La Mas Fuerte

5
IA MAS FUERTE

description

Obra dramatica de August Strindberg

Transcript of La Mas Fuerte

IA MAS FUERTE

PERSONAJES

S¡ñon¡ X, actriz, casacla-

S¡ñonrn Z, acúiz, no casada.

Un rincon, dc un café sóln para ssñoras: d.os pequños ael.adoresde hierro, un diaán de terciopela rojo y alg,nas sillns. Entra laSE-ñone X con traje dt intierno, sombrero y abrigo: un canastillo ja-ponés al. brazo. La Srñonrrn Z atá. smtada an.te ttna botella d¿ cer-aeza a, nedio aaciar; lee un, pniódico ilustrado qu"e dcja mseguid"apara tomar ohos.

Stñonn X, Buenas, quericla Amelia. ¡Tir así, tan sola, la no-che de Noel, como una desdichada solterona!

Z¿ S¡ñorurn Z lannla los ojos del periód,ico. Haa un moaimimtod,e caba,a y continúa leymdn.

¿Sabes?, me da pena verte así, sola, sola en un café. ¡Y lavíspera de Noel! Me da la misma pena que una vez en Parísdonde ü un cortejo de bodas en un restorán: la noüa leíaun periódico humorístico mientras el noüo jugaba al billarcon los testigos. ¡Uf'! -pensaba yo- ¡Con semejante principio,qué continuación tendrán y qué fin! ¡El, jugaba al billar lanoche de boda! ¡Ella leía un periódico humorístico! ¿Te dascuenta? Pero, bien, este no es completamente el mismo caso.

Entra una criad,a, coloca una taza d¿ chocol,a,te

ante ln Ssñma x y salz.

Voy a decirte Lrna cosa, Amelia. Ahora pienso que hubie-ras hecho bien en guardarle. Yo era la primera, yo misma,en decirte ¡perdónale! ¿Te acuerdas? A estas horas podríasestar casada y tener un hogar. ¿'fe acuerdas del pasadoNoel, qué dichosa te sentías, cuando estabas en el campoen casa de los padres de tu novio? ¿Cómo apreciabas enton-ces la felicidad del hogar? ¡Ganas te daban hasta de dejar el

133

teatro! Sí, querida Arnclia, la casa es' con todo, lo rrtcior'

que se pr,"á" tencr -desPués dcl te¿rtro-,y los hijos, ¿sab<'s?

¡Ah, no, t.ú no cornpren<les estas cosas!

Srñorrr.t Z' (Aire despectitto')

(Carga y lita con.tra, ln Señ'rnita' Z.)

Ssñozur,A 7,, (Gest,o tle rniedo.)

Snñont X, ;Te llas asustado? ¿I las crcítlo que te quería ma-

Srñorur¡r 7,, (A4ira ltot- en'citntt' del pti'ótlico, iróni'ca y ntriosa')

S¡ñonr X, en ca'da zapatil'Ia') ¿Ves qrré pies

tan pequ si üeras qué aire elegante! ¡Túno l'e hás tillas!

Sr-ñonrm Z, (Ríe a carcajada,s.)

Suñopr X, ¡Aticrrcle rtn poco! (Ilace anda'r a las zapatillas sobrc,

la ruesa.)

Stñonrr,q Z, (Curcaja,da.)

SEñonn X, Yluegc-r cttatrclo st: enfátla, da pataditas así: "¿Qué?

134

¡l,stirs r:ondcnadas apre nderán en st¡ vicla a hacer café!¡lftrm! ¡Iista vcz cs¿ts cretinas tro ltan despitbilado como esdebiclo l¿r rnecha cle la lárnpara!" Y otra vez es la corriente<l<' airc (¡te etrtra por clellajo clc la prrt:rta, y siente frío a lospies: "¡Dios, qnó fiío, 1, cs¿rs icliot¿rs empcdernidas que nosaberr ctriclzrr el f'rreso ckr la eslrrfal" (Fnta l.as za,pntill.as, lastt,cln de tt,nu. con.l,ru cl. ern|rcin.e de lu oha.)

Sr:ñorrrr¡ 7, ( Car cajurla. )

Snñc-¡lre X, Y lut:go, cuanclo vue ive a lltrscar slls zapatillas queM¿rría ha prresto dcbajo rlel arrnario... Pero no, es vergon-zoso burlarse así cle su rnariclo. .A pcsar dc torlo, cs galante;un marirlito cle una vcz. ¡Un l¡larido así te hrrbiera hecholirlta a ti, Amclia! ¿De <¡ué te rícs? ¿Qtré? iQué? ¡Y sé quenlc es fi<'I, sí, lo sé! Iil nrisn¡o rne h¿r conLaclo... ¿De qué teburl¿rs? (lran<lo )'o hací¿r la tot¡rnéc por Nonrega, vino esanralu pi'cora <[e Fcclerica )¡ trató de sechlcirle. ¡Ima.qínatc<¡tré infhrnia! (Put.su..) ¡Ah, si lo hubiese intc'¡rr.ado cuando\'<r esf aba cn cas¿r, le szt<'o los ojos! (Pausu.) Us una dicha quernc lo hzryu contnclo el nrisnro Bob, que no haya llegado anris oíclt'¡s por otros. (I>ausa.)

Pero Fccleric¿t no lla si<lo la única, tír lo sabes. Nocom¡-rrelrdo por qué, ¡tero las rnujeres se vnclven todas lo-cas por lni urariclo. Al pareccr sc imaginan que tiene varaalta en las contratas cle'l '.leatro porque está elt el Ministerio.T'Ír misrnir, AcAso, has corriclo clctrás dc é1. No tengo en timás confianza <l<' la pr<'cisa, pcr() a('tuahn<:ntc sé que no seilrtercsabzr ¡tor ti, r' sicrrrprt' tuve la irnprcsión rlc que tú pa-rccí¿rs gr-rar<lar lr: un llo('() cle rt:rrcor. (I'uttsa enbu,razo.sa. Qte-du,n, m.i¡án.rlo.se.) ¡V'rr ?r casa. c.sta noche, Amelia, y haz ver asíque no rrt'ls r¡uiercs rrrirl, qu(: no rne qrrieres nral, al rnenos!No sé, p(-'ro rn() pirrccc quc cs partícularmente clesagrada-ble estar enfacla<.l¿r corrtie'o. Qrrizá es porque aquella vez meatravcsé yo cn trr calnil¡r¡. (PatLsa.) ¡O bicn... no sé, llo com-prenclo por qué, c¡r firr!

La Strñtnita Z con.ternltllt. cuñosrt¡n.en.te a ln Señ.ora X. Pausa

¡Fue Lal) extrario el cornienzo de nuestras relaciones!Cuanclo te vi por primera vez tllve rniedo de ti; tanto lniedoque no rne atrcvía a pcrclerte de üsta; siempre csf.al)a a tulado. No me atrevía a ser t-Lr cnenriga: por eso fui tr¡ ¿rnriga.Pero era ttna rlesavenencia en casa c.ada vez que tri ibas ¿t

vernos, porque yo notaba que rni marido no podía s()p()r-t.arte, y entonccs me setrtía zt disgusto, corrro coll un vesti([oque no nos sierr[a bien, 1, hacía tc¡rlo lo c¡ue podía para qucél se r¡rostrara amable contigo, sirr conscguirlo. ¡Hasta <'l

mon)ento en que fuiste prornet.icla! Entonces una üva ¿rnris-

tacl brotír entre vosotros; dio Ia impresiór), por urr rn()nl('n-[o, de que hasta elltonces lro habí¿ris osaclo mostrar()s vu('s-tros sentitnií'ntos..., quc os atrevíais ahora porque tlr \,:r r'.-tabas a crtbicrto. l)cspuós, ¿cn qué vino a parar toclo 1r(lu('-llo? ¡Yo no estaba celosa, cosa extrarla! Yrecuerclo cl l¡lrrrti-zo, cuando tú fuiste madrina: yo le f<rrzabaaabrazttrtt'... lohizo, pero tú qtredaste tan confirsa. Es decir: yo n() lo notí:entonces..., después, ta[)poco; no he pensatkr crr t'llo...¡hasta alrora! (Se lnu.n.l,tt, st.iltil.amtn,Le.) ¿Por qué rro <lit'r:s na-da? No has dicho ni una palabra clcsde que est()y u<¡rrí, rnehas de-jadcl hablar a mí sola. Con tus o-jos has <lcv¿ur¿tdo to-dos mis pensamient-os, qrre pcrntanecíar-I corn() lrr sccl¿t cru-da en cl capullo. ¡Pensantientos..., sospechas, <¡rrizh..., déja-me reflexionar!... ¿Por qué has roto tu boda? ¿l)or <1ué nohas vuelto nunca a nllestra casa descle entollccs? ¿Por quéno c¡uieres venir con nosotros esta nochcl'

Srñonrrn Z, (IIace ademán. de it'a h,ablar)

Srñon¡ X, ¡Cállatel No tienes necesidad cle decir nada, por-que ahora lo comprendo todo yo sola. Era por eso, y Poreso, y por eso. ¡Ya está! ¡Ahora toclas las cuentas salen jus-tas! (Despe.ctiua^) Ah, )/o no pueclo estar sentacla a la mismamesa que tú! (Pasa su,s paqu,etes a oh'a nesu.) Por eso es por loque debía bordar tulipanes qtte detesto elr sus zaPatillas;porque a ti t.e gtrstaban los tulipanes. Por eso es (Tira al stt,e.-

ln la,s za'pal,illas.) p<>r lo que clebíamos pasar el verano al bor-de del Malarn: porque t.it no podías soportar el mar. Y rni

136

hijo clebía llarnarse Eskil porque ttt padre se llantzrb:t irsí: 1'

yo clcbía llevar tlls colorcs, leer ttts escritores pr<rrlilt'<'lrts,corncr los platos clue a ti te gttstau, bcber las bebidas (lll('l('asraclau, trt chocolate por e-iemplo; y además... ¡()lr, l)iosmío! ¡Es abolniuable pcttsarlo, cs abominablc! ¡Torltl, torl,rvenía clc ti a mí, hasta ttts pasiotres!...'I'r alma se rlt'sliz:rlr¡ten l¿t rnía collro Llrt qtrsarto en la matlzaua: roía, roía, itgttir'-rcaba, hasta qtte Iro qrtedase míts que la monda cotl llll I)()-co cle harina lregra. Yo quería huirte, Pcro no po<lí:r: tri t's-

tabas allí coll tus o-jos negros, como una serpicnte, y ¡¡¡1' f:¡s

cinabas..., yo no rnc sentía batir alas rnás quc para lattzirt-me hacia ti. Estaba eu el agua, atacla de pics, y crtartlo ttt:isbraccaba tnás rne hundía, y hasta el fondo. Y tú a<'c<'lritlrlscon)o ltn c?utgrejo gigante Para apresarmc entre ttls l('ll:l-zas. ¡Yahora \¡a estoy en ellas!

¡Ah, córno te odio, le oclio, te odio! Ytú permall(:(:('s s('ll-tada, tranquila, inclifereltte, sin saber si la luna es llll('vit (t

mcngl¡alrte, si es Noel o¿\iro Nuevo, si los dernás soll <liclro-

sos o clt:sgraciados; iucapaz de odiar ui de amar; illrrltivi I r',r-mo Lrna ciE¡üerla ante ulr agujero de ratones. ¡Tú no 1lo<lí:rs

sorbo con i,n,tención.)El chocolate, Por lo demás, es muy bueno para lir s:rlrrrl' Y

si he aprerrdido de ti a vest.irme, lanto mejor: es() ll() lt:t lrr'

cho más ql.¡e atraerrnc rn/rs a ¡ni nr¿rrido, tír ibas perdiendotoclo lo que \¡o ganaba... Sí, a.juzgar por ciertas se ñales,creo que lo has ¡rercli<lo ),a. Pero tri pensabas sin drrda queyo mc retir¿rría, conlo tÍr hicistc antario y irhora te pcsa. Pe-ro, ahí ticnr:s, yo no mc l'ctiro.

¡No seanros nrezquinzrs! ¿Por qué no había yo de tomarmás que lcl c¡rrc naclie quisiera?

Y mira tú, a 1-rn cle ctrt:ntas, acaso soy yo en este momentola rnás frrcrtc..., tir no has rccibi<lo nllnca nacla de mí, nohas hecho rnás que dar lo que tenías... y ahora yo so)/ conrocl ladrón <lr:l <:uento: cr¡anrlo tú dcspcrtaste, yo había t()rn:r-do lo quc zr ti tc hací¿r firlta.

¿Círmo cs, plros, que cnlre tlrs rnanos torlo es estóril, sirr

valor? T'úr no poclías c.onscrvar el arnor dc un ltoull>rr: <'on

tlrs tulipancs v tus pasiortes..., )'),o sí ptrcdo: [út l.lo potlí:tsaprender el arte cle la vida en Lus libros como vt¡ l<¡ lrt'aprcncliclo; ino tc era tl¿rdo [ener ull pequerlo Eskil atrrrr¡rrctu paclre se llarnaba llskil!

¿Y por qué te callas siempre, siempre? Sí, 1,o he crr'í<loque eso significaba ftterza, pero no cra qr-rizá más qttt: n() t('-nías nada qtre clecir. ¡Porque no sabías pensar nacla! (Se lc-

uanla y recog'e las zupat'ilkts.)Ahora vtrelvo a casa y lne llevo los tulipanes conmigo...

¡lus tu,lipan,es!1'ú no has podiclo apreudcr nada de los cle-

más, no h¿ts sabido inclinarte..., y por eso te has quebradocomo unjunco seco. ¡Yo, no!

¡Gracias, Arnclia, por toclas ttrs buenas lecciottes, graciaspor haber e nscñado a mi ¡narido a anrar! Ahora yo luclvo acasa, a aurarlc. (Sal¿.)

(,

138