LAS GALLI:dAS Y SUS PRODUCTOS · II LAS GALLI:dAS Y SUS PRODUCTOS Cualquiera sabe yue por aves...

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II LAS GALLI:dAS Y SUS PRODUCTOS Cualquiera sabe yue por aves domésticas se entienden, geiieralmente, las gallinas, los patos, las ocas o gansos, los pavos de Indias y las pa- lomas. Domésticas son también las pintadas o gallinas de Guinea, los pavos reales, los cisnes y otras aves acuáticas, y ciertas especies de faisanes ; pero éstas suelen tenerse, más que como animales de producción, como decorativas u ornamentales, en jardines públicos o particulares. Este folleto va dedicado especialmente a la Ga- llinocultura, es decir, a la manifestación de la Avicultura más generalizada en Esgaña, habién- dose publicado ya tmo especial para la Colombi- cultura (Las palomas domésticas. Su cría y uti- lidades) y dejando para otro folleto lo que afecta a la crianza de pavos, patos y gansos. Las aves de corral, como todos los animales do- mésticos, sor; descendient^s de troncos salvajes,

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LAS GALLI:dAS Y SUS PRODUCTOS

Cualquiera sabe yue por aves domésticas seentienden, geiieralmente, las gallinas, los patos,las ocas o gansos, los pavos de Indias y las pa-lomas.

Domésticas son también las pintadas o gallinasde Guinea, los pavos reales, los cisnes y otrasaves acuáticas, y ciertas especies de faisanes ; peroéstas suelen tenerse, más que como animales deproducción, como decorativas u ornamentales, enjardines públicos o particulares.

Este folleto va dedicado especialmente a la Ga-llinocultura, es decir, a la manifestación de laAvicultura más generalizada en Esgaña, habién-dose publicado ya tmo especial para la Colombi-cultura (Las palomas domésticas. Su cría y uti-lidades) y dejando para otro folleto lo que afectaa la crianza de pavos, patos y gansos.

Las aves de corral, como todos los animales do-mésticos, sor; descendient^s de troncos salvajes,

--- T ^S --

Las t;allin<ts Ici tuvicr<iIT cn las cspccies Gallu.r

i^unkiz^a ^• Gcrlll+s Snnracrnli, ^luc• tu^lavía existencn las ^elvas a;i^itiia^ ^^ ^,ce^iuicas. I)e esas es-pecies sur^ieron, por la acci^a^ dcl ticmp^^, dc loscan^Y.Tios ^le clima, de los aliment^^s ^', en ;;cneral,del n^edio, subespecies de las ^^uc ríerivarun laslrriluitivas rn^as, en las que la manu dcl h^^mhrcl^gró ]ueg^T ^^htener z^nri^•dnd^^s yue sun ah^^ra st^b-

rn^o,r, aunquc por raias las tcn;;amns in^lebida-mentc.

l^^n las t;allinas son tantas. ^!uc n^ es posibleestablecer un catálo^o cntnpleto ^!e ellas, per^^sí han lx^dido clasificarse dc divc•rsas maneras,siencí^ la agrupación que m^is nos cnnviene tenerpresente, la utilitaria, porque c^m e^l'a quedan cla-sificaclas según lo^que de cada raza !^uede esperar-sc. Fsa clasificación es la si^uientc :

CT-ASTI'ICAC1Oti T?"fT1.l'I':11t1:1 I)I? I..\ti CALT.IN.1S

DOM ^ST I CAS

^ Recomen^lab]es pur su pos-

l:ú^^lii-as ......tura.

ldem I^or sus carnes.

12azas ^3c pn^- Razas de doble irtilidad.

ducto......... ^ P.ecomendahles por su pos-

Pocu rústica ĉ . tura.Idem por sus carnes.Razas de doUle utilídad.

Razas dc lujo^Dc reqular vulumcn.o de fanta-^sía .............^ Enauas.

Razas de pe-^^randes.wf edianas.jea .............1 r;nlnas,

l^;n las razas ríe productu se cstablccen distin-ciones por raz^ín cle su r^csli^i^larl, entenclienclo porrñ^as rústic^as aqucll;IS yue sc mucstran aetiv^s cntu^l^^^ lcis climas, amantes cle curretaar c^ ^^a;;^bun-^l^^ru• por los campus en busca cle su sut^^isten^ía,^;i^e reqttieren menr,s cuiclados, etc. ; en tAnto, a^^;as poco activas, se^lentarias ^^ yue se placen bien,hasia en abs^^lttta reclusi<^n, las a^;rupa ►nos bajhcl nomhrc de razas [^oi o rírsticas.

Aun por razcín cíe su volumcn y° cíe sú peso,pueden subclividirse en ru^as liyeras, rutias semi-^esddas y ra^as /^esadas; pcro cíesde el punto, dev^sta de su material utilida^l, basta ^lividira^s,^enrazas para li.^cE^^^^,c, ra^.as yarq carn^^ y^, razas quepuecíen adaptarsc a amhas cosas, pc^r lo ctial sclas titu}a^ razas de dohl^^ o de geyaeral ictilirla^d.

La gallina española en general pertenece al tipc^ligero meridional o mecíitcrráneo, dotado de granrusticidad y recomencíable por su postura, má ŝo menos abuncíante, per^, de huev^s grandes ^^, portanto, de primera calidacl. Ha sido tan bastardea-da y tan abandonada que, aparte de algunas razasque, más por qucreres de nios yue por cuidad^^sdel hombre, se maiituvieron^ puras, niiestra ga-llina comím y corriente es itna mcuolanza de tipc,sgue no permite hacer de clla una precisa descrili-ci6n.

k:17.^5 NACIONAI,T?S DEí'INID:IS

^obresale entre éstas, csa gallina, generalmentede plumaje negro, con cresta sencilla y bien den-tada, card roja. orejillas blancas y^ í^atas li^npir^s

^:^ phunas, que tanto abunda en la mcseta central,y especialmente en Castilla la :^'ueva, cn las IslasI^aleares y en Andalucía, a la que bien puede dar-se el nombre ^enc^ral de Ra^n esf^a^aola de cczyaroja, en sus variedades castcllana, andaluza y ba-lcar, cíistinguiéndula así de otra t;allina que en clextranjem se rnnoce tanibic^n con el nombre deF.s(^aTiola, perc^ yue ticne la cara hlanca, recubiertade un tejido carunculoso, como cl de los pavos, lacual, aun conservando las líneas del tipo español,uo existió nunca en España. (Véase pág. i4r.)

La española de cara roja tiene también varie-dad blanca y variedad gris-pizarra o azulada (sinduda producto de la unión de la variedad negracon la ólanca) ; pero ambas están mucho menosextendidas en el país que 1a variedad negra.

Tiene también 1;spaña otra rar.a bien definida ^la catalana del Prat, también de tipo ]igero, aun-que de mayor volumen que la española negra. Esmuy rústica, 2ran pbnedora de huevos, de buenpeso y algún tanto rosados, pero dotada de car-nes finas y abundantes, que colocan esta raza enel ^rupo de las de doble utilidad.

Cataluña tiene también otra raza bien definidade plumaje hlanco y pata azulada, tenida comoPrat blanca ; pero más localizada en la comarcadel Vallés que en ]a del Prat de Llabregat.

Aun hay otra raza, de creación moderna, conla que el autor, a base de la raza Prat y de ele-mentos ingleses y americanos, en igi6, obtuvo laraTa Paraíso, yue, aun siendo re ĉomendable coma

^'i^• 3.-Es^a6ola ne^ra de cara r^^}a mejorada.

Nig• 4.-^^spañola ne^ra de cara roja tipo curricnte.

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l^i^;. 5.-Catalana ^lel Ihat lcona^la.

punedora, ^ul,cra a la 1'rat cn rttanto a v^^ltunctt^^ tinura ^Ic sus ^arncs.

l^.n V^alcncia ;tLttn^fa la ^allina l,lattca it nc^.t-^t.tilu^ ;;cnuinrintcntc tu^•^lit^•rrtnc^t, yuc. lticn sclcr-ri^ma^la, lxulrísi c^tn,titttir utra raza, cuutu iw^lrían:Illll t^11^i11:11"SC ^^ll'{IS ll^'>, C(Hl l^iti 1'f'<ITCti,i^ ^f tl'^til-

ii;canas, dr ^ant;tntlcr, ^-un las kul^ias l.l^^^lian<ts,^lc Alava, ^• am I,is Crttalrinas ^lc c^^lur alrcr^liza^lu^^ hucvo ntuy r^^j^^, <tl^^un^l,tntcs cn cl 1'attatlí^<.

La^ ^lcmás ;;allina^ yuc sc vcn cn el ltaís, f'ri-tavinas (cun plun^as cn las }^atas), las ^lc Cincu^ledos, las ^^c Cuello pcla^l^t, l;i, l^cculrts y]as cle['atas r^^rtas, cn rc°ali^la^l n^t c^m^titu^^cn razas,sinct varic^lad^, hrudttci^las c^sl^unt^inrantente, pornnttaci^mcs natttrales en la ^allina indís;cna o porintrontisiún tlc ;an^,rres extrañas, ^^ en realidatl no^lche ni lr,ttrtr,c ^le rllas. l^aa; „allittas, cn stt

Fi^. 6.-Paraíso hlanca. Crcada por cl antc^r cn laF:,cucla Oficial y Suprriur Es^^añula clc _^cicultara ^^

(^ranja Yaraísu, clc _1rcn^> cic \1ar (li;ir.-el^ma).

may^uría <le escasa pruclttcciim, s^iti las yue <lrl,c-rían cliniinarse cic Ir>s cc,rrales cshañnlcs, sustitu-}^í^n^lc^las l^ur ^;alliilas clc ptn-a raza nar•ic,nalcs c,exlratijcras.

I^:ntrc cstas tíltinias hay cl^^s, la Lr^liurn, cluc,aUnqUe clc uri^;^en CUrul^cu, se Tienc rumn Tiurtc-anicricana, y la I^hc^dc lslancí, rtmcricana tamhirrt,l;is cualrs han lu^;rarlu ya estcnclcrsc tanlo cii i•1l^aís, quc t^icn ^uccl^ <lc^^irsc quc han twuaclr, r<trtacle naturaleza españr^la ; la primera en cuairiu aíttil l^or su postura )^ la se^;uucla en ronccpYc, dcraza cle doble tttilidad.

I.as (.)rl^in^;ton )^ las ^usscx in^,rlr,as, la; i ran-ccs^^s cle ]^averr^^lles, ric Ifuncl^ui y^ cie 11 7;ress^: ;l;ts nc^rtc^tmcricanas ^^,'^ancluttc ^^ Pl^^^iic^uth Rc>cl:,

-zo-

las belgas Campine y Malinas, y otras muy ^^e-lebradas como razas de producto, son todas ellasbien conocidas en .l^apaña ; pero es criterio gene-ral entre los buenos avicultores el de yue no to-marán nunca el arraigo yue 1^an tomado 1asl,eghorn y las Ilhode íslan^.

r^un cabe citár una raza holandesa, la 13arnc-^^elder, uo ha muchos años traída y ya bicn acli-matada en España, altamente recomendable pordar huevos muy grandez y cíe un color rojizo muysubido, con el que es fácil acreditar el huevo dentarca para ser vendido como fresco y primor,ya que es raza que los da de tal calor (fig. 57).

1)el grupo de razas de íujo se puede decir queen España son conocidas casi todas, pero son can-tados los que tienen afición a criarlas.

En cambio en algunas regiones, como en Valen-cia, Andalucía, Raleares y Norte de I?spaña abun-^lan los criadores de razas de pelea, por lo queen ellas hay afiĉ ión a las ri^ias de yallos, deportemuy antiguo y que tanto incremento tomó en Es-paña ^lurantc el siglo pasado. Entre las razas dceste último grupo España tiene también su razapropia, bien definida y digna cíe que figure cntrelas razas de gallinas cspañolas.

En el capítulo NI podrá verse siquiera sea lasilueta cle las razas más conocidas en 1?,spaña,limitándonos en este capítulo a intercalar la delas españolas y las extranjeras quc actualméntese ^onsideran como de mayor procíucción.

Fi^. ^.-I.e^horn. (;111u cn varieda^l rojo-dora^lu y fia-lliua en varie^lad hlanca. I:ec^^mendable e^^m^^ tr^^^ned^^ra.

P120llUCCOS ])I^, LAS C:^tLItiAS

La5 gallinas rin^en }^or st^s huev<^s ^^ p^,^- st^carnc clc consuiix^, tt^niendo como suLpro<luctus la

1'ig. 8,-R6otle lsland roja. I^crmosa raza recomcu^lablcci^mo ponedora y curno a^•e de eonsumo de carne : bun-

daute y fina.

l^lunia ^ cl rxrrcn^ent^^. ^^ ^^u[linu.-;u, utilirahl^runw abono.

La l;allina, r^,rnu t^.ulus lus ^u^imalcs dumésticus,c; una uiá^^uin;^ tran^f^>nna^lura ^ic la n^ateria nu-U'iti^^a y^ sr^l^rantc cn rl sustenimicnl^^ norinal ^l^^u vi^la, en 1>ru^luctus, talc5 cumr^ la liche cn l,isva^•as. la lana cn cl },^ana^lo l;inar. la rsirnc y^ };rasacn l^,s anin^silcs ^l^ cngordc, ]as energías y lastuerzas en cl y^^ana^lr^ dc lah^^ir y los huevos en las;;allinas.

l^aas r^iúyrai»us u;^i^nul^s, por tales tenidas cn"1,o^atecnia, se difere:^cian de ]as r.^i►quinas indus-triales en yuc, así crnno éstas tienen desgaste in-niediato y^ cada día pierden valor, la máquina ani-nial acuniula capital al mismo tiempo que produ-ce, cuando menos, hasta un cierto momento de suvida. Una pol1ita de seis meses que valga, porejemplo, seis pesetas, irá daudo huevos duranteel año, y a los dieciocho meses, vendicía como ga-llina, valdrá diez o doce, segírn su peso. El acier-to del avicultor, como cl del ganadero, est^i preci-samente er^ despreuderse del animal cuando suproducciún men{;ua y^ cuando ya su valor no pue-de aumentar.

I?1 huevo cle gallina es hoy en día artículo casrde prirnera necesidacl, no sólo como alimento.por sus nunierosas aplicaciones en el arte culina-rio, en repostería y en pastelería, sí que tambiénpor constituir materia necesaría en muchas indus-trias. rn todos los países se requieren enormes eincalculables cantidades cle huevos, yue, como sedíju en cl capítulo I, dan lugar a un comercio

cuy^^ muvin^icutu se cleva rt n^ás de un mill^ín ríet^^ncla^las to^los lus aiios, s^ílo cn huevu^ c;i cás-cara, p^^ryuc, a^lemá>, la iin^ortacicín y cxl,.^rta-ci^"^n ^Ic hucvos dcscascara^lus, enviados cn latas

^, cn polvu, ascicn^lcn a tinos i.Io milloncs ^le to-neladas tucl^^s lus años.

í^.l val^^r du esta mercancía, a razóu ^ie unasi.^^cx> docenas de huevns en t^^nelada, y a<h^iitieri-do el precio medio ^le i,so pesetas Por ducena, enlos países de origen, represcntan un valor de unos2.00o tnillones de pesetas.

Si son necesarios lus huevos, nu lo es menosla volatería, cuyo movimiento cotnercial en elmundo se calcula en ^nás de zoo millones de kilo-^ran^os anuales, cuyo valor, tan sólo a 5 pesetaskilo, sería dc unos i.ooo millones de l^^esetas.

I:ntre huevos y volatería las gallinas produci-rían, pues, en cuarenta países cuyo co^nercio enproductos avícolas es conocido, por valor de unos3.^^0o millones dc pesetas anuales ; pero nótesebien yuc en esta citra no va coinprendida la delos huevos y la volatcría producida y consumidaen cada país. De poderse contar el valor de esto,posiblemente la cifra se triplicaría.

Agr^.guese a esto el valor de la pluma y de lagallinaza y se verá lo que la crianza y la explo-tación de las ^allinas representa en el mundo.

En algunos países, como Norteamérica, dan lacifra más alta en sus estadísticas de produccibn.