Huber Ballesteros

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La paz del campo es la paz de los colombianos Húbert Ballesteros /  Ningún otro sector como el campesino ha sufrido tan directamente el conflicto social y armado co lombiano. Al haber sido considerado un obstáculo para los planes económicos de la burguesía y las transnacionales, este sector ha soportado dcadas de !iolencia política, económica y acciones armadas or"uestadas y dirigidas desde el establecimiento contra la población rural. Aun"ue algunos estudiosos de la !iolencia en #olombia pretendan periodi$ar el conflicto, se%alando además causas diferentes en cada uno, lo cierto es "ue e&iste una línea continua de tie mpo y causas "ue !an más atrás incluso del lapso de cincuenta a%os "ue algunos mencionan. 'gual di!ersidad encontramos frente al carácter y las causas( algunos de ellos solo le reconocen el carácter de conflicto armado y ubican sus causas en ra$ones ideológicas de origen e&terno. )ero la !erdad es "ue al plantearse la gnesis del conflicto no se puede desconocer como una de ellas la problemática agraria, ni se puede di!idir el conflicto por etapas en tiempos diferentes y con causalidades distintas. *in ser e&agerados, podríamos incluso ubicar su origen en la concepción santanderista de la +epública y el stado, adoptada por los partidos -iberal y #onser!ador creados y 0 a%os despus de la muerte del -ibertador. -os santanderistas, acogidos a las tesis del i ngls 1ohn -oc2e de "ue 3la propiedad es anterior a la sociedad y al stado4, reconocen poder político solo a los propietarios, e&cluyendo de l a las mayorías desposeídas de los bienes materiales. #oncepción "ue entró en cho"ue con la doctrina social del -ibertador en temas como la propiedad, los alcances de la gesta libertadora y el tipo de siste ma político "ue debería guiar los destinos de las naciones recin liberadas y las repúblicas recin constituidas. Ha sido esta concepción e&cluyente el caldo de culti!o de todas las guerras "ue ha padecido nuestro suelo patrio y es la burguesía, "ue se eterni$ó en el poder impidiendo de forma !iolenta la participación de cual"uier otro sector, la responsable de "ue el conflicto no sólo no se haya superado sino "ue se mantenga en el tiempo. 5os aspectos muy importantes de los actuales diálogos deben ser tenidos en cuenta para !alorar la problemática de la !iolencia6 el primero, los res ultados de la #omisión de la 7e rdad Histórica, "ue ubica el problema agrario como una de las principales causas( el segundo, los acuerdos parciales "ue se alcan$aron en la discusión del primer punto. Ambos deben ser!ir para entender y superar las ra$ones ob8eti!as del largo conflicto social armado "ue hemos !i!ido y "ue aspiramos superar con los acuerdos "ue se firmen en -a Habana. se es nuestro "uerer y el de la mayoría de los colombianos( sin embargo debemos ser conscientes de "ue "uienes se oponen y siempre se han opuesto a un proceso de pa$ temen "ue un pacto entre los colombianos para superar tantas dcadas de !iolencia arrebate los pri!ilegios de los se%ores de la tierra "ue han si do a la !e$ los se%ores de la guerra. -a firma de un acuerdo de pa$, "ui$ás, no los haga retroceder en sus pretensiones y como es su costumbre utilicen el  poder "ue tienen tanto institucional como parainstitucional para impedir la concreción d e lo acordado,  particularmente en materia agraria. 9stá el gobierno dispuesto a enfrentarlos tanto política como 8udicialmente: sta debe ser desde nosotros una  pregunta obligada y un deb er del ;obierno responderla. )ues si el problema de la tierra ha sido un detonador del conflicto, igualmente puede ser un gran obstáculo para materiali$ar la pa$. -os campesinos debemos estar conscientes de "ue la firma de un acuerdo de pa$ es una gran oportunidad y un gran reto( prepararnos para apro!echarla y enfrentar las dificultades "ue puedan surgir es una necesidad como lo es, conocer y difundir el contenido de lo preacordado hasta el momento con el ob8eti!o de acrecentar el respaldo a los diálogos y a la con!ocatoria de una asamblea nacional constituyente.

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7/23/2019 Huber Ballesteros

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La paz del campo es la paz de los colombianos

Húbert Ballesteros /

 Ningún otro sector como el campesino ha sufrido tan directamente el conflicto social y armado colombiano. Al haber 

sido considerado un obstáculo para los planes económicos de la burguesía y las transnacionales, este sector ha

soportado dcadas de !iolencia política, económica y acciones armadas or"uestadas y dirigidas desde el

establecimiento contra la población rural.

Aun"ue algunos estudiosos de la !iolencia en #olombia pretendan periodi$ar el conflicto, se%alando además causas

diferentes en cada uno, lo cierto es "ue e&iste una línea continua de tiempo y causas "ue !an más atrás incluso del

lapso de cincuenta a%os "ue algunos mencionan.

'gual di!ersidad encontramos frente al carácter y las causas( algunos de ellos solo le reconocen el carácter de

conflicto armado y ubican sus causas en ra$ones ideológicas de origen e&terno. )ero la !erdad es "ue al plantearse la

gnesis del conflicto no se puede desconocer como una de ellas la problemática agraria, ni se puede di!idir el

conflicto por etapas en tiempos diferentes y con causalidades distintas.

*in ser e&agerados, podríamos incluso ubicar su origen en la concepción santanderista de la +epública y el stado,adoptada por los partidos -iberal y #onser!ador creados y 0 a%os despus de la muerte del -ibertador.

-os santanderistas, acogidos a las tesis del ingls 1ohn -oc2e de "ue 3la propiedad es anterior a la sociedad y al

stado4, reconocen poder político solo a los propietarios, e&cluyendo de l a las mayorías desposeídas de los bienes

materiales. #oncepción "ue entró en cho"ue con la doctrina social del -ibertador en temas como la propiedad, los

alcances de la gesta libertadora y el tipo de sistema político "ue debería guiar los destinos de las naciones recin

liberadas y las repúblicas recin constituidas.

Ha sido esta concepción e&cluyente el caldo de culti!o de todas las guerras "ue ha padecido nuestro suelo patrio y es

la burguesía, "ue se eterni$ó en el poder impidiendo de forma !iolenta la participación de cual"uier otro sector, la

responsable de "ue el conflicto no sólo no se haya superado sino "ue se mantenga en el tiempo.

5os aspectos muy importantes de los actuales diálogos deben ser tenidos en cuenta para !alorar la problemática de la

!iolencia6 el primero, los resultados de la #omisión de la 7erdad Histórica, "ue ubica el problema agrario como una

de las principales causas( el segundo, los acuerdos parciales "ue se alcan$aron en la discusión del primer punto.

Ambos deben ser!ir para entender y superar las ra$ones ob8eti!as del largo conflicto social armado "ue hemos !i!ido

y "ue aspiramos superar con los acuerdos "ue se firmen en -a Habana.

se es nuestro "uerer y el de la mayoría de los colombianos( sin embargo debemos ser conscientes de "ue "uienes se

oponen y siempre se han opuesto a un proceso de pa$ temen "ue un pacto entre los colombianos para superar tantas

dcadas de !iolencia arrebate los pri!ilegios de los se%ores de la tierra "ue han sido a la !e$ los se%ores de la guerra.

-a firma de un acuerdo de pa$, "ui$ás, no los haga retroceder en sus pretensiones y como es su costumbre utilicen el

 poder "ue tienen tanto institucional como parainstitucional para impedir la concreción de lo acordado,

 particularmente en materia agraria.

9stá el gobierno dispuesto a enfrentarlos tanto política como 8udicialmente: sta debe ser desde nosotros una

 pregunta obligada y un deber del ;obierno responderla. )ues si el problema de la tierra ha sido un detonador del

conflicto, igualmente puede ser un gran obstáculo para materiali$ar la pa$.

-os campesinos debemos estar conscientes de "ue la firma de un acuerdo de pa$ es una gran oportunidad y un gran

reto( prepararnos para apro!echarla y enfrentar las dificultades "ue puedan surgir es una necesidad como lo es,

conocer y difundir el contenido de lo preacordado hasta el momento con el ob8eti!o de acrecentar el respaldo a los

diálogos y a la con!ocatoria de una asamblea nacional constituyente.