Formación De Adultos

Sesión III

Enseñanzas de Pablo

Jorge Ayona

La paciencia de nuestro Señor juzgadla como salvación, como os lo escribió también Pablo, nuestro querido hermano, según la sabiduría que le fue otorgada. Lo escribe también en todas las cartas cuando habla en ellas de esto. Aunque hay en ellas cosas difíciles de entender, que los ignorantes y los débiles interpretan torcidamente como también las demás Escrituras para su propia perdición.

2 Pedro 2,15-16

Enseñanzas De San Pablo

Centralidad De Cristo En San Pablo

Desde el momento de su conversión, Jesús lo es todo para San Pablo.

Es el principio vital de su existencia Gál 2,20

Es el que lo amó Gal 2,20

Es la prioridad de su vida. Fil 3,7-8

Es el que lo capacita para todo 2Cor 12

Es la aspiración de su vida Fil 1

San Pablo nos desafía a conocer a Dios...

"Así que en adelante ya no conocemos a nadie según la carne. Y si conocimos a Cristo según la carne, ya no le conocemos así" (2 Co 5, 16).

Conocer "según la carne", de modo carnal, quiere decir conocer sólo exteriormente, pero al conocer a alguien así, no se le conoce realmente, no se conoce el núcleo de la persona.

Sólo con el corazón se conoce verdaderamente a una persona.

No es el encuentro con una doctrina, institución sino con la persona del Resucitado.

Enseñanzas De San Pablo

La IglesiaEn San Pablo

La palabra Ekklēsía aparece por primera vez en la obra de san Pablo, que es el primer autor de un escrito cristiano.

Veamos esto en el inicio de la primera carta a los Tesalonicenses, donde san Pablo se dirige textualmente "a la Iglesia de los Tesalonicenses".

Referencias: Col 4, 16, 1 Co 1, 2; 2 Co 1, 1Ga 1, 2 etc.)

El persiguió a "la Iglesia de Dios".

La calificación "de Dios" implica

no es una asociación humana, nacida de ideas o intereses comunes, sino de una convocación de Dios.

La Iglesia: Misterio Y Sacramento

San Pablol anuncia a Cristo 'conforme... a la revelación de un misterio mantenido en secreto durante siglos enteros, pero manifestado al presente' (Rom 16, 25.26).

Misterio Escondido(Col 1, 26.27)

El término 'sacramento' puede aplicarse a la Iglesia. Esta es el signo de la salvación realizada por Cristo y destinada a todos los hombres mediante la obra del Espíritu Santo.

Es un signo visible: la Iglesia, como comunidad del pueblo de Dios, tiene un carácter visible.

Es un signo eficaz, pues la adhesión a la Iglesia otorga a los hombres la unión con Cristo y todas las gracias necesarias para la salvación.

Al encontrarse con Cristo, Pablo entendió que la convocatoria de Dios se extendía a todas las naciones. Judíos y Gentiles son ahora la “Iglesia De Dios”, nuevo Pueblo de Dios. Ef , Gál

Esto marca una continuidad de la revelación: Dios ha llamado un pueblo para sí; lo hizo con Israel, ahora con la Iglesia.

Imágenes de la Iglesia :Pueblo de Dios

Imágenes de la Iglesia :La Cabeza y El Cuerpo

El concepto paulino de 'cabeza' (Cristo)cabeza del cuerpo que es la Iglesia) significa :

En primer lugar el poder que le pertenece sobre todo el cuerpo: 'bajo sus pies sometió todas las cosas y le constituyó cabeza suprema de la Iglesia' (Ef 1, 22).

En segundo lugar, Como cabeza, Cristo transmite a la Iglesia-cuerpo su vida divina, 'a fin de que crezca 'en todo hasta aquel que es la cabeza, Cristo, de quien todo el cuerpo recibe trabazón y cohesión por medio de toda clase de junturas que llevan la nutrición según la actividad propia de cada una de las partes, realizando así el crecimiento del cuerpo para su edificación en el amor' (Ef 4, 15 16).

La condición para participar en la vida del cuerpo es la unión con la cabeza, 'de la cual todo el cuerpo, por medio de junturas y ligamentos, recibe nutrición y cohesión, para realizar su crecimiento en Dios' (Col 2, 19).

Imágenes de la Iglesia :La Cabeza y El Cuerpo

La Cabeza y El Cuerpo 1 Cor 12

Universalidad : 1 Cor 12,13.

Unidad y Diversidad. Diversos Carismas 1 Cor 12

Orden – Que deben ser ejercidos ordenadamente 1Cor 14

la doctrina de la Iglesia como cuerpo de Cristo-cabeza tiene una relación muy intima con la Eucaristía.1 Cor 10, 16-17

Imágenes de la Iglesia : El Matrimonio.

San Pablo afirma la relación esponsal de la Iglesia con Cristo en el libro de Efesios. Efesios 5

Amor

Cuidado

Sumisión

Crianza“Grande es este miserio” - Mysterion =

Sacramentum

Santuario de Dios. 2 Corintios 6,16

Columna y Fundamento de la verdad 1 timoteo 3,15

Enseñanzas De San Pablo

La Justificación En San Pablo

¿Qué Entendemos Por Justificación?

Todo parte de como definimos el concepto de “justificación”.

“justificación” es el término teológico usado para referirse a la base por la que el hombre puede ir al cielo. Es el medio por el cual un pecador es “justificado” o “hecho recto ante Dios”.

Como Dios es perfecto, trascendente y santo, y el hombre imperfecto, mortal y pecador, debe haber una razón “justa” por la que Dios permita a tan baja criatura vivir con Él para siempre.

¿Qué Entendemos Por Justificación?

Como Dios tiene que preservar su honor y santidad, no puede aceptar sin más a los hombres en el cielo sin una buena y “justa” razón para hacerlo, pues, de otra manera, estaría comprometiendo su propio carácter divino.

Para justificar nuestra entrada en el cielo, Dios debe permanecer también justo, honorable y santo (Romanos 3,26).

Cuando san Pablo se encontró con el Resucitado en el camino de Damasco era un hombre realizado:

Irreprensible en cuanto a la justicia que deriva de la Ley (cf. Flp 3, 6)

Superaba a muchos de sus coetáneos en la observancia de las prescripciones mosaicas

Era celoso en sostener las tradiciones de sus padres (cf. Ga 1, 14).

La luz de Cristo lo cambió radicalmente. De allí en adelante todo lo anterior, lo tuvo por basura. Flp 3, 8

Para comprender esta enseñanza, es necesario primero comprender las creencias de Pablo el fariseo como judío:

Pablo, al hablar de “la ley” asumiendo la interpretación farisaica de la misma: La Torá, la Halajá. Si bien el Talmud como tal no estaba escrito, la tradición oral del mismo estaba vigente.

Según el judaísmo: “para justificar al hombre Dios le ha dado un instrumento adecuado: la Ley”.

Toca al hombre el cumplimiento estricto de la ley con todos sus preceptos y disposiciones. Tiene la capacidad para ello, y por ser libre puede hacerlo. Los judíos, hasta hoy no creen el el pecado original.

Si el hombre cumple la ley, Dios debe declararlo justo. Por tanto, alcanza la salvación.

Sí no cumple la ley (a la manera farisea), entonces Dios lo declara réprobo.

En el fondo, en esta doctrina no es Dios quien justifica y salva al hombre; es este último quien se autojustifica y se autorredime.

Cristo, para ellos, sobra; está de más.

Somos justificados por la fe... no por la “sola fe”.

Fides qua indica el acto mismo con que el creyente, bajo la acción de la gracia, confía en Dios que se revela y asume el contenido de la revelación como verdadero.

Fides quae indica el contenido de la fe que es aceptado por el creyente, las diversas verdades de fe que son acogidas o creídas como una sola cosa, en un solo acto.

La fe obra por el amor y se evidencia en obras.

La justificación conforma al individuo con Cristo. Gal 5,6; Santiago 2,24

CEC 1989... “La justificación no es solo remisión de los pecados, sino también santificación y renovación del interior del hombre” (Concilio de Trento: DS 1528).

CEC 1990 La justificación libera al hombre del pecado que contradice al amor de Dios, y purifica su corazón.

CEC 1991 La justificación es, al mismo tiempo, acogida de la justicia de Dios por la fe en Jesucristo. La justicia designa aquí la rectitud del amor divino.

Con la justificación son difundidas en nuestros corazones la fe, la esperanza y la caridad, y nos es concedida la obediencia a la voluntad divina.

CEC 1992 La justificación nos fue merecida por la pasión de Cristo,

La justificación es concedida por el Bautismo, sacramento de la fe.

La justificación establece la colaboración entre la gracia de Dios y la libertad del hombre.

La justificación es la obra más excelente del amor de Dios, manifestado en Cristo Jesús y concedido por el Espíritu Santo. San Agustín afirma que “la justificación del impío [...] es una obra más grande que la creación del cielo y de la tierra” [...] porque “el cielo y la tierra pasarán, mientras [...] la salvación y la justificación de los elegidos permanecerán”

El error luterano

La doctrina teológica de Lutero (1483-1545) tiene unas profundas raíces biográficas, que conviene conocer. De los agustinos de Erfurt había recibido una mala formación filosófica, nominalista, y una mala teología de la gracia, voluntarista o semipelagiana.

El hombre está totalmente corrompido por el pecado, y lo mejor es reconocerlo con todas sus consecuencias. «El hombre peca siempre, aun cuando intente obrar el bien. El hombre está tan corrompido que ni siquiera Dios puede rescatarle de su podredumbre: lo único que es posible a Dios es no tener en cuenta sus pecados, no imputárselos legalmente» (L. F. Mateo Seco, Martín Lutero: sobre la libertad esclava, Madrid 1978, 18).

El hombre no es libre, perdió su libertad al corromperse. Es inútil, pues, que siga atormentándose la conciencia con la ilusión psicológica de su pretendida libertad. La libertad es irreconciliable –con la realidad del pecado original, que corrompió todo lo que es el hombre, también su libertad; –y es inconciliable con la redención de Cristo, que sería superflua si el hombre fuera libre (18,786).

Sola fides. Por tanto el cristiano se salva por la fe, no por las obras. La justificación cristiana es necesariamente sólo declarativa, pasiva, «imputativa» (WA 56,287). Simplemente, por la fe en el Salvador, no tiene Dios en cuenta el pecado del creyente. Y aunque las buenas obras son convenientes, como expresión de la fe, en modo alguno han de considerarse como necesarias para la salvación. Incluso pueden ser peligrosas, cuando debilitan la fe fiducial

Sola gratia. No es posible que las buenas obras sean necesarias para la salvación. Si fueran necesarias, todos los hombres se condenarían, pues todos son pecadores y han de pecar inevitablemente.

Enseñanzas De San Pablo

La Evangelización En San Pablo

El Magisterio De Los Papas

El Papa Benedicto XVI nos decía hablando de él: “En el apostolado de San Pablo no faltaron dificultades, que afrontó con valentía por amor a Cristo”. Ver Catequesis durante el año Paulino

El Papa Francisco, en Evangelii Gaudium nos da algunos alcances:

La urgencia por comunicar el Evangelio EG9 1 Cor 9,6,

Conciencia de la propia debilidad y confianza en la gracia EG 85; 2 Co 12,9

Para todos los pueblos EG 113, Gál 3,28

Todo cristiano es misionero, sin excusas. EG 120 -121; Flp 3,12-13

La importancia de predicar. EG (EG 136); Rm 10,14-17

Predicar no para los hombres (1 Ts 2,4)” (EG 149).

La vida cristiana como camino de crecimiento en el amor: Gal 5,14; 1 Ts 3,12; EG 161 

Pablo, modelo de acompañamiento personal EG 173 (Tt 1,5; cf. 1 Tm 1,3-5

La opción por los pobres EG195;Ga 2,10

San Pablo y la fuerza misionera de la oración de intercesión. EG 281; Fil 1,4-7

Muchas Gracias...