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LA CASA REAL EN LA BAJA EDAD MEDIA MIGUEL-ÁNGEL LADERO QUESADA Universidad Complutense de Madrid Trataremos en estas páginas sobre tres cuestiones: primero, la definición y características de la Casa y Corte reales. Segundo, el número de personas adscrito al servicio de la Casa y su pago. Tercero, el papel de la Corte en la gestión y redis- tribución del conjunto de los recursos de la Hacienda regia. La continuidad es el rasgo sobresaliente en estos tres aspectos durante la Edad Media tardía, desde finales del siglo XIII, pero los estudios llevados a cabo son escasos y parciales y la docu- mentación cuantitativa es poca antes de la época de los Reyes Católicos, especialmente en Castilla: por este motivo, el estudio se centra en ella aunque se hacen muchas referencias a reinados y tiempos anteriores. I. ASPECTOS DE LA ORGANIZACIÓN INSTITUCIONAL 1. La Casa Real. Delimitación del concepto y de su realidad histórica Las Partidas definen la Corte del Rey como un lugar y, a la vez, como un "com- plejo orgánico-funcional" (D. Torres Sanz): Corte es llamado el lugar do es el rey e sus vasallos e sus oficiales con él, que le han cotidianamente de consejar e de servir, e los ornes del reyno que se llegan y, o por honrra de él o por alcanÇar derecho o por pagarlo, o recabdar las cosas que han de ver con él ... e otrosí ha nome en latín Curia'. Sin embargo, en el último tercio del siglo XIII se estaba consolidando una diversificación a partir de la antigua Curia altomedieval, debido a los cambios en el concepto mismo y en el modo de ejercerse el poder real y a los que se refieren a su relación con los gobernados. Por una parte, de la Curia se desgajan las grandes reuniones extraordinarias de magnates, eclesiásticos y representantes de ciudades, y toman forma propia bajo el nombre de Cortes. Por otra, las reuniones ordinarias de asesores regios adquieren el perfil, cada vez más nítido, de Consejo Real. En tercer lugar, se completa la singularización y la definición de funciones de los diversos oficios de que se rodea el rey para atender a su servicio personal y al aparato de su 1. Estas cuestiones generales en D. Torres Sanz, La administración central castellana en la Baja Edad Media, Valladolid, 1982. J. M. Pérez-Prendes, La Monarquía Indiana, Madrid, 1989. M. A. Ladero Quesada, "Algunas reflexiones sobre los orígenes del "Estado Moderno", en M. González Jiménez, ed., La Península Ibérica en la Era de los Descubrimientos, Sevilla, 1997, p. 483-497.S. de Dios, Gracia, merced y patronazgo real. La Cámara de Castilla entre 1474-1530, Madrid, 1983. A. Álvarez Osorio Alvariño, "La Corte : un espacio abierto para la historia social", en La historia social en España. Actualidad y perspectivas (coord. S. Castillo), Madrid, 1991. Un buen modelo de estudio, Rita Costa Gomes, A Cortes dos reis de Portugal no final da Idade Média, Lisboa, 1995. [1] 327

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  • LA CASA REAL EN LA BAJA EDAD MEDIA

    MIGUEL-NGEL LADERO QUESADAUniversidad Complutense de Madrid

    Trataremos en estas pginas sobre tres cuestiones: primero, la definicin ycaractersticas de la Casa y Corte reales. Segundo, el nmero de personas adscritoal servicio de la Casa y su pago. Tercero, el papel de la Corte en la gestin y redis-tribucin del conjunto de los recursos de la Hacienda regia. La continuidad es elrasgo sobresaliente en estos tres aspectos durante la Edad Media tarda, desde finalesdel siglo XIII, pero los estudios llevados a cabo son escasos y parciales y la docu-mentacin cuantitativa es poca antes de la poca de los Reyes Catlicos, especialmenteen Castilla: por este motivo, el estudio se centra en ella aunque se hacen muchasreferencias a reinados y tiempos anteriores.

    I. ASPECTOS DE LA ORGANIZACIN INSTITUCIONAL

    1. La Casa Real. Delimitacin del concepto y de su realidad histrica

    Las Partidas definen la Corte del Rey como un lugar y, a la vez, como un "com-plejo orgnico-funcional" (D. Torres Sanz): Corte es llamado el lugar do es el reye sus vasallos e sus oficiales con l, que le han cotidianamente de consejar e deservir, e los ornes del reyno que se llegan y, o por honrra de l o por alcanar derechoo por pagarlo, o recabdar las cosas que han de ver con l ... e otros ha nome enlatn Curia'.

    Sin embargo, en el ltimo tercio del siglo XIII se estaba consolidando unadiversificacin a partir de la antigua Curia altomedieval, debido a los cambios enel concepto mismo y en el modo de ejercerse el poder real y a los que se refierena su relacin con los gobernados. Por una parte, de la Curia se desgajan las grandesreuniones extraordinarias de magnates, eclesisticos y representantes de ciudades,y toman forma propia bajo el nombre de Cortes. Por otra, las reuniones ordinariasde asesores regios adquieren el perfil, cada vez ms ntido, de Consejo Real. En tercerlugar, se completa la singularizacin y la definicin de funciones de los diversosoficios de que se rodea el rey para atender a su servicio personal y al aparato de su

    1. Estas cuestiones generales en D. Torres Sanz, La administracin central castellana en la BajaEdad Media, Valladolid, 1982. J. M. Prez-Prendes, La Monarqua Indiana, Madrid, 1989. M. A. LaderoQuesada, "Algunas reflexiones sobre los orgenes del "Estado Moderno", en M. Gonzlez Jimnez,ed., La Pennsula Ibrica en la Era de los Descubrimientos, Sevilla, 1997, p. 483-497.S. de Dios, Gracia,merced y patronazgo real. La Cmara de Castilla entre 1474-1530, Madrid, 1983. A. lvarez OsorioAlvario, "La Corte : un espacio abierto para la historia social", en La historia social en Espaa. Actualidady perspectivas (coord. S. Castillo), Madrid, 1991. Un buen modelo de estudio, Rita Costa Gomes, A Cortesdos reis de Portugal no final da Idade Mdia, Lisboa, 1995.

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    figura y de lo que simboliza y para cumplir las funciones poltico-administrativasque dependen o emanan del poder real cancillerescas, judiciales, hacendsticas,y aumenta el nmero de personas adscritos a cada uno de ellos.

    Este conjunto de oficios forma la llamada Casa Real. No hay, en principio,distincin entre oficios privados y pblicos, domsticos y cortesanos. El rey se sirvede todos ellos, de su Casa, para gobernar. La Casa sera, pues, "la organizacinadministrativa central caracterstica de la monarqua bajomedieval" (D. Torres Sanz),y "la corte o rastro del rey ... el lugar donde est el rey con su casa ("conjunto deoficiales")" (M. A. Prez de la Canal). Paulatinamente, el cambio de significadode la palabra Corte y la diversidad de funciones y de consideracin sobre todo enel plano jurisdiccional de los oficios que formaban de origen la Casa del rey, lleva reservar esta denominacin para el grupo de oficios de carcter preferentementedomstico-privado, mientras que la de Corte se aplicaba al resto de los oficios einstituciones que componan la administracin central de la monarqua.

    Esta distincin es an algo fluida, insegura y artificial a fines de la Edad Media,y deja en pie el hecho o realidad fundamental de que la Casa fue el ncleo primitivoy originario de la administracin del poder regio, y de ah la importancia que tienesu ordenacin o reglamentacin nueva tanto en la Corona de Aragn como en lade Castilla entre el ltimo tercio del siglo XIII y mediados del XIV, porque indicaque se estaba llegando a un nivel o poca distinto a los anteriores en la forma deorganizacin poltica de la sociedad, en coincidencia con otros aspectos que definenel nacimiento de lo que tradicionalmente se ha llamado Estado Moderno. Por esto,tambin, la Casa del Rey facilita un modelo de organizacin, en todos sus aspectos,para las diversas Casas de grandes nobles que han de gobernar y administrar susrespectivos estados seoriales, tan incrementados en la tarda Edad Media.

    La conciencia de que era posible sealar cierta lnea divisoria entre unos y otrosoficios de la Casa del Rey, creando la dualidad a que acabo de aludir se manifiestaen textos diversos, tanto de aquella poca como de sta. Mencionar tres que meparecen expresivos:

    1. En las Cortes de 1371, al establecer un nuevo ordenamiento para su Canci-llera, Enrique II de Castilla diferencia entre ofiiales de la casa del rey que se nontrabajen de juridkin, y oficiales de la casa que tienen jurisdiccin y poder parahacer justicia. Entre los primeros, el mayordomo mayor, el copero mayor, el repostero,el aposentador, el portero, el cocinero mayor, y otros. Entre los segundos, el cancillermayor, el notario mayor, el alguacil mayor, el alcalde de Corte. Hay una primacaevidente de lo privado-domstico en la mayor parte de los oficios del primer grupo.La divisin se repite en lo tocante a los grandes oficios de fuera de la casa del rey,esto es, los que se ejercan directamente en el territorio del reino o en alguna de suspartes, pero aqu ya no hay posibilidad de diferenciar entre privado y pblico: losadelantados y merinos mayores, y diversos alcaldes, tienen jurisdiccin, mientrasque el alfrez mayor luego sustituido por el condestable o el almirante mayor,los monederos o el alfaqueque mayor no, segn ese ordenamiento, pero cumplanigualmente funciones que hoy llamaramos de administracin pblica.

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    2. Gonzalo Fernndez de Oviedo, al comenzar su descripcin de los oficiosde la casa del prncipe don Juan, muerto en 1497, advierte: en los offiios de lagouernaqion o hazienda, en general, ser breue ... porque mi intento prinlipal eshablar en los de la puerta adentro de palacio, pues que los de fuera (como es notorio)otros en ellos curssados los sabrn mejor explicar, pero como yo seruf en la cmara,de aquello tengo ms notigia.

    3. Marcel Durliat, en su comentario a las Leges Palatinae de Jaime II deMallorca, afirma: Mayordomos y camareros mandan al conjunto de los servidoresde la persona real: se distinguen, por tanto, debido a sus funciones, de naturalezaesencialmente domstica, de los otros oficiales, el canciller y el maestre racional,que estn al frente de los rganos de gobierno y administracin central.

    Aun reducindola, repito que con mucho de artificiosidad, al conjunto de oficiosdedicado preferentemente a cuestiones de tipo domstico, privado y familiar delrey, la Casa Real tiene en la baja Edad Media gran peso e influencia poltica. Enel seno de la Casa se cumplen habitualmente casi todas las funciones rituales y sim-blicas destinadas a manifestar la condicin del rey como fuente de poder, personasagrada, vicario de Dios para el gobierno de su reino: el ceremonial se complica,aunque sin llegar a los extremos de la poca moderna, y su desarrollo mismo es yauna manera de ejercer el poder poltico o, al menos, de sustentar y apoyar su ejercicioa partir de las antiguas imgenes mentales sobre "los dos cuerpos del rey" procedentesde la alta Edad Media y del ejemplo de otras civilizaciones.

    En segundo lugar, al formar sus oficiales y servidores el entorno inmediatodel rey y gozar de su confianza, es frecuente que reciban encargos de actuacin guber-nativa y administrativa al margen de la que reglamentaria o habitualmente ejercenotras instituciones y personas. Por una parte, tales reglamentaciones eran anincipientes e incompletas en muchos casos y la prctica del poder permita solapary superponer actuaciones y funciones. Por otra, el poder real era la fuente y sustentode todas ellas y no estaba limitado por las que ya existieran o estuvieran en curso,puesto que son potestades delegadas de su propia soberana, de modo que era siempreposible practicar lo que J. M. Prez-Prendes denomina "flexibilidad adaptativa delas instituciones" y oficios, del mismo modo que el monarca poda siempre recibirdirectamente memoriales, relaciones, quejas e iniciativas polticas de cualquiersbdito, y dar respuesta o solucin: el papel que jugaba la Casa para dar cauce atales expresiones del poder real era insustituible.

    Los argumentos que acabo de exponer explican porqu llegaron a tener tangran poder poltico desde finales de la Edad Media los secretarios reales, o porquse form en la Castilla de los Reyes Catlicos el Consejo de la Cmara el nombrese refiere al aspecto ms domstico y privado de la Casa real para resolver en lascuestiones de "gracia, merced y patronato" que ms directamente interesaban al ejer-cicio absoluto de la soberana regia, al margen del Consejo Real, cuya institucio-nalizacin y burocratizacin eran ya excesivas para que el rey pudiera utilizarlo comovehculo habitual de aquellas manifestaciones de su gracia soberana.

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    2. Los ordenamientos de la Casa Real

    Los ordenamientos bajomedievales de la casa real en los diversos reinos espa-oles deben entenderse en una perspectiva amplia, europea y mediterrnea, quetiene sus antecedentes remotos en la organizacin y ceremonial imperiales de Roma,y en su influencia sobre las realezas brbaras altomedievales, aunque podemos consi-derar como ms prximos y fundamentales tanto el ejemplo bizantino como el caro-lingio y otnida. En el primer caso, el Libro de las Ceremonias debido aConstantino VII (913-959) recopilaba la tradicin establecida e influy en los siglossiguientes, dentro y fuera del Imperio; leemos, por ejemplo, en el cronista aragonsDiego Jos Dormer, que escriba a fines del siglo XVII, lo siguiente: Por ser laespada smbolo del supremo poder y de la justicia, ha sido costumbre el llevarlalos reyes delante de s al tomar la posesin de sus reynos, y desnuda, para manifestarel exercicio de ella contra los pequeos y mayores ... El llevarla en la Corona deAragn el camarlengo, es a imitacin de lo que estaba ordenado en el Imperiode Constantinopla, que algunas veces se encomendaba esta ceremonia al Prefectodel Sello y de la Cmara ..., con que siendo el camarlengo en esta Corona el prefectodel sello y de la cmara.., le toca por entrambos oficios el llevar desnudo el estoquedelante del rey'.

    La herencia carolingia se resume en el libro De Ordine Palatti de Hincmarde Reims, y se prolonga en los ordenamientos cortesanos del Imperio romano-germ-nico, a partir de la segunda mitad del siglo X. En los reinos cristianos espaoles dela alta Edad Media tuvo peso tambin el recuerdo del orden palatino visigodo deToledo recordemos que Alfonso II lo restaur en Oviedo a finales del siglo VIIIy algunos influjos andaluses, por ejemplo en el nombre de determinados oficiosalfrez, almirante, almojarife, alfaqueque. Pero, en lo fundamental, se siguen losmismos modelos que en otros pases europeos.

    Ms an en la poca de renovacin que comienza a mediados del siglo XIII,cuando la noticia de los ordenamientos promulgados por otros reyes coetneos corracon rapidez y con ella la posibilidad de influencias recprocas. En Francia, losordenamientos de la Casa u Htel real comienzan en 1261 y son frecuentes hasta1350. Segn su ejemplo, Carlos de Anjou los promulg para el reino de Sicilia apartir de 1265, aunque no cabe olvidar el posible influjo de los que procedieran dela poca Staufen, normanda e incluso bizantina. A su vez, los ordenamientos angevinosfueron modelo para los del Delfinado en 1336 y 1340, e inspiraran algunos cambiosintroducidos en su Casa por Pedro III de Aragn a partir de 1282, por ejemplo lacreacin del oficio de Maestre Racional.

    Los ordenamientos de la Casa Real aragonesa comienzan, en efecto, con esterey, que los dispuso para su casa y para la de su mujer, Constanza, cuando todavaera infante. Alfonso III y Jaime II innovaron poco, aunque aadieron algunas orde-nanzas. La perfeccin se alcanza con Jaime II de Mallorca, cuyas Le ges Palatinae,

    2. D. J. Dormer, Discursos varios de historia, Zaragoza, 1683, pp. 260-294.

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    ario 1337, describen con todo detalle los oficios de la Casa Real y sus respectivasfunciones, bajo la direccin de los cuatro oficios principales: mayordomo, camarlengo,canciller y maestre racional. Las Ordinacions de Pedro IV de Aragn, Pedro elCeremonioso, promulgadas en 1344, son la traduccin al cataln del texto latinode Jaime II, con escasos aadidos y modificaciones'.

    Para el estudio de la casa real aragonesa contamos, adems, con abundantesy continuos testimonios documentales desde finales del siglo XIII 4. No ocurre lo

    3. Sobre los ordenamientos de la casa real en la Corona de Aragn es fundamental el estudio de MarcelDurliat acerca de la corte del rey Jaime II de Mallorca, escrito en 1962 y nuevamente publicado en laedicin con traduccin al cataln (Lleis Palatines) magnficamente realizada en Mallorca (Olaeta editor,2 vol., 1991, I, p. 7-72). En el trabajo de Durliat hay referencias a otros anteriores de C. A. Willemsen,O. Schena-J. Trenchs y F. Sevillano Colom. La primera edicin de las Leges Palatinae apareci en ActaSanctorum, mense iuniii, tomus III (Amberes, 1701). El Ordenamiento de Pedro IV, ao 1344, fue publicadopor Prspero de Bofarull i Mascar en el vol. V de la Co.Do.In Archivo de la Corona de Aragn, 1850,pp. 451-550. Hay una edicin facsimilar del manuscrito, con estudio previo de B. Palacios Martn (Valencia,1994). La antigua versin en castellano hecha a mediados del siglo XVI fue editada por P. Savall y S.Penen, Fueros, Observancias y Actos de Corte del reino de Aragn, Zaragoza, 1866. J. Trenchs y F.Jimeno Blay tenan en curso una nueva edicin a partir de un texto manuscrito ms completo. V. tambinE. Sureda, De la Corte de los seores reyes de Mallorca, Madrid, 1917. 0. Schena, Le leggi palatinedi Pietro IV d'Aragona, Cagliari, 1983. F. Sevillano Colom, "Apuntes para el estudio de la cancillerade Pedro IV el Ceremonioso", Anuario de Historia del Derecho Espaol, XX (1950), 137-241. F. A.Roca Traver, "Un manuscrito de ordenaciones de la casa del rey en la Corona de Aragn", Anuario deHistoria del Derecho Espaol, XVIII (1948),515-530 (contiene un ndice de adiciones a las Ordenacionesde 1344). U. Deibel, "La reyna Elionor de Sicilia", en Sobiranes de Catalunya, Barcelona, 1928, pp.349-453 (cuentas de su casa en 1373-1374). B. Palacios Martn, "Sobre la redaccin y difusin de las"Ordinaciones" de Pedro IV de Aragn y sus primeros cdices", Anuario de Estudios Medievales, 25/2(1995), 659-682.

    4. Otros textos de ordenamientos y aspectos diversos de la organizacin de las casas reales en la Coronade Aragn : L. Pascual, "Los oficios en la corte de Jaime I de Aragn" en X Congreso de Historia dela Corona de Aragn, Zaragoza, 1980, y, "Los oficios en la corte de Pedro III de Aragn", XI Congresode Historia de la Corona de Aragn, Palermo, 1984. J. Trenchs, Casa, Corte y Cancillera de Pedroel Grande (1276-1285), Roma, 1991. F. Soldevila, Pere el Gran, Barcelona, 1950-1962 (casas de donPedro y de su mujer doa Constanza cuando eran infantes). K. Schwarz, Aragonische Hofordnungenim 13. Und 14. Jahrhundert. Studien zur Geschichte der Hofiimter und Zentralbehrden des KiinigreichsAragon. Berln-Leipzig, 1914 (traduccin parcial en el Boletn de la Real Academia de Buenas Letrasde Barcelona, VII, 1913-1914). F. Carreras Candi, "Ordenanzas para la casa y corte de los reyes de Aragn",Cultura Espaola, 1906,2, 327-338, y, "Redre9 de la Real Casa : Ordenaments de Pere lo Gran e Anfslo Lliberal", Boletn de la Real Academia de Buenas Letras de Barcelona, V (1909-1910), 97-108. Sonmuy importantes las investigaciones de H. Finke, Acta Aragonensia, Berlin-Leipzig, 1908-1922, y deL. Klpfel, Verwaltungsgeschichte der Knigreiches A ragon zu Ende des 13. Jahhunderts, Berlin-Leipzig,1915, y, "Die Beamten der Aragonischen Hof und Zentralfinanzverwaltung am Ausgange des 13.Jahrhunderts", Vierteljahrschrift fir Sozial und Wirtschaftsgeschichte, XI (1913), 1-44.1. E. MartnezFerrando, "Super oficciis Aragonum", Hispania, 17 (1944), 499-535 (sobre los ltimos aos de AlfonsoIII) y, Jaime 1/de Aragn, Barcelona, 1948. E. Gonzlez Hurtebise, Libros de la Tesorera de la CasaReal de Aragn, I, Libro de Pedro Boyl, tesorero del monarca desde marzo de 1302 a marzo de 1304,Barcelona, 1911. La ordenanza de Jaime II en 1308 sobre la mesa real en Co.Do.In. Archivo Coronade Aragn, VI, Barcelona, 1950. Tambin, F. Sevillano Colom, "Apuntes para el estudio de la cancillerade Pedro IV el Ceremonioso", Anuario de Historia del Derecho Espaol, XX (1950), 137-241.

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    mismo en el mbito de la Corona de Castilla 5 . La segunda Partida de Alfonso Xdescribe los principales oficios de la corte regia, pero no es una ordenanza o regla-mento. Despus, hemos de contentarnos con menciones sueltas en crnicas y en lasenumeraciones de confirmantes de privilegios reales, con algunos ordenamientosde Cortes (1371, 1436...) y con una documentacin escasa y discontinua entre la quesobresalen las cuentas de Sancho IV (1284-1295) 6, las del camarero de Enrique IVen 1462 y diversos documentos fiscales del siglo XV 7 , hasta que, para la poca delos Reyes Catlicos, disponemos de las cuentas detalladas de todas las casas realesreina, rey, prncipe heredero-8 y del precioso aunque tardo testimonio que GonzaloFernndez de Oviedo escribi en 1546-1547 recordando sus tiempos mozos al serviciodel prncipe don Juan; su obra, titulada Libro de la Cmara Real del Prncipe donJuan e offigios de su casa e seruieio ordinario, se debe a un mandato del prncipeFelipe futuro Felipe II que en 1548 introducira el "estilo y uso de la casa de

    5. Antecedentes en C. Snchez-Albornoz, "El Palatium regis astur-leons", Cuadernos de Historiade Espaa, LIX-LX (1976), 5-104. J. A. Garca de Cortzar y E. Pea Bocos, "El palatium, smboloy centro de poder en los reinos de Navarra y Castilla en los siglos X a XII", Mayurca, 22 (1989), 1,281-296.P. Salazar de Mendoza, Origen de las dignidades seglares de Castilla y Len, Madrid, 1794. A. M. Rieray Fernndez-Raigoso, "Contribucin al estudio de los oficios y dignidades de Castilla y Len", Hidalgua,XX (19..), 949-967. G. Martnez Dez, "Los oficiales pblicos de Las Partidas a los Reyes Catlicos",Actas II Symposium Historia Administracin, Madrid, 1971, pp. 121-136. R. Prez Bustamante, Losoficios de la casa, corte y cancillera en Castilla durante la Baja Edad Media, Universidad de Madrid(tesis doctoral indita, no he podido consultarla), y, "El juramento de los oficiales en el reino de Castilla.1252-1274", Moneda y Crdito, 129 (1974). M. A. Prez de la Canal, "La justicia en la corte de Castilladurante los siglos XIII al XV", Historia. Instituciones. Documentos, 2 (1975), 385-481.

    6. M. Gaibrois, Historia de Sancho IV de Castilla, Madrid, 1922-1928, 3 vol. Para los reinadosinmediatos, S. de Mox, "La sociedad poltica castellana en la poca de Alfonso XI", Cuadernos deHistoria, 6 (1975), 187-326. L. V. Daz Martn, Los oficiales de Pedro I de Castilla, Valladolid, 1987.Algunos datos sobre 'casas' de infantes y reinas en I. Beceiro Pita, "Los dominios de la familia realcastellana (1250-1350)", en Gnesis medieval del Estado Moderno. Castilla y Navarra (1250-1370),Valladolid, 1987, pp. 79-106. J. Trenchs Odena, "La comitiva de Alfonso XI: notas para su estudio",Saitabi, XXX (1980), 11-19.

    7. M. A. Ladero Quesada, "1462. Un ao en la vida de Enrique IV, rey de Castilla", En la EspaaMedieval, 14 (1991), 237-274. A. Gmez Izquierdo, Cargos de la Casa y Corte de Juan II de Castilla,Valladolid, 1968. M. J. Garca Vera, La alta nobleza en las instituciones de gobierno de la monarquade Enrique IV (1454-1474), Madrid, Universidad Complutense, 1992 (Memoria de Licenciatura), y, "Podernobiliario y poder poltico en la Corte de Enrique IV (1454-1471)", En la Espaa Medieval, 16 (1993),223-237. Y, en colaboracin con R. M. Montero Tejada, "La alta nobleza en la Cancillera real castellanadel siglo XV", Espacio. Tiempo. Forma, 11115 (1992), 163-210.

    8. M. C. Solana Villamor, Cargos de la Casa y Corte de los Reyes Catlicos. Los modestos colabo-radores de los Reyes Catlicos, Valladolid, 1962. M. A. Ladero Quesada, La Hacienda Real de Castillaen el siglo XV, La Laguna de Tenerife, 1973. A. de la Torre y del Cerro, de., La Casa de Isabel la CatlicaMadrid, 1954, Cuentas de Gonzalo de Baeza, tesorero de Isabel la Catlica, Madrid, 1955-1956,2 vol.,y, Testamentara de Isabel la Catlica, Valladolid, 1968. A. Prieto Cantero, Casa y Descargos de losReyes Catlicos, Valladolid, 1969. A. Rumeu de Armas, Itinerario de los Reyes Catlicos (1474-1516),Madrid, 1974. F. de Llanos y Torriglia, En el hogar de los Reyes Catlicos, Madrid, 1946. Tambin,B. Caunedo, "Un importante papel de los mercaderes de Toledo a finales del siglo XV: abastecedoresde la Casa Real", Anales Toledanos, XVI (1983), 139-150.

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    Borgoa", mucho ms complicado, caracterstico desde entonces de la monarquade los Austria espaoles, aunque ya su abuelo Felipe I lo haba trado consigo durantesu breve reinado, en 1506 9.

    A partir de todas estas fuentes de conocimiento, har una exposicin a la vezsinttica y globalizadora, utilizando datos y testimonios tanto aragoneses comocastellanos, desde el ltimo cuarto del siglo XIII hasta comienzos del XVI, aunquesealando en cada caso las precisiones cronolgicas y de reino que sean precisas.Mi campo de estudio sern los oficios de Mayordomo y de Camarero, y cuantosdependen de uno u otro, los cuerpos de guardia, pajes, donceles y continos que servanen la casa del rey, los secretarios o escribanos reales dependientes, en principio, delcamarero, los escribanos de racin y tesoreros vinculados directamente a la casareal, y tambin la Capilla, aunque formalmente estuviera integrada en la Cancillera.

    Pero no incluir el estudio de otros oficios, precisamente los que se desarrollanms ampliamente durante la Edad Media tarda, aunque formen parte, al menos en suorigen de la casa real entendida en su sentido ms amplio, por considerar quecorresponden ms bien al concepto pblico-estatal que no al domstico, aun salvandolo anacrnico de la distincin: cancillera, audiencia y rganos de justicia, contadores,maestres racionales, bayles generales y dems aparato hacendstico, cuerpos armadoscuya funcin va ms all de la proteccin de la persona y casa del rey, Consejo Real,etc.

    3. Funciones y oficios dependientes del Mayordomo

    El Mayordomo era el primer oficial de la casa del rey. Pedro III de Aragnfundi en un solo oficio los de Senescal, cataln, y Mayordomo, aragons, aunquems adelante parece que volvi a haber uno para cada mbito o reino de la Coronade Aragn. All, como en Castilla, lo habitual era que el Mayordomo Mayor fueraoficio honorfico, tenido por algn alto noble que slo lo ejerca en momentos desingular importancia. En Aragn haba adems dos mayordomos ordinarios amboscaballeros y en Castilla un mayordomo mayor del rey, que eran quienes actuabanefectivamente. Sin embargo, no se puede olvidar que en Castilla el Mayordomo Mayorfue cabeza de la administracin hacendstica, por encima de los Contadores Mayoresde Haciendasurgidos desde tiempos de Enrique II, y como tal presida las subastaspara el arrendamiento de rentas reales, y perciba un porcentaje de su importe, loque aada al honor de tan alto cargo unos beneficios muy sustanciosos.

    9. G. Fernndez de Oviedo, Libro de la Cmara Real del Prncipe don Juan e affigios de su casa eservigio ordinario, Madrid, 1870. Muchos aspectos sobre el funcionamiento de la casa real en R. DomnguezCasas, Arte y etiqueta de los Reyes Catlicos. Artistas, residencias, jardines y bosques, Madrid, 1993.Un comentario sobre el contenido de la Segunda Partida y el del "Libro de la Cmara" en J. Allard, "Lanaissance de l'etiquette: les rgles de vie la Cour de Castille la fin du Moyen ge", en N. Guglielin,A. Rucquoi, El discurso poltico en la Edad Media, Buenos Aires, 1995, p. 11-28.

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    Debido a su preeminencia, el mayordomo mayor haba tenido antiguamentejurisdiccin sobre todos los oficios de la casa del rey con limitaciones para losdependientes de otros grandes oficiales, yen las ordenaciones aragonesas se indicaque de l depende el algotzir alguacil o guarda de la prisin del rey; en Castillahaba perdido estas funciones ya en tiempos de Alfonso X, si no antes, a favor delos jueces y alcaldes de Corte.

    En la vida cotidiana de la casa real, la mayordoma era responsable principalde los servicios de comedor y cocina, caballeriza y acemilera, lo que haca queestuviera bajo las rdenes del mayordomo un nmero considerable de personas.

    1. El servicio de la mesa real obedeca a un ceremonial preciso destinado agarantizar la seguridad del rey y a ensalzar su figura y su munificencia como garantede la alimentacin del reino, simbolizado en sus invitados y en los pobres entre quienesse reparte la comida sobrante I . La templanza del rey en la mesa era tambin ejemplaren los das ordinarios: un entrems y dos platos de carne asada y cocida al mediodano faltaba casi nunca la gallina o el pollo, uno slo por la noche, segn las Legesde Jaime II.

    Los alimentos eran trasladados de la cocina a la mesa en cortejo de caballerosprecedidos por el "Sargento de Armas" en Aragn, por el Maestresala en Castilla; losprobaban o "hacan salva" varias personas antes de presentarlos al rey, y ste lostomaba siguiendo el consejo de sus mdicos, presentes en el acto; sus posibles auxiliosse completaran con el de un "limpiador de dientes" que se menciona en las cuentascastellanas. En la preparacin de los alimentos ante el monarca intervenan uno ovarios trinchantes y responsables del cuchillo y del plato regios, siempre de condicinnoble. Mientras tanto, el Copero Mayor (Boteller Mayor en Aragn) atenda al serviciode agua y vino, que tambin eran presentados al rey de manera ritual. En Aragndependa del Boteller no slo la provisin de agua sino tambin la de pan y pastelera,elaborada por un panadero que trabajaba en un obrador totalmente aislado.

    2.El aislamiento era tambin norma de seguridad en la cocina, donde slo podanpermanecer el o los cocineros mayores que eran oficios nombrados personalmentepor el rey, los cocineros y ayudantes marmitones, alenteros o cuidadores del fogn;haba, al menos en Castilla a fines del siglo XV, un portero especial para la cocina.El abastecimiento corra a cargo de un Despensero Mayor (Museu en las ordenacionesaragonesas), auxiliado por otros menores y, en Castilla, por contadores de despensay por un veedor de las compras (es el Emptor aragons); algunos proveedoresaparecen, en las cuentas castellanas de poca de los Reyes Catlicos, integradoscomo oficios de la casa real: regatn, carnicero, pescador, pastelero, gallinero, aguadory frutero, que tambin provea de queso y sal, aunque este ltimo oficio dependadel rebost y, por lo tanto, del camarero en Aragn a mediados del siglo XIV.

    10. Interesantes observaciones, referidas al siglo XVI especialmente, en M. A. Prez Samper, "LaMesa del Rey : imagen y smbolo del poder", XV Congreso Historia Corona Aragn, 1/111, Zaragoza,1996, pp. 433-450.

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  • La casa real en la Baja Edad Media

    Las funciones de aprovisionamiento eran, a veces difciles: del gallinero escribeFernndez de Oviedo que es peor que el milano para las aldeas e labradores ecomarca por donde anda; y es menester que el mayordomo y aun los alcaldes estnsobre aviso, porque no roben, pues que se le pagan sus aves a ms prenio que lascompra, e se le da salario e posada e es franco, etc. Hay algunos ejemplos de lastensiones rurales que provocaba la prctica de su oficio, que era el ms obligadopor el consumo cotidiano que se haca de aquellas aves en la mesa regia 11 . El aguadorera cargo de especial responsabilidad en Castilla, dado el carcter itinerante de laCorte: en el verano de 1494, despus de algunos casos de muerte de sed en el camino,se orden que llevara siempre dos acmilas con agua, vino, frutos y refrescos paraservicio de los mozos de espuelas y gente de a pie que viajaba con los reyes.

    El mayordomo tena que atender tambin el servicio menudo de comida entrehoras de la real persona, provisto habitualmente por el boticario ya veremos porquy por el frutero. Pero su mayor preocupacin deba ser la toma de cuentas semanal,junto con un escribano de racin en Aragn y con un contador de la despensa enCastilla: estaran sujetas a esta toma de cuentas al menos la despensa, el pago delas raciones al personal de la casa, la caballeriza y la acemilera.

    3. La caballeriza era un servicio de gran importancia, dadas las circunstanciasde aquel tiempo. As lo consideran las ordenanzas aragonesas al disponer que hayados caballerizos principales, secundados por un civader o cebadero, uno o variosherradores y mozos de espuelas (mancipia stabulorum) y al tratar detalladamentesobre los caballos, sillas y arneses del rey, que siempre tendra dos a punto, cercade s, en los viajes y en las expediciones guerreras. En Castilla hallamos un CaballerizoMayor, y a veces un caballerizo de las andas para atender este tipo de montura, conel auxilio de mozos de espuelas, silleros, guarnicioneros y albarderos, as como unveterinario o albeitar para la atencin sanitaria de las caballeras.

    4. La acemilera necesaria para los transportes del ajuar y mobiliario dependadel Acemilero Mayor y de su personal, pero, tanto en Aragn como en Castilla, lohabitual era disponer de pocas acmilas propias y alquilar las que se precisaran encada caso o circunstancia as como, si era menester, carretas e incluso barcos, loque significa que era demasiado costoso disponer de un gran parque mvil con cargoa la casa real. La cmara de Enrique IV requera para su transporte de 70 a 100acmilas, la de Isabel I y las infantas sus hijas unas 150: son dimensiones modestassi se las compara con las de pocas posteriores.

    11. Un ejemplo: en noviembre de 1478, el comendador de la Orden de San Juan en su seoro sevillanode Tocina se neg a permitir que nadie vendiera gallinas al gallinero de Isabel I, que las requera paraabastecimiento de la Corte, entonces en Sevilla. Hubo un pleito, en el que constan los trminos altivosde su fiera respuesta : Le Pidieron por merced que viese la carta de Su Alteza e la fisiese conplir y elrespondi que las gallinas que all ava que l era onbre para las comer tan bien como el rey e la reyna,e que l se las ava menester. E que le rogaron que syquiera fuesen treynta gallinas para las nescesidadesde la fiesta e l dixo que no quera dar las dichas gallinas. Dixeron que las tomaran por el lugar, segnSu Alteza mandava, e l enbi a desir con sus escuderos que sy llegasen a las aves que les quebraranlas cabecas, y que a esta cabsa se vinieron sin aves ni cosa ninguna (Archivo General de Simancas,Diversos de Castilla, lib. 42, doc. 99).

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  • MIGUEL-NGEL LADERO QUESADA

    Hay algunos otros oficios juglares, trompeteros y cimbaleros que aparecencomo dependientes de la mayordoma en las ordenanzas aragonesas. Sin embargo,es ms probable que a fines de la Edad Media formaran ya parte del personal dela Cmara.

    4. Funciones y oficios dependientes del Camarero o relacionadoscon la Cmara Real

    El oficio de Camarero Mayor gan mucha importancia en los ltimos deceniosdel siglo XIII, en parte a costa del de Repostero Mayor, que en Aragn desapareci,aunque no el conglomerado de oficios y funciones que diriga (rebost). En Castilla, elRepostero Mayor se convirti en un cargo meramente honorfico pues sus funcionesoficial que tiene grant lugar para guardar el cuerpo del rey, leemos en las Partidashaban sido asumidas completamente por el Camarero 12 . Mientras tanto, ste llegaba aser, segn Fernndez de Oviedo, el mejor oficio de la casa real, porque esms continuo y conversable cerca de la persona del prncipe ... y siempre el tal es susecreto consejero.

    Las ordenanzas aragonesas disponan que hubiera tres camareros, slo unode ellos Mayor, noble y actuante en grandes ocasiones. Los dos ordinarios, que erancaballeros, llevaran el peso del trabajo cotidiano. En Castilla ocurrira algo semejante,pues era Camarero Mayor del Rey el Condestable recurdese la funcin de portarel estoque regio, y haba al menos en tiempos de Enrique IV camareros especia-lizados (ropa, paos, armas).

    Las funciones principales del oficio de Camarero se referan a la guarda delsecreto del rey, a la seguridad de su persona, a la atencin a su salud espiritual ycorporal, a su vestuario y al ornamento, mobiliario y decoro de su cmara y de lassalas para la comida regia, oratorio, consejo real y audiencias. Todas ellas dabantrabajo a muchas personas y provocaban repartos de funciones minuciosamentereglamentados puesto que, a travs suyo, se produca la "puesta en escena" de lapersona regia en la mayora de sus actos privados y pblicos. He aqu una brevedescripcin de todas ellas.

    1. El camarero tena bajo su custodia el sello secreto, de modo que cada vezms documentos regios de especial importancia comenzaron a pasar por su oficio,y en Castilla, aunque pronto hubo un canciller especfico del sello de la poridado secreto, sigui habiendo adems un sello de la cmara. En las Leges de Jaime IIde Mallorca se menciona ya la presencia de dos escribanos-secretarios bajo sus rdenesque efectuaban las correspondientes tareas. Este origen, o muy similar, tendran lossecretarios reales en Castilla, cuyo nmero e importancia a finales del siglo XV noprecisa comentario, ni tampoco su peso en la vida poltica del reino: en las cuentas

    12. H. Grassotti, "El repostero en Len y Castilla (siglos XR-XIV)", Cuadernos de Historia de Espaa,LXIX (1987), 41-75.

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  • La casa real en la Baja Edad Media

    de la poca aparecen al lado de los miembros del Consejo Real, totalmente distin-guidos ya con respecto al personal de la cmarau.

    2. La seguridad del rey dio lugar a un despliegue de medios cada vez mayor.En las ordenanzas mallorquinas y aragonesas de 1337 y 1344 se dispone la pruebaprevia de los alimentos tomados entre horas, y la presencia del camarero en la pruebade los que van de la cocina a la mesa; su vela del sueo regio, dentro de la cmara,con armas y equipo, la vigilancia para que de noche las puertas de palacio estncerradas con llave, y la escolta de la persona real durante el da. Para ello contabael camarero con slo 6 7 escuderos, dos camareros ayudantes y un criado, cuatroujieres con ocho sirvientes y cuatro vigilantes, aunque es posible que hubiera otropersonal a sus rdenes. En la cmara de los reyes castellanos ejercan la vigilanciainterior los Monteros de Espinosa que estuvieran de turno eran 48 en total, perohaba tambin, al menos en la segunda mitad del XV, un guarda mayor (guarda mayordel cuerpo del rey, se denominaba en tiempos de Pedro I), guardas, porteros de cmaray otros "de cadena" situados a la puerta del palacio, ballesteros de maza, y otropersonal que poda cumplir funciones de seguridad, adems de las suyas especficas(monteros y ballesteros de a caballo y de a pie, mozos de espuela y de la ballesta),adems de grupos cuya profesionalidad militar era mayor: escuderos de a pie y dea caballo a cuyo frente haba en tiempos de Pedro I un caudillo de los escuderosdel cuerpo del rey, y a mediados del XV un capitn de la guarda al frente de entreuna y tres capitanas de caballera formadas por "hombres de armas" y jinetes (de entorno a 100 hombres cada una), para el servicio del rey y de toda la Corte. En tiemposde Juan ily Enrique IV una parte de aquella capitana estaba formada por "caballerosmoriscos" pero la novedad no se consolid, al contrario que la introducida en 1507por Fernando V, al establecer la nueva guardia de alabarderos 14.

    3.Las actividades cinegticas del rey movan siempre a alguna parte de su per-sonal de seguridad y a otras muchas personas, cuyo encuadramiento corra a cargode varios oficiales: Cazador Mayor, Montero Mayor, Halconero Mayor, y sus respec-tivos subordinados, mozos de alanos, etc. (en las Le ges de Jaime II dependan delmayordomo, no del camarero). En las monteras organizadas por Enrique IV se contra-taban los servicios de entre 200 y 400 campesinos de los pueblos cercanos para queel correr monte regio tuviera buenos resultados. Un resultado indirecto de aquellaaficin era el mantenimiento de animalias salvajes en diversos palacios y casas regiosy el pago a leoneros, oseros, etc. que cuidaban a las fieras, por ejemplo en el castillode San Jorge de Triana, en Sevilla, y de especialistas diversos, como en la casa

    13. J. L. Bermejo Cabrero, "Los primeros secretarios de los reyes", Anuario de Historia del DerechoEspaol, XLIX (1979), 201 y ss.

    14. P. de Escalera Guevara, Origen de los Monteros de Espinosa, Madrid, 1632. R. de Pereda Merino,Los Monte ros de Espinosa, Madrid, 1914. J. M. Bueno Carreras, Guardias reales de Espaa desde elreinado de los Reyes Catlicos hasta Juan Carlos I, Madrid, 1989. Tambin, A. Echevarra Arsuaga,"Los elches en la guardia de Juan II y Enrique IV de Castilla", en Actas VI Simposio Internacional deMudejarismo, Teruel, 1996, pp. 421-428.

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  • MIGUEL-NGEL LADERO QUESADA

    del prncipe Juan el encargado del buho con los ojos cosidos para ser seuelo delos milanos 15.

    4. La atencin a la salud y a todo gnero de necesidades corporales del rey,incluidos los secretinaturae, eran responsabilidad de personal de la cmara. Es precisomencionar ante todo a los fsicos o mdicos, dos segn las Leges de 1337 aunquePedro IV tena al menos 10 en 1356 tres de ellos judos y de seis a ocho los ReyesCatlicos; entre sus misiones se contaba la vigilancia de la comida regia y el anlisismatinal de la orina o uroscopia, por las indicaciones que poda facilitar sobre la saluddel rey. Haba tambin cirujanos, en plano de menor categora aunque especialmentetiles durante las guerras: con sus mdicos y cirujanos mont Isabel I las tiendasdel llamado Hospital de la Reina durante la conquista de Granada.

    El rey dispona de los servicios cotidianos de un barbero; el del prncipe donJuan cumpla, adems, con otras cualidades que suelen agradecerse en dicho oficio:era el barbero escribe Fernndez de Oviedo Gutierre de Lunas, hombre de bieny parlero donoso, y algunas veces contaba algunas facecias y cosas ridculas, conque el prncipe holgaba y los que le oan, pero no interpona malicias ni deca palabraperjudicial a nadie.

    El boticario era oficio vinculado, en sus orgenes, a la repostera o rebost, almenos en Aragn, donde todava a mediados del siglo XIV acumulaba las funcionesde cerero, oficio que despus se independiz. Las funciones del boticario no selimitaban a la farmacia, como su nombre podra sugerir, sino que era a la vez elconfitero y el droguero del rey. As, fabricaba los jarabes (por ejemplo, de clavo),cocimientos de ruibarbo y otras plantas e hierbas, siropes o electuarios, pero tambinlas confituras de membrillo, diacitrn, almendras y mazapanes, pirionates, mermeladas,jengibre, dtiles, toronja y limn, azcar rosada, pan de azdcar, "manjar blanco","casiafstola", etc. y no slo para el rey sino para el personal de la cmara: los confitessolan tomarse habitualmente en das de ayuno y domingos de Cuaresma. El boticariotena, en consecuencia, necesidades de abastecimiento que no siempre eran fcilesde satisfacer: en tiempo de los Reyes Catlicos, sus proveedores ms importantesde especias y confites eran tenderos de Valencia, lo que parece era ya tradicin enreyes aragoneses anteriores. A veces, incluso, el Bayle General de Valencia se encar-gaba de enviar directamente aquellos productos; leemos, por ejemplo, en una cartadel rey Fernando al bayle Diego de Torres, que haba mandado por la Navidad de1494 marzipanes, citronat, cara basat, melrosada, sucre rosat, cor de junch, dtilesy otras golosinas: el ilustrsimo prncipe y las ilustres infantas, nuestras muy carasy muy amadas hijas, se han mucho holgado en las conservas, y vos han echado milbendiciones... 16

    15. Adems de la abundante literatura sobre caceras y cinegtica hay algunos estudios sobreoficios, entre ellos J. Torres Fontes, "El Halconero y los halcones de Juan II de Castilla", Murgetana, 15(1961), 9-20.

    16. M. Ballesteros Gaibrois, Valencia y los Reyes Catlicos, 1429-1493. Valencia, 1943,2 vol.

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  • La casa real en la Baja Edad Media

    A veces, los reyes habrn mantenido alquimistas en su cmara, pero de estoapenas tenemos noticias. Isabel I dispona de uno en 1502 para el descobrir de losmineros de plata e otros metales en Castilla.

    5. La salud y el recreo espiritual del rey slo era cuidado directo del camareroen algunos actos secundarios o eventuales. Me referir aqu a los de tipo religiosoy no a otras aficiones aunque cabe recordar que, por ejemplo, era el camarero quienfacilitaba dinero al rey cuando ste quera jugar. Tena que proporcionarle tambinel dinero para la ofrenda que entregaba en misa, y para las diversas limosnas, enespecial las reglamentadas en Jueves y Viernes Santo, es decir que el Limosneroregio vena a depender de l' ''. Adems preparaba la ceremonia de lavado de piespor el rey a 13 pobres el da de Jueves Santo, y la llevaba a cabo si el monarca nopoda. Y se cuidaba de que se dijera misa en la cmara del rey si ste se encontrabaenfermo, y, en general, de la custodia de los ornamentos de la capilla.

    La Capilla Real parece que dependi de la Cancillera as es en el Aragndel siglo XIV, sin duda por la procedencia eclesistica de sus miembros, y en Castilla,a fines del siglo XV, an perciba derechos sobre la expedicin de ttulos honorficos,nobiliarios y de dignidades diversas. Pero su funcionamiento cotidiano est muyvinculado al de la cmara en casi todos los aspectos. Un capelln mayor a su frente,ayudado por otros capellanes, dispona todo lo relativo al culto, en especial la misadiaria. Los mozos y reposteros de capilla llevaban a cabo la preparacin materialcon los ornamentos y piezas que retiraban de la cmara y devolvan diariamentepara asegurar su buen cuidado ya que se trataba de piezas de orfebrera, tejidos,cojines, doseles, tapices y paramentos, ornamentos y vestiduras litrgicas de altovalor. Enrique IV tena una "capilla rica" y otra "de continuo", para evitar el usoexcesivo de las mejores piezas, mientras que Jaime II de Mallorca dispona de variosconjuntos o capillas para utilizar segn las pocas del ario.

    El personal de la capilla era abundante. En tiempos de Isabel I los capellanespasan de 36 en 1489 a 76 en 1504 pero cabe suponer que muchos de aquellos nombra-mientos no implicaban un servicio efectivo o continuo en la casa del rey. Lo mismosucede con los confesores reales menos numerosos, y, seguramente, con los clrigosde la limosnera. Pero los mozos de capilla aumentaron de 14 a 35, y stos s queeran personal presente".

    Un resultado marginal pero interesante del funcionamiento de la Capilla fueel establecimiento de una cofrada asistencial y hospitalaria para los miembros dela casa real, lo que sin duda vena a cubrir necesidades en momentos difciles. Existaen Aragn desde finales del siglo XIV, por lo que parece, pero en Castilla la introdujoFernando el Catlico.

    Las aficiones musicales regias se satisfacan tambin gracias a la Capilla, encombinacin con los ministriles y msicos que servan en la cmara, pues los

    17. E. Benito Ruano, El libro del Limosnero de Isabel la Catlica, Madrid, 1989.18. J. M. Nieto Soria, "La Capilla Real castellano-leonesa en el siglo XV: constituciones, nombramientos

    y quitaciones", Archivos Leoneses, 85-86 (1989), 7-54. J. Garca Oro, Las constituciones de los ReyesCatlicos para la Capilla Real de Espaa, Roma, 1985.

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    trompetas, tambores y atabaleros tenan tambin otras funciones, en especial la deanunciar presencias pblicas del monarca, actos solemnes de la Corte o celebracinde fiestas mayores. Las noticias disponibles son casi todas del siglo XV, lo quecorresponde posiblemente, a la mayor importancia que alcanz aquella actividad:Isabel 1 cont con de 10 a 21 cantores y Fernando V con 14, que aumentan hasta 41en 1515, dirigidos por un maestro de capilla. Adems, organistas (de rganos,clavicordios, clavecmbanos), taedores y ministriles (de lad, vihuela, chirimas,sacabuches y tamborinos, flautas). El gusto musical intenso fue caracterstico delos Trastmara del siglo XV y culmin, seguramente, en el prncipe don Juan, segntestimonio de Fernndez de Oviedo 19.

    6. El vestuario regio deba ser sobrium et honestum, segn las ordenanzas deJaime II, que prescriben la confeccin de vestidos con ocasin de las cuatro grandesfiestas anuales (Pascua, Pentecosts, Navidad y Epifana). Enrique IV, por su parte,empleaba sastres y zapateros del pas, a menudo de la ciudad de Segovia, y era bastantems sobrio en estas cuestiones que su hermana y sucesora Isabel. El hijo de sta,el prncipe Juan, tena de nio tendencia a conservar sus vestidos algo ms de loque convena para su imagen de munificencia, hasta que la reina dispuso el repartoanual entre sus pajes y criados, como era costumbre, porque, deca, los prncipesno han de ser ropavejeros y deben saber dar y gratificar a los que le aman y sirven.

    El servicio y atencin al vestuario y armas regios, a la ropa de cama, al ornamentode la cmara y salas del consejo y de audiencia corra a cargo de personal dependientedel camarero, que cuidaba de ropas, cortinas, cojines, alfombras, paramentos, bancales,tapices, doseles, armas, recipientes, vajilla y otros enseres, y dispona su uso porel rey, segn unos rituales de los que dependa la secuencia de su vida cotidianao, en otras ocasiones, la manera de celebrarse los actos solemnes y pblicos.

    El personal estaba especializado por funciones. Haba mozos de cmara para laropa, las armas y los paos o tapices segn la triple distincin que observamos enlas cuentas de Enrique IV; uno especial para el retrete o estancia ms privada, enla que, por ejemplo, el prncipe don Juan conservaba los objetos de uso ms continuoo apreciado y efectuaba sus almuerzos privados; otro para el bacn y silla o sanitario.Trabajaban en la cmara habitualmente una lavandera y una costurera. Haba tambindiversos tipos de reposteros a cargo de las camas, los estrados, la plata de la vajilla(es el argentero aragons) y el servicio de mesa. Un joyero al menos de la reinay un cerero mayor o repostero de la cera, que reciba importante dotacin econmicapara atender a los gastos de iluminacin. Un armero y un espadero cuidaban la cmarade las armas que vino a ser el germen de la futura Armera Real, y tenan a puntoel armamento, tanto el que se pona junto al lecho regio cada noche como el queera preciso en ocasiones especiales: en 1462, por ejemplo, hubo que ensangostarvarias corazas que Enrique IV no utilizaba desde haca aos y que precisaba parasu campaa en la frontera de Aragn. Uno o varios barrenderos formaban el escalnms humilde del servicio. Y, desde luego, un escribano de la cmara que llevabala cuenta de gastos, los libros de inventario y, junto con el personal responsable,

    19. Noticias y actualizacin bibliogrfica en R. Domnguez Casas, op. cit..

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  • La casa real en la Baja Edad Media

    el control del contenido de las arcas numeradas donde se guardaban las ropas, armasy otros objetos. El escribano era el segundo oficio en importancia, tras el camarero.

    7. Un servicio importante vinculado a la cmara era el encargado de cuidarlos desplazamientos regios y los alojamientos del monarca y su casa durante losviajes. Corra a cargo del Aposentador Mayor, llamado Posadero en Las Partidas,que preceda a la casa y corte en los viajes, acompaado por algn alguacil. A finesdel siglo XV, comparta sus funciones en Castilla con varios mariscales, aunquestos actuaban ms bien en los trabajos de alojamiento de tropas. En Aragn elequivalente era el Folrerius o Furrier, que adems provea a la cmara de lea yde plantas verdes y pajas para enramar o cubrir los suelos de tierra.

    Por el contrario, los servicios de correos y mensajeras se encomendaban tantoa correos como a personas diversas de la cmara no especializadas en ellos, segnlas circunstancias, aunque a fines del siglo XV haba ya un Correo Mayor paraorganizarlos, as como un Pregonero Mayor para atender a otra forma de comunicacinmuy frecuente.

    8. No termina as la relacin de oficios vinculados a la cmara regia. Reyesde Armas 2 y caballero tenedor del Guin Real eran oficios de aparato, destinadosa exaltar al rey y al reino por va herldica en todos los acontecimientos solemnes.En el extremo contrario, las nodrizas, amas, ayos y maestros de las reales personasatendan aspectos fundamentales que requeran intimidad y confianza mantenidafrecuentemente a lo largo de toda la vida.

    Haba en la casa real esclavos privados de los reyes, escasos pero apreciadospor sus habilidades: barrenderos, costureras, lavanderas, confiteras, etc. Y comenzabana aparecer bufones y enanos: Enrique IV tena en 1462 un "loco", y una de las infantashija de los Reyes Catlicos, una enana.

    9. Sin embargo, tenan mucha mayor importancia para el acompaamiento regioy para asegurar diversos servicios los grupos de pajes, donceles, damas y continosllamados as por su disponibilidad continua que vivan en la casa real. Era antiguay estaba extendida la costumbre de que hijos de nobles se criaran en casa del reydurante su adolescencia y juventud: en la de Pedro IV haba, en 1356, 110 de diversasfamilias aragonesas, catalanas y valencianas. En Castilla aquel uso se desdobl endos: por una parte haba pajes y criados del rey, nobles o no, y por otra donceles,siempre de condicin noble, que llegaron a tener un encuadramiento militar a lasrdenes del Alcaide de los Donceles, oficio creado tal vez por Alfonso XI en tornoa 1340, segn Salazar y Mendoza. En todos los casos, aqullos eran medios eficacesde establecer una red muy fuerte de clientelas y fidelidades personales en torno ala persona del rey

    La institucin de los continos parece propia de Castilla en tiempo de los ReyesCatlicos, y se diferencia bastante de las que acabo de mencionar aunque corresponda almismo orden de realidades. Eran en torno a un centenar, procedentes de familias hidal-gas del reino, en general. Tenan salario o quitacin fija y se les empleaba en diversosmenesteres poltico-administrativos segn la voluntad regia, de la que eran agentes

    20. A. de Ceballos Escalera y Gila, Heraldos y Reyes de Armas en la Corte de Espaa, Madrid, 1993.

    [15] 341

  • MIGUEL-NGEL LADERO QUESADA

    personales y directos. El contino es, por lo tanto, un oficio muy singular y caractersticode aquel sistema de organizacin del poder poltico, desarrollado en torno a la ilimi-tacin de la soberana regia, y un oficio, conviene aadir, muy eficaz para ayudaral cumplimiento efectivo de sus rdenes. Algunos estaban sujetos a disciplina militarpodan formar una capitanapero, desde luego, en tiempo de los Reyes Catlicosla mayora se dedicaban a las ms variadas tareas de administracin del poder.

    Las damas de compaa de las reinas formaban otro grupo que hemos de teneren cuenta, sobre todo cuando la reina, como suceda con Isabel I, era titular y ejercapersonalmente el poder. El nmero y coste de aquel grupo de personas aument muchoa partir de 1493, coincidiendo con el mayor fasto y aparato cortesanos, pues llegarana ser entre cincuenta y cien, aunque no todas ejercieran en la cmara con misionesque, en buena medida, duplicaran a las de los diversos mozos y reposteros, porrazones fcilmente comprensibles.

    * * *

    Tales son los marcos institucionales y las costumbres ms destacadas que servanpara organizar las casas reales en la Edad Media tarda. En ellas desarrollaban elmonarca, sus familiares y acompaantes, la mayor parte de su vida segn prescrip-ciones reglamentadas con minuciosidad en muchas ocasiones pero que dejaran lugarpara actos e iniciativas espontneas tanto cotidianas, del despertar a la noche, comocon ocasin de fiestas, caceras o viajes. Entrar en este terreno nos llevara a exponerel detalle de lo ritual y de sus rupturas a travs de ejemplos, ancdotas y recuerdoscon nombres propios, color y movimiento lo que no es nuestro objeto actual.

    II. EL NMERO DE PERSONAS EN OFICIOS DE LA CASA REALY SU PAGO 1

    El nmero de personas que componan la Casa real era elevado, aunque noincluiremos en l a algunos nobles exilados o personas de la familia regia mantenidosen el seno de la casa del rey.

    De las ordinacions de Jaime II de Mallorca y Pedro IV de Argn se deducela cifra de 150 personas en el primer caso y 220 en el segundo debido al aumentodel personal de Cancillera y de los auxiliares del maestre racional. Pero la cifrallega a 500 personas en 1356 si se suman los pajes, nobles, eclesisticos y miembrosdel Consejo real residentes en la Corte.

    A finales del siglo XV, en Castilla, el personal de la Casa, cmara, capilla yotros oficios domsticos de Isabel I oscilaba entre 400 y 500 personas. No se cuentaen l, desde luego, el dedicado a funciones de Cancillera, Consejo Real, AudienciaReal y Contaduras, que ya tena estatutos propios e independientes.

    El personal de la casa del rey Fernando V, marido de Isabel, era algo menosnumeroso: me refiero al pagado con cargo a la Hacienda castellana porque el rey,al serlo tambin de Aragn, contaba con recursos de esta procedencia, aunque es

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  • La casa real en la Baja Edad Media

    evidente que no duplic el gasto; adems, Fernando conserv el equivalente a suasignacin castellana durante el tiempo en que abandon el reino 1506 y 1507a la llegada de su yerno Felipe I.

    El aumento de los gastos entre 1480 y 1504 pone de relieve el del poder realy el aparato que lo rodeaba. A los propios de las Casas reales hay que aadir el dinerode libre disposicin regia, administrado por Tesoreros reales, destinado a usos muydiversos pero que, en definitiva, formaba parte de la masa monetaria redistribuidadesde la Casa y Corte real al margen de otros canales institucionales. He aqu algunascifras, presentadas de la manera ms homognea posible, en moneda de cuentacastellana, que es maraved. Un ducado equivale a 375 maravedes 21.

    1480

    Oficios de la casa del rey 2.000.000Oficios de la casa de la reina 3.000.000Oficios de la casa del duque de Villahermosa (hermano rey) 2.000.000Mayordomo Andrs Cabrera (de la reina) 1.000.000Mayordomo Enrique Enrquez (del rey) 162.500Tesorero Ruy Lpez de Toledo (de la reina) 4.468.000Continos 6.000.0004 fsicos y un boticario 367.0005 aposentadores 135.000Amo, aya y nodriza del prncipe Juan 100.000Aya de la infanta Isabel 80.000Cantores, ministriles, che remas 266.000Correos (troteros y caminos) 37.850Dos reposteros (raciones) 26.000Un despensero 180.000Un camarero 60.000Mariscales 100.000Mariscal Alfonso de Valencia 300.000Un paje 9 480Un mozo de espuelas 26.000

    21. Datos tomados de M. A. Ladero Quesada, La Hacienda real de Castilla en el siglo XV, op. cit.

    [17] 343

  • MIGUEL-NGEL LADERO QUESADA

    1481

    La situacin es muy similar a la de 1480. Algunos gastos nuevos o desglosados :

    Despensa de la infanta Isabel 1.018.000Raciones de cuatro monteros 29.200Juan Rodrguez, panadero, su racin 10.000Alvar Gmez, camarero de la reina, su racin 30.000"El gallego", repostero, su racin 10.000Raciones de cuatro oficiales de cmara 27.500Pedro de Segovia, ministril, su racin 10.000(se indica el costo de estas raciones para mostrar algunos ejemplos de su valor)

    1482

    Oficios de la casa del rey

    2.000.000Oficios de la casa de la reina, prncipe Juan e infanta Juana 3.500.000Infanta Isabel 1.600.000Duque de Villahermosa 2.000.000Fsicos y boticarios 500.000Trompetas y ministriles

    600.000Aposentadores 170.000Continos, damas, dueas, amos, amas y oficiales delos reyes pagados por fray Hernando de Talavera 10.000.000

    1488

    Oficios de la casa del rey

    6.297.000

    Tesorero 2.000.000Despensero 1.780.600Caballerizo 576.000Acemilero 630.000Cerero 310.400Pago de raciones 1.000.000

    Oficios de la casa de la reina

    8.460.000

    Despensero 2.600.000Caballerizo 869.787Acemilero 1.400.213Cerero 590.000Pago de raciones 3.000.000

    344 [18]

  • La casa real en la Baja Edad Media

    Tesorero de la reina /sin el pago de las Guardas Reales! aproxim 7 000.000Casa del prncipe e infantas 6 895.000

    Tesorero 4 000.000Despensero 1 900.000Caballerizo 142.000Acemilero 123.000Cerero 330.000Ama del prncipe 100.000

    Despensa de la infanta Isabel 500.000Libre disposicin de la reina 1 000.000Fsicos y cirujanos 767.520Boticarios y medicinas 150.000Caminos 50.000Acemilera 100.000Siete aposentadores 210.000Un sastre 200.000Continos 6 500.000Limosnas 1 000.000

    Algunos gastos en los aos

    1490

    Oficios de la Casa del rey 8 000.000Oficios de la Casa de la reina 9 027.000Libre disposicin de la reina 1 000.000Casa del prncipe e infantas 8 848.000

    1491

    Tesorero de la reina /sin pago de Guardas Reales/ 7 040.000Tesorero del rey 1 500.000Libre disposicin de la reina 1 000.000

    1492

    Oficios de la Casa del rey 8 000.000Oficios de la Casa de la reina 9 527.000Oficios del prncipe 2 792.000Oficios de la princesa Isabel 1 200.000Tesorero de la reina 6 000.000

    [191 345

  • MIGUEL-NGEL LADERO QUESADA

    Tesorero del prncipe y las infantas 6.000.000

    Continos 7.000.000

    Otros gastos apenas experimentan variacin

    1493

    Oficios de la Casa del rey 8.000.000

    Tesorero 3.500.000Raciones de oficiales 1.000.000Despensero 2.000.000

    Caballeriza 540.000Acemilera 630.000Cera 330.000

    Oficios de la Casa de la reina 11.360.690

    Despensero 4.571.000Caballeriza 1.020.635Acemilera 1.459.465Cera 804.590Raciones de oficiales 3.500.000

    Oficios de la Casa del prncipe 3.400.000

    Tesorero del prncipe para gastos dela cmara del prncipe e infantas

    9.950.000Damas y mujeres de la Casa de la reina, vestuario

    2.300.000Oficiales y cantores de la reina, quitaciones 2.000.000Fsicos (6) y boticarios (4)

    665.000Aposentadores (7) 210.000

    1494

    Capellanes y cantores 1.465.000

    1496

    Oficios del rey 10.000.000Oficios de la reina 8.435.000Cmara de la reina 4.000.000Damas y mujeres de la reina

    3.000.000Oficiales, cantores y msica

    1.140.000Otros salarios de las guardas, cmara, damas y msica

    955.000

    346 [20]

  • La casa real en la Baja Edad Media

    "Para el seor prncipe" 20.000.000Otros oficiales de la reina y las infantas 2.565.000Tesorero Gonzalo de Baeza (infantas) 7.610.000Fsicos, boticarios y medicinas 620.000Aposentadores 210.000Maestresala 50.000Sastre 50.000Limosnas 1.540.000

    1500

    Oficios del rey 10.000.000Oficios de la reina 7.817.548Cmara de la reina (con damas, cantores, capellanes) 8.892.710

    1503

    Oficios del rey 10.000.000Oficios de la reina 7.200.000Damas de la reina 3.400.000Cmara de la reina 2.800.000Msicos de la reina 1.882.000

    En pocas palabras, el gasto de las Casas reales se ha multiplicado por dosentre 1480 y 1488, pasando de unos 20.5 millones a 41 millones (53.500 a 110.000ducados). Asciende a 46 47 millones en 1493 y 1496 (126.000 ducados) y alcanzasu mximo en este ario al pagarse aparte la Casa del prncipe Juan otros 20 millones.Luego, se estabiliza en torno a los 50 millones (135.000 ducados) aunque para 1500y 1503 slo hemos anotado algo ms de la mitad : los gastos de los oficios de lasCasas y otros de la Cmara de la reina, pero no los realizados mediante tesoreros,ni el pago a los continos, ni las limosnas. A pesar del aumento, de 54.000 ducadosen 1480 a ms de 135.000 en 1503, la Casa castellana de los Reyes Catlicos semantuvo en cifras de gasto bastante moderadas, que no superaron el 15 por 100 delos ingresos ordinarios. Tampoco fueron desmesuradas las inversiones y gastos enresidencias reales puesto que no se construy ninguna nueva sino que se aprovecharony reformaron las que ya existan aunque los reyes procedieron a numerosas mejorasen unos casos y aplicaron en otros la frmula mixta que aada una residencia reala un convento (vila, Guadalupe) n.

    22. F. Chueca Goitia, Casas reales en monasterios y conventos espaoles, Madrid, 1982. Y el detalladoestudio que realiza R. Domnguez Casas, op. cit. Tambin, M. T. Prez Higuera, Arquitectura mudjaren Castilla y Len, Valladolid, 1993, p. 80-120.

    [21] 347

  • MIGUEL-NGEL LADERO QUESADA

    III. EL PAPEL DE LA CORTE EN LA GESTIN Y REDISTRIBUCIN DELCONJUNTO DE LOS RECURSOS DE LA HACIENDA REGIA

    En Castilla, el rey y las instituciones que dependan directamente de l disponande la gestin del conjunto de la fiscalidad monrquica, pues no la comparta conlas Cortes y las municipalidades actuaban slo en algunos aspectos y como rganosgestores subordinados. Por otra parte, no haba ingresos de un 'patrimonio real'separado de otras fuentes de ingreso fiscales sino que todas se integraban bajo laforma de Hacienda de la monarqua. As, las intervenciones de la Corte iban muchoms all que en otros reinos donde s haba 'patrimonio real' separado o las Cortestenan a su cargo gran parte de la gestin de la fiscalidad pblica de la corona.Analizaremos estas intervenciones en dos fases, utilizando datos del siglo XV : elproceso de arrendamiento, en primer lugar y, en segundo, la capacidad para ordenary distribuir el gasto directamente en la Corte.

    La casi totalidad de las rentas de la monarqua, sobre todo las llamadas ordinariasse arrendaban en pblica subasta por perodos de uno a tres arios generalmente. Lasubasta tena lugar en el estrado de las rentas que se constitua a estos efectos enla Corte, presidido por los Contadores Mayores de Hacienda o, si as lo deseaba,por el Mayordomo Mayor, que cobraba derechos por aquella actividad mediantela cual poda, adems, ejercer un alto papel directivo y orientador de toda la polticahacendstica de la monarqua. Para los posibles arrendadores era, pues, muy necesariotener una buena red de relaciones establecida en la Corte del rey.

    La capacidad de ordenar y distribuir el gasto en y desde la Corte iba ms allde la disposicin de dinero para el funcionamiento de los oficios de la Casa real ypara los pagos encomendados a los tesoreros reales, que son las nicas cantidadesque hemos manejado hasta ahora. Haba gastos fijos o situados sobre los que nocaba intervencin, pero muchos otros se hacan mediante orden de pago o libranzaconcreta, y buena parte de ellos se haca efectiva en la Corte del rey. Podemoscomprobarlo en el siguiente esquema de tipos de gasto por libranza

    1.Para los oficios de la Casa del rey y su Cmara sola reservarse el 10 por 100del dinero procedente de las rentas arrendadas en la Corte, el primero que se cobraba.Reciba el nombre de diezmo de la cmara. Las raciones cobradas, en teora, diaria-mente por los servidores de oficios de la casa y cmara del rey solan librarse concargo al diezmo de la cmara pero ste poda ser insuficiente, por lo que muchas vecesaparecen como partidas de gasto aparte. En cualquier caso, las hacan efectivas delega-dos del mayordomo, del despensero y del camarero y haba un contador especialpara controlar la gestin que cobraba un 2 por 100 de todas las raciones comosalario propio.

    2.El o los tesoreros reales reciban cantidades para atender a gastos concretosy especficos, o para la libre disposicin del rey. Tambin se les sola dar libranzade estas cantidades a comienzos de ao

    3. Las quitaciones eran cantidades cobradas una o varias veces al ao poroficiales y empleados de la Corte y otros organismos pblicos de la monarqua decarcter no militar. Aqu slo hemos incluido las de los continos pero tambin solan

    348 [221

  • La casa real en la Baja Edad Media.

    cobrarse en la Corte las de los miembros del Consejo Real, la Cancillera y lasContaduras. No as las de los jueces de la Audiencia Real pues tena su sede fijaen Valladolid, mientras que la Corte segua siendo itinerante. No es raro el caso deoficiales de la Corte que cobran a la vez racin y quitacin.

    4. Por el contrario, los pagos de carcter militar (sueldos, acostamientos, tierras,tenencias, pagas y llevas a castillos reales) se hacan en el lugar donde estuvieranlas tropas o instalaciones correspondientes, a travs de sus propios tesoreros ypagadores, generalmente fuera de la Corte. Hay que tener en cuenta que estos gastosabsorban aproximadamente la mitad de los ingresos 'ordinarios' de la monarquay casi todos los 'extraordinarios', siempre en tiempo de los Reyes Catlicos.

    5. El rey dispona el pago, muy a menudo en la Corte, de mantenimientos yayudas de costa para atender a miembros de la familia real, personajes nobles delsquito real, altos nobles a veces refugiados polticos, o bien para sufragar algngasto concreto, o como simple merced.

    Otros gastos efectuados mediante libranza: limosnas, ddivas, ayudas para man-tener cotos de caza, para construir edificios religiosos, devoluciones de deudas, etc.

    Estos dos ltimos conceptos daban lugar con bastante frecuencia a entregasde dinero en la misma Corte del rey.

    El importe de las libranzas no siempre era recibido bien y puntualmente porsus beneficiarios. Para evitar este inconveniente los Reyes Catlicos pusieron a puntovarios procedimientos en la Corte mismacon diverso xito y duracinque aumen-taron su funcin como centro redistribuidor :

    1.Establecer tesoreras especiales para el pago de obligaciones concretas. Estastesoreras reciban directamente la cantidad de dinero correspondiente por parte delos arrendadores de rentas y, luego, procedan al pago de las libranzas. A veces sehaca cargo de esta tarea una persona de la mxima confianza regia, como fue elcaso de fray Hernando de Talavera en 1482 : recordemos que este monje jernimo,confesor de la reina, haba redactado tambin unas instrucciones o consejos sobrela manera de organizar la vida cotidiana en las casas regias y de la alta nobleza.

    2.Entre 1491 y 1494 se ensay el funcionamiento de una receptora o pagaduracentral, a cargo de una compaa de financieros que, a la vez, tena arrendadas muchasrentas reales, la formada por Luis de Alcal, Abraham Seneor y Rabi Mayr bautizadoscomo Fernn Prez y Fernn Nez Coronel en 1492. La compaa reciba grancantidad de dinero mediante libranzas, a menudo sobre rentas que ella misma tenaarrendadas, y luego proceda a pagar 'por tercios de ario', segn era norma, a losbeneficiarios de raciones, quitaciones, etc., sin merma alguna. Adems, era precisasu autorizacin previa para hacer libranzas sobre dinero que ella no manejaradirectamente. No sabemos bien porqu este sistema no dur ms all de 1494 aunque,seguramente, esto tiene que ver con el cambio de procedimientos de cobro de muchasrentas ordinarias, al ser sustituido el arrendamiento por la gestin a travs de losmunicipios dirigidos por los corregidores reales.

    3. Utilizar el crdito bancario permitiendo el funcionamiento en la Corte deun banco privado que atendiera los pagos anticipados de proveedores, los anticiposde dinero, los giros entre cuentas corrientes, etc., obteniendo los correspondientes

    [23] 349

  • MIGUEL-NGEL LADERO QUESADA

    mrgenes de beneficio. Conocemos los libros de contabilidad de un banquero deCorte, Ochoa Prez de Salinas, entre 1498 y 1500, pero es evidente que hubo otrosy que la apelacin al crdito bancario fue muy frecuente en la Corte castellana dela segunda mitad del siglo XV23.

    En Castilla, por lo tanto, la Corte segua siendo el principal centro de gestiny redistribucin de las finanzas regias a fines de la Edad Media, tanto en los aspectosms "privados" de la Casa y Cmara real como en los que se referan al ejerciciopblico de la jurisdiccin y el gobierno del reino. Por el contrario, en la Corona deAragn, los altos oficiales de la Corte real slo administraban una parte de losingresos, y los gastos correspondientes, los que correspondan al patrimonio real.A su frente estaba el Maestre Racional, oficio creado en 1283 y que en el siglo XVestaba dividido en tres para Aragn, Catalua y Valencia, ante el que rendan cuentala mayor parte de los oficiales de la monarqua, en especial los Bayles Generalesencargados de la gestin del patrimonio real en cada reino y el Tesorero general,que concentraba en la Corte el dinero del que poda disponer el rey efectivamente,una vez atendidos los pagos y gastos locales.

    Ahora bien, los recursos procedentes del patrimonio real disminuyeron muchoen los siglos XIV y XV, debido a sucesivas enajenaciones, deudas y mercedes, yel resto de los ingresos fiscales estaba bajo gestin y control de las Cortes, queconcedan los correspondientes subsidios y los administraban despus a travs desus comisiones permanentes o Diputaciones del General, tanto en Catalua comoen Valencia y Aragn. Aunque el destino poltico de aquellos ingresos era el acordadopor la monarqua, la Corte real no intervena en su gestin y redistribucin ".

    As ocurri que Fernando el Catlico cont mucho ms con los recursos deque dispona como rey de Castilla que con los de sus reinos patrimoniales de la Coronade Aragn. Cuando hubo de abandonar Castilla, en 1506, estableci con su yernoFelipe I un acuerdo en virtud del cual sigui percibiendo los 10.000.000 mrs. (26.667ducados) correspondientes a su Casa castellana, y conserv la administracin delos maestrazgos de las Ordenes Militares de Santiago, Calatrava y Alcntara, querentaban unos 130.000 ducados aunque muchos estaban ya consignados a diversosgastos, y tambin la mitad de los derechos y rentas procedentes de las Indias.Carecemos del trmino de comparacin necesario porque no se ha estudiado conqu dinero contaba la Casa aragonesa de Fernando el Catlico pero probablementesera una cantidad mucho menor.

    23. Libro mayor del "Banquero de Corte" de los Reyes Catlicos, Ochoa Prez de Salinas ( 1498-1500).Edic. de F. Ruiz Martn y A. Represa Rodrguez), Bilbao, 1980.

    24. Un anlisis de esta cuestin, en trminos generales, en M. A. Ladero Quesada, "El ejercicio delpoder real en la Corona de Aragn : instituciones e instrumentos de gobierno (siglos XIV y XV)", Enla Espaa Medieval, 17 (1994), 31-93.

    350 [24]