La Panera Num. 36

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ROSARIO BRIONES Arte Ruso actual El artista neoyorquino accede por primera vez a que una cámara capte el día a día de su fecundo proceso creativo. UN GENIO DE CONSTANCIA BÍBLICA En código SAATCHI BOWIE EL MEMORIOSO SUPERMAN ENFRENTA SUS CONFLICTOS Claudio Correa CUESTIONA LA REPÚBLICA ALLEN La Panera 36 PERIÓDICO MENSUAL DE ARTE Y CULTURA I marzo 2013 Distribución gratuita

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La Panera Num. 36

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Ar teRusoactual

El artista neoyorquino accede por primera vez a que una cámara capte el día a día de su fecundo

proceso creativo.

UN GENIO dE CONSTANCIA

BÍBLICA

En códigoSAATCHI

BOWIE EL MEMORIOSO

Superman enfrenta sus

conflictos

claudio correaCUESTIONA

LA REPÚBLICA

ALLEN

La Panera 36PERIódICO MENSUAL dE ARTE y CULTURA I marzo 2013 Distribución gratuita

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La Panera

Periódico mensual de arte y cultura editado Por la corPoración cultural arte+

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Presidenta Patricia Ready Kattan Directora general Susana Ponce de León GonzálezDirectora de la sección Artes Visuales Patricia Ready Kattan Editora Jefa Susana Ponce de León GonzálezCoordinadora Pilar Entrala VergaraDirección de arte Rosario Briones RojasDiseño Rosario Briones Rojas Asistentes de diseño Simoné Malacchini y Bernardita EspinozaServicios Agencia EFEColaboradores Carolina Andonie - Sandra Accatino - Víctor Barrera - Pilar Entrala - César Gabler Violeta Güiraldes - Victoria Jiménez - Luciano Lago - Miguel Laborde - Pamela Marfil - Lina Meruane Ximena Moreno - Edison Otero - María Carolina Pavez - Paola Pino - Juan Carlos Ramírez Heidi Schmidlin - Juan José Santos - Rafael Valle - David Vera-Meiggs - Antonio VolandCorporación Cultural Arte+ Espoz 3125, Vitacura, Santiago de Chile. Fono +(562) 2953-6210 Representante Legal Rodrigo Palacios Fitz-HenryImprenta Gráfica Andes

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LAS OPiniOnES VERtiDAS En EStA EDiCión SOn DE EXCLuSiVA RESPOnSABiLiDAD DE quiEn LAS EMitE.

Proyecto acogido a la ley de donaciones culturales nº18.985

Artes Visuales4 Gauguin, el iniciador del canon exótico 8 Mark Lombardi y sus intentos de hacer orden del caos

12 taco alto, una moda creada por los hombres

13 ¡Mi trono por una cama!

Cine18 Premio Oscar, el nO es la regla

Ópera20 Francesca da Rimini vuelve al MEt

Música 24 trío Sagare, cuando menos es más

Libros 28 Making-of de la Novela Gráfica 2013

30 J.K. Rowling, sólo para adultos

32 La columna de Lina Meruane

33 Paul Auster y J.M. Coetze, complicidad literaria 34 Leer, un placer inagotable 36 Efecto Homeostasis, necesario viaje interno Gestión Cultural42 Chilena pionera en Estocolmo

Observatorio44 La columna de Miguel Laborde

Tecnología46 La columna de Edison Otero

47 Agenda nacional e internacional

la Panera se distribuye en todo Chile, y también en el extranjero (embajadas, agregadurías culturales, consulados y otros) con el Patrocinio de la Dirección de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores (Dirac).A través de la empresa HBbooks llega a las bibliotecas de las universidades de Harvard, stanford, texas (Austin), minnesota y toronto, y del ibero-amerikanisches institut (Berlín).Además, la Biblioteca Kandinsky del centro Pompidou de París la ha incorporado a su catálogo oficial.Premio nacional de revistas maGs 2012, otorgado por la Asociación nacional de la Prensa, en la categoría Mejor Reportaje de turismo, viajes y fomento a la cultura chilena.20 mil ejemplares de distribución gratuita.

En silencio, Bowie se encerró con el productor Tony Visconti en Nueva York a grabar canciones, en un proceso que de-mandó dos años.

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4 I La Panera

Artes Visuales

A propósito de su vigésimo aniversario, el museo madrileño finalizó recién una de las muestras más importantes en torno a la obra de Paul Gauguin.

Por Ximena moreno

Desde Londres

«Gauguin y el viaje a lo exótico» estuvo en el Museo Thys-sen-Bornemisza de Madrid hasta enero, abordando tres

temas en torno al trabajo del artista: la obra que nace a partir de sus dos estadías en la Po-linesia, el tema del viaje como traslado y la nueva concepción de lo exótico en su relación con la etnografía.

Basándose en 111 obras –de las cuales sólo un tercio pertenece a Gauguin– las curado-ras Paloma Alarcó y Marta Ruiz del Árbol indagaron en cómo lo exótico contribuyó a construir una nueva visión del arte moderno:

“La preparación de la exposición se inició hace más de tres años. Tras un intenso perio-do de investigación comenzó la elección de trabajos en la que primó el criterio de calidad. Puesto que nuestra propuesta de instalación pretendió la contraposición directa de obras de Paul Gauguin con pinturas de aquellos ar-tistas a los que influyó, debimos escoger cui-dadosamente las piezas que formarían parte de la exhibición. Los museos Metropolitan de Nueva York, Pushkin de Moscú o Alber-tina de Viena, son algunas de las entidades que con su generosidad la hicieron posible”, explica Marta Ruiz.

«Mujeres de Argel» (1849), de Eugène De-lacroix, dio el inicio a la muestra. Además de referir a la admiración que tuvo Gauguin por su obra, hizo el vínculo al interés de explo-rar otras tierras en tiempos donde Baudelaire

THYSSEN-BorNEMISZA réPLIcAS DE uNA

celebración

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La Panera I 5

1. «Matamoe, (Muerte. Paisaje con pavos rea-les)», 1892. Óleo sobre lienzo, 115 x 86 cm. The State of Pus-hkin Museum of Fine Arts, Moscú.

2. «Dos mujeres tahitianas», 1899. Óleo sobre lienzo, 94 x 72,4 cm. © The Metropo-litan Museum of Art, Nueva York.

3. «Muchacha con abanico», 1902. Óleo sobre lienzo, 91,9 x 72,9 cm. © Museum Fo-lkwang, Essen.

4. «Parahi te marae (ahí está el templo)», 1892. Óleo sobre lienzo, 66 x 88,9 cm. Philadelphia Museum of Art.

DoN EDDY«Untitled (4 VWs)», 1971.F. Javier ElorzaImage © Don Eddy,Photo © 2012 Gonzalo de la Serna.

incitaba al viaje y la noción de lo diferente resultaba fascinante. Túnez era un foco de atracción y para varios significó un primer encuentro con la diversidad. Matisse, Kirch-ner, Macke y Klee, entre otros, heredaron de Gauguin la sensibilidad por el primitivismo y por un nuevo lenguaje artístico que había mutado a partir de la aproximación a lo sal-vaje. Pero la salud, la inestabilidad económica y los intentos fallidos de difundir y vender su obra en Francia, hicieron que la vida de Gau-guin en la Polinesia fuera un sueño interrum-pido. Los colonos franceses contaminaban la cultura maorí y el paraíso del pintor se limitó a ser un terreno contradictorio que buscó au-xilio en sus escritos y en una obra que reco-nocidamente se dedicó a desviar la realidad.

La relación del artista francés con el via-je se remonta a su niñez en Perú. La vuelta a Francia implicó los recorridos que realizó como marino durante su juventud, y las opor-tunidades laborales que ofrecía la construc-ción del canal de Panamá lo llevaron en un momento a probar suerte en la construcción de éste; estuvo en Martinica junto a Charles Laval y, a su regreso a Europa, se estableció en Bretaña y después en Arles, donde convi-vió con Van Gogh. Recién ahí, a los 43 años, emprendió su primer viaje a la Polinesia. Una travesía que probablemente no hubiera reali-zado sin el incentivo que años antes recibiera de Émile Schuffenecker y Camille Pissarro, motivando su dedicación a la pintura.

–Es de suponer que la muestra tuvo una importancia especial para el museo en el marco de su vigésimo aniversario.

“El Museo Thyssen-Bornemisza desarrolló numerosas iniciativas para festejar su vigésimo aniversario; en esta celebración, el programa expositivo jugó un papel central. ‘Gauguin y el viaje a lo exótico’ tuvo un lugar prominente, no sólo por la importancia de este artista en las colecciones Thyssen-Bornemisza, sino tam-bién por su reveladora visión como iniciador de un canon exótico. Aunque no se trató exac-tamente de la continuación de «Gauguin y los

La Reina Cleopatra defendió a Egipto contra la expansión del Imperio Romano cuando sólo tenía 18 años.

orígenes del Simbolismo» (realizada en 2004), esta muestra comenzó precisamente donde aquella terminó: en el momento en que el pin-tor francés decide abandonar Europa y embar-carse rumbo a los Mares del Sur. La exposición incide en la importancia que tuvo su etapa po-linésica en las primeras vanguardias del siglo XX. En cómo su reconquista del primitivismo a través de lo exótico se convirtió en fuente de inspiración (entre otros, para los expresionistas alemanes y para los fauvistas franceses) como iniciador de un nuevo canon fundamental en la configuración de los lenguajes artísticos de principios de siglo XX ”, señala Ruiz del Árbol.

–¿En qué momento se decidió incluir a otros artistas en la muestra? ¿Fue necesario armar un vínculo así de explícito?

“Desde el primer momento, la exposición se planteó como un proyecto en el que Gauguin y sus obras de la Polinesia fueran el eje de un discurso que tenía como objeto analizar el de-seo de los artistas de la Modernidad por viajar a tierras lejanas como metamorfosis artística. El papel del pintor francés como precursor en su huida a una civilización supuestamente más auténtica creó unas obras revolucionarias donde reconquistó el primitivismo a través del exotismo, convirtiéndose en modelo para otros creadores que, como él, deseaban sepa-rarse de la tradición artística occidental”.

–Muchos de los artistas se interesaron en el tema de lo exótico, pero no todos se involu-craron con él al punto que lo hizo Gauguin.

Visualmente, ¿qué aspectos considera que evidencian esta ventaja en su obra?

“El paisaje exótico y la indolencia nativa que se mezclan con todo tipo de mitos ancestrales y de simbolismo primitivo, que Gauguin reci-bió sólo en parte de la población autóctona. A su llegada, el pintor descubrió que la religión politeísta maorí había desaparecido al igual que muchos ritos y tradiciones. Sus pastorales tahitianas son reconstrucciones imaginarias, ensoñaciones de aquella tierra prometida que había ansiado encontrar”.

–En referencia a eso, ¿encuentra su paraí-so? ¿O los viajes a Tahití y a las Islas Marque-sas se limitaron, con el tiempo, a ser simple-mente un motor artístico de vanguardia?

“La búsqueda del paraíso en Paul Gau-guin ha sido una de las cuestiones que más ha interesado a los historiadores y es una de las más difíciles de responder. Richard Bret-tell desarrolló el tema en uno de los ensayos del catálogo de la exposición, analizando las muchas estribaciones que podemos encon-trar en el concepto de paraíso gauguiniano que tan presente está, tanto en su obra como en su propia trayectoria vital. Sin duda, Gauguin ansiaba hallar una forma de pa-raíso terrenal cuando decidió huir a Tahití, donde según había leído ‘vivir era cantar y bailar’. Ese paraíso tahitiano aparece refle-jado en muchas de sus obras. Sin embargo, pronto la realidad se impuso y aquel lugar aparentemente ideal mostró su otra cara: la del paraíso perdido”.

eventos clave

Luego de la muestra de Gauguin, y dentro de la programación actual, en «Impresionismo y aire libre. De Corot a Van Gogh», el Thyssen Bornemisza exhibe alrededor de 100 obras que analizan el rol de la pintura al aire libre como “motor de la renovación plástica del siglo XX”. Revela el tramo previo al Impresionismo, donde se venían realizando pinturas a plein air anteriores a la obra de Monet, Renoir y el mismo Pisarro, a quien el Museo le dedicará una muestra entre junio y septiem-bre. Por otra parte, «Hiperrealismo 1967-2012» reunirá a los pioneros de este género, abordando

cronológicamente desde sus inicios hasta hoy, luego de aparecer a fines de los años sesenta y principios de los setenta en eventos clave, como «La imagen fotográfica, 22 Realistas» y la doCUMENTA de Kassel de 1972. Gran parte de los trabajos que se expondrán vendrán de la Meisel Gallery de Nueva York, la cual está pronta a lanzar «Fotorealismo en la Era Digital», su último y cuarto volumen.

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6 I La Panera

Por Ximena moreno

Desde Londres

Reunir a artistas de un país no sig-nifica necesariamente construir un mapa representativo del lugar. Me-nos si ese país no es más que un

común denominador y varios de los creado-res no residen en él. Los rangos de identidad son ambiguos, pero siempre aparece algún elemento que se pueda ordenar bajo un có-digo común. «Breaking The Ice: Moscow Art 1960-1980s» y «Gaiety is the most outstan-ding feature of the Soviet Union: New Art from Russia», que exhibe la Galería Saatchi de Londres, se suman a la atención que ha despertado en los últimos años el arte ruso, con la particularidad de que pocas veces se había reunido tanto material sobre él.

Organizada por la Tsukanoy Family Foun-dation, «Breaking the Ice…» se enfoca en algunas de las figuras clave y temas centra-les que atravesaban Moscú entre los años se-senta y ochenta, mientras «Gaiety...» reúne a 18 creadores contemporáneos, entre los que hay más de uno residente en Londres. Más que ser exposiciones que perfilen el lugar de

origen de estos artis-tas, confirman el sello Charles Saatchi, su aproximación al arte y el uso de los grandes formatos e impacto como herramientas de seducción.

“Las obras expuestas en la Galería provie-nen de la colección que reúne Charles. Él toma las decisiones finales sobre las adquisiciones,

determina qué obras entran en nuestras ex-posiciones y la forma en que se cuelgan en las salas. El objetivo principal en los últimos 25 años ha sido mostrar artistas emergentes y otros que podrían ser bien conocidos en su propio país, pero que no han sido expuestos ampliamente en el Reino Unido”, explica Re-becca Wilson, directora de la Galería Saatchi.

–Le han dedicado exposiciones a China, India, Alemania y otros, ¿qué determinó que esta vez el país elegido fuera Rusia?

“Hemos seguido de cerca lo que ha estado su-cediendo con el arte contemporáneo ruso en los últimos años. (…) Nos interesamos en descubrir artistas que realicen trabajos verdaderamente diferentes, muy distintos al de algunos nombres conocidos que han tenido éxito internacional-mente. El trabajo de los artistas presentes es extremadamente variado. No hay una escuela ni ningún tipo de grupo al que pertenezcan. En parte, porque muchos creadores de Rusia y de la antigua Unión Soviética dejaron el país para es-tudiar o trabajar en otros lugares, por lo que han estado expuestos a otras culturas y tradiciones.

ArTE CoNTEMPorÁNEo rUSo

En código Saatchi

Artes Visuales

SERGEI VASILIEVPrisionero con tatuaje, símbolo de resistencia.(2010)Impresión giclée, 165 x 112 cm.

“HAy UNA fUErTE SENSACióN

DE ANSiEDAD EN ALGUNAS

DE ESTAS obrAS, MiENTrAS

oTrAS SE iNSPirAN EN fiGUrAS

VANGUArDiSTAS CLAVE, CoMo

MALEViCH y ALEkSANDr

róDCHENko”.

Todo el mundo habla del sentido del humor ruso, el cual está tan presente en algunas obras y en sus títulos. La mayoría de los elegidos no ha mostrado sus trabajos internacionalmente, por lo que es una oportunidad para que la gente los descubra”.

–¿Qué los hace insistir en las exposiciones basadas en países?

“El dar a los visitantes la oportunidad de tener una idea sobre qué está sucediendo par-ticularmente con los artistas emergentes en diferentes lugares. Nos entusiasma mostrar las nuevas obras que se están produciendo al-rededor del mundo, que de otro modo no se

podrían ver.(…) Pero no sólo nos enfocamos en las exhibiciones geográficas. El año pasado se presentó un gran espectáculo de fotografía contemporánea de todo el mundo, y nues-tra próxima exposición mostrará una amplia gama de artistas internacionales unidos por su interés en el papel como medio”.

La impronta Saatchi no sólo sirve como una plataforma de mercado y difusión. Cons-truye, además, un statement sobre el conteni-do de las obras que exhibe. Las emparenta por la referencia histórica que hay en ellas, por los grados de provocación que evocan y por la ironía que rescata con su título (cita de

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ArTE CoNTEMPorÁNEo rUSo

En código SaatchiUna vez más, la galería londinense programa dos exposiciones paralelas en relación al arte de un país. Una repetida y exitosa fórmula muchas veces criticada.

Stalin, 1935): “La alegría es la característica más sobresaliente de la Unión Soviética”.

“Una de las cosas interesantes de la mues-tra es justamente que permite apreciar cómo la fuerza de las tradiciones culturales de la Unión Soviética sigue estando en los nuevos creadores. Kazimir Malevich (1878-1935), por ejemplo, todavía parece ser una figura muy fuerte. Nika Neelova y Yelena Popova –dos de los artistas más jóvenes de la expo-sición– hasta ahora no han vuelto a Rusia, pero están profundamente influenciados por la historia de su país, por la política y por su herencia cultural. Algunos de los trabajos apuntan hacia comentarios políticos y socia-les. Hay una fuerte sensación de ansiedad en las obras, mientras otras se inspiran en figuras vanguardistas clave, como Malevich y Alek-sandr Ródchenko” (1891-1956), aclara Re-becca Wilson.

ConTraSTeS y rEfErENCiAS

Anna Parkina (1979), Yelena Popova (1978) y Nika Neelova (1987) son algunas de las artistas que se han radicado fuera de

Catalina la Grande (1729-1796) reinó como Emperatriz de Rusia durante 34 años y fue uno de los mejores políticos del siglo XVII.

sorprendido lo pequeño que es el arte ruso en comparación al tamaño del país: en número de instituciones artísticas, galerías, creadores, escuelas. En todo lo que crea un clima fértil en el arte, que aquí, en la pequeña Gran Bre-taña, es mucho más elevado”, agrega Popova.

Por otra parte, Nika Neelova, quien había recibido en 2010 el New Sensations Prize 2010, entregado por la misma Galería Saat-chi (además de otros reconocimientos, como el Royal British Society Sculpture Shock Award 2012-2013), exhibe «Principles of Surrender» (2010). Trabajo que nace a partir del interés que le provocan los badajos de las campanas como objetos simbólicos y persis-tentes en el tiempo. Reflexiona acerca de la memoria, acentuando la tensión que se gene-ra entre la estructura quemada y el peso de los badajos que se sostienen y columpian de ésta: “Las instalaciones están a menudo realizadas en el momento justo antes del colapso. Es como un catálogo de desastres inminentes”, dice Neelova sobre su obra.

Esta exhibición ofrece también la oportu-nidad de apreciar algunas de las 413 fotogra-fías que componen la serie «Case History», de Boris Mikhailov (1938), que retratan la crudeza de la clase obrera ucraniana a la es-pera de las oportunidades de la Perestroika. Además de los personajes de Vikenti Nilin (1971), que se sientan con indiferencia en las ventanas de los edificios clásicos de la Unión Soviética en una actitud inexpresiva ante el abismo; o- los prisioneros de Sergei Vasiliev (1937), que revelan el léxico de los tatuajes, ayudando a decodificarlos como símbolos de resistencia.

Rusia. Parkina mezcla componentes del pop con elementos del Constructivismo, al igual que Liumidla Konstantinova (1980). Por otra parte, Yelena Popova le asigna un significa-do al carácter femenino en su obra. Desde lo geométrico, investiga acerca de las curvas y del balance, en trabajos que subordinan las formas a un efecto pictórico traslúcido. Des-de algo similar –al menos, en términos de sutileza y soporte– aparecen las pinturas de Janis Avontis (1981).

“Veo esta muestra como una nueva visión de nuestro arte contemporáneo. A pesar de que incluye obras de algunos que trabajamos fuera del país, creo que ofrece una perspecti-va independiente de lo que es considerada la creación artística rusa de hoy”, señala Yelena Popova, ex alumna del Royal College of Arts de Londres (en 2011).

–En referencia al título de la muestra, ¿cuál crees que es la característica más sobresalien-te del arte ruso contemporáneo?

“Me es difícil decirlo, porque vivo en el Rei-no Unido y no estoy completamente inmersa en la escena del arte ruso. Pero siempre me ha

DASHA SHISHKIN «What Does It Matter To Her Ever Creating Womb If Today Matter Is Flesh And Tomorrow Worms».(2012) Técnica mixta, 152.4 x 213.4 cm.

VALERY KOSHLYAKOV«Grand Opera».(París, 1995)Témpera sobre cartón, 420 x 500 cms.

VIKENTI NILINDe la «Serie los vecinos».(1993-presente). Impresión giclée, 165 x 110 cms.

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8 I La Panera

Dibujo y ConspiraCión El ArtE DE

Mark LoMbardi

Artes Visuales

Ada Augusta (1815-1852), hija del poeta inglés Lord Byron, fue pionera en el campo de la computación gracias a sus escritos sobre la manipulación de los símbolos.

Por César Gabler

Vivimos rodeados por un cúmulo infinito de información. Lo escri-bo y siento el vértigo que produce hundirse en los lugares comunes,

pero es así. Hay tanta que no es difícil per-derse en ella o simplemente ignorarla y asu-mir que toda esa farragosa cantidad de datos está ahí para explicarse a sí misma. Si es que explica algo. Sin embargo, para algunos crea-dores la información infinita es un estímulo, como el estadounidense Mark Lombardi (1951-2000), un artista post-conceptual que entendió la realidad a partir de los conflictos políticos y sociales. La compleja red de vin-culaciones que une a terroristas, empresarios y grandes corporaciones se presenta en sus dibujos a través de un lenguaje visual que está a un paso del diseño gráfico y a otro de la abstracción. En ese linde, Lombardi ofrece su trabajo como un intento de organizar infor-mación, para convertir el infatigable discurso de la prensa y de los media en un relato visual. Un intento de hacer orden del caos.

El DiAGrAMA Del poDer

Mark Lombardi no alcanzó a cumplir cua-renta y nueve años. Un día antes se ahorcó. La suya es casi una leyenda: un artista que tras años de una carrera no muy brillante dedi-

minaba por configurar un relato. Lombardi lo denominó “estructuras narrativas”.

Una aseveración del propio artista aclara muy bien la orientación y metodología de sus dibujos: “Los llamé ‘estructuras narrativas’ porque cada uno consiste en una red de líneas y anotaciones destinados a exponer una his-toria, comúnmente sobre hechos recientes de interés para mí, como el colapso de un gran banco internacional, de una compañía de co-mercio o de una casa de inversiones. Uno de mis fines es explorar la interacción de fuerzas políticas, sociales y económicas en los asun-tos contemporáneos… Trabajando a partir de noticias oficiales y de otras fuentes impresas, comienzo cada dibujo recopilando un largo conjunto de información sobre un banco es-pecífico, un grupo financiero o un conjunto de privados. Después de una cuidadosa re-visión de la información publicada, conden-so los puntos esenciales en un conjunto de

cada a la abstracción, descubre la veta que lo pone en el primer plano de la escena artística. Famoso después de los cuarenta, eso sí había escrito un par de libros y se había convertido en un experto en archivos, además de curador y hasta galerista. Experiencias que finalmente lo ayudaron en el salto que dio a partir de los noventa.

Lombardi parecía un devoto de la teoría de la conspiración y durante los últimos años de su vida dedicó todas sus energías a la realiza-ción de una obra gráfica centrada en la pro-ducción de complejos y enormes esquemas destinados a representar algunos de los más sonados escándalos de la política estadouni-dense y mundial. Lo que lo diferenciaba de cualquier paranoico era el hecho de que toda la información que exponía en sus gigantescas composiciones era pública. Se trataba enton-ces de un complejo trabajo de organización informativa, realizado de tal forma que ter-

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La Panera I 9

«George W. Bush, Harken Energy and Jackson Ste-phens c. 1979-90. 5th version»1999.

“uno DE Mis objEtiVos Es

ExPlorAr lA intErAcción DE

fuErzAs PolíticAs, sociAlEs y

EconóMicAs En los Asuntos

contEMPoránEos… trAbAjAnDo A

PArtir DE noticiAs oficiAlEs y otrAs

fuEntEs iMPrEsAs, coMiEnzo cADA

Dibujo rEcoPilAnDo un lArGo

conjunto DE inforMAción”.

Ada Augusta (1815-1852), hija del poeta inglés Lord Byron, fue pionera en el campo de la computación gracias a sus escritos sobre la manipulación de los símbolos.

notaciones y apuntes breves de los hechos a partir de los cuales una imagen comienza a emerger”.

Las imágenes toman la forma de conste-laciones, compuestas por nombres escritos dentro o fuera de círculos, que Lombardi une mediante un conjunto de líneas curvas negras o rojas, de extensión variable. El dibujo con-vierte una larga serie de hechos en un claro y, tal vez, insulso esquema. Si artistas como Leon Golub o José Balmes muestran en su obra la cara emotiva de la política, lo que hace Lombardi es su exacto reverso: devela la rea-lidad a partir de los hechos fríamente presen-tados. El artista pone el mayor empeño en la claridad y elegancia formal de sus modelos; pese a ello, los recursos técnicos son extrema-damente simples: papel y lápices de colores. Un esfuerzo romántico y encendido para un resultado frío, aburrido si quieren.

En la obra de Lombardi, el dibujo apare-

ce en su dimensión más conceptual, porque lo que a distancia podría parecer una densa y calculada composición abstracta no es sino un modelo, un diagrama que explica una compleja secuencia de acontecimientos. En un principio, estos diagramas surgen como una mera forma de traducir el relato que un amigo le hace respecto al escándalo Irán-Contras. Ante la dificultad de vincular todos los datos, Lombardi comienza a ordenarlos en diagramas. Interesado por la forma visual que adquieren y la manera en que condensan y explican la información, sigue trabajando en ellos para convencerse de que son más intere-santes que sus pinturas abstractas. Ahí radi-ca otro punto que explica el interés que aún mantiene su obra; en ella, el arte abstracto –como ocurre con Peter Halley o Rosemarie Trockell– se actualiza (o se repite) a través de su vinculación con la realidad. Si Kandinsky llegaba a sus pinturas tratando de traducir

una experiencia espiritual o musical, los abs-tractos de hoy parafrasean la economía, la ar-quitectura o la política.

unA MuErtE inTriGanTe

Estrenado en 2012, un documental se ocupa de la vida y obra del creador, su título «Death Defying Acts of Art and Conspiracy». Ac-tos de Arte y Conspiración Que Desafían a la Muerte sería más o menos la traducción, y corresponde a la leyenda impresa en la tarjeta de presentación del propio Lombardi, un títu-lo que, dadas las circunstancias de su muerte, se ofrece como ominosamente premonito-rio. Realizado por la artista alemana Mareike Wegener (1983), este filme se centra en los métodos de trabajo de Lombardi y en la for-ma que manipulaba la cuantiosa información acumulada en sus años de producción: la nada despreciable suma de catorce mil fichas, ade-más de una cuantiosa biblioteca dedicada a los temas que le inquietaban, desde las redes de apoyo al terrorismo a los negocios de la familia Bush. Pese a que las críticas no fueron favora-bles, el documental permite conocer la forma en que el artista desarrollaba sus proyectos.

Ahorcado a un día de su cumpleaños y pron-to a inaugurar una muestra importante, para algunos de sus amigos su muerte resulta aún in-trigante y misteriosa. En la película de Wegener, su madre argumenta sus dudas respecto al suici-dio Obsesionado como estaba por desnudar las redes de poder, algunos creen que sus investiga-ciones iban demasiado lejos. Sin embargo, toda su obra fue realizada con información pública y está en manos de colecciones tan importantes como las del MoMA o del Whitney.

Sin importar si develan misterios económicos o políticos (Lombardi no es el autor del código Da Vinci), la importancia de su trabajo está en la voluntad de representar amplias y complejas realidades mediante un sistema visual. El dise-ñador norteamericano Ben Fry, experto en la representación visual de datos, afirma: “Sus pro-yectos nos permiten vislumbrar la posibilidad y la profundidad con la que podemos compren-der información compleja”.

Estrenado en 2012, un documental se ocupa de la vida y obra del creador. Actos de Arte y conspiración Que Desafían a la Muerte sería más o menos la traducción. un título que, dadas las circunstancias de su muerte, se ofrece como ominosamente premonitorio.

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claudio correala belleza de la violencia

el artista ha ocupado los más diversos formatos para intentar responder las preguntas que le han provocado la pintura histórica –su declarada alma máter– y un escepticismo tan profundo como inspirador hacia las instituciones republicanas. Hoy muestra, en la Galería Patricia Ready, una irónica e incendiaria propuesta que tiene como eje a «la Marsellesa», el himno nacional francés usado para exaltar los sentimientos patrios y para levantar a los hombres en armas.

PoR paola pino a.

Primero fueron los pintores cronistas. Esos que iban al lado del Rey y re-gistraban el combate desde una po-sición privilegiada, donde las luces,

el fuego y los sones de la banda de guerra da-ban vida a un verdadero espectáculo que nu-trió la pintura histórica, transformando a este género en uno de los más nobles y de mayor jerarquía. Eso, hasta que Francisco Goya se enfrentó a los desastres de la guerra y realizó su célebre serie de grabados que inmortaliza-ron el combate por la independencia de Es-paña, dando una perspectiva de la contienda impensada hasta entonces en el mundo del arte. Goya mostró a los guerrilleros, a los muertos y al pillaje; en síntesis, dio cuenta de las consecuencias de una conflagración. Siglos más tarde vendría, Picasso y su «Guer-nica», reafirmando que la violencia, aún la más cruda, tiene una dimensión estética, una belleza –que fascina a Claudio Correa– que

artes visuales

1.

2.

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La Panera I 11

se confunde con la épica. Así como también con el clamor de las masas que, en nombre de ideales republicanos, han perdido tantas veces la razón y se han embarcado en cruentas em-presas bélicas. Temática que desvela a Correa y que lo ha llevado a retomarla una y otra vez desde una particular óptica en que la ironía y la experimentación con los soportes ocupan un lugar protagónico.

Obseso de los comportamientos sociales y de la historia, esta vez su trabajo gira en tor-no a «La Marsellesa». El himno que desde 1795 inspira a los franceses y ha animado su resistencia en momentos tan álgidos como la ocupación alemana. Su “¡Marchemos, hijos de la patria, el día de la gloria ha llegado!” ha imbuido los más férreos valores republicanos. Tan fuerte es su impronta que varios han to-mado “prestada” su música, e incluso algunos versos, para crear sus propios himnos. Y Co-rrea, irónico como pocos, se dio el trabajo de pesquisar aquellos plagios y con ellos cons-truir «Cuatro formas de ser republicano a la

1. Registro de quema de instru-mento de cera, 2013. 2. Making-of del rodaje de «Cuatro formas de ser republicano a la distancia», 2013. 3. «Si pudiera lo haría peor» (de-talle), óleo sobre tela en WC, 2000. 4. «Declaración de in/dependencia», óleo sobre papel en escalinata, 2002. 5. Making-of del rodaje de «Cuatro formas de ser republicano a la distancia», 2013. 6. Partitura de La Marsellesa del partido APRA del Perú, 1931.

distancia», que muestra hasta el 5 de abril en la Galería Patricia Ready. Un montaje que en una primera lectura desnuda la copia y que en lo profundo se pregunta por la violencia implícita en estos himnos.

Su obra se estructura en torno a un corto en 8 mm que opera como video clip y que registra la interpretación que un orfeón de guerra y un coro hacen de las “Marsellesas” del Partido Socialista chileno, del APRA peruano, y de la República Española y de la Anarquista. Las imágenes del coro son una metáfora de aquellas masas que, convencidas, marchan a la lucha, pero también son la constatación de la copia y del ardor con que cada grupo llama a luchar contra su enemi-go, ya sea éste capitalista, imperialista o repu-blicano. Así, Correa da cuenta de cómo se ha tomado la forma y se ha eliminado el contenido del himno nacional de Francia, reemplazándolo por los intereses de turno.

un MoMento de conciencia

Según Correa, una de las razones que podría explicar el interés por La Marsellesa tiene que ver con que los himnos, así como otros emble-mas patrios, están cargados de contenido: “La Marsellesa opera como un signo indicativo tan potente como una señal de tránsito. Funciona como un ícono, con un significado concreto y cerrado que genera respuestas”. Y si bien mu-chos de estos himnos llaman a tomar las armas o a luchar contra un enemigo, el artista afirma que es ésa la violencia que le interesa, aquella que está institucionalizada por un símbolo tan republicano como un himno.

–Su propuesta no pasa por lo ideológico.“Debiera ser ideológica, pero no obvia. Creo

que no hay nada más ideológico que incitar al espectador a que relea y se plantee de otra manera el contenido de algo tan cotidiano como un himno, aunque sea el de los scouts. Al hacerlo, se produce un extrañamiento que lo podría llevar a un momento de conciencia, y para mí el arte es un momento de concien-cia. En esta obra, el espectador se enfrenta a cuatro versiones de ‘La Marsellesa’ y, al hacer-lo, primero cree que está escuchando la origi-nal francesa, pero luego se da cuenta de que se trata de un enrredo de voces en castellano y empieza a reparar en lo que escucha. Me in-teresa que la gente se sumerja en la polifonía de los himnos, que lea cada una de las voces y que logre identificar sus distintos discursos”.

–Detrás de esta exaltación de los ideales re-

publicanos hay un llamado a la violencia que parece un poco absurdo en tanto la Repúbli-ca es el patrimonio de la razón.

“Sí, pero también de la ley. Recuerda que la separación de los poderes del Estado es el imperio de la ley y eso es la República. Por un lado, está la violencia de la horda y, por otro, la violencia del Estado, y ambas están unidas por un llamado a la exaltación. El uso de la fuerza debiera suponer una razón, y fi-nalmente es por medio de la intimidación que

se obedece. La gente avala la posibilidad de que se use la fuerza y eso está implícito en los emblemas patrios”.

–“Por la razón o la fuerza…”“Y finalmente la fuerza gana. El uso de la

violencia da un orden a la sociedad en que vivimos, y ese orden pasa por lo que enten-demos por Estado. Por ejemplo, siempre he vivido en Santiago Centro, muy cerca del Barrio Cívico, por lo que para mí la concep-ción de Estado está plasmada en su arquitectura y en el or-denamiento mental que eso genera. No me interesan las reivindicaciones panfletarias en el arte, sino que me pre-gunto en qué momento de mi vida dejé de sentirme parte de lo que se entiende por Repú-blica, en circunstancias de que debería contenernos a todos. Me cuestiono cómo esa ins-titución a la que uno le debe respeto debería ir cambiando, humanizándose, dejando de lado la violencia y volviéndose más inclusiva. Si analizamos, por ejemplo, el contenido de los himnos patrios vemos que de ellos se desprende un deseo de triunfo cuyo fin es propagar la defensa de lo propio e incluso someter al contrario, con lo que se transforman en una forma de política tota-litaria que está legitimada por un ideal de igualdad”.

el germen de la autodestRucción

Junto al video clip, Correa ha instalado vitrinas que contienen las partituras de las cuatro Marsellesas aludidas e instrumentos propios de las bandas militares realizados en cera. Se trata de los mismos instrumentos que aparecen en el video y que marcan el clímax cuando se encienden las mechas que contie-nen en su interior y comienzan a incendiar-se y derretirse hasta desaparecer. Al hacerlo, Claudio Correa provoca un efecto lumínico que irónicamente alude a la misión iluminista del ideal republicano, pero también apela a la violencia soterrada de los himnos.

Según el artista, “estos instrumentos son una metáfora para hablar de la violencia que con-lleva el sentido republicano. Ellos muestran la belleza de la violencia, en tanto se confunde con la épica, y ahí está el engaño. Porque en sí mismo el fuego es un ejemplo de que lo violen-to es hipnótico. El fuego deslumbra y, en tanto luz, puede ser entendido como la razón. Así, lo que nos permite ver también nos destruye”.

Y agrega: “Parafraseando a Peter Sloterdijk, es la igualdad existente entre los hombres la que constituye el origen de nuestras incesantes disputas, por ello surge también la necesidad de mantener a todos sometidos por igual. Des-de ahí, nuestra meritocracia no es más que una llave reguladora que legitima las bajezas nece-sarias para perfeccionar el status quo”.

3.

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5.

6.

“Las revoluciones se producen en los callejones sin salida”, Bertolt Brecht (1898-1956), dramaturgo y poeta alemán.

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12 I La Panera

Estilo a tus pies Los orígenes

del taco altoHace un tiempo, la académica inglesa Lorraine gamman señaló que si bien la ropa de alta costura exige un físico “adecuado”, a unos zapatos bonitos poco y nada les importa que no tengamos una silueta de estrella cinematográfica; siempre habrá un par esperando para hacernos felices. Y aunque los de taco alto sean hoy una prenda femenina por antonomasia, la historia nos muestra que siglos atrás eran favoritos entre los varones, quienes también deseaban sentirse altos, delgados y elegantes.

estatura). Así, para verse imponente y asom-brar a todos, calzó cinco centímetros de taco el día de su matrimonio. Este invento de los zapateros de Catalina o el posterior “boom persa”, fueron quizás los responsables de que los ricos y poderosos de Francia quisieran usar estos zapatos altos, al punto de conver-tirlos en símbolo de status social. Ya en el si-glo XVI era muy común la inclusión de estos elementos masculinos en el vestir femenino.

Quien realmente marcó pauta en lo que a tacos se refiere, fue Luis XIV. El “Rey Sol” decidió calzar zapatos con unos 10 cms para compensar sus 1,63 mts de altura. Nico-lás Lestage, su zapatero personal, era quien realizaba para el monarca francés modelos con suelas de color rojo, piedras preciosas y bordados con diminutas escenas de batalla. Los diseños debían ser exclusivos, so pena de muerte para cualquier súbdito “clon”.

Tras la Revolución Francesa, la sociedad ilustrada buscó alejarse de las jerarquías tra-dicionales y, por ende, el taco se redujo como señal de igualdad. Los varones comenzarían a vestir de manera más sobria, con indumen-taria de “trabajadores”, y el calzado alto que-daría olvidado hasta su despertar en el siglo XIX, junto con las Revoluciones Industriales. Desde el siglo XX hasta hoy, el taco alto reina en el universo femenino, donde comparten trono ilustres creadores, como Manolo Blah-nik, Christian Louboutin o Jimmy Choo.

Las feministas del siglo pasado argumenta-ban que los zapatos de taco alto eran fetiches limitantes diseñados para la “mujer objeto”. Y aunque este discurso no se impuso, debemos reconocer que nuestros queridos tacos poco sirven para caminar o para manejar; tampoco son buenos para andar sobre el pasto, o por lugares pedregosos. Todo ello nos recuerda que los persas no los diseñaron para caminar, sino para cabalgar.

De algún modo, hoy, cuando los usamos, estamos evocando (aunque sea por un par de horas) a los ricos europeos de antaño, esos que podían anunciar su estatus privilegia-do con indumentarias “poco prácticas”, pero atractivas.

arte y Moda

por ViCtoRiA JiMÉNEZ

Unos 3.500 años antes de Cristo, los magnates del antiguo Egipto pro-curaban elevarse social y visual-mente por sobre el resto mediante

el uso de las que podemos considerar como las primeras “plataformas”. Esta idea se repli-caría (aunque menos glamorosamente) en las carnicerías junto al Nilo, donde calzar plata-formas y unos primitivos “tacos altos” evitaba caminar por un suelo inundado de fluidos animales. La costumbre se extendió por Gre-cia y Roma, como distintivo de la aristocracia o –en el caso de los coturnos griegos– para que los actores se hiciesen más altos y visibles en el teatro. En Oriente, los tacos altos fue-ron el calzado predilecto de los viriles jinetes persas, quienes durante los fieros combates se sujetaban con ellos a los estribos y con las manos manipulaban el armamento. Cuando en el siglo XVI comienzan a establecerse la-zos diplomáticos y comerciales entre Europa y Oriente, surge un inusitado “boom persa” y con él, los europeos acaudalados desearon replicar el calzado de los húsares orientales.

tenDenCia “UNisEX”

Aunque desde antiguo fueron estandartes de masculinidad, se cuenta que ya en 1533, una joven Catalina de Médici decidió llevar tacos altos el día de su boda con Enrique II. La futura reina de Francia tenía apenas 14 años y, según cronistas de la época, era delga-dísima y muy bajita (no más de 1,50 mts. de

1. Los coturnos con su elevada suela, eran parte fun-damental de la vestimenta de los actores grecolatinos. 2. Este par de chapines data del siglo XVII. Cada uno fue tallado en madera, cubierto con terciopelo dorado, y decorado con borlas sujetas por tachuelas de plata.3. En 1533, Catalina de Médici importó desde Florencia este par de zapatos para usar en su matrimonio. La imagen corresponde a una ilustración, gentileza de la biblioteca pública de Nueva York.

Luis XIV, el Rey Sol, revolucionó la moda del calzado. El diseña-dor francés Christian Louboutin señala que una de sus piezas favoritas fue inmortalizada en una de las efigies del monarca: “La estatua de Luis XIV lleva unos de mis zapatos preferidos, una especie de sandalia retrabajada”.

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La Panera I 13

La Cama

(1) Los dormitorios, entendidos como hoy, no se configuraron hasta el siglo XVIII. Anterior a esto, las camas eran utilizadas como divanes durante el día, prestándose como lugar de socia-lización. Hasta incluso de noche, cuando se invitaba a dormir al huésped en la misma cama como signo de hospitalidad.

Por María Carolina Pavez

Au n q u e l A c A m A e s q u i z á sel mobiliario más importante de nuestro hogar, por su proximidad, no solemos te-nerla tan presente. Es que nuestra vida

cotidiana se configura a través de acciones que interac-túan con lugares y cosas que, por la rutina, van generan-do una trama uniforme. Según el filósofo chileno Hum-berto Giannini, así se produce un acostumbramiento que hace invisibles las cosas más familiares. Y los com-ponentes del quehacer diario pasan desapercibidos.

Lo lamentable es que justamente a partir de esta trama se constituye nuestra existencia, por lo que re-conocerla y reflexionar sobre ella pudiera acercarnos a descubrir aspectos esenciales de nuestra vida. Giannini reconoce que el artista es capaz, mediante sus creacio-nes, de rescatar estos objetos perdidos o dispersos en el discurrir doméstico. Como no todos tienen la habi-lidad de crear, existe una opción transversal: el simple ejercicio de hacernos conscientes de estos elementos, renovando su encanto.

UN BIEN eSCaSo

El uso de la cama comenzó a ser extensivo recién a fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, cuando su fabricación en serie la puso al alcance de la mayoría de las clases sociales. Anterior a esto, las personas con menos recursos utilizaban para su descanso espacios que incluían el mismo suelo o estrechas estructuras de madera, cuyos colchones eran de crin o de paja. Des-graciadamente, hasta hoy la cama sigue siendo un bien escaso en muchos hogares, donde deben ser compar-tidas por varios miembros de la familia.

Las camas, con la estructura básica que conocemos en la actualidad (bastidor elevado sostenido por pies), fueron piezas exclusivas de la clase gobernante del an-tiguo Egipto. Sus pies tenían forma de patas de anima-les y, a falta de cabecera, un soporte arqueado acogía la cabeza para conservar los elaborados peinados de la época. Los egipcios, al igual que los griegos, utiliza-ron la cama como un lugar para comer y sociabilizar (1), sin embargo, fueron estos últimos los que luego le incorporaron un cabecero diagonal para reclinarse. Los romanos, que asimilaron las formas de vida de sus con-quistados, aportaron el colchón relleno de lana y, pos-teriormente, de suaves plumas. Un cambio significativo ocurrió durante la Edad Media, cuando se incorporó un dosel que rememora los antiguos baldaquinos persas.

Posteriormente, sus variaciones se centraron más que nada en las dimensiones y en sus decorados. Du-rante el siglo XV, los lechos de la realeza tomaron pro-porciones enormes, siempre dentro del marco de la sobriedad renacentista. Hacia el Barroco, los doseles fueron profusamente adornados. En el siglo XVIII, bajo

es necesario ver su vestimenta. El atavío de la cama, al igual que el nuestro, señala el carácter de su usuario: colores opacos o brillantes, cálidos o fríos. Diseños in-fantiles o longevos, flores o dibujos geométricos. Paños sedosos, telas gastadas o retorcidos tejidos.

Luego de este examen reconoceremos que nues-tro lecho es una cosa/lugar en la que habitamos, y por seguro, en la medida que la habitamos, vamos constru-yendo el signo que manifiesta nuestra propia forma de ser en el mundo.

HORIZONTE Del CUerPo

Finalmente, no podemos dejar de lado su dimensión vivencial. Sin lugar a dudas, la cama es el territorio pri-vilegiado donde se vuelca nuestra habitual verticalidad. En este horizonte, el lienzo de la cama captura el estar del cuerpo: roce, pliegue grabado, huella humedecida.

La cama es geometría que acoge la vida y patrocina la muerte. Celebra la salud y asiste nuestra enfermedad. Entre descanso y agitación, encuadra los arqueos del desvelo y del reposo, las cadencias de la vigilia y del sueño, de la pesadilla y de la fantasía.

De noche, la cama es calor irradiado de la protección de sus mantas. De día, es útero interrumpido por el avenimiento de una nueva jornada. Es lugar de ritos y mitos. Captura historias diarias de secretos, evidencias, confesiones y silencio. Es lugar irrenunciable del “tú y yo”. Escenario de Eros y Misos, de gemidos y de sollo-zos. Tajante espacio de compañía y soledad.

Decisivamente podemos ahora reconocer que nada tiene de banal la cama, y menos la nuestra. En ella se desarrollan y manifiestan aspectos fundamentales de nuestra vida. Sólo basta con hacernos conscientes de ello. Así, esta frase amplificará irreductiblemente su sen-tido: “¡No hay como nuestra propia cama!”.

el reinado de Luis XV, se cultivó su refinamiento, apor-tando colorido, ornatos fantásticos y elegancia. Líneas limpias y volúmenes macizos inspiraron la época del imperio napoleónico. Formas delicadas y orgánicas re-presentaron al Art Nouveau. Simplificación y comodi-dad guiaron las pautas modernas.

A través de su evolución, podemos comprender que su función, diseño y tipos de usuarios nos van señalan-do la trama social e histórica donde este mueble está inserto. Basta con ver su figura para advertir cómo sus formas nos instruyen sobre los modelos que edifican la realidad, sobre los cambios de las concepciones y la incorporación de nuevos paradigmas.

SU DoBle CONDICIÓN

Más allá de su función práctica, la cama es, al mismo tiempo, una cosa y un lugar. En palabras de Heidegger, es una construcción que produce un lugar (nuestro ín-timo lugar). Por tanto, no puede ser concebida como un objeto enfrente de nosotros, sino como lugar de “residencia en las cosas”. Ciertamente, habitamos en la cama. Siguiendo esta lógica, diremos que no habitamos en ella porque la hemos construido, sino que, al revés, la construimos en la medida que la habitamos. Esta idea se aclara cuando nos hacemos conscientes sobre cómo habitamos/construimos (configuramos) nuestro propio lecho. Pongamos atención sobre su figura. Veremos no sólo sus objetivaciones sociales e históricas, sino tam-bién sus subjetividades domésticas y privadas. A través de su imagen podremos desentrañar nuestra particu-lar forma de estar-en-el-mundo. ¿Cómo es su cuerpo: simple, macizo, elaborado o austero? ¿Cuánto hay de verdad, de apariencia o de aspiración en su figura? ¿Es pequeña o permite la presencia de un otro? Y si con-siente al otro, ¿cuánto participa éste en la construcción de su imagen?

Pero no basta con observar sólo su cuerpo, también

1. Cama Imperial, siglo XVIII-XIX. 2. Cama ceremonial nupcial, 1650. 3. Kliné griego. 4. Dormitorio Art Nouveau, (1890-1905). 5. Cama Egipcia.

Desde lo cotidiano

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[ por César gabler ]

Klaudia Kemper «INMERSIÓN»Museo Nacional de Bellas Artes (Parque Forestal. Teléfono: 2499-1600). Hasta el 31 de marzo.

Una exposición como esta suerte de retrospec-tiva parcial, en un espacio como éste, todo el

ala sur del Museo de bellas artes, puede resultar monstruosa o repetitiva y algo de eso hay en «In-mersión». pese a ello, Klaudia Kemper logra mos-trar con seguridad sus cartas como artista. Nacida en 1965, Kemper grafica los intereses de una generación cuya formación se cruzó con la Escena de Avanzada y con los Neo-Expresionistas locales. En Kemper se notan también los ecos de la tradición brasileña, par-ticularmente de Lygia Clarke y oiticica; como ellos, persigue una experiencia multisensorial.

«Inmersión» puede interpretarse como una peti-ción de la artista hacia el espectador. El montaje, libre de convenciones museales y cronológicas, propone un viaje a partir de la metáfora corporal. Algo que no resulta completamente discernible, pese a las abun-dantes referencias orgánicas de las obras expuestas: volúmenes y pinturas a manera de células o vísceras y fotografías en que el cuerpo parcial o totalmente desnudo propone una vinculación entre lo intelectual y lo sensorial. En algunos casos de manera algo obvia, como en las video esculturas: suerte de órganos cor-porales con pantalla en el interior (y una no muy re-suelta vinculación entre la imagen y su contenedor).

pero, como lo señalábamos, se trata de una ex-posición muy amplia y caben otras propuestas de la artista, particularmente en el lenguaje del video, abarcando desde la animación al testimonio social o privado; en unos y en otros, el lenguaje parece tribu-tario de registros televisivos. La artista abarca muchos medios y si bien traslada a ellos sus preocupaciones, no siempre resultan significativos los medios formales para lograrlo. Es más personal como pintora y tal vez más convencional como videasta. Sus video instala-ciones ponen en juego la relación entre la imagen y la superficie proyectada, pasando de lo escultórico

a lo arquitectónico. Son, tal vez, más impresionantes que precisas. Una sala de globos-ojos recuerda de-masiado a Tony oursler y no parece ir más allá del efectismo de instalar un racimo de ojos gigantes en un recinto oscuro.

Creo que la última sala de la muestra concentra el aporte más genuino de Klaudia Kemper. A través de un conjunto de dibujos, pinturas y volúmenes, la artis-ta logra aunar el mapa mental con una bien controla-da faena abstracta. Ideas y experiencias –conectadas como órganos– transmiten su personal manera de situar el lugar del pensamiento y la creación.

Exposiciones que usted no debe perderse

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La Panera I 15

POR SANDRA ACCATINO

En E l c u a d r o q u E Vincent van Gogh pintó en 1888 y que se exhibe en la National Gallery de Londres, hay catorce girasoles. Pintados en tonos

amarillos y anaranjados, resaltan sobre el fondo, a pesar de que éste también es amarillo, al igual que el vaso y la superficie que lo sostienen. En la composición, los únicos colores distintos son el verde de los tallos, hojas y brácteas; las pinceladas de violeta oscuro en algunas flores y el tono celeste violáceo que Van Gogh utilizó en la firma que inscribió como si formara parte del florero y en la línea que lo cruza y que parece conti-nuar, ligeramente más abajo, en los trazos que marcan el límite de la mesa.

La línea celeste, que contribuye a crear la sensación del volumen del jarro al prolongarse hacia ambos la-dos de la mesa, devuelve a la imagen su condición de superficie bidimensional: a través de ella, el fondo del cuadro y el primer plano parecen de pronto fusionarse, también porque las dos tonalidades de amarillo que, en el vaso, están sobre y bajo ella, se alternan e intercam-bian en la mesa y en la pared del fondo. De esta forma, Van Gogh invita a observar la estructura que organiza la composición: el juego entre la línea horizontal y los tonos más anaranjados de las flores que parten verti-calmente la tela por la mitad, y la tensión que producen las diagonales que forman los cuatro girasoles que so-bresalen en los extremos del ramo.

Esta tela es la cuarta de las doce pinturas de girasoles que el pintor realizó en 1888 para decorar el taller en Arles que compartiría con Paul Gauguin. La comunidad de artistas que pensaba formar junto a él y en la que depositaba toda su esperanza, acabó abruptamente, sin embargo, dos meses después, cuando tras una discu-sión, Van Gogh amenazó a Gauguin con un cuchillo y se cortó parte de su oreja izquierda. “Todo será una sin-

El 30 de marzo se cumplen 160 años del nacimiento del pintor holandés. acostumbrados a escuchar sobre su

excentricidad, sus ataques de epilepsia y su estatus de genio incomprendido, nos

hemos olvidado que el valor de su pintura no reside en su biografía, sino en sí misma,

en la capacidad de describir, a través de colores, texturas, trazos y composiciones,

el mundo tal como él lo veía.

Sandra accatino es académica del departamento de arte de la Universidad alberto Hurtado. Ha publicado diversos capítulos de libros, artículos y ensayos sobre pintura europea, arte de la memoria, coleccionismo y artistas chilenos contemporáneos.

El Arte de Mirar

Mary Wollstonecraft (1759-1797) fue una escritora y filósofa inglesa que pasó a la historia por su libro “Reivindicación de los Derechos de la Mujer”.

Vincent Van GoGhGirasoles en un vaso

(national Gallery, londres, 1888)

“A MIS OJOS – ESCRIBIÓ VInCEnT A SU

HERMAnO THEO - LOS VERDADEROS

PInTORES nO SOn LOS QUE PInTAn LAS

COSAS TALES COMO SOn, AnALIZÁnDOLAS

SECAMEnTE, SInO LOS QUE LAS PInTAn

COMO LAS SIEnTEn”.

La “LEY dE LoS coLorES”

El artista neerlandés, que admiraba el uso del color de delacroix y de los impresionis-tas, eligió el de esta pintura siguiendo la que, desde el siglo XiX, era llamada la Ley de los colores: para que el amarillo –un color prima-rio– brillara aún más sobre la tela, debía contrastarse con el violeta. Un color secundario formado por la mezcla de los otros dos primarios: el azul y el rojo. El amarillo con violeta, al igual que el rojo con el verde y el azul con el anaranjado, son complementarios, es decir, al yuxtapo-nerse, cada uno se intensifica y exalta. Si los tonos anaranjados y amarillos se distin-guen y resplandecen en el cuadro, es porque Van Gogh los contrapuso a los trazos violetas y azulados presentes

fonía de azul y amarillo”, le había escrito, a su hermano Theo mientras la pintaba, vislumbrando su propia felici-dad en la posibilidad de compartir su vida y su pasión por la pintura con otros artistas.

Van Gogh veía en los objetos y personas, pero sobre todo en la naturaleza, una expresión del propio senti-miento. “no conozco mejor definición del arte que ésta: el arte es el hombre sumado a la naturaleza, a la que él libera, como realidad, como verdad, pero también con una significación que el artista agrega al expresarla”.

La belleza marchita de las flores y la forma circular del ramo, que recuerdan el movimiento de las horas inscrito por el sol en el horizonte que es incansable-mente seguido por los girasoles, transformaron a estas flores (que en la iconografía cristiana simbolizaban la búsqueda de la luz y lo divino) en una metáfora del ser humano y de su anhelo inextinguible de felicidad.

«Girasoles en un vaso» (1888). 93 x 73 cm. national Gallery, Londres.

«doce girasoles en un vaso» (1888). 92 x 73 cms. neue Pinakothek, München.

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16 I La Panera

“te pones a escribir y te imaginas que estás haciendo

«ciudadano kane», o, ya sabes, que todo lo que escribes es

genial, pero cuando tienes que sacarlo de ahí y convertirlo

en película, entonces la realidad entra en escena”.

allan stewart königsberg y

la obra maestraes un hombre menudo, de 77 años, al que le gusta ver partidos de baloncesto de los knicks en su casa con una cerveza en la mano. un padre de familia estadounidense del montón, metodológico y fanático de la rutina. lo único que le hace distinto es lo que ocurre cuando se sienta frente a su máquina de escribir.

cine

«Play it again Sam», 1972.

Lati

nsto

ck

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La Panera I 17A los 17 años, Juana de Arco (1412-1431) convenció al rey Carlos VII de expulsar a los ingleses de Francia, transformándose en la santa patrona de ese país.

por Juan José santos Mateo

allan se convierte en Allen. En Woody Allen. Le presento como un superhéroe porque no se me ocurre otra manera de abordarlo.

Un tipo de una constancia bíblica: en 1969 decide hacer una película al año; por décadas, cada lunes toca el clarinete con su banda de jazz en el Café Carlyle, y va al psiquiatra des-de el 59. Pero lo que le hace realmente inhu-mano es la ingente cantidad de obras maes-tras que ha elaborado. Aunque en su humilde opinión, no haya hecho ninguna:

“Te pones a escribir y te imaginas que estás haciendo ‘Ciudadano Kane’, o, ya sabes, que todo lo que escribes es genial, pero cuando tienes que sacarlo de ahí y convertirlo en pelí-cula, entonces la realidad entra en escena. To-das tus esperanzas de hacer una obra maestra se reducen a: me prostituiré a mí mismo de cualquier forma con tal de sobrevivir a esta catástrofe”. Con esta declaración comienza «Woody Allen, el último documental», di-rigido por Robert B. Weide, que no sé si se estrenará en Chile, o si habrá que esperar a que Woody venga a rodar «Hot dogs and love in the Mapocho River», por ejemplo.

Woody nunca pierde actualidad porque siempre o acaba de terminar una película o va a empezar una nueva. Pero en esta ocasión, en medio de «A Roma con amor» y «Blue Jasmine», ha salido este documental que in-tenta encontrar una explicación lógica a esa brillante productividad. La película de Weide tampoco es una obra maestra y casi todo lo que ahí se cuenta ya era de sobra conocido. Aún así, hay algunos aspectos novedosos. En-tre otras cosas, imágenes de sus comienzos:

El Factor KönigsbErg

buscaba a un personaje histórico

o mitológico que personificara

la rutina, la constancia,

simplemente para utilizarlo

como adjetivo al sustantivo

allen. me topé con kant. un tipo

tan metódico que sus vecinos

ajustaban la hora mirando

cuándo salía immanuel de su

casa. resulta que su casa estaba

en su ciudad natal. resulta que su

ciudad natal es königsberg.

tras ganarse la vida (y bien) como un joven escritor de chistes para otros, se convierte en figura mediática como graciosete en pro-gramas de televisión, donde tiene que boxear con un canguro o cantar con un perro. El show business made in USA. Hasta que se le presenta la ocasión de hacer su primer filme. A partir de ahí, se desvela el primer secreto de su éxito: contra todo lo establecido para un director novato, le dan libertad absoluta para escribir, dirigir y editar sus trabajos. Tie-ne 32 años. Desde aquella hilarante «Toma el dinero y corre» (1968) sucede lo adelantado, nunca dejará de tener ese poder omnipresen-te ni de realizar una película al año. Como ve-mos en el documental, Woody Allen crearía a continuación una serie de filmes de humor directo, “sexualmente triviales”, hasta que lle-gamos a la cismática «Annie Hall» (1977). Una obra en la que, por primera vez, lo esen-cial no es la risa sino la historia. Destaque-mos tres seres vivos en relación a Annie Hall: Diane Keaton, quien se convierte en su pareja profesional y personal durante varios años y define un pe-riodo cinematográfico en su filmo-grafía; Gordon Willis, el director de fotografía que acertadamente escogió ante el asombro de sus co-legas (Gordon, apodado el “príncipe de las tinieblas”, que venía avalado por su trabajo en «El Padrino», no parecía encajar en el estilo de la co-media romántica), y las langostas. La escena en la que vemos a Woody luchando contra estos crustáceos en la cocina junto con una Diane Kea-ton muerta de risa es una de las secuencias más recordadas de su carrera. «Annie Hall» supuso un paso de gigante para Woody, que no acudió a la gala de los Oscar porque estaba tocando el clarinete con su banda.

el caJón de woody

«Manhattan» (1979), para muchos su me-jor película junto a «Hannah y sus hermanas» (1986), casi acaba en un cajón. Allen estaba tan insatisfecho de ella que dijo que haría la siguiente película gratis si no la hacían públi-ca. Por suerte, su poder no era tan ilimitado y se proyectó en los cines. Pero la idea del ca-jón tiene un sentido literal. Durante el docu-mental vemos otro de los misterios revelados: el cajón en el que guarda hojas con miles de ideas para otras tantas películas. Comproba-mos cómo la forma de trabajar del director es tan metódica como artesanal; pega las ideas una encima de otra sobre los folios impresos en su antediluviana máquina de escribir. Es un trabajador incansable, pero aún irrealiza-do. Cree que no ha dado con su gran obra

maestra. Y nos cuenta el por qué: no tiene pa-ciencia. Prefiere irse a casa a ver un partido de baloncesto que seguir rodando escenas has-ta la perfección. Además de dirigir, Woody Allen quiere vivir. Y las más de las veces pare-ce que ambas cosas son incompatibles. Puede que sus relaciones personales hayan sido una transcripción de esa imposibilidad.

aMor&humor

Es más querido en Europa que en Estados Unidos. Ese es uno de los motivos por los que últimamente ha rodado en Francia, España o Inglaterra. ¿Por qué? Algunos creen que por su desaire en la entrega de los Oscar; otros, por su engaño a Mia Farrow con su hijastra, que fue un escándalo en su momento. El documental hace un recorrido breve (porque Woody es muy celoso de su privacidad) por sus relacio-nes sentimentales, muchas de ellas, sus actri-ces. El argumento principal de su creación, la

frágil frontera entre la realidad y la fantasía, se entrecruza con su vida personal. Debe ser complicado diri-gir a tu pareja en tu película y luego llegar a casa a prepararle la cena. La separación entre realidad y ficción es su mensaje primordial, y sus armas, el amor y el humor. Del amor al hu-mor hay un gag y del humor al amor, otro. El tocar siempre los mismos temas y la misma filosofía provoca que el espectador haya encasillado a Woody. Es el director ese de las gracias intelectuales. Tan arquetípi-co es su personaje protagonista, que

en muchas ocasiones nosotros, los espectado-res, hemos dicho “es que soy un poco Woody Allen” para justificar nuestras divertidas torpe-zas. Podemos hablar de la allenación social. Sin embargo, no estamos siendo del todo justos. Hemos encasillado a Allen, primero diciendo que es sólo director, cuando ha escrito teatro, relatos, ha hecho televisión, ha sido monolo-guista... Y, sobre todo, porque es creador de filmes dramáticos como «Interiores» (1978), «Recuerdos» (1980) o «Match Point» (2005), en los que se trasluce más su admiración ha-cia Ingmar Bergman que hacia Bob Hope. A pesar de que luego haga «Midnight in Paris» (2011), comedia que es casi una obra maestra, y nos demos con un canto en los dientes. Ve-remos con qué nos sale en la del 2013, «Blue Jasmine». Esperemos que esté más cerca de esa obra maestra. Mientras tanto, coincidamos con la respuesta que dio a un periodista que le preguntó cuál es su relación con la muerte: “La misma de siempre, estoy fuertemente en contra de ella”.

Tus seguidores también estamos en contra de la muerte. De la tuya, para ser más precisos.

«Woody Allen, el último documentAl»Robert B. Weide2012

obrasmaEstras

1968«toma el dinero

y corre»

1977«annie Hall»

1978«interioreS»

1979«manHattan»

1980«recuerdoS»

2005«matcH Point»

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18 I La Panera

Cine

Vera-Meiggs es director artístico con mención en cine (U. Católica); historiador y crítico de cine (universidades de Florencia, siena y roma). se ha desempeñado como director escénico; director y guionista cinematográfico; comentarista de cine en prensa escrita y televisión; profesor de cine en varias universidades.

Histórico logro de nuestro cine se ve matizado por las limitaciones del célebre premio y por los cuestionables mecanismos para concederlo.Además, ¿sirve para algo?

NOAL OSCAR

pañas promocionales de las casas productoras: gana el más popular, no el más… mejor…

No puede ser de otra manera. El premio fue creado por una industria decidida a celebrarse a sí misma, lo que es muy lícito y si premia productos extranjeros lo hace desde la particu-lar visión de lo extranjero que se puede tener desde el interior de Hollywood. Por eso, obte-ner la candidatura es un mérito indudable que a nosotros los del cine chileno nos tiene muy contentos. Entre otras cosas, porque el nuestro es un país sin imagen clara para el exterior.

América Latina ha logrado pocas veces un espacio entre las candidatas. Sólo México, Ar-gentina, Brasil, Cuba, Perú, Puerto Rico y Ni-caragua nos han precedido. Pero los dos últi-mos casos no son tan claros. Nicaragua estuvo representada por «Alsino y el cóndor», dirigi-da por Miguel Littin y producción mejicana, mientras que la película de Puerto Rico estaba considerada estadounidense por el sistema de distribución. Los únicos Oscar reales fueron por películas argentinas («La historia oficial» y «El secreto de sus ojos»), obras artesanales, poco representativas de la cultura mestiza con-tinental. Los países con mayores candidaturas son los europeos. Francia reúne más de treinta, pero Italia ha ganado más veces, siguen España y Alemania. Más abajo aparece Japón. África ha ganado tres veces: «Z» por Argelia, pero producida por Francia, dirigida por un griego –Costa-Gavras– y sobre un tema griego; Costa de Marfil con «Blanco y negro en color», ha-

POR Vera-Meiggs

¡C laro que sirve!, dirán los interesa-dos, que en el mundo del cine son muchos. Y al menos en el corto plazo, sus virtudes son innegables,

pero al pasar el tiempo las cosas adquieren su justa medida y a cada película que alguna vez ganó el Oscar se le pueden oponer otras más recordadas, pero que no necesitaron ningún premio para volverse clásicos. Un ejemplo en-tre muchos: «Psicosis». ¿Se puede creer que ni siquiera fue candidata a la mejor película, ni tampoco Anthony Perkins estuvo entre los ac-tores? Para qué decimos «Vértigo», «Ciudadano Kane» o «2001: Odisea del espacio».

Todo premio tiene estos problemas. Basta revisar la lista de los ganadores del Nobel de Literatura, el listado de los que no lo obtuvie-ron es tan brillante en nombres importantes que puede opacar al de muchos ganadores. ¿Alguien ha leído a Frans Sillanpaa, a Grazia Deledda o a Sigrid Undset?

Pero el Oscar podría ganar el Oscar al pre-mio más arbitrario. En los festivales e instan-cias similares, un jurado se reúne a deliberar sobre los méritos y limitaciones de las películas en disputa. En el Oscar no. Nadie discute con nadie y la infinita cantidad de votantes (más de cinco mil en la actualidad) envía sus votos por mail donde el resultado no puede ser otra cosa que una manifestación del gusto medio de toda esa gente. Por eso las millonarias cam-

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La Panera I 19

«Ese oscuro objeto de deseo», de Luis Buñuel, que estaban entre las candidatas. «¿Quiere ser el amante de mi mujer?», de Bertrand Blier, ganó para Francia el Oscar 1978, pero ni eso ayudó a su distribución internacional. Cla-moroso fue el caso de «Cinema Paradiso», de Giuseppe Tornatore, destrozada por la críti-ca italiana, ironizada por la internacional e igualmente vencedora en 1989.

Algunas de las películas que fueron pre-sentadas a la consideración de la Academia y que no quedaron en la quina de las candi-datas: «El séptimo sello», «El rostro» y «Per-sona», de Ingmar Bergman; «Apu sansar» y «Los jugadores de ajedrez», de Satyajit Ray; «Los olvidados» y «Nazarín», de Luis Buñuel; «Otoño tardío», de Yasujiro Ozu; «La noche», de Michelangelo Antonioni; «Gertrud», de Dreyer; «El año pasado en Marienbad», de Alain Resnais; «El enigma de Kaspar Hau-ser» y «Fitzcarraldo», de Werner Herzog; «Cría cuervos», de Carlos Saura; «El ami-go americano», de Wim Wenders; «Vivir» e «Historia de Qiu Ju», de Zhang Yimou; «De-trás de los olivos»; de Kiarostami; «La habi-tación del hijo», de Moretti; «Primavera, ve-rano, otoño, invierno y de nuevo primavera», de Kim Ki Duk; y otras joyitas dirigidas por Glauber Rocha, Manoel de Oliveira, Theo Angelopoulos, Jean-Luc Godard y los her-manos Dardenne, entre otros.

Hay que reconocer también los aciertos. Ya hemos mencionado los casos tempranos de Fellini, de De Sica y Kurosawa, pero también Bergman lo ganó cuatro veces. Otros nota-bles ejemplos: «Mi tío», de Jacques Tati; «La

guerra y la paz», de Sergei Bondarchuk; «La tienda en la Calle Mayor», de Klos y Kadar; «Trenes rigurosamente vigilados», de Jiri Menzel; «El discreto encanto de la burgue-sía», de Buñuel; «La noche americana», de Francois Truffaut; «Investigación de un ciu-dadano sobre toda sospecha», de Elio Petri; «La fiesta de Babette», de Gabriel Axel; «Sol ardiente», de Nikita Mikhalkov; y «La sepa-ración de Nader y Simin», de Asghar Farhadi, el año pasado.

Las UVas esTÁN VerDes DIJO LA ZORRA

De este cuadro son deducibles otras carac-terísticas que emparentan estas películas con la chilena «No», de Pablo Larraín. Se trata de cine que a menudo toma la historia como fuente de inspiración y que posee personajes claros y positivos. No es cine experimental o demasiado innovador y siempre basado en es-tructuras de guión clásicas. Casi nunca cine de autor. El caso de Buñuel es la excepción que confirma la regla. Un ejemplo de arribis-mo intelectual de parte de Hollywood, que se ha dado en las ocasiones en que eso se vuelve políticamente correcto, como fue con el marxista italiano Petri en los años setenta. Las circunstancias políticas son siempre muy importantes a la hora de las votaciones. Nada nuevo bajo el sol de los premios célebres.

Habría que entrar en consideraciones co-merciales de distribución y taquilla, nombres de actores famosos, posibilidades de inter-nacionalización y los antecedentes de los autores y del país de proveniencia. Todo eso facilita las posibilidades de una candidatura, que es el verdadero premio para un cine na-cional ajeno a la gran industria mundial y a la hegemonía cultural. Además, no hay país que haya ganado en su primera postulación, incluso autores célebres han debido esperar la segunda oportunidad para llevarse el premio.

¿Es tanto el prestigio que lo acompaña? Depende. ¿Económicamente es un triunfo? El productor de Buñuel tuvo muchos pro-blemas para equilibrar sus cuentas, pero los checos aseguran que fue fundamental obte-nerlo tres veces para financiar la producción nacional.

Finalmente, todo es muy relativo. Quizás sea mejor esperar a que maduren las uvas y decir No al Oscar… por ahora.

blada en francés y producida y dirigida por un francés, Jean-Jacques Annaud; y «Tsotsi» de Sudáfrica, realizada por un equipo europeo. Es decir, triunfa ampliamente la visión euro-cén-trica, a la que tanto debe el imaginario conven-cional de Hollywood, siempre flojito a la hora de ampliar sus horizontes culturales.

eXTraNJerOs EN HOLLYWOOD

La categoría «Mejor Película de habla no inglesa» existe oficialmente desde 1956, cuando lo ganó merecidamente «La strada», la primera de cuatro películas de Federico Fellini en obtener el galardón. Antes se con-cedía como premio especial que no se daba todos los años y que destacó a algunas joyas como «El lustrabotas» y «Ladrón de bicicle-tas», de Vittorio de Sica; «Rashômon», de Akira Kurosawa, y «Juegos prohibidos», de René Clément.

Se solía decir que es la categoría en la que la Academia premiaba verdaderamente el arte cinematográfico, pero hoy es muy objetable tal afirmación, ya que como sucede en la cate-goría Mejor Película, los aciertos no han sido tan numerosos como los desatinos. Es difícil recordar «Los domingos de la Villa d’Avray», de Serge Bourguignon, ganadora de 1962; la soviética «Moscú no cree en las lágrimas», de Vladimir Menshov; la triunfadora en 1980 sobre «Kagemusha», de Kurosawa; o «El úl-timo metro», de Truffaut. «Madame Rosa», de Moshe Mizrahi, ganó en 1977, pero hoy se recuerda más «Un día muy particular», de Ettore Scola; «Ifigenia», de Cacoyannis; y

algunas películas no necesitaron ningún premio para volverse clásicos, como «Vértigo» (1), «2001: Odisea del espacio» (5) y «Psicosis» (6).

«Primavera, verano, otoño, in-vierno y de nuevo primavera» (2), de Kim Ki-duk, fue presentada a la consideración de la academia, pero no quedó en la quina de las candidatas.

Hay que recono-cer también los aciertos, como «el discreto encanto de la burguesía» (4), de Buñuel, o «La strada» (3), de Federico Fellini, elegida Mejor Película de habla no inglesa.

EL PREmIO fuE CREADO POR uNA

INDuStRIA DECIDIDA A CELEbRARSE

A Sí mISmA. Y SI PREmIA PRODuCtOS

ExtRANJEROS, LO HACE DESDE LA

vISIóN DE LO ExtRANJERO quE SE

PuEDE tENER DESDE EL INtERIOR DE

HOLLYWOOD.

1. 2.

3.

4.

5. 6.

“Cuando dirijo, hago de padre; cuando escribo, hago de hombre; cuando actúo, hago el idiota”, Jerry Lewis (1926), actor cómico estadounidense.

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20 I La Panera

Por Vera-Meiggs

La fascinación que el sexo y la vio-lencia ejercen sobre la sociedad hu-mana no ha necesitado de campa-ñas promocionales para mantenerse

inalterable a través de los siglos. De ahí podemos entender que el Canto V

de «La Divina Comedia», de Dante Alighie-ri (1265-1321), tenga tanta popularidad. Desde los maliciosos tiempos actuales, po-dríamos suponer que la inclusión del episo-dio, un escándalo muy mentado en la época, pudo servir para mejorar las ventas del texto, pero nunca se ha dudado de la veracidad de lo ahí narrado.

Los verdaderos protagonistas de esta histo-ria jamás habrán soñado con la inmortalidad y seguramente ni deben haber calculado que carecían de un gran futuro, dadas las circuns-tancias de su época, que no favorecía la com-prensión de las conductas del prójimo. Tal vez eran también feúchos. Ella, pasada de kilos y con un festival de furúnculos (la comida de entonces ayudaba a ello). Él pudo ser bajito, ancho y maloliente, no se estilaba mucho el baño y la estatura varonil promedio andaba por el metro sesenta, en el mejor de los casos. Quizás ni siquiera alcanzaron a enamorarse y todo fue un malentendido con mal resultado. Quizás, quizás, quizás… diría Nat King Cole.

CÓMO FUe LA CoSA

Siglo XIII, Italia dividida en feudos y ciu-dades autónomas; entre ellas, Florencia, Ra-vena y Rímini. Todas con fuertes disputas internas debido a las constantes tensiones políticas entre el Papa y el Emperador ale-mán. Los partidarios de uno y otro bando no se ahorraban violencias, mientras la nueva burguesía capitalista diseñaba la economía moderna, aquella que hará de los bancos, la moneda y las letras de cambio una presencia cotidiana en nuestras vidas. No es raro que los “empresarios” de la época cambiaran de bando según el momento y que las alianzas comerciales incluyeran embajadas, asesinatos y matrimonios de conveniencia.

Guido Novello da Polenta, comerciante acaudalado, buen poeta y político, era señor de Ravena, antigua capital imperial bizantina, y en tal condición necesitó un acuerdo con la vecina ciudad de Rímini, bastante belicosa, y no se le ocurrió nada mejor que casar en 1275 a su hija de veinte años Francesca (que tenía el nombre de moda en aquellos tiempos, San Francisco había muerto sólo unos cincuenta años antes) con Gianciotto Malatesta, hijo mayor del señor local. Los Malatesta (lite-

FRANCESCA DA RIMINI LA verdAderA hiStoriA

Episodio basado en la «Divina Co-media» de Dante

Alighieri, todo ocu-rre en el infierno.

Foto: Winnie Klotz/ Metropolitan

Opera House.

Ópera

ralmente mala cabeza) hacían honor a su nombre, eran poco escrupulosos, ambiciosos y bastante ricos. De hecho, todo parece in-dicar que engañaron a Francesca, haciéndole creer que se casaba con Paolo, el segundo de los hijos, bastante más agraciado que el no-vio, que era deforme (se le ha atribuido una joroba y una pierna más corta que la otra). Es imaginable la decepción de la pobre mu-chacha y los ojos lánguidos que habrá tendido hacia Paolo. Como todo lo que comienza mal puede terminar peor, el violento Gianciotto desarrolló los celos que la ocasión ameritaba y finalmente sorprendió a su hermano con su esposa, y con su espada se consiguió un lugar en la más bella escena del poema de Dante. Como correspondía a la época, el doble ho-micida no fue castigado, ya que el suyo era considerado “delito de honor”, figura aún vá-

lida en muchos países. Los Malatesta, por su parte, coherentes con

su estirpe, cuyo escudo de armas era un ele-fante y una rosa, y agazapados en Rímini si-guieron gobernando la ciudad hasta alcanzar la cúspide del prestigio, del poderío y de la corrupción bajo Segismundo I (1417-1468), que fue uno de los tiranos más ilustrados del siglo XV. Este Malatesta debió servir de ins-piración a Enrique VIII: repudió a su prime-ra esposa, envenenó a la segunda y estranguló con sus manos a la tercera. La cuarta, Isotta degli Atti (Isolda de los Actos), que había sido su amante favorita, y que también hon-raba su apellido, logró sobrevivir gracias a la muerte del marido. Tienen una espléndida tumba en el templo Malatestiano de Rímini, adornado con frisos en que elefantes partici-pan en orgías. Esto llevó a considerar al Papa

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La Panera I 21

FRANCESCA DA RIMINI LA verdAderA hiStoriA

eN eL New Grove diCtioNAry

of oPerA, reNAto ChieSA SeñALA

que eStA ÓPerA eS “uNo de LoS

máS oriGiNALeS y ACAbAdoS

meLodrAmAS itALiANoS deL SiGLo

XX, [que] CombiNA uN PoderoSo

tALeNto Por LA meLodíA itALiANA...

CoN uN domiNio eXCePCioNAL de

LA orqueStACiÓN”.

En el Siglo I, Boudica fue la mujer que organizó a las tribus británicas y mantuvo una dura lucha contra el Imperio Romano dirigido por Nerón.

Y eso es todo. Dante se desmaya al escuchar los lamentos de los amantes que se alejan en su vórtice. Fin del canto.

Fue muy comentado, y lo es todavía, que Dante haya descrito el castigo infernal de la desdichada hija de Guido, que fuera su amigo y protector, que incluso rindiera ofrendas fú-nebres al gran Dante en Ravena, donde toda-vía está enterrado. Lo que podría considerarse una falta de tacto, en realidad sirvió de repara-ción histórica para los asesinados, que por ha-ber cometido adulterio –del que no alcanzaron a arrepentirse– no podían acceder al Paraíso. Habiendo sido compuesto el poema en vida de Gianciotto, para entonces muy poderoso, éste no es mencionado sino en forma elusiva. En un momento, Francesca dice: “Amor nos condujo a una misma muerte y Caín aguarda al que nos quitó la vida”. Es decir, anuncia el futuro castigo del fratricida sin nombrarlo y bastó eso para condenarlo eternamente. Está claro que Dante nunca puso un pie en Rímini.

LA ÓPera

La triste historia ha dado pie para innume-rables citas, pinturas, esculturas («El Beso», de Rodin, se inspira en ella), ilustraciones, novelas, tragedias, el poema sinfónico de Tchaikowsky y dieciséis óperas, entre ellas, una de Rachmaninov y la de Riccardo Zan-donai (1883-1944), discípulo del gran Puc-cini, que es la que ha tenido mayor fortuna, aunque eso no significa mucho ya que no se ha dado mucho en tiempos recientes, si bien existen de ella varias grabaciones con grandes intérpretes (Caniglia, Kabaivanska, Del Mo-naco, Miricioiu, Cigna, Dessi, Alagna).

Este sábado 16, el Teatro Nescafé de las Ar-tes transmitirá este título en directo desde la Metropolitan Opera House con la producción de Piero Faggioni y Ezio Frigerio que no ha sido vista desde 1986, cuando los protagonis-tas fueron Renata Scotto y Plácido Domingo. Esta vez, los desgraciados amantes serán inter-pretados por Eva Maria Westbroek y Marce-llo Giordani, dirigidos por Mario Armiliato.

«Francesca da Rimini» es una ópera a la que se le reconocen muchos méritos musi-cales y que parece representar a cabalidad la vinculación entre verismo temático (erotismo explícito, violencia) y post-romanticismo en la orquestación y estructura. Su base es la tra-gedia de Gabriele D’Annunzio, el poeta de-cadente italiano, que quiso evitar las referen-cias a Dante, pero incluyó el episodio de las lecturas compartidas. Fue estrenada con éxito en fecha decisiva en la historia cultural: 1914, cuando los Gianciottos de Europa volverían a la carga.

Pío II, enemigo declarado de la dinastía, que el templo era un lugar satánico y quemó la efigie de Segismundo por asesinato, violación, adulterio, incesto, sacrilegio y perjurio. Ahí terminó el poderío de los Malatesta.

LOs BUeNOs verSoS

El recuerdo del episodio se lo debemos a Dante Alighieri (1265-1321), que resumió la historia en 70 versos. Pocos para el efecto que tuvieron en las generaciones posteriores, pero suficientes para estimular la imaginación popular. Como se sabe, todo ocurre en el In-fierno. Dante y su maestro Virgilio entran al segundo círculo, donde las almas de los luju-riosos sufren el castigo de ser transportadas por un vórtice que los azota a una contra otra. Ahí encuentra a los desdichados amantes y logra hablar con Francesca, quien inicia con una frase célebre: “Ningún dolor mayor que recordar los tiempos felices en la miseria…”. Luego sigue el breve relato de las lecturas, compartidas con su cuñado, de la historia en-tre Lancelot y la reina Ginebra, cuyo inter-mediario fuera Galeoto. Concluye Francesca con una síntesis magistral: “La boca me besó temblando: Galeoto fue el libro y el que lo escribió. Aquel día ya no leímos más”.

un incidente pasional de provincia italiana ocurrido hace siete siglos sigue provocando estremecimiento gracias a la poesía y a la música. este sábado 16, el teatro Nescafé de las Artes transmitirá en directo desde la metropolitan opera house la ópera que riccardo Zandonai compuso en 1914 sobre la pieza teatral de Gabriele d’Annunzio.

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22 I La Panera

Bowie, The ComebaCkTras unos años en declive, elvis Presley volvió de forma espectacular con una imagen impactante en el concierto televisado «elvis, the comeback». esa imagen se le quedaría en la retina (del ojo bueno) a un artista de 21 años fascinado por “el Rey” desde que era un niño: David bowie.

«The nexT day»Una década después de su último álbum de estudio, el músico británico reaparece en su sexagésimo sexto cumpleaños con este disco producido por otro clásico como él, Tony Visconti.

música

PoR Juan José santos Mateo

en aquel entonces –1968–, David Bowie (1947, Brixton, Londres) era un músico fracasado, desorientado, uno más. Puede que la vuelta triun-

fal de su adorado Elvis constituyera una reve-lación. Es probable que se basara en ese ins-tante histórico para configurar, tres años más tarde, a su personaje más legendario: Ziggy Stardust. Lo que es seguro es que en su cabe-za (y en su twitter, como veremos) ha rondado últimamente la imagen de Presley vestido de cuero. Porque quien ahora ha vuelto por sor-presa, tras años desaparecido, ha sido él.

eL CoHete DeSPeGa

Los comienzos de Bowie fueron duros. Pro-veniente de una familia de clase obrera ingle-sa, inició su andadura como músico con una estética hippy y una música folk que pasaba desapercibida. Con toques de rock psicodé-lico, enlazaba grupos tan rápidamente como coleccionaba fracasos. Sus primeros managers lo estafaron. Pensó en dejar su sueño, e in-cluso apareció en anuncios comerciales para poder ganarse la vida. Hasta que compuso «Space Oddity» en 1969, coincidiendo con la

llegada del hombre a la luna. Los siguientes dos años siguieron siendo complicados y no ganaría dinero hasta mediados de los setenta, pero el cohete ya había despegado rumbo a las estrellas.

GoLDen YeaRS

Bowie hereda la corona del Rey durante toda la década de los 70. Desde el disco «The man who sold the world» (1970) hasta «Scary Monsters» (1980). Publica al menos ocho “clásicos”, conquista Estados Unidos, gana premios, trabaja con los mejores, y, sobre todo, modifica (a base de cambios) la concepción musical para siempre. La influencia de ese concepto sobrevive hasta nuestros tiempos. Pasa de seguir modas a marcar la pauta. En su primer punto álgido, con Ziggy Stardust, deconstruye y “suicida” a la figura de Elvis. La historia freudiana del hijo mata a padre. Y Ziggy viaja a comunicárselo en persona. En 1972 vuela a Nueva York para conocer a Elvis Presley entre dos conciertos suyos y dos de su ídolo. Un encuentro fugaz entre el Rey decadente y el Rey aspirante. Aspirante y aspirador: cuando invade los dominios de Elvis, es un cantante esquelético y paranoico adicto a la cocaína. Tiempo después, en mi-

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La Panera I 23

Los muertos, sus recuerdos del pasado, regresan al presente e inducen y estimulan al artista que vuelve a meterse a un estudio

de grabación.

tad de sus delirios, compone «Golden years» y, según cuenta la leyenda, se la ofrece a Elvis para que la cante. Un Elvis sobrealimentado ignora a un Bowie desnutrido. Nada recuerda de sus 27 años ni de la grabación de «Golden years» y del resto de canciones incluidas en su disco «Station to station» (1976), por culpa de su dieta de drogas, leche y pimientos. Ha tocado fondo, o techo, según se mire, pero lo que sí es innegable es que si sigue así va a ser uno más del club de los 27: Robert Johnson, Brian Jones, Jimi Hendrix, Janis Joplin y Jim Morrison (músicos que murieron a esa edad a causa de las drogas o el alcohol).

LoW PRoFILe

En 1976 llama a Tony Visconti, el produc-tor de sus mejores discos, para volver a grabar algo juntos. Bowie vive en Berlín. Ha decidido regresar a Europa y de un soplido acabar con la cocaína, el sueño americano y el ser una es-trella de rock. Se inventa un disco adelantado a su época, innovador y fascinante: «Low». La portada y el título son un juego de palabras e imágenes (“Low” profile, “perfil” bajo) que resu-men su nueva ideología: en lugar de un disfraz y maquillaje, camisas de cuadros y vaqueros; en vez de una música teatral y efectista creada en

base a su voz, canciones instrumentales. En lu-gar de actuaciones donde aparece como un me-sías, acompaña a Iggy Pop en su gira y se ubica a un lado del escenario tocando los teclados. Luego, las fotos promocionales de «Heroes» lo muestran bostezando y huyendo de la mecánica mirada de la cámara. Retorna su interés inicial por el arte y la literatura, se interesa por la polí-tica (y por Hitler), y por el Berlín decadente de los setenta. Bowie termina de grabar «Heroes» en agosto del 77, coincidiendo con una noticia: Elvis Presley acaba de morir.

boWIe, tHe BaCK

Sus siguientes trabajos hasta «Scary Mons-ters» siguen siendo brillantes, y podemos in-cluir «Let´s Dance» a pesar de que la balan-za entre comercialidad y calidad se empieza a inclinar hacia el primer objetivo. A partir de ahí olvida todo lo aprendido y, a mediados de los ochenta, cae en una deriva profesional alarmante: discos malos, giras pretenciosas, lamentables videoclips, credibilidad bajo cero. En los 90 se recupera lentamente, sobre todo gracias al rescate de dos de sus pilares de la época berlinesa: Brian Eno en el disco «Out-side» (1995), y Tony Visconti con «Heathen» (2002). Demuestra muy buena forma en los

“Nadie ganará nunca la Guerra de los Géneros porque existe demasiada fraternización con el enemigo”, Henry Kissinger (1923 ), político germano-estadounidense.

conciertos de comienzos del 2000, hasta que, primero, un pinzamiento de un nervio en la espalda (en inglés, back) y luego un serio problema cardíaco lo obligan a alejarse de los escenarios. Desde 2003 casi no actúa, apare-ciendo poco en público y publicando nada. Todo indica que se ha retirado para siempre.

8 De eneRo

En el 2010 llama a Visconti para volver a gra-bar algo juntos. Bowie revive Berlín. Empiezan a trabajar con los músicos de su última época sobre algunas ideas, como en los viejos tiempos. Descansan unos meses hasta que David regresa con las letras de las canciones, inspiradas en su biografía, en hechos recogidos de la actualidad y referencias cultas sacadas de libros de histo-ria medieval. La grabación se hace rápidamen-te, durante 2012, con los colaboradores de los anteriores discos. Pone a prueba su lealtad y les pide absoluta discreción. Sus músicos son fieles. No se descubre el misterio hasta la aparición del video de «Where are we now» –el primer single–, el 8 de enero de 2013. El asombro es generalizado. Salvo las pocas personas envueltas en el proyecto, nadie sabía absolutamente nada. Algo increíble en la actualidad. Las entrevistas a sus colaboradores se multiplican: ¿cómo se ha mantenido en secreto? ¿por qué vuelve? La res-puesta es unánime: “Nos dijo que cuando tuvie-ra algo que contar, volvería, y parece que ahora tiene algo que contar”.

Bowie reaparece este marzo con «The next day», un disco rockero que retoma un ánimo vanguardista y experimental, junto con unas letras sustanciosas. «Where are we now», es, como decimos, una mirada atrás, hacia la épo-ca europea de los setenta, y recoge multitud de referencias personales, al igual que la portada del disco: cubre la imagen que ilustraba su ál-bum «Heroes» con un cuadro blanco y el título «The next day» y tacha el de «Heroes». La frase de «Where are we now» es esclarecedora: “just walking the dead” (simplemente paseando a los muertos). Nos encontramos a un Bowie in-trospectivo, hipermnésico, como “Funes, el me-morioso”, el personaje de Borges. Los muertos, sus recuerdos del pasado, regresan al presente e inducen y estimulan al artista que vuelve a me-terse a un estudio de grabación. Elvis Presley es otro de los muertos que se pasea en el “come-back”. Si tanto he incidido en la ascendencia de Elvis no es sólo porque ambos regresaran tras un declive o una retirada. Tal y como recordaba Bowie en su cuenta de twitter recientemente con un montaje que anunciaba un falso con-cierto de Elvis y Ziggy Stardust (las estrellas muertas), los dos nacieron el mismo día. El día que consumó su retorno. El 8 de enero. Pero hoy estamos hablando del “día después”.

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24 I La Panera

Por Antonio VolAnd

Existen episodios recientes en una historia que suma muchos capítulos del pasado. Durante enero, los mú-sicos del Sagare Trío estuvieron to-

cando en el Festival de Jazz de Puerto Prín-cipe, Haití, encuentro que cada año recibía a un invitado chileno en su escenario hasta que en 2010 un terremoto destruyó esa capital. Y durante noviembre –o sea, muy poco antes– el mismo conjunto instaló en los recuentos del año uno de los discos instrumentales más poética y geométricamente elaborados.

Puede que Sagare Trío sea un nombre nue-vo, pero es en su conformación interna donde se advierte la experiencia de los protagonistas y los resultados de ese nuevo trabajo titulado «Sagare Trío». Lo determina la reunión de nombres con peso específico en la música ac-tual: Juan Antonio Sánchez (1965), Antonio Restucci (1956) y Emilio García (1963). Al momento de ordenar las primeras sílabas de los apellidos de estos tres compositores y so-listas, la respuesta aparece sola.

Cada uno escribió un tema nuevo para este ensamble. Sánchez compuso «Sa»; García, «Ga», y Restucci, «Re». Sonoramente es la mejor combinación de esas tres sílabas, aun-que el orden nunca altera el producto: sigue siendo, de cualquier manera, la combinación de maestrías del grupo.

“Sagare es una nueva entidad, formada por tres nombres. Comenzó a funcionar el 2012, pero todos hemos tocado juntos hace años en distintos proyectos y colaboraciones con otros músicos. Armamos un catálogo de

SagarE TríoMúsica

Emilio Garcíaautor de «Ultrablues», una composición que derrocha velocidad y vir-tuosismo, es considerado uno de los héroes de la guitarra eléctrica en chile, un ejemplar presente en todas las mezclas donde ese instrumento pueda dominar los territorios: hard rock, jazz rock, rock fusión. Pero el músico tiene también su lado re-flexivo, hacia adentro. le llaman el “lado B” de las cosas. Y así tituló uno de sus discos, el único que ha grabado con guitarra acústica y que presenta música de aires flamen-cos, brasileños, y ritmos de tonada y bolero.

composiciones nuevas (como ‘Sa’, ‘Ga’ y ‘Re’) y también tomamos material que Toño o yo habíamos hecho para discos antiguos y que adaptamos a este nuevo conjunto basado en los instrumentos de cuerda que manejamos”, indica Sánchez, conocido en los círculos de la música latinoamericana como “Chicoria”.

Se refiere a las guitarras de cuerdas metáli-cas y de nylon que toca García, a la mandoli-na y guitarra nylon de Restucci, y a la guita-rra criolla y al guitarrón cuyano de Sánchez, quien también introdujo el acordeón.

EconomíA de recursos naturales

El disco lleva el subtítulo de “música ins-trumental latinoamericana”, una referencia base acerca de los solistas y de sus creaciones. Pero son esas mismas trayectorias e influen-cias las que también han permitido al grupo ampliar las fronteras de lo que comúnmente se entiende por música latinoamericana. En-tre los aprendizajes del folclor sudamericano, las inspiraciones del flamenco, la disciplina de la guitarra clásica y el campo abierto del jazz se define esta propuesta. “Son composiciones

de raíz, pero también de una abstracción evi-dente”, dice Sánchez.

Antonio Restucci aporta con «Cueca del puerto», «Desierto florido», el chorinho «Mandolineado» y «Recursos naturales», un tema que proviene de los tiempos del grupo La Hebra (ver recuadro). Sánchez se apunta con las autobiográficas «Plaza Brasil», «Vals taranto» y «Lost in Tamaulipas», y Emilio García escribe “una to-nadita muy hermosa tipo Víctor Jara titulada «Letanía» y un tema más lanzado, una especie de jazz manouche, que se llama «Tren a Berlín»”, comenta “Chicoria”.

Cuando menos es más, en Sa-gare Trío puede ser mucho más. Es la experiencia de una econo-mía de recursos obtenidos de la naturaleza de estos músicos referenciales en los cordófonos y su persistente tratamiento moderno de la música. Y también cuando el trío, mucho más que un conjunto de instrumentos es un ins-trumento en sí mismo. “Chicoria” completa: “Sagare Trío ha sido una herramienta para llevar a cabo todas estas ideas”.

Acústicos: quién es quién

triPletade cuerdas

y sílabas

es un cónclave de maestros de la música instrumental latinoamericana y sus muchas variaciones: Juan antonio sánchez, antonio restucci y emilio García suspenden momentáneamente sus proyectos solistas para reunirse en un ensamble de cámara donde esa orquesta llamada guitarra es la máxima protagonista.

antonio rEstUccisi sus inicios musicales lo encuentran en sus quince años tocando una guitarra eléctrica junto al brasileño manduka en los 70, el recorrido que ha realizado habla de música desenchufada, cristalina y creativa. Ha editado siete discos tras su salida del recordado grupo la Hebra, en 1986. se le considera tal vez el más importante referente entre los instrumentistas de cuerdas en la música de fusiones. su último trabajo «ancestros» (2008), consiste en una serie de composiciones para guitarra y mandoli-na, de distintas épocas.

JUan a. sáncHEzEste guitarrista nunca ha tenido problema para presentar en vivo sus chacareras, que en rigor denomina “chequeraras” (porque sus amigos argentinos le dicen “che, qué raras son tus chacareras”). claro que algunas señoras en la primera fila siempre se sonrojan: se titulan «la cholga y la lora», «la cholg’e tu hermana» y «la cholg’e la madre». obras como estas y mucho ma-terial camerístico original fue grabado en los últi-mos dos discos que editó en simultáneo en 2012: «Viajes para guitarra» y «tercer tiempo».

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La Panera I 25

Gabriel reyesEl camino a la iluminación

D os viajes a nueva York

entre 2010 y 2011 para instruirse en los lenguajes de la improvisación con

importantes maestros, captaron la atención del guitarrista de jazz Gabriel Reyes, quien se puso manos a la obra en 2012. inspirado en músicos contemporáneos que han convertido ese jazz de ritmo y swing en nuevas construcciones ornetológicas plagadas de abstracciones y narrativas, Reyes dejó registrado uno de los discos más elaborados del último tiempo y uno de los mejores del año pasado.«Satori» es consecuencia directa de ese aprendizaje en la ciudad más musical del mundo, un trabajo dedicado a los instru-mentos de un sexteto de avanzada y sus posibilidades tímbricas: claudio Rubio (saxo tenor), el estadounidense Derek Bittner (trompeta), Sergio Valenzuela (piano), alonso Durán (contrabajo), nicolás Ríos (batería) y, por supuesto, Gabriel Reyes (guitarra). con «Satori» (“término japonés que designa la ilumi-nación en el budismo zen”, dice), Reyes se ubica en el mapa del jazz, donde habitualmente ha sido un guitarrista menos visible que Federico Dannemann, nicolás Vera o Jorge Díaz.

renata anayaiDiomaS Y cREmillaS

D espués de cada concierto

boutique que suele dar en departamen-tos capitalinos, el público le pregunta a

Renata anaya en qué idioma están escritas sus canciones. la respuesta es en ninguno en particular y en todos los dialectos que estén al paso del momento. Son fonemas creados por esta cantante, autora y compo-sitora, que desde que regresó, en 2010, de París, donde estudió composición electro-acústica, ha tenido una primera figuración en el dúo electrónico y vocal aoraquï, que comparte con el músico Daniel Jeffs. Pero «lü» es un disco solista de mayor alcance, que además nos advierte que su propuesta no está instalada ni en la electrónica de procesos, ni en la canción de raíz folk. Es una combinación de ambas líneas, y con resultados magníficos.las piezas fueron creadas durante una estada de seis meses en Brasil, donde anaya rescató paisajes sonoros, sonidos y cantos de insectos, animales y aves, y fue-ron estrenadas en vivo a fines de 2012 en «Sesiones Perdidas», de Radio universidad de chile. allí, como de costumbre, Renata anaya volvió a ser Renätä anäyä, la mujer de las cremillas en todas las palabras que utiliza. Y también en su maquillaje para salir al escenario.

sylvia soubletteun cuaDRo con Su RoStRo

G abriel Valdés fue un hombre respetado como político por

correligionarios y contrincantes, y al mismo tiempo admirado fuera de la política igualmente por correligionarios y contrincantes, debido a que en 1946 se casó con una las mujeres más elegantes y hermosas de la época: Sylvia Soublette. Soprano especialista en lied, directora de conjuntos de música antigua, alumna de Darius milhaud y de olivier messiaen, académica y compositora, publicó a los 90 años su primer disco monográfico.Producido junto a Víctor alarcón, director del coro de Estudiantes uc, incluye voces solistas y a la orquesta marga marga, que son las herramientas escogidas para «compositora chilena», el postergado recuento de sus creaciones. El disco presenta sonetos, madrigales, una misa romana para cuerdas, vientos, percusión, voces solistas y coro, y una bella suite para violín y piano. Y si eso no fuera suficiente, para ilustrar la portada Sylvia Soublette escogió el gran retrato que le dedicó oswaldo Guayasamín y que tardó 45 minutos en completar.

María MaGDalenano SoY tu DulcERa

F ue uno de los secretos mejor protegidos durante 2012. Su primer disco apenas se difundió a través

de internet con descargas liberadas y sus conciertos casi siempre fueron advertidos de boca en boca por los usuarios mejor informados. la cantautora maría magdalena (Valdivieso) sorprendió con este álbum que podría entrar a disputar una ubicación entre los mejores debut del último tiempo. a medio camino entre el pop de teclados, en can-ciones como «intenciones» y «levita», y la guitarra acústica saturada que tan bien utiliza en «Dulcera» y «alunizaje», maría magdalena puso además un pie en una férrea defen-sa de género: sus canciones más lindas se llaman «maría Bonita» y «Samba maría», pero en esa misma «Dulcera», ella toma las armas para rockear: “Por favor no vuelvas nunca más / no soy tu dulcera, la más leal”.

JoSé BohR(1901-1994)

s i bien nació en Bonn, vivió por

años en Buenos aires y murió en oslo, el nombre de Yopes Böhr Elzer se vincula estrictamente a la his-toria del chile austral. Estamos en presencia de un magallánico de espíritu, a tal punto, que hoy el teatro más importante de Punta arenas lleva su nom-bre. Y si además se le asocia al surgimiento de una industria cine-matográfica en chile –realizó 60 películas y fue director de chile Films–, también es justo decir que Böhr es parte de ese frente de estrellas de la industria musical. Su nombre figura como compositor y cantor, aún sin tener una voz sobresaliente.compuso música para todas esas cintas y además escribió clásicos del repertorio melódico chileno, como el shimmy «Y tenía un lunar» y el tango «cascabelito» que, según cuentan las crónicas, llegó a seducir a Gardel: “me han contado que tenés un tangazo bárbaro”, le dijo el Zorzal criollo a Böhr. “Por qué no hacés una cosa: te venís a casa, nos pasás a los muchachos y a mí tu tango al piano, nos lo aprendemos y te lo pongo en el disco. Será un gol. ¡Ya verás!”.

noMbres propios

Caras y Carátulas [ por Antonio VolAnd ]

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26 I La Panera

Por Rafael Valle M.

El primer Superman se parecía más bien a Lex Luthor, su eterno ar-chienemigo. Era calvo, de expresión malévola y militaba en el bando de

los villanos, como se ve y se lee en la pági-na de presentación del relato publicado en el fanzine «The Advance Guard of Future Civi-lization», de enero de 1933.

Hace ochenta años y con ese cuento, «The Reign of the Superman», el escritor Jerry Siegel y el dibujante Joe Shuster presentaron un personaje que en su debut tuvo su despe-dida. Firmada por Siegel con el seudónimo Herbert S. Fine, la historia contaba cómo un científico (loco) convertía a un vagabundo en el conejillo de Indias de un experimento que le daba poderes telepáticos. Con ellos, el anónimo sujeto se lanzaba a la conquista del mundo con viles propósitos, amenaza que poco llamó la atención del público lector de la revista autopublicada por Siegel-Shuster y de los editores a los que ofrecieron la posible franquicia.

Recoger y barajar de nuevo, y Siegel archivó a su Superman malévolo y a los pocos meses lo recicló, esta vez modelado en el arquetipo heroico e inspirado en Tarzán. Como aquél, el nuevo superhombre era un huérfano sa-cado de su entorno natal para ser criado por otra raza: venía de Krypton, un planeta ex-tinguido, y llegaba a esta Tierra que le daba

SUPEROCTOGENARIOEn enero de 1933, el guionista Jerry Siegel y el dibujante Joe Shuster presentaron el boceto de su futuro y famoso Superman: un villano telépata que tuvo corta vida. El desconocido prólogo en la historia de un personaje de raíces judías que inventó una industria millonaria, que se hizo universal, que murió y resucitó, que olvidó ingratamente a sus creadores y que este 2013 vuelve al cine con una nueva película.

Cómic

26 I La Panera

fuerza sobrehumana y capacidad de vuelo a su organismo alienígena.

“Cuando Joe y yo nos conocimos, fue como encontrar la química perfecta”, recordó una vez Siegel. Ambos nacieron en 1914, arma-ron sociedad siendo adolescentes y se lanza-ron a elaborar proyectos autofinanciados y a ofrecer historias de ciencia-ficción, de de-tectives, vaqueros y todo lo que sirviera para convertirse en profesionales del medio pulp o de los cómics, ese “noveno arte” que crecía a paso agigantado en la tercera década del siglo XX. Superman prometía dar el golpe certero, pero no fue fácil lograrlo. Cinco largos años pasarían para que un editor aceptara publi-car su primera aventura, abriendo una puerta después de tantas que el Hombre de Acero no pudo derribar.

NACIMIENTo Y eSTallIDO

Superman es el alter-ego de Clark Kent, un periodista que vive y trabaja en la imaginaria pero estadounidense ciudad de Metrópolis y que cuando la emergencia lo exige sale a vo-lar por los cielos para hacer el bien, como un eterno boy scout. “Jerry creó todos los nom-bres. Éramos grandes fanáticos del cine y nos inspiramos mucho en los actores y actrices que veíamos. En cuanto a Clark Kent, com-binó los nombres de Clark Gable y Kent Ta-ylor. Y Metrópolis, la ciudad que era su base de operaciones, viene de la película de Fritz

2. «The Reign of the Superman», el relato con que Jerry Siegel y Joe Shuster presen-taron a su super-hombre como un villano telépata.

Lang, que a ambos nos gustaba”, dice el relato de Shuster, que con los lápices modeló a este tipo con mallas y capa, mezcla de caballero volador y gimnasta circense.

El primer número de la revista «Action Comics», de junio de 1938, traía el estreno de Superman y los detalles de su origen krip-toniano: había sido bautizado como Kal-El en su mundo natal y era enviado al espacio en una pequeña nave, en calidad de único su-perviviente y segundos antes de la explosión de su planeta habitado por gente tecnológica-mente adelantada.

Kal-El. Como Daniel, Gabriel, Ezequiel y

1. Primera página del número 1 de «Action Comic», que trajo el debut de Superman tras cinco años de indiferencia del medio editorial.

1.

2.

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La Panera I 27

tantos otros, el nombre tenía resonancias he-breas y hablaba del propio origen étnico de Jerry Siegel y Joe Shuster, otros dos judíos que pondrían su firma en la gran bitácora del có-mic made in USA (ver recuadro). El personaje fue un éxito instantáneo, un estallido en los kioscos, que rápidamente inició una oleada de imitadores en capas y trajecillos ajustados.

Como el western en el cine, el género que inventó Superman es típicamente estadouni-dense y nacido y criado en su propio nicho: las historietas, ese producto de consumo que pronto haría universal a este Hombre de Ace-ro, tanto en su insignia de colores como en la estampa de un niño con una toalla al cuello. Su llegada tuvo impacto cultural y generó un negocio de oro para National Periodical, la editorial con la que Siegel y Shuster firmaron un contrato en que cedían los derechos de su personaje por 130 dólares, a cambio de seguir escribiendo y dibujando sus historietas.

En 1940, Superman protagonizaba varias revistas y en una de sus correrías por la Eu-ropa en guerra golpeaba a Adolfo Hitler en el mentón y lo encarcelaba, generando un ar-tículo odioso contra el héroe y sus judaicos creadores en las páginas de «Das Shwarze Korps», el diario de la S.S. El hombre de la

la influencia judaica

Los pasos de Jerry Siegel y Joe Shuster fueron bien seguidos por otros escritores y dibujantes de origen judío. Bob Kane inventó a Batman en 1939; y en 1941, Joe Simon y Jack Kirby crearon al patriótico Capitán América. El mismo Kirby y el escritor Stan Lee harían, dos décadas después, otro masivo aporte al género de supertipos disfrazados, creando Marvel Comics. Otro contemporáneo de esta generación fue Will Eisner, quien en 1940 inventó al justiciero en-

mascarado The Spirit, que se diferenció de sus pares por el alto nivel gráfico, narrativo y experimental de sus historietas.Pero la contribución judaica al mundo del cómic no se limita a las franquicias masivas. Robert Crumb, en los 60, usó los dibujos cómicos para poner sexo, drogas y crítica social con personajes como Mr. Natural y el Gato Fritz, que lo convirtieron en el padre del cómic underground en Estados Unidos.También nacido artísticamente en el circuito alternativo, Art Spiegelman es el autor de «Maus», una de las novelas gráficas más aclamadas de los últimos tiempos, y que relata con gatos opresores y ratones oprimidos la historia de su familia en un campo de concentración.

La Panera I 27

capa roja tomaba la bandera norteamerica-na y para 1942, con Estados Unidos ya en el conflicto, sus cómics eran incluidos entre las provisiones básicas del cuartel de soldados es-tacionado en Midway.

a lUCHaR Por LA JUSTICIA

Con las décadas, Superman pasó a la radio, a la TV y al cine, y ha sido exprimido con-venientemente por sus editores en buenos y malos tiempos. En 1992, ante las bajas ventas, DC Comics (ex National Periodical Publica-tions) resolvió matar al personaje en manos de un matón galáctico (Doomsday) y comen-zó una campaña de marketing que se amplifi-có con su resurrección, que lo trajo más joven y de pelo largo. Y más millonario.

Una y otra vez, Siegel y Shuster debieron conformarse con mirar de lejos a su Dorian Gray musculoso, tras pelearse con la editorial por un pleito legal de derechos, en 1948. A partir de ahí sus nombres fueron borrados de los créditos de cualquier aventura publicada del personaje, del que terminaron ingrata-mente alejados. En otra casa editora intenta-ron, con Funnyman, un superhéroe gracioso que no convenció, y lentamente empezaron

a separar aguas. El socio guionista siguió en los cómics y el dibujante inició un semi-retiro forzado por su problema a la vista, que lo lle-vó a probar suerte en oficios como el de em-pleado de correos.

En 1973, enterada que Warner Bros. pre-paraba una película con la franquicia, la du-pla contraatacó en tribunales, sin éxito. Siegel maldijo el futuro film: “¿Por qué estoy maldi-ciendo esta película? Porque ni Joe Shuster ni yo, que creamos al personaje, veremos un sólo centavo por ella. Sus palabras tuvieron eco y evitar la mala prensa habría sido, finalmente, la causa de que WB accediera a pagarles una renta vitalicia de 20 mil dólares anuales y a devolverles sus créditos como creadores en las publicaciones tres años antes del estreno del exitoso «Superman» (1978), protagonizado por Christopher Reeve.

Los herederos de Siegel y Shuster retoma-ron la lucha legal hace dos años, pidiendo el 50% de las ganancias generadas por el super-tipo y perdieron de nuevo hace unos meses, en la antesala de «Man of Steel», la película dirigida por Zack Snyder («Watchmen») que debuta este año y que promete el regreso de un Kal-El conflictuado por su herencia extra-terrestre y enfrentado a su mundo adoptivo. Un poco de drama para mantener en vuelo millonario a este Hombre de Acero inoxi-dable, el dueño de una larga historia con un villano escondido.

CoMo EL wESTErN EN EL CINE, EL

géNEro qUE INvENTó SUPErMAN

ES TíPICAMENTE ESTAdoUNIdENSE,

NACIdo Y CrIAdo EN SU ProPIo

NICho: LAS hISTorIETAS. ESE

ProdUCTo dE CoNSUMo qUE

ProNTo hAríA UNIvErSAL A ESTE

hoMbrE dE ACEro.

“Las batallas contra las mujeres son las únicas que se ganan huyendo”, Napoleón Bonaparte (1796-1810).

«SUPERMAN RETURNS», Brandon Routh, 2006, (c) Warner Bros.

Henry Cavill como Kal-El/Clark Kent en «Man of Steel» (2013), que pro-mete un conflic-tuado regreso del personaje al cine.

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28 I La Panera

Las mejores

aventuras gráficas

para 2013

Libros

PARA SOBREVIVIR A LA COCINA

si en Francia la cocina es prioridad nacional, no es sorpresa que los

dibujos de Guillaume Long en el diario «Le Monde» lo hayan convertido en un caricaturista top. Sus ilustraciones -que incluyen desde excursiones por restau-rants poco amigables de Europa del Este a consejos sobre cuál cafetera, tomate o pescado es el mejor- se recopilan en el blog «A boire et à manger». Allí, Long

se personifica a él mismo y, con humor pero también con experticia, enseña cómo mejorar la mano a la hora de cocinar. Para ello, en lugar de los clásicos manua-les de cocina y sus complicadas preparaciones e irreales fotos de platos perfectos, Long prefiere enseñar al lector a desenvolverse en la

feria o en el supermercado y a preparar platos sabrosos, pero que no requieran horas de elaboración. Él mismo no deja de sorprenderse cuando durante las firmas de libros muchos estudiantes le dicen que gracias a sus recetas han descubierto el poder de las verduras. La recopilación de todo este material en español se llama «A comer y a beber», y se puede leer tanto como novela gráfica como una estupenda guía para sobrevi-vir en la cocina.

EL MAKING-OF DEL HORROR

antes de convertirse en una de las obras cumbre del cómic universal, «Maus» fue una historieta por episodios pu-

blicada en la revista alternativa «Raw» entre 1980 y 1991. La idea de narrar autobiográficamente la compleja relación de Art Spiegelman, el autor, con Vladek, su padre (sobreviviente de los campos de concentración nazi en Polonia), ya era arriesga-da. Más aún, representar a los judíos como ratones de rostro uniforme y a los alemanes muy parecidos a los gatos que tene-mos de mascota. Precisamente, ése es uno de los desafíos que buscaba Spiegelman: desarmar al lector y enfrentarlo a esta lectura inesperada del horror. Finalmente, en 1992 se editó en dos volúmenes y el autor fue elevado –a su pesar– como un ícono de la novela gráfica independiente. «Metamaus» es un libro+CD que contiene todo el proceso creativo de la obra y sus consecuencias. En ella encontramos desde sus influencias hasta bosquejos, pasando por entrevistas, discursos y ensayos. Lo interesante es comprobar cómo este libro nació de una obsesión –y dolor– extremadamente profundo y que tiene que ver con la imposibilidad de dimensionar un horror tan público en la vida privada y familiar. Y de cómo asimilar un daño tan grande y sus pequeñas consecuencias en la vida diaria.

BENJAMIN LACOMBEEL ROCKSTAR DE LOS ILUSTRADORES

«MetaMaus»art spiegelman MondadoriEspaña304 PáGINAS $21.400

si hay un ilustrador que ha obtenido reconocimiento glo-bal en estos últimos años, ese es el francés Benjamin

Lacombe (30). Y las razones están –literalmente– a la vista en su treintena de libros publicados hasta la fecha: texturas rojizas, ambientes melancólicos y personajes de ojos grandes y rostros pálidos. En rigor, cualquier intento descriptivo apenas capta su universo. Aunque él no teme enumerar sus influencias: Edward Gorey; «El extraño mundo de Jack», de Tim Burton; las historias ex-

traordinarias de Poe, las películas de Disney, el manga, los trabajos de Leonardo da Vinci, Pedro Almodóvar, los pinto-res flamencos del Quattrocento y la fotografía ilustrada. En España ha vendido más de 100.000 ejemplares y sus libros han sido celebrados como auténticas obras de

«a coMer y a beber»Guillaume Long Editorial Sins Entido España 144 páginas $26.000

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La Panera I 29

Cuentos infantiles bellamente siniestros. Un manual para diferenciar pescados, cafeteras y tomates. el enfrentamiento de un equipo de abogados al mismísimo Dios (que decidió regresar a la tierra). el making of de la novela gráfica más importante de la historia. La alemana que revolucionó la moda (y la música) rock a través de Los Beatles. Cinco ejemplos de la nueva literatura ilustrada que está llegando a Chile y que viene a potenciar un fenómeno global: las grandes historias no sólo son leídas, también son dibujadas.

Benazir Buttho (1953-2007) es la primera mujer en ocupar el cargo de Primer Ministro en un país musulmán.

por J.C. RamíRez FigueRoa

LA CHICA DE LUTO

La historia de la música popular sería otra si The Kinks o The Zombies hubiesen tenido los golpes de suerte de

Los Beatles. Como la temporada iniciática que los de Liver-pool vivieron en Hamburgo. Allí conocieron a la intelectualidad joven y beatnik de la ciudad, que los influyó desde su ves-timenta hasta la ferocidad con que empezaron a tocar rock and roll (la que se fue diluyendo cuando empezaron a grabar en estudio). Esta novela gráfica se mete en el tema, retra-tando el romance entre el bajista –y pintor– Stuart Sutcliffe y la diseñadora Astrid Kirchherr. Los testimonios de Astrid son verídicos: el propio Arne Bellstorf, autor de «Baby’s in Black», la entrevistó. Ella fue la responsable del corte de pelo de la banda y... de haber obligado a Paul McCartney a tocar el bajo tras “secuestrarles” a Sutcliffe, el gran amor de su vida. Éste falleció dos años después, con sólo 21 años, por una he-morragia cerebral que algunos señalan como efecto de una golpiza sufrida por el grupo en las salvajes noches germanas. Algunos años después, Astrid se retiraría de la vida pública. El trazo de Bellstorf rescata esa melancolía que la propia banda retrató con la canción que da nombre al libro.

LA REVELACIÓN DE DIOS

«Dios en persona», al principio parece una parábola del

poder de los medios de comunicación. Básicamente es la irrupción de Dios en el mundo y la cobertura que la prensa da a la noticia. Luego, se transforma en una epopeya científica/teológica soste-nida por las brillantes respuestas que

entrega la divinidad a intelectuales (incluyendo un computador con in-teligencia artificial). Y, finalmente, todo deviene una trama política que incluye juicio y forma de eliminar a tan incó-modo personaje. Y ése es, precisa-mente, el mérito de Marc-Anthoine Mathieu en este libro, ganador de «El Gran Premio

de la Crítica 2010» de la ACBD (Asocia-ción de Críticos y Periodistas de Bande Dessinée): mostrar cómo reaccionaría el mundo contemporáneo a la revela-ción de Dios. La historia está narrada como documental televisivo –con un inesperado giro inicial– y está plagada de referencias culturales y religiosas. Es interesante cómo el lector se siente conmovido por la fragilidad de este Dios de barba y toga, para luego simplemente abrir la boca con las respuestas que da. Algo que las agencias de publicidad detectan y explotan de inmediato, y conducen a nuestro protagonista a un desenlace brutal.

«baby’s in bLack»arne bellstorfEditorial Sins Entido208 páginas $26.500

«Dios enpersona»Marc-anthoine MathieuEditorial Sins Entido 128 páginas $22.500

arte. Muchos señalan que sus ilustraciones serían mejor comprendidas por los mayores: “Los padres tienen más mie-do a mis libros que los niños. Con ‘Los amantes mariposa’, los adultos se lamentaban, mientras que en una revista los pequeños razonaban ‘No, están tan enamorados que se han convertido en mariposas’. Allí mismo decía que no hay que sobreproteger a los niños con historias dulzonas… Desde los seis años, la muerte es una cuestión que se plantean recurrentemente. Mi madre es psicóloga y he hablado con ella al respecto... En mi álbum ‘Genealogía de una bruja’ aparece la hija de una amiga. Es su cara, pero la he pintado sin piernas ni brazos, un horror. Nos daba miedo su reacción, pero su madre le enseñó el dibujo y le preguntó ‘¿Te molesta?’, y contestó: ‘No, al menos puedo rodar’ ”. No repetirse es central en su política de trabajo, por lo tan-to, cada obra es distinta a la otra. También la verosimilitud:

“Mis protagonistas no sonríen constantemente enseñando todos los dientes, pues en mi opinión la vida es así: uno no se ríe todos los días. Los personajes pasan por momentos

distintos. Es verdad que soy un poco melancólico, pero no es ni mucho menos una constante”, ha señalado Lacombe. Ya están disponibles su versión de «Cuentos macabros», de Edgar Allan Poe, en la traducción de Julio Cortázar; «El herbario de las hadas», su particular versión de «Blancanieves»; «Melodía en

la ciudad» y «Genealogía de una bruja», cada uno con una cuidada edición y diseño particular. Estupendas oportunida-des para sumergirnos en el mundo de uno de los autores más solicitados del mundo. Todos publicados por Edelvives y distribuidos por Contrapunto.

http://benjaminlacombe.hautetfort.com/

¿Dónde encontrarlas?

En Santiago se está desarrollando

un interesante circuito para la literatura

ilustrada, desde el comic alternativo

hasta la novela gráfica, pasando

por el libro álbum o formatos expe-

rimentales. Dentro de las librerías especializadas destacan Club

Bolonia (Avenida Italia 2004),

Tesauro (Santa Magdalena 41,

local 6), la sección infantil de Prosa &

Política (Valentín Letelier 1376) y Galería Plop! (Merced 349,

galería 7).

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Literatura

30 I La Panera

POR CAROLINA ANDONIE DRACOS

Si para un autor promedio, salir de su zona de confort resulta un gran desafío, para J.K. Rowling, las cotas son siderales, ya que en la actualidad

hay pocos universos tan arraigados en el pú-blico internacional como el de Harry Potter y sus aventuras en Hogwarts.

Siete extensos volúmenes y un éxito de ventas histórico (450 millones de libros) así lo confirman.

Escribir «Una vacante imprevista», su pri-mera novela para adultos, implicó demostrar que fueron la creatividad y la buena pluma los que la transformaron en una de las mujeres más ricas del Reino Unido y no el haberle dado el palo al gato con un niño mago que fue creciendo junto a sus lectores.

El lanzamiento oficial de la novela («The casual vacancy») en 2012 fue precedido por un millón de órdenes de preventa y se con-virtió en un best seller instantáneo en los mer-

cados anglosajón y español, con contrato ce-rrado para una miniserie de la BBC en 2014. La crítica, sin embargo, se mostró dividida: algunos la consideraron banal, estereotipada y aburrida. Otros, en cambio, la calificaron de brillante, llena de humor negro y como un re-ferente de la Inglaterra contemporánea.

Una forma de zanjar el asunto es decir que lo mismo vale para «Una vacante imprevista» que para la saga de Harry Potter, ya que si bien la autora cambia el perfil de su público (adulto, ya no adolescente), sigue apuntando al mismo tipo de lector (del que claramente hay millones): uno que se entretiene leyendo una historia bien contada y que no aspira a grandes devaneos intelectuales.

Para Rowling, la idea era crear una versión moderna de la novela decimonónica centrada en un espacio acotado. El volumen abre con la muerte de Barry Fairbrother, a los 44 años, por un aneurisma cerebral. Su último día con vida, que coincide con su 19 aniversario de matrimonio, se lo pasa escribiendo un artícu-

La tRagicOmedia de

J.K. Rowlingcon críticas dispares y ventas propias de la autora de Harry Potter, salió al mercado «Una vacante imprevista», su primera novela para adultos, donde pasa de la magia a los enfrentamientos entre vecinos de un pequeño pueblo inglés.

EFE

«Una vacante imprevista» J.K. rowling Salamandra601 páginas$16.700

lo para el periódico local sobre el esfuerzo de una chica por salir adelante, olvidándose de su esposa y sus cuatro hijos. Como integran-te del Consejo parroquial de Pagford, Barry deja tras su muerte una vacante que amigos y enemigos tratarán de ocupar, especialmente ahora, que el pueblo dirime un conflicto terri-torial con la vecina ciudad de Yarvil.

El tema de la administración local es el eje rector del que se despliega una serie de con-flictos actuales, como la superposición de cla-ses, el abuso de las drogas en los jóvenes y la marginalidad vista como un pantano del que es imposible salir. También están presentes la relación de padres e hijos, alumnos y profeso-res, amigos y conocidos, así como la agresivi-dad en adolescentes y la incompetencia de la ayuda social.

Con su plaza adoquinada y su antiquísima abadía, Pagford podría pasar por un idílico pueblito inglés, sin embargo, basta un movi-miento inesperado del destino (la muerte de Barry) para que comiencen a surgir las grie-tas más bizarras de sus habitantes. Están, por ejemplo, el marido violento, el profesor obse-sivo que teme ser pedófilo, la joven que lidia con una madre drogadicta, el hijo adoptado que odia su vida actual, la inmigrante india víctima del bulling, la esposa que descubre el engaño que ha sido su matrimonio y la madre sola que busca pareja. La lista de tipos huma-nos es extensa, al igual que en sus entregas anteriores.

El relato confirma la capacidad de la autora para atrapar al lector en un friso posible, o al menos coherente, de emociones y experiencias propias del vivir en comunidad. La historia mantiene la intensidad hasta el final, en el que Rowling vuelve a recordarnos, de un modo es-tremecedor, que, a fin de cuentas, todo gira en torno a la moral y a la muerte. Entretenida y de fácil lectura. Totalmente recomendable.

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La Panera I 31

bRújULa LiteRaRia [ POR CAROLINA ANDONIE DRACOS ]

La Libertad de cumpLir cien años

Lo nuevo de FinLandia

c omo una novela de humor y aventuras se podría definir «El abuelo que saltó por la ventana y se largó», la increíble historia de un hombre que para

su 100 cumpleaños decide arrancarse del asilo en el que vive y partir sin rumbo ni expectativas.

Se trata de la opera prima del productor de te-levisión sueco Jonas Jonasson, que al alcanzar los 100 empleados a su cargo, vendió todas sus po-sesiones y se fue a Lugano a escribir la peripecia criminal de allan Karlsson, una especie de Forrest gump astuto, que rápidamente se transformó en un fenómeno editorial transeuropeo.

jonasson cuenta en el prólogo que su abue-lo, que inspiró el libro, siempre le recomendaba nunca dejar que la realidad estropeara una buena historia, como la del protagonista, un viejo zorro de aplastante sentido común que cambia por ac-cidente los principales acontecimientos del siglo XX. de ahí que interactúe de tú a tú con perso-najes como Franco, Stalin, churchill, mao, o ayude a Oppenheimer a crear la bomba atómica.

La novela abre con el protagonista dejando la residencia de ancianos en la que vive una hora antes que le celebren su cumpleaños en una mediática ceremonia a la que asistirá incluso el alcalde. Sin saber adónde ir, se encami-

na a la estación de buses y mientras espera el suyo, un joven le pide que vigile su maleta, a lo que accede, pero como el autobús llega antes de que su dueño regrese, allan se sube,

llevándola consigo, sin saber que en su interior se esconde una fortuna en coronas. a partir de ahí, el anciano encontrará en cada persona con la que se tope una oreja para sus insólitos relatos, narra-dos con un estilo divertido y refrescante.

dicen que el autor se habría contentado con sacar doscientos ejemplares al mercado. cómo iba a imaginar que se venderían cuatro millones a nivel internacional o que se adquirieran los de-rechos para su versión fílmica, si hasta las agencias literarias lo habían rechazado porque no sabían cómo reaccionaría el público con un libro humo-rístico, especialmente viniendo de Suecia, donde los íconos son ingmar bergman o Stieg Larsson. a propósito de este último, cabe señalar que el editor que publicó a jonasson fue el mismo que tuvo por semanas en su casa el manuscrito de «millenium» hasta que el propio Larsson fue a re-cuperarlo, al no obtener respuesta. Por lo visto,

esta vez acertó con jonasson, pronto a sacar su segunda novela, «La analfabeta que podía leer», sobre la odisea de una sudafricana por llegar a europa.

n o es mucho lo que se conoce de la producción na-rrativa de Finlandia en el mercado en castellano, si bien somos testigos de un boom nórdico especial-

mente abocado a la novela detectivesca (camila Läckberg, Stieg Larsson o asa Larsson).

Oriunda de Oulu, Riikka Pulkkinen (1980) ha dado una vuelta de tuerca a la situación con «Raja» (Fron-tera), que, luego de ser publicada en 2006, se convirtió en un notable éxito de crítica y público, y obtuvo los premios Kaarle y Laila Hirvisaari. Sin embargo, la internacionalización llegó con su segunda novela, «La verdad», que la consagró como una de las voces más interesantes de la literatura finlandesa.

Los parajes inhóspitos y las muertes cruentas a las que nos tenían acostumbrados los best se-llers escandinavos son depurados a su expresión más sutil a través de un relato a dos voces sobre un secreto de familia expuesto ante la inminente muerte de una de sus protagonistas.

elsa, una reconocida psicóloga infantil que pa-dece un cáncer terminal, ha revolucionado con su enfermedad la vida de toda su familia, la que empieza a administrar su temor la misma noche que llega a su casa después de dos semanas hospitalizada. Su marido, martti, un pintor extrovertido, prefiere no dormir y observar el ritmo cansino de su respiración. Su hija, eleonoora, adop-ta el espíritu práctico y resolutivo propio de su profesión (médico), mientras las nietas permanecen oscilantes entre el arrojo y la pena.

Una de ellas, anna, trata de mitigar el sufrimiento de su abuela compartiendo placeres simples, como hornear

pasteles, disfrazarse juntas o improvisar un picnic en el parque. Un día se prueba un viejo vestido que encuentra en la habitación de elsa, sin saber que la dueña no es su abuela, sino eeva, una misteriosa joven que marcó la vida de su familia.

el relato entonces se abre a la voz de eeva, que en pri-mera persona informa al lector de lo que fue su paso por la vida de la familia ahlgvist. Una joven estudiante de Francés y de Literatura que llegó a trabajar a la casa de martti y elsa, para cuidar a la pequeña eleonoora, cuando su madre viajaba a dar conferencias al extranjero. Poco a poco, eeva se fue enamorando de martti, que le co-rrespondía, transformando a éste y a la niña en su propia familia.

¿Qué pasó con eeva, por qué todos los involu-crados se esmeraron en ocultar lo ocurrido has-ta ahora que su abuela, a punto de morir, decide romper el silencio? Son las preguntas que llevan a anna a obsesionarse con recobrar el pasado de su familia, como si de este modo pudiera recorrer un camino alternativo al de su propia vida, sin te-

ner en cuenta los efectos inesperados que trae consigo la memoria.

Finalista del prestigioso Premio Finlandia, por meses en la lista de los títulos más vendidos, «La verdad» habla de los avatares de tres generaciones que se entrecruzan en una madeja de amor, trauma, perdón y olvido. el título original de la novela es «Totta», que en finlandés significa “verdad”, pero también “así es” o “pues sí”, que grafican muy bien ese tono afirmativo, tardío y desafiante que elabora la novela. Definitivamente, un agrado.

«el abUelo qUe saltó por la ventana y se largó» Jonas Jonasson Salamandra413 páginas$15.500

«la verdad» riikka pulkkinen Salamandra, 2012 318 páginas$14.700

[ retweet]1. @AlfaguaraChile: «Desnuda», el primer volumen de «El affaire Blackstone», la trilogía de Raine Miller, llega al fin a Chile por editorial @sumadeletras, para las viudas de «Cincuenta sombras de Grey».

2. @uwhisp: «Desnuda», de Raine Miller… ¡Un libro para comérselo!

3. @LecturasAC: «Desnuda», de Raine Miller. Christian Grey ya tiene heredero. http://fb.me/WBjPeKzG

4. @QueLeoApumanque: «Desnuda», de Raine Miller, la novela que conquistó a las lectoras de «Cincuenta Sombras», ya disponi-ble en nuestro local.

5. @50SombrasFrases: ¿Me podrías reco-mendar algún libro similar a #50sombras, pero que no sea «Desnuda», de Raine Miller?

6. @Editabundo: «Desnuda», de Raine Miller -Sinopsis, descargas y comentarios. http://www.sumadeletras.com/es/libro/desnuda/#.UPk4OW06I1I.twitter… 7. @elkar: «Desnuda», la primera parte está disponible en papel y ebook.

8. @libreriajavier: «Desnuda», de Raine Miller, suave erotismo y perfecta escritura en una novela que no vamos a poder olvidar... http://fb.me/2mVCfKaoA

9. @estandartenews: De la autopublicación en @amazon a los primeros lugares en la lista de los más vendidos: «Desnuda», de Raine Miller.

10. @MorganeLFay: En la página 35 de 115, de «Desnuda», de Raine Miller: como que la autora va de prisa ya entramos en materia.

11. @pato_sesnich: “Las relaciones son así. Compartes tus sentimientos con la otra per-sona y le ayudas a que te conozca mejor”. «Desnuda», de Raine Miller.

12. @fetcheves: Leí los tres tomos de «50 sombras», excelentes. Compré «Desnuda», de Raine Miller. Decían que era mucho mejor. Resultó malísimo, casi una copia.

13. @lufixD: «Desnuda», de Raine Miller: Es en serio, primero lo pintan todo macho alfa y termina siendo el mas dulce...

14. @GalleyCat: En sus inicios, Raine Miller lideró los puestos de autopublicados en Amazon y Barnes & Noble.

15. @autorassombra: Extracto de «Desnu-da», de Raine Miller (Lee el primer capítulo dentro de la ficha de la novela) http://fb.me/2ipRJrIPX

“Si no puedes lidiar conmigo en mis peores momentos, entonces no me mereces en mis mejores”, Marylin Monroe (1926-1962).

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32 I La Panera

Literatura

Por Lina Meruane.

«El pErro quE comía silEncio»es el curioso primer libro de la chi-lena Isabel Mellado, una escritora recién llegada de Europa a nuestra

escena narrativa. Mellado es sin duda una narra-dora extraña, salida más de las orquestas donde ejerce de violinista que de los talleres literarios. Acaso por eso el suyo sea un libro sin aparentes filiaciones y a la vez libre de los rigores que se ciernen sobre la obra de los autores patrios, sus contemporáneos. Hablo de ciertas expectativas: que todo libro se manifieste sobre el acontecer nacional, que conforme la crónica del Chile actual. Este es, en cambio, un libro que se ubica en el incómodo margen de nuestras contiendas. Menu-do, silencioso y a la deriva, como perro sin dueño que le ladre. Pero desde la pelada esquina que habita nos llega también su aire fresco, su modo distinto de gestionar lo político. Tener una impron-ta descabellada no implica estar desconectado de la realidad. La ficción, por más absoluta, no es lo contrario de lo real sino su distorsionado espejo, su forma de decir lo actual en otra lengua. Y un libro escuálido no es lo mismo que uno ligero: es el caso de estos cuentos breves, alternados por otros aún más sucintos, y rematados por una serie de greguerías que la autora, en una humorada ca-nina, llama “huesos”. Contraria a lo rotundo, Me-llado trabaja con ideas contradictorias y descalces de lo posible. Morir más de una vez, por ejemplo. o por regresar al título de su libro: alimentarse del intangible silencio. Es de situaciones paradóji-cas que arranca cada relato y he ahí su vocación agitadora: quebrar las rigideces del pensamiento, desaletargar nuestros modos de entender la ex-periencia. Sería recomendable, por lo mismo, no leer este libro de un tirón sino apenas algunas páginas por vez, un par de aforismos antes de le-vantarse (antes de abrir los ojos si fuera posible), sobre todo antes de enfrentar las páginas de los

diarios, tan llenos de sentencias que construyen el miedo y destruyen la imaginación de lo distinto. Leer a Mellado exige avanzar despacio, dejarse atrapar por historias que martillean y derrum-ban el sentido común con su lógica irresoluta de preguntas imposibles y finales abiertos. Este es un libro del tiempo paralelo y de su otra realidad. Un libro lleno de alternativas a lo cotidiano. Se lo lee para aprender a mirar el mundo otra vez desde la oscuridad, como hace uno de los tantos narradores: el ciego. Esto es lo que nos dice, ese invidente: “Cuando termine de morir quiero que espar-zan mis cenizas. Con suerte será comida para peces y estos a su vez alimentarán a los pájaros y podré mirar para todos lados”.

La posibilidad de mirar a través de otros después de la muerte es consistente con una poética sin duda surreal que altera los pa-rámetros de lo posible y recupera una tradición que pareció extinguida en Chile con los poetas del grupo Mandrágora, con Huidobro y Juan Emar. En la prosa de esta surrealista tardía se detecta, como en ellos, una operación subversiva cuya he-rramienta es la sorpresa. Apunto estas: “La lluvia es agua tartamudeando” y “Dios cuelga la lluvia del cielo para que se seque”. Lo surreal se presen-ta además en el humor asociativo e incluso en los dibujos que esta escritora-violinista inserta entre las páginas de su libro. Pero es la reivindicación de la imaginación lo que importa: estos relatos se empecinan en hacernos amanecer del otro lado de las cosas. Del lado deslumbrante y sobrecoge-dor de lo inesperado, antecedente inmediato del cambio. Permitirnos imaginar otros modelos del habitar que parecen agotados en la política (en la cabeza gris de casi todos nuestros políticos) y en una producción cultural que nos repite, incesan-

Tragar silencio

Lina Meruane es autora de

«Fruta Podrida» y «Sangre en el

Ojo», entre otras obras de ficción, y «Viajes Virales» es su reciente libro

de ensayo. Ha recibido los premios litera-rios Sor Juana inés de la Cruz (México) y anna Seghers (Berlín). enseña literatura universal y cultura latinoamericana en la universidad de

nueva York.

ConTrArIA A Lo roTUnDo,

LA AUTorA TrAbAJA Con

IDEAS ConTrADICTorIAS Y

DESCALCES DE Lo PoSIbLE.

MorIr MáS DE UnA vEz,

Por EJEMPLo.

«El pErro quE comía silEncio» isabel mellado Páginas de espuma 2011128 páginas

te, lo que ya sabemos, no sea que se nos olvide. Trastornar el ángulo de la mirada, producir una inflexión desde la que ya no sea posible retornar, al menos no retornar de la misma manera, es otro modelo necesario. Dejar de imitar y de confirmar una realidad disecada por la rutina, permitir que la imposibilidad se infiltre en la escena con giros irre-verentes y despilfarros nada programáticos. rom-per un silencio que amenaza volverse mordaza, un silencio que es necesario tragarse aunque nos deje en los huesos. En el silencio se haya, preci-

samente, la última paradoja de este libro: escribir es de-rrotar al silencio, el silencio no es más que una destre-za del decir. Mellado podrá darse el lujo de anotar que cualquier día se despierta con “las manos afónicas” pero lo asegura en un len-guaje nada carrasposo. Hay que ejercer la sospecha, entonces, cuando un per-

sonaje dice que “la palabra desnuda es silencio y es la valentía suprema de nuestro género. Silencio es la evolución última de la palabra, cuando ésta se libera de su ego. El silencio es la pequeña libe-ración del hombre”. Es de este silencio anterior que surge el libro de Mellado para alertarnos que el silencio es la consigna de la libertad en cuanto nos permite volver a la esencia de las cosas, a la palabra que permite nombrar las cosas por lo que son. Es esa su política.

Rosa

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Page 33: La Panera Num. 36

Por Víctor Barrera enderLe

la p r i m E r a s E n s a c i ó n , tras iniciar la lectura de «aquí y aho-ra. cartas, 2008-2011», fue más o menos parecida a ésta: estoy ante un

libro planeado, me dije, pensado como una obra dialógica. Una composición hecha en tándem. Premeditada. Creí entonces que eso demeritaba el texto. Luego cambié completamente de pa-recer, y supongo que a los propios interlocuto-res les pasó lo mismo. Doy una prueba. El 7 de abril de 2011, tras tres años de correspondencia, Paul auster (newark, 1947) llama a J.M. coet-zee (Ciudad del Cabo, 1940) el “otro ausente” y le confiesa su revelación: “He descubierto que muchas veces voy por ahí hablando contigo en mi cabeza…”.

Experimento de literatura epistolar en la era de la comunicación instantánea. El aquí y el ahora son despojados del oropel digital: puestos sobre el papel, tras una pausada reflexión. Ese gesto es ya una provocación, pero también un riesgo: caer en el simple artificio, en una creación forzada. Y ese peligro intensifica la lectura. El antecedente es simple, no ocupa sino la mitad de la contrata-pa: Auster y Coetzee estaban en contacto desde 2005, sin embargo, no se conocieron personal-mente hasta febrero de 2008. Unos pocos me-ses más tarde, a mitad de julio, Coetzee lanza la primera “piedra”: una carta que reflexiona sobre la amistad. El anzuelo cumple su cometido. El 29 de julio, Auster responde desde brooklyn; sus primeras palabras son una confesión: la misiva de

Coetzee le ha desatado “un torbellino de ideas y recuerdos”. Ambos autores han tratado, directa o indirectamente, sobre la amistad en sus res-pectivos libros. Debo aclarar que, desde el inicio, queda establecido el límite del concepto: ellos pensarán y debatirán sobre la amistad masculi-na, y yo añado aquí otro adjetivo a esa amistad: literaria.

no es raro, pues, que el primer asunto planteado sea la amistad, y en particular la amistad masculina: ¿cuándo pueden dos hombres ser amigos sin ser confidentes? Coetzee y Auster comienzan siendo amigos y terminan convertidos en cómplices. Mu-chas cosas los unen: la escritura, en primer lugar, pero también la edad y la lengua. Son hombres maduros que habitan en distintas posiciones del mundo anglófono. Y lo mismo sucede en el terreno literario. A pesar de que Coetzee ha sido galardo-nado con el premio nobel, nunca deja de sentirse como un extranjero en el idioma inglés. Auster, por el contrario, se apropia de la lengua inglesa con la peculiar arrogancia de los estadounidenses. Para él, el centro del mundo es nueva York, aunque reco-noce lo relativo de sus juicios y preferencias.

Los interlocutores, una vez fortalecida la com-plicidad y establecidas las reglas de juego (lanzan sus cartas vía postal, primero, y luego a través del fax, no utilizan el correo electrónico, salvo a ma-nera de telegrama), pasan a la revisión de diver-sos temas. Los menciono al vuelo: la crisis econó-mica desatada en 2008 y su carácter ficcional y especulativo (una perversa forma de ficción que logra empobrecer aún más a buena parte del planeta); la literatura epistolar y su dilema: ¿qué

el aquí y el ahora, disTendidos

la correspondencia enTre ausTer y coeTzee

ESTAbLECIDAS LAS rEgLAS,

¿CUánDo PUEDEn DoS

HoMbrES SEr AMIgoS SIn SEr

ConfiDEntEs? CoMEnzAron

SIEnDo PArES Y TErMInAron

ConvErTIDoS En CóMPLICES.

VíCtOr Barrera enderLe (Monterrey, México, 1972). ensayista y crítico literario. en 2005 obtuvo el Premio nacional de ensayo «alfonso reyes» (México). Ha publicado, entre otros, «La mudanza incesante» (2002), «La otra invención» (2005), «de la amistad literaria» (2006), «Literatura y globalización» (2008) y «Lectores insurgentes» (2010). actualmente dirige la revista cultural «armas y Letras».

buscar ahí, la vida o la obra, o ambas?; la constan-te sensación de pérdida de realidad que provoca la posmodernidad (por momentos las cartas me hicieron pensar en la poesía lárica de rilke, ese canto a la extrañeza que provocaba la irrupción de la vida moderna); los procesos heterogéneos que se llevan a cabo en la escritura de novelas; la lectura literaria en la era digital; la naturaleza de la crítica; el uso de los teléfonos celulares en la trama novelística; el cine clásico; los viajes; las hazañas deportivas; y, por supuesto, el paso del tiempo y sus consecuencias más profundas y evi-dentes: la vejez y la muerte.

Ambos son hombres mayores, su juventud ha quedado atrás: ¿cómo participar de la vida sin reproducir los lugares comunes de su edad y evitando, asimismo, caer en la ridícula actitud del joven eterno? tal es el desafío que los dos en-frentan a diario. Y creo que ahí reside la parte fundamental de este li-bro: en el gesto de salvar la comunicación en un momento donde reina la sobreinformación. Ser coherentes y no caer en las tentaciones de los simulacros. Dos escritores se escabullen de la vorágine y crean el tiempo e inventan el espa-cio. Hacen una pausa para charlar, para discutir, para reconocerse como pares. Tratan de evitar la nostalgia, y no pretenden adornar el pasado ni cancelar el futuro. Por el contrario, Paul Aus-ter y J. M. Coetzee buscan maneras de hacer del presente (del aquí y el ahora) una época mucho más habitable, no sé si eso es posible, pero sí sé que es importante tratar de que lo sea.

La Panera I 33“La mujer llora antes del matrimonio, el hombre después”, proverbio polaco.

Rosa

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34 I La Panera

Por Violeta Güiraldes del Canto

La primera vez que vi a Diego, de 18 meses, deslizar sus dedos con destreza sobre la pantalla de un smartphone pensé que estaba frente

a un genio. Observé cómo abría las aplica-ciones, miraba las fotos como una presenta-ción y hacía sonar la música guardada en el teléfono móvil. Después, me encontré con la sorpresa que muchas amigas conocían en su entorno algún pequeño que hacía lo mismo. “Los niños de hoy vienen con un gen nuevo”, dijeron. Una de ellas me dio una explicación más simple y reveladora: “Ellos ven a sus pa-dres y hermanos conectados, accionando sus teléfonos y hacen lo mismo”. Igual cosa puede ocurrir con el hábito de leer.

La imitación de quienes los rodean juega un rol importante en la educación y puede llevar al descubrimiento del placer de la lec-tura tradicional o virtual. Según los expertos, también son efectivas las lecturas comentadas en familia, las actividades lúdicas en torno a los libros, contar cuentos a los más pequeños e incluso decirles que escriban diarios de vida. Cualquier texto, aunque no sea literario, es útil para crear el hábito de leer.

Las nuevas tecnologías pueden ayudar mucho. Todo pasa por dejar de verlas como rivales del libro y usarlas para acceder a és-

Lectura

EL pLacEr dE La LEctura en tiemPos de interneten formato tradicional o digital, los libros pueden entretener, abrir la mente, dar a conocer otros mundos y mucho más. Acceder a ellos debe ser un agrado, no una obligación.

Alej

Andr

A Ac

ostA

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La Panera I 35

tos a precios más bajos o gratis. Igualmente, conviene utilizarlas para conocer a los auto-res, leer sus biografías, su pensamiento y has-ta escuchar sus charlas y cursos. También es posible visitar los lugares en que vivieron los personajes de los relatos y conocer un poco más de lo que sucedía en la época descrita por su creador. Todo esto se logra con un poco de interés y una conexión de banda ancha en la casa, colegio, biblioteca o cibercafé.

De papel o virtuales, los libros pueden en-cantar a las personas con sus contenidos y su lenguaje. Lo importante es que quienes los lean los comprendan y gusten de ellos. Algunos dicen que leer tiene relación con lo corporal y necesitan tocar y oler los libros, pero las nuevas generaciones están tan fa-miliarizadas con la computación que una ta-bleta o un notebook podría resultarles hasta más cómodo.

la importanCia de Leer

A juicio de los expertos, la lectura no sólo proporciona información, también educa, crea hábitos de reflexión, de análisis, de es-fuerzo y concentración. Permite aprender por sí mismo durante toda la vida y estar actualizado en una época en que los conoci-mientos envejecen rápidamente. Aumenta el vocabulario, mejora la redacción, entre mu-

La política tuvana soviética Khertek Anchimaa-Toka (1912 - 2008) fue la primera mujer en aprender el alfabeto mongol para erradicar el analfabetismo en su ciudad natal.

Si quieres leer en una tableta o en el compu-tador, puedes acceder a libros en diversos idiomas a través de muchas direcciones de Internet, gratis o pagando por ellos. Aquí señalamos algunas que tienen bastantes textos en español o sirven de acceso a otros sitios en que éstos se encuentran:

Memoria Chilena www.memoriachilena.cl

Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes www.cervantesvirtual.com

Libro móvil www.libromovil.es

Librodot www.librodot.com

Books online www.booksonline.com

Ebooks Patagonia.comwww.ebookspatagonia.com

Biblioteca virtual de Unesco www.wdl.org

UnA TArEA UrgEnTE

En la última Prueba de Selección Universitaria (PSU) sólo tres alumnos alcanzaron puntajes nacionales en lenguaje, mientras más de 130 los obtenían en mate-máticas. Por otra parte, un estudio realizado en 2010 por el Instituto nacional de Literacidad de Estados Unidos, que mide el hábito lector en 22 países, demos-tró que el 85% de los chilenos, entre 16 y 65 años, tenía comprensión lectora en el nivel 1, lo que significa que apenas eran capaces de entender la etiqueta de instrucciones que trae un producto comercial. Entre los universitarios nacionales, sólo 25% de los que egresa alcanza el nivel 4-5 de comprensión lectora, esto significa tener la habilidad de inferir a partir de lo que conocen y la capacidad de generar una nueva información desde lo aprendido. Habrá que rogar porque los médicos que nos atienden y los arquitectos que construyen nuestras casas estén dentro de ese 25%. En los años 70, Chile era el segundo país más lector de América Latina. Hoy la realidad ha cambiado, pero quienes aman la lectura pueden hacer mucho por revertir esta situación con el ejemplo y, entre otras cosas, contando historias a los niños más cercanos.

chos otros beneficios.Según Aileen L’Huillier, Presidenta del

PEN Club de Chile y Directora de Edicio-nes Unicornio, leer es vivir y revivir la his-toria humana: “El lector puede trasladarse a cualquier época y adentrarse en el misterio del ser, tomando contacto con el flujo del pensamiento universal”.

Aileen guía talleres literarios de la Munici-palidad de Providencia y asegura que “quien no lee pierde mucho”, porque hacerlo no sólo es una entretención, sino además una posi-bilidad de conocer puntos de vista distintos. “Me gusta, por ejemplo, leer a las escritoras pioneras porque hablan sobre la mujer desde la mujer: muestran sus pensamientos, sus an-helos, sus vacíos. Antes eran descritas por los hombres, desde la perspectiva de ellos”.

La lectura aporta vocabulario para ex-poner el pensamiento propio. Desarrolla la

capacidad de pensar, comparar, definir, argu-mentar y observar. Activa la creatividad al darnos fluidez, flexibilidad, originalidad y sensibilidad. Nos vuelve más tolerantes, me-nos prejuiciosos, más libres, más abiertos al cambio, más universales y orgullosos de lo nuestro. Además, la lectura nos puede librar de la soledad, de la depresión y del consu-mismo compulsivo.

LA vidA es un Cuento

“Me entusiasmé con la lectura porque mis abuelos y mis padres me contaban cuentos”, nos dice Cecilia Hudson, Profesora Gene-ral Básica con mención Castellano y Ma-gíster en Educación Especial por la Uni-versidad Católica. Aprendió así a disfrutar de esas historias y a pensar la vida como si fuera estas narraciones. Actualmente, for-ma parte de Imaginaeduca, una consultora pedagógica cuyo objetivo es hacer un apor-te didáctico en el área del Lenguaje para mejorar el nivel comunicacional y educa-cional de las personas, a través del perfec-cionamiento, asesoría y acompañamiento a los docentes. “Enseñamos a los profesores a entusiasmar a sus alumnos con esta acti-vidad, leyéndoles cuentos y armando todo un sistema que conduce a que los niños sientan el placer de leer”, señala. Capacitan también a los profesores en su función de cuenta-cuentos y en literatura.

“A los niños de esta generación muy pocas personas les leen cuentos”, asegura Cecilia. Los relatos, a su juicio, requieren tiempo para comunicarse, para estar con el otro. “Es im-portante que los profesores hagan recorridos de lectura junto con los niños, partiendo por los cuentos tradicionales. También, que al-guien les lea y los escuche”.

Además, se han creado hasta juegos de mesa para incentivar la lectura; «Poesía es un Juego» y «Qué Leo» son dos de ellos, en venta en librerías chilenas. Y en la red hay software para fomentar el aprendizaje de la lectura, uno de ellos es www.bartolo.cl

“me gustA, Por ejemPLo, Leer A LAs escritorAs PionerAs

Porque hAbLAn sobre LA mujer desde LA mujer: muestrAn sus

PensAmientos, sus AnheLos, sus vAcíos. Antes erAn descritAs

Por Los hombres, desde LA PersPectivA de eLLos”.

DónDe encontrar libros Digitales

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36 I La Panera

HOMEOSTASIS ESE continuo movimiEnto dE adaptación

El proceso de realizar las 23 conversaciones que contiene esta publicación demoró dos años y contiene una reflexión honesta y sin pretensión de personas en sintonía con la naturaleza, con trayectorias profesionales interesantes, y con un grado de equilibrio y armonía importante. interesantes y bellos, estos testimonios caen en un imaginario viaje interno.

Libros

Felipe Monsalve es cineasta y pertenece a la productora audiovisual Malgenio Films, en Barcelona. Regresó a santiago para desarrollar una mediática feria de sustentabilidad, la que realiza en alianza con el arquitecto Mathias Klotz, la Universidad Diego portales y la Municipalidad de vitacura.

por Felipe Monsalve

Fotos: olivia larrain

Tras un viaje iniciático por el Ama-zonas y una temporada laboral en Barcelona, me encontré con un Santiago de muchas personas con

dificultad para conectarse consigo mismas; envidias y resentimientos en todas las ins-tancias y niveles; eternas problemáticas so-ciales sin resolver; ego, vanidad y exposición en las redes de internet; y un monotemático discurso por alcanzar dinero y reconocimien-to. Esa enrarecida frecuencia energética hizo que quisiera saber por qué nos estábamos

comportando de esta manera. Pensé que se-ría un privilegio poder averiguarlo reunién-dome con personas que habían hecho de sus vidas caminos distintos, calmos, atractivos y admirables. Pero también tenía la necesidad de hacer de esta experiencia algo que fuera atractivo, entretenido, y la idea de lograr re-tratarlos en los espacios donde ellos pasaban mayor parte de su tiempo resultaba ideal. En ese instante mágicamente del cielo cayó Oli-via Larrain, quien con su talento fotográfico infinito y su bellísimo imaginario estético pudo traducir en una delicada apuesta visual el contenido editorial que íbamos recibiendo, y que fue complementada con las hermosas ilustraciones botánicas de la artista Patricia Domínguez.

El proceso de realizar las 23 conversacio-nes que contiene «Homeostasis» demoró dos años. Para Olivia y para mí era importante desarrollar estas conversaciones en tranquili-dad y armonía. No queríamos correr ni tener la sensación de estar haciendo un trabajo, por-que resulta muy difícil construir cosas verda-deras en dinámicas ansiosas. Nuestra apuesta consistió en ponernos a disposición de los entrevistados, y nos juntábamos cuando ellos lo estimaban oportuno. Como las entrevistas y sesiones fotográficas resultan ser invasivas, y las personas tienden a cerrarse en vez de abrirse, sabíamos que para obtener la infor-mación que buscábamos cada conversación tendría que abordarse como un proceso que debía ser vivido con naturalidad y empatía. La selección de los entrevistados fue instin-tiva. Deseábamos contactarnos con gente que estuviera en sintonía con la naturaleza; que fuera amorosa y dulce; con trayectorias profe-sionales interesantes; y con un grado de equi-librio y armonía importante. También nos in-teresaba conectarnos con personas mayores, porque son quienes tienen más información y sabiduría para transmitir cómo poder vi-vir mejor; más felices y resueltos. Porque no

queríamos hacer de esto algo intelectual. Era importante que los entrevistados hablaran más desde la emoción que desde el intelecto. Queríamos aproximarnos a las temáticas des-de una reflexión honesta, sin pretensión y de acuerdo a la experiencia de sus propias vidas.

Hacer este libro no sólo significó construir un interesante y bello material, también in-centivó un importante aprendizaje para no-sotros, uno que se fue profundizando con cada viaje que hacíamos, con cada testimonio que escuchábamos. Fue inevitable caer en un viaje interno que permitió ir resolviendo al-gunos temas pendientes que ambos teníamos en esos momentos. Incluso hasta hoy, que recién hemos cerrado este ciclo con el lan-zamiento del libro, vamos entendiendo algu-nas otras cosas que fueron sucediendo en el camino, y que no fuimos capaces de ver en ese instante por estar muy involucrados con lo que estaba ocurriendo. Vivimos un periodo especial y enriquecedor, pero también muy intenso. Aún queda mucho por asimilar, todo tiene su tiempo. Y no tenemos dudas que quienes puedan aproximarse a estos testimo-nios también vivirán su propio viaje interno, el que podría gatillar importantes cambios en sus vidas.

En primEra pErsona

Contiene 23 entrevistas en primera persona. Ximena abogabir, Juan andrés Camus, Jeanine Charron, Horacio Croxatto, Ximena Dávila, Claudette Duchesne, adriana Hoffmann, sergio larrain,

Hugo Marín, Humberto Maturana, Manfred Max-neef, Juan pablo orrego, adela pino, Gustavo ponce, paulina Riedemann, Gustavo aldunate, Jurgen Rottmann, adria-na schnake, Gastón soublette, Janet spröhnle, Douglas Tompkins, María luisa velasco, José luis vergara.

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La Panera I 37A los 59 años, la novelista Virginia Woolf (1882-1941) se ahogó voluntariamente en el río Ouse, cerca de Sussex, Inglaterra, por miedo a una incipiente locura.

Algunos extractos

sErgio Larrain | FoTóGRaFo

“lo místico te conecta contigo, con lo que te rodea. Te mantiene a raya el ego. al ego no se le puede eliminar, por lo mismo tienes que estar atento a que no controle tu actuar. si aparece, pierdes libertad, pierdes ser tú. el trabajo espiritual enseña a ver, reconocer, en ti y en el otro. es importante aprender a observar, lo externo y lo interno. Cuando observas tu mundo interno aparece lo místico, ahí está la espiritualidad, ahí está la posibilidad de crecer, ahí está lo que somos. Trabaja la espiritualidad, te será de mucha ayuda para vivir, para en-tender la vida. Mis fotografías hubieran sido sólo un trabajo estético, bien hecho, algo puramente bonito, si no hubiera realizado un trabajo interno. la fotografía es más que eso. es una forma de expresión, es el resultado de tu mundo interno en composición con la luz. ¿ves ese jarro que está en la mesa? ¿ves cómo el rayo de luz que entra por la ventana rebota en la muralla iluminando la mitad de la flor? esa es una imagen hermosa, una composición perfecta. Juntos hemos tomado una fotografía, hemos hecho el ejercicio fotográfico, sólo que no lo hemos registrado. ¿Te das cuenta? sigo tomando fotografías, pero ahora sin registro. pero existió el acto, el instante. no son necesarios los registros, recuerda que sólo existe el aquí y el ahora. Hay que li-berarse de las imágenes, de todo tipo de imágenes: las de tu infancia, las de tu familia, las de ti mismo. las imágenes te mantienen atrapado en el deseo, en el ego. suelta todo y llegarás a la felicidad. Todo será bienvenido, y nada también”.

CLaudEttE duChEsnE | TeRapeUTa naTURal

“Me vine a Caleu buscando la conexión con la naturaleza. este paisaje es realmente maravilloso, de sol permanente en verano y de nieve en invierno. Y el cerro el Roble en otoño es un espectáculo de rojos. aquí en esta pequeña cabaña soy inmensamente feliz, llevamos una vida muy hermosa con mi marido. Tenemos todo lo que necesitamos, y lo hacemos con nuestras propias manos. Cada mañana realizo mis ejercicios tibetanos, y luego subo el cerro que está aquí atrás y descanso en la cumbre sobre una gran roca. De ahí miro santiago y valparaíso desde las alturas y me conecto con la naturaleza, con sus sonidos y silencios. luego bajo y me doy un baño de agua fría en una pileta, y si hay sol me asoleo un rato. veo mis plantaciones de verduras y frutas y preparo el almuerzo en mi cocina solar. Después aprovecho de estudiar, leer, plantar y cosechar. paso aquí cuatro días. los otros tres estoy en santiago, donde atiendo a mis pacientes. acá casi no usamos electricidad. Tenemos un sistema de energía fotovoltaica, pero la utilizamos muy poco, a veces para escuchar la radio o para leer en las noches. pero tampoco se hace necesario. es tan refrescante y renovador estar en este sector completamente desconectado del ruido y de la información, que no se echa de menos para nada esto de tener electricidad. en realidad, la electricidad es un bien poco útil. ¿Te has preguntado para qué usamos la electricidad verdaderamente? por lo general, para distraernos, para ocupar el tiempo en asuntos que no tienen mucho que ver con el bienestar directo. ahora, claro, también facilita la vida en muchos aspectos, y resulta súper importante para cosas como los hospitales, el alumbrado público u otros. pero en nuestra vida diaria, si uno quiere aprender a estar conectado con uno mismo y con su entorno, la electricidad y sus artefactos poca ayuda nos dan”.

“En nuEStra vida diaria,

Si uno quiErE aprEndEr a

EStar conEctado con uno

miSmo y con Su Entorno,

La ELEctricidad y SuS

artEFactoS poca ayuda

noS dan”.

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38 I La Panera

Libros

adriana hoffamnn | BoTániCa

“Chile nunca ha sido muy sensible a temas medioambientales. Teniendo tanta riqueza natural, no mostramos interés por proteger, conservar, este tesoro. nunca lo he podido entender, mis colegas tampoco. Trato de explicármelo, pero mi cabeza hace como un cortocircuito. Mira a la realidad que hemos llegado, con el calentamiento global, la crisis energética. es realmente catastrófico, y así y todo aún las cosas siguen medianamente igual, pensando en las mismas soluciones, en las mismas dinámicas, salvo con algunas pequeñas mejoritas para que no se diga que no se están haciendo cambios. pero las políticas de inversión y producción siguen siendo las mismas, y las prioridades gubernamentales y empresariales también. Fíjate que nosotros hemos tenido a gente tan preparada, de primera categoría, que hemos despilfarrado: biólogos, médicos, científicos, botánicos, ecólo-gos, en fin, una serie de profesionales tan buenos. Y sus trabajos metódicos y minuciosos, que han ayudado a entender nuestros ecosistemas, nunca han tenido ni el apoyo ni la cobertura que han merecido. Trabajos brillantes, de una rigurosidad fantástica. pero nada, sus trabajos y alarmantes conclusiones pasan casi inadvertidos. pero ellos siguen trabajando con una dedicación, y con un amor, por esas cosas que a pocos les interesa. es brutal si tú te pones a pensar detenidamente. a mí al menos me produce angustia verlo. ¿Cómo podemos decir después que hemos evolucionado? ¿Que somos respetuosos con el medio ambiente? puras tonteras no más, si al final todo sigue igual, y peor. Yo ya no sé qué tiene que suceder para que los políticos y los empresarios se den cuenta que nos están llevando a nuestra propia destrucción”.

adriana sChnakE | psiQUiaTRa

“la interpretación debe ser de las peores cosas que hay en la vida, es tan gratuita, poco rigurosa. en la clínica que yo tra-bajaba siempre miraba cómo los psicoanalistas se pasaban la vida interpretando una cosa u otra, y siempre con las mismas teorías, y yo les decía ‘¡pero cómo!, ¡por favor!’. porque en realidad la interpretación es atroz, es agresiva. Quien interpreta dice cualquier cosa con una seguridad, con una certeza, feroz. no me gusta nada eso de la interpretación, es mucho más sano no pensar nada, vivir el aquí y el ahora. las cosas son lo que son, y duran lo que duran. eso hay que aprenderlo desde niño, acostumbrarse a que las dinámicas de las cosas son así, nada es eterno, y uno no es dueño de nada. aunque uno le ponga todo el empeño del mundo, si la cosa llegó hasta acá, hasta acá no más llegó. si uno entendió y el otro no, bueno, qué le vamos a hacer. el que entendió avanzará más allá, y el que no entendió se tendrá que quedar hasta ahí no más. no sacas nada con tratar de convencer al que no entendió. no te puedes pasar la vida como el papá o la mamá del otro, o como su profesor o cuidador. Uno tiene que preocuparse de uno estar bien, y si uno está bien buscará relacionarse con otros que están bien. pero lo mismo al revés, si uno no está bien, naturalmente buscará relacionarse con otros que no están bien”.

“¿cómo podEmoS

dEcir quE hEmoS

EvoLucionado y SomoS

rESpEtuoSoS con EL

mEdio ambiEntE? puraS

tontEraS no máS. aL FinaL

todo SiguE iguaL, y pEor”.

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La Panera I 39“Los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana”, escrito en 1791 por la política francesa Olympe de Gouges, es uno de los primeros en proponer la emancipación femenina.

“EL EnEmigo dE La

rEFLExión ES EL SabEr y,

En cambio, Su amigo ES

EL rESpEto, porquE abrE

LaS puErtaS aL hEcho

dE quE puEdo EStar

Equivocado”.

hugo marín | aRTisTa visUal

“Todo tiene un sentido, un nacimiento y muerte. eso es universal. Hay un Dios universal, que no muere, que vuelve a ser potencial como lo es la creación del universo. siempre ha existido creación y disolución, y eso es eterno. vamos a lo mismo que estamos, pero siempre somos eso. Dios manifestándose y a la vez es el manifiesto. Todos somos eso mismo. el Ying y el Yang, que también es el Tao, que también es la misma potencialidad de manifestarse. eso es eterno, y parte de la eternidad se debe a un sistema nervioso que te permite ser eso mismo, eternidad. Y eso está dicho en india y también en China. por eso te digo: siéntelo. porque esto es una hipótesis, no una creencia, que ya es otra cosa. si yo lo siento es una ma-nifestación, y participo de eso. porque estamos hablando del mismo misterio que entrega el mismo silencio”.

humbErto maturana | BióloGo

“el enemigo de la reflexión es la verdad. parecería ridículo ¿no? pero es así: el enemigo de la reflexión es el saber y, en cambio, su amigo es el respeto, porque abre las puertas al hecho de que puedo estar equivocado. el respeto consiste en la actitud emocional de aceptar que lo que está allí, frente a mí, es legítimo. Yo no sé todavía lo que es, pero es legítimo, no necesita justificarse. Y elijo que aparezca ante mí tal cual es. esto va sujeto a una cadena de reflexión: ‘Yo opino, ustedes opinan…’, y así se va formando una conversación que es posible solamente porque estamos dispuestos a escucharnos, y eso es una emoción. pero muchas veces no se reconoce la emoción, porque hay un bloqueo. la emoción se encuentra atascada por la intelectualización. pero la emoción siempre está ahí. no la puedes parar. la emoción corresponde a cómo se encuentra uno en la relación, y se sostiene desde donde yo estoy. si eso varía, también varía mi disposición hacia la otra persona. las conversaciones empiezan de una cierta mane-ra y se van transformando. ¿Qué es lo que va cambiando? aparentemente nuestra razón, más que la emoción. pero todo sistema racional depende de premisas fundamentales aceptadas a priori desde la emoción. vayan a ver a un físico y se van a encontrar con premisas fundamentales que en último término no son más que emocionales. al final de una serie de preguntas te dirá ‘bueno, es que no podría ser de otra manera’. ¿Y qué es eso? ¿es una razón? Claro que no. si hay dos físicos o biólogos o filósofos o lo que sea que están argumentando y peleándose, ¿de qué se pelean? en ese caso, estaríamos frente a dos clases de dificultades en la conversación: las racionales, que se resuelven sin ninguna dificultad, y las emocionales, que están ocultas. ¿Y por qué están ocultas? porque no muestran los fundamentos desde donde se dice lo que se dice. Y se conversa o discute como si fuesen discusiones racionales. pero cada uno tiene fundamentos distintos para sus argumentos. Y mientras no se vean esos fundamentos distintos, nunca se resolverá la discrepancia, porque creen que pertenecen a la razón y no a la emoción. por ejemplo, los científicos y los militares no suelen reflexionar sobre su ser, porque eso les cambiaría su hacer. porque si uno se pregunta sobre los fundamentos de su ser, obviamente cambiará su hacer. entonces el acto de reflexión, de saber qué fundamen-tos tengo para sostener lo que pienso, es un acto de liberación”.

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40 I La Panera

“la palabra se realiza en el lector. Y es en él que revela su

condición alienante o liberadora. ¿qué ocurre en quien

lee, mientras lee Y después?...

toda palabra impresa es palabra presa hasta que el lector

la libera Y la transmite. la resonancia de una obra… no

se mide por su tiraje. de mil maneras, a veces misteriosas,

la palabra se multiplica Y se abre camino; Y con artes de

picardía salva muros, engaña aduanas Y llega lejos”.

(eduardo galeano)

por Heidi ScHmidlin m.

En s u a z a r o s o y r u t i l a n t E paso por chile en enero, eduar-do Galeano, una de las figuras más reconocidas del periodismo y de la

literatura latinoamericana, nos dejó «los hijos de los días», su último libro, y se llevó el pre-mio N’aitun 2013, categoría internacional, que la Corporación de Artistas Pro Ecología le entregó por “alumbrar desde los 70 hasta ahora, un cami-no a quienes buscan una nueva manera de vivir en el mundo”.

La fecunda producción de este “mendigo del buen fútbol”, como se describe, ha sido tradu-cida al inglés, holandés, alemán, checo, japonés, noruego, griego, italiano, portugués, sueco, ruso, rumano, hebreo, chino, coreano y al Braille, “pero si tuviera que elegir una lengua indígena que me tradujera, esa sería el guaraní; no sólo por su belleza, sino por lo poética; imagínate que a los mosquitos, los guaranís le llaman las ‘uñas del dia-blo’. En Paraguay, a la hora de la verdad –que es la hora del humor y del amor–, casi todos hablan en guaraní si toca decir las cosas que verdadera-mente importan”.

“loS HijoS” de galeano

La voz pastosa del uruguayo, envuelta en una ironía inconmovible, saludó al público que reple-tó el Teatro Nacional Chileno, mayoritariamente compuesto por universitarios y escritores. Todos querían escuchar, por fin, la voz del “Guis”, el mí-tico pensador, cronista y fundador de su propia editorial (El Chanchito), relator de noticias que “miran el universo por el ojo de la cerradura, desde lo pequeñito, lo que puede parecer insig-nificante”; como es, según el propio Galeano, su manera de escribir.

Ateniéndose estrictamente a la presentación del libro, el escritor contó que este nuevo títu-lo nació de una conversación con la comunidad maya de Chiapas, donde le explicaron que el tiempo funda el espacio de cada día: “Y que esos días se echaron a caminar y nos hicieron a no-sotros. Y así fuimos nacidos nosotros, los hijos de los días, los averiguadores, los buscadores de la vida. Y si somos hijos de los días, cada día tiene su historia”.

Ordenadas en forma de calendario, van apare-

Eduardo GalEano

El privilEGio dE vEr y rEGistrar

Libros

«Los Hijos De Los Días» eduardo Galeano Siglo XXI Editores2012 Desde $18.550

ciendo 366 radiografías de la realidad (una para cada día) escritas a lápiz, “pero cortadas con ha-cha y contadas con la menor cantidad de pala-bras, para decir la mayor cantidad de cosas”.

Por culpa de esa ley que aprendió de Juan Rul-fo, escribió once veces el libro, y las frases “que no eran mejores que el silencio, quedaban fuera”.

“Perdón que enmudezca, pero todavía me em-barga la emoción ante esta ‘derrota de la civiliza-ción’: en 2002 cerraron sus puertas los ocho res-taurantes de McDonald’s en Bolivia… Me cuesta leer esto, es una cosa tan rara… apenas cinco años había durado esta misión civilizadora. Na-die la prohibió. Simplemente ocurrió que estos ingratos le dieron la espalda o, mejor dicho, se negaron a darle la boca. El amor al atraso impidió que Bolivia se pusiera al día con la comida chata-rra… Las empanadas caseras derrotaron al pro-greso. Los bolivianos siguen comiendo sin apuro, en lentas ceremonias, tozudamente apegados a los antiguos sabores en el fogón familiar…”.

Una de las lecturas favoritas fue el «Día del

Agua» : “De agua somos. Del agua brota la vida. Los ríos son la sangre que nutre la tierra y están hechas de agua las células que nos piensan, las lágrimas que nos lloran y la memoria que nos re-cuerda… Algún tiempo después, en el año 2009, una nave espacial descubrió que hay agua en la luna. La noticia apresuró los planes de conquista. Pobre luna”.

Durante dos horas desfilan crónicas, inventa-das o reales: hablan sobre la “Morada humana”, la invitación a que alguien “Adopte un banquerito”, “La independencia como medicina preventiva”, la propuesta de un “Día sin Autos”, “Las semillas suicidas” o el “reino del miedo”…

Termina su “viaje de palabras” en silencio, no quiere hablar con nadie, pero se despide con una última provocación: “Quizás, cuando la historia dice adiós, dice hasta luego….”.

Y como “Los dioses no jubilan”, este ‘hasta luego’ podría significar que algún día, tal vez, tengamos al Galeano goleador en el Estadio nacional.

EFE

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[ notascul | por pamela marfil ]

> un western en iquique

L a calle Baquedano de Iquique es un conjun-to arquitectónico que nos evoca a diario los orígenes de la ciudad y su desarrollo, ligados

estrechamente a la industria salitrera iniciada en 1830. Declarada Zona Típica, su arquitectura también nos recuerda, e incluso transporta imaginariamente, a una película del Western Americano. Los barcos mercantes de la época venían a cargar el llamado “oro blanco”. Una importante parte de ellos venía desde Estados Unidos con madera de pino oregón como lastre. De esa forma, los iquiqueños obtuvieron esta madera, in-cluso dimensionada, para realizar construcciones a las cuales se les incorporaron pequeñas adaptaciones a las condiciones de la región. Esta particularidad propia del tipo de transporte del salitre, le brindó a Iquique no sólo una identidad muy particular, sino que en de-finitiva, proporcionó la madera –material tremenda-mente escaso en el Norte Grande– requerida para el gran crecimiento y desarrollo de la ciudad en sus años de mayor prosperidad (fines del siglo XIX y primeras dos décadas del XX).

> IMPresIones 3D, nueVa ReVOluciÓN

Imagine un mundo en que objetos virtuales pue-dan ser transformados en objetos físicos reales utilizando un periférico conectado a su compu-

tador, es decir, una impresora. Entrar, por ejemplo, a un catálogo de zapatos, bolsos, anteojos o accesorios y como resultado de la compra escoger IMprIMIr en vez de despachar. Enviar o recibir por mail un pro-totipo imprimible “at home”. ¡Una nueva y drástica revolución en la producción que pareciera ser parte de una película futurista! Sin embargo, una vez más la realidad supera la ficción. Actualmente, en Chile ya es posible realizar impresiones 3D “caseras”, lógicamente la tecnología aún no está desarrollada para uso masi-vo, pero ya podemos encontrar un amplio espectro de actividades, experimentando y aprovechando las ventajas de esta increíble herramienta que con seguri-dad cambiará, una vez más, la forma de relacionarnos. A continuación una selección de joyas diseñadas por alissia melka-Teichroew, quien ha experimentado con innovadores materiales, entre ellos, las impresio-nes 3D. “Trato de encontrar la fina línea entre lo esté-tico y lo funcional”, señala la artista.

> MarC CHaGaLL en anIMaCIÓn

M arc Chagall Passion/Strasty po Shagalu (Part 1) y Marc Cha-gall Passion/Strasty po Shagalu

(Part 2) son dos imperdibles animaciones de andrew melnikov, a pesar de las limi-taciones del idioma (la narración está en ruso). Acompañado por la sensible mú-sica folclórica judía de Kristall-Balalayka Folk Band, el video realiza un recorrido por la vida y producción del artista ruso- en el cual todas sus obras cobran vida.

Ver en http://www.youtube.com/watch?v=Z_NMYZJWVqw y http://www.youtu-be.com/watch?v=mw1_BQpHSpo

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42 I La Panera

Por Pilar Entrala V.

No hay receta para ocupar cargos políticos, menos cuando se trata de asumir el rol de Vice Alcalde-sa de Cultura y Deporte en una

ciudad deslumbrante y atrevida como Esto-colmo, para luego desempeñarse en la Unión General de Trabajadores en un país como Suecia, ubicado al otro extremo del mundo y con un idioma nada fácil de dominar.

Y aunque a esta mujer pionera made in Chile asumir esa gran responsabilidad jamás la des-lumbró e incluso a veces se transformó en un eslabón de vida, esa aprobación mayoritaria la ha llevado a disfrutar de la aventura del riesgo y a vivir al límite. Justo cuando se celebra el Día Internacional por los Derechos de la Mu-jer y la Paz Internacional (8 de marzo), está de regreso para reencontrarse con familiares, viejos amigos y “su Océano Pacífico amado”. En la ruta trazada apostó a la integración, a la no discriminación y al antirracismo: “Me fas-cinó el desafío y lo enfrenté al máximo como Vice Alcaldesa en una ciudad donde, además, en ese período fuimos Capital Cultural Eu-ropea. Eso de estar a cargo, percibir el amor y la apertura del pueblo sueco, permitiéndole a una extranjera ser la mayor representante de su cultura a nivel europeo, me hizo sen-tir enormes deseos de cumplir. Ahora estoy buscando hacia adentro, es el camino que me falta recorrer”, asegura.

Admiradora del papel de la mujer en el desarrollo de la política sueca, en especial a partir de los 60, cuando por falta de mano de obra lucharon para integrarse a la vida la-boral, destaca que ese país tiene un evidente desarrollo en estructura social debido a ese empuje femenino. Agrega que Suecia no po-see armas nucleares gracias a la organización de las militantes socialdemócratas, partido al que pertenece: “El 98% de las mujeres tra-baja, el aborto es libre, y aún así la tasa de natividad es una de las más altas en Europa. Ellas pueden realizarse en el trabajo y como madres sin tener que optar. Y hacerlo con alegría”.

No pretende estar en el record de Guinness, pero es la primera latinoamericana en ocupar un alto cargo político en Suecia: “El Día del hombre transcurre 364 días del año, por eso tuvieron que inventar un Día de la Mujer”, bromea la chilena María Paz Acchiardo.

Junto con promo-ver el acceso de los niños y jóvenes al arte y a la mú-sica en la Escuela de la Cultura, la ex Vice Alcaldesa recuerda con especial cariño cuando tuvo a su cargo la Casa de la Cultura y el Teatro Municipal, en el corazón de Estocolmo.

Gestión Cultural

CulturA E intEgración

Cómo ser pioNeray No Morir EN El iNtENto

“ME CuiDÉ MUcHÍSiMO”

Logró que la Reina Silvia de Suecia fuera patrona de la Biblioteca Internacional en Es-tocolmo, posibilitando así que la creación de esa institución “no se volviera una pelea polí-tica entre grupos”. La entidad hoy se proyecta con 200 mil volúmenes en más de 100 idio-mas. Salió airosa en el manejo de un impac-tante presupuesto de 200 millones de dólares durante el año en que esa ciudad fue Capital Cultural Europea, y tuvo a su cargo La Escue-la de la Cultura (15 mil alumnos), los museos de la ciudad y la Casa de la Cultura, similar al Centro Georges Pompidou de París. Lide-ró un programa inédito para que Estocolmo fuera reconocida como la ciudad de avanza-da respecto a la integración étnica y colaboró con el Gobierno de Chile para la instalación de la imponente escultura «Cordillera de los Andes», de Francisco Gazitúa, en agradeci-miento a Suecia por acoger a miles de conna-cionales (40 mil chilenos residentes). Cuando estuvo en los sindicatos, en coordinación con

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La Panera I 43

las organizaciones patronales, fue responsa-ble de la producción del filme «Escenas de la vida laboral», para crear conciencia respecto a la discriminación en el trabajo. El mismo del cual nació el primer curso interactivo en la red y ganó la Claqueta de Oro otorgada por el Fes-tival de Cine de la Asociación de Publicistas y Audiovisualistas de Suecia, en 2004. Sin perder el sentido del humor, resalta: “Porque ser Vice Alcalde allá es más que ser parlamentario, me arrastró sentir el enorme desafío. Trabajaba día y noche al máximo, pobres mis hijos. Me cuidé muchísimo de cumplir en todo, de ser al extre-mo cuidadosa con el tema económico, porque al ser pionera, como me decían, yo sabía que era símbolo de cómo realizaba la gestión. Más aún siendo mujer. Si me caía o metía la pata, sería un estigma para todo extranjero, para que dijeran: “no ves… no son capaces, no pueden, roban”, o lo que sea…”.

–¿Te sentiste auto exigida?“Siempre, a veces hasta me obligaba a tra-

bajar con fiebre y sin dormir, pero me divertí mucho también, lo pasé muy bien. La creati-vidad fue fundamental para sacarle el jugo al presupuesto, ser innovadora en las ideas. Tra-bajar con gente tan hermosa fue impagable. Fui Concejala de la Municipalidad de Esto-colmo durante cuatro años, y Vice Alcaldesa el 97 y 98. Era relativamente joven, pero con una vida avasalladora. Me movió en esa épo-ca una energía de hacer las cosas bien y de contribuir con mis conocimientos y experien-cia de vida. Era un momento en que había muchos extranjeros, que más bien eran vistos como objetos de política y no como actores protagónicos. Me tocó estar en una instancia de cambio, donde la sociedad empezaba a ver necesario integrar el conocimiento de perso-nas no nacidas en el país, incluir la realidad en que vivían y modernizar la sociedad... Hubo gente antes que yo, especialmente un colom-biano, que fue abriendo camino”.

Susan B. Anthony (1820-1906) fue una conocida feminista que triunfó como líder del movimiento estadounidense de los derechos civiles de los trabajadores.

Recién hoy puedo apreciar la fuerza del nom-bre que me dio mi madre”.

–¿Alguna receta?“Considerar que cada ser tiene un derecho

innato a las posibilidades de la creatividad y a sus derechos humanos. Cuando no tienes motivos escondidos, puedes ir de corazón abierto por la vida. Ah… y el humor es fun-damental, quien no es capaz de mirarse con distancia y de reírse de sí mismo, ahí perdió”.

–¿Los ingredientes a evitar?“La falta de sinceridad contigo mismo y

con los demás”. –¿Qué “plato” te volverías a repetir? “Una cosa muy importante fue dar acceso a

todos los niños, independiente si vivían en ba-rrios con mayor bienestar económico o en una situación más precaria y con mayor participa-ción de extranjeros. Darle posibilidad de expre-sarse a todos y en sus propios idiomas, lo recuer-do con especial alegría. Cuando lanzamos el Programa de Integración, le dimos la directiva al Teatro Municipal de hacer el espacio cultural más accesible a todos, en particular a los jóvenes. Creamos una filial en un barrio de las afueras, con repertorio de primera categoría, en colabo-ración con los vecinos. Fue experimental, pero la oposición reconoció su gran valor, y a pesar de haber votado en contra, lo conservó. Recuerdo en especial a un niño de ascendencia árabe que me conmovió durante un ensayo. Un periodista se acercó condescendiente y le preguntó ‘¿y qué has aprendido de esto?’. El niño lo miró y dijo: ‘A relajarme ante situaciones difíciles, a trabajar con los otros, a no tener miedo a expresarme en voz alta, a participar y a decir lo que opino’. El periodista se quedó de una pieza, a ese pequeño le salió la voz desde el fondo y no tenía más de nueve años. Esas cosas te reconfortan. Hacen que no sólo sobrevivas, sino que te inspiran para darlo todo por la gestión cultural”.

–¿Cómo siguió tu ruta?“Me llamaron a trabajar en los sindicatos

y logramos sellar un tremendo compromiso en los temas de antirracismo, discriminación e integración. Llevé durante casi diez años la política de la Unión General de Trabajadores al respecto, junto con la presidenta de los sin-dicatos. Hicimos mucha investigación, publi-camos una serie de informes y de libros. Es lindo, por ejemplo, el trabajo que hice sobre la enorme inmigración finlandesa. Hay 300 mil finlandeses, de los cuales muchos habían sido eje central del crecimiento de la indus-tria sueca. No existía nada sobre esa historia, era un gran vacío... Hicimos un libro bilingüe muy valioso, bajo el concepto del derecho a los idiomas minoritarios, escrito por ellos. Realizamos cientos de proyectos y muchos de cultura también”.

–¿Cultura como instrumento político?“No, como parte fundamental del diálogo

democrático”.

gOlPEcitOS EN lA ESPAlDA

De sus planes futuros, adelanta: “La cultu-ra de la política es de guerra, mientras más te ataco cuando eres opositor, mejor. Eso no. Para ser bien sincera, nunca me gustó estar en conflicto, menos ahora. Fui una implacable peleadora y podía atacar al otro con palabras y eso me dejaba mal, aunque me dieran gol-pecitos en la espalda por lo bien que debatía”.

–¿Vuelves a la política?“Ahora que me mudé a una casita en el

campo en una municipalidad muy hermosa del archipiélago me han invitado a participar. Tuve una conversación con la Vice Alcaldesa de mi partido. Le dije tener clara conciencia que al momento de ver a otro como enemigo, no estoy dispuesta a participar nuevamente en política. La paz debe empezar por uno.

Promovida en su momento por esta gestora "made in" Chile, hoy la Biblioteca Internacional tiene más de 200 mil volúmenes en 110 idiomas(www.interbib.se). En la Municipali-dad, cuyo edificio se impone por su hermosa aquitectura, María Paz marcó su ruta como la primera extranjera en representar a la cultura sueca.

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Fundación El Observatorio

44 I La Panera

POr Miguel laborde

Bu e n n o m B r e , e l de Santiago del Nuevo Extre-mo, para esta ciudad última y lejana, en un territorio que

apareció en la historia como cabeza del nuevo fin del mundo.

Esa poética, tan atrayente para los ar-tistas, quedó sumergida bajo el pragmatismo de los co-merciantes; aquí había poca gente y estábamos lejos de cualquier mercado. Tremenda la mala suerte.

recién ahora, con la globali-zación y sus medios de trans-porte, podemos volver a respi-rar; tiene su gracia ser la gente que habita en la última frontera. Más allá sólo queda el Más Allá.

El ser humano se resiste a pensar en la muerte, aunque organice su vida en función de la idea de su fin; si fuéramos eternos viviríamos de otra manera.

Tampoco nos gusta pensar en el fin del mundo, aunque jugamos con la po-sibilidad cada vez que un cineasta nos provoca con una imagen de destrucción total; por lo mismo, gastamos los recur-sos planetarios como si fueran eternos.

Son muchas las aristas que nos ofrece este tema, en el que se centra el último libro de Cristóbal Holzapfel, «De cara al límite» (Edic. Metales Pesados, 2012).

El autor nos recuerda la observación de Schopenhauer: que apenas nace-mos ya somos suficientemente viejos

para morir. Somos seres destinados a la muerte, aunque esa vocación no la culti-vemos; hay pocos dedicados al bien mo-rir, aunque sea una disciplina muy antigua.

Aquí nosotros; al otro lado lo incier-to, lo indescriptible, lo ilimitado. En me-dio, alguna frontera. Holzapfel comenta la idea de Eugenio Trías, muerto ahora en febrero y considerado el principal

pensador hispano después de Ortega y Gasset; que el ser humano es un “habitante fronterizo”. Notable resulta la etimología de “limítrofe”, que justamente alude a un “vivir del límite”, a alimentarse de él; el soldado romano se exponía al mundo en la frontera, vivía en riesgo, pero de ahí extraía su misión, su rol, su deber.

El chileno ha sido el habi-tante de la última frontera: ¿Ha aprendido a nutrirse de esa condición?

El autor de este libro cita la idea de Toynbee, que cuando

el entorno es muy difícil, exigiendo un esfuerzo al límite de nuestras fuerzas, se produce el salto de una cultura a una civi-lización; pero, si las dificultades son excesi-vas, insoportables, se paraliza el proyecto.

El soldado romano, que vivía una con-dición limí-trofe, de lograr cumplir su misión era digno de un trofeo; pero, de fracasar, podía decirse que se había a-trofiado. Y se quedaba sin trofeo.

¿Qué merecemos, nosotros?El soldado romano fronterizo debía

ser excepcional; muy alta era su respon-sabilidad, al ser quien custodiaba un lími-

Limítrofes, a mucha honra

Desde nuestra condición de seres mortales de corta vida, nos emociona experimentar la inmensidad de la noche cósmica hasta, como diría el poeta, el abismo en el fondo de los ojos de la amada: ¿Saldremos vivos, de caer ahí? ¿Hay vida al otro lado?«De cara al límite», el notable último libro de Cristóbal Holzapfel, recorre un completo panorama del tema, uno fundamental en la cultura chilena, hija de su condición remota: el hombre frente a sus límites, y sus deseos de transgredirlos.

te del imperio. Por lo mismo, luego en la Edad Media, más relevante que el conde era el marqués, porque de él dependían las “marcas”, los territorios fronterizos expuestos, a diferencia de los condados, protegidos, del interior.

Claro, nadie nos preguntó si queríamos vivir en el borde del mundo, expuestos a lo desconocido, al vértigo que provoca tener aquí mismo lo ilimitado: ¿Viene de ahí esa condición, percibida en América del Sur, del chileno como un ser respon-sable, serio, incluso abrumado por su sen-tido del deber? ¿La vida como sacrificio, que debe soportarse con resignación, más que con placer?... Hay una palabra en el campo, para esa sensación: la fatalidad, que se refiere a un suceso inevitable, que, generalmente, es una desgracia.

¿Será cierto? ¿Es tan dura la vida en estos términos, en este final, que se ase-

LA cuLTurA MAPucHE Logró, EN Su AdAPTAcióN AL LugAr,

uNA ExTrAordiNAriA SALidA, uNA rESPuESTA PArA iNgrESAr AL

AHorA dESdE Aquí, SuTiL ArMoNíA ENTrE LA durEzA dEL rigor

Y LA PoéTicA dE LA LibErTAd, EN SAbio EquiLibrio. NuESTrA

cuLTurA oficiAL NuNcA SE HA iNTErESAdo EN ELLo.

meja a una desgracia? ¿La vida es aquí una fatalidad?

Tal cosa nos alejaría de la plenitud humana; como nos recuerda Holzapfel, “Kant sostendrá que la tarea de la huma-nidad es abandonar el reino de la natu-raleza e ingresar al reino de la libertad”.

Nosotros, discapacitados por una na-turaleza extrema, de terremotos y erup-ciones volcánicas, tsunamis y sequías, tormentas y avalanchas –casi un catálo-go en el que sólo faltan los ciclones–, no podríamos entonces encontrar el acce-so que nos permita ampliar el horizonte y lograr “desplegar” nuestros talentos. Tristemente, nos quedaríamos en los valles más rodeados de cerros, más en-cerrados, sin acercarnos a los bordes del borde. centralizados…

casi desconfiados del arte, que, por vocación, tal como lo hace el místico,

«De cara al límite»cristóbal HolzapfelMetales Pesados199 páginas$8.000

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Miguel laborde es director Cultural de la Fundación el observatorio (Centro de estudios geopoéticos de Chile), director de la revista universitaria de la uC, profesor de urbanismo (Ciu-dades y Territorios de Chile) en arquitectura de la udP, miembro del directorio de la Fundación imagen de Chile, miembro honorario del Colegio de arquitectos y de la Sociedad Chilena de Historia y geografía, y autor de varios libros.

busca asomarse más allá de los límites, traspasar las fronteras, aventurarse en lo desconocido. La cautela, cualidad bur-guesa, se asusta ante el horizonte abier-to. Le provoca un pavor cósmico.

Lo lamentable, como observa Holza-pfel, es que el arte justamente, como el amor y el juego, nos permite saltar hacia lo ilimitado, recuperar la sensación de in-finito, la unidad del Todo, la inmersión en el cosmos… Por el contrario, el orden social nos deja “íntegramente atrapados en nuestras profesiones u oficios”.

Nos alejaríamos de eso que busca in-cluso el hombre arcaico, en sus rituales festivos, que son portales a un éxtasis en el que accede a la sensación del infinito, en comunión con el Todo.

Ahí está la cruel paradoja. Nos piden cumplir con el deber, con el máximo ri-gor, porque somos los soldados que cus-todian la frontera, siempre alertas, atados a nuestras responsabilidades, siempre

La Panera_Ed Media Agosto1.pdf 1 23-08-12 17:56

cuidándonos del descontrol, ausentes de todas las orgías… y luego nos acusan de no ser audaces, impulsivos, trasgresores.

Y, como dice Holzapfel, el camino hacia la plenitud pasa por dejarnos ser, dejarnos llevar, sumergiéndonos en nuestro propio ser, en el “sí mismo”. El sumergirnos en el ahora, atemporal como un eterno pre-sente, sería “nuestro modo de contactar-nos con la eterna plenitud del ser”.

Ahí, en contacto con el ser, finalmente accedemos a lo ilimitado, porque nada hay “afuera” del ser. Es un estado de sanación, como el que nos provoca la contemplación de la inmensidad del fir-mamento en una noche luminosa; ahí no hay separación ninguna, se vive la plena unidad, el uno y el Todo.

Pero, el centinela no puede extasiarse en la contemplación del cielo: podría ser el momento, justo entonces, cuando se deslicen los enemigos al interior…

La cultura mapuche logró, en su adap-tación al lugar, una extraordinaria salida, una respuesta para ingresar al Ahora desde Aquí, sutil armonía entre la dureza del rigor y la poética de la libertad, en sabio equilibrio. Nuestra cultura oficial nunca se ha interesado en ello.

Lo que planteó el filósofo español Vi-cente Serrano en Valparaíso, en el con-texto del Puerto de ideas 2012, va por ese camino; aludiendo al filósofo baruch Spinoza, en cuanto a que somos parte de la realidad, y no el centro, la felicidad radi-caría justamente en el saber adecuarse a los límites, con un cierto estoicismo.

Tal actitud sería crucial en este siglo, cuando las ansias de poder llevan a ex-cesos que borran al resto del mundo, y al mundo mismo; olvidando, estúpida-mente, que el planeta es limitado, pere-cible, condenado a muerte como todo organismo vivo. Tarde o temprano.

Cristóbal Holzapfel, doctor en Filoso-fía de la universidad de friburgo (1987), profesor titular de la Universidad de Chile, da una suerte de salto con este li-bro, muy particular en su trayectoria ex-tensa. Porque aquí, aunque revisa el tema con una perspectiva propia de la discipli-na –amplia y universal, aunque con atra-yentes ejemplos históricos–, nos entrega una reflexión extraordinariamente inte-resante para todo lector chileno.

Porque aquí, en este borde o fin de mundo, se vive como el título lo indica: “de cara al límite”.

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Edison otEro BEllo licenciado en Filosofía y profesor titular por la Universidad de Chile. se ha especializado en las áreas de la epistemología, el desarrollo del pensamiento crítico y la teoría de la comunicación.

Por Edison otEro

Se p t i e m b r e 2 0 0 8 , Universidad de la Columbia Británica, Canadá: esta fecha y este lugar podrían convertirse, en unas décadas más, en un hito significativo. En esa ocasión se desa-

rrolló un encuentro académico que reunió a científicos y a especialistas de las humanidades en el propósito de ten-der puentes entre dos territorios, dos ámbitos de estudio que se desenvuelven en términos de mutua ignorancia y desconocimiento.

Existen frases cliché para describir esta divisoria: “apren-dido versus innato”, “historia versus naturaleza”, “cultura versus biología”. Hace unos cincuenta y cinco años, el físi-co británico C.P. snow habló de las dos culturas, describió sus respectivas desmesuras y abogó por su integración. Mucha agua ha corrido en el intertanto, mucha energía dedicada a volver irreductible la antítesis: la distinción en-tre ciencias de la naturaleza, la distinción entre razón e intuición, entre métodos cuantitativos y cualitativos, y la célebre separación entre explicar y comprender.

Para ponerlo en términos bélicos, en su expresión más an-tojadiza los bandos intentan invasiones territoriales audaces: reducir la ciencia a la dinámica irracional de grupos de interés y personalidades ególatras, o reducir los procesos sociales y las instituciones a estricta biología genética. Por cierto, está también el folclore asociado; por ejemplo, el rechazo de lo cuantitativo como expresión de lo culturalmente correcto. En fin, el expediente puede llenar muchos tomos y, todavía más, con la desconsolada expectativa de una sentencia que

Tecnología

LA GUerrA iNÚtiLdeje a todos igualmente descontentos. Con todo, no hay ma-nera de ocultar el masivo desarrollo de conocimiento en las ciencias naturales, logro que las humanidades no manifiestan sino de un modo muy precario y problemático.

Puesto en estos términos, el encuentro académico al que nos referimos podría ser considerado un esfuerzo en la di-rección de un armisticio. Su nombre así lo sugiere: «Creando Consiliencia. integrando las Ciencias y las Humanidades». La expresión ‘consiliencia’ fue echada a rodar por E.o. Wil-son hacia 1975, en un libro cuyo título –«sociobiología»– desató todo tipo de escándalos. Muy recientemente (2012), la Oxford University Press ha publicado las contribuciones centrales del workshop de 2008 en un solo volumen editado por el psicólogo cognitivo Edward slingerland y el arqueó-logo Mark Collard. La diversidad de los artículos refleja per-fectamente lo ancho del rango de los planteamientos, que van desde la recepción entusiasta del proyecto de integra-ción y los términos de su eventual implementación hasta las reacciones escépticas y el franco rechazo de esos términos. Como sea, el volumen constituye un valioso diagnóstico del estado del arte en el problema y sus principales dificultades.

Más allá de los detalles, la lectura de los aportes permite identificar el núcleo duro de las diferencias: se trata del dua-lismo mente-cuerpo. La casi totalidad de las posturas que provienen de las neurociencias, de la biología evolucionista y de la psicología cognitiva consideran a la mente como fun-ción del cerebro y producto de la evolución, y rechazan toda concepción de una eventual entidad autónoma separada. En oposición a este planteamiento, en el ámbito de las humani-dades prevalece la idea de una mente, o espíritu que es, en

último análisis, independiente e irreductible a cualquier forma biológica y que, en su versión religiosa, se prolonga y subsiste más allá de la muerte del cuerpo. Esta entidad no sería abor-dable en términos explicativo-causales. Dilucidar su existencia y textura significaría alcanzar las claves de lo peculiarmente humano, se trate del arte, la filosofía o la religión.

A estas alturas, adherir a uno u otro de los bandos en conflicto sería más de lo mismo, algo así como arrojar com-bustible a un incendio ya declarado. Lo razonable y en con-vergencia con el tenor del encuentro de 2008, es recono-cer que la divisoria entre ciencias y humanidades no puede continuar sosteniéndose. Parece, sobre todo, la porfía de organizaciones y rituales corporativos y profesionales que se persigue mantener a toda costa.

Porque ocurre que hay sociedades, pero también genes. Hay género, pero también sexo. Hay historia, pero también cerebro. Hay cultura, pero también herencia. Hay diversidad cultural, pero también evolución de las especies. Y viceversa. Cualquier teoría o concepción de nosotros mismos que persista en ignorar cualquiera de estos hechos constituye, de inmediato, una forma de auto-amputación, un obstácu-lo insidioso en la senda del conocimiento. A diferencia de ciertas escrituras de larga data, el acceso al conocimiento no expulsa a nadie de paraíso alguno. Por el contrario, es un auténtico proceso de liberación.

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Agenda Santiago / marzo

ÓPERA. «FRANCESCA DA RIMINI»16 de marzo, 12:00 horas. Entradas: $25.000 y $30.000. En directo desde la Metropolitan Opera House de Nueva York llega «Francesca da Rimini», de Riccardo Zandonai (1883-1944), inspirada en la primera parte del poema épico «La Divina Comedia», de Dante Alighieri. La soprano dramática Eva-Maria Westbroek y el tenor Marcello Giordani interpretan a los des-dichados amantes. La dirección musical está a cargo del maestro italiano Marco Armiliato.

CICLO DE CINE4, 11, 18 y 25 de marzo, 19:30 horas. Entrada liberada.El Centro Cultural de España se suma a las actividades del Mes de la Mujer con una variada progra-mación de cine a cargo de desta-

cadas realizadoras españolas. Isabel Coixet, Manane Rodríguez, Judith Colell y Mar Coll son parte de esta selección representativa de cuatro generaciones del cine español contemporáneo. De manera paralela, entre el 21 y el 24 de marzo, en ese mismo recinto se desarrollará la tercera versión del Festival de Cine de Mujeres, FEMCINE3. Programación: www.ccespana.cl

RELATOS 15 de marzo, 19:30 horas. Entrada liberada.«Basta! + de 100 hombres contra la violencia de género» reúne los microrelatos de más de 100 autores que en 150 palabras dan cuenta de su particular mirada narrativa y hu-

mana ante la violencia de género y sus consecuencias. Participan los escritores Joel Solorza Fredes, Carlos Enrique Acevedo Pérez y Martín Pérez Ibarra.

PREMIOS NACIONALES26 de marzo, a las 19:30 horas. Entrada liberada.El investigador Osvaldo Cádiz conversa con la des-tacada folclorista Margot Loyola, Premio Nacional de Artes Musicales 1994. Este diálogo da paso a un ciclo de charlas sobre “lo humano y lo divino”, que se realizará con artistas, escritores, pensadores y cientí-ficos, todos ellos Premios Nacionales, con motivo del aniversario del Centro Cultural de España.

ÁNGEL PARRA «CHILE ÍNTIMO»23 de marzo, 21:00 horas. Entradas: entre $8.000 y $20.000.Ángel Parra, uno de los referentes funda-mentales de la música popular chilena, repasará lo mejor de su disco-grafía en el ciclo «Chile íntimo». El cantautor ha compartido su carrera con grandes figuras de la escena latinoameri-cana, como Atahualpa Yupanqui, Pablo Milanés y Víctor Jara. Hijo de la legendaria Violeta, es conocido por musicali-zar los versos de Pablo Neruda, Federico García Lorca y Gabriela Mistral.

Manuel Montt 032, Providencia - Teléfono: 2 236 3333 - www.teatro-nescafe-delasartes.cl - www.ticketmaster.cl

Teatro Nescafé de las Artes

CENTRO CuLTuRAL LAS CONDESDE RuBENS A VAN DYCKCorporación Cultural de Las Condes, Apoquindo 6570. Martes a domingo, de 10:30 a 19:00 horas. Fundación Itaú, Espacio ArteAbierto, Apoquindo 3457. Lunes a viernes, de 09:00 a 14:00 horas. Entrada liberada.Hasta el 26 de mayo.Las salas de la Corporación Cultural de Las Condes y Espacio ArteAbierto de la Fundación Itaú reúnen veinte pinturas y una treintena de grabados repre-sentativos del arte flamenco desde fines del siglo XV hasta principios del siglo XVIII, con obras de Pedro Pablo Rubens, Anton Van Dyck, Hendrick Gol-tzius, Jan Brueghel y Martin de Vos, entre otros. La muestra incluye parte importante de la Colección Hans Rudolf Gerstenmaier, empresario alemán resi-dente en España hace 40 años. Destacan el «Tríp-tico de la Adoración de los Reyes», de Jan de Beer (1480-1535); el óleo sobre tela «Virgen sosteniendo al Niño en un parapeto», de Pedro Pablo Rubens, y dos pequeños retratos al óleo del siglo XII pintados por Anton Van Dyck. Entre los grabados resaltan ocho estampas con escenas inspiradas en los textos de Ovidio, realizada por Hendrick Goltzius; 14 grabados de la serie de personajes ilustres de Van Dyck, junto a los aguafuertes de Isabel de Borbón y de Felipe IV, creados por Rubens. Esta colección está certificada por el Museo del Prado.

Providencia 927 – Teléfono: 2 795 9700 – www.ccespana.cl

Centro Cultural de España

ANIVERSARIO20 de marzo, 20:00 horas. Entrada liberada.Para celebrar su aniversario número 20, el Centro Cultural de España ha programado un encuentro es-pecial que incluye música en vivo a cargo del grupo DJ Latin Bitman. Junto con presentar sus actividades 2013, los organizadores lanzarán su nuevo sitio web y una atractiva programación de radio online. La muestra «Un espacio de encuentro que ha dejado huella» hará un repaso con una selección de las principales actividades realizadas por el CCE desde su apertura. Por su parte, la exhibición «A dónde, Cuándo, Qué día, 20 años, 20 artistas» incluye el trabajo de 20 destacados creadores de diferentes generaciones, entre ellos, Roser Bru, Raúl Zurita, Ximena Zomosa, Carlos Lederman, Héctor Hidalgo, Alicia Vega, Claudio di Girolamo, Manuel Peña, Graciela Huinao, Alejandro Albornoz, Guillermo Núñez, Floridor Pérez, Paz Errázuriz, Brisa Muñoz, Ricardo Vega, Alejandro “Mono” González, Jaime Quezada, Viviana Bravo, José María Memet y Eduardo Peralta.

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Agenda internacional / marzo

realismo

Con un trabajo que parte de la tradición formal y lingüística del arte Minimal y Conceptual, «resistencia y tradición» es la primera expe-

riencia del artista chino ai Weiwei en un museo español. La sociedad de masas, el consumo llevado a los límites, la producción desmesurada y la contemporaneidad son algunos de los temas abordados en esta propues-ta desplegada en las seis salas del Centro andaluz de arte Contemporá-neo. El título de la retrospectiva alude al posicionamiento político de este creador, el mismo que lo ha mantenido con arresto domiciliario e imposibi-litado de salir de su país. La tradición y la paciencia oriental están reflejadas a través de delicadas piezas en cerámica, como «Colored Vases», una serie de vasijas neolíticas diseñadas con pintura industrial de colores pálidos. El suelo de mármol del museo está cubierto casi en su totalidad de aproxima-damente tres millones de pepas de girasol hechas en porcelana y pintadas posteriormente con mucho realismo por el propio autor. «Luz bajando» es la obra de mayor tamaño de la muestra. Se trata de una enorme lámpara representativa del deseo que siente el autor disidente por la caída del régimen opresor chino. También se puede apreciar en esta imponente ex-posición un pilar de cerámica de color azul oscuro de dos metros y medio de altura, por casi uno de diámetro, y una tonelada de peso. La exposición en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de Sevilla registró más de cinco mil visitas en sus primeros diez días de apertura a público.

TemPoraliDaDHeimo Zobernig (Austria, 1958) cuestiona a través de 40 obras el paso del arte en medios como la arquitectura, el diseño y el teatro. El artista propone una instalación que modifica el espacio del Palacio de Velázquez, ubicado en el corazón del Parque del Retiro en Madrid. En esta retros-pectiva, que reúne piezas diseñadas desde los años 80 a la fecha, junto a pinturas, esculturas y videos, las dependencias del propio Palacio se convierten en un lugar diáfano, incluyendo de manera intencional algunos tabiques removibles de la exposición anterior. De este modo, el creador transforma los muros en obras escultóricas para denunciar la “tempora-lidad del arte”. La estructura del recinto ha sido adornada con telones, tapices y otros elementos de diseño que configuran una escenografía imponente, pero a la vez íntima.

Tres eN UNo«Historias escénicas: obras en vivo, búsqueda en el pasado» incluye tres muestras paralelas en el museo de arte moderno de Nueva York. En «Realización de Historias», los artistas Andrea Fraser, Andrea Geyer, Sharon Hayes y Simone Forti, centran sus trabajos en la re-interpretación artística de nuestra historia reciente; mientras que en «Inventar Abstracción, 1910-1925», los bailarines Fabian Barba y Kelly Nipper recrean algunas de las coreografías más influyentes de la danza con-temporánea. Por su parte, «Tokio 1955-1970: un nuevo Avant-Garde» repasa desde el Modernismo europeo hasta las tendencias del arte en el Lejano Oriente, con expresiones de artistas contemporáneos, como el pin-tor japonés Ei Arakawa, el coreógrafo indio Trajal Harrel, y el dúo japonés de bailarines Eiko & Koma. Una amplia gama de expresiones está incluida en este ciclo. La danza, la música, el teatro y la performance se unen para dar vida a este repaso de la creación, en resonancia con el estado del arte en general.

MUSEO GUGGENHEIM BILBAOHasta el 16 de septiembrewww.guggenheim-bilbao.es

MUSEO DE ARTE MODERNONUEVA YORKHasta el 25 de mayowww.moma.org

reTraTo De ViDaLa relación entre los retratos pintados por Édouard manet (1832-1883) y sus escenas de la vida cotidiana parisina está expuesta en la real academia de Bellas artes de londres (Royal Academy of Arts) a través de 50 obras distribuidas en ocho grandes salas. Es la primera muestra de este tipo en el Reino Unido y se centra en una faceta fascinante del famoso retratis-ta conocido como el “padre del Impresionismo”, el mismo que hasta su muerte mostró gran interés por la psicología humana. Uno de los cuadros que más simboliza las interrogantes del autor es «Le Déjeuner dans l´Atelier» (1868), cuyo principal modelo es Léon, el hijo ilegítimo de la esposa del artista, la holandesa Suzanne Leenhoff. Por su parte, el óleo «La Musique aux Tuileries» (1982) merece en esta ocasión una sala propia. Ahí, Manet reúne a pintores, críticos de arte y personalidades de la sociedad parisina de la época, todos bien retratados, en un acto social donde él aparece “como maestro de orquesta”. «Manet: Retratando la vida», una cita imperdible para descubrir a este creador perteneciente a una familia acaudalada que no necesitó pintar para vivir, pudiendo escoger libremente sus temas.

resisTeNCia«el arte en guerra. Francia 1938-1947: de Picasso a Dubuffet», que exhibe el museo Guggenheim de Bil-bao, está organizada en colaboración con el Museo de Arte Moderno de París. Es un atractivo recorrido por la producción artística en Francia durante la Segunda Guerra Mundial, a través de más de 400 obras de 120 autores, entre ellos Pablo Picasso, Henri Matisse, Pierre Bonnard, Marc Chagall, Vasily Kandinsky, Jean Fautrier y Alberto Giacometti. Es una oportunidad única para apreciar obras emblemáticas que reflejan la evolución de una sociedad “sumida en el miedo, la represión, el odio y el dolor”. La propuesta delata el modo en que estos creadores resistieron y reaccionaron ante la adversidad, haciéndole “la guerra a la guerra” con el diseño de múltiples obras de arte, incluso en los lugares más hostiles y de represión.

REAL ACADEMIA DE BELLAS ARTESLONDRESHasta el 14 de abrilwww.royalacademy.org.uk

CENTRO ANDALUZ DE ARTE CONTEMPORÁNEOSEVILLAHasta el 30 de juniohttp://www.juntadeandalucia.es/cultura/caac/

MUSEO REINA SOFÍA(PALACIO DE VELÁZQUEZ / PARQUE DEL RETIRO) MADRIDHasta el 15 de abrilwww.museoreinasofia.es

48 I La Panera

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ProTaGoNisTa PreCoZEl museo albertina de Viena acoge la primera retrospectiva en el país austríaco dedicada a max ernst (1891-1976). La exposición incluye piezas que se exhiben por primera vez en 72 años, después de haberse expuesto sólo en 1936, en el Museo Nacional de Arte Moderno de Madrid. Es un recorrido por la trayectoria del artista alemán nacionaliza-do francés, a través de una selección de 184 pinturas, collages y escultu-ras. Considerado uno de los autores más relevantes del siglo XX, Ernst fue un protagonista precoz del Dadaísmo y pionero del Surrealismo, además de un inventor de las técnicas conocidas como frottage (consiste en frotar con un lápiz una hoja sobre un objeto) y grattage (la pintura se desprende de la tela). Su constante búsqueda de la libertad ante los obstáculos políticos lo llevaron a abandonar Alemania y trasladarse a París en 1922, para exiliarse en Estados Unidos en 1941.

HereNCia iNDia

Anish Kapoor (1954) ha creado algunas de las obras más ambicio-sas e imponentes del arte contemporáneo: «Orbit» (2012), una

torre de 115 metros de altura para los Juegos Olímpicos de Londres; «Leviathan» (2011), presentada en el Grand Palais de París; «Puerta a las Nubes» (2004), desplegada en el Millennium Park de Chicago; y «Sky Mirror» (2006), montada en el Centro Rockefeller de Nueva York. Por primera vez exhibe sus trabajos en el museo de arte Contemporáneo de sydney, Australia, con una selección de obras clave, desplegadas en dos pisos del recinto. Destacan «1.000 nombres» (1979-80), sus primeras piezas geométricas hechas con pigmentos en polvo; «Void» (1989), una gran escultura en azul profundo que pasa de convexo a una forma cóncava, según se la mire; y la monumental «My Red Homeland» (2003), una enorme escultura circular diseñada con una hoja de acero y 25 toneladas de cera roja. Influenciado por su herencia india y la filosofía occidental, Kapoor busca plasmar “el sentido del ser humano”. Explora la relación entre las fuerzas opuestas de la luz y la oscuridad, a la vez que utiliza el color, la forma y el tamaño, para desafiar la percepción de los visitantes en una puesta en escena bella y atractiva.

MUSEO THYSSEN-BORNEMISZAMADRID Hasta el 12 de mayowww.museothyssen.org

al aire liBreSe suele relacionar la pintura al aire libre con el Im-presionismo. Aunque esta vertiente no la inventaron los impresionistas, sí la llevaron a su máxima expresión. A través de 113 obras de 47 artistas, procedentes de setenta museos europeos, la exposición en el Thyssen–Bornemisza de Madrid profundiza en la génesis de esta manera de abordar la creación, desde su carácter for-mativo en los paisajistas de finales del siglo XVIII hasta sus derivaciones expresionistas de comienzos del siglo XX. La muestra reúne obras en un arco cronológico que va desde 1780 hasta 1900, aproximadamente. En-tre los artistas presentes se encuentran desde los inicia-dores de los estudios al óleo al aire libre, como Pierre–Henri de Valenciennes o Thomas Jones, hasta artistas consagrados como Turner, Constable, Corot, Rousseau, Courbet, Daubigny, Monet, Sisley, Renoir, Seurat, Van Gogh y Cézanne. Esta práctica artística ofreció nuevas e insospechadas posibilidades para la representación del paisaje, revolucionando la pintura del siglo XIX.

"merZ"La Tate Britain de londres presenta la primera gran retrospectiva del modernista alemán Kurt schwitters (1887-1948) para explorar su legado en el Reino Uni-do y la influencia que ha tenido en otros creadores del siglo XX. Son 150 trabajos realizados principalmente después de que el artista se viera forzado a abandonar Alemania en 1937, cuando el régimen nazi calificó su obra de “corrupta”. Centrada en la técnica del collage, la propuesta incluye el uso de todo tipo de materiales, desde boletos de autobús, pedazos de afiches, perió-dicos, lanas y botones, hasta las telas más llamativas. A esta corriente, Schwitters la denominó merz, palabra inventada en julio de 1919 para designar a un conjunto de creaciones (dibujos, pinturas, poesía) y así consignar que cualquier material podía ayudar a diseñar una obra artística. Idea que con el tiempo tuvo gran influencia en autores de gran prestigio, como el vanguardista Damien Hirst. Entre los trabajos de Schwitters destacan «Untitled», una pieza montada con plumas, telas, papel y monedas, mientras que entre sus esculturas abstractas sobresale «Opening Blossom» (1942), considerada una de las más importantes realizadas en Inglaterra.

arTe PoP La Tate modern de londres presenta la exposición más completa dedicada a roy lichtenstein (1923-1997), el máximo representante del arte Pop esta-dounidense en los últimos veinte años. Son 125 piezas, entre pinturas y esculturas. Nacido en Nueva York, en el seno de una familia judía, a principios de 1960, Lichtenstein fue pionero de un nuevo estilo de arte pintado a mano pero inspirado en los procesos de im-presión industrial. En esta ocasión, se pueden apreciar cuadros tan importantes como «Look Mickey» (Natio-nal Gallery of Art, Washington, 1961), «Whaam!» (Tate Gallery, Londres, 1963) y «Drowning Girl» (MoMA, Nueva York, 1963). Sus cuadros se basan en imágenes de cómic, publicidad e interpretaciones de obras de otros artistas. También realizó esculturas, la mayoría en bronce pulido y con un estilo inspirado en las formas del movimiento de diseño popular conocido como Art Déco, perteneciente a la década de los treinta.

TATE BRITAINLONDRESHasta el 12 de mayowww.tate.org.uk

TATE MODERNHasta el 27 de mayowww.tate.org.uk

MUSEO DE ARTE CONTEMPORÁNEOSYDNEYHasta el 1 de abrilwww.mca.com.au

MUSEO ALBERTINA VIENAHasta el 5 de mayowww.albertina.at

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[ popurrí | por luciano lago ]

E ste año se cumple el bicentenario del na-cimiento de Richard Wagner (1813-1883), quien tuvo una vida muy ligada al número 13. El compositor alemán nació en 1813 y si se

suman los números del año, el resultado da 13. Como no podía ser de otra manera, su primera actuación al frente de una orquesta se produjo en riga, en un teatro inaugurado un 13 de septiembre. Compuso 13 óperas, sufrió un destierro de 13 años y, para ser consecuente, se fue a vivir a la casa de Bayreuth un 13 de agosto y la abandonó… un 13 de septiembre. Terminó la primera de las cuatro versiones de «Tann-hauser», una de sus óperas más famosas, el 13 de abril de 1845, y el estreno de la tercera versión (la que se interpreta con más frecuencia) tuvo lugar en parís, el 13 de marzo de 1861, y no se volvió a ejecutar hasta 50 años después, un 13 de mayo de 1895. Como es lógico, finalizó «Parsifal», su última ópera, un 13 de enero. Con estos antecedentes, no sorprende que falleciera el 13 de febrero de 1883, año en que se conmemoraba el decimotercer aniversario de la unificación nacional ale-mana y, además, cuando su hijo Sigfrido tenía… 13 años. para no ser menos, Franz Liszt, su suegro, lo había visita-do por última vez justo un mes antes: el 13 de enero.Su nombre y apellido reúnen 13 letras. por ello, aunque no se sabe si sufrió de “triscadeicafobia” (es decir, fobia al número 13), si así fue sería absolutamente justificado.

Caza de estrellasEn la historia se repiten casos de persecución política. Uno de los más obsecuentes y que atentó contra nuestra entretención de todos los días fue el macartismo, que se fue directamente contra el cine y sus estrellas.Todo comenzó cuando –entre 1950 y 1956– el senador republicano estadounidense Joseph Mc-carthy (1908-1957) arremetió contra Hollywood, sus actores y escritores (unos 300), por sus ideas “subversivas”. Su lista incluía nombres como Charles Chaplin, Bertold Brecht, Leonard Bernstein y orson We-lles. pero no se quedó allí, también la emprendió contra los libros, prohibiendo la venta de más de 30.000 títulos, entre ellos «robin Hood», porque entendía que su protagonista lideraba una banda de ladrones que usaba un sistema parecido al de las guerrillas: robaba a los ricos para repartirlo entre los pobres. otro libro que no se salvó fue «Espartaco» por un tema de opresión de clases. Fi-nalmente, la cordura prevaleció, el personaje perdió su poder y todo quedó como un mal recuerdo. El 2 de mayo de 1957, McCarthy, hospitalizado por problemas de alcoholismo crónico, murió a los 48 años, víctima de cirrosis y hepatitis, luego de haber estado 10 años en el Senado de su país.

ConsecuenteEn cierta oportunidad, el cantautor argentino Facundo cabral visitó al escritor Jorge luis Borges. Luego

de dar una vuelta por la casa de su compatriota, el asombrado Cabral

preguntó a Borges:–¿por qué no hay libros suyos

en su biblioteca?"porque sigo teniendo el hábito

de la buena lectura", fue la pronta respuesta.

MARXISMOGroucho Marx: “Aunque creo que es del dominio público,

he de confesar que nací a muy temprana edad”.

HABEMUS PAPA

Las cadenas de comida rápida deberían estar más que agra-decidas del agrónomo francés Antoine-Augustin Parmentier (1737-1813). En 1775, cuando Francia y Europa sufrían una gran hambruna, la Academia de la ciudad francesa de Besan-zón ofreció un premio a quien presentara una planta alimenticia que pudiera reemplazar con ventaja, en tiempo de escasez, a los cereales conocidos.

Parmentier tuvo la idea de presentar como solución a la solanum tuberosum… la muy apreciada papa. Hasta ese momento, este tubérculo era considerado no comestible, per-judicial para la salud, causante de la lepra y por ello sólo se utilizaba para dar de comer a los animales y a los indigentes. Si bien los colonizadores españoles la llevaron a Europa en el siglo XVI, en América se consumía hacía ya más de ocho mil años.

Parmentier consiguió que se le-vantaran las leyes que prohibían su cultivo, y ofreció una variedad de recetas que cautivaron a los europeos. Tal fue el éxito, que hasta el rey Luis XVI comenzó a pasearse con una flor de papa en la solapa. A su vez, María An-tonieta las lucía en su cabellera.De este modo se impuso la moda de esta flor en la corte de Francia.

Durante mucho tiempo a la papa se le llamó “parmentiere”. Lue-go, en Francia adoptó el nombre de pomme de terre. Por su par-te, Antoine Agustin fue nombrado Inspector de Salud Pública y al fallecer, sus restos fueron ubi-cados en el famoso cementerio Père-Lachaise de París, donde reposan los famosos. Adivinen qué tipo de ofrendas dejan en su tumba los visitantes… sí, flores de papa.

Wagner y el número

orre polémica

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