ESDE - Programa IV Guía 27 Unidad 7: Pluralidad de las Existencias Subunidad 5: De la infancia

18

description

ESDE - Programa IV Guía 27 Unidad 7: Pluralidad de las Existencias Subunidad 5: De la infancia. Objetivos Específicos Hablar de la necesidad de que el Espíritu pase por el estado de infancia. - PowerPoint PPT Presentation

Transcript of ESDE - Programa IV Guía 27 Unidad 7: Pluralidad de las Existencias Subunidad 5: De la infancia

Objetivos Específicos

Hablar de la necesidad de que el Espíritu pase por el estado de infancia.

Interpretar, a la luz del Espiritismo, las palabras de Jesús: «(...) Dejad a los niños venir a mí, no se lo impidáis, porque de los tales es el reino de Dios». (09)

ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia

Introducción

Hacer la introducción del asunto leyendo a los participantes de la reunión, la página espírita «Por Amor al Niño» de Emmanuel. (Anexo)

Distribuir la página leída.

ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia

Nosotros que tantas veces rogamos socorro a la Providencia Divina, ¡oremos al corazón de la Mujer, suplicando por los hijitos de las otras! Pidamos a las labradoras del bien por los niños desamparados, ¡flores humanas azotadas por el viento de infortunio, en las promesas del amanecer! ...

Por los niños que fueron abandonados en los callejones de nadie;

por los que deambulan sin dirección, atemorizados en las tinieblas nocturnas;

por los que chupan sus propios dedos mientras contemplan a través de vidrieras fastuosas, la comida sobrante desperdiciada;

por los que nunca vieron la luz de la escuela;

por los que duermen, a los sobresaltos, en las fauces oscuras de un albañal;

por los que fueron relegados a la protección del lodo y se transforman en cobayos de gusanos destructores;

por los que la tuberculosis espía, ensaña, a través de los harapos con que se cubren;

1/67/7

POR AMOR AL NIÑO

ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia - ANEXO 1 1/2

por los que jamás oyeron una voz que los bendijera y se consideran malditos por el destino;

por los que fueron adoptados por falsa ternura y son mantenidos en casas nobles como bestezuelas, constantemente golpeadas por la vara de la injuria;

y por aquellos otros que cayeron, desorientados en las celadas del delito y son entregados al vicio y a la indiferencia, ¡entre el cautiverio y los castigos de la cárcel!

¡Madres de la Tierra, mientras os regocijáis con el amor de vuestros hijos, abrid los brazos a los huérfanos de madre! .... Rememoremos el pedido inolvidable de Cristo: «dejad venir a mí a los niños». Y recordemos, sobre todo, que si el hombre debe edificar las paredes imponentes del mundo venidero, sólo la mujer podrá convertirlo en alegría de vivir y cariño del hogar.

EMMANUEL

(*)XAVIER, Francisco Cándido e VIEIRA, Waldo. O Espírito da Verdade. Por vários Espíritos. 3ª.ed. Rio de Janeiro, FEB, 1977, p. 136-137.

1/67/7ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia - ANEXO 1 2/2

Desarrollo

Dividir a la clase en dos grupos de estudio y darles las siguientes tareas: GRUPO N.º 01 - Lectura, comentarios y resumen escrito de las preguntas

379 a 385 de «El Libro de los Espíritus». GRUPO N.º 02 - Lectura, comentarios y resumen escrito de los ítems 01 a 04

del capítulo 08 de «El Evangelio según el Espiritismo». Pedir a los relatores de los grupos que lean los resúmenes de los asuntos

estudiados a toda la clase (plenario).

ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia

Conclusión Cerrar la reunión aclarando las posibles dudas.

ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia

La vida del Espíritu recorre en conjunto las mismas fases de la vida corporal. Pasa gradualmente del estado de embrión al de infancia, para llegar por una serie de períodos al de adulto, que es el de la perfección; (...) realiza su progreso no en un solo mundo, sino pasando por diversos mundos». (52) Libro de los Espiritus, Preg. 188

Evolución

Espíritu de un niño puede ser incluso más evolucionado que el de un adulto, a pesar de que su inteligencia no se manifieste plenamente, porque su organismo físico todavía no está suficientemente desarrollado. (02)

El estado de turbación por el que pasa el Espíritu, en el acto de la encarnación, sólo de a poco va cediendo, hasta disiparse totalmente con el pleno desarrollo de los órganos.(03)

La infancia es una fase de adaptación muy necesaria para el Espíritu que encarna. No transcurre de la misma forma en los diferentes mundos; en los más adelantados es menos ruda. (01)

Recién salido del mundo espiritual, donde gozaba de mayor libertad y disponía de mayores recursos, el Espíritu se ve en dificultades para expresar sus pensamientos y manifestar sus sensaciones, en pleno ejercicio de sus reales facultades.

1/61/6ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia 1/3

Síntesis del Asunto:

De la infancia

En esa fase en que el Espíritu se ve limitado en su libertad, la infancia es una demostración de la misericordia de Dios, que le propicia una doble ventaja:

- primero, el Espíritu gana el tiempo indispensable, a fin de prepararse para las futuras y difíciles tareas de la nueva existencia que recorrerá;

- segundo, por la fase que atraviesa - común a todos los niños, es decir, de simplicidad y de inocencia - despertará en los padres y en aquellos con quienes conviva, mucha simpatía, interés y buena voluntad, lo que le facilitará mucho el desempeño de su actividades.

Sabemos, así mismo, que cada niño revelará más tarde todas sus tendencias y fallas morales, de acuerdo con su adelantamiento espiritual y que «(...) el niño rebelde se mantiene ignorante e imperfecto (...)» sin embargo, «(...) su aprovechamiento depende de su mayor o menor docilidad. (..)» (06)

Al reencarnar con la forma inicial de un niño «(...) el Espíritu, durante ese período, es más accesible a las impresiones que recibe, capaces de favorecer su adelanto, al que deben contribuir los encargados de su educación.» (05)

1/61/6ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia 1/3

Como niño «(...) el Espíritu, pues, viste temporariamente la túnica de la inocencia. (...)» (08)

Fue por eso que Jesús destacó ese estado de pureza y de simplicidad de la infancia, remarcando su importancia y haciendo ver que lo ideal sería que el alma permaneciera siempre con tales disposiciones a lo largo de toda su vida.

«(...) Y Jesús, llamando a un niño, lo colocó en medio de ellos, y dijo: En verdad os digo que si no os convirtierais y si no llegarais a ser como niños, de ningún modo entraréis en el reino de los Cielo.» (10)

El canalla más frío habrá de recordar un día que ha sido niño, de apariencia inocente y pura y pensará que mucho le hubiera valido haber continuado cultivando tales virtudes.

1/61/6ESDE Prog IV Guía 27 - De la infancia 1/3

183 – Al pasar de un mundo a otro, ¿pasa el Espíritu por una infancia?

– La infancia es en todas partes una transición necesaria; pero en todas partes no es tan frágil así como la vuestra.

ESDE Prog IV Guía 27 Libro: «El Libro de los Espíritus». Preg 379 a la 385

CAPÍTULO IV SEPARACIÓN ENCARNACIÓN EN LOS DIFERENTES MUNDOS

1/3

18 Abril de 1857 CAPÍTULO VII - DE LA INFANCIA

379 – El Espíritu que anima el cuerpo de un niño, ¿está tan desarrollado como el de un adulto?

– Puede estarlo más, si más ha progresado, y solo la imperfección de los órganos le impide manifestarse. Actúa de acuerdo con el instrumento, con cuya ayuda se puede manifestar.

380 – En un niño de poca edad, poniendo de lado el obstáculo que la imperfección de los órganos opone a su libre manifestación, el Espíritu, ¿piensa como un niño o como un adulto?

– Cuando es niño, es natural que los órganos de la inteligencia, no estando desarrollados, no pueden darle la intuición del adulto, y tiene en efecto, la inteligencia muy limitada mientras la edad le hace madurar la razón. La turbación que acompaña a la reencarnación, no cesa súbitamente en el momento de nacer y sólo gradualmente se disipa con el desarrollo de los órganos.

Una observación viene en apoyo de esta respuesta, y es la de que los sueños de un niño no tienen el carácter de un adulto. Su objeto es casi siempre pueril, lo que es un indicio de la naturaleza de las preocupaciones del Espíritu.

1/3ESDE Prog IV Guía 27 Libro: «El Libro de los Espíritus». Preg 379 a la 385

381 – Al morir el niño, ¿recobra el Espíritu inmediatamente su vigor anterior? – Lo debe recobrar, puesto que está desprendido de su envoltura carnal, Sin

embargo, no vuelve a adquirir su lucidez anterior, hasta que la separación es completa, es decir, cuando ya no existe lazo alguno entre el Espíritu y el cuerpo.

382 – ¿Sufre el Espíritu encarnado, durante la infancia, con el constreñimiento que le impone la imperfección de sus órganos?

– No; ese estado es una necesidad, es natural y conforme con las miras de la Providencia. Es un tiempo de descanso para el Espíritu.

383 – ¿Cuál es, para el Espíritu, la utilidad de pasar por el estado de infancia?

– Encarnándose el Espíritu con las miras de perfeccionarse, es más accesible, durante ese período a las impresiones que recibe y que pueden ayudar a su progreso al que deben contribuir los que están encargados de su educación.

1/3ESDE Prog IV Guía 27 Libro: «El Libro de los Espíritus». Preg 379 a la 385

384 – ¿Por qué las primeras crisis del niño son de llanto?

– Para excitar el interés de la madre y provocar los cuidados que le son necesarios. ¿No comprendes que si sólo tuviese crisis de alegría, cuando no sabe hablar aún, poco se inquietarían con sus necesidades? Admirad, pues, en todo la sabiduría de la Providencia.

385 – ¿De dónde proviene el cambio que se opera en el carácter a cierta edad, particularmente al salir de la adolescencia? ¿Es el Espíritu que se modifica?

–Es el Espíritu que recupera su naturaleza y se muestra como era. No conocéis los secretos que esconden los niños en su inocencia; no sabéis lo que son, lo que fueron y lo que serán, sin embargo, los amáis, los queréis tanto como si fuesen una parte de vosotros mismos, a tal punto que el amor de una madre por sus hijos está considerado como el mayor que puede un ser sentir por otro ser. ¿De dónde procede ese dulce afecto, esa tierna benevolencia que hasta los mismos extraños experimentan respecto al niño? ¿Lo sabéis? No. Pues, esto es lo que os voy a explicar.

1/3ESDE Prog IV Guía 27 Libro: «El Libro de los Espíritus». Preg 379 a la 385

Los niños son seres que Dios envía a nuevas existencias y para que no se les pueda imponer una severidad muy grande, les concede todas las apariencias de la inocencia. Hasta a un niño naturalmente malo, se le cubren las faltas, con la inconsciencia de sus actos. Esa inocencia no es una superioridad real sobre lo que eran antes; no, es la imagen de lo que deberían ser y si no lo son, sobre ellos únicamente recae el castigo.

Pero no solamente por ellos le da Dios este aspecto, es también y sobre todo por sus padres cuyo amor es necesario a la debilidad de aquéllos, amor que se amenguaría notablemente a la vista de un carácter impertinente y rudo, mientras que creyendo a sus hijos buenos y dóciles, les profesan todo su afecto y los rodean de las más delicadas atenciones. Pero cuando los hijos no tienen necesidad ya de esta protección, de esta asistencia, que les dieron durante quince o veinte años, reaparece en toda su desnudez, su carácter real e individual. Se conservan buenos si eran fundamentalmente buenos, pero se revisten siempre de matices que estuvieron ocultos por la primera infancia.

Ya veis que los caminos de Dios son siempre los mejores y cuando se tiene un corazón puro, la explicación es fácil de concebir.

En efecto, imaginad que el Espíritu de los niños que nacen entre vosotros puede venir de un mundo donde tomó hábitos muy diferentes,

1/3ESDE Prog IV Guía 27 Libro: «El Libro de los Espíritus». Preg 379 a la 385

¿cómo querríais que permaneciese en vuestro medio ese nuevo ser que viene con pasiones diferentes de las que poseéis, con inclinaciones y gustos enteramente opuestos a los vuestros? ¿Cómo querríais que se incorporase a vuestras filas de otra forma que como Dios lo quiso, es decir, por el tamiz de la infancia? En ella se confunden todos los pensamientos, todos los caracteres, todas las variedades de seres engendrados por esa multitud de mundos en los que crecen las criaturas. Vosotros mismos, al morir, os encontraréis en una especie de infancia entre nuevos hermanos y en vuestra nueva existencia no terrestre, ignoráis los hábitos, las costumbres y las relaciones de ese mundo nuevo para vosotros. Hablaríais con dificultad una lengua que no estáis acostumbrados a hablar, lengua más viva aún de lo que es hoy vuestro pensamiento. (319)

La infancia tiene aún, otra utilidad: los Espíritus sólo entran en la vida corporal para perfeccionarse, para mejorarse; la debilidad de la primera edad les hace flexibles, accesibles a los consejos de la experiencia y de los que deben hacerles progresar. Entonces es cuando puede reformarse su carácter y reprimir sus malas inclinaciones; tal es el deber que Dios confió a los padres, misión sagrada por la que deberán responder. Por eso la infancia no sólo es útil, necesaria e indispensable, sino que es la consecuencia natural de las leyes que Dios estableció y que rigen el Universo.

1/3ESDE Prog IV Guía 27 Libro: «El Libro de los Espíritus». Preg 379 a la 385

Gracias …