La palabra

De: Pablo Neruda

…Todo lo que usted quiera, sí señor, pero son las palabras las que cantan, las que suben y bajan… Meprosterno ante ellas… Las amo, las adhiero, las persigo, las muerdo, las derrito… Amo tanto las palabras…Las inesperadas… Las que glotonamente se esperan, se acechan, hasta que de pronto caen… Vocablosamados… Brillan como piedras de colores, saltan como platinados peces, son espuma, hilo, metal, rocío…Persigo algunas palabras… Son tan hermosas que las quiero poner todas en mi poema… Las agarro al vuelo,cuando van zumbando, y las atrapo, las limpio, las pelo, me preparo frente al plato, las siento cristalinas,vibrantes, ebúrneas, vegetales, aceitosas, como frutas, como algas, como ágatas, como aceitunas… Yentonces las revuelvo, las agito, me las bebo, me las zampo, las trituro, las emperejilo, las liberto… Las dejocomo estalactitas en mi poema, como pedacitos de madera bruñida, como carbón, como restos denaufragio, regalos de la ola… Todo está en la palabra… Una idea entera se cambia porque una palabra setrasladó de sitio, o porque otra se sentó como una reinita adentro de una frase que no la esperaba y que leobedeció… Tienen sombra, transparencia, peso, plumas, pelos, tienen de todo lo que se les fue agregando detanto rodar por el río, de tanto transmigrar de patria, de tanto ser raíces… Son antiquísimas yrecientísimas… Viven en el féretro escondido y en la flor apenas comenzada… Qué buen idioma el mío, québuena lengua heredamos de los conquistadores torvos… estos andaban a zancadas por las tremendascordilleras, por las Américas encrespadas, buscando patatas, butifarras, frijolitos, tabaco negro, oro, maíz,huevos fritos, con aquel apetito voraz que nunca más se ha visto en el mundo… Todo se lo tragaban, conreligiones, pirámides, tribus, idolatrías iguales a los que ellos traían en sus grandes bolsas… Por dondepasaban quedaba arrasada la tierra… Pero a los bárbaros se les caían de las botas, de las barbas, de losyelmos, de las herraduras, como piedrecitas, las palabras luminosas que se quedaron aquíresplandecientes…el idioma. Salimos perdiendo… Salimos ganando… Se llevaron el oro y nos dejaron el oro…

Se llevaron todo y nos dejaron todo… Nos dejaron las palabras.

Edición 1 8 9 Director Alberto Gómez Aristizábal Cortesía de PROMEDICOSeptiembre – Octubre de 2017 Publicación independiente Licencia 01188

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F r u t a s o l v i d a d a sPablo Mejía Arango

Aunque respeto los gustos de los demás me pareceincreíble que a muchos no les gusten las frutas ylas verduras; inclusive conozco algunos quetampoco comen hortalizas. Dietas basadas encarne asada, papas fritas, tajadas de plátano ysancocho, además de todo lo que envíen adomicilio, alimentos que en su mayoría conformanuna dieta poco saludable y desbalanceada. Tampoco quieren oír hablar de los jugosde frutas naturales y en cambio prefieren las gaseosas y demás bebidas artificiales,aparte del gusto por batidos, helados y malteadas.

Es común que los papis por hacer bonito hagan feo, como cuando crían a sus retoñosdándoles gusto en todo lo que prefieran y por lo tanto no les enseñan a alimentarsebien. Infantes que empiezan a tener dificultades cuando los invitan a comer a otracasa porque con seguridad no les va a gustar lo que sirvan en la mesa, situación quese convertirá en una cabecera cada que les resulte un programa por fuera de suentorno. Después viajan a otra ciudad a estudiar en la universidad y deben vivir solos,sin la mamá dispuesta a atenderles todas sus demandas y resabios, y sin saberpreparar un huevo o lavar un calzón; seguro van a lamentar no haber recibido lainstrucción necesaria.

Por fortuna crecí en un hogar donde nos enseñaron desde chiquitos a comer de todo,a no poner perinola en la mesa, ayudar en la cocina y defendernos en los oficios de lacasa; mi madre no podía con semejante carga y por lo tanto necesitaba nuestracolaboración. Una educación básica como esa se agradece toda la vida, ademásporque nos inculcaban disciplina y reglas de comportamiento.

Para mi gusto las frutas son parte esencial de la dieta diaria, pero no solo por su saboro frescura, sino por la importancia que representan para la digestión y la nutrición.Durante la niñez cogíamos las frutas directamente de los árboles y en las fincas lasmás comunes eran las naranjas –ombligonas, limas, toronjas-, los limones –decáscara gruesa, mandarinos, pajarito-, las mandarinas –de varios tamaños y sabores-guayabas agrias y dulces, zapotes, mangos, guamas, chulupas; grosellas, madroños,corozos; y lo que hubiera disponible en esos bellos bosques que servían de sombra alcafé.

La fruta comodín era el banano, porque colgaban un racimo en elcomedor de la finca y cada que un muchachito decía tener hambre, ledaban uno mientras era hora de las comidas; la mayoría de las sopas seacompañaban con un banano y en época de vacaciones mi mamá lospelaba, los engarzaba en un palo y al congelador. Después los repartía a

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la hora del algo y empezaba uno a lamer el artesanal helado, el cual terminabaconvertido en una baba negra muy poco provocativa.

Rara vez teníamos acceso a frutas como peras, manzanas,duraznos, uvas, melocotones o fresas, y en cambio en los potrerosdonde después construyeron barrios como La Camelia, Sancancio oPalermo encontrábamos matas de uchuva y moras silvestres; lo quesí teníamos prohibido comer eran los lulos de perro y el temido‘tapaculos’. Otras frutas no las volví a ver por poco comerciales:Mamey, chachafruto, jaboticaba, pomarrosa, pepino de agua, ciruelacriolla. Algunas por escasas: Badea, mangostino, chirimoya. Hoydisfruto de los sabores y aromas de las frutas, además porque sonsaludables. Igualmente mis amigos finqueros nunca olvidan traerme remesas conproductos de sus parcelas.

Disfruté mucho al rescatar el sabor del mamoncillo, desde hace tiempoperdido en mi memoria. Los encontré en una venta callejera y comí hastaque me toqué con el dedo. ¡Deliciosos!

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Piedad Córdoba : ---- ¡¡“Yo no conozco a ningún presidente queame tanto a su pueblo como MADURO!!

(TAN BELLA , MUEREN ASESINADOS DIARIAMENTE 2 O 4 0 7 VENEZOLANOS INERMES)

OBITUARIO

Murió a mediados del pasado mes de agosto el Doctor Jesús FonsecaIragorri; no vamos a relatar los doce años impiadosos de su calvariopatológico. Recordamos al colega sabio en su profesión, cordial en eltrato con sus pacientes, colegas, personal de la clínica, su sentido delhumor que era un bálsamo de tranquilidad, la caballerosidad quesiempre lo distinguió. Su fresca risa era un cascabel de alegría querecorría los pasillos de la clínica.

En las frecuentes charlas que tuvimos nos hablaba de su amor por la música colombiana, delafecto por sus hijos y sus nietos, del amor por su esposa. Chucho, como lo llamábamos,también amaba el deporte, lo encontrábamos con frecuencia en las gradas del estadioacompañando a su ilustre padre.

A su esposa Élide y a todos sus familiares enviamos el abrazo fraternal por el fallecimientode este médico sabio y bondadoso con sus pacientes y tan amigable con sus colegas.

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AMO LAS COSAS VIVASAlberto Gómez Aristizábal

Amo las cosas vivas, los ríos, los helechos,los niños cuando corren tras una mariposa,los pétalos cerrados de un capullo de rosalos lagos acunados en sus húmedos lechos.

Amo las cosas vivas, el caballo al acechode una potranca en celo, de pelambre sedosa,la sonrisa del viejo, los ojos de mi esposay en las adolescentes las fresas de sus pechos.

Las gaviotas en vuelo, las olas de los maresque acuestan en la playa sus salobres cantaresy el vientre del océano con sus yodados seres.

La alianza con mi gata de infinita ternura,Beethoven en su cosmos de alegría y pavuraY el demonio que llevan por dentro las mujeres…

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Luis Fernández Plaza

lmaguer es un pueblecito construido como un nido de cóndor, en una cimade la Cordillera Central, al sur del Departamento del Cauca. A él se llegaba

por un camino empedrado, muy estrecho, que subía haciendo una espiral quenos permitía mirarlo a la distancia. El bus escalera ascendía lentamente, tandespacio, que el primer viaje me pareció interminable. Me llenaba de ansiedad eltranscurrir del tiempo porque hice la fantasía de que se alejaba al aproximarnosy que nunca lo alcanzaríamos.

Allí hice el año de Medicina Rural.

Al caer la tarde gustaba sentarme en una roca a otear hacia el horizonte. En las noches leía alumbrado conla luz de unas velas, tiritando de frío bajo las cobijas.

El único televisor funcionaba en la Normal de Señoritas, donde tenían planta eléctrica. Las monjas meinvitaban a verlo, pero iba pocas veces, me inquietaba mucho el aroma de mujer.

Aunque sólo una vez por semana llegaban los periódicos, tenía el privilegio de mirar Le Monde y Le Fígaro,que le enviaban al párroco sus amigos de Francia. Él, un indígena de la región, con alma de poeta, hizo susestudios en Europa, pero regresó a luchar por su pueblo al que nunca quiso abandonar.

En ese lugar apacible, de existencia bucólica, había gente triste. Gente cabizbaja como la que deambula porlas calles de las grandes ciudades.

Lo cierto es que aquí como allá existen la depresión y la angustia, son el precio que paga el Hombre por serHombre.

Cuando se consumían las velas era incapaz de abandonar la tibieza del lecho y solo me quedaba el recursode pensar.

Me preguntaba, alguna vez, cuáles eran nuestras angustias fundamentales y encontré dos: una, el no tenerla certeza de dónde venimos ni para donde vamos; otra, la incapacidad de satisfacer el amor.

En esta incertidumbre muchos se consuelan con Dios como principio y fin de todaslas cosas; otros creemos en el Hombre y moriremos con la esperanza de que algúndía encuentre la respuesta. De la muerte pienso como los epicúreos: es dejar deexistir. Otros creen en el hombre-dios que no muere, que se perpetúa en otravida.

No obstante, cualquiera que sea nuestra fe, tenemos que aceptar que esta vida, laconocida, no es eterna, que envejeceremos y moriremos. No es posible vivir haciendo negación de esedestino ineluctable.

A pesar de mi anhelo de encontrar un objetivo transcendental de la existencia, con la simpleza de mirazonar, no encontré otro distinto del que cada quien le quiera dar.

A

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La incapacidad de satisfacer el amor nace, así se lo entendí a Freud, en la etapa edípica del desarrollopsicosexual. Ese amor a la madre que marcará todos nuestros amores, ese amor incestuoso, prohibido,inalcanzable, dejará en nuestra mente la nostalgia de un bien perdido difícil de borrar. Suele aflorarescuchando canciones melancólicas o mirando desde la playa la inmensidad del mar.

Hoy, pasado tanto tiempo, aunque reflexiono bajo luz flourescente, no se me ha iluminado elentendimiento y sigo creyendo lo mismo. Me ocupo más de las angustias del cotidiano vivir: el trabajo, eldinero, las relaciones personales, la enfermedad.

Confieso que no he leído a Marx como no he leído la Divina Comedia. Me aburren. Lo poco que conozco hasido a través de otros autores. Por una querida amiga supe que Marx afirmaba algo así: el hombre puederealizarse en el arte, en el trabajo o en el amor.

La mayoría, tal vez, podamos realizarnos en el trabajo. No es éste un castigo, al contrario, es algo deseable.En cualquier oficio es posible ser creativo, el crear eleva la autoestima, por eso resulta, incluso, terapéutico.El único trabajo destructor es aquel que no gusta; o el que se utiliza para alejarse de la realidad, ese que sehace en los días y en las noches, buscando olvidar el mundo que hiere.

La Medicina -ciencia y arte- da grandes satisfacciones, pero el fracaso suele ser especialmente doloroso,azas doloroso, por el mucho daño que podemos causar, y por la pretensión de ser omnipotentes. Evitemosque la gente así lo crea, somos falibles, humanos, simplemente humanos.

Tener dinero es motivo de satisfacción si se le da su justo valor: algo que sirve para obtenerobjetos materiales. Cuando se tiene lo suficiente da sosiego, es posible disminuir la lucha porel pan y desviar energías hacia actividades no lucrativas que enriquezcan el espíritu. Es motivode desgracia para quien se enreda en una interminable lucha para colocarse por encima de losdemás; o para el iluso que espera comprar afecto o saber; o para el avaro que amasa sufortuna a base de privaciones, porque está dejando de vivir negando la muerte.

La miseria, en cambio, es un mal que toda sociedad decente debe tratar de erradicar. En una ocasión,visitando un convento de Cartujos, monjes que hacen votos de pobreza, encontré una galería grande decuadros terroríficos. Mostraban gente a quienes le sacaban la lengua con tenazas, asaban vivas, o sometíana otros suplicios propios de la época de la inquisición. Pensé que solo los sadomasoquistas podrían privarsede los placeres de la vida y disfrutar de imágenes tan crueles, además, de mal pintadas.

Cuando se evidenció el inconsciente, la idea del hombre como dueño absoluto de sus actos se derrumbó. Noes posible controlar formas involuntarias de nuestro comportamiento, no obstante, en las relacionesinterpersonales pretendemos que los demás actúen como esperamos. Eso es causa de desengaños. Lo sabioes aceptar al otro como es, aprovechando lo bueno que pueda tener (Claro está que existen personas que esmejor ignorar y no pegarles un balazo)

El ser más digno de cariño es uno mismo, quien no se quiere a sí mismo no merece ser querido. Eso nosignifica egocentrismo, porque sería condenarse a la monotonía de un único amor. Por el contrario, hay queser pródigo en el afecto, podría afirmarse que quien recibe afecto es porque igualmente lo ha dado. Digopodría, porque no falta el trovador que recorra los caminos herido por un desdén.

La enfermedad es una de las situaciones más difíciles de sobrellevar porque igual que la vejez es unenfrentamiento con la muerte. Frente a ellas, el único consuelo posible es haber disfrutado de la vida; yante el dolor físico (que no calma con ninguna religión ni filosofía) o ante la imposibilidad de curación amales horrendos, la única salida razonable que encuentro es la eutanasia o el suicidio.

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En fin, veo la vida como una secuencia de frustraciones ysinsabores que deja unos espacios en blanco que hay queaprender a llenar, de ello depende que, a pesar de todo, paraalgunos sea feliz y para otros una desgracia.

Creo como los hedonistas en la felicidad como un bien, pero noexactamente buscándola como único fin de la existencia, porquesería otra causa de ansiedad. Simplemente hay que dejar quellegue.

Para ello es preciso considerar la vida como un bien y exaltar lossentidos. Borrar de la mente la idea de lo sensual como pecaminoso, y aprender a disfrutar de lo prosaicotanto como de lo sublime. De una sinfonía de Beethoven o el repicar de unas campanas en lontananza; delaroma de un coñac o del pan recién horneado; a sentir en la piel las tiernas caricias de la pareja amada, lafrescura del agua de un arroyo; a deleitarse mirando un cuadro o un atardecer.

Muchas veces me he dicho, como el profesor Otto de Greiff que, aunque fuese solamente para escucharmúsica, se justificaría vivir.

Para mantener joven el alma guardo, como un tesoro, la capacidad de soñar.

Hace un momento miraba los ojos de la Dra. Emilia Caballero, ojos de mar, y me sentíreposando en la tibia arena de las playas de San Andrés, aspirando la brisa matinal,escuchando el murmullo de las olas.

<Hace treinta años escribí este texto, en su esencia no ha cambiado mi línea de pensamiento, acaso hesintetizado mi forma de escribir… Aún recuerdo los ojos de mar de la Dra. Emilia Caballero> ( Publicado en elMagazín de Asomeva hace más de 30 años)

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RECUERDOS TRÁGICOSRamón Villalobos M.D.

El hecho que voy a relatar no fue premeditado ni se ejecutó con intención alguna.

Ocurrió un sábado 8 de Marzo en la ciudad colonial de Mompox y cuando yo era un adolescente. Pero antesde continuar el relato resaltemos lo siguiente: eramos siete los integrantes del “parche”, con más o menosla misma edad, cuyas principales actividades, después de los estudios escolares, eran bañarnos en el río,jugar en las calles football con pelota de trapo y hacer pilatunas y para esto último contábamos con unaciudad sin tráfico automotor, tranquila y con dos o tres policías que, entre otras cosas, nos tenían fichados.Yo era el que proponía generalmente un “proyecto “ que siempre era aceptado por el parche, que tenía susede en el Parque de la Libertad.

Y ya que nos hemos referido a la ciudad de Mompox, cabe recordar que esta ciudadtiene el título de “Ciudad Valerosa” por su desempeño en las gestas de laIndependencia. Es una ciudad culta, de costumbres ancestrales y donde con mucho artese trabajan la filigrana del oro y la plata y la alfarería. Son célebres sus procesiones de laSemana Mayor y no era extraño, al recorrer sus calles, escuchar hermosas melodías alpiano e instrumentos de viento. Allí en su añejo Colegio de Pinillos, donado en laColonia por el benefactor español Don Pedro Martínez de Pinillos, opté honrosamenteel título de Bachiller. La ciudad hoy está en auge gracias a las iniciativas de su Alcaldesa.

Pero retomemos el tema… Entre los miembros de aquel parche sobresalía la figura de Miguel RamírezMartínez ( hoy abogado residenciado en Cartagena ), por antonomasia “Miguelito” y quien era misegundo al mando.

Fue un sábado 8 de Marzo, día de San Juan Dios. Aledaño al hospital de este nombre está el templo de SanJuan de Dios (Construido en el siglo XVII), regentados por la Congregación de las Hermanas de la Caridad,encargadas de la santa misa y la procesión que ese día salía de ese templo a las cuatro de la tarde.

Inusitadamente y poco antes de los actos litúrgicos se me acerco Miguelito para decirme que las religiosasde aquel templo y por ausencia de Pedrito, el campanero, le habían pedido el favor de repicar lascampanas y encender los cohetes o voladores al salir la procesión y me pidió el favor que lo acompañara;cosa que yo acepté sin dilación.

Miguelito era un hábil campanero y había aprendido este arte por las instruccionesque le daban las religiosas. Alguna vez me instruyó sobre ese arte de las campanas ,cuando me dijo, entre otras cosas, que estos artefactos contenían cobre con un 20% deestaño, con algunos otros aditivos secretos que daban sonidos específicos yciertamente las campanas de los siete templos de Mompox son reconocidas por suscaracterísticos sonidos que sólo se confunden cuando tocan a rebato en los incendios ylos sismos.

Con esa invitación Miguelito me entusiasmó pero no meditó que yo de esas vainas no tenía ni el mínimoconocimiento, pues apenas había aprendido a encender luces de Bengala y no obstante nos fuimos a recibirlos voladores de manos de las religiosas del templo. Subimos a la torre por una escalera de caracol , demadera y angosta. Miguel, con tres toques de campana repicó para llamar a los fieles a la misa y a la

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procesión y previamente me había pedido que encendiera yo los voladores mientras él tocaba lascampanas, cosa que acepté.

Los cohetes estaban unidos por una amarra y cuando la procesión franqueaba, hacia la calle, la puertaprincipal del templo de San Juan de Dios, Miguelito, rápidamente y entusiasmado me pasó un tabacoencendido con un paquete de voladores y cual sería mi ofuscación cuando al encender uno de esosvoladores se prendieron todos a la vez.

Yo, atemorizado, me liberé de aquella llama de cohete balístico para evitar quemarme. Los cohetes sesepararon y se dispersaron en la calle, como un bombardeo; se veía humo y seescuchaban sus estallidos. Fue la debacle. Las filas de la procesión se rompieron;los feligreses corrían en todas las direcciones; el paso se balanceó con la imagendel santo. El sacerdote… no supimos dónde se refugió. La banda de músicos sedispersó, mientras nosotros, después de observar sigilosamente aquella confusiónde cosas, nos acurrucamos para esquivar la mirada de los feligreses.

La procesión se reorganizó. La hermana Teresa de Jesús subió a la torre y nosincrepó furiosa del hecho y nos dijo que lo ocurrido era como para una excomunión.

No le respondimos, pues permanecíamos perplejos y mudos.

Vino la calma. Miguelito con los ojos desorbitados –entre serio y risueño- me inculpódel hecho y con voz entrecortada y con argot costeño-caribeño me dijo: Miedda, nojoda..! So pendejo… Tu siempre haciendo EMBARRADA.Te cagaste en la procesión…

Nos miramos maliciosamente y soltamos una carcajada y en señal de AMISTAD YSOLIDARIDAD chocamos los puños.

LOS MADUROS Y DIOSDAOS se vanaglorian de hablar de la república BOLIVARIANA DE Venecuba.Bolívar ha dicho :

“Huid del país donde uno solo ejerce todos los poderes: es un país deesclavos.”

“Un soldado feliz no adquiere ningún derecho para mandar a su patria. No es el árbitrode las leyes ni del gobierno. Es defensor de su libertad.”

"Maldito el soldado que apunta su arma contra su pueblo".

“Más cuesta mantener el equilibrio de la libertad que soportar el peso de la tiranía.”

“Como amo la libertad tengo sentimientos nobles y liberales; y si suelo ser severo, essolamente con aquellos que pretenden destruirnos”

“Todos los pueblos del mundo que han lidiado por la libertad han exterminado alfin a sus tiranos.”

EL PENSAMIENTO DE BOLÍVAR

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Allá en el Congreso,que dulce soñada,en largo bostezosueña en mermelada

LOS BELLOS DURMIENTES DEL CONGRESO

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( EL MAGO : Para unirnos a un aniversario más del 12 de octubre, levantamos el telón )

Historia de un Genovésque en aventura increíbledemostró cómo es posiblevoltear un güevo al revés.

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Al levantarse el telónestá al centro un camisóndentro del cual Isabelhabla con un pantalónque tiene adentro a Colón,y que le queda zancóncomo si no fuera de él.

Decorado y teloncillo:Se ve en Castilla un castillocon treinta puertas al foro;unas dicen “inodoro”y otras “-vote por Rosillo”.

(AVISO DE LA EMPRESA):-“El aparte 24de la reglamentaciónprohíbe sin excepcióndesnudarse en el teatro”-

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Colón (a Isabel):-Si plata tú me consiguesdescubriré el continentey descubriré igualmentequién es el señor Rodríguez

Isabel:-Todas mis joyas son tuyasy si te ves en aprietos,en América Polletote conseguirá unas puyas.

(De un estuche de fantasíasaca joyas y otras más…(fíjate que bobería,decime lo que opinás).

Colón:-Con este rico joyelme basta para el pasaje…

más contesta. –“El hospedajecon que lo pago Isabel?...”

Apuntador:(Tendrás una bolsa llenacuando llegue Fray Marchenaque fue un momento a la esquinaa comprar una gallinay está por entrar a escena).

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(Marchena llega cual rayocon una gallina en pesoque además de ser de yesosabe cantar como gallo).

Autor:-Señores, con el permisovoy a poner otro aviso:

-AVISO:Para evitar altercadosse suplica a los señoresno colgar sus interioresen los palcos numerados.

Isabel (a Marchena):-Marchena por compasióndadle un doblón a Colónque aunque tiene mis alhajasle están faltando dos lajaspara pagar su pensión.

Marchena a Colón:Ay, Colón, con ese viajecada minuto apareces,y ya van como diez vecesque te he pagado el pasaje…

Más hoy, manque te calientesy me declares la guerra,si quieres vete por tierrapero conmigo no cuentes.

Isabel:-No os calentéis ¡oh Marchena!

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que os hace daño la cena.

La gallina al público:Hay que bajar el telónlo menos un cuarto de horamientras esta servidorapone el huevo de Colón.

YO:(Antes de que nos descubran:¡¡Que viva monseñor Güiles!!,hoy les cuento que el decanoechó a un secretario sanopa colocar a “TORILES”).

INTERMEDIOAVISO:(Cumplimos con advertir,previendo toda protesta,que se prohíbe escupirsobre el director de orquesta).

(Hay música de bambucoy el telón se re-levantamientras la gallina cantaun merecumbé maluco)

YO:-(Con perdón de fray Marchenase me olvidaba decirque la Reina está muy buena).

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Fray Marchena (que examinalo que puso la gallina):-esta gallina está loca.

Isabel:-Se equivoca la piroca!!Colón:-Yo lo desconozco moscoy al verlo me maravillomientras las velas elevo:en vez de poner un huevola bicha puso un bombillo!!

Isabel:-Feliz tú, Colón genial,Cristobal L. Colón,

que te darán el vidónde ver la serie mundial.

El Rey Don Fernando 7(que de repente se mete):

-“Y yo que no iré al estadiocargaré mi dura cruzy oiré el juego por radiosi no me cortan la luz”.

(Sale de viaje Colón,llega aquí el 12 de octubrey en San Agustín descubreun busto de ….NAPOLEON).

Descubrió un Nuevo Mundofue una hazaña dolorosa…Y con cariño profundonos trajo a Juan de la Cosa.

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ELESPECTADOR.COM

Por: Gustavo Páez Escobar

Injusticia social

Estaba cantado que el presidente Santos no sancionaría la ley de reducción de la cuota de salud delos pensionados. Desde que hace tres años el proyecto comenzó a abrirse campo en el árealegislativa, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, manifestó su clara intención de oponerse aél. Y lo hizo hundir varias veces.

En el último trayecto, se veía el horizonte más despejado, gracias, en primer lugar, a la vigorosaacción de varias organizaciones de pensionados, y en segundo, al eco que tenían esas voces en elmundo político, medios de comunicación y opinión pública.

Según dijo Edmundo López en su columna del 27 de febrero de 2015 en El Nuevo Siglo, el ministro“se salió de los trapos para amenazar con su renuncia si el Congreso aprobaba la nivelación para lasalud”. Esta intimidación insólita vino a cumplirse, si no con su renuncia, que ya no era necesaria,con el acto del presidente al objetar la ley (junto con la que reducía en 150 semanas el tiempo paraque las mujeres que devengaran menos de dos salarios mínimos pudieran pensionarse), por ser“inconvenientes e inconstitucionales”.

Era todo lo contrario de lo que había dicho en su campaña presidencial: “Hay un proyecto de leyen el Congreso de la República, y yo voy a respaldar ese proyecto de ley. Ustedes han sidolas víctimas de un sistema lleno de dificultades, de burocracias, inclusive de corrupción”.

Tamaña contradicción pone de bulto su insensibilidad social hacia los pensionados (hablemos solode ellos), y ratifica, por otra parte, lo que se ha dicho en distintos tonos: que el presidente se hacaracterizado por decirle mentiras al país. En este caso,se hace evidente la conocida actitud del ministroCárdenas al entorpecer el proyecto aprobado por laplenaria del Senado (con 59 votos a favor y ningunoen contra). Resultado contundente. Las objecionespresidenciales sobre el par de leyes representan la vozcantante –y victoriosa– de su ministro estrella, a quienno quiere perder, y por quien parece sentir temorreverencial. Con el socorrido argumento de que noexisten recursos y se carece del aval del Gobierno, seaumenta el bache de la injusticia social del país. ¿Acaso la promesa en la campaña presidencial nosignifica ese aval?

Esto es lo que tendrá que dilucidar la Corte Constitucional en caso de que la ley objetada tenga laratificación del Congreso y se traslade a la Corte. Por encima de todo, debe prevalecer el sentido dela justicia. No es que se carezca de recursos. Es que no se quiere arbitrarlos. Así lo expresóMauricio Lizcano, presidente del Congreso: “Al ministro de Hacienda le gusta el Congreso queimpone impuestos, pero no el que atiende los sectores más desfavorecidos de la población”.Y agregó: “En el Congreso tenemos en cuenta el impacto social de las iniciativas, pero también te-

nemos en cuenta que a este Gobierno le aprobamos una reforma tributaria con la que se podríancubrir este tipo de gastos”.

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Queda, con este acto desenfocado, una mancha en el Gobierno. Lo mismo queesta columna ha reconocido y ponderado los logros de Juan Manuel Santoshacia la conquista de la paz –la que cada vez se afianza más en el país–,lamenta estos desvíos inexplicables de su administración.

Poder ser hombreCarolina Martínez

Yo sí hubiera querido ser hombre. Es más fácil, me parece. Si yo hubiera sidohombre tendría músculos y no tendría miedo: a una calle oscura, a montar entaxi, a llegar de noche. Ni a bailar sola en la playa. O irme sola a un concierto.A un viaje. A un bar. A una playa nudista. Si yo fuera hombre sería tanirresponsable como ellos y no mediría el peligro. El conductor que me hablaquerido en el taxi no sería una amenaza. Es más, si llueve y estoy en la calle, memonto en uno y me voy, así no más, como si nada. Manejaría mi carro, sola oacompañada, hasta el fin del fin.

Si hubiera sido hombre hubiera hecho camping con mis amigos, y quién sabe, hasta me gustaríanlas motos y me iría en una a recorrer el mundo. Los hombres pasanmás bueno. Van solos a las fiestas sin que nadie los critique. Aprendena cambiar llantas y si manejan por una carretera solitaria no vanmuertos del susto. Pasan un túnel oscuro sin saber qué hay al otrolado. Son más osados los hombres y también menos locos. Más simples,menos cursis, más felices. Los hombres pueden tirar y no enamorarsede su amante y no tienen la necesidad de decir te amo después de

hacerlo. Comunican menos, por lo que se arrepienten menos de sus palabras.

No quedan embarazados, eso es fundamental. Si yo hubiera sido hombre hubiera entendido quelas mujeres son así porque todas son madres potenciales. Sabría que ellas están hechas de otromaterial, de uno que crea la vida con su propia sangre, y entendería queson tan fuertes como su vientre y tan frágiles como sus huesos. Notendría yo que ver telenovelas. Vería fútbol, que idiotiza más. Pensaríaque son más importantes los goles de Messi que su historia de amoreterno con Antonela y su hermoso matrimonio con dedos tatuados, conhijos y con todo. Entendería que lo que hace a Macron un hombregrande es haberse enamorado de su profesora Brigitte a los quince añoscuando ella tenía cuarenta. No tendría que cocinar. Si no hubieraalmuerzo no sería mi culpa. Y además, no tendría por qué saber quienesson las lobas de las Kardashians, y jamás, jamás habría visto Quién tienela razón o Casos de familia.

No me maquillaría ni le tendría pavor a un gordito en la cintura, notendría que combinar la ropa cada día ni hacer tantas compras para ser feliz. No conocería la

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envidia. Bueno, tal vez sí, pero del taller de herramientas de un amigo. Pero nosabría lo que es esa envidia de querer los zapatos de otra, o estar en ellos, asíaprieten. Si después de ser mujer yo fuera hombre, comprendería perfectamentepor qué dicen que es mucho más letal la envidia de una amiga que el odio de unenemigo y sabría también por qué a las amigas no se les puede contar lo regio quees un novio en la cama. Es muy probable que si hubiera sido hombre entendería

por qué carajos los hombres siempre quieren. Por qué no les gusta más una mujer que es capazde abrir el corazón y no las piernas. Y por qué se aprovechan después de lo que dice una mujercuando abre su corazón. Y si fuera un hombre inteligente podría yo saber que no importa el porqué, pero en el alma de una mujer se quedan para siempre esas palabras que no se borran con unramo de rosas ni un lo siento. Sabría que el por qué está más allá del entendimiento, pues lasmujeres no nacieron para ser entendidas ni les importa, lo importante es adorarlas siempreporque ellas son princesas únicas por su inconmensurable esencia.

Así no sepan poner chazos ni claven puntillas ni espanten mariposas negras ni arreglen lámparasni maten ratones o arañas. Así no cambien llantas y así tengan miedo de estar solas. Así, así yo lasamaría. Hasta el fin del fin. Así como ellas aman, que es distinto. (La Patria)

Les voy a amargar el día. Miren la "actividad" de un congresista:

1. Gana 42 salarios mínimos.

2. Trabaja 12 días y le pagan 30.

3. Trabaja 7 meses y le pagan 12.

4. Si no asiste al trabajo, no pasa nada.

5. Le pagan el apto. en Bogotá.

6. Le pagan los escoltas.

7. Le pagan el vehículo, y si quiere, no lo devuelve.

8. Le pagan la gasolina.

9. Le pagan el celular.

10. Le pagan la comida.

11 Dispone de 50 salarios mínimos paracontratar asesores-

12 Le pagan una prima técnica

13 Le pagan primas en junio y diciembre

14 Le pagan primas de antigüedad

15 Se pensiona con 28 millones.

16 Le dan 8 tiquetes de avión por mes.

17 Tiene inmunidad e impunidad.

18 Si lo ponen preso, la condena en casa.

19 Se puede reelegir indefinidamente.

20 Hace leyes para él y sus amigos.

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