TRABAJO DE SÍNTESI SOBRE LAS LEYENDAS.

La Cocollona Dice la leyenda que en la orilla izquierda del Onyar , en el barrioDel Mercadal , había un convento de monjas poco devotas y que llevaba una vida desordenada. Entre ellas había una novicia con verdadera vocación religiosa que les recriminaba la vida que llevaban .

Las monjas para no oír sus recriminaciones , la encerraron en una celda en el subterráneo del convento . Estuvo encerrada durante muchos años y debido a la oscuridad y la humedad le fueron saliendo por todo el cuerpo unas escamas hasta quedar convertida en un cocodrilo . Pero debido a su santidad y pureza de alma también le salieron en la espalda unas maravillosas alas de mariposa de bonitos colores transformándose en Cocollona .

Cuando murió, su fantasma se veía por el rio Onyar muy cerca de donde había estado prisionera .

El Tarlà de L’Argenteria

Unas de las leyendas mas típicas de Girona es el Tarlà , un muñeco que , colgado de parte a parte de a pie de la Platería . Se trata de un muñeco con cabeza de madera y un cuerpo de ropa con serraduras .Últimamente , y desde hace mucho tiempo , va guarnido como una clase de juglar , con cascabel a las puntas de su sombrero .

Tiene unos brazos rígidos , articulados por lo estropea , y las manos están fijadas en una barra (antes de madera, ahora de hierro)que se puede hacer girar mediante una maneta que actúa desde uno de los balcones dónde repone la barra .La leyenda que justifica su actuación es bien conocida por los gerundenses . En una época en qué la peste era uno de los temores colectivos más arraigados , por sus mortales consecuencia , un pequeño brote de aquella terrible epidemia se manifestó a la calle Argentaria dónde , como dice su nombre , había los obradores de los joyeros de la ciudad de Girona .La figura del Tarlà aconteció muy estimada por los gerundenses por su carácter alegre y nada protocolario , y ha sido siempre en Girona símbolo de gresca y diversión .

La leona y su leyendaTodo haciendo una tría entre estas esculturas atípicas , se debe hablar en primer lugar del animal más típicamente gerundense tras las moscas de Sant Narcís : la Leona .

Indefectiblemente, aunque el animal representa claramente un león macho, por no se sabe qué extraños desconocimientos zoológicos, primero se confundió con un mono (puede ser por el hecho de trepar ágilmente por la columna) y más tarde con una leona , como ha quedado fijado por la tradición ciudadana . Se ignora si se trataba de un animal travestido. La estatua original, fuerza parcheada, se guarda en el museo de Arte, mientras que una correcta reproducción en fibra de vidrio se alza cerca del lugar original de emplazamiento.

La bruja de la catedralSegún esta leyenda, había en Girona, tiempo, una mujer dedicada en las diabólicas arte de la hechicería que, para mostrar su odio a la religión, tenía la mala costumbre de lanzar piedras contra el templo catedralicio. Según otras versiones, las piedras las lanzaba al paso de la procesión de Corpus .

Un buen día, o un mal día, por ella, y por obra divina, la bruja se convirtió en piedra y la pusieron en la parte más alta de la pared del templo, porque de su boca no salieran tacos o maldiciones , sino únicamente limpia agua caída de las nubes. Y la pusieron mirando perpetuamente hacia tierra, sin poder girar la vista hacia el cielo. Una cancioncilla popular explica ingenuamente la maldición divina .

* Piedras tiras, piedras tirarás, de piedra quedarás .

Hace mucho tiempo existía un dragón que tenía doble personalidad y vivía en la iglesia de Sant Fèlix. El dragón tenía los ojos verdes y los dientes afilados, era grande, alto, fuerte y escupía fuego. Cada mañana se convertía en una persona y cada noche se transformaba en un dragón; por el día arreglaba lo que por la noche destrozaba y rompía.

Los policías descubrieron que un hombre sospechoso cada noche se iba a la iglesia de Sant Fèlix; cuando lo espiaban descubrieron que por la noche el hombre se convertía en un dragón y supieron que por las noches destrozaba Girona, pero a la mañana siguiente arreglaba todo lo que rompía: puentes como por ejemplo el Pont de pedra, la muralla, se llevaba el reloj de la catedral, algunas casas, etc.

Y al cabo de muchos años el dragón se murió de viejo y en la iglesia de Sant Fèlix lo recuerdan cada día por las noches porque en la Iglesia hay un cuadro con la foto del dragón y cada jueves lo recuerdan.

Xavier Camacho Romina CarbonellAlbert BatistaAlina Costea