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-PRESENTACIÓN -LOS VEINTE AÑOS DEL CENTRO RECUERDOS IMPRESIONES -CONSEJOS DE LA ENFERMERA CARTA A LOS PADRES LA ADOLESCENCIA: 10 CONSEJOS -NOTICIAS CULTURALES MIGUEL HERNÁNDEZ TESTAMENTO DE GARCÍA MÁRQUEZ -CUENTOS DE BUCAY LAS RANITAS DE LA NATA LA PRINCESA BUSCA MARIDO -CREACIÓN LITERARIA ALLIUM CEPA SONETO -CURIOSIDADES EXAMEN -GALERIA DE IMÁGENES FOTOS DE TOLEDO EN EL SIGLO XIX CONCURSO DE ATARDECERES -BUZÓN -PARTICIPACIÓN: [email protected] INDICE Puntos de interés espe- cial: Los veinte años del centro Consejos de la enfer- mera Noticias culturales Cuentos de Bucay Creación literaria Curiosidades Galerías de Imáge- nes Buzón participación 25-1-11 Volumen 1, nº 1 Contenido: Presentación 2 Recuerdos e Impre- siones 3 Consejos de la en- fermera 4,5 Escritores 6,7 Cuentos 8,9 Poemas 10, 11 Curiosidades, Buzón Sugerencias, pps... ...

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-PRESENTACIÓN

-LOS VEINTE AÑOS DEL CENTRO

RECUERDOS

IMPRESIONES

-CONSEJOS DE LA ENFERMERA

CARTA A LOS PADRES

LA ADOLESCENCIA: 10 CONSEJOS

-NOTICIAS CULTURALES

MIGUEL HERNÁNDEZ

TESTAMENTO DE GARCÍA MÁRQUEZ

-CUENTOS DE BUCAY

LAS RANITAS DE LA NATA

LA PRINCESA BUSCA MARIDO

-CREACIÓN LITERARIA

ALLIUM CEPA

SONETO

-CURIOSIDADES

EXAMEN

-GALERIA DE IMÁGENES

FOTOS DE TOLEDO EN EL SIGLO XIX

CONCURSO DE ATARDECERES

-BUZÓN

-PARTICIPACIÓN: [email protected]

INDICE

Puntos de interés espe-

cial:

Los veinte años del

centro

Consejos de la enfer-

mera

Noticias culturales

Cuentos de Bucay

Creación literaria

Curiosidades

Galerías de Imáge-

nes

Buzón participación

25-1-11 Volumen 1, nº 1

Contenido:

Presentación 2

Recuerdos e Impre-

siones

3

Consejos de la en-

fermera

4,5

Escritores 6,7

Cuentos 8,9

Poemas 10,

11

Curiosidades, Buzón

Sugerencias, pps...

...

Queridos lectores:

Tenéis ante vosotros el primer número de Sherezade, la revista de nuestro

instituto. Queremos que en ella tengan cabida las iniciativas, creaciones y re-

flexiones de todos los miembros de nuestra comunidad educativa.

Llegará tan lejos como nosotros queramos. Porque ha nacido para crecer,

con la imaginación, la inteligencia y la fantasía de todos los que aún estamos con-

vencidos de que la educación, y la cultura, constituyen el mejor instrumento –

quizás el único- para seguir avanzando hacia un mundo mejor.

Aquí caben razonamientos y divertimentos. La memoria del pasado y las

adivinanzas que nos ayuden a descubrir el futuro. Las matemáticas y la literatura.

La física y la química. Y por eso, claro, el amor; que ya lo dijo el inminente sabio

Severo Ochoa, antes que Joaquín Sabina: ―el amor es la fusión de la física y la

química.‖

Y también cualquier otro saber que nos ayude a conocer la diversidad del

mundo y sus consecuencias, aunque no esté etiquetado en ninguna asignatura.

Queremos que sea la revista de la realidad de la vida y de los cuentos. De

muchos cuentos, de todos los tamaños y colores. Porque, como decía es escritor

Luis Landero en su libro El cuento o la vida: “Hoy más que nunca la escuela está

bajo el signo fatal de Sherezade‖ (aquella mujer inteligente que utilizaba la imagi-

nación para seguir viva).

Nosotros también necesitamos la imaginación para seguir adelante, cami-

nando hacia esa utopía de la que hablaba Eduardo Galeano, y que siempre está en

el horizonte y siempre alejándose con él. Por eso, decía el escritor uruguayo:

―camino dos pasos, y ella se aleja dos pasos ¿Entonces para qué sirve la utopía?

Para eso sirve, para caminar.‖

En vuestras manos queda Sherezade. Necesita de vuestras aportaciones y

fantasía para seguir viviendo, narrando, contando. A nosotros, quienes lanzamos

esta iniciativa, nos gustaría que su historia, como en Las mil y una noches, fuera

interminable.

Francisco de Paz

PRESENTACIÓN

Página 2 Sherezade

―el amor es

la fusión

de la física

y la

química.‖

La verdad es que las emociones se apretaban entre sí y pugnaban por salir más allá de ―la flor de la piel‖.

Fue necesario ―bajar la mano‖ en varias ocasiones para no quedarse ―al descubierto‖ entre compañeros y antiguos

alumnos, ya médicos, ya abogados, ya directores de empresa o comerciales, ya maestras, ya madres… Los recuerdos

saltaban alborotados y se desparramaban en cientos de imágenes, próximas y precisas muchas, casi tangibles; más

borrosas otras entre el fondo de las clases o de una excursión por la Ruta de Don Quijote… Todas irrepetibles.

Menos mal que el alma se había puesto a buen recaudo desde que recibí la invitación para asistir a los actos

programados por la actual dirección del Carlos III y había buscado toda clase de protección para emociones y sobresal-

tos. No obstante, todo aquello que habían atado y bien atado la prudencia y la razón se vio desmoronado en un instante

al divisar un grupo de gente que esperaba ante las puertas del lugar elegido, que es lo que yo había procurado: estar

entre los primeros en llegar y encontrarme, ya ajustado, ante cuantos fueran llegando. Las palpitaciones aumentaban y

el caballo cordial aceleraba su paso a medida que me aproximaba al grupo, y los apuros de no reconocer con la preci-

sión que yo quisiera a quienes me saludaran los azuzaba con ahínco. Y es cierto que en algunas ocasiones tardé varios

segundos, que se hicieron horas, en identificar al antiguo alumno, a las alumnas sobre todo: se acicalan de tales mane-

ras y tan diversas entre sí que me proclamo incapaz de distinguirlas, de reconocerlas. Entonces, se ponen todos mis

sentidos en funcionamiento y, al poco, ya por el oído que me trae ecos reconocibles, ya por los gestos que atrapo con

mis ojos despatarrados, reconozco perfectamente a mi interlocutor. Eso sí, que no se me pida que diga su nombre o el

curso en que nos encontrábamos a diario, pero en muchos casos también consigo acordarme: entonces me entra una

gran alegría y repito David, Verónica o Natalia varias veces; incluso, le pregunto por el compañero o compañera con

quien, compartiendo pasillo, escaleras o patio, se inició en las artes amatorias. Otras veces, son ellos quienes despiertan

recuerdos puntuales o describen estampas anecdóticas y puntuales también. ―Me acuerdo cuando me dijo la primera

vez en clase que tuviera cuidado porque me iba a caer. Chaval, oye chaval, que te vas a caer, fue como me dijo. ¿Que

me voy a caer?, si estoy bien sentado, le contesté. Pues aunque estés bien sentado, que a pesar de mi miopía bien que

lo veo, estabas ya en el alféizar de la ventana. ¿En el alféizar de la ventana? Cada vez entiendo menos. Que sí, mucha-

cho, que estabas cazando mariposas fuera de la clase. Que estabas despistado.

-Y a mí me dijo un día: Chaval, que se te ha caído el libro. Y como miraba hacia los lados y debajo de la

mesa para ver si veía el libro que no había llevado a clase, mis compañeros de reían y yo cada vez me azoraba más.

-Que no veo libro ninguno, profe.

-Chaval, quiero decirte que tienes que traer el libro a clase. ¿Cuántas veces más debo decírtelo para que

hagas caso…?

En el acto propiamente dicho, las fotografías se perseguían unas a otras, como impidiendo que ninguna se

aposentara como una señorona y desplazara a las demás. Chispazos, fogonazos del pasado próximo, tan próximo que

aún se roza con el presente. De los discursos diré… Dijeron casi todos los oradores que veinte años es muy poco tiem-

po. ¡QUE veinte años es poco tiempo…! No lo doy por cierto: veinte años es una eternidad, pues ahora mismo ninguno

de los alumnos del Instituto cuenta con esa precisa y preciosa edad. Y hablando de la historia del Centro, toda ella se-

gada por la guadaña del 2 y encerrada en la oquedad del 0, es mucha historia: desde su ubicación el la Avenida de su

nombre, que yo no conocí, hasta su llegada a los altos toledanos de la Avenida de Europa, que ponían los mismos pies

de los cigarrales al alcance de la vista salvando el Tajo, hay mucho trecho, y muchas selectividades, y muchos inter-

cambios culturales, y muchos enfados y disgustos escolares, y muchas alegrías, y muchas gargantas rotas y calcina-

das… Toda la historia de la literatura, desfiles de escritores, comentarios de texto…, que muchas veces regresaban a la

cartera…Veinte años son muchos años y marcarán una etapa irrepetible del Carlos III, etapa en la que se consumieron

los últimos rescoldos de lo que había sido un excelente bachillerato. Luego llegó la malhada LOGSE con todos su pro-

gres de pacotilla a cuestas, y con ella el derrumbamiento y la hecatombe escolar. Lamentablemente, no me equivoco:

ahí están las pruebas…

Y más fotografías, y más oradores y más recuerdos entrañables. De todas las fotografías retengo una en mi

retina: aquella en la que la voluntad caprichosa del proyector paralizó la imagen dejando al presi Barreda como si estu-

viera entrerrejado, entrebarrotado. ¿La recordáis? ¿O fue una errónea sensación mía?

En la cena, la cordialidad se deslizaba por los manteles de los comensales, amigos y compañeros que se en-

cargan de prolongar la ardua tarea de enseñar, de enseñar también fuera de las clases, y los domingos y demás fiestas

de guardar...

Apreciados compañeros del claustro del Carlos III, gracias por la cordialidad y el buen rato que me hicisteis

pasar. Y a vosotros, apreciados ex alumnos, que las varillas del abanico vital se os vayan perfilando cada vez más cla-

ras. Si aún no es así, sabed que aún contáis con el beneplácito de la juventud. Y a la dirección del Carlos III, muchas

gracias por esta iniciativa y ánimo para esperar y preparar el veinticinco aniversario que, ¡ay!, está ya a la vuelta de la

esquina.

IMPRESIONES Y RECUERDOS

Volumen 1, nº 1 Página 3

CONSEJOS DE LA ENFERMERA (VEASE TAMBIÉN SIGUIENTE PÁGINA)

CARTA A LOS PADRES

Estimados padres:

Durante el pasado curso escolar, han pasado por la consulta de Enfermería, alrededor de

400 alumnos por motivos diversos. Existe un factor común en un porcentaje amplio de los escolares

que acuden diariamente a la enfermería: la ausencia e escaso desayuno que hacen antes de venir al

instituto.

Cuando un niño en pleno crecimiento está en ayunas desde la noche anterior, aparecen

efectos propios de este ayuno, como son: dolor de cabeza, irritabilidad, disminución de la concen-

tración, fallos de memoria, mareos, etc.

Les recomiendo, que para el buen desarrollo físico e intelectual de sus hijos, insistan en la realiza-

ción de un desayuno completo a base de:

Leche + Zumos o fruta + Tostadas/galletas o cereales

Puedo entender que por la mañana todo son prisas para llegar al colegio, trabajo, etc.; pero tal vez

con ayuda de dos pequeñas estrategias, que ahora les comento, podamos conseguir que sus hijos

hagan en desayuno completo que repercutirá beneficiosamente en su rendimiento escolar, así como

en su buen desarrollo físico.

Estrategias;

1.- Levantarse diez minutos antes

2.- Dejar el desayuno preparado la noche anterior.

3.- El material escolar necesario para el día siguiente (mochila),

debe dejarse preparado el día anterior.

Agradeciendo su colaboración y siempre pensando en el bienestar de sus hijos.

Un saludo

Fdo. Blanca González Arévalo

Página 4 Sherezade

“insistan

en la

realización

de un

desayuno

completo”

LA ADOLESCENCIA

La adolescencia es una etapa de la vida marcada por importantes cambios emocionales, sociales y fisiológicos.

Sobre estos últimos la alimentación cobra una especial importancia debido a que los requerimientos nutricionales,

para hacer frente a estos cambios, son muy elevados y es necesario asegurar un adecuado aporte de energía y

nutrientes para evitar situaciones carenciales que puedan ocasionar alteraciones y trastornos de la salud.

CONSEJOS FUNDAMENTALES PARA NIÑOS Y ADOLESCENTES

1. Disfruta de la comida

Intenta comer alimentos diferentes cada día para gozar de una alimentación variada y disfrutar de ella. Come

con tus familiares y amigos.

2. El desayuno es una comida muy importante

Tu cuerpo necesita energía después de dormir, por lo que el desayuno es esencial. Elige para el desayuno alimen-

tos ricos en carbohidratos, como pan, cereales y fruta. Saltarse comidas, y en especial el desayuno, puede pro-

vocar un hambre descontrolada, que muchas veces lleva a comer en exceso. Si no comes nada para desayunar,

estarás menos concentrado en el colegio.

3. Come muchos alimentos variados

Consumir alimentos variados todos los días es la mejor receta para gozar de buena salud. Necesitas 40 vitaminas

y minerales diferentes para mantenerte sano, y no hay ningún alimento que por sí sólo pueda aportártelos todos.

No hay alimentos "buenos" o "malos", así que no tienes porqué dejar de comer las cosas que te gustan. Simple-

mente asegúrate de que consigues un equilibrio adecuado y come una gran variedad de alimentos. ¡Toma decisio-

nes equilibradas en cada momento!

4. Basa tu alimentación en los carbohidratos

Estos alimentos aportan la energía, las vitaminas y los minerales que necesitas. Algunos alimentos ricos en car-

bohidratos son la pasta, el pan, los cereales, las frutas y las verduras. Intenta incluir alguno de estos alimentos

en cada comida ya que más de la mitad de las calorías de tu dieta deberían provenir de ellos.

5. Come frutas y verduras en cada comida

Puedes disfrutar de las frutas y las verduras en las comidas, o consumirlas como sabrosos tentempiés entre co-

midas. Estos alimentos aportan vitaminas, minerales y fibra. Deberías intentar consumir 5 raciones de frutas y

verduras al día.

6. La grasa

Todos necesitamos incluir algo de grasa en nuestra dieta para conservar una buena salud, pero consumir dema-

siadas grasas, y en particular grasas saturadas, puede ser malo para nuestra salud. Las grasas saturadas se

encuentran en los productos lácteos enteros, los pasteles, bollos, carnes grasas y salchichas. Come de forma

equilibrada - si a la hora de la comida consumes alimentos ricos en grasas, intenta tomar alimentos con menos

grasas en la cena.

7. Los tentempiés

Picar entre comidas aporta energía y nutrientes. Escoge tentempiés variados, como frutas, sándwiches, galletas,

tartas, patatas fritas, frutos secos y chocolate. Asegúrate de que tus elecciones son variadas para mantener el

equilibrio en tu dieta, y no comas demasiado, sino no tendrás hambre a la hora de la comida

8. Saciar la sed

Tienes que beber muchos líquidos porque un 50% de tu cuerpo está formado por agua. Se necesitan por lo menos

6 vasos de líquidos al día, e incluso más si hace mucho calor o haces ejercicio. El agua y la leche son excelentes,

pero también es divertido variar.

9. Cuídate los dientes

Cuídate los dientes y lávatelos dos veces al día. Los alimentos ricos en almidón o azúcares pueden influir en la

aparición de caries si se comen con demasiada frecuencia, así que no picotees o bebas refrescos a todas horas.

10. Ponte en movimiento

Estar en forma es importante para tener un corazón sano y unos huesos fuertes, así que haz ejercicio. Intenta

hacer algo de deporte cada día y asegúrate de que te gusta para que seas constante y no dejes de hacerlo. Si

tomas demasiadas calorías y no haces suficiente ejercicio puedes engordar. El ejercicio físico moderado te ayu-

dará a quemar las calorías que te sobran. ¡No tienes que ser un atleta para ponerte en marcha!

LA ADOLESCENCIA

Volumen 1, nº 1 Página 5

Aunque algunos no creen que sea auténtico, y parece que el propio escritor no ha confir-

mado la autoría de este testamento, no obstante, circula por internet como un escrito del autor de

Cien años de soledad. Por eso queremos reproducirlo. Además, es un texto profundo, y hermoso.

Gabriel García Márquez se ha retirado de la vida pública por razones de salud: cáncer

linfático. Ahora, parece, que es cada vez más grave. Ha enviado una carta de despedida a

sus amigos, y gracias a Internet está siendo difundida.

“Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo y me regalara un

trozo de vida, aprovecharía ese tiempo lo más que pudiera”.

Posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo.

Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan.

Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perde-

mos sesenta segundos de luz. Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando

los demás duermen.

Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, de-

jando descubierto, no solamente mi cuerpo, sino mi alma.

A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse

cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse!

A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo aprendiese a volar.

A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido.

Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres... He aprendido que todo el mundo

quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la for-

ma de subir la escarpada.

He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por primera vez,

el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre.

He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de

ayudarle a levantarse.

Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero realmente de mucho no

habrán de servir, porque cuando me guarden dentro de esa maleta, infelizmente me es-

taré muriendo.

Siempre di lo que sientes y haz lo que piensas.

Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y

rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.

Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo diría “te quiero” y no asumiría,

tontamente, que ya lo sabes.

Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero

por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero,

que nunca te olvidaré.

El mañana no le está asegurado a nadie, joven o viejo. Hoy puede ser la última vez que

veas a los que amas. Por eso no esperes más, hazlo hoy, ya que si el mañana nunca lle-

ga, seguramente lamentarás el día que no tomaste tiempo para una sonrisa, un abrazo,

un beso y que estuviste muy ocupado para concederles un último deseo.

Mantén a los que amas cerca de ti, diles al oído lo mucho que los necesitas, quiérelos y

trátalos bien, toma tiempo para decirles “lo siento”, “perdóname”, “por favor”, “gracias” …

y todas las palabras de amor que conoces.

Nadie te recordará por tus pensamientos secretos. Pide al Señor la fuerza y sabiduría para

expresarlos. Demuestra a tus amigos y seres queridos cuanto te importan”.

Fuente: Anónimo, recibido por Internet – Agosto 2005

TESTAMENTO DE GARCÍA MARQUEZ

Página 6 Sherezade

“Si por un

instante Dios

se olvidara de

que soy una

marioneta de

trapo y me

regalara un

trozo de vida,

aprovecharía

ese tiempo lo

más que

pudiera”.

Miguel Hernández (1910-1942). Celebramos el centenario de su nacimiento. Su poesía señala claramente la transición entre la generación del 27, (Dámaso Alon-so lo llamó “genial epígono”) y la generación del 36, su influencia en la poesía de la posguerra ha sido considerable. Pero su obra está cubierta de una espesa capa de leyendas sobre su persona, que en ocasiones solapan sus logros poéticos; pues, se ha exagerado su pobreza y su incultura, al ser un cabrero que se escolarizó tarde (tenía nueve años) y que por necesidades familia-res debió abandonar los estudios para seguir ayudando en el pastoreo, que compagina con su avidez de libros, de lecturas de los clásicos, de aprender a escribir poesía culta. El resultado fue Perito en lunas (1933) inspirado en Góngora, este libro no es más que un ejercicio de estilo, que carece de sello personal. El siguiente libro, El rayo que no cesa (1936) es una explosión de pasiones e impulsos intensos, como dice él mismo en uno de los poemas “una revolución dentro de un hueso, un rayo soy sujeto a una redoma”. El tema principal es el amor, pero mezclado con el arrebato, el furor, el sentimiento, la de-sesperación y las sombrías premoniciones de la muerte, como nos muestra en su poema “Sino sangriento”, que ha servido, otra vez más, para acrecentar esa leyenda de Hernán-dez, pues profetiza su trágico destino que se cumpliría años más tarde. Su “Elegía” es uno de los poemas más famosos, con ese respeto impuesto como fruto de una sincera efusión de dolor por la repentina muerte de su “compañero del alma”. Durante la República se convirtió impulsivamente del catolicismo más ferviente al comunismo, fruto de ello es Vientos del pueblo (1937) cuyo propósito eran recitarse como poesía de guerra entre los camaradas. El hecho de la guerra y sus penalidades re-sultó beneficiosa para la poesía de Miguel, pues su obra se desnuda de artificios retóri-cos y de dramatismo para alcanzar en El hombre acecha (1938) una serenidad reflexiva y personal ante el panorama de tristeza y sufrimientos que ve reflejados en sus compañe-ros. Al término de la guerra, Hernández fue hecho prisionero y sentenciado a muerte. Murió de tuberculosis en la celda, con treinta y dos años. Los poemas escritos en la cárcel y publicados bajo el título Cancionero y romancero de ausencias constituyen una queja conmovedora, nos sensibilizan sus sentimientos, sus circunstancias de un hombre separado de su esposa y de su hijo, a los que nunca volvería a ver. Lo nuevo es que en su poesía van de la mano los sentimientos y los recursos poéticos Su palabra parece directamente arrancada del corazón (“la lengua en corazón tengo ba-ñada”), conjugada con el arte popular y las técnicas más sabias. Todo para buscar una mayor densidad expresiva, que hace inconfundible su voz. Piedad Martín

MIGUEL HERNÁNDEZ

Volumen 1, nº 1

“una

revolución

dentro de un

hueso, un

rayo soy

sujeto a una

redoma”.

Página 7

Había una vez dos ranas que cayeron en un reci-piente de nata. Inmediatamente se dieron cuenta de que se hund-ían: era imposible nadar o flotar demasiado tiempo en esa masa espera como arenas movedizas. Al principio, las dos ranas patalearon en la nata para

llegar al borde del recipiente. Pero era inútil; sólo conseguían chapotear en el mismo lugar y hundir-se. Sentían que cada vez era más difícil salir a la superficie y respirar. Una de ellas dijo en voz alta: «No puedo más. Es imposible salir de aquí. En esta materia no se pue-de nadar. Ya que voy a morir, no veo por qué pro-longar este sufrimiento. No entiendo qué sentido

tiene morir agotada por un esfuerzo estéril». Dicho esto, dejó de patalear y se hundió con rapi-dez, siendo literalmente tragada por el espeso líquido blanco. La otra rana, más persistente o quizá más tozuda se dijo: «¡No hay manera! Nada se puede hacer para avanzar en esta cosa. Sin embargo, aunque se acerque la muerte, prefiero luchar hasta mi últi-

mo aliento. No quiero morir ni un segundo antes de que llegue mi hora». Siguió pataleando y chapoteando siempre en el mismo lugar, sin avanzar ni un centímetro, durante horas y horas. Y de pronto, de tanto patalear y batir las ancas, agitar y patalear, la nata se convirtió en mantequi-lla. Sorprendida, la rana dio un salto y, patinando,

llegó hasta el borde del recipiente. Desde allí, pudo regresar a casa croando alegremente. BUCAY

CUENTOS DE BUCAY

Página 8 Sherezade

“aunque se

acerque la

muerte,

prefiero

luchar hasta

mi último

aliento. No

quiero morir

ni un

segundo

antes de que

llegue mi

hora”.

Ranitas

Había una vez una princesa, que quería encontrar un esposo digno de ella, que la amase verdaderamente. Para lo cual puso una condición: elegiría marido entre todos los que fueran capaces de estar 365 días al lado del muro del pala-cio donde ella vivía, sin separarse ni un solo día. Se presentaron centenares, miles de pretendientes a la corona real. Pero claro al primer frío la mitad se fue, cuando empezaron los calores se fue la mitad de la otra mitad, cuando empezaron a gastarse los cojines y se terminó la comida, la mitad de la mitad de la mitad, también se fue. Habían empezado el primero de enero, cuando entró diciembre, empezaron de nuevo los fríos, y solamente quedó un joven. Todos los demás se habían ido, cansados, aburridos, pensando que ningún amor valía la pena. Solamente éste joven que había adorado a la princesa desde siempre, estaba allí, anclado en esa pared y ese muro, esperando pacientemente que pasaran los 365 días. La princesa que había despreciado a todos, cuando vio que este muchacho se quedaba empezó a mirarlo, pensando, que quizás ese hombre la quisiera de verdad. Lo había espiado en Octubre, había pasado frente a él en Noviembre, y en Diciembre, disfrazada de campesina le había dejado un poco de agua y un poco de comida, le había visto los ojos y se había dado cuenta de su mirada sincera. Entonces le había dicho al rey: - Padre creo que finalmente vas a tener un casamiento, y que por fin vas a te-ner nietos, este es el hombre que de verdad me quiere. El rey se había puesto contento y comenzó a prepararlo todo. La ceremonia, el banquete e incluso, le hizo saber al joven, a través de la guardia, que el prime-ro de Enero, cuando se cumplieran los 365 días, lo esperaba en el palacio por-que quería hablar con él. Todo estaba preparado, el pueblo estaba contento, todo el mundo esperaba ansiosamente el primero de Enero. El 31 de Diciembre, el día después de haber pasado las 364 noches y los 365 días allí, el joven se levantó del muro y se marchó. Fue hasta su casa y fue a ver a su madre, y ésta le dijo: - Hijo querías tanto a la princesa, estuviste allí 364 noches, 365 días y el últi-mo día te fuiste. ¿Qué pasó?, ¿No pudiste aguantar un día más? Y el hijo contestó: - ¿Sabes madre? Me enteré que me había visto, me enteré que me había elegi-do, me enteré que le había dicho a su padre que se iba a casar conmigo y, a pesar de eso, no fue capaz de evitarme una sola noche de dolor, pudiendo hacerlo, no me evitó una sola noche de sufrimiento. Alguien que no es capaz de evitarte una noche de sufrimiento no merece de mi, Amor, ¿verdad ma-dre? Cuando estás en una relación, y te das cuenta de que pudiendo evitarte una mínima parte de sufrimiento, el otro no lo hace es, porque todo se ha ter-minado.

LA PRINCESA BUSCA MARIDO

Página 9 Sherezade

“Cuando estás

en una

relación, y te

das cuenta de

que pudiendo

evitarte una

mínima parte

de

sufrimiento, el

otro no lo hace

es, porque

todo se ha

terminado.”

Princesa

Allium cepa —Soy una cebolla, una sucia y maloliente cebolla—se la-

mentaba—. Me pudro en el tiempo, quiero pero no alcan-

zo. No soy más que una mísera cebolla.

—¿Me deshago de mis capas? ¿Qué sería de mí?—Se pre-

guntaba—Entonces apenas sería —se contestaba.

En aquel momento mil voces amigas lo calmaron: —Sólo

me queda esperar—dedujo.

Así fue que se quedó muy quieto bajo el sol, secándose y

consumiéndose esperando la llegada de su hora.

Con la piel ya descascarillada por los rayos, perdió el co-

nocimiento. Allí yacía, muerto, inmóvil, el hombre cebo-

lla.

Llegó el día de su entierro y, por primera vez en su vida,

nadie lloró por él.

Diego Castaño Chillarón

CREACIÓN LITERARIA

Volumen 1, nº 1

“Llegó el

día de su

entierro y,

por primera

vez en su

vida, nadie

lloró por

él.”

Página 10

La Montaña

Verdes hojas mecidas por el viento,

Claras aguas susurran al pasar, Lo único que escucho, mi pensamiento, Me invita a un mundo donde reposar.

Tú que fuiste forjada a fuego lento.

Tú que nos das el aire del que respirar. Perderme entre tus bosques no lamento,

Ni tu hermosa belleza contemplar.

Es por ti, que los alados poetas, Con sus alegres y hermosos cantares,

Proclaman tu gran historia atemporal.

Desde tus oscuras, profundas grietas, Hasta las altas nieves invernales, Se aprecia,... tu grandeza natural.

Damián Nieto

SONETO

Volumen 1, nº 1

“Tú que fuiste forjada a fuego

lento. Tú que nos das el

aire del que respirar.

Perderme entre tus bosques no lamento,

Ni tu hermosa belleza

contemplar.”

Página 11

CURIOSIDADES

Página 12 Sherezade

FOTOGRAFIAS DE TOLEDO.pps

FOTOS ANTIGUAS DE TOLEDO

Página 13 Sherezade

CONCURSO_DE_ATARDECERES.pps

Concurso Atardeceres

Volumen 1, nº 1 Página 14

Pueden ofrecer ayuda a la

revista enviando artículos al

siguiente correo:

[email protected]

BUZON PARTICIPACIÓN

Página 15 Sherezade

“quien lee

mucho y anda

mucho, ve

mucho y sabe

mucho...”

IES CARLOS III TOLEDO