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MAULLÍN Antecedentes de historia y cultural local

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MAULLÍNAntecedentes de historia y cultural local

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1.Origen del poblamiento de Maullín

©Revista Enfoque, Marisa Polenta

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Podemos constatar que existen dos sitios arqueológicos relevantes en el área, el sitio paleo-ar-queológico de Monte Verde, datado hasta el momento en 17.500 años AP, y el sitio arqueológico “Conchal Piedra Azul”, ubicado hacia la carretera sur que muestra un campamento base de una población canoera, muestra un depósito formado por una sucesión de ocupaciones superpues-tas, que refieren a un modo de vida cazador-pescador-recolector de gran persistencia a través del tiempo y tienen una data de 5500 años AP. Si bien, en los sectores de trabajo se ven vestigios de Conchales, estos no han sido estudiados ni tampoco patrimonializados, cuestión pendiente.

El otro sitio es famoso en la Región, en el País y en el mundo: el sitio de “Monte Verde” que hoy es un museo de sitio, y que fue encontrado hacia el año 1974 por campesinos locales que per-tenecían a la familia Barría, quienes al diseñar un sistema de riego ocupando el arroyo Chinchi-huapi, encontraron huesos gigantes de mastodontes. Y luego en 1976, por azar, un estudiante de Luis Werner, de paso por el lugar recibió los huesos de la familia Barría; Werner se los entre-gó a los profesores Mauricio van de Maele e Iván Troncoso, quienes visitaron Monte Verde. Las investigaciones en el sitio Monte Verde han identificado dos componentes: Monte Verde I (MV-I) y Monte Verde II (MV-II). Monte Verde tenía instrumentos líticos, óseos, una rica colección de madera y muchísimos restos de plantas.

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2.Historia Local

©Memorias siglo XX, Juana Aguila

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Esta comuna, de aproximadamente 450 años, se destacó por ser un prominente puerto y embarcadero donde se traían manufacturas de Europa y se transportaban cueros, charqui, cebo, trigo y maderas. Pero la apertura del canal de Panamá, influye notoriamente en el tráfico comercial de Maullín. El 15 de septiembre de 1882, por Decreto Supremo, se le otorga el rango de Municipalidad. Luego, el puerto se convirtió en punto salida de la producción colonial que fue principalmente la extracción de madera y todos los derivados de la producción ganadera. Sin olvidar a pequeños grupos familiares ya insertos en economías de subsistencia.

Claramente, la identidad étnica indígena no tiene mayor expresión en el territorio. Como es de esperar, por tratarse de localidades ubicadas en el sur de Chile, hay una tendencia leve a la identificación con el pueblo Mapuche. Al año 2002 no hay comunidades ni organizaciones mapuche en el área. Estos datos, sin embargo, están desactualizados, ya que no logran recoger las demandas indígenas por territorio y autonomía, desatadas justamente durante estos últimos 10 años. Sabemos que tal panorama cambió en este territorio, pero no disponemos de datos estadísticos al respecto. Sabemos que hace 5 años se constituyó en Maullín una comunidad indígena de carácter urbana, entidad que ha formado parte de las movilizaciones por la defensa de la cuenca del río Maullín durante los últimos 4 años.

Por otro lado, Quenuir (Alto) es una población construida para los damnificados del terremoto de 1960; el Quenuir original es uno más en la lista de poblados que desaparecieron en la catástrofe; de ahí que la mayor parte de la población corresponde a los sobrevivientes y sus hijos; el resto de los vecinos son inmigrantes que provienen de los poblados interiores y de Chiloé, pero en general, el resultado es bastante homogéneo y sólo resalta la cantidad de mujeres adultas mayores solas como un grupo importante de la población que vive casi exclusivamente de las Pensiones Asistenciales. El resto de los habitantes de Quenuir realizan labores relacionadas con la extracción de algas, loco y piure. Esto repercute, sin duda, en las actividades culturales que hoy se realizan en el territorio donde encontramos fiestas religiosas, museos y el fuerte como evidencias de esta historia del territorio.

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2.Historia Local

©Memorias siglo XX, Andrea Soto Toledo

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De acuerdo a los antecedentes entregados por el Sistema Nacional de Indicadores Municipales, en Maullín la población es más de 13 mil personas de las cuales un 52% es masculino y un 54% rural. Esto la ubica entre las comunas con un comportamiento intermedio así como su densidad poblacional.

Quenuir es la localidad con mayor densidad poblacional, concentra más de mil de las mil cien personas que viven en el estuario. Lenqui tiene el 10% de la población de Quenuir, y Amortajado el 0,2%. Lo importante es no dejar de trabajar con los habitantes de estas últimas dos localidades, aún considerando su baja densidad. En este caso la densidad no es reflejo de patrimonialidad, puesto que las 5 localidades contienen los humedales que nos interesa conservar, y presentan un tejido social activo: están al tanto de las iniciativas que este mismo diagnóstico busca objetivar.

El grueso de la población está en el rango etario de 25 a 50 años, es decir en plena edad productiva y reproductiva. Llama la atención el incremento en la tasa de natalidad, indicador clave para pensar en la persistencia del reemplazo generacional y, por lo tanto, en la continuidad de la sociedad y cultura locales. Es decir, el territorio no se despoblará, habrá persistencia de ocupación humana, pese a los embates de la migración por motivos laborales y al fallecimiento de los más viejos.

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3.Economía Post Terremoto

©Memorias siglo XX, Victor Chávez

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La pesca artesanal, con eje principal en la extracción del loco y cierto tipo de algas, la explotación forestal en dos ámbitos, extracción de alerce y nativo, en general, para leña, artesanía y durmientes, devinieron las actividades más rentables. En el ámbito agropecuario se tiene básicamente una agricultura de subsistencia que gira en torno a la producción de papa, cereales, frutales menores y mayores, y hortalizas. Además, se observa producción de bovino doble propósito (carne y leche), porcinos y aves de corral.

El ingreso que las localidades tienen es de una economía de subsistencia en que su precaria dinámica se basa en la extracción de recursos naturales, en este caso el Loco, la Luga (Pelillo) y el Piure, sin valor agregado, lo que impide la re-distribución a los agentes locales de los beneficios devengados con los recursos extraídos del territorio. Así, la extracción sirve como medio para obtener recursos que no se pueden producir en el territorio (harina, mate, ropa, calzado, etc.), complementado con la pesca y la recolección de orilla, y con la agricultura menor para el sustento alimenticio de la familia.

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4.Valor Cultural de los Humedales de Maullín

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La naturaleza de los humedales es visualizada como la madre (matriz) que sostiene a los humanos y a toda especie viviente en el territorio, la que da origen y permite el desarrollo de la cultura maullina. Por lo tanto, la existencia misma de la cultura local está ligada a ella; de hecho, es por ello que cada lugar, cada elemento, cada animal, cada planta, tiene una significación mágico y/o religiosa: los habita una deidad (evangelismo, catolicismo) ó un espíritu (aboriginalismo, etnicismo) que merece respeto, sacrificio y, muchas veces, obediencia. En este contexto se trata del Humedal, del Hualve, las Montañas, la Pampa, las Islas y Fuentes de Agua, así como de Aves y Fauna Marina, que adquieren un particular significado más allá de una geografía ó un ecosistema particular: el reconocimiento del maritorio, sus vías de tránsito y zonas de recolección, su comportamiento, sus demandas, su cuidado, representan un conocimiento inter-generacional y acabado del espacio que habitan los maullinos. Esto es lo que llamamos Paisajes de Agua. Hay además otras zonas como lagunas ó vegas, que durante el invierno y gran parte de la primavera se inundan, y llegan aves. Por otro lado en las culturas ancestrales, mapuche ó Williche por ejemplo, los humedales son considerados zonas de importancia cultural. Hay asociaciones culturales muy fuertes entre zonas que contienen agua con lugares ceremoniales ó de especial interés ritual.

Pensamos que resulta fundamental otorgar un lugar de preeminencia a estas dimensiones que nos hablan de un “simbolismo diferencial”. Se trata de un asunto denso y sofisticado: el universo credencial local, el conjunto de explicaciones empíricas, metafísicas y éticas que forman parte del cuerpo de creencias de la población maullina residente, tanto en cuanto la Naturaleza (humedales, aves, ríos, mares) como la Cultura (asociatividad, paisajes de agua, turismo y patrimonio). Décadas de contacto han fragüado un sistema mixto de apelación a la Naturaleza, a lo humano, lo social y lo divino; a lo trascendente, lo inmanente y lo esencial de la vida humana. Hemos registrado un universo inmaterial de sentidos y significados que es determinante a la hora de encarar “el mundo de vida” en Maullín. Y esto revelaría la valentía, la fé y la cortesía (principios morales de la vida decente en el borde costero maullino) de la “cultura de los humedales” descrita. Elementos que también tienen carácter patrimonial, y cuya activación apela al complejo de “etnoconocimientos” descrito arriba y que maneja con mucha habilidad la población maullina.

Hay una tendencia bien marcada entre los maullinos, quienes coinciden en la importancia que reviste la conservación sustentable de los humedales. De modo que hay una línea de base favorable al equipo para iniciar un proceso de intervención biocultural. Se visualiza que Maullín es importante a nivel nacional, que es un sitio prioritario para la conservación de la biodiversidad por la presencia de importantes humedales y aves migratorias. También, en términos de valores culturales y patrimoniales se reconocen lugares de interés. Por otro lado, se aprecia que es una oportunidad el trabajar con la Red de Humedales, Aves y Turismo de Maullín puesto que permitirá diseñar una estrategia de gestión compartida y de acción colectiva. Y en esa medida uno de los flancos a trabajar, para prevenir los daños que hacen las empresas, es la difusión. Se debe mostrar que hay gente que está unida para evitar que se cometan desastres ecológicos en estos humedales.se valora la existencia del Humedal.

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Por otro lado, se aprecia que es una oportunidad el trabajar con la Red de Humedales, Aves y Turismo de Maullín puesto que permitirá diseñar una estrategia de gestión compartida y de acción colectiva. Y en esa medida uno de los flancos a trabajar, para prevenir los daños que hacen las empresas, es la difusión. Se debe mostrar que hay gente que está unida para evitar que se cometan desastres ecológicos en estos humedales.

En este contexto se busca trabajar en forma unida y coordinada con la comunidad para convertir el turismo, el ecoturismo, la conservación de la naturaleza y el turismo ornitológico, en una opción de desarrollo sustentable para los humedales, y que sea compatible con todos los otros usos que la comunidad asigna al humedal. Es importante -en una segunda etapa- implementar infraestructura, capacitación y fortalecimiento a aquellos grupos, organizaciones ó empresas que estén interesadas en este tipo de turismo y desarrollo sustentable.

Una de las primeras cosas que se mencionó fue el tema del Agua, y el reconocimiento de su temor a la escasez del recurso en el tiempo, puesto que ya se ha visto en otros sectores de la región; en este contexto se valora la existencia del Humedal. Por otro lado, se valora que al formar Lenqui, Amortajado, Lepihue y Quenuir parte de la Red Hemisférica de Aves Playeras Migratorias (RHRAP), permitirá un mayor reconocimiento de los humedales de Maullín. Siendo éste, a su vez, un beneficio que hace que mucha más gente conozca, proteja y promueva la conservación de estos humedales, constituyéndose la Red en una estrategia de conservación internacional, que si bien no es una figura vinculante de protección estadual, sí lo es de patrimonialización y puesta en valor de los humedales.

Otro elemento que se debe considerar es que los humedales son zonas donde la clave es el agua y tienen una serie de particularidades y beneficios. Los humedales son importantes, porque mundialmente los humanos nos concentramos en donde hay agua y áquéllos retienen el agua, filtrando y produciéndola. Junto con ser tremendamente productivos, dado su riquezas biológicas y alimentos. Una de las cosas que llama la atención es cómo los vecinos de Maullín tienen una relación de vecindad muy fluida en cuanto a los humedales adyacentes y los recursos que se aprovechan de allí.