Publicación del Consejo Empresarial Colombiano para el Desarrollo Sostenible - Edición No. 4 - Julio 2014

ECOEFICIENCIAMás valor con menos impacto

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Pg 2. Editorial Pg 3. Marco Teórico: Ecoeficiencia

Pg 5. Entrevista: Bar Van Hoof - Académico Experto Ecoeficiencia

Pg 7. TEAM: Procesos Industriales Ecoeficientes

Pg 9. Entrevista: Oscar Vargas - Secretaría Distrital de Ambiente

Pg 11. ISAGEN: Uso de Energías Alternativas para la Gestión Hidrológica

Pg 13. Perfil: José Vicente Mogollón

Pg 13. Recomendado del mes

Pg 14. Opinión: Guillermo Camacho Cabrera

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LLa ecoeficiencia es un concepto desarrollado por el World Business Council for Sustainable Development (WBCSD), basado en lograr la eficiencia económica simultáneamente con la eficiencia ecológica. Producir más con menos siempre ha tenido sentido para las empresas.

Tradicionalmente se ha tenido una tendencia a buscar la eficiencia en los temas ambientales enfocándose en la reducción de los residuos, pero esto es insufi-ciente. Se requiere no solamente reducir los residuos sino reducir adicionalmente el consumo de materiales. También se requiere pensar en nuevas formas de sa-tisfacer las necesidades de los consumidores, y los consumidores a su vez deben buscar como satisfacer sus necesidades a través de servicios más que adquirien-do bienes materiales. La sociedad debe considerar las formas de evitar que los productos una vez terminan su vida útil se conviertan en residuos, recuperando los materiales y convirtiéndolos en materias primas para elaborar nuevos produc-tos, esto permitiría producir más bienes con menos extracción de materiales de la tierra.

No debemos pasar por alto la importancia del uso eficiente de la energía, mediante buenas prác-ticas y desarrollos tecnológicos. Como ejemplo tenemos la evolución de la iluminación que utili-zó bombillos incandescentes, luego bombillos de bajo consumo y ahora la iluminación con LED, los cuales consumen aún menos energía. También debemos considerar la generación de electrici-dad con fuentes de energía más limpias y preferi-blemente renovables.

Como vemos los campos de acción de la ecoe-ficiencia son muchos y solamente están limitados por la capacidad de innovación, la cual no tiene límites, pero se requiere de un trabajo conjunto del gobierno, la sociedad y las empresas. Ninguno de estos tres actores por si solo nos puede proporcionar un mundo ecoeficiente, el estado nos debe proveer el marco regulatorio y tributario que apoye las empresas ecoefi-cientes, las empresas deben utilizar su capacidad de innovación para proveer soluciones ecoeficientes a las necesidades de los consumidores y los consumi-dores deben utilizar su poder de guiar los mercados para apoyar los productos ecoeficientes. Solo de esta forma lograremos un mundo donde los recursos natu-rales alcanzarán para satisfacer las necesidades de todos de manera rentable y sin agotar las fuentes para las generaciones futuras.

Jaime Moncada Bernal Director de Programas - CECODES

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La Ecoeficiencia es la combinación idónea entre la excelencia de las metas de un negocio y el medio ambiente, de tal forma que se crea el vínculo donde pueda soportarse más adelante un proyecto de desarrollo sostenible. Es una gestión que impulsa a los negocios a buscar me-joras ambientales con beneficios económicos para la compañía. De este modo, se otorga un énfasis en la oportunidad de crecer y así mismo permite que las empresas se tornen ambiental-mente responsables y rentables en sí mismas.

Según el World Business Council for Sustainable Development –WBCSD-, la ecoeficiencia se lo-gra mediante la entrega de buenos resultados en el mercado, las necesidades básicas cubier-tas junto con la calidad de vida que se preste, mientras que se reducen impactos en el medio ambiente y en la utilización de los recursos del planeta que estén cubiertos por la capacidad que la tierra tiene.

Ecoeficiencia en la prácticaHan existido varios avances significativos en la aplicación de la ecoeficiencia. Por ejemplo, en el sector industrial muchas empresas han reconocido como exitoso la reducción de las emisio-nes de gases y la eliminación de materiales de alto riesgo en sus procesos productivos. Antes, las compañías solo veían en el desarrollo sostenible y el medio ambiente los riesgos y problemas que existían, actualmente ven mucho más que eso, se percatan de las oportunidades y recur-sos que se pueden utilizar en pro de un negocio.

La ecoeficiencia, vista desde una mejor perspectiva, trata de hacer más con menos, es decir, obtener mejores resultados de negocio utilizando menor cantidad de recursos. Dicho en su forma más simple, se trata de crear más bienes y servicios utilizando menos recursos, al tiempo que se generan menos desperdicios y contaminación.

Sin embargo, la ecoeficiencia no debería limitarse a obtener mejoras en las prácticas y hábitos de una compañía, debería también estimular la creatividad e innovación por la búsqueda de nuevos métodos para realizar los procesos industriales. Se convierte entonces en un gran reto para los ingenieros, compradores, representantes de un producto, comerciantes, especialistas en marketing e incluso el área de finanzas y revisión de control de una compañía, idear formas de aplicar esto en la realidad.

La ecoeficiencia además puede ser usada en las empresas como elemento integrador de la cultura empresarial, en otras palabras, incluirla dentro de las políticas o valores corporativos, visión y misión de la compañía. Se pueden plantear objetivos bajo esta temática que ayuden a la gestión, y por supuesto, también es bastante útil como una herramienta para monitorear información y facilitar la comunicación con sus grupos de interés.

Este concepto que le ha dado la vuelta al mundo, ha venido desarrollándose bajo criterios de reducción de emisión de gases y utilización del agua, hasta ser un conductor hacia la inno-vación e incluso incrementar niveles de competitividad en este sentido. Las empresas usan la ecoeficiencia para optimizar sus procesos, lograr que sus desperdicios sean nuevamente insu-mos en la producción y llevar a caminos donde la innovación dé nuevas funciones a sus pro-ductos. Así las oportunidades que ofrece la ecoeficiencia pueden emerger en cualquier punto del ciclo de elaboración y vida de un producto.

¿QUÉ ES LA ECOEFICIENCIA?

Algunos casos

Desde CECODES - Desarrollo Sostenible se implementan las reuniones de ‘Aprender compar-tiendo’ en las cuales por medio de visitas a empresas con programas de ecoeficiencia en sus plantas de producción se conoce cómo se llevó a cabo el mejoramiento a partir de la apli-cación de la ecoeficiencia. Este proceso es parte de la ‘gestión del conocimiento’, que tiene como principal objetivo lograr que distintas empresas conozcan este tipo de prácticas, comu-nicarlas y de esta forma transmitirlas a sus empresas.

• Corona logró reducir en el 2012 el consumo energético en sus procesos de fabricación sin al-terar la cantidad o calidad de sus productos. Igualmente redujo en 22 Toneladas las emiciones de CO2

• Bavaria usa menos agua para la elaboración de sus cervezas que el promedio de empresas cerveceras del mundo.

No es un remedioLa ecoeficiencia no debe ser el medicamento a problemas industriales y ambientales, debe ser parte de la estrategia constante del negocio. Así como una contabilidad correcta y transpa-rente, un fuerte foco de nuevas tecnologías y la cooperación de todos, la ecoeficiencia debe ser parte de esto para cumplir los objetivos de la organización.

Hay que tener en cuenta que para que la ecoeficiencia tenga éxito en una compañía, debe estar presente y clara en el corazón y mente de todos sus empleados, quienes necesitan com-prender qué es la ecoeficiencia, el valor que tiene llevar procesos bajo este concepto, y cómo hacerlo realidad. Está demostrado el valor que tiene el fuerte acercamiento de los empleados con este concepto y su aplicación, y el que tiene para la empresa implementar y motivar este tipo de acciones.

Este trabajo aún está en camino para llegar a ser un ideal. Pero debemos recordar que la ecoeficiencia cumple solo con dos de los procedimientos para lograr un desarrollo sostenible real, el ámbito económico y ambiental, pero para que realmente esté completo, es necesaria la parte social y donde cada integrante de la organización entienda y crea firmemente en el impacto que este tipo de procesos pueden llegar a tener en una sociedad.

En este orden de ideas, una compañía que lleve a cabo estos pro-cesos (mejorar la rentabilidad económica, disminuir los impactos medioambientales y la mejora en la calidad de vida en la socie-dad), se gana verdaderamente su licencia para operar, donde también innova, crece y se fortalece como compañía, con un negocio apoyado sobre el Desarrollo Sostenible.

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La ecoeficiencia es hacer más con menos. Prever los impactos ambientales a través de la op-timización de procesos y productos no solo disminuye la contaminación sino también genera eficiencia económica, lo que la convierte en una estrategia empresarial muy poderosa para poder poner en práctica la sostenibilidad en procesos industriales y agroindustriales.

La ecoeficiencia operacionaliza el desarrollo sostenible como un concepto macro. Esta tie-ne una aplicación muy práctica dado el alto flujo de materiales y energía transformada en las organizaciones, ya que a través de prácticas de optimización, re-uso, aprovechamiento y otros se procura hacerlos más eficientes. También tiene un impacto social importante ya que disminuye contaminación, contribuye al ofrecimiento de mayor seguridad para los empleados, hace más eficiente los proyectos, hace los fondos empresariales más estables y contribuye a la generación de empleo. La ecoeficiencia como estrategia tiene muchos beneficios y todos estos apuntan al desarrollo sostenible.

Hacer más con menos requiere un cambio en el paradigma. Uno de los grandes desafíos es que se necesita implícitamente un elemento de prevención, una mirada más sistemática que busque la causa de los problemas. La ecoeficiencia busca atacar y generar cambios en las causas de dichos problemas (ambientales, sociales, etc.). El cambio en el paradigma se gene-ra a nivel individual, se traslada a las organizaciones y escala finalmente en el resto de la socie-

dad. Estos cambios no son automáticos sino que toman sus tiempos necesarios.

En Colombia el concepto de la ecoeficiencia existe hace más de 20 años, ha venido siendo trabajado en diferentes niveles. Las empresas han juga-do un papel importante en el lado de la producción pero los consumidores también han jugado un papel determinante en la manera en cómo se usan muchos productos caseros. En Colombia existen desde finales de los años 90

políticas alineadas con la ecoeficiencia, el gobierno busca que las or-ganizaciones sean cada vez más sostenibles y trabajen de mane-

ra “limpia”, existen además entidades territoriales públicas que velan por el cumplimiento de estas políticas y también existen entidades privadas como CECODES que a través de prácticas de difusión, diseño e indicadores promueven las prácticas ecoeficientes.

Bart HoofVan

1. ¿Cómo definiría Usted el concepto de Ecoeficiencia?

4. ¿Cómo se está trabajando la temática en Colombia? ¿Qué hace falta?

3. ¿Cuáles son los retos que debe superar la ecoeficiencia para posicionarse como com-portamiento ideal de la sociedad y de la percepción de los individuos?

2. ¿Cuál es la importancia de la ecoeficiencia en la búsqueda del Desarrollo Sostenible?

Experto en la temática de Ecoeficiencia - Profesor de la Facultad de Administración de la Universidad de los

Andes.

La academia tiene el papel de generar nuevas capacidades, profesionales que utilicen la ecoe-ficiencia como un concepto básico de su formación y de su gestión a futuro. La ecoeficiencia es un paradigma que debe estar en todas las personas y no solo en los académicos porque es una lógica de hacer mejor las cosas y eso nos involucra a todos. Por otro lado, la academia aporta con la investigación generando un entendimiento para que se aplique mejor la temática, lo ante-rior gracias a la comunicación por medio de publicaciones que denoten los avances del con-cepto. La investigación ha permitido complementar a la ecoeficiencia con nuevos conceptos como la gerencia ambiental, ecología industrial, economía verde que son en sí la evolución del concepto macro.

Después de más de 25 años de existencia la ecoeficiencia ha demostrado ser un concepto muy válido y ha tenido efectos muy importantes y grandes. La escala de la ecoeficiencia está en que no debe ser vista solo como un paradigma empresarial, se debe ampliar la visión y potencializar el concepto para los consumidores y ciudadanos del común.

Las empresas deben generar capacidades no solo en una persona especializada sino en todos los empleados. Esta es una estrategia de mejoramiento continuo que se convierte en una estrate-gia cíclica que cada vez se complementa más y trae mejores resultados.

No es un tema cerrado, por el contrario, el aumento de su aplicación hace que cada vez existan más integraciones al concepto. Cada vez va dejando de ser un tema especializado y se está convirtiendo en una herramienta básica de todos los actores empresariales, es en ese punto en el que empiezan a aparecer beneficios cada vez más reales y aterrizados. La ecoeficiencia como concepto solo no soluciona todos los problemas, es necesario que existan nuevas aproximaciones que permitan encontrar respuestas.

Los medios de comunicación deben, no solo mostrar lo que es la ecoeficiencia y publicar los pro-yectos de algunas empresas, tienen también la labor de denunciar y señalar a quienes no están trabajando ecoeficientemente. Por otro lado, los medios y los periodistas tienen que ser los acto-res que eduquen a la sociedad, saliéndose del marco de los términos técnicos y especializados y poniendo a la ecoeficiencia en un lenguaje más entendible y común para todas las personas. Como mencioné, la ecoeficiencia es para todos, no es necesario tener edad adulta ni postgra-dos para ser ecoeficiente. Muchas veces los profesionales caen en tecnicismos y esto no suma a la aplicación y difusión de la herramienta.

En 20 años será un tema cotidiano y normal. Cuando se inventó el tenedor seguramente fue un objeto muy extraño y especial en sus primeros años de uso. Hoy en día nadie se sorprende cuan-do ve un tenedor y lo utiliza 3, 4 o más veces cada día. Yo creo personalmente que ese es el futuro de la ecoeficiencia, ser como un tenedor, en 20 años la gente la utilizará de forma normal y no tendrá más misterio.

7. ¿Cómo puede el sector empresarial alcanzar los criterios de la ecoeficiencia?

8. ¿La ecoeficiencia ya es un tema cerrado? ¿Cuál es el tema del momento?

6. ¿Qué impactos ha tenido la ecoeficiencia hasta ahora en lo ambiental, social y económico?

5. ¿Qué papel ha jugado la academia en el desarrollo del concepto?

10. ¿Qué se vislumbra en el futuro?

9. ¿Qué papel cumplen los medios de comunicación y los periodistas en la ecoeficiencia?

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Procesos Industriales Ecoeficientes

Planta Bogotá

La elaboración de aceites y grasas bajo estándares de sostenibilidad, calidad y ecoeficien-cia puede resumir el modo en cómo funciona TEAM, una compañía multilatina colombiana de tradición que se ha expandido a mercados internacionales como el chileno, el mexica-no y el norteamericano.

TEAM cuenta con cuatro plantas de producción de aceites, mar-garinas y jabones en todo el territorio nacional teniendo sedes específicas en Bogotá, Barranquilla, Buga y Guachené. La mayo-ría de las instalaciones cuentan con certificaciones internaciona-les de renombre como ISO 9001, ISO 14001, ISO 28000, FSSC 22000, OSHAS 18001, HACCP, PREAD, Kosher OU, entre otras, las cuales varían según la planta. De igual manera la empresa ha sido re-conocida múltiples veces por su gestión responsable con premios como Planeta Azul del Banco de Occidente, Portafolio 2010, PREAD, Portafolio de Bienes y Servicios Sostenibles, entre otros.

La organización tiene como política de gestión satisfacer al cliente y consumidor bajo serios estándares de sostenibilidad. Los procesos industriales que desarrolla la empresa para ela-borar sus productos comerciales e industriales tienen la característica de dejar como traza un número de residuos, por lo que la organización decidió orientar su gestión hacia una dis-minución considerable del consumo de recursos utilizando como herramienta la innovación en los procesos, lo que garantiza el futuro de los ecosistemas y del negocio como tal.

TEAM manejaba en años anteriores un porcentaje de aprovechamiento de residuos en la planta de Bogotá del 8%, sin embargo, la implementación de procesos ecoeficientes ha logrado un cambio radicalmente positivo y actualmente aprovechan el 94% de sus resi-duos lo que los ha hecho posicionar como un modelo empresarial del paso de la teoría a la práctica sostenible. A nivel nacional el índice de aprovechamiento de residuos es del

Planta Guachené

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64%. Por otro lado, como parte del aprovechamiento de los residuos del proceso de refinación de los aceites, la planta de Barranquilla produce adicionalmente en sus instalaciones jabones de uso doméstico e industrial que son elaborados gracias a un proceso limpio y con los más altos estándares de calidad.

La compañía logró una disminución del 9% de energía y del 7% de agua empleada por cada tonelada empacada del año 2012 al año 2013. El compromiso de la empre-sa con la sostenibilidad ha hecho que cada vez más sus esfuerzos se vean reflejados en la mitigación real de sus impactos ambientales. En este mismo periodo, TEAM logró disminuir su huella de carbono en un 12% por tonelada empacada, lo que traduce en que cada vez más la empresa genera menos emisiones de CO2 y es además una de las primeras empresas de grasas en el país que maneja estándares ambientales con-cluyentes.

Adicionalmente, se ha reconocido la importancia de ser coherentes e íntegros en las actividades laborales gracias a lo cual se han integrado procesos sostenibles y ecoe-ficientes en la cadena de abastecimiento de la empresa con lo que se pretende ad-quirir aceite de palma únicamente de fuentes responsables y amigables con el medio ambiente, es decir, de proveedores que cumplan con la legislación y no afecten el desarrollo normal de los ecosistemas. TEAM realiza programas de acompaña-miento a los cultivadores para garantizar la sostenibi-lidad de sus prácticas y expandir el concepto de la responsabilidad con el medio ambiente y con el entor-no social.

Uno de los avances en ecoeficiencia más importantes de TEAM ha sido el de la reutilización de la tierra em-pleada como parte del proceso de filtración de pig-mentos de los aceites, la cual queda enriquecida con nutrientes de las grasas, y es dirigida potencialmente a la producción de concentrado para animales y a labo-res relacionadas con la lombricultura. Sin embargo,cabe resaltar que TEAM ha ido más allá y ha utilizado gran parte de estas tierras filtro, las cuales después de ser utilizadas en procesos como la lombricultura y compostaje han sido empleadas como abono para las plantaciones de palma africana, lo que sugiere a grandes rasgos que la compañía ha logrado cerrar el ciclo de su producción de una manera sostenible. Lo anterior es posible gracias al Análisis de Ciclo de Vida que hace con los productos, lo que permite a TEAM estudiar los impactos más signifi-cativos y trabajar en ellos.

El compromiso de TEAM con el medio ambiente ha trascendido y ha logrado permear en comunidades como la Fundación Ana Restrepo del Corral con quienes se realiza-ron capacitaciones en torno al uso óptimo y eficiente de las aguas lluvia y mejoras en los sistemas de energía. Así mismo, los empleados y proveedores de TEAM también se benefician de estos proyectos de la empresa en la que también se les enseñan medi-das de seguridad y el adecuado manejo de residuos junto su respectiva clasificación haciendo énfasis en la limpieza y el manejo de productos químicos e industriales.

Planta Buga

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Desde la Secretaría Distrital de Ambiente la hemos entendido como el uso eficien-te de los recursos naturales en sistemas productivos; es decir como una estrategia basada en producir la misma cantidad de bienes y/o prestar la misma cantidad de servicios utilizando menores cantidades de recursos naturales y consecuentemente disminuyendo la cantidad de residuos que se generan.

Es muy alta. Las empresas no pueden pensar en Desarrollo Sostenible, sin abordar la ecoeficiencia como práctica rutinaria en sus procesos. Bogotá, por ser una ciudad que concentra la mayor cantidad de población del país y ser una de las ciudades más grandes de América Latina, debe estar orientada a un desarrollo ecoeficiente como base para la construcción de una ciudad sostenible en el mediano plazo. La ecoeficiencia debe ser un concepto del día a día, no solo de los empresarios, sino de los mismos consumidores; es decir debe formar parte de la cultura empresa-rial y ciudadana.

Dentro del Programa de Gestión Ambiental Empresarial que desarrolla la Secretaría Distrital de Ambiente, en el nivel 2 se enseña a los empresarios prácticas de eco-eficiencia como base para la prevención de la contaminación y para unir los temas ambientales con el desempeño económico de la empresa.De esta manera, las empresas desarrollan talleres de uso eficiente de agua, de energía y de materias primas, a la vez que aprenden a estructu-rar indicadores que les permitan medir sus logros y traducirlos en valores monetarios.

Actualmente, se está actualizando la política distrital de producción soste-nible, expedida bajo el Decreto 482 de 2003. Esta actualización, refuerza la prevención de la contaminación como eje central de trabajo y se está orientando en la formación de los empresarios bajo un enfo-que de ecoeficiencia, incorporando herramientas como pro-ducción más limpia, ecodiseño y análisis de ciclo de vida entre otras.

1. ¿Cómo puede definirse a la ecoeficiencia?

2. ¿Cuál es la importancia de la ecoeficiencia en el Desarrollo Sostenible de una ....ciudad como Bogotá?

3. ¿Cómo ha sido la aplicación del concepto al interior de la Secretaria Distrital de ....Ambiente?

4. ¿Qué tipo de políticas públicas se vienen trabajando desde el .........gobierno entorno a la ecoeficiencia?

Oscar VargasCoordinador Programa Gestión Ambiental Empresarial

Secretaria Distrital de AmbienteAlcaldía Mayor de Bogotá

Definitivamente cambiar el paradigma de que el tema ambiental en las empresas no es un gasto, sino una inversión, y que si se implementan estrategias como la eco-eficiencia, la organización se ve beneficiada en sus niveles de productividad y redu-ce muchos costos de ineficiencia que muchas veces pasan inadvertidos.

La virtud de la ecoeficiencia es que impacta a la empresa positivamente en dos sentidos: por un lado, disminuye los niveles de contaminación ambiental que la em-presa genera bajo un enfoque preventivo. Lo anterior, reduce costos de tratamien-to al final del tubo y minimiza riesgos ambientales.Por otro lado, al hacerse un uso eficiente de los recursos, mejora la estructura de costos de producción o de prestación del servicio.

Definitivamente, los recursos naturales son cada vez más escasos y eso no es un secreto o un discurso ambientalista. Bajo leyes de mercado, a mayor escasez mayor costo, por lo que inevitablemente, las empresas tienen que poco a poco ir hacien-do conciencia de la importancia de la inversión en la protección de los recursos naturales.

Posteriormente, creo que las empresas irán evolucionando para hacer con-ciencia de que el tema ambiental no se limita al cumplimiento de unas nor-

mas, o al uso eficiente de recursos, sino que tiene que ver con el respeto por el ser humano y con nuestra supervivencia. Creo en un futuro en el cual los empresarios hagan conciencia de que hacer las cosas de una manera correcta, respetando el medio ambiente si es rentable.

5. ¿Qué hace falta para consolidar la ecoeficiencia en las organizaciones públicas ....y privadas?

6. ¿Cuáles son los impactos de la ecoeficiencia?

7. ¿Cómo puede el sector empresarial alcanzar los criterios de la ecoeficiencia? ....¿Qué se vislumbra en el futuro?

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La vida de una Central Hidroeléctrica es el agua como materia prima indispensable para la generación de energía eléctrica, por esto es necesario hacer un monitoreo permanente de todas las variables asociadas con el agua para poder operar de forma eficiente. Para dicho monitoreo es necesario definir puntos estratégicos en la cuenca del embalse llamados estaciones hidrológicas.

Una estación hidrológica, básicamente es una obra civil con equipos electromecáni-cos acondicionados para realizar mediciones específicas de niveles, caudales, lluvia, temperatura, humedad entre otras variables. La función de estos equipos es medir, al-

macenar, y enviar datos por radio o por satéli-te a una Central.

ISAGEN tiene una de sus Centrales Hidroeléc-tricas en el oriente del departamento de Cal-das. La Central Hidroeléctrica Miel cuenta con 40 estaciones hidrológicas distribuidas en tres cuencas con una compleja topografía de difícil acceso y lugares muy apartados de las cabeceras municipales. Llevar energía eléctrica de forma convencional a cada es-tación hidrológica para alimentar los equipos registradores y de transmisión de datos, repre-sentaría un alto costo para cualquier agente generador de energía, por esta razón, ISAGEN adoptó los sistemas solares fotovoltaicos como

medio alternativo, económico y confiable, generando en cada estación hidrológica su propia energía 100 % limpia y suficiente para el consumo de sus equipos electrome-cánicos.

El tamaño de cada sistema varía dependiendo de la necesidad de cada estación, actualmente hay en operación estaciones con paneles solares de 30, 20, 10, 5 y 2 vatios. Estos paneles reciben la radiación solar y la convierten en energía eléctrica que luego pasa por un regulador y finalmente a una batería que almacena cierta cantidad de energía acorde con su capacidad. La energía acumulada en la bate-ría, permite que los equipos puedan operar en la noche y en días sin radiación solar brindando una autonomía de trabajo de hasta 8 días.

USO DE ENERGIAS ALTERNATIVAS PARA LA GESTION HIDROLÓGICA EN ISAGEN

Un panel solar puede durar en promedio hasta 30 años y solo requiere limpieza como mantenimiento preventivo, las baterías pueden durar hasta 5 años y son libres de mantenimiento. En conclusión el valor de la energía entregada por estos sistemas, no tiene punto de comparación con el costo de los mismos por la compleja ubicación geográfica de las estaciones hidrológicas.

Dentro de la Central Hidroeléctrica también hay estaciones con sistemas solares fo-tovoltaicos ya que al no estar conectados a la red de corriente alterna son menos vulnerables a descargas y al estar completamente aislados generando su propia energía, mejora su confiabilidad y representan un ahorro de energía importante en el largo plazo.

En el laboratorio de Hidrología también existe un sistema solar el cual es utilizado para cargar baterías, hacer pruebas y conectar equipos de bajo consumo.

Otra aplicación importante de sistemas solares dentro de la Central Hidroeléctrica es la instalación de paneles solares en estaciones de instrumentación geotécnica mejo-rando la confiabilidad de la de la red y solucionando problemas en los equipos elec-trónicos generados por la red de corriente alterna.Los sistemas solares se han usado desde el inicio de operación de la Central.

ISAGEN seguirá promoviendo los sistemas solares fotovoltaicos para la instalación de nuevas estaciones hidrológicas y de instrumentación geotécnica en los nuevos pro-yectos hidroeléctricos que se estén construyendo y en las nuevas aplicaciones donde surja la oportunidad de instalar sistemas de energía limpios y eficientes.

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Este documento es un compendio esencial de información que permite al lector tener una referencia clara y entender el concepto de la Ecoefi-ciencia. El contenido del documento da cuenta de las formas en cómo algunas empresas globales han interpretado y guiado el concepto en sus respectivos sectores.

Para ver el documento haga click en el siguiente enlace:

http://www.cecodes.org.co/descargas/publicaciones/publica-ciones_wbcsd/ES-Eco-Efficiency-CreatingMoreValue.pdf

José Vicente Mogollón

Nació en Cartagena. En 1963 culminó su carrera en el departamento de Historia y Literatura de la Universidad de Harvard, donde también realizó un postgrado en la Escuela de Gobierno en el año de 1979. Ha ocupado importantes cargos en el país fue Secretario Gene-ral de la Alcaldía de Cartagena y del Ministerio de obras Públicas, senador de la República, Presidente Ejecutivo de Camacol, Director General de Proex-port y Ministro del Medio Ambiente.

Siendo ministro, realizó una de sus más grandes ejecuciones: impulsar el proyecto de Plan de Ma-nejo Ambiental adecuado para el Canal del Di-que, ubicado en la región Caribe del país. En algu-na ocasión José Vicente refirmó la gran ilusión de la ciudad de Cartagena frente al mejoramiento de este canal. En el 2013 publicaron su libro “Canal del Dique: historia de un desastre ambiental” en donde cuenta la historia de la Bahía de Cispata en el Valle del Sinú que desapareció hace más de 40 años vícti-ma de la sedimentación y descuidos políticos que deja-ron de lado el cuidado ambiental y ecológico del canal.

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La palabreja no es fácil de entender. Sin el ánimo de ofender a eruditos y expertos, sería mejor hablar de eficiencia ecológica, económica y social de la producción o de producción eficiente asociada al

cuidado del ambiente y del planeta.

Hace ya casi 20 años, cuando era redactor Free-Lance de la Agencia de Noticias Prensa Verde, la primera agencia de noticias relacionadas con medio ambiente creada en América Latina, el Diario EL TIEMPO y la revista OZONO publicaron un artículo de mi autoría titulado “La Academia de la Lengua ahora se pone en ambiente”.

El artículo de marras, publicado cuando WindowsNT apenas comenzaba a entrar en auge en Colombia y la Cumbre de la Tierra aún no había cumplido un lustro de realizada, trataba de la dificultad de anteponer la raíz eco a cuanto vocablo se pudiera asociar con la ecología. El centro del artículo versaba sobre la dificul-tad de encontrar una palabra que hablara de economía y ecología al mismo tiempo. Se proponía ecoeco-nomía o ecoecología con la consecuencia cacofónica que implica usar cualquiera de estos términos, ade-más de mencionar la raíz dos veces seguidas.

¿Ecoeficiencia?Por: Guillermo Camacho Cabrera*

Miembro de la Red de Periodistas por el Desarrollo Sostenible

*Comunicador social periodista de la Universidad Jorge Tadeo Lozano. Fue galardonado con el Premio Sociedad Para Todos Disnnet Prensa Social 2010 al periodismo inclusivo y a la inclusión en la comunicación. Es miembro del Círculo de Periodistas de Bogotá CPB y actualmente desarrolla su Tesis de grado en la maestría en Ingenie-ría-Transporte en la Universidad Nacional de Colombia. Cuenta con más de 20 años de experiencia dedicados al área de la gestión y el desarrollo social en los temas ambientales, de niñez, prevención del maltrato infantil,

promoción del buen trato, envejecimiento y vejez. Es investigador social.

Hoy, cuando el CECODES nos invita a los miembros de la Red de Periodistas por el Desarrollo Sostenible a opinar en la publicación “Sostenible-Mente”, no pude dejar de recordar dicho texto.

El tema de esta edición del mes de julio de 2014, Ecoeficiencia, evocó necesariamente en mi memoria la manía y flexibilidad que tiene la gente para asociar cuanto término hay a la raíz eco, buscando el menor esfuer-zo en el uso del lenguaje y reducir todo a una palabra que no siempre se comprende por parte de quienes son ajenos a los temas de sostenibilidad.

Recordé también a la señora Laudelina, habitante del municipio cundina-marqués de Tocancipá, cuyo nombre es tan sonoro como una armónica, a quien sus amigos llaman simplemente Lina, según ella por economía: “es que no les gusta pronunciar un nombre tan largo”. Eso me respondió cuan-do le pregunté si tenía un segundo nombre. Ella participaba en un conver-satorio sobre abuso sexual infantil que hicimos con la Asociación Afecto contra el maltrato infantil, organización de la cual soy miembro.

Decirle Lina a Laudelina y Ecoeficiencia a la producción eficiente aso-ciada al cuidado del ambiente o del planeta es igual. También podríamos ser más sostenibles en el concepto y hablar de eficiencia económica, ecológica y social de la producción.

Ser profano al decir que ecoeficiencia es una palabreja no le quita ni le pone al concepto. Al contrario, abre el espacio para que desde las páginas, reportajes, notas de radio o de televisión que construyamos la prensa y los periodistas sobre el tema, se haga una labor de educación de audiencias, se eviten dobles referentes y se entre con el significado del concepto hablando, sencillamente, de producción asociada al cuidado del ambiente y del planeta. Así, sin involucrar el término “eficiente”, que sería redundante.

A veces con el lenguaje hacemos laberintos de lo que pueden ser líneas rectas. Vale la pena dejar los enredos únicamente para los fideos, que son deliciosos con el queso parmesano, y ser muy claros con la producción litera-ria, sonora y visual asociada con el cuidado del planeta, es decir, con el desarrollo sostenible.

Fernando Cortés McCallisterPresidente

Santiago Madriñan de la TorreDirector Ejecutivo

Jaime Moncada BernalDirector de Programas

Sergio Rengifo CaicedoDirector de Proyectos Especiales

Sergio Rengifo CaicedoDirector

Steven Zabala CorreaContenidos, Diseño y Diagramación

Catalina Gómez CortésContenidos

Alejandra Parada ArandaColaboradora

Alejandra Cardenas GómezColaboradora

CECODES –Consejo Empresarial Colombiano para el Desarrollo Sostenible, Carrera 11A No. 93A-80 Of. 302, Bogotá D.C.

Tel. (57 1) 635 5977 / 635 5808. E-mail: comunicaciones@cecodes.org.co Página Web www.cecodes.org.co

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