Teatros de Bogotá, patrimonio de un escenario efímero

Esperando a Godot.Casa del Teatro Nacional, 2009Foto Carlos Lema

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Fragmentos de libertad. Grupo Varasanta, 2009Foto Carlos Lema

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teatrosde

bogotá

escenarios de un patrimonioefímero

4 Teatros en Bogotá

Samuel Moreno Rojas / Alcalde mayor de Bogotá

Catalina Ramírez Vallejo / Secretaria de Cultura, Recreación Yy Deporte

María Claudia Parias Durán / Directora General Orquesta Filarmónica de Bogotá

Santiago Trujillo Escobar / Subdirector Cultural Artístico y de Escenarios

Germán Céspedes Díaz/ Subdirector Sinfónico

Luz Patricia Camelo Urrego / Subdirectora Administrativa

Ángela María Canizalez Herrera/ Jefe Oficina Comunicaciones

Hanna Paola Cuenca Hernández/ Coordinadora Área de Arte Dramático

Ana Maria Cortés Solano/ Coordinadora de Escenarios

Ana Piedad Jaramillo Restrepo/ Coordinadora Teatro Jorge Eliécer Gaitán

Manuel Lara Zabala / Coordinador Teatro La Media Torta

©2010 Orquesta Filarmónica de Bogotá

©2010 Yolanda López Correal / Mauricio Uribe González

Impresión / Panamericana Formas e Impresos

Primera edición, diciembre de 2010. Impreso en Colombia

ISBN XXXXXXXXX

Teatro Municipal Jorge Eliécer Gaitán, 2005Foto Carlos Lema

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5

Proyecto y dirección editorial / Mauricio Uribe González, Yolanda López Correal

Investigación y textos / Yolanda López Correal, Mauricio Uribe González

Fotografía / Carlos Mario Lema, Mauricio Uribe, archivos institucionales y archivos particulares

Diseño y diagramación / Yessica Acosta Molina

Agradecimientos / Carlos José Reyes, Carlos Moreno , Santiago García, Eddy Armando, Jaime Manzur , Angie Bueno,

Consuelo Rodríguez, Jorge Vargas, Mario Matallana, Guillermo Delgado , Nubia Suaza, Críspulo Torres , Mónica Ca-

macho, Germán Betancurt, Hugo Afanador, Ernesto Aronna Restrepo, Miriam Restrepo de Aronna, Rodrigo Rodríguez,

Adela Donadío, Ciro Gómez , Patricia Ariza, Carlos Parada, Kadir Abdel Rahim, María Eugenia Penagos , Jairo Barajas,

César Álvarez Escobar, Sergio González, Gisela Lozano, Héctor Escamilla, Jorge Prada Prada, Heidi Abderhalden ,

Rolf Abderhalden, Manuel Ballesteros López, Israel Guauque, Hernando Parra Rojas, Néstor Arturo Mahecha , Roberto

Antonio Nieto, Ligia Cortés, Fernando Montes, Alejandra Borrero, Tino Fernández, María Rodríguez, William Fortich ,

Daniel Galeano, Santiago Martínez, María del Rosario Ortíz, Myriam del Socorro Cabrera, Manuel Lara Zabala, Ana Pie-

dad Jaramillo, Germán Betancourt, Gustavo Ortíz, Dora Rodríguez , María Belén Sáenz de Ibarra, Cabo Carlos , Carlos

Eduardo Silva, Miguel Durán, Mónica Toro, Ricardo Camacho, Marcela Bustamante, Camilo de Irisarri, Diana Echeverry,

Ana María Alzate, Cecilia Tejada, Jaime Arturo Gómez , Fernando Pérez, Leonor Estrada Herrera, Blanca Cecilia Carre-

ño, Hernán Orjuela, Adriana Méndez, Fabián Acosta Quiroga, Jorge Guzmán Moreno, Ramiro Osorio, Daniel Bermúdez,

María Elvira Madriñan, Daniela Giannetti, Clara López, Alejandro Montaña.

_contenido

PRESEnTACIón pág.9 / PREFACIO pág.10 / LAS SALAS DE TEATRO

En BOGOTA pág.13

> DE CASAS A LABORATORIOS TEATRALES

TEaTro dE MarioNETas doN Eloy pág.28 • TEaTro la CaNdElaria

pág.30 • TEaTro ExpEriMENTal la MaMa pág.34 • TEaTro dE

MarioNETas JaiME MaNzur pág.36 • TEaTro librE, sEdE CENTro

pág.38 • audiTorio raFaEl baquEro pág.40 • TEaTro TallEr dE

ColoMbia pág.42 • TEaTro la baraNda pág.44 • sala dE TEaTro

ChiMiNiGaGua pág.46 • TeaTro esTudio CalarCá - TeCal pág.48 •

aCademia superior de arTes de BogoTá – asaB pág.50 • TEaTro

CENTro CulTural GabriEl GarCía MárquEz pág.54 • TEaTro dE

MarioNETas ErNEsTo aroNNa pág.56 • diTiraMbo TEaTro pág.60

• la Casa dEl TEaTro NaCioNal pág.62 • TEaTro dE MarioNETas

hilos MáGiCos pág.64 • sala sEki saNo pág.68 • Casa TEaTroVa

pág.70 • TEaTro la libélula dorada pág.72 • TEaTro aCTo

laTiNo pág.74 • TEaTro aCTorEs pág.76 • TEaTro baraJas pág.77

• TEaTro El CoNTrabaJo, sEdE TuNJuEliTo pág.78 • TEaTro El

CoNTrabaJo, sEdE bosa pág.79 • FuNdaCióN TEaTro quiMEra

pág.80 • laboraTorio Mapa TEaTro pág.82 • TEa TropiCal pág.84

• silFos TEaTro pág.85 • TEaTro r101 pág.86 • TEaTro NésTor

MahECha pág.88 • TEaTridaNza pág.89 • TEaTro VarasaNTa pág.90

• Casa ENsaMblE pág.92 • la FaCToría l´ExplosE pág.94 • TEaTro

la MaCarENa pág.98 • kábala TEaTro pág.99 • CorporaCióN

TEaTral barraCa pág.100 • TEaTro suEños pág.101 •

Ricardo III. Mapa Teatro , 2001Foto Carlos Lema

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> ESCEnARIOS DE nATuRALEzA TEATRAL

TEaTro ColóN y sala VíCTor MallariNo pág.104 • TEaTro

FaENza pág.110 • TEaTro El parquE pág.112 • TEaTro dE la

MEdia TorTa pág.114 • TEaTro JorGE EliéCEr GaiTáN pág.116

• TEaTro luis ENriquE osorio pág.120 • TEaTro MiNuTo dE

dios pág.122 • audiTorio lEóN dE GrEiFF pág.123 • TEaTro

paTria pág.126 • TEaTro saNTa FE pág.127 • TEaTro NaCioNal

FaNNy MikEy pág.128 • TEaTro Colsubsidio robErTo arias

pérEz pág.132 • TEaTro librE, sEdE ChapiNEro pág.134 • sala

ErNEsTo bEiN pág.136 • TEaTro CaMaríN dEl CarMEN pág.138

• audiTorio FuNdaCióN GilbErTo alzaTE aVENdaño pág.140

• TEaTro NaCioNal la CasTEllaNa pág.142 • TEaTro dE la

CarrEra pág.144 • TEaTro WilliaM shakEspEarE pág.145 •

TEaTro audiTorio lEoNardus pág.146 • TEaTro dElia zapaTa

oliVElla pág.148 • audiTorios dE la rEd dE biblioTECas

públiCas pág.150 • audiTorios uNiVErsiTarios pág.151 •

TEaTro arlEquíN pág.152 • TEaTro asTor plaza pág.154 •

TEaTro Eldorado ECCi pág.155 • TEaTro Cádiz pág.156 • TEaTro

dE bEllas arTEs pág.158 • TEaTro Mayor y TEaTro EsTudio

Julio Mario saNTo doMiNGo pág.160 •

uBICACIOn DE LOS TEATROS En BOGOTA pág.164 /

BIBLIOGRAFíA pág.168 /


lucía dormida, montaje de la asab en el Camarín del Carmen, 2008Foto Carlos Lema

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9

_presentación

_La Orquesta Filarmónica de Bogotá, entidad adscrita a la Secretaría Distri-

tal de Cultura, Recreación y Deporte, ha generado una línea de trabajo alrededor de la investi-

gación y preservación de la memoria en el campo de las artes escénicas en la ciudad. Desde la

política de fomento a las artes, la OFB ha propiciado, igualmente, valiosos procesos de partici-

pación activa y concertación con los creadores, las organizaciones y los circuitos generadores

de bienes, productos y servicios teatrales de la ciudad, en los cuales se ha evidenciado la necesi-

dad de compilar y sistematizar información cualificada sobre el movimiento teatral bogotano.

Esta publicación obedece a la intención de aportar, desde lo público, a la construcción de

esa memoria, considerando uno de los aspectos más tangibles de este arte efímero y vivo: el

escenario. En este caso, el camino de indagación no pretende diagnosticar, ni cuantificar. Por el

contrario, el reto para los investigadores ha sido abordar el objeto de estudio desde una mirada

transdisciplinar, y transversal en la cual no solo se entiende el escenario como un espacio arqui-

tectónico, sino que se concibe como un lugar de convergencia de la vivencia teatral.

Cada sala de teatro de Bogotá tiene una historia, una vocación, una propuesta estética,

un público objetivo. No existen dos escenarios iguales ni arquitectónica ni artísticamente. Esa

riqueza, sumada a la pasión que caracteriza el trabajo de quienes las habitan, administran, pro-

graman, sostienen, construyen y transforman, las convierten en espacios que reflejan la diver-

sidad y el dinamismo creativo de una ciudad como la nuestra.

Por esta razón, los textos y las imágenes registrados en esta publicación, resaltan las parti-

cularidades de cada sala como lugares habitados, transformadores de su entorno y proyecto de

vida de los artistas. El libro es, así mismo, un reconocimiento al tesón de quienes forjaron estas

salas y escenarios y los mantienen activos.

“Teatros de Bogotá Escenarios de un patrimonio efímero” le cuenta a los habitantes de

Bogotá sobre cada uno de esos lugares en los que la magia del teatro ocurre cada noche; es una

invitación para conocerlos y enamorarse de ellos. Pero, sobre todo, esta publicación tiene el ob-

jetivo de que los artistas y quienes les apoyan desde el sector público y privado, reconozcan en

las salas de teatro un motivo de inspiración para hacer de un arte intangible un sueño posible.

María Claudia parias durán

Directora General

Orquesta Filarmónica de Bogotá


_teatros de Bogotá: escenarios de un patrimonio efímero

_Hablar de patrimonio en el campo de las artes escénicas y específicamente

en el arte dramático, implica la presentación de un entramado argumentativo que va desde el

patrimonio inmaterial hasta los diferentes componentes del patrimonio material.

Iniciemos por revisar el camino del quehacer teatral, pero hagámoslo desde el final, es decir

desde la presentación en escena de una obra: esta es en esencia inmaterial, es el momento de la

experiencia vivida por actores y público lo que justifica el camino recorrido por todo el andamiaje

que se esconde detrás de una interpretación. Este momento es efímero, inasible, inaprensible,

pero es el instante buscado, la experiencia estética y tal vez la reflexión generada por el acto

representado. Es la parte visible de un conjunto de acciones, objetos, expresiones, espacios, que

se evapora en minutos pero que se construye en días y queda en la mirada y en la memoria de

quien realiza la presentación –el actor- y de quien la presencia –el espectador-. Entonces, no por

ser efímera desaparece, puesto que ésta queda como experiencia, además de “objeto” en los

diferentes elementos que debieron ser creados en torno a su composición.

Este momento, la obra en la representación, es el patrimonio efímero, patrimonio inmaterial

del cual partimos hasta llegar al espacio en donde se lleva a cabo, pasando de manera ligera por

sus diversos elementos constitutivos como la dramaturgia, el guión, la escenografía, los figuri-

nes. Esta atractiva relación de lo efímero del teatro con su realidad material es el aliciente que

encontramos para empezar a hablar de teatro como patrimonio cultural bogotano.

Sin embargo, para establecer los parámetros que llevan a la interdependencia de la obra

con el espacio, es imperante conocer primero lo visible, lo tangible y permanente: el escenario,

el Teatro, y de este, su vocación, su historia, los seres que los moldean y que los atan luego a sus

obras, a sus pensamientos y a sus vivencias.

En este libro estos teatros son tan solo 70, de un número calculable pero incierto, debido al

constante cambio o por la inestable existencia de algunos casos. Como otra paradoja más a reco-

nocer en esta compleja red del arte teatral, es invaluable la libertad que se alcanza con el encierro

momentáneo en estos muros, lo es tanto para el espectador como para el productor-propietario

y para el grupo de actores convertidos en cómplices y hacedores de la experiencia resultante de

una representación.

En dos categorías mostramos estos teatros, las casas que no dejan de serlo por estar cotidia-

namente habitadas pero que el teatro –como género- convierte en laboratorio de experiencias

para quien ingresa a ellas y, los teatros –como espacios- que permanecen en constante espera a

la llegada de obras, espectadores e ideas que justifiquen su existencia.

Pero las raíces que acompañan al teatro, entendido como género compuesto por maravillo-

sos seres de la dimensión teatral, no son limitadas por los muros, van más allá, se extienden a las

construcciones vecinas, a sus habitantes; los envuelve, los llama y los modifica como brindándo-

les un soporte contundente porque se radica en sus mentes y en sus corazones.

En últimas el patrimonio efímero encuentra acomodo en la memoria de los seres que disfru-

tan haciendo teatro, de quienes gozan viviéndolo y sintiéndolo, solo transmisible a quienes no

asisten a las obras, por las huellas que deja a su paso y a través de las historias de los espacios y de

quienes los transforman para que los demás sean rozados por sus encantos.

Yolanda López CorrealMauricio Uribe González

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Ernesto aronna (al centro)Foto Archivo Teatrino Ernesto Aronna

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Ensayo de la compañía del Colegio del Cuerpo, de álvaro restrepo, en el Teatro ColónFoto Carlos Lema

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13

_las salas de teatro en Bogotá


_El teatro es un compendio de diversas artes visuales y literarias; desde la

antigua Grecia adquiere especificidad como forma artística de expresión humana y por lo tan-

to, a partir de las grandes realizaciones del mundo antiguo puede considerarse patrimonio de

la humanidad. Sin embargo, a diferencia de la literatura, la arquitectura, la música o las artes

plásticas (que pueden jugar un papel en el teatro) se trata de un arte compuesto, que tiene un

componente efímero y siempre actual (la representación), un texto o partitura (la obra dramá-

tica) y un espacio donde se desarrollan las presentaciones.

Como arte efímero, puede decirse que nace y muere en cada representación, de la cual

sólo quedan testimonios, críticas, reseñas, fotografías o en forma más reciente, grabaciones en

video. Sin embargo, ninguno de estos aspectos remplaza el contacto directo entre el público y

los actores, que constituye la esencia del teatro como tal.

La representación parte de una obra escrita o de una partitura (llamada canovaccio, en la

época de la Commedia dell´Arte, como punto de partida para la improvisación). De las grandes

tragedias griegas o de la comedia romana, así como de los misterios medievales o los grandes

teatros del Renacimiento quedan los textos dramáticos, que permiten ser traducidos y repre-

sentados, así como actualizados en diferentes versiones, pero de todos modos, el texto original,

como base primordial de la representación, permanece en el tiempo.

Otro aspecto lo constituyen los espacios creados para la representación, no sólo las pla-

zas públicas, los patios de instituciones u otros lugares donde se pueda levantar un escenario

ocasional, como ocurrió, por ejemplo, en la Edad Media, sino los teatros propiamente dichos,

desde los grandes escenarios griegos y romanos hasta las salas contemporáneas, provistas de

modernas tecnologías de iluminación, sonido y dispositivos escénicos.

En este último aspecto nos referiremos al desarrollo del arte escénico en Bogotá, capital

tanto del Nuevo Reino de Granada como de la República de Colombia, cuya primera representa-

ción teatral (sin mencionar rituales, fiestas indígenas u otras formas de expresión para-teatral)

fue la obra Los Alarcos, que data del año de 1583, según investigaciones recientes, efectuada en

el solar de una casona durante la celebración de un sínodo eclesiástico organizado por el arzo-

bispo de Santa Fe, Luis Zapata de Cárdenas.

En la Colonia, las referencias que se tienen de representaciones teatrales, algunas muy de-

talladas, tuvieron lugar en conventos, patios de colegios mayores, plazas públicas o cuarteles.

La primera sala teatral, conocida como el Coliseo de santa Fe, fue levantada gracias a la inicia-

tiva de don José Tomás Ramírez, antiguo abanderado y oficial del Regimiento Fijo de la capital,

quien al retirarse del servicio militar abrió un almacén en la Calle Real y luego, en el año de 1792

(cuando se cumplía el tercer centenario del Descubrimiento) el gobierno virreinal le concedió el

permiso para construir el teatro, cuyo diseño estuvo a cargo del oficial de ingenieros Domingo

Esquiaqui, quien tomó como modelos algunos teatros madrileños, como el Teatro de la Cruz o

el Coliseo de Caños Peral.

Construido el edificio, la primera función tuvo lugar el 6 de enero de 1793, toldada la sala,

antes de haber levantado el techo definitivo. Durante los últimos años del siglo XVIII don José

Tomás Ramírez intentó sostener el teatro, pero sus cálculos resultaron fallidos, pues la gente no

asistía a las funciones si tenía que pagar boleta, y por lo tanto, don José Tomás perdió toda su

fortuna y murió en la miseria en la población de Mariquita, en el año de 1803.

El Coliseo quedó en manos del gobierno virreinal y luego fue adquirido por el comerciante

capitalino Bruno Maldonado, y entonces pasó a llamarse Teatro Maldonado, en el año de 1840.

Don Bruno Maldonado conservó el inmueble hasta el año de 1885, cuando le fue expropiado por

el gobierno de Rafael Núñez, quien le había hecho una oferta de compra que don Bruno recha-

zó. Núñez ordenó la construcción de un nuevo edificio, que tuviera la dignidad de ser el teatro

de la Nación, y le dio el nuevo nombre de Cristóbal Colón, al cumplirse por los días de su estreno

Teatro MaldonadoGrabado de Rodríguez, Papel Periódico Ilustrado

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15

el IV Centenario del Descubrimiento (el V Centenario, en 1992, fue festejado

con la creación del Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá).

El nuevo Teatro Colón fue diseñado por el arquitecto italiano Pietro Can-

tini, a quien Núñez mandó traer cuando envió una delegación a Roma para

tratar sobre el concordato con la Santa Sede. Para la decoración interior, de

palcos y murales, se contó con un equipo de artistas italianos compuesto por

César Sighinolfi, Luis Ramelli y Filipo Matollar. El telón de boca fue obra del

artista florentino Aníbal Gatti.

Poco tiempo después de que el nuevo edificio del Teatro Colón abrió sus

puertas al público, un grupo de empresarios planteó la construcción del Tea-

tro Municipal de Bogotá, como parte de las actividades de la Sociedad Filan-

trópica de Socorros Mutuos de Bogotá. A la cabeza de los promotores de esta

iniciativa figuraban los señores Medardo Rivas (quien edificó además el tradi-

cional “Pasaje Rivas”, en el centro de Bogotá) y Francisco Zenardo. El nuevo

teatro, de estilo “A la Italiana”, como el Teatro Colón, estaba situado entre el

Observatorio Astronómico y el Capitolio Nacional.

El Teatro Municipal fue inaugurado el 15 de febrero de 1890 con la ópera

Il Trovatore, y a lo largo de más de medio siglo fue un escenario muy impor-

tante en la vida cultural de la ciudad, no sólo para las representaciones teatra-

les, sino también para actos políticos, como los llamados “Viernes Culturales”

organizados por el caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitán. En el Teatro Municipal

se presentaban las obras más populares del teatro colombiano de la primera

mitad del siglo XX, las comedias de Emilio Campos “Campitos” y de Luis En-

rique Osorio, entre otros, mientras en el Colón se realizaban funciones de la

llamada “Alta comedia”, con compañías extranjeras, españolas y en algunas

oportunidades argentinas o mexicanas.

Tras el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, el 9 de abril de 1948, la situación

de la ciudad cambió en forma dramática, tanto en los aspectos materiales

como culturales. El llamado “Bogotazo” transformó la imagen del centro de

la ciudad, muchos de cuyos edificios fueron devorados por las llamas. No ocu-

rrió así con los teatros; sin embargo, en el año de 1952, durante el gobierno

del doctor Laureano Gómez, el teatro fue cerrado por orden del alcalde Ma-

nuel Briceño Pardo, quizá para borrar el recuerdo de los “Viernes Culturales”

de Gaitán. Como un evidente desagravio al caudillo liberal, cuando el Teatro

Colombia fue adquirido por la Alcaldía Mayor de Bogotá y remodelado, se

reinauguró el 8 de marzo de 1973 con el nombre de Teatro Municipal Jorge

Eliécer Gaitán en honor a las jornadas realizadas en el Municipal por el líder

asesinado.

En la primera mitad del siglo XX aparecen varios teatros, con escenarios

adecuados para las artes escénicas, que también fueron usados como salas

de cine. El primero que debe tenerse en cuenta es el Teatro Caldas, cons-

truido en Chapinero e inaugurado en 1917. Se trató de una sala en la cual se

desarrollaron funciones de teatro y también proyecciones cinematográficas.

En ella se presentaron algunas de las comedias de Luis Enrique Osorio y las

revistas musicales y de sátira política de Campitos, alternando con las funciones del Teatro Mu-

nicipal. Una buena noticia reciente habla de la recuperación de este teatro para las artes escéni-

cas, gracias a la gestión de Rodrigo Rodríguez, director del Teatro Ditirambo.

Ese mismo año de 1917 funcionaron el Teatro bogotá y el Teatro del bosque, este último

Teatro ColónTeatro MunicipalFotos de Bogotá 1538-1938, Sociedad de Mejoras y Ornato de Bogotá

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donde se estrenó la primera comedia de Luis Enrique Osorio Ciudad

alegre y coreográfica, cuyo texto se ha perdido. En 1920 se estrenó el

Teatro real, que también combinaba los espectáculos en vivo con la

proyección de películas de cine silente. desaparecidos los tres?

Poco más tarde vino el Teatro Faenza, inaugurado el 3 de abril de

1924. Su nombre se debe a que en el sitio de la construcción se hallaba

una fábrica de loza llamada Faenza, creada desde principios de siglo.

El edificio del Teatro Faenza fue diseñado en el estilo Art Nouveau por

los arquitectos Arturo Tapias y Jorge Muñoz. Los diseños del interior

y fachada fueron realizados por Colombio Ramelli, miembro de la fa-

milia Ramelli cuyo primer miembro, Carlo, llegó a Colombia en 1884.

Este Ramelli fue el autor de las ornamentaciones del Teatro Colón de

Bogotá, que ya hemos mencionado.

A la lista de salas con escenario, que combinaron funciones de

cine con teatro, habría que agregar varios nombres de teatros que o

bien han desaparecido o se transformaron adquiriendo otras funcio-

nes, como es el caso de los teatros lux, apolo, san Jorge, Mogador,

(donde presentó espectáculos infantiles la compañía de la chilena Lili Álvarez Sierra), El Cid, el

imperio, el Teatro azteca o México, adquirido en los últimos años por la Universidad Central,

o el Teatro atenas, que en una primera época remplazó las funciones populares que tenían

lugar en el Municipal, tras su demolición. También hacen parte de este conjunto el Teatro san-

ta Fe, de la calle 57, el Teatro arlequín, en el barrio de La Soledad y el Teatro astor plaza, en

Chapinero, que también adecuaron sus escenarios y programación para dar cabida a las artes

escénicas en vivo.

Otra sala que pasó del cine al teatro fue el Teatro san Carlos, convertido en el Teatro de la

Carrera en 1991 gracias a la gestión de Jaime Arturo Gómez, quien ha promovido una intensa

actividad escénica dirigida ante todo a estudiantes de los colegios de la capital.

En cercanías a la Universidad Nacional se abrió la sala actores, como una dependencia

del Círculo Colombiano de Actores, CICA, gracias a la gestión y constante actividad de María

Eugenia Penagos, quien ha colaborado, además, en la programación como actriz y directora

escénica.

Con motivo de la celebración del IV Centenario de la Fundación de

Bogotá, en 1938, se comenzaron a efectuar diversas obras con algu-

nos años de anticipación. Entre ellas, la creación del Parque Nacional

Olaya Herrera, pues su construcción fue planeada y decidida desde el

gobierno de Olaya, el primero de la época denominada como “La Re-

pública Liberal”. El Parque Nacional se comenzó a construir en 1934, de

acuerdo con el plan trazado por el arquitecto austríaco Karl Brunner.

Dos años más tarde, durante el primer mandato del presidente Alfonso

López Pumarejo, conocido como “La revolución en marcha”, se cons-

truyó el Teatro El parque, con el fin de contar con una sala de títeres y

marionetas para el público infantil y juvenil. El teatro fue diseñado por

el arquitecto Carlos Martínez Jiménez, en estilo Art Deco. Los planos

originales tomaron como referencia al Teatro de los Jardines de Luxem-

burgo, en París, construido especialmente para Maurice Dudevant, hijo

de la escritora George Sand, que era marionetista y titiritero. Más tarde

el Teatro El Parque recibió el nombre de Teatro Cultural y luego fue la

sede de la Dirección de Infancia y Juventud, en la primera etapa del Mi-

Teatro ColombiaTeatro FaenzaFoto Daniel Rodríguez, IDPC - Colección Museo de Bogotá

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17

nisterio de Cultura. En los últimos años el Ministerio entregó

el teatro a la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte de

la Alcaldía Mayor de Bogotá.

Durante el gobierno del presidente López Pumarejo

también fue construido el Teatro de la Media Torta, como

otra contribución a la conmemoración del IV Centenario de

Bogotá. Este teatro al aire libre, situado en uno de los cerros

orientales de la ciudad, con graderías al estilo del teatro grie-

go, pudo ser edificado gracias a la donación que para este

efecto hizo la colonia británica residente en la capital.

Una sala con una amplia historia y varias etapas en ma-

nos de diversos grupos e instituciones fue inaugurada en

1940 con el nombre de Teatro odeón. Como tantas otras,

combinó las funciones de cine con espectáculos de teatro y

variedades. Luego se cerró, se convirtió en imprenta y tuvo varios usos, hasta el año de 1960,

en que fue tomada en arriendo por el grupo de Teatro “El Búho”, fundado por Fausto Cabrera

unos años antes.

El trabajo de Fausto Cabrera, conocido tanto en teatro como en radio y TV adquirió una es-

pecial importancia con la llegada a Colombia del maestro Japonés Seki Sano, quien había sido

alumno de la Escuela de Stanislavski, en el Teatro de Arte de Moscú, y luego desarrolló una gran

tarea en la formación de actores en Ciudad de México. En Bogotá estuvo tan sólo 4 meses, en

1957, de donde fue expulsado por razones políticas, al ser acusado de comunista. Fausto Cabrera

prosiguió la tarea, en un comienzo en la Escuela de Teatro del Distrito, ubicada en los sótanos

de la Avenida Jiménez con carrera 8ª, hasta finales de 1958, cuando se retiró con un grupo de

antiguos asistentes a las clases del maestro japonés y formó un grupo independiente, el Teatro

El búho, primero en su género en Bogotá. La primera sala de cámara de este grupo se hallaba en

un sótano de la Avenida Jiménez, abajo de la Carrera 10ª. En 1960 “El Búho” se trasladó al antiguo

Teatro Odeón, remodelando el escenario y la sala y allí desarrolló una intensa actividad, con tem-

poradas permanentes, hasta comienzos de 1962, cuando se trasladó a la Universidad Nacional.

El Teatro Odeón pasó entonces por un tiempo a la Corporación Festival de Teatro, dirigida

por el profesor húngaro Ferenc Vajta y por el actor y director

Bernardo Romero Lozano. Esta Corporación había sido crea-

da con el fin de realizar festivales anuales en el Teatro Colón.

El agregar a este evento nuevas funciones en el Odeón, te-

nía por objeto fomentar la actividad escénica en la ciudad,

sobre todo porque en esa época los grupos que se formaban

carecían de una sala propia donde realizar sus presentacio-

nes. Debido a los costos del mantenimiento y difusión de las

actividades que allí se realizaban, el Festival no contó con los

recursos suficientes y decidió abandonar la sala. Poco des-

pués, el teatro fue tomado en arriendo por la Universidad de

América, que lo mantuvo durante algunos años, tanto para

funciones de su propio grupo escénico, como de otros con-

juntos de teatro universitario.

En los años 70 el antiguo Odeón fue tomado primero en

arriendo y luego adquirido como sede propia por el Teatro

Popular de Bogotá, TPB, dirigido por Jorge Alí Triana, como

veremos unas líneas más adelante.

Teatro El parqueFoto Bogotá 1538-1938, Sociedad de Mejoras y Ornato de BogotáTeatro de la Media TortaFoto de Crónica del teatro al aire libre de la Media Torta, Universidad de los Andes – IDCT

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Esta experiencia nos remite a la apertura de varias salas teatrales efectuadas por los pro-

pios grupos teatrales en condiciones precarias, gracias a distintos tipos de campañas, aportes

de entidades oficiales y una dedicación de lleno al teatro para mantener estos espacios en per-

manente funcionamiento.

La primera de las salas independientes de esta etapa fue la Casa de la Cultura, ubicada en

la carrera 13 entre calles 20 y 22. Se trató de una acción conjunta de varios hombres de teatro y

promotores de cultura, una parte de los cuales venían del Teatro Estudio de la Universidad Na-

cional y del antiguo Teatro “El Búho”, con Santiago García como el director titular desde los días

de la fundación hasta el presente. La Casa de la Cultura se inauguró en el mes de junio de 1966

y trabajó en esta sede hasta comienzos de 1969, cuando adquirió una casa en el barrio histórico

de la Candelaria, que dio el nombre al grupo, uno de los más constantes y fecundos tanto en

los montajes de diversas obras del teatro universal, como en la creación de un sistema de traba-

jo propio, con el cual ha enriquecido la dramaturgia nacional con obras de creación colectiva o

de autor, como Nosotros los comunes, Guadalupe años sin cuenta, Diálogo del rebusque, El paso,

El viento y la ceniza, En la raya, Alicia Maravilla Estar, La Trifulca y otras muchas producciones

de un variado repertorio que se ha presentado en sucesivas temporadas en el teatro y en giras

internacionales por diversos países de América Latina, España e Inglaterra.

Ubicada en la calle 12, al lado del Teatro La Candelaria se encuentra la sala seki sano, de

la Corporación Colombiana de Teatro, dirigida por Patricia Ariza, actriz, dramaturga y directo-

ra que pertenece al grupo de planta del Teatro La Candelaria. En esta sala se han presentado

muchos grupos que no cuentan con sede propia, y es uno de los espacios donde se desarrolla

patricia ariza en Guadalupe años sincuenta, Teatro la Candelaria, 1979Foto Carlos Lema

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19

el Festival Alternativo, que tiene lugar en forma simultánea con el Festival Iberoamericano de

Teatro, cada dos años.

Con la apertura de la Casa de la Cultura en 1966, otros grupos, actores y directores decidie-

ron impulsar sus propios proyectos, buscando una sede estable en la cual realizar temporadas

de sus obras, a todo lo largo de cada año. Así fue abierto el Teatro la Mama, en la carrera 13 con

calle 48 en una primera etapa, gracias a la iniciativa de Kepa Amuchastegui, Jorge Cano, Ger-

mán Moure, Paco Barrero, Eddy Armando y otros actores y directores. La idea de formar este

grupo tuvo como punto de partida el vínculo con el Teatro La Mama, de Nueva York, dirigido por

Hellen Stewart, como un laboratorio experimental de arte escénico abierto a grupos jóvenes y a

tendencias artísticas innovadoras. Más tarde, La Mama tuvo que abandonar este local y buscar

una sede propia, para lo cual realizó una intensa campaña, con el apoyo del movimiento teatral

y de muchos sectores culturales, hasta que finalmente consiguió su sede definitiva en la calle

63 con carrera 9ª. En toda esta etapa, la dirección del Teatro La Mama ha estado en manos de

Eddy Armando, autor de la mayor parte de las obras presentadas. En su experiencia de más de

40 años ha montado obras de diversos estilos y técnicas. Entre los trabajos realizados en su últi-

ma sede podemos mencionar Los tiempos del ruido, Joselito carnaval, La incertidumbre del amor

o En-sueños de Bolívar, entre muchas otras.

También en 1968 fue creado el Teatro popular de bogotá, Tpb, por parte de un grupo de

hombres de teatro formados en la Escuela de Teatro de Praga, en Checoslovaquia, compuesto

por Jorge Alí Triana, Jaime Santos y Rosario Montaña. Después de realizar actividades en distin-

tos teatros de la ciudad y en giras por el país, el TPB tomó en arriendo y luego adquirió la sede

del antiguo Teatro Odeón, historia a la cual nos hemos referido en líneas anteriores. A lo largo

de más de 30 años de actividad como grupo profesional, el TPB contribuyó en forma notable a

la formación de nuevos públicos en la ciudad. A la actividad de Jorge Alí Triana y sus colaborado-

res en una primera etapa se vincularon figuras destacadas del teatro, como Fanny Mikey, Luis

Alberto García, Gustavo Angarita, Carlos Barbosa o Juan Gentile, miembro del grupo uruguayo

de “El Galpón”, entre muchos otros. Entre los montajes más destacados se encuentran títulos

como Tartufo, de Moliere, La muerte de un viajante, de Arthur Miller, Ricardo III, de Shakespeare,

Delito, condena y ejecución de una gallina, del guatemalteco Manuel José Arce o la creación

colectiva propia I took Panamá, con dramaturgia de Luis Alberto García y dirección de Jorge Alí

Triana.

En 1970 se estrenó el Teatro El local en la calle 53 arriba de la carrera 13, por iniciativa

de Antonio Montaña, Miguel Torres y otros actores y directores. Poco tiempo después Miguel

Torres asumió la dirección del grupo en forma definitiva, realizando una importante labor en

esta primera sede, mientras se adelantaban gestiones para adquirir un espacio propio. Allí se

realizaron permanentes temporadas a lo largo de 30 años, con un repertorio muy variado de

teatro universal y latinoamericano, entre cuyos títulos se destacan El túnel que se come por la

boca, basado en una idea de Alejandro Jodoroski, las obras españolas Bodas de Sangre de García

Lorca y El adefesio de Rafael Alberti, El acuerdo internacional del tío Rico Mac Pato, o la versión

escénica del relato de García Márquez La cándida Eréndira y su abuela desalmada, con drama-

turgia y dirección de Miguel Torres.

En la nueva sede, ubicada en la calle 11 entre carreras 2ª y 3ª se destacó el montaje de la

obra de Miguel Torres La Siempreviva, representada en el patio de la casona colonial, sobre los

sucesos de la toma del Palacio de Justicia en la etapa final del gobierno del presidente Belisario

Betancur. La cercanía de la casona con la Plaza de Bolívar, en cuya costado norte estaba situado

el Palacio de Justicia, se destacó en el montaje de la obra, tanto al reproducir los sonidos de los

disparos de los tanques, como el reflejo del incendio sobre los tejados de la casa, lo cual aporta-

ba un dramático verismo a la representación.

Teatro popular de bogotá, Tpb, en el antiguo Teatro odeónFoto Fernando Cruz, Corporación Barrio La Candelaria

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afiche de la siempreviva, Teatro el local{


Del grupo de teatro universitario de la Universidad de los Andes, diri-

gido por Ricardo Camacho, surgió el Teatro libre de bogotá, fundado en

mayo de 1973, y tras una intensa actividad logró abrir su primera sede en el

barrio de La Candelaria, en la calle 13 entre carreras 2ª y 3ª y posteriormen-

te el Teatro libre de Chapinero, al adquirir las instalaciones del antiguo

Teatro de la Comedia, creado por Luis Enrique Osorio. Con Camacho han

participado como directores del grupo Germán Moure y Jorge Plata, en el

montaje de obras clásicas y contemporáneas, entre las cuales se destacan

títulos como El Rey Lear, de Shakespeare, Seis personajes en busca de autor

de Pirandello, La Orestíada, de Esquilo, Julio César, de Shakespeare, y en

forma más reciente una trilogía compuesta por las novelas más reconoci-

das de Fedor Dostoyevski, Crimen y Castigo, Los hermanos Karamasov y Los

demonios, así como obras de dramaturgia nacional escritas por Jairo Aníbal

Niño, Esteban Navajas y Piedad Bonett, entre otros. Uno de los aspectos

destacados en la actividad del Teatro Libre ha sido la creación de una Es-

cuela de Teatro, de donde san salido nuevos actores para renovar el grupo y ampliar el proceso

de formación del teatro en la ciudad.

Otros grupos de teatro han abierto sus propias salas, acondicionando espacios en patios o

salones de casonas, como es el caso del Acto Latino, dirigido por Sergio González, con una sede

en Chapinero después de trabajar en otros espacios. El acto latino, cuenta con más de 40 años

de actividad, pues fue fundado en 1967. Entre los montajes de la primera época cabe destacar

las versiones de El gran Burundún Burundá ha muerto, poema de Jorge Zalamea y El coronel no

tiene quien le escriba y Blacamán, de Gabriel García Márquez. Al abrir su propia sede, en la ca-

rrera 16 con calle 58, en 1995, el Acto Latino ha desarrollado una tarea tanto en la investigación

dramatúrgica como en el montaje de obras, entre cuyos títulos se encuentran La cabeza del

árbol, Desatar y tejer, El vuelo del halcón, In-Fausto o El demonio del ser, entre otras.

El Teatro ditirambo, dirigido por Rodrigo Rodríguez, situado al lado de la Avenida Caracas

con calle 46, ha adaptado distintos espacios, alcobas y salones de una casona de estilo inglés

característica del barrio, tanto para adelantar los ensayos de las obras como para efectuar sus

presentaciones. Rodrigo Rodríguez ha mostrado una gran versatilidad, como dramaturgo, ac-

tor y director. Entre sus piezas más destacadas se encuentran El Montallantas, premio nacional

de teatro en 1996, o La gallera de todos los santos, escritas y dirigidas por Rodrigo Rodríguez.

El grupo Mapa Teatro, concebido como un laboratorio de actores, fue creado por los herma-

nos Rolf y Heidi Abderhalden, bogotanos de familia de origen suizo, después de haber adelanta-

do estudios de artes escénicas en Europa, en la Escuela Internacional de Teatro de Jacques Lecoq,

entre otros. Desde sus primeros trabajos mostraron su vocación por construir una novedosa ima-

gen escénica, e incluso de sustituir diálogos o textos por imágenes y sonidos en forma experi-

mental. Entre aquellas obras se recuerdan Casa tomada, basada en un relato de Julio Cortázar,

Medea Material, de Heinner Müller o bien Orestea ex Machina, presentada en los sótanos de la

Biblioteca Nacional antes de su remodelación. Desde el año 2000 Mapa Teatro ha tomado como

sede una casona de estilo republicano ubicada en la carrera 7ª con calle 23, en pleno centro de

Bogotá. Allí presenta obras de carácter experimental, como la versión del Ricardo III de Shakes-

peare, Horacio, de Müller o Muelle Oeste, de Bernard Marie Koltés, así como cabarets literarios,

lecturas dramáticas, instalaciones de imagen y sonido y laboratorios del imaginario social.

De más reciente creación, se destaca entre los grupos jóvenes el Teatro r 101. Este grupo,

que surgió en la Universidad de los Andes en 1995, tomó el nombre del salón donde efectuaban

los ensayos en la universidad. Buscaron entonces una casona en el sector de Quinta Camacho,

en la calle 70 A con carrera 11, y allí abrieron un espacio para su sala de teatro de cámara. El gru-

Mi lucha farsa. Teatro r101, 1996 Foto Camille Mazoyer

{

21

po, dirigido por Hernando Parra, funciona como un interesante laboratorio experimental y un

estudio de nuevos autores dramáticos nacionales o del repertorio universal. Entre sus montajes

más destacados se encuentran las obras ¿De dónde vino este animal? inspirada en Las Confe-

siones de San Agustín, donde el santo de Hipona narra sus experiencias de juventud entre las

cuales se encontraba la representación teatral. Luego vinieron otros títulos, como Juego para

dos, una versión libre de una pieza poco conocida de Tennessee Williams, Mi Lucha, basada en

Mein Kampf, obra de Adolfo Hitler en la cual combina recuerdos autobiográficos con sus ideas

políticas y alusiones a los Protocolos de los sabios de Sión.

También hay que mencionar al Teatro quimera, dirigido por Jorge Prada, quien ha desa-

rrollado una intensa actividad en una zona popular, en un costado del barrio de Chapinero, en

la calle 70 con carrera 19.

En el barrio de La Candelaria también cuenta con su propia sede el Centro García Márquez,

dirigido por Hugo Afanador, fundado en 1979 por egresados de la Escuela Nacional de Arte Dra-

mático, ENAD, hoy desaparecida. Ubicado en la calle 13 con carrera 3ª, allí se han presentado

las obras del propio Afanador, de José Assad y otros autores, entre cuyos títulos recordamos La

boda rosa de Rosa Rosas, o Qué bella es la guerra de Afanador o Biófilo Panclasta o Cenizas sobre

el mar, de José Assad. No deja de ser extraño que pese a haber creado la institución y abierto la

sala teatral muchos años antes, se haya bautizado con el mismo nombre la institución cultural

creada por el Fondo de Cultura Económica de México en forma posterior. Por eso Hugo Afana-

dor cuando habla del Centro García Márquez le añade, como un subtítulo El Original.

Un caso especial lo constituye el Teatro don Eloy, situado en el barrio Ciudad Jardín Sur,

de un estrato obrero y popular. Creado por Ángel Alberto Moreno, el popular Don Eloy de “Yo y

tu”, un clásico programa costumbrista bogotano y por su esposa, actriz y escritora de comedias,

Sofía de Moreno. En esta pequeña sala desarrollaron durante más de treinta años una intensa

actividad de teatro y títeres, así como una escuela de la cual han surgido los nuevos actores del

grupo, y ha contribuido a la formación de nuevos públicos en los barrios populares del sur de la

ciudad.

También en el sur de Bogotá se encuentra el Teatro Chiminigagua, que hace parte de la

Fundación Cultural Chiminigagua, creada y dirigida por Venus Albeiro Silva “con el fin de di-

fundir, rescatar, organizar y recrear la cultura popular”. Aparte de la tarea desarrollada con su

teatro y fundación, Venus Albeiro ha realizado una valiosa defensa de la cultura y su papel en la

sociedad, como representante a la Cámara por el Polo Democrático Alternativo.

Entre los conjuntos escénicos que han logrado abrir su sede en forma reciente, hay que

mencionar al Teatro Varasanta, dirigido por Fernando Montes, quien ha adquirido una amplia

mansión en la carrera 15 con calle 39, acondicionando la antigua mansarda y terrazas laterales,

en la cual ha desarrollado un interesante trabajo de carácter experimental. Creado en 1994, en

una primera sala abierta en el barrio La Candelaria, donde presentó obras como El lenguaje de

los pájaros y Kilele, en la nueva sede ha desarrollado una tarea a la vez formativa y de difusión

del arte del actor, entre cuyas obras se cuentan Esta noche se improvisa, una creación libre con

el método de improvisación, a partir de una obra de Pirandello con el mismo título. Con oca-

sión del Bicentenario de la Independencia, se presentó la obra Fragmentos de libertad, bajo la

dirección de Fernando Montes. También como parte de la actividad de Varasanta se encuentran

dos unipersonales de Carlota Llano, que revelan su notable creatividad como actriz: Mujeres

en la guerra, basado en el libro de Patricia Lara, y Columpio al vuelo, inspirada en una dolorosa

tragedia familiar.

Otra casona acondicionada para las representaciones escénicas es la Casa Ensamble, diri-

gida por la actriz Alejandra Borrero, una casa de estilo modernista, inspirada en una villa italiana

diseñada por el famoso arquitecto suizo Le Corbusier. En ella se han desarrollado trabajos ex-


perimentales de diversos tipos, talleres y cursos para actores y para niños, y algunos montajes

entre los cuales hay que destacar el trabajo unipersonal de Alejandra Borrero en Pharmacon,

dirigido por Sandro Romero, inspirado en textos y reflexiones del cineasta Carlos Mayolo, en la

etapa que antecedió a su muerte.

Por su parte, el grupo de danza-teatro l´Explose, dirigido por el coreógrafo Tino Fernán-

dez, ha abierto un espacio para ensayos y talleres, que también ha permitido la presentación de

sus propios montajes, llamado La Factoría de L´Explose. Está ubicado en la carrera 25 con calle

50, y allí se han desarrollado parte de las actividades del Festival Impulsos, danza y cuerpo hoy,

cuya primera edición se celebró en el 2009.

A estos nombres se suma la actividad del teatro callejero y la de los grupos de títeres y ma-

rionetas, que han presentado un notable desarrollo desde las últimas décadas del siglo XX. En re-

lación con el teatro callejero el decano de este tipo de representación en plazas y espacios al aire

libre es el Teatro Taller de Colombia, dirigido por Jorge Vargas y Mario Matallana, que cuenta

con sede propia en el Barrio Egipto, en cuyo solar ha instalado una carpa, bajo la cual prepara sus

espectáculos callejeros y realiza presentaciones para el público de la zona. El grupo fue creado en

1972 y en su larga trayectoria, como el decano de los grupos de teatro de calle, ha realizado una

gran cantidad de montajes, entre los que recordamos La cabeza de Gukup, Popón el brujo, con

dramaturgia de Fernando González Cajiao, Cuando las marionetas hablaron o Éxodo, que trata

sobre el doloroso tema de los desplazados. Entre los montajes más recientes se cuentan Bazuca-

da circo, Cuento de mar y amor, inspirado en un cuento de Jairo Aníbal Niño o Parábola del tiem-

po, una versión libre de Momo, novela de Michael Ende. Un aporte significativo al teatro para

espacios abiertos lo constituye, por parte del Teatro Taller de Colombia, la creación, desde 1993,

de la primera Escuela Internacional de Teatro Callejero y Técnicas de Circo en Latinoamérica.

Otro grupo que ha combinado el teatro callejero con montajes para sala es el Teatro Estu-

dio Calarcá, TECal, dirigido por Críspulo Torres, ubicado en pleno barrio de La Candelaria. Su

obra más conocida es Domitilo, rey de la rumba, presentada en innumerables plazas y parques

de la ciudad. Otros montajes del grupo, para teatro de sala, se titulan Pequeño poder, El álbum,

o Canción breve para una ciudad frágil, entre muchos otros.

El teatro de títeres ha tenido una notable evolución en la ciudad, y los grupos más destacados

han abierto sus propias salas, en las cuales desarrollan una actividad permanente y en muchos

casos permiten la presentación de otros grupos, tanto de teatro como de títeres y animación de

objetos. Como los grupos clásicos y tradicionales en el arte de las marionetas hay que destacar la

obra de la Fundación Jaime Manzur, quien aparte de sus obras de muñecos ha sido un infatiga-

ble promotor de la zarzuela en Colombia. También hay que destacar el trabajo que durante varias

décadas realizó Ernesto aronna, fallecido hace algunos años, cuya tarea en el arte de las mario-

netas la prosigue su hijo Ernesto, sosteniendo la Fundación como director y marionetista, con la

técnica aprendida de su padre, como una tradición de maestro artesano que forma a su aprendiz.

Entre los grupos de animación de muñecos debemos mencionar como al pionero del mo-

derno teatro de títeres en Bogotá a la libélula dorada, grupo dirigido por los hermanos César

e Iván Darío Álvarez, fundado en 1976, con sede propia en actividad permanente en el barrio de

Chapinero, en la carrera 19 con calle 51, donde han presentado su variado repertorio para todos

los públicos, desde niños a ancianos, con títulos como Préstame tu sombrero, Los espíritus lúdi-

cos, Los héroes que vencieron todo menos el miedo, El dulce encanto de la isla Acracia o Ese chivo

es puro cuento, entre otros muchos. A esta actividad creadora se suma la realización del Festival

de Títeres Manuelucho, con invitados internacionales. El festival es un homenaje al primer títere

auténticamente colombiano, creado por Sergio Londoño a comienzos del siglo XX.

También cuenta con sede propia en la calle 71 con carrera 12 el Teatro hilos Mágicos, diri-

gido por Ciro Gómez. Fundado en 1974, el grupo ha realizado una intensa actividad hasta abrir

san simeón, santo patrón de los titiriterosTeatro de Marionetas Hilos Mágicos

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23

su propia sede, y desarrollar en ella un trabajo de investigación,

taller de construcción de títeres y máscaras, pedagogía teatral,

centro de documentación sobre teatro de títeres y sobre todo,

la realización de temporadas permanentes de su repertorio de

obras entre las cuales se cuentan títulos representados en múl-

tiples oportunidades tanto en Colombia como en varios países

de América Latina, como Guepagé, El tesoro de El Dorado, Tra-

vesuras para el Arco Iris, Goranchacha, El hombre que escondió el

sol y la luna, de Carlos José Reyes, o la comedia de Luis Vargas

Tejada Las Convulsiones, estrenada en 1828.

En la calle 24, a dos cuadras de la Biblioteca Nacional se

encuentra el grupo Teatrova, dirigido por Carlos Parada, con

la subdirección de Kadir Abdel, quienes han desarrollado un

trabajo de gran mérito tanto en el arte de los títeres como en

montajes de teatro en los que se combinan máscaras y muñecos. Carlos Parada, más conocido

por sus amigos como Charlie Boy, ha sido actor, director, músico y titiritero, autor de obras tea-

trales y de piezas para títeres.

La prolífica actividad de grupos de diversas tendencias y estilos ha enriquecido el arte escé-

nico en la ciudad y ampliado los espacios de expresión en distintas zonas y barrios de la ciudad.

A las salas creadas por los propios grupos teatrales habría que agregar otras, de gran importan-

cia, que hacen parte de diversas instituciones culturales o financieras.

Entre ellas debemos mencionar las salas ubicadas en el centro histórico de la ciudad, en el

barrio La Candelaria, como es el caso de la sala teatral del Camarín del Carmen, cuya construc-

ción fue promovida por la directora del Museo de Arte Moderno de Bogotá, Gloria Zea, en los

años 80, salvando de este modo un rincón característico de la ciudad, que hace parte de su patri-

monio histórico.

La Fundación Gilberto alzate avendaño, ubicada en una de las casonas de mayor valor

arquitectónico de la Santa Fe colonial, cuenta con una sala propia en la cual acoge a diversos

grupos de la ciudad y es una de las sedes del Festival Iberoamericano de Teatro.

Como una sala alterna del Teatro Colón, ubicada en los altos del teatro, se encuentra la

sala Víctor Mallarino, dedicada en honor de este actor y declamador, que dirigió durante varios

años la Escuela Nacional de Arte Dramático, que desarrollaba sus tareas en esta sala y a la vez,

promovió la realización de festivales anuales de teatro en el Colón, desde mediados de los años

50 hasta finales de los años 60.

También como sala alterna del Colón se remodeló el antiguo Teatro Novedades, luego Ka-

pitol, por parte del Ministerio de Cultura, con el nombre de Teatro delia zapata olivella, que ha

enriquecido la oferta de espacios teatrales en el barrio de La Candelaria.

Las instituciones financieras y cajas de compensación también han construido gran-

des teatros, con una moderna dotación de luz y sonido y un aforo para más de un millar

de espectadores cada una de ellas. La primera de estas salas es el Teatro roberto arias

pérez, de Colsubsidio. Una feliz iniciativa del doctor Arias Pérez, para apoyar el desarrollo

del teatro, pues ya había sido miembro de la directiva del Club de Amigos del Teatro “El

Búho” años atrás.

La Caja de Compensación Familiar CAFAM edificó el Teatro de bellas artes, al lado del su-

permercado principal de la organización. El Teatro de Bellas Artes, dirigido por el doctor Jorge

Guzmán Moreno, fue diseñado por el arquitecto Hernán Herrera, quien falleció antes de que el

teatro fuera inaugurado. Se trata de un escenario dotado con una moderna tecnología, apropia-

do para toda clase de espectáculos.

Fundación Camarín del Carmen, Bodas de Fígaro, Teatro de bellas artes, 2009Foto Carlos Lema

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De reciente inauguración, el Centro Cul-

tural y biblioteca pública Julio Mario san-

todomingo, que hace parte del sistema de

Bibliored como una de las áreas más relevan-

tes de la Secretaría de Cultura, Recreación y

Deporte del Distrito, al tiempo que dispone

de una de las mega bibliotecas de la capital así

como de galerías y espacios de exposiciones,

cuenta con dos salas teatrales, realizadas con

un espléndido diseño del arquitecto Daniel

Bermúdez Samper. La sala mayor, una de las

más hermosas y mejor dotadas no sólo de Co-

lombia, sino de América Latina, está concebi-

da para grandes conciertos y recitales musi-

cales, así como para grandes espectáculos de

teatro, ópera o danza.

No podríamos cerrar este compendio de

salas de teatro sin referirnos a aquellas que

hacen parte de instituciones educativas, uni-

versidades y colegios, la mayor parte de las cuales están abiertas para el público general de

la ciudad. Entre estas salas, las que desarrollan una actividad continua con una buena progra-

mación son el auditorio león de greiff, de la Universidad Nacional, la sala Ernesto bein, del

Gimnasio Moderno, así como el Teatro William shakespeare, del colegio Anglo Colombiano, o

el Teatro leonardus, del colegio italiano Leonardo da Vinci.

La actividad realizada por la Fundación Teatro Nacional merece una mención adicional,

aparte del trabajo de sus tres salas, en la creación, organización y sostenimiento del Festival

iberoamericano de Teatro, creado en 1988 como un gran evento internacional con la inten-

ción inicial de conmemorar el V Centenario del Descubrimiento de América, pero que prosiguió

su realización bienal gracias a la inmensa movilidad de público conseguida desde sus primeras

ediciones.

El Festival, dirigido desde su inicio por Fanny Mikey, con la dirección conjunta de Ramiro

Osorio, quien ya tenía la experiencia de dirigir el gran Festival de la Ciudad de México y luego

dirigió el Festival de Guanajuato, se convirtió en el evento cultural y de difusión teatral más

importante realizado en nuestro país en toda su historia. Tras la muerte de Fanny Mikey, ha

tomado la dirección Ana Marta de Pizarro, quien colaboró como asistente de Fanny durante

varios años, y logró sostener la dinámica, la calidad y el impacto hacia el público que le había

impuesto su fundadora. Puede decirse que el Festival ha modificado en forma profunda el arte

teatral en Colombia, al confrontar la actividad nacional con los mejores trabajos realizados en

los cinco continentes, a lo largo y ancho del mundo entero y motivar al público capitalino de

todas las clases sociales como sólo lo había logrado un deporte como el fútbol. El Festival Ibe-

roamericano de Bogotá, por otra parte, pone en funcionamiento las distintas salas existentes,

junto con el Festival Alternativo dirigido por Patricia Ariza, logrando movilizar cada dos años,

durante quince días, a la ciudad entera.

Carlos José reyes posada

Bogotá, D.C. diciembre 10 de 2010

Teatro Mayor Julio Mario santo domingoFoto Enrique Guzmán pagina siguiente: diego álvarez con el grupo del Teatro popular de bogotá, 1981Foto Carlos Lema

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Escenario del Teatro la CandelariaFoto Mauricio Uribe

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27

_de casas a laboratorios

teatrales


_La Academia de Arte y Teatrino Don Eloy nace por iniciativa del maestro

Ángel Alberto Moreno (1922 – 2009), quien interpretó a Don Eloy Sastoque, uno de los personajes

de la ya legendaria comedia nacional de televisión Yo y Tú, que se transmitió desde 1956 hasta

1976. El maestro Moreno inició su desarrollo profesional como artista de teatro, en la Compañía

Bogotana de Comedias de Luis Enrique Osorio, con la cual trabajó durante 17 años.

En 1958, posterior a su ingreso a la televisión nacional como actor profesional y director, tras

una larga cadena de presentaciones de danza, teatro y de actuaciones en programas de televisión,

Don Eloy redirige sus pasos hacia la pedagogía del teatro. Adquiere entonces la casa ubicada en

el barrio Ciudad Jardín Sur en donde, 4 años más tarde, crea junto con su esposa Sofía Rodríguez

–quien interpretó a Socorrito en la misma serie Yo y Tú–, la actual Academia.

Los primeros pasos de los muñecos de hilo o marionetas de Ángel Alberto Moreno se dieron

de la mano de los maestros Antonio Angulo y Antonio Muñoz “Muñocito”, en el Teatro El Parque,

ubicado en el Parque Nacional Enrique Olaya Herrera, en donde se realizaban obras infantiles para

las escuelas públicas, entre otras actividades artísticas. Con el paso del tiempo y debido al interés

común por las marionetas, se crea una entrañable amistad con los también marionetistas Ernesto

Aronna Solano y Jaime Manzur, de quienes aprendió algunos secretos para la elaboración de sus

muñecos de hilo. Este saber artesanal lo materializó en la fabricación de más de 300 muñecos,

entre marionetas y títeres, que hoy reposan en los cuartos del Teatrino Don Eloy.

La pareja de esposos creó la Academia de Teatro con el fin de transmitir este conocimiento a

las nuevas generaciones de artistas interesados en las marionetas, así como para formar actores

y actrices de teatro de sala. De este empeño sobresale su hijo Carlos Moreno Rodríguez, heredero

de su talento y de la responsabilidad de la Academia de Teatro y Teatrino Don Eloy, la cual dirige

hace ya más de 20 años.

Teatro de Marionetas Don Eloy (1962)

Marioneta de don Eloy Foto Mauricio Uribeprograma yo y Tú, don Eloy y alicia del Carpio, 1960 Archivo Academia de arte y teatrino Don Eloy

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1

29

Dentro del conjunto de casas adaptadas para escenario teatral, el Teatrino Don Eloy es uno

de los más antiguos de Bogotá pues lleva 48 años de funcionamiento ininterrumpido en la misma

edificación, la cual se ha ido transformando paulatinamente de vivienda a Teatrino, gracias a la

generosidad de esta familia de actores quienes han compartido con la comunidad vecina y con la

ciudad su pasión por los títeres y por difundir el teatro.

Don Eloy y Sofía Rodríguez crearon obras como El nacimiento de Pinocho (1962), estrenada en

la inauguración del Teatrino; Brujas Modernas (1962), Abuelo Rin Ron (1975), escritas y dirigidas por

Sofía Rodríguez, entre muchas otras. Por su parte, Carlos Moreno ha realizado adaptaciones como

El flautista de Jamundí (1988), Los tres cerditos (1996), El zapatero perezoso (1994), todas estas

dirigidas por Don Eloy.

DirectorCarlos Arturo Moreno RodríguezCalle 20 Sur (Avenida 1ro de Mayo) No. 10B-36Barrio Ciudad Jardín SurLocalidad Antonio Nariño4080461carlitos.doneloy@gmail.comwww.academiayteatrinodoneloy.com

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el flautista de Jamundí, 1988Archivo Academia de arte y teatrino Don Eloy interior de la sala Foto Mauricio UribeFachadaArchivo Academia de arte y teatrino Don Eloy

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_La situación política del país vivida hacia mediados de los 60 reunió a un

grupo de intelectuales, artistas, poetas, músicos, con el ánimo de “estudiar la posibilidad de

crear una institución independiente, donde pudiéramos realizar nuestras actividades durante todo

el año, con base en una unión efectiva de los artistas a través del trabajo práctico concreto y de la

conjunción de objetivos en relación con el público” (Arcila, 1992). Según esta declaración y los es-

critos que se conservan en el Teatro La Candelaria, el grupo de artistas buscaba crear un espacio

en el cual tuvieran cabida todas las expresiones artísticas y especialmente, el teatro experimen-

tal y de vanguardia.

Es así como en 1966 Santiago García, Carlos José Reyes, Patricia Ariza, Vicky Hernández,

Fernando Mendoza, Celmira Yepes, Eddy Armando, Miguel Torres, Francisco Martínez, Eduardo

Gómez, Peggy Ann Kielland, María Arango, Frank Preuss, Fernando Laverde, Kepa Amuchaste-

gui, Omar Rayo y Jacques Mosseri, entre otros, crean la “Casa de la Cultura”. Su primera sede

funcionó en el local de una casa, ubicada en la carrera 13 con calle 20, que transformaron en sala

de teatro con un aforo para 100 espectadores. Esta sala abrió sus puertas el 6 de junio de 1966 -

intencionalmente a las 6:00 pm- con el estreno de la obra Soldados, basada en la novela La Casa

Grande de Alvaro Cepeda Samudio, en versión y dirección de Carlos José Reyes.

La “Casa de la Cultura” se convirtió en un activo centro teatral que atrajo durante dos años

a estudiantes, artistas, intelectuales y políticos no solo por su programación artística y cultu-

ral, sino también por sus tertulias bohemias y en mayor grado por los montajes de obras de la

dramaturgia universal, adaptadas con técnicas modernas con el fin de popularizar el teatro.

Sin embargo, las dificultades para obtener los ingresos para mantener esta sede, obligaron al

grupo a buscar decisiones radicales para darle sostenibilidad a este espacio de creación y de

experimentación teatral. Apelaron entonces al auxilio estatal y lograron obtener recursos para

adquirir una vieja y amplia casona ubicada en el centro histórico de Bogotá, hoy considerada de

conservación patrimonial.

En cabeza del maestro Santiago García, arquitecto de formación universitaria, se iniciaron

en 1968 las adecuaciones mínimas para la transformación de esta vivienda en un escenario tea-

tral. El maestro García, apoyándose en algunas indicaciones de su amigo el arquitecto Rogelio

Salmona, conservó la fachada original de la casa, reestructuró los espacios sociales convirtién-

Teatro La Candelaria (1968)

DirectorSantiago García Pinzón Calle 12 No. 2 – 59Barrio La Candelaria2814814 [email protected]

2

sala de teatro Foto Carlos LemaGrupo de teatro la CandelariaFoto Centro de DocumentaciónTeatro La Candelaria

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31

dolos en oficinas, cafetería y un amplio espacio para el bodegaje del equipaje teatral generado

tras los diversos montajes realizados (este último convertido desde 2010 en el Centro de Docu-

mentación del Teatro La Candelaria); recuperó la antigua columna que recibe a los espectadores

al ingresar a la casa y construyó en el fondo del predio la sala de teatro, con una capacidad para

270 espectadores. Finalmente, rebautizó la “Casa de la Cultura” como “Teatro La Candelaria”,

por su nueva ubicación en el barrio del mismo nombre. Es así como, desde 1968, en esta sala

se han realizado montajes artísticos de manera ininterrumpida, tanto por parte del grupo de La

Candelaria como por otros grupos de teatro, pues ofrece la opción de alquiler y préstamo para

ensayos teatrales y puestas en escena de grupos sin sala.

Además de la estabilidad que ha aportado este espacio al teatro colombiano, es amplia-

mente reconocida la contribución del grupo de La Candelaria a la evolución del teatro colombia-

no, fundamentalmente por la implementación de un proceso colectivo de creación en el que se

involucran los integrantes del grupo para originar sus propias obras. Así mismo, La Candelaria

creó su sello editorial, bajo el cual han salido a la luz pública varias de sus obras, todas de crea-

ción colectiva, en una serie de textos como 4 obras de teatro. El Quijote, De Caos & Deca Caos,

Nayra, Antígona (2008), Teoría y práctica del teatro (1983) de Santiago García y La imagen teatral

en La Candelaria. Lógica y génesis de su proceso de trabajo (1992) de Gonzalo Arcila Ramírez,

entre otros.

Varias de sus creaciones colectivas se han convertido en hitos del teatro colombiano. Al-

gunas de estas son Marat Sade (1966) de Peter Weiss; Guadalupe años sin cuenta (1975), la cual

alcanzó dos décadas en cartelera y es considerada una obra fundamental del Nuevo Teatro La-

tinoamericano; Diálogo del Rebusque (1981) y Corre, corre Carigüeta (1986), ambas de Santiago

García; El paso (1988), que ha sido representada nacional e internacionalmente cerca de 800

veces, todas dirigidas por Santiago García, entre otras.

El Ministerio de Cultura otorgó en 2006 el Premio Nacional Vida y Obra al maestro Santiago

García por su aporte al desarrollo del teatro colombiano.

Fachada Foto Mauricio Uribeafiche de guadalupe años sin cuenta Centro de DocumentaciónTeatro La CandelariaEn la raya, Teatro Colón, 1996 Foto Carlos Lema

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santiago García como Creonte en Antígona, 2006Foto Carlos Lema

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Grupo del teatro la Mama, 1968Taller-escuela en la sala del teatro, 1987El abejón mono, 1972Fotos Archivo Teatro La Mama

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Teatro Experimental La Mama (1976)

DirectorEddy ArmandoCalle 63 No. 9-60Barrio ChapineroLocalidad ChapineroTel. 2112709 [email protected]

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35

_En 1968 Eddy Armando, en compañía de Kepa Amuchastegui, Consuelo Lu-

zardo, Germán Moure, Gustavo Mejía, Paco Barrero, Jeanine Elgazi, Consuelo Moure, Jorge Cano,

Jaime Carrasquilla, Beatríz Elena Mejía, emprendieron en Bogotá la creación del grupo de teatro La

Mama, basados en la propuesta del café teatro La MaMa E.T.C. -Experimental Theatre Club- creado

en 1961 por la artista newyorkina Ellen Stewart, quien acogió la iniciativa bogotana. Buscaban con

ello generar un espacio para experimentar y proponer nuevas opciones escénicas y de relación con

el público.

Este propósito los unió durante un año y medio, pues pronto el grupo se disolvió. Empero, la

idea sobrevivió en el maestro Eddy Armando, quien junto con Orlando Álvarez continuó con el plan

de consolidar la propuesta del Teatro La Mama en Bogotá.

Durante los primeros años 70 su sede fue un galpón ubicado en la carrera 13 entre calles 48 y 49,

en Chapinero, al que se llegaba después de recorrer un largo corredor que desembocaba en varios

depósitos. Uno de estos fue adaptado como escenario para el teatro experimental que producía el

grupo La Mama. Luego de seis años de trabajo artístico continuo, fueron desalojados, por deber

varios meses de renta, y obligados a generar formas de supervivencia delimitadas por su compro-

miso con el teatro.

Al año de haber dejado el lugar retornaron e iniciaron una protesta pacífica en la que se exigía al

gobierno la implementación de políticas claras hacia el arte y la cultura. Se tomaron el andén próxi-

mo a la construcción de la que fueron expulsados y construyeron allí un “cambuche” que les servía

de refugio y de escenario teatral. Su protesta tuvo gran acogida y fue ampliamente alentada por

artistas e intelectuales que apoyaban sus críticas y exigencias, pero prontamente fueron silenciados

por un organismo secreto. El “cambuche” fue destruido y Eddy Armando y Orlando Álvarez, fueron

desaparecidos durante varios días, tiempo en el cual fueron torturados, interrogados y acusados

de terrorismo. Sin embargo, fueron rescatados aunque condenados a prisión por el “delito de sedi-

ción”. Pasaron ocho meses en la cárcel y luego fueron exiliados. Durante un año, deambularon por

Venezuela y Ecuador, hasta que pudieron regresar al país.

Hacia finales de los setenta, de vuelta en Bogotá y con la idea de retomar los pasos dejados

en la consolidación de su teatro, solicitaron apoyo a Colcultura, entidad que bajo la dirección de

Gloria Zea les entregó recursos económicos para la construcción de su actual sede, la cual fue edi-

ficada sobre un lote del Instituto de Desarrollo Urbano –IDU-. Este arreglo aún hoy se mantiene,

pues la construcción es propiedad del Teatro La Mama y el predio del Instituto. A mediados de los

noventa, el Ministerio de Cultura, en cabe-

za del ministro Ramiro Osorio, respaldó el

trabajo artístico de La Mama a través de la

remodelación y ampliación de la sala y de la

casa en general.

Varias de sus obras y algunos de sus

montajes hacen parte de los hitos del tea-

tro colombiano, entre los que se encuen-

tran Tom Pain y la cabeza de la víctima ha

caído (1975), dirigida por Kepa Amuchas-

tegui; Los pasatiempos de la mama local

(1974); Dos viejos pánicos (1974); Los tiem-

pos del ruido (1985) y En-Sueños de Bolívar

(1990), entre otros.

Fachada del Teatro la MamaFoto Archivo Teatro La Mamala sala del teatroFoto Mauricio Uribe.

{


primera sede del teatro, 1975 Foto Mauricio Uribe

la sala del teatro de marionetasFoto Mauricio Uribe

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Teatro de Marionetas Jaime Manzur (1980)

DirectorJaime Manzur LondoñoCalle 61A No. 14-58Barrio Bajo ChapineroLocalidad ChapineroTel. [email protected]

_La Fundación Jaime Manzur para el Desarrollo de las Artes Escénicas fue

creada el 28 de agosto de 1980 por el maestro Jaime Manzur Londoño junto con Cecilia Lon-

doño de Manzur y Hernán J. Serna García. La sede de esta Fundación durante varios años fue

también la vivienda del maestro Manzur, quien compartía el amplio espacio de esta casona,

ubicada en el barrio Chapinero, con el museo, la cafetería, la bodega y la sala de teatro y en

general, con el público asistente a los espectáculos que ofrecían sus marionetas.

La adecuación de esta casa como escenario artístico y museo así como la dotación de la

sala de teatro, fue resultado de una gestión realizada por la Fundación Jaime Manzur, que lo-

gró el apoyo de una larga lista de empresas privadas y personajes de la vida pública y política

del país, quienes ayudaron a dotar la sala donando una silla hasta completar el aforo de 100

puestos.

El maestro Jaime Manzur, incansable en su labor de creación, ha elaborado cerca de

4.000 vestidos, más de 300 telones y unos 100 muñecos, que le permiten dar vida a 700 perso-

najes de óperas, zarzuelas, operetas y cuentos infantiles. Así mismo, ha realizado diversas y

numerosas adaptaciones de obras de la literatura infantil al lenguaje de los muñecos de hilo.

La acumulación de objetos artísticos, provenientes del trabajo de creación artesanal y de

plástica que aún hoy conlleva cada uno de los montajes realizados por la Fundación, compren-

dido por telones, vestidos, muñecos, muebles de decoración del escenario, motivó la creación

de un espacio en el cual se pudieran exhibir estas creaciones. Fue así como el maestro Manzur,

abrió en el segundo piso de esta casa, un pequeño Museo de Marionetas en el cual, durante

casi una década, se realizaron diversas exposiciones de las miniaturas empleadas en los mon-

tajes del teatrino. En estas se mostraba la historia del mueble y de la indumentaria, esta últi-

4

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Muñecos en escenaFoto Archivo Fundación Jaime Manzur

{ma, a través de los diversos vestidos usados por las marionetas, diseñados por Jaime Manzur

y elaborados de manera detallada por Cecilia Londoño de Manzur, madre del maestro.

La pasión del maestro Manzur por el género lírico le llevó a crear, además, su propia Com-

pañía de Zarzuela y Ópera en Vivo en 1992, con grandes obras del repertorio lírico universal,

eventos a los cuales ha invitado a participar a reconocidos cantantes nacionales y extranjeros.

Hace parte de su repertorio para marionetas Aladino y la lámpara maravillosa y El rena-

cuajo paseador; entre las zarzuelas que representa en vivo la Compañía de Jaime Manzur se

encuentran Los Gavilanes (1923) de Jacinto Guerrero; La Leyenda del Beso (1924), música de

Reveriano Sotullo y Juan Vert; Las Leandras (1913), música de Francisco Alonso y libreto de

Emilio González del Castillo y José Muñoz Román; La Viuda Alegre (1905), música de Franz Le-

har, libreto de Leo Stein y Victor León y adaptación al español de Roger Junoy; Doña Francis-

quita (1923), libreto de Federico Romero y Guillermo Fernández Shaw, basado en La discreta

enamorada de Lope de Vega y Antología de la Zarzuela.

Muñecos de Jaime ManzurFoto Carlos LemaEl maestro ManzurFoto Archivo Fundación Jaime ManzurFachada del teatroFoto Mauricio Uribe

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Teatro Libre, sede Centro (1980)

Director generalRicardo CamachoDirectora de la sala Alejandra GuarínCalle 13 No. 2-44Barrio La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. [email protected]

_“¿Por qué lo llamaron Teatro Libre de Bogotá? No tengo idea. Surgió porque a

alguien le sonó revolucionario, pero no fue meditado. El nombre era provisional, pero se quedó así,

no fue producto de una reflexión.” (Entrevista a Ricardo Camacho, en: “Teatro Libre de Bogotá

1973 – 2005”, editorial Planeta, Bogotá, 2005, página 21).

En 1973 un grupo de estudiantes de las universidades Nacional y de Los Andes, y algunos

otros egresados de la Escuela de Teatro del Distrito, la mayoría sin educación teatral formal,

crean el Teatro Libre de Bogotá. Estos jóvenes artistas, se agruparon con el propósito de cons-

tituirse en un grupo independiente, inicialmente bajo la idea de hacer clara la función del teatro

como una herramienta pedagógica de transformación social; sin embargo, y como parte de la

búsqueda de su lenguaje teatral, años más adelante los maestros Germán Moure y Ricardo Ca-

macho, promotores de este proyecto artístico, definieron el rumbo del grupo de teatro hacia

el teatro de autor.

El esfuerzo de casi una década resistiendo las dificultades propias de la itinerancia, lo vio

reflejado el equipo al momento de adquirir su primera sede, con la clara intención de darle es-

tabilidad al trabajo del grupo. Esto sucedió en 1975, cuando compraron la casa en ruinas de la

familia Matiz Umaña –hoy considerada de conservación arquitectónica-, ubicada en el centro

histórico de Bogotá, la cual había sido una escuela pública, luego un refugio de habitantes de la

calle y también estudio del fotógrafo Abdú Eljaieck. Iniciaron inmediatamente la recuperación

de la construcción de acuerdo a los diseños de los arquitectos Alberto Martínez y Simón Vélez,

trabajos que tardaron cinco años, y en los que participaron albañiles, obreros, artistas y direc-

tores del grupo de teatro. Por fin, en 1980, inauguraron el teatro de cámara con una capacidad

para 204 espectadores.

diseños de Enrique Grau para el rey lear, 1978 la sala del teatro en construcción, 1978Fotos Archivo Teatro Libre

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Durante varios años realizaron montajes en esta sede y en diversos espacios de Bogotá y

del país, al tiempo que avanzaban en la consolidación de su lenguaje teatral. Con el montaje de

algunos clásicos de teatro universal, especialmente con la experiencia de haber llevado en 1979

a escena El Rey Lear de William Shakespeare, se distanciaron de la militancia política y se en-

caminaron hacia el llamado “teatro de repertorio”. Montaron obras como A puerta Cerrada de

J.P. Sartre, La Balada del Café Triste de Carson McCullers, Un Tranvía llamado Deseo de Tenesse

Williams, que finalmente les permitió definir claramente su línea artística y separar el teatro de

los intereses políticos. Con ello se alejaron de la tendencia que marcaban los grupos existentes

en el momento de la creación del Teatro Libre de Bogotá, como el TPB y La Candelaria, los

cuales planteaban, en sus creaciones artísticas, la relación entre el teatro y el activismo social.

Durante otros cinco años esta casa fue la única sede del Teatro Libre, hasta que en 1985,

como consecuencia de la toma del Palacio de Justicia, la accesibilidad a La Candelaria se vio

afectada especialmente en las noches y con ello también la llegada al Teatro. Esta circunstan-

cia llevó al grupo a adquirir otro espacio en donde realizar sus presentaciones nocturnas, por lo

que se resuelve comprar el Teatro de La Comedia o Teatro de Chapinero.

La sede del centro se convirtió entonces en escuela de arte dramático, decisión y acción

que finalmente salvó al Teatro Libre. A partir del 2005, y como resultado de un convenio firma-

do entre la Universidad Central y el Teatro Libre, se creó la carrera profesional de Arte Dramá-

tico que otorga el título de Maestro en Arte Dramático.

Entre sus obras insignes se encuentran El Rey Lear (1976), de William Shakespeare, versión

de Jorge Plata, dirección de Ricardo Camacho y Germán Moure; La agonía del difunto (1976), de

Esteban Navajas, dirigida por Jorge Plata; A puerta cerrada (1983), de Jean Paul Sartre, dirigida

por Germán Moure; La balada del café triste (1983), de Carson Mc. Cullers, dirección de Ricardo

Camacho; Seis personajes en busca de autor (1984), de Luigi Pirandello, dirigida por Germán

Moure; Diatriba de amor contra un hombre sentado (1994), de Gabriel García Márquez, dirigida

por Ricardo Camacho, con actuación de Laura García; El Encargado (2004), de Harold Pinter,

versión libre y dirección de Ricardo Camacho; Las preciosas ridículas (2005), de Molière, adap-

tación de Jorge Plata y dirección de Ricardo Camacho, por citar algunas.

FachadaFoto Carlos Lemala salaFoto Mauricio Uribe

las preciosas ridículas, 2005Foto Carlos Lemalos demonios, 2009Foto Mark Maughan

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Auditorio Rafael Baquero (1983)

Fachada del instituto león TolstoiFotoYolanda López

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_En 1944 se crea en Bogotá el Instituto de Intercambio Cultural Colombo

Soviético como resultado de la solidaridad y admiración por parte de la intelectualidad colom-

biana hacia el pueblo soviético, en homenaje a su resistencia a la invasión de la Alemania nazi

ocurrida entre 1941 y 1945 durante la segunda guerra mundial.

Entre los promotores de este proyecto se encontraban Agustín Nieto Caballero, Baldomero

Sanín Cano, Alfonso López Michelsen, León De Greiff y Gerardo Molina, quienes sumados a ar-

tistas, escritores y políticos participaron en tertulias, eventos artísticos y poéticos y, en general,

en la difusión de la cultura y el intercambio de conocimientos culturales con invitados del actual

territorio ruso.

Después de más de treinta años de actividad y de situarse en varias casas ubicadas en di-

ferentes barrios bogotanos, el Instituto logra con la ayuda de artistas, sindicatos de la antigua

URSS y de Colombia, así como de otros gremios, adquirir en 1982 su propia sede, ubicada en el

centro histórico de la ciudad.

Esta construcción, hoy declarada de conservación arquitectónica, se encontraba en alto

grado de deterioro puesto que allí había funcionado un inquilinato y posteriormente una tipo-

grafía, sin recibir durante varios años mantenimiento alguno. Sin embargo, la junta directiva

del Instituto inició su recuperación y bajo la dirección del arquitecto Leonel Márquez se realizó

la restauración y remodelación de la casa, en cuyo solar se construye en 1983 la sala de teatro

bautizada como “Auditorio Rafael Baquero” con capacidad para 180 personas.

6

41

Sin embargo, las transformaciones sociales y políticas mundiales y nacionales afectaron

la estructura y el corriente andar del Instituto, pues con la desintegración de la URSS dejó de

recibir recursos para su funcionamiento por parte del gobierno soviético. Como solución a este

cambio, surge el Centro Histórico Artístico León Tolstoi. Más adelante, en 1992, ambas institu-

ciones se fusionan para crear el actual Instituto Cultural León Tolstoi.

El Instituto, además de participar en el Festival Iberoamericano de Teatro, ofrece talleres

de formación actoral y promociona grupos teatrales a través del préstamo o alquiler de la sala

de teatro. Por esta sede han pasado grupos bogotanos como la Compañía Nacional de Teatro,

Arte Facto Teatro, Kábala Teatro, entre otros, así como grupos de teatro provenientes de la Fe-

deración de Rusia, quienes han realizado montajes, conferencias y talleres de formación actoral

para estudiantes bogotanos de teatro.

Algunos de los montajes realizados en esta sala han sido Desfachatadamente clásicos

(1991), de Carlos La Rosa, dirección de Andrés Mildon; Los maridos engañana de 7 a 9 (1991), de

Sixto Pontel Ríos, dirección de Carlos Enrique Murillo, con el grupo de teatro de la Academia de

Artes Escénicas de Ronald Ayazo; La Lección (1992), de Eugéne Ionesco, grupo de teatro Arte

Facto, dirección de Hugo Santander; La mañana de un hombre ocupado (1993) de Nicolás Gogol,

adaptación de Pablo Angarita, y Las preciosas ridículas (2004), de Molière, dirección de Juárez

Naranjo, actuación del grupo de teatro “Compañía Nacional de Teatro”, entre otras.

Presidente Rubén Dario FlórezDirector Alfonso Cuéllar Torres Directora cultural Consuelo RodríguezCalle 14 No. 3-86Barrio La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. [email protected]

las preciosas ridículas, 1998Foto Archivo Instituto León Tolstoiinterior del auditorio rafael baqueroFoto Mauricio Uribe

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Teatro Taller de Colombia (1985)

{Grupo del Teatro Taller de ColombiaArchivo Teatro Taller de ColombiaFachada de la casaFoto Mauricio Uribe

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DirectoresJorge Vargas y Mario MatallanaCalle 10 No. 0-19 EsteBarrio EgiptoLocalidad La CandelariaTel. 3364232 [email protected]

_A mediados de los 60, los maestros Jorge Vargas y Mario Matallana, acto-

res iniciados en el Teatro La Mama de Bogotá, emprendieron una larga gira por Centroamérica,

con su obra Orígenes como única tarjeta de presentación. Esta obra les abrió la puerta de dife-

rentes salas de teatro y de casas de familia que los iban acogiendo y apoyando en su empeño

por vivir del teatro. Poco a poco fueron avanzando hasta el norte de América hasta que llega-

ron a California en donde conocieron, de primera mano, el Teatro Chicano y Campesino de Luis

Valdés. Este movimiento artístico y social les mostró, por un lado, una nueva forma de hacer

teatro, en la que se involucraba directamente al espectador en el desarrollo de las obras, y por

otro, la necesidad de profundizar en sus raíces culturales.

Con este bagaje de conocimientos regresaron al país y maduraron los conceptos teatrales

a partir de presentaciones y montajes en los que experimentaban diferentes lenguajes escé-

nicos. Pronto alquilaron una casa y adoptaron el teatro callejero como su propuesta escénica,

incorporando en sus montajes el uso de zancos, máscaras gigantescas y música en vivo. Así

entonces el espacio público bogotano fue su escenario durante varios meses hasta que en 1972

crearon la Fundación Teatro Taller de Colombia, organización que les ha permitido continuar

con su búsqueda artística, experimentar y practicar en calles, parques y plazas públicas, y gene-

rar su propia dramaturgia.

Casi una década más tarde, en 1983, compran una casa ubicada en el barrio Egipto, conver-

tida en la actual sede del grupo de teatro callejero Teatro Taller de Colombia. Al momento de la

compra, esta antigua casona, considerada hoy de conservación patrimonial, era un inquilinato

de ladrones rodeado de chicherías, por lo cual, lógicamente dado el hábito de sus habitantes, su

interior había sido saqueado y en general estaba bastante deteriorada. Una vez desalojados es-

tos huéspedes inoportunos, iniciaron las obras de restauración y adaptaron como escenario una

carpa de circo, amplio espacio en el que todavía ensayan sus obras. Desde 1997 la fundación

realiza el Festival Internacional de Teatro Callejero “Al Aire Puro”, que aún hoy se lleva a cabo.

Entres algunos de sus montajes se encuentran las obras Cuando las marionetas hablaron

(1976) creación colectiva con textos de Juan Carlos Moyano; La cabeza de Gukup (1980), adap-

tación de los textos míticos del Popul Vuh por Juan Carlos Moyano y dirección de Jorge Vargas;

Popon el brujo y el sueño de Tisquesusa (1993) escrita por Fernando González Cajiao y dirigida por

Jorge Vargas; El regreso de Don Quijote (2006), de Azulay y Mario Matallana y dirección de Mario

Matallana y Jorge Vargas.

{Grupo del Teatro Taller de ColombiaArchivo Teatro Taller de Colombiala carpaFoto Carlos Lema


Teatro La Baranda (1986)

DirectorGuillermo Delgado ParraCarrera 6 No. 54–04Barrio Chapinero AltoLocalidad ChapineroTel. [email protected]

la sala del teatro. rebeca lópez en sara bernhardt, 1985Fotos Archivo Fundación Teatral La Baranda

{

_Pocos días antes de la inauguración, Antonio Corrales aún no sabía que

nombre darle al teatro, así que observando la construcción desde el parque del frente, detalló

en la importancia que tiene la baranda del segundo piso en la arquitectura de la casa y por eso

decidió que se debía llamar de esta manera, “La Baranda”.

Luego de haber pasado por varios escenarios teatrales del país, de haber participado en la

fundación del Teatro Popular de Bogotá y de gozar de una amplio reconocimiento en el mundo

de la televisión colombiana, el actor y director Antonio Corrales (1943-1991) detectó la nece-

sidad de crear un espacio para actores ya veteranos, que habían incursionado en la televisión

después de haber cumplido su formación en teatro, y que por la implacable dinámica del medio

ya no eran tenidos en cuenta para formar parte de los elencos de novelas y series de televisión,

y que además no tenían grupo de teatro ni sede en donde actuar.

Junto a Guillermo Delgado, decidieron entonces abrir este espacio para el regreso de acto-

res de televisión a las tablas. En 1985 encontraron esta casa de tres frentes y de estilo art decó,

ubicada sobre la carrera 6 con calle 54, hoy considerada de conservación arquitectónica. El esta-

do de la casa, aunque no era lamentable, sí había sufrido el embate que dejó el ser sede durante

6 años de una institución universitaria y antes de esta, haber sido consultorio odontológico en

parte de su primer piso.

Con el apoyo del arquitecto Antonio Grass, la adecuaron para la realización de obras tea-

trales con actores de televisión. Ese mismo año terminaron las obras e inauguraron el teatro

de cámara, que cuenta con capacidad para 80 espectadores; paralelamente se transformó la

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casa en un centro cultural en el por varios años se realizaron

tertulias entre los actores y el público asistente después de la

obra presentada. De manera intencional, se conservaron los

elementos originales de esta casa con la idea de generar un

espacio en el que se articularan la arquitectura, la gastrono-

mía, el teatro y las tertulias literarias y teatrales.

La sala se estrenó con la obra Sara Bernhardt (1985), en

la que actuaron Fabio Camero, Rebeca López, Yamile Humar

y Delfina Guido, entre otros. Otras representaciones son Or-

questa de señoritas (1986), con la actuación de Ernesto Aron-

na, Antonio Corrales, Juan Pablo Rueda y Gabriel González, y

Dos gallinas sentadas hablando mierda (1989) de John Ford

Noonan, dirigidas por Antonio Corrales.

El restauranteFachadaFotos Mauricio Uribemario sastre y delfina guido en La Noche de la BasuraFoto Archivo Fundación Teatral La Baranda

{


Teatro Chiminigagua (1988)

Directoranubia Liceth SuazaCarrera 80K No. 72–45 SurBarrio LaurelesLocalidad BosaTel. [email protected]

Vive y deja vivir, 2005Foto Carlos LemaFachada de la FundaciónFoto Mauricio Uribe

{

_El dios Chiminigagua hace parte de la mitología indígena muisca, y es el

creador de las cosas, del sol, la luna y la belleza del universo.

En 1988 surge la Fundación Cultural Chiminigagua por iniciativa del hoy congresista Venus

Albeiro Silva, con el fin de rescatar, organizar y recrear la cultura popular a través del teatro y el

arte. Silva dirige esta fundación así como el grupo de teatro hasta inicios del 2002, año en el que

la dirección de la fundación para a ser colectiva.

La sala de teatro Chiminigagua, con capacidad para 130 personas, está ubicada en una

construcción de tres pisos en cuyo frente se encuentra el Parque de las Artes, en el que se dan

cita artistas de varios géneros teatrales, pero especialmente quienes realizan teatro callejero.

La construcción de este parque, así como la concha acústica allí levantada, fue realizada en

1990, y hace parte del aporte que ha realizado la Fundación Cultural Chiminigagua a la infraes-

tructura cultural de la localidad de Bosa. Su construcción tomó seis años de trabajo de jóvenes

y adultos de la comunidad, que junto con los trabajadores calificados para esta construcción,

inauguraron en 1996 este escenario artístico al aire libre. La Fundación Chiminigagua organiza

en este parque y desde hace 19 años, el Festival Internacional Invasión Cultural a Bosa que se

realiza anualmente en noviembre y diciembre.

Entre algunos de los aportes al teatro callejero realizado por el grupo de teatro Chiminiga-

gua se encuentra la especialidad de zancos sobre patines.

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zancos en patines.la concha acústica del parque. la sala Fotos Fundación Chiminigagua

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Teatro estudio Calarcá - Tecal (1989)10

El Álbum, 1998Foto Archivo Tecal

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DirectorCríspulo Torres BombielaCalle 13 No. 2–70La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. [email protected]://www.tecal.8m.com/

_El grupo Teatro Estudio Calarcá, Tecal, fue creado en 1981 por Críspulo Torres

y Mónica Camacho, actores formados en la Escuela Nacional de Arte Dramático, en Bogotá, y no

como podría pensarse provenientes del municipio de Calarcá, Quindío, aunque sí hacen homenaje

al cacique Calarcá, guerrero de los indios Pijaos, de quien tomaron su nombre para representar tan-

to la estética como el valor histórico de una figura legendaria en la cultura popular.

Este ha sido el concepto básico sobre el cual el Tecal ha desarrollado su lenguaje teatral, es

decir, a partir de su relación con las formas tradicionales del teatro popular, proponer montajes sen-

cillos de fácil comprensión para un público amplio sin abandonar el componente de crítica socio-

cultural. Su búsqueda se centra en presentar un nuevo concepto de teatro callejero que no necesa-

riamente estuviera hecho a partir de llamativos vestuarios, sonidos o espectáculos, sino en el que

se privilegiara el argumento y el cuerpo como medios para la transmisión de la experiencia estética.

En sus inicios, el grupo de teatro recorrió el país explorando los lenguajes del hombre de la

calle y realizando montajes para teatro de calle. La intensa actividad pronto los condujo a buscar

un espacio de trabajo permanente en donde depositar su equipaje escénico y en donde ensayar sus

propuestas teatrales.

De este modo ocuparon entonces varias sedes, hasta que en 1988, después de años de trabajo

artístico al aire libre, el Tecal compra una casa antigua ubicada en el centro histórico de Bogotá. La

adquiere con una promesa de compra a un año, con el aporte de la cuota inicial. Con funciones y

trabajo teatral en el patio de la casa, adaptado ahora para espectáculos, sumado a un préstamo

bancario, trabajos como docentes y la solidaridad del gremio teatral, lograron reunir el dinero en

un año para cumplir con la promesa y adquirir la vieja casona definitivamente. En 1989 abren las

puertas de la nueva sede a la ciudad, con la obra Preludio para andantes o fuga eterna, escrita y

dirigida por Críspulo Torres. Pero es en 1995 cuando inauguran su sala de teatro, tres años después

de iniciada su construcción, que cuenta con un aforo para 110 espectadores.

Esta vieja casona, hoy de conservación arquitectónica, en sus inicios fue vivienda familiar y lue-

go fue ocupada por un colegio distrital. El grupo Tecal participó activamente en los trabajos de recu-

peración del inmueble, al cual le cambiaron el techo y los pisos, conservando la fachada y también

algunos de sus “visibles fantasmas”.

Dos obras han marcado significativamente la trayectoria del Tecal en el teatro nacional e inter-

nacional, la primera, Domitilo, el rey de la rumba, estrenada en 1980, superó las 6.000 funciones y El

álbum, estrenada en 1998 en el Parque Nacional de Bogotá, ambas escritas y dirigidas por Críspulo

Torres, director actual.

El Álbum, 1998Foto Archivo TecalFachada del teatroFoto Yolanda Lópezla salaFoto Carlos Lema

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Academia Superior de Artes de Bogotá (1991)

la ilusión cómica en los sótanos de la asab, 1995Fachada del antiguo Colegio la Mercedaño koltes, en el patio de la asab, 1996Fotos Carlos Lema

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Decana Facultad de Artes – ASAB Marta Lucia Bustos GómezCarrera 13 No. 14-69Barrio La CapuchinaLocalidad Los Mártires

_El “Palacio de la Merced” fue diseñado en 1920 por el ingeniero Carlos José

Lazcano Berti para la comunidad religiosa de los capuchinos, como sede del Colegio Departa-

mental La Merced, que en aquella época funcionaba como internado femenino. El edificio de

estilo francés, que se levantó en el lugar que antes ocupaba el convento contiguo a la iglesia de

La Capuchina, posee tres pisos, rematados por una mansarda, y se desarrolla alrededor de un

gran patio central. Fue declarado monumento nacional en 1984.

Veintidós años duró la construcción del edificio, de 1926 a 1948, hoy declarado Bien de

Interés Cultural de carácter nacional, en el cual funcionó el Colegio La Merced hasta 1974, cuan-

do la institución educativa se trasladó al municipio de Mosquera. Luego de ser utilizada como

biblioteca, la edificación fue restaurada en 1986 bajo la dirección del arquitecto Rafael Gutiérrez

y, cinco años más tarde, se convirtió en la sede de la Academia Superior de Artes de Bogotá.

La ASAB, hoy Facultad de Artes de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, se creó

en 1989 como una división del desaparecido Instituto Distrital de Cultura y Turismo (hoy Se-

cretaría de Cultura, Recreación y Deporte), con el fin de agrupar en una sola dependencia las

escuelas de artes del Distrito existentes en ese momento (escuelas de Teatro, de Bellas Artes, de

Danzas Folklóricas, de Ballet, de Música Emilio Murillo y la Escuela de Títeres), que se trasladan

en 1991 luego de la entrega en comodato por parte de la Gobernación de Cundinamarca a la

Alcaldía Mayor de Bogotá.

Años más adelante, en 2003, el IDCT transfiere del todo la ASAB a la Universidad Distrital

Francisco José de Caldas, y en 2005 se crea la Unidad Académica Administrativa Facultad de

Artes ASAB, como Facultad de la universidad.

Los espacios de su sede en el Palacio de La Merced ha sido explorada por los estudian-

tes de artes, quienes han descubierto espacios no convencionales para la presentación de sus

montajes, comolos techos de los pasillos, la mansarda del tercer piso y principalmente el patio

central, que se transforma en escenario para conciertos, exposiciones y en general para las artes

escénicas.

patio de la asabRéquiem/Ruinas, patio de la asab, 2009Fotos Carlos Lema

{


dime lo que ves, montaje de la asab en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán, 2004Fotos Carlos Lema

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Farenheit, 1970Foto Archivo Teatro CCGGM

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Teatro Gabriel García Márquez (1991)

DirectorHugo Afanador SotoCalle 13 No. 3-17La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. [email protected]

_La historia de esta sala de teatro se remonta a los primeros años de la déca-

da del 80, simultáneamente con los últimos años de funcionamiento de la Escuela Nacional de

Arte Dramático en la sede ubicada en una vieja casona de la calle 43 con carrera 15, época esta

de crecimiento y profesionalización del movimiento teatral bogotano, en la que la ENAD debió

cambiar de sede y entregar el espacio a la heredera de “caudillo del pueblo” para la construcción

de un centro cultural que llevaría el nombre de Jorge Eliécer Gaitán. Sin embargo, este proyecto

cultural desplazaba a los grupos de teatro ya seriamente conformados por estudiantes egresa-

dos de la ENAD, puesto que los dejaba sin espacios para ensayar y presentar sus trabajos tea-

trales. Fue a partir de ese suceso que los grupos “Teatro Estudio de Bogotá”, “Gesto”, “Teatro

Experimental de América Latina” y “Nuevo Teatro de Pantomima” iniciaron un largo camino

hacia la búsqueda de un lugar para su práctica del teatro en Bogotá.

La primera acción fue la de impedir el derrumbe de la antigua casa en donde funcionaba la

ENAD, entretanto no se les asignara un espacio apropiado para su desarrollo y práctica teatral.

Por ello ocuparon de manera pacífica pero enérgica esta edificación, resistiendo allí las diferen-

tes acciones policivas para la recuperación de la propiedad. Durante los tres años que ocuparon

la casa en espera de una solución, trabajaron en la adecuación de esta como sala de teatro y

realizaron continuamente presentaciones entre julio de 1980 y junio de 1981 ya bajo el nombre

de colectivo de trabajo Fundación Centro Cultural Gabriel García Márquez, en honor al escritor

colombiano exiliado en México en esos momentos.

El proceso de abandono de la casa por parte de los artistas, sucedió poco después de que

nuevamente se intentara por la fuerza acabar con su protesta de ocupación, pues se retiraron

las tejas del techo de la sala de teatro. Esto sucedió el 21 de octubre de 1982 a la misma hora

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El grupo y vecinos del teatro, 1983Foto Archivo Teatro CCGGM

Fachada en 1983 y la actualFoto Archivo Teatro CCGGMla salaFoto Mauricio Uribe

{

{

en que el país se enteró de la entrega del Premio Nobel de Literatura al escritor Gabriel García

Márquez, coincidencia ampliamente registrada por la prensa y que permanece en el anecdota-

rio de esta sala de teatro. Finalmente, la exigencia logró el efecto buscado y en 1983 el grupo

recibe un lote en el tradicional barrio de La Candelaria, entregado por el Distrito bajo la figura

de comodato, cuya duración será de 90 años (acuerdo 31 de 1983).

Este predio estuvo ocupado por una casa republicana habitada por una señora ya centena-

ria que falleció sin dejar herederos, con lo cual la casa quedó desocupada y poco a poco se fue

derrumbando hasta quedar sólo la fachada y un terreno que fue ocupado por los vecinos del

sector, quienes lo convirtieron en corrales de gallinas y cerdos.

En 1991 inauguraron el Teatro Centro Cultural Gabriel García Márquez y presentaron la obra

Cenizas sobre el mar, escrita y dirigida por José Assad, en una improvisada sala de teatro. Entre

algunas de sus obras originales se encuentran, Biófilo Panclasta (1981), de José Assad; La boda

rosa de Rosa Rosas (1986) de Hugo Afanador y Quixote o la máquina del disparate (1996) de

Andrés Rodríguez.


Teatro de Marionetas Ernesto Aronna (1992)

_Ernesto Aronna Solano (1936 - 2003), descendiente de célebres marione-

tistas italianos, se formó en teatro en la Escuela de Arte Dramático –ENAD–, en el Teatro Colón

con Víctor Mallarino, y actúo en varias obras. Fue actor de sala hasta que asistió al espectáculo

de las marionetas de Salzburgo, presentado en 1956 en el Teatro Colón, experiencia a partir de

la cual inició su trabajo como artista de las marionetas.

Años antes, había asistido a los espectáculos del maestro Antonio Angulo Gutiérrez, deca-

no de los marionetistas bogotanos, quien dirigió el Teatro de Marionetas del Parque Nacional

(conocido también como Teatro del Distrito y hoy como Teatro El Parque), desde 1936 hasta

1951.

Su pasión por este género escénico, lo llevó a fundar en 1960 la Compañía de Marionetas y

Títeres Santa Fe y a realizar funciones en diferentes locaciones de la ciudad y del país, inclusive

al aire libre. Sin embargo, se presentaba con cierta frecuencia en los teatros El Parque y el Tea-

tro Odeón (conocido posteriormente como el Teatro Popular de Bogotá -TPB-, así como en el

Teatrino Don Eloy.

Pese a las permanentes dificultades que enfrentó para conseguir una sede estable en don-

de pudiera no solo realizar sus presentaciones sino también abrir un espacio para formar nuevos

titiriteros y marionetistas, logró junto con su esposa, Myriam Restrepo Castro, adquirir en 1990

la actual sede que alberga el Teatro de Marionetas Ernesto Aronna.

Al momento de comprar esta casa, su interior se encontraba bastante deteriorado puesto

que le servía al propietario de bodega para los aparatos hospitalarios que este restauraba. La

recuperación inicial del inmueble por parte de la familia Aronna se inició con dinero prestado

13

Marioneta emblemática del TeatroFoto Yolanda LópezCartel diseñado por Ernesto aronna solano

{

57

DirectorErnesto Aronna RestrepoCarrera 20 No. 46–19Barrio PalermoLocalidad TeusaquilloTel. [email protected]

Fachada y salaTíteres del Teatro El parqueFotos Yolanda López

{

por el mismo dueño de la casa y poco a poco fueron realizando mejoras y adecuaciones, hasta

que pocos años después lograron construir una sala con capacidad para 40 personas.

Con la creación de la Fundación Ernesto Aronna, la familia se convirtió en una pequeña

empresa de espectáculos y de creación de marionetas, puesto que el maestro Aronna Solano,

además de escribir los libretos, musicalizaba la obra y diseñaba el escenario; por su parte, su

esposa Myriam se encargaba de delinear y realizar el vestuario de las marionetas mientras su

hijo, Ernesto Aronna Restrepo, quien no solamente heredó el nombre sino también el talento,

apoyaba desde niño la producción de los montajes, contando con la colaboración de su amigo

Jorge Avila.

Es hoy Ernesto Aronna R., quien ejecuta con maestría algunas de las obras legadas por su

padre y realiza diversos y contemporáneos montajes de marionetas.


dibujos de antonio anguloArchivo Teatro Aronna

{


Ditirambo Teatro (1993)

DirectorRodrigo RodríguezCalle 45 A No. 14–37 Barrio PalermoLocalidad TeusaquilloTel. 2326440 [email protected]

EdipoFoto Archivo Ditirambo

{

_El maestro Rodrigo Rodríguez, junto a Aída Guarín y Aldo Orjuela, compa-

ñeros de formación de la Escuela Superior de Teatro de Bogotá Luis Enrique Osorio, crearon en

1988 el grupo de teatro Ditirambo, con el claro objetivo de experimentar no solo en su plan-

teamiento escénico sino también en la escritura de un teatro que pudiera identificarse con lo

popular, lo mestizo y lo analógico, componentes estos que fundamentan su quehacer teatral.

A los largo de diez años, el grupo ocupó varias sedes antes de llegar al barrio Palermo;

conoció durante varios meses la dinámica del barrio Galán; realizó varias funciones en un salón

anexo a la Parroquia La Consolata, ubicada en la localidad de Los Mártires; pasó por el barrio

La Fragüita, en donde tomaron en arriendo un apartamento; ensayaron un tiempo en el salón

comunal del barrio Monte Blanco, siempre con la necesidad propia de la práctica teatral, y de

encontrar un lugar en donde ensayar sus obras y guardar el vestuario y la escenografía de sus

montajes.

En 1992 toman en arriendo una casa en Chapinero sobre la carrera 13 con calle 47, lugar en

donde había trabajado el actor y director Agustín Núñez, razón por la cual conservaba adapta-

ciones valiosas para el grupo de teatro, pues contaba ya con una sala con capacidad para cien

espectadores. Allí permanecieron 5 años para luego, en 1998, adquirir su propia sede ubicada

en el barrio Palermo.

14

61

afiche de Yo soy Lazarillo de Tormes Te jodiste amorFoto Archivo Ditirambos

Fachada y sala Fotos Mauricio Uribe {{

El maestro Rodríguez junto a la actriz y gestora Margarita Rosa Gallardo, ha configurado la

Fundación Ditirambo Teatro, como un espacio cultural en el que se desarrollan además activi-

dades pedagógicas y en donde se generan proyectos culturales y artísticos de carácter social.

Entre el extenso listado de obras escritas o adaptadas por Rodrigo Rodríguez, se encuen-

tran obras muy recordadas como Gilaldo Sampos (1988), inspirada en la novela La Familia de

Pascual Duarte de Camilo José Céla; Siervo sin Tierra (1990), adaptación de la novela de Eduardo

Caballero Calderón; Metamorfosis en K (1994), sobre la vida y obra de Franz Kafka; Montallantas

(1997), Premio Nacional de Dramaturgia y Beca Nacional; La Casa de Enfrente (2003), Beca Na-

cional de Creación del Ministerio de Cultura.


La Casa del Teatro nacional (1994)

pinocho y Frankenstein le tienen miedo a harrison Ford, Grupo petra, 2009Foto Carlos LemaTaller de actuación en el salón la sinagogaFoto Mauricio Uribe

{

_Este inmueble fue la última de las tres sedes adquiridas por la maestra Fan-

ny Mikey (1934–2008) para desarrollar las actividades artísticas y teatrales de la Fundación Tea-

tro Nacional.

En sus orígenes, esta casa fue la sinagoga de la Asociación Israelita Montefiore, comunidad

que agrupó a los judíos de habla alemana residentes en Bogotá, quienes en 1953 solicitaron a

la firma de arquitectos Tejeiro Blumenthal & Cía su construcción, inaugurándola en 1955 como

la primera sinagoga de esta comunidad en Bogotá. La edificación fue templo judío durante casi

cuatro décadas, hasta que en 1994 fue puesta en venta.

Fue entonces cuando Fanny Mikey encontró un nuevo uso para la desocupada sinagoga,

adquiriéndola para adecuarla como una casa-teatro. Es ya famosa la anécdota que acompañó

esta transacción, en la que la maestra Mikey, al ver que podría perderla por cuanto existía una

mejor oferta de compra, presentó a los rabinos propietarios su propuesta económica acompa-

ñándola de una narración: les contaba que en un sueño sus abuelos judíos le habían entregado

las llaves de esta sinagoga en bandeja de plata. Logró convencerlos usando este argumento

onírico y empleando además uno histórico, según el cual la tradición reconoce al pueblo judío

como una de las comunidades pilares en la defensa de la cultura y del arte.

La Fundación Teatro Nacional compró la construcción y la convierte en la Casa del Teatro

Nacional, conservando en su interior el salón llamado “la Sinagoga”, en donde aún permanece

una estrella de David como homenaje a los sobrevivientes judíos que llegaron a Bogotá huyen-

15

63

DirectoraAdela DonadíoCarrera 20 No. 37-54Barrio La SoledadLocalidad TeusaquilloTel. [email protected]

FachadaFoto Carlos Lemala salaFoto Mauricio Uribe

{

do de la Alemania nazi. Hoy esta construcción es considerada como un bien de interés cultural

y hace parte del patrimonio arquitectónico de los bogotanos.

En 1994 se inaugura la sala de teatro con la obra Amores simultáneos del maestro Fabio

Rubiano y en el 2000 se abre la Escuela de Arte Dramático. Desde ese momento, la casa se ha

convertido en un espacio en donde se forman y promocionan nuevos artistas y en donde se

facilita la experimentación de nuevas tendencias teatrales.


Teatro de Marionetas Hilos Mágicos (1994)

{ arriba: Goranchachaderecha: Cuentos del abueloabajo: afiche el principitoFotos Archivo Hilos Mágicos

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65

DirectorCiro Gómez AcevedoCalle 71 No. 12-22Barrio Quinta CamachoLocalidad ChapineroTel [email protected]

_El grupo de teatro de Hilos Mágicos (hilos que unen a la marioneta con el

artista y mágicos, porque dan la vida al espectáculo), fue creado en 1974 por Ciro Gómez, con

la presentación de la obra Las convulsiones, de Luis Vargas Tejada, para el desaparecido canal

cultural 11 de la televisión nacional.

Sus inicios se dieron en la localidad de los Mártires en una casa ubicada en el barrio Santa

Isabel, donde el grupo de marionetistas trabajó durante casi veinte años y donde creó el Festival

de Arte y Cultura de Los Mártires, evento que aún hoy se realiza.

Tras varios años de funciones continuas lograron adquirir la casa que ocupaban para con-

vertirla en su sede y en sala de teatro. Allí permanecieron hasta finales de la década del 90 cuan-

do decidieron mudarse hacia el barrio Quinta Camacho, sector de interés cultural en la localidad

de Chapinero, dando la cuota inicial del actual teatro de marionetas con el producto de la venta

de la sede del barrio Santa Isabel.

Aunque el nuevo inmueble se encontraba bastante deteriorado, la Asociación Cultural Hi-

los Mágicos lo adquirió por un alto precio a pesar de su condición, dado el amplio espacio y las

posibilidades de adecuación que ofrecía. Iniciaron entonces el proceso de recuperación conser-

vando el diseño original, remplazando los elementos necesarios para su buen funcionamiento,

recuperando la fachada original e iniciando la construcción de la sala de teatro en el patio inter-

no de la casa. En el 2001 finalizaron la construcción del teatro de marionetas, que cuenta con un

aforo de 180 sillas.

El cambio de sede ocasionó la lógica modificación del público, situación que incrementó

el trabajo de la Asociación, pues debieron emprender la ardua tarea de darse a conocer a los

vecinos del nuevo sector y a contarle a la ciudad su nueva ubicación.

Su director, el maestro Ciro Gómez, ha promovido la cualificación del movimiento de titi-

riteros colombianos a través de las Jornadas de Títeres de Bogotá y ha escrito y dirigido obras

como Llegaron los marcianos (1981), El tesoro de El Dorado (1982), Espejismos sobre el asfal-

to (1998), Cuentos y recuentos de Maese Pedro (1999), El gran Teokikixtli (2000) y Goranchaha

(2002), entre muchas otras.

{

{

ladrones a domicilioCuentos del abueloFotos Archivo Hilos Mágicos

la salaFoto Mauricio UribeFachadaFoto Archivo Hilos Mágicos


VariedadesFoto archivo Hilos Mágicos

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Sala Seki Sano - CCT (1994)

DirectoraPatricia ArizaCalle 12 No. 2-65Barrio La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. 3429621 [email protected], [email protected]

Manuela no viene esta noche, 2010Foto Carlos Lema

{

_La Corporación Colombiana de Teatro -CCT- es la organización gremial de

los teatristas colombianos, fundada el 6 de diciembre de 1969, cuya sede está ubicada en el

centro histórico de Bogotá y en la cual se encuentra a su vez la sala de teatro Seki Sano. La CCT

surgió como una forma de organización del Nuevo Teatro Colombiano, movimiento teatral de

tendencia política fundamentado en la lucha de clases y conformado por artistas que se han de-

dicado sistemáticamente al teatro y, en general, a las artes escénicas para promover el teatro,

desarrollar proyectos sociales, apoyar la creación artística y difundir el trabajo cultural.

La construcción que alberga a la CCT, considerada de conservación arquitectónica, fue ad-

quirida por la Corporación en 1994, momento en el que era usada como un depósito de madera

y una fábrica de muebles. Este uso deterioró su interior y ocasionó alguna pérdida importante

de su originalidad; sin embargo, la CCT bajo la dirección de la maestra Patricia Ariza, recuperó la

casa, adaptó algunos espacios para el funcionamiento administrativo de la Corporación y cons-

truyó la sala de teatro que cuenta con un aforo para 112 sillas.

La sala de teatro de la CCT está dedicada a la memoria del actor, director, investigador y

profesor japonés de teatro, el maestro Seki Sano (1905-1966), quien en 1957 y durante su breve

estadía en Bogotá logró influir en varios jóvenes que recibieron sus clases y continuaron con la

formación hasta convertirse en pilares del teatro bogotano, entre los que se cuentan Fausto

Cabrera y Santiago García.

Actualmente la sala Seki Sano es la sede principal de diversos eventos organizados y pro-

movidos por la CCT, tales como el Festival de Mujeres en Escena, creado en 1993, y el Festival

17

69

Fachada y salaFotos Mauricio Uribepatricia ariza en a manteles con el Teatro la CandelariaFoto Carlos Lema

{Alternativo de Teatro, en 1996. Además, es el espacio de ensayo y escenario de presentación

de los grupos de teatro gestados por la acción del CCT, como Flores de Otoño, conformado en

2000 por mujeres adultas mayores; Rapsoda, creado en el 2000 por jóvenes actrices y actores

de barrios populares de Bogotá; Contravía, integrado por jóvenes de barrios populares desde

el 2000; Enlace Melissa, de 2006, de jóvenes mujeres raperas y hip hopers; Caravana, 2006, de

mujeres desplazadas; Mandrágora, 2006, de jóvenes mujeres estudiantes de colegios de clase

media; Chicos y Chicas de Urabá, 2006, de jóvenes de la ciudad caribeña de Turbo y Trama Luna

Teatro, conformado por mujeres actrices en el 2010.


Casa Teatrova (1994)

El dorado colonizadoFoto Carlos LemaAfiche El dorado colonizadoArchivo Teatrova

{

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71

DirectorCarlos ParadaSubdirectorKadir Abdel RahimCalle 24 No. 4A–16Barrio Las NievesLocalidad Santa FeTel. [email protected]://casateatrova.blogspot.com/

_En 1980 Carlos Parada y Kadir Abdel Rahim fundan un grupo de teatro in-

dependiente (Teatro-Trova) con el cual inician la creación de una dramaturgia propia hacia la

formación de un repertorio para teatro de cámara y títeres. En 1989 crean la Asociación Cultural

Teatrova -Teatrova es la conjunción de las palabras Tea, antorcha y Trova, composición en verso

de los trovadores- e inician la búsqueda de una sede para sus montajes teatrales.

En 1994, adquirieren una vieja casona ubicada en el barrio Las Nieves, construida a finales

del siglo XIX en la Calle de las Trincheras y en cuyo solar aún hoy se conservan dos árboles pa-

trimoniales, un brevo y un cerezo, dando inicio a su reconstrucción y adecuación, simultánea-

mente con el trabajo de inserción en el sector organizando tertulias para los vecinos del teatro.

Con base en una campaña de venta de funciones y con los ingresos por taquilla obtenidos

por sus montajes, lograron adquirir la casa en su totalidad y continuar con la adecuación de la

Casa Teatrova, labor que les ha tomado 16 años en un proceso que se inicia en el patio solar

donde se reconstruyen los pisos y graderías con baldosas originales, logrando un escenario que

desde entonces se llamó “Escenario Solar”. La fachada y los muros que la sostienen en pie se

reconstruyen siguiendo los originales del siglo XIX, siendo lo único que se conserva de la vieja

casona, además del patio central y del patio solar. El primer techo reconstruido en teja de barro

fue el de la parte delantera, que albergó una sala de teatro de cámara y teatrino con una capa-

cidad de 50 espectadores. En el 2000 se cubre el patio central y se levantan columnas, reforza-

mientos en acero, puente de luces y pasadizos de tramoya, que dan forma a la sala de teatro

como se encuentra en el día de hoy.

Teatrova mantiene un repertorio de obras propias de dramaturgia nacional que nutre su

cartelera, además de circularlo con funciones en otros espacios teatrales de la ciudad, proyec-

tándolo a los barrios perimetrales y veredas en salones comunales y espacios no convenciona-

les. Su producción escénica se ubica en el contexto de la nueva dramaturgia colombiana y el

nuevo teatro colombiano. Trabaja con diversos medios expresivos, actuación, máscaras y varias

técnicas de animación de muñecos, desarrollando un estilo particular, de fiesta teatral, un tea-

tro de comedia, festivo y de comunicación para todos los públicos. En el campo de la formación

y el entrenamiento actoral estudia la actuación objetiva y las relaciones actor-máscara-elemen-

to (objetos y muñecos).

Algunos de sus montajes

son Ración de Arlequín (1979);

Fiesta de Cumpleaños y Los

Cuentos de Cucaraní (1980); Co-

muneros 1781-1981 (1981); El

País del Calandrajo Patas Arriba,

Patas Abajo (1985); Rodrigo a la

Torre Encantada (1991); Tetralo-

gocomia (1993), Beca Colcultura

1992; Historia de Globito Manual

(1996), de Carlos José Reyes,; El

Ilusionista (2000); Aluci-Nación

(2004); El Dorado colonizado

(2006), Alias Zorro, (2008), Es-

tado de cosas (2010), Rumba

ambiental (2010), todos con dra-

maturgia y dirección de Carlos

Parada.

FachadaArchivo Teatrovala salaFoto Mauricio Uribe

{


Teatro La Libélula Dorada (1995)

DirectorCésar Álvarez EscobarCarrera 19 No. 51–69Barrio XXXXLocalidad ChapineroTel. [email protected]

la rebelión de los títeres y los héroes que vencieron todo menos el miedo, 1978Foto Archivo Teatro La Libélula Dorada

{

21

73

_En 1976 César e Iván Álvarez Escobar,

luego de conocer el proceso artístico en torno a los

títeres que se estaba retomando en el Teatro El

Parque, ubicado en el Parque Nacional Enrique

Olaya Herrera de Bogotá, decidieron ingresar

a la Escuela Nacional de Títeres y pedagogía

artística de la Universidad Pedagógica -antes

de Colcultura-. Allí fundaron el grupo de teatro

que bautizaron como La Libélula Dorada, por

las virtudes de universalidad, variedad y resis-

tencia que caracterizan a este insecto y que a la vez

define los fundamentos de su lenguaje teatral.

Iniciaron su búsqueda de espacios de trabajo, que en-

contraron en el auditorio León de Greiff de la Universidad Nacional, don-

de permanecieron por un año para luego, en 1979, tomar en arriendo una habitación en la casa

alquilada por el Teatro Taller de Colombia. Debieron entregar este cuarto y decidieron viajar

hacia Villa de Leyva, en donde estuvieron varios meses para luego regresar a Bogotá.

De nuevo en la capital, en 1980, realizaron presentaciones frecuentes en las salas del teatro

La Mama, El Local, en el desaparecido teatro del TPB, en La Candelaria, experimentando con

pantomima, títeres y máscaras. Participaron en el Festival Nacional de Teatro que les permitió

hacer una gira por Francia y al regresar al país aceptaron la propuesta de realizar para la televi-

sión nacional el programa El Rincón de la fantasía, que duró un año, entre 1982 y 1983.

Arriendan luego un apartamento que acondicionan como espacio de trabajo en donde per-

manecen 8 años y logran estabilizarse. En 1992 crean el Centro Cultural Infantil, con el fin de

ofrecer nueva programación permanente de espectáculos y talleres en diferentes áreas relacio-

nadas con el Teatro de Muñecos.

En 1993 reciben el premio Alejandro Ángel Escobar por su trabajo con la niñez en sectores

populares. El premio les permite dar la cuota inicial de esta casa, que data de las primeras dé-

cadas del siglo XX. Inician el proceso de adecuación como taller para la construcción de mario-

netas y como sala de teatro y en 1995 finalmente inauguran la sala, que cuenta con capacidad

para 150 personas.

Esta es, además, sede del Festival de Blues y Jazz que hoy lleva 14 versiones, el Festival de

Danza Contemporánea, con 8 versiones y el Festival Internacional de Títeres Manuelucho, con

10 versiones.

Además del programa El Rincón de la Fantasía, han

realizado el programa Los Reencauchados (1995-1998)

y publicado el libro Delírium Titerensis (Arango Editores)

y la Revista Quiropterus, especializada en el Teatro de

Muñecos.

Algunos de sus montajes, con dramaturgia propia

a cargo de Iván Darío Álvarez, son Préstame tu sombrero

(1976); La rebelión de los títeres y Los héroes que vencie-

ron todo menos el miedo (1978); Sinfonías inconclusas

para desamordazar el silencio (1981); Los espíritus lúdi-

cos (1986); Ese chivo es puro cuento (1990); Las grandes

equivocaciones de Papa Noel (1997); Un pobre pelagato

mal llamado Fortunato (1998); El dulce encanto de la Isla

Acracia (2000) y El Romance de la niña y el sapito (2006).

FachadaFoto Yolanda LópezEl dulce encanto de la Isla Acracia, 2000Foto Archivo Teatro La Libélula Dorada

{


Teatro Acto Latino (1996)

Director generalSergio GonzálezCarrera 16 No. 58A-55Barrio Chapinero BajoLocalidad ChapineroTel. [email protected], [email protected]

Mente blancaFoto Archivo Acto Latino

{

_La historia del grupo de teatro Acto Latino se inició en 1967 en Suba, para

aquel entonces un municipio vecino a la capital, en donde un grupo de jóvenes se reunió en

torno a su interés por el arte. Su sede era el Teatro Vecinal de Suba, ubicado cerca de la plaza

central. Se llamaron Acto Latino -por ser el Acto la esencia del teatro, y el complemento Latino,

que designa la cultura latinoamericana- y crearon la Corporación de Arte y Cultura Acto Latino.

Esta primera experiencia artística tuvo una gran acogida y atrajo a diversos artistas con el

interés de participar en la propuesta cultural. Nacieron entonces varias vertientes artísticas to-

das bautizadas con el apelativo Latino, que identifica la expansión del proyecto, como el grupo

de títeres llamado Biombo Latino, el conjunto musical Son Latino, el colectivo de extensión

cultural Ecos Latinos, la pantomima organizada bajo el Signo Latino y la revista Muro Latino.

Este proyecto artístico estaba estrechamente ligado al pensamiento político de estos jóvenes y

al trabajo social en comunidades, con maestros y con artesanos, particularidades del grupo que

no fueron fácilmente aceptadas por el gobierno del momento, razón por la cual fueron expulsa-

dos del municipio de Suba.

Esta exclusión, aunada a la proyección que ya había alcanzado el teatro socio-artístico del

grupo, los condujo en 1973 al Teatro El Parque, en donde se estaba gestando un movimiento

cultural liderado por Beatriz Caballero, titiritera que conoció al grupo de títeres Biombo Latino y

posteriormente a todo el conjunto Latino, abriéndoles el espacio teatral a su propuesta general.

Permanecieron en el Teatro 6 años, en donde consolidaron aún más su trabajo artístico,

cultural y social creando espacios de formación de teatro, de títeres y de música, a los cuales

asistían principalmente habitantes de los barrios populares del oriente bogotano, antecedentes

22

75

directos estos de la posteriormente creada Escuela de Títeres del Distrito, de corta vida pero de

amplio impacto.

El Centro Latino se desintegró tras varios experimentos de convivencia, al tiempo que con

una nueva administración del Teatro El Parque se vieron obligados a dejar dicha sala y a conocer

escenarios no convencionales durante casi cinco años, como el Centro Comunitario de Lour-

des, el viejo Teatro Cuba, los Sótanos de la Avenida Jiménez, en donde dieron a conocer sus

propuestas artísticas y pedagógicas. Finalmente, en 1995 alquilan la actual sede para ensayar y

experimentar, y un año más tarde abren al público las puertas del Teatro Acto Latino, en donde

no solamente realizan montajes y presentaciones teatrales, sino que también forman actores,

bailarines y practican diversas actividades de las artes orientales.

En sus inicios, el grupo de teatro se centró en la puesta en escena de obras de Anton Ché-

jov, Bertolt Brecht y del colombiano Enrique Buenaventura. Luego redirigió sus pasos hacia el

teatro experimental y hacia la adaptación libre de obras de la literatura colombiana, y realiza-

ron montajes como El Gran Burundú Burundá, de Alberto Zalamea y El Coronel no tiene quien le

escriba, de Gabriel García Márquez. Más adelante, trabajan en una dramaturgia propia y surgen

obras como El pan de los personajes y Jack, Gus y Cris. En los años 80 crean Blacamán, versión

libre basada en la obra del premio nobel García Márquez. Más recientemente y desde 1996, han

creado obras como El demonio de ser (2004); Mente en blanco (2006) y Tendido de ropas (2007).

sala y fachadaFotos Mauricio Uribe

El demonio de ser, 2004PolaFotos Archivo Acto Latino

{

{


Teatro Actores (1994)

DirectoraMaría Eugenia Penagos MayaCalle 46 N. 28-30Barrio Belalcázar Localidad TeusaquilloTel 2687509 [email protected]

Fabio Camerosala y fachadaFotos Archivo Teatro Actores

{

_La sala de teatro Actores hace parte del conjunto de facilidades que ofrece

la Sociedad Colombiana de Gestión a sus afiliados para presentar sus trabajos escénicos. Esta

organización surgió en 1957 con el fin de hacer frente a la creciente problemática de los artistas

colombianos en torno, básicamente, a la vulneración de sus derechos como autores, y trabaja

en alianza con otras organizaciones creadas para la defensa de los derechos de los artistas en las

diferentes áreas como son Adecol, Sayco, Acinpro y Actores.

Esta última organización fue creada en 1989 por el Círculo Colombiano de Artistas, bajo el

nombre de Sociedad Acica, con el objetivo de establecer una plataforma clara y visible de la defen-

sa de los derechos intelectuales de los artistas intérpretes de las artes escénicas, sociedad que más

tarde modificó su razón social y hoy se conoce como Actores, Sociedad Colombiana de Gestión.

Actores y el Círculo comparten esta sede que cuenta, entre otros espacios, con salón para

danza y con una sala de teatro con capacidad para 200 personas. Actualmente Actores agremia

más de 300 artistas, quienes mantienen la sede a través del pago de su mensualidad por la afi-

liación a la sociedad.

Entre algunas de las obras presentadas en este escenario se encuentran Yerma, cuerpo

de mujer, Un noviazgo en 1920, La vida es maravillosa,

Apartamento de soltero y las obras del género danza–

teatro Leyenda del Dorado, Cornudo, apaleado y con-

tento, Anecdótica historia del teatro, a cargo del grupo

Arte-Facto y Las tardes de Manuela, del grupo Imáge-

nes Teatro.

19

77

Teatro Barajas (1998)

DirectorJairo BarajasCarrera 22 No. 56–40Barrio GaleríasLocalidad ChapineroTel. [email protected]

Grupo de teatro barajassalaFotos Archivo Teatro BarajasFachadaFoto Yolanda López

{

_Sus inicios se remontan a 1987, año en el que Jairo Barajas decidió seguir su

inclinación natural hacia el teatro y fundó su primera sede en una casa ubicada en el barrio Polo

Club de Bogotá. Allí inauguró una academia de artes en la que se impartía formación para teatro

y televisión, a la vez que se daban cursos de modelaje, pintura y guitarra para adultos, jóvenes y

niños.

Durante el desarrollo de los talleres de actuación, poco a poco se fue consolidando el grupo

de teatro que Jairo bautizó como Barajas por la alusión que su apellido hace a los naipes y por

las figuras que allí se encuentran, como alegoría del quehacer teatral.

Al poco tiempo el grupo decide adquirir una sede propia y encuentra una vieja casa en el

sector de Galerías. Inician entonces la construcción de la sala de teatro con capacidad para 120

personas, la que finalmente inauguran en 1998.

Tras algunos experimentos definen su lenguaje teatral, comenzando con la obra Préstame

tu marido, de Luis Enrique Osorio, continuando con Don Juan fotógrafo, de Duvian Darío Ga-

llego. Paralelamente a este trabajo inician la venta directa de montajes a colegios públicos y

privados de Bogotá y del país, en los que principalmente ofrecían El retrato de Dorian Gray, de

Oscar Wilde, adaptada y dirigida por Jairo Barajas.

La gestión cultural del Teatro Barajas le ha permitido

lograr su auto sostenibilidad y ampliar su campo de acción

hacia la realización de proyectos socio culturales en di-

ferentes localidades del Distrito. En esta sede funciona la

academia de arte y la sala de teatro, la cual cuenta con una

capacidad para 120 personas.

20


Teatro El Contrabajo, sede Tunjuelito (1996)

DirectoraGisela LozanoCarrera 62A No.62C-28 SurBarrio Isla del SolLocalidad TunjuelitoTel. [email protected]

la salaFachadaFotos Mauricio Uribepresentación para niñosArchivo Teatro Contrabajo

{

_En 1993 Héctor Escamilla y Gisela Lozano lideraron la creación del grupo de

teatro El Contrabajo, con el objetivo de hacer cultura en sectores populares. Con este nombre el

grupo hace un juego de doble alusión, con el cual buscan visibilizar las virtudes y obstáculos del

quehacer teatral, además del compromiso con el que emprenden su trabajo social. El Contraba-

jo evoca entonces, por un lado, el instrumento musical voluminoso y difícil de transportar, a la

vez que emite los sonidos más graves, y por otro, el término con-trabajo cuenta la intención de

producir cultura sin engaños, solo con trabajo.

El grupo inició sus actividades en Ciudad Kennedy y posteriormente continuó en el sector

denominado La Isla del Sol, en donde compró un lote a la orilla del río Tunjuelito con recursos de

los seis fundadores de El Contrabajo y con el apoyo de vecinos y de amigos.

Durante dos años el lote permaneció baldío, entretanto el grupo realizaba presentaciones

artísticas, talleres infantiles de formación de pintura y otras actividades culturales en diferentes

espacios de la zona. En 1994 recibieron un pequeño apoyo económico proveniente de una orga-

nización internacional, recursos que sumados a las jornadas de trabajo del grupo les permitió

dar comienzo a la constricción de la sede definitiva, lo cual

facilitó el trabajo teatral del grupo, especialmen-

te para los ensayos y para la experimentación escénica.

Como resultado de este empeño, el grupo de teatro logró

en 1995 montar los trabajos en títeres Chontaduro Madu-

ro y Ahí están pintados, así como construir comparsas,

realizar talleres de artes, presentar grupos invitados en la

sala, organizar recitales y armar jornadas deportivas. Dos

años después de iniciar la construcción, en 1996, finaliza-

ron la sala con capacidad para 110 personas.

23

79

DirectorHéctor EscamillaCarrera 12 No. 11-72 SUR Barrio La Despensa Bosa (antigua Sala Kerigma)[email protected]://elcontrabajo.110mb.com/

_La actual sala de teatro El Contrabajo, sede Bosa, es un legado de la des-

aparecida Fundación Teatral Kerigma, razón por la cual su historia es reciente aunque estrecha-

mente ligada con el largo camino desarrollado por ésta última. Kerigma nació en 1971 por inicia-

tiva de un grupo de jóvenes, vecinos entre sí, atraídos por las actividades artísticas y culturales

que realizaba el párroco de la iglesia del barrio la Despensa en Bosa. Además de la pasión por

el arte dramático, les unió el interés por hacer cultura en sectores populares, por lo que, entre

otras actividades, organizaron en 1981 la Primera Muestra de Arte Popular bajo el lema “Cultura

para la paz y la convivencia”, que desde hace ya cerca de treinta años se realiza en Bosa en la

primera semana de diciembre.

En sus inicios el grupo buscaba espacios familiares o parques para sus ensayos y presenta-

ciones teatrales, aunque la mayoría de veces la parroquia era su sede. Años después, lograron

alquilar un local y en 1998 recibieron en donación una casa que transformaron con apoyos eco-

nómicos del gobierno distrital y de cooperación internacional en la Casa de la Cultura de Bosa,

donde está ubicada la actual sala de teatro El Contrabajo, con capacidad para 100 personas.

Debido a procesos internos, el grupo de teatro original se disolvió y la Fundación Teatral

Kerigma fue adquirida por la Fundación Cultural El Contrabajo,

que desde 2007 se denomina Casa de la Cultura El Contrabajo,

la cual conserva la naturaleza de esta fundación cual es la de

hacer cultura en sectores populares.

Teatro El Contrabajo, sede Bosa (2007) 24

la salaFachadaFotos Mauricio UribezancosArchivo Teatro Contrabajo

{


Teatro Quimera (1999)

DirectorJorge Prada PradaCalle 70A No. 19-40Barrio ColombiaLocalidad Barrios Unidos Tel. [email protected]

Grupo quimeraFotos Archivo Quimera

{

_Jorge Prada hace parte de la generación de actores que se formó en la Es-

cuela Nacional de Arte Dramático, ENAD, y que participó en los inicios del Centro Cultural Ga-

briel García Márquez con el grupo Teatro Experimental de América Latina, hasta 1985, fecha en

la cual decidió formar junto con Fernando Ospina el grupo Quimera.

Como muchos de esta generación, encontraron en el Teatro El Parque el lugar propicio

para ensayar, intercambiar conocimientos y hacer montajes y presentaciones, un espacio que

fomentó las artes escénicas en sus diferentes géneros y que contribuyó a la consolidación del

teatro bogotano. Poco después de su paso por allí alquilaron un apartamento en el barrio Santa

Fe, que destinaron como lugar de ensayo y de bodega, realizando sus presentaciones en los

teatros de cámara que poco a poco iban surgiendo en la ciudad. Más adelante lograron arrendar

un espacio más amplio, cerca de la actual sede ubicada en el barrio Colombia, donde montaron

su propia sala, en la que iniciaron sus experimentos teatrales e incursionaron en la música con

la creación del grupo Los Cachifos, avanzando en su planteamiento artístico y pedagógico que

busca suscitar en el hombre de teatro la necesidad de trascender las fronteras entre las artes, en

búsqueda de la integralidad escénica.

La disciplina que mantuvieron durante esta etapa, durante la cual ensayaban en las noches

y trabajaban en oficios diversos durante el día, les permitió alquilar una bodega espaciosa, en la

que construyeron una sala tipo gallera, con capacidad para 120 espectadores. Allí permanecie-

ron 6 años, lapso en el que aumentó considerablemente su producción y que recuerdan como

su época dorada.

A tres cuadras de esta sede encontraron luego una casa en ruinas, que en 1998 compraron

dando un buen porcentaje de su valor total, obligándose a cancelarla en un año, asumiendo

25

81

además el compromiso de compartir el espacio con la propietaria que allí residía, Doña Sonia,

quien había perdido la cordura pero a la hora de la contabilidad la recuperaba implacablemente.

El grupo se cambió a esta sede e inició la transición de la “casa de la loca”, como la llamaban los

vecinos, al teatro de cámara Quimera.

Dado el estado de la vivienda, debieron demoler gran parte de su estructura e iniciar una

nueva construcción, diseñando entonces el teatro de cámara con capacidad para 100 personas,

conservando temporalmente algunos trazos de la vivienda original. Entretanto realizaban sus

presentaciones en la entrada de la casa y adecuaron sus montajes al ‘teatro breve’, con máximo

dos actores en escena. El éxito de esta experiencia teatral los condujo a la creación del “Festival

de Piezas Cortas para Espacios Breves”, que aún hoy organizan.

Al cumplir el año completaron las cuotas para hacerse a la propiedad de la casa, firmaron

las escrituras y Doña Sonia abandonó la vivienda.

Entre sus obras más importantes están: El diario de un loco, Juglarada, El Conuco del Tío Co-

nejo, Edipo Rey, El Fatalista -Los embelcos del amor-, Ofelia o la Madre Muerta, De Ausencias, La

noche del matador, Faustos, Bartleby el Escribiente.

Grupo quimeraFoto Archivo Quimerala salaFachadaFotos Mauricio Uribe

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Mapa Teatro (2000)

DirectoresHeidi y Rolf AbderhaldenCarrera 7 No. 23-08Barrio Las NievesLocalidad Santa FeTel. [email protected]://www.mapateatro.org/

interior patio central FachadaFotos Archivo Mapa Teatro

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_En el espacio generado por Mapa Teatro confluyen las artes vivas, como

en un escenario en el que se facilita la interdisciplinariedad artística y se promueve la concilia-

ción de diferentes lenguajes escénicos. Sus creadores, Heidi, Elizabeth y Rolf Abderhalden, en

1984 decidieron dar vida al laboratorio de artistas en un complejo experimento que consiste en

crear “ ‘laboratorios del imaginario social’, para generar procesos de experimentación artística, que

se desarrollan simultáneamente en el ámbito de lo real y en el ámbito simbólico, con la creación

temporal de comunidades experimentales al invitar a distintos grupos de personas para que se

constituyan en sujeto colectivo" (Portafolio virtual de Mapa Teatro). Este laboratorio de experi-

mentación está abierto a artistas que realizan investigaciones artísticas, plásticas y teatrales,

los cuales rotan con frecuencia.

La sede es una vieja casona sobre la carrera 7 en el barrio Las Nieves, que el grupo Mapa

Teatro tomó en alquiler en el año 2000. La casa, de conservación arquitectónica, posee más de

una treintena de cuartos y en ella aún se conservan vestigios de la magnífica arquitectura bogo-

tana del periodo republicano. El grupo aprovecha sus amplios espacios convirtiéndolos en talle-

res que alquila a artistas de diferentes áreas, a la vez que con ello logra su auto sostenibilidad.

Una de las investigaciones artísticas más recientes de Mapa Teatro giró en torno a la extin-

ción del barrio de Santa Inés, El Cartucho, habitado por una población vulnerable e históricamen-

te estigmatizada y marginada. Fueron estos habitantes quienes realizaron el performance-ins-

talación denominado Prometeo (2002-2003) bajo la coordinación de Heidi y Rolf Abderhalden.

26

83

afiche pasillo del segundo pisoArchivo Mapa Teatroblas Jaramillo en Ricardo IIIFoto Carlos Lema

{

Entre 2003 y 2004 realizaron otras dos obras relacionadas

con El Cartucho, Re-corridos, instalación llevada a cabo en

la sede de Mapa Teatro, y La limpieza de los Establos de

Augías, presentada en el Museo de Arte Moderno de Bogo-

tá. Entre 2004 y 2005 hicieron un seguimiento de la cons-

trucción del Parque Tercer Milenio, presentando como re-

sultado una instalación y una 'video-performancia', donde

reunían varios trabajos realizados a lo largo de casi cinco

años: La liberación de Prometeo (antes de y durante la de-

molición del barrio), La limpieza de los Establos de Augías

(después de la demolición y durante la construcción del

parque), y un epílogo, Leteo (posterior a la construcción del

nuevo espacio público).

Otros montajes realizados en los últimos años son An-

sío Los Alpes (2007), El Principito (2007), Testigo de las Rui-

nas (2005), Psicosis (2003) y Ricardo III (2000).


Tea Tropical (2000)27

DirectorManuel Ballesteros LópezCarrera 77N Sur No. 49-09 Barrio Perpetuo Socorro Localidad KennedyTel. [email protected]

_Tea Tropical surge en el sector de Casa Blanca, ubicado en la Localidad Ken-

nedy, por iniciativa y bajo la dirección de Manuel Ballesteros, quien organizó el grupo con el

objetivo de llevar el arte a los sectores populares de la localidad y en general, de la ciudad. Sus

inicios en el campo teatral se remontan a 1988 y está signado por montajes con dramaturgia

propia para teatro callejero, género que han desarrollado ampliamente bajo el esquema de pre-

sentaciones en zancos y elaboración de comparsas festivas.

En 1992 el grupo Tea Tropical (Tea, por el fuego y Tropical por la ubicación geográfica del

país), organizó y llevó a cabo un evento artístico nocturno con el objetivo de resaltar la riqueza

natural de Ciudad Kennedy (antiguo territorio indígena muisca) en el que se involucró a la comu-

nidad residente en el sector y se exhibieron varios comparsas alusivas a estos elementos natu-

rales. Como resultado de esta propuesta y dada la acogida en la comunidad, se volvió a realizar

al año siguiente bajo la denominación de Festival Artístico y Cultural del Agua y del Fuego, el cual

lleva ya 13 versiones.

Ante la necesidad de un espacio fijo en donde ensayar y guardar sus elementos, y tras años

de búsqueda y gestión cultural, el grupo logró conseguir una casa en ruinas (que había sido

vivienda, salón comunal, depósito de materiales, expendio de alucinógenos, albergue para de-

lincuentes), recuperada y adecuada luego como pequeña sala de teatro y espacio para la forma-

ción en artes escénicas; como consecuencia lógica del arribo del arte a la zona y de la convicción

y persistencia de sus promotores, el entorno inició una importante y notoria recuperación. Algu-

nos de sus montajes son El sapo Toribio; Mujeres de agua, hombres de fuego y las comparsas Las

fases del agua y Toritos en Carnaval.

Grupo infantil frente de la entrada del teatrozancosFotos Archivo Tea Tropical

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DirectorIsrael GuauqueCalle 58 Sur No. 19–49 EsteBarrio San RafaelLocalidad San CristóbalTel. [email protected]

Silfos Teatro (2000) 28

_Silfos, Teatro en el viento de palabra” surge en el año 2000 por iniciativa de

Israel Guauque, quien adaptó la casa de sus padres como teatro, centro cultural y escuela de

formación artística para los habitantes del barrio San Rafael Sur Oriente, con capacidad para

albergar 35 espectadores.

Este espacio cultural está ubicado en la localidad de San Cristóbal al sur oriente de la ciu-

dad y es vecino cercano del Cerro del Zuque, antigua cantera que hoy es reserva forestal con

destinación exclusiva para uso ecológico y recreativo, así como del nacimiento de la quebrada

Chiguaza, un río de montaña que en su descenso hacia el río Bogotá se convierte en una de sus

principales fuentes de contaminación. De esta relación estrecha con la naturaleza el teatro de-

riva su nombre mitológico “Silfos”, o elementales del aire, que recibe además de los beneficios

de este pulmón ambiental, el intenso frío del páramo..

Esta ubicación ambientalmente privilegiada, en una zona periférica de la ciudad, convierte

a Silfos teatro es la única fuente de difusión de las artes escénicas para los habitantes de este

sector popular. El grupo, en su empeño y convicción por llevar el arte a sus vecinos, programa de

manera permanente actividades culturales y artísticas en la pequeña sala de teatro y organiza

además el Festival de Narración Ancestral Palabra al Viento wanhto, encuentro de narradores

en el que participan artistas locales, distritales y nacionales que ofrecen a la comunidad de estos

sectores la oportunidad de acceder a este género teatral. la sala y la fachadaFotos Mauricio Uribe

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Teatro R101 (2001)

Director general Hernando Parra RojasCalle 70A No. 11-29 Barrio Quinta CamachoLocalidad ChapineroTel. 3132249 [email protected]

Juego para dosFoto Camille Mazoyer

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29

87

La bienvenidaFoto Camille MazoyerFachadaFoto Mauricio Uribe

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_El grupo de teatro R101 fue

creado en 1995 por un grupo de estudiantes de la

Universidad de los Andes con inquietudes acerca del

oficio teatral, quienes decidieron llamarse de la mis-

ma manera que el número del salón donde practica-

ban, en el bloque R ubicado en el campus universita-

rio, construcción que antiguamente fue la fábrica de

sombreros Richard & Cía. -de donde proviene la R-.

El grupo surge con el propósito de hacer un

teatro profesional independiente, orientado por los

principios de compromiso, autodisciplina y colabo-

ración y con la meta de lograr productos artísticos

de calidad. En sus inicios, su condición de grupo de

teatro autónomo e independiente lo llevó a itinerar

por espacios no convencionales como parques, ga-

rajes, salas de casa y bodegas abandonadas duran-

te más de cuatro años hasta que, en junio del 2001,

los miembros encontraron una bella casa de estilo

inglés ubicada en el tradicional barrio de Quinta Ca-

macho –declarado Sector de Interés Cultural- que

tomaron en alquiler y convirtieron en su sede per-

manente.

Aprovecharon un viejo y rudimentario audi-

torio que se había construido tiempo atrás y sobre

esta base levantaron el actual teatro de cámara, que

cuenta con capacidad para 75 personas. Abrieron las

puertas de esta sala en noviembre de 2003 con la

obra La Historia del Zoológico, de Eduard Albee, con

la actuación de Juan Manuel Lennis y Javier Gardea-

zábal y bajo la dirección de Germán Moure.

Desde ese momento en el Teatro R101 se pre-

sentan sus obras de repertorio como ¿De dónde vino

este animal? (2004), a partir del texto de Felipe Ver-

gara; Juego para dos (2005), adaptación de la obra de

Tennesee Williams, Mi lucha - farsa (2006), versión

libre del texto de George Tabori y Las aventuras del

Quijote (2009), de Miguel de Cervantes Saavedra,

montajes dirigidos por Hernando Parra; Sin mente

(2008), de Harold Pinter, montaje dirigido por Ram-

sés Ramos; A mi manera (2007), de Peter Barnes, La

bienvenida (2008), de Caryl Curchill y Jappy Hauer

(2010), de John Godber, montajes codirigidos por

Ramsés Ramos y Hernando Parra.


Teatro de Marionetas néstor Mahecha (2006)

Directornéstor Arturo Mahecha Carrera 16 No. 65-34Barrio xxxxLocalidad ChapineroTel. [email protected]://marionetasnestormahecha.com/

Ballet folclóricoArchivo Néstor Mahechala salaFoto Mauricio Uribe

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_En julio de 2000 Néstor Mahecha realizó su primer montaje de marionetas, La

bella durmiente del bosque, en el Teatro de la Carrera, después de haber trabajado durante cinco

años en el Teatro de Marionetas de Jaime Manzur, en donde se despertó su pasión por el teatro de

muñecos. Encontró las marionetas de manera coincidencial hace más de quince años, cuando tras

haber vendido su laboratorio técnico dental para estudiar actuación en Cuba, regresó al país y asistió

a la habitual presentación dominical del teatro de Manzur, que ese día presentaba Aladino y la lám-

para maravillosa. Casualmente, por esos días había vacantes en el grupo de marionetistas de esta

compañía, circunstancia que favoreció el ingreso de Néstor Mahecha al grupo de planta del teatro.

Poco tiempo más adelante, su compromiso con las marionetas y en especial su interés hacia la

escenografía de sus montajes, le llevó a estudiar diseño de modas, formación esta que le permitió

diseñar y fabricar los vestidos de sus marionetas, al tiempo que aplicó su formación inicial como

técnico dental para la elaboración de sus muñecos.

Desde el 2000 realizó montajes y adaptaciones de obras presentándose en diferentes salas y

espacios no convencionales, hasta que en 2006 alquiló la actual casa esquinera en donde adecuó

una pequeña sala de teatro con capacidad para 70 personas. Algunos de los montajes realizados

son Juanito y los fríjoles mágicos, Una canción de navidad, Sonrisas de Dios, La sirenita, Hansel y Gre-

tel, Ballet folclórico colombiano en marionetas, Abran cancha que aquí viene Don Quijote de la Man-

cha, todos adaptados y dirigidos por Néstor Mahecha.

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DirectoresLigia Cortésy Roberto Antonio nieto Carrera 13E No. 97-10, Vía a La CaleraBarrio San Isidro Localidad ChapineroTel. 5202254 [email protected]://teatridanza.blogia.com/

_El inicio de la Asociación Cultural Teatridanza se remonta a 1994, cuando Ro-

berto Nieto y Ligia Cortés regresan de una gira por Suramérica que duró dos años, viajando siempre

como titiriteros, con una maleta y un teatrino como único equipaje. Como resultado de esta trave-

sía lograron reunir un capital que invirtieron en la compra de un lote ubicado en uno de los cerros

orientales de la ciudad, en la vereda de San Isidro, sector que hasta hace unas décadas hacía parte

del páramo de Usaquén y que hoy es un barrio de la localidad de Chapinero.

Iniciaron la construcción de su vivienda en el lote adquirido a la par que empezaron a trabajar

en su inserción en la comunidad local, la mayoría de origen campesino, a través de invitaciones a

sus funciones teatrales y con la tenacidad de realizar presentaciones todos los domingos para niños

y niñas de la zona. Tras el esfuerzo de los fundadores por llevar el arte a sectores populares de la

ciudad, la comunidad los aceptó y los integró a sus costumbres.

Simultáneamente con el trabajo de para levantar su casa, comenzaron a construir la sala de

teatro, que inauguraron poco más de diez años después, en 2007. El Teatro Teatridanza o CIAT

-Centro Integral de Artes Teatridanza- o el “Teatro de la Montaña”, tiene una capacidad para alber-

gar 100 personas. Entre sus montajes más recordados están Rosita en el bosque de la verdad, Juan

corazón de melocotón, A.E.I.O.A., Ando juguete ando, Historia con un fin, Cortos circuitos, A la diestra

de Dios Padre y La Melodia del Barrio, dirigidas por Roberto Nieto y Ligia Cortés, protagonizadas por

el grupo de teatro infantil, así como Sueños de un Barrendero, Rafagazos, y Agua-Ceros dirigidas por

Roberto Nieto y creadas con el grupo Payasos de la Montaña.

Teatridanza (2007) 31

FachadaFoto Mauricio Uribela salaArchivo Teatridanza

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Teatro Varasanta (2007)

DirectorFernando MontesCarrera 15 Bis No. 39-39Barrio La MagdalenaLocalidad TeusaquilloTel. 3382045 [email protected]

Fragmentos de libertad, 2009Foto Carlos Lema

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_“Varasanta es el nombre que se le da en una región de la costa Atlántica de Colom-

bia al palo que se utiliza en el juego de la cucaña. La imagen de la vara engrasada a la que hay que subirse

para obtener el premio nos sirve como metáfora de transformación y resistencia para un grupo cuyo fin

es descubrir los secretos del arte del actor a través de la práctica teatral”. Desde su creación en 1994,

el grupo de teatro Varasanta funcionó en diferentes casas prestadas o alquiladas, ubicadas unas en

el barrio La Macarena, otras en Palermo, que arreglaban y adecuaban como espacio de trabajo y

de presentación, pero en las que no permanecían mucho tiempo porque debían regresarlas a sus

propietarios; inclusive en alguna oportunidad ocuparon una construcción prestada por la Dirección

Nacional de Estupefacientes que había pertenecido al narcotraficante Gonzalo Rodríguez Gacha.

Finalmente, en 2008, adquirieron una edificación en el barrio La Magdalena, que convirtieron en la

sede definitiva para la Fundación Teatro Varasanta -Centro para la Transformación del Actor-.

Esta casa, de conservación arquitectónica, fue transformada principalmente en tres salas que se

presentan como la Sala Cantor (inspirada en el concepto de sublimación de Tadeusz Cantor) o Sala de

la realidad degradada, con capacidad para 50 personas; la Sala azul y, por último, la Sala Grotowsky,

un espacio que se puede adaptar según los requerimientos del teatro contemporáneo, un espacio

cubierto por una bóveda blanca porque el grupo de teatro considera que el color negro, habitual-

mente empleado en los teatros de cámara, es inhóspito.

Varasanta busca profundizar en el proceso de transformación y de consolidación de conoci-

mientos y experiencias en el arte teatral; investigar sobre la teoría y práctica teatral, abriendo su

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espacio para apoyar el desarrollo de nuevos creadores, como lugar de ensayo y presentación de tra-

bajos para las nuevas generaciones.

Algunos de sus montajes, dirigidos todos por Fernando Montes, son La conferencia de los pája-

ros (1994), adaptación de Carriére del poema de Farid Uddin Attar; Obra frágil alma a la deriva (Ani-

ma, vagula, blandula), (2000); Kilele, una epopeya artesanal, (2007); Los Hermanos Karamazov, adap-

tación de la novela de Fiodor Dostoievski; El primer hermano, fábula apócrifa, y Flores Fieras, creación

del grupo; Una temporada en el infierno - Le Livre de la Folie; Mujeres en la guerra y A dónde el camino

irá; Fragmentos de libertad 200 años: Libertad en proceso, (2009).

Fragmentos de libertad, 2009Foto Carlos LemaFachada y sala GrotowskyFotos Archivo Varasanta

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Casa Ensamble (2008)

alejandra borrero en Pharmakon, 2008Foto Carlos Lemasala del primer pisoFoto Mauricio Uribe

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33

93

_Esta propuesta surge por la nece-

sidad que tuvo la actriz de cine, televisión y teatro Ale-

jandra Borrero de independizar su quehacer artístico

y teatral de la demanda habitual del medio artístico.

Decide para ello abrir un espacio en donde crear y ex-

presarse libremente como artista, a la vez que facilitar

las condiciones escénicas para quienes no cuentan con

una sala de teatro. Es así como en el 2006 adquiere la

emblemática casa moderna ubicada frente al Park Way

de La Soledad e inicia la restauración y adecuación de

esta como sede para su proyecto artístico.

Esta edificación, caracterizada por la rampa sobre

la fachada principal y catalogada como de conserva-

ción arquitectónica, fue diseñada en 1959 por la firma

de Alfonso Noguera, Jorge Santander y Álvaro Larrea-

mendy -Noguera Santander & Cía- como vivienda para el empresario Antonio Sefair, quien la

habitó tan solo un año, pues falleció en 1960 poco tiempo después de finalizada la obra. En la

década de los 60 fue conocida como “La Casa del Millón” por el costo que tuvo su construcción,

que para la época era excesivo.

Ya en manos de la actriz Alejandra Borrero se inicia el proceso de transformación que tomó

finalmente dos años, durante los cuales se recuperaron los detalles de ornamentación origi-

nales como las barandas de las escaleras, el revestimiento de mosaicos de las columnas, una

pared de agua, los pisos de madera, y se reconstruyó la pecera que atraviesa el jardín y el salón

principal. Respetando la subdivisión interior se construye la sala Carlos Mayolo, la tarima de la

Sala Buenaventura y la tarima para conciertos.

Con las adecuaciones finalizadas se abre la casa al público en el 2008 y se presenta como

un espacio en el que se ensamblan el teatro, la música, las artes visuales y diversas expresiones

artísticas alternativas, de donde proviene su nombre de Casa Ensamble, bajo los supuestos bá-

sicos que su directora considera esenciales para la formación y expresión del artista, como el

contar con un lugar estéticamente funcional y adecuado para la creación. Las piezas del ensam-

blaje que se presentan en la casa van desde la producción teatral, de cine y de televisión, hasta

el desarrollo de bandas musicales y la producción de espectáculos multimediales.

Poco tiempo después de comenzado el proyecto Casa Ensamble este se amplía, para lo

cual se integra a su propuesta artística la adquisición del vecino Teatro Arlequín (ver pág. 136).

Algunos de los montajes realizados en la casa son Pharmakon (2008), obra inédita de Carlos

Mayolo dirigida por Sandro Romero Rey, monólogo interpretado por Alejandra Borrero, con el

cual se inaugura Casa Ensamble; En clave de clown (2009), El locutorio, de Jorge Díaz y dirigido

por Jorge Cao y A 2,50 la Cuba libre (2010).

Directora artísticaAlejandra BorreroAv. carrera 24 No. 41-69Barrio La SoledadLocalidad TeusaquilloTel. [email protected]

FachadaFoto Carlos Lemasala MayoloFoto Galería Casa EnsambleA 2,50 la cuba libre. 2010Foto Raúl Higuera

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Factoría L'Explose (2007)34

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_El grupo de danza-teatro L´Explose, nace en París en 1991 por iniciativa del

coreógrafo español Tino Fernández, quien años después se encuentra en Colombia y descubre

la cercanía de las culturas colombiana y española, además de la importancia de la danza para

transmitir emociones. Se traslada entonces a Bogotá, en donde instaura su propuesta que desa-

rrolla con actores y bailarines colombianos.

En 2008 el grupo L´Explose inaugura su sede ubicada en el barrio Galerías, a la que denomi-

na La Factoría, como una manera de hacer claramente visible el objetivo de este espacio, cual es

el de acoger las diferentes formas de creación artística ligadas a proyectos de experimentación

e investigación propuestos por creadores escénicos.

En el 2009 organizan y realizan el I Festival Impulsos, Danza y Cuerpo Hoy, en coproducción

con el Teatro Nacional. Con la dramaturgia de Juliana Reyes y la dirección de Tino Fernández se

han realizado los montajes Con los ojos cerrados (1991); El silencio de las palabras (1992); El secre-

to de Inés (1993); Contre-coeur (1993); L'attente (1994); Sol a solas (1996); La irrupción de la nada

(1997); La huella del camaleón (1998); Háblame de amor (1999); Tríptico (1999); Sé que volverás

(2000); Por quién lloran mis amores? (2001); Electroshock (2001); La mirada del avestruz (2002); Al

salir de la crisálida (2002); Dime lo que ves (2004); El tiempo de un silencio (2005); Frenesí (2006);

La razón de las Ofelias (2008); Tu boca (2009) y EnOtraParte (2010).

DirectorTino FernándezCarrera 25 No. 50-34Barrio GaleríasLocalidad ChapineroTel. [email protected]

Dime lo que vesFoto Carlos LemaPor quién lloran mis amoresFoto Galería Casa EnsambleFachadaFoto Mauricio Uribela salaFoto Zoad Humar

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La mirada del avestruz, Factoría l´ExploseFoto Carlos Lema

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Teatro La Macarena (2008)

Utopía Circo ZeroFachadaFotos Archivo Teatro La Macarena

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_Christine Specht y Orlando Muñoz se encuentran en 1988 en Zurich (Suiza)

y crean el grupo de teatro Los Funámbulos, término que hace referencia a un grupo de hombres

del teatro clásico que hace equilibrio sobre cuerdas. Tras varios años de viaje por Europa y Sura-

mérica, deciden radicarse en Colombia para llevar su teatro de mimo a municipios del país con

dificultades para acceder a la cultura.

En el 2000 fundan la Corporación Los Funámbulos con sede en una casa del barrio Teusa-

quillo, donde permanecieron varios años, hasta cuando encontraron la actual edificación de

conservación patrimonial ubicada en el barrio Bosque Izquierdo en cercanías de La Macarena,

que antes había sido residencia, consultorio médico, galería de arte y oficinas comerciales. Con

la asesoría del arquitecto William Díaz la convirtieron en el Teatro La Macarena, construyendo

una sala de teatro en el sótano, con capacidad para 50 personas.

Los Funámbulos tuvieron su énfasis en la producción teatral pero fueron ampliando su

campo de acción hacia la formación en teatro y en fotografía, así como

hacia la producción de audiovisuales.

Algunos de los montajes realizados son Utopía Circo Zero (2010), una

versión libre de Persecusión y asesinato de J.-P Marat, de Peter Weiss, di-

rigido por Christine Specht; Roberto Zucco. Los sueños y desvaríos de un

hombre, (2009), del autor francés Bernard Marie Koltès, adaptación y di-

rección de Christine Specht.

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DirectoraChristine SpechtCalle 25B No. 4A-15Barrio Bosque IzquierdoLocalidad Santa FeTel. 8054465 [email protected]

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_El grupo de teatro Kábala fue creado en 1990 bajo el nombre de Nigroman-

te Teatro en las instalaciones de la Fundación Barrio Teatro, pero de acuerdo a su convicción de

crear su propio lenguaje teatral se alejaron de esa escuela y continuaron su desarrollo artístico

en la Casona El Palomar del Ministerio de Hacienda (calle 10 con carrera 5), para tiempo después

ocupar un sótano en la calle 15 con carrera 4, en donde superando condiciones precarias y poco

propicias para la creación, montaron su primera obra La Última Escena, de creación colectiva y

presentada ese mismo año en el Teatro La Candelaria. Debido a dificultades técnicas durante

su estreno, el grupo se disolvió; poco después se reagruparon algunos ex integrantes de Nigro-

mante y retomaron el trabajo teatral con El Cepillo de Dientes, estrenado en 1991 en la sala de

teatro Quimera, bajo el nombre de Kábala Teatro.

Pasaron luego por varias sedes, encontrando por un tiempo en la Corporación Colombiana

de Teatro un espacio para realizar sus ensayos, en donde presentaron La Paloma de la Reina, y

enseguida por otros lugares hasta que en 1995 inauguraron la Sala Flaminia en Kennedy, donde

estuvieron hasta el 2001, cuando hicieron un convenio con la Casa de la Juventud de la misma

localidad hasta 2004. Como consecuencia de amenazas contra algunos miembros del grupo

huyeron hacia la localidad de San Cristóbal, reiniciando nuevamente el proceso de adaptación

y consecución de espacios para ensayar y para sus presentaciones, logrando en 2009 abrir la

actual sede, que cuenta con una sala para 60 espectadores. En ésta han realizado montajes

de teatro, títeres y danza entre los que recuerdan, aparte de las citadas obras, Ana Canto, Las

Mujeres son el diablo, Fuente Ovejuna, El Curriculum, Gamín, 24 Horas De..., Mañana es sólo una

palabra, Ceremonias A K, Una vez agua, Polvo de olvido, Soledades tecleadas, El Ser en la burbuja,

Zoila, tragedia de la teina que fue novia del diablo y Gaitán y la bandera hollada.

DirectorWilliam Fortich Calle 11 Sur No. 5-56Barrio Villa JavierLocalidad San CristóbalTel. [email protected]://www.kabalateatrocolombia.org/

Kábala Teatro (2009) 36


Corporación Teatral Barraca (2009)

DirectorDaniel GaleanoCarrera 17 No. 50-60Barrio GaleríasLocalidad ChapineroTel. [email protected] www.barracateatro.com

Grupo de teatro barracaFoto Archivo Barracala salaFoto Mauricio Uribe

{

_El grupo de teatro Barraca adopta este nombre en homenaje al trabajo reali-

zado por García Lorca en la dirección de la Compañía Estatal de Teatro La Barraca durante la segun-

da república española, periodo en el cual escribió las obras Bodas de Sangre, Yerma y Doña Rosita la

soltera.

Teatro Barraca surge en los primeros años de la década del noventa en Medellín por iniciativa

de Daniel Galeano, quien después de iniciar su trabajo teatral en una de las comunas más conflicti-

vas de esta ciudad, que también era su lugar de vivienda, y de avanzar en el proceso de consolida-

ción como teatro y como escuela de formación de actores, debe huir de su entorno por amenazas

de grupos paramilitares. Llega a Bogotá en 2008, en donde retoma su trabajo actoral y destina sus

energías a instaurar su propuesta teatral en la ciudad, para lo cual obtiene recursos a través de la

realización de montajes de temáticas específicas solicitados por empresas comerciales, además de

la favorable taquilla que deja su primer montaje realizado en el 2009, El beso de Dick, adaptación de

la novela de Fernando Molano.

Tras esta campaña teatral que comprendió casi un centenar de presentaciones, el grupo decide

adquirir un espacio para convertirlo en su sede estable y encuentra una casa en ruinas ubicada en

el barrio Galerías, la cual adquieren con la promesa de pagarla en un año, iniciando el proceso de

recuperación y adecuación como sala de teatro –con capacidad para 60 espectadores-, academia

de actuación y como espacio de trabajo y presentación del grupo de teatro Barraca.

37

101

DirectorSantiago MartínezCalle 14 No. 1 - 40Barrio La ConcordiaLocalidad La CandelariaCel. (314)[email protected]

_El Teatro Sueños, ubicado en lo que antaño fuera un espacio de la Plaza

Distrital de Mercado de la Concordia, localizada en el extremo oriental del Centro Histórico

de la ciudad, es una iniciativa de Santiago Martínez, Santimimo como le conocen en el medio

teatral, quien a su regreso de Europa en 1997 inicia la búsqueda de un lugar para su grupo de

teatro Sueños. Esta plaza de mercado fue construida en dos etapas entre 1933 y 1935 y hoy es

reconocida como patrimonio arquitectónico de los bogotanos.

Santiago toma en arriendo este espacio-bodega, antes ocupado por oficinas de la des-

aparecida EDIS -Empresa Distrital de Servicios Públicos-, posteriormente abandonado duran-

te varios años. Lo adecúa como espacio de ensayo primero y luego como escenario teatral,

conformando una sala de teatro con capacidad para 120 personas.

El proyecto fue avalado por el difunto Miguel, administrador de la plaza en el 2003, quien

días después de conversar con Santimimo decidió suicidarse, el 31 de diciembre a medianoche

y en la mitad de la plaza de mercado. Sin embargo, antes de hacerlo dejó claro el acuerdo con

el administrador que lo reemplazaría para convertir esta bodega en un espacio para la cultura y

las artes escénicas, deseo que fue respetado y que permitió el desarrollo del proyecto.

El trabajo de adecuación y de mantenimiento es una labor conjunta de los grupos de tea-

tro El Alcaraván de Álvaro Rodríguez; Ensamblaje de Misael Torres; Arte sin pausa de Iván Za-

pata y con el mago Jimmy Limas, además de compartir el espacio para la formación en Danza

Afro por parte de diferentes grupos.

Teatro Sueños (2009) 38

SantimimoArchivo Teatro Sueños la salaFoto Mauricio Uribe

{


Teatro Nacional Fanny MikeyFoto Mauricio Uribe

{

103

_escenarios de naturaleza

teatral


Teatro Colón y Sala Victor Mallarino (1892)

Ministerio de CulturaCalle 10 No. 5-32Barrio La CandelariaLocalidad La Candelaria Tel. [email protected]

amadeus, de peter shaffer, grupo de teatro de la asab, 2009página opuesta: FachadaFotos Carlos Lema

{

_El lugar que actualmente ocupa el Teatro Colón ha sido, desde finales del

período colonial, consagrado a las artes escénicas y a la música. En una primera etapa aquí se

levantó el Coliseo Ramírez por la iniciativa de José Tomás Ramírez, soldado y comerciante espa-

ñol quien en 1792, durante el gobierno del virrey José de Ezpeleta, encargó el diseño y la cons-

trucción de un escenario al teniente coronel Domingo Esquiaqui, quien tomó como referencia

los planos del Teatro de La Cruz de Madrid, erigiendo el primer espacio de la ciudad que seguía

las especificaciones necesarias para las representaciones teatrales.

Posteriormente, en la segunda etapa y después de pasar por varios propietarios, el Coliseo

fue adquirido por los hermanos Bruno y Timoteo Maldonado, que cambian su nombre por el

de Teatro Maldonado. Los nuevos propietarios remodelaron la fachada y realizaron algunas

intervenciones al interior, pero debieron cerrarlo en 1879 por falta de público.

La tercera etapa inicia en 1886, bajo el mandato del presidente Rafael Núñez, quien

expropió el teatro a Bruno Maldonado para entregarlo al patrimonio de la Nación. Dado el es-

tado ruinoso en que se encontraba, era necesario reconstruirlo, para lo cual fue encomendado

el arquitecto italiano Pietro Cantini, quien había llegado al país en 1880 para encargarse de los

trabajos de terminación del Capitolio Nacional. Cantini asumió la tarea y propuso un teatro a

la italiana, de elegante fachada clásica hacia la antigua Calle del Coliseo y una platea interior

en forma de herradura con tres órdenes de 74 palcos y una galería superior. La ornamentación

le fue confiada a Luigi Ramelli, Cesare Sighinolfi dirigió los trabajos de escultura, mientras que

la obra pictórica le fue comisionada a Filippo Mastellari (plafón), Giovanni Menarini y Annibale

Gatti, quien elaboró la pintura del telón de boca, en el que plasmó las Musas de la Poesía y de

la Música, además de personajes de óperas como Otelo, Lehengrin, Aída, Fausto, Carmen, así

39

105

como de indígenas, conquistadores españoles y campesinos de ruana y sombrero, todo esto en

medio de una vegetación con palmeras.

La obra avanzaba dirigida a concluir el Teatro Nacional. Sin embargo, dada la cercanía con

la celebración del IV Centenario del Descubrimiento de América, en 1892 se decide cambiar de

nombre por el de Teatro de Cristóbal Colón (Ley 25 de 1.892), en memoria de la gesta del almi-

rante genovés, siendo inaugurado el 12 de octubre de ese mismo año.

Desde entonces el Teatro Colón, el más imponente de la ciudad y del país, declarado Mo-

numento Nacional en 1975, ha sido el escenario de las más memorables ceremonias y funciones

de danza, lírica y teatro, representadas por las célebres compañías que recorrían el continente.

En la Sala del Palomar, en los altos del teatro, surgió la Escuela Nacional de Arte Dramá-

tico -ENAD- , proyecto de formación en artes escénicas impulsado en los años cincuenta por

Bernardo Romero Lozano y por Víctor Mallarino –declamador, poeta, actor y director de tea-

tro- (1909-1967), de la cual egresaron los primeros actores formados en Colombia, muchos de

los cuales han sido los pilares del teatro nacional. En honor a su aporte al teatro colombiano y

en general a la cultura del país, se le dedicó la sala ubicada en el último nivel, denominada sala

Víctor Mallarino.

Actualmente, y con ocasión del Bicentenario de la Independencia, el Teatro Colón se en-

cuentra sometido a un profundo proceso de restauración y de reforzamiento de su estructura,

dirigido por el arquitecto Max Ojeda, que contempla la modernización de la silletería, de las

instalaciones técnicas y del escenario, así como la recuperación de todo el estupendo aparato

decorativo.

afiche de la compañía rambalArchivo Teatro Colón

{


interior del Teatro ColónFoto Carlos LemaVíctor Mallarino en el Teatro ColónFoto Archivo Teatro Colónsala Víctor MallarinoFoto Carlos Lema

{

107

La Gaviota, 2004. Teatro ColónFoto Carlos Lema

{


Telón de boca, Teatro ColónFoto Carlos Lema

{


(Universidad Central)DirectoraMaría del Rosario OrtízCalle 22 No. 5-50Barrio Las NievesLocalidad Santa FeTel. 3239868 [email protected]

FachadaFoto Carlos Lema

{

Teatro Faenza (1924)

_Para comienzos del siglo XX en el espacio que hoy ocupa el Teatro Faenza

se encontraba una fábrica de loza fina que su propietario, don José María Saiz, llamó Faenza

en homenaje a la ciudad italiana en donde se halla un importante museo de cerámica. Don

José María y el médico don José María Montoya, conservando el nombre de la antigua factoría,

aunaron esfuerzos y se propusieron la construcción de un edificio de corte americano en el que,

aprovechando la estructura de la fábrica, se pudiera presentar cine y a la vez realizar espectá-

culos en vivo y eventos sociales de diversa índole. Contrataron para ello en 1922 al ingeniero

Ernesto González y a los arquitectos Arturo Tapias y Jorge Muñoz para elaborar los planos y

dirigir la construcción del nuevo teatro, al igual que a la empresa de Cementos Samper para la

ejecución de la obra y al pintor Maurice Ramelli para la ornamentación y decoración del interior.

Tras diecinueve meses de trabajo el teatro, caracterizado por el gran ventanal circular de la

fachada, el más elaborado ejemplo de art nouveau bogotano, fue inaugurado en abril de 1924

con la proyección de la película francesa El Destino.El interior está organizado en palcos -38 en

total que albergan seis personas cada uno-, la luneta –con capacidad para 1300 sillas- y la galería

para 266 personas Como dato curioso se sabe que la pantalla para la proyección de cine estaba

ubicada en la mitad del teatro, de manera que quienes ocupan las sillas de la luneta veían la

película al derecho y quienes estaban en las galerías, al revés.

A raíz de la apertura de este espacio el sector de Las Nieves se constituyó en un lugar de

visita obligada para la diversión de la aristocracia bogotana, siendo el Faenza el primer teatro

40

111

interior de la sala a finales de 2010Foto Mauricio UribeLos veraneantes, 2008. Fotos Carlos Lema

{construido específicamente para la proyección de cine. Este uso continuó durante varias dé-

cadas, hasta mediados de los setenta, cuando se convirtió en cinema de segunda al tiempo

que acusaba un severo deterioro, pese a lo cual y afortunadamente, fue declarado Monumento

Nacional en 1975.

Durante la década de los noventa allí se realizaron algunos montajes teatrales, como Las

Tres hermanas de Antón Chejov, llevado acabo en 1998 durante el Festival Iberoamericano de

Teatro. Finalmente, en 2004, el edificio fue adquirido por la Universidad Central, institución que

ha emprendido un largo un profundo proceso de restauración, dirigido por la arquitecta Claudia

Hernández, con el objetivo de recuperar el esplendor y ponerlo de nuevo al servicio del público.

Aún hoy se encuentra en obra su interior, pero los avances realizados auguran su pronta rein-

auguración.


Escenario del Instituto Distrital de Recreación y Deporte – IDRD-Dirección de Infancia Supervisora del teatroMyriam del Socorro CabreraCarrera 5 No.36-05Parque Nacional Enrique Olaya HerreraBarrio La MercedLocalidad ChapineroTel. 6605400 ext. 5212www.idrd.gov.co

FachadaFoto Carlos Lema

{

Teatro El Parque (1936)

_El Teatro Infantil del Parque Nacional Enrique Olaya Herrera fue proyectado

por el arquitecto Carlos Martínez Jiménez en 1935, como parte de los equipamientos del moderno

parque metropolitano inaugurado en 1933. De corte racionalista, precursor del ingreso del Movi-

miento Moderno al país, esta edificación de pequeña escala fue diseñada como escenario espe-

cializado en teatro de muñecos para un público infantil popular y contaba con una biblioteca para

niños. Finalizado en 1936, durante su existencia el teatro ha sido conocido con diferentes deno-

minaciones, como Teatro Infantil del Parque Nacional, Teatro del Parque, Teatro El Parque, Teatro de

marionetas del Parque Nacional, Teatro Cultural del Parque Nacional.

Durante sus primeros años fue dirigido por artistas de las marionetas y de los títeres, como

Antonio Angulo Gutiérrez, decano de los marionetistas y director entre 1936 y 1951; posteriormen-

te el edificio estuvo por un tiempo desocupado, hasta que Gabriela Samper, entre 1961 y 1963, lo

recuperó y realizó algunas mejoras en su interior con el fin de ampliar el área disponible para la in-

terpretación teatral, además de implementar el “Taller del Teatro”, como un espacio de formación.

Posteriormente lo condujo Julia Rodríguez, pionera del teatro moderno de muñecos en Co-

lombia por introducir las técnicas del muñeco de varillas, durante un período de dos años, y luego

el teatro fue nuevamente abandonado. En 1968 Yolanda Pulecio, esposa del entonces ministro de

educación Gabriel Betancourt, jefe de la institución responsable del parque por esos años, recogió

a los niños habitantes de la calle -despectivamente llamados en esa época gamines- y los llevó al

Teatro El Parque, en donde les ofreció leche y pan mientras duraba la visita del Papa Paulo VI. Para

ese momento el teatro estaba en condiciones lamentables por su abandono.

Entretanto, los atesorados muñecos de marionetas -más de tres mil muñecos elaborados con

diferentes materiales- sufrieron los embates del tiempo y de la incuria, siendo algunos incinerados

41

113

Marioneta de Ernesto aronnaFoto Yolanda Lópezla salaFoto Carlos Lema

{paradójicamente en la Plaza de Mercado Paloquemao, otros enviados a depósitos y otros desecha-

dos como basura. Posterior a este desatino social, asumió la dirección del parque el titiritero santan-

dereano Príncipe Espinosa, quien entre 1968 y 1970 lo recobró de nuevo.

Para 1970 asumió la dirección Beatriz Caballero, hermana del pintor Luis Caballero e hija del

escritor Eduardo Caballero Calderón, quien lo administró entre 1970 y 1976, tiempo durante el cual

este escenario tomó una extraordinaria importancia en el sector teatral, por ser un espacio en el

que se promocionaba el teatro de muñecos a través de la conformación de la primera Escuela de

Títeres. Así mismo, durante este período se celebraron allí los dos primeros festivales nacionales de

títeres, que como feliz consecuencia consolidaron nuevamente el teatro hacia el público infantil.

En este teatro nacieron o se desarrollaron diversos grupos de teatro de cámara, de títeres y de

marionetas, además de haber sido un lugar de trabajo y de encuentro. Por él pasaron en sus inicios

grupos como el Teatro Taller de Colombia, Biombo Latino y sus diferentes vertientes artísticas, Tex-

co, Latonicalatero, Teatro del Daza Dangong, la música del grupo Yaki Kandru, así como los grupos

La Mama, La Candelaria, el TPB, El Local e inclusive el TEC (Teatro Experimental de Cali), quienes

conocieron los secretos de titiriteros y marionetistas como Ángel Alberto Moreno y su esposa Sofía

de Moreno, José Antonio Muñoz “Muñocito” y Ernesto Aronna Solano.

Luego del trabajo del conjunto de artistas entregados al arte de las marionetas, el Teatro El

Parque, ya en los ochenta, formó parte de Colcultura como una dependencia artística y amplió su

oferta cultural, haciendo perder en parte su esencia como teatro para niños, hasta finales de los no-

venta cuando, bajo la dirección de Adelaida Nieto, se sometió al teatro a un proceso de restauración

(llevado a cabo por el ingeniero Gonzalo Durán), mediante el cual este recuperó su importancia,

fortalecida por la declaratoria como Monumento Nacional en 1995.

Actualmente el teatro, con capacidad para 300 espectadores, es un escenario del Instituto Dis-

trital de Recreación y Deporte, entidad adscrita a la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte.


Coordinador Manuel Lara zabalaCalle 18 # 1-05 Este Barrio CircunvalarLocalidad Santa Fe Tel. 3182460 [email protected]://www.mediatorta.gov.co/web/historia.php

Escenario de la Media TortaFotos Carlos Lema

{

Teatro de la Media Torta (1938)

_La construcción del teatro al aire libre sobre los terrenos de la hacienda la

Media Torta, fue posible gracias a la donación que realizó el Consejo Británico a la ciudad con

motivo de la celebración de los cuatrocientos años de la fundación de la capital. La adminis-

tración pública, bajo el gobierno del alcalde Jorge Eliécer Gaitán aportó el terreno que había

comprado al propietario de la hacienda La Media Torta, y el Consejo por su parte, donó los re-

cursos para realizar la construcción del escenario así como la adecuación de las graderías para el

público, que inicialmente estaban cubiertas de pasto y tenía una capacidad para albergar 3.500

personas.

Este teatro hacía parte de un amplio plan de remodelación del Paseo Bolívar diseñado en

1936 por el arquitecto Karl H. Brunner -proyecto que nunca se llegó a realizar en su totalidad-

pensado como un espacio cultural destinado para los habitantes de Bogotá de bajo recursos.

Fue finalizado en 1938 y tomó su nombre de la hacienda de la Media Torta terreno sobre los

cuales se levantó el teatro.

En 1979 se remodeló el teatro, se amplió su capacidad a 5.000 personas, se pavimentó las

graderías y se construyó un nuevo edificio ubicado en la esquina noroccidental del terreno defi-

nido con el fin de aprovechar la vista de la ciudad como fondo de este; en el 2003, nuevamente

se remodela el escenario y se realiza su reforzamiento estructural.

A partir de 1979 y durante varias décadas tuvo vigencia la norma distrital (acuerdo 974 de

1979) que obligaba a los artistas internacionales a realizar una presentación gratuita en este

escenario.

42

115

Vista aérea de la Media Torta y carteles relativos al teatroCelia Cruz en la Media TortaTomadas de Crónica del teatro al aire libre de la Media Torta, IDCT, 2001.

{Aunque las presentaciones realizadas en este teatro han tenido marcado énfasis musical,

ha sido también sede de eventos teatrales como en 1995, cuando fue una de las sedes del Festi-

val de Teatro “Bogotá en escena”. Actualmente es un proyecto cultural que alcanza los 70 años

de funcionamiento y su manejo es responsabilidad de la Secretaría de Cultura, Recreación y

Deporte de la Alcaldía Mayor de Bogotá.


Escenario de la Orquesta Filarmónica de BogotáDirectoraAna Piedad JaramilloCarrera 7 No. 22–47Barrio Las NievesLocalidad Santa FeTel. 2826361 [email protected]

Teatro Municipal Jorge Eliécer Gaitán (1940)

_El primer Teatro Municipal de Bogotá, que alcanzó poco más de sesenta años

de existencia entre 1890 y 1952, estaba ubicado en la carrera 8 entre calles 8 y 9, al lado del Obser-

vatorio Astronómico en el centro de la ciudad. Diseñado por Mariano Santamaría, el teatro fue el

lugar en que se dio el nacimiento del teatro colombiano “centenarista” y constituyó el sitio de en-

cuentro y diversión de las clases populares bogotanas. Hacia finales de los años cuarenta fue el sitio

escogido por Jorge Eliécer Gaitán para promover su movimiento político, en donde el líder liberal

llevaba a cabo los célebres “viernes culturales”, sus tertulias y reuniones que atraían a un numeroso

público. En 1952, cuatro años después de la muerte del caudillo y motivado solamente por razones

políticas, el presidente conservador Laureano Gómez ordenó su demolición. La pérdida del Munici-

pal es aún sensible para el patrimonio cultural bogotano, material e inmaterial.

En 1938, con ocasión de la conmemoración de los 400 años de la fundación de Bogotá,

la Compañía Colombiana de Seguros -Colseguros- contrató la construcción de un teatro para

la proyección de películas de cine al arquitecto Richard Aek, quien tuvo en cuenta los diseños

de la firma T.S. Ley & Cía., encargando la dirección de la obra a Guillermo Herrera Carrizosa.

Esta imponente construcción, el más grande recinto teatral de la ciudad desde entonces, fue

inaugurada en 1940 con en el nombre de Teatro Colombia y durante casi treinta años sirvió

como cinema. Se trata de una gran sala de amplia platea y generoso balcón, con una capacidad

total de 1.745 sillas. En el interior se destaca los elementos decorativos de inspiración art déco,

tendencia estilística reflejada también en lo relieves de la fachada sobre la carrera 7, antigua

Avenida de la República, obra del escultor Bernardo Vieco que evoca las musas de las bellas

artes y motivos vegetales.

En 1972 el Distrito adquirió el teatro, reformó su interior y lo adecuó para presentaciones de

espectáculos en vivo, inaugurándolo en 1973 con el nombre de Teatro Municipal Jorge Eliécer

43

la sala slava polunin, Yellow, 1996Fotos Carlos Lema

{

117

Gaitán, en homenaje al líder asesinado y al desaparecido Municipal. Sin embargo, dado que las

adecuaciones realizadas no alcanzaron las condiciones óptimas necesarias para las artes escé-

nicas, durante años se llevaron a cabo intervenciones y cierres frecuentes hasta que en 1988 el

Gobierno Japonés donó los recursos para la remodelación del teatro en su infraestructura, así

como para la dotación de equipos de iluminación y sonido. El largo proceso de restructuración,

dirigido por el ingeniero Gonzalo Durán, culminó a finales de los noventa, cuando el teatro pasó

a ser el Centro Cultural Teatro Municipal Jorge Eliécer Gaitán conformado, además de la sala

principal, por el Callejón de las Exposiciones, la Cinemateca Distrital, el teatrino, salas de ensayo

y espacios alternos para la exhibición de trabajos fotográficos. Recientemente, con motivo de la

celebración del Bicentenario de la Independencia, en 2010 el Distrito adelantó el reforzamiento

estructural, de tal manera que el histórico escenario cumple hoy con las más modernas especi-

ficaciones.

FoyerTeatrino El Camaleón, 2007 Fotos Carlos Lema

{


interior de la sala FachadaFotos Carlos Lema

{


Teatro Luis Enrique Osorio (1940)

La Perse, Grupo de teatro de la asab, 2010Foto Carlos LemaConstrucción de los sótanos de la JiménezFoto IDPC – Colección Museo de Bogotá

{

_En el lugar que hoy ocupan los amplios andenes del costado sur de la Ave-

nida Jiménez entre carreras 7 y 8, se encontraba el edificio Rufino José Cuervo, construido en

1914, en donde funcionó durante la primera mitad del siglo XX el organismo nacional encargado

de las comunicaciones, que para la época se efectuaban a través de cartas y telegramas. Esta

construcción fue demolida hacia 1940 para dar paso a la construcción de la avenida, que desde

aquel momento se constituyó como el eje financiero de la capital y símbolo de la modernidad.

Sobre las ruinas de los sótanos del edificio destruido, que se desarrollan en cercanías de la

canalización de las aguas del antiguo río San Francisco, siete metros debajo de la superficie se

levantó un pasaje comercial subterráneo, que en sus inicios albergó varios almacenes de cachi-

vaches y a los cuales se accedía desde cualquiera de las cuatro esquinas de la Avenida Jiménez

con las carreras 7 y 8. Sin embargo, la humedad presente en los locales desplazó prontamente a

los comercios allí instalados, subsistiendo sólo el Museo de Cera de Bogotá, uno de los atracti-

vos del sector hasta principios de la década del setenta, en realidad una no agradable galería en

la que se exhibían las figuras de personajes de la época. Poco tiempo después, la administración

de los sótanos fue asumida por la Extensión Cultural de la Secretaría de Educación, la cual ubicó

allí la Liga de Ajedrez. A comienzos de los cincuenta funcionó el Teatro News Real en el que se

proyectaban películas de cine de manera continua, desde las 6 de la mañana hasta las 12 de la

noche.

Años más tarde el IDCT -Instituto Distrital de Cultura y Turismo- recibe los sótanos de la

Jiménez, los cuales someten a saneamiento y recuperación para fundar la Academia Distrital

de Teatro, que funcionó hasta 1991. Para adecuar la sede de esta escuela fueron encargados

el arquitecto español Ricardo Ribas Seva y el ingeniero Enrique García Reyes, quienes lograron

44

121

Academia Superior de Artes de Bogotá –ASAB -Director Germán BetancourtAvenida Jiménez Carrera 8, SótanosBarrio La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. (311)[email protected]

Vista aérea de la entrada al Teatro luis Enrique osorioFoto Carlos Lemaacceso a los sótanosla salaFotos Mauricio Uribe

{

construir allí varios espacios para la práctica artística comprendidos por una sala de danza, un

teatrino para el público infantil -que lleva el nombre del maestro titiritero Gabriel Esquinas- y

varios camerinos, además de dos amplios salones para ensayos musicales, además de conser-

var el teatro, rebautizado en 1981 como Teatro Luis Enrique Osorio, que cuenta con un aforo

para 140 personas. En 1991 la escuela de teatro se integró a la Academia Superior de Artes de

Bogotá y los salones de los sótanos se destinaron para talleres de los diferentes programas del

IDCT así como para su centro de documentación.

En 2003 el IDCT transfiere la ASAB a la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, que

en 2005 la convierte en la Facultad de Artes de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas.

El teatro, una de las sedes de la ASAB, fue de nuevo intervenido y recientemente reabierto al

público en el año 2010.

Junto al Teatro El Parque, a la Sala Víctor Mallarino del Teatro Colón y al desaparecido tea-

tro TPB, el Luis Enrique Osorio hace parte de los lugares emblemáticos para actores, directores,

dramaturgos y demás involucrados en el movimiento teatral bogotano de la generación de los

años 50 a 70, hoy pilares y gestores del teatro nacional.


Teatro Minuto de Dios (1971)

DirectorJosé Luis RoncayoTransversal 74 No.82A-81 Barrio Minuto de DiosLocalidad EngativáTel. [email protected]://www.teatralminuto.com/

Grupo de la Corporación Teatral Minuto de dios, 2008 FachadaFotos Luz Marina Castellanos

{

45

_El complejo cultural Minuto de Dios se inscribe dentro del macro proyecto

de construcción denominado Minuto de Dios, ideado por el padre Rafael García-Herreros (1909-

1992), el cual estaba compuesto por vivienda, salud, educación y cultura destinados a un gran

porcentaje de población bogotana carente de recursos económicos, proceso que se empezó a

materializar a mediados de los años cincuenta con la construcción de las primeras residencias.

En 1958 se finaliza la construcción del colegio, en 1969 se inaugura el Museo de Arte Con-

temporáneo -MAC- y en 1971 el Teatro Minuto de Dios, que se hallaban frente a una amplia

plazoleta conformada también por la iglesia del barrio, esta última demolida en años recientes.

El teatro fue diseñado por el arquitecto Eduardo del Valle, con el objetivo de proyectar cine

así como para realizar espectáculos en vivo, con una sala de 650 sillas. El complejo cultural com-

puesto por el MAC, el Teatro y el Colegio forman un solo volumen arquitectónico, el cual duran-

te más de veinte años fue el único escenario

cultural del noroccidente de Bogotá.

El Teatro Minuto de Dios cuenta con el

grupo de teatro proveniente de la Compañía

Teatral Minuto de Dios, la cual ha realizado

allí, entre otros montajes, Cuentos pintados.

Homenaje a Rafael Pombo; El Montecalvo;

Pluff el fantasma y La Zapatera prodigiosa,

adaptación del texto de Federico García Lor-

ca.

123

DirectoraMaría Belén Sáenz de IbarraCarrera 30 No. 45-03Ciudad Universitaria, Edificio 104Plaza del CheLocalidad TeusaquilloTel. [email protected]

Auditorio León de Greiff (1973) 46

_El Auditorio León de Greiff fue diseñado en 1963 por la arquitecta Eugenia

Cardozo, quien contó con la asesoría acústica de Manuel Drezner. Su construcción se inició en

ese mismo año y finalizó en 1973. El teatro hace parte del conjunto arquitectónico que configura

la plaza central de la universidad nacional, conocida como Plaza del Che, en honor a Ernesto

Guevara. Con capacidad para 1.630 personas es considerado uno de los mejores auditorios de la

ciudad; en su interior cuenta con una gradería dispuesta radialmente y se destaca el trabajo en

madera que cumple al mismo tiempo una función acústica y ornamental. Este proyecto obtuvo

en 1974 el Premio Nacional de Arquitectura en el marco de la VI Bienal Colombiana de Arquitec-

tura y fue declarado Monumento Nacional en 1995 como parte de un conjunto de edificaciones

de la Ciudad Universitaria representativas de la arquitectura moderna en Colombia.

Aunque el auditorio es principal-

mente un escenario musical, recono-

cido en Latinoamérica por sus eleva-

das condiciones acústicas, y es la sede

permanente de la Orquesta Filarmóni-

ca de Bogotá que presenta el concier-

to al público todos los sábados desde

el año de su inauguración, es también

escenario de montajes teatrales.

Fachada orquesta Filarmónica de bogotá, 2009Fotos Carlos Lema

{


auditorio león de greiffFoto Mauricio Uribe

{


DirectorTeniente Coronel Juan Alberto MontesCel. (321) 2324903AdministradorCabo SegundoCarlos SosaCel. (311) 8477499Carrera 7 Calle 106 esquinaCantón Norte


{

Teatro Patria (1969)

_Este teatro ubicado en terrenos del Cantón Norte, de propiedad del Ejérci-

to Nacional de Colombia, fue construido originalmente como sala para la proyección de cine por

las fuerzas militares en 1969, en conmemoración del sesquicentenario de la Batalla de Boyacá.

El teatro, cuya sala cuenta con capacidad para 1.200 espectadores, una de las más altas de

la ciudad, ha sido intervenido en dos ocasiones. A comienzos de los ochenta se realizó su prime-

ra gran remodelación, en la que se adecuó el escenario para espectáculos en vivo, continuando

como sala de proyección de cine; en 2010 se llevaron a cabo obras para el reforzamiento de su

estructura, se remodeló la fachada, se incorporaron instalaciones y se cambió la silletería, con

el fin de ser utilizado

para espectáculos y

eventos de carácter

institucional y em-

presarial.

47

127

DirectorCarlos Eduardo SilvaCalle 57 No. 17-13Barrio Divino SalvadorLocalidad ChapineroTel. 2121091carloseduardosilva@escenacolombia.comwww.escenacolombia.com


{

Teatro Santa Fe (1970)

_La construcción del teatro Santa Fe se debe a la comunidad religiosa do-

minicana del Divino Salvador, fundada en Alemania en 1874 por el sacerdote Francisco de la

Cruz Jordán. Esta comunidad fue designada por la Arquidiócesis de Bogotá, bajo la dirección

de Monseñor Ismael Perdomo, para presidir la parroquia que debería ser levantada en la man-

zana comprendida por las calle 56 y 57 entre carreras 16 y 17. El responsable para desarrollar el

proyecto de la parroquia fue el padre José Gierer, quien contrató para este propósito a la firma

constructora Urigar y les encargó el diseño del conjunto modernista, compuesto por un templo

de tres naves, una sacristía, una sede parroquial, el noviciado, un teatro y el patio central.

La construcción del complejo se inició en 1948 con la Iglesia del Divino Salvador, que fue

dada al culto en 1953, y prosiguió su avance hasta en 1960 con la apertura al público del teatro.

Esta sala, diseñada originalmente para la proyección de cine, fue bautizada como Cine Santa

Fe y durante décadas se constituyó como uno de los más representativos cines ‘de barrio’ de

Bogotá.

El teatro, con una capacidad para 358 personas, es considerado con el resto del conjunto

como de conservación arquitectónica. Es propiedad de la comunidad salvatoriana, la cual ha

entregado en los últimos años su manejo a empresarios privados, siendo el primero de ellos

el empresario Jaime Arturo Gómez, quien tomó la sala en arriendo y la adecúo para escenario

teatral en los años ochenta y principios de los noventa. Actualmente el teatro es manejado y

administrado por la Fundación Teatral Escena Colombia, un grupo de jóvenes que realizan di-

versos montajes escénicos.

48


Gerente General Fundación Teatro Nacional Miguel DuránAdministradora de la salaSonia BoteroCalle 71 No. 10-25Barrio Quinta Camacho Localidad ChapineroTel. [email protected]

a Fanny lo que es de Fanny, 2004Foto Dora Franco, Archivo Fundación Teatro Nacional

{

Teatro nacional Fanny Mikey (1981)

_Este teatro fue creado como sala de cine, inicialmente llamado Cine Diana,

y posteriormente conocido como Cine Avenida Chile. Una vez adquirido por la maestra Fanny

Mikey se denominó Teatro Nacional Calle 71, y desde su partida en el 2008, y como homenaje a

su creadora, se rebautizó como Teatro Nacional Fanny Mikey.

La artista compró la sala en 1978 para la Fundación Teatro Nacional por la suma de

$2’500.000 de entonces; sin embargo, como no contaba con esa suma, se dio a la tarea de con-

seguir los recursos a través de una amplia y conocida gestión, que comenzó con la organización

de un baile de fantasía en el Salón Rojo del Hotel Tequendama para el jet-set de la época, con

invitaciones pintadas por Enrique Grau. Continuó con una subasta de obras de 30 conocidos

pintores, realizada en 1980, así como una fiesta organizada al aire libre sobre la calle 71 entre 9 y

11, para que se diera la comunicación entre actores y público asistente. Entretanto el arquitecto

Germán Samper, responsable del diseño de reconstrucción del teatro, recorría salas internacio-

nales, bajo el patrocinio de Avianca, para alimentar su trabajo.

Finalmente, el Teatro Nacional abrió sus puertas el lunes 30 de noviembre de 1981, con sus

“miembros activos” como invitados principales, aquellos empresarios, pintores, actores, ami-

gos, políticos, que habían comprado un carné por $10.000 con el cual aseguraban su entrada ‘de

por vida’ a los pre-estrenos del Teatro Nacional. El montaje con el cual se estrenó la sala fue la

obra El Rehén, dirigida por David Stivel y protagonizada por 17 reconocidos actores, función que

se mantuvo en temporada durante seis meses.

En 1988 la Fundación Teatro Nacional creó el Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá,

el cual se ha realizado ininterrumpidamente cada dos años. Se organizó para ser realizado en

Semana Santa, época de vacaciones y temporada religiosa, lo que causó algún malestar inicial

49

129

El RehénFoto Archivo Fundación Teatro NacionalFachadaFoto Carlos LemaEl deber de Fenster, 2010Foto Daniel Cañón, Archivo Fundación Teatro Nacional

{

provocando inclusive actos violentos como el estallido de una bomba en los baños del Teatro

Nacional durante la función. Sin embargo, la protesta anónima no pasó a mayores y más bien

logró fortalecer el apoyo de la ciudadanía hacia el evento, visible en la cantidad de público asis-

tente a la clausura del festival, llevada a cabo en la Plaza de Bolívar.

Entre una larga lista de montajes realizados en esta sala, que tiene una capacidad para 348

personas, algunos han sido Taxi (1992), Monólogos de la vagina (2001), Yo amo a Shirley, (1990),

Doña Flor y sus dos maridos (1990), A Fanny lo que es de Fanny (2004).


El AmanteFoto Daniel Cañón, Archivo Fundación Teatro Nacional

{


DirectoraMónica ToroCalle 26 No.25-40Barrio TeusaquilloLocalidad TeusaquilloTel. 3431899 [email protected]

la sala ConciertoFotos Archivo Colsubsidio

{

Teatro de Colsubsidio Roberto Arias Pérez (1981)50

133

_El Teatro Colsubsidio hace parte del Centro Administrativo y Cultural Col-

subsidio de la calle 26, que comprende además un supermercado y varios edificios que albergan

las oficinas administrativas de esta caja de compensación familiar.

Este centro administrativo se construyó como complemento de la adecuación y utilización

del edificio de venta y talleres de automóviles de la marca alemana Wolkswagen, original de

Bruno Violi, remodelado en los setentas por el arquitecto Dicken Castro, quien convirtió este

espacio en un supermercado con almacén de departamentos, oficinas y una amplia cafetería.

Años más tarde se construyó el edificio que alberga las oficinas de la entidad, por parte de

la firma Pizano, Pradilla, Caro y Restrepo, que incluía el teatro, terminado en 1981, que junto

con la biblioteca, la pinacoteca, la librería, el centro de convenciones y el restaurante, comple-

menta los espacios culturales del centro Colsubsidio.

El Teatro Colsubsidio Roberto Arias Pérez, bautizado así en honor al creador de esta en-

tidad, cuenta con capacidad para 1023 espectadores y fue diseñado específicamente para la

presentación de las artes escénicas.

hall del segundo nivel Fachada obra infantilFotos Mauricio Uribe

{


Director general Ricardo CamachoDirectora sede Chapinero Marcela BustamanteCalle 62 No. 9A-65Barrio LourdesLocalidad ChapineroTel. [email protected] www.teatrolibre.com

la sala y la fachadaFotos Carlos Lema

{

Teatro Libre Sede Chapinero (1988)

_Como medida de seguridad a raíz de la toma al Palacio de Justicia en 1985,

se restringió el tránsito por el centro histórico de Bogotá, especialmente en las noches, alte-

rando con ello el funcionamiento de la sede del Teatro libre ubicada en la calle 13 con carrera 2.

Esto hizo que el grupo de teatro dirigido por Ricardo Camacho tomara la decisión de ampliar su

campo de acción y de buscar una sede alterna en donde realizar su trabajo actoral.

La búsqueda de esta otra sede fue favorecida por la amistad que el grupo tenía con la Fun-

dación Arte de la Música y con su presidente Rafael Puyana Michelsen, propietarios del dete-

riorado Teatro de la Comedia de Chapinero, quienes lo habían comprado para recuperarlo y

adaptarlo como centro musical sin lograr su cometido, por lo que habían resuelto venderlo. El

ofrecimiento fue oportuno para el Teatro Libre, entidad que adquirió la sala pese a que conocían

de antemano los insolubles problemas estructurales que éste presentaba.

Luis Enrique Osorio, director, actor, escritor y creador de la Compañía Bogotana de Come-

dia, había encargado al arquitecto Jorge Gaitán Cortés y al ingeniero Guillermo González Zuleta

el diseño de su Teatro de la Comedia, tras quedarse sin escenario para sus presentaciones ante

la demolición del Teatro Municipal en 1952. Inaugurado en 1953, Osorio disfruta durante poco

tiempo su escenario para la comedia, pues debe exiliarse ante el acoso del gobierno militar el

momento, quedando el teatro en manos de distribuidores de cine y utilizado esporádicamente.

Luego de su adquisición en 1986, el Teatro Libre inicia la remodelación de la edificación

bajo la tutela de los arquitectos Alfonso García y Alberto Martínez, quienes finalizan la obra en

1988, año en que se abrieron las puertas nuevamente al público ahora bajo el nombre de Teatro

Libre de Chapinero, con un nuevo aforo, algo menor que el original, para 760 espectadores.

51

135

de la Trilogía de dostoievskiFoto Javier Coca Montaje de los demoniosFoto Archivo Teatro Libre

{

Dentro del conjunto de obras que compone su repertorio -entre dramaturgia nacional y ex-

tranjera- se encuentran Las Brujas de Salem (1981), de Arthur Miller, dirigida por Germán More;

La Arestinada (1999), de Esquilo; Noche de Epifanía (1988), de William Shakespeare; La tetralo-

gía de Dostoievski, adaptaciones de Crimen y Castigo, El Idiota, Los hermanos Karamazov y Los

Demonios, (2006-2010), adaptadas por Patricia Jaramillo, montajes todos dirigidos por Ricardo

Camacho.


Director del Centro Cultural Gimnasio Moderno Camilo de IrisarriCalle 74 No. 9-24Barrio PorciúnculaLocalidad ChapineroTel. 3477554centrocultural@gimnasiomoderno.edu.cowww.gimnasiomoderno.edu.co/centrocultural

{ la salaantiguo Teatro Fernández Madrid TocuenFoto Archivo Centro Cultural Gimnasio Moderno

Sala Ernesto Bein (1988)

_La sala Ernesto Bein hace parte del Centro Cultural del Gimnasio Moderno,

construido dentro del campus del colegio desarrollado a partir de 1919, declarado Monumento

Nacional en 1985. Destinado a alojar los servicios culturales de la institución, para uso de los

estudiantes y abierto a la comunidad, se convocó a un concurso abierto entre los arquitectos

egresados del colegio, el cual fue ganado por la firma RGM de Carlos Morales y Jorge Rueda.

El nuevo Centro Cultural posee fachadas de ladrillo a la vista, que en clave moderna se inte-

gran al conjunto histórico, acabado que caracteriza igualmente el interior de la sala de teatro,

con capacidad para 572 espectadores. La sala Ernesto Bein reemplazó al antiguo teatro José

Fernández Madrid, que se encontraba en el segundo nivel del edificio principal, ahora dedicado

a la nueva biblioteca del colegio.

52

137

{Vista aérea del Centro Cultural Gimnasio ModernoFoto Hoyos, Archivo Centro Cultural Gimnasio ModernoBallet de Moscú sobre el hieloFoto Archivo Centro Cultural Gimnasio Moderno


Teatro Camarín del Carmen (1985)53

Las brujas de Salem, grupo de teatro de la asab, 2008 la salaFotos Carlos Lema

{

139

DirectoraDiana EcheverryCalle 9 No. 4–93Barrio La CandelariaTel. [email protected] www.tucomedia.com

El Camarín del CarmenFotos Carlos Lema

{

_En sus orígenes, esta construcción hacía parte de un convento que surgió

gracias a la donación doña Elvira de Padilla, quien se enclaustró allí con sus hijas para servir a la

sociedad santafereña en 1605. Hacia 1655, don Pedro de Arandia construye al lado del

claustro la iglesia para las monjas, quienes ya se habían convertido en la comunidad de San

José de las Madres Carmelitas Descalzas. El templo, de una sola nave, poseía una espadaña y

el camarín, únicos elementos arquitectónicos que se conservan en la actualidad, pues el inte-

rior del templo fue saqueado durante los primeros años del siglo XX. El Camarín del Carmen, el

gabinete semicircular que sobresale de la edificación hacia la calle 9 en el que se veneraba a la

virgen del Carmen, con el tiempo se ha convertido en uno de los íconos de la ciudad histórica,

El convento se deterioró debido a su utilización inapropiada, tras haber sido convertido en

hospital en 1861, posteriormente en cuartel militar para luego ser demolido con el fin de cons-

truir en su lugar el Colegio León XIII desde los años 20 del siglo XX, diseño que no pudo ser com-

pletado en su totalidad a causa de la conservación del camarín. Dada su importancia histórica y

su valor cultural y arquitectónico, tanto el gobierno nacional y distrital, así como la Comunidad

Salesiana y la Corporación La Candelaria, se empeñaron en recuperar los restos de la construc-

ción mediante una propuesta de uso definitivo, para lo cual se decidió construir un teatro multi-

funcional, llevado a cabo entre 1987 y 1989 por los arquitectos Víctor Bejarano, Eugenio Castillo

y José Fernández, quienes diseñaron una moderna sala con capacidad para 500 personas.

Antes de finalizar su restauración, la Corporación La Candelaria creó la Fundación Camarín

del Carmen, la cual asumió la conservación y uso del teatro –según acta firmada el 15 de febrero

de 1989 por el Presidente Belisario Betancur y el Alcalde Mayor de Bogotá, Andrés Pastrana–

bajo la figura de comodato que tendría una duración de 50 años.

Durante 15 años se realizaron allí presentaciones escénicas de diversos géneros artísticos,

entre los cuales se destaca la Temporada de la Ópera de Colombia, dirigida por Gloria Zea, has-

ta que en el 2004 se devuelve el inmueble a la Comunidad Salesiana, propietarios actuales del

teatro. Este permaneció cerrado durante un año hasta que en el 2005 la Corporación Promotora

de Cultura Tu Comedia presentó un proyecto artístico que interesó a esta comunidad religiosa.

La Corporación mantiene vivo este espacio mediante continuas presentaciones teatrales

y talleres de actuación. Algunos de sus montajes, dirigidos por César Vanegas Jr, son El aman-

te perfecto (2005), adaptación libre de un texto de Dario F.; Aladino y la lámpara maravillosa,

(2007), adaptación libre de César Vanegas; El avaro (2009) y Un sueño de navidad (2010) de César

Vanegas Jr.


DirectoraAna María AlzateCalle 10 No.3-16Barrio La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. [email protected]

Ritos del retorno, 2009Fotos Carlos Lema

{

Fundación Gilberto Alzate Avendaño (1989)54

141

_El conjunto compuesto por una casa colonial esquinera y tres casas con-

tiguas de corte republicano del centro histórico, considerado de conservación arquitectónica,

constituye la sede de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño, entidad distrital adscrita a la Se-

cretaría de Cultura, Recreación y Deporte encargada de las artes plásticas, audiovisuales y lite-

rarias.

El auditorio, que cuenta con un aforo para 430 personas, junto con las salas de exposiciones,

son el resultado de un concurso arquitectónico convocado por la Fundación y coordinado por la

Sociedad Colombiana de Arquitectos en 1987, del cual resultó vencedor el arquitecto Roswell

Garavito.

Fachada y patioauditorio Fotos Carlos Lema

{


Director generalRicardo CamachoDirectora de la sala, Alejandra GuarínCalle 13 No. 2 – 44Barrio La Candelaria2813516 – [email protected]

sala y fachadaFotos Carlos Lema

{

Teatro nacional La Castellana (1990)

_También cuenta con sede propia en la calle 71 Nº 12-22 el Teatro Hilos Mági-

cos, dirigido por Ciro Gómez. Fundado en 1974, el grupo ha realizado una intensa actividad has-

ta abrir su propia sede, y desarrollar en ella un trabajo de investigación, taller de construcción de

títeres y máscaras, pedagogía teatral, centro de documentación sobre teatro de títeres y sobre

todo, la realización de temporadas permanentes de su repertorio de obras entre las cuales se

cuentan títulos representados en múltiples oportunidades tanto en Colombia como en varios

países de América Latina, como Guepagé, El tesoro de El Dorado, Travesuras para el Arco Iris,

Goranchacha, El hombre que escondió el sol y la luna, de Carlos José Reyes, o la comedia de Luis

Vargas Tejada Las Convulsiones, estrenada en 1828.

En la calle 24, a dos cuadras de la Biblioteca Nacional se encuentra el grupo Teatrova, diri-

gido por Carlos Parada, con la subdirección de Kadir Abdel, quienes han desarrollado un trabajo

de gran mérito tanto en el arte de los títeres como en montajes de teatro en los que se combi-

nan máscaras y muñecos. Carlos Parada, más conocido por sus amigos como Charlie Boy, ha

sido actor, director, músico y titiritero, autor de obras teatrales y de piezas para títeres

La prolífica actividad de grupos de diversas tendencias y estilos ha enriquecido el arte escé-

nico en la ciudad y ampliado los espacios de expresión en distintas zonas y barrios de la ciudad.

A las salas creadas por los propios grupos teatrales habría que agregar otras, de gran importan-

cia, que hacen parte de diversas instituciones culturales o financieras.

55

143

A Fanny lo que es de Fanny, 2004Foto Dora Franco, Archivo Fundación Teatro Nacional Sugar, 1989Foto Archivo Fundación Teatro Nacional

{


Teatro de la Carrera (1991)

El rapto de panamá Foto Archivo Teatro de la Carrerasala y entrada al teatroFotos Mauricio Uribe

{

Director Jaime Arturo Gómez Carrera 13 No. 61-24 Interior 6Barrio LourdesLocalidad ChapineroTel. [email protected]

56

_El antiguo cine San Carlos, así denominado porque pertenecía al Hospital

San Carlos, fue construido en 1951 por la firma de arquitectos Esguerra, Sáenz, Urdaneta, Suárez

con un claro lenguaje moderno y conserva parte de su diseño original. El principal atractivo de la

sala desde el momento de su inauguración fue su integración al pasaje comercial que lo antece-

de y que sirve de entrada por la carrera 13.

Tras varias décadas de servir como sala de cine, en 1991 Jaime Arturo Gómez, empresario

que había tenido también a su cargo el Teatro Santa Fe, lo convirtió en escenario para represen-

taciones teatrales, con capacidad de 435 sillas, y como sede de la Fundación Teatro de la Carrera,

en memoria de la residencia presidencial del Palacio de la Carrera.

145

DirectorFernando PérezAvenida 19 No. 152A-48Localidad UsaquénTel. 6149747theatrewscc@anglocolombiano.edu.cowww.anglocolombiano.edu.co

Teatro Willam Shakespeare (1999)

_El Teatro William Shakespeare, perteneciente al colegio Anglo Colombia-

no, fue construido en 1999 por iniciativa del rector del colegio, David Toze, quien pensó en abrir

un espacio para los eventos culturales propios de su institución, a la vez que para los habitantes

del norte de la ciudad. Encargó entonces del diseño al arquitecto Juan Gonzalo Botero, al tiem-

po que inició la consecución de fondos para la obra. Su propuesta fue apoyada por el Consejo

Británico y por varios empresarios, quienes aportaron recursos y asesorías para la escenografía

teatral del edificio.

Este teatro fue uno de los primeros espacios culturales bogotanos en los que se incorporó

el sistema “flat floor”, provisto de una silletería retráctil que permite transformar un escenario

con silletería en un piso totalmente horizontal.

El aforo total de la sala es de 551 sillas, de las cuales 351 son retráctiles para dar mayor am-

plitud al escenario, que es sede del Festival Iberoamericano de Teatro.

57

Christmas before nightmare Foto Carlos LemaFachada y salaFotos Mauricio Uribe

{


Teatro Leonardus (1999)

Directora Leonor Estrada HerreraCarrera 21 No. 127-23Barrio La CallejaLocalidad UsaquénTel. 6484502 [email protected]

La tempestadFotos Carlos Lema

{

58

147

Fachada y salaFotos Mauricio Uribe

{

_El Teatro

Leonardus, perteneciente al

Colegio Italiano Leonardo

Da Vinci, abrió sus puertas al

público en octubre de 1999,

y se ha consolidado como

uno de los más importantes

escenarios del norte de la ciu-

dad. En la sala, con capacidad

para 300 espectadores, se

han presentado las obras: A

come Alice del Teatro Vascello

di Roma; Yepeto, de Roberto

Cossa, dirigida por Jorge Cao; Una mentira de la mente, de Sam Shepard, dirigida por Ricardo

Sarmiento; Con el corazón abierto de Humberto Dorado, dirigida por Nicolás Montero; Las 11 y

una noches, dirigida por Carolina Rueda; Play Land de Athol Fugard, dirigida por Nicolás Mon-

tero; La tempestad, de William Shakespeare, dirigida por Pawel Novicki; Las curvas del amor,

escrita y dirigida por Rafael Cardozo y A ver si es tan machito, stand up comedy original de Diego

Camargo. El teatro ha sido sede programada durante varias versiones del Festival Iberoameri-

cano de Teatro de Bogotá.


Sala alterna - Ministerio de CulturaCoordinadora de la sala Blanca Cecilia CarreñoCarrera 6 No. 10-76Barrio La CandelariaLocalidad La CandelariaTel. 2825402 [email protected]

Grupos de teatro de la asabFotos Carlos Lema

{

Teatro Delia zapata Olivella (2001)59

149

_Este escenario construido en 1946, llamado Teatro Capitol y luego Teatro

de la Cancillería, fue de propiedad privada y alquilado para diferentes usos, entre los que se

recuerda la primera sede de la Cadena Radial Colombiana -Caracol- en 1948.

En 1986 lo adquiere la Corporación La Candelaria -hoy Instituto Distrital de Patrimonio Cul-

tural- que ese mismo año lo vende al Instituto Colombiano de Cultura -hoy Ministerio de Cultu-

ra-, entidad que lo convierte en una sala alterna del vecino Teatro Colón.

Su recuperación y remodelación integral se inicia en los primeros años noventa, siendo in-

augurado en 2001 como Teatro Capitol, rebautizado en 2001 como Teatro Delia Zapata Olivella

en homenaje a la artista, pedagoga e investigadora de las artes populares colombianas, quien

falleció ese año.

Aunque el énfasis de los espectáculos presentados en esta sala –para 250 espectadores- es

la danza, las demás artes escénicas también tienen cabida, pues su escenario y su platea plana

son adaptables a presentaciones de teatro, recitales de poesía y conciertos.

salaFoto Mauricio UribeFachada Foto Carlos Lemasala de ensayoFoto Mauricio Uribe

{


auditorio principal biblioteca Virgilio barco biblioteca El Tunal biblioteca El TintalFotos Carlos LemaVista aérea biblioteca Virgilio barcoFoto Gabriel Ossa, Fundación Rogelio Salmona

{

Auditorios de la Red de Bibliotecas Públicas (2001)60

_BibloRed, la Red Capital de Bibliotecas Públicas de Bogotá, programa de

la Alcaldía Mayor creado en 1998, está conformada por 4 bibliotecas mayores, 6 locales, 10 de

barrio y 1 Bibliobús. Entre las llamadas “megabibliotecas” se encuentran las bibliotecas Virgilio

barco (60a), diseñada por el arquitecto Rogelio Salmona, con un auditorio con capacidad para

410 personas; El Tintal (60b), obra del arquitecto Daniel Bermúdez, quien para la conformación

de la biblioteca transformó una abandonada planta de tratamiento de basuras, y que cuenta

con el Auditorio Manuel Zapata Olivella de 160 sillas y El Tunal (60c), creada por la firma Tectus

Ltda., de los arquitectos Suely Vargas, Manuel Guerrero y Marcia Wanderley, que tiene un audi-

torio para 230 espectadores.

151

Auditorios universitarios

auditorio Carlos Martínez, universidad Nacional Foto Mauricio Uribeauditorio Mario laserna, universidad de los andes Foto Germán Téllezauditorio Fabio lozano simonelli, universidad Jorge Tadeo lozanoFoto Enrique Guzmán

{

23

_El movimiento teatral ha ocupado la atención de los estudiantes, lo cual ha

generado la conformación espontánea de escenarios diferentes campus universitarios de la ciu-

dad, algunos de los cuales han subsistido durante décadas, como sucede con espacios abiertos

de las universidades Nacional y Javeriana, en donde se ha fortalecido el género de la cuentería.

Así mismo, varios centros de educación superior cuentan con auditorios que, aparte de servir

para usos académicos, permiten la circulación de obras teatrales estudiantiles. La universidad

Nacional (61a) posee el Auditorio Carlos Martínez Jiménez, con capacidad para 200 personas; la

universidad de los andes (61b), cuenta con un grupo de teatro quienes presentan sus obras en

el Auditorio Mario Laserna, con capacidad para 600 espectadores; el Auditorio Fabio Lozano Si-

monelli de la universidad Jorge Tadeo lozano (61c), es un nuevo escenario multifuncional, con

un aforo de 606 personas. Otras universidades ha abierto carreras o posgrados de teatro como

la Universidad Pedagógica, la Universidad El Bosque o la ya tradicional Academia Superior de

Artes de Bogotá -ASAB-.


Directora artísticaAlejandra BorreroCarrera 25 No. 41-64Barrio La SoledadLocalidad TeusaquilloTel. [email protected] www.casaensamble.com

la sala y hall TeatroFotos Archivo Casa Ensamble

{

Teatro Arlequín (2005)62

_El Teatro Arlequín hace parte del conjunto de cinemas capitalinos de gran

escala, en ocasiones en lugares insospechados como este caso, cuya sala se construyó en el

fondo de un edificio residencial de cuatro pisos sin mayor atractivo arquitectónico.

En la década de los setenta la Casa Cinematográfica Colombia -Cine Colombia- tenía bajo

su responsabilidad mantener vivos estos teatros a través de subsidios que permitían su soste-

nimiento, entre los que se encontraba el Arlequín, reconocido por programar ciclos de cine y

estrenos quincenales.

La proyección de películas no solo implicaba un alto costo en el transporte de las cintas des-

de el exterior, sino que su proyección simultánea en las diferentes salas existentes en la ciudad

requería de una precisa coordinación y de una impecable lo-

gística, pues se recibían máximo cinco cintas que debían ser

rotadas por las diferentes salas de acuerdo con las funciones

programadas.

La recuperación paulatina de esta sala para su adapta-

ción a las artes escénicas ha sido realizada por contigua Casa

Ensamble, organización artística que lo incorporó a su espa-

cio artístico aprovechando la cercana ubicación, convirtién-

dolo en la sala mayor de este proyecto cultural.

página opuesta: Doña Flor y sus dos maridos A solas Margarita Rosa de Francisco, 2010Fotos Carlos Lema

{


Teatro Astor Plaza (1981)


{

63

_El Astor Plaza fue construido en 1981 como sala de cine y por su ubicación

y dimensiones pronto se consolidó como uno de los espacios más importantes del circuito ci-

nematográfico de la capital. Durante varios años tuvo este uso hasta que inició el declive de

las salas para proyección de cine, en parte por las nuevas formas de diversión que fueron des-

plazando el asistir a un cinema, como la televisión por cable o el alquiler de películas, y en gran

parte también por la implementación del modelo de salas múltiplex que fueron relegando a los

teatros tradicionales.

Esta circunstancia redujo las posibilidades de sostenibilidad de este tipo de construcciones,

la mayoría de las cuales fueron quedando abandonadas por años hasta que fueron transforma-

das, vendidas o demolidas. Afortunadamente algunas de estas salas han sido adquiridas por

nuevos propietarios con el fin para

remodelarlas y ponerlas al servicio

del arte y la cultura nuevamente.

Este es el caso del Teatro Astor

Plaza, reinaugurado en 2004 -con

la presentación del cantante italia-

no Nicola Di Bari-, que dejó de ser

sala de cine para convertirse en un

escenario para las artes escénicas

y en general para la presentación

de espectáculos en vivo y eventos

masivos.

DirectorHernán OrjuelaCalle 67 No. 11-58Barrio ChapineroLocalidad ChapineroTel. 2127827 [email protected] www.astorplaza.com

155

Teatro Eldorado ECCI (2008) 64

_Las instituciones financieras y cajas de compensación también han cons-

truido grandes teatros, con una moderna dotación de luz y sonido y un aforo para más de un

millar de espectadores cada una de ellas. La primera de estas salas es el Teatro Roberto Arias

Pérez, de Colsubsidio. Una feliz iniciativa del doctor Arias Pérez, para apoyar el desarrollo del

teatro, pues ya había sido miembro de la directiva del Club de Amigos del Teatro “El Búho” años

atrás.

La Caja de Compensación Familiar CAFAM edificó el Teatro de Bellas Artes, al lado del Su-

permercado principal de la organización. El Teatro de Bellas Artes, dirigido por el doctor Jorge

Guzmán Moreno, fue diseñado por el arquitecto Hernán Herrera, quien falleció antes de que el

teatro fuera inaugurado. Se trata de un escenario dotado con una moderna tecnología, apropia-

do para toda clase de espectáculos.

De reciente inauguración, el Centro Cultural y

Biblioteca Pública Julio Mario Santodomingo, que

hace parte del sistema de Bibliored como una de

las áreas más relevantes de la Secretaría de Cultu-

ra, Recreación y Deporte del Distrito, al tiempo que

dispone de una de las mega bibliotecas de la capital

así como de galerías y espacios de exposiciones,

cuenta con dos salas

Director generalRicardo CamachoDirectora de la sala, Alejandra GuarínCalle 13 No. 2 – 44Barrio La Candelaria2813516 – [email protected]

sala y fachadaFotos Archivo Teatro Eldorado ECCI

{


Teatro Cádiz (1952)

DirectorFabián Acosta QuirogaAvenida de las Américas No. 33–50Centro Urbano Antonio Nariño (CUAN)Localidad TeusaquilloTel. [email protected]

_El Teatro Cádiz, construido en 1960 y denominado también como Cine el

Bosque, fue levantado en medio de una amplia zona verde en medio del Centro Urbano Antonio

Nariño -CUAN- de 1952, uno de los conjuntos urbanos y arquitectónicos más representativos

del Movimiento Moderno en el país, hoy considerado como sector de interés cultural.

El conjunto residencial, promovido por el ministro de obras públicas Jorge Leyva, durante

el gobierno presidencial de Laureano Gómez, fue el primer proyecto de propiedad horizontal

construido en Bogotá; su diseño y construcción fue encargado a la firma de arquitectos Rafael

Esguerra, Enrique García Merlano, Daniel Suárez, Juan Meléndez y Néstor Gutiérrez, quienes

presentaron en su propuesta una agrupación de 23 edificios con un total de 960 apartamentos

y una capacidad para 6.400 personas.

El sentido de este planteamiento urbano era el de lograr la auto sostenibilidad de un espa-

cio residencial masivo, por lo que el Centro incluía lugar de intercambio social -el Teatro Cádiz-,

varias de servicios -supermercado, colegio, jardín infantil, lavandería, planta de reciclaje, ade-

más de la iglesia y de las torres de apartamentos.

Durante las décadas de los sesenta y los setenta el teatro funcionó como un cinema para

la ciudad, al cual acudían los residentes del CUAN y vecinos del sector incluyendo a estudiantes

y profesores de la Universidad Nacional de Colombia, quienes desarrollaron buena parte de su

vida cultural alrededor de este espacio.

Debido a la crisis del cine, entre otras razones, el Teatro permaneció abandonado por más

de 20 años, y aunque se realizaron varios intentos por rehabilitarlo, fue hasta 2006 que se inició

su proceso de recuperación bajo la dirección de los artistas y gestores culturales Fabián Acosta,

Rocío Gamboa y Zinnia Muñoz, habitantes del conjunto, quienes contaron con la colaboración

de empresas como Cemex, Corona y Cine Colombia. El edificio, caracterizado por el amplio hall

y la línea sinuosa de la cubierta de la sala, ha recobrado su esplendor y está abierto a la presen-

tación de propuestas de varios grupos de teatro de la ciudad

65

Fachada y hall entradaFotos Mauricio Uribe

{

157

la sala y exposiciones en el hallFotos Archivo Teatro Cádiz

{


Teatro de Bellas Artes de Bogotá (2008)

Bodas de Fígaro, Fundación Camarín del Carmen, 2009 Foto Carlos Lema

{

66

159

DirectorJorge Guzmán MorenoAvenida 68 No. 90-88Barrio La FlorestaLocalidad Barrios UnidosTel. [email protected]://www.teatrodebellasartesdebogota.com/

_Pasaron casi dos décadas, desde que se levantó el Teatro Colsubsidio a co-

mienzos de los años ochenta, para que Bogotá volviera a estrenar un teatro de grandes dimen-

siones, hasta 2008 en que se construye el Teatro de Bellas Artes por parte de la Caja de Compen-

sación Familiar -Cafam- al cumplir 50 años de existencia.

El diseño y concepción del teatro, en alegoría y conjunción de los estilos clásicos y contem-

poráneos, son del fallecido arquitecto Hernán Herrera (1929–2006). Materializar la propuesta

que comprendía una Plaza de la Cultura en el exterior del teatro y su sala con capacidad para

1.000 espectadores, le tomó casi dos años a Cafam. En marzo del 2008, con programación del

Festival Iberoamericano de Teatro, fue inaugurado el Teatro de Bellas Artes bajo la dirección

de Jorge Guzmán Moreno, quien articula al repertorio permanente del teatro el componente

social, liberándolo con ello de la cercanía de ser un teatro de alquiler o de circulación de obras,

para convertirlo en un proyecto cultural que involucra la formación actoral, a través de una pro-

gramación que cubre las artes escénicas y la música.

Fachada y salaFotos Archivo Teatro Bellas Artes

{


Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo (2010)67

arriba: Teatro Mayorabajo: Teatro Estudio Fotos Enrique Guzmán

{

161

_Este complejo ar-

quitectónico, que cons-

tituye la cuarta ‘megabi-

blioteca’ propuesta para

Bogotá con las de Virgilio

Barco, El Tintal y el Tunal,

fue diseñada por el arqui-

tecto Daniel Bermúdez y

es producto de la alianza

público-privada entre la

familia de empresarios

Santo Domingo y la Al-

caldía Mayor de Bogotá.

El conjunto comprende

una amplia biblioteca, dos salas de teatro, además de otros espacios culturales, Su construc-

ción, iniciada en el 2007, finalizó en el 2010 y fue bautizada como Centro Cultural Biblioteca

Pública Julio Mario Santo Domingo, en reconocimiento a quien hizo este importante aporte a la

cultura capitalina.

Consta de dos espacios para el desarrollo de las artes escénicas, el Teatro Mayor y el Tea-

tro Estudio. El Teatro Mayor, inaugurado en mayo de 2010, consiste en una moderna sala que

interpreta la conformación de herradura del teatro all’italiana, con una capacidad para 1.300

espectadores, una de las más altas de la capital, con énfasis en la programación de conciertos,

espectáculos y montajes teatrales y líricos de gran envergadura.

Por su parte, el Teatro Estudio inaugurado en septiembre de 2010, con un aforo para 330

personas, ha sido concebido para la experimentación teatral y artística en general, pues cuenta

con silletería retráctil que facilita la adecuación del espacio a las exigencias de los espectáculos,

entre los que se presentan desde conciertos de música de cámara, danza contemporánea y

montajes escénicos experimentales, hasta performances e instalaciones.

Director Ramiro OsorioAvenida Calle 170 No.67-51Parque Zonal San José de Bavaria Barrio San José de Bavaria Localidad SubaTel. 3778640www.teatromayor.com

Fachada del teatro Foto Enrique GuzmánEn sueños de Bolívar, Grupo de teatro la Mama, 2010 Foto Diana Arévalo

{


Teatro Mayor Julio Mario santo domingo Foto Enrique Guzmán

{


_ubicación de los teatros en Bogotà

Dibujo Paola Pedraza

165

1. Teatro de marionetas don Eloy 2. Teatro la Candelaria 3. Teatro Experimental la Mama 4. Teatro de Marionetas Jaime Manzur 5. Teatro libre - sede centro 6. auditorio rafael baquero 7. Teatro Taller de Colombia 8. Teatro la baranda 9. sala de Teatro Chiminigagua 10. Teatro Estudio Calarcá - Tecal 11. academia superior de artes de bogotá – asab 12. Teatro Centro Cultural Gabriel García Márquez 13. Teatro de marionetas Ernesto aronna 14. ditirambo Teatro 15. la Casa del Teatro Nacional 16. Teatro de marionetas hilos Mágicos 17. sala seki sano 18. Casa Teatrova 19. Teatro actores 20. Teatro barajas 21. Teatro la libélula dorada 22. Teatro acto latino 23. Teatro El Contrabajo, sede Tunjuelito24. Teatro El Contrabajo, sede bosa25. Fundación Teatro quimera

26. laboratorio Mapa Teatro27. Tea Tropical 28. silfos Teatro29. Teatro r10130. Teatro Néstor Mahecha 31. Teatridanza 32. Teatro Varasanta 33. Casa Ensamble 34. la Factoría de l´Explose 35. Teatro la Macarena 36. kábala Teatro 37. Corporación Teatral barraca 38. Teatro sueños 39. Teatro Colón y sala Víctor Mallarino40. Teatro Faenza 41. Teatro El parque 42. Teatro de la Media Torta 43. Teatro Jorge Eliécer Gaitán 44. Teatro luis Enrique osorio 45. Teatro Minuto de dios 46. auditorio león de greiff 47. Teatro patria 48. Teatro santa Fe 49. Teatro Nacional Fanny Mikey 50. Teatro Colsubsidio roberto arias pérez

51. Teatro libre sede Chapinero 52. sala Ernesto bein 53. Teatro Camarín del Carmen 54. auditorio Fundación Gilberto alzate avendaño 55. Teatro Nacional la Castellana 56. Teatro de la Carrera 57. Teatro William shakespeare 58. Teatro auditorio leonardus 59. Teatro delia zapata olivella 60. auditorios de las bibliotecas de la red de bibliotecas públicas 60a. biblioteca Virgilio barco 60b. biblioteca El Tintal “Manuel zapata olivella” 60c. biblioteca El Tunal 61. auditorios universitarios 61a. universidad Nacional 61b. universidad de los andes 61c.universidad Jorge Tadeo lozano62. Teatro arlequín 63. Teatro astor plaza 64. Teatro Eldorado ECCi 65. Teatro Cádiz 66. Teatro de bellas artes67. Teatro Mayor y Teatro Estudio Julio Mario santo domingo


Comedia Tempio, Francia, Teatro Colón, Festival iberoamericano de bogotáFoto Carlos Lema

{


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Entrevistas realizadasAdela Donadío, directora Casa del Teatro Nacional, noviembre 14 de 2010.Alejandra Borrero, directora Casa Ensamble, noviembre de 2010Angie Bueno, Teatro Libre de Chapinero, noviembre de 2010Blanca Cecilia Carreño, directora Teatro Delia Zapata, diciembre de 2010Cabo Carlos, asistente de dirección Teatro Patria, diciembre de 2010

169

Carlos José Reyes, historiador del teatro colombiano, noviembre de 2010Carlos Moreno, director Academia de Arte y Teatrino Don Eloy, el 18 de octubre de 2010.Carlos Parada y Kadir Abdel Rahim, director y subdirector Casa Teatrova noviembre 24 de 2010.César Álvarez Escobar, director de la Libélula Dorada, diciembre 10 de 2010Ciro Gómez, director teatro de marionetas Hilos Mágicos, noviembre 17 de 2010.Consuelo Rodríguez, administradora Instituto Cultural León Tolstoi, noviembre 30 de 2010.Críspulo Torres y Mónica Camacho, directores Teatro Tecal, noviembre 25 de 2010.Daniel Galeano, director del Teatro Barraca, noviembre de 2010Eddy Armando, director del Teatro La Mama, 19 de noviembre de 2010.Ernesto Aronna Restrepo y Miriam Restrepo de Aronna, directores Teatro de marionetas Ernesto Aronna, 26 de

noviembre de 2010.Fabián Acosta, director del Teatro Cádiz, noviembre de 2010Fernando Pérez, director del Teatro William Shakespeare, diciembre de 2010.Francis Rodríguez, asistente de dirección del Teatro, diciembre de 2010.Germán Betancourt, director del Teatro Luis Enrique Osorio, diciembre de 2010.Gisela Lozano, directora Teatro El Contrabajo sede Tunjuelio, diciembre 1 de 2010.Guillermo Delgado, director del Teatro La Baranda, realizada el 3 de noviembre de 2010.Héctor Escamilla, director Teatro El Contrabajo sede Bosa, diciembre 1 de 2010.Hernando Parra, director Teatro R101, noviembre 2 de 2010.Hugo Afanador, director teatro Centro Cultural Gabriel García Márquez, 9 de noviembre de 2010Israel Guauque, director Teatro Silfos, 13 de diciembre de 2010Jaime Arturo Gómez, director del Teatro de la Carrera, noviembre de 2010.Jairo Barajas, director Teatro Barajas, 7 de diciembre de 2010Jorge Guzmán Moreno, director del Teatro de Bellas Artes, noviembre de 2010.Jorge Prada Prada, director del Teatro Quimera, diciembre de 2010.Jorge Vargas, director del Teatro Taller de Colombia, noviembre 9 de 2010.Leonor Estrada Herrera, directora del Teatro Leonardus, noviembre de 2010.Manuel Ballesteros López, director Tea Tropical, 11 de noviembre de 2010.María Eugenia Hoyos, administradora del Teatrino de marionetas Jaime Manzur, 18 de noviembre de 2010María Rodríguez, administradora Teatro La Macarena, noviembre 25 de 2010.Miguel Durán, gerente general Fundación Teatro Nacional, noviembre 17 de 2010.Mónica Suárez, jefe de prensa Teatro Nacional Fanny Mikey, noviembre 22 de 2010.Néstor Mahecha, director del Teatro Néstor Mahecha, diciembre de 2010.Patricia Ariza, directora de la Corporación Colombiana de Teatro, Sala gSeki –Sano, diciembre de 2010.Ramiro Osorio, director del Teatro Julio Mario Santodomingo, noviembre de 2010.Roberto Nieto y Ligia Cortés, directores Teatridanza, 3 de noviembre de 2010Santiago García, director Teatro La Candelaria, 21 de octubre de 2010.Santiago Martínez, director del Teatro Sueños, diciembre de 2010.Sergio González, director del Teatro Acto Latino, noviembre de 2010.William Fortich, director de Kábala Teatro, noviembre de 2010.

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www.libeluladorada.comhttp://www.fundacionbarajas.com/empresa.html consulta realizada el 25 de noviembre de 2010http://www.mapateatro.org/mapa.htmlConsulta página http://teatrosilfos.blogspot.com/2008/01/que-hemos-hecho.htmlConsulta página http://teatror101.wordpress.com/http://teatridanza.blogia.com/Tomado de: http://www.ciudadviva.gov.co/portal/node/129 consulta realizada el 7 de noviembre de 2011Tomado de: http://www.teatrolamacarena.com/sitio/es/conocenos/30-anos-de-artewww.mincultura.gov.coTomado de: http://www.musicalizando.com/catalogo/biografia.php?Interprete=446La pérdida de la tradición moderna en la arquitectura de Bogotá y sus ... Escrito por Camilo Mendoza Laverde en: http://books.google.com.co/books?id=osTOL9C0KmMC&pg=PA60&lpg=PA60&dq=arquitectura+del+teatro+el+parq

ue&source=bl&ots=9F-GfZTMjR&sig=8bHq-mnaRHeFnjod1D-DogRBy6k&hl=es&ei=h2HXTO3QCoT7lweTvNT9CA&sa=X&oi=book_result&ct=result&resnum=2&ved=0CBkQ6AEwAQ#v=onepage&q&f=false

http://www.titiriterosdecolombia.com/revista3.pdfhttp://www.teatrojorgeeliecer.gov.co/historia.phphttp://www.culturarecreacionydeporte.gov.co/portal/node/4050http://www.planetariodebogota.gov.co/historia.php.php.colnodo.org.co


Desplazados. Misael Torres, barrio la perseverancia, 2004Foto Carlos Lema

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humberto dorado y Jorge Emilio salazar en BENT, Teatro Nacional Calle 71, 1984Foto Carlos Lema

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Este libro se terminó de imprimir en diciembre de 2010.

Su edición fue posible gracias al sector teatral de Bogotá y a la Orquesta Filarmónica de Bogotá.

Marioneta Fundación Jaime Manzur

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Teatros de Bogotá, patrimonio de un escenario efímero

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