HOY SE PRETENDE CALIBRAR EL COSTE VIII

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41 Escritura PÚBLICA 40 Escritura PÚBLICA ESPECIAL VIII CON- GRESO NOTA- RIAL SUELO Y VIVIENDA EN EL SIGLO XXI L OS historiadores se han pre- guntado reiteradamente por qué Europa occidental se desarro- lló antes que el resto de la civili- zaciones euroasiáticas entre 1.400 y 1.800. Su respuesta suele ser que, en un determinado momen- to, las familias integrantes de los pueblos europeos occidentales co- menzaron a limitar su autoconsu- mo y a destinar al mercado una parte de su producción. Ahora bien, no basta con producir un ex- cedente, pues hay que tener la se- guridad de que es preferible cam- biarlo a consumirlo. Y esa seguri- dad fué posible, en principio, por- que en Europa se formó un siste- ma descentralizado de poder polí- tico, integrado por incipientes Es- tados en equilibrio inestable, que estaban más interesados en prote- ger el comercio de sus súbditos que en acaparar toda la riqueza para destinarla, como hicieron otros imperios coetáneos, a finan- ciar una arbitraria política de ex- pansión territorial y un consumo suntuario. En resumen: hubo pro- greso porque hubo mercado; y fue posible el mercado porque hubo seguridad jurídica. SEGURIDAD CONTRACTUAL. En es- te favorable marco político, la misma sociedad autogeneró, en gran parte de Europa, un sistema de seguridad contractual destina- do a evitar, en la medida de lo po- sible, la existencia y eventual efi- cacia de negocios ilegales, frau- dulentos, realizados en perjuicio de terceros, injustos o simple- mente defectuosos. Dicho siste- ma, que es, en realidad, el único que se ha ideado y que con mayor o menor intensidad se ha llevado a la práctica para conseguir la se- guridad jurídica sustancial, con- siste –según Rodríguez Adrados– "en no dejar solas a las partes, con sus egoísmos –una frente a la otra–, con sus confabulaciones –ambas contra los terceros–, y en todo caso con sus ignorancias; (y) en colocar junto a las partes, y en- tre las partes, a un tercero impar- cial". Un tercero que se encargue de la redacción del documento, incluida la del negocio contenido en él; es decir, que cuide de la do- cumentación del negocio; que sea, además, consejero legal de JUAN JOSÉ LÓPEZ BURNIOL, PRESIDENTE DEL VIII CONGRESO NOTARIAL LA MISMA SOCIEDAD AUTOGENERÓ EN GRAN PARTE DE EUROPA UN SISTEMA DE SEGURIDAD CONTRACTUAL FUNCIÓN Y COSTE DE LA SEGURIDAD JURÍDICA las partes; y que vele, al mismo tiempo, por los intereses públicos, por los intereses de los terceros, y por los intereses menos protegi- dos de una de las partes frente a los de la otra. Por último: que "dé fe" del documento. Surgió así, de aquel tercero im- parcial, el notario, que es el autor del documento, con un doble ca- rácter de profesional del derecho y funcionario público. En esta línea y por lo que a Es- paña se refiere, dentro del progre- sivo desmantelamiento de la so- ciedad estamental del Antiguo Ré- gimen, tuvo una especial impor- tancia el episodio desamortizador, por el que fueron puestos en cir- culación y adquiridos por la bur- guesía, los bienes de las manos muertas. Esta entrada de una in- gente masa de propiedades en el tráfico provocó la necesidad, in- mediatamente sentida, de poner al día el sistema de seguridad jurídi- ca. Y, dado que el proceso codifi- cador estaba estancado, se acudió al sistema de las leyes especiales, figurando entre las primeras, y no es casualidad, la Ley Hipotecaria de 8 de febrero de 1.861 y la Ley or- gánica del Notariado de 28 de ma- yo de 1.862, que reestructuraron y modernizaron el sistema de pro- tección preventiva de la seguridad jurídica privada. Y es que, aun siendo cierto que el siglo XIX es- pañol puede ser caracterizado con las palabras de Azaña "impotencia y barullo", no lo es menos que en los limitados remansos de paz que se vivieron bajo los moderados, se legisló sobre lo que urgía e intere- saba, y, en general, se legisló con buen pulso. VALORACIÓN ECONÓMICA. Siendo la economía –como escribe Mez- quita– uno de los factores condi- cionantes de la convivencia so- cial, es natural que el tema de sus relaciones con el Derecho como sistema ordenador de la misma haya ocupado desde hace mucho tiempo la atención de los teóri- cos, tanto sociólogos como juris- tas. Y así, en la actualidad, el análisis económico de las institu- ciones jurídicas pretende cali- brar el "costo social" de cual- quier fenómeno jurídico en tér- minos de eficiencia económica. Interesa, por consiguiente, la puesta en relación de las ideas de "eficiencia social" y "seguridad jurídica", pues, si fue en el sector jurídico más economicista, que es naturalmente el Derecho pri- vado, donde el continente euro- peo alumbró las más imaginati- vas soluciones preventivas de la seguridad jurídica privada, lógi- co es deducir que la convenien- cia del mantenimiento de estas mismas soluciones debe valorar- se precisamente desde una pers- pectiva igualmente económica, que se concreta en la constata- ción de su eficacia actual y en la determinación de su coste. Esta reflexión constituye el nú- cleo del próximo Congreso Nota- rial, orientado a mostrar como –desde una perspectiva económi- ca y con referencia a la adquisi- ción de la vivienda– la seguridad jurídica privada han de seguir fundándose en controles verifica- dores de los presupuestos del ne- gocio y de la legalidad de su conte- nido, así como en la prescripción de formalidades instrumentales y registrales. Lo que coincide, por otra parte, con el propósito econo- mizador de actuaciones procesa- les que siempre constituye una meta de toda política legislativa en este ámbito. LA SEGURIDAD CONTRACTUAL CONSISTE EN COLOCAR JUNTO A LAS PARTES UN TERCER IMPARCIAL HOY SE PRETENDE CALIBRAR EL COSTE SOCIAL DE CUALQUIER FENÓMENO JURÍDICO EN TÉRMINOS DE EFICIENCIA ECONÓMICA La seguridad jurídica privada en el sector inmobiliario ha de seguir fundándose en controles verificadores.

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GRESONOTA-RIAL

SUELO Y VIVIENDA EN EL SIGLO XXI

LOS historiadores se han pre-guntado reiteradamente por

qué Europa occidental se desarro-lló antes que el resto de la civili-zaciones euroasiáticas entre 1.400y 1.800. Su respuesta suele serque, en un determinado momen-to, las familias integrantes de lospueblos europeos occidentales co-menzaron a limitar su autoconsu-mo y a destinar al mercado unaparte de su producción. Ahorabien, no basta con producir un ex-cedente, pues hay que tener la se-guridad de que es preferible cam-biarlo a consumirlo. Y esa seguri-dad fué posible, en principio, por-que en Europa se formó un siste-ma descentralizado de poder polí-tico, integrado por incipientes Es-tados en equilibrio inestable, queestaban más interesados en prote-ger el comercio de sus súbditosque en acaparar toda la riquezapara destinarla, como hicieronotros imperios coetáneos, a finan-ciar una arbitraria política de ex-pansión territorial y un consumosuntuario. En resumen: hubo pro-greso porque hubo mercado; y fueposible el mercado porque huboseguridad jurídica.

SEGURIDAD CONTRACTUAL. En es-te favorable marco político, lamisma sociedad autogeneró, engran parte de Europa, un sistema

de seguridad contractual destina-do a evitar, en la medida de lo po-sible, la existencia y eventual efi-cacia de negocios ilegales, frau-dulentos, realizados en perjuiciode terceros, injustos o simple-mente defectuosos. Dicho siste-ma, que es, en realidad, el únicoque se ha ideado y que con mayoro menor intensidad se ha llevadoa la práctica para conseguir la se-guridad jurídica sustancial, con-siste –según Rodríguez Adrados–"en no dejar solas a las partes,con sus egoísmos –una frente a laotra–, con sus confabulaciones–ambas contra los terceros–, y entodo caso con sus ignorancias; (y)en colocar junto a las partes, y en-tre las partes, a un tercero impar-cial". Un tercero que se encarguede la redacción del documento,incluida la del negocio contenidoen él; es decir, que cuide de la do-cumentación del negocio; quesea, además, consejero legal de

JUAN JOSÉ LÓPEZ BURNIOL, PRESIDENTE DEL VIII CONGRESO

NOTARIAL

LA MISMA SOCIEDAD

AUTOGENERÓ EN GRAN

PARTE DE EUROPA UN

SISTEMA DE SEGURIDAD

CONTRACTUAL

FUNCIÓNY COSTEDE LASEGURIDADJURÍDICA

las partes; y que vele, al mismotiempo, por los intereses públicos,por los intereses de los terceros, ypor los intereses menos protegi-dos de una de las partes frente alos de la otra. Por último: que "défe" del documento.

Surgió así, de aquel tercero im-parcial, el notario, que es el autordel documento, con un doble ca-rácter de profesional del derechoy funcionario público.

En esta línea y por lo que a Es-paña se refiere, dentro del progre-sivo desmantelamiento de la so-ciedad estamental del Antiguo Ré-gimen, tuvo una especial impor-tancia el episodio desamortizador,por el que fueron puestos en cir-culación y adquiridos por la bur-guesía, los bienes de las manosmuertas. Esta entrada de una in-gente masa de propiedades en eltráfico provocó la necesidad, in-mediatamente sentida, de poner aldía el sistema de seguridad jurídi-ca. Y, dado que el proceso codifi-cador estaba estancado, se acudióal sistema de las leyes especiales,figurando entre las primeras, y noes casualidad, la Ley Hipotecariade 8 de febrero de 1.861 y la Ley or-gánica del Notariado de 28 de ma-yo de 1.862, que reestructuraron ymodernizaron el sistema de pro-tección preventiva de la seguridadjurídica privada. Y es que, aun

siendo cierto que el siglo XIX es-pañol puede ser caracterizado conlas palabras de Azaña "impotenciay barullo", no lo es menos que enlos limitados remansos de paz quese vivieron bajo los moderados, selegisló sobre lo que urgía e intere-saba, y, en general, se legisló conbuen pulso.

VALORACIÓN ECONÓMICA. Siendola economía –como escribe Mez-quita– uno de los factores condi-cionantes de la convivencia so-cial, es natural que el tema de susrelaciones con el Derecho comosistema ordenador de la mismahaya ocupado desde hace muchotiempo la atención de los teóri-cos, tanto sociólogos como juris-tas. Y así, en la actualidad, elanálisis económico de las institu-ciones jurídicas pretende cali-brar el "costo social" de cual-quier fenómeno jurídico en tér-minos de eficiencia económica.

Interesa, por consiguiente, lapuesta en relación de las ideas de"eficiencia social" y "seguridadjurídica", pues, si fue en el sectorjurídico más economicista, quees naturalmente el Derecho pri-vado, donde el continente euro-peo alumbró las más imaginati-vas soluciones preventivas de laseguridad jurídica privada, lógi-co es deducir que la convenien-cia del mantenimiento de estasmismas soluciones debe valorar-se precisamente desde una pers-pectiva igualmente económica,que se concreta en la constata-ción de su eficacia actual y en ladeterminación de su coste.

Esta reflexión constituye el nú-cleo del próximo Congreso Nota-rial, orientado a mostrar como–desde una perspectiva económi-ca y con referencia a la adquisi-ción de la vivienda– la seguridadjurídica privada han de seguirfundándose en controles verifica-dores de los presupuestos del ne-gocio y de la legalidad de su conte-nido, así como en la prescripciónde formalidades instrumentales yregistrales. Lo que coincide, porotra parte, con el propósito econo-mizador de actuaciones procesa-les que siempre constituye unameta de toda política legislativaen este ámbito. ■

LA SEGURIDAD

CONTRACTUAL CONSISTE

EN COLOCAR JUNTO A

LAS PARTES UN TERCER

IMPARCIAL

HOY SE PRETENDE CALIBRAR EL COSTE

SOCIAL DE CUALQUIER FENÓMENO

JURÍDICO EN TÉRMINOS DE EFICIENCIA

ECONÓMICA

La seguridad jurídica privada en el sectorinmobiliario ha de seguir fundándose encontroles verificadores.

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GRESONOTA-RIAL

SUELO Y VIVIENDA EN EL SIGLO XXI

La aplicación de laseguridad jurídicapreventiva al sectorinmobiliario evitafuturos y costososlitigios.

El consumidor necesita que se le garanticela seguridad jurídica del tráficoinmobiliario.

LA seguridad jurídica que altráfico inmobiliario aporta

la escritura pública, justificaque el notario pueda y deba ac-ceder a la información custo-diada en el Catastro Inmobilia-rio, en el Registro de la Propie-dad y en los distintos nivelesterritoriales de la Hacienda Pú-blica. La práctica diaria cons-tata la fructífera utilización,por parte de los notarios, de losmedios ofimáticos para la re-

dacción de la escritura y poste-rior remisión de la informa-ción precisa a las tres institu-

ciones citadas. Es la mismapráctica la que justifica la ne-cesidad de una actualizaciónpermanente de los modos y for-mas que faciliten y simplifi-quen la conexión con tales ins-tituciones, tanto en la fase pre-via como en la posterior a laautorización de la escritura pú-blica, como reto asumido de lo-grar una mayor exactitud obje-tiva en el contenido de la escri-tura autorizada. ■

‘EL NOTARIO DEBE PODER ACCEDER A LAINFORMACIÓN CUSTODIADA POR EL CATASTRO, ELREGISTRO Y LA HACIENDA PÚBLICA’Joaquín Sapena, notario

ESTA reorientación ha sidoconsecuencia de la crecien-

te demanda de uso de su infor-mación por parte de las Admi-nistraciones y de los ciudada-nos. Además de su tradicionalfunción fiscal, que ha sido elprincipal argumento del Tribu-nal Constitucional para confir-mar la competencia exclusiva

del Estado en la materia y quese despliega, en mayor o menormedida, en diversos impuestosestatales, autonómicos y loca-les, la colaboración con la fun-ción notarial y registral, en elplano de la acreditación de larealidad física de los inmue-bles, y con la Política AgrícolaComún, entre otras políticas

subvencionales, se ha constitui-do en un potente estímulo parala formulación de programas demejora, actualización y difu-sión de la información catas-tral, así como para las reformaslegislativas emprendidas desde1996 que se han culminado conla probación de la Ley del Ca-tastro Inmobiliario de 2002. ■

‘EN LOS ÚLTIMOS AÑOS ELCATASTRO HA CONOCIDOUNA PROFUNDA REORIENTACIÓNEN SUS FINALIDADES’Jesús S. Miranda Hita, Director General del Catastro

de la seguridad como una de lasclaves que explica lo que se ha da-do en llamar "el milagro europeo"(E.L. Jones). Las influencias de-terminantes que dieron cuerpo alsistema económico europeo fue-ron decisiones políticas tendentesa combatir el riesgo en todas susmodalidades: cercenando el poderarbitrario, procediendo a la pau-latina implantación de procedi-mientos legales, codificando lasnormas, creando los instrumen-tos jurídicos adecuados a la reali-

dad económica, etc. Dou-glas North, Premio Nobelde Economía de 1993, in-siste en la importancia ca-pital del reforzamiento delos derechos de propie-dad, pues sin ello, los cos-tes de transacción son de-masiado elevados comopara que se produzca un

comercio de importancia.Si la seguridad es lo contrario

del riesgo, podemos entender quehay dos grupos de instrumentospara combatirlo: los instrumentosque lo compensan económica-mente, como el seguro del títuloamericano y los instrumentos quelo evitan, como el notariado lati-no-germánico. Los dos proporcio-

nan seguridad, pero es obvio quesu valoración económica no pue-de ser idéntica. Un sistema de se-guridad económica, a igualdad decoste, es un sistema más inefi-ciente, ya sea porque es incapazde indemnizar el daño real, o yasea por su coste social, en cuantoemplea recursos que podían dedi-carse a otras actividades más pro-ductivas si el riesgo que cubrenpudiera eliminarse a priori. Portodos estos motivos nuestro Orde-namiento ha hecho una apuestaclara por un sistema de seguridadjurídica (art. 9.3 CE), escogiendoal notariado como uno de sus pi-lares fundamentales.

La elección no es caprichosa,pues viene determinada por la po-sición que el notario ocupa en eltráfico, en el instante en el que losnegocios se perfeccionan y los de-rechos se constituyen. Es eviden-te que este es el momento en elque interesa introducir el meca-nismo de seguridad preventivaque evite el riesgo. Ese es el mo-mento en que interesa que un fun-cionario controle la legalidad y notreinta días después, cuando losprecios ya se han entregado, lospréstamos se han consumido o lasociedad constituida ya está fun-cionando; en definitiva, cuandolos negocios ya forman parte de lavida jurídica y han comenzado aproducir efectos. Apostar por elnotariado es apostar por evitarcontaminar el tráfico con la in-certidumbre. Cualquier otra solu-ción nos terminaría llevando almundo del seguro, al mundo de lacompensación del riesgo, en elque este, por definición, existe. ■

RODRIGO TENA, NOTARIO

APOSTAR POR EL

NOTARIADO ES APOSTAR

POR EVITAR

CONTAMINAR EL

TRÁFICO JURÍDICO CON

LA INCERTIDUMBRE

Aprimera vista puede parecerextraño dedicar toda una po-

nencia en un congreso monográfi-co sobre urbanismo y vivienda aun tema tan aparentemente aleja-do –y que incluso puede sonar acorporativo– como el del valor deldocumento notarial. En realidad,esta extrañeza es un efecto más dela general ignorancia que rodea aldocumento público, motivada se-guramente por ser un instrumen-to tecnológico complejo de no sen-cilla comprensión cuya finalidad–la seguridad jurídica– no es unvalor evidente.

Pese a que la afirmación deuna íntima vinculación entre se-guridad y progreso es tan antiguacomo la obra de Tucídides, han si-do los economistas modernos losque más han insistido en el valor

VALOR DELDOCUMENTONOTARIAL