Diego Salgado MuñozFilosofía de la Historia I

Trabajo final.

Hegel y Colingwood: historiografía e idea de

la historia.

Introducción

R. G. Collingwood fue un historiador inglés nacido en Lancashire en 1889 y G. F.

Hegel fue un filósofo alemán nacido en Stuttgart, Wurtemberg en el año de 1770,

con una diferencia de un siglo, se puede llegar a pensar que se cae en un error al

vincular a dos pensadores tan lejanos entre sí, pero no en el caso de Hegel y de

Collingwood, ya que representan dos momentos muy significativos del desarrollo

de la disciplina histórica, Hegel es la punta de lanza que sintetiza el pensamiento

romántico de su época, el cual buscaba dotar de un orden a la caótica realizada

que se tenía al frente y Collingwood es uno de los exponentes más significativos

del llamado historicismo vitalista del siglo XX, corriente de pensamiento histórico

que, es entre otras muchas cosas, una progresión y un desarrollo de las ideas

heredadas del siglo XIX.

Cada pensador, con su muy peculiar y rica forma de analizar la realidad busca, al

final de cuentas, generar un discurso histórico con miras a explicar la complejidad

de un cuerpo de conocimiento que para su época resultaba más que problemático,

el mismo Collingwood nos advierte en su idea de la historia, apuntes publicados

póstumamente, el proceso que se gesta desde el siglo XVIII donde la historia se

comienza a desarrollar de manera autónoma de los otros grandes cuerpos de

conocimiento, como la matemática o la ciencia experimental. La tendencia

constructiva se prolongará hasta nuestros días, la disciplina histórica estará

generando diferentes paradigmas y alimentando corrientes de pensamiento, Hegel

representa la fase de formación de modelos cerrados de explicación del tiempo en

su totalidad y Collingwood, la búsqueda de cientificidad y de originalidad del

conocimiento del pasado, así como la descripción teórica del oficio del historiador.

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Trabajo final.Aunque la tendencia es evidentemente descentralizadora para las filosofías de la

historia especulativas, aún quedan implícitas y son un punto de apoyo para la

articulación de los fundamentos de la construcción de la historia, que a pesar de

que no se busca ya un espíritu teológico en los fenómenos, si existen en los

pensadores constantes que determinan ciertas formas de la conciencia histórica,

lo cual describe un proceso de entramado de la idea de la historia a partir del

principio de la interacción del hombre con el pasado.

El presente trabajo busca mostrar la continuidad del pensamiento hegeliano en el

pensamiento de Collingwood a partir de fundamentos explicativos comunes que

son permitidos en tanto que desde su gestación describen un proceso de

interacción con el pasado que parece estar sujeto a fenómenos disciplinalmente

aun hasta el siglo XX y que a su vez se desarrollan para darles una mayor

complejidad en su afán de explicar el proceso de interacción del ser humano con

su pasado.

El pensamiento histórico: De proceso teológico a

científico

La especulación sobre el cómo se hace historia no siempre ha estado presente

durante todo el tiempo en que la disciplina histórica se ha desarrollado bajo el

cobijo de la civilización occidental. Como caso particular, pionero y paradigmático

tenemos las reflexiones aportadas por el filósofo alemán del siglo XIX Hegel, el

cual desarrolla toda una teoría general de la historia a partir de la realización de un

espíritu universal en el hombre. Proporciona en su libro, La razón en la historia un

breve estudio del cómo se ha pensado la el pasado hasta sus días ofreciendo

una reflexión de lo más rica y de la cual obtenemos un esquema sobre el

pensamiento historiográfico, asumimos que este permeó en posteriores

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Trabajo final.reflexiones sobre la apropiación del hombre de su pasado, una de ellas sería el

trabajo del historiador inglés R. G. Collingwood.

El esquema de desarrollo sobre la construcción de discursos sobre el pasado

planteado por Hegel en el antes mencionado texto, es solo la base de un sistema

mucho mayor que se realiza sobre la filosofía de la historia como la forma más

acabada de representación del pasado y el tiempo en general1. Las formas

historiográficas otorgadas en el sistema anterior a la filosofía de la historia no

resultan ser de vital importancia, pero para nosotros su riqueza es mucho mayor

de lo que parece a simple vista, se expresa en el desarrollo de tales postulados

una sensibilidad especial para poder develar características del constructo

historiográfico humano, para señalar las particularidades de los discursos y

cuando y como se estaban escribiendo.

De la reflexión de Hegel obtenemos categorías con las siguientes características,

son instrumentales, responden a las necesidades de cada época y a su vez a

formas muy particulares de acercamiento a los vestigios del pasado. En su

respectivo orden, los tipos de formas para tratar la historia son las siguientes:

- Historia Original

- Historia Reflexiva

- Historia Filosófica2

En este estudio se prioriza el desarrollo de los conceptos de historia original e

historia reflexiva, innovadores por su acertada visión de la experiencia

historiográfica y por su significado en la construcción de una filosofía de la historia

posterior, la cual ya no se desarrolla en la esfera de lo teológico. Estas formas de

tratamiento de la historia serán parte central de un pensamiento filosófico sobre la

1 2) Hegel, G. W. F., La razón en las historia, trad. César Armando Gómez, introd. Antonio Truyol, Madrid, Seminarios y Ediciones, 338 p., p. 192 Id.

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Trabajo final.historia, cimentado en los procesos de aprensión del pasado y su constitución

como el corpus de un saber científico.

Collingwood, en su idea de la historia, desarrolla un trabajo que es conducido por

un camino similar a los postulados estructurales de Hegel sobre el pensamiento

histórico, describe un proceso de pensamiento basado en como la historia se

construía a partir de las bases del pensamiento predominante en una época

determinada, ósea como se constituía como un saber valido para su tiempo y

como desde este proceso3, a partir del siglo XVIII, toma cuerpo como un saber

específico con normas completamente diferentes a las del conocimiento científico

de su época. El criterio para ordenar la reflexión sobre el desarrollo del

pensamiento histórico es retomado por Collingwood y a su vez es ampliado para

integrar al proceso de formación la historiografía al mismo Hegel y los trabajos

desarrollados en su tiempo marcados por la tarea de la generación de modelos

explicativos de la totalidad de la historia, como respuesta, según Collingwood a

una necesidad intelectual por superar el conocimiento histórico de su época4.

La historia para ambos se desarrolla dentro como un fenómeno del pensamiento

humano, para Hegel incompleto, pos su falta de proyección del espíritu universal,

para Collingwood, significativo y constructivo a pesar de que se tuvo que esperar

hasta el dichoso siglo XIX para ver en su esplendor como se ensanchaba el

camino de la historia Científica5.

En Collingwood la producción histórica se divide en dos categorías generales

basadas en el tratamiento de las fuentes y de la construcción del discurso

histórico. La historia de tijeras y engrudo6 y la historia científica (crítica, muy

similar a algunos procesos de la historia reflexiva que describe Hegel). La historia

3 Collingwood, Robín, George, Idea de la historia edición revisada, introd. de Jan Van Der Dussen, México, Fondo de Cultura Económica, 2011, 610 p., p. 62. 4 Ibíd., p. 348.5 Ibíd., p. 350.6 Ibíd., p. 340.

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Trabajo final.de papel y engrudo es toda producción historiográfica que no se haya preocupado

por generar un discurso propio de los vestigios de donde se está tomando la

información para generar un trabajo investigativo, se trata entonces de tomar

pedazos de autoridades y colocarlas tal y como están de tal suerte que articulen

un discurso pre configurado como un todo coherente al cual solamente se le

añade información acorde con el entramado del discurso general, sin alterar,

cuestionar o tomar en cuenta información que en su trasfondo puede decir más de

lo que otra fuente puede decir con toda su obviedad.

La historia Científica trata de generar discursos a partir de un análisis de pruebas

históricas obtenidas desde preguntas que dan forma a un discurso, que tiene por

finalidad dar cuenta del pasado, a partir de una idea muy clara de certidumbre

generada por la interrogación hacia los fragmentos, de manera crítica, más allá de

verdadero o falso, su veracidad surge de cómo se cuestiona7. Esta historiografía

es reaccionaria a la anterior ya que como se dijo anteriormente se produce a partir

de una necesidad intelectual.

Lo interesante de estas dos formas muy particulares de observar el desarrollo del

pensamiento está en su base epistemológica. La pregunta clave es ¿Cómo

conocemos la historia?, la respuesta fue respondida, en ambos casos, a partir de

observar en la historia, una necesidad pragmática y en ambos casos esta se ve

reducida por una forma mucho más efectiva para cubrir nuevas exigencias que

corresponden con el conocimiento del pasado. Estas formas de resolver

problemas se observan en los autores de la siguiente forma: a partir del

pensamiento teológico hegeliano con su filosofía de la historia encaminada a

entender el sentido del espíritu universal8 y la historia filosófica científica de

Collingwood, la cual pretende dotar al hombre de una certidumbre de sí mismo en

el pasado a partir del contacto con el pasado como forma de confrontar dos

7 Ibid., p. 367.8 Hegel, op cit, p. 31.

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Trabajo final.realidades quedan como resultado una aproximación indirecta y anacrónica con

los vestigios del pasado.

La historia como Representación.

Siguiendo con la observación de los postulados encontrados en las lecciones

sobre la filosofía de la historia encontramos un concepto curioso, el cual implica

una forma totalmente diferente de comprensión de la realidad histórica, me refiero

a la representación, en especial a representación entendida como la única forma

de generar conocimiento sobre el pasado a través de la historiografía, esto

significa que se lo que se conoce de la historia necesariamente tiene una distancia

de su objeto de estudio, para Hegel, quien lo plantea al inicio de su texto la razón

en la historia, esta cualidad es parte de una historia incompleta9, pero para

Collingwood representa un elemento crucial del saber histórico10.

El pensamiento hegeliano reconoce la perspectiva histórica que se da entre el

pasado y el historiador, esta perspectiva genera una distancia con el objeto de

estudio, esto propicia un fenómeno del cual no se había caído en gracia el cual era

la multiplicidad de formas de tratar un solo tema desde diferentes perspectivas de

análisis. En la historia original (del modelo hegeliano expuesto anteriormente) la

aproximación al pasado es directa, se trabaja con el testimonio presencial, pero el

discurso no se articula bajo el criterio de veracidad de las fuentes, sino bajo los

intereses concretos, político militares del grupo al que pertenece11. El

conocimiento significativo se encuentra en el espíritu y no en el hecho en sí12. La

historia reflexiva a su vez es otra forma de representación de realidades más

complejas fundamentadas en una nueva forma de interacción con los vestigios,

9 Ibid., p. 20.10 Collingwood, op cit, p. 367.11 Hegel, op cit, p. 21.12 P. 23

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Trabajo final.donde se plantea una renovación espiritual de los acontecimientos generando

nuevas narraciones a partir de viejas autoridades13. Posteriormente, la historia

filosófica, también implica una forma particular de entra en contacto directo con

las fuentes, ya que son escogidas las que son proporcionadas por los estados,

figuras de autoridad central, a ser la construcción civilizada más acabada del ser

humano en donde se realiza plenamente el espíritu universal. Gracias a esto, se

genera una relación con las fuentes de la historia basada en un proceso complejo

donde interviene el presente, el pasado y el futuro y del cual se busca la

explicación del camino que se traza hacia la autorrealización del espíritu universal,

los vestigios serán entonces escogidos y categorizados por su procedencia,

cercana a las instituciones de los sistemas estatales complejos y desarrollados.

Por otro lado, la representación en la obra de Collingwood está determinada por

un contacto indirecto con las fuentes del pasado, este es muy significativo ya que

permite que se genere un problema epistemológico, a partir de la pregunta:

¿Cómo se estudia aquello que no se conoce de manera directa?, la respuesta nos

conduce de nuevo a la cuestión de la perspectiva, donde la repetición o la

compenetración profunda con el pasado no existen, sino lo que hay es un sujeto

observando a otros desde diferentes ángulos (espaciales y temporales), esto

niega el conocimiento directo del pasado, pero da una opción, generar

conocimiento a partir de los diferentes ángulos y perspectivas desde los cuales

podemos observar a nuestro objeto de estudio aquí entonces vale la interpretación

del hecho14.

Hegel ayuda a dibujar el camino que conduce a los complejos problemas

epistemológicos de la filosofía de la historia moderna enfocada en el estudio del

discurso histórico, como elemento de conocimiento que es tiene valor por si

mismo, pare entonces que su concepto de filosofía universal no sobrevive cuando

13 Ibid., p, 28.14 Collingwood, op cit, p. 371.

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Trabajo final.el resto de sus postulados sí. Su esqueleto conceptual otorga las posibilidades

analíticas que permiten el desarrollo del pensamiento sobre la historiografía, a

partir de una relación entre el presente y el pasado donde se ven involucrados los

vestigios y los historiadores. Se interactúa siempre en el tiempo presente con

elementos que perduran del pasado pero que al final, se representan y se

resignifican a partir de los elementos conceptuales ajenos y de nuevas formas de

representación.

La Filosofía de La historia.

La filosofía de la historia es el concepto que corona cada visión que pretende

estudiar el proceso del pensamiento histórico en Hegel y Collingwood, encada una

se da una solución diferente, la de Hegel teológica, la de Collingwood científica,

pero con una variable de igualad y de progresión en ambos modelos. La similitud

más simple es que tanto la filosofía de la historia de Hegel como la de Collingwood

plantean en su modelo a la filosofía de la historia como la forma más acabada de

pensamiento15.

El modelo hegeliano es concebido como la última forma de abordar la historia, la

más acabada y exacta que revela un plan teológico surgido de la manifestación de

un concepto metafísico, lo que pretendía Hegel era dibujar un mapa de las

grandes manifestaciones del espíritu en lo humano para conocer y propiciarlas,

estas no son más granos de arena en una gran trama de autorrealización y

redención de lo universal.

El modelo de Collingwood aparentemente, sugiere una ruptura entre este

pensamiento (al cual el mismo ya lo integra en sus reflexiones en la Idea de la

15 Véase en Hegel: Hegel, G. W. F., La razón en las historia, trad. César Armando Gómez, introd. Antonio Truyol, Madrid, Seminarios y Ediciones, 338 p. p. 37, y en: Collingwood: Collingwood, Robín, George, Idea de la historia edición revisada introd. de Jan Van Der Dussen, México, Fondo de Cultura Económica, 2011, 610 p., p. 350.

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Trabajo final.historia) y el desarrollo de la ciencia histórica como un conocimiento vasado en

algo mucho más terrenal que una teleología. Pero si observamos el modelo de

Collingwood, tendremos una filosofía de la historia que también pretende conocer

una naturaleza esencial, la del actuar del hombre, para poder ser utilizada en el

futuro16. Aunque no se plantea una noción clara del que pasará, si hay una

previsión y por ende una reflexión que toma encuentra los tres tiempos (pasado,

presente y futuro). La filosofía de la historia de Collingwood no se aleja de una

revisión general del tiempo, pero sus métodos son más cautos y con una finalidad

científica, que aboga por la construcción de un conocimiento especial con

implicaciones epistemológicas diferentes a los otros cuerpos del saber y que a

partir de su obra se ve reflejado el proceso de consolidación de la particularidad

del pensamiento histórico desde las reflexiones suscitadas por Juan Bautista Vico.

Conclusión:

La continuidad en las ideas y en el pensamiento existe en la medida de que Hegel

proporciona conceptos y pautas que conducen a una especialización del

pensamiento histórico posterior a pesar en las formas de como se hace historia

más allá de las tramas globales del desarrollo del tiempo cultivadas durante el

siglo XIX (y gran parte del Veinte), el contacto con la obra de Hegel es notorio, si

hay una previa lectura y si hay un perfil que se fija rumbo hacia una reflexión de

carácter mucho más científico y formativo para la disciplina histórica, que en el

siglo XIX y principios del XX era joven en el ámbito académico y también en el

ámbito de la reflexión de sí misma.

Bibliografía:

16 Colingwood, op cit, p. 70.

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Trabajo final.- Collingwood, Robín, George, Idea dela historia edición revisada,

introd. de Jan Van Der Dussen, México, Fondo de Cultura

Económica, 2011, 610 p.

- Hegel, G. W. F., La razón en las historia, trad. César Armando

Gómez, introd. Antonio Truyol, Madrid, Seminarios y Ediciones,

338 p.

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