Leccionario de las Exequias

8/10/2019 Leccionario de las Exequias

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Ritual de las Exequias

n

Seor,

t que conoces muy bien a cada ser humano

y usas de tu bondad para consolar a los afligidos

tambin conoces la fe de estos padres; ,

aydalos para que comprendan que este nio,

al cual lloran porque ha concluido su vida terrena

vive encomendado a tu divina misericordia. '

Por Cristo nuestro Seor.

~. Amn.

n

Seor, concede que estos hermanos nuestros

sean acompaados por la Virgen Mara,

la Madre de Dios que estuvo al pie de la cruz

junto a su Hijo moribundo:

que ella les obtenga el consuelo de la fe

y el premio de la Vida eterna.

Por Cristo nuestro Seor.

~. Amn.

LECCIONARIO

Lecturas del ntiguo Testamento

I

Lectura del Libro de Job

19, 1. 23-27a

que mi Redentor vive

Job respondi diciendo: Ah, si se escribie-

ran mis palabras y se las grabara en un monu-

mento Si con un punzn de hierro y plomo

fueran esculpidas en la roca para siempre Por-

que yo s que mi Redentor vive

y

que l, el ltimo

da, se alzar sobre el polvo. Despus con mi piel

l me cubrir de nuevo,

con mi carne ver a

Dios .

n

El texto entre ( ) puede omitirse por razones pastorales.

Lectura del Libro de la Sabidura

3, 1-9

Los recibi como el ofrecimiento de un holocausto

Las almas de los justos estn en las manos de

Dios, y no padecern ningn tormento. Los insen-

satos los tuvieron por definitivamente muertos;

consideraron una desgracia su salida de este

mundo, y vieron su partida de' entre nosotros co-

mo una completa destruccin. Pero ellos gozan de

la felicidad. A juicio de los hombres, sufrieron

muchos castigos, pero ellos tenan toda su espe-

ranza puesta en la vida eterna. Por una breve

correccin recibieron una larga recompensa, por-


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que Dios los puso a prueba

y

los encontr

dignos de l.

(El da de su visita se inflamarn, se propa-

garn como chispas en rastrojo. Juzgarn a las

naciones

y

dominarn a los pueblos

y

sobre ellos

reinar el Seor eternamente.) Los que confan

en el Seor conocern la verdad

y

sus fieles

estarn junto a l en el amor. Porque la gracia

y la misericordia son para sus elegidos.

Adecuada para las exequias de nios bautizados y no

bautizados'.

Lectura del libro de la Sabidura 4, 7-15

Edad provecta, vida inmaculada

El justo, aunque muera prematuramente, ten-

dr descanso; la vejez ~enerable no son los mu-

chos das, ni se mide por el nmero de aos;

canas del hombre son la prudencia, y edad avan-

zada, una vida sin tacha. '

Agrad a Dios

y

Dios lo am; viva entre peca-

dores,

y

Dios se lo llev; lo arrebat para que la

malicia no pervirtiera su inteligencia, para que

el engao no sedujera su alma; la fascinacin del

vicio .ensombrece la virtud, el vrtigo de la pasin

pervierte una mente sin malicia.

Maduro en pocos aos cumpli mucho tiem-

po; como su alma era agradable a Dios, se dio

prisa en salir de la maldad; la gente lo ve y no lo

comprende, no se da cuenta de esto:, que Dios

quiere a sus elegidos, se apiada de ellos y mira

por sus santos.

Leccionario

989

IV

Adecuada para las exequias de nios bautizados

y

no bau-

tizados, omitiendo, en este ltimo caso, el texto entre ( ).

Lectura del Libro de Isaas

25, 6a. 7-9

El Seor acabar con la muerte para siempre

El Seor del universo ofrecer en esta Mon-

taa a todos los pueblos un banquete con man-

jares sustanciosos, una fiesta con vinos excelen-

tes. El quitar en esta Montaa el velo que cubre

a todos los pueblos, el sudario que envuelve a

todas las naciones. Y destruir la muerte para

siempre. El Seor secar las lgrimas de todos

los rostros

y

borrar en toda la tierra la igno-

minia de su Pueblo, porque as lo ha prometido.

Aquel da se dir: Aqu est nuestro Dios

de quien esperbamos la salvacin. Regocijmo-

nos

y

llenmonos -de alegra, porque

NOS

ha sal-

vado

.)

V

Adecuada tambin para las exequias de nios bautizados

, y no bautizados, omitiendo el texto entre ( ).

Lectura del Libro de las Lamentaciones 3,

17:26

~

Es bueno esperar la salvacin de Dios en silencio

(Mi alma est alejada de la paz, 'he olvidado

lo que es dicha. Dije: Ha fenecido mi vigor, y

la esperanza que me vena del Seor Recordar

mi miseria

y

vida errante es ajenjo

y

amargor.

Recuerda,

s,

recuerda

y

se hunde en m mi alma.

Esto revolver en mi corazn, por ello esperar.)


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El amor del Seor no se ha acabado, ni se

ha agotado su ternura; cada maana se renueva:

[Grande es su fidelidad Mi porcin es el Seor,

-dice mi alma- por eso en l esperar

Bueno es el Seor para el que en l espera,

para el alma que lo busca. Bueno es esperar en

silencio la salvacin del Seor. Bueno es para el

hombre soportar el yugo desde su juventud.

VI

Lectura del segundo Libro

de los Macabeos

12, 43-46

Es bueno y piadoso pensar en la resurreccin

En aquellos das, Judas Macabeo hizo una

colecta entre sus soldados y envi a Jerusaln

unas dos mil monedas de plata, para ofrecer un

sacrificio por los pecados de los que haban muer-

to. Este hermoso y noble gesto fue inspirado por

su fe en la resurreccin. Porque si no hubiera

credo que los soldados cados en la batalla iban

a resucitar, habra juzgado intil y superfluo

orar por los difuntos. Pero l pensaba en la

magnfica recompensa que est reservada a los

que mueren piadosamente; y con este pensa-

miento santo

y

piadoso, hizo ofrecer un sacrificio

de expiacin por los difuntos, para que fueran

liberados de su pecado.

Leccionario

991

Lecturas

del

Nuevo Testamento

I

.El texto entre (

rales.

puede omitirse por motivos pasto-

Lectura del Libro de los Hechos de los Apstoles

10, 34-43

El fue constituido por Dios,

Juez de los vivos y de 10 muertos

En aquellos das, Pedro, tomando la palabra,

dijo: Verdaderamente, comprendo que Dios po

hace acepcin de personas, y que en cualquier

nacin, todo el que le teme

y

practica la justicia

es agradable a l. El envi su Palabra .a~pueblo

de Israel, anuncindoles la Buena Noticia de la

paz por medio de Jesucristo, que es el Se~or de

todos. (Vosotros ya sabis qu ha ocurndo en

toda Judea comenzando por Galilea, despus del

bautismo ~ue predicaba Juan: cmo Dios ungi

a Jess de Nazaret, con el Espritu Santo, llenn-

dolo de poder. El pas haciendo el bien y curando

a todos los que

.haban

cado en poder del demo-

nio, porque Dios estaba con l. Nosotros somos

testigos de' todo lo que hizo en el pas de los

judos y en Jerusaln. Y ellos lo ~ataron, s~s:

pendindolo de un patbulo. Pero DIOs-lo~esuclto

*1 tercer da y le concedi que. se mam~estara,

no a todo' el pueblo, sino a testigos elegidos de

antemano por Dios: a nosotros que comimos

y

bebimos con l, despus de su resurreccin.)

y

l nos envi a predicar al pueblo, y a atesti-

guar que l fue constituido por Dios Juez de los

vivos y de los muertos. Todos los profetas dan


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99

testimonio de l, declarando que los que creen

en l, reciben el perdn de los pecados, en virtud

de su Nombre .

n

Lectura de la Carta del Apstol san Pablo

a los cristianos de Roma 5, 5-11

Ahora que estamos justificados por su sangre,

con mayor razn seremos librados por l

de la ira de Dios

Hermanos: La esperanza Ha quedar defrau-

dada, porque el amor de Dios ha sido derramado

.en nuestros corazones 'por el Espritu Santo, que

nos ha sido dado. EH 'efecto, cuando todava

ramos dbiles, Cristo, en el tiempo sealado,

muri por los pecadores. Difcilmente se encuen-

tra alguien que d su vida por un hombre justo;

tal vez alguno sea capaz de morir por un bien-

hechor. Pero la prueba de que Dios nos ama es

que Cristo muri p~.-r/nosotros cuando todava

ramos pecadores. Y ahora que estamos justifi-

cados por su Sangre, con mayor razn seremos

librados por l de la ira de Dios. Porque si siendo

enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la

muerte de 'su Hijo, mucho ms ahora que esta-

mas reconciliados, seremos salvados por su vida.

Nosotros nos gloriamos en Dios' por medio de

nuestro Seor Jesucristo, por quien desde ahora

hemos recibido' la' reconciliacin.

Leccionario



As

como el pecado rein produciendo la muerte,

, tambin la gracia reinar,

por medio de la justicia

. Hermanos: Si por la falta de uno solo remo

la muerte, mucho ms aquellos que han recibido

abundantemente la gracia y el don de la justicia

~vivirn y reinarn por un solo hombre, Jesu-

cristo.

Por consiguiente, as como la falta de uno

solo caus

1 1

condenacin de todos, tambin el

-,acto de justicia de uno solo producir para todos

los hombres 1S t justificacin que conduce a la

Vida. Y de la misma manera. que' por la dese-

bediencia de un solo hombre, todos se convirtie-

ron en pecadores, tambin por la obediencia de

uno solo, todos se convertirn en justos.

Es verdad que la Ley entr para que se mul-

tiplicaran las transgresiones, pero donde abund

el pecado,

sobreabund

la gracia. Porque as

como el pecado rein produciendo la muerte,

tambin la gracia reinar por medio de la justi-

-cia para la Vida eterna, po~ Jesucristo, nuestro

Seor.


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IV

Adecuada tambin para las exequias de nios bautizados,

excepto el texto entre ( ).



Vivimos una Vida nueva

Hermanos: .No sabis vosotros que todos los

que fuimos bautizados en Cristo Jess, nos hemos

sumergido en su muerte? Por el Bautismo fui-

mos sepultados con l en la muerte, para que as

como Cristo resucit por la gloria del Padre,

tambin nosotros llevemos una Vida nueva.

(Porque si nos hemos identificado con Cristo

por una muerte semejante a la suya, tambin nos

identificaremos con l en la resurreccin. Com-

prendmoslo: nuestro hombre viejo ha sido cru-

cificado con l, para que fuera destruido este

cuerpo de pecado, y as dejramos de ser esclavos

del pecado. Porque el que est muerto, no debe

nada al pecado.) .

Pero si hemos muerto con Cristo, creemos

que tambin viviremos con l. Sabemos que

Cristo despus de resucitar, no muere ms, por-:

que la muerte ya no tiene poder sobre l.

V



Anhelamos la redencin de nuestro cuerpo

Hermanos: Todos los que son conducidos por

el Espritu de Dios, son hijos de Dios. Y vosotros

no habis recibido un espritu de esclvos para

Leccionario

995

.

volver a caer en el temor, sino el espritu de

hijos adoptivos que nos hace llamar a Dios

Abba , es decir, Padre. El mismo Espritu

se une

a

nuestro espritu para dar testimonio

de que somos hijos de Dios. Y si somos hijos,

ta;;bin somos herederos de Dios y coherederos

de Cristo, porque sufrimos con l para ser glori-

ficadoscon l.

Pienso que los sufrimientos del tiempo pre-

sente no pueden compararse con la gloria futura

que se revelar en nosotros. En efecto, toda la

creacin

espera ansiosamente esta revelacin de

los hijos de Dios. Ella qued sujeta a la vanidad,

. no voluntariamente, sino por causa de quien la

someti, pero conservando una esperanza. Por-

que tambin la creacin ser liberada de la escla-

vitud de la corrupcin para participar de la

gloriosa libertad de los hijos de Dios. Sabemos

que la creacin entera, hasta el presente, gime

y sufre dolores de parto. Y no slo ella: tambin

nosotros, que poseemos las primicias del Esp-

ritu, gemimos interiormente anhelando que se

realice 'la redencin de nuestro cuerpo.

~

VI

Lectura de 'la Carta del Apstol san Pablo

~ los cristianos de Roma' 8, 31b-35. 37-39

CiUin podr separamos del amor de Cristo?

Hermanos: Si Dios est con nosotros,quin

estar contra nosotros? El que no perdon a su

propio Hijo, sino que lo entreg por todos noso-

tros, no nos conceder con l toda clase de

favores? Quin podr acusar a los elegidos de


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996 Ritual de .}asExequias

Dios? Dios es el que justifica. Quin se atrever

a condenarlos? Ser acaso Jesucristo, el que

muri, ms an, el que resucit, y est a la de-

recha de Dios e intercede por nosotros?

.Quin podr entonces separarnos del amor

de Cristo ?Las tribulaciones, las angustias la

persecucin, el hambre, la desnudez, los peligros,

la espada?

Porque tengo la certeza de que ni la muerte

ni la vida, ni los ngeles ni los principados, ni

lo presente ni lo futuro, ni los poderes espiritua-

les, ni lo alto ni lo profundo, ni ninguna otra

criatura podr separarnos jams del amor de

Dios, manifestado en Cristo Jess, nuestro Seor.

VII

Adecuada para las exequias de nios bautizados, excepto

el texto entre ( ).


a los cristianos de Roma 14, 7-9. 10b-12

Tanto en la vida como en la muerte

somos del Seor

. Hermanos: Ninguno de nosotros vive para s,

ni tampoco muere para s. Si vivimos, vivimos

para el Seor: tanto en la vida como en la muer-

te, pertenecemos al Seor. Porque Cristo muri

y volvi a la vida para .ser Seor de los vivos

y de los muertos.

(Todos, en efecto, tendremos que comparecer

ante el Tribunal de Dios, como est escrito:

Juro que toda rodilla se doblar ante m, y

toda lengua dar gloria a Dios

;

dice el Seor.

Por tanto, cada uno de nosotros tendr que ren-

dir cuenta de s mismo a Dios.)

Leccionario

997

VIII

Adecuada tambin para las exequias de nios bautiza-

dos, excepto el texto entre ( ).

Lectura de la primera Carta del Apstol san Pablo

a los gistianos de Corinto 15, 20-24a. 25-28

Todos revivirn en Cristo

Hermanos: Cristo resucit de entre los muer-

tos, el primero de todos. Porque la muerte vino

al mundo por medio de un hombre, y tambin

por medio de un hombre viene la resurreccin.

En efecto, as como todos mueren en Adn, as

tambin, todos revivirn en Cristo, cada uno

segn el orden que le corresponde: Cristo, el

primero de todos, luego, aquellos que estn uni-

dos a l en el momento de su Venida.

(Enseguida vendr el fin, cuando Cristo en-

tregue el Reino a Dios, el Padre. Porque es nece-

sario que Cristo reine hasta que ponga a todos

los enemigos debajo de sus pies. El ltimo ene-

migo que ser vencido es la muerte, ya que Dios

todo' lo someti bajo sus pies. Pero cuando l

diga:

Todo est sometido

ser evidentemente

a excepcin de aquel que le ha sometido todas

las cosas. Y cuando el universo entero le sea

sometido, el mismo Hijo se someter tambin

\ a aquel que le someti todas las cosas, a fin de

.qu-eDios sea todo en todos.)

~L~~ ~~__~~__ ___ ~ ~~


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i

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Ritual de olasExequias

IX


a los cristianos de Corinto 15, 51-57

La muerte ha sido vencida

Hermanos: Os vaya revelar un misterio: no

todos vamos a morir pero todos seremos trans-

formados. En un instante, en un abrir y cerrar '

de ojos, cuando suene la trompeta final, .Ios

muertos resucitarn incorruptibles y nosotros

seremos transformados. Lo que es corruptible

debe revestirse de la incorruptibilidad y lo que

es 'mortal debe revestirse de la inmortalidad.

Cuando lo que es corruptible se revista de la

incorruptibilidad y lo que es mortal se revista de

la inmortalidad, entonces se cumplir la Palabra

de la. Escritura: La muerte ha sido vencida

Dnde est muerte, tu victoria?

Dnde est tu

aguijn?

.

Porque lo que provoca la muerte es

el pecado y lo que da fuerza al pecado es la Ley.

Demos gracias a Dios, que nos ha dado la.

victoria por nuestro Seor Jesucristo.

X

Lectura de la segunda Carta del Apstol san Pablo

a los cristianos de Corinto 5,

1. 6-10

Tenemos una casa permanente en el cielo

Hermanos: Sabemos que si esta tienda de

campaa -nuestra morada terrenal=- es destrui-

da, tenemos una casa permanente en el cielo,

construida, no por el hombre, sino por Dios. Por

eso, nos sentimos plenamente seguros, sabiendo

que habitar en este cuerpo es vivir en el exilio,

Leccionario

lejos del Seor, porque nosotros caminamos en

la fe y todava no vemos claramente. S, n0S sen-

timos plenamente seguros y, por eso, preferimos

dejar este cuerpo para estar junto al Seor;

en definitiva, sea que vivamos en este cuerpo o

fuera de l, nuestro nico deseo es agradarle.

Porque todos debemos comparecer ante el

tribunal de Cristo, para que cada uno reciba, de

acuerdo con sus obras buenas o malas, lo que

, mereci durante su vida mortal.

XI


a los cristianos de Filipos 3,

20-21

El transformar el cuerpo

de nuestra humilde condicin

Hermanos: Nosotros somos ciudadanos del

cielo, y esperamos ardientemente que venga de

all como Salvador el Seor Jesucristo. El trans-

formar el cuerpo de nuestra humilde condicin

y lo har semejante a su cuerpo glorioso, con

el poder que tiene para poner todas las cosas

bajo su dominio.

\

XII

Adecuada tambin para las exequias de nios bautiza-

dos.


a los cristianos de Tesalnica 4, 13-18

Permaneceremos con el Seor para siempre

Hermanos: No queremos que vivis en la

ignorancia respecto de los que ya han muerto,


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1001

itual de las Exequias

para que no

estis

tristes como los dems, que

no tienen esperanza.

Porque

as como creemos

que Jess muri y resucit, as tambin creemos

que Dios. llevar con Jess a los que murieron

unidos a l.

Queremos decirosvalgo, fundados en la Pa-

Labra del Seor: los que vivamos, los que que-

demos cuando venga el Seor, no precederemos

a los que ya hayan muerto, Porque a la

seal

dada por la voz del Arcngel y al toque de 1:a

trompeta de Dios, el mismo Seor descender

del cielo. Entonces, primero resucitarn los que

murieron en Cristo. Despus, nosotros, los que

an vivamos, los que quedemos, seremos llevados

con ellos al Cielo, sobre las nubes, al encuentro

de Cristo, y as permaneceremos con el Seor

para siempre.

Consolaos mutuamente con estos pensamien-

tos.

XIII .

Lectura de la segunda Carta del Apstol san Pablo

a Timoteo 2, 8-13

Si hemos muerto con l, tambin viviremos

Acurdate de Jesucristo que resucit de entre

los muertos y es descendiente de David. Esta es

la Buena Noticia que yo predico, por la cual

sufro y estoy encadenado como un malhechor.

Pero la Palabra de Dios no est encadenada. Por

eso soporto estas pruebas por amor a los elegi-

dos, a fin de que ellos tambin alcancen la sal-

vacin que est en Cristo Jess y participen de

la gloria eterna.

Esta doctrina es digna de fe: 'Si hemos muerto

'con l, viviremo~ con l. Si somos constantes,

Leccionario

reinaremos con l. Si renegamos de l, l tambin

renegar de nosotros. Si somos infieles, l es

fiel, porque no puede renegar de s mismo ..

XIV

/

Lectura de la primera Carta

del Apstol san Juan

3, 1-2

Lo veremos tal-cual

es

Mirad cmo nos am el Padre: El quiso que

nos llamramos hijos de Dios, y lo somos real-

mente.Si el mundo no nos reconoce, es porque

no io ha reconocido a l. Queridos mos, desde

ahora somos hijos de Dios, y lo que seremos

no se ha manifestado todava. Sabemos que

cuando se m~nifieste, seremos semejantes a l,

porque lo veremos tal \cual es.

XV

\

Lectura de la primera Carta

del Apstol san JU:an

3, 14-16

Hemos pasado de la muerte

la Vida

porque amamos ti los hermanos

. .. . . : . . 1 ; .

Hermanos: .Nosotros sabemos que hemos pa-

sado de la muerte a la Vida, porque amamos a

-, nuestros hermanos. El que no ama permanece

en la .muerte. El que odia a su hermano es un .

homicida, y vosotros sabis que ningn. homi-

cida posee la Vida eterna. Nosotros hemos cono-

cido el amor, porque Jess entreg su vida por

nosotros.' Por eso, tambin: nosotros debemos

dar la vida por nuestros hermanos.


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XVI

Lectura del Libro del Apocalipsis

14, 13

Felices los que mueren en el Seor

Yo, Juan, o una voz que me deca desde el

cielo: Escribe: Felices los que mueren en el

Seor S -dice el Espritu- de ahora en ade-

lanteellos pueden descansar de sus fatigas, por-

que sus obras los acompaan ,

XVII

Lectura del Libro del Apocalipsis

20, 11-21, 1

Los muertos fueron juzgados segn sus obras

Yo, Juan, vi un gran trono blanco y al que

estaba sentado en l. Ante su presencia, el cielo

y la tierra desaparecieron sin dejar rastros. Y vi

a los que haban muerto, grandes y pequeos,

que estaban de pie, delante del trono. Fueron

abiertos los libros, y tambin fue abierto el Libro

de la Vida; y los que haban muerto fueron juz-

gados de acuerdo con el contenido de los libros

cada uno segn sus obras. '

El mar devolvi a los muertos que guardaba;

la Muerte y el Abismo hicieron lo mismo, y cada

uno fue juzgado segn sus obras. Entonces la

Muerte y el Abismo fueron arojados al estanque,

de fuego, que es la segunda muerte. Y los que

no estaban inscriptos en el Libro de 'la Vida

fueron arrojados al estanque de fuego.

Despus vi un cielo nuevo y una tierra nueva,

porque el primer cielo y la primera tierra desa-

parecieron, y el mar ya no existe ms.

Leccionario

1003

XVIII

Adecuada tambin para las exquias de nios bautizados,

excepto el texto entre ( ).

, Lectura del Libro del Apocalipsis

21, l-Sa. 6b-7

\

No habr ya muerte

Yo, Juan, vi un cielo nuevo y una tierra nueva,

(porque el primer cielo y la ~rimer~ tier:-a de~a-

parecieron, y el mar ya no existe mas.

VI

la

CIU

dad Santa, la nueva Jerusaln, que descenda del

cielo y vena de Dios, embellecida como una

novia preparada para recibir a su esposo.)

y

o

una voz potente que deca desde el trono: Esta

es la morada de Dios entre los hombres: l habi-

tar con ellos, ellos sern su Pueblo, y el mismo

Dios estar con ellos. Secar todas sus lgrimas,

y no habr ms muerte, ni pena, ni queja, ni

dolor, porque todo lo de antes pas ,

y el que estaba sentado en el trono dijo: Yo

hago todas las cosas. (Yo soy el Alfa y la Omega,

el Principio y el Fin. Al que tiene sed yo le dar

de beber gratuitamente de la fuente .del agua de

la vida. El Vencedor heredar estas cosas, Y yo

ser su Dios y l ser mi hijo

.)


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,1004


Salmos responsoriales

I

Adecuado tambin para las exequias de nios bautiza-

dos.

Salmo 22, 1-6)

;

Ant. El Seor es mi Pastor,

nada

m

puede faltar.

El Seor 'es mi pastor,

nada me puede faltar.

El 'me hace descansar en verdes praderas,

'me conduce a las aguas tranquilas

y 'repara mis fuerzas;

m e

gua por el recto sendero,

'por amor de su Nombre:

Aunque cruce por oscuras quebradas,

no temer ningn mal,

porque t ests conmigo;

tu .vara y tu bastn me infunden confianza.,

T preparas ante m una mesa,'

frente a mis enemigos;

unges con leo mi, cabeza

y mi copa rebosa.

Tu bondad y tu gracia me acompaan

a lo largo de mi vida;

y habitar en la casa del Seor,

por muy largo tiempo.

Leccionario

1005

1I

Para las exequias de nios no bautizados.

Salmo 24, 6-7bc 17-18. 20-21

Ant. A ti, Seor, el~vo mi alma.

Acurdate, Seor, de tu compasin y de tu amor,

porque son eternos.

Por tu bondad, Seor,

acurdate de m con misericordia.

Alivia las angustias de mi corazn

y scame de mis tribulaciones.

Mira mi afliccin y mis fatigas

y perdona todos mis pecados.

Protege mi vida y lbrame:

que no me avergence de haber confiado en ti;

que mi integridad' y mi rectitud me protejan,

porque yo espero en ti, Seor.

Salmo 26, 1. 4. 7 Y8b Y9a. 13-14

Ant. El Seor es mi luz y mi salvacin.

o

bien:

Contemplar la bondad del Seor

en la tierra de los vivientes.

El Seor es-mi luz y mi salvacin,

a quin temer?

El Seor es el baluarte de mi vida,

ante quin temblar?

Una sola cosa he pedido al Seor,

y esto es lo que quiero:


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1008


VI

Salmo 102, 8 Y 10. 13-14. 15-1.6.1'7-18

.Ant. El Seor es bondadoso y compasivo.

O bien:

El Seor salva a los justos.

El Seor es bondadoso y compasivo,

lento para el enojo y de gran misericordia;

no nos trata segn nuestros pecados

ni nos paga conforme a nuestras culpas.

Como un padre carioso con sus hijos,

as es carioso el Seor con sus fieles;

porque l conoce de qu estamos hechos,

sabe muy bien que no somos ms que polvo.

Los das del hombre son como la hierba:

l florece como

las flores del campo;

las roza el viento, y ya no existen ms,

ni el sitio donde estaban las ver otra vez.

Pero el amor del Seor permanece para siempre,

y su justicia llega hasta los hijos y los nietos

de los que le temen y observan su alianza,

de los que recuerdan sus preceptos y los cumplen.

VII

Salmo 142, 1-2. 5-6. 7ab y 8ab. 10

Ant. Seor, escucha mi oracin.

Seor, escucha mi oracin

atiende a mi plegaria;

respndeme, por tu fidelidad y tu justicia.

No llames a juicio a tu servidor,

porque ningn ser viviente

es justo en tu presencia.

Leccionario

1009

Me acuerdo de los tiempos pasados,

medito todas tus acciones;

considero la obra de tus manos

y extiendo mis brazos hacia ti:

r

suspiro por ti como tierra reseca.

L

. Respndeme pronto, Seor,

porque estoy sin aliento.

.Que yo experimente tu amor por la maana,

porque confo en ti.

Ensame a hacer tu voluntad,

porque t eres mi Dios.

Que tu espritu bondadoso me conduzca

por una tierra llana.

Aleluias

y

versculos antes

del

Evangelio

I

Adecuado para las exequias de nios bautizados.

~

Mt. 11, 25:

Yo te bendigo, Padre,

Seor del cielo y de la tierra,

porque revelaste los misterios del Reino

. a los pequeos.

II

Mt.

25, 34:

Venid, benditos de mi Padre, dice el Seor;

recibid la herencia del Reino

preparado para vosotros

desde la creacin del mundo.


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1010

Ritual de las E~equias

In.

3, 16:

Tanto am Dios al mundo

que le dio a su Hijo Unico;

todo el que cree en l tiene la Vida eterna.

Adecuado tambin para las exequias de nios bautiza-

dos.

In.

6, 39:

Esta es la voluntad de mi Padre

que no pierda nada de lo que

me

ha dado,

sino que lo resucite en el ltimo da.

v

In.

6, 40:

Esta es la voluntad de mi Padre

que todo el que cree en el Hijo,'

tenga la Vida eterna,

y yo lo resucitar en el ltimo da.

Jn 25a26: s-:

Yo soy la Resurreccin y la Vida, dice el Seor;

el que cree en m no morir jams.

Fil. 3, 20:

Somos ciudadanos del Cielo,

desde donde esperamos como Salvador

al Seor Jesucristo.

2 Tim. 2, 11-12a:

Si hemos muerto con Cristo, VIVIremos con l.

si nos mantenemos firmes, reinaremos con l. '

Leccionario

1011

IX

Apoc. 1, 5-6:

Jesucristo es el primognito de entre los muertos;

a

l la gloria

y

el imperio

r

los siglos' de los siglos. Amn.

X

Apoc.

14, 13:

Felices los que mueren en el Seor;

ellos pueden descansar de sus fatigas,

porque sus obras los acompaan.

vangelios

1

Lectura del santo Evangelio

segn san Mateo

5, 1-12a

Alegraos

y

regocijaos

porqU J vuestra recompensa ser grande en el cielo

En aquel tiempo: Al ver la multitud, Jess

subi a una montaa, se sent,

y

sus discpulos

se acercaron a l. Entonces tom la palabra y

comenz a ensearlesdiciendo:

Bienaventurados los que tienen alma de po-

.bres, porque a ellos les pertenece el Reino de

los Cielos.

Bienaventurados los pacientes, porque reci-

birn la tierra' en herencia.

Bienaventurados los afligidos, porque sern

consolados.

Bienaventurados los que tienen hambre y sed

de justicia, porque sern saciados.


14/20

1012


Bienaventurados los misericordiosos, porque

obtendrn misericordia.

Bienaventurados los que tienen un corazn

recto, porque vern a Dios.

Bienaventurados los que trabajan por la paz,

porque sern llamados hijos de Dios.

Bienaventurados los que son perseguidos por

practicar la justicia, porque a ellos les pertenece

el Reino de los Cielos.

Bienaventurados vosotros, cuando seis insul-

tados y perseguidos, y cuando se os calumnie en

toda forma a causa de m.

Alegraos y regocijaos entonces, porque ten-

dris una gran recompensa en el cielo.

II

Adecuada para las exequias de nios bautizados.


segn san Mateo 11, 25-30

Has ocultado estas cosas a los sabios,

y las has revelado a los pequeos

En esa oportunidad, Jess dijo: Te alabo,

Padre, Seor del cielo y de la tierra, por haber

ocultado estas cosas a los sabios y a los pruden-

tes, y haberlas ,revelado a los pequeos. S, Pa-

dre, porque sa fue tu voluntad. Todo me ha sido

dado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo sino

el Padre, as como nadie conoce al Padre sino el

Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.

Venid a m todos los que estis afligidos y

agobiados, y yo os aliviar. Cargad sobre vosotros

mi yugo y aprended de m, porque soy paciente

y humilde de corazn, y as encontraris alivio.

Porque mi yugo es suave y mi carga liviana.

1013

Leccionario



15/20

1014


I V


segn san Mateo

Venid, benditos de mi Padre

En aquel tiempo, dijo Jess a sus discpulos:

Cuando el Hijo del Hombre ,legue en su gloria

rodeado de todos sus

ngeles,

se sentar en su

trono glorioso. Todas las naciones sern reunidas

en su presencia, y l separar a unos de otros,

como el pastor separa a las ovejas de los cabritos,

y pondr a aqullos a su derecha y a stos a su

izquierda. Entonces el Rey dir a los que tenga

a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, y

recibid en herencia el Reino que os he preparado

desde el comienzo del mundo, porque tuve ham-

bre y me disteis de comer; tuve sed y me disteis

de beber; estaba de paso y me alojasteis, desnudo

y me vestisteis;. preso, y me vinisteis a ver .

Los buenos le respondern: Seor, cundo

te vimos hambriento y te dimos de comer; se-

diento, y te dimos de beber? Cundo te vimos

de paso y te alojamos; desnudo y te vestimos?

Cundo te vimos enfermo o preso y fuimos a

verte?

.

y el Rey les responder: Os aseguro que en

la medida que lo hicisteis con el ms pequeo

.de mis hermanos, lo habis hecho conmigo

.

Luego dir a los de su izquierda: Alejaos

de m, malditos; id al fuego eterno que fue pre-

parado para el Demonio y sus ngeles, porque

tuve hambre y.no me disteis de comer; tuve sed

y no me disteis de beber; estaba de paso, y no me

alojasteis; desnudo y no me' vestisteis; enfermo

y preso, y no me visitasteis ,

2 5 31-46

Leccionario

1015

Estos, a su vez, le preguntarn: Seor,

cundo te vimos hambriento o sediento, de

paso o desnudo, enfermo o preso y no te hemos

socorrido?

.

. -S

l les responder: Os aseguro que en la

medida en que no lo hicisteis con el ms pequeo

de mis hermanos, tampoco lo hicisteis conmigo

;

Estos irn al castigo eterno, y los buenos a

la Vida eterna.

V

Adecuada tambin para las exequias de nios no bau-

tizados


segn san Marcos

15, 33-39

\

Jess exclam en alta voz

y

expir

Al medioda se oscureci toda la tierra hasta

las tres de la tarde: y' a esa hora, Jess exclam

en alta voz:

Eloi. Eloi, lam sabachthani?

,

que significa:

Dios mo, Dios mo, por qu me

has abandonado?

Algunos de los que se encon-

traban all, al orlo, dijeron: Est llamando a

Elas , Uno corri a mojar una esponja en vi-

nagre y colocndola en la punta de una, ca~a,

le dio de beber, diciendo: Vamos a ver

SI

Ellas

viene a bajado

,

Entonces Jess, dando un gran

grito, expir. .

El velo del Templo se rasg en dos, de arnba

a abajo. Al vedo expirar as, el centurin que

estaba frente a l, exclam: Verdaderamente,

este hombre era Hijo de

Dios

,


16/20

1010


VI

Lectura del santo Evangelio,

segn san, Lucas

7, u.r:

Joven, a ti te digo, -levntate

En aquel tiempo: Jess se

dirigi

a una ciudad

llamada Naim, .aeompaado de sus discpulos

y de una gran multitud. Justamente cuando se

acercaba a la puerta d~ la ciudad, llevaban a

enterrar al hijo nico de una mujer viuda, y

mucha gente del lugar l~ acompaaba. Al verla,

el Seor se conmovi y le dijo: No llores Des-

pus se acerc y toc el fretro. Los que lo lleva-

ban se detuvieron y Jess dijo: Joven, yo te lo

ordeno, levntate

,

El muerto se incorpor y

empez a hablar. Y Jess se lo entreg a su madre.

Todos, quedaron sobrecogidos de temor y alaba-

ban a Dios, diciendo: Un gran profeta ha apa-

recido en medio de nosotros y Dios ha visitado

a su Pueblo , El rumor de lo 'que Jess acababa

de hacer se difundi por toda 'la Judea y en toda

la regin vecina.

VII


segn san Lucas

12, 35-40

Vosotros, estad preparados

En aqul tiempo dijo Jess a sus discpulos:

Estad preparados, ceidos y con las lmparas-

encendidas. Sed como los hombres que esperan

el regreso de su seor, que fue a una boda, para

abrirle apenas llegue y llame a la puerta. Felices

Leccionario

1017

los servidores a quienes el seor encuentra ve-

land:

a su llegada Os aseguro que l mismo re-

coger su tnica, los

har

sentar a -la mesa -y se

pondr' a servirlos. Felices ellos, si el seor

llega\a medianoche o antes del alba y los en-

cuentra as Entendedlo bien: si el dueo de casa

supiera a qu hora va a llegar el ladrn, no de-

jara perforar las paredes de su casa. -Vosotros

tambin estad preparados, porque el Hijo del

hombre vendr a la hora menos pensada

VIII


segn san Lucas

23, 33. 39-43

Hoy estars conmigo en el Paraso

Cuando llegaron al 'lugar llamado del Cr-

neo

,

lo crucificaron junto con los malhechores,

uno a su derecha y el otro a su izquierda.

Uno s de los malhechores suspendidos en la

cruz lo insultaba, diciendo: No eres el Mesas?

Slvate a ti mismo y slvanos a nosotros Pero

el otro lo reprenda, dicindole: No tienes

temor de Dios? T sufres el mismo castigo que

l. Para nosotros es justo, porque pagamos nues-

tras culpas, pero l no ha hecho ningn mal ,

y deca: Jess, acurdate de m cuando llegues

a tu Reino

.

El le respondi: Yo te aseguro

que hoy estars conmigo en jel Paraso

.

33

~ - - - - - - ~ - - - - - - - - ~ - - - - - - - - ~ - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

I


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1018


- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

1019

IX


segn san Lucas

23, 44-49

Padre, en tus manos encomiendo mi espritu

Era alrededor del medioda. El '101 se eclips

y la 'oscuridad cubri toda la tierra hasta las tres

de la tarde. El velo del Templo se rasg por el

medio. Jess con un grito, exclam: padre, en

tus manos encomiendo mi espritu ; diciendo

esto, expir.

Cuando el centurin vio lo que haba pasado,

alab a Dios, exclamando: Realmente este hom-

bre era un justo. la multitud que se haba

reunido para contemplar el espectculo, al ver

lo sucedido, regresaba golpendose el pecho. To-

dos sus amigos y las mujeres que lo haban

acompaado desde Galilea permanecan a distan-

cia,contemplando lo sucedido.

X


segn san Lucas

24, 13-35

N o era necesario

que el Mesas soportara sufrimientos

para entrar en su gloria?

Ese mismo da, el primero de la semana, dos

de los discpulos iban a un pequeo' pueblo

llamado Emas, situado a unos diez kilmetros

de Jerusaln. En el camino hablaban sobre lo

que haba ocurrido. Mientras conversaban y dis-

cutan, el mismo Jess se acerc y sigui cami-

nando con ellos. Pero algo impeda que sus ojos

Leccionario

lo reconocieran. El les dijo: Qu comentbais

por el camino ? . Ellos se detuvieron, llenos de

tristeza, y uno, llamado Cleofs, le respondi:

'Y,eres el nico habitante de Jerusaln que

ignora lo que pas en estos das

.

Qu co-

sa? , les pregunt. Ellos respondieron:

Lo que

sucedi con Jess, el Nazareno, que fue un pro-

feta poderoso en obras y en palabras delante de

Dios y de todo el pueblo, y cmo nuestros sumos

sacerdotes y nuestros jefes lo, entregaron para

ser condenado a muerte y lo crucificaron. Noso-

tros esperbamos que fuera l quien librara a

Israel. Pero a todo esto ya van tres

das

que

sucedieron estas cosas. Es verdad que algunas

mujeres que estn con nosotros nos han descon-

certado, porque fueron de madrugada al sepul-

cro -yno hallaron el cuerpo de Jess. Al regresar,

dijeron que se les aparecieron unos ngeles, los

que les aseguraron que estaba vivo. Algunos de

los nuestros fueron al sepulcro y encontraron

todo como la~ mujeres haban dicho. Pero a l

no lo vieron ,

Jess les dijo: Hombres duros de entendi-

miento, cmo os cuesta creer todo lo que anun-

ciaron los profetas No era necesario que el

Mesas soportara esos sufrimientos para entrar

.en su gloria? .

y

comenzando por Moiss y con-

tinuando con todos los Profetas, les interpret

en todas las Escrituras lo que se refera a l.

Cuando llegaron cerca del pueblo adonde iban,

Jess hizo ademn de seguir adelante. Pero ellos

le insistieron:

Qudate con nosotros, porque

ya es 'tarde

y.el

da se acaba

,

El entr y se qued

con ellos. estando a la mesa, tom el pan y

pronunci la bendicin; luego lo parti y se lo dio.


18/20

1020


Entonces los ojos de los discpulos se abrieron

y lo reconocieron, pero l haba desaparecido

de su vista. Y se decan: -Noarda acaso nuestro

corazn, mientras nos hablaba en el camino y

nos explicaba las Escrituras?.-

_En ese mismo momento, se pusieron en ea-

mino y regresaron a Jerusaln. All encontraron

reunidos a los Once y a los dems que estaban

con ellos, y stos les dijeron: Es verdad, jel

Seor ha resucitado y se apareci a

Simn

l

Ellos, por su parte, contaron lo que les haba

'pasado en el camino y cmo lo haban reconocido

al partir el-pan.

Adecuada tambin para las exequias de nios bautizados.


segn san Juan

6, 37AO

El que cree en el Hijo tiene Vida eterna,

y yo lo resucitar en el ltimo da

En aquel tiempo, dijo Jess a los judos:

Todo lo que el Padre me da, viene a m; y a los

que vienen a m, yo no los rechazar, porque no

he bajado del cielo para hacer mi voluntad, sino

la voluntad de Aquel que me envi. La voluntad

~el que me ha enviado es que yo no pierda a

ninguno de los que l me dio, sino que los

resucite en el ltimo da. La voluntad de mi Pa-

dre, que me envi, es que todos los que ven al

Hijo y creen en l tengan la Vida eterna; y yo

los resucitar en el ltimo da.

Leccionario

1021

XII

Adecuada tambin para nios bautizados que han partici-

pado ,de la Eucarista.


segn san J.uan

6, 51-59

El que come de este pan tiene Vida eterna,

y yo lo resucitar en el ltimo da

En aquel tiempo, dijo. Jess. a los judos:

Yo soy el pan vivo bajado del cielo. El que

coma de este pan vivir eternamente, y el pan

que yo dar es mi carne para la Vida del mundo

,

Los judos discutan entre si diciendo: C-

mo este hombre puede darnos a comer su car-

ne?

,

Jess. les respondi: Os aseguro que si

no comis la carne del Hijo del hombre y no

bebis su sangre, no tendris Vida en vosotros.

El que com~ mi carne y bebe mi sangre tiene

Vida eterna, y yo lo resucitar en el ltimo da.

Porque mi carne es una verdadera comida y mi

sangre, una verdadera bebida. El que come mi

carne y bebe mi sangre permanece en m y yo

en l. As como yo, que he sido enviado por el

Padre que tiene Vida, vivo por el Padre, de la

misma manera, el que me come vivir por m.

Este es el pan bajado del cielo; no como el

que comieron vuestros padres y murieron. El

que coma de este pan vivir eternamente ,

Jess enseaba todo esto en la sinagoga de

Cafarnan.


19/20

1022


XI I I


segn san Juan

11, 21-27

Yo soy la Resurreccin y la Vida

En aquel tiempo, Marta dijo a Jess:

Se

or, si hubieras estado, aqu, mi hermano no

habra muerto. Pero yo s que an' ahora, Dios

te conceder todo lo que le pidas .

Jess le dijo:

Tu hermano resucitar

Mar-

ta le respondi: S que resucitar en la resu-

rreccin del ltimo da . Jess l dijo: Yo soy

la Resurreccin y la Vida. El que cree en m

aunque muera vivir: y todo el que vive y cree

en m, no morir jams. Crees esto?

,

. Ella le respondi: S, Seor, creo que t

eres el Mesas, el Hijo de Dios, el que deba

ven'ir 'a este mundo.

XI V

Adecuada tambin para las exequias de nios bautizados,

omitiendo los versculos entre (, ).


segn san Juan

11, 32-44

Lzaro, sal, fuera

En aquel tiempo, cuando Mara, la hermana

de Lzaro, lleg adonde estaba Jess, al vedo

se postr a sus pies y le dijo: Seor, si hubieras

estado aqu, mi hermano no habra muerto .

Jess, al veda llorar a ella, y tambin a los

judos que la acompaaban, conmovido y tur-

bado, pregunt: Dnde lo pussteis? Le res-

Leccionario

1023

pondieron: Ven, Seor, y lo vers

Y Jess

llor: Entonces los judos dijeron: Cmo lo

amaba

,

Pero algunos decan: Este, que abri

los ojos del ciego de nacimiento, no poda im-

pedir que Lzaro muriera?

.

Jess, conmovindose nuevamente, lleg al

sepulcro, 'que era una cueva con una piedra en-

cima, (y dijo:

Quitad la piedra ,

Marta, hermana 'del difunto, le respondi:

Seor, huele mal; ya hace cuatro das que est

muerto

.

Jess le dijo: No te he dicho que

si crees, vers la gloria de Dios? , (Entonces qui-

taron la piedra, y Jess, levantando los ojos al

cielo, dijo: Padre, te doy gracias porque me

oste.

Yo s que siempre me oyes, pero lo he dicho

por esta gente que me rodea, para que crean

que t me has enviado

.

Despus de decir esto,

grit con voz fuerte: Lzaro, ven afuera ;

El muerto sali con los pies y las manos atados

con vendas, y el rostro envuelto en un sudario.

Jess les dijo:

Desatadlo, para .que pueda ca-

minar

.

XV

Lectura. del santo Evangelio

segn san Juan 12, 23-28a

s

el grano de trigo muere, da mucho fruto

En aquel tiempo dijo Jess a sus discpulos:

Ha llegado la hora en que el Hijo del hombre

va a ser glorificado. Os aseguro que si el grano

de trigo qUe cae en la tierra no muere, queda

solo; pero si muere, da mucho fruto. El que ama


20/20

1024


su vida la perder; pero el que odia su vida en

este mundo, la conservar para

la

Vida eterna.

El que quiera servirme, que me siga y donde yo

est, estar tambin mi servidor. El que quiera

servirme, ser honrado por mi Padre. Mi alma

ahora est turbada. Y qu dir: Padre, lbrame

de esta hora ? Si para eso he llegado a esta

hora

Padre, glorifica tu Nombre ,

XVI


segn san Juan

14, 1-6

En la Casa de mi Padre hay muchas habitaciones

En aquel tiempo, dijo Jess a sus discpulos:

No

os inquietis. Creed en Dios y creed tam-

bin en m. En la Casa de mi Padre hay muchas

habitaciones; si no fuera as, os lo habra dicho.

Yo vaya prepararas un lugar. Y cuando haya

ido y os haya preparado un lugar, volver otra

vez para llevaras conmigo, a fin de que donde

yo est, estis tambin vosotros. Ya conocis

el camino del lugar adonde voy.

Toms le dijo: Seor, no sabemos a dnde

vas. Cmo vamos a conocer el camino? Jess

le respondi: Yo soy el Camino, la Verdad y

la Vida. Nadie va al Padre, sino por m

.

Leccionario

1025

XVII


seg~n san Juan

17, 24-26

Quiero que donde yo est estn tambin conmigo

En aquel tiempo, Jess levant los ojos al

cielo, diciendo: Padre, quiero que los que t

me diste estn conmigo donde yo est, para que

contemplen la gloria que me has-dado, porque

ya me amabas antes de la creacin del mundo.

Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero

yo te conoc, y ellos reconocieron que t me en-

viaste. Les d a conocer tu Nombre y se lo se-

guir dando a conocer, para que el amor con

que t me amaste est en ellos, y yo tambin

est en ellos

,

Leccionario de las Exequias

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