JULIO TüRRI - Revista de la Universidad de México · De algún modo, la conciencia estética de...

3
JULIO TüRRI y su gambusino Entrevista a Serge l. Zettzeii . . .... ; ññ¡;¡¡a;· · E n su texto titulado " El descubridor ", Julio Torri dejaba establecida su poética: (lA semejanza del minero es el escritor: explota cada intuición como una cantera. A menudo dt¿jará la dura faena pronto, pues la veta no esprofunda. Otras veces dará con rico yacimiento del mejor metal , del oro más e smerado. " A su modo, el lector de Torri continúa este af án de explotación y exploración, para separar los brillos aparentes de los verdaderos. En Serge I. Zaitzeff, Torri ha encontrado a uno de sus más de votos gambusinos.Profesorde la Universidad de Cal- gary, Canadá, 7aitzeff ha dedic ado varios años al estudioy rescate de la obra de los autores del Ateneo de la J uventud, sobre todo de aquéllos cuya obra no había sido reunida. Las siguientes constituyen sus opiniones sobre Julio To rri, a casi una década de haber iniciado sus inve stigaciones sobre el escritor coahuilense. ... Llegué a Ju lio Torri por mi interés en los miembros del Ateneo de la Ju ventud, sobre todo en aquellos escritores injustamente olvidados como Carlos Díaz Dufoo hijo, Rafael Cabrera o Mar iano Silva y Aceves. Tras el trabajo que emprendí sobre Raf ael López, a instancias de mi maestro ABen W. Phillips, también por sugerencia suya me en contré con Julio T or ri. Fue un descubrimiento leer a un escritor tan perfecto, tan especial. Al principio lo estudié sólo en su contexto mexica no; posteriormente pud e relacionarlo con autor es latinoamericanos, y encontré sus afinidades con plumas posteriores como las de Macedonio Fernández, Jorge Lu is Borges y Julio Cortázar . Re sulta sorprendente que en una época tan violenta, tan exaltada y superficialmente nacionalista como en la que vive Torri, aparezca un libro com o E nsayos y poemas , contemporáneo de obras en apariencia tan disímiles como Los de abajo de Mariano Azuela o La sangre de vota de Ramón López Velarde. De algún modo, la conciencia estética de Tor ri, su exigencia estilística, constituyen un puent e cl ar amente identificable de la generación del Ateneo con la de Contemporáneos. Si bien existe una .vinculación inmediata de Torri con estos escritores en cuanto a que él colabora en publicaciones como Contemporáneos , y más tarde en Tierra Nueva , la conciencia poética de los Contemporáneos se halla más cerca de Torri que la de cualquier otro ateneísta. Éste ha sido un aspecto poco estudiado, así como e! hecho de que Torri, a pesar de ser un autor cercano, por sensibilidad y gustos, a escritores extranjeros como Aloysius Bertrand, Marcel Schwob o Charles Lamb , es autor de algunos -textos nacional istas muy bien logrados, como "La feria ", cuyo clima y título son antecedentes del libro homónimo de Juan José Arreola. Torri es el gran estilista de la literatura mexicana, no obstante que su obra esencial - Tres libros- no llega a las 200 páginas. Más tarde, al descubrir al Torri disperso, cuyas obras recopilé bajo el título Diálogo de los libros, me di cuenta de que Torri había sido un hombre más productivo de lo que pensábamos. En este último caso, tuve que enfrentarme al dilema constante del investigador. ¿Vale la .pena rescatar aquellos textos que, como los reunidos en ElIadr án de ataúdes, Torri no incorporó a los Tres libros en que él parecía resumir su obra completa? Estoy consciente de que la mejor parte de la producción torriana no se halla en la obra dispersa. Sin embargo, para el investigador -y para el lector general- cada nueva página, cada pista no detectada anteriormente, contribuye para hacer un retrato más completo del sujeto de análisis. Una edición de rescate no es lo mismo que una antología selecta. Mi tercer encuentro ha sido con el Torri inédito. Una casualidad que pudiéramos llamar torriana me llevó _________________ 35 _

Transcript of JULIO TüRRI - Revista de la Universidad de México · De algún modo, la conciencia estética de...

Page 1: JULIO TüRRI - Revista de la Universidad de México · De algún modo, la conciencia estética de Torri, su exigencia estilística, constituyen un puente claramente identificable

JULIO TüRRIy su gambusino

Entrevista a Serge l. Zettzeii. . .... ; ññ¡;¡¡a;· ·

E n su texto titulado " El descubridor", Julio Torri dejaba establecida su poética: (lA semejanza del mineroes el escritor: explota cada intuición como una cantera. A menudo dt¿jará la dura faena pronto, pues la veta noesprofunda. Otras veces dará con rico yacimiento del mejor metal, deloro más esmerado. " A su modo, el lector

de Torri continúa este af án deexplotacióny exploración, para separar los brillos aparentes de los verdaderos. EnSerge I. Zaitzeff, Torri ha encontrado a uno desus más devotosgambusinos. Profesordela Universidad de Cal­gary, Canadá, 7 aitzeff ha dedicado varios años al estudioy rescate de la obra de los autores delAteneo de laJuventud, sobretodo de aquéllos cuya obra no había sido reunida. Las siguientes constituyen sus opiniones sobreJulio Torri, a casi una década de haber iniciado sus investigaciones sobre el escritor coahuilense.

...

Llegué a Julio T orri por mi in terés enlos miembros del Ateneo de la

Juvent ud , sobre todo en aquellosescrito res inju stamente olvidados comoCarlos Díaz Dufoo hijo, Rafael

Cabrera o Marian o Silva y Aceves.

Tras el trabajo que emprendí sobreRafael López, a insta ncias de mi

mae stro ABen W . Phillips, tambiénpor sugerencia suya me encontré conJulio T orri. Fue un descubrimientoleer a un escritor tan perfecto, tan

especial. Al principio lo estudié sóloen su contexto mexica no;

poster iormente pude relacionarlo conautores latinoamericanos, y encontrésus afinidades con plumas posteriorescomo las de Macedonio Fernández,

Jorge Lu is Borges y Julio Cortázar.Re sulta sorp rendente que en una

época tan violenta , tan exaltada ysuperficialmente nacionalista como enla que vive T orri, aparezca un librocomo Ensayos y poemas, contemporáneode obras en apa riencia tan disímilescomo Los de abajo de Mariano Azuelao La sangre devota de Ramón LópezVelarde. De algún modo, laconciencia estética de Torri, suexigencia estilística , constituyen unpuente claramente identificable de la

generación del Ateneo con la de

Contemporáneos. Si bien existe una.vinculación inmediata de Torri conestos escritores en cuanto a que élcolabora en publicaciones comoContemporáneos, y más tarde en TierraNueva , la conciencia poética de losContemporáneos se halla más cerca deTorri que la de cualquier otroateneísta. Éste ha sido un aspectopoco estudiado, así como e! hecho deque Torri, a pesar de ser un autorcercano, por sensibilidad y gustos, aescritores extranjeros como AloysiusBertrand, Marcel Schwob o CharlesLamb, es autor de algunos -textos

nacional istas muy bien logrados, como

"La feria ", cuyo clima y título son

antecedentes del libro homónimo de

Juan José Arreola.Torri es el gran estilista de la

literatura mexicana, no obstante que

su obra esencial - Tres libros- no

llega a las 200 páginas. Más tarde, al

descubrir al Torri disperso, cuyasobras recopilé bajo el título Diálogo delos libros, me di cuenta de que Torrihabía sido un hombre más productivod e lo que pensábamos. En este último

caso , tuve que enfrentarme al dilema

constante del investigador. ¿Vale la

.pena rescatar aquellos textos que,como los reunidos en ElIadr án deataúdes, Torri no incorporó a los Treslibros en que él parecía resumir su

obra completa? Estoy consciente deque la mejor parte de la producción

torriana no se halla en la obradispersa. Sin embargo, para elinvestigador -y para el lectorgeneral- cada nueva página, cadapista no detectada anteriormente,contribuye para hacer un retrato máscompleto del sujeto de análisis . Unaedición de rescate no es lo mismo queuna antología selecta.

Mi tercer encuentro ha sido con elTorri inédito. Una casualidad quepudiéramos llamar torriana me llevó

_________________ 35 _

Page 2: JULIO TüRRI - Revista de la Universidad de México · De algún modo, la conciencia estética de Torri, su exigencia estilística, constituyen un puente claramente identificable

en 1984 a dos hechos coincidentes y

hondamente satisfactorios en mirelación con el escritor saltillense. Ese

año me fue concedido el premio

Xavier Villaurrutia en la rama de

ensayo, por mi libro El arte deJulioTorn , Unas horas antes de la

premiación, recibí una llamadatelefónica de parientes políticos de

Torri, quienes me invitaban a su casa

para que examinara los papeles del

escritor que ellos conservaban: cartas,

borradores, originales de sus obras.

Además de permitirme el acceso a

estos documentos , me dieron

autorización para fotocopiarlos. Con

ayuda de m i esposa me dir igí al

Copicentro más cercano, y con eltiempo justo llegamos a la prem iación .El 'premio -para Torri y para mí­

fue de esta manera doble, pu es la

mayor parte de los documentos, sobre

todo las cartas, que he ido recogiendo,proceden de allí.

La modernidad de Torri seencuentra en su capacidad para

mezclar géneros diversos , y abandonarel dogmatismo que establece "esto es

un poema" , " aquello, un cuento" ;

esta confusión deliberada ha sidodeterm inante en la obra de escritores

poster iores a Torri , no sólo enMéxico , sino en el ámbitolat inoam ericano . Creo y he tratado dedemostrar que Torri es un precursor

de Juan J osé Arreola y AugustoMonterroso , pues comparten con él

actitudes ant e la literatura, ante eloficio de escribir.

En cuanto a la leyenda del T orriprofesor , me resulta dificil juzgarla,

pues los testimonios que existen soncontrad ictorios. La mayoría está deacuerdo en que no se caracterizabapor ser un buen profesor. Hayalgunos , en cam bio , qu e a pesar delas imp erfeccio ncs de T orri pudieronaprend r mu cho de él. Fue el profesord . varia s generacio nes de escritores

m xicanos qu ' inevi tablemente

pasaron por sus au las. Q uizá el mejort stimonio de su labor docente se hallen su M anual de litrratura española, un

libro qu s algo más que una historiarudita y acad émica. pues r vela los

gustos y pr feren cias del au tor. Lomismo o .urr cun sus prólogos ycom ntarios a lib ros aj nos. La mayorpart son br v s , y en ellos tra ta de

sint tizar la 1 ctura par a el lectorg n ra l; hay otros ext ensos , como eld di ado a Lu is t , rbina, donde senota al Torri erudito, al To rri

profe or .Uno de los t .x lO S donde mejo r

pod mas ver la idea que To rri ten ía

de su papel en la literatura podemosverlo en el texto q ue escribió conmotivo de la mu ert e de Carlos DíazDufoo, hijo. Si en ,. De la noble

esterilidad de los ingenios" defendía- siguiendo a Rémy de Go urmont­

la estirpe de los escritores que noescriben, el dedicado a Dufooconstituye, por un a part e, un retratode la generación del Ateneo y su

credo estét ico; por la otra , seconvierte en un a especie de

autobiografía :

En los pr imeros año s del sigloaparece en nuestras letras una serie

de escrito res malogrados -Cauto,Gómez Robledo , J esús 1'. Acevedoy Carlos Díaz Dufoo, hijo- qu e

Reunión de \a Academia Mexicana de la Lengua_______________ 36 _

Page 3: JULIO TüRRI - Revista de la Universidad de México · De algún modo, la conciencia estética de Torri, su exigencia estilística, constituyen un puente claramente identificable

visión muy personal e íntima de la

personalidad del hombre y el escritor;

otra aportación significativa es la de

Dolores Koch, quien se recibió .

recientemente con una tesis doctoralen la cual establece la similitud de

Torri con Juan José Arreola y

Augusto Monterroso.Como mencionaba anteriormente,

es necesario abandonar la idea de que

Torri fue exclusivamente autor de Tres

libros. En la actualidad trabajo en tres

volúmenes -prácticamente la obra

completa de Torri-, que publicará elFondo de Cultura Económica. Elprimer tomo es una edición crítica,anotada, de Tres libros; el segundo

contiene los textos rescatados,dispersos e inéditos, lo cual, resultarámuy útil para la investigación futura;el tercero es quizá el más importante,pues incluye material nuevo, esto es,

los espistolarios sostenidos por JulioTorri. De sus cartas puede decirse que

constituyen una especie deautobiografia, así como testimonios de

primera mano sobre sus .contemporáneos. Hay aquí cartas que

envió a Alfonso Reyes, PedroHenríquez Ureña, José Vasconcelos,Ramón Menéndez Pidal y Juan »-

Ramón Jiménez. La idea de estaedición es proporcionar al lector unaedición crítica definitiva de todo loque se ha ido rescatando.

En este último viaje a Méxicotambién tuve la oportunidad de ver labiblioteca de Julio Torri, adquiridapor el Gobierno de Tabasco. No mefue posible verificar la leyenda dellibro de Amado Nervo empastado conparte del vestido nupcial de la madrede Torri, ni aquel otro, igualmentecélebre , encuadernado en piel demujer. Pude, en cambio, percatarmeque se trataba de una biblioteca nonutrida, pero sí selecta. Predominanen ella las obras completas de losclásicos franceses en ediciones lujosas.Al mirar los volúmenes,cuidadosamente acomodados en susanaqueles, no podemos dejar depensar con ironía en las cartas dondeTorri confiesa las penurias económicaspor las cuales pasaba para pagar.puntualmente el abono a laslibrerías. e

Car l'indifférence est le seul hommag«Dont je suis jaloux

palabras que de Nerval escribióGautier: "N'a causé d'autrechagrin a ses amis que celui de samort."

Nunca sacrificó en el altar delbuen éxito o del oportunismo. Suprobidad literaria parece ilustrarestos versos de Villiers deL'Isle-Adam:

Sin embargo, el escritor que no esctibiaque también era Julio Torri, havenido adquiriendo en la últimadécada cada vez mayor importancia,no sólo en México, sino en el .extranjero. El libro de Beatriz Espejo,Julio Torri, uoyerista desencantado es una

nos dej aron breve producción perode sorprendent e calidad y un nobleejemplo de amor exclusivo a laBelleza . Deliberadamenteinadaptados al medio ambiente,atentos sólo a un alto designioespiritual. Almas escogidas de lafamilia del orgulloso Cavalcanti,sus cortas y atormentadorasexistencias tienen el matiz derareza de los poétes maudits.

Sus estudios dotaron parasiempre, a Díaz Dufoo Jr., dedistinción meditativa. Con él muerelo mejor de una generación que seagota en ingrata lucha con el mediopoco propicio a las manifestacionesde la cultura. Tan loco, tanvaleroso, tan nietzscheano, cuantosle tratamos podemos repetir las

al

oE~

::iQjUlID

NID;¡¡;Ne

<3IDj

.2"~wID

"C

::lalO

eID

al"C'EOU'--- ---...:. -..J

_________________ 37 _