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    LOS DISPOSITIVOS MÓBILES Y LA POESIA DIGITAL

    INTRODUCCIÓN

    Jill Walker Rettberg1 determina que el uso de “literatura electrónica” como un

    concepto referido a la literatura que utiliza las potencialidades del medioelectrónico se dio por primera vez en el artículo de Jay Bolter “The Idea ofLiterature in the Electronic Medium” publicado enComputers in the Libreral Arts en el año 1985. Bolter se refería, entonces, a una literatura que deberíaaprovechar las características de los videojuegos, por una parte, y lasposibilidades de colaboración en la escritura de la red, por la otra, paraconvertir-se en un fenómeno accesible a un número de lectores noespecializados en filología, arte o humanidades. Jill Walker Rettberg expresasu sorpresa teniendo en cuenta cómo han evolucionado las textualidadeselectrónicas2.

    Los dispositivos electrónicos han cambiado mucho desde que en 1960Raymond Queneau y Françoise le Lionelle crearan el “Ouvroir de littératurepotentielle” (Oulipo) o Mark Bernstein publicara los primeros hipertextos deficción enEastgate Systems a finales de los ochenta. Las nuevas posibilidadesde creación incorporan elementos como la geolocalización, la tactibilidad, lacolaborabilidad, la socialización y la portabilidad, características que pareceque están abriendo las posibilidades de creación y lectura de obras literariasdigitales a un mercado potencial más amplio y a una comunidad social delectores menos académica o elitista.

    Estos cambios en los dispositivos, sin duda, son tomados en cuenta por lacomunidad académica, como demuestra la exposición virtual para la MLA20133 en la cual se mostró una panorámica de la literatura digital desde susinicios y para ello se organizaron las obras según los soportes en los que sepueden leer, además de clasificarlas por géneros. Así, la exposición distingueentre obras para ordenador, obras que requieren performance y obras paramóviles y localización geográfica (desktop, performance & Mobile-geolocative ).Dene Grigar, Kathi Inman Berens y Lori Emerson justifican sus decisionessobre esta clasificación y sobre las obras elegidas como antologadoras ycuradoras de la exposición aduciendo la voluntad y la necesidad de conectar laliteratura digital con un público lector muy joven que ya está plenamente

    inmerso estas textualidades:“According to two recent studies by the National Foundation for EducationalResearch (NFER) and National Endowment for the Arts (NEA), young

    people are reading social media sites, texts, television ads, websites—writing other than literature. We contend that works, like ElectronicLiterature, that take advantage of the new text technologies made possible

    1 http://jilltxt.net/?p=2665 2 “I was surprised at how clearly Bolter states that “such literature is growing out of the computer gamesthat are so popular today” (page 32), given how strongly authors of the late 1980s and early 1990sworked to distance themselves from games. But he also notes that the Oulipo’s works and concrete poetryare natural allies to the computer, and the possibility of generative electronic literature”.3 http://dtc-wsuv.org/mla2012/curatorial.html

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    Admitir que el soporte en que la encontramos es algo que afecta a la obraliteraria en aspectos esenciales (“la poesía afuera del libro también hamantenido el diálogo con la innovación tecnológica i con formas de leer, amenudo efímeras, que van más allá de la lectura individual”) puede significaraceptar que por ello, quizás, el lector, el crítico, sufre un proceso de

    identificación de la obra con su soporte al cual es difícil sustraerse. De hecho la performance pública9 es una de las prácticas poéticas que Piringer suele llevara cabo, cosa que muestra la estrecha conexión de algunas formas de laliteratura digital con el arte (o elnet-art ) y el espectáculo (o lo audiovisual). Suactivismo poético lo lleva, además, a la creación de herramientas creativasdigitales10 al servicio de la poesía sonora 11 o de la música concreta 12 de la cualtambién participa en la Orquesta Vegetal13.

    Tanto abcdefghijklmnopqrstuvwxyz como konsonant , son dos poemas digitalesque son aplicaciones para teléfono y tablet, aunque konsonant también tieneuna versión para ordenador. Ambos juegan con el movimiento, sonido, forma ytamaño de las letras, formando parte de la poesía tipográfica y de la poesíasonora. Pero el hecho de dejar al lector libertad para manipularlas añade aestas obras la posibilidad de convertirlas en imágenes, en el caso deabcdefghijklmnopqrstuvwxyz o en nuevos sonidos y mezclas musicales enkonsonant . En ambas obras la manipulación del lector es esencial.

    En abcdefghijklmnopqrstuvwxyz las letras del alfabeto se mueven por lapantalla según la fuerza de la gravedad, como si fueran vehículos, comopájaros o como grillos. Mientras se mueven, cada una de ellas suena con elsonido que le es propio, pero con una intensidad y ritmo diferentes de acuerdocon el personaje que representan: las letras-vehículo se mueven con unrepetitivo sonido de motor antiguo i cuando chocan entre ellas desaparecen;los grillos corren raudos y temblorosos, como insectos, y no “cantan” hasta quese encuentran; los pájaros suenan sin cesar mientras vuelan y se juntan enbandadas y la gravedad hace que caigan las letras según su peso y suvelocidad, aunque podemos hacerlas parar o circular más deprisa moviendo lapantalla de nuestro dispositivo móvil. En cualquier caso, podemos luchar contralas letras del alfabeto y eliminarlas con bombas y flechas o capturarlas connuestros dedos y llevarlas a dónde queramos. Además, podemos controlar laintensidad del sonido y las huellas que dejan las letras sobre nuestra pantalla,en blanco. Podemos fotografiarlas si queremos y, por tanto, nos es posible

    dibujar con ellas, así como jugar con sus sonidos de manera constante. Lamezcla de sonidos depende de nuestra elección de las letras y de lamanipulación a que las sometamos. La tipografía está viva, pero siempre lapodemos controlar de alguna manera.

    konsonant , en cambio, es un poema visual con un gran peso de la música(Jörg Piringer lo califica de “juguete sonoro”), una mayor elaboración en los

    9 https://vimeo.com/channels/polipoesia/1988815210 http://apps.piringer.net/realbeat.php http://joerg.piringer.net/index.php?href=software/oscsurface.xml&mtitle=software http://joerg.piringer.net/index.php?href=namshub/namshub.xml 11 Randomización y poesía sonora: http://soundcloud.com/jpiringer/money12 http://joerg.piringer.net/index.php?href=mp3s/mp3s.xml&mtitle=sound13 http://youtu.be/ZUADjV_QVNk

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    movimientos y, por tanto, una mayor limitación de nuestro campo de accióncomo lectores. Consta de cuatro posibilidades de manipulación de algunasconsonantes: la primera consiste en trazar caminos por donde transitan la M, laN y la O que suenan según la intensidad y la forma de nuestro trazo y si seencuentran se desdibujan y suenan de manera diferente, más nasales; la

    segunda nos permite eliminar las letras que surgen de una nube crea-letrascon nuestras armas las H, X y Z; la tercera posibilidad nos permite construirmáquinas con la C, F, H, J, L y M para gestionar la constante fabricación deletras por parte de la nube y, la última, nos muestra un circuito en red en el quepodemos trazar diferentes itinerarios para las R (R, r, ! , " , # , $ ) marcando enlos nodos las alteraciones que deseamos en el movimiento, como por ejemploel sonido, la velocidad, la repetición, un efecto sorpresa, etc. A estas cuatrovariantes debemos añadir la posibilidad de escuchar como banda sonora y, portanto, sampleando los sonidos que nuestro juego va produciendo con lasconsonantes, las quince pistas musicales creadas por Piringer que, además,nos anima a compartir con él nuestras propias mezclas.

    Sin duda alguna, estas dos obras de poesía digital (poesía visual, tipográfica,sonora, juego sonoro) son sobre todo juegos: nos permiten manipular, destruir,recomenzar tantas veces como nos plazca, grabar imagen y sonido, trazardibujos y garabatos, masacrar letras o construir máquinas que lasmanufacturen e incluso elaborar un circuito e-letra-trónico14 a nuestro antojo. Elsignificado es el juego: jugar es el sentido de la obra; la mezcla delcomponente visual y sonoro, el ritmo del sonido y el ritmo del movimiento.

    En este caso, el medio electrónico posibilita la relectura infinita del poema perocada relectura, sin embargo, es una obra nueva y, por tanto, el lector participade la obra plenamente. Esta lectura-juego de la poesía de Piringer a través delos dispositivos móviles evoca los aspectos originales de la poesía sonora yvisual: lo efímero, lo randomizado, lo antiacadémico e incluso lo antiintelectualy, sin duda, lo lúdico. El móvil y la tableta son el espacio potencial de laperformance virtual, de una performance, eso sí, diferida en el tiempo, en elespacio, efímera y recuperable, en parte. Y aunque se pierde la posibilidad decompartir el tiempo y el espacio el espectáculo ha tenido lugar para el lectorque, además, ha formado parte de él de manera desinteresada, por el merohecho de jugar. Es por eso que, como afirma Alexandra Saemmer en “Digitalarts and literature – is it just a game?” 15en este mismo volumen:

    “a "disinterested play," which is the exact opposite of the moralising, so-called pedagogy, elitist academicism and ideological ‘missionarism’”.

    CONCLUSIÓN

    Ante la proliferación de dispositivos móviles cómo teléfonos y tabletas conconexión a Internet, cada vez son más los autores que crean sus obrasliterarias y las piensan específicamente para este medio. La exploración de lasnuevas herramientas se encuentra en el trasfondo de estas nuevas creaciones,

    14 http://youtu.be/3efV2wqEjEY 15 Seria posible enlazar esto con el artículo? S AEMMER, ALEXANDRA (2012) “Digital arts and literature, is it just a game?” en AQUÍ IRIA EL TÍTULO DEL VOLUMEN

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    pero la voluntad de acercarse a un público lector usuario de estos dispositivosdebe ser otra razón de peso a tener en cuenta. Alexandra Saemmer 16 defiendeuna apuesta más fuerte por la jugabiblidad de las obras literarias digitales paraevitar que éstas queden reducidas a un sector de lectores críticos, docentes ycreadores, a un círculo cerrado de consumo literario sin trascendencia social.

    Quizás los nuevos soportes estén abriendo el camino necesario para que lasapps de literatura sean un entretenimiento, un juego practicado cada día pormás lectores y lectoras, con toda la profundidad, eso sí, que un buenentretenimiento, la buena literatura, es capaz de generar.

    Quizás, además de la obra en si, el soporte móvil sea lo que puede lograr lasocialización de la obra, ya que en el caso de las tablets y las apps el soportesí que es en buena parte la obra. Lo lúdico (la manipulación, la socialización, latransportabilidad, la recreación) de la obra se relaciona íntimamente con laapropiación del soporte en que se muestra.

    En este breve artículo os hemos presentado la lectura de dos obras deliteratura digital creadas para ser leídas en dispositivos móviles. Nuestraintención ha sido reflexionar brevemente sobre el proceso de lectura de dichasobras y relacionarla con otros elementos característicos de este tipo desoportes como la tactilidad, la portabilidad y la geolocalización. Los nuevossoportes y las interfaces que requieren, ¿pueden contribuir a una mayor jugabilidad y difusión social en las obras de literatura digital?

    Oreto Doménech

    16 Artículo Alexandra Saemmer