......

n~ -1S COMPANIAS

LAS ULTIMAS JUGADAS lndadablem•al• 'l'M 81 toda a..ua •lda

" ana blcba c:iontra el ~..so. -o dlc• la E8crltara, - c:omi.ate .. lonlÍll máa ell• carnlsado hacia el na de la ~. en •- últlmOll cU.u - ... el ._onlo u.ata tambl6n am UL TJXAll NGADAS.

De aquí la bondad de J....criato al lnaU· tulr ua aaaameato eqoeclal para fortalecer­

- en el combate. •- -.. coa aceite en - úlllma, EXTBEICA VllCJOK que DOS

hace el sacerdote. La rama ... ollYO con 'u fruto wa•• .. 8'mbolo de la PAZ. El aceU• d• la unción. •• figura de la pacla que pone PAZ en el corazón del ..termo al perdo-narle los pecados nlllal• ... deteata • ID· clmo los mortal" ll no loe ..... eomeau y al menos los a!>onece por t-or d• los cutlSJO& por ell09 mencldoe.

Ademu, la GRACIA PROPIA de la Extn­maunclón refvena la Vll'tvd • la ESPE­RAKZA del enfermo. l• da vn cierto dnec:ho a -otras tTªclaa actual" qv• la aaxlllail •n .... úJtJmu lvchu contra el 4-onlo. SI, para la .. J•adóa del alma, • coa.,,...i.nte la salad del cuerpo, eaa gracia aac:r.meatal aliña. e lnclvao cura la enfe~cl.

A todos nos va a Uepr ~rimodo o no- vn momento 1•rio •n la •Ida. Va a .. r el último. el de la d"pedlda. Apartar ahora con temor nveatro pensamiento de 61 " Mr U69tcoe • y cobard"'

La IglHla nos ayuda a preparar -momento dlficll, dindonoa con el sacra· mento de la COlfFlR.MACIOlf, lnGUvtdo por JHucrl1to. la IJl'acla, o .. a la fuersa para el trance supremo. Sólo M puede admtniah1lr al EKFERXO GRAVE pues para 61 fue 1-sUuklo: y " u .n comple­mento de la Conf•albn. o PenUencla, co. mo la Conflnnac:tón lo " d • l Bauti.mo.

Por ..., .. nec:eearlo al paciente que no puede confHarM.

El ncerdote, jvnto a la c:ama del en­fermo, le llldlca los efectos del sacra­mento, lo consuela y anima. S. reu el acto de contl'lcdón, y extendiendo la mano dencba eobre •l enfermo el acer­dote reza: Ea el nombre del Padre y d•l HJJo y del E9pl.riJu Santo, extúapM -ti todo lafluJo del dlablo. por la lmpo-1lclón de na..tru - y por la la•o­c:aclóa de la Madre de Dloe la '9'lrpn Maria. de San JOllé. y de todM .... Ú>g9·

l•. ~ ~ ......... apóe-to .... ~. - a-1-...., ....u-e-e. y .. too&oe ........ a Ja - A-'-.

MoJaado i..,o el dedo ,..ipr en los santos Odi.o. hac9 el .. cerdote vadoDH eobre los Mlllldos d•l enfermo, c:om•n­nndo por loe o)OL IGeldru trua lu cruces, t esa la oración J1o911ia 4*1 1&aa­m•nto

Con otru ~ a m... pid14adole ayuda para el IUJ)rWID.O indaate, termina la adm.inlanaclón de la Extnmaunclón

) )

EIPoderdeunalde~ D

OS naciones H disputan el honor del nac:lmlento de Crlll.tóbal Colón. Tres, • proc:lamil.n la gloria póstuma de albergar, 1>us huesos. Un sóolo de

mlaterlo envuelve su Juveniud. El bOmbre que Dios ha destinado !'<ll'ª que descubra un mundo, habla PC>QO de au lnfanc;la. Hundido en lo grandioso de sua aueñoa, busca ln.fallgablemenie la manera. de reall· zatloa.

Co:i profundos c:onoc:tmientoa de aatr1>nonúa, ha leí­do - - el llbro de las est~llu '!! sabe que mu alll. en la o~la opueata del gran Mar. hay una tierra, dormida en au noc:he de milenios quo espera la hora on que la ;!>lanJa del Navegante Inmortal se pose en olla, !)r& ec:har a c:amina: por la rula del progreso.

Su ideal: a....entural!'M en laa soledades de loa océa­nos desc:onoc:idos, aln más guía que su pro!)lo pensa­m.len.lo ...

Después que la reina de España materializó loa quí­mérlc:oa planes de Colón. partian ele Palos, el 13 da Agoelo de 1492, la Niña, la Pinta '! la SanJa Maria, que eran lu c:arabelH que Isabel la Católlc:a le había ayudado a equipar.

De!>Bltento, hambre, c:anaanc:lo, miedo, eran el ba­gaJe que .,.,:-!aban. alej,ndoN cada ves mb, gracias a la invencible voluntad del Almirante, la:! lree cara­belas, duran.le la navegación que duró má.s o meno1 do• meses.

¡¡Adelante!! ¡ ¡Adela.nlell fue la orden '.' el grito de batalla que opuso el genovés, a la rebelión de los Hpirltu11, de ésa c:ada ves mú aterrorizada tripula ctón ...

Avecillas del c:ielo con olo:- t Uerra llegaban hasta los mú.lllea que soll!enían laa camadas velu, hln<:ha­das P::'anas bajo el peso de tantos terrores: maderos

·que Uotaban '!· ol grit? Inmortal: ¡ ¡Tlerra!I ¡¡Tierra!! ¡¡Tierra !!. . .

12 de Octubre de 1952 . . . Amanecer de un día glo~loso en la hl.a.toria del

mundo; nuevas tierras que c:onoc:erian h yerdad de Crisdo; i::eserva maravillosa '! promlaorla de renoY&· c:lón !)a.a la humanidad aangranle: Am6rlc:a, fruto fo1 az de la imaginación de un hombre.

Cristóbal COión lgn>:>ró el nuevo c:onUnen.to, pues c.:eyó que hablr. logrado aolamen.le le anhelada ruJa paYa España. que le diera acceso a laa Indias de lu Fe!'las, cr!)&Cies y maderas !'r.aosas..

El c:o:azón americano, c:on fe profunda """ los desll­no:5 de cada llnft de nuea.lras patrias, rinde - el d.fa de ho'!'. un eme<:ionado homenaje al gran Alml· rarue Crta.tóbal Colón .., eleva al c:ielo una oración de paz poi:: estas tlen:as -que descubrió un hombre na· vegando hacia lo desconoctdo.

1mm llEISUAL ICJDIKE 115& LAS COMPAÑIAS ll lLDOIUO 2125

MOITUI BEO

. UNA REVISTA ESCOLAR SANA PARA FORMAR MENTES Y CORAZONES SANOS , .., '-' • '¡.. ., . , • ,. "'

Redacción: JOSE SOMMA REKART S.D.B. Admlnlstraclón: JUAN J. LASA S.D,!I. Tel.: 2 .3%.44 TeL: .0.41.26

EL SIMULACRO DE GUERRA MAS EXTRABO QUE HUBO

DHAJ ANIRAN comandante del ejército Maharatta (India) aver­gonzado de rendirs~ sin pelear a las fuerzas de Satara, libró un simu­lacro de batalla que duró 6 días. Consideró satisfecho su honor cuando, por fin, un soldado cayó muerto ¡de fatiga! (1708).

EL GOBIERNO MEJICA­

NO LLAMA A LOS

JESUITAS

Méjico. - El Ministro de Edu. cac16n Nacional de Méjico se ha dirigido a los Padres de la Com­paAla de J'esús a !In de solicitar su colaboración en la lucha contra el anallabetlsmo principalmente entre las tribus indias, llamadas "laraburnaras". Los J'csultas co­mo respuesta a esta Invitación. han propuesto iniciar una campa_ fta de escuelas racUbfónJcas seme­jante a la qu~ cUrlge en Colom­trn1 el P Salcedo

* MILAH. - Una niña de 18 m-. Lucian.a Arrigoni. ha sido sometida a una excepcional iniervención quirúrgica.

El profesor Angelo De Gasperis. mediante un aparato llamado "corazón-pulmón artificial" logró desviar la circulación san­guínea del corazón de la pequeña. Por espacio de 48 minntoc

el corazón de Luciana latió sin ser atravesado por la corriente sanguínea y de ese modo pudo practicársele la operación re­querida.

AUTOMOVIL QUE VUELA

PONTIAC, Mlchlga n. - Una comblnaclón de avlon y automó vtJ construida po: Dewey Bryan de 33 añ0& de eda d . piloto de prueba da l a General Molo~• CorporaJlon, paaó las pruebas corr .. pondlenlea en el aire y en la carretera.

Bryan, da Ja ce r cana Mllfor d , eaUma qua su " rod ap lano" ea e l primero en llevar aua alas p lagadas por la earr•t•~a. Otros aparatos alml­Jares dejaban la sección de laa aJaa • n a l ae­ropuerto o las llevaban de tiro en un n m olque.

El av ión-automóvil de un 1>olo a siento. pan 272 kllogTam oa y eéá equipado con u n m otor de 40 caballos que Je da una velocidad da 10 k ilóm etros POr h or a y una velocidad en e l aira da 91 k ilómetros por bo·a. Atan lza a u na ve­locid ad de ent ra 40 y U kilóm etros horarios.

U~ PIANO TIENE e .ooo PIEZAS MÓVILES ••• PERO NO /t/ECESIT/i LUBRICAC1dN

MUCHACHOS ASJ. LLEGARON A SER MISIONEROS

El futuro obispo de los antr opófagos, Monseñor Próspero Augouard, jamás pudo pagar en la escuela elemental los castigos que uno tras otro se le acumulaban.

. -- ~ '

-·---~ "1-~~L HIJ O 0€ U~ CORONEL DE UN RECZ\MIE.NTO ALSACIAMO SE RELLENÓ

CON LOS B IGOTES DE lOO GRANADEROS

(Aqosro 25, 1786)

LOS ZURDOS

Una noche, en medio del más religioso silencio, sonó un agudo silbido en el dormitorio. Las pesquisas indicaron •· Augouard-'Eomo autor del desacato. El chico, esta vez, cierta­mente inocente, protestó con energía, con lo que se ganó quinientas líneas por copiar. Recurrió al rector, quien m an tuvo el castigo .

- Bien - dijo, entonces, Augouard- , me marcho. Y de hecho fué despedido, siendo, en consecuencia, colo­

cado por sus padres como aprendiz de carpintero. Pero el muchacho era testarudo.

- ¡Aunque tenga que ir al cabo del mundo, seré sacer dQte! Un día, en París, estando de soldado, se encontró con

Monseñor de Ségur, ant iguo conocido suyo de seminario, a quien le contó todo:

Tienes razón - le respondió Monseñor de Ségur- te conozco, y sé que has nacido para ser sacerdote; pero no en Francia. Con tu carácter, estarás bien entre salvajes.

El Dr . George Desse ha escrito un Interesante libro sobre las manos. En él se d ice que el p roble. ma de los zurdos constituye el 6 % de la humani­dad. Y mlls ndelante se expresa que el zurdo rué <'OOSldcrado en todos los tiem pos como una exccp­d ón. La lnutllldal de la mano derecha tiene, se­gún parece, una gran importancia en la toma de eQnclcncia del mundo exterior y en el d esarrollo del centro cerebral del lenguaje. Un zurdo con tra­riado en sus hábitos se convier te en tartamudo o es un hombre muy torpe.

..

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1) Cabeza da obrara y :zángano. La obrera llana la trompa mb larga '!! el zángano los ojoa más g-:andes y t•H ojos simt>lH u ocelos.

2) Las abejas chuoan el nktar de lH flores y dHpranden al polen qua llevan a la colma- ea u.­cavidad da s us paJu posterlorN, llamado " CNtillo".

3) Parta externa e Interna d a la pata poáerior da una obrara. 4) Reina -abdomen más la1"90- aólo ?M>D• loa hunoa para la reproducción. ~) Zángano. 8) La abaja es un himenóptero, viva en enJamhrH. La obrara hace todo el 1':abajo: recolada al polen,

fabrica la ce~a. elabora la miel, allmanla a la reina. etc.; aólo la obrar a pO&ff agnljón. 7) X.. ml•l se conoce ?' aprovecha desde •poc:aa remotas. Antlguametna r.a hacian las colmenas de paja. 1) Moderna colmena de madna. La cria da abejas •• llama apicultura tl TrOtlO da panal. Las caldlllaa son da forma exagonal, hac:hH con cara.

101 El aolcullor toma sus !>1'9C&Uciones 9'lft la c0&4Cha da la miel, nutrlilvo allmaiúo.

IAS ARBJAS MARAVILLA DE LA CREACION

(Ver página anterior )

Las abejas viven formando conjuntos de Indivi­d uos o sociedades. Las comunidades de abejas vi­ven naturalmente en los h uecos de los árboles y otros sitios resguardados; pero el hombre las hoce vivir en refugios artificiales o colmenas.

En la colmena hay una reina, algunos sángano• y varios miles de obreras..

Las obreras, que son las únicas que vemos ordi­nariamente, realizan todos los trabajos de la so­ciedad: salen a buscar el alimento, elaboran la miel y la cera, cuidan las larvas, hacen los pana­les, hrnplan y arreglan la colmena, la dellenden de los Intrusos y expulsan a los zán¡ronos cuando ya son JnútJles.

Dentro de la colmena, las obreras hacen varios panales, que son unos tabiques dispuestos vertical­mente ,con celdlllas por ambas caras. Elltas celdi­llas tienen forma de prisma hexagonal y están dls. puestas con suma regularidad. Los panoloa están hechos de cera. Las abejas segregan ésta por va­rios sitios del lado Inferior del abdomen, con las patas posteriores la llevan a la boca y en ella la mascan y mezclan con un liquido que hace que la cera se vuelva blanda y sirva para construir e l panal.

Con la cera forman las abejas un tabique vertical, por ambos lados de éste van haciendo, con sus mandíbulas, tosetas que ser'n los fondos de las celdillas. y conel ma­terial que aacan al hacer estas fosetas constru­yen las delgadlslmas paredes de las celdillas. El principal alimento d elas abejas es la miel que elaboran con el néctar de las flores. Tornan el néc­tar rnedlonte su lengüeta y lo alrnacenon en una especie de buche. Llegando a la colmena. lo de­vuelven por la boca y llenan con él las celdillas d e los panales. donde experimenta un espesamien­to y cambio de sabor. quedando asl transformado el néctar en miel.·

Mucho cuidan las obreras, el alimento de las larvltas recién nacidas. Tanto es as! que depende de la alimentación el que una larva dé luego obre­ra o reina. Es uh hecho certlslmo, hasta el punto de que las obreras. cuando se les muere la reina, si no hav celdillas reales en la colmena deshacen tres celdillas de obreras, improvisando en su lugar una celdUla real. en la que dan la alimentación de reina a una larvlta que de otro modo hubiese re­sultado una obrera, consiguiendo ns! une reina nueva con lo que evitan la extinción de la col­mena.

Obreras, nacen a millares: zánganos, muchos menos. y reinas, poqufstmas. El nacimiento d'e una nueva relnn es, por decirlo as!, un acontecimiento en In colmena y pone de manttiesto notabllfslmos Instintos. Pocos dlas antes de nacer una reina nueva, la reina vieja abandona la colmena acom­pañado de varios mUlares de obreras, constituyen­do entre todas lo que se llama un enfarn.bre. El enfambre vuela de una parte a otra ,formando sus Individuos apretada masa. en busca de un lugar adrcuado donde establecer una nueva sociedad.

Todas estas maravillas de la naturaleza elevan nece.1arlamente el pensamiento del hombre a Dios, creador admira ble de estos prodigios.

Hablamos, desde luego, del hombre copoz de pen~ar, no del que usa la cabeza nado más que para sostener un sombrero ...

FESTEJE LAS

CON DE FIESTAS

* Iba.mos para el colegio ¿sabe? cuando mi com·

pañera se detiene anJ:e un cartel. . . ¡de esos! ... "Va­mos a llegar tarde", le digo. -"NQ. sobran 10 minutos; lo que tienes es miedo''. No supe qué responder, pero seguí caminando; ella se rino conmigo y fuim0& en silencio.

... Sí, tienes miedo ¿y con eso? ¿Ea una imbecilidad tener miedo de tomarse un veneno o esJar en peligro de tomarlo? ¿No será idiotez lo contrario? No es cier­to que no hayas respondido; tu actiiud dijo mucho y le hiciste bien.

* Cuando se en fe r m ó don Félix, el caso era

gran, le dije a doña Ro· sa por qué no le daban el sacramento de los enfer· mos. Doña Rosa biso un a s p a v i e n t o y me dijo: "¿Para que se muera más pronto?" No atiné a nada y . . . ¿qué se le dice?

... nadie se murió hasta e l día de ho por recibir la EXTREMAUNCION. Al re­vés, a muchos le devolvió la salud. El en­fermo no se asusta, Susto lleva, e irrepa­rable, el que se condena. ¿Tiene coruón el que priva de la Religión al que más la necesita? ...

La tralclón habla entr~ do entre las fllu de los rebelde&. DaAin habla dNCUblerto al tnldor y preparaba la trampa pa­ra hacerlo caer. Pero '-te, ya estaba confabu­lado con lo• naziL Cuan­do en la rewü6a aecreta M produjo el choque ln­e"ri!able, ambos bandos estaban preparado• Y dentro del edificio la lucha fue terrible, hasta qua, por una Allda ae­creta, 109l'aron escapar­•• loa rebeldes. Ya ea.­ta gota habla colmado la copa T comen.RJ:'On las terribles repreaallu de loa nada.

"EL IMPERIO DE LA ESTRELLA ROJA"

CAPITULO VIII

SE ACERCA EL nN -¡Karl! ... querido hermanito, ¡déjame aquí! ... ¡Te castigarán! La voz estentórea del centinela cortó los ecos de Jo dicho

por la niña. Chasqueó el látigo en el aire ... Karl sentía un escozor que le abrasaba la espalda. Dolorosamente, con rabia, apretando los dientes se alejó de

su hermana que recostada al árbol se reponía de la reciente paliza ...

Un sollozo ahogado . .. Lágrimas grandes cruzaban las me­jillas amoratadas de frío. El soldado se acercó a la nifia y profi­riendo una maldición levantó, airado, el látigo.

La niña se acurrucó más ... ¡Inútil! ... ¡Ay! ... Doloroso, desgarrador. De lejos Karl asistía impotente a la escena brutal. No pudo

aguantar más y corriendo se acercó al cruel verdugo. - ¡Asesino! ¿No has tenido madre ... hermana? ... ¿o una

hija? ... Y su cuerpo se interpuso entre la niña y el soldado. En los ojos del ruso brilló una luz ... mas pronto se apagó

entre tanta idiotez. - ¡Bah! ¡vete a trabajar! ... yo me ocuperé de ella ... Karl obedeció. Antes de alejarse besó a su hermana infun­

diéndole ánimo: era lo único que les restaba para no entregarse de una vez en manos de la muerte.

El soldado levantó a Ja niña y llamó .. . Karl se mordía de radia: Pablo había sido distinguido otra

vez por el centinela! El látigo acalló los murmullos provocados por aquella arbi-

trariedad. • El soldado le urgía desaforadamente . para que se avispara a

cumplir la orden ... Ya fue tarde: Helen se levantó y comenzó a correr ... Clamor unánime se levantó de las filas de los prisioneros:

Karl habia visto a su hermana caer en la nieve como herida por un rayo.

Rompió las filas ... Fue inútil la orden del centinela. . . Frenético se acercó a la niña. La levantó nervioso, pensando lo peor. . . Afortw adamen te aún respiraba.

En el rostro sucio con nieve enfangada, cubierto por las guedejas doradas de su cabello en desorden, Karl creyó ver el fin ... Una sonrisa ... triste ... lastimosa ... un leve quejido . . .

El se encaminaba rápido al galpón de la enfermería. . . Y hundió nuevamente su vista ansiosa en aquel rostro desfigurado ... ¡Y de cerca vio a la muerte!

DRAMA EN EL BOSQUE. - Un grito involuntario partió de los labios convulsos de Adrián: -¡Scheler! ...

¡Oh! ¿Tú aquí?· ... ¡Aquí me tienes, simpático Dasain! ¡Oh! ... ¿Me recuerdas? ... Ya me pagarás las balas que me alojaste en el cuerpo aquella noche ... - Y reia desacom­

pasadamente.

CUMPLEA90S FELICES CON CINE FILME%

-;Traidor! Seca, sibilante, casi con rencor impotente Dasain cortó la risa del traidor.

-Te prometi que me verías nuevamente y entoces... ;yo me daraí la revancha!

-;Traidor! ;Cochino espía! ... -¡Gracias señorito! Y cambiando de tono:

¿No te das cuenta, estúpido, que estás en mis m:mos? ... ;O pi:msas que éstos, mis fieles ami­gos te dcjarén escapar sin alojarte unas dece­nas' de balas en tu c·ierpo? ... Ja, ja, ja, ja ...

El clamor lejano de una sirena, el zumbido de los aviones de patrulla le dieron a Scheler la clave de la situación:

-Bueno mis queridos amigos ... ;Aquí es­tamos fue;a de lugar! Los Soviets no nos mi­ran bien. . . Es conveniente acercarse cuanto antes a la frontera y de allí ...

El ronquido de unos cazas sobrevolando a baja altura acallaron su voz.

Medroso miró aouellos monstruos oscuros, re­cortados en el cielo. -;En marcha! . . . Adrián buscó con la vista a Dasam: mterro­

gación larga se pintó en aquellos rostros ... Una señal de inteligencia ...

Estaban echadas las suertes: no volverían a pisar tierra dominada por los nazis ... ¡Antes morir!

La marcha fue larga: se adelantaba lenta­mente pues la fronda boscosa lo impedía bas-tante. .

1 .

Ambos prisioneros caminaban .. e~ s1 enc10: estudiaban el terreno y sus pos1b1bdades.

Dasain, dueño de sí, aun . en la~ situacio~~s más peligrosas, procuraba mfund1r a Adr1an el ánimo necesario para que no fracasara la tentativa ...

Scheler, un os paaus más atrás scgula en voz baja la relación de s us proezas de espía y ag1•n­te nazi: familias dcsJw. chas, encarceladas ... Pll • dres muertos, asesina· dos. . . madres Mc·arn•· ladas... hijos llcvudo11 al frente o hacinndo:i .-11 inmundos albergu"s .•.

- ;Calla!, le gritó Dn­sain impaciente ante tal cuadro.

Scheler se puso lívi­do... Levantó la J>C· sada pistola de ordc· nanza que empuñaba y se acercó a Dasain ...

_.._ Este guiñó un ojo :i Adrián ...

¡Había llegado el nin. mento!

Tres pasos, dos pasos, un ...

La distancia se nt·or­tó... Los dem6s <'!lb• · ITOs estaban algo udc•· lant,.,dos.

Un puntapié violenti· -7 ¿ _:;-;· simo en el vientre hizo ~ arrollarse al t r a i d o r,

11UJ1tA;T~ Antes de que rcaccío· nase r>aSain se le echó encima. Sonó un tiro. .

;Demasiado tarde: había quedado dcsar· mado!

Adrián había atacado mientras al soldado que tenla más a mano la sorpresa le ayudó. Prontam~nte, dueño de la pistola hizo íu1·~11

a discreción contra el grupo de guardias Desconcertados, despavoridos se dcspurrn­

maron.

La lucha tenaz y violenta se apartó del sen· dero iluminado por la luna. En la oscurlchul del bosoue sólo se sentían imprecaciones, grl tos ahogados, crujidos de ramas rotas.

Adrián iba a buscar un nuevo blanco t•n quien descargar su arma, cuando recib1é>, l'll

pleno pecho un brutal puñetazo del guanhll agredido, que ya se había levantado. El dolCll' y la sorpresa hicieron caer el arma de lo!I 11111 nos . .. mas se repuso: esperó preparado <>I 111• gundo ataque del alemán y con hábil maniobro lo esquivó tirándolo al suelo ...

Buscó el arma, pero no la encontró .•. Scheler se defendla desesperadamcntt•. l..as

manazas de Dasain le atenazaban el t·uello. El traidor dejaba escapar un gemido ronco . Pero Dasain tropezó y aquella pequcl\11 vrn

taja la aprovechó Scheler para atnr.nr, ~•1rl miendo el gran puñal de oficial.

El muchacho se sintió perdido • i111'1 tilmrn te forcejeaba para librarse de aqtwl hr1um que acercaba la hoja fatal a su gargantn • ,

Los demás desbandados a los prinwron dil!IJ>n ros de Adrián habían permanecido tl!'ultos: no usaban sus armas por temor cfp hrrir a IOI compañeros.

;Y esto salvó a los dos amigos!

Adrián pudo d.ejar sin sentido a su enemigo de un feroz puñetazo ...

Buscó, febril, el arma. Por el ruido se guió hasta el lugar donde Scheler y Dasain se com­batían a muerte.

Ya la hoja del puñal arañaba la garganta del muchacho, cuyos esfuerzos resultaban es­tériles ...

Un disparo. . . El resplandor iluminó la es­cena.

Y Scheler se desplomó pesadamente sobre Dasain ...

Este sintió la sangre. del enemigo que le salpicaba el rostro ... Pero ...

Los demás avanzaban, ya repuestos, como serpientes, para rodear a los dos compañeros.

Estos no medían el peligro, pero estaban dis­puestos a no dejarse matar ...

Otro disparo. . . Un aullido de dolor. . . Otra silueta caía entre las sombras ... y enseguida un tableteo ensordecedor aulló entre las ramas su sinfonía de muerte!

-¡No Adrián! ... ¡No son ellos!... ¡Los dis­paros atrajeron a una patrullá de rusos que rondaba aquí cerca! ...

Ordenes, foc0s eléctricos, sirenas estriden­tes, disparos a granel. ..

-¡Dasain ... tendremos que despedirnos! .. . ¡No hay remedío!

-¿Qué? ... ¿Remedio? . . . ¡Veremos! ¡Sígue­me! ...

Y se adelantó corriendo hacia la floresta más espesa.

Pero una nueva ráfaga de metralla les cortó el paso ...

LA MUERTE SE VISTE DE BLAN,CO

Y Helen no pudo más. . . Como una flor mar­chita se inclinó sobre su tallo ...

Sonrió a su hermano ... - ¡Animo!. .. ¡Hasta el cielo!... ¡Papá! ...

¡Dios mío! ... Karl sintió aquel último cálido beso. La ma­

no de la niña que tenía entre las suyas, cedió . . . ¡Había muerto!

El muchacho besaba desesperadamente aquel frío rostro amado: -¡Yo! ... ¡Yo te he asesinado! ... Yo te tra­

je a Rusia pensando encontrar la libertad que no tenía nuestra Polonia dominada! ¡Yo no te supe cuidar!... ¡Hermanita mía! ...

El médíco respetaba los deshagos del mu­chacho. - Mas llegó el oficial:

-¡Basta de pavadas!... ¡Tú!, ¡déjate de llo­riquear! ... ¡Pareces una nena! ¡Vete al patio!

Karl se encendió por aquel insulto y el trato brutal. Dejó el cuerpo de su hermana y se acercó al soldado.

Este temió al vérsele acercar el fornido mu­chacho, con intenciones bien claras.

- . . . por respeto a ella. . . Lo perdono ... ¡Siempre me lo había pedido así! ...

El oficial lo miró extrañado ... Karl se enjugó las lágrimas y salió al patio. Ya todos habían vuelto del trabajo. Leyeron

en aquel semblante demudado el triste fin : un velo de tristeza cayó sobre todos ...

FILME:X CINE 16 m/m.

Aun Pablo, generalmente insensible ante otras muertes anteriores, hoy se había coruno­vido ... pero sólo fue por un rato.

¡No convenía dejarse conmover por eso: per­dería la estima de los centinelas! ...

Karl fue rodeado por los amigos. Palabras de consuelo... amistad... verda­

dero cariño. . . admiración por . Heleo. . . Con el alma partida por el dolor, el muchacho se separó del grupo.. . ¡Quería estar solo! ... Dar rienda suelta a su llanto contenido: de eso no se avergonzaba! !

-¡Ah!. .. ¡Dios mio! ¿Qué haré yo en el mundo? ...

Gruesas lágrimas caían de sus ojos ... Pensaba en Helen que ya no estaría más ...

pensaba en su padre, traidor ... Corrían las lágrimas por las mejillas amo­

ratadas. . . Se confundían luego con la nieve del suelo ...

La llama se había encendído: la rebelión ya estaba decidida y no esperaba otra cosa que e l momento propicio para estallar.

La guarnición era pequeña, porque ellos eran niños ... ¡Ya verían los efectos! ... A los lejos, recortándose en el horizonte gris, tres figuras se movían ... Karl miraba... ,

Los otros dos abrían en la nieve un foso ... En silencio . .--

y sobre la tumba una cruz, tGsca, burda que al día siguiente el soldado derribó y pisoteó ...

¡Otra tumba sin nombre! ...

(Continuará).

Capítulo IV: "MAAANA SERA TARDE"

COLONIA Y ROXLO

·wrt Yida es un ~ Y\lel­

lul . . . 'J' a cada vuelta un panorama nua•o y a cada ncodo una sorpresa ... ¡Bu eno, Dios mlo. 84 qua Tu permllH estas cona " raras" que me pasan! Yo l u quiero recibir como venidas d e tu mano lu buenas 'J' como permUldu por Tl las " otras" ...

Esto h abla escrito San Pérez en su diario, en 1u libreta de impresiones. ¡Un diario Intimo macanudo! Era el diario de un muchacho que vive co:no tú Bueno, como tú podr las vivir, si qullleras ser de ver­dad hombre y católico Integro. ¿Por qué no vas a J>O(ler tú lo que pudo San Pérez, que experimenta tus mlsmas dificultades y siente las mi.mas tentaclone1 y tiene los mismos compañeros que tú?

Esto contéstalo tú mismo; pero yo te digo que si quleres lo serás. Ten un director espiritual, un con­fesor !ljo como lo tiene San Pérez y 1ya verAst. . Te voy a tener que dedicar también otra página de la revista: SAN . . . ¿cómo?

1 Ah, pero me olvidaba! San Pérez escribió aquello en su libreta de tapas negras porque ese dla habla tenido un traspié. Por eso venia en el ómnibus rogan· do a Dios que su mamá no estuviera en casa cuando él llegara; pero Nuestro Señor tenla dispuesta otra cosa: no sólo estaba. sino q ue estaba en la puerta pues acababa de despedir a una aml¡a que habla ve. nido a visitarla. Asl, que vio cómo venia el pobre: un ojo casi negro (por lo menos gris). el pelo como plu· mero de turco y hasta el pantalón sucio de algo que denunciaba una buena " revolcada".

La mamá lo miró un momento asombrada, pero en seguida reaccionó como ella siempre lo ha hecho, y recibió el beso carifloso que su hijo se lanzó a darle. asomándole en sus ojos, a pesar del esfuerzo que hizo, unas lágrimas.

- Mamá. voy a arreglarme antes de tomar el te . --Si. anda, no más, y como yo no lo he toma do

aún, te acompañaré. Y hablaron después mucho... y la mamá tuvo que

teleConear al Padre Director . . .

Alberto en esos momentos no su!rla por los golpes recibidos en la nariz que se la hablan dejado como un melocotón (yo, a U que lees esto, te lo confieso. yo no sé como es un melocotón, p ero supongo que debe ser como una nariz hinchada): Alberto no su!rla por su nariz hinchada sino allá aden tro y no es taba tr anquUo... ¡Cóm o lo Iba a estarl

Eran las 10.30 y no s e podla dormir . Pero a n tes d e las 11. habiendo tomado su resolución , se durnuó y sofló en una m ontarlo de melocotones que se Je venia encima.

Y a la maña na siguiente se confesó, y al ir a co mulgar se dio cuenta que San Pérez comulgaba a su lado y Jes(Js supo q ue Alberto pedla poi' Pérez y San Pt.'rez por Alberto.

Te rminada la m isa, P érez se volvió a su casa. par­que (no te extrañes) hab la sido suspendido por 2 dlas de clase y Alberto se !ué derecho al despacho de l Padre Director.

- Padre, ¿puedo hablar un momento con Ud. solo? - ¡SI!, ¡cómo no. Alberto!.. . A ver tú, Pedrfn, y tú

Lato, afuera que aqul no tienes arte ni parte ... - 1 Siéntate, Alber to!. . pero ¿qué te pasa, muchacho?

¡No!. .. ¡nada. Padre!. .. Sobre aquel muchacho bueno, varonU y valiente, que

en ese momento, pálido y casi temb!Andole las manos. poco le faltaba para perder su dominio y echarse a

llorar o salir corriendo de aquel cuarto, cayeron sua . ves las palabras del iDrector, que después de un b reve silencio continuó:

-He v111to tu nota de Espaflol y de F rancés, te feli­cito, muchacho, ha sido mucho mejor que Ja del mes pasado ... las mejores notas han sido la tuya y la de Pérez. (¡Cómo habla sabido aquel hombre hacer en­trar en el tema a Alberto!) .

-Padre, de él, de Pérez le quiero hablar ... --Si; comprendo que ha sido doloroso, pero tú ves

que una falta as! habla de ser sancionada. - Eso es lo que quena decirle. Mire: yo he estado

pensando ... me cuesta mucho decirle esto .. . - ¡Alberto!, hace tiempo que no te arrepientes de

hacer lo que debes ;hazlo ahora también .. . - 1 SI, Padre! Es que a Pérez no se le puede casti ·

¡ar . .. él no ha tenido la culpa de lo que pasó . . . 1 Cómol ¿Te parece que está bien que a una cua­

dra del Liceo y ante otras personas haya tenido esa pe lea? T1'.J lo quieres defender parque eres buen compallt>ro

(1 SI, buen compaAerol. se dijo Alberto para sus adentros. ; buena mandarl"-1 )

-1 . . . 1 --SI, yo. He pensado las cosas y he visto que hu-

biera sido un cobarde ¿Pérez no le dijo nada, de por qué me habla pecado?

- No, sólo un momento estuvo por hablarme pero v1 que se cont rala su cara, y de5J)ués me dijo sólo: ··1 Está bien, Padre!".

- Pues mire, 1 eso es ser hombre! Si l>I le hubiera dicho la verdad el castl¡ado hubiera sido yo. Tuve un mal momento ... empecé a decirle macanas... y él me dijo como otras veces q\te me callara, pero yo ~egul y ... hasta le hice una alusión maliciosa que de él habla hecho .. . uno de la clase . Pérez Be hizo el desentendido, entonces yo le dije otra cosa .. , asi ... un poco peor. . . y Péru me dio una trompada .. . lo habla provocado, Padre, pero le repliqué con otra, y asi fue la pelea . .. Ud. mLlmo. Padre, 11 él le hubie­ra dicho que por defender a Cristo en su a lma, me habla encajado un bollo ... dlscupe, Padre, me hab la pegado. Ud. mismo lo hubiera :felicitad o.

-Como te felicito a ti ahora.

.. y a"cí~~llá" tárci~:. d~ . ~~e~o ·e,; . ~¡ e"s"érito~lo d0el0 0

Pác:ii'.~ Director, Alberto y San P érez, que fue llamado por teléfono, se daban la mano. después que el P. D1recto1 se las estrechara a cada uno.

¡Quién tuviera un amigo como San Pérezl 1 Y quién fuera tan leal y sincero como Albe-rtol

• •

Aquel cura de París obser­vó que cierto empleado de un banco cuantas veces le veía lo saludaba muy fino, a pesar de no conocerle. Pica­do de curiosidad, se decidió una de las veces a interrogar­le la causa de su anómala conducta.

-Señor -le contestó el in­terpelado-, saludo a usted por puro reconocimiento.

-¿Cómo es eso? No re­cuerdo haber prestado a Ud. ningún servicio.

- Pero me lo ha prestado un individuo de su clase, y yo jamás olvido los benefi­cios.

-¿Qué favor es ese? -Devolverme 10.000 fran-

cos que me habían sustraído de mi oficina, volviendo con ellos la paz a mi familia.

Y luego el empleado le con­tó lo siguiente:

-Hallábame un día en mi despacho y tuve la necesidad de salir de él unos cuantos momentos. La caja es ta b a abierta. Vuelvo y me encuen­tro con que han desaparecido

10.000 francos en billetes. Las circunstancias eran tales, que sólo yo tenía que respon­der de ellos. Agobiado por el disgusto y queriendo evitar un escándalo, cuento al teso­rero lo que me ocurría, y este por mucho favor prome­te callar y me concede un mes de tiempo para reponer la suma.

Calcúlese la pena que cae­ría sobre mi familia al saber la ocurrencia. Una hija mía estaba por casarse, y le había destinado como dote algunas acciones que tenía en el Ban­co, fruto de mis ahorros. Al tener que enajenarlas, el ma­trimonio hubo de suspender­se; así lo exigía la delicade­za. Ya comprenderá la tris­teza que esto produciría a todos. Sólo la confianza en Dios y su mucha piedad pudo sostener a mi pobre hija.

Tres semanas habían trans­currido ya de este m o d o , cuando una mañana se abre la puerta de mi despacho y entra en él un sacerdote des­conocido.

-¿Es usted -me pregun­ta s in m á s preámbulo- la persona que perdió de tal y tal manera diez billetes de l. 000 .francos el día tanto de este mes?

-Sí, señor. -Pues quí los tiene usted. Y dejándolos sobre la me­

sa se levantó para marcharse. -No lo hará usted sin que

yo le estreche contra mi co­razón- exclamé loco de ale­gría, dándole el abrazo más sincero que he dado en mi vida.

Hubiera deseado explicacio­nes; pero el sacerdote no me las dió. Sólo me dijo que aquella era una restitución de conciencia fruto de una buena confesión.

Desde entonces no oigo ha­blar de la confesión sin sentir un profundo respeto, ni veo un sacerdote sin quitarme el sombrero para saludarle.

FILNE:Z: CINE PARA NISOS

11 A.RGELITOll

-Mamá, ¿los ángeles tienen alas y vuelan?

-SI, querido. ¿Y cómo la sirviente, que

según papá es un ángel, no tiene alas?

-No te preocupes. nene. que igual va a volar ..

LO QUE EL HIJO P IENSA DEL PADRE

A los siete aflos: Papé es un genio: todo lo sabe.

A los quince aflos: Me pare­ce que papá se equivoca en algunas cosas que dlce.

A los veinte: PapA está un poco atrasado en sus teorlas: no es de esta época.

A los veinticinco: El "viejo" no sabe nada .. . Decididamen­te: está chocheando.

A los treinta: No sé sl ir a consultar con el "viejo" ese asunto ... Tal vez pudiera acon­sejarme.

A los cuarenta: Con mi ex­periencia mi padre a esta edad pudiera haber sido un millo­nario.

A los cincuenta: Qué lAstlma que se haya muerto el pobre "viejo". La verdad es que te­nía unas ideas y una clarivi­dencia notables.

..A los sesenta: Pobre papá ... Era realmente un sabio. Lás­tima que yo lo haya compren­dldo tan tarde.

EN UN OMNJBVS

Un señor muy gordo y gra­cíoso subió a un ómnlbus que ya estaba repleto. Par6se en medio observando a los pasa­jeros y uno de ellos le dijo:

-Hola, señor.. . ¿No tiene Ud. asiento?

-¿Yo?... (contestó el Inter­pelado). SI que lo tengo. Sólo c;iue no si donde colocarlo.

POBRE H OMBRE . EL MUERTO

Ante tamaña desgracia, los amigos encargaron al fiel Fe­derico que comunicara a la señora de Don OU.otoro, la muerte de su esposo: Federico aceptó y se tue a la casa de la viuda.

-¿Oh, cómo está Federico1, le dice la sef\ora.

-Yo estoy bien pero tendrla algo que decirle ...

-Diga, don Federico. ¿en qué puedo servirle? ...

-Oh, en nada, sef\ora: pero resulta que hoy se le ha caldo a su esposo el traje desde el octavo piso.

-Si es eso. no corre apuro ... -Pero es que Don Ottotoro

lo llevaba puesto .

- -- --

IJ€PORTES VOLVERA A BRILLAR, UNA VEZ MAS, LA ANTORCHA OLIMPICA

Australia enfrenta el problema del alojamiento

de =)0.000 hué~pedes 73 PA I SES EN UN TO T AL DE 6 , 000 ATL E TAS

Australia prepara febrilmente la organiza­ción de los próximos Juegos Olímpicos que ten­drán como escenario la ciudad de Melbourne. Y por el momento, el más grave problema que erúrenta, es el de dar alojamiento a la enorme cantidad de huéspedes que amenazan con "in­vadir" aquel pintoresco país.

Sobre el particular, escribe el corresponsal de un diario español, el "ABC", la siguiente nota:

"No figura Australia como país fascinante en las rutas del turismo internacional. Su aspiración es el inmigrante -la necesidad de asentar po­blación extranjera en su te­rritorio de tres millones de millas cuadradas- y no el viajero. Por ahora prefiere u trabajador a cualquier canti­dad de contemplativos fuga­~ .Tiene, por esta causa, una hotelería incipiente. Pero an­te la celebración en Melbour­ne de los próximos Juegos Olímpicos, que concentrarán allí a más de 50 . 000 espec­tadores de aluvión, llegados de los cinco continentes, ade­más de los atletas y sus de­legaciones, Australia afronta el conflicto con entusiasmo, con buena fe y un concepto tan elevado de la hospitali­dad que merece la pena des­tacar su esfuerzo.

seos de huésped, que los anfitriones olvidan alguna vez o no sospechan siquiera. En los casos de familias que se resisten, por patrio­tismo o señorío, a penetrar profesionalmente en la órbita de la hospedería el Comité de los Juegos aconseja el cobro /'con destino a una institución de beneficencia". La fórmula asom­brará quizá a los Viajeros que proyectan tras­ladarse a Melbourne como adelantados de ci-

Sólo disponen de 2. 000 ca­mas para la avalancha los hoteles de Melbourne. El ha­bitante ofrecerá el resto. Al­gunas familias han expresa­do incluso el propósito de abrir gratuitamente sus casas al viajero. Rechazan esta ge­nerosidad, como principio, los organizadores de los Juegos; su criterio es que el precio de la pensión regula los tér­minos de una convivencia provisional mucho mejor y más humanamente que la si­tuación que se crea cuando el invitado d e be renunciar a esos pequeños derechos o de-

LOS REMEROS ORIENTALES, QUE OBTUVIERON EL TERCER PUESTO

MUNDIAL EN LOS JUEGOS OUMPICOS DE HELSINKl.

C O' P-EA:ROS FELICES CO CINE FILMEX

a -;.. supera todo lo

• SUELA ACIOIAl: c1.,,. tk, hionQ. ..,..,_,.,., -......... ~-.. c..ui .rom/lllCTI u E 1

conocido!

...... ,_ ... .. n . 0 1 9.Jll • n . n1 -

li1h - ...... ,. fU llSA ... , si H ru 11 u .. ken• IF

vilizaciones milenarias. Un chino, rico comer· ciante de Papeete, escribe una carta deliciosa: "Además de mi idioma hablo el inglés y apre­ciaré mucho la franca y gratuita hospitalidad, para mí y un amigo mío, que me conceda un caballero casado y su muy amada esposa".

El 80 por 100 de los que ofrecen sus casas aceptan huéspedes de cualquier raza y reli­gión, sin discriminaciones de importancia. Otros señalan preferencias. Los neoaustralianos, en su mayor parte emigrados de Europa, limitan la hospitalidad a determinadas nacionalidades, porque no han olvidado aún sus desventuras de la última Gran Guerra. Un veterinario ad­mite cualquier huésped, de cualquier color, religión e idioma, a condición de que sea veteri­nario como él Otro exige "únicamente" que la persona o personas que le destinen hayan vi­vido en un determinado barrio de Londres pa­ra que le cuenten como va "aquello".

Los 6. 000 participantes, en representación de 73 naciones, y sus acompañantes serán concen­trados en la Villa Olimpica, levantada en Hei­delberg, a ocho millas de Melbourne. Se calcu­la que consumirán por día 9.000 pintas de le­che, tres toneladas de carne, 500 kilos de man­tequilla, 15. 000 docenas de huevos y dos tone­ladas y media de helados de crema, más las m~nudencias. La Villa Olímpica incluye 22 comedores, 170 cocineros, importados de Euro­pa para Ja ocasión y para que se queden en el pais si es posible, y 1.240 camareras. Habrá menús en tres idiomas: inglés, español y fran· cés. Se ha fijado el precio de la pensión com­pleta en tres libras y media australianas. Cada delegación recibirá los alimentos que le son más familiares, "porque Australia, dada su va­riedad de climas, obtiene normalmente la ma­yor parte de los productos básicos que se con­sumen en el mundo".

Destaca Londres con frecuencia la esforzada lucha del Comité de los Juegos Olímpicos de Melbourne en su propósito de alcanzar un éxi­to de organización que difícilmente pueda ser superado en las mismas circunstancias".

J . M .

! i . 4 -..s ~--------------........ --\ ~I u se en cada fug ar

~ la Umpara PHflf PS a4H••••

FILME X CINE 16 m/m. COLONIA Y ROXLO

Costas del Este Ofrecen de trecho en trecho modernos paradores de descanso.

El viajero que desea recorrer el este

uruguayo puede emprender su excursión

seguro de encontrar a cada paso, las co­

modidades que le brindan modernos pa­

radores que se van sucediendo a lo largo

de la línea costera, como éste·

No solamente paradores o lugares de

descanso transitorio, encuentra el turista

en su viaje al este uruguayo. Hoteles de

categoría, prestigiados por una seria

preocupación por satisfacer las exigen­

cias de los visitantes, hacen que el via­

jero emprenda su camino, seguro de en­

contrar a su paso todo lo necesario para

poder gozar meior del espectáculo mara­

villoso que ofrece el país a lo largo de

los costas del este.

Característica <!e Maldonado y sobre

todo del departamento de Rocha, son los

palmares, que con Ja esbeltez de sus

troncos y la gracia de sus desmelenadas

ramas ponen una nota de armonía y co­

lor en el oriente uruguayo.

Entre uno de esos palmares, está poé­

ticamente rodeado el parador SOLANA

DEL MAR.

Uruquayo

Sierras J rinares ponen digno Dll CD a las rlayas del Este ~riental

Plriápolis, en el Departamento de Maldonado, ofrece al vla,ero ginar el hombre en su contacto con la naturaleza. Las sierras, digno del mejor de los pinceles. - Teniendo a la vista un es

del Salmista: "Los cielos y

de los espectáculos más encantadores y variados que pueda ima una riqueza maravillosa de tonos y matices, enmarca un cuadro lo así, no se puede menos de exclamar recordando las palabras

tierra cantan tus glorias, Señor"·

ATRACCIONES QUE OFRECE El PAIS

Vista aérea de Malvín con sus blanquísimos arenales.

Hotel Carrasco, .:i.creditado por sus qrandes comodidades.

PRIOCIPU y meno1co RESUMEN DE LO PUBLICADO

El hijo de En­rl~ue V 111 era WI prindpe como to­doe los da au 'po­ca. Un dla eatal>a en 1 o a jardinH del palado, cuan­do ylo en laa ver­lu a otro niño como •1. Era po­bre, muy pobre, pero l&mbl6n muy Igual a .i. Pare. cian no aólo her­ma- •lno melll­aoa.

Cambiaron. por j u990, aua traj H

Con loe hara­poe del p o b r e qu1llo el principe reprender •l guarda que ha. bia querido echar a su amlgo . Aquel Jo confun· d• y lo echa de palado. En la ca­e a 1 1 • quiere el princlpe conoe9r la casa de au amlgo pobr• y a 11 i l&mbl'n lo confunden y 1 o muelen a paloa aunque •1 dn. pa'9 dice a to­dos que a q u• J hombre pobre no n su JNMlre. Un amigo, entonces .. compad~ de '1.

Mientra. t anto. muere el Rey, su verdadero padH. Juego, aua trajea

En palacio, el amlsro pobre tam.. poco aabe qué hacer puH nadie le cre e que n o ... •1 el prínci ­pe.

ClwrY'7!PCJllRert~ SE, PERI>. '()ógfi ewrltE El. 6EN7i ; pg;o M1 SE RtE<7ÓMVCHO ••• ~Ró EN IA'llR E.S\:ílltNA/19; VHltlO TSIPO ffTVllO ESPIRN· PO tR POSRDR l!N IA QUE ENT'RRROVIEWON Y lilJtH/RDO. , ..

l t---'-'-"r-T~~

11~-

Nutre r refresca "'-

Dlnltn llonteuibennn ~ --PW'8cfllecta de ch1cos r grandes. ,,,,., '

Pepsk:_~o]a

Héroe El 30 de enero de

1938 el tren que Iba desde Puerto Berilio a Med'eWn, en Co­lombia, se descarri­ló. Hubo u n o s 10 muertos y más de 30 heridos. E n t r e los viajeros se halla el P. Félix Rulz, eudis· ta.

Tiene una pierna completamente aplas tada y una gran he­rida por la que se derramaban sus en. traffas. Algunos en· fermeros acuden pre. surosamente a é 1 . pero les dice "Atended primero a los demás". Despué< con una fuerza ¡ de Animo poco común. se arregla con la.• manos su estómago se faja con un paño y plde que le tral· gan los moribundo. y heridos más irra · ves para confesarloi y 11bsorberlos.

Terminado su mi. nisterlo sacerdotal dice a loe enferme ros: ';,Estov felh: de h"ber podido cum· plir con mi deber hasta el fin; os en· tr1>go m il cadflver" F 11e transportado • M.edellin, en donde pocas horas despuh expiraba. Tenla sólo 36 affos.

PEM. ART

lllllllllllllllllllUIDlllllllUllffi

UllllilllllilllllDDlllllDlliDllU

Hacer , ¡Haz tu quehacer, muchacho!

Tu vida no consl.s­" ' en hacer, sino en un QUEhacer: reall . 1.ar una vocación.

SI haces al¡o, si haces mucho, pe r o no lo que tlene• que hacer, FALSIFICAS tu vida.

El vendedor no te •repta diez monedas lnl1&s, por la única V••rdadera q ufe l e l'Xl¡e.

¡.Sabes quiénes son In• que dan queha-1·er?

Aquellos q u e ha­•·•n todo, menos lo qu• tienen que ha­rrr, ¿Qué harias tú cun una gallina que •uplera contar en lu-1ar de poner hue­vnc?

Hubo una persona •n el mundo que al morir exclamó: He h11tho todos mis que­hat·cH·es"; "Consum­matum est".

Se-a El, tu modelo Pl!ro recuerda que

por hacerlos tam. blén Je hicieron una rrui: para clavarlo.

A t o do hombre. ll•1ado al final de 1u vida con sus que­hacer<'S cumplidos h1 quedan los bra­Jut1 t'n fo r m a de

UI ,

lllllilllillllllllllllllllllllllllll

El Refresco de la Amistad

,,flP'. - _...,....

P4D~fE lt~ famoso escritor

. no GlovannJ Pa~ini. primeramen­te mcrédulo, se caSó a ~sar de sus Ideas anhrreligiosas c 0 n una ferviente' católi ­ca, que le Impuso como condición ca­sarse en católico educar católicame,{ te los posibles hljoS que. del matrimonio nacieran. Cuando los hijos fueron ya ma yorcltos, su madr; fmpezó a preparar­os para la primera

comunión. y como ella mu­

chas v e e e s estaba agobiada por las ta­reas del hogar d cla a Papinl en' es~; momentos: "¡Vamos estoy muy ocupad ~ómales ~ la leccl<>°n n~ ca~cISmol" Papl­b primero se nega-

a ,pero, al fin ce dió, Y comenzó ~ to -mar . la lección d~ j~!~cismo a sus hl-

r Lo hacia sln lnte-és, como por ruti­

na. Pero a medida que pasaba el tiem­po, el olr a sus hi ­jos responder a la~ oreguntas Y. ademA~ ~lacerle preJtUntas a lnt~~º· Paplnl se

Aquellas verdades t a n senc!llamente expuestas, le cautl vnron tanto produjeron su• c~~e ve~slón. e hizo s~ Primera Comunión 1untamente con su~ h ijos. -

lllillllllllUUUllllílllllllllHlm

LIBROS El gran emperador

Carlomagno era ade_ más de un monarca muy celoso de la buena-marcha de los asuntos de su pais un excelente padre y abuelo. Entre su familia, la preferida del monarca era una nietecita 11 a m a d a Imelda, que siempre estaba preguntando a su abuelo cosas ávida de saber. Y en honor de ella fundó Carlomagno la pri­mera escuela. cuan­do sus ocupaciones le dejaban libre, el emperador se aper­sonaba en la clase y hacia de maestro.

Un dJa anunció l:I sus alumnos el ilus­tre maestro qu2 lfos iba a hablar sobre los tres lbros más bellos del m u n d o . Todos clavaron en él sus ojos curiosos, y Carlomagno les ex­P 1 i c ó brevemente una gran lección:

"El primer 1 i b r o es el Cielo, dijo el emperador; el segun­do libro es la Con­ciencia, y el tercero es el Evangelio".

Estos tres libros siguen siendo aún hoy y lo serán siem­pre, los tres libros más famosos d e 1 mund'o, y los tres nos h a b 1 a n de la existencia de Dios.

mn1111m11111m111tn11111111

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CONTINUARA .................................................................................................................................................... ~

! ¡Un verdadero deleite infantil:

!¡ ~!?M~!-~H~co~!?.X,~~-1

,1

L ..................... ~ ............................................................................................................................. 11

flllnnIIIJlllillJillilIHlllDIW

Mé~ico Un dla, Pfo XI vi­

sitaba el hospital de San .Ju1m de Dios, y cuando todos se po­nlan de rodillas pa­ra recibir la bendi­ción, distinguió a pocos pasos a UD

hombre que perma­nec!a de ple en ac­titud de respeto, pe_ ro mezclado con tur _ bación.

-¿No os acer-::\i~

como los demás?, ha­bló el Padre Santo.

-¡Es que soy me­dico p rotestante!

-¡ M é d 1 c o . qué tiene que ver! ¡Yo los estimo! Pero aña­dis protestante. ¿Contra qué protes­táis. y por qué pro­testáis?

Sin esperar contes­tacón, el P a p a 1 o bendijo y se separa. ron como el sem­brador que arroja la semJJJa y espera que Dios Ja fructifique.

El médico quedó profundamente emo­cionado. Aquella pre­gunta. ¿contra qui> protestáis y Jl a r a qué protestáis? no Ee aparba de su mente

Quiso responder a ellas seriamente y no encontraba causa suficiente y con t."tn­ta perfección se con­testó a si m 1 s m o que después abjura­ba de su herejla.

FILM EX CINE 16 m/m.. COLONIA y ROXLO lllllllllllffiUI111mwuDlll

Loretta Young, Pat'O Brlen, Joe Brown y otros nos dicen que • , •

-"Joven amigo, Ud. está mejorando . .. " El teólogo esbozó una sonrisa agradeciendo

el optimismo del afable médico. -"10 meses atado al lecho ... Tuberculoso ...

pero siento, como una fresca ráfaga de vida nueva correr por mis venas ... Virgen bendita ¡estoy mejorando!

y mejoró. En febrero de 1940, al año de haber sido in­

ternado en el hospital de South Bend, es de­clarado lo suficientemente restablecido como para reanudar sus estudios. Preparación inme­diata al Sacerdocio del que sería el famoso Pa­dre Patrick Peyton.

En Junio de 1941 es ordenado Sacerdote. Des­tinado a Nueva Orleans. Su Obispo consideran­do el estado delicado del nuevo sacerdote, le confía unas tareas sencillas y menos fatigosas. Pero el Padre Peyton quiere trabajar. Arde' en celo por la causa de Dios y quiere encender las almas. Siente un ansia gigante de mostrarle a la Virgen su gratitud y su amor en un público homenaje. En ese amor mariano brota en su alma el afán de acrecentar el rezo familiar: "La

CAMPANILLA El c41ebre m•dco fran"'5 Recamlr. dJce

u.a. dia a au amigo el Dr. M asM: El Ro.arto " u.a.a campanilla. cada a'lremarta " una llamada o mejor. es una petlclón muy blAln r-endada.

Dla•lamenJe ••mos llegar a Paria muUI· tud de aollc:Uan.t .. que ,,..,..,. a tram.Uar IN.a uunJ01 con Iu auJorldad" y buscan la lnfluencla !' r ecomendación de lo: podero­- !MU'• Uesi&• huta lu Tullertu y conae­<TU!r audiencia. . . Mas para hablar oon la SanUl!na Virgen todo es facilidad: H llra de la CAMPANILLA. es decir M toma el roearlo y en el acto la puerta M abre; pre­Mn1al1 VUHtra aúpllca y H tan buena la San.ti.alma Virgen que al no hay obat•cuJoa gTaves. tnmedl.atamente .. co~e cuanto H ..

familia que reza unida permanece unida", es la consigna y el lema que enarbola en el más­til de su apostólico entusiasmo.

Existe una sola arma eficaz en el combato , contra la invasión del espantoso paganismo mo­derno. Esa arma poderosa e invencible es el Rosario, piensa. Convencido, lanza su idea re­volucionaria: "El Rosario Radial".

Una estación de radio de Albany, ante la per­suasiva persistencia del P. Peyton, le cede unos minutos semanales para rezar con los radio­escuchas. No obstante esta emisora tiene muy poca difusión. Su celo le impele a una campa­ña de difusión nacional.

Escribe a centenares de obispos y sacerdotes informándoles de su colosal idea. Recibe en res­puesta los 5000 dólares para iniciar su pia­doso cometido. Personalmente luego, enmpren­de una jira. Recorre iglesias, escuelas, clubes. Su palabra convencida y convincente enciende los corazones: "Las familias deben rezar su Ro­sario; la familia que reza unida permanece uni­da". Hay un ideal que le tortura: "Un programa de radio nacional para su causa" El jefe de la emisora "Mutual" le replica rudamente: "No hay nada para nosotros en su ideal". Es que el P. Peyton no posee dinero.

-¿Me daria Ud. una hora el día de las ma­dres si yo le presentara una estrella de cine en el programa sin que Ud. tuviera que abonarle nada?" preguntó sonriente el P. Peyton.

-¿Estrella de cine? ¡Desde luego! ¿Pero quién va a conseguir una estrella gratis? contestó in­crédulo el jefe de la Mutual.

- Yo -replicó varonilmente el sacerdote ... Con paso decidido se dirigió al teléfono. Llamó a Bing Crosby en Hollywood ... Hacerse con el cantor en el teléfono es poco menos que impo­sible El P . Peyton lo consiguió.

-¡.Qui:.;iera Ud. hacer algo por la Srna. Vir­gen? ...

· supera todo lo conocido! ·

lil1 >DIS'll .._..,, .... . ...... , ...... , -· - »•n s UM • :t lll lUS .... "114.29

• SUUA ACROllAT: S.al· bl&. lrv~ rnd.l.,,_,,,,o, ~. onlWJ.nhzonle. . CASI lNDEST/IUCT18lE 1

:La táctica fue acertadísima. Al dia siguiente el sacerdote notificó al jefe

de la Mutual: "El Sr. Crosby cantará sin co­brarnos nada ... "

- ¿Crosby? ¿Quiere decir Bing Crosby? El sueño del P. Peyton se había convertido

en realidad. El programa se llevó a efecto y trajo upa

lluvia de felicitaciones de parte de católicos, judíos y protestantes. Todo el mundo insistió

OPTICA

AIDRES FDRMID,c. • 1

fitl.18 DE JULIO frente Oiog. A qrociodo

en que se repitiese el programa. La Mutual se prestó gustosa para la repetición.

El sacerdote anhelaba disponer de una hora de radio por semana. Después de una leve dis­cusión con el director de la Mutual, se retiró reflexionando: "Media hora vale 10.000 $ ... No tengo dinero para ir a Hollywood para sem­brar mi idea entre los actores ... "

Le interrumpió un mensajero: "Padre, aquí tiene un asiento pullman reservado y su pasaje de ferrocarril para Los Angeles".

El sacerdote lo miró sorprendido: "Yo no pe­dí ningún pasaje ... "

Un amigo anónimo le enviaba el regalo Catorce estrellas se ofrecieron gustosas a las

insinuaciones del P . Peyton, entre ellas: Char­les Boyer, Irene Dunne y Maurren O'Sullivan que firmaron promesa de presentarse en cual­quier programa preparado por el sacerdote. Partió del país de los actores, disponiendo de una orquesta y 31 contratos.

El primer programa se efectuó el 13 de fe­brero de 1947. Primeramente música por una orquesta integrada por personas de ñiversos credos. Luego el actor J omes Stewart díciendo: "Se forjan más cosas por medio de la oración de lo que este mundo sueña". Tercero un dra­ma: "Huida del hogar" ... El P. Peyton triunfó plenamente. Los radio-escuchas fueron gene­rosos en enviarle cheques y giros bancarios.

Así comenzó a irradiarse semana tras sema­na el programa engarzado por estrellas y di­fundido por todo el mundo.

Nin¡wna de las estrellas ha faltado a su pro­mesa. Y todos insisten porque el sacerdote les dé ocasión de aparecer a menudo en sus pro­gramas. Los cheques que reciben los actores como bonificación frecuentemente los endosan inmediatamente al Padre. El famoso J immy Durante se quejó de que aún no lo habían invi­tado a participar En una palabra los actores de Hollvwood rezan y hacen rezar.

El P. Peyton es un verdadero héroe d1> la ora­ción. Su lema: "La familia que reza unida per­manece unida" le infunde alientos v le da bríos". Enormes dificultades obstaculizan aún su labor. Pero el P. Pevton posee un secreto: "tiene una cita diaria con Jesús Sacramentado, ron quien permanece por espacio de una hora". El Señor Todopoderoso es el que le sugier,, los J?rancies ideales, le infunde valor y le da el triunfo. • • •

¡Qué hermoso sería si todos los qrandes ac­tores y deoortistas de nuestra. Patria y del mundo entero se presenta..ran a la radio oa.ra ofrecer y dedicar sus éxitos y corona'I a Dios v aprobar con voz elocuente -por ser SU TOC-­

los al)OStolados de Ja Jolesia. e insistir en la necesidad del rezo del Rosario diario!

La India. floreciente pals de misiones ea!6U­cas proh1bl6 la entrada a todo misionero extran­jero. Con todo, mú de 3000 saeerdot" nall•Oll siguen la obra da avanqallzaclón c-rúttana .., multiplican su número para que el ca!ollc:t9mo progT ....

FILMEX CINE 1 6 m./m. COLONIA Y ROXLO

- 1 -

Vamos, que si te lo propongo "de enlracla" no ter­m inas de leer esto, y a lo mejor te interesa... Por eso hablemos de otra cosa.

-"¿Y para qué voy a quedarme con Don Bosco?" Y el Joven Miguel Unla no entendla, sonrela , mi­

raba a Don Sosco. -¿Y si yo te manillesto el estado de tu conciencia,

¿Jo tomarás como una sei'ial de que Dios te llama? . . Y,, comenzó la letanfa ... Miguel estaba algo "son.

rosado ... -"¡Y eso no es todo! CUando tenías once alios, un

domingo, estando en las Vísperas, viste que un com­pañero dormla con la boca abierta a tu lado, y tú sacast e del bolsillo una ciruela y se la pualste en lo boca ... El, medio ahogado, saltó de un brinco, echó a correr por la iglesia, y ¡claro!, hubo que suspen­der el canto, y.. . este pecado no necesita penitencia porque ya se encargó entonces de dártelo tu primo Sacerdote, con unos buenos coscorrones ...

... Y el Joven Miguel Unla, de 27 of\oa de edad, se quedó para "aTUdar a Don Bosco".

Pero los aflos pasan, y cuantos más posan, o deben ~. parecen más largos al principio... Sólo que a Miguel le parecieron largos al fin: antes de orde­narse de Sacerdote se sintió cansado, agotado como el decla: "con la cabe za rota". '

- Decididamente, Don Sosco, me marcho mailana mismo: Usted sabe que "vale más burro vivo que doctor muerto" ... Allá en mi pueblo podré servir pa­ra algo.

- Bueno, si tienes la cabeza rota , se arrecio fácil­mente: toma la mfa.

Y el clér igo recibió el sombrero de Don ao.co. Fue un instante: todas sus dud~. temores. ansiedades, ce. saron sllbltamente. Sólo le quedó ... e l bonete milagroso, que conservó toda su vida como preciosa rell-q uia.

- II -

A tres dios de la ciudad de· Bo. gota , en parajes solitarios, 900 le­prosos lranscurrlan su misera vi­da. Con un calor so!ocante, no ten!an para beber más agua que la trafda con burros desde un ma­nantal o una hora de camino, y que llegaba al lazareto casi en ebullición: nula era Ja corresp0n­<1enc1a con la capital colombiana. por temor al contagio. De vez en cuando, los soldados les llevaban pan, que, con el largo camino y <'<>n el c11Ior tropical, llegaba du­rísimo. ¡En un cementerio de ca­dáver.. ambulanteal

El Padre Miguel Unia se en­contraba rezando el Srevario en el domingo XIn después de Pen­tecostl-s; ,.¡ Evangelio narra la cu­ración m1Iatrro"3 de los 10 lepro­sos . La voz de Dios se hace sen­t ir ·Iaramente, y la "ciudad de

1111'1'1~1 1111111111111111111111!111!1'11 1 111111111111111111'1'1

FILM EX

C inc pa ra Niños

los leprosos" des!Ua delante de su !antasla: ellos le muestran sus Ua¡as, le cuentan sus desven turas. lanzan crttos lasUmeros ...

Por la r.-oche no puede resistir más, y golpea a la puerta de su Padre Director , don Rabagliatl.

-Padre Unla, ¿ir con los leprosos? SI se t ratara de mi, irla en se¡ulda; pero, usted ... Es un sacrl!lclo heroico, superior.. . En !in, consUltaré con los Supe­riores. Rccemo1, y que Dios nos ilumine, y si El lo quiere ...

. .. Y Dios lo qullO, y allá rué el Padre Unía, y se hizo querer de " INI 1-p~·. y los llamó "Bw­m&no1", y un dla comenzó su sermón: -''Xoaoúos los lepr- ...

Por que Dlot quiso que au sacrificio tuera pertecto y completo. . . Hoy 1u e1tatua custodia la entrada del que fuera "reino del dolor", magnifica ciudad hoy de leprosos. a tendldot por los Salesianos e Hijas de Maria Auxiliadora; leprosos que h an aprend ido que todos estamos de paso en esta vida, que nuestro c uer ­po es sólo instrumento pasajero, que lo que v ale es el alma... en cracla.

. .. Amigo lector: ¿viste? Un héroe de veras, no co­mo los de tus novelas ni de tus pelleulas: t erml.. nan el "episodio" poco menos que muertos y ya tuera de combate ... y se hacen los " vivos" para que vuel­vas "la semana próxima en esta misma sala" ...

¿Viste cómo hay "herol.smos verdaderos? ¿Te asus­taste al leer el titulo del principio? Y sin embarco el joven Unla quiso realizar toda y b len completa esta historia reaL

Si me preguntas: ¿cómo hizo?, te respondo: - Pel\.IÓ en Cristo muriendo por los h ombres, pensó que los hombres eran sus hermanos... . que él habla nacido para héroe de verdad, y qubo... y lo fué.

lOS JllNÓNINOS l. - LA LLUVIA

En toda masa de aire encontramos vapor de agua . La cantidad máxima que puede contener varia con Ja temperatura. Al ascender ésta, aumenta el poder de absorción de humedad por parte de la atmós.fe­ra, e inversamente. Pongamos un ejemplo. Una masa de aire de 1 metro cúbico de volumen y a 20Q de temperatura puede contener como máximo 17 gra­mos 13 de vapor de agua, alcanzando asi la satu­ración. Ahora bien, Si esa misma masa desciende a 109 de temperatura. su contenido de humedad dismi­nuirá a 9 gramos 33, lo que arroja un excedente de 7 gramos 80 que se condensará formando pequefias gotitas de agua que integrarán las nubes. Al per­sistir el descenso de temperatura las gotitas se unen aumentando su tamafio, vencen la resistencia que el oponen las capas inferiores de la atmósfera precipitándose como lluvia.

2. - EL RAYO

Las tormentas que presentan un cielo opaco. cu­bierto d e espesas nubes, son iluminadas momentá­neamente por relámpagos, y también rayos que se dibujan en la atmóslera. Los primeros son debidos a descargas eléctricas producidas entre dos nubes y el rayo, entre una nube y el suelo. El chispazo es de corta duración, pudiendo ser sus resultados desasttrosos ya que esta descarga puede fundir ba­rras de cobre y aun de hierro debido a Ja cantidad e:ictraordlnaria d e ene~la que libera.

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.. 5. - LA NIEVE

't.a nieve se produce por la condensación directa del vapor de agua al estado sólido. Cuando las go­tas de agua que forman un nube, se en.frian por debajo del cero grado, se produce la precipitación en forma de copos de nieve que descienden difi ­culto.amente hasta alcanzar el suelo. Pero, si en la catoa atraviesa capas de aire de temperatura supe­r iores a la de congelación, lo que llega al suelo es aguanieve, como hace muy poco tiempo pudo ser apreciada en varios puntos de nuestro pals.

El paisaje, luego de las precipitaciones, se cubre de un manto blanco, donde los sucesivos copos al

1 caer, se comprimen, unen y end\Jrecen hasta con­vertirse en hielo.

fWo 1Ja7 cesa. per fácil que aea: qrie ne la baga dfticfl la mala gana.

VIVES

MITIOROlOG~C ~

2. - ARCO IRIS Este fenómeno luminoso puede ser observado por

a quellas personas que enfrentadas a la región del cielo donde llueve, tengan el sol a tus espaldas.

Se presenta el arco iris como medias circunleren­rencl:ls coloreadas. Es una gama de siete colores que va del violeta, el interior, hasta el rojo, el más exterior.

Este fenómeno se produce por la descomposición de los rayos solares al atravesar las goUtas de Alf\la que se precipitan.

4. - HURACANES Las regiones tropicales son las más afectadas por

este fenómeno de violencia inusitada. También ee co­noce a Jos huracanes por las denominaciones de ciclo­nes o tl!ones. La caracterteristlca de los mismOll, está dada por las velocidades extraordinarias que alc1Ul%8 el aire. devastando todo a au paso. La dirección se­guida por el viento ,es ir hacia las reglones donde la presión atmosférica es menor.

Se han registrado velocidades del viento de hasta 216 !unta. por hora, lo que hace una progresión del aire a razón de 60 metroe por segundo.

6. - EL GRANIZO Et granizo o pedrisco, es otra precipitación sólida.

Lo forman masas de hielo con dimensiones que va­r lan entre 5 y 15 millmetros , alcanzándose a recoger en oportunidades piedras de hasta 6 centímetros de diámetro. Su aspecto es redondeado o de huso y está compues to de varias capas concéntricaJ de hielo. Se atribuye a causas eléctricas la producción de este fenómeno.

Los dafios ocasionados por el granizo sobre c ulti­vos, animales y edificios son cuanti~ La restringi­.da irea afectada por el granizo y su escasa frecuen­c ia d isminuyen los perjuicios que ocasiona.

••• ua clat'o •e pferdeJuna .herradura, :,y por una .he .. •r•d•ra un caballo, :,y per ua c•ballo ua caballero.

Proverbio Esp•ftol

Generalidades La América Central es el lazo de unión en­

tre la América del Norte y la del Sur. Su po­blación alcanza a unos 8.000. 000 de habitantes. Al este, están las Antillas. Relieve

La Ccrclillera Ceniroamericana está separa­da de los Andes y de las Rocallosas, por las depresiones del Panamá y Tehuantepec. Pre­senta un marcado carácter volcánico, y es cen­tro de sismicidad.

Hidrografía No hay corrientes de importancia. El Río San

Juan es el desagüe del Lago Nicaragua. quien a su vez recibe las aguas del Lago Managua. C<>ltas

En el Mar Caribe se destacan el Golfo de Honduras y el Cabo Gracias a Dios. En el Pa­cífico, el GoUo de Panamá.

GUATEMALA República, cuya capital es GUATEMALA LA

NUEVA. Tiene sobre el Pacífico el puerto de CHAMPERICO.

HONDURAS República que tiene por capital a TEGUCI­

GALPA, en el interior. En el Golfo de Fonsec:a. sobre el Pacífico, está el puerto de AMAPALA.

EL SALVADOR República. Capital, SAN SALVADOR, tam­

bién en el interior.

NICARAGUA República. Capital: MANAGUA, en las már­

genes del lago homónimo.

COSTA RICA República. Capital, SAN JOSE. Sobre el Mar

Caribe, PUERTO LIMON.

PAN AMA

República. Capital, PANAMA, en el Golfo de P anamá. Es también puerto. Sobre el Mar Ca­ribe el puerto de COLON. El Islmo de Panamá está hoy cortado por el Canal de Panamá.

HONDURAS BRITANICA Colonia inglesa. Capital: BELICE.

Producciones De origen vegetal: café. banana. gom a de

chicle. etc.

A NTIL LAS Generalidades

Archipiélago que se extiende desde el Rio Orinoco has ta Yucatán. Se divide en Antillas mayores y m enores. Las Mayores son monta­ñosas y fértiles; las Menores, volcánicas y ári­das.

ANTILLAS MAYORES CUBA

La mayor de las islas. República, cuya capi­tal, LA HABANA, es un excelente puerto. Pro­duce azúcar, tabaco y café, de alta calidad. HAITI

Comprende dos repúblicas: SANTO DOMIN­GO, capital TRUJILLO: y HAITI, capital PUERTO PRINCIPE. Produce café.

PUERTO RICO Al este de Haití. Depende de los Estados

Unidos. Su capital es SAN JUAN DE PUERTO RICO. Producciones: cafi. ce.ña de asúcar y tabaco.

JAMAICA Al sur de Cuba. Posesión inglesa. Capital :

KINSTON. Produce caña de azúcar. ron y ta­baco.

ANTILLAS MENORES Bordean el Mar Caribe. Se dividen en dos

grupos: Isla:; de Barlovento, -desde Puerto Rico a las bocas del Orinoco; y de SotaTen.to. en las costas de Venezuela. Entre las de Barlo­vento se encuentran las islas: GUADALUPE, MARTINICA y TRINIDAD. Son, en general, posesiones extranjeras.

LUCAYAS Llamadas también BAHAMAS, Al norte de

las Antillas .Entre ellas se encuentra la de San Salvador o Guanahaní. Son posesión bri­tánica.

Gróficos Unidos S A•

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OC[ANO PACIFICO

América Central

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EL ENTRENAMIENTO ES LA BASE DEL tXITO EN EL FúTBOL, DICE CATAPATO. Y NO ES DE EXTRA· i'IAR QUE OPINE ASI, PUES tL ES ENTRENAOOR. ~ -___,..._,_~

CUANOO LA PELOTA VIENE DE AL TO HA Y QUE SALTAR PARA ALCANZARLA. Y PARA DESARRO­LLAR LA AGILIDAD EN EL SALTO.

. . LO MEJOR ES PRACTICAR El SAL TO A LA CUERDA. A VER, UNO, 005 .. .

" i.OS FORZOSOS" SE JUEGAN UN PARTIDO FACIL, AL DE­CIR DE CATAPATO. EL ENTRE­NADOR, QUIEN LOS HA PRE· PARADO "AL PELO"

" LOS FORZOSOS ' AVANZAN .•.