02 JUL 0

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www.maquenorepublik.com

INDICE

BLA/BLA/BLA 07PALABRAS DEL DIRECTOR

MAESTROS 08CONDUMIO: 20 BANDAS 20 TEMAS

HÉROES DE VERDAD 14CÁLICO ELECTRÓNICO

OPINIÓN 18EL ROCK ECUATORIANO¿Alcanzamos la madurez?

OBRA GRÁFICA 23RÓGER YCAZA

LA COLUMNA DEL CHIVO 28¿EL TAMAÑO IMPORTA?

CUIDADANOS DEL MUNDO 34MAX EPSTEIN

TOMA TU MAQUEÑO 38ENSAYO GRÁFICO

Todos los derechos reservados©. La Revista Maqueño es una publicación de Maqueño Republik y SUTTI Studio, Ecuador. Los artículos publicados reflejan la opinión per-sonal de los autores. Junio 2009

INDICE INMEMORIAN

MASCATASCARASCA 44LA LETRA CON SANGRE ENTRA

QUÉDATE FRÍO 48LA EDUCACIÓN EN CIFRAS

TUBO DE ENSAYO 52BIORN BORG

ENTRE CANÍBALES 60PÁNICO MORAL

EL CALDERO 65EL INFIERNO Y EL PARAÍSO

CRÓNICA 66LA BUNGA

TESTIMONIO 72PANCHO VIÑACHI

GENTE MAQUEÑO 76ALEXANDRA ALVARADO

Dirección General/JUAN ZURITA jezurita@gmail.com

Dirección Ejecutiva/EDWIN ZURITA maquenoreblik@gmail.com

Edición/ANDREA ÁVILA J.

ColaboradoresAndrés CadenaJalál DuBoisRodrigo PadillaXavier AndradeRomina Ycaza

Producción/Sutti StudioDiseño/Anabela OjedaFotografía/Juan Zurita

Ventasmaquenorepublik@gmail.com(593-2) 2547007/2277401(593-9)526 0801

©2009, ECUADOR06

Revista Maqueño Republik Año 3, edición No 2. Ecuador, Julio 2009

07

El trono, el centro mismo de la creatividad, horas de placer literario y pasión escatológica. Bienvenidos a la tercera entrega de la revista Maqueño. Nos tomamos un tiempito largo para evaluar y planificar el regreso.

En este número rendimos un justo homenaje al retrete, escusado o water: placentero espacio donde el Yo se integra y se expresa en su totalidad, donde somos y donde creamos. Quién no ha tenido sus mejores ideas en ese lugar. Nuestro punto de partida abre las puertas a nuevos temas: música, músicos, calles, grafittis. El espectro urbano absurdo y maravilloso que compartimos. Una vez más nos presentamos ante ustedes con lo mejor de nuestra charla cotidiana, porque para hacer camisetas siempre volvemos a lo básico y sim-ple, como si visitásemos el Edesa donde depositamos una partecita de lo que vamos dejando de ser.

BLA/BLA/BLA

20 bandas, 20 temasCondumioGuanaco presenta

La vanguardia musical ecuatoriana está dentro del álbum. Son temas de tendencias no tradicionales dentro del panorama local.

Condumio

De MC a “curador musical”, Juan Pablo Cobo, el Guanaco, hizo un Condumio con veinte ingredientes: el disco que acompaña a la revista Maqueño. El trabajo comenzó para-lelamente a la organización de la gira que llevaría a Sudakaya al otro lado del charco: Terminal Europa 2009. En esta entrevista, el Guanaco nos cuen-ta del proceso de selección de temas y de la creación del disco.

¿Cuál fue el criterio para elegir los veinte temas del álbum?Primero reuní alrededor de 800 pro-puestas entre demos, eps y álbumes:

unos de gran calidad otros muy case-ros. No quería perder la oportunidad de encontrar una joya oculta. Al final, me di cuenta de que las propuestas con mayor calidad de sonido casi siempre son las que demuestran atri-butos en producción, composición y trabajo en pequeños detalles. Una vez que ubiqué las grabaciones, me dejé llevar por la música, la letra o el ritmo.

¿Hay temas que prefieras?Condumio tiene temas que siento más cercanos y otros que no son el tipo de música que escucho habi-tualmente. Creo ser muy abierto

musicalmente así que seleccioné aquellos temas que encerraban excelen-tes propuestas musicales. Muchas bandas que me gustan no fueron inclui-das porque aún no tenían una grabación que las represente dignamente, y otras porque no calzaban dentro del concepto del álbum.

De MC a compilador musical…Para mí siempre fue un

sueño hacer este trabajo. De adolescente hice casetes, luego CD y ahora playlist. Siempre he sido un selector frustrado, como muchos melómanos. Me ha influenciado mucho el trabajo de otros MC como RZA que produ-jo el soundtrack para Kill Bill. Ya dirá la crítica si está bien o mal. Lo importante es que la pasé muy bien haciendo Condumio. Lo disfruté mucho.

¿Cuánto tiempo tardaste?El trabajo me tomó un mes. Las bandas tuvieron mucha predis-

posición. Algunas me sugirieron otro tema pero les expliqué que no era una compilación de singles, sino que la selección iba en función del carác-ter del álbum, que es una especie de banda sonora de un día común en el Ecuador.

¿El tema recurrente en el disco es la ciudad, la vida urbana?Quise que la música sea urbana y actual. La vanguardia de la música joven ecuatoriana está dentro del álbum. Los temas responden a ten-dencias no tradicionales dentro del panorama musical local. La propues-ta es nueva dentro del medio y, en algunos casos, fuera de él. Condumio está lleno de fusiones y al-ternativas novedosas. La única forma de que nuestra música sobresalga a nivel mundial es imponer un sonido propio y una forma de hacerlo es el regreso a la raíz. Este material es una

buena carta de presentación al mun-do, de la música ecuatoriana actual.

¿A qué llamas música alternativa?La música independiente tiene una propuesta más sincera, se podría decir que más inocente porque se propone hacer música, sin importar la generación de recursos económicos millonarios. Además, se mantiene fuera de las fórmulas radiales locales que son absolutamente caducas. La música alternativa del Ecuador es la que más propone, ya que sin muchos recursos crea, produce y comerciali-za obras arriesgadas para un público creciente y totalmente fanático, ávido de música intelectualmente más rica.

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La cosa del éxito es que muchas veces es inexplicable o, al menos, inesperado. Tomemos el ejemplo de Cáli-co Electrónico, una serie flash española que, tras unos años en la red, cuenta con millones de seguidores en el mundo, un cómic impreso y, ahora, una serie televi-siva. Pero así, resumido, todo parece fácil.

¿UN HÉROE GORDONFLÓN Y RIDÍCULO?

Cálico Electrónico es un superhéroe a la inversa: chaparro, regordete, sin poderes especiales y siempre afecta-do por sus rivales. En su web, donde se accede a los capítulos (de poca duración) de las tres temporadas se dice que es «aspañol»: el humor del antihéroe es ibérico. Su creador, el español Niko -amante del cine de Lynch-, tomó las características más risibles de sus coterráneos y las extremó hasta el esperpento: Cálico es malhablado, torpe, soberbio y un «pesao» con las mujeres, según él mismo. Habría que aumentar que tras una lucha en la que queda mal parado, al voltearse se le ve la raya...

La libertad de las series flash, sin censuras ni amarres publicitarios, permite hablar de todo y en cual-quier tono. Cálico tiene un humor suspicaz que se ríe de lo cotidiano; el recurso es la parodia, y cuando es

autocrí-tica, el cinismo (al final de cada capítulo, se pasan supuestas escenas, como bloopers de actores, para reírse de la serie misma). Numerosos personajes, escenas, can-ciones y frases del cine, la TV y los cómics se reeditan en son de burla.

El mérito es el universo de refe-rencias tras el que se escuda este antihéroe: la ridiculez o la vulga-ridad, según el caso. Su nombre

recuerda al pirata del s. XVII Jack Raham, conocido por su colo-rida y delicada ropa de calicó (textil ligero de algodón), como «Calicó Jack». En él también se basa Jack Sparrow (Piratas del Caribe) y, antes, un personaje de la celebérrima tira cómica Las aventuras de Tintín. En Cálico Electrónico reviven el nombre, el mostacho y la apariencia estrafalaria.

Las referencias, los prés-tamos, las parodias, se sostienen sobre centenares de íconos del cine y del cómic: desde Batman hasta Las Chicas Super-poderosas, pasando por Terminator, Scarface, Mars Attack, The Matrix, Austin Powers, Blade

Runner, Calvin y Hobbes y muchos más.

Este gordinflón -que se excita irremediablemente ante una malhe-chora de enormes atributos- empezó como mascota de Electronicaweb, empresa que vende artefactos de au-dio y videao en la red. La tienda le provee de inverosímiles armas para derrotar a sus no menos ridículos enemigos. Aunque se lo relaciona con South Park o Los Simpson, Cá-lico no necesita ser tan burdo como los primeros ni tan crítico como los de Springfield, después de todo, na-ció del marketing. Su éxito, aunque sorprenda, es que se vuelve entraña-ble, inexplicablemente cercano. Y, claro, chistoso.

Visita a Cálico en:www.calicoelectronico.com

grabación profesionales, promo-tores responsables con el público y respetuosos con el medio mu-sical, medios de comunicación

EL ROCK ECUATORIANO¿Alcanzamos la madurez?

Por: Rodrigo Padilla

La respuesta depende de muchas variables: espacios para tocar, bandas con calidad, estudios de

conscientes de su responsabilidad con la escena musical indepen-diente ecuatoriana, con el rock del país.

Para el rock del Ecuador, la tele-visión es un espacio inaccesible: casi la totalidad de productores reducen, en el mejor de los ca-

sos, la música ecuatoriana al pop comercial. No existe un míni-mo interés en presentar música dentro de su programación: la televisión abierta tiene un único programa de vídeos musicales, cuyo contenido cada televidente sabrá juzgar. No existe ninguna alternativa televisiva cultural real: la televisión independiente en el Ecuador es una utopía, todos los canales responden a diferentes intereses políticos y económicos. La música no comercial indepen-diente, el rock ecuatoriano, no genera ni el más mínimo interés para la autodenominada prensa libre del país. La televisión no representa un espacio de creci-miento o de exposición sobre el trabajo del rock ecuatoriano.

La radio es, en teoría, el lugar idóneo para que el rock ecuato-riano se difunda, pero es triste

darse una vuelta por el dial quite-ño: para la mayoría de emisoras, lo único que tiene “vigencia” son los éxitos de los 70 y 80, el término talento ecuatoriano es su mejor invento y su “bandera de lucha”, y las baladas melosas romanticonas son su mejor menú.

En la actualidad, la proliferación de reproductores compactos de música y la posibilidad de acceso que brinda Internet, permiten que cada uno decida lo que quie-re escuchar, ante ello, las radios

18

deben tener contenidos especiali-zados. Existen radios deportivas, religiosas, noticiosas, de adultos, de variedades, de cachos…

Las radios juveniles son, con pocas excepciones, una oda al borreguismo: sus contenidos están dictados desde las grandes disqueras, enchufan al radioescu-cha a una realidad que se basa en el consumo de música hecha por y para las grandes corporaciones, y dejan de lado a la tan maltrata-da escena musical independiente ecuatoriana: el rock.

Hace -más o menos- nueve años nació en Quito la versión noctur-na y de fin de semana de la radio Latina, un espacio que dio la im-portancia a la música hecha en el Ecuador y sobre todo a la música independiente. Seguramente ban-das como RoCola Bacalao, Sal y Mileto, Mamá Vudú, Sudakaya, Guardarraya, Can Can o Muscaria encontraron en la Latina un lugar para sonar, para hacerse escuchar y para desarrollarse.

Hoy por hoy, la escena musical independiente ecuatoriana nece-sita un espacio en donde sonar, porque con emisoras cada vez más interesadas en ser un nego-cio que un medio de comunica-ción, no hay forma de crecer.

19

20

Es la tercera producción discográfica de la banda cuencana La Doble. Un disco de corte electroacústi-

co donde el eje conceptual es el pasado: todas las canciones hacen

referencia directa a experiencias de

los integrantes del grupo, tanto en lo personal como en lo social, políti-co o espiritual. Estas experiencias

dan como resultado un rock puro y experimental.La grabación de los temas se realizó

entre enero y febrero de 2008 en

Cuenca. Luego fue editado, mezcla-do y masterizado en Buenos Aires.

Los discos se encuentran a la venta en el al-

macén de música El Surtido y en el Círculo

Musical en Cuenca y también en la web:

www.myspace.com/ladoblemusica.

AYERLa doble

RÓGER YCAZA

Róger Ycaza es ambate-ño, tiene 32 años, y una hija que se llama Claudia. Estudió diseño gráfico pero -poco a poco- ce-dió paso por completo a la ilus-tración. “Muy pocas veces me encargan trabajos de diseño; una de las ramas que más disfruto

es la imagen corporativa, y el diseño de afiches “. Además, es músico, guitarrista de la mítica banda Mamá Vudú.

Creció rodeado de pinturas, óleos, lienzos y pinceles; su padre es artista plástico. Aunque siem-pre le gustó dibujar, en la ado-lescencia abandonó los colores, y cuando llegó a la Universidad los retomó hasta hoy. Usa varias técnicas en sus ilustraciones: tinta, acrílico, lápiz, acuarela, digital, de ahí que sus trabajos sean variados.

Róger ha ilustrado más de cua-

renta cuentos y novelas infanti-les y juveniles para las editoria-les más importantes de Ecuador, México, Perú y España. Pero muy pronto, palabras e imágenes serán suyas: Alfaguara Infantil trabaja en la publicación de sus dos primeros libros: “Sueños” y “La emocionante historia de un valiente gato que subió a la rama más alta de un árbol...y luego no pudo bajar” verán la luz en julio de este año.

Sus ilustraciones también se han publicado en revistas y textos escolares, y han aparecido en empaques de discos. Róger realiza cada una de sus ilustraciones de manera “honesta, sin mentiras ni pretensiones “ busca resultados que lo dejen satisfechos a él y a sus clientes. Su ética profesional se guía en un solo principio que también es determinante en su quehacer musical: “no me gusta vender mi trabajo sólo por dinero,

analizo muy bien cada proyecto, lo estudio detenidamente, lo leo una y otra vez, y cuando lo siento mío, empiezo a traba-jar.”

En su página web: www.rogerycaza.com y en su blog www.rogerycaza.blogspot.com se pueden ver sus trabajos.

El power dúo manabita que no rompe corazones pero sí la rompe. No es un disco de larga duración, es un disco que dura y se va de largo. Los siete cortes que ajustan el EP “No somos siameses” (Carter Media, 2009) son las siete extremidades de una criatura de circo, un freak rockero y ambulan-te que se originó en las profundidades del mar, y ahora camina de lo más tranquilo entre nosotros, como si no tuviera nada que perder y, menos aún, que temer.Los juguetes son los mismos: guitarra, batería y voz. Cero partituras. Cero huevadas. La banda, la sensación, el feeling y la atmósfera son lo que ha cambiado, para no morir en la pausa de los tiburones infelices. Los discos de Los Pescados no responden a nada ni a nadie, sólo preguntan, abren, perforan y dejan el túnel habilitado para que el resto pase.

NO SOMOS SIAMESESLos pescados

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MAPA DE RUIDOMama Vudú

Este disco es el resultado de un proceso de crea-ción intenso, donde se unifican los elementos que determinan el sonido de Mamá Vudú: experimenta-ción y fascinación por el rock’n’roll. Hablando de lo estrictamente musical podemos contemplar la consolidación definitiva de un soni-do, un ideario musical que -sin ser estricto- perma-nece como espina dorsal sosteniendo canciones de pureza pocas veces lograda. Se destaca la produc-

ción de Daniel Pasquel (Can Can), quien consigue resaltar el espíritu imaginativo de la banda.Mapa de Ruido es un disco in-dispensable para comprender la historia del rock ecuatoriano, un compendio de música transgresora e iconoclasta.

VÍNCULOS:www.mamavudu.com

www.myspace.com/mamavuduwww.myspace.com/bridgeconsulting

ladrando@mamavudu.com

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Por: Jalál DuBois Psicólogo clínico y productor de TV

LA COLUMNA DEL CHIVO

TAMAÑO¡Por su pollo que sí! Aunque sea difícil de admitir, todos los que podemos llamarnos portadores del miembro que “tienen los niños y las niñas no”, no nos perdemos la ocasión para incluir en la amena conversación entre panas la “estatura del primo”.

¿EL

IMPORTA?

Tenemos una relación de amistad íntima con nuestro mejor y peor aliado, y hasta le ponemos nombre, y no cualquiera, sino uno que denomine grande-za: Nerón, sultán, el mandamás, paleta del chavo, perro salchi-cha.

Nadie le pone de nombre: firulais, cuzo (el cuzo maldito, capaz, pero no cuzo a secas), peluchín, boby, etc.“El tamaño no importa, sino cómo se mueve” dice anónimo (seudónimo para “otro que lo tiene chiquito”).

Pruebas científicas ratifican que así es: el tamaño no es importante en el mo-mento de la satisfacción sexual, igual estamos ahí con “el tema”.

No es cuestión del tamaño tal cual, porque hace rato que la humanidad ha dejado de andar llucha mostrando al “colgado”, aunque intentamos ver el tamaño del calzado o el porte de la mano para determinar, por alguna extraña lógica matemática, la relación con el largo del pene (con razón tiene tanto apodo. Feo nombre le pené).

Pero éste es un tema varonil. Una mujer puede aludir al tamaño del “amigo” para halagar a su “Simba-

macho-castigador”: ¡Uy! Si mi hombre lo tiene ¡ay! (léase “como de este vuelo”); o para denigrar al “infeliz-ese-caremazo” luego de una separación tortuosa, y decirle: “primero encuéntrate y después háblale a una dama, ¡cojudo!”. Realmente es al varón a quien le interesa tener el pene del “padre de la horda primitiva”, aquel que tenía todas las hem-bras y al cual los otros machos le tenían miedo. Pero ninguno se ha preguntado ¿como para qué? Si con una ya me vuelvo loco, ¿para qué chugchas quie-ro estar con todas?

Todos quisiéramos ser el man del cacho que tenía el pipí tan grande, que tenía prepucio, pucio y pospu-

cio. Aunque haya operaciones para el agrandamiento, vuelvo y repito: no andamos lluchos por la calle. Y, como ya quedamos, a las que te ven llucho, no les importa, a menos que quieran quedar bien con sus panas o hacerte quedar mal con tus panas.

Realmente el problema no es que hablemos de tamaños. Todo se relaciona con lo que hacemos (satisfacer a nuestras hembras) y te-nemos (la herramienta con la cual las satisfacemos). El imaginario colectivo se ha llenado de ejemplos: si juega bien al fútbol: les “da por ahí” a todi-tos en la cancha. Mostrar “mis nuevos zapatos super fly de Ronaldinho”: ése de ley la tiene grande, porque los super fly son mejores que tus kit dealuca. Un trabajazo que puede ser controlado desde una Blackberry del tamaño de una uva, significa que el del “trabajazo” tiene una rubia rica-za, y que el Blackberry pequeño lo

hace poseedor de “una cuestión grande”.

Lo importante es no caer en la necesidad de seguir comparando el tamaño del pipí con los objetos que conseguimos para sentirnos superiores. Si realmente quisiéra-mos abordar el tema: mostremos todos “el pollo” y midámoslo con regla, a ver quién gana. Pero estoy seguro que nos sorprenderá quien gane, porque no corresponderá a los clichés del momento, ni el ganador querrá asumirse “rey del mundo”, porque no lo será.

Cinco años se tomó la agrupación quiteña para cocinar su nueva

producción. Esta banda, desde su aparición hace ocho años, ha alimen-tado el espectro musical ecuatoriano

con una sólida propuesta que tran-sita por diversos géneros, lo que ha

consolidado sonido y lírica entre los muchachos. Nunca pasan desaper-cibidos, son más bien los líderes de

un culto que se reinventa en cada presentación.

Quitarán di Áhi, fue grabado en Quito y masterizado en la Yony. Este

disco no es un viaje, es más bien una experiencia.

QUITARÁN DI ÁHIGuardarraya

www.guardarraya.com

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MAX EPSTEIN

Pasillo y funk… eran los dos extremos del cordel musi-cal que ataba el grupo Esto es Eso para sorprender a to-dos: ¿se podía hacer eso? Sí, se pudo, en un disco cuyo nombre ejemplifica esta idea de unir opuestos: Ecuafor-nia, que evocaba los lugares de origen de los músicos Luis Villamarín (Ecuador) y Max Epstein (California).

exploraciones entre opuestos

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Ahora, lejos de su natal California, pero manteniendo esa relajada onda tropical, Max se encuentra en un nuevo momento de su trayectoria musical.

¿Será también otra experimentación inaudita? Por lo pronto, en la nueva banda, Guerrilla Clika, se empieza a notar lo que Max aporta al funk del grupo, los ritmos californianos que le salen naturalmente, en unos concier-tos —en español e inglés— bastante movidos. ¿Qué momento de tu trayectoria marca Guerrilla Clika? ¿Qué te dejó Esto es Eso? Tuve una muy buena experiencia con Esto Es Eso, que me enseñó muchí-simo, y ahora estoy pasándola muy bien con la Clika. Con una mezcla de funk y hip-hop bilingüe, los concier-tos son divertidísimos y hemos tenido una reacción positiva del público.

¿Cuáles son tus influencias? ¿Qué bandas y géneros musicales te gusta escuchar?Mis influencias son varias, desde The Beatles y Led Zeppelin, Bob Marley y Peter Tosh, The Roots por su estilo de tocar hip-hop en vivo, y Blackali-cious, un grupo de hip-hop del norte de California. Hip-hop consciente y positivo es lo que más escucho al momento.

¿Cuál es tu propuesta estética actual? ¿Cuáles son tus búsquedas musicales en Guerrilla Clika?Mi propuesta estética es: limpio, cómodo, urbano. ¿Mis búsquedas musicales? Con la Clika busco una manera de expresarme que sea fresca, divertida, y que anime al público.

En cuanto a temáticas, ¿de qué te gusta hablar cuando rapeas? Hablo de todo un poco… trato de no

ser tan profundo, pero tampoco tan light. Me gusta explorar temas de la sociedad, de mi propia mente, juegos de palabras, y frases que quedan con la onda de la música.

¿Cómo vives el Ecuador? ¿Cómo influye en tu creación musical?Ecuador me ha dado tanto… oportunidad, aventura, amor, amistades increíbles y expe-riencias que me han ayudado a aprender y crecer mucho. Por supuesto, mi entorno en estos últimos seis años ha influido mucho en mis letras y composiciones. Vivir aquí me ha hecho una persona más humilde y tolerante, y espero que eso se note en mis letras.

Una brevísima autodefinición... Soy una persona sencilla, extrovertida y estu-diante de la vida. Aprendo algo nuevo todos los días porque eso busco, y me encantan las nuevas experiencias, conocer a nuevas perso-nas y explorar (¡en la música y en general!).

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ENSAYO FOTOGRÁFICO

Cuando entrego las primeras calificaciones a mis estudiantes me lleno de desconsuelo: los promedios generales cada vez empeoran. Al final, siempre, ellos hacen esfuerzos de última hora para aprobar la materia, y con-cluyo que se trata de procesos individuales que, como profeso-ra, solo puedo apoyar, acompa-ñar. Pero tampoco dejo de con-siderar “de dónde vienen”:

Por Andrea ÁvilaComunicadora y filóloga.

El sistema educativo que impera en el país es vertical: el conocimiento se impone, no se generan debates, ni se entregan explicaciones lógi-cas y lúdicas que posibiliten el aprendizaje y destierren para siempre el memorismo. Muchos profesores son repetidores de citas y autores. Siempre me pregunto ¿si dejan de pensar, pueden sentir?

• Se siguen repitiendo postulados decimonónicos que demuestran la poca actualización de los contenidos. ¡Y los profesores se oponen a ser eva-luados! Son urgentes las evaluaciones para docentes escolares y universi-tarios, para colegios y universidades (sobre todo para las instituciones que reciben fondos públicos).

• La exigencia de calidad debe ser integral: exámenes de bachillerato y de admisión, cursos de nivelación previos a la carrera, actualizaciones y exámenes periódicos para los docen-tes, revisión de los pénsum de estu-dios y de los sistemas de enseñanza-

• Muchos docentes defienden postu-lados como dogmas: se convierten en sacerdotes de teorías, aunque se pro-clamen ateos, y crean guerras medie-vales: su verdad es la única, y a quien defiende otro postulado, otra mirada, lo enviarían a la hoguera. Los debates argumentados son la excepción, lo que perjudica a los estudiantes que –a veces- deben integrar un bando.

aprendizaje: los hijos de la tecnología tienen otros códigos y otras destrezas, ¿qué sabemos de ellos? Tenemos que ser conscientes de las habilidades de los estudiantes y de que muchos –simplemente- no quieren hacer una carrera universitaria.

Muchos chicos no saben qué estudiar cuando salen del colegio. Sería importante que se dediquen un tiempo a averiguar –sin presiones familiares absurdas- qué es lo que realmente les interesa. El sistema edu-cativo debe brindar oportunidades para ello.

¿Por qué la universidad pública no genera un plan de carreras intermedias? ¿Por qué se ha despre-ciado tanto a los oficios? ¿Está mal ser carpinte-ro, zapatero o plomero? Cada ser es importante en la tarea que desempe-ña, así de simple. • Un título académico no garantiza que su propietario sea un ser humano íntegro, responsable con el mundo en el que vive, y tampoco un sujeto político comprometido con los pro-blemas de su entorno. Es urgente una educación con principios, que deje en claro que somos partes integrantes del mundo y -por tanto- responsables de nuestro accionar dentro de él, de administrar adecuadamente nuestra libertad y de respetar a los demás

en su diferencia. Además, es nuestro deber y derecho involucrarnos en los temas políticos que nos afectan como miembros de una sociedad.

Un profesor dispuesto a la enseñanza, que ame entregar lo que conoce, que se cultive permanentemente, cuide su trato con los demás, exija a sus estudiantes pero que esté atento a sus procesos, valore los esfuerzos y el crecimiento, no la memoria, que sea capaz de transmitir su pasión por lo que sabe y genere responsabilidades, es alguien que no se olvida y deja lecciones académicas y de vida.

EDUCACIÓN EN CIFRASUno de cada

diez niños no entra a la escuela.

de cada tres niños, no está inscrito en primero de básica. 1

17% de niños no asiste a la escuela porque no le interesa

EDUCACIÓN EN CIFRAS

48% de los niños y 56% de las niñas entre 6 y 11 años no van a la escuela por el costo que implica para sus familias.

siete de cada diez niños no terminan la educación básica

encuesta1999

$

Datos tomados del Informe de Progreso Educativo Ecuador 2006.

Año en el que realizó el único estudio nacional sobre evaluación del ci-clo diversificado (actual bachillerato).

1990199119921993199419951996199719981999

2000200122022003200420052006200720082009

UNO de cada diez bachilleres en ciencias logra el dominio de los esquemas de pensamiento lógico-formal.

÷∑±√

1990

EDUCACIÓN EN CIFRAS

Datos tomados del Informe de Progreso Educativo Ecuador 2006.

Sólo un tercio de los afroecuatorianos yun cuarto de los indíge-nas acuden a centros educativos.

Con las tasas de repetición ac-tuales (4%), el Ecuador “pier-

de” más de 30millones de dólares por año.

En los niveles básico y medio

hay cerca de 118 mil profesores fiscales en el país.

EDUCACIÓN EN CIFRAS

Y LOS ABSURDOS COTIDIANOS

Fotos: Romina Ycaza

Iniciaron hace dos años. Han tenido varias alineaciones. Desde hace ocho meses están con la definitiva: Pablo Maya y Sebastián Game en las guitarras, Bastián Napolitano en la batería, Sofía Abedrabbo en la voz, y Toño Cepeda en la voz y el bajo.

Grabaron Todo se destroza en Quito y lo masterizaron en Nueva York en el 2008, y lo presentaron en junio de este año. Son doce temas. Toño define al disco como “una propuesta rockera auténtica, sensata, sincera que no se está con pendejadas. Cero maquillaje.”

La lírica de Biorn Borg es una descar-ga de ironía. “Hablamos de nuestras propias realidades, así que en ese punto es imposible no ser político. Decimos las cosas como las vivimos”, explica Toño.

La banda no cae en la música acadé-mica: el proceso creativo surge como un vómito espontáneo que luego se organiza, para de ahí pasar a la composición. Biorn Borg tiene que ver con rock, punk, indie, con varias cosas. Es difícil encasillarla en un género.

¿Y el nombre? Desde el absurdo, dice Toño: “Siempre nos reuníamos a ha-blar huevadas. Un día el Pablo dijo: hagamos un grupo sueco de rock. Como el tenista Björn Borg era un referente de nuestra niñez, uno de los cinco mejores de la historia, así nos bautizamos.”

La respuesta del público a la banda ha sido efervescente y no decae, por eso confían en recuperar lo invertido con la venta de discos y tocadas.

La banda quiteña que no solo está en su momento sino que, además, está construyendo un momento a su alrededor. Biorn Borg viene, no tan irónicamente, de las aulas de clase. Recibieron la educación pero

TODO SE DESTROZABiorn Borg

no se sometieron al thought

control, ni permitieron que

las partituras construyeran

un muro. Eso les da toda la

autoridad necesaria para,

con conocimiento de causa,

titular su disco Todo se des-

troza. Todo, absolutamente

todo, debe ser destrozado

antes de poder volver a poner

columnas vertebrales y armar

esqueletos. Y eso es lo que

hace esta banda: bombardear

lo que ya fue con un sonido

sólido, amarrado, duro, rápido cuan-do hay que correr para que no te atra-pen, lento y pesado cuando hay que pararse frente al pelotón de fusila-miento y pedir que, por favor, tengan la fineza de quitarnos la venda.

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MORALPor: Xavier AndradeAntropólogo

PANICO

Las tímidas modificaciones a la legislación nacional, formuladas por la Asamblea Constituyente, y la violencia desatada en México como resultado de la ruptura del cómodo pacto social establecido históricamente entre autoridades y mafias. Las visiones dominan-tes, con su absurdo imperativo represivo y militarista, por su-puesto, continúan imperando a pesar de las amplias evidencias de su fracaso.El caso de la marihuana ejem-

plifica a cabalidad el misterio que encierran estas políticas, las mismas que –siendo exportadas desde Estados Unidos al resto del planeta y teniendo como terri-torio de guerra a países como el nuestro– reproducen el status quo de una batalla en la que los datos científicos están lejos de servir de sustento. De hecho, a pesar de las evidencias médicas tanto de los beneficios terapéuti-cos cuanto de los daños mínimos

Las discusiones sobre las drogas (entiéndase ilícitas porque alcohol y tabaco se hallan fuera del escrutinio punitivo) tomaron reciente vigencia local e internacio-nalmente gracias a hechos puntuales:

que la marihuana tiene sobre sus consumidores, y a pesar de los avances logrados al permitir su receta médica para pacientes terminales o con enfermedades como el SIDA en Estados Unidos, el pánico moral sobre la misma continúa imperando y tejiendo fantasmas que obstaculizan la legalización de su consumo para beneficio de quienes la prefieren. Y, de hecho, de la sociedad en su conjunto, puesto que abolir el mercado negro y las conse-cuencias mafiosas que este tiene, dado un tráfico ilegal que per-vierte personas, instituciones y Estados, requiere de un manejo más tolerante de las decisiones individuales para generar entor-nos sociales menos proclives a la violencia.

De hecho, una mirada objetiva a la expansión de ciertas sustancias (concretamente de cocaína y sus derivados, pero también del éx-tasis) que van constituyendo mer-cados internos estables debería promover políticas de salud pú-blica menos basadas en el miedo y la prohibición, y más afines a las necesidades de los usuarios: información que, paralela a mo-dificaciones legales sustanciales, permita gozar responsablemente de las posibilidades y estar atento a los límites y riesgos de cada una de ellas. Hakim Bey viene al caso: decadencia sin enferme-dad, salud sin aburrimiento, este es el mejor antídoto al pudoroso Estado.

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Es un grupo que empezó to-cando por pura diversión y ya lleva más de cuatro años en los escenarios del país. La fuerza y la buena vibra despuntan en los diez temas de este CD: rolas escritas y compuestas en un lugar donde el tiempo parece dilatarse y el sabor se concentra.

www.suburbia.ecsuburbiaecuador.hi5.comwww.myspace.com/suburbiaska

SUBURBIASuburbia

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UNION VERDADERAYahuarsónicos

Sonido aguardientoso, pro-ducto del cantaclaro y la iluminación rastafari. Esta banda reinventa el reggae; lo funde, lo mezcla, y lo perfuma con su lírica de contenido social y espiri-tual, como solo los lojanos de adeveras saben hacerlo.

Música sin pretensiones, honesta, que dice lo que dice la alegría, que es sangre, que es sonido, y que la defienden bailando y cantando. Sangrecita dul-ce, que se dice, sangrecita lojana.

www.yahuarsonicos.com Puedes descargar el álbum “Unión Verdadera” en http://www.mediafire.com/download.php

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EL CALDERO

El infierno y el paraísoUn samurái le pidió a un maestro que le explicara la diferencia entre cielo e infierno. Sin responderle, el maestro se puso a dirigirle gran cantidad de insultos. Furioso, el samurái desenvainó su sable para decapitarle. –He aquí el infierno –dijo el maestro antes de que el samurái pasara a la ac-ción. El guerrero, impresionado por estas palabras, se calmó al instante y volvió a enfundar el sable. –Al hacer este último gesto, el maestro añadió:-–He aquí el cielo.

Alejandro Jodorowsky, El dedo y la luna

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BUNGAMiércoles de

Crónica

Son las 11:00 p.m. En el gigantesco vientre de un dino-saurio industrial, una iluminación empalidece a -más o menos- doscientas personas que se mecen y taratean lo que suena.

Andrés CadenaEscritor

Alrededor, una barra elevada llena de miradas expectantes. El corredor y la balaustrada que conforman un segun-do piso están vacíos, en penumbra. La suma de oscuridad y lobreguez azulina empapa las miradas. «Es otra noche más», dicen Los Prisio-neros. Muchos intentamos corear a los chilenos, porque es agridulce la idea del «baile de los que sobran». Aquí se busca lo diferente, lo otro. La Bunga es un lugar alternativo. Así nació, hace nueve años, cerca de la 12 de Octubre. Ahora está en la Ore-

llana y 6 de Diciembre. Ha cerrado por lapsos para readecuaciones. La última fue hace cinco meses. Pese a las transformaciones, el bar recurre a su esencia para promocionarse: la marginalidad como originalidad.

Los miércoles son días de bunga. Ambulan figuras clásicas, roles que se interpretan, juegos con los límites: los punkeros, rockeros y amantes del ska; los acechadores de gringas; los

nuevos hippys; los gringos y su desen-freno acartonado; los desgarbados treintones; los oficinistas desenmas-carados. Un par de falditas inverosí-miles parecen buscar clientes... Me extrañan unos chamos agrupados y bastante menos relajados que el resto.

La alternatividad —la diferencia frente a la mayoría— radica para La Bunga en la música, dice Carlos Hidalgo, uno de los socios del bar.

Ahora mismo, se oye a Sudakaya, lue-go una ligera de Todos tus muertos, seguida del básico Marley. Hidalgo asegura que se da apertura a géneros que no tienen cabida casi en ningún otro lado. Y con ello explica el amor-fo target al que apelan, «alternativos entre 18 y 30 años». Menciona una actitud pro musical y de expresiones artísticas variadas.

En un muro libre al lado del rectángu-lo de baile, un telón expone un canal de deportes extremos. La imagen es opaca, por defectos de proyección. El

recurso de las acrobacias ambientales se repite en cada bar de la Mariscal. Es una tendencia hacia la yuxtapo-sición de símbolos urbanos sin sus sentidos primigenios. Una pared al fondo tiene estampados sicodélicos fluorescentes; la cueva del DJ tiene la ubicación de púlpito de iglesia, como de rave. La música puede ser tan popular como la cumbia. ¿La margi-nalidad como cliché?

A medianoche: bufidos masculinos, insultos in crescendo y forcejeos de bronca. Dos de los chamos sospecho-sos se revuelcan al pie de la billa. Los amigos —un montón de excitados— los rodean para que nadie interfiera. La luz platinada los revela patéticos: semiabrazados en el suelo, uno a horcajadas sobre el otro, las piernas entreveradas y los cuellos tensos. Se susurran amenazas, ahogadas en el miedo y la emoción. No pasa nada.El man de la puerta llega y los separa.

Aunque a empellones, el montón de amigos del aparente skinhead que estaba sobre el otro, le hacen saber que son poderosos, incontrolables. El man es el mismo que, hace un par de horas, en la entrada me dijo «hoy no hay cover». Todos entran, incluidos los chamos agresivos, que ahora re-tornan a su averno, al lado del baño.

No ha habido mosh. Se arman tríos en sánduches que ondulan al son de la cumbia. Unos encamisados impe-cables esperan otra tanda de música electrónica, un house fácilmente digerible. Yo esperaría Soda, típica; o nuevamente Los Prisioneros. Éste no es el baile de los que sobran; aquí no sobra nadie. Entran todos, pasa todo. La alternatividad ha dejado de ser una respuesta frente a las discotecas de carmelinas y exclusividad artifi-cial, para ser un rótulo permisivo y de carácter ambiguo. Lo «otro» es más bien «todo lo otro».

MERMELADA

TESTIMONIO

Me llamo Pancho Viñachi Asquet. Tengo 28 años. Me dedico a la producción de vídeo ficción, al dibujo, la animación y la mezcla de vídeos en vivo (VJ, vi-yei). Hice poco tea-tro, menos del que me hubiera gustado hacer.

Por el 2001, con el colectivo Sapo Inc. y Gon-zalo Rodríguez, hice mi primera animación: Cristo viene. Luego me dediqué a hacer video de ficción: Mapa para Historia que tuvo una mención en el primer Cero Latitud, y Síndrome que ganó el Festival de Octaedro.

Mermelada me llegó en el momento justo: el proyecto de hacer una animación estaba tomando forma pero no cuajaba, me rondaba una historia de zombis, no quería trabajar con diálogos, quería centrarme en contar la historia con imágenes pero sabía que necesitaba una banda sonora. Compré el disco de Biorn Borg y la canción Mermelada se pegó a mi idea espontáneamente.

La banda sonora funciona como un subtexto de la imagen. La música y la letra no necesaria-mente cuentan la historia pero sí la refuerzan. De alguna manera nunca estuvieron separadas porque -aunque la idea en general existía- no empecé a plasmarla ni en guión ni en dibujo hasta que tuve la canción escogida. El tubo de lubricante y la crudeza de las escenas sexuales

vienen directamente de una conver-sación con un miembro de la banda sobre su visión de la canción.

Del vídeo sólo voy a decir que hay muertos vivientes, traición, un amor perdido, encontrado y vuelto impo-sible. Si no dijera lo de los muertos vivientes posiblemente sonaría a telenovela. Si contara el final, arruina-ría la experiencia. Muchas personas se quedan con la sensación visual del vídeo y luego se dan cuenta de que hay una historia bien construida en él.

Para el storyboard usé lo básico: papel y lápiz. Los primeros cuadros fueron trabajados en una mesa de luz para animación a la manera tradicio-nal: papel y lápiz nuevamente. Esca-neé los lápices y el acabado fue dado mediante una tableta gráfica wacom; es decir, los pasé a tinta en la com-putadora, donde también los pinté y

animé. Hacia el final, y dependiendo de lo complicado de la escena, ya no animaba necesariamente en la mesa sino directamente en la computado-ra. Utilicé Adobe Flash para animar los personajes y Adobe After Effects para componer las escenas. Desde el storyboard hasta el último cuadro de render tardé dos meses y medio.

Ahora tengo un par de ideas con animación pero son proyectos que requieren de más producción. Habrá que ver qué depara el destino. Tam-bién planeo hacer una recopilación de mis trabajos en DVD pero esto aún es el embrión de una idea. Algunos ya están en la web: www.youtube.com/nacoboypro y en una página escondida en el servidor de SAPO INC.: www.sapoinc.com/faltasyerro-res.html (de veras está escondida, la única forma de llegar ahí es sabiendo la dirección).

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ALEXANDRA ALVARADO

Es jefa del Área de Sismología, de la Politécnica Nacio-nal. Ahí, donde ahora “controla” los volcanes, estudió Geología por seis años.

Luego se fue a París doce meses a un máster en Geodinámica y Física de la Tierra. Su especialidad son las fallas tectónicas: esas fracturas que se encuentran en la corteza de la tierra, que se mueven cada cierto tiempo y producen terremotos. “Es emocionan-te saber cómo, por esas fallas, se han creado paisajes, relieves, montañas”, lo dice empapada de la curiosidad que generan los misterios.

Su atención profesional se enfoca en el valle interandino y el suban-dino oriental. Sus volcanes preferi-dos son el Guagua Pichincha y el Tungurahua.“Me gustan por el con-traste: el Tungurahua es rápido, ex-plosivo, espectacular, impresionante en sus erupciones. Sus cambios han hecho que la tierra recupere nuevos nutrientes, se acomode, se trans-forme. Al Guagua le tengo especial afecto porque es un vecino cercano.” La naturaleza me ha enseñado hu-

mildad, y que en nuestra insignificancia debemos adaptarnos a los cambios aunque sean dramáticos.

En la Poli también da clases. El reto con los estudiantes, que han nacido con la destreza de la tecnología, es que se adapten al silencio de la observación. Alexandra tiene vocación para la enseñanza por eso cree importante acabar con estructuras caducas. “La evaluación a los profeso-res reanimaría y actua-lizaría el sistema. No podemos negar que la escuela y la universidad tienen problemas y es urgente superarlos”, dice esta salsera, amante de La Fania.

Telf. 2547 007Quito - Ecuador

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COMPILADA POR GUANACOla banda sonora de mi vida

DE VENTA EN LAS TIENDAS MAQUEÑO REPUBLIK