MI PROYECTO DE VIDAPOR: MIGUEL OSWALDO URBINA

Catedra UNADISTA

EL TESORO DE MI CASA(NARRACIÓN)

Desde que mi memoria recuerda cuando yo apenas era un niño tenía un gran tesoro, hoy todavía lo tengo y si algún día de va de mi lado solo perderé su presencia porque en mí rondaran sus concejos y sus deseos.

Mi madre siempre quiso dar lo mejor de sí para que nada nos hiciera falta, pero desafortunadamente las condiciones económicas del lugar en que vivíamos no se prestaban para poder tener una vida digna, lo poco que ella ganaba solo alcazaba para darnos un poco de comer y otro para medio vestirnos, yo aún recuerdo con que ganas que ella trabaja luchando sin descanso, acarreando agua a la espalda en canecas de cinco galones, de 4:00 a 6:30 de la mañana, para lavar docenas de prendas de vestir piezas por las cuales le pagaban los dueños lo que se le venía en gusto, luego nos alistaba un rico desayuno que constaba de una deliciosa arepa de callana y una tasa con café bien bajo en azúcar para economizar,

así nos mandaba para la escuela a mi hermano mayor y a mí, el más pequeño se quedaba con ella mientras aseaba la casa, adelantaba el almuerzo y comenzaba de nuevo su ardua tarea de hacer mantenimiento de unas casas de gente pudiente, bien recuerdo cuantas callosidades tenía en sus manos tanto trajinar con el palo de la escoba y del trapero refregando cada rincón esas casas grandes como nosotros las llamábamos, y claro era muy grandes comparada con un cuarto de 5 x 4 m3 sitio en el que nos acomodábamos este nos servía de cuarto y de cocina a la vez, luego regresaba a casa cansada pero preocupada pensando en las tereas que en la escuela nos habían dejado, con dificultad pero con paciencia nos ayudaba a desarrollarlas , recuerdo que para que no nos estresáramos, nos llevaba a dar de comer el marrano, a coger hierva para los cuyes y conejos, nos enseñaba a realizar los oficios de la casa tales como: barrer, trapear, lavar, cocinar y toda actividad doméstica que se pueda mencionar, recuerdo sus palabras textuales “Tienen que aprender para que se defiendan en la vida” en pocas palabras ella “no nos dio pescado para comer un solo día, sino que nos enseñó a pescar para que no aguantáramos hambre”.

Pero en fin también muy claro me acuerdo cuando llegaba la noche, nos reunía alrededor del fogón de leña para que nos sirviéramos un plato con sopa mientas en el fuego se miraba ondear una pequeña olla llena de agua panela que ella nos daba para que nos fuéramos a dormir con el estómago lleno, tengo en mi mente que yo tan curioso por medio de las cobijas veía a mi madre sentada al lado de la hornilla cogido un atado de cabuya hilándolo y haciendo los uvillos acompañada de un pequeño radio transistor el cual con su música del recuerdo a mi madre le sacaba cuantas lagrimas se puedan imaginar, entre llanto y uvillo se pasaba la noche y a veces se quedaba dormida sentada en ese banquito de aquel rincón hasta que volvía a amanecer y comenzaba la rutina los uvillo a un costal y el fin de semana los llevaba al mercado y con la plata que recibía compraba cualquier cosita que en la cocina le hacía.Así transcurrieron varios años en los cuales mientras ella pasaba tantas penas y desconsuelos mis hermanos y yo íbamos creciendo y dándonos cuenta cuanto mi madre sufría y se esforzaba por sacarnos adelante para que fuéramos hombres de bien, honrados, honestos responsables cumplidos con nosotros mismos y con la sociedad,

fue ahí cuando aceptamos su disciplina, esa la misma que nosotros por ignorancia criticábamos pensábamos que aquellos llamados de atención eran pura cantaleta y claro más aún cuando teníamos que repasar las tablas de multiplicar, yo pensaba con gran ignorancia que eso solo era para la gente grande porque veía que mi madre se las sabia al revés y al derecho, apenas cuando ya estaba en secundaria me vine a dar cuenta que mi madre solo había estudiado hasta primero de primaria y que todo lo que ella sabía lo había aprendido por experiencia y otro poco lo aprendía con nosotros, por eso prácticamente hoy puedo decir y a boca llena que mi mamá es una profesional egresada de la universidad de la vida con su título de filosofía psicología ética y valores, profesión con la que nos ha enfocado no sola a sus hijos sino también a esposo , hermanos nietos y nueras .

Ese tesoro es el que conservamos y que nos ha inducido a seguir adelante, a diario nos motiva con sus palabras y concejos y nos fortalece, siento que es ella quien ha forjado mi autocorrección, mi autodirección y mi autonomía personal, por eso por mi parte sé que no me alcanzaría la vida para pagarle, pero sí quiero darle el gusto de que en mí el profesional que ella siempre soñó y seguiré adelante siendo una gran persona tanto para la sociedad, como para mi esposa, mis hijos mis padres, mis hermanos y toda mi familia tratando de mantenerla unida tal cual como mi madre lo desea.