Revista vision economica anee 1
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DIRECTORIO INSTITUCIONAL
Héctor González CanalesSecretario General
Arturo Castro SandovalSecretario de Interior
Juan Carlos López GaviñoSecretario de Academia
Nancy Viridiana Trejo CastroSecretaria de Finanzas
Martha Cecilia García AmadorSecretaria de Organización
Mauricio Eduardo Arroyo Jardón Secretario de Difusión
REVISTA “VISIÓN ECONÓMICA”Año 1, volumen 1, enero-junio de 2012
DirecciónHéctor González CanalesDiego Federico Juárez Díaz
Comité EditorialMartha Cecilia García AmadorJuan Carlos López Gaviño
Diseño GráficoDirección y Comité Editorial de la Revista
Las opiniones expresadas en los artículos son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no necesaria-mente reflejan los puntos de vista de la ANEE A.C. o de los miembros de la Revista “Visión Económica”
ÍNDICE
Impacto de los Acuerdos Bilatera-les en la Inversión Extranjera Direc-ta, Sector Aéreo Mexicano (1990 - 2010)
Tania Itxelt Miranda Vázquez 5
Temor a Flotar y Blancos de Inflación en los Países Emergentes del G20
Luis Ángel Monroy Gómez Franco 26
La Política Monetaria y sus Mecanismos de Transmisión Yazmín Torres Cortez 38
Paraíso Victimario e Infierno Terrenal. Las Causas del Crimen en México
Gerardo Gazca Solís 48
La geografía del dinero: Una perspectiva de economía política para el estu-dio de las relaciones monetarias internacionales Fernando Arteaga González
Noemi Nallely Barbara Negrete 60
Este primer número de la presente revista es la culminación de un es-
fuerzo conjunto de estudiantes de diferentes universidades de todo el
país, de miembros de la Asociación Nacional de Estudiantes de Eco-
nomía A.C. (ANEE) y de la Mesa Directiva Nacional (MDN) 2011-2012. La
idea inicial de este proyecto, la cual data de hace al menos dos años, fue la de
preparar un compendio de artículos sobre diversos temas de interés tanto de la
Economía nacional como internacional.
Pronto nos dimos cuenta que para cumplir con el objetivo se requeriría
de gran trabajo y dedicación debido a la variedad y a veces hasta por la com-
plejidad de los temas a tratar, para lo cual todos los participantes en esta com-
pilación estuvimos de acuerdo en “aventarnos al ruedo y tomar al toro por los
cuernos”.
La intención de estos trabajos es la de presentar una Visión de la Econo-
mía tanto hacia al pasado como al futuro, ya que es bien sabido que el centro de
nuestro saber es un compendio histórico de cifras y hechos de gran relevancia
históricamente hablando.
Los temas incluidos en esta revista van desde un análisis del sector aéreo
mexicano, pasando por revisión de las políticas monetarias nacionales e inter-
nacionales hasta llegar a estudiar desde una perspectiva económica las causas
del crimen en nuestro país. Todo con la finalidad de contribuir a entender
mejor la naturaleza y los alcances de las decisiones humanas dentro del ámbito
económico, en un ambiente de apertura e inclusión, tratando hasta donde nos
Mural: Omniciencia Autor: Arnold Belkin Ubicación: UAM-Iztapalapa
lo permiten nuestras capacidades el proponer soluciones y sugerir caminos
para llegar a una ruta de desarrollo económico y social.
En el primer artículo de esta revista, se lleva a cabo una revisión del im-
pacto de los acuerdos bilaterales en la Inversión Extranjera Directa (IED) en el
Sector Aéreo Mexicano durante la última década del siglo pasado y la primera
del actual, haciendo hincapié en la globalización y su fomento a la participa-
ción de esta en sectores estratégicos de la Economía mexicana, como lo es el
sector aéreo.
En el segundo, la investigación está centrada en algunas Economías del
G-20, sobre todo por la relevancia que han tomado estas durante los últimos
años en el plano internacional, resaltando los mecanismos de regulación de sus
políticas monetarias.
En el siguiente trabajo, se evalúa tanto a la política monetaria como a
sus mecanismos de transmisión, puesto que dada la importancia que ha ad-
quirido el uso de esta política para estabilizar los precios y la inflación, se ha
vuelto altamente necesario entender el proceso mediante el cual se afecta a
la Economía.
En el cuarto artículo, se toca un tema de mucha actualidad e importancia
para nuestro país, la violencia y la criminalidad, dando una explicación econó-
mica del cómo se origina, del por qué se presentan y cuáles son sus consecuen-
cias, como por ejemplo los costos humanos que esto implica.
Por último, pero no por eso menos importante se presenta un trabajo
sobre la geografía del dinero, en el cual se pretende analizar la actual geografía
monetaria y las relaciones económicas y políticas que la moldean, sugiriendo
la necesidad de un nuevo modelo de Economía política que considere, en el
estudio del contexto monetario mundial, no sólo las relaciones hegemónicas
entre Estados sino también la importancia de los actores privados.
No se puede dejar de mencionar y agradecer la participación de los arti-
culistas que se incluyen en esta primera publicación, como son Tania Miranda
(UAM-A), Luis Ángel Monroy (FE-UNAM), Yazmín Torres (UAdeC-Torreón),
Gerardo Gazca (BUAP), Fernando Arteaga y Noemí Barbara (FE-UNAM)
porque sin su trabajo no se tendría la materia prima de esta revista. Y ade-
más, expreso mi sincero reconocimiento hacia Héctor González Canales, Juan
Carlos López Gaviño y Martha Cecilia García Amador miembros de la MDN
2011-2012 y parte del comité editorial de esta revista por el gran esfuerzo rea-
lizado para que esté concretado el proyecto que hoy tienen ante ustedes.
Julio de 2012.
M. en E.S. Diego Federico Juárez Díaz.
9
Tania Itxelt Miranda Vázquez1
RESUMEN
La globalización ha fomentado la participa-
ción de Inversión Extranjera Directa en sec-
tores estratégicos de la economía mexicana,
como el sector aéreo, pero este hecho no trae
consigo uno de los principales objetivos de la
política económica, el desarrollo económico.
A partir de esta afirmación se desarrolla una
explicación de los beneficios y contradiccio-
nes que la variable macroeconómica (IED) ha
tenido en nuestra economía, así como el papel
de los acuerdos internacionales en materia de
inversión.
Palabras clave: globalización, sector aéreo, in-versión.
INTRODUCCIÓN
Este trabajo pretende explicar el impacto
que ha tenido la inversión extranjera directa
a través de los Acuerdos Internacionales de
Inversión (AII) y de los Acuerdos de Libre
Comercio (ALC) en las aerolíneas de México
en comparación con las aerolíneas internacio-
nales y la competencia que se ha suscitado a
partir de este mismo hecho con el surgimien-
to de las aerolíneas nacionales de “bajo cos-
to” que se han insertado en el sector aéreo.
La globalización en la que se encuentran los
lazos internacionales comerciales se inserta en
todos los sectores de la economía mexicana,
por ello se analizará también el impacto de los
Impacto de los Acuerdos Bilaterales en la Inversión Extranjera Directa, Sector Aéreo Mexicano
(1990 - 2010)
1Licenciada en Economía por la Universidad Autónoma Metropolitana, Azcapotzalco.
10
acuerdos comerciales en la variable macroeco-
nómica (IED), más específicamente el Tratado
de Libre Comercio de América del Norte el
cuál ha causado mucho debate en relación a
los beneficios y pérdidas que se han desatado
desde su firma en diciembre de 1992 en San
Antonio Texas.
El desarrollo de la investigación se deli-
mita en un periodo de 20 años (1990-2010),
donde se ha observado una tendencia al
crecimiento y diversificación de la actividad
aérea, así como la privatización del servicio
del transporte aéreo y de la administración y
operación de aeropuertos.
La información en la que se contextualiza este
trabajo se recolectó de trabajos sobre el sec-
tor aeroportuario y papers relacionados con el
TLCAN, así como estadísticas que se encon-
traron en la Secretaría de Comunicaciones y
Tranzsportes (SCT), en la Secretaría de Eco-
nomía (SE), en el Banco de México (Banxi-
co) y en Aeropuertos y Servicios Auxiliares
(ASA). Se tomaron estos organismos como
clave por la importancia que tienen en el con-
trol, administración y desarrollo del sector
que se está estudiando y el comportamiento
de éste en el comercio mexicano.
Las políticas neoliberales que se han imple-
mentado desde 1990 hasta la actualidad han
permi- tido la entrada de inversión extranjera
directa así como la interacción de los capita-
les más rentables de los países desarrollados
dirigiéndose a países en desarrollo, esto debi-
do principalmente por la no intervención del
Estado en la economía, que impondría res-
tricciones a la rentabilidad del capital o aran-
celes al comercio internacional, dando paso a
la creación de un “nuevo regionalismo” y la
proliferación de los acuerdos de libre comer-
cio.1
A inicio de la década de los ochenta, los ca-
pitalistas imponen un nuevo orden, donde el
gobierno ejerce la función de una empresa
dándole prioridad al accionista e imponien-
do nuevas políticas de estabilidad de precios.
A pesar de que se habla de una intervención
estatal durante este período, se puede obser-
var que ésta se ha caracterizado por ser una
institución que le da prioridad a la hegemonía
1UNCTAD, Informe sobre el Comercio y el Desarrollo, 2007, El Nuevo Regionalismo y los acuerdos comerciales Norte-Sur.
Anee a.c.
11
empresarial. En realidad la autonomía del Es-
tado se ha visto reducida, pues ahora la clase
que domina una supuesta “democracia” se in-
clina hacia los que garantizan rentabilidad del
capital, sin importar el lugar de procedencia
de estos capitales. Una de las controversias de
las políticas comerciales neoliberales es que se
ha visto cómo el poder de las clases dominan-
tes se ha incrementado, permitiéndole que se
introduzcan en asuntos que correspondían al
sector público y ahora se encuentran en el sec-
tor privado; para el caso aeroportuario, se ma-
nifiesta mediante la inversión extranjera, pero
como se verá más adelante, este hecho no ha
se ha reflejado en la mejora del servicio aéreo,
lo que conlleva a que la economía nacional no
se vea beneficiada, aún existiendo desviación
del comercio en el TLC, se esperaba el incre-
mento de la eficiencia en los siguientes casos2:
2 Andere, Eduardo y Kessel, Georgina (Académica e Investigadora del ITAM) Compiladores, México y el tratado trilateral de libre comercio, impacto sectorial.
Al reducirse preferencialmente los aranceles,
disminuye el precio para los consumidores, lo
que conduce a un patrón de consumo menos
distorsionado
a) Al alcanzarse economías de escala por
la ampliación de mercados los costos
de producción se tornen competitivos.
b) Las barreras no arancelarias habían im-
pedido el intercambio a pesar de que
los costos de producción originalmen-
te eran bajos.
Una forma de observar la eficiencia de los
acuerdos comerciales sería que la competiti-
vidad en el comercio internacional del servi-
cio aéreo creciera a la par del incremento en la
IED, y esto se ha alejado de la realidad, don-
de se siguen cobrando tarifas aeroportuarias
elevadas, precios muy por encima del poder
adquisitivo de los trabajadores y la concentra-
12
ción más marcada del sector.
La forma en que operan algunas aerolíneas
mexicanas es a través del financiamiento que
se les otorga en el sistema financiero, la banca
de desarrollo actúa como intermediaria para
la implementación de nuevas estructuras ae-
roportuarias que favorecen a los que utilizan
este servicio (Véase Gráfica 1). A pesar de las
medidas de competitividad que se han toma-
do, el consumo promedio del servicio aéreo
no se ha incrementado, esto debido en gran
parte por las grandes concentraciones del ser-
vicio en sólo dos empresas, la primera de ellas,
Aeroméxico y la segunda, Compañía Mexi-
cana de Transportación Aérea mejor conocida
como Mexicana de Aviación.
Principales componentes de la Inversión Extranjera Directa.
Una forma de captar IED es la firma de AII,
pero cabe destacar que éste no es el único factor
que propicia la entrada de capitales extranjeros
a nuestro país o a cualquier país en desarrollo,
pues existen otros aspectos como el atracti-
voeconómico, el tamaño de su mercado,su
mano de obra y los recursos naturales con los
que cuenta. Esto contribuye a la expansión de
la inversión en la economía mexicana, y más
precisamente en sectores estratégicos, como el
aéreo. “Otro aspecto fundamental es el gra-
do de estabilidad política, que determina el
riesgo político de invertir en un país receptor.
Otros determinantes esenciales de la IED son
las estructuras físicas y tecnológicas del país
receptor, el costo y la calidad de los recursos y
otros insumos, y las medidas de facilitación de
la actividad empresarial, como las medidas de
fomento de la IED, incluida la concesión de
incentivos a los inversores extranjeros”3.
La inversión ha aumentado en términos abso-
lutos en los tres sectores (primario, secunda-
rio y terciario), el crecimiento en el sector de
los servicios, especialmente en los servicios de
telecomunicaciones y electricidad y los servi-
cios prestados a las empresas, ha sido muy sus-
tancial desde el momento en el que los países
receptores empezaron a abrirse a la IED. Un
Acuerdo Internacional de Inversión (AII) tiene
como principales disposiciones el trato justo y
equitativo conforme al derecho internacional,
los inversores extranjeros no deben ser trata-
dos menos favorablemente que sus homólo-
gos nacionales. En lo que respecta a la protec-
ción de los inversores extranjeros se refiere a
las garantías y compensación basadas en nor-
mas internacionales y garantías de libre trans-
ferencia (Véase Recuadro 1).
3El papel de los acuerdos internacionales de inversión en la atracción de inversión extranjera directa hacia los países en desarrollo, Colección de publicaciones de la UNCTAD sobre las políticas internacionales de inversión para el desarrollo.
Anee a.c. Anee a.c.
13
En el efecto de los AII en la liberalización
de la inversión, es preciso distinguir entre
los acuerdos que” solamente” confirman y
aseguran el grado de apertura ya existen-
te para la inversión extranjera, y los que ge-
neran realmente una mayor liberalización.
La liberalización de la IED derivada de los
AII afecta principalmente a los recursos na-
turales y los servicios. El de los servicios si-
gue siendo el sector con más restricciones a
la IED. La liberalización de los servicios se
está negociando fundamentalmente en la
Organización Mundial del Co-
mercio (OMC) en el contexto del
Acuerdo General sobre el Comercio de Ser-
vicios (AGCS). La liberalización en el marco
del AGCS, que tiene por objetivo “lograr un
nivel de liberalización progresivamente más
elevado en el comercio de servicios respetan-
do debidamente los objetivos de las políticas
nacionales”4, es gradual y está lejos de haber
concluido.
La aviación mexicana
México y Estados Unidos, firmaron el primer
convenio bilateral sobre transportes aéreos el 15
de Agosto de 1960, permitiendo así la expansión
de los servicios aéreos entre ambos países, que
sean atendidos por líneas aéreas de las dos partes.
En 1990 participaban cuarenta y tres aerolí-
neas ofreciendo sus servicios en el país, mien-
tras que para 2004 se sumaron dieciséis; esto
muestra que en menos de dos décadas el mer-
4 El papel de los acuerdos internacionales de inversión en la atracción de inversión extranjera directa hacia los países en desarrollo, Colección de publicaciones de la UNCTAD sobre las políticas internacionales de inversión para el desarrollo.
Anee a.c. Anee a.c.
14
cado de servicios aéreos se volvió muy com-
petitivo y cada vez se unían más participan-
tes. Esto requería de una regulación estricta y
eficaz por parte del Estado para el manejo de
las aerolíneas en beneficio de la competencia
y la verificación para evitar la formación de
monopolios.
En 1995 se crea la Ley de Aeropuertos que
permitía la inversión privada y en 1998 se dan
los lineamientos generales para la apertura a la
inversión en el sistema aeroportuario mexica-
no. Estos dos hechos fomentaron la entrada
de capitales extranjeros para invertir en aerolí-
neas mexicanas a las que posteriormente se les
daría concesiones para que la rentabilidad de
éstas se fuera directamente a manos de inver-
sionistas extranjeros y de esta forma tuvieran
un mercado cautivo.
Para 1989, las líneas aéreas internacionales
atendían la demanda de 13 ciudades y en 2004
ya eran 21 ciudades a las que se le brindaba
un servicio de este tipo. En 2005 se da la li-
beralización comercial más intensa permitien-
do la creación de líneas de bajo costo, como
Click Mexicana (antes AeroCaribe), Interjet,
Volaris y Avolar. La privatización de la ad-
ministración y operación de los aeropuertos
ha fomentado la concentración del mercado
dentro del subconjunto de las aerolíneas na-
cionales. A finales de 1980 había una mayor
participación de aerolíneas extranjeras debi-
do en mayor parte por la modificación del
convenio bilateral con Estados Unidos (fir-
mado en 1960); la flexibilización de tarifas
y rutas; el surgimiento de nuevas aerolíneas;
la privatización de Aeroméxico y Mexica-
na (1988-1989); la “guerra de precios” que
se desprendió de la desregulación y crisis fi-
nanciera (1995), así como por la quiebra de
Aeroméxico y Mexicana que posteriormen-
te fue rescatado por medio del IPAB (antes
FOBAPROA) con la condición del control
de Grupo Cintra para asegurar la combina-
ción de las ventajas competitivas y geográ-
ficas de las más importantes líneas aéreas y
empresas de servicios aéreos de México.
Cabe mencionar que Grupo Cintra fue cons-
tituida el 23 de mayo de 1995; a través de sus
subsidiarias, éste presta servicio de transpor-
tación aérea de personas, sus bienes y carga
15
no sólo en México, también lo hace en Norte
América, Sudamérica y Europa. El proceso de
reprivatización para las dos empresas de ae-
rolíneas antes mencionadas, fue complicado,
sobre todo por los cambios de directivos de
Cintra, y por las divergentes resoluciones de
la Comisión Federal de Competencia (CFC)
quien se encarga de proteger el proceso de
competencia y libre concurrencia mediante
la prevención y eliminación de prácticas mo-
nopólicas y demás restricciones al funciona-
miento eficiente de los mercados. Ante esto,
se decidió la venta en 2005 de estas empresas,
con un mecanismo de dos paquetes principa-
les; el primero estaba formado por Mexicana
y Click (subsidiaria de bajo costo) y el segun-
do por Aeroméxico y Aerolitoral. “Mexicana
de Aviación fue vendida por 165.5 millones de
dólares a Grupo Posadas, encabezado por el
empresario Gastón Azcárraga. La operación
incluía la asunción de pasivos por 294 millones
de dólares y arrendamientos de aviones que
implican otros 997 millones de dólares, con lo
que el monto neto de la operación llegaba has-
ta mil 456 millones de dólares”. 5 Finalmen-
te la decisión entre permanecer en el sector
público o privado se culminó con la venta de
esta empresa; la importancia de Mexicana no
se había perdido, pero ahora se encontraba en
manos empresariales.
Competitividad del sector aeroportuario; justificación de la IED
Según la “Encuesta entre las principales em-
presas en el país con inversión extranjera di-
recta”, realizada a 202 empresas por el Banxi-
co y la Secretaría de Economíza, México se
ubica entre las empresas más caras en trans-
porte por sus elevados costos de producción
(Ver Gráfica1). Este hecho limita la competi-
tividad dentro del sector aéreo, repercutiendo
en la economía en su conjunto y justificando
la intervención privada, no sólo en aspectos de
producción o desarrollo, sino en los de con-
trol de administración y operación de los ser-
vicios aéreos.
Como el mercado aéreo nacional presenta in-
eficiencia en sus servicios, entran nuevos com-
petidores tratando de cubrir la demanda con
5 http://www.jornada.unam.mx/2005/11/30/038n1eco.php
Anee a.c.
16
precios más bajos, fomentando que más con-
sumidores tengan acceso al servicio de trans-
porte aéreo. 6 Entre las medidas que ha pro-
puesto la Comisión Federal de Competencia
se encuentra la concesión de entrada de inver-
sión extranjera y la flexibilización de acuerdos
bilaterales para que la competitividad no se
vea limitada por las restricciones interiores
que existen en el sector aéreo nacional.
En comparación con otros países, como Ale-
mania o Estados Unidos, México se encuentra
entre los últimos lugares en la transportación
de carga, esto puede observarse en el Cuadro 1,
lo que lo caracteriza como un país con baja
competitividad en cuanto a este servicio. No
sólo es preocupante su posición frente al mer-
cado internacional, sino también, la forma en
la que caen los millones de toneladas cada año, 6 Comisión Federal de Competencia
desde el año 2000 con un número de 27,316
llegando para el 2009 a 18,663. Por otro lado
se puede observar que para el país vecino la si-
tuación es más favorable, teniendo un número
de dos millones 512,948 toneladas e incremen-
tando su carga hasta tres millones 263, 168 to-
neladas para el 2009.
En la transportación de pasajeros, México
ocupa un lugar similar que el que presenta
en la transportación de carga, mientras que
nuevamente Estados Unidos está en la cima.
Esto en primera instancia se debe a la modi-
ficación del convenio bilateral con este país,
que estimuló la participación mayoritaria de
transporte de pasajeros en ambas rutas, tanto
México-Estados Unidos como Estados Uni-
dos-México.
GRÁFICA1 . COSTO DE PRODUCCIÓN DE LAS EMPRESAS EN MÉXICO
(2007)
Anee a.c. Anee a.c.
17
El número total de pasajeros transportados
por el sector aéreo (servicio doméstico e in-
ternacional) se multiplicó por 2.3 en los últi-
mos quince años. Según la Organización de
las Naciones Unidas, se pasó de un total de
18.6 millones en 1989 a 43.5 millones en 2004.
El aumento en el transporte de carga fue in-
cluso más notable. En el mismo período se
multiplicó por 3.5, al crecer de 158 mil a 561
mil toneladas.
El gasto en el consumo de transporte aéreo en
los hogares ha tenido una caída considerable;
este hecho se remarca en el año 2004 donde se
tenían convenios con 37 países, mientras que
en 1989 sólo se tenían 15.
Algunos de estos convenios se establecieron
con cinco países de Centroamérica y el Cari-
be, región con la que no se tenía ninguno en
1990; casi se duplicó el número de convenios
con países europeos; y creció significativa-
mente, de 3 a 8, el número de convenios con
países asiáticos.7
La baja competitividad que México presen-
ta en la prestación del servicio aéreo, crea las
expectativas para permitir la entrada de IED
y de esta forma incrementar los niveles de
calidad y disminuir costos para las empresas
nacionales establecidas en el país.
7Autoridad Aeronáutica de México
CUADRO 1.TRANSPORTE AÉREO, CARGA (2000-2009)
Fuente: Organización de las Naciones Unidas
Anee a.c. Anee a.c.
18
Inversión pública y privada
La inversión pública y privada en el sector co-
municaciones y transportes desde 1994 hasta
2009 ha tenido un comportamiento creciente,
teniendo más inestabilidad en el sector pri-
vado. En el Cuadro 3 se puede observar el
comportamiento que ha tenido el total de la
inversión pública y privada, así como tam-
bién la inversión en el sector transportes,
que es de interés para el trabajo de investi-
gación, y el sector comunicaciones. La en-
trada de inversión privada en el sector co-
CUADRO 2. TRANSPORTE AÉREO, CARGA (200-2009)
Fuente: Organización de las Naciones Unidas.
Fuente: Sistema de Cuentas Nacionales.
Anee a.c. Anee a.c.
GRÁFICA 2. GASTO PRIVADO EN TRANSPORTE COMO PORCENTAJE DEL GASTO TOTAL.
19
municaciones y transportes fomentó el
crecimiento y diversificación del servicio en
más ciudades cubiertas regularmente por el
sector de aerotransporte. El número de ciu-
dades mexicanas atendidas por aerolíneas
nacionales creció modestamente, de 52 en
1989 a 60 en 2004 (luego de alcanzar un máxi-
mo de 66 en 2001-2002). Pero el número de
ciudades extranjeras atendidas por empresas
mexicanas se duplicó, al crecer de 22 a 46 du-
rante el período analizado.
Como se observa en el Cuadro 3 la inversión
privada en infraestructura aeroportuaria en el
período de 1989 a 1994 es nula, esto debido a
las restricciones que se les imponía a la IED.
En 1995 se da la liberalización comercial y
esto se ve reflejado el el período de 1995-2000,
pues la inversión privada comienza a tener una
participación significativa en la infraestruc
tura de aeropuertos, gracias a la Ley de Aero-
puertos creada en 1995.
Después del año 2000 se observa un creci-
miento ascendente de la inversión privada,
pero para 2009 no se refleja el mismo com-
portamiento, pues hay una caída de 20.12 por
ciento, esto se le atibuye principalemente a
la crisis mundial financiera. Durante el sexe-
nio de Salinas de Gortari la inversión públi-
ca y privada en infraestructura aeroportuaria
apenas alcanzaba los 6,589.8 millones de pe-
sos, mientras que para el mandato de Vicente
Fox esta cifra se cuadruplica con un monto de
23,105.4 millones de pesos. La inversión no
CUADRO 3. INVERSIÓN PÚBLICA Y PRIVADA EN EL SECTOR COMUNICACIONES
Y TRANSPORTES
Anee a.c. Anee a.c.
20
sólo en el sector privado, sino también por
parte del Estado creció significativamente,
pues la demanda por parte de los consumido-
res nacionales creció exponencialmente, sobre
todo por el contexto de globalización en que
se encuentra la economía nacional. A parte de
analizar el comportamiento que ha tenido la
inversión pública y privada en infraestructura
aeroportuaria, es necesario conocer qué papel
ha desempeñado la inversión extranjera, para
CUADRO 4. INVERSIÓN PÚBLICA Y PRIVADA EN INFRAESTRUCTURA AEROPORTUARIA
A PRECIOS CORRIENTES Y CONSTANTES
GRÁFICA 3. INVERSIÓN PÚBLICA Y PRIVADA EN INFRAESTRUCTURA AEROPORTUARIAACUMULADA POR SEXENIO
(Millones de pesos)
Anee a.c. Anee a.c.
21
indagar sobre este tema.Como se observa en
la gráfica cuatro, la inversión del exterior en
México ha tenido un comportamiento cre-
ciente en el periodo 2001-2009, se le puede
atribuir este comportamiento a la liberaliza-
ción del comercio y las no restricciones de
entrada de nuevos capitales en nuestro país.
Una consecuencia positiva de esto es que
para 1994 el Sistema Aeroportuario Nacional
(SAM) contaba con sólo 33 aeropuertos de
servicio nacional. Para el 2005, el aeropuerto
de la Ciudad de México transportó 23,961,089
pasajeros, el de Cancún 9,314,476, el de Gua-
dalajara transportó 5,656,023, el de Mon-
terrey 4,660,138 y el de Tijuana 3,472,074;
estos principales aeropuertos formaban el
68% del total de los aeropuertos nacionales.8
En 1994 eran 50 aeropuertos prestando un
servicio internacional. El número de aero-
puertos nacionales disminuía, mientras que
los aeropuertos que prestaban un servicio
internacional aumentaba, llegando a 61 aero-
puertos para el 2009.
El comportamiento de la IED en el perío-
do 1995-2010 ha sido ascendente, aunque en
2005 cae en 58.4 por ciento, y no se recupe-
ra hasta el 2007, pero sin alcanzar sus niveles
máximos. Para el 2009 cae más profundamen-
te ésta, la causa principal es la incertidumbre
8INEGI, Economía, Transporte aéreo.
GRÁFICA 4. INVERSIÓN DEL EXTERIOR EN MÉXICO (2001-2009)
Fuente: Elaboración propia con datos de Banxico
Anee a.c. Anee a.c.
22
que existe en los mercados debido a la crisis
financiera.Las aeronaves comerciales y par-
ticulares aumentaban de manera paralela,
pero con una diferencia de casi trescientos
por ciento, mientras las aeronaves comer-
ciales son 1,723 para el 2009, las aeronaves
particulares son 5,735 para el mismo año.
CUADRO 5. INVERSIÓN EXTRANJERA DIRECTA EN MÉXICO. TRIMESTRE OCT-DIC
(MILES DE DÓLARES)
TrimestreMiles de
dólaresOct-Dic 1995 2,375,157.0Oct-Dic 1996 3,373,463.0Oct-Dic 1997 2,530,817.0Oct-Dic 1998 3,313,538.5Oct-Dic 1999 3,930,626.8Oct-Dic 2000 5,782,160.5Oct-Dic 2001 4,829,168.8Oct-Dic 2002 6,556,895.9Oct-Dic 2003 3,341,334.6Oct-Dic 2004 8,033,930.5Oct-Dic 2005 4,886,715.6Oct-Dic 2006 4,581,903.8Oct-Dic 2007 6,591,894.5Oct-Dic 2008 6,436,481.0Oct-Dic 2009 2,605,861.8Jul-Sep 2010 2,110,518.3
Fuente: Elaboración propia con datos de Banxico
CUADRO 6. INFRAESTRUCTURA AEROPORTUARIA Y FLOTA AÉREA
Anee a.c. Anee a.c.
23
Reestructuración del Sistema Aeroportua-rio Mexicano
El contexto en el que se encuen-
tra el sistema aéreo en México
ha recaído entonces desde 1995 en el Plan
Nacional de Desarrollo 1995-2000, que esta-
blecía que se debería contar con una infraes-
tructura adecuada, moderna, y eficiente en la
red aérea del país. Con este fundamento, el 9
de febrero de 1998 se publicaron en el Dia-
rio Oficial de la Federación los Lineamientos
Generales para la Apertura a la Inversión en
el Sistema Aeroportuario Mexicano como ya
había sido mencionado antes. Dichos linea-
mientos tienen el propósito de que la apertu-
ra a la inversión en el Sistema Aeroportuario
Mexicano se desarrolle conforme a los obje-
tivos establecidos por el Gobierno Federal,
definiendo las diferentes fases del proceso
de reestructuración de dicho Sistema. Así es
como el Gobierno Federal, a través de la SCT,
definió como prioritario, consolidar y moder-
nizar la red aeroportuaria mexicana, mejorar
la calidad, acceso y eficiencia de los servicios
a través de la participación del sector privado.
ASA ha atendido las necesidades de infraes-
tructura y proporcionado por sí, o por con-
ducto de terceros, los servicios aeroportua
rios; pero es necesario lograr un desarrollo
acorde a la tendencia del sector y del creci-
miento del país, con la participación de la
iniciativa privada. Es por eso que en la actua-
lidad se vive un proceso de licitación para la
colocación de títulos representativos del ca-
pital social. Dentro del marco legal de este
importante proceso, la ley de aeropuertos fo-
menta la modernización de la infraestructura
y tiene como aspectos fundamentales, conce-
siones integrales otorgadas por la SCT, perío-
GRÁFICA 5. FLOTA AÉREA NACIONAL (Aviones)
Anee a.c. Anee a.c.
24
dos de hasta 50 años, prorroga-
ble, con participación accionaria
limitada. Asimismo afirma que el
Estado seguirá ejerciendo la rec-
toría del espacio aéreo, radioayu-
das, telecomunicaciones e infor-
mación aeronáutica.
Se busca mediante estos mecanismos propiciar
la participación de inversionistas y operado-
res de calidad, capacidad y solvencia técnica,
operativa, administrativa, financiera y mo-
ral. Respetar los derechos de los trabajadores
conforme a la ley y asegurar para el Estado las
mejores condiciones disponibles en cuanto a
precio, calidad, financiamiento, oportunidad
y demás circunstancias pertinentes.
A partir de ello, se evaluaron diversas al-
ternativas de agrupamiento de aeropuertos
queincluyeron desde la concesión de los 35
aeropuertos en una sola red, hasta la adminis-
tración por concesionarios independientes en
cada aeropuerto. Esta alternativa se eligió por
ser la que mejor satisface los objetivos y cri-
terios del proceso de apertura a la inversión,
concilia los intereses de los usuarios y cumple
con las expectativas del mercado.
Cada grupo es lo suficientemente atractivo
para incentivar el interés de inversionistas po-
tenciales: cumple con una masa crítica mínima
en términos de pasajeros e ingresos, así como
con una adecuada proporción de pasajeros
internacionales, que representa un potencial
para el desarrollo de actividades comerciales.
Adicionalmente, facilita una comparación en
cuanto a la calidad de los servicios e indica-
dores de desempeño tanto para los grupos
en su conjunto, como para los aeropuertos
de manera individual. Permite la aplicación
de un marco regulatorio sencillo y transpa-
rente que resulta en un esquema aceptable
para los usuarios, especialmente a las líneas
aéreas quienes perciben alto riesgo en el caso
de un solo concesionario para todo el sistema.
Considera al AICM de manera independien-
te, el cual es comparable internacionalmente
y puede ser más sencillo de asimilar por los
inversionistas potenciales.
Derivado de lo anterior, en el mes de mayo
de 1998 se constituyeron legalmente las so-
ciedades controladoras de aeropuertos como
empresas de participación estatal temporal
mayoritaria, denominadas:
• Grupo Aeroportuario del Sureste,
S.A.de C.V.
25
• Grupo Aeroportuario del Pacífico,
S.A.de C.V.
• Grupo Aeroportuario del Centro
Norte, S.A.de C.V.
• Grupo Aeroportuario de la Ciudad de
México, S.A.de C.V.
Estas últimas constituyeron, por cada uno
de los aeropuertos de su grupo, una sociedad
concesionaria como empresa de participación
estatal temporal mayoritaria, otorgándoseles
el título de concesión del aeropuerto corres-
pondiente, por lo que son responsables de su
administración y operación. Las sociedades
controladoras serán propietarias del 100%
(menos una acción) de las sociedades conce-
sionarias del grupo de aeropuertos respectivo.
Asimismo y con el objeto de asesorar en as-
pectos técnicos, de ingeniería, administrati-
vos, financieros, de procesamiento y control
de datos, de supervisión, de organización de
mercadotecnia y en general, cualquier clase de
servicios que requieran las empresas concesio-
narias, se constituyó una sociedad de servicios
aeroportuarios por cada Grupo.
CONCLUSIONES
Las limitaciones del mercado de aerotrans-
porte, la desigual distribución del servicio y
las dificultades para regular a las empresas po-
derosas del sector están claramente asociadas
a los altos niveles de desigualdad y pobreza
que caracterizan al país. Existe un sector ae-
ronáutico muy pequeño y un aparato admi
nistrativo en el que la confianza interperso-
nal tiene mucha importancia y los criterios
impersonales no tanta. Las políticas públicas
que se han implementado han favorecido a las
grandes inversiones que son capaces de absor-
ber la magnitud de rentabilidad por sus altos
niveles de capital.
La causa fundamental de la IED en el sector
aéreo se ha visto reflejada en el crecimiento de
este servicio, pero éste sólo se brinda a las per-
sonas con mayor nivel de ingreso y éstas mu-
chas veces no acceden a un servicio nacional,
sino prefieren uno internacional.
El problema de la IED es que ésta llega a
nuestro país, con facilidad, se inserta en nues-
tro mercado, obtienen niveles de rentabilidad
26
muy elevados, y posteriormente sale para in-
sertarse en mercados que le den aún un mayor
beneficio. Este tipo de situación es de mucha
susceptibilidad, pues se tiene incertidumbre
de la posición que tomarán los capitales ante
algún problema global internacional.
Los acuerdos bilaterales de libre comercio
han propiciado la entrada de inversión extran-
jera directa para el crecimiento de la econo-
mía mexicana, pero a la vez han provocado
que más empresas transnacionales se instalen
en nuestro país, dejando en desventaja al sec-
tor aéreo, pues sólo se rentabiliza el capital,
pero no se reutiliza como inversión nacional.
La propuesta de políticas económicas más ac-
tivas en este sector pueden ayudar a mejorar la
capacidad productiva, así como la especializa-
ción en el trabajo, a través de la división bien
específica de este, es decir que exista una espe-
cialización de cada uno de los sectores que se
encadenan con el sector aéreo.
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Anee a.c.
27
Luis Ángel Monroy Gómez Franco1
RESUMEN
Las economías del G20, dentro de las que se
encuentra las emergentes, en los últimos años
han adquirido una mayor relevancia en el pla-
no internacional, bajo ésta premisa se analiza
en el texto, el caso específico de tres econo-
mías de este grupo, para identificar cuales son
los mecanismos de regulación de sus políticas
monetarias.
Palabras clave: Economías emergente,
regulación, política monetaria.
1 Estudiante de la Licenciatura en Economía, Universidad Nacional Autónoma de México.
INTRODUCCIÓN
Desde la década pasada y más aún tras la
crisis de 2007-2009, las economías emergen-
tes han adquirido mayor importancia dentro
de la economía global. En especial, aquellas
economías emergentes que forman parte del
“Grupo de los 20”2 han incrementado su in-
fluencia pues pertenecen al mecanismo inter-
nacional de coordinación de política econó-
mica más importante.
Por ello, la forma en que se conduce la políti-
ca económica en estos países se torna de suma
importancia. En este artículo se analiza la for-
2El G20 está conformado por Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos de América, Francia, India, Indone-sia, Italia, Japón, México, Rusia, Reino Unido, Sudáfrica, Turquía y un representante de la Unión Europea. Argen-tina, Brasil, China, India, Indonesia, México, Rusia, Sudá-frica y Turquía son considerados economías emergentes.
Temor a Flotar y Blancos de Inflación en los Países Emergentes del G20
Anee a.c.
28
ma en que Brasil, Indonesia, México y Sudá-
frica3 conducen su política monetaria a la luz
de la hipótesis del temor a flotar postulada por
Calvo y Reinhart (2002).
Además de esta introducción el artículo cons-
ta de cuatro secciones. En la primera se realiza
una breve revisión teórica de la hipótesis del
temor a flotar y de los postulados del EBI A
continuación se presenta el análisis pro-
babilístico para determinar la presencia del
temor a flotar en las economías analizadas. En
tercer lugar se analizan las causas probables
del temor a flotar en estos países, enfatizando
tanto el papel de la credibilidad de las autori-
dades monetarias como el traspaso del tipo de
cambio a los precios. Por último se realizan
algunos comentarios finales a modo de con-
clusión.
3Se analiza a estos países pues forman parte del G20 y operan bajo un régimen de política monetaria sustentado en el Enfoque de Blancos de Inflación (EBI). Se excluyó a Turquía debido al proceso de estabilización por el que atravesó en la primera década del siglo XXI.
LA HIPÓTESIS DEL TEMOR A FLOTAR Y EL EBI
La hipótesis del “temor a flotar”
El “temor a flotar” es definido como la
renuencia por parte de las autoridades mo-
netarias a permitir variaciones en el tipo de
cambio a pesar de declararse en un régimen
de libre flotación (Calvo y Reinhart, 2000).
Este fenómeno ocurre con mayor frecuencia
en las economías emergentes, pues las causales
señaladas se encuentran normalmente en estas
economías. Estas causales, de acuerdo a Calvo
y Reinhart (2002) y a Calvo y Mishkin (2003)
son:
• Un alto grado de traspaso de las varia-
ciones en el tipo de cambio a la inflación.
• Estrategias de desarrollo orientadas al
exterior.
• Un alto porcentaje de deuda denomi-
nada en moneda extranjera en el siste-
ma financiero nacional.
• Problemas de credibilidad de las auto-
ridades monetarias nacionales.
Este último punto cobra especial relevancia
para aquellas economías que han adoptado el
EBI ya que se trata de un marco de política
sustentado por completo en la noción de cre-
dibilidad como se menciona adelante.
Anee a.c. Anee a.c.
29
Esquema de blancos de inflación
De acuerdo a Bernanke y Mishkin (1997) el
EBI posee las siguientes características:
a) La autoridad monetaria anuncia un
blanco de inflación (nivel en que el
banco central desea mantener la infla-
ción) y se compromete a alcanzarle.
b) No existe otra ancla nominal para la
política monetaria más que el blanco
de inflación. Por tanto, la autoridad
monetaria se ha de abocar solamente a
la consecución de dicho blanco.
c) La autoridad monetaria cuenta con in-
dependencia de instrumentos, lo que
le permite determinar cuál es la mejor
combinación de políticas que le permi-
tirá alcanzar el blanco.
d) El banco central debe de poseer una es-
trategia de comunicación que fomen-
te la transparencia, con el fin de que
el público conozca la forma en que
el banco central operará para alcan-
zar el blanco y pueda incorporar este
comportamiento a sus expectativas.
e) Debe existir un mecanismo de rendi-
ción de cuentas que incentive a la au-
toridad monetaria a alcanzar el blanco
inflacionario.
Si bien el EBI disminuye la discrecionalidad
en el accionar de la autoridad monetaria, no
le restringe a una forma específica de actuar.
Esto permite al banco central abocarse al con-
trol de la inflación en el largo plazo y respon-
der ante choques que afecten el producto
en el corto plazo (Bernanke et al, 1999). Sin
embargo, es necesario recalcar que el objeti-
vo principal de la política monetaria es la
consecución del blanco inflacionario, por lo
que sus esfuerzos por estabilizar el producto
no deben de poner en riesgo este objetivo.
Un requisito para que la autoridad monetaria
pueda realizar políticas de estabilización en el
corto plazo es que cuente con la credibilidad
necesaria con fin de que el público no ponga
Anee a.c. Anee a.c.
30
en duda su compromiso antinflacionario. Es
decir, el público debe considerar que el banco
central va a alcanzar el blanco de inflación aun
cuando realice la política de estabilización, o
en su caso, que la no consecución del blanco
es momentánea y no marca un cambio en las
prioridades del banco central.
Se entiende como credibilidad del banco cen-
tral el grado en que el público toma por cier-
tos los pronunciamientos que éste realiza
(Blinder, 1999). Para aumentar su credibili-
dad, las autoridades monetarias deben de ape-
garse a los compromisos que han adoptado al
establecer un blanco de política, en este caso
el blanco de inflación. Sin embargo, como se-
ñala Truman (2003), estos blancos tienen que
ser en sí mismos creíbles para ser efectivos,
puesto que blancos muy bajos serán con-
siderados inalcanzables y las expectativas de
inflación no disminuirán.
Respecto al régimen cambiario que ha de
acompañar al EBI, Ho y McCauley (2003)
señalan tres posturas al respecto. La posición
de la “construcción estricta” considera que un
banco central operando bajo el EBI sólo debe
de utilizar la tasa de interés y el resto de los
instrumentos de política en respuesta a movi-
mientos de la inflación que la lleven fuera de la
trayectoria del blanco. Por tanto el EBI debe
ir acompañado por un régimen cambiario de
libre flotación. Una segunda postura es la de
“blancos de inflación flexibles”, que acepta la
posibilidad de que el banco central estabilice
el valor de la moneda mediante los instrumen-
tos de política monetaria, siempre y cuando la
inflación se encuentre dentro del blanco. La
tercera posición es la del “EBI singapurense”
que postula que en economías con un alto gra-
do de traspaso del tipo de cambio a los pre-
cios, el combate a la inflación necesariamente
requiere un manejo activo del tipo de cambio
por parte del banco central. Es decir, el con-
trol del tipo de cambio es el medio por el cual
se busca alcanzar el blanco de inflación.
En el caso de los países a analizar, la gran ma-
yoría de ellos acompaña al EBI con un régi-
men de libre flotación4. A pesar de esto, como
señala la hipótesis de temor a flotar, es posible
que los bancos centrales no operen bajo este
régimen cambiario, por lo que se vuelve nece-
sario comprobarlo empíricamente.
Temor a Flotar en Algunos Países del G20
El análisis que se presenta a continua-
ción se basa en el presentado en Cal-
vo y Reinhart (2002) y puede ser des-
crito por las siguientes desigualdades:
4 Solo Indonesia opera bajo un régimen diferente: flo-tación controlada.
Anee a.c. Anee a.c.
31
P (|Xe|<Ɛe || F) > P (|Xe|< e ||F0) (1)
P (|Xri|< e || F) > P (|Xri|< e ||F0) (2)
P (|Xi|<Ɛei || F) > P (|Xi|< ei ||F0) (3)
En donde Xe, Xri, Xi son las variaciones por-
centuales mensuales del tipo de cambio, las
reservas internacionales del banco central y la
tasa de interés respectivamente. A su vez Ɛ y Ɛi
son los márgenes de control siendo Ɛe =1% y
Ɛe= 20.5% y Ɛei= 0.5%. F0 señala la existencia
de un régimen cambiario de libre flotación
mientras que F señala la existencia de un régi-
men de tipo de cambio fijo.
El periodo para el cuál se elaboró este análi-
sis abarca desde el momento en que se dio la
adopción del EBI hasta mayo de 2010.
Además de los países mencionados ante-
riormente, se incluyó a Argentina pues se tra-
ta de un país cuyo régimen de política mone-
taria gira en torno a la estabilización del tipo
de cambio (Frenkel y Rapetti, 2008) y forma
parte del G20. Se espera que Argentina presen-
te la menor variabilidad en el tipo de cambio y
la mayor variabilidad en los instrumentos de
política. El análisis se presenta en el Cuadro 1.
Tanto Argentina como Indonesia muestran el
comportamiento esperado. Es decir, una alta
volatilidad de los instrumentos de política y
una baja volatilidad del tipo de cambio, indi-
cando que se en ambos casos no se trata de re-
gímenes de libre flotación y se estabiliza pre-
ferentemente con las reservas internacionales.
El caso opuesto es Sudáfrica, que presenta la
mayor volatilidad en el tipo de cambio (63%
de las observaciones excedieron el umbral de
20.5%) la menor volatilidad en la tasa de in-
Anee a.c. Anee a.c.
32
terés (10% de las observaciones por encima
del umbral de 0.5%) y una de las menores en
el caso de la volatilidad de las reservas inter-
nacionales (27% por encima del umbral de
20.5%). Estos resultados permiten afirmar
que Sudáfrica es el más cercano a la postura
de “construcción estricta del EBI” de entre los
países analizados.
En el caso de Brasil, el tipo de cambio real-
dólar presenta una volatilidad relativamente
alta (55% de las observaciones por encima del
umbral de 20.5%) acompañada de una baja
(aunque considerable) volatilidad de la tasa de
interés (30% de las observaciones por enci-
ma del umbral de 0.5%). Al considerar la
volatilidad de las reservas internacionales,
se hace notoria la existencia de una política
de estabilización del tipo de cambio pues en
un 52% de las observaciones la variación por-
centual mensual de las reservas fue superior
al umbral de 20.5%. México, por otra parte,
presenta una volatilidad relativamente baja
tanto de la tasa de interés como de las re-
servas internacionales (pero de significan-
cia pues es cercana al 30% en ambos casos).
Empero, el peso presenta una variabilidad
baja, lo que indica que la intervención que
realiza Banco de México afecta de forma im-
portante al valor del peso5. Esto indica que las
autoridades monetarias de ambos países su-
fren de temor a flotar. Cabe entonces, evaluar
si esta estabilización del tipo de cambio es en
función de conseguir el blanco inflacionario
(en un EBI flexible o bajo la postura singapu-
rense) o sí se da prioridad al tipo de cambio
estable por sobre el blanco de inflación. En la
siguiente sección se aborda más a detalle este
punto.
EL TRASPASO DEL TIPO DE CAMBIO A LOS PRECIOS Y LOS PROBLEMAS DE CREDIBILIDAD DEL BANCO CENTRAL
El Traspaso del Tipo de Cambio a los Precios
El traspaso del tipo de cambio a los precios
(o “efecto traspaso”) se refiere al efecto que
tiene un cambio en el valor de la paridad cam-
biaria sobre el nivel general de precios de la
economía. Esto ocurre ya que la modificación
del tipo de cambio afecta al precio en moneda
nacional de los bienes importados de consu-
mo final cuyo precio se determina en base a la
moneda extranjera o debido a que la variación
del tipo de cambio modifica el precio de los
insumos importados y este aumento en costos
se traslada al precio final.
De acuerdo a Taylor (2000) es necesario con-
siderar a la magnitud del efecto traspaso como 5 Esta intervención, como señala Ruíz (2011) ha tomado la forma de una política de acumulación de reserva, incluso antes del estallido de la crisis.
Anee a.c. Anee a.c.
33
algo endógeno al ambiente inflacionario de
una economía. Esto significa que el efecto
traspaso depende tanto del nivel como de
la volatilidad de la inflación. La explicación
radica en que un ambiente de alta inflación los
cambios en los precios tienden a ser mucho
más persistentes que en un ambiente de baja
inflación. Por tanto, las empresas esperan que
los cambios ocurridos en su estructura de cos-
tos causados por una depreciación) sean per-
sistentes y afecten a sus competidores. Esto
les lleva a trasladar al precio final gran parte
de este incremento en costos, ocasionando
un aumento generalizado de precios. Lo con-
trario ocurre en el caso de un ambiente de baja
inflación, en donde al no esperar que los
cambios sean permanentes, las empresas ab-
sorben una mayor parte del efecto, tratando
de mantener invariable el precio en moneda
nacional. Esta estrategia se conoce como “pri-
ce to market”, y de acuerdo a autores como
Engel (2009) es uno de los factores que expli-
can la magnitud del efecto traspaso. La hipó-
tesis de Taylor cuenta con un amplio respaldo
empírico; ejemplo de ello son los análisis eco-
nométricos realizados por Bussiére y Pelto-
nen, (2008), Ca’ Zorzi et al, (2007), Coulibaly
y Kempff, (2010) y Ho y McCauley, (2003).
Como se señaló en la sección 2 del presente
trabajo, uno de los determinantes del temor a
flotar es el efecto traspaso del tipo de cambio
al nivel de precios por lo que resulta necesa-
rio observar cual es la magnitud de este efecto
Anee a.c. Anee a.c.
34
para los países aquí analizados. Esto se pre-
senta en el Cuadro 2.
Tanto México como Brasil muestran altos co-
eficientes de traspaso. Esto puede justificar las
intervenciones de las autoridades moneta-
rias en el mercado cambiario, pues estarían
interviniendo con el fin de controlar el com-
ponente de la inflación causado por el efecto
traspaso mediante la estabilización del tipo de
cambio (es decir, siguen la lógica de la postu-
ra singapurense). Al atacar directamente este
componente de la inflación, se esperaría que
el banco central de cada país alcance su blanco
de inflación de forma consistente.
En el caso de In-
donesia se ob-
serva un efecto
traspaso conside-
rable, lo que si-
guiendo la lógica
anterior justifi-
caría la elección
de combinar el
EBI con un régimen de flotación controlada.
Sudáfrica en cambio, muestra un bajo efecto
traspaso del tipo de cambio a los precios, ex-
plicando hasta cierto punto la ausencia de un
temor a flotar considerable por parte de la au-
toridad monetaria.
El Papel de la Credibilidad en la Explicación del Temor a Flotar
En sí mismo el temor a flotar de las autorida-
des monetarias es un elemento que juega en
contra de su credibilidad, puesto que implica
romper con el compromiso público de dejar a
la moneda flotar y no intervenir en el mercado
cambiario de forma sistemática. Sin embargo,
este efecto puede ser atenuado si el banco cen-
tral logra explicitar ante el público la relación
entre las variaciones en el tipo de cambio y el
nivel de inflación, de tal forma que el públi-
co considere a la intervención en el mercado
cambiario como una herramienta más para al-
canzar el objetivo inflacionario. Sólo de esta
forma un régimen de tipo EBI “singapurense”
puede ser sostenido a lo largo del tiempo sin
un déficit creciente de credibilidad. Sin em-
bargo, difícilmente este régimen llega a una
credibilidad plena puesto que la banca central
Anee a.c.
35
puede comenzar a “hacer trampa” (en el sen-
tido de Contreras, (1997)) y estabilizar al tipo
de cambio por otros motivos.
Considerando todo esto es posible medir la
credibilidad de una autoridad monetaria que
opera en un régimen tipo EBI a través de su
efectividad para alcanzar el blanco de infla-
ción (aunque de forma burda). Una mayor
efectividad implica un mayor cumplimiento
del compromiso asumido con el público y por
tanto una mayor credibilidad frente a éste.
Se espera entonces que en las economías que
exhiben un alto grado de traspaso del tipo de
cambio a los precios y en donde la autoridad
monetaria muestra temor a flotar, ésta tendrá
una efectividad considerable para alcanzar su
blanco, puesto que está atenuando uno de los
determinantes de la inflación dentro del país.
Este análisis se presenta en el Cuadro 3.
Se puede observar que Brasil es el país que
goza de una mayor efectividad en alcanzar la
banda de inflación que actúa como blanco, es-
tando un 33.6% de los meses para los que se
analizó fuera de este blanco. México por
otro lado es el país con menor efectividad
de todos, pues en un 67.3% de los meses para
los que se analizó, la inflación anualizada se
encontró por fuera del blanco de inflación.
Esto indica que en el caso de Brasil la políti-
ca de intervenir en el mercado cambiario con
el objetivo de atenuar el efecto traspaso. Ha
contribuido a alcanzar el blanco de inflación.
El caso mexicano es el contrario, puesto que
muestra una baja efectividad en la consecu-
ción del blanco aun cuando se interviene en el
mercado cambiario para estabilizar al tipo de
cambio. Sí esta estabilización no tiene como
fin aumentar la probabilidad de alcanzar el
blanco de inflación, y en un escenario en que
el banco central no cumple consecuentemen-
te con el compromiso de alcanzar el blanco,
la estabilización del tipo de cambio puede ser
vista como la operación de un ancla de política
paralela al blanco de inflación. Es decir, se tra-
ta de un temor a flotar vinculado a problemas
de credibilidad del banco central y no a una
postura de EBI “singapurense”.
Tanto Sudáfrica como Indonesia muestran
una efectividad baja en la consecución del
blanco de inflación. En el caso indonesio esto
permite cuestionar si en realidad es el blanco
de inflación el que predomina sobre la estabi-
36
lización cambiaria. En el caso sudafricano, si
bien no está presente el problema del temor
a flotar, es posible notar que hay problemas
en la consecución del blanco de inflación y
que es necesario investigar más a fondo para
determinar sus causas.
CONCLUSIONES
Como se ha mostrado el temor a flotar sigue
estando presente en más de un país emergen-
te. Sin embargo, hay una divergencia en las
causas de este comportamiento y por tanto
en la forma en que se conjuga con el régimen
de política monetaria. En el caso de los países
que operan un EBI singapurense (es decir con
temor a flotar), cabría preguntarse si no sería
más conveniente admitir abiertamente que
operan en realidad en un régimen cambiario
de flotación controlada. Esto podría mejorar
la credibilidad del blanco central pues no
se estaría “haciendo trampa” en el manejo
cambiario. En cambio, para aquellos países
que presentan problemas de credibilidad
cabría cuestionarse la conveniencia de reajus-
tar el régimen de política en base a la magnitud
del efecto traspaso, la credibilidad del blanco
inflacionario en sí mismo y el índice de precios
en base al cual se calcula la inflación blanco.
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Anee a.c. Anee a.c.
38
La Política Monetaria y sus Mecanismos de Transmisión
Yazmín Torres Cortez1 RESUMEN
La importancia creciente que ha adquirido el
uso de la política monetaria con el fin de esta-
bilizar los precios y la inflación, es necesario
entender el proceso mediante el cual ésta afec-
ta a la economía, es decir, entender los meca-
nismos de transmisión de dicha política.
Es objeto de la investigación describir los
principales mecanismos de transmisión mo-
netaria, como son el canal de la tasa de interés,
el del tipo de cambio, el del crédito y el efecto
en el precio de otros activos.
La finalidad describir los efectos de estos me-
canismos, para llevar a cabo un manejo exito-
so de la política monetaria, sobre la economía.1Estudiante de la Licenciatura en Economía Universidad Autónoma de Coahuila. Campus Torreón.
INTRODUCCIÓN
En el pasado, diversos países adoptaron po-
líticas expansivas que fueron parcialmente fi-
nanciadas a través del impuesto inflacionario.
Con el paso del tiempo estos países se dieron
cuenta que estas políticas solamente propicia-
ban incrementos en la inflación y por ello se
buscó que la política monetaria se concentrara
en la estabilidad de precios. Debido a esto, es
que a los bancos centrales se les ha otorgado
una mayor autonomía, con el fin de cumplir
con el objetivo de la estabilidad.
Para que la política monetaria pueda alcanzar
y mantener la estabilidad de precios y con-
tribuir al desarrollo económico, es necesario
crear las condiciones propicias mediante la
política fiscal.
39
En efecto, cuando en un país se mantiene una
postura fiscal insostenible, se pone en riesgo la
estabilidad de precios. Por un lado, a las auto-
ridades hacendarias les puede resultar compli-
cado encontrar fuentes de financiamiento para
el déficit fiscal y por el otro, a las autoridades
monetarias les es inconveniente adoptar una
postura restrictiva tendiente a mantener una
inflación baja y estable, ya que con ello se po-
dría dificultar aún más el financiamiento de la
postura fiscal. En resumen es indispensable
crear las condiciones necesarias que nos lleven
a tener unas finanzas públicas sanas para po-
der llegar a una estabilidad económica.
La conducción de la política monetaria requie-
re en principio el establecimiento de un obje-
tivo u objetivos a ser alcanzados, de manera
que la autoridad monetaria defina los instru-
mentos más adecuados para su consecución.
Los instrumentos de la política mo-
netaria, son herramientas con las que
cuenta la autoridad monetaria para
modificar las condiciones financie-
ras. En una economía de mercado los
bancos centrales que buscan la esta-
bilidad de precios no pueden contro-
lar la inflación directamente, por lo
que tratan de hacerlo indirectamente
incidiendo sobre las tasas de interés o
la cantidad de dinero y crédito en la
economía.
Dada la importancia de los efectos de las
medidas de política monetaria, esta inves-
tigación tiene como objetivo primordial el
de presentar los aspectos teóricos más rele-
vantes de los principales canales de trans-
misión de dicha política, con lo cual se es-
pera que sirva de fundamento para cumplir
con el principal objetivo de esta, que es la
estabilización de precios y de la inflación.
POLÍTICA MONETARIA
Según palabras del Banco de México: “La po-
lítica monetaria es el conjunto de acciones que
lleva a cabo el Banco de México para influir
sobre las tasas de interés y las expectativas del
público, a fin de que la evolución de los pre-
cios sea congruente con el objetivo de man-
Anee a.c.
40
tener un entorno de inflación baja y estable”.
Los Bancos Centrales son las autoridades res-
ponsables de proveer de moneda y de instru-
mentar la política monetaria. Esta última está
asociada al conjunto de acciones a través de
las cuales la autoridad monetaria determina
las condiciones bajo las cuales proporciona el
dinero que circula en la economía, con lo cual
influye en el comportamiento de la tasa de
interés de corto plazo.Actualmente, ha que-
dado claro que una contribución importante
que la política monetaria puede hacer para fo-
mentar el crecimiento económico sostenido es
procurar la estabilidad de precios. Por tanto,
en años recientes muchos países, incluyendo
a México, han reorientado los objetivos de
la política monetaria de forma que este sea el
objetivo prioritario del banco central, el cual
se ha formalizado, en la mayoría de los casos,
con el establecimiento de metas de inflación
en niveles bajos.
El Banco Central no tiene un control directo
sobre los precios ya que éstos se determinan
como resultado de la interacción entre la ofer-
ta y demanda de diversos bienes o servicios.
Sin embargo, a través de la política monetaria
el Banco Central puede influir sobre el proce-
so de determinación de precios y así cumplir
con su meta de inflación.
Para la autoridad monetaria (Banco de Mé-
xico), es sumamente importante conocer los
efectos que sus acciones tienen sobre la eco-
nomía en general y, particularmente, sobre el
proceso de determinación de precios. El estu-
dio de los canales a través de los cuales se pre-
sentan dichos efectos se conoce como meca-
nismo de transmisión de la política monetaria.
MECANISMO DE TRANSMISIÓN DE LA PO-
LÍTICA MONETARIA
“Proceso mediante el cual las acciones de po-
lítica del Banco Central afectan a la deman-
da agregada y a la inflación. El proceso del
mecanismo de transmisión surge a partir del
momento en que el Banco Central actúa en el
mercado de dinero, y sus acciones tienen un
efecto sobre las tasas de interés de corto pla-
zo” (Schwartz, 1998).
1) Etapas del Mecanismo de Transmisión de la
Política Monetaria
El efecto de las tasas de interés sobre las de
más largo plazo y sobre el precio de otros ac-
tivos, que pudieran tener un impacto sobre la
demanda agregada y por ende sobre los pre-
cios, no es del todo predecible, así como tam-
poco lo son los rezagos con que este efecto
pudiera darse, el cuál dependerá, en gran par-
te, de la estructura financiera de cada país, y
de su entorno macroeconómico.
Anee a.c. Anee a.c.
41
El Banco de México cuenta con la facultad de
modificar la postura de la política monetaria
para hacer frente al surgimiento de presiones
inflacionarias o para mantener condiciones
ordenadas en los mercados financieros nacio-
nales. Por consiguiente, la comprensión de los
canales a través de los cuales dicho cambio en
la postura monetaria afecta la evolución de
otras variables macroeconómicas es impor-
tante para evaluar los resultados de la política
monetaria. El análisis de los efectos que los
cambios en la postura monetaria propician so-
bre las principales variables macroeconómicas
se puede organizar a través de la figura 1.
El mecanismo de transmisión de la política
monetaria característicamente se activa como
resultado de alguna acción por parte del banco
central (ajuste en la postura de la política mo-
netaria). En una primera instancia, dicha ac-
ción tiene un impacto sobre las tasas de interés
de corto plazo y sobre las expectativas de los
agentes económicos (expectativas de inflación
o riesgo país, por ejemplo). En un entorno de
alta credibilidad en los objetivos e intencio-
nes del Banco Central, el efecto del ajuste en
la política monetaria sobre las expectativas
puede ser tal que la propia modificación
de las expectativas incida directamente so-
bre la determinación de los precios a través
de la oferta agregada. Este sería el caso, por
ejemplo, cuando las negociaciones salariales
respondieran de manera prácticamente inme-
diata a los ajustes en la política monetaria.
La segunda etapa del mecanismo de transmi-
Anee a.c. Anee a.c.
42
sión se refiere propiamente a los canales a tra-
vés de los cuales las acciones del banco central
se transmiten a la oferta y a la demanda agre-
gada.
El mecanismo de transmisión concluye con la
interacción entre la oferta y demanda agrega-
da y su efecto sobre la evolución de los pre-
cios. Es importante destacar que los diferentes
canales por los cuales se transmiten los efectos
de la política monetaria a la economía suelen
complementarse entre sí, ya que operan de
manera simultánea.
1.1 Primera Etapa. La primera etapa del meca-
nismo de transmisión se refiere a los efectos
que los instrumentos de política monetaria
tienen sobre las tasas de interés de corto plazo
y las expectativas de los agentes económicos.
En años anteriores, el Banco de México ha
utilizaba el “corto” para modificar la postura
de política monetaria. Así, al establecerse un
“corto”, el Banco de México propicia un au-
mento en las tasas de interés de corto plazo y
una disminución de las expectativas de infla-
ción de los agentes económicos.
Actualmente el Banco de México ha dejado
de utilizar el corto monetario como variable
operativa para implementar la política mone-
taria y ahora opera mediante la tasa de interés
de referencia, tal como lo hace la FED de EE.
UU., donde al aumentar la tasa de referencia
se tiene como objetivo disminuir la tasa de in-
flación.
La secuencia del mecanismo de transmisión
comienza con los instrumentos de política
monetaria que utiliza el Banco Central. A tra-
vés de estos instrumentos el Banco Central
afecta la oferta de base monetaria en el merca-
do de dinero e influye sobre su demanda.
Entre los instrumentos más utilizados por los
Bancos Centrales se encuentran las operacio-
Anee a.c.
43
nes de mercado abierto, el establecimiento de
ventanillas para proveer o retirar liquidez a
iniciativa de los participantes del mercado y
los requerimientos de reserva.
Parte crucial de esta primera etapa del meca-
nismo de transmisión es que el Banco Central
pueda propiciar que la banca, a nivel sistémi-
co, enfrente excesos o faltantes de base mo-
netaria. Al enfrentar una posición de liquidez
distinta a la deseada, los bancos, con el objeto
de minimizar
los costos en
los que incu-
rrirían si per-
manecen con
los referidos
excesos o fal-
tantes de base
m o n e t a r i a ,
llevan a cabo
acciones en el
mercado de dinero que buscan alcanzar la po-
sición de capacidad deseada. Los excedentes
de solvencia redundan en una pérdida para las
instituciones de crédito por el hecho de que
éstas incurren en el costo de oportunidad de
no otorgar dicho excedente en forma de fi-
nanciamiento. Por su parte, los faltantes de
liquidez generan un costo para los bancos, el
cual, en buena medida, estará dado por la po-
sibilidad y los términos en que la banca pueda
incurrir en sobregiro en sus cuentas en el Ban-
co Central.
Las acciones realizadas por los bancos en el
mercado de dinero con el objeto de alcanzar
la posición de liquidez deseada, tienen un im-
pacto sobre el objetivo operacional del Banco
Central, el cual en ocasiones ha sido la trayec-
toria de reservas bancarias e n el Banco Cen-
tral, alguna tasa de interés de mediano plazo
o la tasa de fondeo. Varia-
ciones en la tasa de fondeo
por ejemplo, repercuten a
su vez sobre el resto de las
tasas de interés y el tipo de
cambio.
1.2 Segunda Etapa. Los
principales elementos de
esta etapa del mecanismo
de transmisión se pueden
dividir para su explicación
en cuatro canales a través de los cuales la tasa
de interés de corto plazo puede influir sobre la
demanda y oferta agregada y posteriormente
los precios.
a) Canal de Tasas de Interés. En general, las
tasas de mediano y largo plazo dependen, en-
tre otros factores, de la expectativa que se ten-
ga para las tasas de interés de corto plazo en el
Anee a.c.
44
futuro. Así, cuando el Banco Central induce
cambios en las estas tasas de corto plazo, éstos
pueden repercutir en toda la curva de tasas de
interés. Es importante destacar que las tasas
de interés nominales a diferentes horizontes
también dependen de las expectativas de
inflación que se tengan para dichos plazos
(a mayores expectativas de inflación, mayores
tasas de interés nominales). En general, ante
un aumento en las tasas de interés reales se
desincentivan los rubros de gasto en la eco-
nomía. Por un lado, al aumentar el costo del
capital para financiar proyectos, se desincenti-
va la inversión. Por otro, el aumento en las ta-
sas de interés reales también aumenta el costo
de oportunidad del consumo, por lo que éste
tiende a disminuir.
Ambos elementos inciden so-
bre la demanda agregada y even-
tualmente modifican la inflación.
b) Canal de Crédito. Un incremento en las ta-
sas de interés disminuye la disponibilidad de
crédito en la economía para inversión y con-
sumo. Por una parte, el aumento en las tasas
de interés encarece el costo del crédito y la
cantidad demandada del mismo disminuye.
Por otra, la oferta de crédito también puede
reducirse, en virtud de que una tasa de interés
real mayor puede implicar mayor riesgo de
recuperación de cartera, a lo que los interme-
diarios financieros típicamente reaccionan ra-
cionado el crédito. Un descenso del consumo
y la inversión se traduce a su vez en una dismi-
nución en la demanda agregada y consecuen-
temente en una menor inflación.
c) Canal del Precio de Otros Activos. Un au-
mento en las tasas de interés tiende a hacer
más atractiva la inversión en bonos y dismi-
nuye la demanda de acciones, por lo que el
valor de mercado de estas últimas, así como
el de otros activos puede disminuir. Ante la
caída en el valor de mercado de las empre-
sas, éstas pueden ver deteriorada su capa-
cidad para acceder a diversas fuentes de fi-
nanciamiento, lo cual dificulta la realización
Anee a.c. Anee a.c.
45
de nuevos proyectos de inversión. Lo ante-
rior también conduce a una menor demanda
agregada y a una disminución en la inflación.
d) Canal del Tipo de Cambio. El aumento en
las tasas de interés suele hacer más atractivos
los activos financieros domésticos en relación
a los activos financieros extranjeros. Esto pue-
de dar lugar a que se presente una apreciación
del tipo de cambio nominal que puede dar lu-
gar a una reasignación del gasto en la econo-
mía. Debido a que el referido ajuste cambiario
tiende a abaratar las importaciones y a encare-
cer las exportaciones. Ello tiende a disminuir
la demanda agregada y eventualmente la infla-
ción. Por otra parte, la apreciación del tipo de
cambio significa una disminución en el costo
de los insumos importados que a su vez se tra-
duce en menores costos para las empresas, lo
que afecta favorablemente a la inflación.
Es importante destacar que los diferentes con-
ductos por los cuales se transmiten los efectos
de la política monetaria a la economía suelen
complementarse entre sí, ya que operan de
manera simultánea. Cabe señalar que existen
canales adicionales a través de los cuales la
política monetaria influye sobre el comporta-
miento de la inflación, sin embargo, los antes
mencionados son los de mayor relevancia.
1.3 Tercera Etapa. La etapa final del mecanis-
mo de transmisión se refiere a la interacción
entre la oferta y la demanda agregada, y su
resultado sobre los precios. Un exceso de de-
manda agregada (gasto) con relación a la ofer-
ta agregada (producción) propiciará que el ni-
vel de precios aumente. En la medida en que
los cambios en la demanda agregada vengan
acompañados por variaciones equivalentes
en la oferta agregada será posible mantener
la estabilidad en el nivel general de precios.
Es por esto que los Bancos Centrales deben
vigilar con atención la evolución de los merca-
dos de manera que no se presenten desequili-
brios que eventualmente se traduzcan en pre-
siones inflacionarias.
Anee a.c. Anee a.c.
46
En ocasiones tanto la demanda como la oferta
agregada pueden verse afectadas por eventos
sobre los cuales las autoridades monetarias
no tienen control. Los precios internaciona-
les, factores climáticos o fenómenos naturales
y los problemas económicos y financieros en
otros países son ejemplos de este
tipo de eventos. Así, en la
medida en que las auto-
ridades monetarias lo-
gren aislar y contener
los efectos nocivos de
este tipo de eventos
se podrá esperar que el
efecto de éstos sobre los
precios sea tan sólo transito-
rio.
CONCLUSIONES
La misión primordial de los bancos centrales
es, a través de la política monetaria, promover
la estabilidad de precios, es decir, el control
de la inflación como condición básica del cre-
cimiento económico sostenible a largo plazo.
El mecanismo de transmisión de la política
monetaria a la actividad económica es princi-
palmente mediante el impacto de las tasas de
interés en la disponibilidad de crédito y liqui-
dez. Es importante destacar que el estudio de
tales mecanismos debe ser una tarea perma-
nente debido a la naturaleza evolutiva de los
factores que influyen sobre ellos. Los respon-
sables de la política monetaria deben de estar
atentos a los cambios estructurales de la eco-
nomía, ya que tienden a modificar los efectos
que se esperaban de diferentes medidas de la
política a través del tiempo.
Estos factores crean las
condiciones de que no
se pueda conducir los
mecanismos de trans-
misión de la política
monetaria por medio
de un canal particular.
Dependiendo de las cir-
cunstancias que prevalezcan en
el momento, algunos canales adquieren
mayor importancia que otros.
Sin embargo, a pesar de que los efectos de la
política monetaria se difuminan en un espec-
tro muy amplio, se debe destacar el papel que
juega la tasa de interés real en la implementa-
ción de la política monetaria, ya que al haber
una disminución en la tasa de interés de re-
ferencia, el costo del dinero disminuye. Esto
permite fomentar el consumo y la inversión
mediante la expansión del crédito, siempre y
cuando los agentes económicos tengan capa-
cidad de mayor endeudamiento.
Anee a.c. Anee a.c.
47
La política monetaria que actualmente opera
el Banco de México a través de sus mecanis-
mos de transmisión analizados en el docu-
mento ha dado como resultado la estabilidad
macroeconómica de la que goza el país, sin
este correcto manejo de los instrumentos para
llevar a cabo la esta estabilidad de precios, no
se tendría la capacidad que se tiene en este
momento, para reaccionar ante una turbu-
lenta economía internacional. Todo esto para
tener un mejor sistema económico, bienestar
social y confianza de los agentes económicos.
Como una futura línea de investigación se
intentaría desarrollar un modelo cuantitati-
vo que permitiera dimensionar el impacto de
cada uno de los mecanismos de transmisión de
la política monetaria en la economía nacional.
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TUDIO.PDF
Anee a.c.
49
Paraíso Victimario e Infierno Terrenal. Las Causas del Crimen en Mé co
Gerardo Gazca Solís1
RESUMEN
Es el tiempo del caos. El sostenimiento del
país oscila entre la incredulidad y la incerti-
dumbre. Las realidades de la economía mexi-
cana se viven en la desventura: la inestabilidad
financiera internacional, el debilitamiento del
mercado interno y la ausencia de posibles
cambios estructurales en la composición de las
actividades económicas. Éstos son algunos de
los factores explicativos del crecimiento y de-
sarrollo económico nacional. En el marco del
nuevo papel del Estado, dedicaremos nuestro
estudio a uno de éstos agentes: la inseguri-
dad pública, pragmatismo materializado en la
vida de los mexicanos, no sólo directamente
1Estudiante de la Licenciatura en Economía, Benemerita Universidad Autónoma de Puebla.
por los costos humanos y sociales, sino por
la tragedia económica que representa como
precipicio de la economía nacional originan-
do estancamiento y detrimento económico.
Su entendimiento responde al análisis y cues-
tionamiento de los incentivos que genera la
delincuencia, es decir, identificar las causas
que originan el desarrollo de la criminalidad
en México, otorgándonos como resultado, la
comprensión de la incidencia delictiva, nueva
profesión en México.
Anee a.c.
50
AVERIGUACIONES PREVIAS
El análisis económico del delito parte de la
concepción utilitarista del individuo de los
economistas neoclásicos y de sus postulados
acerca del individualismo, el comportamien-
to maximizador del beneficio, el equilibrio
del mercado y las preferencias estables. Así
los delincuentes no son contemplados, en
principio, como individuos desvia-
dos, sino como personas norma-
les, como agentes maximizadores
que evalúan el coste y el beneficio
de su actividad, y la pena sería el
precio, resultado del equilibrio en-
tre demanda de seguridad y oferta
de delito. El sistema judicial sería
un mercado que podría alcanzar
la combinación deseada entre se-
guridad y gasto. Casi todas las in-
vestigaciones realizadas sobre economía del
delito parten del estudio titulado “Crime
and Punishment: An Economic Approach”,
del Premio Nobel Gary Becker (1968) y de
las posteriores ampliaciones realizadas por el
profesor de la Universidad de Chicago Isa-
ac Ehrlich, publicadas en 1973 en su artícu-
lo “Participation in Illegitimate Activities:
A Theoretical and Empirical Investigation”.
PREINSTRUCCIÓN E INSTRUCCIÓN.
Utilizando únicamente el modelo de Isaac
Ehrlich, referenciamos el análisis de la deci-
sión del individuo en razón de la distribución
del tiempo entre actividades legales (tl) e ile-
gales (ti). Así, la actividad legal generará unos
rendimientos ciertos Wl(tl) que dependerán
del tiempo dedicado a la mismas, y la activi-
dad ilegal otros Wi(ti), pero dependiendo de
que ocurran uno de los dos estados posibles:
ser detenido o no. La pena o sanción Fi(ti)
también dependerá del tiempo dedicado a las
actividades ilegales. En estas circunstancias, el
valor monetario de los costes y beneficios será
distinto, dependiendo de la probabilidad p de
ser arrestado y condenado, o de no serlo (1-p).
Así, la riqueza generada, en caso de ser arres-
tado y condenado, por sus actividades legales
e ilegales sería Xa , mientras que la riqueza
Anee a.c. Anee a.c.
51
esperada si el individuo no es capturado sería
Xb. Analíticamente podríamos representarlo
de tal forma que W’ sea el valor monetario
de la riqueza del individuo.
Xa = W’ + Wi(ti) - Fi(ti) + Wl(tl)
Xb = W’ + Wi(ti) + Wl(tl)
Por tanto, dado que el valor de la probabilidad
p viene determinado exógenamente, el indivi-
duo tendrá que decidir la cantidad de tiempo
que dedica a delinquir de forma que maximice
su utilidad esperada, que no sería más que la
suma de las utilidades de cada uno de los dos
estados anteriores:
EU = p U(Xa) + (1-p) U(Xb)
Matemáticamente la condición de primer
orden para la maximización de la utili-
dad esperada nos llevaría a la fórmula (Ehrlich
1973: 526):
Al final, tras algunos desarrollos y reordena-
ciones matemáticas se transforma en:
wi – wl > pfi
Indica que para que una persona actúe ilegal-
mente será suficiente que el beneficio marginal
esperado del delito supere al valor marginal
esperado del castigo en términos monetarios,
independientemente de la actitud que el indi-
viduo presente hacia el riesgo. Si considera-
mos que los individuos presentan aversión al
riesgo y que desempeñan conjuntamente ac-
tividades legales e ilegales, un simple ejercicio
de estática comparativa nos indicará los efec-
tos de las distintas variables sobre el tiempo
destinado a actividades delictivas (Bandrés,
2001:9). Así un incremento de las variables
vinculadas con el sistema de justicia criminal
(probabilidad de ser capturado p y severidad
en el castigo f) reducirá el tiempo de activi-
dades ilegales al incrementar el coste esperado
del castigo.
Por otro lado el término (wi-wl) representa el
diferencial de salario entre la actividad ilegal y
la legal, y guarda relación con las condiciones
económicas. Si se supone, siguiendo a Ehrlich,
que existe una relación directa y positiva con
el nivel de desigualdad de la renta (wi-wl), es
decir, cuando wl sea mayor a wi significa
que hay un aumento de los rendimientos
procedentes de actuaciones legales dando lu-
gar a una reducción del delito creado por me-
joras en el crecimiento económico que conlle-
Anee a.c. Anee a.c.
52
van la reducción del grado de desigualdad en
la distribución de la renta. Por ello, si existe
una Distribución del Ingreso más equitativa,
se eliminan los incentivos hacia las actividades
ilícitas, reduciendo la criminalidad, es decir,
que una mejor distribución de la renta incide
de forma indirecta en el volumen delictivo.
Como consecuencia , las dos vías con las
que dispone el sector público para redu-
cir el nivel de delincuencia serían, por un
lado, las relacionadas con las instituciones
de justicia criminal, como el aumento de la
probabilidad de captura a través de la efica-
cia policial, o el incremento de la severidad
del castigo; y por otro, las relacionadas con la
actividad económica, aumentando los rendi-
mientos legales y reduciendo la desigualdad
en el reparto de la renta (Bandrés, 2001:10).
Dado esto, analizaremos ambos argumentos,
a partir de la incidencia delictiva a través de
las denuncias totales realizadas y la cifra ne-
gra; por otro lado, la distribución de la ren-
ta, a partir de la noción que la preferencia a
actividades lícitas es generada por mayores
ingresos en ella, donde la distribución de la
renta es más equitativa y las desigualdades en
el ingreso son mínimas o por lo menos no tan
agudas.
JUICIO.Primera comparecencia: victima-rio mexicano.
Actualmente, México se encuentra en una de
las crisis más agudas respecto al tema de Se-
guridad Pública. Cuestionables resultan los
logros en esta materia. El significativo au-
mento en los índices de criminalidad en todo
el país ha provocado una creciente polémi-
ca sobre el verdadero nivel del problema de
inseguridad Pública, añadido a la falta de un
sistema de administración de justicia confia-
Anee a.c. Anee a.c.
53
ble y expedito. Esto ha provocado que la so-
ciedad no denuncie ante las autoridades los
actos criminales, resultando en México sólo
21.5% los delitos son denunciados al Ministe-
rio Público, mermado nuestra capacidad para
entender la dimensión real de la delincuencia.
El total de víctimas visibles e invisibles de de-
litos graves registradas entre enero de 1997 y
mayo de 2011 ascendió a 12 millones 993 mil
10, de las cuales 3 millones 208 mil 213 son
víctimas visibles y 9 millones 784 mil 797 son
víctimas invisibles2.
Por otra parte, la cifra negra, definida como la
falta de averiguación previa, es creciente. La
falta de articulación en el seguimiento de los
procesos penales refleja la impunidad actual.
2Se entiende como víctimas visibles a todas aquéllas personas que han sufrido directamente el delito, mien-tras que Víctimas Invisibles se refiere a quienes re-ciben daños indirectos como lo es el núcleo familiar.
Las instituciones de justicia criminal, resultan
ineficientes dada la disminución en la proba-
bilidad de captura a través de la eficacia poli-
cial así como de la acción de procuración de
justicia.
Segunda comparecencia: desigualdades en distribución de la renta
Con las políticas de reforma o ajuste estruc-
tural, impulsadas por el Banco Mundial, en
los años ochenta, consistentes en basar el
crecimiento económico a través del mercado
y la asignación de equilibrio de los recursos,
donde los precios reflejen la escasez o abun-
dancia y las decisiones se tomen de acuerdo
con la rentabilidad económica en el marco de
las ventajas comparativas de los países (Ro-
dríguez, 1995:3), se tuvo como consecuencia,
Anee a.c. Anee a.c.
54
el aumento de la inversión extranjera, los
cambios de mano de la propiedad y el incre-
mento de la dispersión de las productividades,
conduciendo a la desigualdad en la distribu-
ción del ingreso.
Para su estudio,
utilizamos la distri-
bución del ingreso
corriente mone-
tario desde 1977
hasta 2008, y la del
ingreso corriente
total desde 1992
hasta 2008. La dife-
rencia entre ambos
conceptos de in-
greso radica en que
el segundo agrega al ingreso monetario el no
monetario, que incluye la estimación del valor
de la renta de las viviendas habitadas por sus
propietarios, la valoración del autoconsumo,
los regalos recibidos y los pagos en especie.
En la gráfica 2 se muestra la evolución del Ín-
dice de Gini para el período 1977-2008. En la
parte izquierda de la curva se advierte el últi-
mo tramo de la caída en la desigualdad corres-
pondiente a la época del modelo sustitutivo
de importaciones, mientras que entre 1984 y
1989 se observa un aumento marcado.
En 1994, inmediatamente antes de la crisis
provocada por el llamado “error de diciem-
bre”, la inequidad en el reparto de los frutos
monetarios de la economía alcanzó su nivel
máximo. A partir de ahí se inicia una tendencia
a la disminución a pesar de algunas fluctuacio-
nes. Antes de interpretar teóricamente la in-
formación de la gráfica, es necesario eliminar
la posibilidad de que las fluctuaciones de azar
que afectan a la información de ingresos que
se obtiene por métodos muestrales generen
dichas variaciones. De la exanimación de los
datos del cuadro 1 se concluye que las varia-
ciones en la desigualdad a lo largo del tiempo
no son estadísticamente significativas, salvo lo
acontecido con la concentración del ingreso
monetario entre 1994 y 2006 y 2008. Lo que
Anee a.c. Anee a.c.
55
se debe aclarar es si esto es consecuencia de
algún cambio en la heterogeneidad estructural
o de alguna modificación en la élite econó-
mica, la política, o bien una alteración en las
relaciones entre ellas, en caso de no coincidir.
En síntesis, la información muestra que en los
últimos tres lustros la desigualdad del ingreso
monetario ha disminuido de manera significa-
tiva, mientras que la distribución del ingreso
total ha permanecido relativamente estable
por tanto, es necesario afinar el análisis. En la
Gráfica 2 a partir del Índice de Gini e Índice
de Theil, que superan la mitad de la unidad,
observamos crecientes desigualdades a nivel
Nacional, Urbano y Rural coincidente con el
creciente volumen de delitos denunciados.
En las distribuciones de los cuadros 4 y 5 (ver
anexo) se devela que la desigualdad en la re-
partición de los ingresos monetario y total es
sensible a la participación relativa de los ho-
gares que se encuentran en la cúspide de la
distribución del ingreso. Las reducciones en
la desigualdad en ambos tipos de ingresos re-
gistradas en 1984, 1996 y 2002 a 2004 se deben
esencialmente a la caída en la participación re-
lativa del décimo decil. En los datos de 1984 se
refleja la distribución de los ingresos después
de la crisis del petróleo de 1982; en los de 1996,
los ingresos de los hogares a casi dos años de
la contracción económica de 1994-1995 y de
2002 y 2004, corresponde al estancamiento vi-
vido por México entre 2000 y 2003.
Dado que el décimo decil domina la evolu-
ción de la desigualdad, debemos identificar
los actores sociales que lo conforman. En este
estrato se encuentran los hogares de la cla-
se media alta; su ingreso lo obtienen por su
desempeño como empresarios o como asala-
riados no agropecuarios. Incluye profesionis-
tas, ya sea que trabajen por cuenta propia o
como asalariados; técnicos, trabajadores de
la educación y artistas; funcionarios públi-
cos o funcionarios privados; oficinistas y co-
merciantes, y vendedores y agentes de ventas
Anee a.c. Anee a.c.
56
(Cortés y Rubalcava, 1991: 59 a 83 y Cortés,
2000: 57 a 75).
Una vez que se identifican los sectores socia-
les incluidos en el décimo decil podemos ob-
servar que la desigualdad se abate gracias a la
caída en su participación relativa.
Una explicación posible a las caídas de la des-
igualdad que suceden a las contracciones eco-
nómicas radicaría en las reducciones en los
sueldos y salarios reales de sectores sociales
ubicados en el décimo decil, como los buró-
cratas, los maestros y empleados universita-
rios, cuyos salarios los determina la institu-
ción y no el mercado (Rubalcava, 1998: 97 y
98, y 128 a 139). Según esta explicación,
las políticas de austeridad económica que
han aplicado los gobiernos mexicanos para
enfrentar las crisis recurrentes se reflejarían
principalmente en la participación relativa del
décimo decil. Las variaciones en la desigualdad
en la distribución del ingreso observadas des-
de la década de los noventa no provendrían de
cambios en la heterogeneidad estructural ni de
la preocupación gubernamental por aminorar
la desigualdad, sino sería una consecuencia de
la reacción del gobierno para estabilizar sus
gastos. En épocas normales los ingresos de es-
tos sectores se recuperan y retorna la inequi-
dad económica.
Por otra parte consideremos la tasa de cre-
cimiento en términos reales de algunos indi-
cadores que nos dan una perspectiva global
sobre cuáles son las preferencias de la actual
política, mostrándonos las realidades mexica-
nas.
Es posible observar que el gasto generado en
Educación y el dirigido hacia el Consejo Na-
cional de Ciencia y Tecnología tienen un mar-
ginal crecimiento real si lo comparamos con
el incremento generado en Seguridad Pública,
Marina y Defensa Nacional (Ver anexo, cua-
dro 6). Esto nos da tres perspectivas posibles.
La primera que la generación de factores de
Educación e Investigación Científica, como
bases fundamentales de bienestar y crecimien-
to del país se encuentran relegadas de la
política nacional. En segunda parte, se le
suma el crecimiento en Desarrollo Social,
donde las políticas de asistencialismo foca-
Anee a.c. Anee a.c.
57
lizado obtienen resultados cuestionables, no
mejorando la distribución de la renta. La ter-
cera es que, por consecuencia, estos factores
inciden en el crecimiento, bajo esta tesis, de la
incidencia delictiva, agravando el incremento
en las dependencias de procuración del delito
y aseguramiento de la población frente al cri-
men.
SENTENCIA. CONCLUSIONES.
Al partir de los modelos teóricos de Becker
y Ehrlich, se emplea una función general de
oferta de delitos agregada en la que influyen
variables preventivas, otras personales, y otras
disuasorias. Dada la naturaleza de nuestro es-
tudio, nos centramos en la utilización de va-
riables relacionadas con el sistema socioeco-
nómico, es este caso, tomamos la Distribución
de la Renta como pilar significativo de las cau-
sas de la incidencia delictiva. En ella, podemos
incluir variables como, el desempleo, la densi-
dad demográfica, los niveles de educación, los
programas de bienestar, los ingresos de las fa-
milias o las personas, los niveles de desigual-
dad en el ingreso, índices de pobreza, inmigra-
ción edad, género, y concentración urbana.
Por otra parte, respecto al sistema de procu-
ración de justicia los resultados son precarios
respecto a la creciente Cifra Negra. México
demanda un acelerado crecimiento económi-
co y un proceso gradual de redistribución del
ingreso a fin de comenzar a revertir las enor-
mes desigualdades y condiciones de pobreza
que existen en la actualidad. Se requiere acele-
rar el proceso de acumulación de capital e ini-
ciar el restablecimiento del mercado interno
mediante el aumento paulatino de los salarios
reales basado en crecimientos paralelos de la
productividad laboral y de la productividad
total de los factores. Se necesita, por último,
una política social activa que beneficie con
instituciones de salud y educación a los es-
tratos medios y bajos de la escala distributiva
para permitirles acrecentar su productividad e
ingresos en el mediano plazo. Se precisa, de
una nueva estrategia de desarrollo, en la cual
el abatimiento de la pobreza forme parte de
los objetivos del crecimiento económico ba-
sado en el consenso social de los mexicanos.
Para el abatimiento de la incidencia delictiva
se necesita una redistribución del ingreso. En
Anee a.c. Anee a.c.
58
México lejos de ser equitativa, es cada vez más
desigual. Incidir en la desigualdad de la dis-
tribución del ingreso implica actuar sobre las
relaciones sociales, la pobreza y crecimiento
económico. Mayores niveles de concentra-
ción, es decir, mayor apropiación del producto
por los más ricos, coincide con la agudización
de la incidencia delictiva, creando conflictos
de inestabilidad social, incertidumbre políti-
ca, crisis y paralización de la economía y, por
supuesto, niveles inasumibles en materia de
los costos materiales y humanos, donde la de-
lincuencia se cristaliza y posiciona como una
realidad vivida por todos y cada uno de los
mexicanos.
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Anee a.c. Anee a.c.
59
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Occidente
Apéndice Estadístico
Anee a.c. Anee a.c.
60
Anee a.c.
61
La geografía del dinero: Una perspectiva de economía política para el estudio de las relaciones
monetarias internacionalesFernando Arteaga González1
Noemi Nallely Barbara Negrete
El presente texto pretende analizar la actual
geografía monetaria existente y las relaciones
económicas y políticas que le moldean. El mo-
delo de monedas territoriales, basado en una
única unidad monetaria por nación, resulta ya
obsoleto para el entendimiento de las relacio-
nes monetarias actuales. Más aún, histórica-
mente tal esquema es bastante reciente y no se
convirtió en paradigma sino hasta finales del
siglo XIX. La tesis de este trabajo sugiere que
se necesita de un nuevo modelo de economía
política que considere, en el estudio del con-
texto monetario mundial, no sólo las relacio-
nes hegemónicas entre Estados sino también
1 Estudiantes de la Licenciatura en Economía, Universidad Nacional Autónoma de México.
la importancia de los actores privados.
Palabras Clave: sistemas monetarios, historia
monetaria, soberanía monetaria, dinero estatal,
dinero privado.
A notion prevails that the Money Market is something
so impalpable that it can only be spoken of in a very ab-
stract words and that therefore books on it must always
be exceedingly difficult. But I maintain that the Money
Market is as concrete and real as anything else: that it
can be described in as plain words
Walter Bagehot. Lombard Street
Anee a.c.
62
INTRODUCCIÓN
El presente texto pretende analizar la actual
geografía monetaria existente y las relaciones
económicas y políticas que le moldean. La te-
sis de este trabajo sugiere que se necesita de un
nuevo modelo de economía política que con-
sidere, en el estudio del contexto monetario
mundial, no sólo las relaciones hegemónicas
entre Estados sino también la importancia de
los actores privados.
Para tal efecto, el trabajo está estructurado en
primer lugar con esta introducción. La segun-
da sección explica lo que entendemos por di-
nero. La tercera expone de manera detallada
el significado del concepto de geografía mo-
netaria, y como el esquema actual resulta in-
suficiente para la compresión de la realidad de
las relaciones monetarias mundiales. La cuarta
revisa brevemente las relaciones monetarias a
través de la historia, desde el surgimiento de
los primeros objetos que fungieron como di-
nero, pasando por diversos patrones moneta-
rios, hasta la disolución del sistema de Bretton
Woods en 1971. La quinta analiza el papel del
Estado ante esta nueva geografía monetaria.
Se examina el significado de soberanía mone-
taria, así como los costos y beneficios de man-
tenerla. Se contempla, también, el desafío del
sector privado al Estado en materia de emi-
sión de dinero. Al final las conclusiones.
¿QUÉ ES EL DINERO?
La literatura económica distingue entre dos ti-
pos de bienes: los de capital y los de consumo.
Los primeros son aquellos que, siendo produ-
cidos, tienen como fin producir otros bienes;
los segundos se refieren a bienes de uso final.
El dinero contiene características de ambos
grupos, sirve tanto para fomentar la genera-
ción de riqueza, como para conservarla, pero
se diferencia de aquellos por su propiedad
esencial: servir como medio de cambio. Perte-
nece por ende a un grupo único.
Se presupone, por lo tanto, que el dinero sur-
ge solamente en un contexto de orden econó-
mico basado en el intercambio. La lógica jus-
tificativa del dinero relata que éste emana de
la evolución de la sociedad misma, en donde
se pasa de una economía primitiva de trueque,
costosa e ineficiente, a una de intercambio in-
directo a través de un medio común: el dine-
ro.2
Cubierto el requisito de actuar como medio
de cambio, el dinero pronto adopta otras fun-
ciones: a) Servir como unidad de cuenta, esto
es, ser un estándar de valor común por el cual
otros bienes puedan expresar su valor a través
de los precios. b) Fungir como reserva de va-
2 Esta explicación genética del surgimiento del dinero la da por primera vez Aristóteles en La Política. Esta argumen-tación ha sido repetida ad nauseaum, a diferentes niveles de detalles, por diversos académicos a través de la historia.
Anee a.c. Anee a.c.
63
lor, ser un activo a través del cual la población
conserve su poder de compra.
Es la confianza de la sociedad la que dota a un
objeto cualquiera la distinción de ser dinero.
Ésta proviene de la cohesión social, que está
cimentada en la red transaccional, la cual será
más grande en tanto mayor sea el número de
personas que acepten tal objeto como dinero.
GEOGRAFÍA DEL DINERO
La geografía como disciplina social se refie-
re a la construcción de espacios mentales por
los cuales los humanos podemos concebir al
mundo. De tal manera, que con el concepto de
geografía monetaria, estamos hablando de la
dimensión espacial del dinero (Cohen, 1998:
cap 1); Por lo tanto, en última instancia, ésta
describe la política del dinero y del sistema
que gobierna las relaciones monetarias.
En la concepción actual se visualiza al Estado
como el único actor importante en la deter-
minación de los aspectos monetarios. A tal
acepción se le ha denominado de diversas ma-
neras: modelo Westfaliano, régimen de mo-
nedas nacionales/territoriales, etcétera. Esta
idea se remonta al propio surgimiento de los
Estados-nación como unidad política prepon-
derante. La historiografía sitúa la firma de los
tratados de paz de Westfalia, en 1648, como el
punto primigenio de esta visión. Sin embar-
go, dadas las condiciones presentes de apertu-
ra económica con altos flujos de capital, este
enfoque resulta, en la actualidad, totalmente
inadecuado para una exacta comprensión del
tema;3 Los agentes privados cada día juegan
un papel más importante en la determinación
del contexto monetario mundial.
Por ello Benjamín Cohen arguye la necesidad
de formular un nuevo esquema para el enten-
dimiento de las relaciones monetarias interna-
cionales (1998). Para tal efecto hace una dis-
tinción entre el significado de los conceptos de
dominio monetario: a) Dominio Territorial,
que corresponde a la jurisdicción política de
un gobierno emisor de monedas; b) Dominio
Transaccional, entendido como el rango de
circulación de una moneda; c) Dominio Au-
3 Y quizás nunca lo fue. Helleiner (2003) nar-ra como el triunfo del modelo de monedas nacio-nales no se da sino hasta finales del siglo XIX.
Anee a.c. Anee a.c.
64
toritativo, que significa una nueva noción que
capta la dimensión funcional (transaccional) y
física (territorial) del dinero. (p.23).
Por lo anterior podemos suponer que la vi-
sión Westfaliana resulta insuficiente en tanto
que evalúa únicamente el dominio territorial
(Cohen, 1998, pp.24-26). Por otra parte los
actuales modelos, generalmente estudiados
en las escuelas de economía y de negocios, re-
siden casi de manera exclusiva en el estudio
del dominio transaccional de la moneda; tal
posición también resulta insatisfac-
toria, en tanto sitúa las acciones
de los agentes privados como
las únicas definitorias de las
relaciones monetarias interna-
cionales. Por lo tanto es evidente
la necesidad de formular un nuevo
modelo, uno que resulte más conveniente para
la adecuada comprensión del tema, que consi-
dere tanto a los agentes privados como al Es-
tado, tratando de ponderar su justa relevancia
en la configuración del sistema monetario in-
ternacional.
Para comprender de mejor manera el esta-
do actual de la geografía monetaria y para
entender el por qué se requiere una nueva
perspectiva del tema, es necesario llevar a
cabo una revisión histórica del dinero y del
contexto internacional en el que ha operado.
HISTORIA DE LAS RELACIONES
MONETARIAS INTERNACIONALES
Orígenes: El cobre fue la primera mercancía
metálica a usarse en la tarea de valuar otros
bienes. Su uso se remonta por lo menos al si-
glo XII a.c. en el medio oriente. Más tarde,
al avanzar la tecnología, se lograron extraer
otros metales, que se incorporaron al oficio
de ser medio de cambio: oro, plata, bron-
ce, hierro; Se moldeaban en ciertas figuras,
de práctico tamaño, que circula-
ban como dinero en tal forma.
El primer registro del uso de
monedas se encuentra en el
lejano oriente en el año 1022
a.c. durante la dinastía Chou.
En occidente los registros datan
del siglo VII a.c. en el Mediterráneo. Se
acredita al rey Gyges de Lydia, en el año 670
a.c., como el introductor de su uso.
En pos de dotar de credibilidad a las monedas,
se inició la práctica de grabarlas con imágenes
de figuras divinas. Tal tradición se extendió a
Grecia y a Persia, Estados que proveyeron las
monedas hegemónicas de los siglos V y IV a.c.
. El dominio de Roma llegó en el siglo III a.c.
y fue total: Al conquistar territorios, anula-
ban los derechos de estos para crear su propia
moneda. Por legislación, la única moneda ofi-
Anee a.c. Anee a.c.
65
cial era la romana. Por otra parte, fueron ellos
los que dotaron al oro de su preponderancia
histórica como activo de reserva, en tanto le
establecieron como el primer material de sus
monedas4
La implosión del Imperio Romano de Oc-
cidente implicó un cambio en la geografía
política, que trajo consigo un cambio en la
geografía monetaria. Se adoptó la tradición es-
colástica, en donde se asumía que el dinero era
una obligación moral personal, y por lo tanto
estaba fuera del ámbito del gobernante - El di-
nero era un aspecto en el que los gobernantes
no eran soberanos, sino sólo guardianes de los
derechos de las personas-, por lo cual no exis-
tió restricción legal al libre tránsito de mone-
4 No es de extrañar entonces, que ellos también hayan sido los innovadores en la práctica de reducir el con-tenido metálico de la moneda. Desde el periodo de Nerón (56-84 a.c.), se inició la práctica de experimen-tar la amalgamación de metales para acuñar monedas con menos metales valiosos, y así generar ingresos.
das. Dicho fenómeno dio origen a un pequeño
cúmulo de monedas, que por el poderío de los
Estados que las respaldaban5, o por la repu-
tación que habían adquirido6, en diferentes
periodos fungieron como monedas preemi-
nentes de uso internacional: bezant bizantino,
florín de Florencia, ducado de
Venecia, real de ocho novohis-
pano y el thaler austriaco.
2. Patrón oro. Para princi-
pios del siglo XIX, la visión
Westfaliana de la geografía
monetaria, que supuso el sur-
gimiento de monedas nacio-
nales, se impuso mundial-
mente gracias a las propias
tendencias políticas que veían en el Estado la
fuente del poder nacional. Helleiner (2003)
enumera los motivos, surgidos como con-
secuencia directa de proyectos políticos,
para la creación de monedas territoriales:
• Establecer mercados nacionales. Aumen-
tando los costos de transacción en el co-
mercio con el exterior y disminuyéndo-
les en el interior.
5 La moneda acuñada por aquel Estado que, en deter-minado periodo, sea hegemónico a nivel económi-co, goza de una ventaja evidente para convertirse en moneda internacional; Sus redes de transacción son las más amplias, lo cual incentiva la producción mun-dial, debido a la existencia de economías de escala. 6 Esto es, sobre la confianza de los usuarios, de que la can-tidad metálica de la moneda referida, es exacta y cierta.
Anee a.c. Anee a.c.
66
• El deseo de controlar la oferta monetaria
nacional. El fin inicial, sin embargo, no
era el promover el crecimiento econó-
mico ni mucho menos. La idea era crear
un monopolio monetario en un país que
se apegase lo mejor posible a un patrón
metálica que diera estabilidad a la mone-
da.7 No fue sino hasta después de la gran
depresión cuando se dio importancia
a la idea de la política monetaria como
instrumento activo de crecimiento eco-
nómico.
• Necesidad de financiamiento del Estado.
Los bancos centrales surgieron de facto
como entidades bancarias privilegiadas
que otorgaban financiamiento a los Es-
tados.
• Para enaltecer la identidad nacional. La
idea de tener una moneda sirvió como
instrumento de propaganda político que
enaltecía el poder y la importancia de la
nación misma.
El uso de diversos metales en la composición
de las monedas generaba varios problemas, en
tanto existía una tendencia a la depreciación
de aquellas de bajas denominaciones (gene-
ralmente en plata) respecto a las grandes (en
7 En efecto las ideas de David Ricardo primero y lu-ego de la Currency School en Inglaterra son ejem-plos claros de esta idea: Se buscaba un sistema que brindará estabilidad a la moneda, sólo eso.
oro).8 De tal manera que se ideó un esquema
en donde el oro fungiera como ancla nominal,
y donde se emitiera papel dinero redimible
en dicho metal.9 Tal sistema no era perfecto,
pero sirvió como estabilizador de precios en
el corto plazo. Gran Bretaña adoptó este el
patrón oro en 1816, Alemania en 1871 y EUA
en 1873. Dicho régimen se generalizó a la ma-
yor parte del mundo hacia 1894, dando inicio,
sin acuerdo formal alguno, a un primer siste-
ma monetario internacional, definido a través
de una regulación automática del flujo de oro
entre naciones10. Este duró hasta la primera
guerra mundial, cuando los países europeos
en pos de financiar su esfuerzo bélico, tuvie-
ron que implementar una política monetaria
expansiva, abandonando la convertibilidad al
oro que les restringía. Acabado el conflicto
armado, se presentó un enorme problema de
inflación. En un afán de resolver dicho pro-
blema, en 1925 Inglaterra estableció un nuevo
modelo, fue éste una variación del patrón oro:
el patrón oro en barras.
Este sistema, propuesto originalmente por el
mismo David Ricardo, 11 retiró las monedas de 8 El gran problema del cambio pequeño le llamó el gran historiador monetario Carlo Cipolla.9 Fue Adam Smith el primero que expuso con claridad la noción de que existe un beneficio si se saca de la cir-culación al dinero especie y se le remplaza con una cir-culante de papel, pero anclado a un patrón metálico.10 El conocido mecanismo de flujo especie-dinero, postu-lado por primera vez por David Hume.11David Ricardo expuso este modelo casi cien años antes, en 1824, en su texto The Plan
Anee a.c.
67
oro como monedas de curso legal y las rem-
plazó en su totalidad por moneda fiduciaria,
a su vez estableció que la convertibilidad de
este dinero, respecto al oro, sólo era efectiva
para el intercambio por barras de peso consi-
derable.
Con el tiempo, el nuevo sistema centralizó
el oro en las autoridades monetarias de cada
país, que en pos de ahorrarse movimientos de
oro innecesarios, empezaron a acumular tam-
bién moneda extranjera como activo de reser-
va, dando inició así a un nuevo sistema mone-
tario: el patrón oro cambio. Los países ya no
fijaban el valor de su moneda de acuerdo al
oro, sino de acuerdo al valor de las monedas
de reserva. Al ser Londres y Nueva York los
principales centros financieros mundiales, las
monedas de aquéllas ciudades se convirtieron
pronto en las monedas de reserva más impor-
tantes.
for the Establishment of a National Bank.
A raíz del crack de 1929, los distintos gobier-
nos mundiales abandonaron toda cooperación
monetaria existente e implementaron medidas
proteccionistas, para proteger sus mercados y
para evitar la fuga de oro. El periodo de en-
treguerras entonces se caracterizó por ser un
campo de batalla comercial a través de deva-
luaciones competitivas por parte de los distin-
tos Estados.
3. Bretton Woods. El sistema monetario in-
ternacional fue replanteado acabada la segunda
guerra mundial, en la conferencia de Bretton
Woods. Ahí se propuso crear un sistema que
proporcionase estabilidad monetaria mundial
y que estuviese acorde a las necesidades del co-
mercio internacional. Se basaba en un acuerdo
político mundial en el que Estados Unidos ase-
guraba una convertibilidad fija entre el dólar y
el oro12, mientras que el resto de los gobiernos
garantizaban un tipo de cambio estable entre
12 35 dólares la onza de oro fino.
Anee a.c.
68
sus monedas y el dólar. Dicha estabilidad mo-
netaria estaría sustentada en una nueva ins-
titución, el Fondo Monetario Internacional,
que tendría la misión de proveer divisas a los
distintos países que lo requirieran, para así po-
der evitar la devaluación de su moneda local.
El sistema Bretton Woods se resquebrajó a fi-
nales de los años 60 a raíz de las políticas eco-
nómicas estadounidenses, enfocadas a lograr
un mayor gasto público, de expansión fiscal y
monetaria.13 Dicho acto ocasionó un aumento
en la inflación que tampoco ayudó a desatas-
car la economía14. Estos sucesos
desembocaron en un evidente
desequilibrio entre la cantidad
de dólares existentes y el oro, lo
cual cimbró incertidumbre en
la economía mundial.
A mediados de 1971 el presi-
dente de EUA declaró la in-
convertibilidad del dólar res-
pecto al oro, acción que detonó
la desarticulación del sistema
Bretton Woods. El acuerdo
Smithsoniano, firmado a finales de 1971 por
el G-10, tuvo como objetivo restablecer las
paridades fijas entre las monedas, sin embargo
13 Debido a la guerra de Vietnam, y a planes am-biciosos de educación pública y desarrollo urbano.14 Se experimentó estanflación: estancamiento económico junto a inflación.
fracasó ante la falta de un ancla nominal que
pusiese restricciones a la expansión monetaria
estadounidense; Ante el aumento de la oferta
monetaria en dólares, el resto de los países, en
pos de mantener un tipo de cambio estable,
se vieron obligados a adquirir más dólares,
expandiendo así su misma oferta monetaria e
imponiendo inflación en sus respectivas eco-
nomías. Esto degeneró en 1973 en un conven-
cimiento general, de los distintos gobiernos
mundiales, de que el sistema de paridades fi-
jas de tipo de cambio era perjudicial para sus
economías, iniciando así la era del sistema de
tipos de cambios flexibles (Chapoy 1998).
4. Tipos de cambio flotantes. En 1976, en
la llamada Reunión de Jamaica, se modificó
la reglamentación del FMI, en pos de legali-
Anee a.c. Anee a.c.
69
zar el sistema de tipos de cambio flexibles. La
economía mundial pasó a modelarse a través
de decisiones de política económica hechas
de manera autónoma por los distintos países,
sin tener en consideración los efectos que es-
tas pudieran tener en el resto del mundo. Esto
significó un viraje de la política mundial, al
dar más importancia a los flujos de capitales
sobre los flujos comerciales (en contraste con
el sistema Bretton Woods que establecía exac-
tamente lo contrario)15.
Tal situación derivó en un cambio
de facto de la geografía monetaria
internacional, en la que los agentes
privados empezaron adquirir un pa-
pel mayor; El dólar estadounidense,
conservó su poder como moneda
hegemónica mundial, en tanto dos
cuestiones: a) El plan Volcker de
1978 aumentó las tasas de interés en
EUA, y por lo tanto incrementó el
flujo de inversiones en dólares. b) No existía
otra moneda en el mundo que pudiese servir
de alternativa.
La falta de un acuerdo internacional se hizo
manifiesta cuando dichas medidas estaduni-
denses, que fueron tomadas considerando sólo
15 Tal situación se derivó de un incremento en importancia en los flujos de capitales privados. Como bien señalan Steil y Hinds, antes la cuenta de capitales servía para ajustar la cuenta corriente, ahora sucede lo contrario: la cuenta de corriente se adecua a la cuenta de capitales (2009:208-211).
objetivos domésticos, repercutieron negativa-
mente en el resto del mundo, ya que ante la
subida de las tasas de interés en EUA, el resto
de los países se vieron obligados inercialmente
a subir las suyas (en pos de no perder capita-
les), lo cual degeneró en una contracción mo-
netaria mundial que resultó en una recesión
internacional.
El reconocimiento de que hacía falta una ma-
yor intervención gubernamental directa en el
sistema monetario internacional llevó a que
en enero de 1985 se llevara a cabo una im-
portante reunión entre ministros de finanzas
y presidentes de los Bancos Centrales de los
países del G-5, que concluyó con el Acuerdo
Hotel Plaza. Donde se acordó que los tipos
de cambio deberían reflejar con mayor exac-
titud la “realidad económica” existente, y por
ende se convino que lo más adecuado era la
Anee a.c. Anee a.c.
70
depreciación del dólar, en pos de aliviar los
problemas de déficit comercial que tenia EUA
(pretendiendo corregir también los problemas
ligados de superávit comercial de Alemania y
Japón)16.
A más recientes fechas, no se percibe la posi-
bilidad de lograr acuerdos mayores para una
regulación monetaria internacional. Por otra
parte, el advenimiento del euro ha significa-
do un primer reto a la hegemonía monetaria
estadounidense. También ha surgido un nue-
vo jugador monetario importante: China, que
siendo ya la segunda economía más grande del
planeta, tendrá que adecuarse a su papel a tra-
vés de una mayor liberalización de su régimen
monetario.
A su vez, y más importante aún, resulta el visua-
lizar los posibles efectos de una competencia
privada en la oferta monetaria de los Estados,
entiéndase, la posibilidad de que las empresas
puedan empezar a producir su propio dinero.
EL PAPEL DEL ESTADO EN LAS RELACIO-
NES MONETARIAS
1. SOBERANÍA MONETARIA. La literatura
convencional usualmente sitúa al concepto
de “soberanía monetaria” como un referen-
16 Dicha meta no se logró, en tanto el déficit comercial de EUA siguió aumentando. Y la depreciación nominal del dólar sólo resultó en el corto plazo. Para 1990 el dólar se había vuelto a apreciar a casi sus niveles de 1980.
te en el posicionamiento de un Estado dado
respecto al sistema monetario internacio-
nal vigente. Sin embargo, y como lo señala
Kurt Schuler (2003), no existe una defini-
ción concreta para tal acepción. La concep-
ción de soberanía monetaria, por lo tanto,
adquiere diferentes interpretaciones, como:
• Que es un ejercicio legítimo de auto-
ridad por parte del gobierno nacional.
• Que pertenece al ámbito del gobierno
nacional, y no a ningún otro nivel de
gobierno, o a otro cuerpo institucional
que no sea el gobierno.
• El banco central, a través de una políti-
ca monetaria discrecional, personifica
el más alto grado de soberanía mone-
taria.
• Un esquema de tipo de cambio flotante
significa un mayor grado de soberanía
monetaria que un sistema referenciado
o fijo.
• Una nación retiene siempre el derecho
legítimo de cambiar sus acuerdos mo-
netarios según el gobierno decida.
• Las circunstancias internacionales
pueden limitar el grado efectivo de so-
beranía monetaria.
Anee a.c. Anee a.c.
71
Se puede concluir que con soberanía moneta-
ria, generalmente nos referimos, a la situación
ideal supuesta por el modelo Westfaliano, en
el que el Estado es el único ac-
tor en las relaciones monetaria,
es decir, a una economía donde
el Estado tiene el monopolio
de la emisión monetaria.
Las ventajas específicas que los
gobiernos obtienen a través
del monopolio en la emisión y
control de la moneda, son:
a) Simbolismo político.
La moneda territorial
promueve el sentido de
pertenencia a una colec-
tividad, y puede ser un
símbolo nacional a la par de la bandera,
el himno, etcétera. A destacar dos vías
por las cuales la moneda doméstica ha
servido este fin: primero, al ser emitida
por una autoridad central, recuerda a
los ciudadanos la conexión con el Esta-
do, y segundo, a través de su uso diario,
recalca el hecho de que cada individuo
pertenece a una misma entidad social.
b) Señoreaje. Representa la capacidad
del Estado a través de su monopolio
monetario de generarse ingresos por
la emisión de dinero. Existen dos re-
quisitos institucionales para que el
señoreaje opere adecuadamente: pri-
mero, la política monetaria debe estar
subordinada a los designios de la po-
lítica fiscal, y segundo, no debe existir
una moneda alterna que circule como
substituta a la moneda doméstica.
c) Función de prestamista de última ins-
tancia. La autoridad monetaria del Es-
tado puede brindar cuanta liquidez sea
necesaria, actuando como garante del
sistema bancario doméstico.
Anee a.c. Anee a.c.
72
d) Manejo macroeconómico. El poseer el
control de la base monetaria, provee al
gobierno de una herramienta econó-
mica que puede ser usada de dos ma-
neras: 1) a través de una manipulación
de la oferta monetaria (lo cual incide
en otras variables como la producción,
empleo, tasas de interés, inflación17; 2)
sirve para modificar el tipo de cam-
bio, y con ello, las relaciones comer-
ciales de la nación con el exterior.
e) Aislamiento monetario. El emitir la
moneda de uso local provee al Estado
de una autoridad política mayor, en
tanto no se supedita a los designios de
otra entidad ajena.
2. JERARQUÍA MONETARIA. Sin embargo,
como apuntan Cohen y Schuler, tal esquema
ideal se diluye de acuerdo a la posición real de
cada Estado en las relaciones monetarias in-
ternacionales. Cohen construye una pirámide
en la que cataloga a las monedas, y a los Esta-
dos que las emiten de acuerdo a su jerarquía
en la nueva geografía monetaria internacional
(2004, p.14-17):
17 Existe un amplio debate académico respecto al tema; ¿Qué tanto puede la política monetaria influir en la economía real? La revolución keynesiana dotó al gobierno de un respaldo académico en pos de tratar de incrementar el producto y el empleo, a través del aumento de la oferta monetaria. Por otra parte, la contrarrevolución monetaris-ta, y luego la crítica de los nuevos clásicos, presentó el caso de que tal accionar sólo afecta los niveles de inflación.
a) Moneda sobresaliente. Este rango está
reservado para las monedas que poseen
una confianza universal y dominan los
procesos internacionales monetarios
(y por ende su dominio autoritativo no
está limitado a ninguna región geográ-
fica). Actualmente el dólar estadouni-
dense es la única moneda que se sitúa
en esta categoría.
b) Moneda Patricia. Son monedas que se
usan sustancialmente en los procesos
monetarios mundiales, pero no al nivel
de la moneda sobresaliente. El euro y
quizás el yen japonés pueden ser in-
cluidos en esta categoría.
c) Moneda Élite. Monedas que son sufi-
cientemente atractivas para calificarse
como monedas internacionales, pero
con poca influencia más allá de sus
fronteras nacionales. La libra esterlina
inglesa, el franco suizo, y el dólar aus-
traliano califican como monedas élite.
d) Moneda Plebeya. Monedas modestas,
de uso internacional limitado, que sin
embargo conservan un dominio auto-
ritativo sobre su territorio. Este grupo
se ve conformado por las monedas de
los pequeños países industriales (No-
ruega y Suecia), de algunas naciones de
Anee a.c. Anee a.c.
73
ingresos medios (Corea del Sur, Israel
y Taiwán) y de los Estados producto-
res de petróleo (Arabia Saudita, Emi-
ratos Árabes Unidos, Kuwait).
e) Moneda Impregnada. Monedas cuyo
domino autoritativo se ve compro-
metido incluso dentro de su territorio
nacional, en tanto ocurre un fenómeno
de sustitución de la moneda18. Muchos
países latinoamericanos y ex soviéticos
entran en esta categoría.
f) Cuasi-Monedas. Monedas que se ven
suplantadas en su territorio por mone-
das extranjeras, tanto en el uso reserva
de valor como en los otros dos (unidad
de cuenta y medio de pago). La moneda
nacional existe pero su dominio es más
jurídico que real. Casos como los de
Azerbaiján, Bolivia, Camboya y Laos,
son ejemplos de países en esta categoría.
g) Pseudos-Moneda. Monedas que sólo
existen en nombre. El ejemplo más cla-
ro es el Balboa panameño (totalmente
subordinando al dólar estadouniden-
se), y otras monedas que operan bajo
18 Esto es, la moneda local sigue siendo usada como medio de cambio y unidad de cuenta en el territo-rio nacional, pero se encuentra comprometida en la función de reserva de valor por una moneda foránea.
esquemas de cajas de convertibilidad u
otros regímenes fijos de tipo de cam-
bio.
Por ende, es obvio que la nueva geografía mo-
netaria afecta de manera distinta a los Estados
situados en la cúspide de la pirámide mone-
taria respecto a los que se encuentran debajo.
3. Estrategias del Estado ante la nueva geogra-
fía monetaria
Dada esta clasificación, los gobiernos, en la
elección de su sistema monetario, pueden
adoptar cuatro tácticas específicas (Cohen
2004, pp. 36-37):
a) Liderazgo de mercado. Política unilate-
ral agresiva para la promoción del di-
nero local.
b) Preservación de mercado. Política uni-
lateral que pretende mantener el status
quo, preservando el dominio autorita-
tivo de la moneda nacional.
c) Seguimiento de mercado. Política de
subordinación monetaria, que se refie-
re al acto de referenciar o fijar el valor
de la moneda doméstica respecto a una
foránea.
d) Alianza de mercado. Política de colu-
sión, en la que se comparte la soberanía
Anee a.c. Anee a.c.
74
monetaria. Esto es, el Estado cede par-
te de su autonomía en tanto acuerda,
con otros Estados el establecimiento
de una institución monetaria común.
Aquellos países ubicados en lo alto de la pi-
rámide monetaria, generalmente aplican el es-
quema agresivo19, obteniendo varias ventajas
de tal posición:20
• Adquieren mayores ingresos por el lla-
mado señoreaje internacional;
• Incrementan la flexibilidad de su polí-
tica monetaria;
• Obtienen prestigio en las relaciones
exteriores;
19 Cabe destacar la posibilidad de que un país hegemónico no elija la estrategia agresiva. Por ejemplo Alemania que prefirió una alianza monetaria (por motivos políticos).20 Sin embargo, también existen límites a estos beneficios: El poder monetario se puede erosionar debido a la excesiva emisión de tal moneda, pudiendo incentivar el ascenso de otras monedas competidoras.
• Ganan poder político, en tanto los
otros países se hacen dependientes de
su moneda.
Para el resto de los países sólo quedan tres
opciones: defender, compartir o subordinar
su soberanía monetaria. La elección obvia,
es tratar de preservar la soberanía moneta-
ria. Para tal efecto, los Estados cuentan con
dos vías:
• La persuasión, donde se intenta incre-
mentar el prestigio y credibilidad de la
moneda nacional. El gobierno se so-
mete a las reglas y preferencias de los
capitales privados que buscan un desti-
no de inversión estable y que le indican
que la disciplina fiscal es esencial.
• La coerción en la que se implementan
trabas legales para el uso doméstico de
monedas foráneas. Esto es, a través de
la imposición de controles de capitales.
Sin embargo, la competencia monetaria in-
ternacional cada vez dificulta y hace más
costosa la defensa de la moneda nacional
(Cohen 1998, 2004; Steil y Hinds, 2009).
Es por eso que a últimas fechas, algunos
países han preferido la opción de “sub-
contratar” las monedas de otros países.
Anee a.c. Anee a.c.
75
Los factores que inciden en elección entre de-
fender, compartir o subordinar su soberanía
monetaria son los siguientes (Cohen, 2004,
pp. 99-104);
a) Costos de transacción. El mayor bene-
ficio de una menor cantidad de mone-
das internacionales es la disminución
en los costos de transacción (Disminu-
yen los costos administrativos, incen-
tiva el funcionamiento estable de los
mercados financieros, puede significar
una disminución en las tasas de interés
para países con problemas de falta de
credibilidad).
b) Estabilización macroeconómica. Su-
bordinar, y en menor grado compar-
tir, la soberanía monetaria representan
un costo: los países pierden la habili-
dad de generar una política monetaria
propia. Sin embargo, para gobiernos
que enfrentan problemas de credibi-
lidad o de dolarización de facto, sig-
nifica poca pérdida, en tanto tal ha-
bilidad ya está altamente restringida.
c) Distribución del señoreaje. Subordi-
nar y en menor grado compartir, la
soberanía monetaria representan la
pérdida de ingresos por señoreaje.
Simbolismo político. El rol de la mone-
da, como símbolo de identidad nacio-
nal, implica que existe un “pérdida” in-
cuantificable en el caso de subordinar
o compartir la soberanía monetaria.
d) Influencia diplomática. La moneda na-
cional es considerada, hasta cierto pun-
to, como un instrumento de influencia
diplomática (Para los gobiernos hege-
mónicos puede servir para presionar a
otros países. Mientras, para el resto de
los países, el mantener una soberanía
monetaria aísla los efectos de tales po-
líticas monetarias agresivas de Estados
de alta jerarquía). Por lo tanto, el su-
bordinar o compartir la emisión mone-
taria involucra un costo real.
4. Competencia privada en la oferta monetaria
Los actores privados no sólo han adquirido
importancia como demandantes de dinero,
también han ido ganando terreno como ofe-
rentes de dinero21, lo cual representa una ame-
naza explícita al esquema Westfeliano.
El dinero electrónico resulta la modalidad más
referida del dinero privado; Su razón de ser se
encuentra en las facilidades de transmisión de 21 Es indudable que los agentes privados, como ya lo vimos, han jugado un papel importante como deter-minantes del dinero interno – dinero producido por la banca a través de las funciones que esta juega. Pero en esta sección se lidia sobre la idea de que los agentes privados también sean proveedores de dinero externo.
Anee a.c. Anee a.c.
76
información alrededor de todo el mundo, que
brindan las nuevas tecnologías.
Actualmente el dinero electrónico está respal-
dado en las monedas nacionales y opera bajo
las reglas convencionales del sistema de pagos,
pero es posible que en un futuro, cuando las
entidades privadas se animen a pelear por el
potencial de ingresos que brinda el señorea-
je, éste se vuelva una moneda en sí misma. La
idea parece utópica, pero básicamente emula
lo sucedido con el dinero fiat, que primero se
respaldó en activos metálicos, para luego fun-
cionar de manera independiente. Así, el dinero
privado, actualmente respaldado en monedas
de emisión estatal, puede emanciparse para
funcionar como un sistema monetario propio.
Esta competencia privada a la oferta de dinero
estatal, puede resultar en una reducción en el
rango de maniobra, de la política monetaria,
por parte del Estado: Las monedas privadas
podrían en efecto sustituir a las estatales, en
tal medida que el control monopólico del Es-
tado sobre su moneda serviría de poco, dado
que significaría el control sobre una moneda
que no es utilizada.22
La única forma en que el Estado puede pro-
tegerse ante tal eventualidad (surgimiento de
poderosas monedas privadas) es utilizando su
poder coercitivo, estableciendo reglas que se
opongan al uso de tales monedas.
CONCLUSIONES
La geografía monetaria representa la con-
cepción espacial del dinero, que es influi-
da por factores políticos y económicos. Te-
niendo al dinero como cualquier objeto que
goce de la confianza de la sociedad, y que
por lo tanto cumpla con ser medio de cam-
bio, unidad de cuenta y reserva de valor.
Actualmente las relaciones monetarias están
definidas tanto por el Estado como por agen-
tes privados. Es por eso que es necesario un
nuevo modelo de economía política que su-
22 Tal situación, nueva para los Estados hegemónicos, resulta familiar al escenario actual de los países con monedas domes-ticas plebeyas, que se ven limitados en su política monetaria, en tanto existe una dolarización de facto de sus economías.
Anee a.c. Anee a.c.
77
plante la visión tradicional Westfaliana que
caracteriza al Estado como el único jugador
importante.
Aún más, la historia monetaria expresa que
dicha visión Westfaliana resulta parcialmen-
te correcta sólo a partir del siglo XIX y hasta
1970. Antes de eso, en el Medioevo y el mun-
do antiguo, las monedas eran producidas de
manera privada y circulaban libremente sin
restricciones ni límites territoriales; después,
tras la liberalización financiera mundial, los
flujos de capital se han convertido en actores
preponderantes. De tal manera que esta nueva
geografía monetaria desafía la noción tradi-
cional de soberanía monetaria.
La reacción de los Estados a tal desafío, en
el ámbito monetario que antes dominaban
dependerá de la posición económica y po-
lítica en que estos se encuentren. Así pues
los Estados que se encuentren en la cúspi-
de monetaria gozarán de una ventaja y por
ende podrán beneficiarse de ella. Por otra
parte el resto de las naciones tendrán que ele-
gir entre tres opciones: Defender su sobera-
nía monetaria, subordinarla o compartirla.
Cualquier elección contrae costos y bene-
ficios, el futuro de las relaciones monetarias
dependerá del accionar específico de cada Es-
tado en esta nueva geografía monetaria.
Cabe destacar que la falta de una regulación
monetaria internacional por parte de los Es-
tados, puede incentivar la creación de institu-
ciones alternas no gubernamentales. Esto es,
el poder del Estado en el ámbito monetario
puede disminuir a tal punto que se vea despla-
zado por actores privados.
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Anee a.c.
A N E E n b r e v e . . .
V Asamblea Nacional de Representantes FECHA: 16,17y18deAgosto LUGAR: SanLuisPotosí,S.L.P. CONTACTO: www.facebook.com/alumnos.faceconomiauaslpCOSTO: $1,300PESOS
Foro RegionalOccidente6,7y8deSeptiembreMorelia,Michoacán.n Hospedaje 4 días 3 noches
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LUGAR: Cd.Juárez,Chihuahua.
CONTACTO: www.facebook.com/VISimposioANEE
SEDE: UniversidadAutónomadeCiudadJuárez
VI Simposio Nacional de Estudiantes de Economía
ConvocatoriaA la comunidad académica uni-versitaria, grupos y entidades de investigación en áreas afines a la Economía; a participar con trabajos de investigación ya sean con un enfoque de análisis a nivel global, nacional o local, que pue-dan ser publicados en la Revista VISIÓN ECONÓMICA núm. 2, Ju-lio – Diciembre de 2012. El propósito fundamental es fo-mentar la investigación en los estudiantes de licenciatura, es-timulando e incentivando esta actividad por medio de la publi-cación de los resultados obte-nidos en artículos de difusión y divulgación, que permitan el in-tercambio de conocimientos de las diferentes escuelas del pen-samiento económico. Es requisito básico que los traba-jos, en cualquiera de las modali-dades, no hayan sido publicados en ningún otro medio. La revista VISIÓN ECONÓMICA, acusará de recibido todos los documentos que lleguen para su dictamen. La publicación dependerá de la aprobación realizada por espe-cialistas en la temática y del Co-mité Editorial.
Los artículos de INVESTIGA-CIÓN, deberán ser escritos con letra Times New Roman, núme-ro 12, espacio 1.5, en una ex-tensión de 20 cuartillas máximo (excluyendo notas y referencias bibliográficas), mientras que LAS RESEÑAS, ENSAYOS Y ARTÍCU-LOS DE DIVULGACIÓN entre 5 y 10 cuartillas.
ANEE.MDN MDN_ANEE ANEEAC
Los trabajos se recibirán del 23 de julio al 10 de octubre de 2012 y deberán ser enviados en proce-sador de textos Microsoft Word al correo electrónico:
Los trabajos deberán presen-tarse acompañados de la si-guiente información:
1) Nombre del autor e institu-ción donde estudia.2) Resumen curricular (máximo 10 líneas) 3) Número de teléfono y correo electrónico.4) Resumen con 5 palabras cla-ves (15 líneas máximo).5) Las reseñas con la ficha bi-bliográfica completa.6) Los cuadros, gráficas o imá-genes deberán estar numeradas y con la fuente respectiva.7) Las referencias deben pre-sentar el formato APA:
a) Interior del texto: apellido del autor, año y número de pá-gina de consulta entre parén-tesis. b) Libros: apellidos del autor (es), nombre (s), año entre pa-réntesis. Nombre del libro en cursiva, país, editorial. c) Revistas: apellidos del autor (es), nombres, año entre pa-réntesis, nombre del artículo o capítulo entre comillas, nom-bre de la revista consultada en cursiva, país, editorial.d) Página web: apellidos del autor (es), nombres, nombre del artículo o capítulo, nom-bre de material consultado, di-rección electrónica y fecha de consulta.
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