Los veRdadeRos detectives médicos modeRnos

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POR MARCELO GÁLVEZ En una fecha como hoy, en 1895, Wilhelm Conrad Röntgen (1845-1923), ingeniero mecánico y físico alemán de la Universidad de Wurzburgo, descubre los rayos X. Sus experimentos iniciales le permitieron obtener representación en imágenes de segmentos y estructuras corporales a las que, hasta ese momento, la medicina solo había podido acceder a través de disecciones anatómicas. Más de un siglo ha pasado y hoy las imágenes constituyen uno de los pilares fundamentales de la práctica médica. Los signos radiológicos nos permiten médicamente plantear las posibilidades diagnósticas frente a una persona enferma y estimar sus probabilidades de ocurrencia. “La medicina es una ciencia de la incertidumbre y un arte de la probabilidad. No es una ciencia exacta” , nos diría en forma brillante William Osler (1849-1919), considerado el padre de la medicina moderna. Nada más cierto en nuestro tiempo, donde los médicos requieren cada vez más información para tomar decisiones respecto de sus pacientes. Es así como hoy la radiología tiene un rol en el quehacer de las decisiones de la mayor parte de las especialidades de la medicina. Se estima que aproximadamente el 10% de las consultas ambulatorias requieren un examen radiológico, así como el 50% de los pacientes atendidos en servicios de urgencia y el 70% de los pacientes hospitalizados. MISTERIOS DESCIFRADOS “Datos, datos, datos. No puedo fabricar ladrillos sin arcilla” , nos ilustra Sherlock Holmes en “El misterio de Copper Beeches” . Al igual que en el libro de Sir Arthur Conan Doyle (1859-1930), los signos radiológicos son las claves que se encuentran en las imágenes y que permiten acercarse al diagnóstico correcto del paciente. Porque es posible llegar al diagnóstico a través de la inferencia, es decir, mediante una operación mental en la que estructuramos tanto el conocimiento, como la deducción. De una forma similar a como el señor Holmes enfocaba y resolvía los misterios en sus célebres aventuras. No muchos saben que el más célebre detective, Sherlock Holmes fue creado por un médico. Conan Doyle estudió medicina en Edimburgo donde fue alumno del doctor Joseph Bell (1837-1911), cirujano, pionero de la medicina forense, cuyos razonamientos analíticos inspiraron al autor en la creación de su personaje. Según relatos de la época, el doctor Bell, en su caminata por los pasillos del hospital, hacía diagnóstico de enfermedades a las personas que se encontraban esperando atención médica, utilizando la observación aguda y el razonamiento astuto. “Pensé en intentar escribir una historia en la que el héroe tratara el crimen como el doctor Bell trataba la enfermedad” , confesaría Arthur Conan Doyle años más tarde. Y no hay que pasar por alto las similitudes en la metodología del neurólogo William Gowers (1845-1915), autor de “La biblia de neurología” , con la del detective. Por esas curiosidades de la historia, Roentgen, Bell, Gowers y Conan Doyle fueron contemporáneos. Este proceso de observación, una búsqueda activa de hallazgos que nos permitan concluir algo, no es una técnica esotérica. Más bien es una disciplina orientada a buscar pistas que nadie más ve. Haciendo un símil, el radiólogo de nuestro tiempo es también un buscador de hechos. Las imágenes médicas nos ayudan a pensar que existen causas comunes, otras menos comunes y otras francamente infrecuentes, pero no menos importantes. El diagnóstico diferencial es el abanico de posibles causas que se abre en presencia de los antecedentes clínicos, los síntomas y signos que manifiesta el paciente, junto a los hallazgos en los exámenes radiológicos. Radiografía, ecografía, tomografía computarizada, resonancia magnética, ¿cuál será la técnica más adecuada para estudiar una u otra dolencia? En películas, papel fotográfico o copias digitales, confiamos en la oportuna lectura e interpretación de los hallazgos. Como piezas de un rompecabezas, ayudamos al médico tratante a unificar todas las pistas en un diagnóstico que permita establecer un tratamiento que restablezca el anhelado bienestar. La interpretación de estos exámenes, consolidada como la especialidad de la Medicina cuyo nacimiento celebramos hoy, toma años especiales de estudio y entrenamiento de capacidades de observación y descripción. Así, los “radiólogos de cabecera” , término acuñado por el maestro de la radiología chilena, doctor Claudio Cortés, se incorporan a equipos de trabajo donde el informe radiológico pasa a ser el resumen pormenorizado de los hallazgos revelados por las imágenes junto a su probabilidad de ocurrencia, en concordancia con la observación aguda y el razonamiento astuto. “Nunca confíe en las impresiones generales, concéntrese en los detalles” , podría ser la recomendación final de Holmes. Un día en urgencia Las profesionales de imagenología se han transformado en una pieza clave dentro del trabajo de la ex Posta Central. 2 Tecnologías en Chile Las principales marcas del equipos de imagenología dan a conocer algunas de sus novedades para el mercado chileno de la especialidad. 4 y 5 Radiólogos en regiones Pese a las dificultades que encuentran, principalmente, en equipamiento, los radiologos de regiones realizan un gran aporte a las comunidades. 6 Recolectando pistas para descubrir enfermedades: la radiología al servicio de la medicina. Los radiólogos son especialistas en recolectar pistas para descubrir enfermedades. RADIÓLOGOS: LOS VERDADEROS DETECTIVES MÉDICOS MODERNOS Dr. Marcelo Gálvez, presidente de la Sociedad Chilena de Radiología. [email protected] SANTIAGO DE CHILE MIÉRCOLES 8 DE NOVIEMBRE DE 2017 DÍA INTERNACIONAL DE LA RADIOLOGÍA 5 3 1 0

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POR MARCELO GáLVEZ

En una fecha como hoy, en 1895, Wilhelm Conrad Röntgen (1845-1923), ingeniero mecánico y físico alemán de la Universidad de Wurzburgo, descubre los rayos X. Sus experimentos iniciales le permitieron obtener representación en imágenes de segmentos y estructuras corporales a las que, hasta ese momento, la medicina solo había podido acceder a través de disecciones anatómicas.

Más de un siglo ha pasado y hoy las imágenes constituyen uno de los pilares fundamentales de la práctica médica. Los signos radiológicos nos permiten médicamente plantear las posibilidades diagnósticas frente a una persona enferma y estimar sus probabilidades de ocurrencia.

“La medicina es una ciencia de la incertidumbre y un arte de la probabilidad. No es una ciencia exacta”, nos diría en forma brillante William Osler (1849-1919), considerado el padre de la medicina moderna. Nada más cierto en nuestro tiempo, donde los médicos requieren cada vez más información para tomar decisiones respecto

de sus pacientes. Es así como hoy la radiología tiene un rol en el quehacer de las decisiones de la mayor parte de las especialidades de la medicina. Se estima que aproximadamente el 10% de las consultas ambulatorias requieren un examen radiológico, así como el 50% de los pacientes atendidos en servicios de urgencia y el 70% de los pacientes hospitalizados.

MistERiOs dEsCifRAdOs

“Datos, datos, datos. No puedo fabricar ladrillos sin arcilla”, nos ilustra Sherlock Holmes en “El misterio de Copper Beeches”. Al igual que en el libro de Sir Arthur Conan Doyle (1859-1930), los signos radiológicos son las claves que se encuentran en las imágenes y que permiten acercarse al diagnóstico correcto del paciente. Porque es posible llegar al diagnóstico a través de la inferencia, es

decir, mediante una operación mental en la que estructuramos tanto el conocimiento, como la deducción. De una forma similar a como el señor Holmes enfocaba y resolvía los misterios en sus célebres

aventuras. No muchos saben que el más célebre detective, Sherlock Holmes fue creado por un médico. Conan Doyle estudió medicina en Edimburgo donde fue alumno del doctor Joseph Bell (1837-1911), cirujano, pionero de la medicina forense, cuyos razonamientos analíticos inspiraron al autor en la creación de su personaje.

Según relatos de la época, el doctor Bell, en su caminata por los pasillos del hospital, hacía diagnóstico de enfermedades a las personas que se encontraban esperando atención médica, utilizando la observación aguda y el razonamiento astuto. “Pensé en intentar escribir una historia en la que el héroe tratara el crimen como el doctor Bell trataba la enfermedad”, confesaría Arthur Conan Doyle años más tarde. Y no hay que pasar por alto las similitudes en la metodología del neurólogo William Gowers (1845-1915), autor de “La biblia de neurología”, con la del

detective. Por esas curiosidades de la historia, Roentgen, Bell, Gowers y Conan Doyle fueron contemporáneos. Este proceso de observación, una búsqueda activa de hallazgos que nos permitan concluir algo, no es una técnica esotérica. Más bien es una disciplina orientada a buscar pistas que nadie más ve.

Haciendo un símil, el radiólogo de nuestro tiempo es también un buscador de hechos. Las imágenes médicas nos ayudan a pensar que existen causas comunes, otras menos comunes y otras francamente infrecuentes, pero no menos importantes.El diagnóstico diferencial es el abanico de posibles causas que se abre en presencia de los antecedentes clínicos, los síntomas y signos que manifiesta el paciente, junto a los hallazgos en los exámenes radiológicos. Radiografía, ecografía, tomografía computarizada, resonancia magnética, ¿cuál será la técnica

más adecuada para estudiar una u otra dolencia? En películas, papel fotográfico o copias digitales, confiamos en la oportuna lectura e interpretación de los hallazgos.

Como piezas de un rompecabezas, ayudamos al médico tratante a unificar todas las pistas en un diagnóstico que permita establecer un tratamiento que restablezca el anhelado bienestar. La interpretación de estos exámenes, consolidada como la especialidad de la Medicina cuyo nacimiento celebramos hoy, toma años especiales de estudio y entrenamiento de capacidades de observación y descripción. Así, los “radiólogos de cabecera”, término acuñado por el maestro de la radiología chilena, doctor Claudio Cortés, se incorporan a equipos de trabajo donde el informe radiológico pasa a ser el resumen pormenorizado de los hallazgos revelados por las imágenes junto a su probabilidad de ocurrencia, en concordancia con la observación aguda y el razonamiento astuto. “Nunca confíe en las impresiones generales, concéntrese en los detalles”, podría ser la recomendación final de Holmes.

Un día en urgenciaLas profesionales de imagenología se han transformado en una pieza clave dentro del trabajo de la ex Posta Central. 2

Tecnologías en ChileLas principales marcas del equipos de imagenología dan a conocer algunas de sus novedades para el mercado chileno de la especialidad. 4 y 5

Radiólogos en regionesPese a las dificultades que encuentran, principalmente, en equipamiento, los radiologos de regiones realizan un gran aporte a las comunidades. 6

Recolectando pistas para descubrir enfermedades: la radiología al servicio de la medicina. Los radiólogos son especialistas en recolectar

pistas para descubrir enfermedades.

RadióLogos:

Los veRdadeRos detectivesmédicos modeRnos

Dr. Marcelo Gálvez, presidente de la Sociedad Chilena de Radiología.

[email protected] santiago de chile miÉrcoles 8 de noViemBre de 2017

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