Memoria y exilio en Delirio y destino deMaría Zambrano

Rose Corral, El Colegio de México

Porque la confesión es una acción, la máxima acción que es dadoejecutar con la palabra.

María Zambrano, La confesión: género literario

Reconocida en España sólo en los últimos años de su vida, a su regresode un largo exilio de cuarenta y cinco años, María Zambrano destacapor la profundidad y originalidad de su obra filosófica. Entreteje poesíay filosofía, motivos históricos y éticos con la reflexión sobre la concienciay la constitución del individuo. Parece que su obra ha cautivado muchomás a los poetas y escritores en general que a los filósofos 'profesionales'.El interés de María Zambrano por la poesía aparece muy pronto, enparticular durante la Guerra Civil, en Valencia, en los tiempos de Horade España. Su amistad con Emilio Prados, Luis Cernuda, José Bergamíny Ramón Gaya se prolongará en forma epistolar a lo largo del exilio. Aellos también dedicará varios ensayos. En algunos fragmentos de su libroautobiográfico Delirio y destino (subtitulado Los veinte años de unaespañola), María Zambrano rememora el papel que tuvo la joven poesíaespañola en el renacer de España, a finales de los años 20, y la repercusiónque tuvo también la lectura de estos poetas en su propia intimidad.1

Escrito a principios de los años cincuenta en La Habana, dondeentonces vivía, este libro quedará prácticamente inédito - salvo algunosfragmentos publicados en distintas revistas - hasta 1989, o sea casi hastael final de su vida.2 Aunque alude en la presentación de su libro a lascircunstancias externas de su escritura - la convocatoria de un premioliterario de la cultura europea para una novela o una biografía - resultaevidente que su escritura primero y finalmente, al cabo de los años, supublicación responden 'al afán de poner en claro mi vida'(ll); alusióntal vez al escritor español exiliado en México, José Moreno Villa, y a suautobiografía Vida en claro? También se refiere a la necesidad que quizástengan las nuevas generaciones de mirarse en una perspectiva histórica.Finalmente, concluye: 'La misma voz que me pidió entonces salir de mímisma y dar testimonio tal vez sea la que ahora me pide que lo publiqueespontánea y precipitadamente antes de morir'(12).

La primera referencia a este texto es contemporánea de su escritura: seencuentra en una carta de 1953 enviada por María Zambrano a su amigaRosa Chacel, también exiliada. María Zambrano le habla de su nuevolibro Delirio y destino, y comenta: 'No es novela. ¿Qué es? ... Desde un

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punto de vista objetivo, diría un catedrático de no sé qué asignatura, esla historia o el relato - seamos modestos - de los orígenes de la República.La primera parte acaba el 14 de abril. La segunda, que es más bien Epílogo,son Delirios, algo que me encontré escribiendo en París a ratos cuando el"daimon" me tomaba después de la muerte de mi madre'.4 Aunque apuntala dificultad de determinar el género de su nuevo libro, parece considerarloprincipalmente como un testimonio histórico y no como unaautobiografía ni como una confesión, género cercano, sobre el que habíareflexionado pocos años antes, al principio de su exilio.5 Esta reticenciatemprana que le impide asumir su libro como lo que es, o sea un textoautobiográfico - texto en ese sentido único en la obra de Zambrano -explica tal vez su renuncia a publicarlo por completo. No deja tampocode ser revelador que todavía en 1987, en un ensayo intituladoprecisamente 'A modo de autobiografía', manifestara de manera explícitasus reservas hacia el género autobiográfico: 'A modo de autobiografía,porque no estoy muy cierta de poder hacer de mí una biografía, a no seresas que he hecho ya, sin darme cuenta, en mis libros y sobre todo en mivida'.6 Aunque sabe que 'no basta con vivir', que la vida necesita lapalabra que la aclare, acaba afirmando: 'Lo que resulta imposible enprincipio es revelarse a sí mismo, es decir, hacer eso que se llama unaautobiografía, porque habría que hacerla en la forma más pura ytransparente, es decir, incluyendo los momentos y las épocas de oscuridad,en que uno no se está presente a sí mismo'.7 Por fin agrega: 'Me sientoincapaz de revelar mi propia vida, quería, por el contrario, que alguienme la revelara, ser Miguel de Cervantes, el que reveló a Sancho suverdadero ser'.8 No vuelve ya aquí sobre el ensayo de los años 40 dedicadoa 'la confesión'; es oportuno, sin embargo, recordarlo porque existe enDelirio y destino una confesión, la necesidad de la protagonista de revelarla propia vida, lo que entiende por su morir y re-nacer o segundonacimiento, que ocurre a finales de los años veinte después de una largaenfermedad. La confesión es un género de crisis, motivado porcircunstancias tanto individuales como históricas, que, según Zambrano,'no se hace necesario cuando la vida y la verdad han estado acordadas';es un 'acto en el que el sujeto se revela a sí mismo, por horror de su ser amedias y en confusión'.9 No hay autocomplacencia ni narcisismo enuna auténtica confesión, como puede haberlos en una novelaautobiográfica.10 En Delirio y destino también descarta la posibilidad denovelar su vida y opta por otro concepto de esta palabra: 'Sólo la vida;con la que quería reconciliarse hasta el fondo ... La vida en la verdad;vivir en la verdad. En una verdad viviente que nos invade y está ennosotros'(37).

Junto a la reconstrucción autobiográfica de una parte de su pasadocuidadosamente elegida, bien delimitada en el tiempo, y junto altestimonio de lo que llamará su 'generación' - el capítulo más intenso yconmovedor de todo el libro - hay preguntas y reflexiones más generales

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sobre lo que significa la escritura del 'yo', sobre la posibilidad y los límitesdel conocimiento propio, también sobre el papel de la memoria en elexilio, lo cual anticipa en varios sentidos su conocida 'Carta sobre elexilio' de 1961." En efecto, el impulso de verdad, de clarificación de lapropia existencia, no puede desligarse de otro que aparece muy pronto,desde las primeras páginas del libro: rescatar la 'historia sumergida' deEspaña, la que va gestándose en esos mismos años que abarca laautobiografía.12 Si no se recuerda y clarifica la historia, ésta se convierteen un 'oscuro sueño', en una pesadilla, en una suerte de fatalidad. Comolo había advertido una y otra vez en otros escritos suyos, durante laguerra en Hora de España, y después en los primeros libros que publicaen el exilio, España olvida con frecuencia su historia.

Aunque es evidente la parte testimonial de muchas de las páginas deDelirio y destino, no nos parece posible decir, como lo han hecho algunos,que la confesión que abarca sobre todo los primeros capítulos, el inciso'Adsum' o 'La multiplicidad de los tiempos', deriva después hacia lasmemorias y el testimonio histórico." Nos parece, por el contrario, quela construcción autobiográfica de Zambrano, su gesto esencial, consisteen la conjunción de dos 'gestaciones', íntimamente vinculadas: la propiay la de España despertándose por esos mismos años, y que culmina conel advenimiento de la República. Éste es precisamente el 'destino soñado'del cual nos habla a lo largo de la primera parte. En este destino soñadose funde la propia vida con la de la colectividad anónima, con 'el pulsode España'(54) dirá también. El sueño de ser 'uno más, uno entre todos',en el que incluso fantasea la desaparición de las clases sociales, sóloempieza a abandonarla en la derrota, después de cruzar los Pirineos, enenero de 1939, cuando está por concluir la rememoración de un ciclovital e histórico, el de su participación y entrega a la historia colectiva deEspaña: 'Sabía que para siempre se había desgajado de aquella multitudde la que formaba parte, como uno más, uno entre todos; se habíadesgajado para siempre, había vuelto a ser ella, otra vez, a estar "aquí",a solas consigo misma'(237).

Es en este contexto que debe entenderse la metáfora que desarrollaZambrano del nacimiento, de la necesidad de 'nacer por sí misma', o seade un verdadero nacimiento del cual podemos tener conciencia. Se refieresin ambigüedad a un estado 'pre-natal'(28), al hecho de vaciarse de símisma y de despojarse de la máscara o del personaje que asfixia el ser o lapersona. Retomará más tarde la misma imagen - 'uno que está naciendo'- para referirse al camino seguido por el exiliado en su destierro.14 Enuna suerte de ascesis, intenta liberarse de ataduras anteriores: 'todo habíaido cayendo; lo que se creía ser; su "ser" ... ya sabía que no era, queaquello, no era apenas nada'(21; subrayado nuestro). Y es desde estaextrema desnudez, sin proyectos propios, que nace en ella el 'sueño deEspaña'. De la siguiente manera lo formula la autora: 'Como no teníaproyecto y sí tan solo su pobreza a la que quería ser fiel - no edificaría

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nada sobre sí misma, no esperaría nada de sí misma, nada para sí misma- el sueño de España se le fue entrando y comenzó a vivir sola esesueño'(28). Otras autobiografías y memorias del exilio aluden a esteespacio excepcional de convivencia que fue España a partir del 31: piensosobre todo en la recreada por Rafael Alberti en La arboleda perdida, perotambién en la del solitario Moreno Villa, que a pesar de empeñarse entrazar su propio destino en Vida en claro, vive junto con los demás losacontecimientos históricos de esa década y durante ese breve período nole parece posible distinguir entre vida íntima y vida colectiva.

La fuerza que emana del testimonio de María Zambrano se origina en laintensidad de su mirada, enfocada casi exclusivamente en los años de gestaciónde estos cambios decisivos, antes de que ocurran los hechos mismos. Prefiererescatar la atmósfera que rodeó ciertos sucesos que demorarse en los mismos.Es notoria la lentitud con la que va narrando el nacimiento o renacer,prácticamente toda la primera parte, para finalmente condensar en muypocas páginas la salida de España en 1939, su partida a América, y elretorno a Europa en 1946. Casi podría decirse que la autobiografía abarca,en términos cronológicos, de finales de 1928 al 14 de abril de 1931. AunqueZambrano conserva en sus grandes líneas, para situar los hechos, un marcocronológico, trastoca el tiempo sucesivo - lo llama en otra parte 'el tiempocasillero'(113) - en la evocación de sus experiencias.15

La parte sustancial de Delirio y destino la ocupa la naturaleza de ese'destino soñado' que empieza o 'nace' en la más profunda intimidad. Dela intimidad, de la soledad e incluso del aislamiento físico (debido a laenfermedad) que recorre paso a paso, parece surgir el sueño departicipación colectiva. Si empieza a vivir sola este sueño como ella mismaafirma, también es cierto que entronca muy pronto con el sueño de sugeneración, una generación 'sacrificada' dirá, a la que dedica algunos delos capítulos más conmovedores de todo el libro, en particular el quetitula 'La inspiración'. Es probablemente en esta parte de la autobiografíadonde Zambrano muestra mayor empeño o voluntad por rescatar lahistoria sumergida o silenciada. Recuerda el anonimato de su lucha (nopertenecen a ningún partido), no buscan protagonismos ni heroísmos, ydestaca lo que llama su 'delirio de pureza condenado tan pronto por eldestino'(206): no aceptan los puestos y el poder que se les ofrecen cuandotriunfa la República. Evoca finalmente la muerte, también anónima, dela gran mayoría de ellos, de los que entraron 'desnudos en lahistoria'(210). La segunda parte, intitulada 'Delirios', la constituye textosbreves, muy libres, en donde los recuerdos se mezclan con la recreaciónde sueños, imágenes, escenas vividas, sin una referencia temporal precisa.Al final de la primera parte, los anuncia de alguna manera, cuando dice,al referirse de manera evidente a los años anteriores a la guerra, que 'Laesperanza fallida se convierte en delirio'(247). Por otra parte, en el prefacioreclama el derecho de incluirlos ya que 'no son una falacia de falsoensoñamiento'(12), o sea que también son a su modo verdaderos.

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Como sus libros de filosofía, tan pocos ortodoxos, podría decirse queDelirio y destino tampoco se parece a una autobiografía clásica. A pesarde que no cabe ninguna duda sobre la identidad de la joven española delsubtítulo, opta por la tercera persona - a veces por el 'nosotros' cuandose refiere a sus compañeros, y sólo en un par de páginas recurre al 'yo' -que resulta menos frecuente que la primera persona del singular. Es posibleque María Zambrano, ante la dificultad de asumir en su narración un'yo' rotundo, que le resulta demasiado imperativo y exclusivo, hayaintentado buscar un equilibrio entre lo que le sucede a 'ella', laprotagonista, y lo que le sucede a España. Frente al 'yo', la tercera personaestablece también cierta distancia con la materia narrada y manifiesta undeseo de impersonalidad, a tono con la experiencia central del 'no-ser' oel 'ser apenas' que constituye el trasfondo de la confesión de MaríaZambrano. Por otra parte, la inclusión de los textos más creativos oimaginativos que conforman los 'Delirios', junto con la inserción dereflexiones sobre el género en el mismo texto, constituyen otros de losrasgos innovadores de Delirio y destino. A esto último habría que agregartambién la pluralidad de caminos que su escritura explora - y eso escomún a sus demás libros - a lo largo del recorrido autobiográfico: seadentra con soltura y pasión en la poesía, en la filosofía y en la historiade España, en la pintura y la música también.

Aunque afirma en el ya citado texto de 1987, 'A modo deautobiografía', que su biografía aparece, de manera involuntaria, en loslibros que ha escrito, en ninguno existe sin embargo la intención devincular de manera tan estrecha vida o destino individual e historia,como lo lleva a cabo en Delirio y destino. Uno de los puntos culminantesde su testimonio, de la lenta gestación del 'destino soñado', lo constituyela fusión o unión del yo con los otros. Es cierto que la franja de vidaelegida es sin duda única: no habrá ya para ella ni para los españoles laoportunidad de vivir otro sueño parecido, de comunión y plenitud.También es sintomático que María Zambrano elimine de surememoración el desencanto y los problemas que surgirán desde losprimeros años de la República. Centrar su autobiografía sobre los años1929-1931 le permite destacar el momento utópico y esperanzado delcambio. A partir de la ruptura de la guerra y del exilio, el exiliado seconvierte en 'memoria. Memoria que rescata', memoria histórica quenecesita establecer, para sobrevivir, una mínima continuidad entre el antesy el después de la guerra.16 La construcción o reconstrucción de estacontinuidad desde el exilio es el telón de fondo, me parece, de varios delos textos autobiográficos del exilio español. Aunque la narración acaba,en Delirio y destino, en el umbral del exilio, aparece ya aquí esbozado el'ser del exiliado', obligado a 'nacer' o 'renacer' después de la agonía dela guerra. En este sentido Delirio y destino es un texto clave para entenderel origen y la evolución posterior de la ininterrumpida reflexión de MaríaZambrano sobre el exilio. Su actitud frente al pasado que empieza con

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este libro, la necesidad de contar su historia, que comparte con otrosescritores del exilio, le hará escribir pocos años después: 'Lo pasadocondenado - condenado a no pasar, a desvanecerse como si no hubieraexistido - se convierte en un fantasma. Y los fantasmas, ya se sabe, vuelven.Sólo no vuelve lo pasado rescatado, clarificado por la conciencia; lopasado de donde ha salido una palabra de verdad'.17 En su 'Carta sobreel exilio', de manera todavía más radical, agregará que el exiliado es'memoria y conciencia', la conciencia de un país que después de la guerrase abandona al olvido. El vasto campo de la memoria, la recurrencia aveces obsesiva del pasado, es lo único que le queda al exiliado. MaríaZambrano eligió contar en Delirio y destino el sueño privado y colectivode una historia construyéndose entre todos. Esa fue 'su palabra de verdad'.

NOTAS

1 Delirio y destino. (Los veinte años de una española) (Madrid: Mondadori,1989). De aquí en adelante se citará en el texto, siguiendo esta edición.

2. Se publicaron algunos fragmentos en la revista cubana Orígenes, en larevista italiana Botteghe Oscure, en los Cuadernos del Congreso por laLibertad de la Cultura de París, y en La Licorne de Montevideo.Finalmente, dos capítulos ya habían aparecido en forma de libro: Elnacimiento. (Dos escritos autobiográficos) (Madrid: Entregas de la Ventura,1981).

3. Publicada por El Colegio de México en 1944. Es probablemente la primeraautobiografía que se publica en el exilio.

4 Cartas a Rosa Chacel, ed., intr. y notas de Ana Rodríguez-Fischer (Madrid:Cátedra, 1992), pp. 45-46. En la misma carta, Zambrano le cuenta a suamiga las dificultades que tiene en aquellos años para publicar Delirio ydestino; recibe varias propuestas que finalmente no se concretan. Estascartas nos informan por lo menos que sí tuvo la intención de publicarlo,pero que tal vez ante estas dificultades abandonará este proyecto que sóloretoma al final de su vida.

5. Aunque ha sido publicado en forma de libro - La confesión: géneroliterario (Madrid: Mondadori, 1988) - la primera versión de este textoaparece en la revista Luminar (México), 5 (1941), pp. 292-323, y 6(1943), pp. 20-51. Se citará aquí por la edición de Mondadori.

6. Este texto fue publicado en el homenaje que le hizo la revista Anthroposa María Zambrano: véase María Zambrano. Pensadora de la Aurora,Anthropos, 70-71 (1987), 69-73.

7. Anthropos, 70-71 (1987), p. 69.8. Anthropos, 70-71 (1987), p. 70. En otro fragmento del mismo texto

alude a la dificultad de asumir un 'yo' rotundo, seguro de sí mismo:prefiere exhibir su fragilidad, su precariedad, lo que hará también porcierto en Delirio y destino: 'lo que más me ha costado trabajo es asumireste yo, el yo he hecho esto, el yo, no puedo con él. Yo no soy nadie, yo

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no soy ninguno y cómo si no soy ninguno puedo tener una autobiografía';esta cita también de la pág. 70.

9. La confesión: género literario, p. 16.10. 'El que se novela, el que hace una novela autobiográfica, revela una cierta

complacencia sobre sí mismo, al menos una aceptación de su ser, unaaceptación de su fracaso, que el que ejecuta la confesión no hace demodo alguno': La confesión: género literario, p.17.

11. Véase en La razón en la sombra. Antología del pensamiento de MaríaZambrano, ed. de Jesús Moreno Sanz (Madrid: Siruela, 1993), pp. 381—91.

12. María Zambrano emplea esta expresión en su 'Carta sobre el exilio',reproducido en La razón en la sombra, ed. Moreno Sanz, p. 389.

13. Véase José Antonio Ugalde, 'Modos de subjetivación en María Zambrano:no ser apenas', ínsula, 509 (1989), 11-12.

14. Al referirse al camino seguido por el exiliado, dice: 'Ir despojándosecada vez más de todo eso para quedarse desnudo y desencarnado; tansolo y hundido en sí mismo y al par a la intemperie, como uno que estánaciendo; naciendo y muriendo al mismo tiempo, mientras sigue la vida':La razón en la sombra, ed. Moreno Sanz, p. 382.

15. Mucho más tarde, se referirá de nuevo a este tiempo, inadecuado pararevelar al ser: 'Mal tiempo, el sucesivo, para la integración de la persona,que no puede darse más que a partir de un renacer. Y el renacer desde unmorir. La confesión literaria ha de mostrar, antes que nada, esta muerte':El sueño, creador (Madrid: Turner, 1986), p. 131.

16. Lo dice en la 'Carta sobre el exilio' reproducida en La razón en la sombra,ed. Moreno Sanz, p. 389.

17. La razón en la sombra, ed. Moreno Sanz, p. 389.