«Con la corrupción, la política de comunicación correcta sería decir la verdad»

• Ladislao Azcona Periodista y empresario

• El periodista que renovó en 1976 la imagen de los informativos en televisión, habló ayer de 'Empresa y Comunicación', en el Ágora de Foro

• C. DEL RÍO - Ágora de Foro 22 julio 201400:18

Lalo Azcona es un veterano periodista, experimentado empresario y sagaz emprendedor que ayer demostró, en la cuarta jornada del Ágora de Foro celebrada en el Instituto de Salinas y dedicada a la Comunicación, por qué es el fundador y presidente de Estudio de Comunicación -la empresa del ramo

más importante de España presente en doce países con unos cuatrocientos empleados-, el presidente de Tecnocom, con más de seis mil trabajadores en diez países, consejero en Inypsa y en Tressis, presidente de la Fundación Azcona de patrocinio del arte contemporáneo y presidente del Consejo Social de la Universidad de Oviedo, entre otros. Azcona, que dio sus primeros pasos profesionales en LA VOZ DE AVILÉS con 17 años, ofreció en su conferencia 'Empresa y Comunicación' las claves para emprender con sentido común, otorgando un valor fundamental a la comunicación porque «una parte importante de las ideas es contarlas a los demás».

-¿Y se están contando bien?

-Hay de todo. Hay gente que lo cuenta muy bien y otros que todavía no han empezado a contarlo. Yo creo que en este país, que está empezando a salir de la crisis, hay que empezar a contar las cosas positivas para generar un optimismo que será capaz de realimentar todo. Cuando nos creamos de verdad que las cosas empiezan a mejorar, todo volverá a tirar.

-El gobierno ya está difundiendo ese mensaje, pero parece que cala más el reivindicativo.

-Porque no son contrarios. La situación económica está bien, pero en la política tenemos problemas muy graves. Problemas políticos de estructura del Estado que se han quedado atascados. El gobierno puede poner el foco sobre los éxitos económicos, pero ha habido una inacción que es el deber y el haber del gobierno.

-¿Hay buenos comunicadores en los grandes partidos? ¿Y sus políticas de comunicación?

-Muy buenos. Y las políticas, en general son buenas. Tienen canales sistemáticos para distribuir la información y la gente está muy bien formada.

-¿También en la gestión de casos como el de Bárcenas y los ERE de Andalucía?

-Lo malo de todo esto es que, posiblemente, sea verdad. La política de comunicación para ellos sería taparlo pero... ¡es que no se puede tapar! La verdad se ve y la porquería huele. Cuando aparecen casos de corrupción en las estructuras de las organizaciones, a mí me parece que la política de comunicación correcta sería decir la verdad, pedir perdón y devolver el dinero. ¡Porque en este país no se devuelve el dinero! Y, luego, el que lo merezca, a la cárcel.

-¿Por eso los partidos no contratan empresas de comunicación?

-Yo no he trabajado nunca para ninguno ni para ninguna religión. Una vez los empleados sufrieron una gran decepción porque nos vino a contratar una campaña para la iglesia de la Cienciología Tom Cruise y me negué. ¡Todas las chicas del despacho estaban locas! Y decían que cómo no lo íbamos a hacer si sería el contrato de nuestra vida. Me miraban diciendo 'este tío es idiota' (risas).

-¿Cómo es que, entonces, los partidos cuando hacen autocrítica aluden siempre a que no han sabido comunicar?

-Porque como ciudadanos lo que nos preocupa es lo que ha pasado en estos seis años, y yo creo que eso es lo que deberían contar. Se ha producido un aumento de las desigualdades, una desigualdad que yo llamo 'corrosiva', con muchísima gente pasándolo muy mal. Eso no ocurría antes, cuando había una gran clase media con un horizonte y perspectivas de calidad de vida. Ahora eso no pasa. Este es el gran problema que nos ha dejado la crisis.

-Va a ser difícil incluir el 'optimismo' en esta explicación...

-Hay que contar lo bueno que se está haciendo y ojalá que los gobernantes tuvieran un espíritu común para resolver luego los grandes problemas del Estado. Lo que ocurrió con el espíritu de la Transición. Una idea de consenso que ahora no existe por culpa de las personalidades de los políticos.

-¿Comunicar es convencer?

-Comunicar es hacer una máxima que dice 'el silencio no es rentable'. Es poner en valor las cosas positivas. No se trata de convencer todo el tiempo, pero tú tienes que defender las cosas en las que crees y si te callas, no las defiendes. Hay que hablar, opinar, decir las cosas.

http://www.elcomercio.es/aviles/201407/22/corrupcion-politica-comunicacion-correcta-20140722001834-v.html