Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con...

11
Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 L’O S S E RVATORE ROMANO EDICIÓN SEMANAL Unicuique suum EN LENGUA ESPAÑOLA Non praevalebunt Año LII, número 30 (2.677) Ciudad del Vaticano 24 de julio de 2020 POR UN ALTO EL FUEGO GLOBAL E INMEDIATO El Papa pide compromiso internacional por la paz y la seguridad en zonas de conflicto

Transcript of Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con...

Page 1: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00

L’O S S E RVATOR E ROMANOEDICIÓN SEMANAL

Unicuique suum

EN LENGUA ESPAÑOLANon praevalebunt

Año LII, número 30 (2.677) Ciudad del Vaticano 24 de julio de 2020

POR UN A LT OEL FUEGOGLOBAL E

I N M E D I AT O

El Papa pide compromiso internacional por la paz y la seguridad en zonas de conflicto

Page 2: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

L’OSSERVATORE ROMANOEDICIÓN SEMANAL

Unicuique suum

EN LENGUA ESPAÑOLANon praevalebunt

Ciudad del Vaticanoredazione.spagnola.or@sp c.va

w w w. o s s e r v a t o re ro m a n o .v a

ANDREA MONDAd i re c t o r

Giuseppe Fiorentinosub director

Silvina Pérezjefe de la edición

Redacciónvia del Pellegrino, 00120 Ciudad del Vaticano

teléfono 39 06 698 99410

TIPO GRAFIA VAT I C A N A EDITRICEL’OS S E R VAT O R E ROMANO

Servicio fotográficop h o t o @ o s s ro m .v a

Publicidad: Il Sole 24 Ore S.p.A.System Comunicazione Pubblicitaria

Via Monte Rosa 91, 20149 Milanos e g re t e r i a d i re z i o n e s y s t e m @ i l s o l e 2 4 o re . c o m

Tarifas de suscripción: Italia - Vaticano: € 58.00; Europa (España + I VA ): € 100.00 - $ 148.00; AméricaLatina, África, Asia: € 110.00 - $ 160.00; América del Norte, Oceanía: € 162.00 - $ 240.00.Administración: 00120 Ciudad del Vaticano, teléfono + 39 06 698 99 480, fax + 39 06 698 85 164,e-mail: [email protected] México: Arquidiócesis primada de México. Dirección de Comunicación Social. San Juan de Dios,222-C. Col. Villa Lázaro Cárdenas. CP 14370. Del. Tlalpan. México, D.F.; teléfono + 52 55 2652 99 55,fax + 52 55 5518 75 32; e-mail: [email protected] Perú: Editorial salesiana, Avenida Brasil 220, Lima 5, Perú; teléfono + 51 42 357 82; fax + 51 431 67 82;e-mail: [email protected].

página 2 L’OSSERVATORE ROMANO viernes 24 de julio de 2020, número 30

Nuevo llamamiento a un alto el fuego global para entregar asistencia humanitaria a los enfermos de covid-19

Una paz duradera para el Cáucaso

Ángelus

El Papa Francisco sigue «conp re o c u p a c i ó n … el agudizarse de las

tensiones armadas en la región delCáucaso, entre Armenia y

Azerbaiyán»: lo confió al finalizar elÁngelus del 19 de julio, auspiciando

que se alcance «una solución pacíficaduradera, que se preocupe por el bien

de esas amadas poblaciones».Asomándose a mediodía desde la

ventana del estudio privado delPalacio apostólico vaticano, antes de

rezar la oración mariana con losfieles presentes en la plaza de San

Pedro –en respeto de las medidas deseguridad adoptadas para evitar la

difusióndel virus– y con quienes loseguían a través de los medios, como

habitualmente, el Pontífice ofrecióuna reflexión sobre el Evangelio deldomingo, comentando en particular

la parábola de la cizaña

Preocupación del Papa por el recrudecimiento de las tensiones armadas entre Armenia y Azerbayán

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!

En el Evangelio de hoy (cfr. Mt 13, 24-43)nos volvemos a encontrar a Jesúshablan-do a la multitud en parábolas sobre elReino de los cielos. Me detengo sola-

mente en la primera, la de la cizaña, a través de lacual nos hace conocerla paciencia de Dios,abriendo nuestro corazón a la esperanza.

Jesús cuenta que, en el campo en el que se hasembrado la semilla buena, brotatambién la ciza-ña, un término que resume todas las malas hier-bas, que infestanel terreno. Entre nosotros, pode-mos decir que también hoy el terreno estádevasta-do por muchos herbicidas y pesticidas, que al fi-nal también hacen maltanto a la hierba, como a latierra y a la salud. Pero esto, entre paréntesis.Lossiervos entonces van donde el amo para saber dedónde viene la cizaña, y élresponde: «Algún ene-migo ha hecho esto» (v. 28). ¡Porque nosotros he-mossembrado trigo bueno! Un enemigo, uno quehace la competencia, ha venido ahacer esto. Ellosquieren ir enseguida a arrancar la cizaña que estácreciendo,sin embargo el amo dice que no, por-que se corre el riesgo de arrancar juntaslas malashierbas —la cizaña— y el trigo.

Es necesario esperar el momento de lacosecha:solo entonces se separan y la cizaña será quema-da. Es también unahistoria de sentido co-mún. Enesta parábola se puede leer una visión dela historia. Junto a Dios —el amo delcampo— queesparce siempre y solo semilla buena, hay un ad-versario, que esparcela cizaña para obstaculizar elcrecimiento del trigo. El amo actúaabiertamente,a la luz del sol, y su propósito es una buena cose-cha; el otro,el adversario, sin embargo, aprovechala oscuridad de la noche y obra porenvidia, porhostilidad, para arruinar todo. El adversario tieneun nombre: esel diablo, el opositor de Dios porantonomasia.

Su intención es obstaculizar laobra de salva-ción, para que el Reino de Dios sea obstaculizadopor trabajadoresinjustos, sembradores de escánda-

los. De hecho, la buena semilla y la cizaña nore-presentan el bien y el mal de forma abstracta, si-no a nosotros los sereshumanos, que podemos se-guir a Dios o al diablo. Muchas veces, hemos es-cuchadoque una familia que estaba en paz, des-pués han comenzado las guerras, las envidias…Un barrio que estaba en paz, después han empe-zado cosas feas… Ynosotros estamos acostumbra-dos a decir: “Alguien ha venido ahí a sembrarci-zaña”, o “esta persona de la familia, con los chis-mes, siembra cizaña”. Siempre es sembrar el mallo que destruye.

Y esto lo hace siempre el diablo onuestra tenta-ción: cuando caemos en la tentación de chismo-rrear para destruir alos otros. Laintención de lossiervos es la de eliminar enseguida el mal, es decira laspersonas malvadas, pero el amo es más sabio,ve más lejos: estos deben saberesperar, porque so-portar las persecuciones y las hostilidades formaparte de lavocación cristiana. El mal, por supues-to, debe ser rechazado, pero los malvadosson per-sonas con las que hay que tener paciencia. No setrata de esa toleranciahipócrita que esconde ambi-güedad, sino de la justicia mitigada por la miseri-cordia. Si Jesús ha venido a buscar a los pecado-res más que a los justos, a curar a losenfermos an-tes que a los sanos (cfr. Mt 9, 12-13), tambiénnuestra acción comosus discípulos debe estar diri-gida no para suprimir a los malvados, sino para-salvarlos. Y ahí, la paciencia. El Evangelio de hoypresenta dos modos de actuar y de vivir la histo-ria: por unlado, la mirada del amo, que ve lejos;por otro, la mirada de los siervos, queven el pro-blema. Los criados se preocupan por un camposin malezas, el amo sepreocupa por el buen trigo.El Señor nos invita a asumir su misma mirada, la-que mira al buen trigo, que sabe custodiarlo tam-bién en las malas hierbas.

No colabora bien con Dios quien se pone a lacaza de los límites y de los defectosde los otros,sino más bien quien sabe reconocer el bien quecrecesilenciosamente en el campo de la Iglesia yde la historia, cultivándolo hastala maduración. Y

entonces será Dios, y solo Él, quien premie a losbuenos ycastigue a los malvados. La Virgen Maríanos ayude a comprender e imitar lapaciencia deDios, que no quiere que ninguno de sus hijos sepierda, que Él ama con amor de Padre.

Al finalizar el Ángelus, el Papa renovó «elllamamiento a un alto el fuego globale inmediato, quepermita la paz y la seguridad indispensables paraproveer la asistenciahumanitaria necesaria» en estetiempo de pandemia, rezó por la paz en elCáucaso ysaludó a los grupos de fieles presentes.

Queridos hermanos y hermanas:

En este tiempo en el que la pandemia nomuestra signos de detenerse, deseoasegurarmi cercanía a los que están afrontando la

enfermedad y susconsecuencias económicas y so-ciales. Mi pensamiento va especialmente a esaspo-blaciones, cuyos sufrimientos se agravan por si-tuaciones de conflicto.

En base de una reciente Resolución del Conse-jo de Seguridad de las Naciones Unidas, renuevoel llamamiento a un alto el fuego global e inme-diato, que permita la paz y la seguridad indispen-sables para proveer la asistencia humanitaria nece-saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en la región del Cáucaso, entre Armenia yAzerbaiyán. Mientras aseguro mi oración por lasfamilias de aquellos que han perdido la vida du-rante los enfrentamientos, deseo que, con el com-promiso de la comunidad internacional y a travésdel diálogo y la buena voluntad de las partes, sepueda alcanzar una solución pacífica duradera,que se preocupe por el bien deesas amadas pobla-ciones.

Dirijo mi saludo a todos vosotros, fieles de Ro-ma y peregrinos procedentes de Italia yde otrospaíses. Os deseo a todos un buen domingo. Porfavor, no os olvidéis de rezar por mí. Buen al-muerzo y hasta pronto.

Page 3: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

número 30, viernes 24 de julio de 2020 L’OSSERVATORE ROMANO página 3

Compostela, donde se abrazan el cielo y la tierra

“ Esta esla gracia de la

p e re g r i n a c i ó ncristiana que

la tierra se convierte enun espacio teológico, lo

verdaderamente humanose esclarece en lo eterno,

la noche se hace claracomo el día y la fuerza

secreta para vivir yluchar en este mundo seencuentra en la cercanía

del cielo y la presenciaamiga de Dios

CAROLINA BLÁZQUEZ CASAD O

Celebramos la solemnidad de Santiago, el Mayor, unode los tres apóstoles, junto con Pedro y Juan, que vi-vió una especial intimidad con Cristo. En España, dehecho, se le suele invocar como Santiago, «el amigo

del Señor». La especial amistad de estos tres discípulos con Je-sús explica el que solo ellos estuvieran presentes en algunos mo-mentos de su vida, según nos narran los evangelios: en la resu-rrección de la hija de Jairo, en la Transfiguración o en la nochede Getsemaní. La ciudad de Santiago de Compostela en Españaes una de las sedes apostólicas de la cristiandad, pues en ella seveneran los restos de este apóstol y a ella, desde todas las partesdel mundo, peregrinan ininterrumpidamente miles de hombres ymujeres desde hace más de diez siglos.

También este año, a pesar de la crisis mundial del covid 19 ytodas las restricciones y protocolos que ha traído consigo, si-guen llegando peregrinos a este lugar de gracia, donde el cielo yla tierra se abrazan.

Existen diversas propuestas toponímicas para explicar el nom-bre de la ciudad. La explicación más conocida, aunque muy po-co probable, es la que parte de la leyenda medieval sobre el ha-llazgo del sepulcro donde se encontraron los restos del Apóstol.En ella se cuenta cómo, en pleno florecimiento del eremitismovisigótico español, en el siglo IX y en la única zona peninsularprácticamente libre de la invasión islámica, se advirtió un extra-

También hoy, para los que caminan asegurados por la multi-tud de indicaciones que señalan por dónde ir, orientados por lasguías y los móviles, se produce este paradójico milagro: que latierra invita al peregrino a mirar al cielo y que la meta de estaaventura no es, en realidad, un lugar más de este mundo, puesal pisarlo se gusta algo de lo eterno. Puesto que los apóstolesson los eslabones más cercanos que nos unen a Jesucristo, a tra-vés de ellos que vieron, tocaron, contemplaron su cuerpo crucifi-cado y resucitado, la carne del Hijo de Dios —el Dios hechohombre y así el hombre hecho Dios—, somos introducidos tam-bién nosotros misteriosamente en el misterio de la encarnación.Existe una pedagogía propia del camino de Santiago por la que,gracias al contacto más estrecho con el mundo, con la densidadde lo humano —el propio cuerpo y la voz del corazón—, con lacompañía de los otros peregrinos, con la tradición de fe y la his-toria que han forjado esta ruta durante siglos, se percibe una es-pecial presencia del Dios que ha elegido esta tierra y el ser hu-mano como su morada.

A medida que se van dando pasos y uno se adentra en el ca-mino, descendiendo los Pirineos, recorriendo los campos dora-dos de la meseta, ascendiendo los montes de León y Galicia, enla concentración sobre uno mismo que impone el hecho de ca-minar y la soledad y el silencio y la oscuridad en la que cada díatemprano, cuando aún el alba no se ha levantado, el peregrinoestrena la jornada, en la belleza del arte… va brotando una exi-gencia de trascendencia, de absoluto, de diálogo con el Misterio

ño resplandor, a modo de estrellas que caían sobre un monteci-llo del Bosque Libredón, señalando un lugar. Finalmente, elobispo Teodomiro de Iria Flavia, avisado de este fenómeno, en-contró justamente, en el sitio esclarecido por la misteriosa luz dela noche, la antigua y olvidada tumba de Santiago, el apóstolque, según la tradición cristiana, había llegado allí para evange-lizar hasta Finisterrae y cuyo cadáver había regresado secreta-mente desde Jerusalén por mar para descansar en esta tierra. Deeste modo, la palabra Compostela podría proceder del términolatino campus stellae, el campo de las estrellas.

Sea o no sea acertada la etimología, lo cierto es que en el Ca-mino de Santiago la tierra y el cielo se han unido de una mane-ra misteriosa. Desde la Edad Media, la multitud de estrellas dela vía láctea eran como las flechas amarillas de hoy que los pere-grinos de toda Europa seguían para llegar hasta el Monte delGozo. Ya allí, las torres de la catedral, contemplada desde lejospor primera vez con los propios ojos, dirigían los últimos tra-mos del caminante hacia la meta. El cielo, por tanto, guiaba lospasos de los hombres en la noche de este mundo y para caminarseguro y no perderse solo se podía mirar atentamente hacia lomás alto.

que esclarece un nuevo sentido, una nueva razón para seguir ca-minando. Los peregrinos pisan el polvo de la tierra mientras sedespierta en ellos la sed de Dios; se encuentran con ellos mis-mos, con sus preguntas, con sus heridas y también con multitudde compañeros de camino, con la belleza de este mundo que lesrodea y se abren al encuentro con el Dios Vivo. Entran en tem-plos silenciosos y solitarios donde en lo secreto Alguien les espe-ra y les habla al corazón. Incluso la mochila pesada que llevansobre los hombros y, aún más, la que cargan en su interior tirade ellos, ¡pero hacia arriba!, pues toda preocupación, inquietud,el dolor o la búsqueda que motivaron el camino en algún mo-mento se transforman en oración, súplica, palabra de gratitud yalabanza, gesto de confianza o gemido y lágrima de misericordiaante Dios.

Esta es la gracia de la peregrinación cristiana que la tierra seconvierte en un espacio teológico, lo verdaderamente humano seesclarece en lo eterno, la noche se hace clara como el día y lafuerza secreta para vivir y luchar en este mundo se encuentra enla cercanía del cielo y la presencia amiga de Dios, que ha queri-do dejarse encontrar y reconocer en la entraña de este mundo.

Santiago de Compostela hacia 1837(David Roberts)

Page 4: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

página 4 L’OSSERVATORE ROMANO viernes 24 de julio de 2020, número 30

El mensaje de la subasta We Run Together sostenida por el Pontífice

El deporte solidariopara volver a comenzar juntos

GI A M PA O L O MAT T E I

El deporte como motor soli-dario para volver a comen-zar juntos. Palabras de PapaFrancisco. Y que no sea so-

lo una bonita metáfora sino un muyconcreto estilo de vida lo están testi-moniando los muchos atletas de to-do el mundo protagonistas de WeRun Together (w w w. c h a r i t y s -t a rs . c o m / We R u n To g e t h e r ), la subasta,sostenida por el Papa —también re-galando algunos objetos— para elpersonal de los hospitales de Bérga-mo y Brescia, en primera línea paraayudar a los enfermos.

«En el deporte se ven muchos“m i l a g ro s ” de mujeres y hombresque se vuelven a levantar después delas caídas, y esta es una actitud deci-siva para la vida de cada uno de no-sotros». Va directa a lo esencial lasaltadora croata Blanka Vlašić, cua-tro títulos mundiales y una multitudde medallas que la ponen en la ca-beza de las clasificaciones de todoslos tiempos. En un video-testimonioexclusivo para los medios vaticanos,Vlašić relanza su estilo deportivoque la ve protagonista también enmuchas iniciativas con su archidióce-sis de Spalato-Makarska.

Y, con este espíritu, Vlašić ha do-nado la camiseta, firmada, de su se-lección nacional (y sus históricas za-patillas de salto que, explica, «com-parto porque son un símbolo de lossacrificios para tener éxito en la vi-da») que usó para subir al podio enlas Olimpiadas de Río de Janeiro en2016. Se supone que en ese encuen-tro la campeona no debía estar poruna de sus muchas lesiones. Pero hi-zo todo lo posible para bajar a lapista, incluso terminó ganando lamedalla. «También con el deporte setestimonia la fe y la belleza de lacreación», dice la saltadora croata.

El atletismo —«el rey del deporte»— es el protagonista del sexto lote dela subasta We Run Together que laAthletica Vaticana está llevando ade-lante con las Llamas Amarillas, el

Iten, en Kenia, también ha construi-do edificios de una parroquia, traba-jando ella misma con su marido ydos hijos.

Luego están los dos saltadores depértiga más fuertes del mundo. Lagriega Katerina Stefanidi y la esta-dounidense Sandi Morris son muyamigas entre ellas, no obstante queen la pista se reparten las medallasde oro entre Olimpiadas y Mundia-les por poquísimo centímetros. Y asíhan elegido sostenerse en la subastaWe Run Together la una a la otra,han ofrecido sus camisetas (firma-das) de sus equipos nacionales yMorris también el pectoral de losMundiales 2019, precisamente paratestimoniar «cómo debería ser el de-porte y también, sobre todo, la vi-da».

longitud. Para la subasta ha donadoel traje del equipo nacional italianoque utilizó en la competición, el 21de julio de hace un año, en Boras enSuecia.

En el sector masculino han bajadoal campo auténticos «monumentos»del atletismo. Empezando por sirSebastian Coe que, después de unaextraordinaria carrera de medio fon-do (dos veces campeón olímpico,doce récords mundiales), ha organi-zado las Olimpiadas de Londres en2012 y hoy es presidente de la Fede-ración internacional de atletismo.Coe ha puesto a disposición una ca-miseta de la World Athletics y su au-tobiografía (Running my life).

Stefano Baldini es, en Italia, elsímbolo del maratón por su victoriaen los Juegos Olímpicos de Atenasen 2004: ofrece una camiseta de la

selección italiana y sus zapatillas «le-gendarias», todo firmado. No es unaexcepción Fabrizio Donato, capitándel equipo nacional italiano, queapunta a su sexta Olimpiada des-pués de subir al podio en el saltotriple en Londres en 2012 y ganardos títulos europeos. De su parteuna invitación a su casa para una ce-na con su familia (su esposa, ex atle-ta y sus dos hijas): y que Donato esun excelente cocinero lo saben bienlas familias del Dispensario SantaMarta, considerando que ha prepa-rado dos veces la comida para ellos.

Y también, Thiago Braz da Silva,campeón olímpico de salto con pér-tiga en su Río de Janeiro, dona lacamiseta de la selección brasileña. Alestilo de la «cultura del encuentro»,entonces, Davide Re, poseedor delrécord italiano de los 400 metros, in-vita a un fin de semana de entrena-miento en el centro deportivo de lasLlamas Amarillas en Castelporziano.Particularmente emocionante será elentrenamiento con Oney Tapia, elcampeón mundial invidente de lan-zamiento de discos. De origen cuba-no pero ya bergamasco, Tapia —queha «probado» el camino para ciegosen los Museos Vaticanos— tambiénpone a disposición su máscara histó-rica con la palabra «paz». En el gru-po está, para representar el estilo deAthletica Vaticana (también una de-dicación especial en la camiseta),don Vincenzo Puccio, párroco enBarcellona Pozzo di Gotto en la zo-na de Messina. Con una confesión:entrenar y correr con él significatambién rezar juntos. Finalmente,para representar el mundo paralím-pico, está Sara Morganti, la tres ve-ces ganadora de los Juegos EcuestresMundiales: de su parte la camisetade los Juegos Paralímpicos de Lon-d re s .

La subasta solidaria finalizará el 8de agosto: el Comité Olímpico In-ternacional, Carolina Kostner y losjugadores de Atalanta están a puntode salir al campo, entre otros. Parainformación: www. athleticavatica-n a . o rg

En el deporte se ven muchos “m i l a g ro s ” de mujeres yhombres que se vuelven a levantar después de lascaídas, y esta es una actitud decisiva para la vida decada uno de nosotros

Atrio de los Gentiles y Fidal Lazio,siguiendo las indicaciones del PapaFrancisco: recoger fondos para elpersonal de los dos hospitales lom-bardos pero también testimoniar elrostro solidario de un deporte quesea realmente inclusivo, para todos.

Hasta el 24 de julio, con BlankaVlašić —después tocará a un nuevogrupo de atletas— hay otras cincomujeres con preciosas historias quecontar. En primer lugar está la ke-niata Mary Keitany, cuatro veces pri-mera en la maratón de Nueva York(regala la camiseta del equipo nacio-nal africano, firmadA, y precisamen-te el prestigioso pectoral de NuevaYork) y tres veces primera en la deLondres. Hace un año vino a Romapara participar en la misa celebradapor el Papa Francisco en la capillade la Casa Santa Marta. Y en su

No faltan dos atletas italianas dealtísimo nivel internacional. La mar-chadora pullesa Antonella Palmisa-no, cuarta en las olimpiadas de Ríoy tercera en los Mundiales, está muyunida a la Athletica Vaticana tam-bién por haber servido para veces,en las comidas de navidad, a las fa-milias pobres asistidas por el Dis-pensario pediátrico Santa Marta.Palmisano invita a una cena en sucasa («cocinamos mi marido y yo»),la posibilidad de asistir a un entre-namiento de marcha y su originalpasador de pelo en forma de florque usa en las competiciones (se loprepara la madre costurera). Y en lapista está también la jovencísima flo-rentina Larissa Iapichino (18 años el18 de julio) —hija de arte, la madrees la inolvidable Fiona May— cam-peona europea sub-20 de salto de

Page 5: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

número 30, viernes 24 de julio de 2020 L’OSSERVATORE ROMANO página 5

Visita sorpresa de Francisco a los pequeños huéspedes del «Verano de los jóvenes en el Vaticano»

Uno solo no se divierte

La conexión entre lafelicidad y lasbienaventuranzas naciócuando Jesús deNazaret usó ocho frasesque comenzaron con«Bienaventurado». Elmensaje era simple:estad serenos, notengáis miedo, porqueestoy a vuestro ladoincluso cuando todoparece perdido. Sedfelices porque estoy avuestro lado

NICOLA GORI

«La gente que solo sabe divertirse sola es egoís-ta, para divertirse hay que estar juntos, con ami-gos». Con estas palabras el Papa Francisco se di-rigió a un centenar de chicos y chicas que asistena la iniciativa «Verano de los jóvenes en el Vati-cano». El diálogo tuvo lugar el lunes 20 de juliopor la mañana, cuando el Papa llegó por sorpre-sa al Aula Pablo VI, donde los pequeños estabandesayunando antes de dedicarse a los juegos, lasaventuras y el deporte. Informó de ello el direc-tor de la Oficina de Prensa de la Santa Sede,Matteo Bruni, quien explicó que «después depasar por las mesas, el Papa visitó los espaciospara los juegos instalados en la sala y se detuvocon los participantes», regresando a la Casa San-ta Marta a las 10 de la mañana, no sin antes ha-ber agradecido «individualmente» a los operado-res por su trabajo.

Un animador presente en el encuentro, SergioGarozzo, subrayó que vio a Francesco «muy fe-liz». «Felicitó a los niños —dijo— por el excelen-te trabajo, por los resultados que estamos logran-do, por la felicidad de los niños y porque escu-chó que todos hablan bien de esta experiencia,tanto que está pensando en volver a proponerlacon el tiempo. Les animó a hacerlo cada vez me-jor». Los niños dieron la bienvenida al Papa conmúsica, bailes y el canto de los versos elegidospara el «Verano de los jóvenes». Garozzo dijoque una niña tenía curiosidad por saber qué ha-cía el Papa durante el día y él «respondió que esun sacerdote y hace lo que todos los sacerdoteshacen». Otra habló de su abuelo fallecido y pre-guntó al Papa si el Paraíso era como se lo habíandescrito: un lugar hermoso, feliz y pacífico. ElObispo de Roma la tranquilizó bendiciendo uncollar que le recordaba a su amado abuelo.

No pudo haber un mejor epílogo para estecentro de verano que está llegando a su fin. En-tre el buceo en la piscina, los torneos de fútbolsala, tenis, baloncesto y tenis de mesa, pero tam-bién las visitas guiadas a los Jardines Vaticanos,los niños y los jóvenes también han podidoaprender a formarse en el espíritu de Don Bosco.La iniciativa, de hecho, estuvo animada por losSalesianos junto con la asociación Tutto in unafesta. Promovida por la Gobernación del Estadode la Ciudad del Vaticano, involucró a unoscientos de niños y niñas que han sido acogidosdentro de los muros leoninos cada semana desdeel 6 de julio para divertirse, aprender y jugar contotal seguridad, a pesar de la epidemia de covid19. Habla de ello en esta entrevista con L'Osser-vatore Romano, reviviendo los momentos deasombro y gratitud por la visita del Papa, DonFranco Fontana, coordinador del evento, supe-rior de la comunidad Salesiana en el Vaticano ycapellán de la Dirección de Servicios de Seguri-dad y Protección Civil y Museos Vaticanos.

¿Cómo vivió la inesperada visita del Papa Francis-co?

Fue una gran sorpresa para nosotros. No esta-ba en el Aula Pablo VI, pero me avisaron de lallegada del Papa y volví. Había dejado la CasaSanta Marta solo y fue al Aula a saludar a loschicos que terminaban de desayunar. Pasó entrelas mesas, primero charló con los pequeños, lue-go con los de la escuela primaria y media. Se in-teresó por lo que hacen, cómo pasan el día, lespreguntó si estaban contentos.

Podemos imaginar el asombro de los chicos...

Se asombraron lo suficiente como para perma-necer completamente en silencio. Luego, despuésde la vuelta, bajamos al Aula Pablo VI, hicimoslo que hacemos todas las mañanas, no alteramosel horario. El propio Papa lo quiso así. Tres per-sonas le hicieron preguntas que habíamos formu-lado la semana pasada, porque era nuestra inten-ción escribirle. Les respondió de forma muy sim-ple. Finalmente, nos dio un saludo general y lue-go agradeció calurosamente a los 22 animadores.

También nos tomamos una foto juntos. A pie, elPontífice regresó a Santa Marta. A los niños lesllamó la atención la familiaridad, la sencillez y lapaternidad del Papa que quería vivir este mo-mento.

¿Cuánta gente ha asistido al “Verano de los jóvenesen el Vaticano”?

Algún centenar de niños y niñas asistieron a lainiciativa, en la que participaron unas 140 fami-lias. Cada semana había 125 niños. Algunos deellos han hecho sólo una semana, más dos sema-nas, un número hará tres. Algunos participarándurante todo el mes de julio participando en lascuatro semanas de programación. En cuanto alos orígenes, puedo decir que provienen de losdistintos lugares donde viven sus padres que tra-bajan en el Vaticano.

¿Cuáles eran los objetivos de la iniciativa?

El objetivo principal era hacer que los niñosdescubrieran la belleza de estar juntos, de jugar,pero de «jugar en grupo incluso a una distanciade un metro», de compartir pasiones, emocionesy sonrisas. El mensaje que nos hubiera gustadotransmitir es que la Iglesia, desde siempre, no secierra y no abandona a los niños a sí mismos, es-pecialmente en esta fase histórica. La Iglesia, conla pasión educativa que la caracteriza, no quierefaltar a su propio y típico compromiso con elcrecimiento y la formación de las nuevas genera-ciones, especialmente en este momento en que elcuidado de los niños y los adolescentes no puedeseguir estando a cargo solo de las familias.

¿Qué parte de la enseñanza de san Juan Bosco seencuentra en el esquema educativo?

Don Bosco era un soñador y por lo tanto so-mos hijos de un soñador. Nos hemos dado algu-nas líneas, fruto del esfuerzo de un equipo de

soñadores y apasionados de la educación, quehan tenido en cuenta el sistema preventivo denuestro fundador. Si el Papa nos anima a soñaren grande, no nos echamos atrás. Así que aun-que era época de vacaciones, sin embargo, losmuchachos han tenido una oferta de actividadesatractivas e intensas. Gran ritmo y frescura, paraseguir el paso de las almas de los pequeños,siempre curiosos y llenos de energía. Así que el«patio» de Don Bosco se convierte en el juego,pero al jugar, se prueban nuevas reglas y nuevasdinámicas. Sin perder nunca la idea de jugar y eldeseo de jugar. Por último, la atención a las es-tructuras y ambientes. El ambiente también edu-ca a los niños, por lo que se ha tenido cuidadoen hacer que cada área utilizada sea acogedora ycolorida.

¿Qué tema inspiró esta experiencia de verano?

El tema elegido para este año ha sido «Felici-dad y Bienaventuranzas». Se identificó un cami-no pedagógico educativo, basado en una historiaconvincente ambientada en el mundo del depor-te para hablar de la importancia de la verdaderafelicidad como objetivo y estilo de vida para to-dos y a todas las edades. La felicidad no se com-pra en el supermercado o en Internet, sino quese conquista y cuando se alcanza da alegría. Yaquí entra en juego el deporte que significa com-promiso, esfuerzo, perseverancia, gestión de lasderrotas y compartir todos estos aspectos con losdemás miembros del equipo. El deporte requiereel compromiso del individuo y el apoyo de todoel equipo para lograr una victoria y cuando llegala derrota se afronta todos juntos y no en solita-rio. Cada día para vivir «Una vida de cam-peón». La conexión entre la felicidad y las bie-naventuranzas nació cuando Jesús de Nazaretusó ocho frases que comenzaron con «Bienaven-turado». El mensaje era simple: estad serenos, notengáis miedo, porque estoy a vuestro lado inclu-so cuando todo parece perdido. Sed felices por-que estoy a vuestro lado.

¿Cuánto ha influido el brote de covid 19 en el desa-r ro l l o ?

Ciertamente requería una atención especial.Hemos trabajado, y estamos trabajando, para im-plementar todas las directrices del estado actual.El objetivo es poner en marcha acciones para ga-rantizar la seguridad de los niños y del personal.Dispositivos de seguridad, espaciamiento, medi-ción de la temperatura, máscaras, gel desinfec-tante, higienización de ambientes y equipos, jun-to con la formación de animadores, y la sensibili-zación de los niños. A pesar de todo y conscien-tes de los obstáculos que inevitablemente ten-dríamos que afrontar, estas atenciones han per-mitido hasta ahora, y permitirán, gestionar lasdistintas fases del verano de los jóvenes con se-guridad.

Page 6: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

número 30, viernes 24 de julio de 2020 L’OSSERVATORE ROMANO páginas 6/7

Entrevista al cardenal prefecto Beniamino Stella

Necesitamos parroquias capaces de salir y buscar a los alejadosFABIO COLAGRANDE

Renovar las estructuras parroquiales redescubriendo la vocación mi-sionera de cada bautizado y al mismo tiempo superando la idea deuna pastoral parroquial limitada al territorio. Estos son los aspectoscentrales de la Instrucción «La conversión pastoral de la comunidadparroquial al servicio de la misión evangelizadora de la Iglesia», re-dactada por la Congregación para el Clero y publicada el lunes 20de julio. En el documento se subraya que hoy en día existe un ries-go real de que las parroquias sigan siendo estructuras organizativasburocráticas más cuidadosas de preservarse a sí mismas que deevangelizar, y se las invita a estar cada vez más proyectadas hacialas nuevas formas de pobreza. La Instrucción quiere en particularponerse al servicio de algunas elecciones pastorales ya iniciadas yprobadas, para contribuir a evaluarlas y orientarlas en un contextomás universal, como ha confirmado el Cardenal Beniamino Stella,Prefecto de la Congregación para el Clero.

Por un lado, especialmente en el llamado mundo «occidental»,hay escasez de sacerdotes, lo cual es ahora un aspecto objetivo. Perotambién está el hecho de que los confines de las parroquias hancambiado: han «desaparecido» de alguna manera. Hoy en día hayotras necesidades: hay una movilidad más acentuada. Todo esto nosha hecho comprender que tenemos que mirar más allá de la idea dela parroquia tradicional. Hoy en día la gente se desplaza, van a laiglesia del lugar donde están. Por lo tanto, muchos proyectos de re-forma de las comunidades parroquiales y de reestructuración dioce-sana ya están en marcha. Es necesario, sin embargo, que la normaeclesiástica que debe regular estas reestructuraciones tenga en cuen-ta la esfera canónica de la Iglesia, que tiene ámbitos universales. Esnecesario que estas reformas no sean dictadas sólo por el gusto —yodiría casi «por capricho»— de personas competentes y expertas. Esnecesario que obedezcan a las nuevas exigencias, pero también quetengan en cuenta una perspectiva más amplia, que miren a la Igle-sia en su universalidad.

¿Por qué la Iglesia siente esta necesidad de renovar las estructuras pa-rroquiales en clave misionera?

No estamos contratados por una empresa, sino que pertenecemosa una comunidad, a una familia. Esta fe nuestra, que significa adhe-sión, que significa encuentro, que significa adoración del rostro deDios, debe llevarnos necesariamente a mirar más allá de nuestrasnecesidades personales y familiares, a sentir que nuestro campo deacción es la humanidad, pero una humanidad más amplia que nues-tro jardín de casa, que nuestras fronteras. Ser misioneros significaolvidar el pueblo, olvidar la familia, olvidar sobre todo las propiascomodidades y, partiendo de la belleza de la fe y la alegría delEvangelio, sentir que pertenecemos al Señor y, por tanto, compartirnuestro tesoro con los que no lo tienen, con los que han perdido elsentido de su valor, con los que necesitan volver al encuentro delSeñor, sentir su presencia en sus vidas.

La Instrucción también pide que se supere la idea de una pastoral pa-rroquial limitada, en el interior de su territorio, y espera una «pastoralde conjunto», caracterizada por un «dinamismo en salida». ¿Qué signi-fica esto, en términos concretos?

Significa que, si sentimos que nuestra fe es una fe a ser anuncia-da, a ser propuesta, no sólo están las rectorías, los muros de lasiglesias, sino que están las personas que necesitan esta fe. La parro-quia se ha sentido hasta ahora casi como un palacio, un castillo quese debe custodiar, proteger... Me parece que hay que quitar las lla-ves, abrir las puertas, ventilar el ambiente y salir: he aquí que estedinamismo en salida del que tantas veces habla el Papa significa mi-rar a lo lejos, ver quién necesita la fe: todo el mundo juvenil, todoel mundo de los que necesitan a Dios, pero no saben qué caminotomar. La parroquia debería ser una estructura en búsqueda. Sacer-dotes, diáconos, consagrados, deben saber salir, estar fuera.

El Papa habla a menudo de «estar con»: esto significa saber de-dicar tiempo, descubrir las riquezas, a veces, de las personas, de lasfamilias, simplemente viviendo juntos. Es un gran sacrificio porquetodos amamos las costumbres, nuestro hábitat que nos hace pacífi-cos, serenos, cómodos. Pero esta no es la dinámica de la fe. Tam-bién es necesaria la cooperación entre las parroquias, la coordina-ción de los horarios.

Todo esto nos lleva a sentir la parroquia como una «vida de lascomunidades», una «vida de la gran familia».

Por eso el sacerdote debe ser el guía de esta procesión en salida:debe ayudar a sus colaboradores, ayudar a las familias a «estarafuera», a buscar a los que están lejos y esperar sólo un asentimien-to, una palabra, una invitación a implicarse en este camino de feque da también alegría, serenidad y a su vez proyección misionera.

Instrucción de la Congregación para el CleroLa conversión pastoral de la comunidad parroquial al servicio de

la misión evangelizadora de la IglesiaANDREA RI PA *

«El nuevo Israel, que caminando en el tiempo presente, bus-ca la ciudad futura y perenne (cfr. Hb 13,14), también es de-signado como Iglesia de Cristo (cfr. Mt 16,18)» (Lumen gen-tium, n. 9). Ella es el Pueblo que Dios ha constituido, demodo que «le confesara en verdad y le sirviera santamente»(ibíd.). Este pueblo vive en la historia y participa en la únicamisión salvífica recibida de Cristo. En efecto, es el Pueblode Dios quien evangeliza a través de cada uno de sus miem-bros, en comunión y de modos diversos, personal o comuni-tariamente; cada uno según su propia vocación, las posibili-dades reales que tiene en cada momento y de acuerdo conlas responsabilidades que le corresponden o ha asumido.

La parroquia es una célula viva del Pueblo de Dios, cuyosprimeros rastros se perciben en la constitución de las Iglesiasdomésticas o «casas», en la época apostólica, y que, a lo lar-go de la historia, se irá configurando hasta adquirir su fiso-nomía actual, como una comunidad de creyentes, con diver-sos carismas, bajo el cuidado de un pastor. De ahí, que elCódigo de Derecho Canónico (can. 515, § 1) defina la parro-quia ante todo como «una determinada comunidad de fielesconstituida de modo estable en la Iglesia particular», y, asícomo aquellas «casas» del primer siglo eran confiadas porlos apóstoles a uno de los hermanos, su «cura pastoral, bajola autoridad del Obispo diocesano, se encomienda a un pá-rroco, como su pastor propio».

La vida de las comunidades parroquiales, con sus gozos yesperanzas, tristezas y angustias, resuena en Roma, junto alSucesor de Pedro, quien preside en la caridad todas las Igle-sias. De hecho, en la Congregación para el Clero encuentraneco y apoyo las iniciativas de tantos Obispos que, en comu-nión con sus hermanos en el episcopado e implicando alPueblo de Dios, están reformando estructuras eclesiales, tra-tando de reducir el peso de la burocracia y aumentar la efi-cacia evangelizadora; también se conoce el compromiso desacerdotes, personas consagradas, fieles laicos, quienes, res-petando y potenciando sus respectivos carismas, sueñan yprograman juntos, trabajan y celebran juntos, caminan jun-tos en espíritu de sinodalidad, en sus parroquias y comuni-dades; profundizando no sólo en la letra, sino también en elespíritu de los documentos del Concilio Vaticano II y delMagisterio posterior.

Sin embargo, en este Dicasterio se perciben también lasdificultades de muchos Obispos para poder dar un pastor acada parroquia; la tristeza de las comunidades cristianas, cu-yas Eucaristías se distancian cada vez más en el tiempo; elcansancio de bastantes sacerdotes que no tienen más remedioque «acaparar» en su persona excesivas responsabilidadesparroquiales y diocesanas; el lamento de laicos que no sesienten tratados como miembros corresponsables del Pueblode Dios; el dolor de personas consagradas que son valoradasúnicamente en la medida en que trabajan directamente enestructuras diocesanas y parroquiales; la queja de diáconospermanentes cuyos párrocos no acaban de promover los mi-nisterios que el Espíritu suscita en el Pueblo de Dios; la faltade implicación de tantos cristianos que exigen sacerdotes, sinempeñarse en la promoción de las vocaciones...

Para contribuir a responder a los desafíos que plantea estavasta realidad, tan diversa y tan extendida, se ha elaboradola presente Instrucción, que pretende brindar una síntesisadecuada al contexto eclesial actual, tanto de la Instruccióninterdicasterial «Ecclesia de mysterio, acerca de algunas cues-tiones sobre la colaboración de los fieles laicos en el ministe-rio de los sacerdotes», promulgada el 15 de agosto de 1997,como de la Instrucción «El presbítero, pastor y guía de lacomunidad», publicada por la Congregación para el Clero el4 de agosto de 2002. Así como en estas instrucciones, la pre-sente no contiene «novedades legislativas» y está destinadasolo «a aclarar las disposiciones de las leyes y desarrollar ydeterminar los procedimientos para llevarlas a cabo» (can. 34

CIC), teniendo en cuenta la experiencia de la Congregaciónpara el Clero en su servicio a las Iglesias particulares.

Otro de los objetivos principales de la Instrucción es re-cordar que «en la Iglesia hay lugar para todos y cada unopuede encontrar su lugar» en la familia de Dios, conforme ala particular vocación recibida, tratando de que todos pue-dan desplegar los propios carismas en la edificación común yen la misión. Así se podrá librar a la Iglesia de posibles deri-vas, como la «clericalización» de los laicos, la «seculariza-ción» del clero, la conversión de las parroquias en «empresasprestadoras de servicios espirituales» o meras «agencias deservicio social», el individualismo en la vivencia de la fe ydel apostolado, el desprecio del instinto de la fe —el sensusfidei— del Pueblo de Dios en el discernimiento de las situa-ciones y la toma de decisiones, o el olvido de la caridad(diakonia) como dimensión constitutiva de la comunidadcristiana, junto con el anuncio de la Palabra de Dios (keryg-ma-martyria) y celebración de los Sacramentos (l e i t u rg i a ).

También se ha dado una especial atención a las agrupacio-nes de parroquias —llamadas «unidades pastorales»—, «vica-rías foráneas» y «zonas pastorales» (cfr. Apostolorum successo-re s , art. 215b y 219). Otro aspecto al que se ha prestado unaconsideración particular es la participación de diáconos per-manentes, personas consagradas y laicos en la cura pastoralde la comunidad parroquial, en especial cuando, por escasezde presbíteros, ella no dispone de un sacerdote como pastorpropio. También se ha subrayado la importancia del Consejode Asuntos Económicos y el Consejo pastoral, como instan-cias de sinodalidad y corresponsabilidad en la conducciónpastoral, en especial en el discernimiento de lo que el Señorestá pidiendo a la misma comunidad, en su realidad concre-ta.

En estos y otros aspectos de la Instrucción subyace la mi-sión, “la Iglesia en salida”, como criterio guía para la renova-ción de la comunidad parroquial. Este principio reclama unaconversión personal y pastoral, que requiere que todos susmiembros asuman su «ser parte del pueblo y participar deuna identidad común hecha de vínculos sociales y cultura-les», como recordaba el Papa Francisco en una entrevista(concedida al P. A. Spadaro, S.J., en 2016 y publicada al ini-cio del volumen En tus ojos está mi Palabra).

En síntesis, con esta Instrucción se quiere brindar un ins-trumento para motivar y poner en marcha procesos de refle-xión y renovación pastoral de las parroquias, donde todavíano se han comenzado, y, por otra parte, suscitar una profun-dización, evaluación y eventual corrección de los ya inicia-dos.

Teniendo presente la diversidad de las comunidades parro-quiales, en las diversas partes del mundo, la presente Ins-trucción, al mismo tiempo teológico-pastoral y canónica, nopuede ni debe ofrecer indicaciones demasiado concretas, sinocriterios generales y normas que deben ser actualizadas, en ladiversidad que caracteriza el Pentecostés eclesial.

La Instrucción, en definitiva, busca promover la «conver-sión pastoral» de la comunidad parroquial en el dinamismode la realidad eclesial actual que, tal como lo formulara elPapa Francisco, comprende, por un lado, que «la parroquiano es una estructura caduca; precisamente porque tiene unagran plasticidad, puede tomar formas muy diversas que re-quieren la docilidad y la creatividad misionera del Pastor yde la comunidad... si es capaz de reformarse y adaptarsecontinuamente, seguirá siendo “la misma Iglesia que vive en-tre las casas de sus hijos y de sus hijas”...» (Evangelii gau-dium, n. 28); y, por otro, constata que «tenemos que recono-cer que el llamado a la revisión y renovación de las parro-quias todavía no ha dado suficientes frutos en orden a queestén todavía más cerca de la gente, que sean ámbitos de vi-va comunión y participación, y se orienten completamente ala misión» (ibíd.).

*Subsecretario de la Congregación para el clero

Page 7: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

página 8 L’OSSERVATORE ROMANO viernes 24 de julio de 2020, número 30

Vídeomensaje de la subsecretaria del Dicasterio para los laicos, la familia y la vida dirigido a los obispos de Colombia

Un recurso valioso en tiempo de pandemia

«A compañar» a los matri-monios es la palabraclave. Con dos finalida-des pastorales esencia-

les: «Ayudar a los esposos a compren-der, a descubrir el valor profundo delsacramento nupcial, que es signo de lapresencia de Cristo en su vida», y«apoyarles y acompañarles en la educa-ción de los hijos». Es esta una de lasindicaciones de fondo sugerida por Ga-briella Gambino, subsecretaria del Di-casterio para los laicos, la familia y lavida, a los prelados de la Conferenciaepiscopal colombiana, reunidos del 6 al8 de julio en su 110º asamblea plenariasobre el tema «Al servicio del Evange-lio, por la esperanza de Colombia». Enun vídeomensaje enviado el lunes 6 alos obispos reunidos de forma virtual,Gambino —a partir de su experienciapersonal «como esposa y madre»— in-dica prioridades y objetivos de la pas-toral familiar, recordando sobre todoque «en este tiempo de pandemia, lasfamilias en todo el mundo han demos-trado ser el recurso más importante dela sociedad».

De hecho, «con su resiliencia se hanconvertido en una fuerza motriz y difu-sora del sentido de responsabilidad, so-lidaridad, del compartir y de la ayudarecíproca en la dificultad». Estas «sony siguen siendo un gran amortiguadoreconómico, social y educativo». Y poreso no se las puede dejar solas. Hoy,por tanto, «la pastoral familiar está an-te un gran desafío»: el de «mostrar alas nuevas generaciones que la familiano es solo esfuerzo y dificultad, sinoalegría, camino de vocación y felici-dad».

A partir de estas premisas, Gambinorecuerda sobre todo que «como sacra-mento», los cónyuges «son Iglesia do-méstica». ¿Qué significa concretamenteesto en la vida cotidiana? La respuestaes clara y llama a la responsabilidad aeducadores y guías espirituales: es ne-cesario ayudarles «a descubrir el poderde la presencia de Cristo en sus desa-fíos de cada día». Es precisamente loque el Papa Francisco pide que se hagaen Amoris laetitia: una exhortaciónapostólica «llena de respuestas» que lostrabajadores pastorales, «junto a los es-posos», pueden «encontrar para las di-ficultades de su vida cotidiana».

Es necesario incluirles «como prota-gonistas en la pastoral familiar —exhor-ta Gambino— porque a través del sacra-mento y su ser familia, son esencialespara edificar la Iglesia, son testimoniospara tantas familias». Junto a los espo-sos, dice dirigiéndose a los obispos, po-déis «contribuir a edificar la Iglesia enla corresponsabilidad pastoral».

Una de las preocupaciones más gran-des de las familias hoy es la educación.«Tenemos que dedicar nuestras energías—insiste Gambino— a comprender có-mo podemos acompañar a los padres»frente a los desafíos de una sociedad«dominada por una tecnología difusaque aleja a los jóvenes de las auténticasrelaciones humanas, de un modo de vi-vir la sexualidad que no les ayuda acomprender el valor del cuerpo y la en-trega de sí mismos en el matrimonio yla familia».

En resumen, es necesario «revisar lametodología y los contenidos de la pre-paración de los jóvenes al matrimonio,con una preparación que no solo sea

inmediata y cercana a la celebración delmatrimonio, sino “re m o t a ”». Si el obje-tivo de toda pastoral familiar es ayudara los padres a «enseñar a nuestros hijosa que amen el matrimonio y a proyec-tar su vida como una vocación» —p or-que el matrimonio «es una llamada “dedos en dos”, como los discípulos, aamar y servir a Cristo en la familia y enla comunidad»— entonces, según Gam-bino, «hay que hablarles de la bellezade la vocación nupcial ya desde la in-fancia hasta el catecismo».

En este sentido se vuelve útil «unapastoral transversal, que una la pastoralde la infancia y la catequesis de prepa-ración a los sacramentos en la pastoraljuvenil vocacional y en la pastoral fami-liar».

Por otro lado, desde 2017 el PapaFrancisco habla de la necesidad de «es-tablecer itinerarios catecumenales parala vida matrimonial».

Un compromiso urgente si se consi-dera que «es la vocación de la mayorparte de hombres y mujeres en el mun-do», no obstante «cada vez hay menosjóvenes que se casan, y casi la mitad delos matrimonios se rompen en los pri-meros diez años de vida juntos». Nohay que dejar, entonces, que «la com-prensión profunda de este camino desantidad para los fieles laicos» sea «ca-sual».

Decidir casarse y tener hijos, de he-cho, «no es como elegir un trabajo ocomprarse una casa». Unirse en matri-monio con otra persona, reitera Gambi-no, «es una vocación, es la respuesta auna llamada de Dios», y como tal sepresenta a los propios hijos.

También por esto, «el catecumenadoal matrimonio, como itinerario —afir-ma— se debe continuar, por lo menos,en los primeros diez años de la vidamatrimonial».

La pastoral familiar, por otro lado,debe hacerse cargo precisamente «delos años más arduos para una pareja,cuando nacen los hijos, cambian los rit-mos y los roles, nos convertimos en pa-dres y educadores sin que nadie nos di-ga cómo serlo».

En la conclusión de su intervenciónGambino hace referencia al tema de latercera edad, invitando a «dar espacio aun compromiso pastoral con las perso-nas mayores y las personas más frágilesdentro de las familias».

En una sociedad en la que «la pre-sencia de las personas mayores estadís-ticamente es tan numerosa, tenemosque aprender —encomienda— a recono-cer el valor de esta presencia». Estas«son la gran parte del Pueblo deDios»; por tanto, «tenemos que ayu-darles a redescubrir la riqueza de su vo-cación bautismal y a ser actores de lanueva evangelización, valorando susdones y carismas, como también su ex-traordinaria capacidad de rezar y trans-mitir la fe a los jóvenes».

Al mismo tiempo, añade, «tenemosque cuidar su espiritualidad; no les de-jemos solos, ni materialmente ni espiri-tualmente».

En conclusión, Gambino expresa alos obispos colombianos la esperanzade que, gracias a su munus sanctificandi,«puedan generar una pastoral familiarcapaz de mostrar que la familia de ver-dad es una vocación y un camino desantidad».

Page 8: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

número 30, viernes 24 de julio de 2020 L’OSSERVATORE ROMANO página 9

San Benito y el hombre europeo

En la memoria litúrgica del padredel monacato occidental

DO N AT O OGLIARI*

Con motivo de la consagración de la reconstruida iglesia catedralde Montecassino, el 24 de octubre de 1964, Pablo VI proclamó aSan Benito el principal patrón de Europa. Con ese gesto el Pon-tífice afirmó el papel decisivo que el monacato benedictino había

desempeñado en la Edad Media, a través de la densa red de sus monaste-rios, en la configuración del continente europeo mediante una unidad defe y cultura sin parangón. Incluso un agnóstico como el sociólogo LéoMoulin admitió que San Benito y sus monjes podían ser llamados cierta-mente «los “Padres de Europa” en el pleno sentido del término, tanto des-de el punto de vista histórico como sociológico».

Sin embargo, hay que recordar inmediatamente que todo lo que losmonjes benedictinos fueron capaces de realizar debe remontarse a ese prin-cipio unificador de su vocación, de decir, el quaerere Deum, la búsqueda deDios (cf. Regla de San Benito [=rb] 58, 7). «Ellos —como dijo BenedictoXVI— querían hacer lo esencial: esforzarse por encontrar lo que vale y siem-pre permanece, encontrar la Vida misma. Estaban en busca de Dios. De lascosas secundarias querían pasar a las cosas esenciales, a lo que, por sí solo,es verdaderamente importante y fiable».

Los monjes benedictinos, por lo tanto, no tenían una vocación innata decolonizar, cultivar o crear granjas que fueran verdaderas empresas de van-guardia donde se realizaban atrevidos experimentos de agronomía y seeducaban a las masas rurales de manera ilustrada. Tampoco tenían comoobjetivo principal drenar los pantanos, construir molinos y viveros, incre-mentar el arte de la apicultura, cuidar los bosques o especializarse en laproducción de vino, aceite y queso. Así como su objetivo principal no erarecuperar y transmitir la cultura antigua o crear una nueva.

Y sin embargo, si en respuesta a las exigencias de los tiempos, los mon-jes, así como los grandes evangelizadores, se revelaron también como gran-des «educadores económicos» (H. Pyrénées) y propagadores culturales, és-te fue el resultado de una existencia vivida en la búsqueda diuturna deDios, realizada en el seguimiento de Jesús y a la luz de su Evangelio, que,por supuesto, fue también una búsqueda de la verdad sobre el hombre ysu auténtica realización. Fue desde aquí, de hecho, desde donde el huma-nismo benedictino —«una parte importante del humanismo cristiano»(Ludmiła Grygiel)— tomó forma, lo que marcó el ethos europeo de una ma-nera duradera y profunda.

Sin embargo, hoy en día, en el clima sociocultural en el que se debate laEuropa secularizada y poshumana, donde las metanarrativas sobre el Dios

mismo tiempo su universalidad» (Juan Pablo II). Un eco de esto se puedeencontrar en la exhortación apostólica Gaudete et exsultate del Papa Fran-cisco, donde exhorta a los cristianos a vivir la “santidad cotidiana”. ParaSan Benito, entonces, no hay nada que no contribuya de alguna manera asu propio camino de santidad, hasta el punto de exhortar a sus monjes amanejar con cuidado las herramientas del monasterio, tales como una aza-da, un cucharón o un lápiz. También ellos, de hecho, son instrumentos através de los cuales se busca a Dios, y por esta razón deben ser manejadoscomo si fueran vasos sagrados del altar (cf. Rb 31, 10).

Finalmente, para percibir la presencia de Dios en nuestra vida diaria,san Benito también da gran importancia a la “estabilidad”. El paradigmadel cambio de época que estamos atravesando es el de la complejidad y lavelocidad, y esto es a menudo una causa de ansiedad, desorientación y de-sestabilización. La estabilidad a la que alude San Benito (cf. Rb 58, 17),además de ser de naturaleza físico-espacial, es también y sobre todo inte-rior. Se trata de un corazón firmemente fundado en la roca que es Cristo, ala que no hay que anteponer absolutamente nada (cf. Rb 72, 11), y en suEvangelio, guía seguro para el camino de aquí abajo (cf. Rb, Prol. 21).

La Regla de San Benito sigue siendo, pues, una fuente de inspiracióntanto para el creyente como para todo hombre de buena voluntad quequiera contribuir a la construcción de una Europa con rostro humano,«una Europa capaz de dar a luz un nuevo humanismo», para lo cual senecesita «memoria, coraje y utopía humana» (Papa Francisco). ¡Benedictusbenedicat!

*Abad ordinario de Montecassino

“ San Benito nos insta a reconocer encada hombre y mujer un hermano y

una hermana para acompañar,cuidar, educar, avanzar, evangelizar,

amar y conducir felizmente al puertode la vida eterna

la caridad (cf. Rb, Prol. 17; 4, 25; 65, 11). No es casualidad que el BreveApostólico con el que Pablo VI declaró a San Benito el principal Patrón deEuropa comience con las palabras «Pacis nuntius», «mensajero de la paz»,y «Effector unitatis», «constructor de la unidad». Sólo siendo promotoresde la paz y la unidad, de hecho, será posible vivir en armonía con unomismo, con los demás y con la creación, y contribuir eficazmente a la cons-trucción de un mundo más justo y humano. Todo ello bajo el estandartede una «cultura del diálogo» que «implica un auténtico aprendizaje, unaascesis que nos ayuda a reconocer al otro como un interlocutor válido»(Papa Francisco).

Otro valor de la RB es el respeto por cada ser humano. Fiel al Evange-lio, San Benito nos exhorta a «honrar a todos los hombres» (Rb 4, 8),porque Cristo está presente en cada ser humano. Es una invitación a unanueva mirada al prójimo, una mirada que, inspirándose en el mandamientocristiano del amor, se centra en la unicidad y la dignidad de cada persona;una mirada abierta a la dimensión plural, sobre todo a nivel cultural y reli-gioso; una mirada que favorece la inclusión, el compartir y la solidaridad,sobre todo hacia los enfermos, los peregrinos, los forasteros (que nunca fal-tan en el monasterio: cf. Rb 36, 4), es decir, hacia los humildes, los pobres,los últimos. En resumen, San Benito nos insta a reconocer en cada hombrey mujer un hermano y una hermana para acompañar, cuidar, educar, avan-zar, evangelizar, amar y conducir felizmente al puerto de la vida eterna.

Otro aspecto que merece atención es lo valioso de la vida cotidiana. Es-to último es para san Benito el lugar en el que se reconocen los signos dela cercanía de Dios en la propia vida (cf. Rb 19, 1); el lugar en el que se vi-ve la santidad evangélica de forma ordinaria, de modo que «que lo heroicose convierta en normal, en cotidiano, y que lo normal, lo cotidiano se con-vierta en heroico. Debemos admirar la simplicidad de este programa, y al

cristiano están en franco declive,se plantea la cuestión de si elmensaje de San Benito puede se-guir siendo una fuente de inspira-ción para los ciudadanos euro-peos. Creemos que puede. Aquíhay algunos ejemplos de cómo es-te mensaje todavía tiene algo quedecir a las mentes y corazones denuestros contemporáneos.

En primer lugar, la exhortaciónde San Benito a ser artesanos dela paz y de la unidad, buscando yguardando tanto la verdad como

Page 9: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

página 10 L’OSSERVATORE ROMANO viernes 24 de julio de 2020, número 30

Un héroe para las Pampas

La aventura de la feFrancesco Bibolini, sacerdote de la paz entre los pueblos indígenas

“ Francesco Bibolini se dedicó con esmero al servicio religioso ypuso mucho entusiasmo en su acercamiento con los indios

guerreros estacionados en las fronteras del estado sudamericano

fundió con un médico y fue secuestradopor un policía para realizar una amputa-ción.

La experiencia devastó al joven sacer-dote que huyó a la vecina Argentina a laprimera oportunidad. La fuga de DonFrancesco bastaría ya para llenar un librocon un trasfondo aventurero: el sacerdotellegó a Buenos Aires solo en 1854, despuésde atravesar pantanos y bosques infesta-dos de animales feroces, pasando por lasprovincias de Corrientes, Entre Ríos ySanta Fe. Cuando llegó a la capital argen-tina, el sacerdote ligur se puso inmediata-mente a trabajar, pidiendo ser trasladadoa las fronteras del estado, a los intermina-bles territorios de la Pampa. Fue satisfe-cho y asignado al pueblo de Mulitas ypoco después fue nombrado párroco delpueblo de 25 de Mayo. En este pequeñopuesto de avanzada de la civilización ca-tólica el misionero de Lerici, habiendo ob-tenido la autorización para iniciar una co-lecta para construir la primera capilla delpueblo, comenzó su construcción y labendijo con el nombre de Nuestra Señoradel Rosario.

Francesco Bibolini se dedicó con esme-ro al servicio religioso y puso mucho en-tusiasmo en su acercamiento con los in-dios guerreros estacionados en las fronte-ras del estado sudamericano. También en-contró el tiempo para escribir versos ycomprometerse totalmente con obras decaridad hacia los desheredados en la fron-tera americana. Y encontró el coraje queno lo había asistido en su llegada a Para-guay durante los dramáticos días de laguerra civil argentina. De hecho, en 1859el país se sumergió en una de las muchasguerras fratricidas que marcarían la histo-ria de Sudamérica: por un lado la provin-cia de Buenos Aires, con su gobierno re-publicano, y por otro las provincias argen-tinas unidas en la Confederación. Se alia-ron con estos últimos los indios Calfucurá

Araucan Calfucurá, un gobernante indioque ya se había distinguido en las guerrasde la Pampa y líder indiscutible de supueblo durante cuarenta años. Calfucuráaterrorizaba a sus enemigos: dotado de untamaño gigantesco (cosa rara entre los na-tivos de ese rincón de Sudamérica), el jefede los nativos tenía de su lado no sólofuerza sino también ingenio estratégico,encarnando en estas cualidades todas lascualidades del jefe guerrero de un pueblolargamente oprimido por los blancos.

Las incursiones, la depredación, la des-trucción sistemática llevada a cabo por elcacique (título que se da a los líderes indí-genas de esa zona geográfica) representa-ban, por lo tanto, un verdadero flagelopara los pequeños pueblos fronterizos dela Argentina. Granjas saqueadas, pueblosdestruidos, cosechas quemadas: este es elbalance de la avanzada india en 1859 y el26 de octubre los ejércitos araucanos lle-garon a la vista del pueblo 25 de Mayopara dar otro asalto a las miserables espe-ranzas de los asustados colonos. Calfucu-rá acampó a unos pocos kilómetros deldistrito y esto fue suficiente para hacerque la mayoría de los habitantes huyeranen pánico. Sin embargo, don Bibolini nohuyó y decidió enfrentarse al indio en supropio campamento para disuadirlo deatacar a un pueblo indefenso.

Consciente del peligro mortal (los nati-vos sentían un odio visceral hacia todoslos cristianos), el sacerdote no se dejó per-suadir por las sentidas palabras de sus fe-ligreses y, cargando dos caballos con rega-los de diversa índole, montó un tercer ca-ballo en dirección al campamento enemi-go. Al acercarse a las tiendas, el valienteitaliano cayó de su caballo asustado porlos gritos de los indios pero, paradójica-mente, el incidente resultó esencial en suprimer acercamiento con el despiadadoenemigo. Calfucurá no permitió que nin-guno de sus guerreros tocara al misionero

y lo invitó a volver a la silla para conocer-lo de cerca.

Una vez entregados los regalos, donFrancesco comenzó una larga conversa-ción que terminó con éxito después de va-rias horas. El resultado fue tal que la po-blación pudo presenciar el regreso de Bi-bolini a la aldea, acompañado por el pro-pio jefe indio. Cuando llegaron al centrode la plaza, los nativos de la Pampa co-menzaron a vender sus tocados a la gentedel pueblo, mientras que Calfucurá siguiócaminando junto a Bibolini, hasta llegar ala iglesia. Al día siguiente, los cinco milguerreros salieron de 25 de Mayo y se di-rigieron al desierto. El lugar del encuentroentró en la historia de la geografía localtomando el nombre de Laguna del Cura yen la historia argentina entró también donFrancesco Bibolini. Fue el primer párrocode la iglesia dedicada a Nuestra Señoradel Rosario y vivió en la más absoluta po-breza - en su casa en el número 700 de laVía 10 - hasta su muerte en 1907. Su tra-bajo pastoral dejó una huella indelebleentre la gente de la Pampa y el ayunta-miento del pueblo se encargó del funeraldel querido sacerdote. Lerici honró la fi-gura de su ilustre hijo con la creación deun monumento en 1932, que se inaugurófrente a la iglesia parroquial.

Pero si la vida de don Francesco Biboli-ni estuvo llena de mil episodios de cari-dad, sólo uno ha quedado indeleble en lamemoria de Argentina. Y lo encontramosen la inscripción funeraria de su monu-mento, situado en el atrio de la iglesia pa-rroquial de 25 de Mayo, bajo el cual des-cansan sus restos. Para todos los habitan-tes de la Pampa, Francesco Bibolini fue yes el “salvador del pueblo de las invasio-nes de los indios en 1859”, para todosellos don Francesco es el santo de la Pam-pa.

GENEROSO D’AGNESE

El mar saludó el nacimiento deFrancesco Bibolini, el 3 de sep-tiembre de 1822. Y fue el mar elque lo llevaría lejos, varios años

después, depositándolo en las costas delnuevo continente, en un país todavía engran parte salvaje y lleno de oportunida-des. Bibolini nació en Lerici, un pueblode Liguria que había visto a muchos ni-ños partir hacia las nuevas tierras de Amé-rica. De las muchas historias que conta-ban los emigrantes que regresaban, sacabael entusiasmo de un futuro para dedicarsea la misión. De hecho, el joven prontosintió la vocación al sacerdocio y conclu-yó sus cursos de teología con su consagra-ción como sacerdote en 1847. Partió paralas Américas unos años después, en 1853:anteriormente el sacerdote había vendidotodos sus bienes temporales para pagar suviaje y fijó su destino en Paraguay. Sinembargo, el sacerdote no estaba aún pre-parado para impactar duramente en larealidad de ese país y se enfrentó inmedia-tamente a ella. En la frontera se le con-

Page 10: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

número 30, viernes 24 de julio de 2020 L’OSSERVATORE ROMANO página 11

Documento final de la Asamblea especial

Por una movilización mundialpor la Amazonía ”¡Basta

d e a n t ro p o c e n t r i s m o,de soberbia suicida, detecnolatría delcrecimiento ilimitado,hasta la explosiónglobal! La Amazoníano nos “pertenece”,nosotros convivimos ydependemos deella. Vida plena es lainterdependencia entretodo lo queexiste. ¡Amazonía Viva,Humanidad Segura,Buen Con-Vivir paratodas y todos

MARCELO FIGUEROA

Entre los días 18 y 19 de julio se llevó ade-lante esta primera Asamblea de la Ama-zonía con la participación de represen-tantes de Brasil, Ecuador, Colombia, Pe-

rú, Bolivia, Chile, Paraguay, Guyana, Venezuela ySurinam. Al cierre de la misma, los organizadoresdifundieron un documento final. Desde el iniciode ese texto conclusivo, se reconocen como autoconvocados y convocadas «ante la destrucción dela Amazonía y sus pueblos, que producirá una ca-tástrofe global, por la inter-dependencia profun-da de todo lo que existe». Del mismo modo, lla-man en su primer párrafo a una «movilizaciónmundial por la Amazonía». Los objetivos de lamisma son tres. Detener el ecocidio, el etnocidioy el genocidio de los pueblo indígenas.

En el primer caso, se denuncia que se «avanzaal “punto de no retorno” de sabanización y frac-tura ecosistémica de la Amazonía y sus conexio-nes» a la vez del «infierno de las masivas quemase incendios, del garimpo, del tráfico de tierras,

lo que denominan etnocidio y genocidio de lospueblos pueblos indígenas, afro descendientes yamazónicos en general, expresan su agravamientodentro de la pandemia del covid-19: En este senti-do, llaman a «detener las aberraciones del genoci-dio, necropolítica y los “cuerpos desechables”,desde los Estados, especialmente en Brasil yotros. Erradicar el racismo estructural, social, tec-nocrático, estatal, ontológico y epistemológico; ladestrucción y homogeneización de las culturas yel mito de las “razas”, y así avanzar en la descolo-nialidad del poder, saber y del ser. Dejar de ser loque no somos, ni podemos ni queremos ser».

En la segunda parte del documento asamblea-rio, los organizadores realizaron varios «llama-dos» puntuales, que al cierre del mismo identifi-can como realizados «a los ciudadanas-os delmundo a Amazonizarse: sellar una alianza perma-nente y solidaria con la Amazonía: ¡Informemos,movilicemos, actuemos en defensa de la vida y delos derechos de las personas y de la naturaleza!».El primero de esos llamados es a la «cobertura deemergencia de servicios sociales, con sistemas desalud y autocuidado basados en las estructuras co-munitarias y estatales que combinen saberes tradi-cionales y medicina occidental; inversiones estra-tégicas y consistentes de los poderes públicos en

mado está orientado a «superar las opresiones delestado-centrismo». Dramáticamente denuncian yllaman a detener «los asesinatos de líderes, defen-sa de los defensores de la Vida, sin la criminaliza-ción y judicialización de los derechos y luchas so-ciales. Institucionalidad y organizaciones socialeslaicas, con libre espiritualidad y sin sectas delmiedo, represión y violencia psicosocial». Comoen reiteradas ocasiones, llaman también a «dete-ner el extractivismo y sus estructuras de depreda-ción, opresión y corrupción empresarial y estatal,y los tratados o acuerdos de “libre comercio” quelos refuerzan. Por economías comunitarias, con re-ciprocidad y solidaridad, con y dentro del bos-que, para que se quede en pie». En lo que llamanla des-mercantilización de la vida, llamaron a «de-tener la dictadura ecocida de los negocios del ca-pitalismo privado y del capitalismo de Estado, ensus diversas expresiones políticas. Justicia climáti-ca con reducción neta de emisiones sin falsas so-luciones (geo-ingeniería, mercado de carbono yotras). Acción social y estatal para detener lasmafias, sicariato y todas las formas de violenciade las “economías” ilegales en la minería, madera,narcotráfico, plantaciones y tráfico de tierras». Fi-nalmente llaman a la creación de «ciudades inclu-sivas, igualitarias, acogedoras, ecológica y econó-

micamente sustentables. Políticas urbanas e inver-sión, con prioridad al derecho a una vivienda dig-na, el acceso al agua y saneamiento básico, a rela-ciones justas en el intercambio con el campo y laforesta. Detener el consumo de productos amazó-nicos basados en el ecocidio, etnocidio y múlti-ples formas de opresión». Claman concluyendoese llamado para que «¡ni una gota más de sangreindígena y popular en las economías amazónicas!Frenar el crecimiento sin fin en un planeta limita-do y los patrones de consumo incompatibles conla preservación de la vida».

Los asambleistas, al cierre del histórico docu-mento expresan creer en «los procesos de auto or-ganización de los pueblos en la Panamazonía y elAbya Yala, con la movilización de las comunida-des, ciudades y movimientos sociales». No dudanen concluir su declaración final con una serie deexpresiones determinantes y urgentes: «¡Ya nohay más tiempo! ¡Basta de antropocentrismo, desoberbia suicida, de tecnolatría del crecimiento ili-mitado, hasta la explosión global! La Amazoníano nos “p ertenece”, nosotros convivimos y depen-demos de ella. Vida plena es la interdependenciaentre todo lo que existe. ¡Amazonía Viva, Huma-nidad Segura, Buen Con-Vivir para todas y to-dos!».

salud y educación, con participación y control delos pueblos amazónicos; atención integral y trans-fronteriza de las pandemias (actuales y futuras) yenfermedades tropicales. Sistemas de educaciónbilingüe intercultural de calidad y no marginales,basados en el diálogo equitativo de saberes y elrespeto del patrimonio intelectual colectivo ytransgeneracional de los pueblos». El segundo lla-mado está relacionado con la erradicación de todaforma de dominio y violencia de género. Bajo esepostulado invitan a construir «efectivas relacionesde equidad de género e intergeneracional y supe-rando las opresiones históricas del patriarcado».En este conxtexo sostienen que «las mujeres ama-zónicas son protagonistas de resistencia, de for-mas locales y cíclicas de economía, de nuevasaperturas al sagrado de la vida. La juventud ama-zónica fortalece los procesos, con la renovacióndirigencial y la creatividad en múltiples dimensio-nes, como la comunicacional y artística». Tambiénllaman a un «autogobierno y libre determina-ción de los pueblos indígenas y la sociedad, en es-pecial de los pueblos en aislamiento…». Este lla-

parcelación, colonización,para los intereses de laganadería, soja, palmaaceitera, monocultivos,minería, hidrocarburos yotros» . Piden un alto alo que llaman «la dicta-dura de la infraestructura(como carreteras y repre-sas hidroeléctricas) y delas commodities convencio-nales o falsamente “ver-des” . Consolidar los dere-chos de la naturaleza ydel ecosistema amazónicocomo ser viviente sustan-cial a la pervivencia pla-netaria». Realizan un lla-mado urgente para que«antes que sea irreversi-ble, detener la catástrofede la vida global, por ladestrucción de la Amazo-nía como corazón delmundo, por sus innume-rables bondades comomega biodiversidad, oxí-geno, agua dulce, regula-ción y refrigeración climá-tica». En relación a suexigencia de detención de

Page 11: Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 OL’ S S E ... · saria. Enparticular, sigo con preocupación el agu-dizarse, en los días pasados, de lastensiones arma-das en

página 12 L’OSSERVATORE ROMANO viernes 24 de julio de 2020, número 30

Documentales de la repam sobre «Querida Amazonia»

Soñando con Papa Francisco«Querida Amazonia: los sueñosde Papa Francisco para la Pana-mazonia»: es el título de lanueva serie de documentalespromovida por la Red eclesialpanamazónica (R E PA M ) en cola-boración con Verbo Filmes.

La producción, que quierereflexionar sobre la exhortaciónapostólica postsinodal QueridaAm a z o n i a de Papa Francisco, yaha difundido el primer episodioque presenta «El sueño socialdel obispos de Roma por la re-gión y sus pueblos».

En el documento el Pontíficeescribe entre otras cosas: «Sue-ño con una Amazonia que lu-che por los derechos de los máspobres, de los pueblos origina-rios, de los últimos, donde suvoz sea escuchada y su digni-dad sea promovida.

Sueño con una Amazoniaque preserve esa riqueza cultu-ral que la destaca, donde brillade modos tan diversos la belle-za humana.

Sueño con una Amazoniaque custodie celosamente laabrumadora hermosura naturalque la engalana, la vida desbor-dante que llena sus ríos y susselvas. Sueño con comunidadescristianas capaces de entregarsey de encarnarse en la Amazo-nia, hasta el punto de regalar ala Iglesia nuevos rostros conrasgos amazónicos» (7).

Estos son los cuatro sueñosdel Papa para la Amazonia, esdecir un sueño social, uno cul-tural, uno ecológico y uno ecle-sial.

La iniciativa de los documen-tales —explica la R E PA M — q u i e re«seguir llevando vida y un fu-turo de esperanza» en la re-gión, «soñando junto al PapaFr a n c i s c o » .

El primer documental, titula-do «Un sueño social» y difun-dido en los días pasados, haimplicado a indígenas, campesi-nos, comunidades fluviales,personas de origen africano ytrabajadores pastorales. Catorcepersonas procedentes de Boli-via, Brasil, Colombia, Ecuador,Perú y Venezuela han grabadosus reflexiones.

La invitación de la R E PA M esa «mirar a nuestra casa comúnpara ver cómo la hemos daña-do, destruido, ultrajado, perotambién para reconocer todaslas posibilidades que tenemospara salvarla».

El organismo eclesial recuer-da «haber tenido el privilegiode escuchar miles de testimo-nios». Todos han compartido«sus deseos, sus penas y sus es-peranzas» en la misión de laIglesia en el territorio.

«La periferia ha ido al cen-tro», subraya la Red panamazó-nica, que reitera: «El Sínodono ha terminado, sino que con-tinúa: depende de cada uno denosotros y de ustedes llevarloadelante, esto es sólo el co-mienzo».