FACULTAD DE CIENCIAS HUAMANAS Y CIENCIAS DE...

83
1 FACULTAD DE CIENCIAS HUAMANAS Y CIENCIAS DE LA SALUD SEGUNDA ESPECIALIDAD EN: ATENCIÓN OBSTÉTRICA DE EMERGENCIA Y CUIDADOS CRITICOS” TRABAJO DE INVESTIGACIÓN “FACTORES DE RIESGO ASOCIADOS A LA PREECLAMPSIA”. ABRIL 2016 PARA OPTAR TÍTULO DE SEGUNDA ESPECIALIDAD OBST. VIVIANA ROJAS PASACHE. ICA, 2016

Transcript of FACULTAD DE CIENCIAS HUAMANAS Y CIENCIAS DE...

1

FACULTAD DE CIENCIAS HUAMANAS Y CIENCIAS DE LA

SALUD

SEGUNDA ESPECIALIDAD EN:

“ATENCIÓN OBSTÉTRICA DE EMERGENCIA Y

CUIDADOS CRITICOS”

TRABAJO DE INVESTIGACIÓN

“FACTORES DE RIESGO ASOCIADOS A LA PREECLAMPSIA”.

ABRIL 2016

PARA OPTAR TÍTULO DE SEGUNDA ESPECIALIDAD OBST.

VIVIANA ROJAS PASACHE.

ICA, 2016

2

INDICE

Pág.

CARATULA…………………………………………………………………………………1

INDICE………………………………………………………………………..……….… 2.3

DEDICATORIA……….……………………………………………………………….….4

RESUMEN…………….……………………………………………………………….….5

I INTRODUCCIÓN………………………..……………………………………...…..… 6

II MARCO TEORICO……………………………………………………………..….… 7

II.1 ANTECEDENTES…………………………………………………...………… 7

II.2 BASES TEORICAS……………………………………………………...……. 9

II.3 TRABAJOS DE INVESTIGACIÓN:

INTERNACIONALES………………………………………………………….30

NACIONALES……………………………………………………….…………38

CAPITULO I…………………………………………………………………………….. 51

TEMA DEL CASO CLINICO………………………………………………….………. 51

DEFINICIÓN…………………………………………………………...………. 51

INCIDENCIA……….……………………………………………………..…..…51

ETIOLOGÍA………….…………………………………………………...……..51

EPIDEMIOLOGÍA……….…………………………………………..…….……52

PATOGENIA……………….……………………………………………………52

FISIOPATOLOGÍA………….………………………………………..………...52

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL…….…………………………………………54

FACTORES DE RIESGO…………….………………………………...……...54

CLASIFICACIÓN………………………….…………………………………….55

FORMAS CLÍNICAS Y FRECUENCIA DE PRESENTACIÓN…..………...56

REPERCUCIONES MATERNAS, PERINATALES……………….…….…..56

3

CAPITULO II……………………………………………………………………...……..58

CASO CLÍNICO…………………………………………………………………………58

1 INTRODUCCIÓN……………………………………………………………………..58

2 OBJETIVO……………………………………………………………………..….…..58

3 MATERIAL Y METODO………………………………………………………...…...59

4 CASO CLÍNICO………………………………………………………………...…….59

ANAMNESIS………………………….……………………………...………….…59

EXPLORACIÓN FÍSICA……………….…….…………………………..………..59

PRUEBAS COMPLEMENTARIAS……….………………………………...…...60

DIAGNÓSTICO…………….……………………….……………………….…..…60

TRATAMIENTO……………..……………………………………………………..61

EVOLUCIÓN………………….……………………………………………..….….61

EPICRISIS……………………….…………………………………………..….….69

5 DISCUSIÓN Y ANÁLISIS………………………………….………………..…..……70

6 CONLUSIONES Y RECOMENDACIONES……………….………………...….…. 71

7 PROPUESTAS DE MEJORA…………………………….…………………..….…. 73

BIBLIOGRAFÍA…………………………………………………………..….…….…... 74

ANEXOS……………………………………………………………………..…………. 79

4

DEDICATORIA

A DIOS, PORQUE ÉL

SIEMPRE ESTUVO,

ESTÁ Y ESTARÁ

CONMIGO DURANTE

TODO EL TRAYECTO

DE MI VIDA.

A MIS PADRES,

QUE SIEMPRE ME

IMPULSARON

A SEGUIR CRECIENDO

A M I ESPOSO, POR SU

APOYO INCONDICIONAL

EN TODO MOMENTO

A MI HIJO, QUE ES LA RAZON DE

MI VIDA Y POR EL CUAL

SIEMPRE TENDRE LAS GANAS Y

LAS FUERZAS DE SEGUIR

ADELANTE.

5

RESUMEN

La Preeclampsia es una patología propia del embarazo, constituye un gran

problema de salud pública y una de las principales causas de mortalidad materna

-neonatal en muchos países del mundo.

Esta patología está asociada a factores predisponentes para

desencadenarla, como la etnia mestiza, primigravidez y deficientes controles

prenatales durante el embarazo, las cuales son de mayor frecuencia.

Además, que las consecuencias fetales son frecuentes en este grupo de

edad, como tener Recién Nacidos pequeños para la edad gestacional y depresión

neonatal. Otra Consecuencia, materna es que el 90% de los casos terminaron su

embarazo por cesárea a causa de ésta patología.

Este estudio es de tipo descriptivo y retrospectivo en la cual concluimos

que la edad, el peso. Los controles prenatales y la obesidad son algunos de los

factores de riesgo que se encuentran presente en la presentación de la eclampsia.

6

I INTRODUCCIÒN

La Preeclampsia es una de las complicaciones más preocupantes durante

el embarazo, ésta patología que tiene origen desconocido y está asociada a

múltiples factores de riesgo, constituye uno de los principales problemas de Salud

Pública en nuestro país, que cobra grandes repercusiones en la práctica

obstétrica-perinatal. Este tipo de hipertensión en el embarazo constituye un amplio

espectro de alteraciones en muchos sistemas, que producen consecuencias en el

binomio madre-feto, y predisponen a una mayor morbimortalidad materna, fetal y

neonatal.

La frecuencia de mujeres jóvenes con problemas de pre eclampsia cada

vez ha ido aumentando a nivel mundial. La incidencia de Preeclampsia oscila

entre 2-10% de los embarazos y varía en todo el mundo. La Organización Mundial

de la Salud (OMS) estima que la incidencia de Preeclampsia es siete veces mayor

en los países en desarrollo que en los desarrollados (2,8% y 0,4% de los nacidos

vivos respectivamente).Por eso muchos científicos han desarrollado diversas

investigaciones para responder la interrogante de cuáles son las causas para su

aparición en este grupo de edad pero hasta el momento no se las ha podido

descubrir.

Esta patología presenta complicaciones graves durante la gestación como:

desprendimiento prematuro de placenta, partos pretérmino, muerte fetal y

neonatal, restricción del crecimiento intrauterino, entre otros. En la madre se

presentan consecuencias fatales como la eclampsia, síndrome de Hellp,

coagulación intravascular diseminada, hemorragia cerebral, insuficiencia renal

aguda, shock y mortalidad. La Preeclampsia es una patología de alto riesgo en el

embarazo que aún no se puede evitar.

7

II MARCO TEORICO

II.1 ANTECEDENTES

Bonilla (2008), define clásicamente a la Preeclampsia como “El inicio

agudo de hipertensión, proteinuria (y edema) en la segunda mitad del embarazo

en una mujer que ha sido previamente normotensa y cuyo estado clínico haya

sido satisfactorio.

Joerin Verónica Natalia: Es la hipertensión arterial (HTA) propia del

embarazo y se caracteriza además por proteinuria, asociada o no a edemas. Esta

enfermedad afecta de preferencia a las nulíparas, aparece después de las 24

semanas de gestación y es típicamente reversible en el posparto inmediato.

La Preeclampsia es una enfermedad de origen desconocido y multifactorial

cuyo tratamiento definitivo es el parto, además de ser causal de repercusiones

sobre la madre y el recién nacido.

Perozo Romero Juan, La Preeclampsia es un desorden multisistémico

idiopático específico del embarazo y del Puerperio en humanos. Más

precisamente, es una enfermedad causada por la placenta, pues se ha descrito en

embarazos donde existen tejido trofoblástica pero no fetal (embarazos molares

completos).

8

Morgan-Ortiz Fred: Es un conjunto de signos y síntomas exclusivo de la

gestación, aparece a partir de la Semana veinte de embarazo, durante el parto o

hasta las seis semanas postparto. Esta patología se caracteriza por una placenta

anormal y disminución de la perfusión sistémica.

Beals Étienne, Cáceda L.; También depende de otros factores que

predisponen esta alteración, entre los cuales se incluye la hipertensión arterial,

diabetes, resistencia a la insulina, hipertrigliceridemia, incremento de la

testosterona, edad materna y diferencias étnicas como las observadas en mujeres

afroamericanas, portuguesas e indias.

9

II.2 BASES TEORICAS

PREECLAMPSIA

En esta primera parte se realiza una amplia revisión de los factores

clásicos de riesgo de Preeclampsia, enfatizando en los aspectos

inmunoendocrinos en cada uno de los casos. Se propuso una clasificación que los

divide en 2 grandes grupos: maternos y ambientales, y esta constituye el eje

central a partir del cual se realiza la discusión de los diferentes aspectos que

integran esta revisión, la cual evidencia la importancia que tienen el sistema

inmunológico y el endocrino en la fisiopatología, y el surgimiento de la enfermedad

hipertensiva inducida por el embarazo.

FACTORES DE RIESGO DE PREECLAMPSIA

Los factores de riesgo de PE han sido clasificados o divididos de diferente

manera por varios autores. Así, Serrano y otros6 los dividen en genéticos y

medioambientales, mientras que Contreras y otros en preconcepcionales o

crónicos y vinculados con el embarazo. En otros estudios epidemiológicos se ha

encontrado que son clasificados en modificables y no modificables, visión que

pudiera ser más operativa y práctica, ya que acepta o da la opción de cambiar

algunos de ellos, en este caso, los que se consideran modificables. También se

acepta la división en placentarios y maternos. En este trabajo proponemos una

clasificación que los divide en maternos y medioambientales:

1.- Maternos:

A) Preconcepcionales:

Edad materna menor de 20 y mayor de 35 años.

Raza negra.

Historia personal de PE (en embarazos anteriores).

10

Presencia de algunas enfermedades crónicas: hipertensión arterial, obesidad,

diabetes mellitus, resistencia a la insulina, enfermedad renal,

neurofibromatosis, síndrome antifosfolípidos primario (anticuerpos

antifosfolípidos) y otras enfermedades autoinmunes (síndrome antifosfolípidos

secundario), trombofilias y dislipidemia.

B) Relacionados con la gestación en curso:

Primigravidez o embarazo de un nuevo compañero sexual.

Sobredistensión uterina (embarazo gemelar y polihidramnios).

Embarazo molar en nulípara.

2.- Ambientales:

Malnutrición por defecto o por exceso.

Escasa ingesta de calcio previa y durante la gestación.

Hipomagnesemia y deficiencias de zinc y selenio.

Alcoholismo durante el embarazo.

Bajo nivel socioeconómico.

Cuidados prenatales deficientes.

Estrés crónico.

1.- FACTORES DE RIESGOS MATERNOS

A) PRECONCEPCIONALES

Edad materna: para algunos autores las edades extremas (menor de 20 y mayor

de 35 años) constituyen uno de los principales factores de riesgo de hipertensión

inducida por el embarazo, y se ha informado que en estos casos el riesgo de

padecer una PE se duplica.

Múltiples conjeturas han tratado de explicar este riesgo incrementado. Se

ha planteado que las mujeres mayores de 35 años padecen con mayor frecuencia

enfermedades crónicas vasculares, y esto facilita el surgimiento de la PE. Por otra

parte, se ha dicho que en el caso de las pacientes muy jóvenes se forman con

11

mayor frecuencia placentas anormales, lo cual le da valor a la teoría de la

placentación inadecuada como causa de la PE.

Raza negra: algunos autores informan que la PE aparece con mayor frecuencia

en las mujeres de esta raza, lo cual ha sido explicado por el hecho de que la

hipertensión arterial crónica es más frecuente y severa en estas personas.

Además, la obesidad y la diabetes mellitus tipo 2 también son más prevalentes en

la población afronorteamericana de los EE.UU. que en la caucásica, y gran parte

de los estudios sobre factores de riesgo de PE se han hecho en este país. Es

sabido que padecer cualquiera de estas enfermedades crónicas incrementa el

riesgo de sufrir una hipertensión inducida por el embarazo.

Historia familiar de Preeclampsia: en estudios familiares observacionales y

descriptivos se ha encontrado un incremento del riesgo de padecer una PE en

hijas y hermanas de mujeres que sufrieron una PE durante su gestación. Se

plantea que las familiares de primer grado de consanguinidad de una mujer que

ha padecido una PE, tienen de 4 a 5 veces mayor riesgo de presentar la

enfermedad cuando se embarazan. Igualmente, las familiares de segundo grado

tienen un riesgo de padecerla de 2 a 3 veces mayor, comparado con aquellas

mujeres en cuyas familias no hay historia de PE. Este tipo de predisposición

familiar apoya la definición de la PE como una enfermedad compleja, en la que los

factores genéticos que contribuyen a su origen, y que suelen ser múltiples,

interactuarían de la forma siguiente entre ellos y con el ambiente: 2 o más genes

entre sí (herencia poligénica), o 2 o más genes con diferentes factores

medioambientales (herencia multifactorial), y donde la heterogeneidad genética

del individuo determinaría diferentes respuestas a un factor externo. Los genes

que están implicados en el surgimiento de la PE, de los cuales se han encontrado

más de 26, han sido agrupados, de acuerdo con su papel etiológico en 4 grupos:

aquellos que regulan el proceso de placentación, los que intervienen en el control

de la tensión arterial (TA), los que están involucrados en el fenómeno de isquemia

placentaria y, por último, los que rigen el proceso de daño/remodelado del

endotelio vascular.

La influencia del componente genético en el surgimiento la PE ha sido

puesta en evidencia por estudios hechos en gemelos de sexo femenino, muchos

12

de los cuales han demostrado una mayor frecuencia de aparición de PE entre

gemelos homocigóticos que en dicigóticos. Por su parte, se ha precisado que el

efecto genético sobre la susceptibilidad para desarrollar una PE está dado, en

gran medida, por genes de origen materno; pero que también los genes paternos,

por medio del genotipo fetal, pueden contribuir a esta predisposición, ya que estos

últimos genes tienen un papel clave en la placentación. La influencia de los genes

paternos como factor de riesgo de PE, se pone de manifiesto al encontrar que una

mujer tiene 80 % más de riesgo para desarrollar una PE si su compañero sexual

tiene como antecedente ser el progenitor masculino de una gestación previa en la

que la mujer sufrió una PE. A su vez, los hombres cuyas madres padecieron una

PE durante la gestación que los procreó, tienen 110 % más riesgo de que una

mujer por ellos embarazada desarrolle esta enfermedad durante la gestación.

Así, como la susceptibilidad para desarrollar una PE está mediada en gran

parte por un componente genético heredable, que contribuye en

aproximadamente un 50 % al riesgo de sufrir la enfermedad, indagar sobre la

existencia de historia familiar de PE puede ser una herramienta valiosa para

detectar embarazos con alto riesgo de padecerla.

Historia personal de Preeclampsia: se ha observado que entre un 20 y 50 % de

las pacientes que padecieron una PE durante un embarazo anterior, sufren una

recurrencia de la enfermedad en su siguiente gestación. Torales y otros hallaron

en su estudio de 56 gestantes hipertensas que el 31 % tenía el antecedente de

haber sufrido una PE durante el embarazo anterior, mientras que Álvarez y

Mendoza encontraron en su investigación hecha en 100 embarazadas hipertensas

en Barquisimeto, que el 50 % tenía también el mismo antecedente ya referido.

Asimismo, Sánchez y otros plantearon que uno de los hallazgos más llamativos

de su estudio de 183 mujeres preeclámpsicas, fue la diferencia significativa entre

casos y controles, en cuanto al antecedente referido de PE en un embarazo

previo, y concluyeron que las mujeres con este antecedente tuvieron un riesgo de

padecer una PE durante la gestación actual que se estudió, casi 9 veces mayor

que las que no la refirieron. Se ha planteado que este riesgo de recurrencia

estaría justificado por el hecho de que existe una susceptibilidad para padecer

una PE en toda mujer que la sufre, y en esto jugaría su papel el factor genético

utilizando como mediador al sistema inmunológico. Este supuesto tendría una

explicación satisfactoria, sobre todo, en el caso de las pacientes que no lograron

13

desarrollar una tolerancia inmunológica a los mismos antígenos paternos a los

que ya se expusieron en gestaciones anteriores.

Presencia de algunas enfermedades crónicas

Hipertensión arterial crónica: es conocido que un alto índice de

enfermedad hipertensiva del embarazo se agrega a la hipertensión arterial

preexistente, y que en la medida en que es mayor la TA pregestacional,

mayor es el riesgo de padecer una PE, La hipertensión arterial crónica

produce daño vascular por diferentes mecanismos, y la placenta

anatómicamente es un órgano vascular por excelencia, lo cual puede

condicionar una oxigenación inadecuada del trofoblasto y favorecer el

surgimiento de la PE. Se ha informado también que en la PE se produce

un aumento de la sensibilidad a la norepinefrina, y que esta es aún más

intensa en las pacientes que ya tienen una hipertensión arterial crónica,

cuando la PE se le asocia. Por otra parte, se ha visto que el 20 % de las

mujeres que sufren una PE durante su embarazo y que no eran

hipertensas con anterioridad, pueden quedar en este estado para siempre,

sobre todo, si la toxemia apareció antes de las 30 semanas de gestación.

Obesidad: la obesidad, por un lado, se asocia con frecuencia con la

hipertensión arterial, y por otro, provoca una excesiva expansión del

volumen sanguíneo y un aumento exagerado del gasto cardíaco, que son

necesarios para cubrir las demandas metabólicas incrementadas, que esta

le impone al organismo, lo que contribuye a elevar la TA. Por otro lado, los

adipocitos secretan citoquinas, en especial el factor de necrosis tumoral

(FNTa), que producen daño vascular, lo que empeora el estrés oxidativo,

fenómeno que también está involucrado en el surgimiento de la PE.

Diabetes mellitus: en la diabetes mellitus pregestacional puede existir

microangiopatía y generalmente hay un aumento del estrés oxidativo y del

daño endotelial, todo lo cual puede afectar la perfusión uteroplacentaria y

favorecer el surgimiento de la PE, que es 10 veces más frecuente en las

pacientes que padecen esta enfermedad. Asimismo, también se ha visto

14

que la diabetes gestacional se asocia con frecuencia con la PE, aunque

todavía no se tiene una explicación satisfactoria para este hecho.

Resistencia a la insulina: en los últimos tiempos se ha reunido alguna

evidencia para considerar a la resistencia a la insulina como un factor de

riesgo de PE; sin embargo, el embarazo por sí mismo está asociado con

una reducción de la sensibilidad a la insulina, por lo que es difícil precisar a

partir de qué grado la resistencia a la insulina comienza a ser anormal

durante la gestación. En el estado hiperinsulinémico existe una

hiperactividad simpática y una retención de sodio y agua por el riñón

debido a la acción natriurética directa de la insulina, todo lo cual puede

contribuir al incremento de la TA durante el embarazo. El responsable

directo de las alteraciones metabólicas que se producen en el estado

hiperinsulinémico parece ser el FNTa. Esta citoquina actúa directamente

sobre el receptor de la insulina, y lo hace resistente a la acción de la

hormona, y además, estimula la liberación de ácidos grasos libres y

disminuye la producción de óxido nítrico, lo que contribuye a aumentar aún

más el estado de insulinorresistencia y favorecer la vasoconstricción,

Respectivamente.

Enfermedad renal crónica (nefropatías): las nefropatías, algunas de las

cuales ya quedan contempladas dentro de procesos morbosos como la

diabetes mellitus (nefropatía diabética) y la hipertensión arterial

(nefroangioesclerosis), pueden favorecer por diferentes mecanismos el

surgimiento de una PE. En los casos de la nefropatía diabética y la

hipertensiva, puede producirse una placentación anormal, dado que

conjuntamente con los vasos renales están afectados los de todo el

organismo, incluidos los uterinos. por otra parte, en las enfermedades

renales en la que existe un daño renal importante, se produce con

frecuencia hipertensión arterial, y como ya se comentó, su presencia en la

gestante puede coadyuvar a la aparición de la PE. Presencia de

anticuerpos antifosfolípidos: estos están presentes en varias

enfermedades autoinmunes, como el síndrome antifosfolípidos primario y

el lupus eritematoso sistémico, y su presencia (prevalencia aproximada de

15 % en mujeres con alto riesgo obstétrico) se ha relacionado con un

aumento de la probabilidad de padecer una La presencia de anticuerpos

antifosfolípidos se asocia con un aumento de la tendencia a la trombosis.

15

Esto puede afectar la placenta, tornándola insuficiente, lo que resulta por

trombosis de los vasos placentarios, infartos y daño de las arterias

espirales. Se alteraría así el desarrollo del trofoblasto desde su inicio y no

habría una efectiva circulación fetoplacentaria (isquemia), y en etapas

tardías, aparecería un daño importante de la vasculatura uteroplacentaria,

lo que produciría un estado de insuficiencia placentaria y surgirían las

complicaciones gestacionales que se asocian con esta. Por otro lado, se

produciría también un aumento de la respuesta inflamatoria del endotelio

de todo el árbol vascular, con porosidad de la membrana vasculosincitial,

secreción de moléculas pro adhesivas y citoquinas, e ingreso fácil al

espacio subendotelial de auto anticuerpos de tipo IgG, todo lo cual ha sido

implicado también en la fisiopatología de la PE. En resumen, los

mecanismos patogénicos para el surgimiento de la trombosis placentaria

en el síndrome antifosfolípidos serían los siguientes:

hipercoagulabilidad plaquetaria inducida por la presencia de los auto

anticuerpos, disminución de la producción de prostaciclina, aumento de la

síntesis del factor Von Willebrand y del factor activador plaquetario,

inhibición de la actividad anticoagulante de las proteínas C y S, y de la

antitrombina III, deterioro de la fibrinólisis y, finalmente, disminución de la

anexina V, proteína producida por la placenta que se une a los fosfolípidos

aniónicos membranales exteriorizados, para hacer las superficies de las

membranas de los vasos placentarios no trombogénicas.

Trombofilias: su presencia se asocia con un mayor riesgo de presentar

enfermedad tromboembólica durante el embarazo y el puerperio,

alteraciones vasculares placentarias, aborto recurrente y PE. En el estudio

de tipo caso-control de Kupferminc y otros en 110 mujeres con

antecedentes de complicaciones vasculares placentarias tardías (PE

severa, abruptio placentae, retardo del crecimiento intrauterino y/o muerte

fetal intrauterina), se detectó algún tipo de trombofilia en el 52 % de los

casos. Asimismo, se ha observado una mayor incidencia de resistencia al

efecto de la proteína C activada, de deficiencia de proteína S y de

mutación del factor V de Leiden en mujeres que tienen antecedentes de

PE, de resultados perinatales adversos o de ambos. Por lo tanto, las

mujeres con trombofilia familiar tienen un mayor riesgo de PE y de pérdida

fetal.

16

Es necesario aclarar que cuando se habla de trombofilias se refiere a

trastornos de la coagulación que padece la mujer, en este caso, antes del

embarazo, y en los cuales existe una situación de hipercoagulabilidad, por

lo que pueden contribuir a acentuar el estado procoagulante propio de

cualquier embarazo normal. Otro aparte merecen los trastornos de la

coagulación que pueden aparecer en el curso de una PE, que son muy

variados, y que por supuesto, no están presentes antes del surgimiento de

esta enfermedad.

Dislipidemia: su presencia se asocia con un aumento del estrés oxidativo

y con la aparición de disfunción endotelial, condiciones que están

vinculada con la génesis de la PE, además, generalmente se presenta

acompañando a otras enfermedades crónicas, como la obesidad, la

diabetes mellitus y la hipertensión arterial, lo que incrementa aún más el

riesgo de padecer una PE. Al parecer, un simple aumento del substrato

oxidable (lípidos circulantes, y más específicamente, LDL pequeñas y

densas ricas en triglicéridos), que logre superar la capacidad

amortiguadora antioxidante de la gestante, podría ser responsable de la

liberación de productos derivados de la oxidación lipídica, que pueden

afectar la integridad de las membranas celulares y generar una cascada de

eventos que tendrían como colofón a la disfunción endotelial.

En cultivos de células placentarias se ha visto que la modificación de

los lípidos membranales por reacciones como la oxidación, disminuye la

secreción de progesterona, afectándose el proceso de placentación, y así

también se ha relacionado la presencia de una hipertrigliceridemia

importante al inicio del embarazo con el incremento de la probabilidad de

sufrir una PE en la segunda mitad de la gestación. Debido a que los

triglicéridos (TGC) son los lípidos predominantes en las lipoproteínas de

muy baja densidad (VLDL), el aumento de su concentración encontrado en

gestantes preeclámpsicas pudiera ser explicado por la gran resistencia a la

acción de la insulina que también tienen estas pacientes, ya que esta

hormona inhibe la secreción hepática de VLDL. Son estos TGC en exceso

los que se acumulan en las células endoteliales y contribuyen al

surgimiento de la disfunción endotelial, por lo que se ha planteado que la

alteración en el metabolismo lipídico es un pre requisito para la aparición

de la disfunción endotelial en la PE.

17

B) FACTORES DE RIESGO MATERNOS RELACIONADOS CON LA

GESTACIÓN EN CURSO

Primigravidez o embarazo de nuevo compañero sexual: esto ha sido

comprobado por múltiples estudios epidemiológicos, que sustentan la validez de

este planteamiento, siendo en las primigestas la susceptibilidad de 6 a 8 veces

mayor que en las multíparas.

La PE se reconoce actualmente como una enfermedad provocada por un

fenómeno de inadaptación inmunitaria de la madre al conceptus fetal. La unidad

fetoplacentaria contiene antígenos paternos que son extraños para la madre

huésped, y que se supone sean los responsables de desencadenar todo el

proceso inmunológico que provocaría el daño vascular, causante directo de la

aparición de la enfermedad. En la PE, el sistema reticuloendotelial no elimina los

antígenos fetales que pasan a la circulación materna, y se forman entonces

inmunocomplejos, que se depositan finalmente en los pequeños vasos

sanguíneos y provocan daño vascular y activación de la coagulación con nefastas

consecuencias para todo el organismo. Durante el primer embarazo se pondría en

marcha todo este mecanismo inmunológico y surgiría la PE pero, a la vez,

también se desarrollaría el fenómeno de tolerancia inmunológica, que evitará que

la enfermedad aparezca en gestaciones posteriores, siempre que se mantenga el

mismo compañero sexual. Así, el efecto protector de la multiparidad se pierde con

un cambio de compañero. El fenómeno de tolerancia inmunológica disminuye con

el tiempo y aproximadamente 10 años después de una primera gestación, la mujer

ha perdido la protección que le confiere esta.

Se ha comprobado, asimismo, que la escasa duración de la cohabitación

sexual es un determinante importante del surgimiento de la enfermedad. En varios

estudios ya se ha demostrado que tanto en las primigestas como en las

multíparas, la mayor duración de la cohabitación sexual antes de la concepción

tiene una relación inversa con la incidencia de PE. Por el contrario, la modificación

de la paternidad o un breve período de exposición a los espermatozoides del

compañero sexual, se han relacionado con un incremento sustancial del riesgo de

padecer la enfermedad, y lo mismo sucede con los embarazos ocurridos por

inseminación artificial heteróloga o por donación de ovocitos, y con el hecho de

tener un compañero que fue el progenitor masculino en un embarazo con PE en

otra mujer.

18

Por otra parte, se ha dicho también que la mujer primigesta, por no haber

tenido sometido previamente el útero a la distensión de un embarazo, tiene

durante toda su evolución un mayor tono del miometrio que, por compresión,

disminuye el calibre de las arteriolas espirales, y esto limita la perfusión sanguínea

a esta zona, con la consecuente posibilidad de hipoxia trofoblástica, fenómeno

que también ha sido implicado en la génesis de la PE. Así, la inadecuada

perfusión de la placenta es seguida por sus cambios patológicos, el escape de

trofoblasto a la circulación, y el consecuente y lento desarrollo de una coagulación

intravascular sistémica con efectos deletéreos importantes en todo el organismo.

Se ha comprobado que en la PE la irrigación uteroplacentaria está

disminuida en un 50 %, lo que produce una degeneración acelerada del

sincitiotrofoblasto y trombosis intervellosa e infartos placentarios, lo cual conduce

al síndrome de insuficiencia placentaria, y altera el intercambio diaplacentario de

sustancias y la producción y secreción hormonal de la placenta, facilitándose,

además, su desprendimiento prematuro, con sus consecuencias nefastas para la

madre y el feto.

Sobredistensión uterina (embarazo gemelar y polihidramnios): tanto el

embarazo gemelar como la presencia de polihidramnios generan Sobredistensión

del miometrio; esto disminuye la perfusión placentaria y produce hipoxia

trofoblástica, que, por mecanismos complejos, ya explicados en parte, pueden

favorecer la aparición de la enfermedad. Así, se ha informado que la PE es 6

veces más frecuente en el embarazo múltiple que en el sencillo.

Por otra parte, en el embarazo gemelar hay un aumento de la masa placentaria y,

por consiguiente, un incremento del material genético paterno vinculado con la

placenta, por lo que el fenómeno inmunofisiopatológico típico de la PE puede ser

más precoz e intenso en estos casos.

Embarazo molar: la frecuencia de PE es 10 veces superior en estos casos a la

encontrada en el embarazo normal. Durante el embarazo molar se produce un

mayor y más rápido crecimiento del útero, lo que genera distensión brusca del

miometrio, con el consiguiente aumento del tono uterino, disminución del flujo

sanguíneo placentario e hipoxia que, como ya se comentó, está vinculada con la

aparición de la enfermedad. Asimismo, en el embarazo molar está aumentada la

masa placentaria, ya que hay una superabundancia de vellosidades coriónicas, lo

cual puede anticipar y acrecentar la reacción inmunitaria anormal vinculada con la

19

aparición de la PE. Por su parte, en este tipo de gestación está muy elevada la

HCG, situación que también se ha asociado con un incremento de la incidencia de

PE, incluso en el embarazo que no está afectado por una mola. Gökdeniz y otros

publicaron en 1999 un estudio en el cual compararon los niveles de ß-hCG

encontrados al principio del tercer trimestre en mujeres preeclámpsicas y en otras

con gestación normal, y concluyeron que esta estaba muy elevada en las

primeras y que su temprano (inicio del segundo trimestre) y marcado incremento

pudiera predecir el surgimiento posterior de una PE.

2.- FACTORES DE RIESGO AMBIENTALES

Malnutrición por defecto o por exceso: se ha visto que, con frecuencia, la

malnutrición por defecto se asocia con la PE. La justificación de este hecho es

compleja. La desnutrición se acompaña generalmente de anemia, lo cual significa

un déficit en la captación y transporte de oxígeno, que puede ocasionar la hipoxia

del trofoblasto. Por otro lado, en la desnutrición también existe deficiencia de

varios micronutrientes, como calcio, magnesio, zinc, selenio y ácido fólico, cuya

falta o disminución se ha relacionado con la aparición de la PE. En relación con la

malnutrición por exceso, ya fue abordado el tema cuando nos referimos a la

obesidad.

Escasa ingesta de calcio: estudios epidemiológicos en mujeres embarazadas

encuentran una relación inversa entre el calcio ingerido en la dieta y la

hipertensión inducida por el embarazo. Un trabajo reciente en el cual se le

administró a gestantes adultas un suplemento de 1,5 g de calcio elemental al día

(en forma de carbonato de calcio), y a embarazadas adolescentes, otro con una

concentración de calcio elemental de 2 g, mostró una disminución de la PE en los

grupos que recibieron el suplemento. Se plantea que una excreción urinaria de

calcio menor que 12 mg/dL puede predecir el surgimiento de la PE con una

sensibilidad de 85 %, una especificidad de 91 %, un valor predictivo positivo de 85

% y un valor predictivo negativo de 91 %.

La disminución del calcio extracelular conlleva, a través de mecanismos

reguladores, al aumento del calcio intracelular, lo que produce una elevación de la

reactividad y una disminución de la refractariedad a los vasopresores; entonces, la

noradrenalina actúa sobre los receptores alfa y produce vasoconstricción y

20

aumento de la TA. Con la disminución del calcio plasmático, disminuye también la

síntesis de prostaglandina (prostaciclina), que es un vasodilatador. En esencia, la

hipocalcemia en el líquido extracelular despolariza las membranas de las células

nerviosas y musculares, y aumenta la producción de potenciales de acción.

Asimismo, a diferencia de los embarazos normales, en la PE los niveles de

la hormona paratiroidea, en respuesta a la hipercalcemia inicial, se encuentran

significativamente elevados y los de vitamina D3, disminuidos, produciéndose esto

último luego del aumento plasmático de la PTH y del incremento de la calcemia.

Todo lo anterior pudiera explicar la menor excreción de calcio por la orina, y la

reducción de la absorción intestinal de este ión que se presentan en la PE. Otros

autores han hablado también de la existencia de una ATPasa de calcio (bomba de

calcio) defectuosa en las mujeres con PE. Esta enzima es responsable de la

regulación de los niveles de calcio iónico intracelular, y tiene como función extraer

el calcio del interior de la célula y llevarlo al espacio extracelular. Su defecto

conduciría a una acumulación intracelular de calcio que produciría un aumento del

tono de la musculatura lisa arteriolar, vasoconstricción, aumento de la resistencia

vascular periférica y, finalmente, de la TA.

Además, en el embarazo, el metabolismo del calcio se modifica, sobre

todo, para compensar el flujo activo transplacentario de este ión al feto. El

equilibrio del calcio es afectado por la dilución de este elemento que se produce

por la expansión del volumen del líquido extracelular, así como por la

hipercalciuria que resulta del aumento de la tasa de filtración glomerular durante

la gestación. Por tanto, para mantener un balance positivo de este elemento, la

embarazada tiene que ingerir más calcio que la mujer no embarazada. Se ha

comprobado también que en el ser humano el calcio es un inductor de la

fosfolipasa A2, enzima que interviene en la síntesis del ácido araquidónico, que

es un precursor de otros elementos que tienen función vasodilatadora, y de la

óxido nítrico sintetasa, que está vinculada con la producción de óxido nítrico, el

vasodilatador natural por excelencia. Por todo ello, el suministro adecuado de

calcio parece disminuir la respuesta vasopresora y, por ende, mejora la

microcirculación, lo que reduce, en consecuencia, la posibilidad de padecer

hipertensión arterial durante el embarazo. Los resultados son apreciables

después de las 8 semanas de terapia suplementaria con 2 g de calcio al día.

21

Hipomagnesemia: la disminución del magnesio debido a su función reguladora

del calcio intracelular, del tono vascular central y de la conductividad nerviosa,

también se considera un factor precipitante de la hipertensión durante la

gestación, lo cual ha sido informado por Davison y otros; sin embargo, estos

resultados no son concluyentes, dado que otros investigadores han encontrado en

sus estudios lo contrario, es decir, una asociación entre la hipermagnesemia y la

PE, por lo que se necesitan más investigaciones sobre el tema para poder

resolver esta disyuntiva.

Bajo nivel socioeconómico y cuidados prenatales deficientes: múltiples son

los estudios que relacionan estas 2 situaciones con la presencia de PE. La causa

de esto se ha informado que es multifactorial e involucra a varios de los factores

individuales mencionados en esta revisión. Estrés crónico: varios estudios

evidencian que el aumento de los niveles de las hormonas asociadas con el

estrés puede afectar tanto la TA de la madre, como el crecimiento y el desarrollo

del feto. Las mujeres sometidas a estrés crónico presentan una elevación en

sangre de la ACTH, que es producida fundamentalmente por la hipófisis, pero

también por la placenta. La elevación de la ACTH favorece el incremento de la

síntesis de cortisol por las glándulas suprarrenales y este produce un aumento de

la TA, pero también actúa sobre la placenta adelantando su reloj biológico, y

puede así desencadenarse el parto antes de las 37 semanas.

Consideraciones finales

Los sistemas orgánicos inmunológico y endocrino están implicados de

forma importante en la génesis de la PE, como quedó evidenciado en esta

revisión, acerca de les factores clásicos de riesgo de esta enfermedad

gestacional. Detectar tempranamente durante el embarazo los factores de riesgo

de PE tiene gran importancia, ya que esto permitirá diagnosticarla de forma

precoz y, en algunos casos, hasta prevenirla y actuar sobre ellos, evitando así

todo el malestar que puede causar esta enfermedad en la madre, su producto y el

personal de salud que los atiende.

22

CLASIFICACIÓN

Leve

a) TA ≥ 140/90 y <160/110 mmHg

ƒ

b) Proteinuria ≤ 5g/24horas

Severa:

Presencia de uno o más de los siguientes signos:

ƒ TA ≥ 160/110mmHg (antes de haber iniciado el tratamiento

hipotensor).

Proteinuria >5g/24horas Por encima de 5 gr, el grado de proteinuria no

se Correlaciona ni con la gravedad ni con los resultados Maternos o

perinatales

Creatinina sérica mayor de1, 2 mg/dl (a menos que se sepa

Que estaba previamente elevada).

Plaquetas < 100.000/μgƒ

Aumento de las transaminasas

ƒ

Hemólisis:

O Bilirrubina>1,2 mg/dl

O LDH>600UI

O Presencia de esquistocitos

Oliguria: < 500 ml/24 horas Clínica neurológica, dolor del epigástrico o

alteraciones visuales

Edema pulmonar

23

DIAGNOSTICO

Para establecer el Diagnóstico de Preeclampsia hay que tener en cuenta

que se trata de una alteración que no solo afecta a la placenta sino a muchos

otros órganos de la madre, como el riñón, el hígado y el corazón, al estar

plenamente implicado el sistema cardiovascular.

Una de las claves para diagnosticar la Preeclampsia son los valores de la

tensión arterial. Cuando una embarazada que previamente no tenía problemas

de hipertensión muestra unos valores de presión arterial superiores a 140/90

mmHg se habla de Preeclampsia.

Para confirmar el diagnóstico de la hipertensión arterial se precisa hallar en

dos ocasiones separadas al menos 6 horas una de otra, las cifras de 140/90 mm

Hg, o un aumento de TAS (Tensión arterial sistólica) de al menos 30 mm Hg, o un

aumento de TAD (Tensión Arterial diastólica) de al menos 15 mm Hg.

Se define una Preeclampsia grave si se superan en dos ocasiones,

separadas al menos de 6 horas una de otra, cifras de TA de 160/110 mm Hg, o

tensión arterial diastólica mayor o igual a 120 mmHg aunque sea en una ocasión o

incremento de la tensión arterial sistólica de 60 mmHg o de la tensión arterial

diastólica en 30 mmHg sobre la tensión basal.

El obstetra hace un examen físico en cada una de las citas para observar

si hay o no edema, además de vigilar la ganancia de peso de la embarazada (que

no ha de ser superior a 1 kg en una semana, ni muy brusca en 2 o 3 días).

Además, el médico controlará, mediante un análisis de orina, si hay o no

proteinuria (presencia de proteínas en la orina), teniendo en cuenta que los

valores patológicos están por encima de 300 mg/24 horas.

Mediante las análisis de sangre rutinarias del embarazo, el médico puede

valorar también si las enzimas del hígado registran valores alterados y si hay

trombocitopenia (en este caso, el número de plaquetas sería inferior a 100.000).

También es importante analizar si los factores de coagulación presentan algún

problema.

La evolución del feto también puede ayudar a diagnosticar una

Preeclampsia. Así, las ecografías periódicas permiten al especialista examinar el

24

estado de la placenta. Pero, además, la Preeclampsia se puede manifestar con

crecimiento intrauterino retardado (CIR) y con pérdida de bienestar fetal (también

conocida como sufrimiento fetal). El CIR no sucede en todos los casos de

Preeclampsia leve, pero sí con mucha frecuencia cuando la patología es grave.

Con respecto a la pérdida de bienestar fetal, se puede observar en algunos casos,

independientemente de la gravedad de la Preeclampsia.

Para hacer un diagnóstico precoz de la Preeclampsia en aquellas mujeres

con más riesgo se puede optar por realizar una exploración Doppler de las arterias

maternas, haciendo especial hincapié en la arteria uterina.

Es muy importante tener en cuenta los criterios de gravedad de una

Preeclampsia:

Tensión arterial sistólica mayor o igual a 160 mmHg o tensión arterial diastólica

mayor o igual a 110 mmHg registrados en dos ocasiones con intervalos no menor

de 6 horas y en estado de reposo o tensión arterial diastólica mayor o igual a 120

mmHg aunque sea en una ocasión o incremento de la tensión arterial sistólica de

60 mmHg o de la tensión arterial diastólica en 30 mmHg sobre la tensión basal.

Proteinuria mayor o igual a 500 mg en 24 horas.

Disfunción hepática o disfunción renal severa.

Trastornos cerebrales o visuales.

Dolor epigástrico.

Edema pulmonar o cianosis.

Trombocitopenia de 100.000 plaquetas o menos.

Ácido úrico mayor o igual a 7 mg/dl.

Aparición de crecimiento intrauterino retardado y/o oligoamnios.

TRATAMIENTO

A) Preeclampsia leve

Control ambulatorio .

Tratamiento:

• No administrar diuréticos

• Dieta sin restricción de sal

25

• Restricción de la actividad física (no es necesario el reposo en cama)

• Hipotensores:

Su uso es controvertido, Se propone utilizarlos solo Cuando la TA ≥

150/100..En caso de utilizarse, el objetivo es mantener la TA Alrededor de 140/90.

α‐metildopa (Aldomet® Comprimidos de 250 mg):

250/12‐8 horas aumentando hasta 500 mg/6 horas

Labetalol trandate® comprimidos de 100 y 200 mg) Inicialmente 100

mg/12 horas oral, aumentando de 100 en 100 mg/12 horas hasta un

máximo de 2400 mg/día partir de 400 mg/12horas se puede fraccionar la

dosis en 2 o 3 tomas al día

Hidralazina (Hydrapres®comprimidosde25y50mg):12,5‐50mg/6 horas

Control.

Control periódico de TA, peso y proteinuria.

Proteinuria cuantitativa, recuento plaquetario, enzimas hepáticas y

creatinina una vez a la semana

En presencia de recuento plaquetario y enzimas hepáticas normales no es

preciso estudio de la coagulación.

El ácido úrico no es útil para predecir una mala evolución de la Preeclampsia.

Recuento diario de movimientos fetales

Test no estresante1‐2 veces a la semana y perfil biofísico si no es reactivo.

Tras el diagnóstico, valoración ecográfica con debiometría y Doppler.

Control del crecimiento fetal y volumen de líquido amniótico cada 3‐4

semanas.

Finalización de la gestación

≥ 40semanas

≥ 37semanas si test de Bishop>6

Si está indicada una cesárea (por otra causa), ésta se practicará a partir de la

semana 37.

B) Pre eclampsia grave

Ingreso hospitalario.

26

Tratamiento:

• Hipotensores:

el objetivo es mantener la TA diastólica entre 90‐105mmHg y la TA sistólica entre

140‐155 mmHg. Una Vez alcanzado el control de la TA debe mantenerse la menor

dosis efectiva .Parece existir cierta evidencia sobre el beneficio del Labetalol

frente a la Hidralazina.

Labetalol (Trandate®: ampollas de 5mg/ml de clorhidrato de Labetalol en una

ampolla de 20ml.Comprimidos de100 y 200mg) .

Dosis de ataque:

Bolo de 20mg en 2‐minutos.Si la TA no se controla, administrar otro bolo de

40mg. al cabo de 10 minutos y posteriormente 80mg.cada 10 minutos dos veces

más (20,40,80,80:máximo 220 mg.). Si la TA sigue sin controlarse, pasar a otro agente antihipertensivo. .A continuación: infusión de 30‐120 mg/hora ⇒ 5 ampollas en 500 ml de suero glucosado al 5% (1mg/ml) a un ritmo de 30‐120 ml/hora. ƒ

Mantenimiento:

Inicialmente100mg/12 horas oral, aumentando de 100 en 100 mg/12 horas, cada 2

días, hasta un máximo de 2400mg/día. A partir de 400mg/12 horas se puede

fraccionar la dosis en 2 o 3 tomas al día. Evitar su uso en pacientes asmáticas o

con insuficiencia cardiaca congestiva y frecuencia cardiaca materna<60 latidos /

minuto.

Hidralazina (Hydrapres®: ampollas de 25 mg y comprimidos de 25 y 50mg)

Dosis de ataque:

5 mg i.v .en 1 ‐ 2 minutos.

Si no hay efecto, repetir cada 15 minutos hasta un máximo de 6 dosis (30mg).

Si no hay respuesta, pasar a otro agente.

Nifedipino: La ficha técnica de acción corta (Adalat®), no contempla su

utilización para el tratamiento de la HTA.

La de acción prolongada (Adalat®), contraindicada su utilización durante la

gestación.

Pueden adicionar los tratamientos ante la falta de control.

27

• Anticonvulsivantes

Sulfato de magnesio (Sulmetín simple®: ampollas de1, 5mg en10ml): pueden

utilizarse si las cifras tensionales son límites o si la hipertensión se controla

rápida y fácilmente. En caso de duda deberá utilizarse y siempre que se

prevea el parto en menos de 24‐48 horas o haya signos de pródromos de

Eclampsia.

Una vez iniciado el tratamiento puede suspenderse después de las primeras

24 horas si se decide prolongar la gestación.

ƒ

Dosis de carga:

4 g i.v. En 5‐15 minutos 3 ampollas en 70 ml de suero glucosado al 5%(extraer 30

ml de un envase de100) a un ritmo De 400 ml/hora.

Mantenimiento:

1g/hora inicialmente, ajustando la dosis en función de los controles 10 ampollas

en 400 ml de suero glucosado al 5%(extraer 100 ml de un envase de 500)

a un ritmo de 34 ml/hora.

Niveles terapéuticos:

4‐8mg/dlƒ

Controles:

O Reflejos, frecuencia respiratoria y diuresis horarios

O Magnesemia cada 2 ‐ 6 horasƒ

Signos de toxicidad:

Disminución o abolición del reflejo rotuliano

Frecuencia respiratoria inferior a 12 / minuto

Diuresis < 25 ml/hora durante más de 4 horas

En caso de toxicidad:

- Gluconatocálcico; (Sandosténcalcio ® ampollas de 5ml al 10 %):1 gr i.v. (2

ampollas) en 2 minutos. El tratamiento con SO4Mg se mantendrá por un periodo

De 48 horas post parto. En casos de normalización de la TA; Y sin signos

prodrómicos de eclampsia, se puede suspender A las 24 horas. Si transcurridas

28

48 horas persisten los signos o síntomas prodrómicos, se mantendrá el

tratamiento 24 horas más.

•Cefalea (en mujeres sin historia de migraña):

° Investigación del origen de la cefalea

° Asociar al tratamiento hipotensor Paracetamol

° Reposo en cama.

Si persiste cefalea intensa:

Control estricto de la TAŽ

Iniciar tratamiento con sulfato de magnesio

Si persiste la cefalea terminar la gestación

Control

Monitorización continúa de la TA hasta lograr su estabilización.

Posteriormente cada 4 horas, respetando el Sueño nocturno

Peso y diuresis diarios

Recuento plaquetario, enzimas hepáticas y creatinina diario

En presencia de recuento plaquetario y enzimas hepáticas normales no es

preciso estudio de la coagulación

El ácido úrico no es útil para predecir una mala evolución de la pre eclampsia.

Perfil biofísico fetal en presencia de oligoamnios y/o CTG no reactivo

Ecografía/48horas (ILA y Doppler umbilical y fetal).

Control del crecimiento fetal cada 2 semanas

Finalización de La gestación

<24semanas:

Debe ofertarse la terminación de la gestación.

24‐33 semanas:

Tratamiento conservador con administración de glucocorticoides y extracción fetal

en la semana 34.

34 semanas:

Administración de glucocorticoides y extracción fetal en 48 horas.

29

>34semanas:

Finalización de la gestación.

Independientemente de la edad gestacional, desde que se establece el

diagnóstico y en el plazo máximo de 72 horas:

Con uno o más de los siguientes datos

A. Indicaciones maternas

Hipertensión ≥ 160/110 a pesar del tratamiento a dosis máximas de al menos

2 agentes antihipertensivos

Plaquetas <100.000/μg

Oliguria (<5ml/Kg/hora) que no revierte tras fluidoterapia

. Aumento de transaminasas por encima del doble del límite

Superior de la normalidad, si se acompaña de dolor epigástrico

O en hipocondrio derecho.

Edema pulmonar

Aumento de la creatinina de 1 mg/dl sobre los niveles basales

Cefalea persistente o alteraciones visuales

B.Indicaciones fetales

Deceleraciones tardías o variables severas, persistentes

Perfil biofísico ≤ 4 en dos ocasiones con un intervalo de 4horas

Oligoamnios moderado‐severo o índice de líquido amniótico ≤50mm

CIR con Doppler de arteria umbilical con diástole ausente

Flujo diastólico reverso en arteria umbilical.

La vía de parto de elección es la vaginal.

La cesárea se reservará para las indicaciones obstétricas habituales.

30

II.3 TRABAJOS DE INVESTIGACIÓN INTERNACIONAL Y/O

EXTRANJERA

ARTÍCULOS INTERNACIONALES

Revista Cubana de Obstetricia y Ginecología

Rev. Cubana Obstet Ginecol v.37 n.2 Ciudad de la Habana Mayo-ago. 2011

PREDICTORES DE LA PREECLAMPSIA/ECLAMPSIA EN UN GRUPO DE

GESTANTES DE ALTO RIESGO

Juan Antonio Suárez González, Mario Gutiérrez Machado, María Rosa

Cabrera Delgado, Alexis Corrales Gutiérrez, María Elena Salazar

Máster en Atención Integral a la Mujer. Especialista de I Grado en Medicina

General Integral. Especialista de I y II Grados en Obstetricia y Ginecología.

Profesor Auxiliar. Hospital Universitario Ginecoobstétrico "Mariana Grajales".

Santa Clara, Villa Clara.

INTRODUCCIÓN; Los trastornos hipertensivos durante el embarazo son muy

frecuentes y ocurren en más del 10 % de todas las gestaciones a término.

OBJETIVO: Determinar los factores de riesgos en este grupo de pacientes que

permitan establecer estrategias de trabajo diferenciadas en pro del bienestar

materno fetal.

MÉTODOS: Se realizó un estudio descriptivo, de corte transversal, en 30

gestantes con riesgo de Preeclampsia/eclampsia que acuden a la consulta

municipal de atención al riesgo de Preeclampsia/eclampsia en la ciudad de Santa

Clara, Villa Clara, en el periodo comprendido entre septiembre de 2009 a enero de

2010.

RESULTADOS: La mayoría de las pacientes fueron nulíparas (70 %), con

malnutrición por exceso (80 %) y en edades extremas (56,6 %) con predominio de

la avanzada edad materna (33,3 %), se encontró un gran porcentaje de gestantes

con riesgo de síndrome metabólico. Se proponen estrategias de atención con

enfoque de riesgo a estas gestantes en la atención prenatal.

31

CONCLUSIONES: La nuliparidad, las cifras de glicemia elevadas en la captación

del embarazo y la malnutrición por exceso fueron algunos de los factores de

predicción más frecuentemente encontrados para la Preeclampsia/eclampsia en el

grupo estudiado.

Palabras clave: Hipertensión, factores de riesgo, embarazo, síndrome

metabólico, riesgo vascular.

INTRODUCCIÓN

Los trastornos hipertensivos durante el embarazo son muy frecuentes y

ocurren en más del 10 % de todas las gestaciones que llegan a término,

constituyen, junto con las hemorragias y las infecciones, la tríada que origina la

mayoría de las muertes maternas y es una de las principales causas de morbilidad

en las embarazadas, es mayor su importancia como causa de niños nacidos

muertos, así como la morbilidad y mortalidad neonatal. Estos trastornos

hipertensivos constituyen la primera causa de muerte materna en los países

desarrollados y la tercera en los países en vía de desarrollo, lo que representa 4

defunciones por cada 100 000 nacimientos y 150 defunciones o más por cada 100

000 nacimientos, respectivamente.

La enfermedad hipertensiva gestacional, conocida bajo múltiples sinonimias, es

con seguridad un proceso muy antiguo del que se encuentran referencias en los

escritos hipocráticos. Primero fue reconocida como fenómeno convulsivo

(eclampsia del griego éklampsis, destello o relámpago), considerada como

patognomónico de la enfermedad. En el siglo XVII las convulsiones eclámpticas

fueron consideradas como estados de posesión diabólica.

Los estudios epidemiológicos y la aplicación del concepto de riesgo del problema

han llevado a establecer una relación evidente entre un conjunto de

características asociadas que intervienen e incrementan la aparición de la

Preeclampsia y que han obligado a sustituir la Idea de un estado de salud anterior

por un terreno de riesgo sobre el cual se desarrolla la enfermedad.

Todo lo anterior sirvió de motivación para Identificar algunos de los factores

predictores presentes en las pacientes que tienen riesgo de padecer la

enfermedad desde el inicio del embarazo.

32

MÉTODOS

Se realizó un estudio descriptivo de corte transversal a un universo de 30

gestantes diagnosticadas con riesgo de Preeclampsia/eclampsia, de la ciudad de

Santa Clara, Villa Clara, desde septiembre de 2009 hasta enero de 2010. La

muestra quedó constituida por 30 pacientes que representaron el 100 % del

universo, según los siguientes criterios de exclusión:

A) Pacientes con riesgo de Preeclampsia/eclampsia que no asistieron a las

consultas.

B) Las pacientes que no reunían al menos dos factores de riesgo de Preeclampsia

eclampsia.

Para la recogida de la información se confeccionó una ficha que fue

llenada en el momento de su incorporación a la consulta, y completada con la

historia clínica de seguimiento de la gestante.

Variables relacionadas con los factores de riesgo

I. Edad: Se tuvo en cuenta el último año cumplido, por interés de la investigación

se agrupó de la siguiente forma:

< 20 años adolescentes

20 a 35 años jóvenes

> 35 años adultas (avanzada edad materna)

Este grupo de edades fue la de interés obstétrico por considerarse factor

de riesgo menor de 20 y mayor de 35 años.

II Antecedentes patológicos familiares de madre o hermano de la.

Preeclampsia

III. Antecedentes patológicos personales: Se indagó acerca de antecedentes

de hipertensión arterial, diabetes mellitus, neuropatías. Antecedentes de

preedampsía/eclampsia en embarazos anteriores, así como complicaciones en

embarazos anteriores relacionados con la Preeclampsia. La presencia de

cualquiera de ellas se consideró como variable de riesgo.

33

IV. Paridad:

Se agrupó en:

Nulípara: la que nunca ha parido. Se consideró como factor de riesgo.

Partos anteriores: la que ha parido uno o más hijos.

Con partos anteriores y en embarazo actual con un nuevo cónyuge. Si el

embarazo actual fue de un nuevo cónyuge se consideró también un factor de

riesgo.

V. Evaluación nutricional: se realizó según índice de Masa Corporal (IMC).

IMC= Peso en Kg/(talla m)2 .

Categorías IMC.

Bajo peso < 19,8

Normopeso 19,8 26,0

Sobrepeso > 26,0 29,0

Obesa > 29,0

VI. Riesgo de síndrome metabólico: Se tuvieron en cuenta los resultados de las

mediciones antropométricas (cintura abdominal en período pregestacional) y los

resultados de complementarios como glicemia en ayunas, colesterol, triglicéridos

Para el procesamiento de la información se resumieron las variables de forma

manual mediante calculadora de mesa. Se presentaron en forma de distribuciones

de frecuencia en valores absolutos y porcentajes. Se realizó estadística inferencial

mediante una tabla de contingencia con la prueba de Chi cuadrado con un nivel

de significación de a (falta) 0,05 por el sistema estadístico SPSS..

RESULTADOS

Al analizar la edad materna y según las edades de riesgo de menos de 20

años y más de 35, se encontró que estas representan el 23,3 % y 33,3 %

respectivamente.

70%.

En nuestro estudio predominaron las nulíparas en 21 pacientes para un

En esta investigación solo 5 pacientes multíparas tuvieron un embarazo de

nuevo cónyuge, 16,6 % (tabla 1)

34

Tabla 1. Distribución de las gestantes según paridad

Paridad Nº %

Nuliparidad 21 70

Con partos anteriores 9 30

Con partos anteriores y nuevo conyugue 5 16,6

Malos antecedentes obstétricos relacionados con la Preeclampsia 8 26,6

Al analizar el estado nutricional se apreció que más de la mitad de la muestra estudiada

se encontraba mal nutrida (por exceso o defecto) para un 86,6 %, la malnutrición por

exceso fue la que reportó el mayor número de casos (80 %) (Tabla 2).

Tabla2. Distribución de las gestantes según estado nutricional

Estado nutricional

%

Bajo peso

2

6,6

Normopeso

4

13,3

Sobre peso

15

50

Obesas

9

30

Total

30

100

35

En nuestra investigación solamente 7 (23,3 %) pacientes presentaron el

antecedente familiar de ser hijas de madres que presentaron hipertensión en el

embarazo.

De los factores de riesgo estudiados, los más hallados fueron la

nuliparidad, la mal nutrición por exceso, las edades de riesgo y los antecedentes

obstétricos desfavorables (tabla 3)

Tabla3 Distribución de los factores de riesgo

Factores predictores

Presencia en la

muestra

Nº %

Edad

< 20 años 7 23,3 20 – 24 años 13 43,3 >= 35 años 10 33,3

APF HTA Crónica 8 26,6

Nuliparidad 21 70

Malnutrición por exceso 24 80

Glicemia elevada en la captación 13 43,3

Pobre ingesta de calcio previa a la

gestación

Pobre ingesta de calcio en la

gestación

20 66,6 15 50

Circunferencia abdominal > 88 cm 15 50

Colesterol elevado 8 26,6

Triglicéridos elevados 7 23,3

Alteraciones en el fondo de ojo 3 10

36

DISCUSIÓN

Varios investigadores han encontrado resultados similares a los nuestros

en los cuales hubo una alta incidencia de enfermedad hipertensiva del embarazo

en adolescentes y añosas. Si se compara con el grupo de edades, que se

considera como edad óptima para la gestación, no existe diferencia; sin embargo,

el hecho de que en un grupo de gestantes la mitad de ellas se gesten en edades

de riesgo, resulta de gran importancia.

La paridad también está muy relacionada con la aparición de los trastornos

hipertensivos gravídicos, específicamente la nuliparidad es reconocida como un

factor de riesgo para este tipo de trastorno en las pacientes que en su primer

embarazo son homocigóticas paira un gen relativamente común susceptible.

Investigadores del Hospital "General de O'Horan", México,, encuentran que el 55

% de las enfermas eran primigestas.

En el Instituto de Investigaciones Cardiológicas de la Universidad de

Buenos Aires se observa que las primigrávidas son de 6 a 8 veces más

susceptibles que las multíparas .En Cuba, en las encuesta de riesgo obstétrico de

1981, aparece la nuliparidad como el principal y más frecuente factor de riesgo de

la enfermedad. También se afirma que la hipertensión inducida por el embarazo

puede ser más bien un problema de primipaternidad que de primigravidez, donde

la cohabitación sexual previa y duradera antes de la concepción parece proteger a

la mujer de los trastornos hipertensivos del embarazo. Sin embargo, los resultados

obtenidos en esta investigación pueden explicarse por la idiosincrasia de la

población haitiana donde el divorcio no es común y puede que se tenga un

número desconocido entre las multíparas que podrían tener verdaderamente

embarazos de un nuevo cónyuge, pero que debido a los tabúes sociales no salen

a relucir.

La explicación de la nuliparidad y la multiparidad con embarazos de nuevo

cónyuge en el desarrollo de la Preeclampsia se sustenta en varia teorías, basadas

en la propia fitopatología de la enfermedad, desde la isquemia placentaria con

disfunción endotelial, las lipoproteínas de muy baja densidad como actividad que

previene toxicidad, hasta la adaptación inmunitaria deficiente y la impronta

genética, estas dos últimas son las que pudieran explicar el desarrollo de la

enfermedad en este tipo de pacientes.

37

Villegas plantea que la obesidad se relaciona con la Preeclampsia. Lugo

Sánchez la señala como un factor predisponerte de gran importancia para el

desarrollo de la enfermedad, y en el estudio de Moya Romero, ocupó el primer

lugar en importancia. Sin embargo, en este estudio la malnutrición por defecto fue

la que reportó el mayor número de casos, lo cual se corresponde con otros en los

cuales las desnutridas tienen mayor riesgo de padecer la enfermedad; en lo que sí

casi todos coinciden es en encontrar relación entre los estados de mal nutrición y

la entidad que nos ocupa.

Existe una alta susceptibilidad a los trastornos hipertensivos en el

embarazo en aquellas mujeres nacidas de madres con estos mismos

antecedentes; se incrementa la relación cuando la madre de la actual gestante ha

sufrido este episodio durante su embarazo. Este autor también señala: "Cuando

más evidente es la anamnesis familiar de hipertensión con más frecuencia

aparecerá la enfermedad"'. En la investigación este factor no se presentó, por lo

que en nuestro grupo no fue un factor determinante. Puede deberse a la dificultad

en la recogida de los antecedentes, o por el desconocimiento de la enfermedad.

La nuliparidad, las cifras de glicemia elevadas en la captación del embarazo y la

malnutrición por exceso fueron algunos de los factores de predicción más

frecuentemente encontrados para la Preeclampsia/eclampsia en el grupo

estudiado.

38

ARTÍCULOS NACIONALES

Revista Peruana de Ginecología y Obstetricia

Version On-line ISSN 2304-5132

Rev. Perú. Ginecol Obstet vol. no.4 Lima oct/dic. 2014

SIMPOSIO PRE ECLAMPSIA, VIEJO PROBLEMA AUN NO RESUELTO:

CONCEPTOS ACTUALES

Actualización en la epidemiología de la Preeclampsia

Sixto E. Sánchez

Jefe del Departamento de Gineco Obstetricia, Hospital Nacional Dos de Mayo,

Lima, Perú.

Profesor de Epidemiología, Investigación y Tesis, Escuela de Post Grado,

Universidad San Martin de Porras, Lima, Perú.

Médico Gineco Obstetra, Máster en Salud Pública (MPH), Doctorado en Salud

Pública.

RESUMEN

La Preeclampsia es una complicación del embarazo que se caracteriza por

una inadecuada placentación, con la resultante isquemia fetal y el compromiso de

varios órganos maternos. Es una de las condiciones más graves en el embarazo y

una importante causa de morbimortalidad materno perinatal. Se ha encontrado

varios factores de riesgo asociados al desarrollo de Preeclampsia, así como

algunos factores protectores. Finalmente, las mujeres que desarrollan

Preeclampsia durante un embarazo, tienen mayor riesgo de presentar en el futuro

diabetes mellitus, hipertensión arterial y complicaciones cardiovasculares. En este

artículo se hace una actualización sobre la epidemiología de la Preeclampsia.

Palabras clave: Preeclampsia, prevalencia, factores de riesgo, factores

protectores, complicaciones, mortalidad maternal, mortalidad perinatal.

39

INTRODUCCIÓN

La Preeclampsia es una complicación del embarazo caracterizada por

alteración en la fisiología de las células endoteliales de las arterias espirales del

útero, produciéndose una inadecuada invasión del citotrofoblasto en estas

arterias; esto altera la placentación y se desarrolla el síndrome isquémico en el

tejido placentario y el Compromiso de varios órganos matemos. Se ha postulado

mecanismos fisiopatológicos de tipo hipoxico, metabólico, inmune y genético, con

aumento de los factores antí-angiogénicos estrés oxidativo placentario por

desbalance de los prooxidantes y antioxidantes maternos y expresión aberrante

de las citoquinas, lo que ocasiona una respuesta inflamatoria sistémica

exagerada.

FRECUENCIA

La Preeclampsia es la complicación médica más frecuente del embarazo. Se le ha

encontrado en 1,91%', 3,3%', 4,2%' y hasta 12% de los embarazos'. Ananth' halló

en Carolina del Norte una incidencia de 3,6% y Ostlund, en Suecia, la encontró en

2,4% de los embarazos.

La incidencia de eclampsia varía entre 2 y 13 por mil partos.Liu halló que

la incidencia de eclampsia disminuyó drásticamente desde 12,4 por 10 000 partos

en 2003 hasta 5,9 en 2009.

En el Perú, los desórdenes hipertensivos leves a severos han sido

encontrados desde 4,11%', 4,8%', 5,36%', 6,6%', 7,9% hasta 10,8% en gestantes

que acuden a hospitales peruanos. La eclampsia ha sido hallada en 2,8 por mil

hasta 7,9 por mil nacidos vivos.

COMPLICACIONES

La Preeclampsia es una de las condiciones más graves para la mujer embarazada

y el feto y una importante causa de morbimortalidad materno perinatal.

Mortalidad materna

La mortalidad materna debida a Preeclampsia es alta, variando desde

1,5% hasta 2,9%, siendo las principales causas la hemorragia posparto,

desprendimiento prematuro de placenta, coagulopatía, insuficiencia renal,

encefalopatía hipertensiva, hemorragia intracerebral, síndrome Hellp y rotura del

hematoma hepático.

40

En el Perú, la hipertensión inducida por el embarazo se ha encontrado

entre las tres causas más importantes de mortalidad maternal desde la década de

los 90 (Ludmir 1995). En esa década, la mortalidad debida a Preeclampsia

representaba 15,8% de todas las muertes maternas en el Perú. La mortalidad

materna especifica debida a Preeclampsia ha sido 237/10 000 recién nacidos.

Pacheco halló una mortalidad materna en 18,9% de los casos cuando se

complicaba con eclampsia.

Durante el periodo 2002-2011, la razón de mortalidad materna atribuida a

Preeclampsia fue 24,6/100 000 nacidos vivos, ocupando el segundo lugar como

causa de mortalidad materna en el Perú. Sin embargo, a nivel urbano, la

Preeclampsia superó a la hemorragia durante ese periodo como principal causa

de mortalidad materna.

Mortalidad perinatal

Del mismo modo, la mortalidad perinatal es alta, y las principales causas

son prematuridad, restricción del crecimiento intrauterino y peso bajo al nacer.

Rasmussen describió que la restricción de crecimiento intrauterino se presenta

básicamente sí el parto se da antes del término.

En el Perú, la mortalidad perinatal ha ocurrido en 1% y 7% de los recién

nacidos de madres con Preeclampsia leve y severa, respectivamente. Pacheco

halló que la Preeclampsia fue la tercera causa de muerte y fue responsable del

13% de la los casos de muerte fetal. Los desórdenes hipertensivos ocuparon el

segundo lugar como causa de mortalidad perinatal (23,6%) en el Perú y en otros 5

países en vías de desarrollo.

FACTORES DE RIESGO DE PREECLAMPSIA

En la literatura mundial, se ha identificado varios factores asociados al

desarrollo de Preeclampsia, los cuales se menciona a continuación.

Primigravidez

Cambio de paternidad

Preeclampsia previa

41

Historia familiar de Preeclampsia

Raza negra

Hipertensión crónica

Edad materna joven (< 20 años)

Edad avanzada (> 35 años)

Índice de masa corporal aumentado

Embarazo múltiple

Diabetes mellitus pregestacional

Hiperhomocisteína

Resistencia a la insulina

Tabaquismo: efecto protector

Reproducción asistida.

A continuación mostramos algunos hallazgos en los estudios de investigación.

Antecedente de diabetes e hipertensión arterial

En un estudio poblacional realizado en Suecia, se encontró que la

presencia de diabetes gestacional estuvo asociada al desarrollo de Preeclampsia

(a OR: 1,61; IC95%: 1,39 a 1,86). Funai, en su estudio de cohortes de 82 436

gestantes, halló que la diabetes era un factor de riesgo bastante importante para

el desarrollo de Preeclampsia (OR 5,64; IC95%: 4,33 a 7,35).

En un estudio de 190 pacientes con Preeclampsia y 373 controles, Qiu;

encontró que el riesgo de Preeclampsia fue 1,9 si la madre era hipertensa, 1,8 si

lo era el padre y 2,6 si fueron los dos. En las mujeres que tenían por lo menos uno

de los padres y un hermano con hipertensión arterial, el riesgo de Preeclampsia

fue 4,7 (IC95%: 1,9 a 11,6). Otros estudios continúan hallando una relación

significativa entre la presencia de diabetes mellitus y el desarrollo de

Preeclampsia.

Sánchez S; y colaboradores observaron en Lima que las mujeres con

antecedente de diabetes mellitus en por lo menos uno de los padres, tuvieron 3,4

veces (IC95%: 1,4 a 8,4) mayor probabilidad de presentar Preeclampsia y que el

antecedente de tener familiares con diabetes o con hipertensión arterial aumentó

el OR a 4,6 (IC95%: 0,9 a 23,0). Sin embargo, esta diferencia no fue significativa,

dada la pequeña cantidad de casos.

42

Obesidad

En un estudio de cohortes prospectivo en base comunitaria, 3 480 mujeres con

obesidad mórbida definida como un índice de masa corporal mayor de 40 fueron

comparadas con mujeres de peso normal (IMC: 19,8 a 26), encontrándose un alto

riesgo de desarrollar Preeclampsia (OR: 4,82; IC95%: 4,04 a 5,74). En un estudio

de cohortes que comparó a mujeres con IMC de 21 o menos, el OR ajustado para

Preeclampsia se duplicó si hubo IMC de 26 a 29,9 (OR: 2,1; IC95%: 1,4 a 3,4]) y

casi se triplicó si el IMC fue 30 o más (OR: 2,9; IC95%: 1,6 a 5,3).

En un estudio multicéntrico de 2 637 gestantes, se halló que el sobrepeso

y la obesidad fueron los factores de riesgo más importantes para Preeclampsia y

Preeclampsia severa, con riesgo atribuible porcentualizado de 64,9% y 64,4%,

respectivamente. Las gestantes con IMC de 25 a 30 kg/m2 tuvieron OR de 1,65

(IC95%: 1,13 a 2,41), aquellas con IMC 30 a 35 un OR 2,34 (IC95%: 1,51 a 3,61),

las con IMC 35 a 40 un OR 3,59 (IC95%: 2,13 a 6,03) y aquellas con IMC mayor

de 40 un OR 6,04 (IC95%: 3,56 a 10,24). Hubo una relación dosis respuesta en la

relación entre IMC y Preeclampsia y Preeclampsia severa.

En un estudio de cohortes prospectivo de 1 200 mujeres con embarazos

únicos, las mujeres con índice de cintura/cadera >0,85 e IMC >25kgm2 medidos

en las primeras 12 semanas de gestación tuvieron RR 2,3 (IC95%: 1,26 a 4,27) y

3,3 (IC95%: 1,6 a 6,86) para desarrollar Preeclampsia.

Peso de la madre al nacer

En un estudio de 181 casos de Preeclampsia y 349 controles, Dempsey, encontró

que el riesgo de Preeclampsia disminuyó a medida que el peso materno al nacer

aumentaba (p=0,01).

Después de ajustar para confusores, halló que las mujeres con peso bajo

al nacer (<2 500 g) tenían 2,3 veces mayor riesgo de experimentar

Preeclampsia (IC95%: 1,0 a 5,3) comparadas con las mujeres que pesaron entre

2 500 y 2 999 g al nacimiento. Los autores también hallaron un sinergismo con la

obesidad. Las mujeres con sobrepeso y que habían pesado menos de 2 500 g al

nacimiento tuvieron casi 4 veces mayor riesgo de Preeclampsia (OR: 3,8; IC95%:

1,1 a 13,8).

43

En un estudio en base comunitaria de 2 180 casos con Preeclampsia y 22

955 controles, en Nueva York , el riesgo de Preeclampsia respecto al peso

materno al nacer dibujó una forma de U, con el mayor riesgo para las que habían

nacido con menos de 1,5 kg, OR: 2,1 (IC95%: 1,1 a 3,9), asociación que se

fortaleció aún más (p para tendencia < 0,0001) cuando se controló otros factores

perinatales.

Antecedente familiar de Preeclampsia

La Preeclampsia fue más frecuente si la mujer nació de una madre Pre

eclámptica o que tenía una hermana que sufrió de Preeclampsia en alguno de los

embarazos.

Skjaerven; en su estudio de registros básicos de 438 597 unidades madre-

hijo y 286 945 unidades padre-hijo, en Noruega entre 1967-2003, encontró que: 1)

las hijas de mujeres que habían sufrido de Preeclampsia durante el embarazo

tenían un riesgo de Preeclampsia mayor de dos veces (OR: 2,2; IC95%: 2,0 a

2,4); 2) los hombres nacidos de un embarazo complicado con Preeclampsia

tuvieron un moderado incremento de riesgo de inducir un embarazo con

Preeclampsia (OR: 1,5; IC95%: 1,3 a 1,7); 3) las hermanas de hombres o mujeres

afectados y que nacieron de embarazos no complicados por Preeclampsia,

tuvieron también un incremento en el riesgo (OR: 2,0; IC95%: 1,7 a 2,3); y, 4) los

hombres y mujeres nacidos de embarazos complicados con Preeclampsia

tuvieron mayor probabilidad de inducir Preeclampsia en sus propios embarazos (o

de sus parejas), OR 3,0 (IC95%: 2,4 a 3,7) para las madres y 1,9 (IC95%: 1,4 a

2,5) para los padres. Los autores concluyen que los genes maternos y fetales del

padre o la madre pueden inducir Preeclampsia, que esta asociación es más fuerte

con la madre que con el feto, y que la asociación familiar predice una

Preeclampsia más severa.

Antecedente de Preeclampsia

La Preeclampsia fue casi 9 veces más frecuente en las mujeres que

tuvieron un embarazo anterior complicado con Preeclampsia. Mostello; encontró

que el antecedente de un embarazo con Preeclampsia confería mayor riesgo de

Preeclampsia en el segundo embarazo y que este riesgo era inversamente

proporcional a la edad gestacional del primer embarazo (OR ajustado 15,0,

44

IC95%: 6,3 a 35,4 si el primer embarazo alcanzó solo 20 a 33 semanas; OR

ajustado 10,2, IC95%: 6,2 a 17,0 si fue de 33 a 36 semanas; y OR ajustado 7,9,

IC95%: 6,3 a 10,0 si fue de 37 a 45 semanas).

Antecedente de infección a .C Pneumoniae

Las mujeres con Preeclampsia tuvieron una seroprevalencia de IgG a C.

Pneumoniae significativamente mayor que las mujeres sin Preeclampsia. Estos

datos preliminares sugieren una asociación específica entre infección a C

Pneumoniae y Preeclampsia. Sin embargo, otros autores no han encontrado

evidencias consistentes con este hallazgo.

Dislipidemia

El aumento de ácidos grasos, triglicéridos, el aumento de LDL y la

disminución del HDL están relacionados al desarrollo de Preeclampsia. La

hipertrigliceridemia está asociada a disfunción endotelial y con la elevación de la

presión arterial y proteinuria. Las lipoproteínas ricas en triglicéridos contribuirían

en la fisiopatología de la Preeclampsia. Varios autores han encontrado asociación

positiva entre el nivel de triglicéridos en sangre y la presencia y severidad de la

Preeclampsia.

Factores Genéticos

La presencia de polimorfismo del gen ACE I/D afectó el flujo

uteroplacentario y del cordón umbilical y la recurrencia de efectos adversos del

embarazo en mujeres con historia de Preeclampsia. El alelo T del gen TNF-alfa

puede modificar el riesgo individual de Preeclampsia, protegiendo contra el

desarrollo de esta complicación. En un estudio realizado en Finlandia se halló que

regiones en los cromosomas 2p25 (P=,0007) y 9pl3 (P=,0007) tienen genes

susceptibles para Preeclampsia.

Obed Ng, piensa que el ARN fetal estaría incrementado en el plasma

materno de la mujer con Preeclampsia. Concluye que el CHH mARN representa

un nuevo marcador molecular de Preeclampsia. El ARN plasmático materno es

independiente del género y polimorfismo, y puede permitir la expresión de un gen

no invasivo en un feto.

45

En un metaanalisis de 11 estudios para explorar la asociación entre el

polimorfismo del gen para IL 10 interleuquina 10), se encontró que dos

polimorfismos estuvieron asociados a la Preeclampsia; el IL-10 -819C/T (C versus

T) obtuvo OR 1,28; IC95%: 1,08 a 1,50, P = 0,003, y el IL-592C/A (C versus A)

tuvo OR = 1,28; |p95%: 1,03 a 1,59, P = 0,03).

Riesgo de Preeclampsia Asociado al Cambio de Paternidad

En mujeres multíparas en Dinamarca encontraron, en un estudio de 364

casos y 281 controles, que la prevalencia de la nueva paternidad fue

significativamente mayor (P<0,0001) en las mujeres que desarrollaron

Preeclampsia y pacientes con HELLP (OR 8,6; IC95%: 3,1 a 23,5, y 10,9; IC95%:

3,7 a 32,3, respectivamente), en comparación con un grupo control de

normotensas. Los autores concluyen que las mujeres que cambiaron de

compañero sexual deben ser consideradas como si fueran mujeres primigrávidas

para los efectos de valoración de riesgo de desarrollar Preeclampsia. Este

resultado también fue hallado por Saftlas con lo que respecta a abortos, pues los

embarazos seguidos de un aborto del mismo compañero sexual estuvieron

asociados a una reducción en el riesgo de Preeclampsia (aOR = 0,54; IC95%:

0,31 a 0,97). Sin embargo, si el aborto previo fue de un compañero sexual

diferente, existió el mismo riesgo de desarrollar Preeclampsia como cualquier

primigrávidas sin antecedente de aborto (aOR = 1,03; IC95%: 0,72 a 1,47). Pero,

Trogstad encontró que el cambio de paternidad es un factor protector y aduce que

el sesgo hallado en otros estudios es debido al insuficiente control de la variable

intervalo internatal.

Riesgo de Preeclampsia asociado a fertilización in vitro con esperma de un

donante

En un metaanálisis realizado en 2014 por González-Comadran se comparó

2 342 embarazos productos de donación espermática con 8 556 productos del

esperma del compañero sexual, encontrando que en el primer grupo existió

significativamente mayor riesgo de desarrollar Preeclampsia (OR: 1,63; IC95%;

1,36 a 1,95).

46

Chen comparó 1 357 mujeres expuestas a FIV con 5 190 controles,

hallando que la Preeclampsia fue 1,78 veces más frecuente en el primer grupo

(IC95%: 1,05 a 3,06). Sin embargo, Watanabe, después de aplicar el análisis

pareado del score propensity, encontró que la asociación entre fertilización in vitro

y Preeclampsia desaparecía, concluyendo que esa aparente asociación podría ser

debida a factores confusores residuales no medidos.

Migraña y Preeclampsia

Marcoux observó mayor prevalencia significativa de migraña en gestantes

complicadas con Preeclampsia (16%) que en controles (8%), OR 2,44; IC95%:

1,42 a 4,20.

Adeney, en 2006, al hacer una revisión bibliográfica de la relación entre

migraña y Preeclampsia halló que 8 de 10 estudios habían encontrado una

asociación positiva entre migraña y el desarrollo de Preeclampsia.

Violencia de Género y Depresión Materna Durante el

Embarazo

Sánchez encontró que al comparar aquellas mujeres no expuestas a

violencia, las que habían sido víctimas de violencia por el compañero sexual

durante el embarazo tuvieron 2,74 mayor probabilidad de desarrollar

Preeclampsia (OR=2,4; IC95%: 1,9 a 3,9).

Con respecto a la depresión materna, Qiu halló que aquellas gestantes con

depresión moderada tuvieron 2,3 veces mayor probabilidad de desarrollar

Preeclampsia (IC 95%: 1,2 a 4,4), riesgo que aumentó a 3,2 veces (IC95%: 1,1 a

9,6) en los casos de depresión severa. Otros autores también han encontrado

esta asociación.

FACTORES PROTECTORES DE PREECLAMPSIA

Antecedente de embarazos a término

En un estudio de cohortes prospectivo basado en la comunidad, de 140

773 partos entre 1993 y 1999, en 49 hospitales en la parte norte y central de

Alberta, Canadá, se encontró que la incidencia de Preeclampsia fue

marcadamente menor en multíparas que habían tenido un parto a término (0,9%),

comparado con la incidencia en primigrávidas (2,9%, OR 0,29; IC95%: 0,26 a

47

0,33). Los OR ajustados de Preeclampsia para mujeres con 1, 2, 3 y más de 4

embarazos previos a término fueron 0,32 (IC95%: 0,28 a 0,36), 0,27 (IC5%: 0,22 a

0,34), 0,22 (IC95%: 0,15 a 0,33) y 0,21 (IC95%: 0,12 a 0,35), respectivamente.

Los autores concluyen que la historia de embarazos a término (> o =37 semanas)

confiere una protección sustancial contra la Preeclampsia en los embarazos

subsecuentes.

Factores dietéticos y suplementos vitamínicos

En un estudio realizado en Noruega entre 1999 y 2008 se encontró que las

mujeres que tenían gran adherencia a una dieta rica en vegetales (coles, papas,

avena, granos enteros, berries), pescado, leche y agua tuvieron riesgo bajo de

desarrollar Preeclampsia (OR 0,86; IC95% 0,78 a 0,95) y Preeclampsia temprana

(OR 0,71; IC95% 0,52 a 0,96).

Suplemento de antioxidantes (vitaminas C y E) en mujeres con riesgo de

Preeclampsia hizo que los índices metabólicos, los índices de disfunción

placentaria y el estrés oxidativo llegaran a niveles encontrados en mujeres con

riesgo bajo de Preeclampsia

.

Aspirina

En un estudio clínico de 3 294 primigrávidas aleatorizadas a aspirina 100

mg o placebo, no se encontró en la incidencia de Preeclampsia. Contrariamente,

se observó una mayor incidencia de complicaciones hemorrágicas en un

metaanálisis en el cual se incluyó 14 estudios clínicos importantes, se halló un

efecto protector de la (OR: 0,79; IC95%: 0,64 a 0,96), pero básicamente en

mujeres con historia de Preeclampsia anterior.

En una revisión sistemática y metaanálisis que incluyó 4 ensayos clínicos,

se halló que la administración de aspirina antes de las 16 semanas disminuye la

probabilidad de Preeclampsia severa, pero no de la leve.

Bujold, en un metaanálisis que incluía 34 ensayos clínicos, encontró que

dosis bajas de aspirina iniciadas a las 16 semanas o menos estuvo asociada a

una significativa reducción de Preeclampsia (RR: 0,47; IC95%: 0,34 a 0,65),

especialmente la severa (RR: 0,09; IC5%: 0,02 a 0,37). Esta reducción de riesgo

no fue encontrada cuando se inició la administración de aspirina después de las

16 semanas.

48

La U.S. Preventiva Services Task Force recomienda el uso de dosis bajas

de aspirina (81 mg/d) como medicación preventiva después de las 12 semanas de

gestación en mujeres con gran riesgo de Preeclampsia.

Actividad física

En un estudio caso-control que comparó 201 pre eclámpticas y 383

normotensas, las mujeres que desarrollaron actividad física regular antes de las

20 semanas, comparadas con aquellas inactivas, tuvieron disminución del riesgo

de Preeclampsia en 35% (OR: 0,65; IC95%: 0,43 a 0,99). Las mujeres que

desarrollaron actividades físicas más vigorosas (puntaje metabólico de 6 o más)

tuvieron un 54% de disminución en el riesgo de desarrollar Preeclampsia (IC95%:

0,43 a 0,99). El subir las escaleras estuvo inversamente asociado con el riesgo de

Preeclampsia (p para tendencia linear: 0,039). Los autores concluyeron que la

actividad regular física, particularmente cuando se realiza durante el año previo al

embarazo y durante estadios tempranos del embarazo, están asociados con una

reducción del riesgo de Preeclampsia.

En una revisión sistemática y metaanálisis donde se combinó 15 estudios

de casos y controles, Aune encontró que la actividad física antes del embarazo

reducía el riesgo de Preeclampsia (RR: 0,65; IC95%: 0,47 a 0,89), reducción

mayor a cuando la actividad física se hacía durante la primera parte del embarazo

(RR: 0,79; IC95%: 0,70 a 0,91).

PRONÓSTICO DE LAS MUJERES CON PREECLAMPSIA

Recurrencia de la Preeclampsia

En un estudio realizado en Finlandia, se observó una recurrencia de

Preeclampsia del 15% en gestantes que la presentaron en su primer embarazo.

En este estudio se halló también que sí no se desarrollaba Preeclampsia

recurrente, no existían problemas con el peso fetal, distres fetal o prematuridad;

sin embargo, la tasa de cesáreas fue mayor.

En un estudio de cohortes de 19 811 mujeres que tuvieron un parto único

en Tanzania, 3 909 volvieron a gestar a los 2 a 10 años. En estos embarazos, el

riesgo absoluto de recurrencia de Preeclampsia fue 9,2 veces mayor (IC 95%: 6,4

49

a 13,2) en aquellas mujeres que tuvieron Preeclampsia en el embarazo previo

comparado con aquellas que no tuvieron tal complicación.

Enfermedades cardiovasculares en mujeres con Preeclampsia

Muchos factores de riesgo (y también protectores) lo son también de la

enfermedad cardíocoronaria. Las mujeres con Preeclampsia tienen mayor riesgo

de enfermedad coronaria posterior. En el estudio de Sattar, se encontró que las

mujeres con Preeclampsia tuvieron mayor presión diastólica (p<0,05), mayores

concentraciones de molécula 1 de adhesión de células endoteliales y molécula 1

(ICAM-1) de adhesión intercelular (p<0,03) y mayores niveles de insulina (p: 0,08)

en ayunas y hemoglobina glicosilada (p=0,004).

Usando un estudio de base comunitaria en Finlandia, donde se siguió 5

889 mujeres desde 1966, las mujeres que habían tenido un embarazo complicado

con Preeclampsia (n=49) a los 31 años de edad habían aumentado

significativamente su presión arterial en comparación con las mujeres que habían

sido normotensas durante la gestación; esto persistió aun controlando la variable

índice de masa corporal (P<0,023). Estas mujeres también tuvieron mayor

circunferencia de cintura, índice cintura/cadera, índice de masa corporal, niveles

de insulina y el índice glucosa/insulina. Esta asociación permaneció aun

controlando las variables edad gestacional y el peso de la mujer al momento del

nacimiento.

Írgens, en 2001, encontró que el riesgo de muerte por causas

cardiovasculares entre mujeres con Preeclampsia y un embarazo pretérmino fue

8,12 veces mayor (IC95%: 4,31 a 15,33), Los autores concluyeron que son los

factores genéticos los que incrementan el riesgo de enfermedad cardiovascular y

estarían Relacionados también con la Preeclampsia.

En una revisión sistemática, Drost halló que el riesgo de hipertensión en mujeres

que tuvieron Preeclampsia en el pasado fue entre 2 y 10, comparado con mujeres

que no habían desarrollado Preeclampsia.

50

Riesgo de diabetes mellitus en mujeres con Preeclampsia

En un estudio en base poblacional de 1 010 068 mujeres gestantes que

tuvieron su parto en Ontario, Canadá, entre abril 1994 y marzo 2008, Feig

encontró que después de 16,5 años de seguimiento, las mujeres que habían

desarrollado Preeclampsia tuvieron 2 veces mayor probabilidad (CI 1,97 a 2,19)

de desarrollar diabetes en relación a aquellas que habían tenido un embarazo sin

esta complicación.

51

CAPITULO I

TEMA DEL CASO CLINICO:

“FACTORES DE RIESGO ASOCIADOS A LA

PREECLAMPSIA”

1 DEFINICIÓN

Es definida como el incremento de la presión arterial acompañada de

edema, proteinuria o ambos que ocurre después de la 20 va semana de

gestación.

2 INCIDENCIA

Incidencia Preeclampsia es de 3-10%

3 ETIOLOGIA

No existe una causa específica de la Preeclampsia, debido a esto, se la

denomina como la “enfermedad de las teorías”. Entre las que se mencionan están

la placenta anormal, inmunocomplejos en la placenta lesión del endotelio, factores

citotóxicos que afectan las células endoteliales, anormal metabolismo de

prostaglandinas, genética, etc.

Sin embargo existe una teoría con mayor aceptación, la cual considera a la

invasión anómala en las arterias espirales uterinas por células citotrofoblástica

durante la placentación.

En el primer y segundo trimestre del embarazo normal, el trofoblasto

invade a las arterias espirales de la decidua, destruye el tejido de la media y de la

capa muscular de la pared arterial, provoca un remplazo del endotelio por material

fibrinoide, hace desaparecer la arquitectura musculo -elástica de las arterias

espirales, y da como resultado vasos dilatados que soportarían el incremento de

la volemia del embarazo.

Mientras que en mujeres con Preeclampsia sucede lo contrario.

52

4 EPIDEMIOLOGIA.

Cada tres minutos muere una mujer en el mundo debido a la

Preeclampsia. Afecta entre el 3 y el 10% (promedio 5% 4,14), y de los embarazos,

es la principal causa de muerte materna en el mundo y en estados unidos

representa al menos el 15% de las muertes relacionadas con embarazo. La

Preeclampsia en el Perú es la segunda causa de muerte materna en los

hospitales de Essalud del país y en lima ciudad. Se relaciona con 17 a 25% de las

muertes perinatales y es la causa principal de restricción del crecimiento fetal

intrauterino.

5 PATOGENIA

- Insuficiencia placentaria

- Implantación anormal del embrión

- Predisposición genética

- Respuesta inflamatoria en la Preeclampsia

- Cambios en el sistema de la coagulación

- Magnesio e hipertensión

- Disfunción endotelial

- Dislipoproteinemia en Preeclampsia

- Factores inmunológicos.

6 FISIOPATOLOGIA

La Preeclampsia resulta de una invasión anormal de las arterias espirales

del útero por las células citotrofoblástica extravellosas (CTEV), con alteraciones

locales del tono Vascular, del balance inmunológico y del estado inflamatorio.

El comienzo de la Preeclampsia se debe a la disminución de la perfusión

uteroplacentaria, ya que el citotrofoblasto invade anormalmente a las arterias

espirales.

Otro órgano muy importante vinculado en la patogénesis es el endotelio,

responsable de un número de funciones fisiológicas vitales

53

. Las placentas de mujeres con Preeclampsia expresan menores niveles de

metaloproteinasa de la matriz (MMP), antígeno linfocítico humano (HLA)

G, lactógeno placentario (HPL), que aquellas mujeres con embarazos normales.

Puede suceder que la primera invasión del trofoblasto endovascular sea

incompleta en ciertas mujeres Preeclámpsicas, lo cual no afecta la estructura

musculo-elástica de las arterias espirales, así como tampoco tiene efecto en sus

funciones de respuesta a sustancias vasoconstrictoras endógenas, disminuye de

esta manera la perfusión materno placentaria y por consiguiente puede generar

una hipoxia placentaria en periodos avanzados de la gestación. Por la afección del

endotelio se produce una reducción de prostaciclina, que es un inhibidor de la

agregación plaquetaria, por lo que la colágena subendotelial puede favorecer la

agregación plaquetaria y liberación de tromboxano A2, poderoso vasoconstrictor.

Este desequilibrio entre la formación de compuestos vasodilatadores y

vasoconstrictores es lo que contribuye a este signo patognomónico de la

Preeclampsia, la hipertensión.

La Preeclampsia es una enfermedad que característicamente aparece sólo

durante el embarazo. Tiene una alta prevalencia en los países en vías de

desarrollo donde se constituye en la primera causa de muerte materna. En la

actualidad se considera que ésta es una enfermedad producida por la activación

del endotelio vascular, desencadenada probablemente por isquemia placentaria la

cual a su vez estaría generada por un defecto en Ia invasión por el trofoblasto de

las arterias espiraladas uterinas. Se invocan causas genéticas, inmunológicas y

bioquímicas para explicar el porqué de este defecto en la implantación del

trofoblasto con la isquemia placentaria que trae aparejada. Como consecuencia

de la activación endotelial se liberan diferentes mediadores químicos que al actuar

afectan el funcionamiento de todos los órganos y sistemas, produciendo los

diversos síndromes relacionados con la Preeclampsia. El gran interés que existe

en la prevención de esta enfermedad se traduce en los estudios multicéntrico con

calcio y aspirina que se han realizado y actualmente se llevan a cabo

54

7 DIAGNÒSTICO DIFERENCIAL

La Preeclampsia /eclampsia pueden imitar y ser confundidas con muchas

otras enfermedades incluidas la hipertensión crónica, enfermedad renal crónica,

trastornos de vesiculabiliar y páncreas.

Patologías inmunológicas o del colágeno (síndrome anti fosfolípidos),por lo

que debe tenerse en cuenta siempre la posibilidad de Preeclampsia ante cualquier

mujer embarazada más allá de las 20ss de gestación

Diagnóstico diferencial

Neurológico

Diagnóstico de

compromiso Órgano

Blanco

Diagnóstico diferencial

de alteración vesicular

Epilepsia

Trombosis venosa central

Encefalitis

Hemorragia cerebral

Purpura trombocitopenica

Autoinmune.

Hepatitis viral

Hígado graso del

embarazo.

Pancreatitis aguda

Colelitiasis vesicular

Hipertensión secundaria.

Adicción a la cocaína.

Tirotoxicos.

Macroangiopatias

8 FACTORES DE RIESGO

Se han identificado entre los diferentes factores que incrementan el riesgo

de Preeclampsia: la primigestación, edades maternas extremas, exposición

limitada al esperma de la misma pareja, pareja masculina con antecedente de

Preeclampsia en un embarazo con otra mujer, gestación multifetal, enfermedad

trofoblástica gestacional, antecedente de Preeclampsia, hipertensión crónica,

enfermedad renal, diabetes mellitus pregestacional, trombofilias, obesidad,

55

síndrome de ovarios poliquísticos, procesos infecciosos y el antecedente personal

materno de restricción en el crecimiento Intrauterino.

Maternos:

- Edad materna menor de 20 y mayor de 35 años.

- Raza negra.

- Historia personal de PE (en embarazos anteriores).

- Presencia de algunas enfermedades crónicas: hipertensión arterial, obesidad,

diabetes mellitus, resistencia a la insulina, enfermedad renal, neurofibromatosis,

síndrome anti fosfolípido primario (anticuerpos anti fosfolípidos) y otras

enfermedades autoinmunes (síndrome anti fosfolípido secundario), rombofilias y

dislipidemia.

Relacionados con la gestación en curso:

-Primigravidez o embarazo de un nuevo compañero sexual.

-Sobredistensión uterina (embarazo gemelar y polihidramnios).

-Embarazo molar en nulípara.

Ambientales:

- Malnutrición por defecto o por exceso.

- Escasa ingesta de calcio previa y durante la gestación.

- Hipomagnesemia y deficiencias de zinc y selenio.

- Alcoholismo durante el embarazo.

- Bajo nivel socioeconómico.

- Cuidados prenatales deficientes.

- Estrés crónico.

9 CLASIFICACIÒN

a) Leve

TA ≥ 140/90 y <160/110 mmHg

b) Severa

TA ≥ 160/110mmHg (antes de haber iniciado el tratamiento hipotensor).

56

10 LAS FORMAS CLÌNICAS DE PRESENTACIÒN

En muchas oportunidades la primera manifestación de la enfermedad es la

elevación de la presión arterial que generalmente es asintomática y se detecta en

el control prenatal.

En la Preeclampsia la hipertensión es generalmente leve o moderada, en

la mayoría de los casos no excede valores de 160/110 mmHg.

La proteinuria es considerada patológica cuando la concentración de

proteínas es mayor a 300 mg en orinas de 24 hrs. La magnitud de la proteinuria

reviste especial importancia para evaluar severidad y progresión de la

Preeclampsia.

El edema puede expresarse en forma precoz, por un aumento de peso

exagerado. La retención hidrosalina en cara, manos y región lumbosacra se

instala tardíamente. Se considera Preeclampsia siempre que la paciente presente,

aumento de la presión arterial en la gestación acompañado o no de proteinuria y

edema. Además pueden presentarse cefaleas, escotomas, acufenos, epigastralgia

y alteraciones en las pruebas bioquímicas.

11 REPERCUCIONES MATERNAS, Y FETALES.

MATERNAS:

Las mujeres con Preeclampsia severa son

Susceptibles de presentar complicaciones graves como:

Edema Pulmonar

Falla Respiratoria

Desprendimiento Prematuro De Placenta Normoinserta

Coagulación Intravascular Diseminada

Insuficiencia Hepática o Renal

Hematomas o Ruptura Hepáticos

Enfermedad Vascular Cerebral,

Ceguera Cortical

Desprendimiento de Retina

Crisis Convulsivas Eclámpticas y Falla orgánica múltiple

57

FETALES:

El efecto de la Preeclampsia en el feto es el resultado de la disminución de

la perfusión del espacio coríodecidual, que se inicia semanas antes que las

manifestaciones clínicas, lo que se manifiesta en la restricción del crecimiento.

El riesgo del feto está relacionado, además, a la severidad de la

Preeclampsia y al tiempo de gestación cuando se inicia la enfermedad.

58

CAPITULO II

CASO CLÍNICO

1 INTRODUCCIÒN

La Preeclampsia es un trastorno hipertensivo inducido por el embarazo

que se manifiesta clínicamente después de las 20 semanas de gestación. Fue

descrita hace más de 2 mil años; la falta de un manejo oportuno, conduce a

eclampsia , sin embargo, la causa sigue desconocida y se asocia a problemas de

salud materna-perinatal importantes. La Preeclampsia y eclampsia se manifiestan

clínicamente con todo un espectro de síntomas clínicos por la misma condición.

En la Preeclampsia están presentes principalmente la hipertensión y proteinuria,

además de edema, cuando se presentan convulsiones, además de estos

síntomas, se diagnostica como Preeclampsia.

La Preeclampsia constituye un problema de salud pública porque incide

significativamente en las tasas de morbilidad y mortalidad materna perinatal a

nivel mundial. Sin embargo, el impacto de la enfermedad es más severo en países

en desarrollo, donde otras causas también frecuentes, ocasionan mortalidad

materna (por ejemplo, hemorragia y sepsis. El manejo médico es ineficaz debido a

la presentación tardía de la enfermedad; el problema se complica por su etiología

y naturaleza impredecible, que hace necesario contar con un control efectivo de la

Preeclampsia y sugerir las medidas para aplicarlas en cualquier parte de la

población. La presente revisión de la literatura proporciona evidencia sobre el

diagnóstico, prevención, tratamiento de la Preeclampsia

2 OBJETIVO

Determinar los factores de riesgo de la Preeclampsia en la historia clínica

seleccionada del Hospital San José de Chincha

59

3 MATERIAL Y MÈTODO

Diseño de investigación Descriptivo Retrospectivo

Material elección de una historia clínica con diagnóstico de Preeclampsia del

Hospital San José de Chincha

4 CASO CLÍNICO

ANAMNESIS:

NOMBREY APELLIDO: Martínez León, Deysa Verónica

Edad : 36 años

Estado Civil : Conviviente

Ocupación : Ama de casa

Grado de instrucción : Primaria Incompleta.

Fecha Ingreso : 06 de Marzo 2016 Hora: 16:56hrs.

Motivo de Consulta: Paciente gestante de 33 ss., acude a emergencia por

presentar dolor en hipogastrio tipo contracción uterina de regular intensidad, que se

irradia hacia la región lumbar, desde hace más o menos 3 horas; y, cefalea.

Nº de C.P.N:01 TALLA: 1.50cm

Refiere antecedentes de Hipertensión

Funciones Vitales:

PA: 140/80 Tº: 36 ºc PESO: 82 KG

EXPLORACIÓN FÍSICA:

Estado General:

Conciencia; LOTEP Hidratación; AREH

Nutrición; AREN

60

Examen Físico:

Abdomen:

AU: 33 cm. MF: ++ SPP: LCD

LCF: 143 LT X 1”

TV:

D: 0

I: 0

AP: -3

G10 P4504

FUR 15 julio 2015

FPP 25 de Abril 2016

EG 33 ss.

PRUEBAS COMPLEMENTARIAS:

Sedimento Urinario

Hemograma Completo

Proteinuria de 24 hrs.

TGO, TGP, Urea, Creatinina, Bilirrubinas totals, NST.

DIAGNÓSTICO:

Gran Multigesta de 33 ss. Por FUR

Cesareada 3 veces/NLP/PIC

D/C: ITU

D/C: Pre-Eclampsia

61

TRATAMIENTO:

NPO.

CFV.

CLNA 9%/1000 (500cc a chorro, luego 15gts X min.

Hioscina 1 amp. EV. Cada 8hrs.

Metamizol 1g. IMS staff

Nifedipino 10g V: oral. Por PA mayor o igual 160/110mmhg.

Control de PA en hoja aparte C/ 2 hrs.

Monitoreo de síntomas presentes de Eclampsia.

Reevaluación con resultados

EVOLUCIÓN:

06 de marzo 2016

Reporte Obstétrico;

18:20 hrs.

-Pcte, ingresa al servicio de GO,-ARO, con DX;

Multigesta de 33ss por FUR.

-Cesareada anterior 3 veces.

-PIC, D/C: ITU. D/C: Pre-eclampsia.

Al Exámen:

ARE, LOTEP

Piel y mucosas conservadas e Hidratadas.

Mamas turgentes.

Abdomen:

AU: 33cm. LCD

LCF: 135

MF: ++

DUT: Esporádico

G. Externo:

STV (-) PLA: (-)

62

Funciones Vitales

PA; 140/80 mmHg. Pulso; 80 X min.

Respiración: 20 x min.

T: 36.6ºc

20:00hrs.

Pcte. Se encuentra en UCEO con DX: de gran multigesta de 33ss por FUR.

-Cesareada anterior 3 veces.

-PIC, D/C: ITU. D/C: Pre-eclampsia

Al Exámen:

ARE, LOTEP

Piel y mucosa conservadas.

FCF: 131 X min.

MF: presente,

SPP: LCD.

DU: (-)

G. Ext. STV (-) PLA: (-)

MI. +/+

Func. Vitales:

PA; 130/70mmhg

Pulso: 76xmin.

Pcte. Refiere cefalea de moderada intensidad y dolor a nivel lumbar. Presenta CU:

esporádicas.

Se recepciona Sedimento Urinario y Hemograma completo

20:45hrs

Se comunica al médico de turno.

Médico de turno indica.

Nifedipino 10mg vía; oral C/20 min. Por tres dosis;

Luego cada 8 hrs.

21:45hrs

Se administra Nifedipino 10g, Vía: oral

Betametasona 12mg Im. Staff

63

.23:00hrs

Se inicia en NST. LCF: 180xmin.

Se evidencia DIP: ll

Se comunica al médico de turno

23:30hrs.

Pcte. Es evaluada por el médico de turno; El cual indica cesárea.

Se administra Ceftriazona 1gr. EV.

00:00hrs

Pcte. Pasa a SOP. Con funciones vitales: PA: 130/70mmhg. Pulso: 76xmin. T:

36.4ºc.

URPA:

07 de marzo 2016

02:15hrs

Post-cesareada recibió terapia del dolor.

Apósitos secos, Útero contraído, Sangrado transvaginal poca cantidad.

PA: 102/56mmhg

Pulso: 107xmin.

05:00hrs

Pcte. Regresa de SOP: con DX: Post-cesareada inmediata. Con Vía permeable

más agregados.

Apósito de herida operatoria húmeda con secreción hemática.

Loquios en poca cantidad hemáticas.

Refiere un ligero dolor en el abdomen.

PA: 140/80mmhg.

Pulso: 100xmin.

Respiración: 20xmin.

Tiene pendiente HTO de control a las 7am.

Pcte, queda con Vía, Apósito mojado, Loquios en cantidad normal.

64

07:40hrs.

PA: 120/70mm/hg P: 76 xmin .

Pcte. Estable, niega molestias.

AREG, LOTEP.

ABDOMEN:

Útero contraído, apósitos secos.

G. EXT.: Loquios hemáticos en poca cantidad

Con vía permeable. Dextrosa + agregados.

12:00hrs

Se administra Ceftriazona 1g EV.

Se instala l frasco de dextrosa + agregados.

PA: 120/60mmhg

Pulso: 80xmin.

18:00hrs

Pcte. Post-cesareada inmediata queda estable. Cumple tratamiento indicado.

Queda con Vía permeable.

PA: 120/60mmhg.

Pulso: 80xmin.

Diuresis: 500cc.

Guardia nocturna:

20:00hrs.

Se encuentra Pcte. Estable. Post-cesareada inmediata. CST anterior tres

veces/PIC corto/Preeclampsia. Refiere leve dolor de cabeza

Al exámen:

ARE, LOTEP

Piel y mucosa hidratadas.

Mamas blandas y secretantes

Abdomen:

Útero contraído.

Herida operatoria, apósitos secos.

STV: (escasos)

65

Funciones vitales estables.

PA: 120/80mmhg

Pulso: 72xmin.

Se le administra ceftriazona.

06:00hrs ( 8 de marzo del 2016)

Pcte. Pasa la noche tranquila. Refiere leve dolor en le herida operatoria, queda

con VEP, Dextrosa 5% + agregados.

Funciones vital:

PA: 120/80mm/hg P: 76xmin.

Diuresis: 750cc.

GUARDIA DIURNA

08:00hrs

Se encuentra Pcte. Estable con DX: post-cesareada mediata asintomática; refiere

dolor leve en herida operatoria.

Con Dextrosa al 5%+agregados.

Al Exámen

AREG, LOTEP.

Mamas blandas y secretantes.

Abdomen: Útero

contraído. Apósito

limpio y seco. G: ext.:

STV. Escaso MI: Sin

edema Funciones

vitales:

PA: 110/60mmhg

Pulso: 76xmin.

T: 36.5ºc.

66

REPORTE GINECOLÓGICO

6 de marzo de 2016

11:50hrs

FCF: 176xmin.

Se acude ha llamado de obstetra, se verifica T: 36.5ºc,

NST:

-FCF: 176xmin-186xmin-100xmin.

Patrón inestable.

DX; Gran Multigesta de 33ss por FUR/NLP.

ARO: SFA, taquicardia fetal.

Cesareada anterior 3 veces.

PIC

Preeclampsia.

Plan:

Interconsulta a Neonatología.

Preparar para SOP.

Programar para SOP.

7 de marzo de 2016

02:30hrs

Post SOP

- NPO

-CFV

-Dextrosa al 5%/1000+ hipersodio 1amp.+Oxitocina 20 UI.+Metamizol 2g en el l ll

y lll frasco a 45 gts.

-Ceftriazona 1g ev/12hrs.

-Nifedipino 10g Vía oral. Condicional a PA mayor 160/110mmhg.

-Control de PA cada 4 hrs, en hoja aparte.

-Monitoreo de síntomas presunto a eclampsia.

-Keterolaco 60mg EV. Cada 8hrs.

-Se solicita hemoglobina posterior a sala de operaciones.

67

08:00hrs - Dieta blanda

- Dextrosa al 5%+hipersodio 2amp+Oxitocina 2amp+Metoclopramida

2amp+Metamizol 3gm

(l y ll frasco).

- Ceftriazona 1gr EV. Cada 12hrs.

- Post-Cesareada inmediata por sufrimiento fetal y taquicardia.

- Cesareada anterior 3 veces.

- A la evolución refiere dolor en la herida operatoria.

Al Exámen

AREG, LOTEP, AREN.

Abdomen:

Útero contraído doloroso a la palpación.

G. Ext.: Loquios hemáticos en normal cantidad.

Funciones vitales:

PA.140/80mmhg

Pulso: 95xmin.

Exámenes de laboratorio: 7 de marzo 2016

HB; 10.9g/dl

Sedimento: 14-18xc.

DX. Post-Cesareada inmediata.

8 de marzo de 2016

08:00hrs

Post-Cesareada mediata que a la evolución refiere dolor en herida operatoria.

Al Exámen:

AREG, LOTEP, AREN.

Abdomen: Útero contraído dolor a la palpación.

G. EXT.

STV: escaso

Funciones Vitales:

PA: 120/80mmhg

P: 78xmin.

68

Exámenes de laboratorio Hcto: 34%

Dx: Post-Cesareada mediata.

Se le indica ALTA. Con indicaciones:

-Ceftriazona 500mg cada 12hrs 14tab. X 7 días

EXAMENES COMPLEMENTARIOS

6 MARZO 2016

Glucosa: 108mg/dl

Creatinina: 0.8mg/dl

HGB: 10.9g/dl

HCT: 30.1%

Sedimento Urinario:

Cel. Epit.: 12 a 15 x cam.

Leucocitos: 14 a 18xcam.

Hematíes: 2 a 4xcam.

Gérmenes: +

Grupo y Factor: O+

Eco. Obstétrica:

Dx: gestación de 33ss

Se observa:

- Útero ocupado por feto único vivo, de presentación cefálico con el dorso

hacia el flanco materno.

- Biometría:

BDP: 8.40cm

LF: 6.00cm

Peso aprox.: 2040g +- 200g. que corresponde a 33ss de gestación.

Latidos cardíacos presente de 142xmin.

Mov. Corporales y respiratorios espontáneos.

- Placenta Fúndica corporal posterior grado ll.

- Líquido amniótico en cantidad adecuada. ILA: 18cm.

69

EPICRISIS

Fecha de ingreso; 06 de marzo de 2016. A horas 16:56hrs. Al servicio de Gineco-

obstetricia, con dx. De gran Multigesta de 33ss. Por FUR. Cesareada anterior 3

veces.

Pcte. Refiere en hipogastrio tipo contracción uterina de moderada intensidad, que

se irradia hasta le región lumbar.

Exámenes auxiliares

Hb: 10,4 g/dl

Sedimento: 14 a 18xcamp.

Evolución:

Favorable.

Tratamiento recibido

Dextrosa al 5% EV cada 24hrs.

Oxitocina 10 UI ev. Cada 24hrs.

Metoclopramida 10mg. EV. Cada 24hrs.

Ceftriazona 1g EV. Cada 24hrs.

PROCEDIMIENTO:

Atención de parto por cesárea.

Atención del recién nacido.

Atención del Alumbramiento.

Fecha de egreso: 8 de marzo de 2016

70

5 DISCUSIÓN Y ANÀLISIS

Diferimos con Joerin Verónica Natalia, quien refiere que la preeclampsia se

presenta en gestante nulíparas, contradiciendo con nuestro caso clínico; ya que

nuestra paciente de la historia clínica que presentamos es multípara; coincidiendo

con otros autores que si consideran como factor de riesgo de preeclampsia la

multiparidad,

Coincidimos con los artículos de la literatura revisada; en cuanto a la edad

materna, que refieren que el margen de edad de presentación de la `preeclampsia

es entre 20 a 35 años. Coincidiendo con la edad de nuestro paciente que es de 33

años,

Con respecto a los controles prenatales, Tomic V et al ,encontró que las mujeres

con embarazos complicados con preeclampsia tuvieron significativamente un

número bajo de controles prenatales ; la cual confirmamos ; mediante la revisión

de la historia clínica de nuestro paciente; quien solo tuvo una atención ( control)

prenatal.

En la literatura revisada sobre preeclampsia se considera como factor de riesgo la

obesidad, comprobándose este enunciado en nuestra historia clínica presentada,

ya que la paciente presentaba un exceso de peso en relación con su talla.( antes

del embarazo 75kg; a las 33 ss de embarazo 82kg; y con una talla de 1.50cm.).

71

6 CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

CONCLUSIONES

Concluimos que el rango de edad de presentación de la preeclampsia es

entre 20 a 35 años como señala la literatura.

Comprobamos que la obesidad es un factor de riesgo importante en la

presentación de la preeclampsia.

Encontramos que la multiparidad es un factor de riesgo importante que

demos tener en cuenta como antecedente para el Diagnóstico probable de

preeclampsia

La enfermedad hipertensiva como antecedente de un embarazo, nos dará

un alerta de cuidado en la paciente sobre preeclampsia; La cual

controlaremos en cada control prenatal.

72

RECOMENDACIONES

o Que el equipo de salud que atiende esta patología, la Preeclampsia, tenga

conocimientos actualizados de los principales factores predisponentes en

una mujer gestante para desarrollar ésta enfermedad, que se actúe

conforme al protocolo de estados hipertensivos, lo cual permitirá un

manejo adecuado, oportuno y uniforme de las pacientes con estos

trastornos.

o Realizar charlas educativas que incentiven a las pacientes a una buena

calidad de vida, a disfrutar de una maternidad saludable y sin futuras

complicaciones. También orientando a las familias sobre educación

sexual, planificación familiar y las patologías más comunes para evitar

embarazos en la adolescencia.

o Aumentando el nivel de educación en salud para todas las pacientes, en

especial aquellas mujeres menores de 20 años por medio del trabajo en

equipo de médicos y obstetras.

o Capacitar al personal de salud periódicamente sobre los diversos

problemas de salud pública que aquejan nuestro medio y que los avances

de la medicina puedan estar al alcance de toda la población, ya sea

incrementado los servicios de salud en aquellas zonas rurales y de difícil

acceso para las pacientes.

o Que en todas las instituciones de salud se cuente con equipamiento básico

adecuado para brindar una atención de calidad para las pacientes,

garantizando la integridad, salud y vida de cada persona, además de

referir a la unidad de atención de mayor complejidad los casos que

ameriten una atención especializada.

o Desarrollar un plan especial de control prenatal en los centros de salud

para las embarazadas con riesgo, en el cual el obstetra pueda registrar

toda la información necesaria de cada historia clínica en una base de

datos y que se cree un vínculo entre estos centros de menor complejidad y

los hospitales donde serán trasferidas las pacientes que necesiten una

atención especial para que puedan ser asistidas satisfactoriamente.

73

7 PROPUESTAS DE MEJORA

Ya que la Preeclampsia es uno de los principales problemas de salud

pública, responsable de graves consecuencias que conlleva para la madre y feto,

hasta incluso puede causar mortalidad, se ve la necesidad de realizar acciones

preventivas para esta patología, mediante la orientación de las pacientes sobre los

factores de riesgo y consecuencias de la Preeclampsia, haciendo que ellas

puedan identificarlos y contribuyendo a una detección temprana de la enfermedad.

Logrando que las pacientes, médicos y obstetras formen un equipo óptimo de

salud en el control prenatal, de esta manera se podrá evitar muchas

complicaciones maternas y fetales

Del mismo modo, se propone que al momento del diagnóstico de Una

paciente con preeclampsia, solicitar de forma rutinaria sus exámenes de

proteinuria en orina de 24 horas para evitar complicaciones futuras y fatales para

la madre y el producto.

74

BIBLIOGRAFÍA

75

1. Rozman,C. Nefropatía y embarazo.13era.ed.(CD-ROM).Medicina Interna.

Barcelona: Ediciones Doyma; Mosby-Doyma Libros; 1996.p. 966-8.

2. Civetta MJ, Taylor WR, Kirby RR. Hypertensive disorders: pre-eclampsia and

eclampsia.. 2da.ed. Critical Care. Philadelphia: J.B.Lippincott; 1992.p.869-79.

3. Shoemaker CW, Ayres MS, Grenvik A, Holbrook RP. Critical care medicine and

the obstetric patient. 3era.ed. Textbook of critical care. Philadelphia: Saunders;

2000.p.50-64.

4. Kirshon B. Effects of low dosis dopamine therapy in the oliguric patient with

Preeclampsia. Am J Obstet Gynecol 1988; 159 (3): 604.

5. Gritchard JA. The use of magnesium sulfate in Preeclampsia-eclampsia. Med

Reprod J 1979; 23:107.

6. Working group report on high blood pressure in pregnancy. National Institutes of

Health, National Heart, Lung, and Blood Institute National High Blood Pressure.

Education Program NIH Publication No. 00 - 3029 National High Blood Presure

Education Program; 2000.

7. Capeless EI, Clapp IF. Cardiovascular changes in early phase of pregnancy. Am

J Obstet Gynecol 1989; 161:1449.

8. Cunningham FG, Pritchard JA. How should hypertension during pregnancy be

managed? Med Clin North Am 1984; 142:28.

9. Marín R, Gonzales PC, Gorostidi M, Sánchez NM, Sánchez E, Fernández VF, et

al. Hipertensión arterial en el embarazo: estudio de 864 casos consecutivos por

un período de 24 años. Originales 1999; XIX: 1-5.

10. Brown MA, Buddle ML. What's in a name. Problems with the classification on

hypertension in pregnancy. J Hypertens 1997; 15:1049-54.

11. Micali AL, Marín DE, Gutiérrez LA, Silva R, Tenias P, Bravo A. Factores

predisponentes de eclampsia en la población de Paraguaná 1993-1997. Rev

Hospital Cardón 2000;2:2-8.

76

12. The Magpie Trial Collaborative Group. Do women with pre-eclampsia, and their

babies, benefit from magnesium sulphate? The Magpie Trial: a randomised

placebo-controlled trial. Lancet 2002; 359:1877 - 90. Disponible en:

www.thelancet.com.

13. Vargas-Hernández VM. Enfermedad hipertensiva durante el embarazo. Rev

Hosp Juan Mex 1999; 6:125-34.

14. Myers JE, Baker PN. Hypertensive diseases and eclampsia. Curr Opin Obstet

Gynecol 2002; 14:119-25.

15. World Health Organization. Global Program to Conquer Preeclampsia/Eclampsia.

2002.

16. Shah A, Fawole B, M'Imunya JM. Cesarean delivery outcomes from the WHO

global survey on maternal and perinatal health in Africa. Intl J Gynec Obstet 2009;

107:191-7.

17. McClure EM, Saleem S, Pasha O, Goldenberg RL. Stillbirth in developing

countries: a review of causes, risk factors and prevention strategies. J Matern

Fetal Neonatal Med 2009; 22:183-90.

18. Igberase G, Ebeigbe P. Eclampsia: ten-years of experience in a rural tertiary

hospital in the Niger delta, Nigeria. J Obstet Gynaecol 2006; 26:414-7.

19. Adamu YM, Salihu HM, Sathiakumar N, Alexander GR. Maternal mortality in

Northern Nigeria: a population-based study. Eur J Obstet Gynecol Reprod Biol

2003; 1098:153-9.

20. Ikechebelu JI, Okoli CC. Review of eclampsia at the Nnamdi Azikiwe University

teaching hospital, Nnewi (January 1996-December 2000. J Obstet Gynaecol

2002; 22:287-90.

21. Onuh SO, Aisien AO. Maternal and fetal outcome in eclamptic patients in Benin

City, Nigeria. J Obstet Gynaecol 2004; 24:765-8.

77

22. Duley L. Pre-eclampsia and the hypertensive disorders of pregnancy. Br Med Bull

2003; 67:161-76.

23. Thiam M, Goumbala M, Gning SB, Fall PD, Cellier C, Perret JL. Maternal and

fetal prognosis of hypertension and pregnancy in Africa (Senegal). J Gynecol

Obstet Biol Reprod 2003; 32:35-8.

24. Wagner LK. Diagnosis and management of pre-eclampsia. Am FAM Phys 2004;

70:2317-24.

25. Kharb S. Serum markers in pre-eclampsia. Biomarkers 2009; 14: 395-400.

26. Audibert F, Boucoiran I, An N, Aleksandrov N, Delvin E, Bujold E, Rey E.

Screening for Preeclampsia using first-trimester serum markers and uterine artery

Doppler in nulliparous women. Am J Obstet Gynecol 2010; 203:383.e1-8.

27. Papageorghiou AT, Campbell S. First trimester screening for Preeclampsia.

Current Opin Obstet Gynecol 2006; 18:594-600.

28. Louden k, Kilby M. Low-dose aspirin: the rationale for preventing pre-eclampsia

and intra-uterine growth retardation: a role after CLASP. In: Recent Advances in

Obstetrics and Gynaecology, 1995;Num 19, Bonnar J, Ed., Churchill Livingstone,

Edinburgh, UK, 1995.

29. Beals Étienne, Cáceda L. Luis, Carvajal Alejandro, Saravia Anthony, Olivares

Cristian, Victoriano ranco, Echeverría Guillermo, Díaz Víctor. REVISTA ANACEM

ISSN 18 -5308, VOL3. Estudio Comparativo de la Morbimortalidad del Producto

Gestacional en Mujeres Embarazadas con Preeclampsia moderada o

severa.(2009)

30. Bonilla. Obstetricia, Reproducción y Ginecología Básicas pag 311 (2008).3.Ceriani

Cernadas -Neonatologia Práctica 4° edición, 2009.-Editorial Médica

Panamericana.

78

31. Cruz Hernández Jeddú, Hernández GarcíaPilar, Yanes Quesada Marelis, Isla

Valdés Ariana. Revista Cubana de Medicina General Integral versión On-line ISSN

1561-3038 Ciudad e La Habana oct.-dic. 2007. Factores de riesgo de

Preeclampsia: enfoque inmunoendocrino. 32. .Di Marco Ingrid, Basualdo María Natalia, Di Pietrantonio Evangelina, Paladino

Silvina, Ingilde Mónica, Domergue Gastón, Velarde Carmen Nora. Guía de

práctica clínica: Estados Hipertensivos Del Embarazo 2010 Redalyc (Sistema de

Información Científica Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe,

España y Portugal.).

33. Rodríguez Hidalgo N, Cutié León E, Cordero Isaac R, Cabezas Cruz E, Águila

Setién S, Álvarez Lajonchere C, et al. Enfermedad hipertensiva durante el

embarazo. En: Manual de diagnóstico y tratamiento en Obstetricia y Perinatología.

3ra. ed. La Habana: ECIMED; 2000. p. 237-52. 34. Witlin. AG, Sibai Baha. Hypertension in pregnancy: current concepts of pre-

ecíampsia. An Rev Med. 2007; 48:125-7.

35. Botella Uusiá J, Claviro Núñez JA. Hipertensión y embarazo. En: Tratado de

Ginecología. 14ta ed. La Habana: Editorial Científico-Técnica; 2001. p. 5-55.

36. OPS/OMS. Problemas de salud. En: Análisis de la situación sanitaria de Haití.

Puerto Príncipe: Ediciones de las Antillas; 2008. p. 61.

37. Dekker GM. Etiology and pathogenests of pre-eclampsia: current concepts. Am 3

Obst Gynecol. 2008:5(179):1359-75.

38. Dekker GA, Sibai BM. Etiology and pathogenesis of pre eclampsia: current

concepts. Am J Obstet Gynecol. 1998 Nov; 179(5); 1359-75.

39. Sekí H. Balance of antíangiogenic and angiogenic factors in the context of the

etiology of pre eclampsia. Acta Obstet Gynecol Scand. 2014 Oct;93{10):959-64.

doi: 10.1111/ aogs.12473.

40. Scholl TOl, Leskiw M, Chen X, Sims M, Stein TP. Oxídative stress, diet, and the

etiology of pre eclampsia. Am J Clin Nutr. 2005 Jun; 81(6): 1390-6.

79

ANEXOS

80

LA PRESIÓN ARTERIAL AUMENTA CUANDO HAY

PREECLAMPSIA

81

r'

' J ,\ _, !' r )'::J ;.¡

82

Frecuencia Porcentaje

Hipertensión arterial

Cefalea

Tinnitus

85 57,84

1.56

Anormalidad Leve Severa

Matemal

Presión sangulnea sistól ca Presión sangulnea dlast61ica Proteinuria En orina recolectada de 24 h Oliguria (< 500 ml/24 h) Edema Pulmonar Trombocitopenia Dolor de cabeza Disturbios Visuales Elevación de enzimas hepáticas

Fetal

< 160 mm Hg < 100mm Hg

1 2 + 300mg

Ausente Ausente Ausente Ausente Ausente Mínmi a

> 160-180 mm Hg 110 mm Hg o más

3-4 + Smg

Presente Presente Presente Presente Presente Marcada

Diminución delcrecimiento Ausente Presente

Tabla 1

Severidad de la preedampsia

TABLA 2

Factores de riesgo para el desarrollo de preecl ampsi a

Ri esgo alto Preeclampsia

previa Diabetes

mellitus

HTAcrónica

Nefropatai prEvia

Enfermedades autoinmunes

R iesgo moderado

Primer embarazo

Edad :1: 35 ar1cs

Embarazos multiples

Antecedentes 'amiliares ele preeclampsia grave

Resistencia a la insulina

índice ele masa corpora1 elevado

Aumento de la testosterona eirculante

Aumento de la concentración ele homocisteina en

sangre

Trombofilias

Prueba ele roll over positiva

Estudios clopp er de arterias uterinas anormales

HTA: hipertensión arterial. Adaptada de las cita 30 y 37. 83