FUSIÓN DEL MANTOURBANO GONZÁLES – MARCELA ÁLVAREZ

La estructura interna de la tierra está conformada por 3 capas concéntricas, química y mineralógicamente distintas, denominadas núcleo, manto y corteza, las que a su vez, se subdividen en diferentes capas mecánicamente diferentes.

El manto, cuyo espesor es de 2.890 Km, es la capa de roca fundida que se desplaza lentamente, que se encuentra entre la corteza (discontinuidad de Mohovicic) y el núcleo (discontinuidad de Guttemberg). La parte superior contiene zonas de rocas fundidas, razón por la cual, no es considerada totalmente cristalina. Esta zona del manto se llama astenósfera, que hacia arriba pasa a la litosfera térmica, que también integra el manto, pero incluye a la corteza. El límite entre la astenosfera y la litosfera térmica se encuentran a 1.280°C aproximadamente.

Es en el manto superior, comprendido entre la corteza y la discontinuidad sísmica de los 600 Km, donde se originan la mayor parte de los fundidos magmáticos que alcanzan la corteza, donde los minerales más abundantes son el olivino, piroxeno y granate; y es a través de tomografías sísmicas que se ha podido comprobar que es heterogéneo lateralmente. Las causas de esta variación se atribuyen principalmente a la presencia de distintas proporciones de magma, a cambios composicionales casados por diferentes grados de fusión que han dejado residuos de diversas composiciones, a la separación y coalescencia del fundido y también a la orientación de los minerales. Dada ésta heterogeneidad en la composición del manto superior, se pueden hallar depósitos con distintos grados de enriquecimientos y distintos grados de fertilidad.

Cuando las rocas se funden, lo hacen paulatina y progresivamente atravesando un estado de fusión parcial. Esta, se produce por ascensión de astenósfera caliente durante el cual y a una profundidad de unos 100 Km, se funden principalmente los piroxenos formando capilares de líquido, que por conjunción crean canales de ascenso los que debido a la cristalización de olivino en las partes externas, hacen confluir al magma hacia la base de la Cordillera de Expansión Oceánica, de unos 5 Km de ancho. Además, causa la descompresión en la base de la litófera, capa superior de la tierra, que comprende entre la corteza y la parte superior del manto. Esta descompresión es producida por la situación de extensión, la que al resistir esta situación de tensión, provoca un reducción del esfuerzo en el sentido del estiramiento, lo que genera la

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fusión parcial de la base y fracturas longitudinales en la corteza superior, y que a su vez permiten una liberación de los fundidos desde las cámaras magmáticas, formado lavas en la superficie, diques paralelos alimentadores, gabros y rocas de cúmulos en la base, formando así la corteza oceánica. Un escenario similar provocado por ascenso y descompresión, se encuentra en los bordes divergentes intracontinentales como es el caso de África del Este, donde todo el sistema de hendiduras o Rift corresponde a una situación de extensión intracontinental; proceso de extensión que produce fusión parcial, descompresión y magmatismo. En estas dos situaciones, ocurren diferentes asociaciones mineralógicas, donde la fusión de los minerales esta siempre en equilibrio con las condiciones ambientales, siendo las diferencias de presión y temperatura las que van definiendo en estos ambientes, una serie de minerales con características químicas distintas.

Por otro lado, en una situación de convergencia de placas, tenemos una producción de magma por hidratación de la astenósfera resultado de la deshidratación de la placa oceánica que subducta; provocando un proceso de transformación metamórfica que convierte la anfibolita en eclogita, gracias al agua que se encuentra en la corteza oceánica y pasa a la astenósfera mediante el proceso de subducción. Esta adición de agua, baja las temperaturas de fusión de minerales y ocasiona la fusión de los minerales de menor temperatura, incrementando la cantidad de volumen de líquido. Este fundido se aglomera hasta adquirir una masa crítica, que le permite elevarse y salir para formar rocas volcánicas o cristalizarse bajo la superficie.

Si las condiciones de esfuerzos lo permiten, también se pueden formar volcanes, si no, se quedan almacenados intracorticalmente formando plutones.

Hoy los geólogos están seguros que dichos magmas se generan por la fusión del manto terrestre, puesto que saben muy bien de qué está compuesto el manto, debido a que tienen muestras que han aflorado en las erupciones de explosiones volcánicas.

Bibliografía http://www.youtube.com/watch?v=PCEQEdA-iAI http://www.youtube.com/watch?v=B8Y7S2ZwGNQ&feature=related ciencias de la tierra; Tarbuck Edward J , Lutgens Frederick K

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http://rutageologica.cl/index.php?option=com_content&view=article&id=389&Itemid=90&limitstart=12

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