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O divina Helena Bosch

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O

divina

Helena Bosch

O

Mentalismos

1

a ti, mentira blanca,

de mi propio ser y circunstancia

, mariposa sonámbula,

te doy mi canción

ya sé que pasan los años

desde que prometiste una flor

pero quizás yo en mis sueños

aún las siga regando

de mi río, sombrío meandro,

a ti, guayabal de Matanzas,

, presumido y acostumbrado,

a ti, melao de melaza.

una flor que parece un ancla

y otra semeja el corazón

te doy este mío desvelo

húndete en mí derredor

, sano desconsuelo,

a ti doy mi canción

2 De la sangre derramada, hijos

Siete veces habrán gemido

de abandono y frío.

Procede

con el susto del poder elimina su competencia

y discierne abrazando su enemigo que puede elevarse

más

conforme se abalanza,

carnalmente a disposición

entrega sus guerreros desangre por evitar su muerte

De todas las condiciones, incondicionales ¿No ves?

juan bobo

que nace en una islita chiquitita

a vibrar de cerca con los muertos.

De todos los cuerdos, y me río, el más anormal, pero

corre por tu vida, que despertará.

3

Pitón boricua

que renace temprano

sale del catre

cuela su café prieto

y fuma yerba

en un habano

4 cuando prenda el fogón, piensa compañero

aquel jibarito hambriento

canta su desconsuelo

no sea vago bacalao saque y préndase el leñito

salpicao con un poquito, la comía sabe mejor

prende el negro, saca plato y su canequita e ron

agua, tenedor, cuchillo, ron cañita y chichaito

ya lo huele todo el barrio

ya lo sabe la ‘buela y el don

que hoy hiciste en tu casa

arroz, gandule y chicharrón

que pediste olla grande

pa que tó diera pa tó

y en filita van los niño,

atrá dello el titerón,

abuelita, doña lola, y don cheo de cachetón

tío ñego y Papito van primero, sí señor,

cuida bien de los viejito,

las mujere y el manganzón

que bien alimentadito

el boricua va mejor

y aunque sea por un ratito

no lo jode la calor

5Arpegio de la nostalgia

alma escarlata de halcón

me pego al cuello tus zarpas

y brilla todo alrededor

no seas más ingrata

de lo que te soy ahora yo

sólo culpa tus placeres: tu conyugue y mi corazón.

Escucha tú mi grito

grifa, música ensopada

codo del río, donde caigo yo.

En un azul celeste, oye mi grito,

Muero si reclamo tu amor;

por eso te digo no te vayas, no sin quitarme

primeramente la voz;

después de todo cantarla

sin ti carece de candor

Si es que lloro como una cría

mientras aleteo muriente

es que lastimó tu mirar, capilla ardiente

tus garras, mi agua

y tu color.

6 El behíque a mí me dijo que me bañara en agua clara

porque mustia mi alma rara ha de pasión enloquecido

mi india, taína hermana, perla de mi sinrazón

en sus manos el caos de mi historia

vuelve a los ojos de dios, con recelo a mí él me mira

como actuando yo sin perdón

pero es mi danza puro fuego, baile solamente de

amor he llorado con coraje y he rezado por dolor

y el consejo, agua clara, de estuario, mar o río

no importa cómo y dónde sólo una clara intención

purgar mi cuerpo de ti para la otra vida

ir reluciente sin temor.

7 Cuando empeñaron Matador, pueblo de vibra campesina

el loco que hace orilla sin armas cazaba al cazador

desde siempre con mala espina arraigada cual aguijón

Matador, ahora dos calles con edificios, un callejón

el concreto esparcido llenas ventanas de color

rojo y ropa naranja tendidos trapos sucios por pantalón

de las barandas metálicas fue mi padre un soldador

a encarcelar nuestras calles sin duda contribuyó,

porque, antes, Matador, reina de abejas y de bueyes,

ahora sólo un nombre entre dinero y vaivenes.

8 Piel, tremor ardiente

del sol rayo último primero estallasueños, brillante

como cuerpo al llevar aceite

Esa mano, esparciendo oro

explorando mi deleite

se riega como suero caliente

evaporando mi cuerpo todo

9

Expandiendo en oriente

garra del águila redentor

cuenta todo, cuenta el príncipe

tiene un grandioso control.

Sobre las cosas que domina

tu pensamiento y tu razón.

Ya no se trata de himnos

nación ni sacrificios; se trata

más de una pausa en que se mata

por abolir a otros de sus oficios

10Cantas un verso alucinante

patrocinas mis sensoriales desvelos

quiero que el sonido toque mi cuerpo

como revientan tus manos sobre el cuero

Alisio tierno y caliente, del Atlántico punto de vuelo

cual cerro de nubes pequeñas semillero

engrandecidas por la piedad de la Señora.

Con cuánta vida el paraíso aflora

y con abundancia compromete mi destino,

es tonada del Tres Picachos en oro

aunque huela a plomo vivirlo.

Veo su verso, quiero seguirlo,

quiero llegarle por las mismas rutas del viento

que ha tomado tu aliento en este voraz alisio

alucinando me lleva

al eterno precipicio.

a ti, fauno, todo menos mío

en el paraíso perdido

a ti doy mi canción

Correspondencias

primero fue la bestia conmigo

lamimos barquillas de café y chocolate

a orillas del Mediterráneo y sólo recuerdo

mojarnos los pies, encantarme de su seductor resplandecer

de su adicción a cigarrillos cuando pasaba por Madrid

encargar espadas en vez de flores en Toledo

por comprarme cajitas para prendas en la Alhambra

y la primera carta dijo tiempo después, bañada en romero fresco

tengo que sentarme

para de oro y diamantes

poder contigo platicar

Me gustan las piedras negras,

pero como tus ojos obsidiana

no hay negro igual

que reluzca dorado

y devuelva al sol su brillar.

segundo fue conmigo la bestia

un libro lentamente clausuraba:

foto de un paisaje solitario

bendecida vereda por un flamboyán,

colinas peinadas en brillo amarillo ondulado

trazas doradas de pasto para vacas pastando,

al hotel de la orilla

anclado en un acantilado, el horizonte púrpura y sonrojado

desayunamos en mesa circular de caoba

con flores victorianas en el tallado

y utensilios de punto diamante

con metálico puro del Caribe cromados.

“Te gusta” “No no me gusta”

Pero continúo engulléndolo todo.

“Es que el poder es tan sabroso”

Pero yo, por ser yo,

su visión hasta mi agrado:

los silencios expandidos,

las praderas descolonizadas,

los santuarios bien financiados

para seres desprotegidos

y críos desamparados

pero conmigo, te gusta la champaña y el vino

y no me dejas probar una cerveza condecorada

ni comer un poco de arroz mamposteado con tocino

sólo pastas y salmón

langosta termidor y sushi ‘bien cocido’

tercero fue la bestia conmigo

y en un jardín flotante

dijo “tengo que adornarte,

ponerte en buenos carros, darte buenos amantes,

vuelos, viajes alucinantes, delicias sin comparación

en y fuera de tu suelo, donde todo trata de ración”

déjame ser tu cielo

cuando todo se ha repartido.

Esta rosa en verano

con similar aprecio

se ha repetido

la acepto solamente en ciclos.

Los Te Amo no se ven vencidos

cruzan el océano

son luces como un veloz alarido

cuarto fue conmigo la bestia

a las humeantes murallas de Nueva York

Aquí nació de tu locura el precursor,

vengo a mostrarte hombres que sacan

por las ventanas a sus madres;

señoritas que abortan casi todos los martes;

pollo al horno mal cocido arrojado

a los perros sarnosos rampantes;

atropellados en suicidio osamentas

de aspirantes gatos cantantes;

y por al lado drogas estimulantes

en los baños de Manhattan y Broadway

No soy de tomar mucho alcohol, pero de boca a boca

la borrachera supo mejor.

quinto fue la bestia conmigo

a las planicies guajiras de la Florida

y en Kisimí el demonio ocupaba el claro cielo

danzando en espirales relucientes

desvelo y revuelo

que atrae baile y serpientes.

supongo que está bien

repetirle un te quiero

de vez en cuando, cual palabra rebuscada,

puede que necesite uno de nuevo.

sexto desperté y la bestia no estaba allí

mi mano desesperada encontró el lecho frío

mas una nota que no era mía

me hizo llorar de alegría

cuando la hube yo leído

O,

ahora soy tú y eres

la flama azul que me porta,

ahora es tu ser quien imanta

hacia sí a pasar las cosas

7Dios no es;

soy yo, Nadie, en quien todo confluye

una desembocadura existencial

procesada en mi cuerpo

mediante éxtasis sensorial.

8 Si desde lejos el mar vicioso

me trae un dolor que lleva siglos

¿Por qué esta selva desierta dice

que Yaldabaó está intranquilo?

Sólo me pregunto qué va buscando

porque soy yo quien corre peligro

Rompe ya el embruje, palomita,

que te van siguiendo los demonios

Cuídate, mi santa, que se esconden

cuando atardece, en tu cocina

El temido piano va sonando

toca que mi dios va poseído

por la rabia de todos mis placeres

dice que mi brazo está maldito

Cuando su silueta por las noches

va palabreando desenfrenada

danzando rumba ella suelta,

perfume de rosa cual derroche

Y si el coquí le canta a coro

ella dobla juntas las muñecas

porque su cuerpo a todo responde

como debe a todo su existencia

Ha tocado base, ruta larga

Ya le duelen mucho las piernitas

pero ante el fuego va danzando

pa cansar de nuevo las jupitas

óigame señor, ¿y qué le pasa?

Sacuda el bolsillo un poquito

que ella también quiere unos chavos

pa darse a penas un gustito

óigame señor, ¿qué está buscando?

¿acaso una prenda ha perdido?

óigame señor, ¿qué está pidiendo?

¿acaso ha usted enloquecido?

¿que mi pueblo sea sólo de esclavos?

¿que donde no tiene más le saque?

¿que no baile si no está gimiendo?

óigame señor, usted está malo.

óigame señor lo que le digo

el diablo se sufre por destino

y si no me aprecia esta danza

yo me busco un santo que lo haga

Ay mi Catalina, tú sí sabes,

Ah, qué lindo baila Barlovento,

Ahí viene el tumbao del Asomante

Ya llega gritando Sotavento

Es el alumbrar de fuego claro

es mi desplazar que fluye lento

es mi oración bajo el tormento

pura cual dolor de los tres clavos.

9 A orillas del río luminiscente

decido encontrarme

bajo la gran luna alzo el velo

para atraerle con mi dedo

Por los pétalos suaves de la brisa

llega como polvorienta estrella

su potente brío y sal de aroma

sube la colina cual tiniebla

Donde mi abrazo es su abrazo

que nos arropa del espejo el frío

desde nuestras almas brota el río

entre nuestros pechos, brillo tibio

Los peces lentamente escurren

cuentan anécdotas del interior

serpean golpeando por los bordes

a veces por pura diversión.

10Cantas un verso irresistible

que me va quemando desde adentro

conversando lo ineludible

que será vivir por amor.

Caigo libremente entre las nubes,

¿a dónde llevará mi canción?

Vibración

1 sobre la montaña llegando

roja a tender su nido

cruza con el tiempo lo que fue el alba

mientras se nos van riendo los niños

De un pasado a la eternidad volvemos

por ello el sereno es alma en que trasciendo

pero no entiendo del fauno la inquietud

mientras yo medito, baila

cruje como leña al fuego

vela la madriguera con saña

cuando toso en desvelo

varones pequeños espanta

pero rápido que peleo, ya es silueta por la ventana.

Hacia dónde vamos no veremos,

más de las culpas nos absolveremos

cuando veamos no existe ni una.

2 la amable consecuencia

de vivir sin falta en vida

la gota de agua dura

bajando del antebrazo hasta la orilla

3 Dentro una pupila

orino rosas sobre él

quien marca toda mi piel

con una ortiga espinosa

Es mi alma penosa

exiliada, que nos ve.

soy en cuerpo propio mi lento querer

el agua que fluye hermosa,

mi alma pájaro, mi entero ser

4 La isla tiene, pues,

viejitas que barren las aceras a las diez,

playas nudistas donde hay yates de papel

fantasmas de Santa María y calles

de vejigantes en tropel

proyectos sin terminar, deudas activas por doquier

pero se habla poco del paraíso

que en sí misma ella es.

5

Serás el tierno devenir de la ola,

espuma de etéreo castrato

concha espiral de mi nacimiento

El crónico lento aproximar

de un astro plasmático

Serás el pórtico que bajo la mar se abre

La esencia que blanca mi piel absorbe

Dejarás que al oído yo te hable

cuando sientas de mí el venir del orbe

En cuerpo de Tierra, bañado escarlata,

ni las rojas semillas de cundeamor

tampoco la espalda de baraja

Serás Yemayá inscrita en la primera cara

indomable cresta que persigna

en la orilla hasta quien más rápido nada

cumbre del olvido cuando repetidamente

me hayas muerto como pez en el suelo

Serás el llegar de la nube, un susurro por el viento,

una caricia que se torna violenta cuando tu golpe

rompa la duna, me bañe de espuma, me inunde de fuego

6 No le conoce nadie

pero con absoluto control

el dictador asume sus libertades

a puerta cerrada defiende su honor

es la clave aguda del piano

lo acompaña la percusión, también

su guerrilla matona rumba, salsa y guaguancó

en el Caribe baila con ahínco y sabor

cuando vuela, se dice a sí mismo Diablo y Redentor

7 Dormir La Borinqueña

tierra de santo declamar,

Virgen donde no he sido

es santa derramada en cielo abierto.

hondo soñar, en el calor de la tarde

despierto a decir lo que siento

los alisios el concierto

que desatan al caer las hojas

de un amarillo conveniente

como espejo reluciente el firmamento

mi cuerpo aclara, una nube blanca

es la que mi sueño espera

pa mirar Borínquen de mi alma

desde arriba cual en la mar

la más vibrante estela.

8 Vibro intensa con la tarde

La humedad entre nosotras me calienta

Somos una con la casa, tres con la tierra

Eres una proyección, de todas la más bella

Brotas como sonrisa en mi rostro

Flor Maga, Santa Flor de ángel

9 Luz y denuedo carroña ardiente

a picotazos terminan espejismos y señuelos

La gota gorda, emplumada y coagulada

invita desde el gris a ponderar sobre los cuerpos.

10 Cantas un verso hoy muriente,

pero hay que aceptarlo.

Mañana es marzo cuatro, y hoy preparo los deleites

para opacar tu adiós reciente

con un montón de delicias.

Por la noche, será, que me acaricias

cuando una lágrima caliente

te dedique yo, querida, a quien debo mi corazón.

Polaridad

1 Mar espejo, en la otra orilla

en isla de la isla, una inmortal camina

Veo los cocoteros de Caguana

las palmas reales con ritual de agua dominan

2

Acaricia el mar

la luna en su parte más concentrada

mano de agua elevada

liberando ángeles de prisión

Vierte balística el agua

lo suelta a riendas de dios

lágrimas del ojo mesías

lo que presenciamos tú y yo:

El agua que chorrea la flor en la ventana

La mar que baja lento

Las piedras que semejan escamas

Por los costados, arena y vapor

3 lentamente por la costa

colina en colina al azar, por las curvas de la isla

La púrpura tarde, un candente día

una lentitud sagrada

y cuando pasa,

la emoción dura poco

que no me hubo recogido con la lengua

para practicarle desde adentro

un espiritual despojo

Quiere que llegue a sus manos.

Cual maná de luz depositarme

casi por mi cuenta, polo básico de la vida

ya inerte, en su lengua.

4 Un amanecer tan sosegado

mis cabellos escapan cuales pájaros liberados

abajo las gramas trenzan largas

y se vuelven serpientes las piedras

en mi caminar

la suave vibra del roble rasga al cielo

su copa rostizando estelas de fuego

marcando eternas tajantes huellas largas

como la palma de mi mano

mientras

sigue el firmamento girando

5

Cerco, O profunda

Mi vida encuentro en este frío

En cada gota de rocío

una pesada visión

La radio tocando Silvia

y ella amarrando su pulsera de tobillo

Cerco, ay, neblina

Hay días de humildad, los más

Pero tocaré mi cuerpo

cuando me recorra el agua

Café y nubes negras

hoy me quedo aquí.

Afuera será mejor mañana.

6 joven soldado

sobre la tumba dormido

por el alma de un soldado anónimo fue bendecido

(Sin nombre para no hallarlo

en los cuentos ni los libros

y ninguno de nuestros hijos

le dé más cuerda al asunto

‘Liberación o muerte

de este imperio maldito’

‘Que viva la república’

y ‘abajo los asesinos’)

‘Ten cuidao con el diablo

pues se viste bonito.’

dijo el abuelo mío

‘Un mundo sin buenos ni malos

es lo que Dios te ha dejado;

tu herencia es algo cruda,

pero aprecia tu legado:

te lo dice un soldado,

desde siempre Primitivo’

7 Conservado en roca

el rompediamantes lustroso,

la luz de la tarde clara

la mar ruborosa con su espuma

su movimiento abrillanta

como perla en cuello imanta

todo metal lujoso

Han pintado su cara en bruto roja

como rubí, pero el océano lo entibia

con moho turquesa y costra de anís

8 Este silencio semeja

las nubes altas pasando

lluvias copiosas simulando

aguas que casi tocan, casi nutren,

casi caen.

velas que, casi, apagan;

salud en abundancia

y abundancia lenta

Pareciera

que todos los velones verdes del mundo

jamás, por más oro y humo,

a nadie convencieran

que los azules quemaran con mayor vehemencia

Este silencio semeja

el lento pasar de la mano de mamá

azotando con una limpieza

hojas que caen, ramajes que despejan

cielos nublados que extraen hojas nuevas

9 Interminable luz del paraíso;

punto donde siempre encuentro

el nuevo comienzo.

10 Cantas de un verso renaciente

ciclo del tiempo, volviendo

ola que llega rompiente

O cometa brillante

el sol recorriendo

Tu denso cuerpo mi espejo

a mis brazos para la travesía

ha vuelto. Nos bajamos del carro, corremos.

Déjenme aquí, donde soy me quedo.

Permíteme besar el color de la montaña

dulce piel de rocío, sagrada luz de alba

Ritmo

1

Si fueran a girar

su mirada hacia la visión

verían

la lágrima explosión

cuerpo de fuego hecho verbo

desde que comenzamos

a oler como terror

2 Hay tenues, colores suaves

que tardan un siglo en nacer

Terciopelo que toma

épocas para brotar

de las escamas del pez

Luces que, hasta el final de los tiempos,

no llegarán, de tan lejos que están

Almas tan elevadas

que no se sienten pasar.

3 fondo musical

baile en lo más hondo

equilibradas por la vela encendida

afuera llueve y susurras “Son azules las cortinas”

como tus fotos en Argentina

cielo sobre pampa y colina

Bésame Me miras se agota la sequía

no despiertes tú solita

de esta dulce canción

4 ¿es cordillera todo este cuerpo mío?

¿es pétalo todo lo que rozan como flor?

¿podemos hoy aunque llueve

subir, ala abrazo del río?

es que siento deber

quedarme desnuda

bajo inminente frío

alimentarme

de libélulas breves alcornia paraíso

bromelias nativas y de lirios amarillos

5 Entre amor y objetivo, humo irresoluto

cuando tus labios agua deban tocar la roca

me deshilan tus ojos como ardiente hiedra

Y si tus dedos candentes exprimen sol de mí

fuerza de mil y una primaveras

cuales faros mis ojos estarán brillando

sobre mis pómulos rojo centella.

6 empuja la humedad hacia abajo

empuja el oxígeno hacia abajo

empuja fuertemente, ata con tus brazos

el aire pausa con tus manos

la humedad arriba

bájala empujándola cambiando el viento

luego mira la llama elevarse

continuo, pero despacito extinguirse

volver a nacer hacia arriba hasta que se extingue hacia abajo

para volver a nacer hasta que se extingue

7 Brotó una isla fue accidental

que un ser puso el fuego

el otro la flor

y el tercero los edificios a cambio de un zapato.

8 beso cohoba y grises de ceniza

esparzo derredor sin prisa

no me arrastre

el alisio de las delicias

beso tu mente cohoba

piano del ser primitivo las costillas

entrelazado bosque

y mantel ondulante

de almas océano vibrante que respira

beso tu ser

numen oscuro que brilla

en el vacío me libera y desparrama

cual humo a desvanecer obliga.

9 hojas moribundas

fantasmas recogidas en la orilla

paredes de piedra corroída

por la rompiente blanca

que abulta la tierra

10 Tu verso

descalzo,

piensa las cuentas se saldan solas.

no se equivoca.

cangrejos fantasmas monedas sobre la arena

tu verso bajo palma seductor tormento

dorado reflejo

del sol el mar y tu espera:

¿será la isla estrella

ese capullito de alelí

será plateada ella

como las perlas en Abril?

¿embustera como el cuarzo

sangrienta como rubí?

¿qué demonio será

que no le deja vivir?

Causa y efecto

1 agua cautiva en prisión de Dios, tiene que liberarse

con sonido de larga trompeta

con perforaciones balísticas en las sienes

que al menos deshilen las aguas de la azotea

refresque un breve viento

abombe el espacio vacío que queda

con tiempo que pasa, sol que corre,

agua que espesa

con calor cuerpo que evapora

como cuando un muerto se torna pensamiento,

agua ácido, estancada espera.

2 generaciones tomadas en aéreo secuestro

soldados juramentados con sangre de lengua

cuerpos detrás del mar, sosegados en otra casa

o bajo otro puente.

¿quién es quien ha tomado demasiado préstamo?

3 elévate,

la noche está poblada de sonidos

despójate; es un cauce sin fondo el firmamento oscuro

la luna medio ojo va cual múcaro velando,

entre los árboles riendo,

el sedimento calcificando

de agua mi cuerpo va recomponiéndose

en las pasadas estrellas

como serpiente mi cola

enrosca la palmera quimera

de cobre costados

ojos diamante en bruto

demencia de Ponce de León

que todavía azota

como esclavo bellaco mi cuerpo

desnudo

mi cuerpo es estrella y voy

moribunda en una isla

cual voz compasiva.

4 en el momento que revientan las rosas

abro las manos y caen pétalos sobre mis hombros

Mi cuerpo todo como incienso arde

el aire como agua sacudida vibra

Escamas de papel papiro

que una sale del resquicio entre dos

absorben la humedad del aire

luego toman rojo color

mi respirar intenso mi cuerpo retorció

contorné en las risas de un carnaval caleidoscópico

volviendo a mirar

la hermosa lluvia de rosas

que no cesa

me hizo alumbrar

5 nombrada por la vela

tras el vapor de cazuela

leche hirviendo y cafetera

sazonando el agua del plato

el cigarro llamando ‘ch’ al apagar

contraluz y silueta de trapos algodón

tan lisos que parecen agua ante el sol

almácigo brazo cuyos colores confunden

su felicidad con el alisio de mi amor

6 los postes inclinados y las hiedras colgantes estiran

para tapar las nubes desde los cables del tendido eléctrico

las tumbas blancas, cruces del cementerio todo limo y cemento

realumbrando al pie de la montaña cual espejo

un estático credo

bajo el verde azul caribeño

7 Morí en el sueño de las diez.

Fui entre las colinas doradas

y vi resplandeciendo el río.

Respiré el brillo del cielo tibio

amé de nuevo la colisión

cual renacer perfecto

rompí en conmoción

cuando el paraíso me recibió.

8 el doctor fulano de tal

guardaba de sus hijitos los zapatos.

Dejó sus casas abandonadas

al ratón que habita sólo una de ellas.

Los jardines interior, cito, los cementen

sin dejar ni una planta escaparse.

Las habitaciones, ciérrenlas

con sus respectivos fantasmas adentro,

cito, confianza a deambulantes

sólo los domingos, hijos míos, y cito,

para que no peleen, siguen en la vida

como yo en la muerte, teniendo nada:

todo es del ratón.

9 O respira

Estás rompiéndome completamente.

10 Cantas un poema

cuyo grosor ha corrompido

la siguiente sección

Creo que todo lo hablado y expuesto amerita

que sea yo libre ya.

Amarás mi ser y cuerpo, cualquiera sus formas.

Besa en el recuerdo, donde dar es singular.

Nolvides nunca cómo te amo,

te amo, mi eterna O,

te amo

O