Hoja Parroquial del 17 de junio de 2012

17 de junio de 2012Nº 2.625

Sacerdotes para la Nueva Evangelización

Semanario de la Diócesis de Segorbe-Castellónhojaparroquial

2 // Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón

Indicaciones prácticas para sacerdotes evangelizadores

El sábado próximo, el Obispo, mons. Casimiro López Llorente, ordena-rá dos nuevos presbíte-ros: David Barrios y Julio de Alonso. Ambos se han formado en el Seminario Diocesano, Misionero e Internacional Redemp-toris Mater, que tiene en su escudo el lema “Nueva Evangelización”. Ésta está coloreando toda la pastoral de la Iglesia por iniciativa

del Santo Padre Benedicto XVI, y entre sus protago-

nistas, están los sacerdotes. La atención a la evangeli-

zación, sin haberse olvida-do nunca en la Iglesia, re-suena de nuevo con fuerza desde hace unos años. En la Carta circular de la Con-gregación Vaticana para el Clero sobre le identidad misionera del presbítero en la Iglesia (Junio de 2010), se dan algunas indicacio-nes concretas para una re-novada praxis misionera en el ámbito de los tria mune-ra, o funciones propias del sacerdocio: Enseñar, santi-ficar y gobernar.

REDACCIÓN.

Reportaje

Enseñar

Gobernar

Santificar

- Levantarse e ir en busca, sobretodo, de los bautizados que por motivos diversos no viven su pertenencia a la comunidad eclesial, y también de quienes poco o nada conocen a Jesucristo. Ir a las casas y a cualquier lugar y ambiente social.

- Valorar las formas tradicionales de encuentro, como la bendición de las familias.

- Invitar, formar y enviar también a los fieles laicos y religiosos.

- Relieve central al kerigma con mucha constancia,

convicción y alegría tanto en las homilías, como en las catequesis, visitas domiciliares, en las plazas, en los encuentros personales, etc.

- Método del verdadero diálogo, que no excluye el anuncio, sino que más bien lo supone.

- Preparación de los misioneros a través de una sólida espiritualidad, una auténtica vida de oración, una es-cucha constante de la Palabra de Dios, y un estudio constante de la doctrina católica.

- Preparar y organizar la misión en las comunidades ecle-siales y en las parroquias. Tener en cuenta los modos más incisivos y oportunos de la misión desde el punto de vista organizativo.

- Buscar la ejecución de una buena metodología misionera, teniendo en cuenta las nuevas circunstancias de esta época.

- Acompañar el anuncio de una acción eficaz y amorosa de promoción humana integral.

- Arraigar la misión en la estructura misma de la actividad pastoral y de la vida de la Iglesia y de sus comunidades para que sea permanente, aunque hayan períodos más in-tensos.

- Transmitir un sentido vivo de lo sobrenatural y de lo sagrado, que fascine y que lleve a una experiencia real de Dios existencialmente significativa.

- La Palabra de Dios.- La Eucaristía, punto de llegada de la misión, y dimen-

sión de envío misionero. - Belleza, dignidad y devoción de la celebración de los

sacramentos, ya que Dios es Belleza y la belleza de la celebración litúrgica es uno de los caminos que nos conducen a su misterio.

- Rezar para que el Señor despierte la vocación misione-ra de la comunidad eclesial, de sus pastores y de cada uno de sus miembros.

- Ser solícito en la celebración regular y frecuente del sacramento de la Reconciliación, ya que posee una profunda e intrínseca misionaridad.

- Asumir como primera tarea misionera la regeneración del pueblo cristiano y el cuidado de la dimensión co-munitaria de la experiencia cristiana.

- Comprender mejor la naturaleza de la sed que ator-menta a los hombres y mujeres de nuestro tiempo, aunque a veces de modo inconsciente: la sed de Dios, de experiencia y de doctrina de verdadera salvación, de una religión cristiana que sea capaz de impregnar toda la organización de la vida y transformarla cada día más.

Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 3

Dos nuevos sacerdotesQueridos diocesanos: El próximo sábado tendremos dos nuevos sacerdotes. Al gozo de su ordenación se une nues-tra cordial acción de gracias a Dios por este gran regalo. Cada uno de ellos tiene su pro-pia historia cristiana y vocacio-nal. Sin embargo ambos tienen en común haber acogido con generosidad y alegría la llama-da de Dios al sacerdocio, que han madurado en la oración, en la vida de comunidad, en el estudio y en diálogo abierto y sincero con el Señor y sus for-madores. Todo un proceso de años, no exento de dudas al comprobar su pequeñez ante la grandeza de la llamada de Dios o ante los desafíos de la nue-va evangelización y la misión ad gentes, a las que se sienten especialmente llamados. Pero, ¿cómo acometer esta nueva etapa de nuestra vida cristiana y ser fieles a la tarea de la nueva evangelización?

Nuestros nuevos sacerdotes son conscientes de que su or-denación es, antes de nada, un gran don de Dios, inmerecido por su parte, y un profundo

misterio, porque sólo Dios conoce la razón por la que los ha elegi-do. Por ello lo reciben con profunda grati-tud y con humilde admiración. Saben muy bien que no son ellos quienes se ordenan, sino que es Cristo mismo, Maes-tro, Sacerdote y Pastor, quien en la ordenación les incorpora al orden de los presbíteros para que hagan sus veces enseñando la Palabra de Dios, celebrando los Sacramentos y guiando al Pueblo de Dios. Es Cristo mis-mo quien les configura con Él, Cabeza y Pastor invisible de su Iglesia, y les capacita para re-presentarle y actuar en su nom-bre, no como alguien ausente sino presente en ellos.

Los nuevos sacerdotes sa-ben que sin Jesucristo, sin su elección, envío y acción por medio del Espíritu Santo, nada son y nada podrán ser ni hacer. En consecuencia desean vivir su sacerdocio anclados y ci-mentados en Cristo, mediante el encuentro personal con Él

en la oración diaria, en la meditación de la Palabra de Dios, en los sacramentos, especialmente en la Eucaristía y en su vida pastoral. El motor y la razón de su vida será un amor apasionado por Cristo, Maestro que enseña, Sacerdote

que ofrece y se ofrece, y Pastor que guía; esto les llevará a una verdadera caridad pastoral, es decir a amar a los hermanos con los mismos sentimientos y la misma entrega de Cristo, el Buen Pastor. De la identifica-ción existencial con Cristo y de la unión vital con Él brotará un amor apasionado por todos los hombres, especialmente por los más pobres, para llevarlos a Cristo, el Evangelio de Dios, el único que puede salvar al ser humano.

Para ser sacerdotes de la nueva evangelización hay que estar, en primer lugar, llenos de Dios, de su Hijo Jesucristo y de la alegría del Evangelio con una fe viva y sin fisuras en Dios y en Cristo Jesús, muer-

to y resucitado para la vida del mundo; es decir, hay que ser sacerdotes enteramente gana-dos por Jesucristo vivo que es el Evangelio perenne de Dios a los hombres, tal como se con-serva, se vive y se anuncia en la Iglesia católica y apostólica. Por ello deberán ser sacerdotes con un claro sentido eclesial, y vivir en comunión afectiva y efecti-va con la Iglesia y sus Pastores en la doctrina, en la disciplina y en la misión; sacerdotes que crean de verdad en la necesidad e importancia de su ministerio y lo vivan con verdadera ale-gría; sacerdotes centrados en el anuncio del kerigma cristiano; sacerdotes bien formados teo-lógicamente, conscientes de la necesidad de cristianizar la cultura, servidores de las voca-ciones y carismas, y creadores de comunidad; sacerdotes que sean testigos de la esperanza fu-tura en Dios.

Oremos y demos gracias a Dios por los dos nuevos sacer-dotes.

Con mi afecto y bendición,

Tribuna

(*) Obispo de Segorbe-Castellón

por Juan Manuel GilSan Juan de Ávila: su influencia más allá del ayerLa influencia de nuestro Santo fue especial en el Concilio de Trento a través de sus Memo-riales, pero también en la Escuela Sacerdotal que se creó en torno a su mensaje. Y a lo largo de los siglos ha crecido más y más. Durante su vida su influencia espiritual fue decisiva para San Juan de Dios, San Francisco de Borja, Santa Teresa de Jesús, San Juan de Ribera, Fray Luis de Granada y un sinfín de personas que conectaron con Dios gracias a sus virtudes.

Fue un auténtico maestro de santos, como reconocía el mismo Papa Pablo VI, por lo que le dispensó del milagro requerido para su ca-nonización. Su enseñanza fue decisiva en el Concilio de Trento, sobretodo en cuanto a la creación de los seminarios y la reforma de las costumbres de obispo y sacerdotes. Así mis-mo influyó de una manera importante en la aplicación de Trento en España, a través de los Concilios de Toledo y el Sínodo de Granada. También pasó gran parte de su influencia a

América, sobretodo a través del Concilio de Lima.

Sus discípulos, diseminados por toda An-dalucía, la Península Ibérica y el resto del mun-do, contribuyeron enormemente a la reforma de la Iglesia. Muchos de ellos tuvieron contac-to con San Juan de la Cruz, venido a Andalucía y siendo posteriormente el rector del centro de formación de carmelitas de Baeza, en cuya uni-versidad estudiaban. Posiblemente San Carlos Borromeo, muy amigo de nuestro santo, San Juan de Ribera, arzobispo de Valencia,, y Fray Bartolomé de los Mártires, obispo de Braga, estuvieron bajo su inspiración. Así como San Francisco de Sales, San Antonio María Claret, y el Cardenal Pierre de Bérulle y su escuela de espiritualidad francesa, que tanto ha influido también en la vida espiritual de los sacerdotes del mundo entero.

En la España del siglo XX y XXI, la in-fluencia de San Juan de Ávila es importante.

Sabios sacerdotes españoles han dedicado sus tareas científicas a investigar y difundir la doc-trina de nuestro santo. Omitiendo a sabiendas a otros muchos, citaré tan solo a dos a quienes conocí mucho y aprendí de su saber en torno al tema: Don Baldomero Jiménez Duque y Don Juan Esquerda Bifet.

Las obras de San Juan de Ávila, ya en el siglo XVIII, habían sido traducidas al inglés, alemán, francés e italiano, y siguen siendo tenidas muy en cuenta por teólogos de pres-tigio. Por todo ello podemos decir que la vida y doctrina de San Juan de Ávila han pasado a formar parte de las mismas venas de la Iglesia, siendo su influencia universal. Por lo que la petición de la declaración del Santo como doc-tor de la Iglesia Universal, se ve ampliamente justificada. Recientemente, el Papa Benedicto XVI ha anunciado que San Juan de Ávila será proclamado Doctor de la Iglesia Universal el próximo 7 de octubre.

Mons. Casimiro López Llorente *


Entrevista

“Si el sacerdocio viene del Cielo, puedes estar contentísimo porque es Dios quien te llama a entregar tu vida entera”

Julio de Alonso (Orense, 1967) y David Barrios (La Canonja, 1983) serán orde-nados presbíteros el sábado que viene en la S.I. Concate-dral de Santa María. Culmi-narán así un recorrido que por caminos diversos los ha llevado a un mismo destino: responder a la llamada de la Nueva Evangelización desde el servicio al Pueblo de Dios y la comunión con la Iglesia diocesana.

- ¿Qué es para vosotros la Nueva Evangelización?

- Julio Alonso (JA): Lo primero es tener un corazón abierto a la misión, creer que el Señor lleva la historia, y ver las necesidades que hay en todo el mundo. A conti-nuación, creer que el Señor tiene un plan para cada uno, y estar dispuesto a dar una palabra nueva a un hombre que tienen muchos prejui-cios: se ve la iglesia estática, en cambio es algo vivo con el Señor presente.

- David Barrios (DB): La Nueva Evangelización es la misma que la Igelsia viene haciendo desde hace 2000 años, pero nueva por la situación concreta del mundo de hoy: un hombre que ya no cree en nada, que no es receptivo a la forma tradicional de Iglesia y las presencias tradicionales de Jesucristo. Se necesita una forma nueva de llegar a este hombre para decirle que la luz de Cristo sigue tenien-do fuerza para salvarle de la muerte y ayudarle en su vida y sufrimientos.

- ¿Cómo se notará esta dimensión en tu ser y ha-cer de sacerdote?

- JA: Tenemos la expe-riencia concreta del Camino Neocatecumenal, pero en general vemos la necesidad de una iniciación cristiana que lleve la gente a encon-trarse con el Señor en su vida, porque la religiosidad natural se acaba. Muchos ven la Iglesia desde fuera como un cúmulo de leyes,

pero si se encuentran con un cristiano, descubren otra forma de vivir. En el ejerci-cio del sacerdocio puedes anunciar el amor de Jesu-cristo a muchas personas destruidas. ¿Qué les puedes decir? No tengo una varita mágica para que tu vida se transforme, tienes una cruz, pero te invito a una inicica-ción seria que te va a ayudar. Se trata de predicar el amor de Dios, acompañar, y tam-bién convertirme yo mismo para que la potencia del bautismo despierte.

- DB: Como decía Julio, lo primero es que formamos parte de una comunidad, y tiene que notarse que no vamos solos, que seguimos viviendo la fe y un proceso de conversión, y todo ello sin separarnos de los lai-cos, sino como parte de un mismo pueblo. Viendo el sufrimiento y los prejuicios que hay, tenemos que ser un presbítero que, sin dar una imagen clerical que solo pone leyes, acoja al pecador

y tenga disponibilidad para la misión. Poder anunciar a Jesucristo que te ama a pesar de tus pecados, no ponerse por encima como un refe-rente moral, sino anunciar a Cristo que me ha salvado y que también te quiere a tí.

- ¿Dónde encontrar el nuevo fervor para anun-ciar a Cristo?

- JA: En la comunidad, porque no es solo un lugar, sino una iniciación cristiana. Y como presbítero, es fun-

G. FARRÉ.

Sigue en pág. 5

Convertido sin salir del redil

David Barrios Figueras es el menor de 5 hermanos de una familia cristiana comprometida en el Camino Neoca-tecumenal. Nació en 1983 en la Canonja, (Tarragona), y el proceso de su vocación fue muy natural: “A los 13 años entré en las Comunidades, y a los 18 sentí esta vocación y entré en el Seminario. Sentí la vocación en la comunidad,

en la Iglesia, porque donde hay jóvenes aparecen vocacio-nes”, explica. Pero el ambiente propicio no bastaba; Da-vid tuvo que hacer su propio recorrido personal.

“Empecé a ver todo lo que me había hecho sufrir en mi vida y de lo que había huido. Desde la muerte de mi madre al ser pequeño, siempre intenté triunfar y ser el pri-mero, buscaba el éxito en el deporte, en los estudios, con los amigos. Pero en el Seminario empezaron a manifes-tarse muchas crisis, no sabía qué hacer, para qué vivía, no aceptaba nada de mi historia. Sin embargo, el Señor me mantuvo aquí, en el Seminario, y durante el tiempo de misión que hice en Túnez y Rwanda, viéndome con mis pecados en las manos y mi imposibilidad de poder estar con los demás, me encontré durante una confesión con el Señor que me decía que me quería tal como era, no en ese “yo” que siempre quería ser. Esto es lo que me ha hecho poder entrar en el ministerio, con mucho miedo al prin-cipio, pero sintiéndome amado por el Señor y pudiendo llevar esta experiencia a los demás”.

Julio de Alonso y David Barrios, serán ordenados sacerdotes el sábado que viene


Entrevista

“Si el sacerdocio viene del Cielo, puedes estar contentísimo porque es Dios quien te llama a entregar tu vida entera”

damental la intimidad con el Señor, la Escritura, y la comunión con los compa-ñeros, aunque muchas veces estés solo con el Señor. Y la disponibilidad, estar con la maleta en la puerta para ir donde te envíen: esto te da alegría.

- ¿Qué nuevos métodos

te atraen como sacerdote?- DB: Todo lo que sea el

contacto directo con la per-sona para poder anunciar a Jesucristo como se pueda: ir por las casas, hacer una misión parroquial... todo lo que puede ser anuncio explícigo del kerigma, que en si mismo tiene un poder para llegar al hombre.

- ¿Cómo trabajar en co-munión con los seglares en la nueva evangelización?

- JA: Es necesario estar siempre disponible y que vean que nosotros vivimos el celibato con alegría, que nos preocupamos de sus hijos, del alma del matrimonio, de los estudios de los hijos.

- DB: Nuestra experien-cia con las familias en misión del Camino Neocatecume-nal muestra cómo la Iglesia evangeliza como todo un pueblo: familias con el pres-

bítero, algunos célibes. Así aparece esta igualdad radical de los bautizados de la que ha hablado el Concilio Vati-canos II como algo natural. Esto se nos ha dado como un regalo para nosotros y en tantas nuevas realidades eclesiales.

- Con la ordenacón lle-gáis al final de una etapa. ¿Por qué ser sacerdote?

- JA: Esencialmente por-que es un llamada. De natu-ral uno quiere casarse, pero si hay una llamada, ayudado por la Iglesia para discernir, es lo mejor para ti y te da alegría. Es cierto que hay una parte de sacrificio, pero el Señor te llena totalmente, incluso a nivel de sexualidad y afectividad.

- DB: Humanamente no es difícil, ¡es imposible! Pero si es algo que viene del Cielo como una llamada de

Dios, puedes estar contentí-simo porque es Dios quien te llama a entregar tu vida entera. ¿Por qué? Porque hay una gran necesidad del hombre sediento de encon-trarse con Jesucristo.

- ¿Qué pilares susten-tan la vida sacerdotal?

- JA: La oración, el es-crute de la Palabra, celebrar los sacramentos y la comu-nidad, que es la Iglesia, unos hermanos que rezan por mi, que nos conocemos y vemos sus problemas.

- DB: Añado la comu-nión entre los presbíteros y con toda la Iglesia, y vivir seriamente el celibato. Al contrario de ser una repre-sión o limitación, sin dejar de ser un combate, es el mo-tor que nos impulsa a poder dar toda nuestra vida y a evangelizar. Y esta vocación es una gran alegría.

Viene de pág. 4

Buscaba el Corán y se encontró con Santa Teresa

Julio de Alonso Santos vivía fuera de la Iglesia desde la primera comunión. Sus padres también habían dejado la práctica religiosa cuando por motivos de trabajo se muda-ron a Madrid desde su Orense natal donde había nacido en 1967. Cuando regresaron a Galicia, iba a misa alguna vez con la abuela, pero como no le faltaba de nada, no veía ninguna necesidad de ir a la Iglesia. A los 14 años atracaron a su padre, comerciante de joyas, y se llevaron toda la mercancía. Fue un acontecimiento muy duro que representó la quiebra total. Como que la situación en casa era muy difícil, Julio encontraba su refugio en las fiestas

con los amigos. A los 19 años dejó los estudios, se fue a hacer el servicio militar, y al volver comenzó a trabajar.

Entonces llegó al punto más bajo: “Llega un momento en que uno está cansado de todo y después de haber roto con una novia con la que, a diferencia de muchas otras, pensaba que iba más serio, empecé a buscar. Entré en una librería buscando el Corán, libro del Islam, pensando que hablaba de budistas, y como que no lo tenían me compré un libro de Santa Teresa y San Juan de la Cruz. Empecé a leer y a leer, y fue un toque del Señor”. Desde entonces se acercó de nuevo a la Iglesia, pero con paréntesis porque le faltaba una comunidad que le ayudase. Había dejado atrás la juventud y se volvía a encontrar perdido. Enton-ces, un amigo de Valencia, más deprimido que él, le pidió que le hablara de Dios. Sin saber qué decir, se fueron unos días al monasterio cisterciense de Osera: “Estuvimos un fin de semana pero nos pareció que fué un mes. Ahí nos encontramos con un sacerdote que atendía comunidades del Camino. Nos habló de ellas, con mucha alegría fui-mos a conocerlas, y me quedé. Mis padres estaban separa-dos, pero entraron uno después de otro, y ahora vuelven a estar juntos. Después de la Jornada Mundial de la Juven-tud en Toronto, me levanté para entrar en el Seminario, e ingresé en el 2003.

Julio de Alonso y David Barrios, serán ordenados sacerdotes el sábado que viene


Caritas Diocesana, junto con otras entidades dio-cesanas que están al ser-vicio de las diversas nece-sidades de las personas en dificultades, mantendrán su compromiso solidario a pesar de no contar con suficientes recursos para responder a la demanda de ayuda que reciben. En este sentido se han desarrollado programas de acción espe-cíficos, según se ha explica-do durante la presentación de la memoria de Caritas del año pasado, presentada el jueves 7 conjuntamente por el Obispo, mons. Ca-simiro López Llorente, y el director de la entidad, Juan Manuel Aragonés.

Una de las áreas que más ha crecido es el apo-yo y la asesoría jurídica, que se ha ampliado, más allá de cuestiones relacio-nadas con extranjería, a consultas vinculadas con el empleo y la vivienda. Por ejemplo, se ha ayudado a redactar cartas de petición de moratoria o de refinan-ciación, consiguiendo evi-tar desahucios y que varias familias se quedaran en la calle. En la misma línea de acción, se está traba-jando conjuntamente con Pastoral Penitenciaria para abrir a nacionales pisos de acogida que hasta ahora estaban destinados a inmi-grantes.

Hay datos que mani-fiestan un cansancio pro-vocado por la duración y profundización de la crisis, como el descenso de so-cios o de aportaciones de particulares. Sin embargo se mantienen signos de es-peranza, como el aumento

de voluntarios -en el 2011 hubo 710- o la mayor im-plicación de los socios que continúan. Incluso el des-censo de donativos se ha compensado con aporta-ciones extraordinarias de Caritas Nacional (47.751 €) y de la Administración diocesana (25.373 €).

Desde que se inició la campaña de crisis en 2008, se han redistribuido más de 645.000 € entre las Ca-ritas parroquiales, llegando a los 174.000 en el año pa-sado, para ayudar a 2.500 familias en diversas áreas como bolsas de comida, ropero, ayudas al alquiler, luz, agua o farmacia. Aun-que aún hay que esperar para analizar el dato, Ara-gonés adelantaba que en abril han constatado un estancamiento, incluso un suave descenso, de solici-tudes de atención prima-ria y de comida. También explicaba que los usuarios no necesitan solo ayuda material, sino que tam-bién esperan “palabras de esperanza y sentirse acom-pañados”, función que es posible gracias a que “la Caridad parte de Cristo y que es ese amor el que nos apremia”, como afirmaba el Obispo durante el acto solidario.

Caritas mantiene su compromiso con los necesitados a pesar de estar desbordada

REDACCIÓN.

Vida Diocesana

En la publicación de Colectas del año 2011 se indicó por error que la Arciprestal de S. Jaime de Vila-real había ingre-sado 2.643€ en concepto de Colectas de Primeros Domingos, cuando se de-bería haber indicado que ingresó 5.739,24 €.

Caritas Informa:

El gesto público que se viene haciendo los últimos años, con-sistió en cubrir el rostro del Buen Pastor, con los sufrimientos de la sociedad actual y que atienden las diversas entidades diocesanas, manifestando una semejanza entre Cristo y los pobres

La Semana de la Caridad se inauguró con una Vigilia Joven de Oración en la Parroquia de San José Obrero el viernes 1 de junio. El Obispo, mons. Casimiro López Llorente, invitó a tener un corazón compasivo y eucarístico para hacer posible el cambio en la sociedad y en la Iglesia

El jueves, el Obispo explicó a la sociedad, a través de los medios de comunicación, la obra que realiza Caritas y otras entidades sociales de la Iglesia en la Diócesis, como Pastoral Penitenciaria, la Sociedad de San Vicente de Paúl, las Juven-tudes Antonianas, Manos Unidas y las Hijas de la Caridad


El Evangelio del Domingo

“¿Con qué compararemos el Reino de Dios?”Primera LecturaEz 17,22-24. Esto dice el Señor Dios: -Arrancaré una rama del alto cedro y la plantaré. De sus ramas más altas arran-caré una tierna y la planta-ré en la cima de un monte elevado; la plantaré en la montaña más alta de Israel; para que eche brotes y dé fruto y se haga un cedro noble. Anidarán en él aves de toda pluma, anidarán al abrigo de sus ramas. Y todos los árboles silvestres sabrán que yo soy el Señor, que humilla los árboles al-tos y ensalza los árboles hu-mildes, que seca los árboles lozanos y hace fl orecer los árboles secos. Yo, el Señor, lo he dicho y lo haré. Pala-bra de Dios.

Salmo responsorialSal 91. R/. Es bueno darte gracias, Señor. R/. Es bueno dar

gracias al Señor y tocar para tu nombre, oh Al-tísimo, proclamar por la mañana tu misericordia y de noche tu fi delidad. R/. El justo crecerá como una palmera, se alzará como un cedro del Líbano; plantado en la casa del Señor, crece-rá en los atrios de nuestro Dios. R/. En la vejez se-guirá dando fruto y estará lozano y frondoso, para proclamar que el Señor es justo, que en mi Roca no existe la maldad. R/.

Segunda Lectura2Cor 5,6-10. Hermanos: Siempre te-nemos confi anza, aunque sabemos que, mientras vi-vimos en el cuerpo, esta-mos desterrados, lejos del Señor. Caminamos guia-dos por la fe, sin ver toda-vía. Estamos, pues, llenos de confi anza y preferimos salir de este cuerpo para

vivir con el Señor. Por eso procuramos agradarle, en el destierro o en la patria. Porque todos tendremos que comparecer ante el tribunal de Cristo, para re-cibir el premio o el castigo por lo que hayamos hecho en esta vida. Palabra de Dios.

EvangelioMc 4,26-34. En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: “El Reino de Dios se parece a lo que sucede cuando un hombre siembra la semilla en la tie-rra: que pasan las noches y los días, y sin que él sepa cómo, la semilla germina y crece; y la tierra, por sí sola, va produciendo el fruto: primero los tallos, luego las espigas y después los granos en las espigas. Y cuando ya están maduros los granos, el hombre echa mano de la hoz, pues ha llegado el

tiempo de la cosecha”. Les dijo también: “¿Con qué compararemos el Reino de Dios? ¿Con qué parábola lo podremos representar? Es como una semilla de mostaza que, cuando se siembra, es la más peque-ña de las semillas; pero una vez sembrada, crece y se convierte en el mayor de los arbustos y echa ramas tan grandes, que los pájaros pueden anidar a su som-bra”. Y con otras muchas parábolas semejantes les es-tuvo exponiendo su men-saje, de acuerdo con lo que ellos podían entender. Y no les hablaba sino en parábo-las; pero a sus discípulos les explicaba todo en privado. Palabra del Señor.

Próxima semana: Natividad de S. Juan Bautista Is 49,1-6 / Sal 138 / He 13,22-26 / Lc 1,57-66.80

Domingo XI del Tiempo Ordinario (3ª Semana del Salterio)

Los Hospitales públicos, así como el Hospital Rey Don Jaime de Castellón,

cuentan con servicio religioso católico.Pida el servicio cuando acuda a cualquiera de ellos,

contactando con el control de planta o información.Delegación Diocesana de la Salud

Tlf.: 657 35 79 56 - [email protected]

Servicio Religioso Católico en los Hospitales

Dep. Legal: CS97-1960Suplemento del B.O. del Obispado

Edita: Obispado de Segorbe-Castellón Director: Juan Manuel Gil Coordinador: Josep Miquel Francés Redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: Teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / [email protected] / [email protected] / www.obsegorbecastellon.es

Impresión y reparto: Gràfiques Color Imprés, s.l.u. Pol. Ind. Fadrell, nave 75. 12005 Castellón / Teléfono 964 255 100

hojaparroquial

Las Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Inmaculada toman el relevo de las Capuchinas en Castellón

La comunidad de Monjas Esclavas del Santísimo Sa-cramento y de la Inmacula-da, presentes ya en la Dió-cesis en Burriana, tomarán el relevo de las Capuchinas en el Real Monasterio de la Purísima Sangre de Cris-to y del Glorioso San José de Castellón. Las Esclavas, con su presencia, harán po-sible que siga abierto al cul-to la capilla. Por su carisma particular, dedicado de una manera especial a la Adora-ción del Santísimo Sacra-mento, estará abierto a la oración de todos los fieles.

En la eucaristía de des-pedida de las Capuchinas, celebrada el martes 30 de mayo, el Obispo, mons. Casimiro López Llorente, dio las gracias a las MM. Capuchinas por la cesión

que han hecho del Monas-terio a la comunidad de Monjas Esclavas, represen-tadas por la Madre Gene-ral.

Tristeza y agradecimiento

Las Madres Capuchinas dejan una honda huella en el corazón de los castello-nenses tras estar presentes más de 320 años en la ciu-

dad. En la eucaristía parti-ciparon varios sacerdotes y un gran número de fieles que quisierón arropar en ese día tan señalado a la comunidad saliente que, con tres hermanas, se tras-lada por falta de vocacio-nes al Convento de MM. Capuchinas de Barbastro (Teruel), del cual formarán parte integrante ahora.

Durante la celebración

había sentimientos en-contrados de tristeza por la separación y traslado de esta comunidad religiosa tan querida en Castellón, pero también de acción de gracias, como expresaba el Obispo en la homilía, por el don que Dios ha conce-dido durante más de tres siglos a la vida cristiana del pueblo de Castellón, con la presencia de las MM. Ca-puchinas que tanto han in-tercedido por el bien de las almas de la ciudad. “Esta eucaristía -recordaba mons. López Llorente-, antes que una despedida es una ac-ción de gracias y un tránsi-to. Dios, que está presente en la historia y la vida de cada uno, nos pone de nue-vo en camino. Un camino, siempre, de seguimiento en el Señor. Allí donde Él dis-ponga en cada momento”.

REDACCIÓN. CASTELLÓN.

Agenda DiocesanaJueves 21.* 20h Confirmaciones en la parroquia de Santo Tomás de

Villanueva de Benicassim.Viernes 22.* 19h El Espejo de la Iglesia Diocesana en COPE.Sábado 23.* 11h Ordenaciones sacerdotales en la S.I. Concatedral de

Santa María de Castellón.

* Confirmaciones en la parroquia de San Vicente de Pie-drahita.

Domingo 24.* Solemnidad de la Natividad de San Juan Bautista.* 9h45 Iglesia Viva en COPE.* 12h30 Confirmaciones en la parroquia de El Salvador

de Pina de Montalgrao.* 15h Encuentros en Popular Televisión.

Foto

: T. P

oyat

o - E

l Per

iódi

co M

edit

errá

neo

Hoja Parroquial del 17 de junio de 2012

Documents

Transcript of Hoja Parroquial del 17 de junio de 2012