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3 EN PORTADA Ministro, termina un año clave para el Ministerio de Justicia por la importancia de las actuaciones em- prendidas para renovar la justicia, en el marco del Plan Estratégico de Modernización del Sistema de Justicia 2009-2012. ¿Se están cumpliendo los objeti- vos del Plan? Cuando aprobamos el Plan Estratégico de Moderniza- ción algunos lo descalificaron por poco realista. Pues bien, ese plan de transformación de nuestra justicia se está cumpliendo según la programación establecida y, allí donde la ejecución depende íntegramente del Mi- nisterio de Justicia, se está llevando rigurosamente a la práctica. Muchas de las medidas que contempla el Plan de Mo- dernización eran “asignaturas pendientes” de nuestra justicia, como la puesta en marcha de la Oficina Ju- dicial, el diseño de un nuevo Registro Civil, la reforma de un mapa judicial que no se acomoda a la actual geografía social de España o la elaboración de leyes que favoreciesen vías complementarias a la jurisdic- ción (arbitraje y mediación) como cauces para reducir el volumen de asuntos que llegan a nuestro sistema de justicia. Todo ello está en marcha y con todo ello hemos cumplido. La tarea no es fácil ni política ni institucionalmente, pero en el Ministerio tenemos el convencimiento de que es necesario consolidar una nueva cultura en el funciona- miento de la Administración de Justicia a través de un cambio que ha de ser continuado y progresivo. ¿Cuáles han sido, en su opinión, los principales logros alcanzados este año? Las actuaciones más importantes del Plan de Moder- nización están vinculadas a la implantación de la Nue- va Oficina Judicial y al amplio paquete de medidas requeridas para su puesta en marcha. La NOJ es, sin duda, la estrella del Plan, pero no todo se centra en ella. De hecho, en el Plan Operativo de este año hasta el 40% de las medidas emprendidas por el Ministerio es- tán vinculadas al desarrollo de las nuevas tecnologías. En este sentido, hemos creado la sede electrónica del Ministerio de Justicia para que los ciudadanos pue- dan realizar consultas y trámites de forma telemática. Hemos comenzado la instalación de la firma electró- nica en los sistemas de grabación audiovisual de los juzgados y tribunales dentro del “Programa Ius+Red”, suscrito con el Ministerio de Industria Turismo y Comer- cio y la empresa pública Red.es para el desarrollo de servicios públicos digitales en el ámbito de la Adminis- tración de Justicia. Hemos concluido el inventario de aplicaciones y el ca- tálogo de servicios del EJIS —Esquema Judicial de Interoperabilidad y Seguridad— lo que permitirá la interoperabilidad a nivel nacional entre todos órganos judiciales. Con independencia del territorio donde se encuentren. A lo largo del próximo año aguardamos Francisco Caamaño: “La Oficina Judicial ha dejado de ser un deseo para convertirse en una realidad tangible” Entrevista a Francisco Caamaño. Ministro de Justicia

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Ministro, termina un año clave para el Ministerio de Justicia por la importancia de las actuaciones em-prendidas para renovar la justicia, en el marco del Plan Estratégico de Modernización del Sistema de Justicia 2009-2012. ¿Se están cumpliendo los objeti-vos del Plan?

Cuando aprobamos el Plan Estratégico de Moderniza-ción algunos lo descalificaron por poco realista. Pues bien, ese plan de transformación de nuestra justicia se está cumpliendo según la programación establecida y, allí donde la ejecución depende íntegramente del Mi-nisterio de Justicia, se está llevando rigurosamente a la práctica.

Muchas de las medidas que contempla el Plan de Mo-dernización eran “asignaturas pendientes” de nuestra justicia, como la puesta en marcha de la Oficina Ju-dicial, el diseño de un nuevo Registro Civil, la reforma de un mapa judicial que no se acomoda a la actual geografía social de España o la elaboración de leyes que favoreciesen vías complementarias a la jurisdic-ción (arbitraje y mediación) como cauces para reducir el volumen de asuntos que llegan a nuestro sistema

de justicia. Todo ello está en marcha y con todo ello hemos cumplido.

La tarea no es fácil ni política ni institucionalmente, pero en el Ministerio tenemos el convencimiento de que es necesario consolidar una nueva cultura en el funciona-miento de la Administración de Justicia a través de un cambio que ha de ser continuado y progresivo.

¿Cuáles han sido, en su opinión, los principales logros alcanzados este año?

Las actuaciones más importantes del Plan de Moder-nización están vinculadas a la implantación de la Nue-va Oficina Judicial y al amplio paquete de medidas requeridas para su puesta en marcha. La NOJ es, sin duda, la estrella del Plan, pero no todo se centra en ella.

De hecho, en el Plan Operativo de este año hasta el 40% de las medidas emprendidas por el Ministerio es-tán vinculadas al desarrollo de las nuevas tecnologías. En este sentido, hemos creado la sede electrónica del Ministerio de Justicia para que los ciudadanos pue-dan realizar consultas y trámites de forma telemática. Hemos comenzado la instalación de la firma electró-nica en los sistemas de grabación audiovisual de los juzgados y tribunales dentro del “Programa Ius+Red”, suscrito con el Ministerio de Industria Turismo y Comer-cio y la empresa pública Red.es para el desarrollo de servicios públicos digitales en el ámbito de la Adminis-tración de Justicia.

Hemos concluido el inventario de aplicaciones y el ca-tálogo de servicios del EJIS —Esquema Judicial de Interoperabilidad y Seguridad— lo que permitirá la interoperabilidad a nivel nacional entre todos órganos judiciales. Con independencia del territorio donde se encuentren. A lo largo del próximo año aguardamos

Francisco Caamaño: “La Oficina Judicial ha dejado de ser un deseo para convertirse en una realidad tangible”

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En Burgos y Murcia, la transición al nuevo modelo de Oficina Judicial se ha producido con notable éxito“

contar con los primeros resultados prácticos.

El desarrollo del SIRAJ —Sistema Integrado de Re-gistros Administrativos de apoyo a la Actividad Judi-cial— permitirá que numerosos registros administrati-vos formen parte de un único sistema para facilitar la consulta de los datos que contienen por los usuarios habilitados. En concreto, se integran el Registro Central de Medidas Cautelares, Requisitorias y Sentencias No Firmes, el Registro de Protección a las víctimas de la Violencia Doméstica el Registro de Penados, el Regis-tro de Sentencias Firmes de Menores y el Registro de Rebeldes Civiles.

Estamos implantando el Expediente Digital en la Au-diencia Nacional, para extenderlo posteriormente a otros órganos judiciales y fiscalías.

El despliegue del correo securizado o sistema LEX-NET es pleno entre los órganos judiciales no transfe-ridos y estamos cofinanciando con las Comunidades Autónomas que han optado por su utilización la imple-mentación del mismo. Prueba del éxito de LEXNET es que hemos pasado de realizar una media de 474.000 notificaciones al mes en el año 2009 a 1.500.000 este año.

Igualmente, para cubrir las necesidades requeridas por los Institutos de Medicina Legal, hemos creado la aplicación de gestión ASKLEPIOS, cuyo desarrollo es-tará listo a finales de 2011 y que permitirá la interopera-bilidad con otras aplicaciones judiciales y sistemas de información de la Administración.

Un importante hito ha sido la aprobación por el Con-sejo de Ministros del Proyecto de Ley del Registro Ci-vil. Del viejo Registro territorializado y disperso en casi 8.000 oficinas pasaremos a un Registro informatizado y próximo al ciudadano. Los tradicionales libros serán sustituidos por una base de datos única para todo el

Estado a la que se podrá acceder desde casa o desde cualquier otro lugar para examinar datos personales u obtener certificaciones. Con el nuevo Registro se re-ducen trabas, se ahorran costes y se gana en agilidad y eficiencia.

Todo este despliegue tecnológico necesita un ade-cuado engarce normativo. Para ello, hemos elaborado el Anteproyecto de Ley de Nuevas Tecnologías en la Administración de Justicia. Queremos que las tecnolo-gías sean el instrumento de relación preferente con los usuarios de la justicia y para ello necesitamos modifi-car nuestro marco legal.

Una de las claves de la modernización de la justicia es la Nueva Oficina Judicial. Su despliegue está sien-do un proceso complejo pero sus primeros resultados ya son visibles con la entrada en funcionamiento el 10 de noviembre de las primeras Oficinas Judiciales en Burgos y Murcia. ¿Qué balance hace de su primer mes de funcionamiento?

La Nueva Oficina Judicial, es pieza central del Plan Es-tratégico de Modernización. Su puesta en marcha ha exigido un importante esfuerzo: proyectos normativos, adaptación de edificios, diseños de sistemas informáti-cos, formación de secretarios judiciales y funcionarios, etc.

En Burgos y en Murcia han empezado a funcionar las primeras Nuevas Oficinas Judiciales del territorio del Ministerio. En ambas ciudades, la transición al nuevo modelo se ha producido con notable éxito. Actuacio-nes complejas, como la itineración de expedientes a las nuevas unidades organizativas o el proceso de aco-plamiento de los funcionarios en sus nuevos puestos de trabajo, se han realizado conforme a una exhaus-tiva planificación y dentro de los plazos previstos.

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“En octubre se crearon las primeras Comisiones Territoriales de Calidad de la historia de la Administración de Justicia española”

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Pero, superada esta primera fase nos queda ahora al reto más complicado. Consolidar su funcionamiento e implantar nuevos métodos de trabajo, modernas técni-cas de gestión y directrices organizativas comunes. Sin duda, una tarea compleja que llevará un tiempo.

El Ministerio acaba de presentar el calendario de des-pliegue de la Nueva Oficina Judicial para el próximo año, según el cual Ciudad Real, Cáceres, León, Cuen-ca, Ceuta, Melilla, Mérida y Palma de Mallorca tendrán Oficina Judicial en 2011. La experiencia adquirida con Burgos y Murcia, ¿va a servir para orientar estas nue-vas actuaciones?

Murcia y Burgos han sido, efectivamente, la punta de lanza desde la que vamos a hacer realidad un modelo más eficiente de justicia y, en este sentido, he de seña-lar que la experiencia ya adquirida en esos dos proce-sos de transición va a orientar las nuevas actuaciones. Tal y como habíamos prometido, la nueva oficina ha dejado de ser un deseo para convertirse en una rea-lidad tangible que, progresivamente, podrán constatar los ciudadanos de acuerdo con el programa de im-plantación y despliegue que hemos establecido.

La Nueva Oficina Judicial cuenta con un sistema de calidad que es pionero en esta Administración y que tiene el objetivo de garantizar un servicio público ágil y eficiente. Esto supone una novedad importante para el ciudadano.

La reforma de la Nueva Oficina Judicial tiene como principal objetivo que los ciudadanos obtengan un servicio próximo y de calidad, con respeto a los princi-pios recogidos en la Carta de Derechos de los Ciuda-danos ante la Justicia. Para ello, hemos desarrollado un sistema de calidad basado en la gestión por procesos,

que tiene por finalidad obtener productos y servicios que satisfagan las expectativas de los usuarios en todo el Estado.

Desde el mes de octubre, las Nuevas Oficinas Judicia-les de Burgos y Murcia cuentan con las primeras Co-misiones Territoriales de Calidad de la historia de la Ad-ministración de Justicia española y el 2 de noviembre se ha constituido la Comisión Estatal de Calidad de la Nueva Oficina Judicial, que nace como un espacio de consenso y de colegiación de esfuerzos a nivel nacio-nal para impulsar el desarrollo del Sistema de Calidad en las Nuevas Oficinas Judiciales de toda España.

Usted ha comentado en numerosas ocasiones que invertir en justicia es indispensable para la recupe-ración económica y, por eso, el Ministerio de Justicia asegura para 2011 unos presupuestos “ambiciosos en sus objetivos pero realistas en el diseño de las medidas”. Unos presupuestos orientados a la moder-nización. En este sentido, ¿qué planes tiene el Minis-terio para el próximo año?

Desde 2005 las inversiones en materia de justicia han experimentado un incremento del 161,21%. La justicia, a pesar del momento económico actual, ha recibido un trato preferente en las cuentas del Estado. Los Presu-puestos del año 2010 en justicia han sido los mejores presupuestos de la historia (más de 1.800 millones – 218,5 millones adicionales para modernización de la justicia). Y, siguiendo esta tendencia, los presupuestos para 2011 son los segundos mejores presupuestos de la Justicia, con 1.680,5 millones de euros. Esto se tradu-ce en un esfuerzo muy importante y en un fuerte com-promiso con la modernización y la reforma del sistema de Justicia.

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Junto a los proyectos en marcha que ya hemos co-mentado en esta entrevista y que tendrán su continua-ción a lo largo del próximo año, se reformará la LOPJ para crear los Tribunales de Instancia y estamos traba-jando en la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal para, entre otras cosas, atribuir al fiscal la instrucción de las causas penales, siguiendo las recomendaciones de la Comisión de expertos designada para la elaboración de una nueva Ley de Demarcación y Planta Judicial.

La modernización de la justicia constituye una de-manda también a nivel europeo, como quedó de ma-nifiesto en la última Conferencia de Ministros de Justi-cia del Consejo de Europa. ¿España está en posición de aportar mejores prácticas o va a estarlo a medio plazo?

En el reciente informe bianual del Consejo de Europa de evaluación de los sistemas judiciales europeos se pone de manifiesto que nuestro país, ya en el año 2008, gastaba en justicia un porcentaje del PIB per capita su-perior a la media europea. Países como Francia, Italia, Suecia u Holanda están muy por detrás de nosotros, lo que pone de manifiesto, de nuevo, el compromiso de este Gobierno con la modernización de la justicia cuyos resultados, ya estamos comenzando a percibir.

Con las actuaciones emprendidas este año, la justicia está en el camino de modernizarse y transformar el servicio público que se presta a la ciudadanía. Se tie-ne la sensación de que se han dado muchos pasos en poco tiempo, ¿el ciudadano también lo percibe así?

Es cierto que en poco tiempo hemos consensuado los fundamentos de un nuevo modelo, hemos programa-do nuestra acción y en el último año la estamos eje-cutando. Detrás de este profundo proceso de cambio hay, no solo convicciones firmes acerca de la justicia como servicio público, sino también un trabajo tan in-tenso como discreto, conscientes de que sólo así se puede progresar en una tarea tan compleja y delicada como la de la modernización de la justicia. La política con mayúsculas es aquella que hace posible lo nece-sario aunque no ocupe las cabeceras de los informati-vos y es un hecho que la modernización de la justicia comienza a ser posible y de que vamos en el camino hacia una percepción de la justicia más acorde a los estándares de un servicio público de calidad •