó a secar el cenote y así se quedó el puro sótano; también

mandó epidemias y mandó a los españoles. Los huastecos vinieron para acá,

vivieron con sus hechiceros, sus brujos, hicieron costumbre, le pidieron al

dios que los ayudara; entonces salieron muchas víboras coralillo con alas,

esas víboras eran los espíritus de las mujeres que había aventado, se convir-

tieron en víboras y no dejaron acercar a los españoles. Entonces así se fueron

y los huastecos ganaron (Don Bonifacio, Unión de Guadalupe, 2009).

Independientemente de que este mito opera como un recurso de reivindicación étnica en

el cual los teenek vencen a los conquistadores, se observa la importancia de los brujos

como especialistas rituales gracias a los cuales se logró la preservación de la comunidad.

Page 5: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

1|2011 85

Ketzalcalli

Al respecto Aguirre Beltrán advierte que en la antigüedad “los huextecos fueron famosos,

[…], por su cabal conocimiento de la ciencia de la hechicería […] Uno de sus dioses, Naual-

pilli –de naua, sabiduría, ciencia, magia; pilli, jefe, principal, grande: mago en jefe, princi-

pal hechicero o gran nagual– gozaba de enorme prestigio entre los pueblos del Cemanahu-

ac”. (1992: 97). El mismo autor señala que desde la conquista, hechiceros y naguales per-

dieron sus atributos socialmente productivos; conservando únicamente los rasgos malignos.

En el relato anterior se demuestra cómo los dhimanes en los tiempos anteriores eran suje-

tos integrados a la vida ritual de la comunidad pero en la actualidad su posición se ha inver-

tido, son seres excluidos que suelen llevar a cabo sus costumbres de manera particular.

EL CUERPO DE LOS DHIMANES

Los brujos tienen una constitución corporal común al resto de los hombres, compuestos

por materia y sustancia, la primera asociada con la carne, los órganos, los huesos y la san-

gre, elementos que pueden ser visibles e inteligibles a los sentidos; por su parte, la sustan-

cia es identificada con el alma o espíritu (t’sitsin o e’jataláb) invisible pero también per-

ceptible pues es aire. Éste último es semejante a un ave (t’sitsin) que se encuentra sobre

la cabeza y se mantiene volando; cuando ésta abandona aquel sitio es porque lo han es-

pantado o una entidad malévola lo capturó, entonces sobreviene la muerte corporal de los

humanos y otros seres que lo poseen.

Los teenek más ancianos reconocen la existencia de la sombra como otro componente

del ser humano, incluso hay quienes lo ligan o equiparan con el espíritu a pesar de su dis-

tinción terminológica. Sombra es llamada en teenek ts’almil y tiene por función proteger

la integridad de los hombres, velando por la estabilidad de alma y el cuerpo. Algunas per-

sonas explican que es ésta la que les concede poder para actuar en este mundo, por ella

tienen fuerza para salir hacia el monte a trabajar, preparar las tortillas o hacer los costum-

bres. Mientras el ts’itsin es una sustancia perene al tiempo, la sombra es una entidad difu-

sa que envuelve la totalidad del cuerpo y perece con éste mismo.

Los teenek de El Zopope distinguen entre dos tipos de sombras: las duras y las buenas

o blandas. Quienes tienen una sombra buena harán que todo germine, contarán con una

familia numerosa, hijos y animales sanos, cosechas abundantes y una larga vida pues se

encuentran protegidos por dicha entidad. La gente que poseen una sombra dura, entre

ellos los dhimanes, cuentan con una gran cantidad de energía que tiende a destruir su

entorno; algunos de estos humanos son estériles, no pueden procrear descendencia, no

hacen que fructifiquen las cosechas ni logran el crecimiento de plantas y animales, propa-

gando así la sequía y la muerte.

Como lo he venido mencionando, los brujos tienen la capacidad de provocar un daño

intencional hacia quien se lo propongan, mandar desgracias, enfermedades y “pobreza”,

esto se debe en gran medida a la posesión de una sombra dura o mala que los acompaña a

lo largo de su vida.

EL DHIMAN Y SUS HOMÓLOGOS

Los brujos teenek son asociados con varios seres que también cuentan con capacidades de

agentividad negativa, pues trastocan el orden comunitario; entre éstos figuran naguales,

duendes, tepas y ejénchix. Para este trabajo únicamente me centraré en las atribuciones

que tienen los dos últimos.

Page 6: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

86 1|2011

Ketzalcalli

TEPAS

Los tepas son seres ambiciosos–ya sea hombres o mujeres, esto último sobretodo en loca-

lidades teenek de la Sierra Gorda queretana– que se transforman en bolas de fuego, luces

verdes o guajolotes para así viajar por comunidades y ciudades, robar dinero y cometer

otras fechorías. En su forma humana son descritos como personas que visten ropa blanca

y calzan botas, lo cual denota riqueza.

Algunos teenek piensan que vislumbrar a un tepa en el cielo en forma de bola incan-

descente es presagio de prosperidad económica y cambios climatológicos, por ejemplo, si

había lluvias saldrá el sol, o al contrario, llegará una temporada de frío.

La transformación de los tepas puede ocurrir de dos maneras. La primera consiste en

una traslación anímica ya que es el espíritu quien viaja abandonando el cuerpo y tornándose

bola numinosa. La segunda es una metamorfosis corporal en donde el humano se hace ani-

mal, generalmente alado, para así sobrevolar los lugares donde ha de realizar sus trastadas.

El poder de los tepas es anticipado mediante sueños, como lo indica un habitante de El

Zopope: “ese no es su nacimiento, dicen que esos sueñan que vuelan, entonces nada más

alzan las manos y se van a empezar a levantar, y es cuando los apoyan sus dioses para que

se conviertan” (Don Guillermo, El Zopope, 2009).

Al igual que los brujos, sus cualidades sobrenaturales se forjan en algunos casos, a par-

tir de “muchos estudios, rezos, palabras”; y se consolidan con una serie ofrendas y danzas

que llevan a cabo en los cerros del barrio Cuetáb o en una montaña sagrada conocida co-

mo el tepa ts’én (el cerro del tepa) ubicada al sur de El Zopope. Otro vecino de la comuni-

dad describe que “ahí está una piedra boluda, ahí se ve que bailan, ahí se ve una rueda;

hacen costumbres también, llevan el bolím hasta allá arriba. Ocupan brujos que les ayu-

den y unos de esos son también brujos que se saben hacer de guajolotes, de gallinas, de

gallos, de gatos, de tigres”.

Figura 3. Celebrando costumbres. Tamapatz, S.L.P.

Foto: Aguirre Mendoza (2010)

Page 7: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

1|2011 87

Ketzalcalli

La elaboración de costumbres de manera repetitiva les garantiza a estos seres protec-

ción y buena fortuna en la obtención de tesoros, y es mediante rituales que éstos últimos

son “desencantados” para que los tepas puedan disponer libremente de ellos. Los teenek

ven en las acciones de los tepas una suerte de trabajo que les permite sobrevivir pero ante-

s de salir en busca de dinero es condición ofrendar un bolím y practicarse una barrida con

hierbas del monte. Un anciano refiere que:

“Cuando ya hicieron el bolím van a subir a la punta del cerro y van a hacer otra barri-

da, [después] van a ir a sacar el dinero donde está enterrado. Lo van a sacar y lo van a

llevar nada más poquito, no mucho, para cuando vengan otra vez, sacan más dinero y lo

llevan a enterrar a otro lugar. [Para finalizar] van a hacer un bolím para una fiesta, una

danza” (Don Nicolás, El Zopope, 2009), esto último en agradecimiento a sus entidades

protectoras por beneficiarlos con las riquezas obtenidas.

Los tepas logran trasladar el dinero mediante la deglución pausada de las monedas:

“dicen que se van, comen el dinero, tres, cuatro pesos, no comen harto; pero como a cada

rato van, regresan y pal’ otro día tienen bastante dinero” (Don Guillermo, El Zopope,

2009). En la actualidad los tepas no solo se benefician de tesoros encontrados en la sierra,

en el imaginario de los teenek ahora también pueden asaltar bancos y cajeros automáti-

cos: “dicen que va a una ciudad grande, se meten a un banco, sacan dinero, a eso se dedi-

can” (Don Dolores+, El Zopope, 2009).

Como lo indica el siguiente testimonio, los tepas se pueden capturar mediante oracio-

nes y amarres hechos a base de hilos. Con la traslación acaecida entre la noche y el día

ocurrirá también una inversión en su transformación; así el tepa en su forma de animal o

de luz incandescente, adoptará una vez más su morfos humano:

Estaba un tepa por Tamapatz. Tenía una casa de palma y como en un año levantó una

casa de material, y que lo agarrón y ya no regresó. Esos que se hacen tepa los agarran y

los matan porque dicen que hay rezos para que los amarren […] Dicen que para agarrar a

un tepa se ponen unos hilos rojos y verdes a cada lado [de la cama] ya cuando viene la

tepa, ahí lo va a amarrar y tienen que esperar hasta que amanezca y ahí se va a quedar

como animal, se convierten en todo, ahí se va a convertir en una nueva carne pero es un

mismo espíritu el del tepa y el hombre (Don Guillermo, El Zopope, 2009).

EJÉNCHIX

Los ejénchix son seres malignos que igualmente suelen equipararse con los dhimanes.

Éstos aprovechan la noche, cuando la gente duerme, para introducirse en sus viviendas y

darles de beber de sus propios orines; varios de ellos gustan de chupar sangre humana a

granel, que almacenan en botellas para cuando no puedan salir a atacar.

Algunas personas piensan que el poder de los ejénchix “viene de nacimiento” y se con-

densa con la falta del sacramento de bautizo; sus capacidades no se transmiten por heren-

cia sino que son producto de su suerte, de su destino predeterminado por las potencias

astrales. Otros consideran que además de estos factores, ellos estudian magia para ir per-

feccionando sus habilidades y adquirir nuevos conocimientos.

Algunos ejénchix se convierten en guajolotes, otros sustituyen sus ojos por los de este

mismo animal y los resguardan en el fogón mientras salen a cometer sus fechorías; asimis-

mo, se despojan de sus piernas y las remplazan por largos carrizos. Estas entidades pue-

den inducir a sus víctimas en un estado de letargo del cual sacan provecho pues gustan de

abusar sexualmente de las mujeres, siendo considerados como seres de una libido exacer-

Page 8: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

88 1|2011

Ketzalcalli

bada. Los ejénchix atacan a señoras solitarias y enfermos, a quienes suministran sus póci-

mas de orín y ceniza hasta conducirlos a la muerte. Al respecto el curandero Tomás relata:

El ejénchix un hombre que se mete a una casa de noche. Si tú estás haciendo

alguna cosa a las 9 o 10 de la noche y todavía no duermes, vas a sentir mu-

cho sueño, como que ya quieres dormir y ya no aguantas el sueño. Ya te

acuestas a dormir, te duermes muerta, entonces ya se viene acercando el

ejénchix, cuando se llega en la puerta tú estás dormida y no vas a sentir na-

da, te va a levantar la cabeza y te deja caer. Entonces creo que ese tiene una

maña muy fea, si ve que no te despiertas, se va, agarra un traste, un plato o

una taza, se mea ahí; entonces agarra las cenizas del fogón, las mete, les da

la vuelta con la cuchara y te los echa en la boca como atole. Él te va a decir

que es atole pero uno no va a oír ni sentir nada.

Hay un ejénchix que es mujer y uno que es hombre, esa idea la agarra en un

libro de la magia, entonces uno que sepa mucho manejar, se puede hacer

ejénchix porque estudia bien el libro y agarra una sola carrera, un solo traba-

jo de hacer eso. Si una mujer sabe leer, agarra una sola carrera y eso lo que

le lleva a hacer; si un hombre agarra eso, él se hace.

El hombre se hace más feo porque él le goza a la mujer, hace que se duerma y

no lo siente. Entonces entra, se mete [a la casa]; sí es una mujer está sola, ha

salido su esposo a trabajar lejos, entra, se va en su cama donde está dormida,

le quita el pantalón y él te abusa, hace su gusto y a lo mejor te deja sin pan-

talón y él se va. Cuando despiertes, tu pantalón está aparte y estás desnudo y

no vas a sentir cómo le hizo para quitarte, nada más vas a sentir como amar-

goso y no sabes ni por qué, será que ese maligno ha entrado.

(Don Tomás, El Zopope, 2009).

Los teenek imputan mayormente la identidad de ejénchix a los nahuas que habitan en

municipios aledaños. Una abuela de la comunidad explica que anteriormente, cuando esta

clase de seres abundaban, la gente estaba “más pajiza, no tenían ganas de trabajar, se pon-

ían bien flacos, bien adoloridos pues la sangre toda la quitaron con ejénchix” (Doña María,

El Zopope, 2009). La misma anciana menciona que muchos de estos demonios murieron

cuando su “mero mandatario”, el mayor de los ejénchix, auguró su perecimiento, enton-

ces “todos se encerraron en una casa, a ponerse los ojos [de humano] y quitarse los de

guajolote pero ya no podían, por eso se acabaron” (Doña María, El Zopope, 2009), porque

si no vuelven a su estado antropomórfico después del amanecer, quedarán atrapados en su

cuerpo animal y así morirán.

Otros ancianos relatan que todavía en tiempos de la revolución había bastantes ején-

chix pero años después, cuando los cristianos comenzaron a ser bautizados, se acabaron

debido a que ya no imperaba la voluntad del diablo sino la de dios. En la actualidad esta

clase de seres pueden ser ahuyentados mediante oraciones de la religión católica.

Hasta aquí se han referido las características de los dhimanes, ponderando el origen de

su poder, sus componentes corpóreos y sus entidades asociadas, en lo que sigue se hará

alusión a la puesta en marcha de estas cualidades, ¿cómo es que los brujos teenek llevan a

la práctica su poder?

Page 9: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

1|2011 89

Ketzalcalli

TÉCNICAS DE BRUJERÍA

Entiendo por técnicas de brujerías a las aplicaciones que los dhimanes hacen sobre sus

dones sobrenaturales, es decir, son los fines prácticos en los que concretan su poder. Las

principales técnicas empleadas por los brujos consisten en conjuros emitidos a través de

súplicas maléficas, brebajes preparados con hierbas y otros componentes, confección de

entidades animadas que fungen como sustitutos de la persona a afectar; todos provocan

padecimientos corporales y enfermedades psicosomáticas.

Desde la concepción teenek, los brujos utilizan los mismos esquemas de culto de la

religiosidad católica, se encomiendan a santos de connotaciones perversas que les ayudan

a concretar sus fines y les brindan protección. Entre éstas figuran la Santa Muerte y San

Cipriano, quienes los amparan de peligros y los auxilian en la concreción de sus maldades

decretadas mediante hechizos. A su vez,

construyen alianzas con las almas de los

muertos, los cuales son sus emisarios,

vehiculando los males emitidos. Así lo

menciona un habitante de El Zopope:

Me dijo el curandero que me al-

guien me había dejado en cierto

lugar, enviaron ahí mi nombre. Lo

mandaron con los malos espíritus

porque ellos no lo vienen a dejar

personalmente. Yo lo soñé y tardó

[el mal] como cuatro años, de los

cuatro años ya llevaba yo como

cuatro caídas, me estaban fregando.

(Don Sebastián, El Zopope, 2009).

Los dhimanes complacen a las almas

con ofrendas de alimentos en las que

predomina el siete como “el número del

muerto” en tamales, velas y tragos de

aguardiente. Además les dedican sacrifi-

cios de gallos para pagarles sus favores;

ofrendas y sacrificios son practicados en

el camposanto durante la noche.

Los males por brujería son también

llamados “enfermedades puestas”, éstas se hacen perceptibles en dolores de cabeza, pier-

nas y otras partes del cuerpo, inflamación en el vientre, marcas que en ocasiones toman

forma de quemaduras, provocando un ardor interno y externo. También se visualizan en

forma de granos llenos de pus, que en cuanto son exprimidos, expulsan distintos objetos.

Todos estos síntomas se conjugan con debilidad, falta de apetito y vomito.

Las enfermedades puestas se materializan en piedras, espinas, tierra, granos de mazor-

ca, hilos, figuras de plástico, palos, hormigas, lombrices y gusanos que se mueven mien-

tras se introducen en el cuerpo y caminan hasta llegar al corazón para inducir la muerte.

La presencia de dichos artefactos y animales puede ser advertida en la interpretación de

los huevos cuya yema y clara se vierten en un vaso con agua después de una limpia corpo-

ral, en los sueños que alertan de habladurías, peligros y desgracias por venir; y pueden ser

Figura 4. Ritual terapéutico.

El Zopope, Tamapatz

Foto: Aguirre Mendoza (2009)

Page 10: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

90 1|2011

Ketzalcalli

extirpados por la succión que el curandero realiza con un carrizo sobre la parte del pacien-

te que considera afectada. Posteriormente se recomienda quemar los objetos en una

hoguera o depositarlos en botellas con alcohol, y sí éstos desaparecen como por suerte de

magia, se confirma la hipótesis de que se trataba de una enfermedad puesta.

Hay brujos que además de utilizar estos recursos, confeccionan muñecos de tierra pro-

cedente del panteón, los cuales representan a la persona embrujada y son enterrados en el

interior de su solar pero al ser hallados es igualmente aconsejable quemarlos para erradi-

car por completo el mal. En una localidad teenek de la Sierra Gorda de Querétaro se re-

gistró el caso de un dhiman elaboró un mono como réplica de la figura del diablo, subra-

yando entre sus características unos cuernos protuberantes sobre la cabeza. El muñeco

fue sepultado en el manantial comunitario para enfermar al resto de los vecinos que de ahí

beben. El conflicto comenzó con las disputas suscitadas por la posesión de tierras y gana-

do; fue un curandero el encargado de extraer el objeto maligno que “había sido activado

por medio de palabras que el brujo le rezó”, dotándolo así de poderes destructivos

(Aguirre 2008).

De acuerdo con estudios clásicos de magia (Frazer 1922; Mauss 1950), ésta opera me-

diante dos principios fundamentales: la ley de la semejanza en la cual lo semejante produce

lo semejante y la ley del contagio en donde las cosas que una vez estuvieron en contacto se

actúan recíprocamente a distancia. Así elementos como las velas, la ropa y el mismo nom-

bre de las personas pueden ser de gran utilidad en la concreción de diversos maleficios.

Velas, nombres y artefactos como los monos son la persona en sí. Éstos se movilizan

por una suerte de magia simpatética (Frazer 1922) en que prevalecen el principio de se-

mejanza, y por lo tanto, de contagio. Generalmente los monos son elaborados o ataviados

con prendas de vestir que pertenecieron al sujeto que se busca dañar. Algunos dhimanes

gustan de emplear agujas que clavan en el corazón y cabeza de dichos objetos animados

para así desencadenar dolores corporales, y en el peor de los casos, perjudicar al espíritu

hasta llevarlo a la muerte.

Como arriba lo mencioné, las velas y los monos son sepultados dentro de espacios sig-

nificativos en la vida de la persona para que así los hechizos surtan un efecto más eficaz.

En este sentido se concibe que la proximidad y la humedad de la tierra agudizarán las do-

lencias a causa de la frialdad contagiada por el mundo subterráneo, el mundo del diablo y

el de los muertos. En cuanto a los nombres, éstos son instrumentos indispensables en la

práctica de infortunios, basta pronunciar el apelativo de la víctima acompañado por ora-

ciones maléficas para capturar el alma y afectar al ser humano en su totalidad.

En el siguiente testimonio se observa como la envidia es uno de los principales factores

que hacen a los teenek enviar “enfermedades puestas”, en éste los objetos hechizados,

portadores de mal, tiene la capacidad de provocar desgracias en las personas aunque estén

lejos de la comunidad:

Estaba acostado adentro [del cuarto] y yo veía, no es como un sueño, es personalmen-

te, la carta que me la clavaban, ¡ya me pegaron el daño! Y vi que entraban las gotas de

agua en las paredes, después que me levanto y andaba bailando adentro, estaba temblando

la tierra. Algo que me agarraba y me daba vueltas, [era] como un aire; yo nada más brin-

caba, iba a caer. Entonces sé que eso no es normal, me hicieron algo. Después mi cuñado

me limpió con un huevo y ahí vio que me mandaron la brujería. Me dijo:

–Aquí está la virgen y aquí está la vela en el camino del camposanto. Le pi-

dieron a la virgen que no te ayudara nada, invocaron a los muertos.

Page 11: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

1|2011 91

Ketzalcalli

Yo digo que fue el tío de Arnulfo porque le tiene un libro y así también le

hizo a mi carnal. No sé cuántos huevos había dejado ritualizados y que según

estos huevos hablaban a medio día. El curandero ya dijo que ahí estaba una

porquería cerquita:

–Ahora nada más fíjate bien–me dijo–, yo te voy a decir pero tú vas a oír ahí,

tienen que hablar a medio día.

Así me hicieron el daño

(Anónimo, El Zopope, 2009).

En términos de Gell, los dhimanes se configurarían como agentes primarios, “seres inten-

cionales que son categóricamente distinguidos de ‘meras’ cosas y distribuyen su agencia

de manera efectiva” (Gell 1998: 17). Mientras que los objetos que emplean para hacer el

mal y las potencias con las que se confabulan constituirían agentes secundarios o artefac-

tuales ya que no son completamente autosuficientes, más bien, actúan “en conjunción con

determinados (humanos) asociados” (Gell 1998: 17), es decir, del poder que ostentan los

brujos para intervenir en el cosmos teenek.

APUNTES FINALES

Los dhimanes son una suerte de agentes inscritos en un pensamiento y en una lógica par-

ticular de ver el mundo, con sus acciones alteran el orden, perturban códigos sociales y

morales que imperan dentro de la vida en comunidad. En este sentido bien pudieran con-

siderarse auténticos trickster, embaucadores que transgreden la armonía del universo, una

suerte de practicantes de lo místico que con sus poderes manipulan el mundo para llevar a

cabo diversos propósitos.

Sin lugar a dudas la metamorfosis es uno de sus atributos centrales, otorgándole las

propiedades de multiplicidad y versatilidad, ya sea como un tepa, un ejénchix o un nagual.

Los teenek piensan que dichos seres pueden ser alejados portando crucifijos, sahumando

alrededor del solar con chile y copal, regando agua bendita en este mismo espacio, hacien-

do limpias y ofrendas que gestionen su protección ante los dioses benignos.

Los brujos no actúan con fines colectivos sino individuales, no son agentes unificadores

sino disyuntores. No obstante, sus acciones tienen un carácter expansivo, afectando las

varias esferas sociales y los diversos planos del cosmos. A diferencia de los curanderos que

pueden llegar a considerarse como humanos cercanos al ámbito sagrado, los dhimanes

pertenecen al orden de lo caótico y antinatural.

Aunque aparentemente operen de manera clandestina, son socialmente reconocidos;

gran parte de los miembros de su comunidad saben, o al menos sospechan, quienes son

los generadores de daño. Como varios teenek lo señalan: “se les nota en la mirada, en que

andan por la noche en el monte, en las cuevas, en el camposanto, nunca van a los costum-

bres de los santos”.

Pero los brujos no sólo provocan infortunios, también saben darles tratamiento y com-

batir las enfermedades puestas emitidas por otros brujos, pues gran parte de su vida espiri-

tual se desenvuelve en el plano de las sensaciones, por ello son perceptibles a ruidos, visio-

nes, olores, sabores, tactos que en el común de los hombres pasan inadvertidos. En este

mismo sentido Gallardo Arias, en su tesis de licenciatura sobre medicina tradicional y bru-

jería entre los teenek y nahuas de la Huasteca potosina señala que:

Page 12: EL PODER DE LOS DHIMANES BRUJERÍA ENTRE LOS · PDF fileen las diferentes esferas del cosmos. Los brujos serán vistos como sujetos ... que los brujos obtienen su poder median-te pactos

92 1|2011

Ketzalcalli

Los brujos son individuos dotados de poderes sobrenaturales para hacer el bien o el

mal, provocar o curar la enfermedad, manipular y controlar la voluntad de hombres y mu-

jeres, causar la muerte rápida o lentamente y en general alterar el curso natural de las

cosas. Por medio de ritos, ceremonias mágicas, recitación y oraciones especiales, el mane-

jo de muchas plantas y la comunicación con espíritus es que logran hacer brujería

(Gallardo 2000: 133).

En cuanto a la brujería, ésta ha sido vista por otros autores como “una amenaza cons-

tante frente al concepto de comunidad” o “una respuesta ante la pobreza, la injusticia, la

desigualdad, las enfermedades y la muerte” (Gallardo 2000: 101, 109). En este trabajo ha

sido preferible abordarla como un dispositivo de relaciones e intercambios intencionales

que se establecen entre los brujos y otras potencias malignas con el fin de provocar des-

gracias en los seres humanos. En este sistema de interrelaciones los dhimanes son formu-

ladores y portadores de un saber cosmológico que los configura como entidades con capa-

cidades para enlazar este y otros mundos, y es precisamente en estas atribuciones en las

que reside su poder.

BIBLIOGRAFÍA

Aguirre Beltrán, Gonzalo

1992 Obra antropológica VIII. Medicina y Magia. El proceso de aculturación en la

estructura colonia. México: Universidad Veracruzana–INI–FCE.

Aguirre Mendoza, Imelda

2008 Trayectorias perpetuas. Concepciones alrededor de la muerte entre los teenek

de la Sierra Gorda de Querétaro, Querétaro: Tesis de licenciatura. , Universidad

Autónoma de Querétaro.

2011 El poder de los seres. Organización social y jerarquía en el cosmos de los tee-

nek de Tamapatz, San Luis Potosí. San Luis Potosi: Tesis de maestría, El Cole-

gio de San Luis.

Ariel de Vidas, Anath.

2003 El trueno ya no vive aquí. Representación de la marginalidad y construcción

de la identidad teenek (Huasteca veracruzana, México). México: CIESAS–

Colegio de San Luís–Centro Francés de Estudios Mexicanos y Centroamerica-

nos.

Frazer, James

1951 [1922] La rama dorada. México: FCE.

Gallardo Arias, Patricia

2000 Medicina tradicional y brujería entre los teenek y nahuas de la Huasteca potosi-

na. México: Tesis de licenciatura, ENAH.

Gell, Alfred

1998 Art and Agency. An Anthropological Theory. Oxford. Oxford University Press.

Mauss, Marcel

1991 Sociología y Antropología. Madrid: Editorial Tecnos.

Thomas D. Norman

1974 Envidia, brujería y organización ceremonial. Un pueblo zoque. México: SEP.