Mercurial Eclesiástica

17
Mercurial Eclesiástica Enviado por AniVelastegui, Oct 2012 | 31 Páginas (7,597 Palabras) | 38 Visitas | 1 2 3 4 5 Denunciar | Biografía y Obras de Don Juan Montalvo El Cosmopolita, hombre íntegro, de limpia conciencia de, ejemplar moral; cuya pluma le sirvió para combatir a tiranos e inmorales; desplegó una vida de constante lucha por la búsqueda de la libertad y la justicia. He aquí su vida, su obra y su gloria. El primer Montalvo en llegar al Ecuador fue don José Santos Montalvo, abuelo de Juan Montalvo; quien fue maestro de capilla en la Iglesia De Guano, que a la vez fue cuna de Don Marcos Montalvo y éste, padre del Cosmopolita. Marcos Montalvo fue un hombre loable de empeño, trabajo y constancia. En estos peregrinajes Don Marcos llega a Ambato; conoce a Josefa Fiallos con quien forma la Familia Montalvo-Fiallos y se radica en la ciudad que más tarde sería la cuna del Ilustre ambateño. De este matrimonio nacieron ocho hijos, entre ellos Juan, quien nace en la ciudad jardín del Ecuador un 13 de abril de 1832. Sus hermanos fueron: Francisco, el primogénito, notable abogado que ayudó a su hermano Juan llevándolo a la capital para que realice sus estudios; Francisco Javier, quien fue Rector del Colegio Bolívar de Ambato y San Fernando de Quito; sus hermanas: Alegría, María Rosa, Rosa Juana e Isabel, quienes junto a su hermano Carlos,

Transcript of Mercurial Eclesiástica

Page 1: Mercurial Eclesiástica

Mercurial EclesiásticaEnviado por AniVelastegui, Oct 2012 | 31 Páginas (7,597 Palabras) | 38 Visitas

|

1 2 3 4 5

Denunciar

|

Biografía y Obras de Don Juan MontalvoEl Cosmopolita, hombre íntegro, de limpia conciencia de, ejemplar moral; cuya pluma le sirvió para combatir a tiranos e inmorales; desplegó una vida de constante lucha por la búsqueda de la libertad y la justicia. He aquí su vida, su obra y su gloria.El primer Montalvo en llegar al Ecuador fue don José Santos Montalvo, abuelo de Juan Montalvo; quien fue maestro de capilla en la Iglesia De Guano, que a la vez fue cuna de Don Marcos Montalvo y éste, padre del Cosmopolita.Marcos Montalvo fue un hombre loable de empeño, trabajo y constancia. En estos peregrinajes   Don Marcos llega a Ambato; conoce a Josefa Fiallos con quien forma la Familia Montalvo-Fiallos y se radica en la ciudad que más tarde sería la cuna del Ilustre ambateño.De este matrimonio nacieron ocho hijos, entre ellos Juan, quien nace en la ciudad jardín del Ecuador un 13 de abril de 1832. Sus hermanos fueron: Francisco, el primogénito, notable abogado que ayudó a su hermano Juan llevándolo a la capital para que realice sus estudios; Francisco Javier, quien fue Rector del Colegio Bolívar de Ambato y San Fernando de Quito; sus hermanas: Alegría, María Rosa, Rosa Juana e Isabel, quienes junto a su hermano Carlos, fueron un pilar fundamental en la vida de Montalvo.Su niñez se vio marcada por varios acontecimientos; cuando tenía apenas cuatro años, fue atacado por la viruela, la visita del Presidente de la República Dr.

  Vicente Rocafuerte, a la escuela donde el niño Juan estudiaba, impresionó gratamente a este pequeño. Sus estudios primarios los cursó en la escuelita unidocente del profesor Romero, a quien lo recordara con poco cariño por ser severo y poco ilustrado.Juan María al terminar sus estudios primarios, siente amor y pasión por la naturaleza; entonces decide refugiarse en la propiedad de Baños; lugar que recuerda con nostalgia desde sus múltiples exilios. Por el año 1848, ingresa en el Colegio San Fernando de Quito, donde perfecciona sus estudios de Gramática Latina y castellano, en 1851 se gradúa de Maestro en Filosofía con las más altas calificaciones.

Page 2: Mercurial Eclesiástica

Ingresa a la Universidad a la Facultad de Jurisprudencia, donde permanece dos años, pues José María Urbina decreta la libertad de estudios y Juan decide auto educarse en la Quinta de Ficoa y de Baños lugares predilectos de él.Su anhelo de adolescente se ve cumplido cuando en 1857, sale rumbo a París la ciudad luz; recorre algunas ciudades del Viejo Continente, visita museos del arte, ciencia, monumentos y más sitios históricos; donde corrió sediento a las fuentes de la Ciencia y bebió de ella su dulce néctar. En París es nombrado secretario de la Legación del Ecuador en Francia.En aquellos años la situación socio-política de país se encontraba en un declive gobernado por los Conservadores, principalmente por la Dictadura Garciana, al cual tuvo lugar por un período de 15

años 1860- 1875, período en el que se rige el pensamiento saturado por el fanatismo religioso y un accionar tiránico.Es entonces cuando Montalvo, hombre universalmente consagrado por su saber y de carácter de luchador abnegado y tenaz, empuñó su pluma y combatía las tiranías de Veintimilla, Urbina y García Moreno, enviándole una carta a este último, con el afán de ver a su patria querida coronada de los diamantes de la libertad y justicia.Don Juan Montalvo   también se dio tiempo para el amor. Se enamoró de María Adelaida Guzmán quien tras dos años de romance llegará a ser su esposa, y la madre de sus hijos; el primero de ellos Juan Carlos Alonso, quien muere a temprana edad, luego nacerá María del Carmen; pero lamentablemente María Adelaida sufre en silencio la ausencia de su esposo, y emprende su camino al más allá.El 17 de enero de 1869 cae el gobierno de Javier Espinoza y García Moreno asume las facultades de Dictador y con ello, la libertad, los derechos, la paz y la Justicia son lesionados; ante estos acontecimientos, y como su vida corría peligro, Montalvo escoge el camino de autoexilio refugiándose en la ciudad colombiana de Ipiales, posteriormente se dirige a Panamá donde se encuentra con su amigo Eloy Alfaro quien le ayuda a financiar su segundo viaje a ParísEsta es la época por excelencia en la que florecen sus   escritos: El Cosmopolita, Siete Tratados, Capítulos que se le Olvidaron a Cervantes, El Descomulgado,

La Dictadura Perpetua entre otras. Lamentablemente la vida de Montalvo se ha visto llena por muchos infortunios, enfermedades, destierro, despotismos; pero pese a todos estos argumentos es el más claro ejemplo de que: “Su vida fue una llama al viento, y éste la inflamó”. Byron Robalino   París su Ciudad, Luz es golpeada por un crudo invierno que afecta la salud del ilustre ambateño. En mayo de 1888 se enferma gravemente de pleuresía, el 17 de enero de 1889, el Cervantes de América cerraba sus ojos para siempre, emprendiendo el viaje a la eternidad A continuación su amplia producción literaria:  * Las Catilinarias  * Geometría Moral  * Capítulos que se le olvidaron a Cervantes  * La Mercurial Eclesiástica  * El Espectador  * El Regenerador  * Los Envenenadores del Obispo  * Ciudad de los Techos Verdes.

MERCURIAL ECLESIÁSTICA              Obra escrita en París en 1884, con la cual Juan Montalvo responde al Arzobispo de Quito Ignacio Ordoñez; por haber censurado y prohibido la lectura de   los SIETE TRATADOS. Con venganza y odio político, el Arzobispo Ordoñez considerándose ofendido él y el Clero, toma tal decisión autoritaria, quizá por defender oscuros intereses clericales a los cuales el Caballero de la pluma con pensamiento y alma nacidos para la batalla literaria, disciplinó con sus escritos de fuego,   los oscuros sentimientos del clero. Con elegancia y pulcritud Montalvo desencadena

Page 3: Mercurial Eclesiástica

despiadadamente tanto la vida como la Pastoral de José Ignacio Ordoñez.El Obispo a través de una Pastoral marca a Montalvo como hereje, impío de los dogmas de la fe católica, motivos suficientes para reñir su obra despectivamente. Entonces, sí, el cuestionador sentirá el peso del incomparable crítico en la Mercurial Eclesiástica. La época del ilustre escritor ambateño se ve marcada, por una hegemonía clerical que manejaba al país como si se tratara de su propia hacienda. El poder Legislativo se encontraba a manos de la aristocracia clerical, imponía leyes como la pena de muerte, efectuaban el destierro, la persecución; es decir creaban un ambiente de malestar social, siempre apoyados por la dictadura de turno.El poder económico se concentraba en manos de la Iglesia, poseían joyas, eran dueños de los latifundios, cobraban los famosos diezmos, los cuales eren autorizados por la Constitución.Bajo estas premisas y rodeados de un ambiente en donde el fanatismo religioso reinaba, los pocos hombres de pensamiento liberal de aquellos tiempos; juntaban su hombro para neutralizar la intervención de los religiosos en las cuestiones del Estado, razones por las cuales se entablan un sin número de querellas políticas encarnizadas.Esta situación predominante   de la clerecía en el Ecuador, usurpando poderíos que no le competían ejercer, otras funciones que no sean las que deben cumplir; hizo que Montalvo que coexistió esta

experiencia creyera incorrecta tal situación. Por un lado los gobernantes de la Iglesia, aristócratas, conservadores y teocráticos. Por otro lado el Cervantes de América Libre Pensador, demócrata, verdadero cristiano; la paradoja estaba bien definida.  

          La obra inicia con una crítica a José Ignacio Ordoñez, Arzobispo de Quito quien censura sin sentido ni gloria sus SIETE TRATADOS, tachándola   de inmoral, herética y blasfemia. Pero a Juan esto no le importa; pues grandes hombres de la sociedad mundial de aquel tiempo sostienen que: el libro es pura moral y profunda filosofía.Menciona Montalvo que él es un hombre sencillo, y que por el mismo hecho no menciona los calificativos benevolentes que le otorgan aquellos sabios en Literatura; los cuales rondan es su cabeza cual música arrulladora y lisonjera. Cantú, hombre influyente, justo y sabio   en aquel tiempo mira en Montalvo rectitud moral y elevación. Luego falta a la moralidad quien dice no haber visto sino perversidades y mentiras.El uno juzga como filósofo, el   otro como necio, y ejecuta como verdugo, es necesario mencionar aquella máxima de Solón: “hombre sin buenas costumbres no puede gobernar”, Montalvo agrega: “clérigo de malas costumbres no puede predicar, las excepciones que hago con ciertos sacerdotes de virtud, les hará entender que no soy enemigo ciego del clero. Lo que pido   es clero ilustra, recto y virtuoso, útil; no ignorante, torcido,

perjudicial”.Cuando pensamos en El Hombre Cuerdo, debemos tener muy en claro que: Cordura, es prudencia, es benignidad, es mansedumbre. El hombre cuerdo se salva cada día y salva a sus semejantes; el precipitado, violento y furioso, se pierde y sacrifica a los que tiene la desgracia de seguirle.Al momento en el preclaro escrito ambateño, utiliza el Principio de Bufón no lo hace sino como una metáfora de comparación, pues menciona que lamentablemente el pueblo de la época, poco ilustrado y nulo conocedor de los asuntos humanos; se deja dominar por el Poder que ejerce la religión, y sobre todo por aquellos actos ilícitos, como aquel derramamiento de sangra que provocó Ignacio Ordoñez.Llegamos a la hora de El asesinato del cirujano de los Académicos, es aquí cuando don Juan Montalvo sin temor alguno afirma que: La Revolución Francesa fue obra de los clérigos, mucho hacen estos, mucho dicen; y como conclusión nosotros decimos que cuando, el mismo pueblo dominado y oprimido por el poder eclesiástico, abre los ojos sin piedad y es incontrolable su furia y   perversidad. Y es allí cuando el Cosmopolita alega que después de muchos años un escritor de su clase dirá: Montalvo salió desterrado por hereje y murió a manos del Arzobispo de Quito.Cuando se dirige a las Ruinas de Itálica se encuentra con un hombre, el mismo que le

Page 4: Mercurial Eclesiástica

servirá de guía en el recorrido; pero ¡oh sorpresa! Aquel ciudadano en el pasado fue Fraile de una

congregación; entonces el Cervantes de América hace lo posible por desligarse del personaje, y emprende su camino solo hacia las ruinas. Mientras continua con su ruta hace un llamado de atención a los dueños de la Iglesia; les aconseja. Ser sabios, ser cuerdos, pues solo de esta manera su imagen será la correcta y la gente los venerará y no atentará en contra de ellos.Los Modelos Pastorales, no son otra cosa que prototipos de virtud, los cuales debe poseer un sacerdote; señala a dos grandes de la Iglesia: Dupanloup, cortesía de hombre, que gracia de literato, elocuencia de sacerdote. Gilbert Obispo de París, hombre comedido, escritor remirado y Obispo cuerdo. Hace alusión a Ignacio Ordoñez cuando dice que la caridad ha de ser modesta y callada, no modesta y brutal; cuando asegura que mil veces es mejor ser llamado SEÑOR, DON, CABALLERO, y no por un título académico o eclesiástico que lo único que hace es corromper a la persona.Expone que él jamás ha ofendido a los clérigos, no ha hecho otra cosa sino ponerlos en su lugar; pues son lobos que acometen, ahuyentan y dispersan a la gente, especialmente a mí dice. Asegurando que no es necesario ir a una Iglesia para estar en la presencia de Dios, ni tampoco cumplir los actos religiosos por un mero compromiso con la sociedad; sino hacerlo en cualquier lugar en cualquier momento, y con el convencimiento firme de sentido, fe y convicción.El Río de Sangre, los Albigenses, los

Templarios, los Hugonotes. Es hacer memoria y mencionar a aquellos personajes y sectas que derramaron sangre por no cumplir los mandatos del Catolicismo; es mirar hacia atrás y ver como: razas enteras exterminadas, pueblos enteros echados al mar o al desierto. Y se pregunta: esta es la mansedumbre, ¿Esta es la misericordia de la secta que nos condena por malos y perjudiciales?, y encuentra como respuesta que solo cuando   la verdad y la virtud lleguen al centro, Dios reinará, sus ministros serán justos y los pueblos libres y felices.Menciona a Bossuet, a quien le considera; gran clérigo, sabio y elocuente amigo de las virtudes. Bossuet, era hombre puro, fanático de convicción; cuya fanatismo no se detenía ni en la crueldad ni en la barbarie. Admira a aquel hombre, cuyo discurso acerca de la Historia Universal, es el hombre que lo deslumbra y domina.En cuanto a Enrique VIII y Felipe II; no está a favor de las persecuciones que realiza el primero, reprende duramente las tesis reformadoras del reformador católico español, pero lo único que desea es: que se note es que el filósofo, el cristiano tolerante y generoso, el sabio, el bienhechor del género humano, el amante de la libertad; jamás han sido verdugos de los católicos.Es aquí donde tacha al Obispo Ignacio Ordoñez de ignorante, porque el desconoce de la historia; y llamar mentira a la Historia, no es enseñar; llamar blasfemia a la verdad no es predicar; es por esto

que cuando se somete a un pueblo a través del engaño y la falsedad, este con el pasar del tiempo reacciona, se siente avergonzado de sí mismo y responde de manera violenta, sin haber poder humano que lo detenga.   Muera el que Piensa, sin lugar a duda, es una crítica muy bien elabora a la falsedad y doble discurso del Arzobispo Ignacio Ordoñez, a quien lo compara con Caín pues el Obispo sigue la doctrina de aquel personaje bíblico repudiado ya hace mil años y lo hace de una manera vil cuando lo llama hermano e hijo, y al mismo tiempo está buscando que su “hermano” claudique.Aunque muchas veces el error triunfe desacertadamente, pues prohibir, no es discutir, el que prohíbe no convence, el que en vez de enseñar insulta, no hace otra cosa que poner en manifiesto el vacío de su pecho y la hosquedad de su cabeza. La Iglesia castiga a sangre y fuego a los que creen en la fuente de sus propias máximas, esto se da cuando el clero pone en el infierno a la máxima autoridad en filosofía Aristóteles y por ende a Santo Tomás; después de que de ellos provienen sus bases y cimientos.

Page 5: Mercurial Eclesiástica

Entonces el ilustrísimo Ignacio Ordoñez, Obispo de Quito no tiene muy en claro su ideología cuando de forma represiva manda: al infierno por enemigo de la Iglesia, al infierno por amigo de la iglesia; al infierno por pagano, al infierno por cristiano; al infierno por judío, al infierno por católico.Del Ayuno: “En tiempos de cuaresma, dice la Santa

Iglesia hacer mayores esfuerzos para desprendernos de las cosas de la tierra, con la saludable mortificación del ayuno”. Es aquí donde don Juan Montalvo disputa la equivocada concepción de la Iglesia en lo que respecta a las costumbres de la Semana Mayor para los católicos; y hace mayor referencia a esa terrible tradición, que manifiesta que el comer queso durante los días de cuaresma y en la Semana Santa otorga el perdón de los pecados, a la vez la gente que lo hace, se vuelve más católica y mantiene puro el espíritu.Lo que el desearía fervorosamente es que para evitar las tentaciones del robo, la envidia, la murmuración, comieran algo. De la mentira, el engaño, la murmuración, la calumnia, la codicia, NO los salva el queso. Por otro lado, no le parecen correctos los castigos exagerados que imponen los sacerdotes como penitencia, para otorgar el perdón de los pecados; sino que por el contrario manifiesta: “Si a mí me dan de penitencia que me regale de día y de noche con aves y suspiros de hermosas, cuente conmigo el señor Obispo, como el primer católico de la cristiandad”.             Cerciora que no sabe quien reina en nuestros clérigos, o la ignorancia o la insensatez, ya que no hay en el mundo secta más sutil que ésta y pícaros más acomodadizos entre ellos que los devotos. Es muy horrendo darse cuenta como la gente de la religión católica cree que con una simple comida se acerca a la gloria, y no hay como reprocharles

nada a los clérigos, porque ahí está el infierno, discuten entre judíos, musulmanes, budistas y católicos por la verdad, sin darse cuenta que ella no se revela ni se muestra sino al filósofo, al pensador, al sabio, a todo aquel de quien la fuerza de la virtud se pone en contacto con la divinidad. La Fe Viva: Oigamos luego otra verdad en boca de uno que no gusta de ella. Nuestros mayores dice el ilustrísimo señor Ignacio Ordoñez, en tiempos mejores que los nuestros, no tenían sino que lamentar los pecados en que la malicia y la fragilidad humana los habían hecho caer, y como conservaban viva la fe se volvían a Dios de veras, su arrepentimiento era sincero y su conversión verdadera”.Sostiene como falsa la afirmación antes mencionada ya que poca fe habrá habido en esos tiempos mejores que los nuestros, cuando las dos terceras partes de los cristianos han perecido en las llamas por hereje, brujos, masones y judíos, pero que equivocada es la concepción de que antes todo era mejor pues que nos dice el ilustrísimo Arzobispo de Quito cuando mencionamos que: el padre Torquemada, fue mil veces inquisidor y ocho mil asesino. Para el escritor invencible no hay mayor honor que morir en la hoguera a causa de sr un hombre recto y honorable, antes que estar predicando fuego y sangre como el impuro Ignacio Ordoñez.   Señala Juan Montalvo: “Si el aguijón de amor pica, excusado es poner tregua; va el caballo tras la yegua, y el

asno tras la borrica, rebuznando”. Estas palabras fueron referidas a Ignacio de Veintimilla, quien cuando veía acercarse el final de su nefanda vida pública dirigiéndose a los liberales decía: “Pero no saben que les he de dejar a Ordoñez2, y así fue lamentablemente ese fue el castigo que nosotros recibimos del malvado y cruel tirano.La Fe en la Aldea: “porque la palabra del sacerdote es tan poderosa en los campos, donde la escuchan los pobres y los sencillos? Los pobres y los sencillos tienen la dicha imponderable de conservar viva la fe”¡Hay! Pero qué gran verdad es esta, y al mismo tiempo una terrible contracción con la personalidad del Arzobispo de Quito excelentísimo señor Ignacio Ordoñez; pues el no es ni pobre ni sencillo, no conserva viva la fe, no es ni pobre puesto que en su país lo llaman burro de oro, no es sencillo puesto que es clérigo de hacha y machete.   Con certeza en el campo, en las aldeas, la fe es poderosa; pero el orgullo fuera grande si

Page 6: Mercurial Eclesiástica

esto sucediera en las ciudades, donde viven los inteligentes y los cultos donde se concentra la verdad y donde las ideas reinan, y se ponen por encima de la sencillez que caracteriza a la gente del campo.

Ruina de las Almas: “Las almas se arruinan porque la fe se ha perdido”. La fe se pierde cuando se deja de pregonarla, o cuando de manera arbitraria se quiere someter a una nación a ser esclavos de la misma. Montalvo menciona que para él Ordoñez está muerto,

pero aun esto debe sr falso, pues dicen que los difuntos no muerden. Pero llega a concluir que él no se mete con los difuntos y menos con aquellos deslenguados y barbaros que han perdió el sentido de humanidad.Malas Señales: “Queréis saber cuáles son las malas señales de la pérdida fe? dice el Obispo muerto, esa sed, esa ansia de los bienes puramente temporales, ese deseo, esa inquietud por alcanzarlos, ese desconsuelo, esa desesperación una vez haberlos perdido, ved ahí una señal de que se ha apagado al fe”Es muy triste decir que la fe entre ningún género de personas está más perdida que entre nosotros los católicos, pero lamentablemente es la realidad, pues nosotros nos hallamos en esa sed de bienes puramente temporales, y el Señor Obispo de Quito si está muerto, no podrá resucitar, pero no lo que es peor no podrá hacer resucitar la fe en el pecho de todo aquel hombre sabio e ilustrado que no se deja dominar por la religión, sino por la razón.     El Teatro: “El teatro causa lamentable daño en las buenas costumbres, y por esto no concurren jamás a él quienes sabes apreciar en lo que valen, la virtud y la inocencia”Que equivocada estaba Ignacio Ordoñez cuando hizo uso de esta frase, pues si nos remontamos al pasado podemos observar que ni Sófocles ni los griegos inventaron el teatro, lo cultivaron como causa de daño de las buenas costumbres. El teatro es escuela de virtudes después de una pieza trágica; el poeta

que sabe su deber, el gran poeta, el poeta verdadero, siempre tiene un fin moral elevadísimo en sus composiciones. Esto no es causa para que un clérigo que juzga al teatro por los títeres que él ha visto, no pueda alzar la voz contra la forma más bella de la inteligencia. Pues ilustrísimo padre Ignacio Ordoñez afirma que no concurre jamás al teatro ya que este corrompe las virtudes.

Acaso el cabo Ordoñez no sabrá que la aristocracia francesa y española, aquellas señoras católicas, apostólicas, romanas, tienen palcos de su propiedad en los teatros principales. Nadie ignora que en Roma se encuentra uno de los más célebres teatros de Europa, el Apolo, y no hemos sabido que el Papa haya prohibido la visita a este cultural lugar. Y entonces señor Obispo porque ese rencor y desprecio a la cultura por qué esa difamación al arte.

Los Malos Libros: “Los malos libros dice su señoría, nos ponen en contacto con la gente más ruin, nos hacen intervenir en escenas inmorales”. En este pasaje Montalvo realiza comparaciones entre el budismo y el catolicismo, ya que para él los dos poseen costumbres similares. Pero tristemente estas costumbres son muy denigrantes y no aportan provechosamente a favor de la virtud; sino que por el contrario aterran y deshonran a todo aquellos quienes tienen que cumplirlas. La Novela: “ Quienes son sino los héroes de las novelas? ¿Quiénes sino los adúlteros, ladrones y los asesinos? Siento decirle

al señor Obispo que en ese concepto, el no puede ser héroe de novela, pues que libros que novelas habrá leído el ilustrísimo? .Las novelas están rodeadas de personajes de alta virtud, de grandes ejemplares de moral y claridad.Hay muchos ejemplares de novelas y novelistas en las que uno cae de rodillas ante aquella personificación   de la fraternidad y unidad humana. Pero que sabe de estas cosas Ignacio Ordoñez, el piensa que la novela es   cosa del diablo y la prohíbe como perjudicial; pues no las ha leído y por eso no ha entendido todos aquellos mensajes que nos dejan estos sabios escritos. Como aquella de Saint Pierre el ejemplo de 2 niños que muestran

Page 7: Mercurial Eclesiástica

sumisión y respeto a sus padres.Pero que dirá el reverendísimo Obispo, que se creerá para cuestionar de casa de mancebía   a “Fabiola”, cuyo escritor es el honorable y respetable Cardenal Wisemán; si el héroe de una novela es un ladrón, adultero y asesino, el novelista sirve de juez, juzga a ese delincuente y lo entrega al verdugo, de este modo la moral queda triunfante. Pero realmente es incomprensible todo el odio y aborrecimiento de parte de Ignacio Ordoñez a aquellos novelistas, que no hacen otra cosa sino a través de sus historias dejar sembradas moralejas que sirven como testimonios de vida.   La Vergüenza:”Con las malas lecturas se va perdiendo poco a poco el respeto a la religión, la vergüenza y hasta el propio pudor natural”. El pudor natural es lo primero que

pierde el hipócrita aquel que censura a los demás sin razón ni motivo.Es cuando refiriéndose al Arzobispo de Quito Montalvo cita que: vergüenza es lo que siente aquel clérigo, es odio, venganza, horror, pasiones de Satanás, le dice que la vergüenza es fiel compañera de los que se oponen a las buenas obras; la vergüenza es fuego del espíritu porque denigra la personalidad del hombre y a él lo hace fracasar.Suerte del Cajista; nunca, nunca se ha visto prelado ni cura que no se sienta contento con mandar a los infiernos a los escritores, porque todos dicen contribuyen a la ruina de las almas.Recuerde cabo Ordoñez cuando Ud. era presidiario de las almas y atemorizaba a la gente de Riobamba menciona el Cervantes de América; y a continuación recuerda que el cajista no hace otra cosa que cumplir con su oficio; él no sabe que libros le parecerán al Señor Obispo ilustrativos, y que libros considera su excelencia herejes.Porque en vez de censurar el trabajo digno del cajista señor Ordoñez, no censura la maldad de sus curas cuando niegan la sepultura a un hombre pobre mientras su familia, no le pague mínimo cien pesos; que corrompida y corrupta está la Iglesia que asombroso.Tristeza y Amargura: “En verdad venerables hermanos y queridos hijos el autor de los Siete Tratados ha llenado nuestra al ma de amargura, y nos ha causado profunda tristeza, porque se manifiesta muy a las claras enemigo, no solamente del clero, sino de

la Iglesia Católica”Pues Montalvo niega esta afirmación al decir: “Mi veneración por los grandes sacerdotes que han sido honra; no de su clase solamente, sino también del género humano”, expone no ser enemigo del Clero sino de todos aquellos fanáticos que infunden miedo refiriéndose claramente a Ordoñez, la hiel que se está derramando de su pastoral, no indica al pastor sino al clérigo lobo que lleva dentro.Es mejor temer menos la espada del enemigo militar que los medios ocultos y criminales de los enemigos de sotana. Pero no nos queda más que el firme convencimiento, que los jóvenes, inteligentes, nobles y de firme confianza no le creen al tirano de sotana ellos hacen prevalecer sus ideales por sobre todas las cosas y son quienes sacará adelante al país.     Dar Buen Consejo: “Condenamos pues esa obra porque contiene proposiciones heréticas, máxima escandalosas y principios contrarios a los dogmas revelados” Critica duramente la actitud ambiciosa del Clero cuando quieren los sacerdotes sacar provecho hasta del infierno, recuerda cuando el niño le visita un chagra de su tierra y muy comedidamente le solicita sea el padrino de bautizo de su hijo, el con gusto acepta; pero el sacerdote encargado de realizar la ceremonial bautismal al ver que solo llegan con un simple regalo trata en lo posible de no bautizar al niño.Por esto su llamado de atención al Arzobispo de Quito a que tome conciencia de que el mor lo acomoda

todo, todo lo puede, todo lo salva; has que tus hermanos a esos que llamas herejes y blasfemos, rompan las estatuas de sus falsas divinidades y te convertirás en otro San Pablo.

Si la Iglesia Católica ha Errado: “Condenamos esa obra porque en ella el escritor acusa de error a la Iglesia Católica y reprueba el culto de las Sagradas imágenes.”Indica todos aquellos momentos en los que tantos Papas como clérigos han estado en

Page 8: Mercurial Eclesiástica

contradicción entre ellos; pues mientras unos dicen blanco para otros todo es negro. Y sin duda a continuación viene una serie de errores que cometen tanto pontífices como los Concilios pero al final de todo, según ellos nadie puede estar equivocado, ya que todos están iluminados por el Espíritu Santo y por lo tanto son infalibles.Pero el Arzobispo de Quito se horroriza porque cree que el clero jamás ha cometido una equivocación, que insensato es. Entonces expone las razones por las cuales llama NEGRO al Obispo ni no es por el simple hecho de un insulto; sino por el impacto que causó en Ordoñez el contenido del Tratado de la Nobleza en el Obispo. Y le cuestiona firmemente como un oradorcillo que solo dice ¡Mentira, Blasfemia!Las Sagradas Imágenes, todos nosotros a quienes el Señor Obispo nos tacha de herejes hemos participado de una u otra manera en las festividades religiosas; y nos cuenta el autor de   forma melancólica una experiencia suya ocurrida ya hace mucho tiempo en la ciudad de Baños

durante un día de procesión; mientras se desarrollaba este acto religioso de repente se oyeron unos gritos que decían: ¡los reclutas, los reclutas!; y de pronto esos religiosos hombres que llevaban en sus hombros las sagradas imágenes; se dispararon a correr despernadamente dejando caer a los santos sin piedad.Es esto lo que critica el negro Obispo, ¿Acaso él no hiciera lo mismo estando en lugar de aquellos pobres hombres que lo único que pensaron en ese momento era salvar su vida?  

No hay peor barbaridad para nosotros que ver la forma vil y humillante con la que los pobres campesinos son obligados a gastar en las fiestas religiosas; acaso esto es religión?, ¿Acaso quitar el pan de cada día de los hijos de un pobre es gloria?. Pues el Señor Obispo cree que la religión está en el bolsillo y no en el corazón. Pero Montalvo le dice que su religión no es adorar un pedazo de madera, sino adorar una virtud y mandar tras ella el corazón a Dios.Las Penas Eternas: “Condenamos esa obra, porque en ella el autor hable de la eternidad de las penas del infierno de una manera tal, que da a entender muy a las claras que no cree en ese dogma, o hace como si no lo creyese, burlándose de él”.De qué habla señor Obispo responde Montalvo y sustenta que es una mala costumbre el hecho de que el señor Ignacio Ordoñez tome el carácter de Jesuita y niegue todo lo que digan sus adversarios, que ridículo es el Negro cuando piensa que no

hay infierno, y yo lo digo. “¿Cómo no va haber infierno?, si el infierno eres tú.Años se ha pasado el Clero tratando de explicar el infierno, la vida del más allá, la separación del cuerpo y del alma, pero en fin no han llegado a conclusión alguna.Y llegamos al momento en el cual el Caballero de la Pluma, recuerda con tristeza y a la vez con iras uno de los tantos acontecimientos de su vida y nos cuenta: a la llega da de su segundo destierro, cuando Faustino Lemus Rayo desterraba para toda la vida a García Moreno, santiguándole con un Machete. A los siete días de haber llegado al país Montalvo es merecedor de la visita de dos Frailes en su casa, al principio los mira con asombro, pero transcurridos treinta minutos de aquella tertulia; los sacerdotes le dicen que lo admiran no solo por ser un genio en prosa sino por su gran personalidad, y admiten estar equivocados al creer que es un hereje.Como es tradición en el país las visitas deben ser devueltas y Montalvo no hace otra cosa que cumplir con esta costumbre tras cuatro días del acontecimiento primero; pero oh sorpresa al llegar al convento se encuentra con la ingrata admiración de que el mismo hombre que no hace mucho lo glorificó en su casa; hoy ni lo toma en cuenta, tan solo por el hecho de estar rodeado de files.La Honestidad de las Costumbres: “Condenamos esa obra porque ella no puede menos que causar grave daño en la honestidad de las costumbres”.¿Pero qué

sabe de esto el Negro Obispo?. Acaso no fue el mismo quien recibió la noticia de que el Presidente de la República del Salvador, ha mandado a comprar todos los ejemplares que se hallen de ese libro, el gobierno de Venezuela condecora al autor otorgándole el premio de el Busto del Libertador, la Academia Franco-Hispano-Portuguesa le ha nombrado

Page 9: Mercurial Eclesiástica

miembro a causa de los Siete Tratados. Un grupo de Sabios españoles le envían cartas honrosas y dignificantes.Entonces el Cervantes de América menciona: ¿De quién he de hacer caso yo?, del padre Ordoñez, clérigo semi bárbaro que mata brujos, o de estos ínclitos varones que sí resplandecen por los conocimientos humanos, pues haré caso a quienes afirman que mi obra es moral de inteligencia y corazón.Nuestro Adorable Redentor: “El escritor dobla la rodilla ante nuestro adorable Redentor, pero es para darle sacrílegas bofetadas en su rostro divino”. Juan le responde, todo el que lea mi retrato de Jesús, si es persona consiente y de inteligencia dirá. ¿Dónde están esas bofetadas?, todo es amor, todo respeto y basta contemplar esas mirada infinita que nos transmite a la gloria.Ese Obispo lo único que hace es difamar y faltar a la verdad, pero ante este desagravio aún conservamos firme la esperanza de que los jóvenes no nos dejamos convencer por esos discursos falsos a la verdad, pues es nuestra obligación salvar a la patria y salvarnos a nosotros mismos.La Nidada de Víboras: “El

desgraciado escritor nos ha regalado pues, en sus Siete Tratados, una nidada de víboras en cestillo cubierto de flores”. El escritor hace relación a tiempos inmemorables de Cleopatra donde la gente que vive mal muere de la misma manera, por lo que pide al Arzobispo de Quito, al Clero a los Curas y Monjes que se curen para no hacer la comparación con el principio de Hipócrates ” similla similibus”, es decir culebras con culebras víboras con víboras se devoran .La Desnudez del Alma: “Ojalá Dios Nuestro Señor se digne concederle la gracia que tanto necesita para reparar los daños que ha causado con su pluma. Esa gracia de la cual el escritor tiene mayor necesidad, cuanto menos conoce la desnudez y la pobreza de su alma”. Utiliza una metáfora para comparar la desnudez de su alma de la cual se siente orgulloso el escritor; pues considera que todo lo puro limpio, legítimo es desnudo; la verdad desnuda, el amor desnudo, el aire desnudo; pues a Ordoñez lo imagina cual charco inmundo sin movimiento ni renovación vestido de hierbas malsanas, algas venenosas y nauseabundas.La Buena Ocasión: “Ha llegado la ocasión de levantar enérgicamente nuestra voz para condenar un escrito que merece la reprobación de todo buen católico, de todo el que ame de veras a la iglesia. Montalvo dice que su obra a más de ser   aprobada, es aplaudida y felicitada por muchos hombres ilustres Filósofos Profundos, Poetas Insignes. Por ello él pide una iglesia

alumbrada por la Luz Divina donde la verada y las virtudes resplandezcan, donde pueda entrar y postrarse ante el ser invisible que levanta su corazón. Pero no esa aduana del pensamiento, donde las grandes ideas, las máximas de la filosofía, los primores del arte son artículos del contrabando confiscados por los negros que están a la puerta, esa aduana no es su iglesia.El Juicio de Dios: “Alzando alto nuestra voz llamaremos a las tinieblas tinieblas, a la blasfemia blasfemia, porque solamente tenemos dos cosas: el juicio de Dios y las alabanzas de los perversos”El escritor conjuga al Excelentísimo Arzobispo Ordoñez como, que se cree lo máximo y no tiene temor de Dios, aún sabiendo que obra mal, maldice condena y roba la esperanza de los hombre buenos.   Critica a los sacerdotes que no lo son por vocación o inclinación sino por bancarrota de amor, por despecho y por dinero.Más Cuaresma: “El tiempo de Cuaresma es tiempo saludable, venerables hermanos y queridos hijos; tiempo de salvación: no lo dejemos pasar en vano para nuestras almas”. La crítica a Ordoñez los hace en cuanto el Arzobispo, cree tener la razón y piensa que a donde vaya va esta muy bien así sea en el infierno.Pro Gratiarum Actione: “Finalmente para dar gracias a Dios por los muchos beneficios que tan misericordiosamente a dignado conceder en estos últimos meses a nuestra república, ordenamos y mandamos que desde la primer dominica de cuaresma hasta

Page 10: Mercurial Eclesiástica

la dominica de pasión, todos los sacerdotes de nuestra arquidiócesis recen en la Santa Misa la oración Pro Gratiarum Actione”.Hace alusión que todos buenos políticos que han pasado, han sido en su mayoría eclesiásticos, pero hoy su llamado de atención a que todas las clases sociales tengan participación, para que todas contribuyan al bien general y sean un aporte a la sociedad.Lamentablemente el arzobispo de Quito Ignacio Ordoñez está haciendo rezar el Progratarium Actione no como una oración de agradecimiento a Dios por lo benevolente que ha sido en los últimos tiempos; sino porque su mayor enemigo y adversario Ignacio de Veintimilla ha muerto. El Nudo del Asunto: “Esta carta pastoral se leerá en todas las Iglesias de la Capital y de las parroquias el día domingo, cuando hubiera mayor concurso de gente”. Montalvo sostiene que: “Un Obispo de la índole de Ordoñez, sin contrarresto de la ley ni de la imprenta, es animal sin freno que atropellará con todo”, pues el Obispo niega la sepultura, a los que lean esas cosas; el teatro, la novela, las reuniones sociales están excomulgadas.

Más dudo que aquel perverso pueda algo con los estudiantes afirma Juan; ni con los jóvenes, ni con los viejos ilustrados, quienes tienen vergüenza y se irritan de que su país salgan esos documentos infames para escándalo de América.   El Arte en el Teatro; es muy atroz ver como el excelentísimo Señor Arzobispo Ignacio Ordoñez atenta contra

la cultura y las más bellas expresiones del Alma; pues la única condición que justifica este mal proceder, es la ignorancia del clérigo con respecto a la cultura y maravilla interior que todo ser humano posee como habilidad.El Baile; dice Montalvo, este ejercicio quien lo creyera es una de las manifestaciones del Espíritu, y una muda pero enérgica manera de dar formas a los sentimientos del ánimo, la vida se conserva con el movimiento, y el movimiento armónico es arte. El baile es una de las expresiones de la naturaleza; prohibirlo es prohibir una efusión necesaria; condenarlo es como condenarle el uso de la palabra.Pero que dirá el excelentísimo José Ordoñez cuando se entere que las damas aristócratas de parís Católicas, Apostólicas, Romanas organizan corridas taurinas y reuniones sociales y no siente ofenderle gravemente a Dios; y este impío ignorante prohíbe una de las más bellas expresiones del alma sin motivo alguno.Aparición: Montalvo, al regresar de Europa en uno de sus viajes, inesperadamente se encuentra con el padre   Ordoñez vestido de Obispo, quien entabla una conversación con los miembros de la tripulación y manifiesta que odia Martín Lutero; no por la grandiosa espada que le dio a Roma sino por el hijo que a Dios le concedió.Ordoñez estaba acompañado por el inseparable don Saturnino Picón, quien le obedecía en todo y al mismo tiempo le perturbaba en ciertas ocasiones; a tal punto de que un día el

Obispo solicitó le diesen otro asiento, no viéndose conforme con esto se encierra en su camarote durante todo el resto del viaje; pues de lo contrario ese monstruo irrespetuoso pudo hasta quitarle la vida.El Primero Soberbia: “Dado en nuestro Palacio Arzobispal de Quito a los diez y nueve días de febrero de 1884”. El Ministro del Interior solicita una entrevista a Ordoñez, el mismo que la concede en el Palacio Episcopal, porque se siente alagado por su visita.El escritor tacha a todos aquellos políticos y personajes que tienen a honra estar en contacto con la Curia y andan besándoles la mano a todos los clérigos, los inflan, les hacen perder el juicio, y les ponen de modo que no hay demonio que los aguante.+ José Ignacio; Con este signo anuncian los periódicos Españoles la muerte de la persona cuyo retrato pública”. Los buenos son aquellos que hacen el bien a sus amigos y semejantes, y no aquellos perversos que con el ayuno y la misa descuentan sus pecados, sino los que practican las virtudes en silencio, y divinizan sus penas y dolores con el sufrimiento.Montalvo cree que no existen personas más hipócritas que los devotos de profesión quienes no saben que es la caridad ni mucho menos la fraternidad, son egoístas, duros de corazón y ruines hasta lo más bajo. El desea una república donde todos sean piadosos y

Page 11: Mercurial Eclesiástica

solidarios. Y él no quiere que el clero sea quien gobierne, porque como es de conocimiento el pueblo, hace

todo lo que el sacerdote dice, y esto conlleva a dos opciones; la una puede ser su ruina completa y la otra puede ser su salvación.Estas son las crisis de las naciones, o se pierden en la conquista, o dan el salto que las pone al otro lado del precipicio donde están la libertad y la cultura.Comentarios: Se concluye que el Clero perseguía y mataba a todos quienes no seguían su doctrina sin respetar su nacionalidad, conocimiento académico, origen y creencias y los juzgaban brujos y herejes, sin darles ocasión a justificar su tesis.Durante los cinco primeros siglos, la Iglesia condenaba como herejía la adoración de las imágenes, tanto así que Caprónimo castigaba con horribles suplicios a quienes rendían culto; es algo inconcebible que el Obispo Ordoñez niegue estas verdades, esto no es   más que igualar el atrevimiento con la ignorancia.Desde la era de Jesucristo, existió la civilización y la inspiración a tal punto que conocemos que San Lucas pintó el rostro de Jesús sin haber sido pintor; y sus compañeros evangelistas escribieron los Evangelios, sin siquiera saber escribir por cuanto eran unos humildes pescadores.Es conocido que los Evangelios como obra de inspiración, perduran ya por más de 1800 años, y no se han perdido; mientras que el Rostro de Jesús otra obra de inspiración divina, ha sido olvidado y se ha perdido.La gente pagaba al Papa Calixto dinero para que éste   saque a las almas del Purgatorio sin

distinción de sexo raza ni edad. Por lo que en París el Ilustrísimo José Ignacio Escrudiñes salió mal parado, por escuchar el consejo de aquel Pontífice que mientras no tenga el dinero en la mano no saque almas del purgatorio, porque cuenta y razón conserva amistad. Sin el principio jurídico hago para que des no hay salvación posible.Finalmente el caballero de la Pluma dice: “allí está la Historia General de España, donde el señor Ilustrísimo José Ignacio Matabrujos puede ir a tomarme estotra mentira. Por felicidad el padre Juan de Mariana es Jesuita; y no dirán los clérigos come- académicos que no han hecho sino firmar lo que yo les he mandado.            El Caballero de la Pluma, luchó por ver una patria libre y soberana, combatió por la vigencia de la Ley y su correcta aplicación; por la Ley como voluntad de los pueblos y el pensamiento, como derecho indiscutible de los hombres para corregir y educar su voluntad. Jamás pretendió corromper a la sociedad mediante sus escritos; lo único que hizo es expresarse a través de la verdad, la dignidad y la soberanía. Montalvo exigió a la sociedad de su tiempo una reforma   social en distintos órdenes. Para el afamado escritor, la sociedad debía estar organizada en torno al respeto de las Leyes, la moral cristiana y la instrucción pública.En La Mercurial Eclesiástica Juan Montalvo aboga por un clero ilustrado, recto, virtuoso, humano; más no ignorante, torcido, lleno de vicios;

sino que por el contrario sea un aporte positivo y productivo para la sociedad.España reconoce en el ilustre escritor ambateño su grandeza de hombre, rindiéndole los más grandes tributos de admiración; grandes personajes de la Literatura admiraron las ideas políticas de Montalvo, su pensamiento iluminado, y su fecunda obra literaria.  

Pues no solo reúne las características para ser el más grande escritor ecuatoriano e hispanoamericano; sino que también cumple con las actitudes e ideales para ser un prócer, precursor del liberalismo y sobre todo hombre valiente y grande de espíritu democrático que enfrentó y riñó la dictadura; y al decir de Aristóteles Juan Montalvo es: “El sabio que no dice todo lo que piensa, pero siempre piensa todo lo que dice”

COMENTARIOAl finalizar este trabajo de investigación, hemos tratado de resumir hechos y circunstancias de la vida y obra del más grande escritor ecuatoriano e hispanoamericano Don Juan María Montalvo Fiallos. Hombre de grandes convicciones no solo morales, políticas e

Page 12: Mercurial Eclesiástica

intelectuales; sino patrióticas, libertarias y democráticas. Con certeza, la juventud debemos ser los más fieles seguidores de sus lecciones. Los maestros, el clero, la clase militar, todos quienes hacemos cultura, y que sentimos la necesidad de enriquecer nuestras vidas, deberíamos leer a Montalvo. Qué decir del sector político. Son ellos los llamados a renovar sus conductas, manejar con honestidad

los asuntos del estado, a   guiar con rectitud y patriotismo a los ciudadanos.Como de costumbre siempre hemos sido traicionados y burlados por los políticos de turno. Eso sí, muy hábiles para hacernos caer en las redes de la mentira, de la demagogia, de la picardía; pues lo único que pretenden es sacar provecho y lucro personal, a costa del pueblo que los apoya sin ponerles siquiera un alto.Es por esto, que estamos seguros de que todas ustedes queridas compañeras y porque no decirlo toda la sociedad; tomemos el ejemplo de genial escritor ambateño, el pensador americano; en el sí la pasión política y educativa, ardía en el fondo de su alma noble. El consideraba   a la política y a la educación como ciencia y arte del estado; como fundamento y base de un gobierno.Entonces no nos queda más que decirles; imitemos con honor el excelso legado del Cervantes de América, luchemos día a día por conquistar nuestros ideales; hagamos de este Ecuador una patria próspera en donde arda al fuego la espada de Alfaro; y florezca a la tierra la pluma de Montalvo.Que la misma filosofía democrática, humana y noble, del insigne ambateño líder de la no violencia; se inmortaliza cual sonrisa de una madre; y sea esta la fortaleza que nos ayude a cumplir el paradigma que nos dejó El Caballero de la Pluma a los jóvenes.“Desgraciado el pueblo donde los jóvenes son humildes con el tirano; donde los estudiantes no hacen temblar al mundo”