Recuerdito MV

1
¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas. ¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas. ¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas. ¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas.

Transcript of Recuerdito MV

Page 1: Recuerdito MV

¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR

Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas.

¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR

Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas.

¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR

Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas.

¡Hermanas Maestras Visitantes! Mis queridas hermanas ¿estamos cumpliendo nuestra meta? Recuerden que por medio de las visitas mensuales que estamos haciendo a nuestras hermanas podemos crear lazos de amor, amistad y confianza. Si escuchamos los susurros del Espíritu aumentaremos nuestra percepción de las necesidades de otras personas. Si actuamos de acuerdo con esas impresiones divinas, podemos ser una bendición para los que necesitan ayuda. Pero tenemos que estar dispuestas a dar; a dar de nuestros recursos y de nuestro tiempo. La magnitud de nuestra vida no se mide con lo que recibimos, sino con lo que damos. El programas de las maestras visitantes, brinda la oportunidad de dar, a medida que atendemos las necesidades físicas, espirituales y emocionales de las hermanas. “A TRAVES DE LA VIDA VEREMOS QUE HAY PERSONAS QUE AYUDAR, BRAZOS QUE APOYAR, CORAZONES QUE CONSOLAR, ALMAS QUE SALVAR…” RECUERDA ¿ HAY ALGUIEN A QUIEN VISITAR

Recordad siempre que el llamamiento de Maestra Visitante viene directamente del Señor. Ya que Él nos hace responsables del cuidado de nuestras hermanas, debemos esforzarnos siempre en no defraudar al Señor velando por ellas.