Filosofia Griega Ensayo 1
-
Upload
paty-acosta-vargas -
Category
Documents
-
view
2.287 -
download
0
Transcript of Filosofia Griega Ensayo 1
Filoso�ía de las Ciencias: La Antigua
Grecia y la Edad Media
Science Philosophy: The Ancient Greece and the Middle Ages
CARIBBEAN INTERNATIONAL UNIVERSITY MASTER DEGREE IN DISTANCE EDUCATION E-LEARNING
FILOSOFÍA DE LAS CIENCIAS TUTORES: Mailen Camacaro, Janina Rodríguez Y Ronald
Ordoñez
Autores: Acosta, Patricia
Concha A, Juan Carlos Dávila Toro, Carlos Augusto
Lopez M, Ximena Salvador, Luis
Terán Korowajczenko, Karinne
Julio de 2013
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
1
Filosofía de las Ciencias: La Antigua Grecia y la Edad Media
Science Philosophy: The Ancient Greece and the Middle Ages
Resumen
Desde los antiguos filósofos griegos, se ha planteado una inquietud que ha perdurado hasta la época actual: ¿Cuál es la verdad?, ¿Hacia dónde vamos? Diversas corrientes filosóficas han esbozado resolver estas inquietudes, desde la búsqueda de placeres sensoriales hasta la privación de ellos, cada una de las filosofías, han dejado una huella en la historia de la humanidad que perdura hasta nuestros tiempos. En esta primera parte lo que vamos a realizar es un bosquejo de lo que sucedió entre la transición de la antigua Grecia hasta la Edad Media o época del oscurantismo.
Palabras clave: filosofía griega, edad media, corrientes filosóficas
Abstract
From the old Greek philosophers there has appeared a question that has lasted up to the current epoch: Which is true?, Towards where do we go?. Diverse philosophical currents have considered solving these questions, from the search of sensory pleasures up to the privation of them, each of the philosophies have allowed a trace in the history of humanity who lasts up to our times. In this first part what we go it is necessary to realize is a sketch of what happened between the transition of the ancient Greece up to the Middle Ages or epoch of the obscurantism.
Keywords: Greek philosophy, middle age, philosophical
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
2
Pensamiento clásico griego
Filosofía Griega: Entre el 600 y el 200 a.C.
• La escuela Jonia • La escuela Pitagórica • La escuela Eleática • Los antiguos griegos • Thales • Anaximandro • Los Sofistas • Sócrates • Platón • Pitágoras • Aristóteles • Movimientos Filosóficos • Neoplatonismo • Estoicismo • Epicureísmo
Etapas de la Filosofía Medieval (siglos V al XV)
• La Patrística: Expositor más destacado San Agustín • La Escolástica: Representado por Santo Tomás de Aquino • La lucha entre el realismo y el nominalismo
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
3
El origen de la filosofía ha sido una cuestión controvertida a lo largo de
la historia del pensamiento. Por lo general los filósofos griegos han
considerado que la filosofía nace en Asia Menor, con el "viaje de Jonia”
que hiciese Tales de Mileto (unos 630/635 aC - 543 aC), el cual se
caracteriza por ser el primer sabio antiguo y fundador de la escuela de
Mileto de la filosofía natural. En contraparte, la última escuela filosófica
griega, fue la Academia platónica de Atenas. De ellas se desprende, la
posterior formación de la cultura europea, su visión del mundo y de los
conceptos de las ciencias naturales en los que se conformó posteriormente
la ciencia europea.
Al respecto, tres historiadores del siglo XX, Francis Macdonald Cornford,
John Burnet y Jean-Pierre Vernant, defienden la tesis expresada en el
párrafo anterior, señalando:
Cornford: sostiene que el desarrollo del pensamiento filosófico surge a
partir del pensamiento mítico y religioso. Según esta hipótesis la filosofía
sería el resultado de la evolución de las formas primitivas del pensamiento
mítico de la Grecia del siglo VII antes de Cristo.
Para Cornford existe una continuidad real entre la primera especulación
racional y las representaciones religiosas, de tal modo que las maneras de
pensar que, en filosofía, logran definiciones claras y afirmaciones explícitas
ya estaban implícitas en las irracionales intuiciones de lo mitológico.
En su obra "De la religión a la filosofía", (1984), Cornford explica cómo la
estructura de los mitos de Hesíodo en la "Teogonía" se mantiene en las
teorías de los primeros filósofos, rechazando éstos solamente el recurso a
lo sobrenatural y la aceptación de la contradicción. Destaca la influencia
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
4
educativa de Homero y Hesíodo en la constitución y posterior desarrollo de
la civilización griega, y analiza también cómo algunos de los conceptos que
serán fundamentales posteriormente en la filosofía, proceden directamente
del pensamiento mítico-religioso griego, entre ellos: Moira (hado, destino),
Diké, (justicia), physis, (naturaleza), ley, dios, alma, entre otros.
Burnet: plantea lo que él denomina: la tesis del "milagro griego". Según
esta hipótesis la filosofía habría aparecido en Grecia de una manera
abrupta y radical como fruto de la genialidad del pueblo griego. Esta
hipótesis prescinde de los elementos históricos, socioculturales y políticos,
por lo que termina por no explicar nada, cayendo en un círculo vicioso: Los
griegos crean la filosofía porque son geniales, y son geniales porque crean
la filosofía. Esta puede leerse en su obra "La Aurora de la filosofía griega",
(1944).
Vernant: en su obra "Mito y pensamiento en la Grecia antigua", (1965),
añade importantes elementos derivados del contexto sociocultural, político
y económico de la época, para explicar cómo este paso del mito a la
racionalidad fue posible, y por qué se produjo en Grecia en lugar de en
otra civilización de la época. La inexistencia de una casta sacerdotal, la
figura del sabio, el predominio de la ciudad, la transmisión pública del
saber, la libertad individual y el desarrollo de la escritura, hacen posible la
puesta en entredicho de las explicaciones cosmológicas y su sustitución
por una forma de pensamiento que no entrañe la creencia y la superstición
propias de los pensamientos mítico y religioso.
De esto se desprende, que las ideas filosóficas de los romanos no son
originales. Son las ideas de los filósofos griegos las que viajaron a través
de la lengua latina extendiéndose en la Edad Media y más tarde al resto
del mundo. Para finalizar este apartado, los autores del presente ensayo,
comparten los pensamientos sobre Grecia que presentan algunos
personajes destacados en la historia:
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
5
La raza griega es la más elevada de todas, ya que tiene la ventaja de que no dejó de
ser nunca la madre de la civilización. Moellendorff
Los griegos tienen el don de la maravilla. Bloomfield
En Grecia tenemos nuestra mente y todas nuestras virtudes. Voltaire
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
6
El origen y las raíces son griegas. Gorbachov
Sócrates fue el primero que trajo a la tierra , a la filosofía, del cielo. Cicerón
Los griegos nos legaron a Dios dentro de nosotros. Bienaventurado
el que guarda un dios dentro. Koestler
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
7
Grecia es la cuna de la civilización más noble que
conoció la humanidad. Makenzi
Excepto las fuerzas ciegas de la naturaleza, todo lo que se encuentra en la civilización humana, sólo tiene
origen griego. Pascal
La filosofía griega se encuentra en existencia misma del
hombre. Heidegger
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
8
Por el siglo VI a. de J.C. se presentan una serie de pensadores que
intentan explicar el mundo prescindiendo de las fuerzas divinas a las que
recurren las explicaciones míticas. De esta manera surgen las primeras
explicaciones científicas y racionales, que colocan los cimientos de lo que
hoy en día consideramos como ciencia Occidental. Los griegos iniciaron la
filosofía occidental, creyendo alguno de ellos que fueron los que
descubrieron al hombre, ahora bien, el hombre para los griegos sólo es un
ciudadano, porque fuera de la ciudad, pensaban, como Aristóteles, que el
humano estaba entre animal y dios. El pensamiento griego estuvo liderado
por Platón, quien dio importancia a la razón, considerando al hombre el
único ser capaz de adquirir ciencia fundada en razonamientos, aunque
Aristóteles precisó que existen tres cosas fundamentales: la naturaleza, el
hábito y la razón.
Es importante destacar, que en este período se produjeron notables
logros culturales y científicos. La ciudad de Atenas presentó al mundo una
democracia directa de la talla de la que nunca se había visto hasta
entonces, o con posterioridad, emulada miles de años más tarde por los
gobiernos occidentales como Gran Bretaña, Francia y EE.UU. El enfoque
racional para explorar y explicar el mundo que se refleja en el arte clásico,
la filosofía y la literatura se convirtió en el trampolín que la cultura
occidental utilizó, para dar un salto adelante, a partir de la edad helenística
posterior. Los pensadores de la época clásica griega, dominaron el
pensamiento durante miles de años, y han permanecido vigentes hasta
nuestros días. Las enseñanzas de Sócrates, Platón y Aristóteles, entre
otros, de forma directa, se han utilizado como punto de referencia de un
sinnúmero de pensadores occidentales en los últimos dos mil años. Por
ejemplo, Hipócrates se convirtió en el "padre de la medicina moderna", y el
juramento hipocrático se sigue utilizando hoy en día.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
9
La escuela Jonia
Aparece en el siglo VI, antes de Cristo, en Jonia, pertenece al primer
período de la filosofía griega, en la cual predomina el pensamiento
cosmológico. Sus principales filósofos fueron Tales, Anaximandro y
Anaxímenes pertenecientes a la escuela de Mileto en Efeso y Heráclito
como el más importante representante de esta escuela, proponen una
visión naturalista de la realidad o una visión “visible” de la realidad.
Su preocupación fundamental es la comprensión de la naturaleza o
physis, rechazando las explicaciones míticas del origen del universo y del
hombre, buscando explicaciones naturales, sin negar la existencia del alma
y de los dioses imponiendo una visión materialista de la espiritualidad. La
esencia de todas las cosas está conformada de una materia primera
compuesta de uno o cualquier combinación de los elementos agua, aire,
fuego, tierra junto con el movimiento.
La materia por tanto se reconoce como principio esencial y sustancia
real del mundo junto con el movimiento continuo o incesante de la misma.
Sin embargo, el mundo no es una combinación fatal de fuerza y materia,
sino el producto de la inteligencia de un ser trascendente y por tanto
espiritual.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
10
Sus puntos de vista básicos se pueden resumir en las siguientes tesis:
“El mar es el agua más pura y más corrupta; es potable y saludable para
los peces; para los hombres, en cambio, es impotable y nociva”
“La enfermedad hace a la salud agradable y buena, el hambre a la
hartura, el cansancio al descanso”;
“Todas las cosas se mueven y nada está quieto... nunca te podrás
sumergir dos veces en el mismo río”;
“La guerra es el padre y el rey de todas las cosas; a uno les muestra
como dioses y a otros como hombres, a unos los hace esclavos y a otros
libres”
“Una armonía invisible es más intensa que otra visible”; “la auténtica
naturaleza de las cosas suele estar oculta”.
Con respecto a Heráclito era un individuo solitario, fue el primero que
habló de dialéctica entendida como oposición de fuerzas, veía en el fuego
el elemento al que todo el universo podría reducirse, murió en un
estercolero abandonado y confundido con la basura. Su pensamiento tuvo
mucha influencia en el marxismo y en Nietzsche.
La escuela jónica había planteado y resuelto en el terreno material,
sensible y contingente el problema cosmológico, el cual coincide con el
problema filosófico durante el período ante socrático, y sus especulaciones
se hallaban limitadas y circunscritas al mundo externo, sin que el hombre y
Dios, sin que la psicología, la moral y la teodicea llamaran su atención.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
11
La escuela Pitagórica
La denominación de pitagórica viene de su fundador Pitágoras, un
filósofo muy conocido en la antigüedad, acerca del cual se ha escrito
mucho en tiempos antiguos y modernos, sin que los escritos hayan logrado
disipar la oscuridad y las dudas que existieran acerca de sus hechos y
doctrina. Conocida así mismo como escuela itálica, por haber tenido su
asiento en Italia, a causa de las muchas ciudades que allí fundaron los
griegos, despierta en todos los espíritus la idea de la metempsicosis, al
mismo tiempo que trae a la memoria el precepto que prohíbe comer carne
de animales.
Platón y Aristóteles acatan su gran sabiduría. Al declinar el paganismo,
Porfirio y Jámblico oponen su nombre como una respuesta y un apoyo a
las nuevas creencias que lo invaden todo. El Cardenal Nicolás de Cusa, en
el siglo XV, y Jordano Bruno en el siguiente, adoptan y propagan sus
enseñanzas. Leibnitz descubre en su doctrina la substancia más pura y
sólida de la Filosofía de los antiguos.
La escuela itálica eleva el problema cosmológico desde el terreno
puramente material y sensible, al terreno matemático, dándole un aspecto
más racional y profundo, un modo de ser más universal y más científico.
Como resultado y consecuencia de este modo superior de plantear y
resolver el problema filosófico de la época, la escuela itálica se separa
también y se eleva sobre la jónica por la universalidad de sus soluciones,
formulando una especie de sistema relativamente filosófico, general y
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
12
complejo, en el cual, al lado de las nociones cosmogónicas, aparecen
ideas y nociones relacionadas con la psicología, la moral y la teodicea, por
más que estas ideas son por extremo confusas, incompletas, y, sobretodo,
poco científicas.
La escuela Eleática
La escuela eleática, cuyo nombre proviene de la ciudad griega de Elea,
(Velia o) en el sur de Italia, es una corriente griega de filosofía que tuvo su
desarrollo aproximadamente en el siglo VI antes de Cristo. Se distingue por
su radical monismo, es decir, su doctrina del Uno ,
El miembro más importante de esta escuela era el filósofo Parménides,
el cual tenía una posición opuesta a la de Heráclito. El universo es, en
esencia y en su mayor amplitud, una unidad inmutable infinita en tiempo y
en espacio que está más allá del conocimiento que se puede adquirir por
medio de los sentidos. Esta escuela permitió más adelante el desarrollo y
evolución de la ciencia de la lógica. Según esta escuela nada podía ser
afirmado como tal excepto lo que “realmente era”.
La apariencia del movimiento y la existencia en el mundo de objetos
distintos son mera ilusión: sólo parecen existir. Las observaciones
sensoriales ofrecen tan solo una visión limitada y distorsionada de la
realidad.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
13
Cada miembro de la escuela eleática defendía una variedad distintiva de
eleatismo: Parménides siguió una ruta directa y lógica de pensamiento
dirigida a ver lo finito y al “Ser” eterno. Zeno se mostró de acuerdo con las
doctrinas de Parménides, sin embargo, empleó los métodos indirectos de
“reductio ad absurdum” y regresión infinita, Meliso modificó las doctrinas,
mostrando al “Ser” infinitamente extenso y eternamente temporal. Un
cuarto pensador, el siciliano sofista Gorgias de Leontino, empleó los
métodos de Zeno de Elea para defender su oposición al nihilismo,
afirmando el “No Ser” en lugar de “Ser”.
El Eleatismo representa una reacción contra las diversas tendencias
del pensamiento. Metodológicamente, rechazó el enfoque empírico
(observacional) tomado por los cosmólogos anteriores, como los de Thales
y Anaxímenes, haciendo caso omiso de las apariencias perceptuales. Esta
escuela perseguía un racionalismo, es decir, una realidad estrictamente
abstracta con un enfoque lógico, de allí que Parménides fuera considerado
el padre de la pura ontología.
Los antiguos griegos más destacados en la historia fueron:
• Thales • Anaximandro • Los Sofistas • Sócrates • Platón • Pitágoras • Aristóteles
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
14
Tales de Mileto
Tales de Mileto (unos 630/635 aC - 543 aC) fue un griego antiguo, el
primero de los siete sabios de fundador de la escuela de Mileto de la
filosofía natural.
Fue un innovador y pionero para su época. No hay acuerdo sobre los
escritos de los proyectos. Otros argumentan que no dejó nada por escrito,
mientras que otros, le atribuyen algunas obras, entre ellas los solsticios y
equinoccios. El Herodoto informa que Tales predijo el eclipse solar del 585
aC .
Continuando con este orden de ideas, fue el primero que trató de
explicar los fenómenos naturales mediante procesos naturales. Típico fue
el intento de explicar el fenómeno de los terremotos. Según Tales, la tierra
flota en el agua y los terremotos son causados cuando la tierra es sacudida
por las olas de agua. Su cosmología estaba basada en:
• La Tierra tiene la forma de un disco circular que se fundamenta en
agua.
• El agua es el principio de todo.
En otro orden de ideas, fue considerado un gran geómetra. Incluso
ganó la admiración de los medidores egipcios, por la precisión del cálculo
en la altura de las pirámides, en base a la longitud de la sombra.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
15
Anaximandro
Anaximandro (610 aC - 547 aC) fue el segundo de los filósofos.
Poco se sabe sobre su vida y obra. El Aelian lo menciona como líder de
la colonia de Mileto en Anfípolis. Las fuentes lo mencionan a veces como
un buen estudiante de Astronomía y Geografía y como uno de los primeros
defensores de la ciencia exacta.
Se dice también que introdujo el uso de la luz en la antigua Grecia y que
construyó un mapa del mundo conocido. Explicó la creación del mundo a
partir del infinito. Desde el infinito estaban el fuego y el aire nublado. En el
centro de la nebulosa se concentró la Tierra, mientras que de la llama que
flotaba en el aire, salió una bola de fuego que explotó y se disolvió en
ciclos envueltos por el aire nublado. Esto generó unos círculos los cuales
se extienden y forman los cuerpos celestes y las estrellas, que son
condensaciones de gas y fuego, creado por la turbulencia. También
construyó relojes de sol, y calculó la oblicuidad de la eclíptica.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
16
Los Sofistas
La Sofística de la antigua Grecia
Para la segunda mitad del Siglo V, Grecia había llegado a altos
estándares de progreso político-militar, económico y científico-cultural. La
coalición militar entre Atenas y Esparta no sólo había alejado el fantasma
de la invasión extranjera; además, la magnífica victoria de la unificación
griega sobre los persas les había permitido la expansión colonizadora y el
control del Mediterráneo.
El crecimiento de la producción artesanal y agrícola, facilitado por la
proximidad entre núcleos urbanos de alta densidad poblacional y por la
fertilidad de las tierras coloniales, había estimulado significativamente el
auge económico y la oferta ocupacional para una población en rápido
aumento, con importantes ventajas derivadas tanto de los incesantes
proyectos de construcción urbana como de la expansión comercial que
vinculaba a las ciudades griegas entre sí y con los centros del
mediterráneos y el Mar Negro. A las conquistas filosóficas y matemáticas
del siglo anterior se sumaban ahora importantes progresos en historia y
medicina, madurándose una astronomía y una biología científicas, lo cual
constituía el clímax del llamado "período cosmológico", orientado al estudio
del mundo material.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
17
Es fácil ver cómo este progreso, así descrito, obedecía a estándares
unilaterales que excluían el factor humano o humanizante, cosa que
paulatina y silenciosamente iba gestando la semilla de la "crisis", derivada
del reclamo de atención por parte de los intereses del "espíritu" y de la paz
social (era el predominio de la "razón instrumental" y "tecnológica", dirían
hoy los críticos de la modernidad. Nótense los paralelismos entre esa
época y la actual). Efectivamente, las ciudades-estado mantenían sistemas
políticos notoriamente diversos y ubicaciones desiguales dentro de la
estructura altamente jerarquizada que se había instaurado a raíz de la
coalición militar entre Atenas y Esparta. Por lo demás, estaban muy lejos
de ser resueltas las rivalidades entre ambas partes, rivalidades que más
tarde culminarían en las devastadoras guerras peloponesas. El malestar
político y social fue penetrando todas las esferas de la vida civil, cada vez
con mayores demandas de atención y "redimensionamiento".
En el plano del quehacer científico, se había pasado de una visión
amplia, global e interdisciplinaria del mundo natural a una fragmentación en
problemas y aspectos especializados. Y, acto seguido, los representantes
del saber comenzaron a preguntarse por la fundamentación del
conocimiento: se inició la búsqueda de unos criterios de verdad universal
que sustentaran la multiplicidad y diversidad de los problemas y las
soluciones. Desde allí fue fácil la concatenación entre una búsqueda de
criterios de verdad y una búsqueda de leyes universales, lo cual no pudo
menos que sensibilizar los mecanismos psicológicos de protección de la
individualidad, sembrando el pavor entre quienes consideran toda 'ley'
como una amenaza al libre albedrío y toda 'abstracción' como un atentado
contra la singularidad. Se configuró así, desde las esferas de la academia y
la ciencia, una especie de peligro para el 'sujeto'.
A esto se suma el hecho de que la élite científica de ese entonces (al
menos antes de la aparición de Sócrates) carecía de mentes dedicadas al
estudio del hombre y, por tanto, no había mayores progresos en materia
social y psicológica sino exclusivamente en materia de filosofía natural (con
lo cual se hacía patente, ya para ese entonces, la célebre "muerte del
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
18
sujeto"). Con esto resulta aún más explicable el surgimiento de esa especie
de miedo a la 'razón', entendida ésta ya no como una capacidad natural del
ser humano sino como una institución o como un estilo de liderazgo
sociocultural.
En ese contexto de cambios, signado por el miedo a la razón, a la
pérdida de la individualidad y a la aniquilación del 'factor humano', surge el
interés por el debate, por el intercambio de puntos de vista, por la dialéctica
de la acusación y la defensa y, en fin, por el ánimo de la controversia,
quizás en una especie de impulso colectivo a evidenciar las diferencias por
encima de la peligrosa homogeneidad, la especificidad por encima de la
riesgosa generalidad, el ardor humano por encima de la amenazante
insensibilidad de los objetos materiales o naturales. Con la democracia
griega se produce la irrupción de las masas a la vida pública y, con ella,
una atención especial a las cuestiones de educación, sociedad y realidad
humana (las comedias de Aristófanes, en especial "Las Avispas", "Las
Nubes" y "La Asamblea de las Mujeres", constituyen un vivo retrato de ese
despertar del ‘factor humano’ que, en forma de controversias y
confrontaciones, caracterizaba la vida ateniense de entonces).
Paralelamente se desarrolla el interés por la persuasión, por las técnicas
de la argumentación y la contrargumentación y, más que eso, por la
astucia y el encantamiento de la palabra, en calidad de nuevas habilidades
que esa nueva era de cambios ("crisis") exigía a quienes necesitaban sacar
partido de la debilidad de las masas mediante un control tanto de los
mecanismos internos del individuo como de las expectativas de las
multitudes.
Era, precisamente, el terreno abonado para la aparición de los sofistas o
'maestros de la sabiduría', verdaderos prestidigitadores de la palabra;
profesionales de la erudición (ya que, efectivamente, solían cobrar por sus
lecciones de "cultura general"); hábiles en la construcción de discursos
llenos de pomposidad y de coartadas argumentales (hoy sabemos,
afortunadamente, que la ambigüedad discursiva constituye una excelente
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
19
coartada para el argumento interesado); incapaces de dominar
técnicamente y en profundidad una especialidad del saber, pero realmente
brillantes en materia de generalidades y globalidades ("holísticos", diríamos
hoy en día); apóstoles de la subjetividad, de la inefabilidad y del misterio de
la realidad humana en contra de cualquier intento "reduccionista" y
"analítico"; predicadores del fracaso de la ciencia y de las limitaciones del
conocimiento humano; exaltadores del espíritu, de la relatividad de la
verdad, de la opinión individual y de la condición humana como único
criterio de orientación en el mundo ("el hombre es la medida de todas las
cosas", como decía uno de sus máximos representantes de ese tiempo o
"es en la conciencia donde nos objetivamos nosotros mismos para
resubjetivarnos en un bucle recursivo incesante", como dice hoy en día
Morin, E (1994, pp. 67)
En un principio, especialmente por homonimia con los Siete Sabios de
Grecia (siglos VII y VI, quienes originalmente habían sido llamados
"maestros de sabiduría"), los sofistas fueron acogidos favorablemente por
las multitudes, logrando un prestigio excepcional. Sus planteamientos
sobre la individualidad, el valor del ser humano y la imposibilidad de
verdades estables, lanzados desde una plataforma de rebeldía y desde
una postura "crítica" hacia la filosofía natural y la ciencia cosmológica,
impactaron el ánimo y la actitud del público. De hecho, sus preocupaciones
por la Educación los convirtieron en un hito histórico de la pedagogía
occidental (algunos historiadores los consideran como factor de avanzada,
p. ej., (Larroyo, 1976, pp. 147-151). Y, en general, a ellos se les debe, de
un modo u otro, el haber puesto el acento sobre los problemas del hombre
y, más que eso, el haber actuado dentro de la dialéctica de progreso
recorrida por lo que hoy conocemos como lógica, teoría del razonamiento y
filosofía del lenguaje.
Pero luego de su impacto inicial, los sofistas fueron progresivamente
perdiendo credibilidad, en particular por su creciente malabarismo retórico
y por su incapacidad en la construcción de una oferta real a la problemática
del ser humano. En efecto, tal y como suele ocurrir hoy en día con las
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
20
críticas a la razón, el recurso al subjetivismo y a la relativización, lejos de
constituir una solución y justo por engendrar en sí mismo la negación de
cualquier referencia, cierra toda salida, conduciendo sólo a un eterno
regodeo en el problema, regodeo que termina desgastando su interés. Y,
precisamente, este ir y volver sobre el problema sin ofertas de solución,
sólo alimentado por el ejercicio de un juego de palabras cada vez más
atosigante, terminó finalmente en el total descrédito de los sofistas.
Y fue allí, justamente, en ese punto de problematización desgastada, de
anarquía y de ilusionismo retórico, donde primero Sócrates, después
Platón y finalmente Aristóteles enfocaron todo su ataque a la sofística. He
aquí el perfil de esa sofística impugnada despiadadamente por los tres
maestros griegos, ya entendida como una actitud, predisposición o
tendencia (como invariante histórica), más que como una escuela o
corriente de pensamiento:
i) Presunción de sabiduría, engreimiento y autosuficiencia. Decía
Aristóteles: "Sabiduría aparente, pero no real"
ii) Énfasis en el palabreo y en la elocuencia por encima de los saberes
propiamente tales. Ilusionismo y prestidigitación verbal. Habilidad para
refutar o sostener al mismo tiempo tesis contradictorias entre sí (Erística).
iii) Impugnación al interés filosófico por el cosmos y la naturaleza, a
favor del hombre y sus problemas, planteando una dicotomía radical entre
el conocimiento del mundo natural y el conocimiento del hombre. Incitación
a la "crítica".
iv) Defensa ficticia de la interdisciplinariedad y del conocimiento global o
integral, en abierta contradicción con el rechazo al conocimiento de la
naturaleza.
v) La individualidad como criterio ético y epistemológico. Énfasis en el
sujeto. Reducción del conocimiento a la opinión de cada quien.
Relativización del concepto de verdad.
vi) Énfasis en el estudio de la realidad humana, concebida como
realidad inestable, compleja, misteriosa y problemática.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
21
Sócrates
Sócrates vivió en Atenas (469 aC - 399 aC). Era filósofo y una de las
principales figuras del mundo, la cultura y la civilización griega. Fue uno de
los fundadores de la filosofía occidental. Un indicativo de su importancia
para la filosofía griega antigua es que a todos los filósofos griegos antes
que él, se les denominan pre-socráticos.
Tenía un círculo de amigos fieles, especialmente los jóvenes de familias
aristocráticas, de toda Grecia. El más conocido fue Platón y Antístenes en
Atenas, Euclides en Megara, la Faidonas Ilia y Aristippos en Cirene.
Su vida
Era el hijo de un albañil llamado Sofronisco y de Fenareti su madre
quien era una partera. A los 17 años conoció al filósofo Arquelao, que le
trasmitió su pasión por la filosofía y lo convenció para dedicarse a ella. Se
casó en la vejez con Xantipa.
Evitó la participación en la política, aunque realizó 3 excepciones. Así,
participó en tres campañas durante la guerra del Peloponeso, el sitio de
Potidaia en Delion de Beocia, en el 422 aC en la batalla de Anfípolis salvó
la vida de Alcibíades y mostró una fuerza increíble en la miseria. En el 406
aC, en el juicio de los 10 generales atenienses, se negó a ceder a la
exigencia de llevar a votación en la Ecclesia una sentencia ilegal (ser
juzgado en grupos y no individualmente, como exige la ley) a los generales
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
22
que en ese momento fueron acusados, y en el 404 aC con la misma osadía
frente a los Treinta Tiranos, se negó a detener a un ciudadano
democrático.
Sócrates aparece ante todo no como un hombre que ofrece una nueva
doctrina cosmológica al modo de los pensadores de Jonia, de Heráclito o
de los pluralistas, o que se presta a debatir todas las materias, como los
sofistas, sino como un hombre que ataca dondequiera toda doctrina que no
tenga por objeto único examinar el bien y el mal.
La Dialéctica Socrática
Este filósofo a través del diálogo, trataba de llevar al interlocutor a
descubrir la verdad más profunda de las cosas, es decir, lo que sigue
siendo independiente de las circunstancias y condiciones. En este método,
Sócrates dejaba a su interlocutor expresar libremente sus puntos de vista
sobre el tema tratado, considerando inicialmente este punto de vista
integrado y conectado. Entonces, a través de un proceso de preguntas y
respuestas, mostraba luego de éstas, las consecuencias extremas de esos
puntos de vista, demostrando su inestabilidad. Posterior a esto, llevaba a
su interlocutor, hacia el descubrimiento de nuevos hallazgos y nuevos
enfoques a la verdad presentada.
En este mismo orden de ideas, una característica de la enseñanza
socrática era la combinación de las ideas con el uso del sarcasmo De
acuerdo con este método, Sócrates en sus deliberaciones, fingía completa
ignorancia sobre el tema abordado en un momento, tratando a través de
preguntas, obtener la verdad de su interlocutor. Esencialmente Sócrates lo
que quería, era resaltar el papel de la conciencia a través de este proceso
de preguntas y respuestas, creado una cultura del diálogo en la discusión.
Por medio de sus constantes interrogaciones Sócrates hacía surgir
dondequiera lo que antes parecía no existir: un problema. De hecho, toda
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
23
su obra se dirigió al descubrimiento de problemas más bien que a la busca
de soluciones. El problema hacía desvanecerse los falsos saberes, las
ignorancias encubiertas, las inauténticas satisfacciones. Más para
descubrir problemas se necesita hacer funcionar continuamente el
razonamiento. Sócrates aceptó esta necesidad; más aún, la convirtió en
una de sus máximas virtudes.
Por este motivo, la virtud y la razón no son para Sócrates
contradictorias. Todo lo contrario, uno de los rasgos más salientes de su
doctrina es la equiparación del saber y de la virtud.
Sin embargo, sus métodos generaron controversias entre los
cosmólogos y los sofistas de la época, porque se descubre, por boca del
oráculo de Delfos, que era el más sabio de todos los hombres; justamente
porque es el único que sabe que no sabe nada. Los cosmólogos y los
sofistas habían pretendido poseer muchos saberes; olvidaban, según
Sócrates, que el único saber fundamental es el que sigue el imperativo:
"Conócete a ti mismo."
Desde ese punto de vista es fácil establecer una clara línea divisoria
entre el subjetivismo sofístico y el subjetivismo socrático. Según los
sofistas, el sujeto humano es un espejo de la realidad; siendo ésta
multiforme, el espejo lo es del mismo modo. Según Sócrates, el sujeto
humano es el centro de toda inquisición; como ésta se reduce a una sola
ingente cuestión "conocer el bien", el sujeto tiene una sola realidad. Si se
sigue hablando de saber, habrá, pues, que entender éste en otro sentido;
con Sócrates cambia, en efecto, la dirección del pensamiento.
De lo anterior se desprende, la irritación causada por Sócrates en
muchos hombres de su tiempo porque veían en él, el destructor de ciertas
creencias tradicionales. Pero se debió sobre todo a que este filósofo
entraba en aquella zona donde los hombres más se resisten a la
intervención: en su propia vida.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
24
Y fue así como en 399 aC fue acusado por desacato a los dioses y por
corromper a la juventud. El filósofo fue condenado a la muerte. Durante el
juicio demostró coraje, y el anuncio de la sentencia no consiguió sacarlo de
su indiferencia divina. Tras ser condenado permaneció en la cárcel 30 días,
porque la ley prohibía la ejecución de la pena de muerte antes del regreso
de la nave sagrada de las fiestas de Delos.
Sócrates pudo ser salvado, si quería, ya que los estudiantes fueron
capaces de ayudarle a escapar, pero se negó y como un ciudadano
respetuoso de la ley y un verdadero filósofo, esperó a la muerte tranquilo,
sereno, y bebió la cicuta, según lo ordenado por la ley.
Platón
Ante la situación de Atenas y la muerte de Sócrates suponen el inicio de
la filosofía platónica. Por una parte, hacen que Platón viaje a Egipto y a las
colonias griegas del sur de Italia, donde, en contacto con los pitagóricos,
adquirió conciencia de la importancia de las matemáticas y se familiarizó
con la doctrina sobre la inmortalidad del alma y la reencarnación. Por otro
lado, su desengaño con la dictadura de los Treinta Tiranos y con la
democracia posterior le llevó a plantear un modelo de sociedad en el que
imperara la justicia.
Filósofo griego (Atenas, 427 - 347 aC.). Nacido en el seno de una familia
aristocrática, abandonó su vocación política por la Filosofía, atraído por
Sócrates. Siguió a éste durante veinte años y se enfrentó abiertamente a
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
25
los sofistas (Protágoras, Gorgias…). Tras la muerte de Sócrates (399 aC.),
se apartó completamente de la política; no obstante, los temas políticos
ocuparon siempre un lugar central en su pensamiento, y llegó a concebir
un modelo ideal de Estado. Viajó por Oriente y el sur de Italia, donde entró
en contacto con los discípulos de Pitágoras; luego pasó algún tiempo
prisionero de unos piratas, hasta que fue rescatado y pudo regresar a
Atenas.
Allí fundó una escuela de Filosofía en el 387, situada en las afueras de
la ciudad, junto al jardín dedicado al héroe Academo, de donde procede el
nombre de Academia. La Escuela, una especie de secta de sabios
organizada con sus reglamentos, residencia de estudiantes, biblioteca,
aulas y seminarios especializados, fue el precedente y modelo de las
modernas instituciones universitarias.
En ella se estudiaba y se investigaba sobre todo tipo de asuntos, dado
que la Filosofía englobaba la totalidad del saber, hasta que paulatinamente
fueron apareciendo -en la propia Academia- las disciplinas especializadas
que darían lugar a ramas diferenciadas del saber, como la Lógica, la Ética
o la Física.
A diferencia de Sócrates, que no dejó obra escrita, los trabajos de Platón
se han conservado casi completos y se le considera por ello el fundador de
la Filosofía académica (a pesar de que su obra es fundamentalmente un
desarrollo del pensamiento socrático). La mayor parte están escritos en
forma de Diálogos, como los de La República, Las Leyes, El Banquete,
Fedro o Fedón.
Platón responsabilizó a los sofistas de la decadencia ateniense: su
relativismo no acepta ninguna norma fija y reduce la moralidad a lo que
interesa en cada momento.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
26
Teoría de las ideas
En la teoría de las ideas se afirma la existencia independiente y absoluta
de unas entidades inmateriales, inmutables y universales que constituyen
la auténtica realidad. Si una persona es bella, es porque existe la idea de
belleza. La belleza de la persona, que captan los sentidos, puede cambiar,
pero la idea de belleza (como la de bien, justicia, etc.) es inteligible y no
varía.
Las ideas constituyen un mundo perfecto, eterno e inmutable, que se
encuentra jerarquizado. En su cúspide aparece la idea de bien, que es a la
vez causa y fin de las demás ideas; por eso, su conocimiento, que es
propio de la razón, permite apreciar el orden de las cosas. Esto solo está al
alcance de unos pocos (los filósofos).
El conocimiento: reminiscencia y dialéctica
No obstante, las ideas están en un mundo distinto del sensible, ¿cómo
le es posible al hombre su conocimiento? Aquí aparece la doctrina del
conocimiento como reminiscencia: el hombre es cuerpo y alma, y esta, que
es inmortal, pertenece al mundo de las ideas, a donde regresa cuando
muere el cuerpo. Mientras permanece en el mundo de las ideas, el alma
conoce todo cuanto existe. Pero al encarnarse en un cuerpo, olvida lo que
sabe. Sin embargo, el contacto con las realidades físicas del mundo sensi-
ble hace que recuerde y comience de nuevo su aprendizaje.
Este aprendizaje se gradúa en dos niveles: la opinión y la ciencia. La
opinión no es un conocimiento estricto, sino una forma de creencia más o
menos generalizada pero carente de fundamento. Tiene dos grados: la
conjetura aventurada o la convicción más o menos verosímil, aunque
ambas son propias del mundo sensible y están basadas en los sentidos;
por ello no son conocimiento seguro.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
27
También hay dos grados de ciencia: el conocimiento matemático, que
hace uso de lo sensible para alcanzar sus conclusiones, y la dialéctica,
conocimiento de las ideas dirigido por la razón, que representa la
culminación de este proceso y la verdad absoluta.
Pitágoras
Importante filósofo griego, matemático, geómetra y teórico de la música.
Es el fundador de la primera escuela griega de matemáticas, creó un
sistema robusto para la ciencia de los cuerpos celestes que encarna toda
la aritmética y pruebas geométricas. De la misma forma, fue el fundador
de un movimiento filosófico iniciático llamado pitagorismo. Influyó en la
filosofía y la enseñanza de la religión en el siglo 6 aC, Se refieren a
menudo a este filósofo como un brillante matemático y científico, y es
conocido por el teorema de Pitágoras, que lleva su nombre.
Nacido en una fecha que no se conoce, se presume que sería
aproximadamente en el año 570 aC. Murió en Metapontis entre el 500-490
aC.
Algunos historiadores dicen que Pitágoras se casó con una mujer
llamada Teano y tenía una hija llamada Damo, y un hijo llamado Telauges,
que sucedió a Pitágoras como profesor. Otros dicen que Teano era uno de
sus estudiantes, no su esposa, y que nunca se casó ni tuvo hijos.
Pitágoras fue bien educado, tocaba la lira, conoció la poesía y recitó en
muchas oportunidades a Homero. Él estaba interesado en las
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
28
matemáticas, la filosofía, la astronomía y la música, y fue muy influenciado
por Pherekydes (filosofía), Thales (matemáticas y astronomía) y
Anaximandro (filosofía, geometría).
Pitágoras abandonó Samos para dirigirse rumbo a Egipto en
aproximadamente 535 aC a estudiar con los sacerdotes en los templos.
Muchas de las prácticas de la sociedad que creó más tarde en Italia, se
pueden remontar a las creencias de los sacerdotes egipcios, como los
códigos de secreto, la búsqueda de la pureza, y la negativa a comer frijoles
o llevar pieles de animales como vestimenta.
Diez años más tarde, cuando Persia invadió Egipto, Pitágoras fue hecho
prisionero y enviado a Babilonia (en lo que hoy es Irak), donde conoció a
los Magoi, sacerdotes que le enseñaron los ritos sagrados. En 520 aC,
Pitágoras, fue de nuevo un hombre libre, dejó Babilonia y regresó a
Samos, y algún tiempo después comenzó una escuela llamada el
semicírculo. Sus métodos de enseñanza no eran populares entre los
líderes de Samos.
Más adelante, Pitágoras se instaló en Crotona, una colonia griega del
sur de Italia, cerca de 518 aC, y fundó una escuela filosófica y religiosa
donde vivían y trabajaban muchos de sus seguidores. Los pitagóricos
vivían de reglas de comportamiento, incluso cuando hablaban, lo que
llevaban y lo que comían. Pitágoras fue el Maestro de la sociedad, y los
seguidores, tanto hombres como mujeres, quienes también vivían allí, eran
conocidos como mathematikoi. No tenían posesiones personales y eran
vegetarianos.
Sin embargo, a otro grupo de seguidores que vivían fuera de la escuela
si se les permitía tener posesiones personales y no tenían que ser
necesariamente vegetarianos. Todos trabajaban comunalmente en los
descubrimientos y teorías.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
29
En otro orden de ideas, para Pitágoras: todas las cosas eran números.
Las matemáticas son la base de todo, y la geometría es la forma más alta
de los estudios matemáticos. El mundo físico puede entenderse a través
de las matemáticas.
El alma reside en el cerebro, y es inmortal. Se mueve de un ser a otro, a
veces de un ser humano en un animal, a través de una serie de
reencarnaciones llamadas transmigración, hasta que se vuelve puro.
También creía que las matemáticas y la música podían purificar, que los
números tienen personalidades, características, fortalezas y debilidades,
así como que ciertos símbolos tienen un significado místico. Así mismo
pensaba que el mundo depende de la interacción de los opuestos, como
varón y hembra, luz y oscuridad, caliente y frío, seco y húmedo, pesado y
ligero, rápido y lento.
Pitágoras también relaciona la música con las matemáticas, planteando
que las cuerdas vibrantes de la lira sonaban cuando las longitudes de las
cuerdas eran proporcionales a los números enteros, como 2:01, 03:02,
04:03. Y luego se dio cuenta de que este conocimiento podría ser aplicado
a otros instrumentos musicales.
Los informes de la muerte de Pitágoras son variados. Se dice que fue
asesinado por una turba enfurecida, que fue atrapado en una guerra entre
Agrigento y los siracusanos y asesinado por los siracusanos, o que fue
quemado en su escuela en Crotona.
.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
30
Aristóteles
Aristóteles (- 384 a - 322) nació en Estagira, en Tracia, el año 384-3
aC., según Diógenes Laercio, quien nos dice que era hijo de Nicómaco y
Efestiada, y que su padre ejercía la medicina en la corte del rey Amintas
(II) de Macedonia, "por causa de la medicina y por amistad", lo que se ha
tratado de asociar con el posterior interés naturalista de Aristóteles.
Diógenes Laercio nos describe a Aristóteles como "el discípulo más
legítimo de Platón, y de voz balbuciente... que tenía las piernas delgadas y
los ojos pequeños, que usaba vestidos preciosos y anillos, y que se
cortaba la barba y el pelo". (Vidas de filósofos ilustres, libro V, 1).
Aristóteles en la Academia
Poco se sabe de la educación recibida por Aristóteles en su juventud,
aunque debió ser la propia de los jóvenes griegos de su época. A los
diecisiete años, el 368 a. C., se trasladó a Atenas donde se incorporó a la
Academia de Platón en la que permanecería durante veinte años. A pesar
de algunas anécdotas que se hacen eco de un supuesto enfrentamiento
entre Platón y Aristóteles, antes de la muerte de aquél, es poco probable
que tal enfrentamiento haya podido producirse, dado que todas las
referencias que tenemos de Aristóteles hacia Platón hacen gala de un gran
respeto y admiración hacia el maestro, pese a las discrepancias teóricas
que luego llevaron a su separación doctrinal. El hecho de que la crítica
contemporánea haya puesto de manifiesto el carácter histórico, evolutivo,
de la obra aristotélica hace aún más insostenible dicha hipótesis. Sabemos
que Aristóteles atravesó por una fase profundamente platónica antes de
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
31
desarrollar sus propias concepciones filosóficas, asumiendo como propia,
por ejemplo, la teoría de las Ideas de Platón, antes de haber procedido a
su crítica, como claramente se pone de manifiesto en el diálogo aristotélico
"Eudemo", una de sus obras de juventud.
A la muerte de Platón, en el - 347, Espeusipo, sobrino de Platón, se
hizo cargo de la dirección de la Academia, bien por designación directa de
éste o bien por decisión de sus condiscípulos, imprimiendo una orientación
de carácter más especulativo y místico-religioso a las actividades de la
Academia, lo que no fue del agrado de Aristóteles quien la abandonó, (ya
fuera por esta razón, ya por sentirse frustrado al no haber sido designado
él mismo como director, como sostienen otros.
Aristóteles tras el abandono de la Academia
Aristóteles se dirigió entonces, en compañía de Jenócrates, a Assos,
donde reinaba el tirano Hermias, (con quien, al parecer, entabló profunda
amistad), fundando allí una sección de la Academia que él mismo dirigió
durante tres años. Fue allí probablemente donde comenzó a desarrollar
sus propias opiniones contrarias a la teoría de las Ideas. De esta época es,
en efecto, su obra "Sobre la filosofía", en la que aparecen los primeros
elementos críticos de la teoría de las Ideas. También allí contrajo
matrimonio con Pythia, hija adoptiva o sobrina de Hermias, con la que llevó
una vida feliz hasta la muerte de ésta. (Desconocemos cuando tuvo lugar
este acontecimiento, pero sabemos que Aristóteles tras la muerte de Pythia
vivió con Herpilis, con la que tuvo un hijo llamado Nicómaco.
Tres años después, en el 345-4, se trasladó a Mitilene, en la isla de
Lesbos, entrando allí probablemente en relación con Teofrasto, que sería
posteriormente el más destacado discípulo y continuador de la obra de
Aristóteles. Allí continuó con su actividad filosófica hasta que en el año
343-2 fue llamado por Filipo de Macedonia para hacerse cargo de la
educación de su hijo Alejandro, el futuro Alejandro Magno, que tenía
entonces trece años. Probablemente dicho encargo se debiera más a la
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
32
amistad y parentesco con Hermias, aliado de Filipo, y asesinado hacía
poco mediante una trampa tendida por los persas, que al pasado de su
familia en la corte de Macedonia. Allí permaneció siete u ocho años, hasta
el 336-5, cuando Alejandro subió al trono, regresando entonces Aristóteles
a Atenas.
Regreso a Atenas y creación del Liceo
Una vez en Atenas, en el 335, fundará su propia escuela, el Liceo, una
comunidad filosófica al estilo de la platónica , llamada así por estar situada
dentro de un recinto dedicado a Apolo Likeios. Además del propio
edificiocontaba con un jardín y un paseo (perípatos) del que los
aristotélicos recibirán el nombre de peripatéticos, ya sea porque Aristóteles
impartiera sus enseñanzas paseando, como recoge Diógenes Laercio ("...
tomó en el Liceo un sitio para pasear, y paseando allí hasta la hora de
ungirse los atletas, filosofaba con sus discípulos, y de este paseo fue
llamado peripatético"), o porque, simplemente, se impartieran dichas
enseñanzas en el paseo. (Excavaciones realizadas a mediados de los 90
en Atenas, cerca de la la Plaza Sintagma, dejaron al descubierto los
cimientos de varios edificios, como se puede observar en la imagen, que
los arqueólogos consideran pueden ser los restos del Liceo de Aristóteles).
Según la tradición el orden de las actividades en el Liceo estaba
fuertemente establecido, dedicándose las mañanas a las cuestiones más
difíciles de carácter filosófico, reservadas para los discípulos, y las tardes a
las lecciones de retórica y de dialéctica, entre las que se podía encontrar
un público más amplio.
Aristóteles abandonará Atenas y se retirará a Calcis, ("para que los
atenienses no vuelvan a pecar contra la filosofía", dicen que dijo, en clara
referencia a la condena de Sócrates), a una propiedad de su difunta
madre, en la isla de Eubea, de donde era originaria. Allí morirá Aristóteles,
el 322 a. C., de una enfermedad del estómago.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
33
Neoplatonismo
Neoplatonismo es la denominación historiográfica de diferentes
momentos de la historia de la filosofía en que se produjo una revitalización
del platonismo (Platón, Academia de Atenas).
El neoplatonismo es la última manifestación del platonismo en el mundo
antiguo. Sin embargo, dicha corriente no es sólo, como su nombre parece
indicar, una renovación de la filosofía de Platón, sino un sistema que,
además del pensamiento platónico, recoge con gran vigor especulativo las
restantes direcciones fundamentales de la filosofía antigua, así como ideas
religiosas y míticas incluso de Oriente.
Si bien algunos consideran a Ammonio Sakkas (175-242 d.C) como su
fundador, lo cierto es que el neoplatonismo tuvo en el mejor de sus
discípulos, Plotino (m. 270 a.C.), su verdadero fundador y figura más
representativa. Plotino resume y formula sistemáticamente las tendencias y
orientaciones que se habían manifestado en la filosofía griega y alejandrina
del último período. Elementos pitagóricos, aristotélicos y estoicos se
funden con el platonismo en una vasta síntesis de gran influencia en la
filosofía patrística y en todo el curso de la mística y del pensamiento
cristiano, y a través de él también en el pensamiento moderno.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
34
Concepción Filosófica
Según los neoplatónicos, el principio de todo lo existente es la unidad
absoluta, lo Uno, llamada realidad suprema o gran vacuidad, de la que
surgen todas las demás realidades por emanación. El primer ser emanado
del Uno es el Logos, llamado también Verbo, o Inteligencia, que contiene
las ideas de las cosas posibles. Después, la Inteligencia engendra el Alma
como idea, principio del movimiento y de la materia. El Uno, la Inteligencia
y el Alma son las tres hipóstasis de la Trinidad neoplatónica.
La doctrina central de Plotino es su teoría de la existencia de tres
hipóstasis o realidades primordiales: el Uno, el nous y el alma. En realidad,
el principio básico es siempre el Uno, mientras que las otras dos hipóstasis
y el resto de realidades son derivadas.
El Uno de la teoría de Plotino es indescriptible, ya que es la unidad, lo
más grande, hasta tal punto que a veces le denomina el propio autor como
Dios, único, infinito. Plotino antes de querer corregir, prefiere guardar
silencio que decir algo. Una actitud claramente mística. Como principio y
última realidad, esta absoluta trascendencia hace que no existan términos
para referirla. Se trata entonces de la Unidad que funda la existencia de
todas las cosas. Es ése el centro de toda su doctrina. El Uno está más allá
del Ser y, por lo tanto, no hay ninguna definición que describa
positivamente al Uno y opta por la vía negativa. Elude su comprensión
porque la considera imposible según la modalidad humana de conocer.
La siguiente realidad o hipóstasis es el nous. No hay una traducción
adecuada pero algunos autores lo identifican con espíritu, mientras que
otros prefieren hablar de Inteligencia, mas esta vez no con un sentido
místico sino intelectual. La explicación del "nous" por Plotino parte de la
semejanza entre el Sol y la Luz. El Uno sería como el Sol y la Luz como el
nous. La función del nous como luz es la de que el Uno pueda verse a sí
mismo, pero como es imagen del Uno, es la puerta por la que nosotros
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
35
podemos ver al Uno. Plotino afirma que el nous es observable simplemente
aplicando nuestras mentes en dirección opuesta a nuestros sentidos.
Este concepto está tomado de la noción de dialéctica de La República
donde un proceso similar se dice que conduce a la visión de la forma del
Bien, no del Bien mismo.
El "nous" se puede, y muy probablemente se debe, entender como "la
inteligencia pura". El "nous" procede de "lo uno" no a voluntad porque "lo
uno" es tan "más que perfecto" que no puede tener voluntad, está mucho
más allá; y todo lo que procede de "lo uno" es un especie de "escurrirse",
de "desparramarse", en el acto de hacerse a sí mismo que es "lo uno"; por
tanto la analogía del sol y la luz deben entenderse como una mera imagen
para dar una idea de cómo "emana la luz" del sol; resulta más ilustrativo
pensar "el despliegue de un círculo a partir de su centro".
La tercera realidad o hipóstasis es el alma la cual es de naturaleza
doble. En un extremo está ligada al nous y tira de él. En el otro extremo se
asocia con el mundo de los sentidos, del cual es creadora (o, mejor,
plasmadora). Por tanto Plotino considera a la Naturaleza como el resultado
de una procesión que va "hacia abajo" desde el alma.
Para adquirir la Gnosis (conocimiento) el ser engendrado se esfuerza en
ascender hacia la perfección de que emana. Todo viene del Bien y tiende
hacia el Bien. Para que el Alma se una al primer principio es preciso que
supere el pensamiento y que, por el éxtasis, se confunda con Dios y pierda
toda consciencia de sí misma. Plotino estaba convencido de haber llegado,
dos o tres veces en su vida, a esta unión íntima con la más alta hipóstasis.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
36
Estoicismo
Dentro del período helenístico, el estoicismo es un movimiento filosófico
fundado por Zenón de Citioen hacia el 301 a. C. La palabra estoico
proviene de la voz griega stoa que quiere decir pórtico.
Los estoicos proclamaron que se puede alcanzar la libertad y la
tranquilidad tan sólo siendo ajeno a las comodidades materiales, la fortuna
externa, y dedicándose a una vida guiada por los principios de la razón y la
virtud. El fin supremo de la sabiduría es la virtud, la cual consiste en
cumplir el orden universal impuesto fatalmente por la naturaleza.
(Diccionario Enciclopédico Espasa Calpe, Editorial Santiago, España,
1997). Asumiendo una concepción materialista de la naturaleza, siguieron
a Heráclito en la creencia de que la sustancia primera se halla en el fuego
y en la veneración del logos, que identificaban con la energía, la ley, la
razón y la providencia encontradas en la naturaleza.
La razón de los hombres se consideraba también parte integrante del
logos divino e inmortal. La doctrina estoica que consideraba esencial cada
persona como miembro de una familia universal ayudó a romper barreras
regionales, sociales y raciales, y preparar el camino para la propagación de
una religión universal. La doctrina estoica de la ley natural, que convierte la
naturaleza humana en norma para evaluar las leyes e instituciones
sociales, tuvo mucha influencia en Roma y en las legislaciones posteriores
de Occidente. Además tuvo importancia en corrientes y filósofos
posteriores como Descartes y Kant.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
37
En el campo de la lógica desarrollaron la lógica inductiva. Dividieron la
lógica en Retórica (ciencia del recto decir) y Dialéctica. En el campo de la
física retornaron a la filosofía de Heráclito: todo está sometido al cambio, al
movimiento. La física, según el estoicismo, es el estudio de la naturaleza
tanto del mundo físico en su totalidad como de cada uno de los seres que
lo componen, incluidos los seres divinos, humanos y animales.
Epicureísmo
El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una
vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y
dolores, la ataraxia ("ausencia de turbación") y los vínculos de amistad
entre sus correligionarios.
Para los epicureistas los besos con amor eran la base de todo, ya que
para ellos el amor era lo que le daba alegría a las personas. Fue enseñada
por Epicuro de Samos, filósofo ateniense del siglo IV a. C. que fundó una
academia llamada el Jardín y cuyo pensamiento fue seguido después por
otros filósofos, llamados epicúreos.
Epicuro proponía la realización de la vida buena y feliz, la ataraxia y las
relaciones amistosas entre sus correligionarios. Consideraba el placer
como objetivo de la vida y la única felicidad. (Diccionario Enciclopédico
Espasa Calpe, Editorial Santiago, España, 1997). Este placer no debía
limitarse sólo al cuerpo, como preconizaba el hedonismo cirenaico, sino
que debía ser también intelectual, ya que el hombre es un todo. Además,
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
38
para Epicuro la presencia del placer o felicidad era un sinónimo de la
ausencia de dolor, o de cualquier tipo de aflicción: el hambre, la tensión
sexual, el aburrimiento, entre otros. Era un equilibrio perfecto entre la
mente y el cuerpo que proporcionaba la serenidad o ataraxia.
Esta escuela de pensamiento perduró largamente aun siete siglos tras la
muerte de Epicuro; pero después fue casi relegada al olvido al advenir la
Edad Media, periodo en el que se perdió o fue destruida la mayoría de los
escritos de este filósofo griego a causa del rechazo que por sus ideas
experimentó el Cristianismo, que no pudo adaptarlas a su sistema de
creencias por la visión cristiana del dolor.
Escepticismo
Doctrina que niega la posibilidad del conocimiento. Originariamente,
actitud espiritual que después de haber examinado las cosas, no encuentra
motivos suficientes para reconocer la verdad, se abstiene de todo juicio y
busca la felicidad en la ataraxia.
El escéptico es alguien que profesa duda o está en desacuerdo con lo
que generalmente está aceptado como verdad. La palabra "Escéptico"
viene del griego skeptikoi (de skeptesthai que en griego significa
examinar), el nombre dado a los seguidores del filósofo griego Pirrón. La
etimología de esta palabra indica en su significado: "quien duda e
investiga". Los filósofos escépticos no creen en una verdad objetiva,
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
39
porque todo es subjetivo, dependiendo del sujeto que estudia y no del
objeto estudiado.
Una persona escéptica diría siento frío pero no hace frío, ya que sólo
puede saber que el/ella tiene frío o calor. A esta postura de no emitir juicios
sino exclusivamente opiniones, se la llamó suspensión de juicio.
En filosofía, esta actitud los lleva a la paz del alma porque, al no creer
en nada, no entraban en conflictos con nadie y no se veían obligados a
defender sus opiniones ya que no existían verdades objetivas.
Pirrón fue el creador del escepticismo. Un gran viajero que conoció
muchas culturas con los ejércitos de Alejandro Magno, cosa que le permitió
dudar de las verdades evidentes y tradiciones de su cultura. Se dice que
Pirrón llevó al extremo la suspensión de juicio, hasta el punto de sacarse
las cuerdas vocales.
Otro importante escéptico fue Sexto Empírico, autor de Esbozos
Pirrónicos. En esta obra sostiene que en la vida práctica hay que seguir:
Las señales que aporta la naturaleza
Las necesidades del cuerpo
Las tradiciones y las leyes
Timón el Silógrafo continuó la tradición escéptica poniendo en duda las
ideas aristotélicas, dudando incluso de los primeros principios de la
deducción aristotélica.
Sin embargo, el sistema socrático de hipótesis y deducciones nunca fue
puesto en duda por los escépticos, aunque se ganaron fama de
desbaratadores y perdieron popularidad al luchar contra los ritos, leyendas
y supersticiones arraigadas.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
40
Durante el siglo I a. C. el escepticismo volvió a cobrar importancia
paulatinamente hasta Luciano de Samosata y Sexto Empírico, que
representan a los últimos escépticos clásicos.
La Filosofía Medieval comprende desde el siglo V al XV, la filosofía
atravesó las etapas:
La Patrística: Expositor más destacado San Agustín
La patrística es la fase en la historia de la organización y la teología
cristiana que abarca desde el fin del cristianismo primitivo, con la
consolidación del canon neotestamentario, hasta alrededor del siglo VIII.
La patrística se ocupó sobre todo de la defensa del cristianismo frente a las
religiones paganas y las sucesivas interpretaciones heterodoxas que
darían lugar a las herejías.
Su nombre deriva de los padres de la Iglesia, los teólogos cuya
interpretación dominaría la historia del dogma. Para ser considerado padre
de la iglesia era necesario reunir las siguientes condiciones:
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
41
Antigüedad
Santidad de la Vida
Doctrina Ortodoxa
Aprobación Eclesiástica
En este período se distingue: la Patrística oriental dedicada al estudio de
la existencia y atributos de Dios, y la Patrística occidental en la que
aparece la primera filosofía cristiana, gracias a la obra de San Agustín.
San Agustín perteneció en primer lugar a la secta maniquea formada
dentro del movimiento gnóstico, más tarde profesó su escepticismo
académico que abandonó para convertirse al cristianismo en el 386,
gracias al influjo personal de San Ambrosio y al conocimiento de la filosofía
neoplatónica.
En el año 391 fue ordenado presbítero y posteriormente elegido obispo
de Hipona. San Agustín fundó un convento e instituyó una orden religiosa.
Se dedicó principalmente a luchar en defensa de la fe, sin embargo no
descuidó su formación intelectual que le llevó a sobresalir como metafísico,
historiador, teólogo, músico y moralista.
De las numerosas obras que escribió cabe destacar La ciudad de Dios,
Retractaciones, Soliloquios, Confesiones, Contra los académicos, La
Trinidad.
San Agustín ha ejercido una influencia decisiva hasta nuestros días. Las
teorías fundamentales de la Edad Media se apoyan en él. En la Edad
Moderna, autores como Lutero, Descartes, Malebranche y Pascal retoman
alguna de sus doctrinas.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
42
Punto de partida de su filosofía
El fin de la filosofía de San Agustín apunta a la consecución de la
felicidad. El único camino para obtener la felicidad es ascender
progresivamente hasta el Ser supremo partiendo de la interioridad del
hombre.
De esta forma los objetos de su filosofía van a ser el alma del hombre y
Dios. Puede concluirse que la filosofía de San Agustín está subordinada a
la religión: la filosofía y la razón necesitan de la religión y la fe. Luego la
razón y la fe van unidas y se complementan: la fe es el elemento que
consolida y enriquece la actividad de la razón.
Su filosofía ha sido llamada metafísica de la experiencia interior puesto
que la estudia desde el interior del hombre.
Naturaleza del hombre: el alma
San Agustín, al igual que Platón, considera que el hombre está formado
de cuerpo y alma que se han unido accidentalmente. El alma, que es el
principio vital del hombre, está destinada a regir al cuerpo. De esta manera
se mantiene la superioridad del alma con respecto al cuerpo.
San Agustín, al plantearse la cuestión del origen del alma , al principio
sostiene la doctrina generacionista (el alma es engendrada por el alma de
los padres, al igual que el cuerpo), posteriormente, sin embargo, se
inclinaría por el creacionismo (el alma es individualmente creada por Dios
para cada cuerpo).
El conocimiento: la verdad
A San Agustín le preocupa el tema del conocimiento, concretamente la
búsqueda de la verdad y su justificación. Parte del hecho de que existe la
verdad y hay posibilidad de encontrarla. De esta forma llega a una serie de
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
43
verdades de evidencia inmediata. Una de estas verdades es la verdad de
la propia existencia que se revela en la actitud pensante y puede resumirse
de esta forma: si dudo, si sueño, si me engaño, además de ser verdad mi
duda, mi sueño y mi engaño, es también verdad que existo; si no existiera
no podría dudar, ni soñar, ni engañarme.
Otras de las verdades claras y evidentes pertenecen a la Lógica y a la
Matemática, a la conciencia y a los principios morales.
Existen otras verdades mediatas, que necesitan demostración y a las
que se llega por medio del razonamiento.
Ahora la verdad que busca San Agustín es una verdad total y única,
eterna e inmutable, por la que son verdaderas las cosas que lo son. Esta
verdad es Dios, como ser, como luz y como bien. Dios es la guía de la
conducta del hombre y objetivo de sus aspiraciones.
Dios
San Agustín afirma que el fin último del hombre es Dios. Con Dios, se
alcanza la felicidad. Bajo este supuesto, San Agustín se propone
demostrar racionalmente la existencia de Dios y determinar su esencia.
Existencia Existen dos vías para demostrar la existencia de Dios:
Observación de la contingencia y mutabilidad del mundo. El mundo, los
seres nacen y mueren, por lo tanto son contingente, es decir, no pueden
existir por sí mismos. Necesitan de un ser supremo que les haga ser
contingentes y este ser es Dios.
Prueba de la verdad. Existen en el entendimiento ciertas verdades que
por ser eternas y necesarias están sobre el hombre y sobre su razón.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
44
Estas verdades sólo pueden proceder de Dios que es la Verdad eterna.
Luego queda demostrada la existencia de Dios.
Esencia
El conocimiento de la esencia de Dios se adquiere a través del estudio
de las propiedades del mundo, que es obra creada por él.
San Agustín se inclina por la teología negativa: a Dios se le conoce
mejor negando de el las propiedades de los seres creados que afirmando
algo positivo.
De esta manera, frente a la realidad contingente, mutable, finita,
imperfecta del mundo creado, Dios se erige como Ser supremo, inmutable,
infinito y perfecto.
Creación del mundo
Dios ha creado el mundo por medio del Verbo divino, segunda persona
de la Santa Trinidad. Lo creó libremente de la nada, sin materia
preexistente y conforme a las ideas eternas que existían en su mente
(ejemplarismo), de esta forma el mundo es un reflejo de las ideas divinas.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
45
La Escolástica: Representado por Santo Tomás de Aquino
La escolástica es el movimiento teológico y filosófico que intentó
utilizar la filosofía grecolatina clásica para comprender la revelación
religiosa del cristianismo.
La escolástica fue la corriente teológico-filosófica dominante del
pensamiento medieval, tras la patrística de la Antigüedad tardía, y se basó
en la coordinación entre fe y razón, que en cualquier caso siempre suponía
una clara subordinación de la razón a la fe (la filosofía es sierva de la
teología). Se basaba mucho en las enseñanzas de los libros de Aristóteles.
(Diccionario Enciclopédico Espasa Calpe, Editorial Santiago, España,
1997)
Dominó en las escuelas catedralicias y en los estudios generales
que dieron lugar a las universidades medievales europeas, en especial
entre mediados del siglo XI y mediados del XV.
Su formación fue, sin embargo, heterogénea, ya que acogió en su
seno corrientes filosóficas no sólo grecolatinas, sino también árabes y
judaicas. Esto causó en este movimiento una fundamental preocupación
por consolidar y crear grandes sistemas sin contradicción interna que
asimilasen toda la tradición filosófica antigua. Por otra parte, se ha
señalado en la escolástica una excesiva dependencia del argumento de
autoridad y el abandono de las ciencias y el empirismo.
Pero la Escolástica también es un método de trabajo intelectual:
todo pensamiento debía someterse al principio de autoridad, y la
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
46
enseñanza se podía limitar en principio a la repetición de los textos
antiguos, y sobre todo de la Biblia, (principal fuente de conocimiento), a
pesar de todo ello, la escolástica incentivó la especulación y el
razonamiento, pues suponía someterse a un rígido armazón lógico y una
estructura esquemática del discurso que debía exponerse a refutaciones y
preparar defensas.
Ideológicamente la escolástica evolucionó en tres fases, a partir de
la inicial identificación entre razón y fe, ya que para los religiosos el mismo
Dios es la fuente de ambos tipos de conocimiento y la verdad es uno de
sus principales atributos, de forma que Dios no podía contradecirse en
estos dos caminos a la verdad y, en última instancia, si había algún
conflicto, la fe debía prevalecer siempre sobre la razón, así como la
teología sobre la filosofía.
Sin duda, el máximo representante de la teología dominica y en
general de la escolástica es Santo Tomás de Aquino (1225-1274). En su
magna obra Summa Teologica aceptó el empirismo aristotélico y su teoría
hilemórfica y la distinción entre dos clases de intelectos. De la filosofía
árabe, Avicena tomó la distinción (ajena a los griegos) entre ser de esencia
y el ser. Dios se hace comprensible únicamente a través de una doble
analogía.
Elaboró así una fusión platónico-aristotélica, el tomismo, que con
sus argumentos cosmológicos para demostrar la existencia de Dios: las
cinco vías ha sido la base fundamental de la filosofía cristiana durante
muchos siglos. La demarcación entre filosofía y creencia religiosa llevada a
cabo por Tomás de Aquino iniciará el proceso de independencia de la
razón a partir del siglo siguiente y representará el fin de la filosofía
medieval y el comienzo de la filosofía moderna.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
47
La lucha entre el realismo y el nominalismo.
Una de las polémicas filosóficas más importantes de todos los
tiempos, la encontramos en la época medieval. Platón y Aristóteles habían
aceptado la existencia de universales, es decir, aquello que hace que un
ser sea lo que es, siendo compartido por todos aquellos seres que
ontológicamente son lo mismo. Todas las manzanas tienen el universal de
manzana, que es lo que les permite ser una manzana. Esta idea fue
aceptada hasta llegar al final del Medievo.
La polémica de los universales A finales de la Edad Media aparece una polémica que girará en
torno a la existencia o no de los universales. Algunos autores consideran
que los universales tienen una existencia separada en el mundo inteligible
(Realismo platónico), otros considerarán que los universales existen, pero
no en una realidad separada (Realismo Moderado), mientras que otros
considerarán que los universales no existen (nominalismo), siendo
Guillermo de Ockham uno de sus máximos representantes.
Realismo Platónico
Platón considera que los universales existen, y lo hacen en una
realidad inmaterial que es más real que la realidad material, es decir,
considera que el Mundo de las Ideas es la auténtica realidad, mientras que
el Mundo Sensible es una copia de la realidad de las Ideas. De ahí que
jerárquicamente el alma sea superior al cuerpo, y el universal a su copia
material.
Realismo Moderado Aristóteles considera, por el contrario que los universales existen,
pero no lo hacen formando parte de una realidad separada sino que la
materia y la forma (universal) son inseparables formando una unidad
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
48
denominada sustancia. En cierta medida los elementos que Aristóteles
propone para el ser son los mismo de los que hablaba Platón, pero
mientras Platón separaba en dos realidades estos principios (materia y
universal), Aristóteles los une bajo el concepto de Sustancia
La cuestión más importante que tenemos que tener en cuenta en
relación con la filosofía griega, es aprender, cuál fue la naturaleza y el
alcance del efecto de oposición en el espíritu griego de lo que algunos
llaman la sabiduría oriental y occidental.
Esto es debido, a que toda ciencia se ha basado en una filosofía
específica, al principio los más trascendentales aportes obtenidos en el
desarrollo científico vinieron de la antigua Grecia. Dividida entre la capital
cultural Atenas y la capital de la guerra Esparta, los griegos fueron capaces
de desarrollar sus habilidades científicas, incluyendo el desarrollo de la
filosofía, palabra que viene del griego y que quiere decir búsqueda de la
verdad. Pero ¿Cuál es esa verdad?, hasta el día de hoy no parece existir
un acuerdo definitivo, pero ya podemos observar que dentro de la misma
cultura griega, lo que para unos era verdad para otros no lo era.
La influencia de los griegos se traspasó a la cultura occidental en las
formas de educación, por ejemplo: (el método socrático) y en las formas de
gobierno (democracia). En la edad media a través de la antigua Roma, en
aquel entonces Constantinopla los cristianos pudieron ejercer una
influencia definitiva en Europa Central, a través de filosofías que
rechazaban los placeres sensoriales y se concentraban en una vida de
contemplación y meditación, que buscaban una vida frugal y alejada de
vicios que afectaban la moral y ética religiosa muy estricta que existía en
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
49
aquel entonces. La edad media o época del oscurantismo también por la
fuerte influencia de la iglesia que era contraria al desarrollo de las ciencias
significó un estancamiento a nivel de desarrollo científico, debido a que
también muchos científicos de aquella época fueron considerados como
herejes y brujos, llegando inclusive algunos de ellos a ser condenados a
morir en la hoguera.
Pero aquí hay que destacar dos cosas. En primer lugar, la palabra
"filosofía" llegó, para revestir una teología de un tipo más o menos secreto,
e incluso para aplicarse a diversas formas de ascetismo. En segundo lugar,
la necesidad y la búsqueda del hombre para conocer y explicar el mundo,
por el impulso de buscar y encontrar la solución al problema cosmológico,
hace que se evidencie que el objetivo de los científicos sea investigar la
realidad, tratando de probar lo que existe en esa realidad.
Todo lo contrario a los filósofos, que tratan de mostrarnos lo que podría
ser el caso en la realidad. El interés de los filósofos no está enfocado para
mostrar si algo se ha establecido como ciertamente real y válido, les basta
con que se pueda pensar y argumentar lógicamente. Sin embargo, filosofar
no sólo es un requisito previo para un tratamiento adecuado de los
problemas humanos, es un elemento intelectual y primario de autenticidad.
Debido a esto, el hombre sale de la parte dolorosa de la
convencionalidad y la libera de las verdades trilladas, ya que las ciencias
particulares, no están interesadas ni son capaces, de ofrecer al hombre
una visión general del mundo y de la vida, así como no pueden sacarlo del
espíritu del unilateralismo. Sólo le pueden ofrecer una satisfacción teórica.
Filo
sofía
de
las C
ienc
ias:
La
antig
ua G
reci
a y
la E
dad
Med
ia
50
Adorno, T. (1976): On the Logic of Social Sciences, en Adorno et Al.: The Positivist Dispute in German Sociology. New York. Editorial Harper & Row
Anastasiadis, B. (1985) Las causas de la condena de Sócrates. Philosophical Review. pp. 308-314. Disponible: https://www.dukeupress.edu/Catalog/ViewProduct.php?productid=45625
Brown, H. (1994): La Nueva Filosofía de la Ciencia. Madrid. Editorial Tecnos.
Bueno. G. (1974), La metafísica presocrática. Oviedo. Editorial Pentalfa. Burnet, J.(1944) La aurora de la filosofía griega. México. Editorial Argos Cornford, F. (1984), De la religión a la filosofía. España. Editorial Ariel Ferrater-Mora, J. (1994): Diccionario de Filosofía. Tomo IV. España.
Editorial Ariel Gilson, E. (2004) La filosofía en la Edad Media: desde los orígenes
patrísticos hasta el fin del siglo XIV. Madrid. Editorial Gredos Gilson, E. (2007) El espíritu de la filosofía medieval. Madrid. Editorial Rialp Hadjistefanou, C. (1980) La práctica socrática de la virtud en el Protágoras
de Platón. pp.. 67-76. Londres. Editorial: London, K. Paul, Trench & co. Heinzmann. H. (1995) La filosofía en la Edad Media. Barcelona. Editorial
Herder, S.A. Larroyo, F. (1976): Historia General de la Pedagogía. México. Editorial
Porrúa. León. D. (1958) La Filosofía de la Historia en la Antigüedad y en la Edad
Media. Buenos Aires. Editorial Galatea-Nueva Visión Morin, E. (1994): La Noción de Sujeto, en Schnitman, D.: Nuevos
Paradigmas, Cultura y Subjetividad. Buenos Aires. Editorial Paidós Papanoutsos, E. (1943) Sofistas y Sócrates. El problema moral en la
antigua filosofía griega. Clark pp 585-589 Londres. Editorial Edinburgh: T. & T.
Vernant, J. (1985), Mito y pensamiento en la Grecia antigua. Barcelona. Editorial Ariel