21 de enero de 2006

En domingoHISTORIA

Compte yCarnilivariUna exposición en La Lonja recuerda lavida paralela de dosde los más relevantesarquitectos del góticomediterráneo

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ENTREVISTA

Lynn MagulisAutoridad mundial en bioquímica

«Ahora el problemaes que nadietrabaja con seresvivos, trabajan conordenadores»

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FOTOGRAFÍA

Valencia, cara al marUn paseocostumbrista por las postales delGrao y el Cabanyal

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La vida desde la dependencia

La Ley de Dependencia eshoy por hoy una realidad amedias. Entró en vigor conel año, pero no se aplicará,como pronto, hasta el mesde abril. La norma que hade sostener el llamado«cuarto pilar del Estado deBienestar» es vista porquienes se han debeneficiar de ella (mayoresy discapacitados) comomuy necesaria, pero conciertas lagunas demasiadoprofundas. Páginas 2 y 3.

Detalle del brazo de VicentaRubio, de 90 años,

representante de losusuarios de residencias en

el Consejo de Mayores de laC. Valenciana. FOTO: MANUEL

MOLINES

Alfons Garcia

■ VALENCIA

ROSA, Antonio, Vicenta yMarta están dentro deese grupo social al quepolíticos y expertos han

puesto el moderno nombre de «per-

sonas dependientes». Esto es, aque-llas que por razón de edad, enfer-medad o discapacidad precisan dela atención de otras o de ayudas im-portantes para realizar las activida-des básicas de la vida diaria(ABVD), que en la nueva jerga sonel cuidado personal y las tareas máselementales del día a día. Desde elpasado 1 de enero tienen una leyque refuerza sus derechos. Oficial-mente se llama Ley de Promociónde la Autonomía Personal y Aten-ción a las Personas en Situación deDependencia, aunque en la callesólo se la conoce por sus palabrasfinales e incluso los más irónicoshan reducido el acróstico a Lepra.

No obstante, no se aplicará has-ta abril, como pronto, porque faltanreglamentos que la desarrollen einstrumentos que la hagan operati-va (baremos, equipos de valora-ción). De todos modos, se re-comienda paciencia, porque la

implantación será gradual: en 2007sólo habrá prestaciones para la«gran dependencia»; la grave seatenderá entre 2008 y 2010, y la mo-derada, entre 2011 y 2014. Rosa, An-tonio, Vicenta y Marta (sus padres,para ser rigurosos, en el caso de estaúltima) coinciden en que una nor-ma de base era muy necesaria, aun-que la reciben con cautela —entreel papel y la realidad suele haber de-masiada distancia— y con la espe-ranza de que en su puesta en prác-tica en los próximos años mejorenalgunas cosas.

INDEPENDENCIA. Rosa Segre-lles tiene 51 años, vive sola y se dejaacompañar por una distrofia mus-cular degenerativa desde hace casitreinta, cuando los médicos le die-ron diez días de vida. La prórroga deese pronóstico errado la disfrutacon una vitalidad arrolladora y conun espíritu combativo que puedecon casi todo.

En septiembre pasado estuvomás de 24 horas encerrada en lasede del Instituto de Mayores y Ser-

vicios Sociales (Imserso), enMadrid, con unas decenas

de compañeros de

toda España del Foro de Vida Inde-pendiente para reclamar mejoras enla ley. Al final, el ministro Jesús Cal-dera los recibió, pero Rosa aseguraque los resultados han sido nulos.

El foro, del que ella es un refe-rente en la C. Valenciana, es una en-tidad joven, surgida gracias a inter-net, que ha crecido en 5 años congran fuerza debido a la claridad ycontundencia de sus planteamien-tos. Los foreros detestan el pater-nalismo y exigen la igualdad real yauténtica entre «verticales» y «per-

sonas con diversidad funcional»

(en este ámbito no hay capacitadosy discapacitados). Un ejemplo:¿existe igualdad si el sistema de ser-vicios sociales obliga a Rosa a acos-tarse a las 19.30 horas todos losdías? La respuesta es innecesaria.Por esta razón ella ha renunciado alservicio de ayuda a domicilio de tar-de y así, se juega la vida todas las no-ches, dice, y sabe lo que es dormiren el suelo cuando no logra pasar dela silla de ruedas a la cama.

El acceso a la vida comunitaria,social y cívica no aparece por nin-gún sitio en la ley y, es uno de susgrandes agujeros, sostiene Rosa.«Necesitamos la ley, pero que no

nos tomen el pelo. Esto no tiene

nada que ver con vida indepen-

diente. Para los que precisamos

atención varias veces al dia solo

hay arresto domiciliario», afirma. La gente del foro rechaza tam-

bién el copago —los usuarios de-berán aportar alguna cantidad si tie-nen un mínimo de ingresos—, quellaman con sorna «repago», porquetambién ellos han aportado y apor-tan impuestos. Y reclaman una asis-tencia de una tercera persona eltiempo que necesiten y elegida porellos. «Si nos ha de levantar y lim-

piar el culo…», comenta. El asis-tente fue una figura incluida al finalen la norma, aunque de manera bas-tante difusa, asegura.

Según los primeros borradoresde los decretos que desarrollarán laley, Rosa podría tener como máxi-mo una atención de 99 horas al mes,una cantidad con la que, insiste, no

hace nada. «¿Y el respiro de la persona

con diversidad funcional,

qué?», agrega. Porque la ley ha-bla del descanso de los cuida-dores, mediante la estanciatemporal de los discapacita-dos en residencias, pero «¿y

nuestras vacaciones, no tene-

mos derecho?», se pregunta.Los foreros rehuyen del

modelo de residencias. Lo ca-lifican incluso de «granjeri-

zación» entre ellos. Está en lasantípodas de su filosofía devida independiente y en igual-dad de condiciones: «La espe-

ranza de vida es cada vez ma-

yor y mucha gente será de-

pendiente en el futuro. Así que

no me pregunten a mí qué me gus-

taría, sino pensad vosotros dónde

os gustaría estar cuando llegue, tal

vez, ese momento».Para Rosa, la nueva norma no es

el cuarto pilar del Estado del Bie-nestar, como se ha repetido. El pro-

blema de base, señala, es que era«una norma para mayores;

nosotros entramos de rebo-

te y para acallarnos».

ESPERANZA. Vicenta Rubio tie-ne noventa años y sus ideas y filo-sofía de vida son bastante distintasde las de Rosa. Hace casi cuatroaños entró en la residencia públicade tercera edad de Velluters (Valen-cia). Entonces le faltaba una pierna;luego le amputaron la otra, siempre

por problemas de circulación. Sedeclara «muy feliz» y «considera-

da» en el centro. Su integración estanta que los internos la eligieroncomo su voz en la junta de gobier-no. Desde hace unos meses se co-dea incluso con políticos, ya que fuedesignada representante de losusuarios de residencias en el Con-sejo de Mayores de la Comunitat Va-lenciana.

La opinión de Vicenta tiene unvalor especial, ya que conoce la de-pendencia desde los dos lados: aho-ra, desde el geriátrico en el barrioviejo de Valencia en el que vive; an-tes de perder la pierna, como cui-dadora durante ocho años de su ma-rido, enfermo de Alzheimer. «A mí

me han solucionado la situación

aquí [en la residencia]», afirma. «Me alegro por la ley —añade

sonriente—, porque hay personas

que lo necesitan, que no están tan

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CUATRO USUARIOS COMENTAN LA NUEVA LEY PARA PROTEGER A AQUELLOS QUE NO PUEDEN VALERSE PORSOCIEDAD

La vida desde la dependenciaAdiós a ideas vetustas de caridad ybeneficencia. La Ley de Dependencia fijacomo derecho la atención de aquellosmayores de 65 y discapacitados que nopueden valerse por sí solos. El avance esimportante, pero podía haber sido másvaliente, dicen los propios usuarios. Comocasi siempre, cuestión de dinero.

Rosa Segrelles, en sucasa de Valencia, delantede su ordenador. FOTO:FERRAN MONTENEGRO

Los usuariosreciben la Ley deDependenciacomo necesariay positiva, peroobservanlagunasimportantes ensu articulado

Marta Alcantud, de19 años, con suspadres, Fracisco yCarmen. FOTO: MANUELMOLINES

Antonio Estela,junto con sumujer, Antonia.FOTO: FERNANDOBUSTAMANTE

atendidas como yo. Es muy nece-

saria para estas personas».Vicenta pone énfasis en dos

cuestiones: que haya más residen-cias publicas, como la de Velluters,y que exista provisión de fondos su-ficientes para poner en marcha to-dos los recursos necesarios, «por-

que aquí, en Valencia, no hay mu-

cho dinero. Será a largo plazo». «Y

que la gente sea respetuosa con las

rampas y que haya bastantes»,aña-de. Que no le pase, recuerda, comocuando fue al Palau de la Generali-tat y tuvieron que subirla a brazo dospersonas.

Su secreto es su carácter positi-vo: hacer y no decir y admitir lo quete toque. «Si llorando me crecieran

las piernas», comenta.Algunas de las prestaciones re-

cogidas en la ley también podríanser aplicables para Vicenta, ya quelos fines de semana se va a su casaen el barrio de la Isla Perdida, en lacapital, y la atiende su hija con laayuda altruista de algunas amista-des, ya que ella está algo tocada dela espalda.

FUTURO. Marta Alcantud tambiénlleva la sonrisa pintada en el rostro.Tiene 19 años y sufre una parálisiscerebral de nacimiento, pero sus pa-dres, Carmen y Francisco, se es-fuerzan porque lleve una vida lo másnormal: dos días a la semana va a ungrupo de teatro y todos los días acu-de al centro Hort de Senabre, de laAsociación Valenciana de ParálisisCerebral (Avapace).

Francisco, profesor de Psicolo-gía Evolutiva en la Universitat deValència, subraya que el ocio es underecho para el desarrollo personaly no aparece en la Ley de Depen-dencia. En la actualidad, esta partede la vida en las personas con pará-lisis cerebral se basa en lo que lospadres puedan hacer o pagar y en laayuda de voluntarios, explica. «Es

un tema grave —continúa—, por-

que sin un ocio sensible acaban

siendo caldo de cultivo de trastor-

nos psiquiátricos».En consonancia con la opinión

de Rosa Segrelles, Alcantud consi-dera que la norma está orientada ha-cia la parte final de la vida y «poco

pensada para los que tienen la vida

por delante». Como los niños de 0 a3 años. «Se metieron en la ley como

apostilla, pero no estaban, y somos

los padres los que asumimos el día

a día (levantarlos, arreglarlos, lle-

varlos al centro), que se traduce en

esfuerzo económico», relata. Laconsecuencia es también un costepsicológico fuerte, agrega: «No ten-

go datos precisos, pero muchas pa-

rejas acaban en desastre».Las viviendas tuteladas o la fór-

mula del copago son otras solucio-nes mejorables en la ley, en opiniónde este profesor, responsable de uncentro de atención temprana que laUniversitat proyecta en colabora-ción con la Conselleria de BienestarSocial.

Sin embargo, como las otras vo-ces reflejadas en estas líneas, coin-cide en la necesidad de la norma,que valora como «buena, pero me-

jorable». Aunque tendemos a creerque el papel soluciona sólo los pro-blemas, Francisco invita a esperara ver cómo se reglamenta y qué

aportaciones económicas llegan delas administraciones. Porque la leyla hace el Gobierno central, pero lafinanciación corre al 50% con las au-tonomías y las entidades locales.

REALISMO. Antonio Estela espe-ra, sobre todo, que la Ley de De-pendencia suponga alguna ayudapara su mujer, Antonia, dedicadapor completo a él desde que hacecuatro años le amputaron una pier-na. La otra la perdió después. Connormalidad, sin dramatismo, expli-ca que se le gangrenaban a causa deuna obstrucción de las arterias pro-ducida por la nicotina del tabaco.«Nunca lo hubiera esperado. Mis

amigos ni se lo creen cuando lo

cuento», comenta con una sonrisa.Antonia dejó entonces su traba-

jo en la hostelería para ocuparse desu marido. Había oído que la nuevaley contempla ayudas para las cui-dadoras y acudió hace poco a Bie-nestar Social para informarse, perono sacó nada en claro. Pese a estarya en vigor, no hay folletos, ni do-cumentos, ni formularios de solici-tudes. Hasta abril parece que la nor-

ma será sólo una realidad jurídica,pero no empírica.

«Yo no me lo creo», asegura An-tonia al ser preguntada sobre la po-sibilidad de nuevas prestaciones. Laexperiencia de los últimos años lehace ser escéptica. Este matrimo-nio afirma que son muy pocas lasayudas que ha recibido este tiempo.Tuvieron que cambiar el piso por unbajo, adaptar el baño y el vehículo,y todo ha salido de su bolsillo. Loúnico, precisa él, la silla motorizadaque estrenó las últimas Navidades,ya que después de la última opera-ción de corazón necesita un sumi-nistro extra de oxígeno.

La ayuda que recibe, dice Anto-nio, es de Cocemfe (la asociación dediscapacitados físicos), por la quevan dos días a la semana a estar conél y hacerle compañía.

Este electricista de 61 años no seha encerrado en casa. Todas las ma-ñanas y todas las tardes procurareunirse con sus amigos de siempre,en el distrito marítimo de Valencia,y jugar su partida de cartas. «Y ha-

blar, que es su afición», añade An-tonia.

«Espero que se pueda conseguir

algo», apunta Antonia sobre las ex-pectativas levantadas. La pareja notiene grandes motivos ahora para eloptimismo: acaba de vivir una cir-cunstancia que ilustra la vida real deaquellos que no pueden valerse porsí mismos.

Antonia ha tenido que renunciara una operación quirúrgica, porquela Administración no se hacía cargode atender a su marido mientras es-tuviera convaleciente: «Me dijeron

que me buscara la vida. No se dan

cuenta que hoy todo es diferente, los

hijos tienen sus trabajos, sus vi-

das… Y en qué situación se queda

de él… Nadie piensa que nos pue-

de pasar a cualquiera».

R SÍ MISMOS

N O ha trascendido toda-vía a la opinión públi-ca, pero nosotros

estamos perfectamente infor-mados del secreto «dossier

Alonso», redactado por laPolicía Local de Valencia (apartir de ahora PLV).El dossier obra en poder deMiguel Domínguez, concejalde Seguridad Ciudadana delayuntamiento de Valencia, y sunúmero es AZ/34567/2007.En él se inicia un expedientesancionador contra Bernie

Ecclestone, el magnate de laFórmula 1 automovilística, y elpiloto español Fernando

Alonso, por «haber infringi-

do, presuntamente, varios

artículos del código de la cir-

culación el 15 de enero del

año en curso».

Efectivamente. Durante la pre-sentación del nuevo bólido quepilotará Alonso la próximatemporada —el McLarenMP/422 Mercedes—, que tuvolugar en un circuito urbano deValencia, la PLV detectó variasy presuntas infracciones, queson las siguientes.

1.ª «El vehículo perdió 12 delas 6.500 piezas que lo com-ponen, diseminándose por lacalzada con riesgo de males-tar».

2.ª El conductor, «de nombreFernando Alonso, no respe-tó el paso de cebra existenteen la calle Menorca, obligan-do a M.J.S. a una maniobrapeatonal evasiva».

3.ª El conductor «hizo casoomiso de las luces regulado-res del tráfico en el puentede Monteolivete, pasandocon el color rojo y no con elverde».

4.ª El conductor «promoviópresuntamente la contami-nación acústica y un presun-to delito ecológico cuandocirculaba sin el silencioso encondiciones de reglamenta-ria insonoridad por la auto-pista del Saler, a la altura delParque Natural de LaAlbufera».

5.ª El conductor «hizo variosarriesgados trompos, a pesarde su pericia, en varios tra-mos del circuito de exhibi-ción, poblados de personas,

mujeres, niños y aficiona-dos».

6.ª El conductor «puso en peli-gro de choque la esculturallamada El Parotet deMiguel Navarro sin necesi-dad de ello».

7.ª El conductor «hizo casoomiso de poner las lucesindicativas del cambio dedirección o intermitentesdurante varios cambios dedirección del recorrido inte-rurbano».

8.ª El conductor «circulóvarios minutos con las luceslargas o de carretera sinvehículos de frente a menosde 300 metros, causandodeslumbramiento a quienescirculaban por la calleSorní».

9.ª El conductor «produjo eltriple de contaminación porCO2, según las medicionesde la sección científica de laPLV, que veinte autobuses dela EMT, 568.000 bicicletas ytodas las fábricas de China».

10.ª El conductor «dio positivoen el control de alcoholemiapor Coca-Cola efectuadotras el espectáculo del Circdel Soleuil y el castillo defuegos de artificio».

11.ª El conductor «efectuósorderas por la potenciadel McLarenMP4/22 envarios ciudadanos alejadosdel circuito, que caminabanpor la avenida de Fernandoel Católico, con resultadode presunta afectación tim-pánica».

12.ª El conductor «seguramen-te por la velocidad y las apu-radas de frenada consumióparte de la goma de los neu-máticos, ocasionando huma-reda, olor a goma quemada einhalación nociva e involun-taria de ésta».

Hasta aquí, según las fuentesde máxima fiabilidad consul-tadas, el cuerpo principal delinicio de un posible expe-diente sancionador contraFernando Alonso y BernieEcclestone, el patrón de laFórmula 1. Al parecer, estáprevisto que el concejal deSeguridad Ciudadana, MiguelDomínguez, convoque unarueda de prensa la próximasemana, en el restaurante delOceanogràfic, para informarpúblicamente de lo que ya seconoce como «el casoAlonso».

El casoAlonso

AntonioVergara

SALVE Y USTED LO PASE BIEN

Un ninot de Fernando Alonso de las pasadas Fallas. FOTO: LEVANTE-EMV.

L

«Mucha genteserá dependienteen el futuro, asíque no mepregunten a míqué quiero, sinopensad vosotrossi querréis estaren casa o en unaresidencia»

Vicenta Rubio, en eljardín de la residenciade Velluters, en Valencia.FOTO: MANUEL MOLINES

Marco R. Nobile* ■ VALENCIA

FOTOS: CATALOGO EXPOSICIÓN

PERE Compte es una fi-gura clave de la arqui-tectura gótica valen-ciana del siglo XV, sin

duda el período de mayor pro-yección internacional de la his-toria de Valencia. Pere Comptefue activo entre 1454 y 1506, fun-damentalmente en Valencia. Fuemaestro de las obras reales, ma-estro de obras de la ciudad y dela catedral de Valencia y funda-dor del gremio de canteros.Todo ello, unido a su extraordi-naria longevidad –52 años devida profesional- hizo que suprestigio e influencia diera for-ma a su época.

Su actividad es conocida do-cumentalmente en la Lonja de Va-lencia (ahora declarada Patrimo-nio de la Humanidad), la catedralde Valencia (Arcada Nova) las de-saparecidas torres del PortalNou, el almudín de la ciudad, elEstudi General etc., lo mismopuede decirse, en distinta medi-da sobre las catedrales deOrihuela, Tortosa y Zaragoza y delos palacios del obispo de Torto-sa en Valencia y de los duques deGandía –Los Borja- en la mismaciudad. Otras muchas obras, ca-rentes de documentación, pue-den atribuirse al maestro o a sucírculo más estrecho: la iglesia(ahora revestida) y claustro de larecordació de la cartuja de Por-taceli, las iglesias de Villena, On-teniente, el Carmen de Valenciay un largo etcétera.

Con todo, el mayor interés desu obra está en el hecho de ha-ber llevado hasta sus últimasconsecuencias las investigacio-nes del arte de la montea y cor-te de piedras –la moderna cien-cia de la estereotomía iniciadaspor su maestro Francesc Baldo-mar. Es sabido

que estas investigaciones serí-an retomadas en los capítulos co-rrespondientes al renacimientoespañol y francés y acabarí-an dando lugar a fi nes delsiglo XVIII a la actual ge-ometría descriptiva.

Matteo Carnilivari diNoto es un arquitecto sici-liano con un itinerario paralelo

al de Pere Compte. Fue autor delos grandes palacios palermita-nos del mercader Abatellis y delbanquero Aiutamicristo, es másque probable autor de la bellísi-ma iglesia de Santa María de laCatena en Palermo y consejerode las obras del palacio real (Ste-ri) de Palermo. Su prestigio e infl

uencia en Sicilia fue similar alde Pere Compte en Valencia ysu reino. Pero no es esto lo

único que los une. Los notablesparecidos formales y comunes

soluciones técnicasde ambos maestrosban a la herencia drecta del maestro Fdomar (Valencia, 14simultánea muertaños, de Pere ComCarnilivari invita a rjuntamente la obra quitectos. Cabe señobras de ambos maconvertido en susciudades en edificiocos y de alto valor

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LA LONJA DE MERCADERES ACOGERÁ UNA IMPORTANTE MUESTRA SOBRE LA ARQUITECTURA GÓTICA VALENEXPOSICIÓN

La simultáneamuerte hace 500años, de PereCompte y MatteoCarnilivari invitaa recordarconjuntamentela obra de ambosarquitectos.

Compte &CarnilivariA partir del proximo miércoles y hasta el15 de abril podrá visitarse la muestra, queorganizada por la Generalitat, elAyuntamiento de Valencia, el Consorciode Museos, la Fundación Pere Compte yUnesco Valencia, recoge la vida y la obraparalela de dos de los arquitectos másrelevantes del gótico mediterraneo: PereCompte y Matteo Carnilivari.

Gárgola de la Lonja deValencia.

Detalle de laescalerahelicoidal.

Maqueta de lacapilla real deValencia encontrucción.CarlosMartínez.

Panel de la Ascensión.Bajorrelieve de un retablo depiedra. Onda. Museo Municipal.Atribuible al círculo de AntoniDalmau.

Ventana de la torre de la Lonjade Valencia, de Pere Compte.

FOTO J. BÉRCHEZ.

Matteo Carnilivari. Ventana delpalacio Abatellis de Palermo.

s de las obrass acaso se de-directa o indi-Francesc Bal-425-1476). Late hace 500

mpte y Matteorecordar con-de ambos ar-ñalar que las

aestros se hans respectivasos emblemáti-simbólico: la

lonja y la catedral en Valencia yel palacio Abatellis (ahora Galle-ria Regionale de la Sicilia) y San-ta María de la Catena en Palermo.

La exposición que celebra lamemoria de estos arquitectos nodebe limitarse a recordar la apa-riencia o la piel de sus obras. Lahistoriografía contemporánea dela arquitectura medieval no atien-de solo a aspectos morfológicossino, sobre todo, a cuestionestecnológicas. Cabe preguntarse–haciendo pedagogía de la histo-

ria de la ciencia como se cons-truyeron estos edifi cios, como seorganizaron las obras y que téc-nicas se emplearon. En definiti-va como pudieron realizarseobras que hoy, acaso, no sabría-mos hacer. El contexto de la ar-quitectura gótica mediterránea yel de la arquitectura europea co-etánea muestra hasta que puntoestos maestros fueron auténticoshitos de la historia de la arqui-tectura universal.

* Autor del texto del catálogo.

NCIANA E ITALIANA

E l seis de febrero minovela sale a la calle.Es algo que me da

miedo. Es algo así como sifuera a parir, aunque una vezle pregunté a Ana María

Matute qué había de cierto eneso de que publicar libros eracomo tener hijos y me mirócomo si fuera a soltarme unafresca de esas que te dejantiesa. No lo hizo. Después deunos segundos, sin cambiar elgesto, me dijo que no. Enrealidad, con la mirada meestaba diciendo que cualquie-ra que pensara eso, yo inclui-da, era un poco idiota, perocon la palabra me explicó quelos que mantenían esa opiniónno eran padres o madres, queun hijo no se podía compararcon ninguna otra obra. Si ellalo dice, verdad será. Yo, comono los tengo, todavía, meangustio sobremanera alpensar que en menos de tressemanas el objeto de misdesvelos durante los cuatroúltimos años dejará de perte-necerme sólo a mí y podrá serde cualquiera que lo compre,si es que alguien lo compra. Eso es lo que me da miedo.Pero miedo, miedo. Porque siyo, en lugar de ser escritorafuera nada más que lectora,tendría serias dificultadespara decidir en qué me gastolos dieciocho o veinte eurosque vale el libro. Por ejemplo,si tuviera que elegir entre lahistoria de ficción que mecuenta un escritor de verdad ola real como la vida queesconde entre sus páginas"Ana María Ríos: Boda,

cárcel y fama", ya me dirán.No hay color. Preferiría milveces que la gallega de

Cancún me explicase cómo sesintió durante la semana queestuvo en la cárcel, que no fuesu marido el que le colocó lapistola en la maleta, que no esanoréxica pero que Dios la hapremiado con una delgadezque da envidia (sic), que llorócuando vio su desnudo enInterviú, o que se plantea sercolaboradora de un programade la tele. Yo, con lo de larevista no me meto, y nocomo hacen sus vecinos deArcade, vergüenza ajena medan, como si aquí cualquierapudiese opinar de lo quehacemos con nuestras vidas,hombre, aunque si me lopreguntan también tengo quedecir que si yo tuviera pezo-nes que se parecieran a roda-jas de mortadela, rulajas, quedice mi abuela, hubiera agra-decido que usaran un poquitode photoshop.

El libro, el de Ana María, sepublica este fin de semana,

primero en gallego, pero estoysegura de que no tardará ensalir también en castellano.Eso me inquieta, porque esque así no se puede competir.Estoy por proponer a mieditorial algo parecido, ya sealo de Cancún o lo de Interviú,lo que mejor les venga, aun-que no tengo buenas experien-cias en ese sentido. Cuandopubliqué la novela anterior,"La larga noche", como iba deprostitutas de principios delsiglo XX, sugerí a mis editoresde entonces que regalásemosbonos de descuento paralocales de alterne a la comprade cada ejemplar, al estilo deManolo Rivas, que plastificó"El lápiz del carpintero" ymetió uno, no un bono: unlápiz, en la novela. Todavía lostengo, el lapicero y el libro.Los editores me pusieron lamisma cara que Ana MaríaMatute. Así me fue. Y con estano quiero que me pase lomismo. Ya que he llegadohasta aquí, de verdad se lodigo, lo que me gustaría esque si Paulina Rubio y yocoincidiésemos al bajar de unavión, como le pasó a lapeluquera, los fotógrafosvinieran a hacerme las fotos amí y no a ella. No sólo por mibien, también por el de laliteratura, ojo, para que porahí dejasen de decir queEspaña es un país de paletosen el que sólo leen cuatrocosa que, por cierto, yo niegosiempre que puedo. Así que,ya lo saben: si quieren, paraleer ustedes mismos, cóm-prense el libro de la gallega,que no sólo no les juzgo sinoque les comprendo, pero sitienen algún regalo pendientellévense cualquiera de ficción,aunque no sea el mío. Yo, porsi acaso, iniciaré los contactoscon Interviú, a ver qué pasa.

A ver qué pasa

Carmen Amoragapmaspmenos2004@yahoo.es

PALABRAS MÁS, PALABRAS MENOS

Preferiría mil vecesque la gallega de

Cancún me explicasecómo se sintió

durante la semanaque estuvo en la

cárcel, que no fue sumarido el que le

colocó la pistola en lamaleta, que no es

anoréxica pero queDios la ha premiado

con una delgadez queda envidia (sic), quelloró cuando vio su

desnudo en Interviú,o que se plantea sercolaboradora de unprograma de la tele.

Ana María Ríos. FOTO: EFE

Yo dit Pere Comte mestre de les obres de la Seu perquant so estatpresent vehent e sabent en lo continuar de la obra de la arcada devantlo campanar ab aquest escrit de la mia ma fas testimoni en veritat comtotes les depeses de la propasada setmana del primer item fi ns aldarrar son ver, e prenen suma de... FOTO J. BÉRCHEZ.Libro de fábrica de la Arcada Nova de la catedral de Valencia con firmaautógrafa de Pere Compte. Archivo catedral de Valencia.

La portada de la Trinidad.

Utiles dearquitecto y decantero de laépoca.

Dolors Palau ■ VALENCIA

FOTO: FERNANDO BUSTAMANTE

NO resulta difícil imagi-nar a una Lynn Margu-lis veinteañera insis-tiendo hasta quince ve-

ces para ver publicado uno de losprimeros artículos en los que re-movía, como a menudo ha sucedi-do a lo largo de su carrera, los pila-res de la tradición científica, conuna inteligencia y brillantez quehan reconocido nueve doctoradoshonoris causa, entre ellos el de laUniversitat de València. No lo es,sobre todo, después de asistir estejueves a su rebelión contra las cá-maras televisivas o las luces del au-ditorio del Museo de las CienciasPríncipe Felipe, que se negaban aapagarse por completo. Pero, al fi-nal, esta bioquímica cuyo nombrefigura desde hace años en los libros

de texto, logró, en su particular cru-zada contra un medio que detesta,que las cámaras grabaran su voz sinenfocar su rostro. E incluso que lasala de conferencias que reunía adecenas de personas, muchos deellos profesores que enseñan en elinstituto sus aportaciones al cono-cimiento de la vida y la evolución,quedara a oscuras. Y todo sin per-der el sentido del humor ni el espí-ritu divulgador, que mantenía, pa-

sadas las diez y media de la noche,dispuesta a realizar la entrevista, enel hall del hotel donde se hospeda-ba, ya sólo con un hilo de voz, des-pués de la conferencia y el colo-quio, tras atender a cerca de un cen-tenar de fans que hacían cola paraque les dedicara un autógrafo del li-bro Els inicis de la vida (Brome-ra-PUV) y unas palabras.

—Dice que hay una especie de

trampa lingüística al preguntarse‘¿qué es la vida?’ ¿Por qué entien-de que es más correcto hablar dela vida como verbo que como sus-tantivo?—Seguramente la vida es materia,pero es una materia muy peculiar,porque siempre existe un flujo deenergía. Una persona no es la mis-ma, en esencia, que diez años antes,hay un intercambio permanente. Elproceso de la vida es continuo des-

de que empezó hace 4.000 millonesde años hasta ahora, sin parar. Ésees el flujo; entonces, en lugar desustantivos debemos pensar en lavida como verbo. Hay muchas for-mas de energía: calor, radioactivi-dad, luz, etc., pero la vida sólo pue-de utilizar luz, y muy específica-mente, un espectro visible de ella.Por tanto, se necesita energía y flu-jos de materia en cantidades apro-piadas, siempre con agua. No hayvida sin agua. —Una de sus líneas de trabajo hapartido de cambiar el punto de vis-ta sobre las bacterias, considera-das tradicionalmente gérmenespatógenos. ¿Qué papel han de-sempeñado las bacterias en laevolución?—Los evolucionistas, que en gene-ral han sido zoólogos, no han estu-diado el tipo de vida, que es lo másimportante para la evolución. Esimposible ser evolucionista y zoó-logo a la vez, porque estos últimosconocen a los animales, pero losanimales son menos de una quintaparte de la vida, compuesta tam-bién por bacterias, protistas, plan-tas y hongos, los cuatro reinos quepertenecen a la botánica. [Ser evo-lucionista y zoólogo] es como in-tentar estudiar a Shakespeare enchino. Se puede hacer algo, pero nomucho. Los elementos de la biolo-gía son células bacterianas (proca-tiotas y eucariotas) y éstos no hansido estudiados por quienes se lla-man evolucionistas. A menudopasa que la gente que quiere saberde un tema no es la misma que loestudia por tradición. La verdade-ra sociología son relaciones socia-les entre organismos de la mismaespecie. Muy probablemente, conlas bacterias y protistas se puedeestudiar sociología mucho mejorque con la gente.—¿Por qué no se había tenido encuenta a estos microorganismos ala hora de estudiar la evolución?—Cuando empecé a estudiar, elhecho que generaba más confu-sión era que teníamos la apariciónde animales perfectamente bienformados hace 500—600 millones

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«Decir que con el genoma se van a curar enfermedades es pura propaganda»

PerfilL YNN Margulis (Boston, 1938)

forma parte, desde hace dé-cadas, del selecto grupo de loscientíficos más relevantes delpanorama internacional. Profe-sora del Departamento de Geo-ciencias de la Universidad deMassachussets y miembro de laAcademia de Ciencias de EE UU,esta bioquímica ha profundizadoen cuestiones clave en la investi-gación de los orígenes y funcio-namiento de la vida, desde la im-portancia de los microbios y lasimbiosis en la evolución a laclasificación de los seres vivosen cinco reinos, pasando por lasdestacadas aportaciones a la hi-pótesis Gaia sobre la autorregu-lación del ecosistema terrestre.Licenciada con apenas 20 años,conoció en la Universidad de Chi-cago a quien fue su primer mari-do, el astrónomo y divulgadorCarl Sagan.

Lynn

Lynn Margulis,fotografiada paraLevante-EMV en lapresentación de sulibro, editado porla Universitat deValència.

ENTREVISTA

Margulis Autoridad

mundial enbioquímica

de años y no teníamos nada deba-jo. Aunque hay muchísimas rocascon fósiles antes, no se sabía queexistía un mundo microbiano y sedecía que, por el carácter azarosode la vida, se necesitaron muchosaños de combinaciones correctaspara que pudiera surgir. Me pare-ce que eso es una tontería. Ahorasabemos que muy poco después dela formación de rocas sedimenta-rias, se pueden estudiar en ellas losfósiles. En rocas metamórficas, enrocas ígneas no se puede estudiar,porque la temperatura fue tan altaque está destruido el registro fósil.Hay muchas razones, pero, sobretodo, por la ignorancia total sobreestos microorganismos. Dos si-glos después de que se descu-briera el microscopio, se utiliza-ba como un juguete, para mirar in-fusiones... Además, la microbio-logía, que es muy importante parala alimentación y para la salud, es-taba vista como algo claramenteantiintelectual. —Defiende que la evolución sedebe más a un proceso de simbio-sis que a las mutaciones al azar,como aseguran los neoevolucio-nistas.—Estudié genética porque me in-teresaba la evolución y no queríaanalizar huesos. Nunca he tenidointerés en ellos, en cambio, siem-pre lo he tenido en la historia de lavida. Como genetista, me dijeronque las innovaciones en la evolu-ción vienen a través de la acumu-lación de mutaciones al azar y elcambio de una especie a otra im-plica más acumulación, pero nohay ninguna diferencia cualitativa.Bueno, busqué en las revistas cien-tíficas ejemplares para estudiar elpaso de una especie a otra y des-cubrí que no había evidencia algu-na, porque el 99% de las mutacio-nes son deletéreas, altamente da-ñinas. Por tanto, si pones sustan-cias mutantes en una levadura o encualquier cosa que estás estudian-do, tienes más muertos. Nunca con-sigues crear nada. Es como el trajedel emperador: está desnudo. Em-pecé con la genética citoplasmáti-ca (fuera del núcleo de la célula) yme di cuenta de que estamos estu-diando células dentro de células,porque no hay genes desnudos, nitampoco hay genes egoístas, por-que éstos, por sí mismos, no pue-den hacer nada.—Presenta el genoma humanomás como un registro que comomotor del proceso de evolución.Desde este punto de vista, ¿quépuede aportar el hecho de desci-frarlo? ¿Se han generado quizásdemasiadas expectativas?—Hay una regla que está clara: siel hombre puede descifrar el ge-noma y alguien lo paga, se va a ha-cer. El problema es que el genomaes sólo una parte. Creo que hemosobtenido buenos resultados parareconstruir el pasado, por eso meinteresan los genomas; pero decirque con el genoma se van curar en-fermedades es pura propagan-da.Vas a tener una serie de letras,pero no vas a saber para qué sir-ven. Ahora el problema es que na-die trabaja con seres vivos, traba-jan con ordenadores. Venden máslos ordenadores. —La hipótesis Gaia, que usted hacontribuido a desarrollar junto aJames Lovelock,plantea que la Tie-

rra es un ser vivo que se autorre-gula en una simbiosis a nivel pla-netario. Pero, ¿dónde están los lí-mites ante las crecientes amena-zas que sufre el planeta?—La temperatura del planeta nun-ca ha pasado, de forma global, ahielo o agua hirviendo. La Tierranunca ha perdido el agua, nunca seha desecado toda, nunca ha cam-biado la atmósfera hasta conver-tirse en inviable para cualquiertipo de vida. Había unos límites,pero nunca se han superado.¿Cómo funciona la regulación? Elsistema que ha utilizado Gaia es elde la extinción: en el momento queun tipo de organismo cambia de talmanera que los otros no pueden vi-vir, se extinguen. Durante toda lahistoria se ha producido la alter-nancia de una gran serie de oríge-nes y extinciones. Por cada espe-cie actual, hay mil que se han ex-tinguido. Y eso regula.—Entonces, ¿se aborda de mane-ra catastrofista lo que, hasta cier-to punto,ha sido la norma habitual?—Bueno, si tienes dos años y tupadre muere, es una tragedia, parati y para tu familia, pero no para lahistoria del hombre. En el mismosentido [respecto al conjunto deseres vivos], el hombre no es nada:nos importa, claro, porque somoshombres, pero no tiene nada quever con Gaia, porque hemos per-dido muchísimos mamíferos, to-dos los del Paleoceno han desapa-

recido. Lo que Lovelock ha mos-trado, y me parece que es verdad,es que, en efecto, estamos sufrien-do el calentamiento global y la can-tidad de CO2, sin duda, está su-biendo, pero estaba mucho másalta en el pasado, porque durantela historia de la vida, el CO2, quees muy elevado en Marte y Venus,ha bajado. En los últimos años, lasemisiones de CO2 están aumen-tando a unos niveles que es difícilcontrolar y, si no se pone remedioy se extingue esta forma de vidahumana, vamos a tener un marca-dor fósil que es el automóvil.—En una de sus obras afirma queposiblemente llegue un día en quesexo y reproducción queden des-ligados, como ha ocurrido en elpasado. ¿Se está refiriendo a laclonación?—Lo que existe hoy en día no esclonación, es reemplazar una célu-la o núcleo con otros. Clonación se-ría dividir el óvulo sin fertilizaciónen dos partes, en cuatro partes y te-ner gemelos o cuatrillizos. Los ex-perimentos que se hacen ahora sonpura mentira, consisten en reem-plazar núcleos de fertilización connúcleos de la madre. Es un tipo declonación, pero no es en verdadclonación. Además, todos se mue-ren. La madre de uno de mis nietos,que trabaja en estas cuestiones, medecía que las personas que estánclonando vacas por este procedi-miento utilizan microscopios tanmalos y desconocen tanto lo que es-tán haciendo que, por eso, el 90% delas veces no funciona. Es fácil au-mentar el éxito de forma sencilla:con gente que sepa qué hace, pero,en general, no comprendo porquéquieren usarlo para la reproduc-ción si el problema es el control denacimientos.—Ha trabajado durante años en elproyecto de la NASA de búsquedade vida fuera de la Tierra. ¿Confíaen que estas investigaciones arro-jen resultados positivos?—La NASA tiene un documento,una ley que dice que debe buscar yestudiar evidencias de la vida en eluniverso, allá donde estén. Por cier-to, es la única ley de todo el go-bierno que dice que se tiene que es-tudiar algo. Pero, de momento, notenemos evidencias de vida.—¿Es factible pensar que estemosasistiendo en otros planetas a es-tados anteriores de vida compleja,como pasó en la Tierra hace millo-nes de años?—Me parece que hay posibilidadesde que hubiera empezado la vidaen otros planetas, pero de que exis-ta ahora no hay evidencias. Es po-sible que alguien descubra vida enestado latente, no activo, como es-poras, quistes, semillas que no es-tán activas, pero sobreviven. El he-cho de que haya agua está muybien, pero no es suficiente. Para re-construir la historia de la vida de-bemos estudiar primero los plane-tas del Sistema Solar, porque deotros sistemas es muy difícil. Demomento, no hay evidencias devida pasada, pero es mayor la pro-babilidad de que existiera en el pa-sado, porque había meteoritos ybólidos. Y seguro que había agua,mucha más agua, en las primerasetapas de Marte y Venus. Es posi-ble que hubiera vida. Y debemosbuscar fósiles, pero no hay nadaque me obligue a creer.

“ Ahora elproblema es

que nadie trabajacon seres vivos,trabajan conordenadores.Venden más losordenadores.

“ Durante todala historia se

ha producido laalternancia deuna gran serie deorígenes yextinciones. Porcada especieactual, hay milque se hanextinguido.

“ Hayposibilidades

de que hubieraempezado la vidaen otros planetas,pero de que existaahora no hayevidencias.

E L 11 de marzo de hacecasi tres años un atenta-do llenó Madrid de

muertos. El gobierno del PPconvocó una manifestacióncontra esa barbarie y -cada unoen su ciudad- acudimos a la citamillones de personas. No mira-mos que ese gobierno nos habíametido en una guerra delirantesaltándose todas las reglasdemocráticas a la torera. El pre-sidente Aznar no consultó alParlamento para entrar o noentrar en esa guerra y sinembargo la tarde de la manifes-tación allí acudimos a gritarcontra el atroz atentado. Enesos días Aznar, Rajoy, Acebes

y Zaplana mintieron cínica-mente sobre los autores de lamasacre: aún así, allá que fui-mos a manifestar nuestra repul-sa. Lo más importante era quela democracia saliera a la callepara aumentar el tamaño deuna solidaridad que en momen-tos tan terribles necesitan lasvíctimas y su gente más cerca-na. La democracia salió a lacalle y se metió la rabia dondele cupo: ahí su grandeza, la deno responder nunca a la violen-cia con violencia. Sí con pala-bras. Sí, también, con el silen-cio a que el dolor obligamuchas veces. A las pocashoras de aquella manifestación,el Partido Popular perdió laselecciones y el país cambió degobierno. Esa misma noche,Aznar, Rajoy, Acebes, Zaplana yalgunos medios de comunica-ción se marcaron un objetivo:dinamitar la democracia y con-seguir el adelanto electoral.Para ellos la democracia sirvesi son ellos los que ganan. Ycomo no ganaron ese domingode marzo, no han parado decrispar el ambiente, de romperlas reglas de la convivencia, demorder como perros rabiosos elpapel sagrado donde está escri-to que en democracia unasveces se gana y otras se pierde.Pero ellos no: ellos, si no ganan,destrozan lo que haga falta. Eso

sí, con la ayuda de ciertosmedios de comunicación y dealgunas asociaciones que no tie-nen ningún pudor en situarsecerca del golpismo en unostiempos nada propicios paraaventuras de esa catadura. Peroa ellos qué: se han pasado tresaños dando la murga contraRodríguez Zapatero. Les salióbien aquella cantinela de "váya-se señor González" y repiten elestribillo para ver si tienen lamisma suerte que entonces.Hace unas semanas ETA asesi-nó a dos personas y destrozólas expectativas de nuevemeses de esperanza. Tambiénfue convocada una manifesta-ción contra el atentado. No laconvocó el gobierno sino dossindicatos y una asociaciónecuatoriana. A esa manifesta-ción fue todo el mundo menosel PP. Todo el mundo menosellos. Porque ya se sabe: losmuertos son más muertos si lessirven para hacer campañaelectoral. Si no les sirven paraeso, les importan un pito. Y esoes lo que hacen: campaña elec-toral a todas horas, ocupar lacalle como si la calle fuerasuya, desestabilizar la democra-cia para que la gresca perma-nente consiga adelantar laselecciones. El otro día, uno desus periódicos amenazaba conque si a Zapatero no lo echabanlas urnas habría que echarlo dela manera que fuera. Golpismopuro y duro. Y en esa radio quees como la de Queipo del

Llano de cuando la guerra con-tra la República, todas lasmañanas se arenga para levan-tar la infame tapadera de unacrispación insoportable. Así sonellos: miserable carne de resen-timiento. Y una cosa: si se con-vocaran elecciones anticipadasy no las ganaran ellos -que nolas ganarían-, volvería a pasar lomismo. Absolutamente lomismo. ¿Se apuestan ustedesalgo? Les aconsejo que no lohagan porque perderían. Seguroque perderían. Seguro.

DESDE LA FRONTERA

AlfonsCervera

Golpismo

Queipode Llano.

Tomás Gorria ■ VALENCIA

FOTOS: ARCHIVO A. SOLAZ

El libro, que esta editadopor el Ayuntamiento deValencia, y sigue la lí-nea de «Valencia, ciu-

dad de postal» en el que se recogíala memoria gráfica del Centro His-tórico, nos muestra ahora el reco-rrido costumbrista-toponímico dela fachada Marítima de hace ape-nas 100 años, evocando el carác-ter marinero del lugar.

El libro está dividido en tres par-tes. En la primera parte, el texto,incluye capítulos como: el Trans-porte Público, la Marina Mercan-te, Cabanyal, Canyamelar, Cap deFrança, El Grau, La Malva-rosa,Natzaret, las playas, costumbres,vida social... conformando unaaproximación toponímica que dael carácter de un pueblo marinerocon personalidad propia. El autor,además de las tarjetas postales, in-cluye otras ilustraciones: fotogra-fías antiguas -algunas muy curio-sas, como las cinco mujeres delGrau-, viejos anuncios, planos yotras curiosidades.

La segunda parte es la que reco-ge propiamente la selección de tar-jetas postales de Alfredo Solaz consu pie de foto, datación y comen-tarios a la imagen. Es muy curiosover la evolución de la zona por-tuaria, la Escalera Real, el Edificiodel Reloj, las escenas de la playa,los personajes con sus pulcros ba-ñadores o las mujeres esperandoa su familia con un pescado queserviría como sustento de una ac-tividad apenas reconocida y malpagada.

El libro aporta un dato, cree-mos, hasta ahora inédito: los co-mentarios de un viajero del sigloXVII al desembarcar en el Grau, re-firiéndo las gentes del lugar y sudevoción hacia el Santísimo Cris-to. También un documento sel si-glo XIX que incluye datos de unNatzaret formado por apenas 600habitantes o aquel plano, fechadoen 1915, que recoge las acequiasque pasaban por el Pueblo Nuevodel Mar antes de su desemboca-dura.

Igualmente interesante es la re-seña del texto íntegro de la pro-puesta de un grupo de concejales

en la sesión del Ayuntamiento deValencia del 15 de junio de 1896para la agregación a la ciudad delas poblaciones de Villanueva delGrao, Pueblo Nuevo del Mar yCampanar o la División Municipaldel Marítim en 1898 con el detallede sus barrios, calles, plazas y nú-mero de habitantes. En cada pun-to del texto el autor incluye, en for-ma de selección, una cita, un pá-rrafo, un comentario de otros au-tores que hablaron sobre el Marí-tim a través de los años.

La tercera parte es una pequeñamuestra de fotografías actuales,obra del fótografo Fernando Mu-rad, que permite su comparacióncon las imágenes antiguas.

Última En domingo 21 de enero de 2006

FOTOGRAFÍA RECOPILACIÓN DE LAS POSTALES SOBRE LA VALENCIA MARÍTIMA

Valencia cara al marLa familiadel autorposa en LasTermas, enuna imagende 1952tomada porun fotógrafoambulante.

Dos imágenesdel final de laactual avenidadel Puerto. Enla imagensuperior, de losprimeros añossesenta, puedeobservarsecomo la torrede Santa Maríadel Mar fuereformada paraser utilizadadurante laguerra civilcomo bateríaantiaérea.

Las arenas, a principios del siglo pasado.

La dársena interior, con eledificio del reloj al fondo.

El club Naútico, obra de Goerlich, fue demolido a principios de los setenta.

El Grao siempre ha sido cantera de aficionados del Levante UD.

Una de las imágenes más antiguas de la Valencia marítima, fechada en1897 y obra de Julio Derrey. Al dorso «cinco mujeres».

El libro «El Marítim»,de Rafael Solaz, nosofrece un paseocostumbrista conimágenes sobre losbarrios marineros deValencia a través deantiguas tarjetaspostales (de finalesdel XIX y de laprimera mitad delXX) procedentes de la colección deAlfredo Solaz.

Alrededor detrescientasilustraciones que,configuran un libroimprescindiblepara todo aquelque quiera hacerun recorrido visualy sentimental porlos que en algunaépoca se llamaronlos PobladosMarítimos.