Todos necesitamos recargar energías para poder continuar nuestras actividades y poder rendir al máximo, los niños pequeños no son la excepción, efectos del confinamiento en los niños trae consecuencias negativas a nivel de estrés. A pesar de que la niñez se caracteriza por ser una etapa en la que nuestros hijos/as están llenos de energía, es necesario ayudarlos a mantenerse activos para que no experimenten bajones súbitos de ánimo o manifiesten en pataletas o llantos difíciles de controlar. En el aprendizaje, de cualquier índole, resulta de gran utilidad puesto que les permite aprender a desconectarse por un momento, relajarse y retomar la acción con más entusiasmo, interés y capacidad de retención. Aunque parezca que la vida de los niños pequeños consiste solamente en diversión, debemos tener en cuenta que, al estar en un continuo aprendizaje, muchas veces pueden llegar a extenuarse tanto mental como físicamente. Los ejercicios sencillos de relajación que les propongo funcionan para niños/as de diferentes edades. No se requiere de una gran metodología, pero sí de empatía, paciencia y perseverancia.

Los siguientes ejercicios sencillos de relajación se pueden aplicar a diario, sin ningún entrenamiento previo.

Ejercicios sencillos de relajación para niños

El abrazo del peluche

Este ejercicio ayuda a relajar los músculos en niños pequeños. La actividad consiste en pedirle al niño/a que inhale profundamente y que, abrace su peluche (o una almohada pequeña) con mucha fuerza. (los tutos, pañales o mantitas, también sirven para relajar y entregar tranquilidad en los niños/as). Luego, poco a poco, lo guías para que disminuya la tensión de sus brazos y al mismo tiempo exhale el aire lentamente por la boca. El resultado de esta técnica se traduce en una completa relajación muscular y mental. (para los más pequeños es importante solo enseñar a abrazar el peluche o cualquier objeto que sea suave y acolchado)

El juego del plumero o la pelota

Otro ejercicio sencillo de relajación para niños/as puede incluso servir como una especie de juego. Consiste en recostar al niño/a sobre una superficie cómoda, pedirle que cierre los ojos, y a continuación deslizar un plumero por los brazos y piernas del niño. Es igualmente efectivo deslizar una pelota pequeña y suave por sus extremidades. Al transcurrir de 3 a 5 minutos será tiempo suficiente para lograr el efecto deseado, luego permita que el niño/a juegue libremente con la pelota o plumero utilizado.

Masaje superficial

El masaje superficial consiste simplemente en darle un masaje a tu hijo/a. No hace falta ser una experta. Basta con que te tomes el tiempo para ayudar a tu hijo a relajarse. Un masaje puede traducirse como una serie de caricias con la palma de la mano sobre la espalda de tu hijo, con un poco de aceite esencial. Mientras más lenta sea la acción, más relajante será. El masaje en la espalda es solo una alternativa, pero también puedes probar a hacerle un masaje en las palmas de la mano o en la planta de los pies.

Ejercicios de visualización

Los ejercicios de visualización resultan excelentes antes de la hora de dormir guiarás la actividad poniendo música suave, intentando que cierre los ojos y comenzarás a acariciarle la frente, luego le comenzarás a contar algún cuento breve, de forma pausada, también puede ser cantando suaves canciones de cuna o simplemente tarareando la música que tienes de fondo.

Como última sugerencia, un baño caliente antes de dormir con agua de manzanilla ayuda a un buen descanso en los niños/as.

ACTIVIDADES PARA TODOS LOS DÍAS

“Ejercitando nuestras manos y ojos”

¿Tienes un canasto para la ropa, de esos plásticos que parecen botes? si no tienes, puedes usar una caja de cartón. ¿Qué haremos? pasaremos algún elástico o cinta formando una especie de “telaraña” en su superficie; dejando espacios para que el niño o la niña puedan introducir sus manos. Dentro de este contenedor podemos poner juguetes y objetos que sean de fácil agarre y que no presenten peligro. Los objetos que pongas en su interior dependerán de la etapa de desarrollo del niño o niña. Siéntense cómodamente en el suelo y ofrezca la oportunidad para que saque sus tesoros del contenedor. Anímalo/a, apóyelo, pero brinde oportunidades para que lo intente y persista en ello.

Materiales: Canasto, caja, cintas, elásticos, juguetes.

Aprendizajes: Autonomía, corporalidad y movimiento.

“Un cuento entelado”

¿Tienes un delantal de cocina? ¿un cojín? ¿una falda o una polera? Cualquiera de estos elementos nos servirá para narrar historias. ¿Cómo lo hacemos? la tela puedes decorarla (bordando, pegando botones, cintas) como un paisaje. Esto les servirá para muchas historias, Ahora ¡hagamos los personajes! si tejes, puedes hacerlos de lana o también de papel. La idea, es que a medida que cuentes el cuento (pueden inventarlo) vayan poniendo el personaje en el escenario (puedes afirmarlos con un alfiler o ponerles cinta adhesiva). Incentiva a que la niña o el niño vaya reconociendo los personajes o poniéndolos en la historia. Si pueden expresarse verbalmente que vaya también narrando, si no, que se exprese como desee: con gestos, aplaudiendo, gestualizando, participando.

Materiales: cojines, delantales, falda, polera o lo que tenga disponible para transformar en un escenario de cuentos.

Aprendizajes: Desarrollo del lenguaje, vínculo afectivo, disfrute de narraciones, memoria, creatividad.

“Paredes parlantes”

Busquen una hora del día para ejercitarse juntos. Un horario en el que tu bebé esté más activo. Si es pequeño, hagan estiramientos, imite sus movimientos. Si es más grande, busca dibujos que muestren movimientos. Por ejemplo, un conejo saltando, un caracol arrastrándose, una serpiente reptando, una oruga desplazándose; un elefante caminando, un gato durmiendo (bien acurrucado). Pongan estos dibujos en las paredes y hagan los movimientos. Pueden hacerlos en secuencia, es decir, uno después de otro (o hacerlos individualmente por día).

Materiales: Papeles, lápices, pinturas, revistas.

Aprendizajes: Autonomía, corporalidad y movimiento

Pegando objetos

Tienes una cinta de embalaje masking o similar, la debes pegar en el espacio de una puerta, en sentido horizontal a la altura del niño, lo importante es que pegues unas tres o cuatro cintas. En una caja o bolsa debes tener a disposición del niño/a pelotas u objetos pequeños y livianos, como tapas de bebidas, corchos, lápices, etc, muéstrale como pegar los objetos en las cintas, luego motívalo para que el/ella lo haga, esta actividad es muy entretenida para los niños, los divierte ver como los objetos quedan pegados en las cintas.

Materiales: Cinta de embalaje, pelotas u objetos pequeños.

Aprendizajes: Motricidad fina, corporalidad y movimiento.

“Disfrutando la música”

La música infantil favorece el aprendizaje del lenguaje y el desarrollo de capacidades cognitivas ¿Cómo lo hacemos? brindemos oportunidades de manipular objetos sonoros. Pueden crear una botella de sonido; en una botella pequeña ponga semillas, arroz, botones y asegúrate de que quede muy bien tapada para que no se derrame su contenido. Revisa, además, que la tapa no tenga astillas ni trocitos que puedan dañar al bebé. Dejen que el niño o niña la exploré, descubra sus sonidos. Acompaña y observa sus movimientos. Si el niño o la niña es más grande, decoren juntos estas botellas. Coloca música rítmica y muéstrale al niño/a como mover la botella para escuchar el sonido y así acompañar la canción, tu puedes apoyar con un instrumento musical u otros objetos que emitan sonidos, pueden cantar canciones y acompañarlas con los instrumentos.

Materiales: Botellas plásticas pequeñas, arroz, botones, semillas.

Aprendizajes: Exploración, descubrimiento de sonidos, texturas y alegría.