Evaluacio ́n econo ́mica de intervenciones sanitarias el coste de oportunidad de no evaluar

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Reumatol Clin. 2009;5(6):241–243

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1699-25

doi:10.1

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Corre

www.reumatologiaclinica.org

Editorial

Evaluacion economica de intervenciones sanitarias: el coste de oportunidadde no evaluar

Economic evaluation of health interventions: the opportunity cost of not evaluating

Jaume Puig-Junoy a,� y Juan Oliva b

a Centro de Investigacion en Economıa y Salud (CRES-UPF), Universitat Pompeu Fabra, Barcelona, Espanab Departamento de An�alisis Economico, Facultad de Ciencias Jurıdicas y Sociales de Toledo, Universidad de Castilla-La Mancha. Investigador afiliado al CRES, Toledo, Espana

I N F O R M A C I O N D E L A R T I C U L O

On-line el 6 de octubre de 2009

La evaluacion economica (EE) de medicamentos y otrastecnologıas es una herramienta cada vez m�as empleada en laidentificacion de prioridades relacionadas con la financiacionpublica de los nuevos medicamentos y tecnologıas m�edicas paraun financiador racional. ¿Cu�al es el valor social de las mejorasadicionales en el estado de salud que aportan los cambiostecnologicos en el diagnostico y el tratamiento de las enfermeda-des?, ¿qu�e parte de la mejora en la esperanza de vida y en lacalidad de vida es atribuible a la atencion sanitaria y a losmedicamentos?, ¿valen lo que cuestan las innovaciones terap�euti-cas que generan un mayor gasto? Deberıa aconsejarse la busquedade criterios que ayuden a priorizar de manera transparente,eficiente y equitativa las decisiones de financiacion publica de losmedicamentos, por la evidencia sobre la relacion entre el beneficiomarginal (contribucion marginal a la mejora del estado de salud)y el coste marginal del tratamiento completo (que no se debeconfundir con el precio de venta del medicamento). Ello llevarıa apremiar las innovaciones en funcion de su mayor beneficioterap�eutico relativo respecto a las alternativas disponibles1.

En un contexto internacional, la EE de medicamentos est�aalcanzando su edad dorada en Europa. La principal causa de esteflorecimiento se debe al papel impulsor que est�an desempenandolas autoridades publicas en su desarrollo, que utilizan estasherramientas como elemento clave en las estrategias de adopciony difusion de las innovaciones sanitarias. Buena parte de estatendencia se explica por la toma de conciencia de los responsablessanitarios europeos de que hay que conjugar el acceso de susciudadanos a los avances terap�euticos que ayuden a mejorar susalud y la sostenibilidad financiera de los sistemas sanitariospublicos, lo que la adopcion indiscriminada de tecnologıassanitarias podrıa amenazar2.

8X/$ - see front matter & 2009 Elsevier Espana, S.L. Todos los derechos reserva

016/j.reuma.2009.09.004

or para correspondencia.

o electronico: [email protected] (J. Puig-Junoy).

Caracterizada como cuarta barrera o como cuarta garantıa, laprimera expresion refleja la prevencion o desconfianza que generaen algunos actores la introduccion de una medida que podrıaretrasar la incorporacion en el arsenal terap�eutico de medica-mentos que han probado su eficacia, su calidad y su seguridad. Porel contrario, la expresion cuarta garantıa harıa referencia a unacondicion adicional que tendrıan que demostrar las innovacionespara obtener financiacion de fondos publicos: la eficiencia. Esdecir, habrıa que demostrar que el valor social de un nuevomedicamento es mayor que el coste social que su provisionconlleva.

La formula de introduccion de estos procedimientos en elproceso de toma de decisiones sanitarias no es unica. Ası, cadapaıs en funcion de su organizacion, su cultura sanitaria, susmedios y el grado de inter�es de quienes deciden, ha apostado poruna formula propia. Un caso paradigm�atico ha sido en el ano 2002la creacion del Lakemedelsformansnamnden (LFN) sueco. �Estaexperiencia sigue la tradicion adoptada desde los anos noventa enpaıses como Canad�a y Australia al crear un comit�e de beneficiosfarmac�euticos en el seno del ministerio de salud. Este comit�erecoge entre sus principios rectores la defensa de la dignidadhumana, ası como la cobertura de las necesidades de losciudadanos, pero entendiendo que en la asignacion de recursospublicos la eficiencia debe ser un principio de primer orden. Trasrecibir un informe de las empresas comercializadoras delmedicamento el LFN, en un plazo m�aximo de 180 dıas, debeemitir un informe bien recomendando, bien rechazando el preciosolicitado y la financiacion publica del f�armaco, bien proponiendocondiciones a su recomendacion (por ejemplo, contratos de riesgocompartido)3,4. Entre 2002 y 2005, el LFN ha rechazado lafinanciacion publica de un 10% de los nuevos medicamentosevaluados bas�andose en que el beneficio marginal y la relacioncoste-efectividad no han sido establecidas5. Asimismo, porejemplo, las decisiones del LFN han aprobado la financiacionpublica de dos medicamentos indicados para la osteoporosis

dos.

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J. Puig-Junoy, J. Oliva / Reumatol Clin. 2009;5(6):241–243242

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(Protelos y Forteo), limitada unicamente a los subgrupos en losque la relacion coste-efectividad es favorable.

La experiencia del LFN no es unica. A los citados casos deAustralia y Canad�a podrıamos unir los de paıses europeos conorganismos similares, como serıa el caso de Paıses Bajos o Alemania.Sin embargo, existen formulas alternativas, entre las cuales la demayor �exito es la propuesta por el National Institute for Health andClinical Excellence (NICE). La creacion de ese instituto en 1999 marcaun antes y un despu�es en el contexto europeo. NICE es un organismofinanciado publicamente, pero dotado de un gran nivel deindependencia que, junto con la transparencia en sus actuaciones,la participacion activa y directa de diferentes agentes (industria,universidad, clınicos, pacientes, etc.) en sus procesos y un elevadogrado de exigencia y autocrıtica, son sus principales senas deidentidad. La EE es clave en las recomendaciones (favorables o no) deNICE sobre la utilizacion de un determinado medicamento (u otratecnologıa sanitaria) segun una indicacion determinada, si bien su�ambito de actuacion tiene lugar una vez que el medicamento ya hasido aprobado y se comercializa en el mercado. Las revisionesexhaustivas de la evidencia cientıfica y los an�alisis economicos queNICE encarga a una institucion externa pueden prolongar el procesode evaluacion durante 2 o 3 anos, y en todo caso las empresascomercializadoras tienen la posibilidad de reclamar, ası como NICEpuede revisar los informes transcurridos unos anos. No solo suinfluencia dentro del National Health Service ha sido creciente, sinoque allende sus fronteras se ha estudiado su caso con especial inter�esdesde sus inicios, con lo que se ha convertido en un referente clave6,7.

En el medio espanol hay una actividad creciente y se disponedel marco normativo potencialmente adecuado para dar entrada aeste tipo de experiencias. El Real Decreto 1030/2006, de 15 deseptiembre, por el que se establece la cartera de servicioscomunes del Sistema Nacional de Salud, y el procedimiento parasu actualizacion incluyen la eficiencia (relacion entre coste yresultados) como uno de los elementos que considerar en ‘‘ladefinicion, detalle y actualizacion de la cartera de servicioscomunes’’. No obstante, la Ley de Uso Racional y Garantıas deMedicamentos y Productos Sanitarios, de 28 de julio de 2006, nohace ninguna referencia a la relacion coste-efectividad, y habr�aque esperar al desarrollo reglamentario de la ley para ver como seincorporan los criterios de eficiencia mencionados en los procesosde la negociacion del precio y la decision de financiacion publicade los medicamentos, y qu�e papel desempenar�a la EE demedicamentos. La creacion del llamado Comit�e de Evaluacion dela Utilidad Terap�eutica de los nuevos medicamentos podrıa serclave en la normalizacion de la evaluacion economica como cuartagarantıa si recibe el apoyo polıtico suficiente.

Desde la perspectiva social, los conceptos de utilidadterap�eutica y grado de innovacion de los nuevos medicamentosdeben ser referidos al valor social anadido por los mismosrespecto a las alternativas de tratamiento disponibles y los costesanadidos que comporten, esto es, a su relacion coste-efectividadincremental8. El enfoque de la relacion coste-efectividad incre-mental es el adecuado para las decisiones de cobertura de undeterminado tratamiento por las aseguradoras publicas, del precioque se est�a dispuesto a pagar por �el, y de las situaciones clınicas ylos grupos de pacientes en los que se recomienda. El an�alisis decoste-efectividad incremental y el establecimiento de un umbralque indique el coste m�aximo que se est�a dispuestos a pagar por‘‘ano de vida ajustada por calidad’’ ganado son los elementosesenciales de esta aproximacion, que no exige fijar el precio de losnuevos medicamentos en el umbral de la disposicion a pagar.

A los nuevos medicamentos (y las tecnologıas m�edicas) hay quepedirles no solo eficacia respecto del placebo, sino eficacia relativarespecto a los medicamentos con los que van a competir o que vana sustituir. La evidencia disponible indica que en muchos casos laaportacion marginal es muy pequena pero, en cambio, el coste es

mucho m�as elevado. La estandarizacion de los procedimientos deEE9, el requerimiento y la realizacion en condiciones de transpa-rencia e independencia de este tipo de estudios para lasinnovaciones (alejamiento de las evaluaciones promocionalescercanas a los departamentos de marketing de la industria) y elestablecimiento de un umbral que indique el coste m�aximo porAVAC que no se debiera superar (p. ej., los 30.000 euros por AVAC oun valor an�alogo mejor fundamentado, flexible pero representativode la disposicion social a pagar) serıan actuaciones en la lınea dedeterminar la disposicion publica a pagar en funcion del valoradicional del medicamento y para proporcionar una orientacioninequıvoca a la actividad investigadora.

Los umbrales reales de coste por AVAC adicional deben serflexibles (m�as orientativos que barreras rıgidas). Pero tambi�enrevisables despu�es. En el momento de autorizar y decidircobertura y precio, la informacion sobre medicamentos es todavıamuy escasa (especialmente en los aspectos de mayor inter�es paravalorar efectividad incremental: ausencia de estudios en condi-ciones reales y respecto a comparadores activos). La EE puedelidiar con la incertidumbre sobre los par�ametros y los modelos,pero tambi�en suele ser muy sensible a sus modificaciones, lo querequiere reevaluacion y revision de las decisiones ante nuevasinformaciones que afecten a estos par�ametros.

La aplicacion pr�actica de la EE requiere de la adopcion de unconjunto de reglas de juego mınimas o estandarizacion de losm�etodos que adoptar�an los agentes que realizan evaluacioneseconomicas en el �ambito de la salud. Una revision de diez estudiosde EE que comparaban dos o m�as antagonistas del factor de necrosistumoral alfa (TNFa) en el tratamiento de la artritis reumatoide yasenalaba la importancia de las diferencias en la calidad metodolo-gica de los estudios publicados, aspecto que es fundamental paraponer de relieve los puntos fuertes y d�ebiles de la evidenciadisponible10. Desde la optica puramente investigadora, emplearunos m�etodos previamente estandarizados o acordados no esimperativo. Es m�as, desde la logica cientıfica el avance delconocimiento implica la superacion de dichos m�etodos por otrosde m�as calidad o robustez, y la discusion metodologica no es unproblema, sino una vıa de avance11,12. No obstante, es obvio que lamayor parte de estos trabajos se realizan con un fin muy concreto:aportar informacion relevante para el decisor sanitario. En lamedida en que haya una serie de elementos compartidos por losactores del sistema, al estilo de codigos de buenas pr�acticas,mayores ser�an la comparabilidad entre trabajos y la utilidad de estetipo de an�alisis en el proceso de toma de decisiones.

Entre los elementos m�as comunmente tratados por las guıas deevaluaciones economicas, se encontrarıan el alcance y losobjetivos del an�alisis por realizar, la perspectiva que emplear, elcomparador que utilizar, el tipo de evaluacion m�as indicado(minimizacion de costes, coste-efectividad, coste-utilidad o coste-beneficio), la calidad de las fuentes sobre los datos de eficacia y/oefectividad que emplear en el an�alisis, la forma m�as adecuada demedir y valorar tanto recursos como resultados en la salud y elbienestar, el horizonte temporal m�as adecuado para captar loscostes y beneficios terap�euticos m�as relevantes, las condiciones enlas que se emplearıan t�ecnicas de modelizacion, las tasas dedescuento empleadas, los criterios de equidad que implıcita oexplıcitamente se incorporen al an�alisis, las condiciones paragarantizar en la medida de lo posible la transferibilidad de losresultados alcanzados a otros medios y otras poblaciones y lapresentacion de los resultados del an�alisis que incluya laexposicion motivada de las limitaciones del estudio, la manerade reflejar las conclusiones alcanzadas por los investigadores y laexposicion de conflictos de intereses, potenciales o reales13.Aunque es frecuente mencionar que no existe una metodologıacomun entre las guıas oficiales de los distintos paıses, locierto es que hay acuerdo en cerca del 75% de los aspectos

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J. Puig-Junoy, J. Oliva / Reumatol Clin. 2009;5(6):241–243 243

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metodologicos14,15. Los puntos de discusion (perspectiva que se vaa emplear, gama de costes y beneficios que incluir y su valoracion)tienen mucho m�as que ver con aspectos normativos que positivos.

Logicamente, la adopcion de la cuarta garantıa exige asumirriesgos al imponer una dimension adicional que considerar en elproceso de toma de decisiones (el balance entre el valor social dela innovacion y su coste). No obstante, no incluir el criterio deeficiencia en este proceso tiene unos riesgos aun mayores queafectarıan a la sostenibilidad financiera del sistema y tendrıan sureflejo en la calidad y el acceso a la atencion recibida. En ultimot�ermino, la cultura evaluativa exige transparencia y rigor t �ecnicoen las decisiones adoptadas. Ello no supone que las decisionesvayan a depender exclusiva o fundamentalmente de una relacioncoste-efectividad ni que las decisiones vayan a quedar en manosde los t�ecnicos sino, al contrario, que los t�ecnicos dotar�an a losrepresentantes de los ciudadanos de una herramienta adicionalque permita que los recursos publicos se asignen de manera m�astransparente y racional.

Financiacion

Este editorial forma parte de un conjunto de proyectosfinanciados por la ayuda de investigacion SEJ2007-66133 delMinisterio de Educacion y Ciencia, y por una beca incondicionadaconcedida al CRES-UPF por la Merck Company Foundation, la ramafilantropica de Merck & Co. Inc., Whitehouse Station, Nueva Jersey,Estados Unidos.

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