Tecnicas y Procedimientos
-
Upload
rafael-sauceda-lopez -
Category
Documents
-
view
199 -
download
1
description
Transcript of Tecnicas y Procedimientos
TECNICAS Y PROCEDIMIENTOS
INYECCION en
AMIGDALAS vs. FARINGE
Es sabido que los polos amigdalinos NO son sus polos geométricos, entonces...
¿la inyección se hace realmente en los polos o en la farínge periamigdalina?
Dr. Pablo R. Koval,
Argentina, 19/11/03
Introducción: La fosa amigdalina, el espacio donde se aloja la amígdala
correspondiente, está limitada por los pilares o arcadas del velo del paladar,
anterior y posterior, y por la lengua por debajo. La prominencia de la superficie
amigdalina libre no sirve como orientación para conocer el volumen real de la
amígdala pues ésta puede introducirse en tejidos vecinos, hacia arriba
(paladar), abajo (lengua) o adelante (pilar anterior). La cara libre (interna) está
cubierta por epitelio escamoso, la cara externa (profunda) está cubierta por una
cápsula fibrosa adherida a la pared faríngea. Los ángulos superior e inferior que
forma la cápsula con la pared faríngea constituyen los polos
amigdalinos respectivos. A nivel del polo inferior la cápsula se adhiere a la
lengua y a las fibras de los músculos gloso-estafilino y faringo-estafilino. En este
sitio la arteria tonsilar, rama de la a. facial y principal arteria amigdalina junto
con sus dos venas acompañantes entran en el polo inferior y constituyen un hilio
que sangra profusamente al extirpar la amígdala.
Para una buena visualización de los polos es necesario el uso de una pinza para
luxar la amígdala hacia la línea media. Cuando las amígdalas están atrofiadas la
visualización de los polos es aún más dificultosa.
Los diferentes autores difieren en cuanto al sitio de inyección:
1) Inyección en las tonsilas en La terapia neural según Huneke. Peter
Dosch.1996. Por cada polo amigdalar 0.5 cc. Técnica: Prótesis dentales flojas
es mejor sacarlas antes de la inyección. Cabeza bien fija. Sin sacar la lengua.
Buena luz. En la primera sesión inyectamos los polos superiores e inferiores de
las amígdalas de tal modo de abarcar bien los centros de reorientación linfática
reduciendo asi los fracasos a su mínima expresión. La procaína la ponemos
submucosa por debajo y por encima (sic) de los polos amigdalares. Para
inyección en los polos inferiores presionamos la base de la lengua al final de la
corredera dentaria hacia medial y ponemos nuestro repolarizador submucoso
entre cordal e inserción lingual. Si el paciente ha sido amigdalectomizado no se
inyecta en los polos sino en el centro mismo del tejido cicatrizal inmediatamente
por debajo de la superficie de la cicatriz. En los casos de sintomatología
predominantemente unilateral primero recomiendo aplicar el impulso en los
cuatro polos amigdalares. Si la reacción es buena y es positiva a la repetición se
puede intentar sólo con la inyección del lado de la sintomatología y únicamente
en el polo superior.
2) Inyección de la amígdala en Illustrated atlas of the techniques of
neural therapy with local anesthetics. Matias Dosch, MD., 1996. Cabeza
bien fija y buena iluminación intrabucal. Punto de inserción: por arriba de los
polos amigdalinos superiores. Para la inyección de los polos inferiores, empujar
la lengua ligeramente hacia la línea media e insertar la aguja entre el último
molar inferior (muela de juicio) y la raíz de la lengua. Inyección submucosa: 0.5
cc. En caso de cicatriz insertar la aguja en el centro de la cicatriz e inyectar
directamente debajo del tejido cicatrizal.
3) Inyección junto a las amígdalas en Terapia neural según Huneke.
Figura 42. Lorenz Fischer, México, 2000.
El epígrafe dice inyección al
polo superior e inferior pero
muestra como sitios de punción
el pilar anterior y no los polos.
4) Prueba de las amígdalas en Infiltraciones terapéuticas. Hans Tilcher
(Viena) y Manfred Eder (Graz), 1994 Hippokrates Verlag – Stuttgart. Con
la boca abierta al máximo se sujeta con una espátula la lengua sin extenderla
hacia fuera de la boca. Se punciona desde el ángulo bucal contralateralmente
en la zona del pilar inferior de las amígdalas, paratonsilar, aproximadamente
0.5 cm de profundidad y tras una aspiración negativa, se inyecta 5 cc (sic) de
anestesia local. La infiltración recomendada para los pilares superiores de las
amígdalas no aporta mejores resultados.
5) Anestesia para tonsilectomía en Anestesia local de Hans Killian,
Salvat, 1979.
A modo ilustrativo -sabiendo fehacientemente que TN no es anestesia- es
interesante leer la técnica de anestesia para tonsilectomía. Primero se inyectan
2-3 ml bajo la mucosa del arco palatino anterior y (si es posible) también del
posterior a partir de varios sitios. Para ello empleamos la jeringuilla de cono
doblado (30º) que permite buena visibilidad durante la inyección. Esto mismo
puede lograrse doblando la aguja (nota del Dr Koval). Luego se realiza la
infiltración peritonsilar propiamente dicha la cual puede facilitarse luxando la
amígdala hacia la línea media. De esta forma se destaca claramente el límite
lateral de la amígdala y se evita la inyección en el parénquima
amigdalino. También debe evitarse una dirección excesivamente lateral de la
inyección pory la presencia de los vasos y nervios que discurren por el espacio
parafaríngeo limítrofe. A partir de 3-4 puntos de punción se infiltra la tonsila
con un total de 5-8 ml de anestésico y ha de intentar darse una dosis suficiente
en el polo inferior y en el tejido limítrofe de la base de la lengua.
Conclusión: De acuerdo a mi experiencia personal los polos son la mayoría de
las veces invisibles e inaccesibles sin ayuda de instrumental especial. Siguiendo
a Fischer la inyección “junto” a las amígdalas, en los pilares o arcos del velo
palatino –no en los polos propiamente dichos- es mucho más factible. Mediante
el empleo de un espejito odontológico puede empujarse medialmente la lengua,
iluminando aún más el área de inyección y acceder al tejido periamigdalino del
polo inferior, -no al polo propiamente dicho.
Comentario 1
Dr. Alfonso C.
García,
México,
22/11/03
La mayoría de las aplicaciones que aplico desde 1988, es
como lo indica Lorenz Fischer en su libro. Y cuando es en la
cicatriz de las amigdalectomías y llega hasta faringe, allí
infiltro.
Comentario: para médicos que empiezan con esta
aplicación tan útil en el tratamiento y diagnóstico,
asegúrense de enroscar ajustando hasta el tope la aguja en
la jeringa, evitando así, por la presión que se ejerce, que se
botara la aguja en la orofaringe, y ni pensar en sus
consecuencias. Tener una buena fuente de luz orientada al
sitio de inyección. Las agujas de insulina o tuberculina
cortas del #25 o 27 son excelentes. Saludos a todos.
Otras sugerencias: en pacientes corpulentos u obesos,
sobre todo para la cicatriz de la amigdalectomía, para
compensar la escasa longitud de la aguja empleo una
jeringa de 5 cc totalmente cargada, aunque no utilice la
totalidad del contenido. Además en la posición en decúbito
dorsal, que aprendí hace tiempo y que a mí me aplicó
Armin Reimers, el paciente está la mayoría de las veces
más relajado. Estando el operador atrás de el. Como
anotaba teniendo de preferencia una buena fuente de luz ya
sea desde el techo o lámpara frontal como las que usan los
ORL. Como sabemos hay que tener listo un recipiente o
"riñón" a la mano por aquellos consultantes que llegan a
tener reflejo nauseoso. Raras veces vomitan. Bueno, ya me
pasé de lanza...Hasta la vista. Dr. Alfonso C. García
Respecto a la aplicación en los polos amigdalares, la verdad
Comentario 2
Dr.
Heberth
García
Rincón,
25/11/03
es que autores como Barop, Richard y otros hablan de
aplicación en las cercanías de los polos. En verdad la
aplicación se ha hecho en el pilar anterior y esto ha sido
suficiente para dar el impulso neuralterapéutico en caso
que la irritación se encuentre en la zona amigdalar
(palatina), ya sea con manifestaciones segmentarias o
como CI. Es más, Huneke describió la misma técnica y la
utilizó hasta sus últimos días, siempre con éxito, por tanto
no me parece relevante la discusión; vuelvo y repito, sin
desechar la importancia de la técnica, es mucho más
importante saber cuando está indicada esta aplicación, que
no es necesariamente cuando haya una amigdalitis sino
cuando la historia o el interactuar con el paciente durante
el tratamiento así lo requiera. Un abrazo, Heberth García.
Aporte
Dr Chavez
Licona,
México, 12/03
El Dr Peter Dosch recomienda los polos amigdalares (uno
superior y otro inferior). Sin embargo recordar que la
amígdala es críptica y donde la inyecten ustedes van a
notar que lo inyectado sale por alguna otra cripta. Yo en lo
personal me acerco a la orilla del arco palatino donde se
inserta la amígdala con una aguja calibre 27 y entro un
milímetro y ahí coloco la procaína o xilocaína al 1 %
(inyecto no más de un cm, con esto es suficiente); no es
nada doloroso. Decirle al paciente que respire por su
garganta. Existen algunos pacientes que tan irritada está la
faringe que el reflejo nauseoso es muy sensible pero hay
que hacerlo de todos modos.
Respuesta
Dr Pablo
Koval,
12/03
Estimado colega: Justamente en el artículo publicado se
hace hincapié en el hecho de que los polos amigdalares NO
son como los polos del globo terráqueo sino que son el
ángulo de unión de la cápsula amigdalar con la pared de la
faringe. De ningún modo hay que inyectar en la amígdala
propiamente dicha, no lo recomendamos. Saludos.
TN en OFTALMOLOGIA
El ganglio ciliar: El guardián de los ojos
Dr. Hans C. Peyer,
Emmental, Suiza
Experiencia con la inyección del ganglio ciliar (inyección retrobulbar) en una
consulta de terapia neural. Trabajo resumido, presentado por el Dr. Hans Peyer,
Suiza, en Cuba 2002. La versión completa puede encontrarla en la página web
terapianeural.com
Las enfermedades de los ojos que muestran una disminución de la visión así
como también los casos en que los ojos pueden constituir por sí mismo un
campo de interferencia, son indicación clara para la aplicación de la técnica de
inyección del ganglio ciliar.
Hace alrededor de siete años participé en un congreso de TN en la ciudad de Interlaken en
Suiza, presidido por nuestro apreciado maestro Dr. Peter Dosch. Ha pasado mucho tiempo
pero todavía sigo escuchando como Peter Dosch con su voz autoritaria comentaba "no es
posible que un suizo que está sufriendo tenga que desplazarse hasta el Tirol para poder
recibir una inyección curativa en el ganglio ciliar", lo que se convirtió en un estímulo
constante para que yo pudiera adquirir mi experiencia práctica aplicando cada vez más este
método.
Caso 1: La señora G.K. de 47 años concurre a mi consultorio y muestra una
sintomatología vegetativa de estrés, temor intenso y dolores que cambian
permanentemente de localización. Hasta ese momento yo había aplicado siempre en estos
casos inyecciones intravenosas de procaína, inyecciones en la tiroides, en la cicatriz de las
amígdalas y en varios dientes que habían sido tratados anteriormente en su raíces, con el
objetivo de alcanzar la estabilización de la situación psicovegetativa. Este tratamiento tuvo
en la señora G solo un efecto pasajero.
La paciente concurre nuevamente a mi consulta, esta vez se trata de una
urgencia. Desde hace algunas horas ha aparecido un nuevo síntoma: dolor muy
intenso en el ojo derecho. La señora describe el dolor como intolerable, desearía
con gusto arrancarse el ojo mencionado. Aparece como una paciente muy
nerviosa, descontrolada con tendencia a hiperventilación. El párpado superior
del ojo derecho muestra un temblor permanente, las conjuntivas están
enrojecidas e inyectadas. La decisión debía tomarse inmediatamente, ahora o
nunca, recomendar un viaje al Tirol era imposible. Rápidamente repasé las
recomendaciones técnicas en el libro de Peter Dosch. La paciente se ubicó en la
camilla con la mirada hacia arriba, hacia la izquierda y adentro. Preparé mi
inyección de procaína 1% y con la punta de mi dedo índice desplacé el bulbo
ocular muy suavemente en dirección arriba y nasal. Ubiqué la aguja de 35 mm
de largo en posición hora 07.00, y la introduje cuidadosamente en el piso de la
órbita con dirección sagital debajo del bulbo ocular, intentando elevar la
dirección después de dos centímetros hacia atrás-arriba-adentro, hasta que la
punta de la aguja alcanzara con absoluta seguridad alrededor de tres
centímetros retrobulbar. Muy tenso y con viva atención me dispuse a esperar la
reacción de esta terapia. La paciente que cerraba fuertemente sus labios por el
dolor intenso en el ojo, comenzó de improviso a sonreír y me informó que los
dolores habían desaparecido. Al certificarme el éxito de la TN estábamos
paciente y médico radiantes de felicidad.
Tres semanas más tarde concurre la paciente en la noche como urgencia y
muestra otra vez una sintomatología dramática similar. Después de repetir la
inyección del ganglio ciliar se obtuvo una remisión permanente y no ha sido
necesario repetirla hasta el presente en esta paciente. Este resultado me obligó a
incorporar este método a mi repertorio de la TN pese a que muchos colegas están
atemorizados e incluso espantados por la cercanía de la inyección con el bulbo ocular .
Como se puede aprender con ejemplos prácticos, deseo presentarles otro caso muy
interesante.
Caso 2: Una maestra de la escuela secundaria L.Z., a quien conozco desde
hace muchos años, concurre a mi consultorio el año pasado y describe una
enfermedad aguda de los ojos. Dos semanas antes fue medicada por un oculista
sin poder observar ninguna mejoría. Se le diagnosticó una queratitis herpética
del ojo izquierdo. Se le trató con un virustático y la paciente comenzó con visión
doble. La inyección única del ganglio ciliar efectuada de acuerdo a la técnica
descrita más arriba, mostró una mejoría rápida de los trastornos oculares, en
especial del enrojecimiento de los ojos. A través del agrandamiento de la pupila
y del estrabismo compensatorio desapareció la visión doble en menos de treinta
minutos. Después de dos días se observó la curación de la lesión herpética de la
córnea, que fue certificado con mucho asombro por el oculista.
Estos resultados deberían alentar a los médicos generalistas a buscar el trabajo
conjunto con oculistas escépticos que creen como en el refrán "el campesino
que no conoce algo, no está dispuesto a comerlo" y adoptan una posición
defensiva no queriendo modificar sus esquemas terapéuticos. La propagación
de estos métodos como por ejemplo la inyección del ganglio ciliar permitiría
ayudar a combatir los sufrimientos de muchos pacientes.
Caso 3: Se trata de una paciente de 70 años, C.E., que padece de una
disminución aguda de la visión y al mismo tiempo de mareos. Consulta a un
oculista pensando que probablemente necesita lentes nuevas. El oculista envía
inmediatamente a la paciente a la clínica universitaria para realizar exámenes
especiales. Allí se diagnostica una fibroplasia central izquierda y una
perforación de la mácula derecha. Se le informa que probablemente perderá
90% de su vista y solamente sería posible en el futuro diferenciar entre claro y
oscuro. Desde el punto de vista de la medicina escolástica no existía ninguna
posibilidad de efectuar un tratamiento. La paciente debería internarse en un
asilo para ciegos. La señora me escribe una carta informándome que de acuerdo
a ese pronóstico su vida no tiene más sentido, prácticamente debe sólo vegetar
en una oscuridad casi absoluta. Ha decidido ingresar a una sociedad (Exit)
donde todos sus miembros esperan morir sin obtener ninguna asistencia médica
que pueda prolongar su vida.
Después de realizar varios tratamientos de TN, especialmente buscando campos de
interferencia que fueran responsables de la sintomatología mencionada. Como no obtuve
ningún resultado positivo, opté por inyectar ocho veces al ganglio ciliar. Después de seis
meses envié a la paciente a un oculista neutral para realizar un control. Con mucha tensión
esperé el resultado de estos exámenes. En el informe pude leer: agudeza visual con
corrección para objetos cercanos y lejanos 1.0, con un comentario lapidario, la terapia ha
ayudado un poco.
La paciente me agradeció regalándome una moneda de oro y con estas palabras: "debo
agradecerle para siempre por su ayuda médica y el apoyo moral que ha permitido dominar
mis trastornos oculares". Después de seis años de haber realizado el tratamiento
mencionado, la paciente a permanecido fiel habiéndola tratado también por
otros trastornos. Los exámenes oftalmológicos han mostrado hasta el presente
una situación estable.
Caso 4: El señor C.B., de 36 años, fue enviado por un amigo dermatólogo para TN. Como
diagnóstico de la clínica universitaria presenta una iridociclitis izquierda después de
enucleación derecha. Sufrió perforación grave de ambos bulbos oculares. Desde 1982
tiene una prótesis de vidrio ocular derecha. Desde 1992 en tratamiento por una
queratoconjuntivitis izquierda. En el diagnóstico diferencial se postuló también
una oftalmia simpática y se aplicó una fuerte dosis de esteroides. A pesar de ello
aparecieron desde 1995 ataques de iridociclitis de tal manera que el señor B
prácticamente podía ver únicamente a través de una niebla densa. Había
comenzado con inyecciones en la región del ojo enucleado a la derecha sin
obtener reacciones subjetivas importantes. Pese a que la enucleación de un ojo
es una contraindicación relativa para efectuar una inyección del ganglio ciliar
del otro lado, decidí aplicar este método en el ojo izquierdo en dos
oportunidades. Inmediatamente se produjo una mejoría de la agudeza visual
que tornó necesaria una nueva corrección de los lentes. No se produjeron más
episodios inflamatorios aunque la turbiedad de la visión no se modificó. Un año
más tarde se decidió realizar una operación de cataratas para superar este
inconveniente. He controlado al paciente hace dieciséis meses y las relaciones
oculares habían permanecido estables.
Procedimiento de la inyección retrobulbar
Estimulación del ganglio ciliar
Otras técnicas de TN
Dr. Hans C. Peyer,
Emmental, Suiza
En la introducción del libro de Peter Dosch sobre la técnica de la TN
encontramos un conocido dicho del soldado de caballería; "Para superar un
obstáculo, pon todo tu corazón sobre el mismo y lánzate tras él", refiriéndose a
la técnica de la TN y especialmente a la aplicación de una inyección como la
mencionada más arriba, que no pertenece a la rutina diaria, donde deberíamos
evitar toda clase de temores y concentrarnos para tener éxito.
Con la inyección del ganglio ciliar debemos tener en cuenta los siguientes
items: 1. Localización del pinchazo; 2. Dirección del pinchazo; 3. Profundidad del
pinchazo, 4. ¿Existe un trastorno de la coagulación? 5. Miedo a la inyección por parte
del paciente que puede desencadenar reacciones psicológicas de aversión.
Es muy importante conocer las relaciones anatómicas para poder aplicar con
éxito una inyección del ganglio ciliar. A continuación me referiré a las
características anatómicas como son presentadas en los libros de Peter Dosch y
Hans Barop. El ganglio ciliar que tiene un tamaño aproximado de 2 milímetros
está ubicado entre el tercio posterior y el tercio medio de la órbita entre el
fascículo óptico y el músculo recto lateral. Por detrás y lateral del ganglio ciliar,
aparece la arteria oftálmica alrededor del nervio óptico que dispone de fibras
simpáticas y parasimpáticas. El componente simpático es responsable de la
nutrición del ojo, de los vasos del ojo, del músculo dilatador de la pupila y de los
músculos tarso y ocular . Las fibras parasimpáticas abastecen al músculo
esfínter de la pupila y al músculo ciliar. Las fibras sensitivas provienen del
nervio nasociliar y corresponden a la primera rama del trigémino y abastecen la
membrana coroidea, iris, cuerpo ciliar y la cornea.
Para evitar producir una herida de los vasos ubicados por detrás del bulbo ocular se utiliza
una aguja de 30 a 35 milímetros de largo. Yo utilizo una cánula de 35 milímetros que se
atornilla a una jeringa especial de uso dental (Karpulenspritzen) donde tenemos la
seguridad absoluta de poder aspirar antes de inyectar. En cada inyección es suficiente
aplicar 0,5 hasta 2 mililitros de procaína 1%. En cantidades mayores puede producirse una
exoftalmia, la que también puede aparecer cuando la lesión de los vasos sanguíneos
permite el desarrollo de un hematoma retrobulbar. De acuerdo a la literatura consultada
puede aparecer un hematoma por cada ochenta inyecciones si fueron realizadas con una
técnica adecuada. Se trata de una hemorragia venosa sin consecuencias, pero que se
desarrolla en pocos minutos. El paciente muestra rápidamente un ojo negro. Por suerte yo
no he vivido esta complicación hasta el presente.
Inmediatamente después de la inyección del ganglio ciliar aparecen los efectos
de la procaína que se mantienen por unos treinta minutos, el tiempo de
resorción del anestésico local. La pupila se dilata hasta mostrar una midriasis,
la visión doble se manifiesta por la parálisis temporal del músculo recto medio
que conduce a un estrabismo hacia fuera. La presión intraocular disminuye por
la interrupción de los impulsos parasimpáticos y simpáticos (disminución de la
producción de líquido en la cámara ocular y aumento de la eliminación del
líquido intraocular).
La cabeza del paciente acostado o sentado, debe fijarse. Con los ojos abiertos la
vista del paciente dirigida hacia arriba y al lado contrario. El paciente debe
evitar movimientos oculares durante la inyección. El terapeuta coloca su dedo
índice con muy poca presión en el párpado inferior y desplaza el bulbo ocular
hacia el medio y hacia arriba. El pinchazo se realiza en el borde inferior de la
órbita en posición hora 07.00 a la derecha, en hora 05.00 a la izquierda. La
dirección del pinchazo es sagital con una muy pequeña desviación hacia el suelo
de la órbita por debajo del bulbo ocular.
Después de unos dos centímetros, al tomar contacto con el hueso, se retrocede
la jeringa y se procede a elevar un poco la punta de la aguja y se avanzará
todavía un centímetro en dirección de la parte posterior de la órbita. Después
de aspirar cuidadosamente, se realiza muy lentamente la infiltración.
Para tener en cuenta: 1. Después de la inyección: midriasis, exoftalmia, parálisis
ocular (pasajera); 2. Hematoma retrobulbar (venoso o arterial); 3. Muy
importante: (derecha hora 07,00, izquierda hora 05.00); 4.Dirección del
pinchazo, profundidad del pinchazo (máximo 35 milímetros)
Pregunta
Dr Pablo
Koval,
Argentina
, 12/2/03
Estimado Dr Hans Peyer: En referencia a su articulo sobre
inyección ciliar para enfermedades oculares quisiera hacerle
algunas preguntas: 1) porqué un ojo enucleado es una
contraindicación relativa para la inyección retrobulbar; 2) su
experiencia con dolor post cirugía del ojo;
contraindicaciones, etc.; 3) si tiene experiencia con agujas
más cortas (2.5 cm) con el objeto de evitar el daño de vasos
oculares y dejando a la procaína bañar el ganglio ciliar por
acción gravitatoria (con el paciente en decúbito dorsal); 4)
trastornos oculares que pueden tratarse con este abordaje.
Gracias por su atención. Su artículo es muy importante por el
temor que existe acerca de esta inyección.
Respuesta 1
Hans C.
Peyer,
Emmental,
Suiza,
Estimado colega: he recibido su mail y soy muy feliz que se
interesa de este papel sobre la terápia neural del ganglio
ciliar. En mi clínica la inyección retrobulbar es practicada
casi cada día y tengo una gran experiencia. Muchas veces
tiene que repetir hasta diez veces, pero es un procedimiento
23/2/03relativamente indoloro y los pacientes son muy agradecidos.
Respondo sus preguntas: 1) después de un enucleation se
puede hablar de un riesgo minimal por un daño como un
hemoragia por el ojo restante. Pero con la terapia adecuada
es realmente minimal; 2) después de un intervención ocular
espero los resultados de la cura de la herida, más tarde los
resultados de la inyección por un neuralgia son buenos; 3) la
aguja de 2.5 cm no es suficiente largo, es mejor de utilizar
3.5 cm; 4) todos los trastornos del ojo pueden ser tratados
para esta inyección. No tenga miedo de practicar. Muchos
saludos.
Respuesta 2
Dr Andrés
Peralta,
Argentina,
10/11/03.
Dr Koval, con respecto a su pregunta sobre la inyección del
ganglio ciliar realizada al Dr. Hans Peyer utilizando una
aguja más corta como la que tenemos en Argentina de 25
mm de largo y dejar al paciente en decúbito dorsal, puedo
comentarle mi experiencia al respecto. He realizado esta
técnica en varias oportunidades con dicha aguja observando
en todos los casos la reacción esperada (midriasis,
exoftalmia, parálisis) y sobretodo el beneficio de la misma.
También en dos oportunidades, con pacientes ya
acostumbrados a que se la coloque, hice una comparación
con aguja de 40 mm pero tuve que estar doblemente atento
para no pasarme de largo ante un posible movimiento del
paciente. Honestamente prefiero hacerlo con la aguja de 25
mm que es un poco más fina y presionar un poco para
profundizar ganando asi unos 3 mm, con lo que se llega a los
28 mm aproximadamente, colocar de 1 a 1,5 ml de procaína
1% y dejar al paciente 10 minutos en decúbito dorsal.
Saludos.
Nota del Dr
Koval,
Tras la inyección es conveniente hacer ligera presión sobre el
globo ocular con un apósito, con el párpado cerrado, con dos
objetivos: distribuir mejor el neuralterapéutico y reducir la
posibilidad de sangrado.
15/11/03
INYECCION EN TIROIDES.
Tiroides - Próstata - Hígado
¿Inyección perivisceral,intraparenquimatosa, plexual o
aplicación segmentaria de pápulas?
Página de inicio
Otras técnicas de TN
Intercambio de opiniones publicado en la página web terapianeural.com
Pregunta
Estimulación
intra-
parénquimatos
a vs.
estimulación
del plexo
regional
Dr Pablo Koval,
Bs.As.,
Argentina,
16/6/03
Por qué razón se recomienda la inyección
intraparenquimatosa del tiroides o de la próstata y para otros
órganos se insiste en la importancia de la estimulación del
plexo nervioso regional?
Con el criterio intraparénquimatoso debería aconsejarse la
inyección intrahepática o intrarenal. Según mi evaluación, la
inyección intraparénquimatosa es muy localizada y no abarca
la inervación total de la glándula. Además supongo que se está
causando una lesión innecesaria. En el caso de un tiroides
quístico o tumoral donde hay un cirujano dando vueltas y un
paciente que no puede tomar una decisión por razones obvias,
la inyección intraparénquimatosa significa entrar en un
terreno que puede conducir a un problema médico-legal.
La inervación que tiene el tiroides permite estimularlo
infiltrando superficialmente la glándula sin entrar en ella. De
hecho, con este tratamiento (6 aplicaciones) he logrado que
una paciente hipotiroidea suplementada con tiroxina durante
2 años, recuperara la función glandular autónoma.
Lo mismo es aplicable a la próstata que puede tratarse con un
bloqueo caudal.
Respuesta 1
Aplicación
perivisceral
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
18/6/03
Estimado Pablo, yo también soy partidario de las aplicaciones
en el sistema nervioso perivisceral, en lugar de las
intraparenquimatosas. Uno de los objetivos principales de la
TN es la aplicación del anestésico local en el Sistema
Nervioso, y a nivel parenquimatoso éste se encuentra en
menor proporción que alrededor del órgano. También es
cierto que lesionamos menos.
La mayoría de las veces, en TN cuando decimos aplicación en
un órgano, nos referimos a su perifería. Aunque en ciertos
libros insisten en la aplicación intraparenquimatosa, en
ocasiones es una cuestión terminológica.
En cuanto a las afecciones de tiroides, podría decir que la TN
en éste órgano suele ser muy agradecida. Son múltiples las
personas que han podido reducir o suprimir el tratamiento con
tiroxina.
Precisamente suelo poner como ejemplo del efecto regulador
de la TN a las afecciones tiroideas. La aplicación en tiroides
puede ir muy bien (normalizar la función tiroidea) tanto a una
persona con hipertiroidismo como a otra con hipotiroidismo.
En casos de nódulos hiperfuncionantes, hay pacientes que
buscan alternativas al tratamiento con yodo radioactivo o a la
intervención. También en estos casos podemos hablar de la
desaparición de los nódulos y de la regulación del tiroides, a
veces, sin mezclar otros tratamientos.
En fin, recordemos la visión holística de la TN. Y aunque es
muy frecuente la aplicación tiroidea en afecciones de este
órgano, debemos historiar bien a la persona y tratar en
consecuencia.
Respuesta 2
Aplicación
periprostática.
Aplicación
peritiroidea.
Dr Julio C.
Payán,
Popayán,
Colombia,
28/6/03
Estimado amigo: Ud. tiene toda la razón, en el caso de la
próstata hace algún tiempo que no entramos a la glándula
sino que aplicamos la periprostática y la mejor vía es la
perineal.
En el caso de tiroides yo tampoco busco la intraglandular,
prefiero la periglandular, aunque de verdad a veces veo
que la intra produce efectos que no da la peri, esto puede
ser porque la glándula de todas maneras tiene alguna
inervación intra, pero uno va probando.
Es que en T.N. el problema no es sólo de técnicas ya que si
el paciente no necesita una próstata sino una cicatriz, por
más que uno se esmere en la técnica la cosa no resulta. Al
fin y al cabo la TN es también un acto creativo.
Yo realmente le tengo que decir que no trato enfermos de
tiroides o de próstata ya que es volver al reduccionismo
que tanto problema y medias verdades ha producido. Me
alegro de sus aciertos con la enferma que relata, pero
tenga en cuenta que también, de pronto, otra lo que
requiere es un troncal u otro lugar de aplicación.
Noto en Ud. una gran capacidad de estudio, de
observación y de deseo de adentrarse en este mundo
confuso, milagroso y misterioso de la T.N., eso me alegra
mucho, por eso me permito adjuntarle el trabajito que
llevo al próximo Encuentro Mundial, ojala le sea de
utilidad. Mire, mi querido Pablo: cada vez me maravillo
más ante la fuerza de un paciente que se cura, o que no se
cura, cada vez de verdad, entiendo menos lo que ocurre no
sólo en el enfermo, sino en el significado de la vida misma.
No sólo es la teoría nerval, también hay fenómenos
cuánticos, como los condensados de Bosse Einstein, que
pueden tener lugar en los microtúbulos, están también
implicados los cristales de procaina que creo actuan como
cristales líquidos o semi-cristales, están implicados todos
los mecanismos de plasticidad neural y los procesos
cibernéticos. En fin, hay todo un mundo misterioso que
hace imposible cualquier tipo de reduccionismo. Tampoco
puedo desconocer la teleología de la "Jodida vida", que uno
desconoce. En fín, creo que somos unos ignorantes
ilustrados, bendita sea la vida que todos los días nos
muestra sus sutilezas y sus maravillas con cada enfermo/a
que nos pone en el camino. Gracias por su confianza. Me
alegro que me cuente sus dudas y me alegro poder
aumentar su confusión. Un abrazo.
Respuesta 3
Aplicación
plexual
regional
Dr. Alvaro
Zambrano,
Venezuela,
3/7/03.
Pues bien, Dr. Koval, yo me he hecho las mismas preguntas y
las he analizado con mi profesor de Terapia Neural y amigo el
Dr. Freddy Montaño, llegando a las mismas conclusiones que
ud. Hemos asistido a multiples reuniones en mi pais y la
respuesta siempre es la misma, probablemente en este
Congreso Mundial a realizarse en Bogota puedan aclararse
estas dudas.
Pregunta
Aplicación
intrahepática
Dr Agustin
Callahuara,
De tratarse una enfermedad de higado, de causa idiopatica, y
ser al mismo tiempo considerado como campo interferente,
debe ser inyectado este organo y otros o simplemente alcanza
con tratar el segmento, me gustaria conocer opiniones y
controversias que serian de beneficio para todos. Saludos a
todos.
Bs.As,
Argentina,
16/7/03
Respuesta
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
16/7/03
En TN no inyectamos en el interior del hígado, pues la
finalidad es el propio sistema nervioso. Por eso, en caso de
creerlo conveniente, nos dirigimos al ganglio celíaco
(ganglio nervioso que controla la inervación de la mayoría
de órganos abdominales). En muchas ocasiones sirve
empezar con pápulas en la piel del segmento de hígado,
aunque debemos recordar la visión integral.
Caso clínico: síntomas digestivos + cefalea. Me
acuerdo de un señor con síntomas digestivos y dolores de
cabeza, que mejoró de ambas molestias inyectando en el
supraorbitario derecho. Los dolores de cabeza podrían ser
de origen hepático, pero en este caso mejoró
completamente sin aplicar directamente en el segmento de
hígado. Podríamos haber hecho al revés, inyectar en el
segmento de hígado. Quizás también hubiera mejorado de
todo. En fin, en el organismo todo son zonas reflejas.
En caso de campo interferente, creo que se hace más
indispensable aplicar en la zona específica, aunque
supongo que no siempre, depende. Saludos.
Pregunta
Pápulas vs.
intra-
parénquima
Dr. Carlos
Tradicionalmente a uno en TN sólo se le viene a la mente, al
hablar de inyección de órganos, la próstata o tiroides
básicamente. No se inyecta corazón, hígado, riñón, testículo,
ovarios, colon, etc.
Montenegro
S.,Cartagena,
Colombia,
11/10/03
Por ejemplo en una sintomatología respiratoria no se nos
ocurre inyectar pleura o parénquima pulmonar, nos vamos al
segmento o mucho mejor a campos de interferencia u
irritaciones encontrada en la HC : cicatrices, interferencias
regionales o distantes, cavidad oral, etc. no se nos pasa por la
mente que el segmento de respiratorio debe incluir ir
directamente a la inervación perivisceral del pulmón, ya que
de hecho esto no creo que nadie lo haga.
Ahora mi pregunta para el foro es : Porque como con el
ejemplo del pulmón no hacemos un segmento próstatico con
pápulas únicamente infraumbilicales y perineales además
de agotar las interferencias que tenga el paciente? o un
segmento en piel del área tiroidea? . Gracias.
INYECCION EN PROSTATA
Tiroides - Próstata - Hígado
¿Inyección perivisceral,intraparenquimatosa, plexual o
aplicación segmentaria de pápulas?
Página de inicio
Otras técnicas de TN
Intercambio de opiniones publicado en la página web terapianeural.com
Pregunta
Estimulación
intra-
parénquimatos
a vs.
estimulación
del plexo
Por qué razón se recomienda la inyección
intraparenquimatosa del tiroides o de la próstata y para otros
órganos se insiste en la importancia de la estimulación del
plexo nervioso regional?
Con el criterio intraparénquimatoso debería aconsejarse la
inyección intrahepática o intrarenal. Según mi evaluación, la
inyección intraparénquimatosa es muy localizada y no abarca
regional
Dr Pablo Koval,
Bs.As.,
Argentina,
16/6/03
la inervación total de la glándula. Además supongo que se está
causando una lesión innecesaria. En el caso de un tiroides
quístico o tumoral donde hay un cirujano dando vueltas y un
paciente que no puede tomar una decisión por razones obvias,
la inyección intraparénquimatosa significa entrar en un
terreno que puede conducir a un problema médico-legal.
La inervación que tiene el tiroides permite estimularlo
infiltrando superficialmente la glándula sin entrar en ella. De
hecho, con este tratamiento (6 aplicaciones) he logrado que
una paciente hipotiroidea suplementada con tiroxina durante
2 años, recuperara la función glandular autónoma.
Lo mismo es aplicable a la próstata que puede tratarse con un
bloqueo caudal.
Respuesta 1
Aplicación
perivisceral
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
18/6/03
Estimado Pablo, yo también soy partidario de las aplicaciones
en el sistema nervioso perivisceral, en lugar de las
intraparenquimatosas. Uno de los objetivos principales de la
TN es la aplicación del anestésico local en el Sistema
Nervioso, y a nivel parenquimatoso éste se encuentra en
menor proporción que alrededor del órgano. También es
cierto que lesionamos menos.
La mayoría de las veces, en TN cuando decimos aplicación en
un órgano, nos referimos a su perifería. Aunque en ciertos
libros insisten en la aplicación intraparenquimatosa, en
ocasiones es una cuestión terminológica.
En cuanto a las afecciones de tiroides, podría decir que la TN
en éste órgano suele ser muy agradecida. Son múltiples las
personas que han podido reducir o suprimir el tratamiento con
tiroxina.
Precisamente suelo poner como ejemplo del efecto regulador
de la TN a las afecciones tiroideas. La aplicación en tiroides
puede ir muy bien (normalizar la función tiroidea) tanto a una
persona con hipertiroidismo como a otra con hipotiroidismo.
En casos de nódulos hiperfuncionantes, hay pacientes que
buscan alternativas al tratamiento con yodo radioactivo o a la
intervención. También en estos casos podemos hablar de la
desaparición de los nódulos y de la regulación del tiroides, a
veces, sin mezclar otros tratamientos.
En fin, recordemos la visión holística de la TN. Y aunque es
muy frecuente la aplicación tiroidea en afecciones de este
órgano, debemos historiar bien a la persona y tratar en
consecuencia.
Respuesta 2
Aplicación
periprostática.
Aplicación
peritiroidea.
Dr Julio C.
Payán,
Popayán,
Colombia,
28/6/03
Estimado amigo: Ud. tiene toda la razón, en el caso de la
próstata hace algún tiempo que no entramos a la glándula
sino que aplicamos la periprostática y la mejor vía es la
perineal.
En el caso de tiroides yo tampoco busco la intraglandular,
prefiero la periglandular, aunque de verdad a veces veo
que la intra produce efectos que no da la peri, esto puede
ser porque la glándula de todas maneras tiene alguna
inervación intra, pero uno va probando.
Es que en T.N. el problema no es sólo de técnicas ya que si
el paciente no necesita una próstata sino una cicatriz, por
más que uno se esmere en la técnica la cosa no resulta. Al
fin y al cabo la TN es también un acto creativo.
Yo realmente le tengo que decir que no trato enfermos de
tiroides o de próstata ya que es volver al reduccionismo
que tanto problema y medias verdades ha producido. Me
alegro de sus aciertos con la enferma que relata, pero
tenga en cuenta que también, de pronto, otra lo que
requiere es un troncal u otro lugar de aplicación.
Noto en Ud. una gran capacidad de estudio, de
observación y de deseo de adentrarse en este mundo
confuso, milagroso y misterioso de la T.N., eso me alegra
mucho, por eso me permito adjuntarle el trabajito que
llevo al próximo Encuentro Mundial, ojala le sea de
utilidad. Mire, mi querido Pablo: cada vez me maravillo
más ante la fuerza de un paciente que se cura, o que no se
cura, cada vez de verdad, entiendo menos lo que ocurre no
sólo en el enfermo, sino en el significado de la vida misma.
No sólo es la teoría nerval, también hay fenómenos
cuánticos, como los condensados de Bosse Einstein, que
pueden tener lugar en los microtúbulos, están también
implicados los cristales de procaina que creo actuan como
cristales líquidos o semi-cristales, están implicados todos
los mecanismos de plasticidad neural y los procesos
cibernéticos. En fin, hay todo un mundo misterioso que
hace imposible cualquier tipo de reduccionismo. Tampoco
puedo desconocer la teleología de la "Jodida vida", que uno
desconoce. En fín, creo que somos unos ignorantes
ilustrados, bendita sea la vida que todos los días nos
muestra sus sutilezas y sus maravillas con cada enfermo/a
que nos pone en el camino. Gracias por su confianza. Me
alegro que me cuente sus dudas y me alegro poder
aumentar su confusión. Un abrazo.
Respuesta 3
Aplicación
plexual
regional
Dr. Alvaro
Zambrano,
Venezuela,
3/7/03.
Pues bien, Dr. Koval, yo me he hecho las mismas preguntas y
las he analizado con mi profesor de Terapia Neural y amigo el
Dr. Freddy Montaño, llegando a las mismas conclusiones que
ud. Hemos asistido a multiples reuniones en mi pais y la
respuesta siempre es la misma, probablemente en este
Congreso Mundial a realizarse en Bogota puedan aclararse
estas dudas.
Pregunta
Aplicación
intrahepática
Dr Agustin
Callahuara,
Bs.As,
Argentina,
16/7/03
De tratarse una enfermedad de higado, de causa idiopatica, y
ser al mismo tiempo considerado como campo interferente,
debe ser inyectado este organo y otros o simplemente alcanza
con tratar el segmento, me gustaria conocer opiniones y
controversias que serian de beneficio para todos. Saludos a
todos.
Respuesta
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
16/7/03
En TN no inyectamos en el interior del hígado, pues la
finalidad es el propio sistema nervioso. Por eso, en caso de
creerlo conveniente, nos dirigimos al ganglio celíaco
(ganglio nervioso que controla la inervación de la mayoría
de órganos abdominales). En muchas ocasiones sirve
empezar con pápulas en la piel del segmento de hígado,
aunque debemos recordar la visión integral.
Caso clínico: síntomas digestivos + cefalea. Me
acuerdo de un señor con síntomas digestivos y dolores de
cabeza, que mejoró de ambas molestias inyectando en el
supraorbitario derecho. Los dolores de cabeza podrían ser
de origen hepático, pero en este caso mejoró
completamente sin aplicar directamente en el segmento de
hígado. Podríamos haber hecho al revés, inyectar en el
segmento de hígado. Quizás también hubiera mejorado de
todo. En fin, en el organismo todo son zonas reflejas.
En caso de campo interferente, creo que se hace más
indispensable aplicar en la zona específica, aunque
supongo que no siempre, depende. Saludos.
Pregunta
Pápulas vs.
intra-
parénquima
Dr. Carlos
Montenegro
S.,Cartagena,
Colombia,
11/10/03
Tradicionalmente a uno en TN sólo se le viene a la mente, al
hablar de inyección de órganos, la próstata o tiroides
básicamente. No se inyecta corazón, hígado, riñón, testículo,
ovarios, colon, etc.
Por ejemplo en una sintomatología respiratoria no se nos
ocurre inyectar pleura o parénquima pulmonar, nos vamos al
segmento o mucho mejor a campos de interferencia u
irritaciones encontrada en la HC : cicatrices, interferencias
regionales o distantes, cavidad oral, etc. no se nos pasa por la
mente que el segmento de respiratorio debe incluir ir
directamente a la inervación perivisceral del pulmón, ya que
de hecho esto no creo que nadie lo haga.
Ahora mi pregunta para el foro es : Porque como con el
ejemplo del pulmón no hacemos un segmento próstatico con
pápulas únicamente infraumbilicales y perineales además
de agotar las interferencias que tenga el paciente? o un
segmento en piel del área tiroidea? . Gracias.
INYECCION INTRAHEPATICA
Tiroides - Próstata - Hígado
¿Inyección perivisceral,intraparenquimatosa, plexual o
aplicación segmentaria de pápulas?
Página de inicio
Otras técnicas de TN
Intercambio de opiniones publicado en la página web terapianeural.com
Por qué razón se recomienda la inyección
Pregunta
Estimulación
intra-
parénquimatos
a vs.
estimulación
del plexo
regional
Dr Pablo Koval,
Bs.As.,
Argentina,
16/6/03
intraparenquimatosa del tiroides o de la próstata y para otros
órganos se insiste en la importancia de la estimulación del
plexo nervioso regional?
Con el criterio intraparénquimatoso debería aconsejarse la
inyección intrahepática o intrarenal. Según mi evaluación, la
inyección intraparénquimatosa es muy localizada y no abarca
la inervación total de la glándula. Además supongo que se está
causando una lesión innecesaria. En el caso de un tiroides
quístico o tumoral donde hay un cirujano dando vueltas y un
paciente que no puede tomar una decisión por razones obvias,
la inyección intraparénquimatosa significa entrar en un
terreno que puede conducir a un problema médico-legal.
La inervación que tiene el tiroides permite estimularlo
infiltrando superficialmente la glándula sin entrar en ella. De
hecho, con este tratamiento (6 aplicaciones) he logrado que
una paciente hipotiroidea suplementada con tiroxina durante
2 años, recuperara la función glandular autónoma.
Lo mismo es aplicable a la próstata que puede tratarse con un
bloqueo caudal.
Respuesta 1
Aplicación
perivisceral
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
18/6/03
Estimado Pablo, yo también soy partidario de las aplicaciones
en el sistema nervioso perivisceral, en lugar de las
intraparenquimatosas. Uno de los objetivos principales de la
TN es la aplicación del anestésico local en el Sistema
Nervioso, y a nivel parenquimatoso éste se encuentra en
menor proporción que alrededor del órgano. También es
cierto que lesionamos menos.
La mayoría de las veces, en TN cuando decimos aplicación en
un órgano, nos referimos a su perifería. Aunque en ciertos
libros insisten en la aplicación intraparenquimatosa, en
ocasiones es una cuestión terminológica.
En cuanto a las afecciones de tiroides, podría decir que la TN
en éste órgano suele ser muy agradecida. Son múltiples las
personas que han podido reducir o suprimir el tratamiento con
tiroxina.
Precisamente suelo poner como ejemplo del efecto regulador
de la TN a las afecciones tiroideas. La aplicación en tiroides
puede ir muy bien (normalizar la función tiroidea) tanto a una
persona con hipertiroidismo como a otra con hipotiroidismo.
En casos de nódulos hiperfuncionantes, hay pacientes que
buscan alternativas al tratamiento con yodo radioactivo o a la
intervención. También en estos casos podemos hablar de la
desaparición de los nódulos y de la regulación del tiroides, a
veces, sin mezclar otros tratamientos.
En fin, recordemos la visión holística de la TN. Y aunque es
muy frecuente la aplicación tiroidea en afecciones de este
órgano, debemos historiar bien a la persona y tratar en
consecuencia.
Respuesta 2
Aplicación
periprostática.
Aplicación
peritiroidea.
Dr Julio C.
Payán,
Popayán,
Colombia,
28/6/03
Estimado amigo: Ud. tiene toda la razón, en el caso de la
próstata hace algún tiempo que no entramos a la glándula
sino que aplicamos la periprostática y la mejor vía es la
perineal.
En el caso de tiroides yo tampoco busco la intraglandular,
prefiero la periglandular, aunque de verdad a veces veo
que la intra produce efectos que no da la peri, esto puede
ser porque la glándula de todas maneras tiene alguna
inervación intra, pero uno va probando.
Es que en T.N. el problema no es sólo de técnicas ya que si
el paciente no necesita una próstata sino una cicatriz, por
más que uno se esmere en la técnica la cosa no resulta. Al
fin y al cabo la TN es también un acto creativo.
Yo realmente le tengo que decir que no trato enfermos de
tiroides o de próstata ya que es volver al reduccionismo
que tanto problema y medias verdades ha producido. Me
alegro de sus aciertos con la enferma que relata, pero
tenga en cuenta que también, de pronto, otra lo que
requiere es un troncal u otro lugar de aplicación.
Noto en Ud. una gran capacidad de estudio, de
observación y de deseo de adentrarse en este mundo
confuso, milagroso y misterioso de la T.N., eso me alegra
mucho, por eso me permito adjuntarle el trabajito que
llevo al próximo Encuentro Mundial, ojala le sea de
utilidad. Mire, mi querido Pablo: cada vez me maravillo
más ante la fuerza de un paciente que se cura, o que no se
cura, cada vez de verdad, entiendo menos lo que ocurre no
sólo en el enfermo, sino en el significado de la vida misma.
No sólo es la teoría nerval, también hay fenómenos
cuánticos, como los condensados de Bosse Einstein, que
pueden tener lugar en los microtúbulos, están también
implicados los cristales de procaina que creo actuan como
cristales líquidos o semi-cristales, están implicados todos
los mecanismos de plasticidad neural y los procesos
cibernéticos. En fin, hay todo un mundo misterioso que
hace imposible cualquier tipo de reduccionismo. Tampoco
puedo desconocer la teleología de la "Jodida vida", que uno
desconoce. En fín, creo que somos unos ignorantes
ilustrados, bendita sea la vida que todos los días nos
muestra sus sutilezas y sus maravillas con cada enfermo/a
que nos pone en el camino. Gracias por su confianza. Me
alegro que me cuente sus dudas y me alegro poder
aumentar su confusión. Un abrazo.
Respuesta 3
Aplicación
plexual
regional
Pues bien, Dr. Koval, yo me he hecho las mismas preguntas y
las he analizado con mi profesor de Terapia Neural y amigo el
Dr. Freddy Montaño, llegando a las mismas conclusiones que
ud. Hemos asistido a multiples reuniones en mi pais y la
respuesta siempre es la misma, probablemente en este
Dr. Alvaro
Zambrano,
Venezuela,
3/7/03.
Congreso Mundial a realizarse en Bogota puedan aclararse
estas dudas.
Pregunta
Aplicación
intrahepática
Dr Agustin
Callahuara,
Bs.As,
Argentina,
16/7/03
De tratarse una enfermedad de higado, de causa idiopatica, y
ser al mismo tiempo considerado como campo interferente,
debe ser inyectado este organo y otros o simplemente alcanza
con tratar el segmento, me gustaria conocer opiniones y
controversias que serian de beneficio para todos. Saludos a
todos.
Respuesta
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
16/7/03
En TN no inyectamos en el interior del hígado, pues la
finalidad es el propio sistema nervioso. Por eso, en caso de
creerlo conveniente, nos dirigimos al ganglio celíaco
(ganglio nervioso que controla la inervación de la mayoría
de órganos abdominales). En muchas ocasiones sirve
empezar con pápulas en la piel del segmento de hígado,
aunque debemos recordar la visión integral.
Caso clínico: síntomas digestivos + cefalea. Me
acuerdo de un señor con síntomas digestivos y dolores de
cabeza, que mejoró de ambas molestias inyectando en el
supraorbitario derecho. Los dolores de cabeza podrían ser
de origen hepático, pero en este caso mejoró
completamente sin aplicar directamente en el segmento de
hígado. Podríamos haber hecho al revés, inyectar en el
segmento de hígado. Quizás también hubiera mejorado de
todo. En fin, en el organismo todo son zonas reflejas.
En caso de campo interferente, creo que se hace más
indispensable aplicar en la zona específica, aunque
supongo que no siempre, depende. Saludos.
Pregunta
Pápulas vs.
intra-
parénquima
Dr. Carlos
Montenegro
S.,Cartagena,
Colombia,
11/10/03
Tradicionalmente a uno en TN sólo se le viene a la mente, al
hablar de inyección de órganos, la próstata o tiroides
básicamente. No se inyecta corazón, hígado, riñón, testículo,
ovarios, colon, etc.
Por ejemplo en una sintomatología respiratoria no se nos
ocurre inyectar pleura o parénquima pulmonar, nos vamos al
segmento o mucho mejor a campos de interferencia u
irritaciones encontrada en la HC : cicatrices, interferencias
regionales o distantes, cavidad oral, etc. no se nos pasa por la
mente que el segmento de respiratorio debe incluir ir
directamente a la inervación perivisceral del pulmón, ya que
de hecho esto no creo que nadie lo haga.
Ahora mi pregunta para el foro es : Porque como con el
ejemplo del pulmón no hacemos un segmento próstatico con
pápulas únicamente infraumbilicales y perineales además
de agotar las interferencias que tenga el paciente? o un
segmento en piel del área tiroidea? . Gracias.
PAPULAS VS PARENQUIMA
Tiroides - Próstata - Hígado
¿Inyección perivisceral,intraparenquimatosa, plexual o
aplicación segmentaria de pápulas?
Página de inicio
Otras técnicas de TN
Intercambio de opiniones publicado en la página web terapianeural.com
Pregunta
Estimulación
intra-
parénquimatos
a vs.
estimulación
del plexo
regional
Dr Pablo Koval,
Bs.As.,
Argentina,
16/6/03
Por qué razón se recomienda la inyección
intraparenquimatosa del tiroides o de la próstata y para otros
órganos se insiste en la importancia de la estimulación del
plexo nervioso regional?
Con el criterio intraparénquimatoso debería aconsejarse la
inyección intrahepática o intrarenal. Según mi evaluación, la
inyección intraparénquimatosa es muy localizada y no abarca
la inervación total de la glándula. Además supongo que se está
causando una lesión innecesaria. En el caso de un tiroides
quístico o tumoral donde hay un cirujano dando vueltas y un
paciente que no puede tomar una decisión por razones obvias,
la inyección intraparénquimatosa significa entrar en un
terreno que puede conducir a un problema médico-legal.
La inervación que tiene el tiroides permite estimularlo
infiltrando superficialmente la glándula sin entrar en ella. De
hecho, con este tratamiento (6 aplicaciones) he logrado que
una paciente hipotiroidea suplementada con tiroxina durante
2 años, recuperara la función glandular autónoma.
Lo mismo es aplicable a la próstata que puede tratarse con un
bloqueo caudal.
Respuesta 1
Aplicación
perivisceral
Estimado Pablo, yo también soy partidario de las aplicaciones
en el sistema nervioso perivisceral, en lugar de las
intraparenquimatosas. Uno de los objetivos principales de la
TN es la aplicación del anestésico local en el Sistema
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
18/6/03
Nervioso, y a nivel parenquimatoso éste se encuentra en
menor proporción que alrededor del órgano. También es
cierto que lesionamos menos.
La mayoría de las veces, en TN cuando decimos aplicación en
un órgano, nos referimos a su perifería. Aunque en ciertos
libros insisten en la aplicación intraparenquimatosa, en
ocasiones es una cuestión terminológica.
En cuanto a las afecciones de tiroides, podría decir que la TN
en éste órgano suele ser muy agradecida. Son múltiples las
personas que han podido reducir o suprimir el tratamiento con
tiroxina.
Precisamente suelo poner como ejemplo del efecto regulador
de la TN a las afecciones tiroideas. La aplicación en tiroides
puede ir muy bien (normalizar la función tiroidea) tanto a una
persona con hipertiroidismo como a otra con hipotiroidismo.
En casos de nódulos hiperfuncionantes, hay pacientes que
buscan alternativas al tratamiento con yodo radioactivo o a la
intervención. También en estos casos podemos hablar de la
desaparición de los nódulos y de la regulación del tiroides, a
veces, sin mezclar otros tratamientos.
En fin, recordemos la visión holística de la TN. Y aunque es
muy frecuente la aplicación tiroidea en afecciones de este
órgano, debemos historiar bien a la persona y tratar en
consecuencia.
Respuesta 2
Aplicación
periprostática.
Aplicación
peritiroidea.
Estimado amigo: Ud. tiene toda la razón, en el caso de la
próstata hace algún tiempo que no entramos a la glándula
sino que aplicamos la periprostática y la mejor vía es la
perineal.
En el caso de tiroides yo tampoco busco la intraglandular,
prefiero la periglandular, aunque de verdad a veces veo
Dr Julio C.
Payán,
Popayán,
Colombia,
28/6/03
que la intra produce efectos que no da la peri, esto puede
ser porque la glándula de todas maneras tiene alguna
inervación intra, pero uno va probando.
Es que en T.N. el problema no es sólo de técnicas ya que si
el paciente no necesita una próstata sino una cicatriz, por
más que uno se esmere en la técnica la cosa no resulta. Al
fin y al cabo la TN es también un acto creativo.
Yo realmente le tengo que decir que no trato enfermos de
tiroides o de próstata ya que es volver al reduccionismo
que tanto problema y medias verdades ha producido. Me
alegro de sus aciertos con la enferma que relata, pero
tenga en cuenta que también, de pronto, otra lo que
requiere es un troncal u otro lugar de aplicación.
Noto en Ud. una gran capacidad de estudio, de
observación y de deseo de adentrarse en este mundo
confuso, milagroso y misterioso de la T.N., eso me alegra
mucho, por eso me permito adjuntarle el trabajito que
llevo al próximo Encuentro Mundial, ojala le sea de
utilidad. Mire, mi querido Pablo: cada vez me maravillo
más ante la fuerza de un paciente que se cura, o que no se
cura, cada vez de verdad, entiendo menos lo que ocurre no
sólo en el enfermo, sino en el significado de la vida misma.
No sólo es la teoría nerval, también hay fenómenos
cuánticos, como los condensados de Bosse Einstein, que
pueden tener lugar en los microtúbulos, están también
implicados los cristales de procaina que creo actuan como
cristales líquidos o semi-cristales, están implicados todos
los mecanismos de plasticidad neural y los procesos
cibernéticos. En fin, hay todo un mundo misterioso que
hace imposible cualquier tipo de reduccionismo. Tampoco
puedo desconocer la teleología de la "Jodida vida", que uno
desconoce. En fín, creo que somos unos ignorantes
ilustrados, bendita sea la vida que todos los días nos
muestra sus sutilezas y sus maravillas con cada enfermo/a
que nos pone en el camino. Gracias por su confianza. Me
alegro que me cuente sus dudas y me alegro poder
aumentar su confusión. Un abrazo.
Respuesta 3
Aplicación
plexual
regional
Dr. Alvaro
Zambrano,
Venezuela,
3/7/03.
Pues bien, Dr. Koval, yo me he hecho las mismas preguntas y
las he analizado con mi profesor de Terapia Neural y amigo el
Dr. Freddy Montaño, llegando a las mismas conclusiones que
ud. Hemos asistido a multiples reuniones en mi pais y la
respuesta siempre es la misma, probablemente en este
Congreso Mundial a realizarse en Bogota puedan aclararse
estas dudas.
Pregunta
Aplicación
intrahepática
Dr Agustin
Callahuara,
Bs.As,
Argentina,
16/7/03
De tratarse una enfermedad de higado, de causa idiopatica, y
ser al mismo tiempo considerado como campo interferente,
debe ser inyectado este organo y otros o simplemente alcanza
con tratar el segmento, me gustaria conocer opiniones y
controversias que serian de beneficio para todos. Saludos a
todos.
Respuesta
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
En TN no inyectamos en el interior del hígado, pues la
finalidad es el propio sistema nervioso. Por eso, en caso de
creerlo conveniente, nos dirigimos al ganglio celíaco
(ganglio nervioso que controla la inervación de la mayoría
de órganos abdominales). En muchas ocasiones sirve
España,
16/7/03
empezar con pápulas en la piel del segmento de hígado,
aunque debemos recordar la visión integral.
Caso clínico: síntomas digestivos + cefalea. Me
acuerdo de un señor con síntomas digestivos y dolores de
cabeza, que mejoró de ambas molestias inyectando en el
supraorbitario derecho. Los dolores de cabeza podrían ser
de origen hepático, pero en este caso mejoró
completamente sin aplicar directamente en el segmento de
hígado. Podríamos haber hecho al revés, inyectar en el
segmento de hígado. Quizás también hubiera mejorado de
todo. En fin, en el organismo todo son zonas reflejas.
En caso de campo interferente, creo que se hace más
indispensable aplicar en la zona específica, aunque
supongo que no siempre, depende. Saludos.
Pregunta
Pápulas vs.
intra-
parénquima
Dr. Carlos
Montenegro
S.,Cartagena,
Colombia,
11/10/03
Tradicionalmente a uno en TN sólo se le viene a la mente, al
hablar de inyección de órganos, la próstata o tiroides
básicamente. No se inyecta corazón, hígado, riñón, testículo,
ovarios, colon, etc.
Por ejemplo en una sintomatología respiratoria no se nos
ocurre inyectar pleura o parénquima pulmonar, nos vamos al
segmento o mucho mejor a campos de interferencia u
irritaciones encontrada en la HC : cicatrices, interferencias
regionales o distantes, cavidad oral, etc. no se nos pasa por la
mente que el segmento de respiratorio debe incluir ir
directamente a la inervación perivisceral del pulmón, ya que
de hecho esto no creo que nadie lo haga.
Ahora mi pregunta para el foro es : Porque como con el
ejemplo del pulmón no hacemos un segmento próstatico con
pápulas únicamente infraumbilicales y perineales además
de agotar las interferencias que tenga el paciente? o un
segmento en piel del área tiroidea? . Gracias.
APLICACIÓN VISCERAL
Tiroides - Próstata - Hígado
¿Inyección perivisceral,intraparenquimatosa, plexual o
aplicación segmentaria de pápulas?
Página de inicio
Otras técnicas de TN
Intercambio de opiniones publicado en la página web terapianeural.com
Pregunta
Estimulación
intra-
parénquimatos
a vs.
estimulación
del plexo
regional
Dr Pablo Koval,
Bs.As.,
Argentina,
16/6/03
Por qué razón se recomienda la inyección
intraparenquimatosa del tiroides o de la próstata y para otros
órganos se insiste en la importancia de la estimulación del
plexo nervioso regional?
Con el criterio intraparénquimatoso debería aconsejarse la
inyección intrahepática o intrarenal. Según mi evaluación, la
inyección intraparénquimatosa es muy localizada y no abarca
la inervación total de la glándula. Además supongo que se está
causando una lesión innecesaria. En el caso de un tiroides
quístico o tumoral donde hay un cirujano dando vueltas y un
paciente que no puede tomar una decisión por razones obvias,
la inyección intraparénquimatosa significa entrar en un
terreno que puede conducir a un problema médico-legal.
La inervación que tiene el tiroides permite estimularlo
infiltrando superficialmente la glándula sin entrar en ella. De
hecho, con este tratamiento (6 aplicaciones) he logrado que
una paciente hipotiroidea suplementada con tiroxina durante
2 años, recuperara la función glandular autónoma.
Lo mismo es aplicable a la próstata que puede tratarse con un
bloqueo caudal.
Respuesta 1
Aplicación
perivisceral
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
18/6/03
Estimado Pablo, yo también soy partidario de las aplicaciones
en el sistema nervioso perivisceral, en lugar de las
intraparenquimatosas. Uno de los objetivos principales de la
TN es la aplicación del anestésico local en el Sistema
Nervioso, y a nivel parenquimatoso éste se encuentra en
menor proporción que alrededor del órgano. También es
cierto que lesionamos menos.
La mayoría de las veces, en TN cuando decimos aplicación en
un órgano, nos referimos a su perifería. Aunque en ciertos
libros insisten en la aplicación intraparenquimatosa, en
ocasiones es una cuestión terminológica.
En cuanto a las afecciones de tiroides, podría decir que la TN
en éste órgano suele ser muy agradecida. Son múltiples las
personas que han podido reducir o suprimir el tratamiento con
tiroxina.
Precisamente suelo poner como ejemplo del efecto regulador
de la TN a las afecciones tiroideas. La aplicación en tiroides
puede ir muy bien (normalizar la función tiroidea) tanto a una
persona con hipertiroidismo como a otra con hipotiroidismo.
En casos de nódulos hiperfuncionantes, hay pacientes que
buscan alternativas al tratamiento con yodo radioactivo o a la
intervención. También en estos casos podemos hablar de la
desaparición de los nódulos y de la regulación del tiroides, a
veces, sin mezclar otros tratamientos.
En fin, recordemos la visión holística de la TN. Y aunque es
muy frecuente la aplicación tiroidea en afecciones de este
órgano, debemos historiar bien a la persona y tratar en
consecuencia.
Respuesta 2
Aplicación
periprostática.
Aplicación
peritiroidea.
Dr Julio C.
Payán,
Popayán,
Colombia,
28/6/03
Estimado amigo: Ud. tiene toda la razón, en el caso de la
próstata hace algún tiempo que no entramos a la glándula
sino que aplicamos la periprostática y la mejor vía es la
perineal.
En el caso de tiroides yo tampoco busco la intraglandular,
prefiero la periglandular, aunque de verdad a veces veo
que la intra produce efectos que no da la peri, esto puede
ser porque la glándula de todas maneras tiene alguna
inervación intra, pero uno va probando.
Es que en T.N. el problema no es sólo de técnicas ya que si
el paciente no necesita una próstata sino una cicatriz, por
más que uno se esmere en la técnica la cosa no resulta. Al
fin y al cabo la TN es también un acto creativo.
Yo realmente le tengo que decir que no trato enfermos de
tiroides o de próstata ya que es volver al reduccionismo
que tanto problema y medias verdades ha producido. Me
alegro de sus aciertos con la enferma que relata, pero
tenga en cuenta que también, de pronto, otra lo que
requiere es un troncal u otro lugar de aplicación.
Noto en Ud. una gran capacidad de estudio, de
observación y de deseo de adentrarse en este mundo
confuso, milagroso y misterioso de la T.N., eso me alegra
mucho, por eso me permito adjuntarle el trabajito que
llevo al próximo Encuentro Mundial, ojala le sea de
utilidad. Mire, mi querido Pablo: cada vez me maravillo
más ante la fuerza de un paciente que se cura, o que no se
cura, cada vez de verdad, entiendo menos lo que ocurre no
sólo en el enfermo, sino en el significado de la vida misma.
No sólo es la teoría nerval, también hay fenómenos
cuánticos, como los condensados de Bosse Einstein, que
pueden tener lugar en los microtúbulos, están también
implicados los cristales de procaina que creo actuan como
cristales líquidos o semi-cristales, están implicados todos
los mecanismos de plasticidad neural y los procesos
cibernéticos. En fin, hay todo un mundo misterioso que
hace imposible cualquier tipo de reduccionismo. Tampoco
puedo desconocer la teleología de la "Jodida vida", que uno
desconoce. En fín, creo que somos unos ignorantes
ilustrados, bendita sea la vida que todos los días nos
muestra sus sutilezas y sus maravillas con cada enfermo/a
que nos pone en el camino. Gracias por su confianza. Me
alegro que me cuente sus dudas y me alegro poder
aumentar su confusión. Un abrazo.
Respuesta 3
Aplicación
plexual
regional
Dr. Alvaro
Zambrano,
Venezuela,
3/7/03.
Pues bien, Dr. Koval, yo me he hecho las mismas preguntas y
las he analizado con mi profesor de Terapia Neural y amigo el
Dr. Freddy Montaño, llegando a las mismas conclusiones que
ud. Hemos asistido a multiples reuniones en mi pais y la
respuesta siempre es la misma, probablemente en este
Congreso Mundial a realizarse en Bogota puedan aclararse
estas dudas.
Pregunta
Aplicación
intrahepática
Dr Agustin
Callahuara,
Bs.As,
De tratarse una enfermedad de higado, de causa idiopatica, y
ser al mismo tiempo considerado como campo interferente,
debe ser inyectado este organo y otros o simplemente alcanza
con tratar el segmento, me gustaria conocer opiniones y
controversias que serian de beneficio para todos. Saludos a
todos.
Argentina,
16/7/03
Respuesta
Dr David
Vinyes,
Barcelona,
España,
16/7/03
En TN no inyectamos en el interior del hígado, pues la
finalidad es el propio sistema nervioso. Por eso, en caso de
creerlo conveniente, nos dirigimos al ganglio celíaco
(ganglio nervioso que controla la inervación de la mayoría
de órganos abdominales). En muchas ocasiones sirve
empezar con pápulas en la piel del segmento de hígado,
aunque debemos recordar la visión integral.
Caso clínico: síntomas digestivos + cefalea. Me
acuerdo de un señor con síntomas digestivos y dolores de
cabeza, que mejoró de ambas molestias inyectando en el
supraorbitario derecho. Los dolores de cabeza podrían ser
de origen hepático, pero en este caso mejoró
completamente sin aplicar directamente en el segmento de
hígado. Podríamos haber hecho al revés, inyectar en el
segmento de hígado. Quizás también hubiera mejorado de
todo. En fin, en el organismo todo son zonas reflejas.
En caso de campo interferente, creo que se hace más
indispensable aplicar en la zona específica, aunque
supongo que no siempre, depende. Saludos.
Pregunta
Pápulas vs.
intra-
parénquima
Dr. Carlos
Montenegro
Tradicionalmente a uno en TN sólo se le viene a la mente, al
hablar de inyección de órganos, la próstata o tiroides
básicamente. No se inyecta corazón, hígado, riñón, testículo,
ovarios, colon, etc.
Por ejemplo en una sintomatología respiratoria no se nos
S.,Cartagena,
Colombia,
11/10/03
ocurre inyectar pleura o parénquima pulmonar, nos vamos al
segmento o mucho mejor a campos de interferencia u
irritaciones encontrada en la HC : cicatrices, interferencias
regionales o distantes, cavidad oral, etc. no se nos pasa por la
mente que el segmento de respiratorio debe incluir ir
directamente a la inervación perivisceral del pulmón, ya que
de hecho esto no creo que nadie lo haga.
Ahora mi pregunta para el foro es : Porque como con el
ejemplo del pulmón no hacemos un segmento próstatico con
pápulas únicamente infraumbilicales y perineales además
de agotar las interferencias que tenga el paciente? o un
segmento en piel del área tiroidea? . Gracias.
ABORDAJE SUPRAPUBICO
Dr. Pablo R. Koval,
Argentina, 29/02/04
Introducción: La región pelviana es un área ricamente inervada y de acceso
relativamente fácil. Representa con mucha frecuencia un foco de interferencia.
Los procesos inflamatorios y las cirugías pueden causar trastornos funcionales
regionales o a distancia. Si bien las figuras corresponden a la anatomía
femenina, sus principios son también aplicables al sexo masculino.
Figura 1: Inervación uterina. Plexo de Lee-
Frankehauser. Ramas provenientes del plexo aórtico, plexo
mesentérico superior, plexo hipogástrico, asi como ramas somáticas
de raíces sacras conforman una extensa red regional.
El plexo de Frankehauser es sólo una parte de esa red.
Inervación del útero: 1. nervios sacros; 2. plexo uterino magno; 3. plexo aórtico; 4.plexo mesentérico superior; 5. nervio hipogástrico; 6. plexo
hipogástrico; 7. nervio pélvico; 8. plexo cervical de Lee-Frankehauser; 9. nervio espermático; 10. ganglios lumbares del simpático. A. aorta; R.
recto; V.u. vejiga urinaria; U. útero. (Según Frankehauser, modificado por Guggisberg.)
Figura 2: Pubis, corte transversal, puede observarse la
angulación del hueso del pubis respecto a la pared anterior de
la pelvis.
1. infundíbulo de la trompa; 2. ovario; 3. ligamento redondo; 4. fondo uterino; 5. sínfisis del pubis; 6. vejiga urinaria; 7. fondo de saco vésico-uterino; 8. recto
Se han descripto diversas formas de abordaje. En este artículo presentamos la
técnica con
aguja angulada.
Técnica con aguja angulada (Dr Koval)
Observando la figura puede entenderse que la aguja debe insertarse
oblicuamente (45º-135º) y que la distancia desde el borde superior del pubis a
la vejiga no supera los 4-5 cm. En los pacientes de abdomen prominente es
complicado, a veces imposible, abordar la pelvis con la técnica que incluye el
desplazamiento de la aguja sobre su eje y también resulta muy dificultosa la
inyección al quedar la jeringa paralela y muchas veces en contacto estrecho con
la pared pelviana.
Utilizamos una aguja de 5 cm de largo calibre 0.8. Al quedar angulada la
longitud del cuerpo libre de la aguja es de unos 4,2 cm.
Angulación de la aguja: la aguja debe angularse utilizando el capuchón con el
que viene protegida con la salvedad de que el bisel quede dirigido hacia el
ángulo mayor. El punto de angulación debe quedar a aproximadamente 0.7 cm
del cono. Retirando suavemente el capuchón se ejerce presión sobre el metal
imprimiéndole el ángulo deseado. El doblado debe efectuarse en un solo
movimiento uniforme de modo de no quebrar la estructura de la aguja. En el
caso de no poder hacerlo de ese modo, es conveniente comenzar nuevamente
con otra aguja. Los ángulos creados son de 45º en la cara posterior al bisel y de
135º en la cara correspondiente al bisel.
Posición: Con el paciente en decúbito dorsal, el operador debe ubicarse a un
costado de pie o sentado en el borde de la camilla, enfrentando la cara del
paciente. Conviene colocar un rollo debajo de las rodillas del paciente con el
objeto de relajar la musculatura abdómino-pelviana.
Abordaje: Con los dedos mayor e índice de la mano no dominante se palpa el
borde superior del hueso pubiano, se presiona con cierta firmeza de modo que
los dedos queden cabalgando sobre el hueso, 1-2 cm lateralmente a la línea
media, marcando asi el espesor óseo e imaginariamente dónde debe insertarse
la aguja. El dedo que queda más lateral debe palpar la arteria femoral,
quedando de este modo protegida. El ángulo de la aguja es aproximadamente el
ángulo de inclinación del hueso pubiano, de modo que su inserción es más
sencilla.
Inserción: Con la aguja con el bisel hacia abajo, calzada en una jeringa de 10
cc sostenida en la mano dominante, se inserta haciendo punción entre los
dedos de la mano no dominante apenas por encima del borde óseo, buscando
que quede montada en el hueso. La aguja debe dirigirse con una ligera
inclinación hacia la línea media. La inserción debe hacerse sin fuerza, la aguja
debe deslizarse suavemente dentro del tejido laxo retropubiano. Mayor
resistencia puede indicar la presencia de una víscera. Si se choca con hueso,
deberá reubicarse la aguja un poco más posteriormente, siempre montándola
sobre el hueso. La forma de hacerlo es retirar ligeramente la aguja, presionar
más fuertemente con los dedos de la mano no dominante de modo de llevar los
tejidos de la pared en dirección posterior, para luego volver a insertarla. Un vez
insertada hasta el punto de angulación, el cono queda en posición perpendicular
respecto a la pared pelviana, facilitándose la inyección.
Inyección: Una vez que se tiene la seguridad de que se encuentra en la
posición señalada, se aspira y se inyectan 8-10 cc de neuralterapéutico. El
procedimiento se hace bilateralmente. El tejido laxo retropubiano permite la
difusión del neuralterapéutico y su acción sobre las estructuras neurales.
Comentarios:
1) El uso de una aguja más larga puede causar lesión visceral innecesariamente.
2) Al tratarse de un procedimiento a ciegas, es imposible saber con precisión
dónde se encuentra la punta de la aguja en relación con las estructuras
neurales, por lo tanto el uso de cantidades menores de neuralterapéutico puede
ser insuficiente para el objetivo fijado.
3) Con ésta técnica el procedimiento resulta totalmente atraumático y libre de
complicaciones.
4) Previamente al procedimiento el/la paciente debe vaciar su vejiga.
Comentario
1:
Dr. Heberth
García.
Con respecto a la técnica suprapúbica, llevo todos mis años de
experiencia practicando la técnica descrita por el Dr. Hopfer sin
que a la fecha se haya presentado alguna complicación que
lamentar: el punto de entrada se ubica más o menos a 4 traveses
de dedo de la sínfisis púbica o 2 traveses de dedo de la arteria
pulsante, y medio cm. por encima del hueso púbico. La dirección
de la aguja es con la punta hacia medial y hacia caudal (como a
salir por el ano); utilizamos agujas de 6 a 8 cm de longitud
calibre 0.8 mm. La llegada al plexo uterovaginal es denunciada
por una parestesia descrita por la paciente como un corrientazo
en los genitales o sensación de haberse orinado; obviamente,
hay que hacer orinar a la paciente antes del procedimiento.
Cuando la paciente es muy obesa le pido el favor a mi auxiliar
que desplace el manto de grasa hacia cefálico, dejándome al
descubierto la zona del procedimiento. En algunas pacientes con
un marcado exceso de obesidad, he necesitado agujas de 10 cms.
para desencadenar la parestesia. Eventualmente, después de las
aplicaciones las pacientes pueden describir sensación de peso
en la región baja o disuria, lo cual como muy bien lo dice el Dr.
Fischer en su libro, no es más que una señal de irritación local
que las más de las veces nos indica que el problema no es allí
sino en otra zona del organismo. La técnica de la próstata, es
idéntica a esta, sólo que la aguja se coloca un poco más vertical.
Agradezco sus comentarios.
Respuesta al
Comentario
1:
Dr Pablo
Koval
Personalmente concuerdo con el profesor Vischñevsky, quien en
su libro sobre bloqueos novocaínicos, traducido al español en
1948, consideraba que los estímulos con fines curativos debían
ser débiles, evitando toda irritación innecesaria. Las irritaciones
fuertes pueden conducir a un agravamiento del estado de
parabiosis. Tanto la irritación de estructuras nerviosas por
acción de la aguja (corrientazo, sensación disúrica, parestesias),
una inyección intraperióstica -en lugar de periperióstica; una
lesión visceral o simplemente una concentración alta del
anestésico local constituyen estímulos irritativos fuertes
innecesarios y potencialmente contraproducentes.
Con la técnica de aguja angulada descripta más arriba se logra el
estímulo plexual regulador sin ningún tipo de irritación
neurológica excesiva.
Comentario
2
Dr Heberth
García,
Hermano, quiero hacer algunas apreciaciones sobre mi
comentario de la técnica suprapúbica: Yo también estoy de
acuerdo con el doctor Vischñevsky en sus comentarios
publicados en el libro "El Bloqueo Novocaínico y los antisépticos
27/3/04 oleobalsámicos como una forma terapéutica patógena" Editorial
Cartago 1958, con respecto a las irritaciones y los impulsos
fuertes.
En la técnica por mi descrita el unico riesgo de lesión visceral es
la vejiga, pero si se hace orinar a la paciente, el riesgo es nulo;
la probabilidad de lesión periostica manteniendo la dirección
descrita, tambiés es nula. En cuanto al "corrientazo", éste no es
producido por la aguja sino por la llegada del anestésico a la
estructura neural, lo cual no causa irritación y nos anuncia el
éxito de la técnica, tampoco lo es por el volumen o la
concentración, ya que usamos 2 a 3 cc. al 0.25% - 0.5% por cada
lado; es más, en un sin numero de técnicas de TN, la presencia
del "corrientazo" nos dice que hemos alcanzado la estructura
neural. Ejemplo: nervio supra e infraorbitario, ganglio de Gasser,
raíces espinales, etc.
Reacciones como disuria o peso suprapúbico no son inherentes a
la técnica, sino un indicativo de que el problema de la paciente
se encuentra en otro segmento nervioso diferente al plexo
uterovaginal.
En la escuela en que me formé y en los 14 años de trabajo, no he
visto irritaciones inherentes a las diferentes técnicas de la TN,
eso si sin desconocer posibles accidentes (iatrogenia) por error
en la técnica. Lo que si observo es que la repetición mecánica de
un punto de TN, por ejemplo aplicar suprapúbicos uno tras de
otro sin interpretar las reacciones de la paciente, puede causar
una irritación en el sentido que decía el doctor Vischñevsky, a
pesar de haber mantenido una técnica impecable. Una vez más,
prima el concepto necesariamente acompañado de una buena
técnica. Reciba un cordial abrazo y quedo en espera de sus
comentarios.
Respuesta al
comentario 2
El intercambio de opiniones sobre el bloqueo suprapúbico me
llevó a releer –una vez más- lo escrito por Vischñevsky en el
Dr Pablo
Koval,
28/3/04
tercer capitulo de su libro Bloqueos Novocaínicos... Considero
que su aporte es muy interesante y sus enseñanzas –si bien
algunas han perdido actualidad- en general siguen siendo
válidas.
1. evitar la inyección intramuscular de volumenes grandes
para evitar el dolor y la sensación de distensión y peso
(región lumbar)
2. evitar la lesión del riñón (bloqueo lumbar)
3. busca que el procedimiento sea completamente indoloro,
dice: ...no es correcto considerar que el dolor es habitual al
efectuar el bloqueo (lumbar)
4. el bloqueo novocaínico es un recurso terapéutico ...papel
de irritante debil... Cualquier traumatismo corriente, tanto
en su ejecución, cuanto en los efectos posteriores resultara
perjudicial, alterará el fundamento de su esencia......
5. ...la aguja no debe raspar el hueso, la inyección debe
hacerse en forma continua y suave (bloqueo
subaponeurótico del muslo)
6. ...la inyección efectuada en forma grosera agravará la
irritación existente y no la disminuirá (bloqueo localizado
de los nervios)
Vischñevsky en su escrito no se refiere al concepto de vicariación
por tratamiento repetido, éste es un aporte de la medicina
biológica.
Durante mis años de practicar la medicina del dolor –desde
1983- he recibido muchos pacientes con diversos traumatismos
neurológicos causados por aguja, (neuropatías traumáticas) de
difícil y lenta resolución, muchas veces sin resolución definitiva.
Pregunta 3
Dr Eduardo
Antonio Paz,
Brasil,
Pregunta sobre la infiltracion suprapúbica: En algun lugar
aprendi a hacer el terreno ginecológico con una infiltracion
suprapúbica medial, es decir colocando la aguja
perpendicularmente en la línea media arriba del hueso púbico y
15/4/04 después se desplaza con la mano libre la pared abdominal hacia
cefálica, con lo que la aguja queda inclinada unos 45 grados en
dirección hacia abajo. Se continúa introduciendo la aguja
infiltrando hasta que se "siente", terminando de hacer la
infiltracion
Como no he encontrado esta técnica en el libro de P ni de M
Doch pregunto si les parece correcta. Gracias
REGION LUMBAR ESTIMULACION SIMPATICA
Dr. Pablo R. Koval,
Argentina, 4/03/04
Respecto de los cuerpos vertebrales el simpático lumbar se encuentra en una
posición anterolateral. La aorta tiene una posición casi media y se encuentra
próxima al simpático izquierdo. En cambio la vena cava inferior se encuentra
más alejada de los cuerpos vertebrales hacia la derecha. La cadena simpática
lumbar se encuentra en el plano aponeurótico cercano a la cara anteroexterna
de los cuerpos vertebrales, separada de los nervios somáticos por la fascia del
psoas y el músculo propiamente dicho. La inyección de un volumen grande de
líquido (25 cc) en cualquier lugar de este espacio baña, en la mayoría de los
casos, la totalidad de los ganglios lumbares. Teóricamente una inyección en L2 o
L3 debería ser suficiente para lograr una adecuada difusión longitudinal.
El Dr J.J. Bonica llamó la atención sobre el hecho de que el simpático lumbar no
solamente presenta diferencias de un lado a otro sino que está sometido a una
gran variabilidad en su conformacion general. El ganglio L2 parece el más
constante mientras que los ganglios L4 y L5 a menudo están distribuidos de
forma irregular o se concentran alrededor de L2. A veces faltan ganglios o
confluyen entre sí. En ocasiones se encuentran también en la musculatura
formando los llamados ganglios del psoas.
Las fibras preganglionares para las extremidades inferiores proceden de la
region D12-L2. Dichas fibras discurren por las raíces anteriores y los ramos
comunicantes blancos hasta llegar a los ganglios. Las fibras posganglionares van
en dirección al plexo lumbosacro y a las extremidades inferiores.
Técnica clásica
Posición: Decúbito lateral con un rollo debajo de modo que el lado a tratar
quede más elevado. Asi se abre el espacio entre las costillas y la cresta ilíaca.
Personalmente considero incorrecta la técnica con el enfermo de pie, recostado
sobre la camilla.
Fotografía obtenida del libro Neural blockade, editado por MJ Cousins y PO Bridenbaugh
A 7-10 cm por fuera de las apófisis espinosas de la columna lumbar se hace un
habón dérmico a través del cual se introduce una aguja de 12 a 18 cm de
longitud que se dirige vérticalmente a la piel en dirección medioventral. En
algunos casos puede notarse un contacto óseo tras unos 4-5 cm,
correspondiente a una apófisis transversa lumbar. Una vez sobrepasado este
primer contacto óseo desviando la aguja en dirección craneal o caudal, se la
introduce unos 3 a 5 cm adicionales en dirección medioventral. El segundo
contacto óseo que se produce se corresponde con el flanco lateral del cuerpo
vertebral. Dicho contacto puede percibirse como dolor sordo poco intenso. Se
retira la aguja 1 cm y se modifica su dirección de modo que su punta señale algo
más hacia fuera. Se reintroduce 2-3 cm deslizándola sobre la cara lateral del
cuerpo vertebral hasta llegar a la vecindad del simpático. Tras aspirar en dos
planos se inyectan 5-8 cc de neuralterapéutico.
Con el uso de volúmenes grandes puede lograrse una acción bilateral ( 25-30
cc), pero también la solución puede difundir hacia nervios somáticos o hacia el
espacio peridural a través de un manguito neural.
Pérdida de resistencia: El espacio donde se aloja la cadena simpática tiene
presión negativa. La posición correcta de la punta de la aguja puede verificarse
con la prueba de pérdida de la resistencia. La penetración de la fascia del psoas
provoca un cambio de resistencia. Esa pérdida de resistencia puede percibirse
también al penetrar en un vaso. La prueba se hace con una jeringa de 5 cc
cargada con aire o solución fisiológica o bien solución y un poco de aire
observando cómo se modifica la forma de la burbuja. Se ejerce ligera presión
sobre el émbolo hasta que cede y la burbuja deja de deformarse. Si la aspiración
es negativa se ha llegado al espacio deseado.
Cuando la aguja se encuentra entre los músculos psoas y cuadrado lumbar, en la
región de la apófisis transversa, a unos 5 cm de la piel, también puede
detectarse pérdida de la resistencia. La inyección en este espacio resulta
en estimulación del plexo lumbar somático. Un hecho peligroso si se
inyectan soluciones neurolíticas, pero puede ser de utilidad como abordaje
neuralterapéutico, cuando se busca modificar el estado de dichos nervios o
actuar sobre el territorio inervado por éstos.
Es de vital importancia aspirar antes de inyectar verificando si aparece sangre o
líquido cefalorraquídeo. Además la inyección debe hacerse sin resistencia. La
existencia de resistencia puede indicar que la aguja se encuentra en una pared
vascular (aorta o cava), en la de una víscera abdominal o en un disco
intervertebral. La aguja puede pasar cerca de un nervio segmentario causando
dolor "fulgurante". La aguja siempre debe avanzarse lentamente y su dirección
debe modificarse si provoca parestesias evitándose de este modo la laceración
de una estructura nerviosa con la posible consecuencia de una neuropatía.
Notas: Para el tratamiento de un cólico renal , una inyección de
neuralterapéutico en L2 permite erradicar completamente el dolor, en estos
casos puede ser necesario usar una dosis de 20 a 25 cc. En pacientes con
enfermedad arterial obstructiva, pueden hacerse inyecciones de 5 cc en L2, L3 y
L4.
Abordaje alternativo (Bryce-Smith)
Debido a la posición anterolateral de los ganglios lumbares, el curso de los
ramos comunicantes es extenso en torno al cuerpo vertebral en un canal fibroso.
Este arco fibroso constituye uno de los puntos de inserción del músculo psoas y
proporciona acceso indirecto a la cadena ganglionar.
Fotografía obtenida del libro Neural blockade, editado por MJ Cousins y PO Bridenbaugh
Técnica: Se hace un habón a tres traveses de dedo por fuera de la punta de la
apófisis espinosa de L3, se introduce una aguja de 12 cm de largo en un ángulo
de 70º y se avanza hacia el cuerpo vertebral; cuando la punta de la aguja toca la
vértebra se encuentra dentro del túnel fibroso. La solución neuralterapéutica
depositada allí difunde hacia adelante alcanzando la cadena simpática. La
solución puede actuar sobre el tercer nervio somático lumbar o incluso entrar en
el saco dural. Por lo tanto no es una técnica selectiva para el simpático, pero es
más sencilla que el abordaje clásico. El uso de soluciones anestésicas diluidas y
un volumen de 5 a 8 cc hace que la acción en el espacio peridural constituya una
complicación sencilla de manejar.
Técnica descripta por el Dr. Julio César Payán(aportada por el Dr Agustín Callahuara)
Se coloca a paciente acostado, sentado o de pie. Se ingresa a la altura del espacio L1- L2, preferentemente por el lado derecho, a 3 cms de la línea media a nivel del espacio intervertebral. Se hace un habón. Se ingresa perpendicularmente a la piel con una aguja de 10 cms de longitud; a unos 3-4 cms de profundidad puede chocar con la apófisis transversa, cosa que no ocurre al ingresar a nivel del espacio intervertebral. Si se choca con la apófisis transversa, se retira un poco la aguja y se retoma la dirección de modo de pasar por arriba o por
debajo de esa estructura ósea, es una maniobra fácil que se efectua sin ningun problema. Una vez remontada la apófisis se continua insertando la aguja hasta que, a una profundidad de 5 a 6 cms adicionales, se nota pérdida de la resistencia muscular. Allí se encuentra la zona del ganglio, se aspira para evitar la aplicación en uno de los grandes vasos, cosa que con esta técnica ocurre rarísima vez, y se inyectan entre 2 y 5 cc.
En algunas ocasiones, se presentan cambios vasomotores en el miembro inferior homolateral que nos indican que la solución llegó con precisión al ganglio lumbar correspondiente, no obstante no son necesarios dichos cambios para asegurarse el éxito de la técnica.
Ocasionalmente puede presentarse dolor tipo calambre en el mismo miembro inferior del paciente por roce de la aguja con el nervio espinal correspondiente.
REGION LUMBAR ESTIMULACION SOMATICA
Dr. Pablo R. Koval,
Argentina, 4/03/04
Respecto de los cuerpos vertebrales el simpático lumbar se encuentra en una
posición anterolateral. La aorta tiene una posición casi media y se encuentra
próxima al simpático izquierdo. En cambio la vena cava inferior se encuentra
más alejada de los cuerpos vertebrales hacia la derecha. La cadena simpática
lumbar se encuentra en el plano aponeurótico cercano a la cara anteroexterna
de los cuerpos vertebrales, separada de los nervios somáticos por la fascia del
psoas y el músculo propiamente dicho. La inyección de un volumen grande de
líquido (25 cc) en cualquier lugar de este espacio baña, en la mayoría de los
casos, la totalidad de los ganglios lumbares. Teóricamente una inyección en L2 o
L3 debería ser suficiente para lograr una adecuada difusión longitudinal.
El Dr J.J. Bonica llamó la atención sobre el hecho de que el simpático lumbar no
solamente presenta diferencias de un lado a otro sino que está sometido a una
gran variabilidad en su conformacion general. El ganglio L2 parece el más
constante mientras que los ganglios L4 y L5 a menudo están distribuidos de
forma irregular o se concentran alrededor de L2. A veces faltan ganglios o
confluyen entre sí. En ocasiones se encuentran también en la musculatura
formando los llamados ganglios del psoas.
Las fibras preganglionares para las extremidades inferiores proceden de la
region D12-L2. Dichas fibras discurren por las raíces anteriores y los ramos
comunicantes blancos hasta llegar a los ganglios. Las fibras posganglionares van
en dirección al plexo lumbosacro y a las extremidades inferiores.
Técnica clásica
Posición: Decúbito lateral con un rollo debajo de modo que el lado a tratar
quede más elevado. Asi se abre el espacio entre las costillas y la cresta ilíaca.
Personalmente considero incorrecta la técnica con el enfermo de pie, recostado
sobre la camilla.
Fotografía obtenida del libro Neural blockade, editado por MJ Cousins y PO Bridenbaugh
A 7-10 cm por fuera de las apófisis espinosas de la columna lumbar se hace un
habón dérmico a través del cual se introduce una aguja de 12 a 18 cm de
longitud que se dirige vérticalmente a la piel en dirección medioventral. En
algunos casos puede notarse un contacto óseo tras unos 4-5 cm,
correspondiente a una apófisis transversa lumbar. Una vez sobrepasado este
primer contacto óseo desviando la aguja en dirección craneal o caudal, se la
introduce unos 3 a 5 cm adicionales en dirección medioventral. El segundo
contacto óseo que se produce se corresponde con el flanco lateral del cuerpo
vertebral. Dicho contacto puede percibirse como dolor sordo poco intenso. Se
retira la aguja 1 cm y se modifica su dirección de modo que su punta señale algo
más hacia fuera. Se reintroduce 2-3 cm deslizándola sobre la cara lateral del
cuerpo vertebral hasta llegar a la vecindad del simpático. Tras aspirar en dos
planos se inyectan 5-8 cc de neuralterapéutico.
Con el uso de volúmenes grandes puede lograrse una acción bilateral ( 25-30
cc), pero también la solución puede difundir hacia nervios somáticos o hacia el
espacio peridural a través de un manguito neural.
Pérdida de resistencia: El espacio donde se aloja la cadena simpática tiene
presión negativa. La posición correcta de la punta de la aguja puede verificarse
con la prueba de pérdida de la resistencia. La penetración de la fascia del psoas
provoca un cambio de resistencia. Esa pérdida de resistencia puede percibirse
también al penetrar en un vaso. La prueba se hace con una jeringa de 5 cc
cargada con aire o solución fisiológica o bien solución y un poco de aire
observando cómo se modifica la forma de la burbuja. Se ejerce ligera presión
sobre el émbolo hasta que cede y la burbuja deja de deformarse. Si la aspiración
es negativa se ha llegado al espacio deseado.
Cuando la aguja se encuentra entre los músculos psoas y cuadrado lumbar, en la
región de la apófisis transversa, a unos 5 cm de la piel, también puede
detectarse pérdida de la resistencia. La inyección en este espacio resulta
en estimulación del plexo lumbar somático. Un hecho peligroso si se
inyectan soluciones neurolíticas, pero puede ser de utilidad como abordaje
neuralterapéutico, cuando se busca modificar el estado de dichos nervios o
actuar sobre el territorio inervado por éstos.
Es de vital importancia aspirar antes de inyectar verificando si aparece sangre o
líquido cefalorraquídeo. Además la inyección debe hacerse sin resistencia. La
existencia de resistencia puede indicar que la aguja se encuentra en una pared
vascular (aorta o cava), en la de una víscera abdominal o en un disco
intervertebral. La aguja puede pasar cerca de un nervio segmentario causando
dolor "fulgurante". La aguja siempre debe avanzarse lentamente y su dirección
debe modificarse si provoca parestesias evitándose de este modo la laceración
de una estructura nerviosa con la posible consecuencia de una neuropatía.
Notas: Para el tratamiento de un cólico renal , una inyección de
neuralterapéutico en L2 permite erradicar completamente el dolor, en estos
casos puede ser necesario usar una dosis de 20 a 25 cc. En pacientes con
enfermedad arterial obstructiva, pueden hacerse inyecciones de 5 cc en L2, L3 y
L4.
Abordaje alternativo (Bryce-Smith)
Debido a la posición anterolateral de los ganglios lumbares, el curso de los
ramos comunicantes es extenso en torno al cuerpo vertebral en un canal fibroso.
Este arco fibroso constituye uno de los puntos de inserción del músculo psoas y
proporciona acceso indirecto a la cadena ganglionar.
Fotografía obtenida del libro Neural blockade, editado por MJ Cousins y PO Bridenbaugh
Técnica: Se hace un habón a tres traveses de dedo por fuera de la punta de la
apófisis espinosa de L3, se introduce una aguja de 12 cm de largo en un ángulo
de 70º y se avanza hacia el cuerpo vertebral; cuando la punta de la aguja toca la
vértebra se encuentra dentro del túnel fibroso. La solución neuralterapéutica
depositada allí difunde hacia adelante alcanzando la cadena simpática. La
solución puede actuar sobre el tercer nervio somático lumbar o incluso entrar en
el saco dural. Por lo tanto no es una técnica selectiva para el simpático, pero es
más sencilla que el abordaje clásico. El uso de soluciones anestésicas diluidas y
un volumen de 5 a 8 cc hace que la acción en el espacio peridural constituya una
complicación sencilla de manejar.
Técnica descripta por el Dr. Julio César Payán(aportada por el Dr Agustín Callahuara)
Se coloca a paciente acostado, sentado o de pie. Se ingresa a la altura del espacio L1- L2, preferentemente por el lado derecho, a 3 cms de la línea media a nivel del espacio intervertebral. Se hace un habón. Se ingresa perpendicularmente a la piel con una aguja de 10 cms de longitud; a unos 3-4 cms de profundidad puede chocar con la apófisis transversa, cosa que no ocurre al ingresar a nivel del espacio intervertebral. Si se choca con la apófisis transversa, se retira un poco la aguja y se retoma la dirección de modo de pasar por arriba o por
debajo de esa estructura ósea, es una maniobra fácil que se efectua sin ningun problema. Una vez remontada la apófisis se continua insertando la aguja hasta que, a una profundidad de 5 a 6 cms adicionales, se nota pérdida de la resistencia muscular. Allí se encuentra la zona del ganglio, se aspira para evitar la aplicación en uno de los grandes vasos, cosa que con esta técnica ocurre rarísima vez, y se inyectan entre 2 y 5 cc.
En algunas ocasiones, se presentan cambios vasomotores en el miembro inferior homolateral que nos indican que la solución llegó con precisión al ganglio lumbar correspondiente, no obstante no son necesarios dichos cambios para asegurarse el éxito de la técnica.
Ocasionalmente puede presentarse dolor tipo calambre en el mismo miembro inferior del paciente por roce de la aguja con el nervio espinal correspondiente.
GANGLIO CERVICAL SUPERIOR
Dr. Pablo R. Koval,
Argentina, 27/09/04
El ganglio cervical superior
El ganglio cervical superior es una masa de color rosado grisáceo, de forma en huso situada sobre el músculo recto anterior mayor de la cabeza inmediatamente por delante de la apófisis transversa de las vértebras cervicales 2°, 3° y a veces 4°. Su porción superior se encuentra en estrecha relación con los nervios glosofaríngeo, hipogloso y vago y con el nacimiento de las ramas laríngea y faríngea del último, mientras que a lo largo de toda su estructura se encuentra en relación directa con la vaina carotídea que engloba a la arteria carótida interna, a la vena yugular interna y al nervio vago, encontrándose en una posición inmediatamente posterior a estas estructuras. Es el más grande de los ganglios paravertebrales, tiene de 3 a 5 cm de longitud, 0.6 a 1 cm de ancho y de 0.2 a 0.4 cm de espesor, con su extremidad inferior a 1-2 cm por debajo de la base del cráneo y su extremidad inferior por delante de la apófisis transversa de la 4° vértebra cervical. Se considera que representa la fusión de los cuatro ganglios segmentarios correspondientes a los cuatro nervios cervicales superiores.
El ganglio cervical superior da muchas ramas significativas que controlan casi toda la actividad simpática de la totalidad de la cabeza y de la porción superior del cuello.
Técnica de bloqueo
Se logra un más completo abordaje de la inervación simpática de la cabeza y del cuello a través de la estimulación del ganglio cervical inferior (estrellado). Por otra parte, la estrecha proximidad del ganglio superior a los nervios vago, glosofaríngeo e hipogloso hace que estos nervios queden involucrados cuando se inyectan 5 cc o más de solución.
Se ubica al paciente con la cabeza girada hacia el lado opuesto, se hace un habón dérmico a 1 cm por debajo y por detrás del extremo de la apófisis mastoides. Con la cabeza rotada el habón se encuentra a nivel de la apófisis transversa de C2. Se emplea una aguja de 5 cm calibre 22 ó 25 sin jeringa, que se introduce perpendicularmente a la piel y se avanza hasta contactar la apófisis transversa, en ese punto se ubica un marcador sobre la aguja a 2 cm de la piel. Se retira la aguja hasta que su punta se encuentre en el tejido subcutáneo, luego se reinserta de modo que su eje forme un ángulo de 25° con el corte coronal; quedando la punta hacia delante y el cono hacia atrás respecto de la línea coronal media. Se avanza lentamente la aguja hasta que el marcador tome contacto con la piel, se efectúa una prueba de aspiración y, si es negativa, se inyecta lentamente la solución. Si la punta de la aguja se encuentra en la posición correcta no habrá resistencia a la inyección. Si existe resistencia es que la punta se encuentra en músculo, debiendo introducirse un poco más hacia delante. Una inyección positiva se asocia al síndrome de Horner: constricción de la pupila, caída del párpado y exoftalmos; además, congestión conjuntival, ausencia de sudoración, aumento de la temperatura cutánea y congestión de la mucosa nasal homolateral.
A menos que se tomen extremas precauciones y se haga la prueba de aspiración en forma repetida, el neuralterapéutico puede ser inyectado inadvertidamente en uno de los grandes vasos tan cercanos al ganglio o en el espacio subaracnoideo. Si la solución es inyectada dentro de la vaina carotídea puede resultar afectado el vago observándose taquicardia, puede resultar comprimida la arteria carótida con la consiguiente isquemia cerebral transitoria (vértigo , pérdida de la conciencia) aunque esto es muy infrecuente con dosis de 5 cc o inferiores.
La aplicación sobre el ganglio cervical superior está indicada en pacientes con espasmo arterial cerebral, trombosis o embolismo y en los síndromes faciales (dolor, parálisis, espasmo, atrofia).
Ganglio esfenopalatino
Dr. Pablo Rubén KovalMédico Especialista
Existen diversos abordajes del ganglio esfenopalatino.
Se describirá la vía del conducto palatino a través del techo de la boca.
Anatomía
Vista ósea del techo de la boca. Está indicada la ubicación del conducto palatino posterior.
Vista ósea desde el interior de la boca. Se ha abierto la pared interna del seno maxilar.
Obsérvese las características del conducto palatino posterior
En esta imagen se observa el conducto palatino posterior ocupado por ramas nerviosas del ganglio esfenopalatino ubicado en la parte
superior del conducto.
Técnica
Puede observarse que la mucosa palatina a nivel del conducto palatino posterior
presenta cierto grado de decoloración respecto del resto de la mucosa,
(justo a la derecha del sello de copyright)como consecuencia del menor espesor de su capa,
asi como cierto grado de depresión que puede palparse digitalmente.
Se observa la inserción de la aguja angulada en el centro del área decolorada.
Puede usarse una aguja 40/4. Aquí se empleó una 40/7. Puede emplearse también una jeringa carpoule con aguja 30G-25mm
angulada.Con delicadeza debe encontrarse el trayecto del conducto.
En ese momento la aguja se desliza con más facilidad. Debe hacerse un pequeño habón en la mucosa.
Una vez dentro del conducto la aguja se introduce y retira varias veces inyectando el neuralterapéutico en total de 1 a 2 cc.