EL TIEMPO

FECHA: MAYO 31 DE 2012

Veto a venta de agua en bloque afecta a 154.000 viviendas en la

sabana

Por: REDACCIÓN CUNDINAMARCA | 12:32 a.m. | 31 de Mayo del 2012

El Acueducto critica desorden en desarrollos urbanísticos y contaminación de ríos.

El anuncio del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, de no vender más agua en bloque a nuevos desarrollos urbanísticos en los municipios

podría frenar la construcción de al menos 154.782 unidades de vivienda en Soacha, Mosquera, Funza, Madrid, Tenjo, Zipaquirá y

Facatativá.

Esta cifra, según Camacol Bogotá y Cundinamarca, corresponde a proyectos que tienen cerca de 75 constructoras en el departamento y 500

en la capital.

"Más del 90 por ciento de estas viviendas son de interés social y no se han podido empezar a construir. Estos proyectos abarcan 1.572

hectáreas", le dijo a EL TIEMPO Martha Moreno Mesa, gerenta del Camacol Bogotá y Cundinamarca.

El gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, Diego Bravo, justificó la decisión de no suministrar agua en bloque a

nuevos proyectos urbanísticos por el desorden con el que se ha desarrollado la sabana, el suministro irregular de agua potable por fuera de

los perímetros urbanos y la contaminación de las fuentes, aguas arriba de las bocatomas, lo cual hace más difícil la captación y costoso el

tratamiento.

"Hace 12 años en Puente La Virgen, el punto donde entra el río Bogotá a la ciudad, el agua se filtraba en condiciones de ser usada para

riego. Tenía oxígeno disuelto, el río estaba vivo, pero ahora llega sin oxígeno; es decir, el río llega muerto", aseguró.

Programas afectados

Uno de los programas de vivienda que se vería afectado con la decisión del Distrito es el megaproyecto Ciudad Verde, en Soacha, cuya

primera etapa ya alberga a 3.000 familias. El problema del suministro de agua, según la Alcaldía de Soacha, sería para las otras 6 etapas del

programa, que contempla la construcción de 42.000 unidades en total.

Puede suceder algo similar en el macroproyecto Maiporé, también en Soacha. Este desarrollo tiene casi terminada su primera etapa y aún

no cuenta con suministro de agua.

"Tengo entendido que el agua se la van a comprar a un acueducto privado o se surtirán con tanques de almacenamiento o carrotanques,

mientras se define el tema", sostuvo Juan Carlos Nemocón, alcalde de Soacha.

Rechazo a la medida

El alcalde de La Calera, Álvaro Venegas, también está en desacuerdo con la medida. "Es absurdo que un municipio que tiene el embalse de

San Rafael y varias fuentes hídricas no tenga agua para adelantar sus proyectos urbanísticos", agregó.

Por su parte, el gobernador de Cundinamarca, Álvaro Cruz, rechaza la medida porque, en su opinión, el 90 por ciento del agua que

consume Bogotá proviene de Cundinamarca. Cruz incluso advirtió que llevará este asunto al Congreso. "La última alternativa podría ser

que a las empresas ubicadas en los municipios afectados se les autorice la utilización de aguas subterráneas de la formación Guadalupe o de

la formación Tilata".

El mandatario dijo que la situación es igualmente crítica en Tocancipá. "También ocurre en Mosquera y Funza; con estas decisiones se

limita la posibilidad de autorizar más construcciones urbanísticas", afirmó el Gobernador.

La decisión de la Alcaldía de Bogotá también tiene preocupados a los constructores. Es el caso de Álvaro Luna, arquitecto de la

constructora Hábitat Calera. "Es perjudicial para el desarrollo. Nos toca solucionar el problema con acueductos vecinales o aguas lluvias

tratadas", dijo.

Uno de los constructores afectados, que pidió mantener en reserva su nombre, le dijo a EL TIEMPO que la ciudad está creciendo hacia los

municipios vecinos y "no puede un alcalde pretender cambiar esa realidad y afectar a todas las personas con una medida tan arbitraria".

EL TIEMPO

FECHA: MAYO 31 DE 2012

SEMANA.COM

FECHA: MAYO 31 DE 2012

Concejo aprueba ‘Bogotá Humana ya’ y se anota una victoria

BOGOTÁDespués varias semanas de tensión entre el Concejo de Bogotá y el alcalde Gustavo Petro, los cabildantes le aprobaron su plan

de Desarrollo con 36 votos, después de imponerle 663 modificaciones, algo que nunca antes había visto la capital.

Miércoles 30 Mayo 2012

El Plan de Desarrollo, 'Bogotá humana ya', del alcalde Gustavo Petro, vivió un tortuoso camino hasta llegar a su aprobación. El Concejo no

le puso las cosas fáciles a la hoja de Ruta de Petro, un documento de 77 artículos que contiene objetivos, metas, estrategias y políticas que

guiarán las acciones del gobierno distrital, hasta que termine el 2015. Un plan que le costará a la ciudad 61 billones de pesos, el cheque más

alto que haya recibido un alcalde.

El juego político se dio en medio de tensas jornadas en las que estaba en riesgo no sólo la aprobación del PDD, sino el voto que legitimara

al actual gobierno, pues la posibilidad de que los concejales le hubieran dicho que no a este Plan habría significado una ruptura total entre

mandatario y cabildantes, tal y como sucedió con el exalcalde Antanas Mockus. Una opción que se alcanzó a rozar.

Petro presentó su Plan el pasado 30 de abril y fue recibido con una catarata de críticas. Varios concejales se mostraron inconformes, sobre

todo con el monto del presupuesto, el más alto en la historia de Bogotá.

Para contener la reprobación, la plana mayor del gobierno de Petro, liderada por el secretario de Gobierno, Guillermo Asprilla, y el

secretario general, Eduardo Noriega, se trasladaron al Concejo. Allí negociaron de forma individual con los cabildantes y por bancadas, y

buscaron acuerdos sobre lo que era posible. Y ahí, el pulso lo ganó el Concejo.

Por primera vez, el alcalde de la capital, quien es el único amparado por la ley para hacer las modificaciones, aceptó las propuestas y le

hizo 663 modificaciones a su plan.

Pero ese no fue el único obstáculo, hubo más. Una vez conocidos las enmiendas, el Concejo designó una comisión para evaluar las

modificaciones. Durante 23 sesiones, 133 horas, un grupo conformado por 15 cabildantes deliberó sobre el texto. Finalmente, y después de

muchas especulaciones en las que se pensó que sería rechazado, hubo humo blanco, y el pasado sábado 12 concejales votaron a favor.

Con el camino allanado, los 45 cabildantes debían avalar o negar la propuesta en la plenaria del Concejo que se realizó este miércoles.

Aunque se anticipaba que la votación sería positiva, el resultado final seguía siendo una incógnita, pues el Concejo no sólo es controlado

por una coalición opositora al alcalde, sino que las relaciones entre ambos poderes ha sido de choque desde el primer saludo.

Sin embargo, la aprobación llegó con amplia mayoría y contó con 36 votos a favor.

¿Que ganó el Concejo?

Según expertos consultados por Semana.com, el Concejo no sólo salió victorioso de este pulso por las modificaciones que le impuso al

alcalde, sino que también le hizo entender a Petro su fuerza y su importancia, en palabras de un político fue “un trato de ablandamiento que

le resultó al Concejo”.

Con las modificaciones, varias de las banderas propias de los concejales y de las de sus partidos se vieron incluidas en el PDD. Tal es el

caso de los animalistas, representados por Carlos Roberto Sáenz, de Progresistas y Clara Lucía Sandoval, de La U; en el tema de la salud se

siguió los cambios de Edward Arias, del Partido Verde, y en las políticas hacia los maestros se cumplió con lo sugerido por Álvaro Argote,

Celio Nieves y Orlando Santiesteban, del Polo Democrático. Por poner unos ejemplos.

Otro analista también resalta lo que quizás sea más importante: el hecho de que el Concejo se lavó las manos de futuros cuestionamientos o

juicios que se haga en los años venideros a esta alcaldía. “Los concejales no querían que se les fuera a señalar de haber sido el obstáculo de

Petro, un alcalde que promete tantos compromisos sociales, no les convenía asumir ese altísimo costo político”, explica una persona que

conoce muy de cerca la política de la capital.

La aprobación del PDD dejó en el ambiente una pregunta que hasta el momento no encuentra respuesta: ¿Por qué el Concejo pasó de los

insultos hacia Petro y terminó aprobando el Plan por amplia mayoría? El secretario de Gobierno salió al paso de los rumores y dijo que "no

ha habido ofertas de puestos ni presiones del Concejo".

¿Qué perdió la ciudad?

La ciudad perdió principalmente una institución y un deseo: La veeduría y la cultura ciudadana.

La veeduría vio significativamente reducido su presupuesto que le quitará los dientes que ya de por sí estaban poco afilados. Aunque el

alcalde había prometido, en el marco de un Foro organizado en el mes de abril por la revista SEMANA, que dotaría a este organismo un

presupuesto de 20.000 millones de pesos, la realidad es otra. En el PDD se aprobó que su presupuesto sería de 5.000 millones, la mitad de

lo que tenía durante la administración de Samuel Moreno.

Esta decisión también hizo dudar a su cabeza, Adriana Córdoba, esposa del exalcalde Antanas Mockus, de quien se especuló que podría

renunciar.

La cultura ciudadana también quedó ausente del PDD y no se contempló ninguna política que impulse esta bandera que durante la década

de los noventa y promovida por Antanas Mockus se convirtió en un faro para combatir varios de los problemas de la ciudad.

¿Qué ganó Petro?

La gran conquista del alcalde en la aprobación de ‘Bogotá Humana Ya’ es que se atreve a poner de nuevo en el centro de la agenda que la

administración pública debe estar por encima de los intereses privados. “Eso es histórico”, explica Jorge Gaitán, experto en temas de la

capital y editor adjunto de Razonpublica.com

Por su parte, la concejal Angélica Lozano, del movimiento del alcalde, Progresistas, destaca que el PDD responde con un programa muy

ambicioso en este campo. “El Plan de Desarrollo no sólo se compromete a darle inicio al Sistema Integrado de Transporte Público, sino a

construir con dos metrocables, las troncales de Transmilenio de la 68 y la Boyacá, introducir la red férrea y rescata del olvido la movilidad

humana, comprometiéndose a ampliar el número de corredores peatonales y de ciclorrutas de la ciudad”.

El otro tema que destacan desde el grupo político de Petro es el medio ambiente, una de las insignias durante la campaña a la Alcaldía de

Petro y el énfasis en la planeación alrededor del agua. “El plan se propone un abanico amplio de objetivos alrededor del agua que van desde

mejorar la calidad del agua del Río Bogotá, hasta renaturalizar quebradas en suelo urbano, pasando por la recuperación de 40 hectáreas de

humedales y el involucramiento ciudadano en estrategias de investigación y educación alrededor de la preservación de los territorios del

agua”, explica Lozano.

EL COLOMBIANO

FECHA. 31 DE MAYO DE 2012

Plan de Desarrollo de Bogotá pasó en el Concejo

Colprensa | Publicado el 30 de mayo de 2012

La plenaria del Concejo de Bogotá le dio luz verde al Plan de Desarrollo presentado por el alcalde mayor, Gustavo Petro, bautizado

como Bogotá Humana, y el cual fue respaldado con 36 votos a favor y 8 en contra y que regirá hasta el 2015.

Según el mandatario capitalino esto es "una demostración de que en el país se pueden lograr acuerdos sobre lo fundamental y así lo

demostraron las diferentes bancadas en el Concejo de Bogotá".

El Plan consta de 76 artículos y tendrá un costo global de 61.1 billones de pesos.

Para el secretario de Gobierno, Guillermo Asprilla Coronado, "se trata de un Plan supremamente ambicioso que llevará a la ciudad a dar

saltos históricos. El primero de ellos tiene que ver, por ejemplo, con la aplicación, el diseño, el desarrollo y la construcción del modo férreo

en la ciudad, que en el largo plazo cambiará totalmente nuestro sistema de movilidad, en armonía con lo ya desarrollado".

Según el funcionario, para esta Administración es importante "defender el medio ambiente y de construir una ciudad que respete los

espacios del agua, así como crear una política pública que garantice transparencia y defensa de lo público".

Por su parte, el secretario de Hacienda, Ricardo Bonilla González, expresó que el Plan "cumple con todos los criterios de legalidad jurídica

y con todos los requisitos y criterios para la organización presupuestal".

En cuanto a su financiamiento, Bonilla explicó que ya un 75 por ciento se encuentra aprobado y resaltó que el Gobierno Nacional acordó

"aportar 1.4 billones de pesos para el programa de vivienda a Bogotá, cuando el Distrito había proyectado 800 mil millones de pesos". En

cuanto a movilidad, el asunto que más preocupa a la capital, se contempla la posibilidad de que se apruebe un cupo de endeudamiento de

4,1 billones de pesos destinados a financiar las obras, siempre y cuando se sustenten con estudios técnicos.

Asimismo, el Secretario manifestó la decisión de la Administración Distrital de eliminar el cobro del alumbrado público, la cual fue uno

de los puntos claves para apoyar el proyecto de Petro.

LA REPUBLICA

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