UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

72
1 UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA Resolución Nº 009-2007-CONAFU Resolución Nº 269-2009-CONAFU FACULTAD DE INGENIERIA Y CIENCIAS ECONOMICAS CARRERA PROFESIONAL DE DERECHO TRABAJO DE INVESTIGACIÓN: PROBLEMÁTICA EN TORNO AL RÉGIMEN DE ECONOMÍA SOCIAL DE MERCADO EN EL PERÚPARA OPTAR EL TÍTULO DE: ABOGADO PRESENTADO POR: EDMARA ANTHOANET BARRETO ESPINOZA ASESOR: DR. JOSE JORGE CAMPOS MARTINEZ ICA - 2018

Transcript of UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

Page 1: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

1

UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA Resolución Nº 009-2007-CONAFU

Resolución Nº 269-2009-CONAFU

FACULTAD DE INGENIERIA Y CIENCIAS ECONOMICAS

CARRERA PROFESIONAL DE DERECHO

TRABAJO DE INVESTIGACIÓN:

“PROBLEMÁTICA EN TORNO AL RÉGIMEN DE

ECONOMÍA SOCIAL DE MERCADO EN EL PERÚ”

PARA OPTAR EL TÍTULO DE:

ABOGADO

PRESENTADO POR:

EDMARA ANTHOANET BARRETO ESPINOZA

ASESOR:

DR. JOSE JORGE CAMPOS MARTINEZ

ICA - 2018

Page 2: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

2

DEDICATORIA:

El presente trabajo de investigación está dedicado a mi hijo y a mi madre, quienes son

mi motor y motivo para salir adelante. A ellos me debo y son la fuente de mi

inspiración.

Page 3: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

3

RESUMEN

A continuación se abordará el tema de la economía social de mercado en el Perú, y

cómo ha incidido la problemática en torno a su implementación, a raíz de la dación de

la vigente Constitución Política del año 1993.

Se abordará su evolución histórica, así como la naturaleza del capítulo económico de

las Constituciones, denominado: “Constitución Económica”. Así mismo, el rol del

Estado en la economía, y lo que realmente rige en el Perú en materia económica, que

no es sino una mezcla de mercantilismo y populismo.

Por otro lado, se precisarán los alcances de la implementación y la problemática de la

economía social de mercado, desde el crecimiento económico, y la tutela de los

derechos de tanto los consumidores y usuarios como de los trabajadores.

Palabras clave: economía social de mercado, mercantilismo, populismo,

consumidores, usuarios, trabajadores, crecimiento económico.

Page 4: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

4

ABSTRACT

The following will address the issue of the social market economy in Peru, and how it

has impacted the problem around its implementation, following the enactment of the

current Political Constitution of the year 1993.

Its historical evolution will be addressed, as well as the nature of the economic chapter

of the Constitutions, called: "Economic Constitution". Likewise, the role of the State in

the economy, and what really governs in Peru in economic matters, which is nothing

but a mixture of mercantilism and populism.

On the other hand, the scope of the implementation and the problems of the social

market economy, from the economic growth, and the tutelage of the rights of both

consumers and users as well as workers will be specified.

Key words: social market economy, mercantilism, populism, consumers, users,

workers, economic growth.

Page 5: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

5

ÍNDICE

I. INTRODUCCIÓN 7

II. PROBLEMA DE LA INVESTIGACIÓN 11

a. DESCRIPCIÓN DE LA REALIDAD PROBLEMÁTICA 11

b. FORMULACIÓN DEL PROBLEMA 13

c. JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN 13

d. HIPÓTESIS 14

e. VARIABLES 15

III. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN 16

a. OBJETIVO GENERAL 16

b. OBJETIVOS ESPECÍFICOS 16

IV. MARCO TEÓRICO 17

4.1. La Constitución Económica 17

4.2. Un poco de historia 22

4.3. El régimen en la Constitución 28

4.4. El rol del Estado 31

4.5. Problemática en torno al régimen de economía social

de mercado en el Perú 34

4.6. La corrupción: fruto del mercantilismo y del populismo 41

4.7. La tutela de los derechos de los consumidores y usuarios 43

4.8. La tutela de los derechos de los trabajadores 47

4.9. La tutela de los derechos de los consumidores y usuarios 50

4.10. La tutela de los derechos de los trabajadores 53

V. MÉTODOS O PROCEDIMIENTOS 58

5.1. Tipo y nivel de investigación 58

Page 6: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

6

5.2. Método y diseño de investigación 58

5.3. Técnicas e instrumentos de Recolección de datos 59

VI. RESULTADOS 60

a. CONTRASTACIÓN DE LA HIPÓTESIS 60

VII. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES 68

a. CONCLUSIONES 68

b. RECOMENDACIONES 70

BIBLIOGRAFÍA 72

Page 7: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

7

I. INTRODUCCIÓN

La actual y vigente Constitución Política del Estado peruano cuenta ya con

cerca de 25 años. Dada luego del autogolpe de Estado perpetrado por el

entonces Presidente Alberto Fujimori, y a instancia de organizaciones

internacionales como la OEA para restablecer la democracia en el Perú, se dio

la vigente Carta Magna, aplaudida por muchos por los logros económicos

obtenidos, y tildada por otros de inclusive ser un simple documento.

Es en el contexto de la dación de la nueva Constitución Política, que se

implementaron una serie de medidas de corte económico para liberalizar a la

economía nacional insertándola en el concierto internacional, desregulando al

mercado y atrayendo inversiones privadas extranjeras.

Recuérdese que los años 90 del siglo XX significaron el apogeo del

denominado “Consenso de Washington”. Un conjunto de medidas económicas

para que los países en desarrollo superaran la crisis, y lideradas por el

economista John Williamson, basadas en la libertad de los mercados.

Fue así que se introdujo en la Constitución Política un capítulo destinado a

desarrollar el contenido del régimen económico que rige en nuestro medio, el

cual se distancia del también denominado régimen de economía social de

mercado implementado en la Constitución Política de 1979.

Así es, si hoy se quiere realizar una suerte de comparación entre ambas

Constituciones, la de 1979 y la de 1993, la Constitución de 1979 es fiel reflejo

de la Constitución española de 1978 y se inclina por una mayor protección del

factor trabajo. Mientras que la del 93 es más flexible en cuanto a las relaciones

de trabajo, a través de la desregulación de los mercados, incluido el laboral.

Es bajo este nuevo marco normativo y constitucional del régimen de economía

social de mercado, que los diferentes agentes del mercado tienen asignados

distintos roles, desde las empresas privadas, los consumidores y usuarios, los

trabajadores y, el Estado.

Page 8: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

8

Sin embargo, todas las personas potencialmente podemos ejercer

indistintamente cualquiera de los roles que asigna la economía social de

mercado. Desde el abogado que se convierte en un proveedor de sus servicios,

y que al mismo tiempo es un usuario de los servicios de telefonía.

La economía social de mercado básicamente se reduce a la siguiente frase:

cuando mercado sea posible y cuanto Estado sea necesario. Bajo este modelo,

se deja que los agentes del mercado se guíen bajo la máxima de dejar hacer y

dejar pasar, pero reservándole al Estado el rol de regularlo sin desnaturalizar

su esencia.

Aquí debemos cuestionarnos hasta cuánto puede regular el Estado al mercado

para precisamente no desnaturalizar su esencia.

Sin embargo, la regulación del mercado por parte del Estado se ha justificado

bajo el argumento de que se presentan algunas relaciones jurídicas y

económicas de asimetría, correspondiéndole precisamente al Estado equilibrar

aquellas situaciones para salvaguardar los intereses de los agentes

económicos del mercado.

Los consumidores y usuarios, así como los trabajadores, son claros ejemplos

de partes débiles de sus respectivas relaciones, frente a los proveedores y

empleadores.

Ahora bien, la economía social de mercado en el Perú ha generado cierta

problemática. Y si bien pareciera que hoy en día existe un cierto consenso en

torno al tema, no menos cierto es que la economía social de mercado aún no

ha resuelto el problema de la pobreza y el subdesarrollo en algunos segmentos

de la sociedad.

Efectivamente, uno de los grandes retos del régimen de economía social de

mercado, cuando se implementó en el Perú allá por la década de los 90 del

siglo XX, es que el gobierno se había planteado luchar contra la pobreza,

precisamente con un conjunto de medias económicas. Sin embargo, ello iba de

la mano con el proceso de pacificación de la sociedad, dado que sufríamos los

embates del terrorismo por parte de Sendero Luminoso y el MRTA.

Page 9: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

9

No se podían implementar las grandes reformas económicas de la economía

social de mercado, si es que a su vez no se daban las condiciones de

estabilidad política y social que se requerían para atraer a la inversión privada

extranjera.

La problemática en torno a la implementación del régimen de economía social

de mercado será objeto del presente trabajo de investigación, con el único

propósito de despertar el interés en tan importante tema, dado que como

profesionales dedicados al estudio del derecho, muy bien tenemos presente

que el ordenamiento jurídico encabezado por la Constitución Política, es

determinante para el comportamiento de los agentes económicos del mercado.

Apoyándonos en algunos conceptos de la moderna herramienta jurídica del

Análisis Económico del Derecho (AED), intentaremos dar una explicación

jurídica respecto de la problemática generada a raíz de la implementación del

régimen económico de economía social de mercado en el Perú.

Es cierto que el derecho tiene como principal valor a la justicia, mientras que la

economía se basa en la eficiencia. Ambos no necesariamente tienen que estar

separados. Aunque como veremos, las soluciones más justas a veces resultan

no ser tan eficientes. O las decisiones eficientes también pueden ser injustas.

El punto en cuestión es encontrar un equilibrio entre los derechos de todos los

agentes del mercado, sin desperdiciar los recursos de que disponemos en la

sociedad.

La economía social de mercado apunta precisamente a maximizar en lo posible

los recursos, reconociendo las instituciones jurídicas que emplean los agentes

del mercado: derechos de propiedad, privada, contratos, libertad de empresa,

libertad de trabajo, entre otros aspectos fundamentales e importantes,

precisamente sobre los cuales se edifica tal régimen económico.

Necesitamos un estado de derecho que apunte a consolidar un modelo político

y económico, en función a la fórmula contenida en nuestra Carta Magna, que

se desprende de interpretar conjuntamente sus artículos 43 y 58. Tal modelo

no es sino el Estado Social y Democrático de Derecho, que es el contexto

constitucional en el que se desenvuelven los agentes del mercado.

Page 10: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

10

Debe tenerse presente pues a la fórmula del Estado Social y Democrático de

Derecho. Esto es así por cuanto lo político y lo económico están íntimamente

vinculados, como los veremos en las siguientes páginas del presente trabajo de

investigación.

Page 11: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

11

II. PROBLEMA DE LA INVESTIGACIÓN

a. DESCRIPCIÓN DE LA REALIDAD PROBLEMÁTICA

La implementación del régimen de economía social de mercado con la

Constitución Política del Estado del año 1993, ha traído exitosos

resultados en materia económica. El gobierno de entonces logró frenar

problemas macroeconómicos como el de la hiperinflación, la recesión, la

balanza comercial, la inversión extranjera directa, la deuda externa, los

niveles de crecimiento, entre otros, logrando además que nuestro país

se reinsertase en el concierto internacional.

Sin embargo, el modelo no es capaz de solucionar en su totalidad el

gran saldo de pobreza y subdesarrollo que aún persiste en el país.

Sumado a ello, existe descontento entre segmentos de la sociedad

respecto de los logros obtenidos por el régimen, que no traducen en

todos. En otras palabras, no todos los peruanos se han beneficiado del

régimen.

El sector privado, amparado en el libre mercado, abusa de su posición

de dominio, cobrando tarifas excesivas, abusando de los derechos del

trabajador sin reconocer una serie de derechos sociales. Los

consumidores y usuarios se ven avasallados en sus derechos por las

grandes empresas y centros comerciales. Los organismos reguladores

brillan por su ausencia, y el Estado se desentiende de su rol tuitivo ante

los más desprotegidos.

Y los organismos reguladores brillan por su ausencia por cuanto son

capturados por los grupos de poder económico, favoreciendo a las

grandes empresas en desmedro de los pobres y cautivos consumidores

y usuarios. A eso, como veremos en el desarrollo del presente trabajo

de investigación, se le denominado mercantilismo.

En tres aspectos fundamentales ha incidido la implementación del

régimen de economía social de mercado en el Perú: (i) el crecimiento

Page 12: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

12

económico, (ii) la protección de los consumidores y usuarios y, (iii) la

tutela de los derechos de los trabajadores, pieza fundamental del

proceso productivo del mercado.

El crecimiento económico se ha visto favorecido con el régimen de

economía social de mercado. Pero según los indicadores del desarrollo

sostenible, el desarrollo no sólo puede medirse en crecimiento, es decir,

en cifras o números, sino también desde lo social, político, cultural,

ambiental, territorial. Éste es precisamente uno de los aspectos

fundamentales del concepto de desarrollo sostenible o sustentable.

Éste, se mide en función a todas sus aristas y no sólo desde lo

económico.

Habiéndole asignado al mercado el rol de distribuir la riqueza y los

recursos, los consumidores y usuarios no han quedado desamparados a

su suerte, sino que el Estado ha asumido su defensa y tutela.

Y tampoco se ha desentendido de los derechos de los trabajadores,

implementando una legislación que les reconoce una serie de derechos

sociales, atendiendo también a la flexibilidad laboral. Esto es

fundamental, por cuanto como veremos más adelante, los costos

laborales son significativos para la inversión privada.

Es sobre la base de esta realidad problemática, que se abordará el tema

del régimen de economía social de mercado en el Perú.

La descripción de la realidad problemática debe centrarse en el entorno

que rodea al problema. Es evidente que un problema de contenido

jurídico y social no está aislado de la sociedad, sino que forma parte de

la misma. La sociedad, de esta manera, resulta ser un engranaje de

situaciones que están íntimamente relacionadas.

En cuanto a la realidad problemática que rodea al problema que

formularemos a continuación, la economía social de mercado influye

significativamente en las relaciones de consumo, los derechos de los

consumidores, las relaciones de trabajo, así como en el accionar de los

agentes económicos y del mercado, en la inversión privada.

Page 13: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

13

Como se ha advertido, en realidad lo que rige por suelo patrio y

nacional, es el mercantilismo, socio de populismo. Ambos obedecen a

criterios de privilegios y favoritismos desde el gobierno. Lo cual es

totalmente ajeno a los principios sobre los que reposa la economía

social de mercado, la cual en principio se basa en cuanto mercado sea

posible y cuanto Estado sea necesario.

b. FORMULACIÓN DEL PROBLEMA

Problema principal : ¿En qué medida el régimen de

economía social de mercado contemplado

en la Constitución Política del Estado

incide en el crecimiento y desarrollo del

país?

Problemas específicos : ¿En qué medida el régimen de economía

social de mercado contemplado en la

Constitución Política del Estado incide en

la garantía de los derechos de los

consumidores y usuarios?

¿En qué medida el régimen de economía

social de mercado contemplado en la

Constitución Política del Estado incide en

la garantía de los derechos de los

trabajadores?

c. JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN

Como futuros profesionales del derecho y de la abogacía, debemos

encontrar la justificación legal del vigente régimen de economía social

de mercado contemplado en la Constitución Política del Estado. Más

aún cuando dicho régimen es el que condiciona el crecimiento y el

desarrollo del país.

Page 14: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

14

Como profesionales del derecho, muy bien sabemos que las normas

jurídicas generan incentivos a los agentes económicos del mercado.

Éstos ven en las normas jurídicas un factor por medio del cual,

realizando un racional ejercicio de ensayo y error, y de análisis costo y

beneficio, deciden si cumple o no a la norma.

Es por ello que creo fundamental una justificación legal de este trabo.

Pues los abogados no sólo nos debemos a los tribunales de justicia,

sino también a la realidad socio-jurídica de la que formamos parte.

Frente a la problemática social que existe en el país, dado que aún no

existe un consenso generalizado respecto de la legitimidad del régimen

de economía social de mercado como el factor que promueve el

crecimiento y general al mismo tiempo el desarrollo, es que en la

presente investigación se intentará dar una explicación legal y

doctrinaria respecto de las ventajas y desventajas del régimen en

cuestión.

Pero esa justificación legal, respecto de la legitimidad del régimen de

economía social de mercado, debe ir acompañada de un estudio de las

demás variables del desarrollo sostenible o sustentable. Pues ninguna

variable en particular nos ayudará a medir aisladamente al desarrollo.

Todas deben concurrir de manera simultánea como ya lo hemos venido

sosteniendo.

Finalmente, creo que como ciudadana, consumidora y usuario,

aprovechando los valiosos conocimientos jurídicos impartidos en mi

Universidad, puedo contribuir a un mayor entendimiento legal respecto

del régimen de economía social de mercado en el Perú.

Los profesionales del derecho no podemos ser indiferentes a la realidad

problemática del régimen de economía social de mercado, y dejarles el

problema a otros profesionales, como los economistas o sociólogos.

Pues todos, desde nuestro ámbito de acción, podemos contribuir en

algo.

Page 15: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

15

d. HIPÓTESIS

Hipótesis principal : El régimen de economía social de

mercado contemplado en la Constitución

Política del Estado incide en el crecimiento

y desarrollo del país en grado significativo.

Hipótesis específicas : El régimen de economía social de

mercado contemplado en la Constitución

Política del Estado incide en la garantía de

los derechos de los consumidores y

usuarios en grado significativo.

El régimen de economía social de mercado

contemplado en la Constitución Política del

Estado incide en la garantía de los

derechos de los trabajadores en grado

significativo.

e. VARIABLES

Variable independiente : Régimen de economía social de mercado.

Variable dependiente : Crecimiento y desarrollo del país.

Page 16: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

16

III. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN

a. OBJETIVO GENERAL

Determinar en qué grado el régimen de economía social de mercado

contemplado en la Constitución Política del Estado incide en el

crecimiento y desarrollo del país.

b. OBJETIVOS ESPECÍFICOS

Determinar en qué grado el régimen de economía social de mercado

contemplado en la Constitución Política del Estado incide en la garantía

de los derechos de los consumidores y usuarios.

Determinar en qué grado el régimen de economía social de mercado

contemplado en la Constitución Política del Estado incide en la garantía

de los derechos de los trabajadores.

.

.

Page 17: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

17

IV. MARCO TEÓRICO

4.1. La Constitución Económica

La Constitución es la norma jurídica y política de mayor jerarquía dentro

del ordenamiento jurídico de los Estados. Es norma jurídica porque

regula las funciones del Estado y reconoce derechos. Es norma política

porque es dada por un Congreso con facultades constituyentes.

La Constitución dentro de la jerarquía normativa se encuentra en el

primer nivel. Así, siguiendo los importantes aportes de Hans Kelsen en

su “Teoría Pura del Derecho”, la Constitución se convierte en la norma

fundante del ordenamiento jurídico. De ella se desprende y legitima todo

el derecho dado por los órganos competentes para ello.

Efectivamente, la Constitución establece los límites formales y

materiales para la dación de las demás normas jurídicas que

constituyen el ordenamiento jurídico de un Estado.

Como muy bien precisa el constitucionalista Bruno Águila Grados, sobre

la Constitución:

“Es un cuerpo de normas jurídicas fundamentales que contienen los

derechos esenciales de las personas y que determinan la organización

del Estado y constituye la base del ordenamiento jurídico de un país”1.

La Constitución es la norma fundamental de un Estado. Su función no

sólo se limita a reconocer y garantizar un conjunto de derechos para las

personas, sino también a estructurar los poderes del Estado. Esto es

fundamental por cuanto la Carta Magna se centra en lo esencial es una

sociedad organizada política y jurídicamente, dando lugar al Estado.

1 Águila Grados, Bruno. El ABC del Derecho Constitucional. EGACAL-Editorial San Marcos.

Lima, 2007, p. 65.

Page 18: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

18

Al conjunto de normas que desarrollan lo que la Constitución regula, se

le denomina el bloque de constitucionalidad. Así, el bloque de

constitucionalidad en materia del régimen de economía social de

mercado, estaría integrado por el conjunto de normas que establecen

los mecanismos procesales de los organismos reguladores, los

derechos del consumidor, así como las que se refieren a las prácticas

monopólicas.

Modernamente la Constitución es el texto que, desde la Carta Magna de

1215, limita el poder del soberano para proteger los derechos de las

personas. De esta suerte, originariamente la función de una

Constitución radica en colocarle límites a quien detenta el poder.

Hoy en día el exceso de constitucionalismo ha dado lugar a que todas

las áreas del derecho pretenden ser regulados en la Constitución. Si no

se encuentra regulado en la Carta Fundamental entonces carece de

amparo y protección por parte del derecho y del Estado.

Cuando la tradición constitucionalista siempre fue la de establecer

principios generales y abstractos que se vayan adaptando a las

circunstancias, sin aludir a nadie en particular, pues la ley debe ser igual

para todos.

Esa es la naturaleza de la Constitución, la de establecer los límites en el

ejercicio del poder. Y garantizar los derechos y las libertades inherentes

de las personas o agentes económicos del mercado. Pero la

Constitución no se debe poner del lado de nadie, para precisamente

garantizar la estabilidad.

Actualmente se reconocen hasta tres partes en la estructura de las

Constituciones. Una primera parte, la dogmática, que reconoce una

serie de derechos a favor de las personas.

Una segunda parte, la orgánica, que contempla la estructura orgánica

del Estado, desde las relaciones entre sus tres poderes (Ejecutivo,

Legislativo y Judicial) hasta los distintos organismos constitucionales

autónomos.

Page 19: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

19

Finalmente, se ha reconocido una tercer parte en las Constituciones, la

denominada Constitución Económica, que contempla las reglas bajo las

cuales se desenvuelven los agentes económicos, y sus relaciones con

el Estado.

Ésta es pues la estructura de la Carta Magna. De conformidad con el

constitucionalista Darío Herrera Paulsen, sobre el objeto de la

Constitución podemos precisar lo siguiente:

“La Constitución de modo genera, organiza el ejercicio del Poder. Esta

organización puede descomponerse en un cierto número de reglas que

determinan el estatuto de los gobernantes y paralelamente precisan los

fines de su actividad. El objeto de la Constitución es, pues, doble: de

una parte, designa los funcionarios a quienes corresponde decidir las

cuestiones del Estado, fijando su competencia y las modalidades de su

ejercicio y, de otra, dice Burdeau, “también indica qué doctrina de

organización de organización social y política representan los

gobernantes y, en esto, ella identifica la idea de Derecho que será la

idea de obra de la institución estatal”2.

Por otro lado, como bien precisa el constitucionalista Domingo García

Belaunde respecto de la Constitución Económica:

“(…) por tal debemos entender la parte económica que aparece en las

constituciones contemporáneas, en especial, las dictadas en el período

de entreguerras, y más en concreto, en la segunda post-guerra (…).

En efecto, la constitución económica es, en rigor, el aparato estatal de la

economía (debidamente normativizado) que, en síntesis, coincide con

los objetivos del llamado derecho económico. En consecuencia, y como

quiere que el derecho constitucional es el que posibilita y da razón de

ser del derecho económico, (…)”3.

2 Herrera Paulsen, Darío. Derecho Constitucional e Instituciones Políticas. Editorial y

Distribuidora de Libro S. A. Lima, 1987, págs. 144 y 145. 3 García Belaunde, Domingo. La Constitución en el péndulo. Editorial UNSA. Arequipa, 1996, p.

159.

Page 20: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

20

En realidad, existe un sector de la doctrina que sostiene que las

Constituciones deben ser neutrales en el extremo de incluir determinado

régimen económico, y sólo deben limitarse a garantizar derechos y

libertades.

Pues no cabe duda que los regímenes económicos obedecen a

determinadas orientaciones políticas e ideológicas, sobre las cuales es

difícil lograr determinados consensos para la legitimidad de las Cartas

Fundamentales.

En nuestro país, la vigente Constitución Política del año 1993,

contempla a la economía social de mercado como el régimen

económico que le asigna al Estado un rol regulador pero con amplios

márgenes de libertad económica para los agentes del mercado.

El artículo 58 de la Constitución Política del Estado señala lo siguiente:

“La iniciativa privada es libre. Se ejerce en una economía social de

mercado. Bajo este régimen, el Estado orienta el desarrollo del país, y

actúa principalmente en las áreas de promoción de empleo, salud,

educación, seguridad, servicios públicos e infraestructura”.

Del artículo en cuestión, el Estado se limita a cumplir un rol regulador y

subsidiario, promoviendo y orientando el desarrollo, mientras que el

sector privado en el mercado es la fuente generadora de trabajo y de

riqueza.

En ese sentido, la década del `90 del pasado siglo significó el comienzo

de las grandes transformaciones estructurales. Efectivamente, se

llevaron a cabo las denominadas reformas de primera generación, y que

abarcaron básicamente: eficiencia en el gasto público, reducción del

aparato estatal, proceso de privatizaciones, control de la inflación,

reinserción en el crédito internacional. Con esto el Perú ganó prestigio y

se convirtió en una plaza atractiva para la inversión extranjera.

Sin embargo estas reformas se hicieron con mano dura. Los exitosos

primeros años de gestión de Fujimori, gracias a una mezcla de

Page 21: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

21

neoliberalismo, mercantilismo y populismo (entiéndase: asistencialismo)

lo ensimismaron en el poder, a tal punto que intentó entornillarse en el

mismo, erosionando la frágil democracia peruana. La corrupción se

hace evidente con un video, y la sociedad civil organizada se lanza a las

calles para deslegitimar a un gobierno que se caía.

Posteriormente, Alejandro Toledo continuó y profundizó las reformas

económicas liberalizadoras, pero ahora bajo cauces democráticos. La

clase política y la sociedad en general se dan cuenta que la receta para

combatir el subdesarrollo consiste en el modelo adoptado.

Así, comienza una nueva etapa de apertura con la suscripción de

acuerdos comerciales con otros países, los cuales precisamente han

dinamizado la economía nacional, siendo que el gobierno de Alan

García cosechó sus frutos, quien se vio favorecido por los altos precios

internacionales de los minerales. El líder aprista, como una manera de

reivindicarse con el Perú por su desastroso primer gobierno, afirmó el

modelo.

Si bien es cierto, el régimen le ha dado crecimiento al país, por otro lado

no ha logrado reducir la brecha entre ricos y pobres. El gran reto de los

sucesivos gobiernos consiste en redistribuir la riqueza y combatir la

pobreza. Sin embargo, no puede ni debe apartarse del camino ya

trazado, y que tanto sacrificio le ha costado al país. Hacer lo contrario,

significaría echar por la borda tantos años de esfuerzo en ir moldeando

un modelo que muchos reconocen como “el milagro peruano”.

La idea de implementar una Constitución Económica, es decir, un

capítulo dedicado a regular los aspectos de las relaciones económicas,

en la Constitución, fue la de dotas de las herramientas jurídicas y

legales a los agentes del mercado.

Y es que sin reglas de juego los agentes económicos quedan sujetos a

excesos y abusos. La tarea del Estado y de la Constitución consiste

precisamente en dotar de seguridad jurídica a las relaciones jurídicas,

incluidas las relaciones del mercado.

Page 22: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

22

Por otro lado se ha sostenido que el modelo es un régimen político. Por

cuanto básicamente se centra en establecer las funciones del Estado en

el mercado o en la economía.

El punto en cuestión consiste en determinar los alcances del Estado.

Por cuando lo que debe prevalecer es que el mercado puede por sí

mismo darle solución a las denominadas fallas.

4.2. La economía social de mercado: un poco de historia

El modelo económico adoptado fue implementado por los alemanes

luego de la Segunda Guerra Mundial, con su Canciller Konrad Adenauer

y el Ministro Ludwig Erhard. Este modelo se basó en el libre cambio que

prospero durante el siglo XIX en la denominada Época Victoriana,

época en la que resaltó el gobierno liberal de William Gladstone.

Recoge así mismo la doctrina socialcristiana, la cual propone un rol

social asignado al Estado en la economía. De esta manera, se busca un

punto de encuentro entre el individualismo liberal y la solidaridad

cristiana.

Como se ha precisado en un interesante trabajo de doctorado de la

Universidad Privada de San Martín de Porres, respecto de los orígenes

de la economía social de mercado:

Ahora bien, los agentes del mercado no sólo deben obedecer a sus

satisfacciones particulares, sino que deben conciliar sus particulares

intereses con el nacional y el bien común.

De esta manera, la economía social de mercado se encuentra entre la

economía centralmente planificada y la economía de libre mercado.

En la economía de libre mercado el mercado se autorregula a sí mismo,

como resultado de la interacción libre y espontáneo de los agentes

económicos. Rige la ley de la oferta y de la demanda, la cual fija los

Page 23: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

23

precios de los bienes y servicios que se intercambian para la

satisfacción de las necesidades y por medio de la valoración subjetiva.

En la economía centralmente planificada, el Estado es el agente sobre

el cual gira toda la economía. Realiza actividad empresarial estatal, fija

los precios, los tributos, los aranceles, planifica el desarrollo. No existen

libertades económicas.

Libertades económicas, derechos de los consumidores, rol subsidiario,

promoción del desarrollo y, políticas de inclusión social, serían las

columnas del régimen de economía social de mercado, de lo que se

desprende la sentencia citada por el Tribunal Constitucional.

Es ilustrativa la comparación que realiza Bruno Leoni en torno a los dos

regímenes económico en comparación con los sistemas jurídicos. Así,

para Leoni, la economía de libre mercado va de la mano con el sistema

jurídico anglosajón, en la medida que se basan en las libertades

individuales. Mientras que la economía centralmente planificada va de la

mano con el sistema jurídico romano – germánico, en la medida que

ambos necesitan de la ley para planificar y ordena la convivencia social.

Como ha quedado claro, la economía social de mercado recoge lo

mejor de cada régimen económico, siendo un modelo intermedio entre

los dos antagónicos.

La economía social de mercado, como ya se ha precisado, es un

modelo ecléctico entre la economía de libre mercado y la economía

centralmente planificada. Para ello debemos remontarnos

históricamente a las primeras organizaciones políticas y económicas.

Así, en la Edad Antigua, el comercio surgió con los fenicios. Es en mar

Mediterráneo donde encontramos los primeros atisbos del comercio y el

tráfico mercantil entre las culturas fenicia y griega. Las democracias

griegas establecieron una suerte de globalización a escala menor. Más

adelante sus conquistadores, los romanos, expandieron el derecho a

todos los pueblos conquistados, estableciendo relaciones comerciales y

de subordinación a su imperio.

Page 24: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

24

Con la caída del Imperio Romano, durante la Edad Media, en lo

económico rigió el feudalismo. Un régimen basado en la propiedad

sobre la tierra. La autoridad la concentraba el Señor Feudal, quien era

propietario de grandes extensiones de tierra. Parte de su tierra se la

daba a sus vasallos, con quienes celebraba una suerte de contrato por

medio del cual aquellos producían para su subsistencia y cambio de

pagaban en tributo al Señor y se sometían a su autoridad.

Con el Renacimiento Comercial el capitalismo reemplazó al feudalismo.

En adelante la riqueza ya no reposará en la propiedad sobre la tierra

sino en las relaciones mercantiles y comerciales. Los individuos

abandonaron el campo y se trasladaron a las ciudades a ofertar sus

fuerzas de trabajo, en las relaciones comerciales. Durante la Baja Edad

Media ya se habían ido formando los elementos que más tarde

configurarían al Mundo Moderno.

Sin embargo, durante la Edad Moderna, la Europa Continental

sucumbiría por el mercantilismo, propios de los regímenes absolutistas.

La frase “dejar hacer, dejar pasar”, fue una frase que denunció la

libertad de empresa e industria y la libertad de comercio, entre las

personas al margen de sus nacionalidades.

El capitalismo floreció durante el siglo XIX, cuando las naciones, y

principalmente El Imperio Británico apostaron por el libre comercio. Sin

embargo, los excesos en las relaciones laborales, las jornadas que

sobrepasaban las ocho horas diarias, ínfimas remuneraciones, las

precarias condiciones, dieron lugar a la creación de organizaciones

sindicales, socialistas y anarquistas que abogaron por los derechos de

los trabajadores.

En Inglaterra, por ejemplo, la Sociedad Fabiana dio lugar más tarde a la

creación del Partido Laborista. Los múltiples movimientos anarquistas

en España e Italia, competían con las organizaciones socialistas y

comunistas, que más tarde llevaron a la práctica las ideas en la

Revolución Rusa.

Page 25: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

25

En adelante, las legislaciones del mundo se adhirieron a toda la

corriente en pro de los derechos de los trabajadores. Es así como en el

derecho constitucional se reconocieron legalmente una serie de

derechos, de contenido económico, social y cultural. Los denominados

derechos de segunda generación.

En América Latina, durante la década de los años 60 y 70, se

implementaron una serie de medidas económicas tomando como

modelo a las políticas de la Comisión Económica para América Latina –

CEPAL, que se reducían a la industrialización por sustitución de

importaciones. El modelo consistía en que los países latinoamericanos,

para promover a sus industrias nacionales, elevaran las tasas de los

aranceles para la importación de bienes, favoreciendo el consumo de

productos nacionales.

Esas medidas, a la larga, aislaron del comercio internacional a los

países latinoamericanos, mientras que otros países, especialmente los

denominados “tigres asiáticos”, desregulaban sus mercados y

aperturaban sus economías al comercio internacional.

En el caso del Perú, toda la década de los años 70 del siglo pasado, y la

década de los 80, significaron un tiempo perdido, porque no se

implementaron las medidas económicas que nos permitieran sacar

provecho no sólo de los vastos recursos naturales, sino también del

talento de nuestra gente.

Es así como llegamos a los años 90, en que se dio la vigente

Constitución, la cual es precisamente la que regula a la economía social

de mercado, inclinándose más a las relaciones del mercado, la

promoción de la inversión, los derechos de los consumidores y usuarios,

los derechos de los trabajadores, el desarrollo sostenible, entre otros

aspectos fundamentales.

Si nos queremos remontar a la historia reciente, debemos referirnos a la

“Guerra fría”. Fue un periodo comprendido entre el fin de la Segunda

Guerra Mundial y los últimos años de la década de los ´90. Durante este

periodo, dos grandes potencias políticas, económicas, militares y

Page 26: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

26

diplomáticas, como fueron los Estados Unidos de Norteamérica y la ex

Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), se vieron

enfrascadas en una suerte de carrera armamentista, y además de

mostrarle al mundo cuál de los dos modelos que abrazaban cada uno

de ellos, era el mejor para brindarle prosperidad a las naciones del orbe.

Así, mientras los Estados Unidos de Norteamérica se adscribía al libre

mercado del capitalismo y la democracia, la URSS lo hacía a la

economía centralmente planificada y el totalitarismo.

Fueron la caída del Muro de Berlín y la desmembración de la Unión

Soviética lo que le demostró a las naciones del mundo que no existía

mejor receta para lograr el crecimiento económico y el desarrollo de los

pueblos, que el libre mercado, el capitalismo y la democracia liberal en

estado de derecho. Así lo sostuvo el futurólogo Francis Fukuyama en

“El fin de la historia y el último hombre”.

Hoy en día, el reto de los regímenes económicos radica en lograr la

inclusión social de miles y millones de personas que sobreviven en la

pobreza. En el caso del Perú, se vienen haciendo grandes esfuerzos, a

pesar de problemas como la corrupción, para ese cometido.

En el ámbito nacional, la clase política tradicional que había gobernado

durante los años 80, se había desprestigiado ante la opinión pública por

sus gobiernos que insistieron con políticas económicas proteccionistas y

de aislamiento del comercio internacional. Se tenía como modelo a lo

que en Europa denominaban el Estado de Bienestar. La Constitución de

1979, como se ha precisado, estaba en esa corriente, al ser una copia

de la Constitución española de 1978. La idea era que el Estado

garantizara un mínimo de seguridad a los ciudadanos.

El enfoque de la economía social de mercado en la anterior Constitución

de 1979 se centraba en los derechos de contenido social. Pues se

inspiró en la Constitución española de 1978, cuando España restauraba

a su Monarquía y un régimen constitucional de partidos, luego de la

dictadura de Francisco Franco.

Page 27: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

27

A su turno, el jurista peruano Enrique Chirinos Soto en su momento al

realizar unos comentarios a la anterior Constitución Política del Perú del

año 1979, ha precisado las siguientes ideas en torno al régimen

económico –también de economía social de mercado- que rigió en

aquella Constitución y contenido en su artículo 110, en los siguientes

términos:

“Por lo pronto, el artículo bajo comentario define principios inobjetables.

Se declara, por ejemplo, que el desarrollo económico y social se

alcanza por medio del incremento de la producción y la productividad.

Incrementar la productividad significa producir mejor. Significa obtener

racionalmente el máximo del esfuerzo humano. Para distribuir, hay que

empezar a producir. No es lo mismo que determinar la prioridad entre el

huevo y la gallina. No. No se puede distribuir la riqueza que todavía no

se ha producido. Tal es una de las leyes de hierro de la economía.

En cuanto al trabajo, ya se ha declarado que en el Preámbulo que “es

deber y derecho de todos los hombres y representa la base del

bienestar nacional”. En el artículo 42, que es “fuente principal de la

riqueza”. En el artículo 79, que la República del Perú se basa en el

trabajo”4.

Hoy en día pueden vislumbrarse los efectos de haberse aplicado un

modelo en el que se ahogó desmedidamente de gasto y presupuesto

público al Estado de Bienestar. Consecuencias que está pagando la

Unión Europea con una crisis que ha sacudido a países como España y

Grecia.

El gasto desmedido sin prever las fuentes, es en materia económica

totalmente irresponsable. Ello, a la larga, condena a las generaciones

futuras a asumir los costos de las decisiones de las generaciones

presentes. En economía existe un principio básico, que consiste en que

no se puede ni se debe gastar más de lo que ingresa.

4 Chirinos Soto, Enrique. La Nueva Constitución al alcance de todos. Editores Importadores S.

A. Lima, 1986, p. 122.

Page 28: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

28

4.3. La economía social de mercado contenida en la Constitución

Política del Estado

Bajo el antecedente histórico de la implementación de la economía

social de mercado en la vigente Constitución, uno de los progresos que

ha traído la vigente Constitución en cuanto a su capítulo del régimen

económico, es el reconocimiento de un derecho de los consumidores y

usuarios, como lo veremos más adelante.

Como ha sostenido Lourdes Flores Nano, respecto de la economía

social de mercado en el Perú:

“Creemos que el desafío de los próximos cinco años es profundizar en

ella, precisamente para hacerla accesible a aquellos que no están en el

mercado. Desde una perspectiva privada esto consiste en dejar que la

inversión privada venga, crear las reglas más simples y permitir que

haya el mayor despliegue a partir de la inversión. Desde una

perspectiva pública la tarea promotora del Estado consiste, en nuestro

concepto, no en el asistencialismo, el populismo o el subsidio

indiscriminado, sino en favorecer las inversiones para que el mercado

sea accesible a las unidades productivas ahora ausentes en un número

importante”5.

El reto en el Perú, radica pues en encontrar un punto de equilibrio entre

los fines públicos que debe garantizar el Estado, con lo privado, donde

prevalece la inversión de las empresas privadas que son las que

generan los puestos de trabajo. El Estado asume, en el contexto de la

economía social de mercado un rol promotor.

Carlos Guillermo Morales6, en un interesante estudio en torno al rol del

Estado en la economía social de mercado contemplado en la

5 Flores Nano, Lourdes. La Reforma Constitucional desde la perspectiva de Unidad Nacional.

En: “Reforma del Estado Reforma de la Constitución”. Comisión Andina de Juristas – Konrad Adenauer Stiftung. Lima, 2005, pp. 143-162, p. 147. 6 Guillermo Morales, Carlos. El rol del Estado en una economía social de mercado. En: “Temas

de pensamiento político”. Fundación Konrad Adenauer en el Perú. Instituto Peruano de Economía Social de Mercado. Lima, 2003, pp. 63-90.

Page 29: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

29

Constitución, al mismo tiempo que precisa cuál es el rol del Estado en

la economía, precisa el contenido constitución del régimen económico

en cuestión, en mérito a los siguientes puntos:

1. Reconoce como principio fundamental que la iniciativa privada es

libre, y que se ejerce en una Economía Social de Mercado (art.

58º).

2. El Estado cumple un rol promotor en el desarrollo del país,

actuando principalmente en las áreas de promoción del empleo,

salud, educación, servicios públicos e infraestructura (art. 58º).

3. El Estado puede cumplir un rol empresarial subsidiario en la

economía, sólo autorizado por ley expresa, o por razón de alto

interés público o de manifiesta conveniencia nacional (art. 60º).

4. La actividad empresarial pública o privada recibe idéntico

tratamiento legal (art. 60º).

5. El Estado facilita y vigila la libre competencia. Combate toda

práctica que la limite, así como el abuso de posiciones de

dominantes o monopólicas. Ninguna ley ni concertación puede

autorizar monopolios (art. 61º).

6. La libertad de contratar garantiza que las partes pueden pactar

válidamente según las normas vigentes. Dichos términos

contractuales no pueden ser modificados por leyes u otras

disposiciones (art. 62º).

7. Mediante contratos – ley el Estado puede establecer garantías u

otorgar seguridades a los contratantes. Dichos contratos tampoco

pueden ser modificados legislativamente, sin perjuicio de la

protección otorgada a la propia libertad de contratar antes indicada

(art. 62º).

8. La inversión nacional y la extranjera reciben idéntico tratamiento

legal. En todo contrato estatal debe constar el sometimiento de los

Page 30: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

30

contratantes a las leyes y tribunales de la República y su renuncia a

reclamación diplomática. Se exceptúa de lo dispuesto

anteriormente a los contratos de carácter financiero (art. 63º).

9. El Estado y las demás personas de derecho público pueden

someter sus controversias a tribunales o arbitraje nacional o

internacional, en la forma que disponga la ley (art. 63º).

10. El Estado defiende el interés de los consumidores y usuarios,

garantizando el derecho a la información sobre los bienes y

servicios en el mercado (art. 65º).

El Supremo Intérprete de la Constitución ha precisado los principios

constitucionales que informan al modelo económico. La garantía a estas

libertades es fundamental en un régimen de economía social de

mercado. Por cuanto sin derechos de propiedad los agentes

económicos no se sienten incentivados para invertir, al no sentir la

seguridad que el Estado y las leyes protegen lo suyo. Eso es libertad de

empresa.

Sumado a ello, el mercado y los intercambios sólo operan allí donde

existen derechos de propiedad, y donde la propiedad está

descentralizada entre miles y millones de personas, que intercambian

las titularidades de dichos bienes y servicios. Y eso es libertad de

contratación y de comercio.

No puede desarrollarse una economía de mercado donde no hay

derechos de propiedad privada. Pues los intercambios por medio de los

contratos, opera cuando existen titulares de los bienes. Precisamente,

los derechos de propiedad privada permiten maximizar y sacar el mejor

provecho de los bienes, asignándoles un valor.

En suma, el régimen de economía social de mercado, que realza al

mercado como el escenario de interacción de los agentes económicos,

con un rol social del Estado, no opera sin la garantía a dichas libertades

económicas.

Page 31: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

31

En el contexto en que en el Perú se debatía dentro del Congreso

Constituyente Democrático la dación de una nueva Constitución, la de

1993, el Centro de Investigación y Estudios Legales – CITEL, editó un

texto de Bernard H. Siegan titulado: “Reforma Constitucional Esbozando

una Constitución para una República que emerge a la libertad”. En

dicho texto, el autor precisó lo que una Constitución debe contener en

materia económica:

“(…) las regulaciones económicas son impuestas por una o ambas de

las siguientes razones: primero, para intentar mejorar el funcionamiento

del sistema económico, esto es, para remediar o eliminar los excesos o

las limitaciones del mercado; segundo, para asegurar ventajas

económicas a una persona, sociedad o grupo económico, mediante la

eliminación o restricción de negocios, ocupaciones, productos o

servicios competitivos”7.

En materia económica, es controvertido el aspecto que reserva a la

Constitución una función reguladora. Se ha sostenido que en cambio las

Constituciones debieran evitar pronunciarse sobre el régimen

económico, es decir, asumir una cierta neutralidad que sería resuelta

por los propios tribunales de justicia o tribunales administrativos en

casos concretos y particulares.

Ahora bien, lo que debemos cuestionarnos es si realmente la economía

social de mercado contemplada en la Constitución Política se verifica en

la realidad.

4.4. La relación de la economía social de mercado con la fórmula

política

No puede desconocerse el hecho de que lo político y lo económico

están íntimamente vinculados el uno al otro. Se condicionan

mutuamente. En lo político, la forma de gobierno en nuestro país, el

7 Siega, Bernard H. Reforma Constitucional Esbozando una Constitución para una República

que emerge a la libertad. CITEL. Lima, 1993, p. 79.

Page 32: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

32

Perú, es la democracia representativa. De conformidad con el artículo

43 de la Constitución, la cual establece textualmente que:

“La República del Perú es democrática, social, independiente y

soberana.

El Estado es uno e indivisible.

Su gobierno es unitario, representativo y descentralizado, y se organiza

según el principio de la separación de poderes”.

Somos pues una democracia representativa, una República social.

Siendo el Estado unitario y descentralizado, organizándose en función a

la separación de poderes.

Es en mérito a ello, que el Estado Social y Democrático de Derecho le

asigna al Estado una serie de funciones en lo social y económico. Su

función o rol, como veremos más adelante, se centra en garantizar una

estabilidad política y social para que los agentes del mercado puedan

desenvolverse eficaz y eficientemente, pero teniendo como norte el bien

común.

Así es, el Estado es el garante del bien común, pues la economía social

de mercado se enmarca dentro de aquella lógica. Es cierto que los

agentes del mercado en principio buscan satisfacer necesidades o

incrementar sus ganancias. Pero deben hacerlo legítimamente en

armonía con el bien común.

Ahora bien, debe precisarse que estos conceptos de Estado Social y

Democrático de Derecho, Estado Constitución de Derecho, o simple y

sencillamente Estado de Derecho, se circunscriben a establecer un

marco normativo sobre el que tanto los poderes del Estado como la

sociedad civil, interactúan. La idea es que nadie esté por encima de la

ley, ni gobernantes ni gobernados.

Como se ha precisado, nuestro sistema político es la democracia

representativa. Implica un sistema por medio del cual los ciudadanos

eligen a sus representantes, quienes toman decisiones por la

Page 33: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

33

ciudadanía en mérito a funciones, competencias y atribuciones

previamente señaladas en la Constitución y demás leyes.

Pero la democracia no significa atropello de derechos, al margen que

exista una mayoría que gobierne. Las funciones de quienes ejercen una

representación política están señaladas en la Constitución. Esto es, en

suma, el Estado de Derecho.

Lo que los ingleses conocen como the rule of law, por nuestro sistema

jurídico en el Perú, nos inclinamos por el estado de derecho, que implica

básicamente tres aspectos: que gobiernen las leyes, que haya

separación de poderes y, que rijan plenamente los derechos de las

personas.

Esto es fundamental por cuanto sin libertades y derechos políticos, la

economía social de mercado no puede prosperar. Es lo que viene

criticándosele al régimen de partido único en la República Popular

China. Ésta se ha adscrito en su totalidad al régimen del capitalismo que

se basa en las libertades del mercado. Pero sin una sólida democracia

que garantice derechos civiles y políticos, de nada servirán las

libertades económicas.

En el Perú, nuestra democracia se encuentra en plena consolidación.

Pues venimos celebrando elección, a pesar de los problemas que

existen. La historia de nuestro país es de dictaduras militares y civiles.

Raramente hemos gozado de democracia. Es la excepción. A pesar de

ello, el reto radica en consolidar una clase media capaz de asumir el

reto de defender sus derechos de propiedad.

Se ha sostenido que la democracia se edifica sobre la base de las

clases medias. Cuando éstas tienen derechos que defender, entonces

se consolida la democracia.

Sin embargo, la democracia tampoco puede operar sin un régimen

económico que garantice las libertades económicas: derechos de

propiedad privada, contratos, libertad de empresa y, libertad de trabajo.

Page 34: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

34

A continuación, precisaremos el contenido jurídico de estos aspectos

fundamentales para que opere la economía social de mercado.

4.5. Derechos y libertades garantizados por la economía social de

mercado

Una economía social de mercado, como mínimo debe garantizar ciertos

derechos y libertades, básicos para que el mismo régimen económico

pueda funcionar. Estos derechos y libertades al mismo tiempo son

derechos de contenido civil y político. Son: el derecho de propiedad, la

libertad de contratación, la libertad de empresa y, la libertad de trabajo.

El derecho de propiedad es una institución del derecho civil. Surge en

Roma como la propietas. Hoy en día el derecho de propiedad no sólo

tiene un contenido civil, sino también constitucional. En Roma se

asumía que el derecho de propiedad confería a su titular un conjunto de

atributos y facultades que podía ejercer sobre el bien, esto es: jus

utendi, jus fruendi, jus abutenti, jus persequendi; es decir, usar, disfrutar,

abusar, disponer y, reivindicar.

Pero como se ha precisado, la propiedad tiene una connotación

constitucional. Está reconocida en nuestra Constitución en su artículo

70. Y bajo el esquema de la economía social de mercado, la propiedad

debe ejercerse en armonía con el bien común y dentro de los límites de

ley.

Por ello, el derecho de propiedad faculta a su titular para usar, gozar,

explotar y disponer de ella, siempre y cuando, a través de su uso, se

realice la función social que le es propia. De ahí que el artículo 70.° de

la Constitución precise que el derecho de propiedad se “ejerce en

armonía con el bien común”. Y no solo esto; además, incluye el derecho

de defender la propiedad contra todo acto que tenga efectos de

privación en la integridad de los bienes protegidos”.

Ahora bien, desde el análisis económico del derecho, se asume que

establecimiento de derechos de propiedad privada genera incentivos a

Page 35: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

35

los agentes económicos. En la medida que el propietario que sabe que

la ley garantiza su derecho de propiedad, invertirá para maximizar el

bien o recurso.

Sin embargo, existe una limitación constitucional al derecho de

propiedad reconocido en el propio artículo 70 de la Constitución, que es

la expropiación. La expropiación es la pérdida del derecho de propiedad,

que efectúa el Estado en razón a dos causales: seguridad nacional o

necesidad pública. Pero debe ser declarado por ley y previamente debe

pagarse en efectivo una indemnización justipreciada que comprenda a

su vez compensación por algún eventual perjuicio.

Esta es la que se conoce como la expropiación directa, que en el fondo

es el despojo de la titularidad sobre el bien que efectúa el Estado sobre

la persona propietaria.

Existe sin embargo otra clase de expropiación que no se encuentra

regulada en la ley, pero sí en pronunciamientos de los tribunales de

justicia como el Tribunal Constitucional y el Indecopi. Se trata de la

expropiación indirecta o regulatoria.

Efectivamente, con el voto del magistrado César Landa Arroyo, que se

introduce jurisprudencialmente en el Perú, la figura de la expropiación

indirecta o regulatoria, bajo los siguientes alcances:

“La noción de expropiación indirecta o expropiación regulatoria se utiliza

tanto en derecho internacional como en derecho interno. A nivel de

derecho internacional se ha empleado expresamente dicha noción en el

reconocimiento del deber de protección del Perú frente a inversionistas

extranjeros en Tratados Bilaterales de Promoción y Protección

Recíproca de Inversiones, reconociendo el derecho de dichos agentes a

ser indemnizados si son expropiados regulatoriamente.

(…)

A nivel interno, entendemos por expropiación indirecta o expropiación

regulatoria aquellas en donde la Administración Pública a través de uno

Page 36: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

36

sobre regulación priva (total o parcialmente) al propietario de un bien de

uno o todos los atributos del derecho de propiedad (ya sea del uso, del

disfrute o de la disposición). El derecho de propiedad sobre bienes tiene

sentido en tanto permiten extraerle un mayor provecho a los bienes. Si

no se puede disponer, usar o disfrutarlos bienes, gozar de su titularidad

carece de relevancia”8.

Así es. Aquella se presenta cuando como consecuencia de la actividad

regulatoria del Estado, la persona propietaria no puede ejercitar los

atributos que confiere precisamente el derecho de propiedad, esto es,

usar y disfrutar. Propiamente no existe un despojo del derecho de

propiedad, sino que simple y sencillamente resulta imposible ejercer los

atributos del derecho de propiedad. Es decir, la persona sigue siendo

propietaria, sigue siendo titular, pero no puede ejercitar plenamente las

facultades del derecho de propiedad.

La función del derecho consiste en garantizar el derecho de propiedad,

que es piedra fundamentar sobre el que reposa tanto el sistema político

como el sistema económico.

Por otro lado, un régimen de economía social de mercado no

funcionaría si es que no se garantiza la libertad de contratación.

Precisamente, el mercado es un espacio donde miles y millones de

personas intercambian bienes y servicios. Siendo el contrato el

instrumento jurídico por el cual operan tales transacciones.

La Constitución Política garantiza a todas las personas en su artículo 2

inciso 14 el derecho a “contratar con fines lícitos, siempre que no se

contravengan leyes de orden público”. Sin embargo, la libertad de

contratación, como todo derecho constitucional y fundamental, tiene

limitaciones, dado que ningún derecho es absoluto. La propia

Constitución establece que tal limitación es el orden público.

Efectivamente, siendo el contrato un acto jurídico y una figura del

derecho civil, de conformidad con el artículo V del Título Preliminar del

8 Sentencia del expediente 01735-2008-PA/TC.

Page 37: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

37

Código Civil, “es nulo el acto jurídico contrario a las leyes que interesan

al orden o a las buenas costumbres”.

Ahora bien, la libertad de contratación a su vez comprende dos

libertades: (i) la libertad de contratar y, (ii) la libertad contractual.

La libertad de contratar significa la posibilidad que tiene cada persona

de celebrar o no un contrato, y de decidir con quién celebrar ese

contrato. Por otro lado, la libertad contractual implica ponerse de

acuerdo con la otra parte en cuanto al contenido del contrato, es decir,

en cuanto a las cláusulas que gobernarán y regirán el acuerdo.

Es pues la libertad de contratación, piedra fundamental del régimen de

economía social de mercado. Gracias a este instrumento jurídico, miles

y millones de personas lograr los intercambios mercantiles en los

mercados, logrando satisfacer necesidades.

El contrato es el instrumento jurídico por excelencia que permite y

facilita los libres intercambios. El comercio, propio del libre mercado, se

basa en el contrato. A nivel internacional, instituciones como el

UNIDROIT, la Cámara de Comercio Internacional de París, el

UNCITRAL, abogan por la difusión de los principios del contrato en

general.

Debe distinguirse que existen contratos de naturaleza civil y contratos

de naturaleza comercial. En el caso del Perú, las normas del contrato en

general están contenidas en el libro VII del Código Civil. Dichas normas

resulta aplicables a todos los contratos en general, sean civiles,

comerciales, administrativos, laborales.

La principal fuente normativa de los contratos civiles es el Código Civil.

Mientras que la principal fuente normativa de los contratos comerciales

es la costumbre. Ello es así por cuanto el comercio y las relaciones

mercantiles son dinámicas, y legislar en materia de contratos como la

franquicia, el joint venture, el know how, etc., resulta un tanto forzar a

estas figuras contractuales que encajan mejor con lo consuetudinario.

Page 38: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

38

Sería como encasillarlas o tomarles una fotografía del momento, cuando

la realidad de estos contratos evoluciona momento tras momento.

Como ha quedado claro, el contrato es fuente generadora de

obligaciones. Las obligaciones surgieron en Roma. En Roma se

establecieron las obligaciones de dare, facere, y non facere (dar, hacer

y no hacer). En un contrato, que es el acuerdo de voluntades, ambas

partes ganan derechos y adquieren obligaciones.

El contrato sólo vincula jurídicamente a las partes que lo han celebrado.

Es decir, los terceros, quienes no han participación en la celebración del

mismo, ni ganan derechos ni adquieren obligaciones. Sin embargo, en

el caso de los sucesos, éstos adquieren los derechos y obligaciones de

su causante.

El objeto del contrato es establecer una relación jurídica obligacional

entre acreedor y deudor. Siendo que el objeto de dicha relación jurídica

obligacional son las recíprocas prestaciones que se deben ambas

partes. En adelante, lo que vincula jurídicamente a ambos extremos de

la relación, no es el contrato, sino precisamente la relación

jurídicamente obligacional.

Los intercambios que se producen a través del contrato operan a través

de la subjetividad. El valor de los bienes que se intercambian es

enteramente subjetivo. Un bien, en el mercado, vale de acuerdo a su

escasez o a su abundancia, por medio de la ley de la oferta y la

demanda. Cuanto más escaso sea un bien y mayor su demanda, valdrá

más; sin embargo, mientras abunde más en el mercado y su demanda

sea menor, su valor se verá reducido. Somos las personas quienes les

asignamos valores a los bienes. Los bienes en sí no tienen un valor

objetivo, intrínseco. Sin embargo, hay que distinguir el concepto de valor

de otros conceptos como precio y costo. El precio es como se oferta al

mercado, mientras que el costo es lo que se invierte en la producción de

dicho bien.

No se puede garantizar un régimen de economía social de mercado, si

es que no se dejan amplias libertades para que sean las personas

Page 39: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

39

quienes les asignemos valores a los bienes y a las cosas. El Estado no

fija los precios de los bienes y servicios. El precio se fija y establece por

la espontánea concurrencia de ofertantes y demandantes en el

mercado. Cuando el Estado fija los precios, nos encontramos en

realidad en una economía centralmente planificada.

Así mismo, la economía social de mercado debe garantizar la libertad

de empresa. Ésta no es más que una forma del emprendimiento del

agente económico. La empresa, que en el fondo es un concepto más

económico y de la administración y gerencia, que jurídico, es la

aventura de una persona de negocios, en ver una verdadera

oportunidad de maximizar ingresos en una determinada actividad

económica.

Es pues la libertad de empresa pieza fundamental en el juego

económico de los agentes del mercado. La idea es que el Estado facilite

y vigile la libre competencia, combata las prácticas que limiten la libre

competencia, y al mismo tiempo combata el abuso de las posiciones

dominantes o monopólicas. La libre competencia se convierte así en el

escenario en el que los agentes del mercado compiten por los

consumidores y/o usuarios. Ello permite abaratar costos y brindar

productos y servicios a mejor calidad. El beneficiado de ello es el

consumidor y/o usuario.

La libre competencia es que los agentes del mercado compitan. Y la

función del Estado se reduce a garantizar un juego limpio sobre las

reglas de juego dadas, y que se desprenden del régimen de economía

social de mercado contenido en la Constitución Política.

Bajo las reglas de la economía social de mercado, se garantiza que

todos los agentes económicos gocen de la posibilidad de acceder al

mercado como proveedores. Además, la Constitución Política garantiza

que tanto la inversión privada nacional como extranjera se sujetan a las

mismas reglas, sin mayores privilegios.

Lo cierto es que el monopolio es una figura que naturalmente se

produce en el mercado. Ello es así por cuanto los agentes económicos

Page 40: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

40

aspiran a ser los únicos proveedores de un producto y servicio, y

tienden a eliminar a la competencia, abaratando sus costos o brindando

servicios de mejor calidad. Los grandes beneficiados del régimen de

competencia, finalmente son los consumidores y/o usuarios, que

acceden a productos o servicios de calidad a bajos costos.

En algunos rubros, como los servicios públicos y básicos, como es el

caso de los servicios de saneamiento y energía eléctrica, resulta más

rentable económicamente que sea un solo proveedor el encargado de

brindar el servicio, pues si se introdujera un régimen de competencia en

estos rubros, ello implicaría que la empresa que ingresa al mercado, en

el caso de los servicios de saneamiento tendría que establecer su

propia red de suministro de agua potable y alcantarillado para sus

usuarios, lo mismo que la empresa que ingrese en el rubro de energía

eléctrica tendría que tender sus propia red de suministro. En estos

casos, se produce el monopolio natural.

Así mismo, el régimen económico debe garantizar la libertad de trabajo.

Ahora bien, hay que distinguir entre derecho al trabajo y libertad. De

trabajo. El Estado y la Constitución garantizan el derecho al trabajo,

esto, la posibilidad de acceder a un trabajo formal, con todas las

garantías y beneficios que la ley prevé. Sin embargo, ello no significa

que el Estado debe estar obligado a proporcionar puestos de trabajo,

sino que serán las condiciones de la economía las que generen los

puestos de trabajo que demanda la sociedad. Es tarea del Estado

generar las condiciones para que el sector privado pueda invertir y

generar así los puestos de trabajo necesarios. Por otro lado, la libertad

de trabajo significa que toda persona tiene la posibilidad de

autogenerarse la oportunidad de trabajo.

Lo cierto es que la realidad peruana demuestra altos índices y grados

de informalidad laboral. Masas de trabajadores que son

sobreexplotados en los mercados informales, laborando más de ocho

horas diarias bajo salarios ínfimos, sin derechos sociales, sin seguro, ni

pensiones, en situaciones precarias, exponiendo su seguridad e

integridad en una gran mayoría de circunstancias.

Page 41: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

41

No menos cierto es que el enfoque legalista y del análisis económico del

derechos nos indica que, en realidad, la regulación laboral que exige a

las empresas que quieren ser formales, a que cumplan con una serie de

derechos y beneficios a los trabajadores, constituye una barrera para la

formalización. Cumplir la legalidad es costoso en el Perú. Son pocas las

empresas que pueden pagar un sueldo mínimo vital. Ello a la larga

promueve el desempleo, pues cumplir la norma empuja a los

empleadores a desemplear a varios trabajadores, pues no están en

condiciones de pagarles un sueldo mínimo vital.

De lo que se trata es de encontrar un punto de encuentro entre el

derecho de los trabajadores y la promoción de la inversión privada, que

es la que genera los puestos de trabajo mediante el factor de

producción del capital. La seguridad laboral o la flexibilidad laboral son

conceptos que deben ser asumidos en el real contexto del régimen

económico peruano. Ver a estos conceptos como instrumentos que

permitan sacar el máximo provecho de la masa laboral peruana. No sólo

como meros conceptos que obedecen a determinadas ideologías.

Los radicalismos a veces son perjudiciales. De tal suerte que lo utilitario

resulta encontrar un punto de equilibrio entre las demandas laborales de

los trabajadores, las cuales son legítimas, pues lo que buscan es una

calidad de vida y digna, para ellos y sus familias; mientras que el

empleador busca maximizar sus ingresos en procura de una mayor

inversión a largo plazo, que genere a su vez más puestos de trabajo.

Como veremos más adelante, el trabajo es fundamental en las

relaciones del mercado. Es el trabajo el factor de producción que genera

la riqueza. Pero para ello Es función del Estado garantizar este derecho

que al mismo tiempo es una libertad.

4.6. El rol del Estado en la economía social de mercado

En los últimos años se ha logrado un cierto grado de consenso respecto

al rol del Estado en el régimen de economía social de mercado. De esta

manera las leyes del mercado rigen en plena libertad, siendo que el

Page 42: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

42

Estado propicia las condiciones de la libre competencia, permitiendo

que los agentes del mercado interactúen libre y espontáneamente.

Así, al Estado se la asignado la triple función en la economía,

consistente en: (i) regular al mercado, (ii) promover y orientar el

desarrollo nacional y, (iii) realizar actividad empresarial subsidiaria.

Según la ONG Agenda Perú, las funciones genéricas del Estado son las

siguientes:

1. Garantizar la seguridad externa e interna.

2. Establecer y mantener la estabilidad de las reglas de juego para la

participación y representación política.

3. Establecer las normas jurídicas y administrar la provisión de justicia.

4. Promover la equidad, la integración y la justicia social.

5. Establecer, vigilar y cautelar la estabilidad de las reglas de juego

para los agentes económicos.

6. Promover una adecuada inserción del sistema productivo en la

división internacional del trabajo.

7. Promover el respeto a la diversidad y el sentido de identidad

nacional.

8. Orientar, normar y ejecutar el planeamiento estratégico para el

desarrollo.

Habiendo asumido el Estado, principalmente el rol de regular al

mercado, amparando al derecho de los consumidores y usuarios, se

constituyeron los organismos reguladores, cuya función básica y

esencial consiste en actuar como factor de equilibrio y recomposición de

los diferentes intereses en juego, sin perjuicio de la posibilidad de que

los afectados por sus decisiones promuevan el control judicial en

defensa de sus derechos.

En principio, como ya se ha señalado, es rol del Estado garantizar las

reglas de la libre competencia. Ello implica establecer un marco

normativo e institucional al cual deben sujetarse los agentes del

mercado.

Page 43: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

43

Ahora bien, ¿hasta cuánto puede regular el Estado al mercado, para

precisamente no denaturalizar su esencia? Pues en principio deben

prevalecer la libre competencia y el libre mercado.

Otro de los roles asignados al Estado en la economía social de mercado

consiste en promover y orientar el desarrollo, que se infiere de

interpretar los artículos 44 y 58 de la Constitución.

Promover el desarrollo no es lo mismo que planificar el desarrollo. Éste

último se asocia al modelo de economía centralmente planificada. En la

economía social de mercado, el mercado es el asignador de los

recursos y el espacio de distribución de la riqueza.

Finalmente, el tercer rol asignado al Estado en la economía social de

mercado consiste en realizad actividad empresarial subsidiaria, en la

medida que al sector privado no le resulte atractivo, en actividades

considerada de alto interés público o de manifiesta conveniencia

nacional.

El Estado, en la economía social de mercado, no asume un papel

pasivo, sino que por el contrario, desempeña un rol protagónico, como

se ha visto.

4.7. Problemática en torno al régimen de economía social de

mercado en el Perú

La economía social de mercado implementada con la vigente

Constitución Política de 1993 ha generado una serie de polémicas y

controversias.

Se ha denunciado su falta de sensibilidad con los derechos de los

trabajadores, dada la flexibilidad laboral implementada en el contexto

del referido régimen económico. Así mismo, se ha denunciado el

desamparado de los consumidores y usuarios frente a los excesos y

abusos de las empresas prestadoras de servicios públicos.

Page 44: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

44

Por otro lado, se ha denunciado el hecho de que si bien el régimen de

economía social de mercado ha permitido que el país obtenga altos

índices de crecimiento económico, no menos cierto es que ese

crecimiento no se ha traducido en un desarrollo sostenible que incluya a

todos los segmentos de la sociedad.

En su momento se deslizó la idea del famoso chorreo económico, es

decir, que gradualmente la riqueza alcanzaría a todos los sectores de la

sociedad, por medio de la inversión privada y la generación de puestos

de trabajo.

Se ha propuesto retornar a la anterior Constitución Política de 1979, de

la que se ha dicho tiene una mayor sensibilidad social, con los

trabajadores, los consumidores y usuarios. En el sentido que dicha

Constitución, que en el fondo se inspiró en la Constitución española de

1978, tiene una mayor sensibilidad social.

No han faltado las críticas al régimen económico vigente en la

Constitución Política, de tildarlo de modelo neoliberal, aludiendo a la

ideología del liberalismo, que coincidió durante la década de los ´90 con

el denominado “Consenso de Washington”.

Al respecto resulta oportuno precisar que, en realidad, la economía

social de mercado, como se ha explicado en su evolución histórica, se

basa en la doctrina social cristiana que se forjó en la Alemania

Democrática después de la segunda guerra mundial.

El liberalismo clásico en realidad floreció durante el siglo XIX, en la

denominada época Victoriana, cuando los ministros ingleses apostaban

por el libre cambio. Es más bien cuando surgen las ideologías de

contenido social, que el Estado empieza a asumir ciertas funciones de

bienestar social. Las primera Constituciones del mundo que tuvieron

una orientación social en el rol del Estado fueron la de Querétero de

1917 y la de Weimar de 1920.

Lo que debe quedar claro, es que en sí el modelo o régimen económico

no es el único factor del que dependa el desarrollo sostenible del país,

Page 45: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

45

De la mano deben implementarse otras medidas económicas, política y

sociales. Así, se ha sostenido que lo que realmente rige en nuestro país,

en materia económica, es una mezcla de mercantilismo con populismo.

El crecimiento económico no necesariamente asegura el desarrollo

sostenible de un país. Esto es evidente por cuanto el desarrollo debe

ser entendido bajo toda sus aristas.

Mientras que no internalicemos una conjunto de principios y de valores

que van de la mano con el modelo de economía social mercado, de

nada valdrán que tendamos las mejores leyes y Constituciones,

mientras que las personas no asumamos esos principios y valores.

Resulta interesante en ese sentido tomar como referencia las

conclusiones a las que el sociólogo alemán Max Weber arribó cuando

intentó de dar una explicación con relación al origen del capitalismo, en

su famoso libro titulado: “La ética protestante y el espíritu del

capitalismo”.

Para Weber el capitalismo se originó como consecuencia de la ética de

los protestantes europeos quienes empezaron a internalizar y cultivar

una serie de principios y valores con el propósito de servir a sus

semejantes y al mismo tiempo agradar a Dios. La disciplina, la

constancia, el ahorro y la inversión, muy pronto dieron lugar a una clase

capitalista, sobre la cual precisamente se edificó el moderno

capitalismo.

Lo que en ese sentido debemos cuestionarnos es porqué se critica al

régimen de economía social de mercado, mientras que al mismo tiempo

no internalizamos ni asumimos esos principios y valores que deben ir de

la mano.

Bajo este enfoque, el crecimiento económico y consecuentemente el

desarrollo se medía en función al gasto público del presupuesto estatal,

que genera los incentivos para lograr que las familiar tuvieron poder

adquisitivo y capacidad de gasto, con los consecuentes resultado de las

compras y la reactivación de la economía.

Page 46: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

46

El mercantilismo se reduce a la tristemente célebre frase del ex

Presidente Oscar R. Benavides: “Para mis amigos, todo; para mis

enemigos, la ley”. Consiste en que determinados grupos de poder

económico logra ventaja gracias a los favores del gobierno de turno.

Frente al mercantilismo, como en su oportunidad lo resaltaron De Soto,

Ghersi y Ghibellini:

“Se ha iniciado ya una revolución contra el mercantilismo, que ha estado

en gestación por décadas, pero que solo en los últimos años ha

empezado a mellarlo fuertemente: la informalidad”9.

La informalidad no es el problema. Es la solución que miles de peruanos

han hallado frente al estado de cosas imperante, mercantilista que cierra

filas entre los empresarios cortesanos que capturando el poder estatal,

diseñan una legislación que lo encarece todo.

Los costos de la formalización son diametralmente opuestos a los altos

índices de informalidad en el Perú. Sin embargo, estos miles de

peruanos que no pagan impuestos, operan sin licencias, trabajan más

de ocho horas diarias sin beneficios sociales, han diseñado sus propios

códigos como el resultado de la interacción espontánea entre los

mismos.

Por otro lado, el populismo consiste en que el gobierno de turno, con el

propósito de mantenerse en el poder, implementa programas y políticas

públicas de contenido social para así obtener impacto entre el

electorado y mantenerse en el poder.

En resumidas cuentas, más allá de lo que diga la Constitución, y más

allá de los modelos económicos a nivel internacional, lo que realmente

rige en el Perú es el mercantilismo y el populismo.

Si por economía social de mercado entendemos un régimen en el rigen

las leyes del libre mercado con ciertos grados de regulación estatal,

9 De Soto, Hernando. El otro sendero. Orbis Ventures S.A.C. Lima, 2005, p. 321.

Page 47: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

47

entonces ello dista mucho de la realidad peruana. Ahora bien, no menos

cierto es que esos grados de regulación estatal en el fondo constituyen

una válvula de escape para que se camuflen las políticas de corte

asistencial y planificador, en el que el Estado es el protagonista de la

economía.

Sumado al Estado mercantilista y populista que rige en el Perú, a todo

ello se suma el gran costo que implican los altos índices de corrupción.

Ésta no es más que el resultado de un exceso de legislación que lo

encarece todo. De esta manera, para eludir la aplicación de las costosas

leyes, comprar funcionarios –o como coloquialmente se dice, aceitarlos-

es una alternativa rentable.

4.8. La corrupción: fruto del mercantilismo y del populismo

Uno de los grandes problemas de la sociedad peruana es la corrupción.

Es un desafío el erradicarla. El historiador peruano Alfonso Quiroz

Norris (1956-2013), nos ofrece un interesante estudio titulado “Historia

de la corrupción en el Perú”. Así, nos precisa, refiriéndose a la

publicación en cuestión, que: “El presente estudio analiza la importante

histórica de la corrupción en el Perú, paradigmáticamente expuesto a su

perniciosa influencia. Los esfuerzos t escritos de quienes se opusieron a

sucesivas olas de corrupción ilimitada y sistemática brindan los hilos

conductores para detectar ciclos y deshilvanar causas y consecuencias

de una gobernación corrupta que puede rastrearse desde la época

colonial. Varias generaciones de redes corruptas adeptas a la violación

endémica de reglas establecidas, así como sus afines interconexiones

internacionales, surgen como factores que ligan las prácticas corruptas

en las esferas pública y privada”10.

El mercantilismo es la causa de la corrupción. En realidad, lo es el

empoderamiento del gobernante y de determinados grupos de interés

que cierran las puertas a los demás, estableciendo una suerte de club y

marginando a la generalidad.

10

Quiroz, Alfonso W. Historia de la corrupción en el Perú. Instituto de Estudios Peruano. Lima, 2013, p. 31.

Page 48: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

48

La tradición legalista peruana es la de la historia de la corrupción. Como

sostiene Enrique Ghersi, desde el enfoque del análisis económico del

derecho, la corrupción es el resultado de la excesiva legalidad. Es

producto del costo de ser formal o de cumplir la ley.

Refiere Ghersi que: “La corrupción es pues, desde mi punto de vista, un

efecto y no una causa. Es un efecto del alto costo de la legalidad.

Mientras no lo veamos así, podemos llenarnos la boca con fórmulas

retóricas y con condenas más o menos generales, pero nunca

produciremos instituciones más honestas”11.

Siguiendo la idea central de Ghersi, podemos sostener, que

efectivamente la corrupción no es la causa. Es el efecto del acto costo

de ser formales o legales en el mercado. De esta excesiva legalidad es

que el funcionario público saca provecho. La corrupción resulta ser una

suerte de prima o seguro que el interesado le paga al corrupto

funcionario para eludir la aplicación de la ley. O que se haga de la vista

gorda frente a sus ilícitas actividades.

La economía social de mercado, que tiene del libre mercado el

elemento de que todos los agentes económicos deben interactuar en

plena libertad bajo la idea de que todos somos iguales ante la ley, no

encaja con el sistema mercantilista y corrupto. La corrupción es propia

del mercantilismo.

Pues determinados grupos de poder económico sacan provecho gracias

a los favores del gobierno de turno, o eluden la aplicación de la ley,

abstrayéndose de la generalidad.

Si se pretende legitimar a la economía social de mercado como el

régimen que le ha permitido al Perú lograr el crecimiento con equidad,

es necesario combatir decididamente a la corrupción y al mercantilismo,

que terminan empañando los buenos resultados de la economía social

de mercado.

11

Ghersi, Enrique. Economía de la Corrupción. CEDICE. Rescatado de: http://www.hacer.org/pdf/ghersi3.pdf, p. 8.

Page 49: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

49

Durante los últimos años la corrupción se ha incrementado. Hoy es uno

de los principales problemas sociales que se deben afrontar,

conjuntamente con la inseguridad ciudadana. El sonado caso “Lava

Jato” en el Brasil ha repercutido no sólo en el Perú sino en una gran

mayoría de países latinoamericanos, comprometiendo a políticos y

hasta a ex Presidentes. La corrupción se encuentra en las grandes

esferas del poder.

Y ese es el mensaje que se le da a la sociedad: el que no es corrupto es

un tonto, pues para obtener éxito hay que sacarle la vuelta a la ley o

comprar conciencias y funcionarios. De allí también los altos índices de

inseguridad ciudadana. Las personas que delinquen llegan a la

conclusión de que si los políticos y funcionarios delinquen, ellos también

pueden hacer lo mismo, pues hay que sacar ventaja a como dé lugar.

La corrupción eleva los costos de transacción, pues a mayor corrupción

mayores reglamentos y normas que la pretendan frenar. Y más normas

es una invitación a darle mayor poder de arbitrariedad al funcionario

para cobrar cupos o abstraer de la aplicación de la ley a quien lo

compra.

La corrupción no calza con el régimen económico adoptado, en la

medida que ésta premia el esfuerzo y el talento de los agentes

económicos del mercado en un clima de libre competencia.

Ahora bien, ¿cómo combatir la corrupción en una sociedad que siente

que la misma forma parte de su idiosincrasia? El problema entonces es

cultural, siendo ésta una de las dimensiones del desarrollo sostenible.

Cuando la corrupción se ha internalizado tan profundamente en la

conciencia popular, al extremo que las personas la perciben como algo

normal, entonces debemos empezar a cuestionarnos sobre la

legitimidad de las instituciones.

La pregunta que debemos hacernos además es la siguiente: ¿el

problema de la corrupción es un problema de valores o de instituciones?

Page 50: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

50

Los valores es ya un tema de formación personal. Sin embargo, como

ha quedado demostrado, los sistemas legales pueden generar los

incentivos para que las personas sean más o menos corruptas. El

objetivo consiste entonces en quitarle poder a quienes ejercen el poder

para que no tengan capacidad de arbitrariedad.

Y como se ha precisado, la idea es que el marco legal ayude en ese

proceso. En realidad no hacen falta las leyes. Cuantas menos leyes

haya es mucho mejor. La corrupción, es pues el resultado del exceso de

leyes.

4.9. La tutela de los derechos de los consumidores y usuarios

Uno de los aspectos fundamentales del régimen de economía social de

mercado, es la apertura de los mercados, tanto internos como

internacionales. Las relaciones de consumo se han incrementado

precisamente con la apertura hacia los capitales internacionales.

Nuevas y mayores cadenas comerciales se han instalado en el Perú,

precisamente por las reglas de juego que incentivan la inversión privada

en territorio nacional.

En ese sentido, la economía social de mercado ha priorizado a las

relaciones de consumo, al extremo de tutelar prioritariamente al

consumidor o usuario, por ser precisamente la parte débil de la relación

de consumo. Según la Constitución Política, el Estado vela por los

derechos de la salud, la información y la seguridad de los consumidores

y usuarios.

Esto es fundamental, porque en las relaciones de consumo se

presentan situación de asimetría informativa. Es por ello que se obliga a

los proveedores a que informen sobre la inocuidad de los productos y

servicios que ofertan a los consumidores y/o usuarios, en salvaguarda

de su salud.

Los precios los fija la ley de la oferta y la demanda. Pero en el ámbito de

los servicios básicos, como agua y saneamiento, electricidad, telefonía,

Page 51: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

51

son regulados por los organismos reguladores, que cautelan y tutelan

los derechos de los usuarios.

Ahora bien, ¿qué entendemos por consumidor o usuario en el marco de

la nuestra vigente legislación? Al respecto, el Tribunal Constitucional, en

la sentencia recaída en el expediente 008-2003-AI/TC, ha definido a los

consumidores o usuarios bajo los siguientes términos:

“(…) El consumidor –o usuario- es el fin de toda la actividad económica;

es decir, es quien cierra el círculo económico satisfaciendo sus

necesidades y acrecentando su bienestar a través de la utilización de

una gama de productos y servicios. En puridad, se trata de una persona

natural o jurídica que adquiere, utiliza o disfruta determinados productos

(como consumidor) o servicios (como usuario) que previamente han

sido ofrecidos en el mercado (…)”.

Esta definición es fundamental para saber si nos encontramos a un

consumidor de productos, o un usuario de servicios. El consumidor o

usuario es fundamental pues en las relaciones de consumo. Todo el

proceso productivo de se centra en la satisfacción de las necesidades

de los mismos.

Así mismo, el propio Tribunal Constitucional, ha precisado que:

“El artículo 65º de la Constitución prescribe la defensa de los

consumidores y usuarios, a través de un derrotero jurídico binario, a

saber: a) establece un principio rector para la actuación del Estado; y, b)

consagra un derecho personal y subjetivo.

En el primer ámbito, el artículo 65° de la Constitución expone una pauta

basilar o postulado destinado a orientar y fundamentar la activación del

Estado respecto a cualquier actividad económica. Así, el juicio

estimativo y el juicio lógico derivado de la conducta del Estado sobre la

materia tiene como horizonte tuitivo la defensa de los intereses de los

consumidores y usuarios.

Page 52: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

52

En el segundo ámbito, el artículo 65º de la Constitución reconoce la

facultad de acción defensiva de los consumidores y usuarios en los

casos de transgresión o desconocimiento de sus legítimos intereses; es

decir, reconoce y apoya el atributo de exigir al Estado una actuación

determinada cuando se produzca alguna forma de amenaza o

afectación efectiva de los derechos del consumidor o del usuario,

incluyendo la capacidad de acción contra el propio proveedor”12.

En suma, el Estado adopta una función tuitiva con relación a los

consumidores y usuarios, dado que en la relación de consumo son la

parte débil. Y el Estado, en el propósito de salvaguardar la igualdad,

equilibra esa relación, reconociéndole una serie de derechos a los

consumidores y usuarios: a la información, a la salud y, a la seguridad.

Esto es fundamental, por cuanto no basta que se establezcan los

derechos de los cuales gozan los consumidores y usuarios si es que al

mismo tiempo éstos no encuentran tutela procesal efectiva en el Estado.

Así es, no basta el reconocimiento de los derechos, si es que no se

implementan los mecanismos y las instituciones de tutela a tales

derechos. En el caso de los consumidores y usuarios, el INDECOPI es

la institución rectora que los tutela. Además de los organismos

reguladores de determinados servicios, en campo de la telefonía, los

servicios de saneamiento, los servicios de energía eléctrica, los

servicios educativos y de salud.

Los derechos de los consumidores y usuarios que el Estado cautela,

son los de información, seguridad y salud. Es evidente que la

información es un elemento fundamental en el proceso de formación de

la voluntad del consumidor, pues sin la misma no podrá tomar la

decisión respecto de si contrata o no el servicio o si compra o no el

producto.

Es por ello que en la denominada etapa precontractual, es decir, cuando

se está celebrando el contrato, el proveedor tiene la obligación de

12

Sentencia del expediente 1865-2010-PA/TC.

Page 53: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

53

brindador al consumidor o usuario toda la información que sea

necesaria para que éste pueda tomar la decisión adecuada. Si bien es

cierto que aún no hay contrato, pero ya las partes están obligadas a

brindarse toda la información para el correcto proceso de formación de

la voluntad.

Efectivamente, una de las principales circunstancias que se presenta

entre proveedores y consumidores, es la asimetría informativa. Es el

proveedor quien se encuentra en una mejor situación respecto del

conocimiento sobre el producto o servicio. Y es sobre quien recae la

obligación de brindar la información al consumidor o usuario.

Con relación al derecho a la seguridad de los consumidores y/o

usuarios, este derecho es fundamental, por cuanto de por medio está la

integridad física y emocional de los mismos, y si esto no se cumple,

puede dar lugar a situaciones de daños y perjuicios que deben ser

reparados por medio de la indemnización.

Finalmente, las mayor parte de los productos que compramos, los

consumimos, siendo que de una u otra manera producen un efecto

sobre nuestra salud. La información está asociada a este derecho, por

cuanto la inocuidad de los productos debe verificarse con las

reglamentaciones que dicta el Estado en salvaguarda de la salud

pública.

4.10. La tutela de los derechos de los trabajadores

Si bien, como ya se ha precisado, la vigente Constitución ha introducido

al régimen de economía social de mercado, que prioriza al mercado

como el escenario de reparto de la riqueza y de la generación de

puestos de trabajo, sin embargo, ello no significa que la Constitución y

el Estado dejen en desamparado a los trabajadores y sus derechos.

Así, en el artículo 22 de la Carta Magna se precisa que: “El trabajo es

un deber y un derecho. Es base del bienestar social y un medio de

realización de la persona”.

Page 54: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

54

Así mismo, en el artículo 24 se establece que:

“El trabajador tiene derecho a una remuneración equitativa y suficiente,

que procure para él y su familia, el bienestar material y espiritual.

El pago de la remuneración y de los beneficios sociales del trabajador

tiene prioridad sobre cualquiera otra obligación del empleador.

Las remuneraciones mínimas se regulan por el Estado con participación

de las organizaciones representativas de los trabajadores y de los

empleadores”.

De ello se puede colegir, que la Constitución no ha desamparado a los

trabajadores, que son piezas fundamentales en las relaciones

económicas del mercado. El factor trabajo en el proceso productivo es

importante. Es por ello de vital importancia incentivar significativamente

a la clase trabajadora para que tenga ingresos dignos que cubran su

calidad de vida.

Esto es fundamental, por cuanto el trabajador tiene derecho a conservar

el puesto de trabajo y no ser despedido sino por causa justa.

Sin embargo, no puede desconocerse el hecho que los mercados

laborales requieren de incentivos. Y ello implica reducir los costos para

que las empresas privadas puedan invertir y así generar puestos de

trabajo.

Y al igual que en el ámbito de tutela de los derechos de los

consumidores y usuarios, es necesario que el Estado implemente los

mecanismos procesales y las instituciones que tutelen los derechos de

los trabajadores. Así, se cuenta con el Ministerio de Trabajo y

Promoción del Empleo, así como con la Superintendencia Nacional de

Fiscalización Laboral (SUNAFIL).

Los derechos de los trabajadores en una economía social de mercado

no quedan desamparados, por cuanto partiendo del modelo político y

económico contemplado en la Carta Magna, partimos del Estado Social

y Democrático de Derecho, en el que si bien se garantizan las libertades

Page 55: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

55

individuales, no menos cierto es que esa libertad debe estar limitada por

los derechos sociales.

En el caso que nos ocupa, los derechos de los trabajadores, como

derechos fundamentales, se desprenden de la dignidad humana.

Efectivamente, la dignidad humana:

“Es la piedra angular de los derechos fundamentales de las personas,

así como el soporte estructural de todo el edificio constitucional, tanto

del modelo político como del modelo económico y social. Siendo esto

así: ¿Cuáles son los medios para procurar la defensa de la persona,

según enuncia nuestro texto constitucional? En el Estado Social y

Democrático de Derecho, estos medios son precisamente los derechos

fundamentales, los cuales se constituyen como una forma de tutelar de

manera óptima al hombre en su dignidad y libertad, en tanto son aquel

conjunto de facultades e instituciones que, en cada momento histórico,

concretan estas exigencias, las cuales deben ser reconocidas

positivamente”13.

El punto de quiebre de la economía social de mercado, en cuanto a las

relaciones laborales entre trabajadores y empleadores, radica en

precisamente colocar un punto de equilibrio. Por cuanto si bien es cierto

que el factor capital es fundamental para la generación de trabajo, no

menos cierto es que sin el trabajo humano no sería posible la creación

de riqueza.

El derecho no puede dejar desamparados a los trabajadores, por cuanto

éstos desempeñan una tarea importantísimo en la sociedad. Merecen

un trato digno acorde con la calidad de vida. Ahora bien, hacer

responsables de ello al sector privado, constituye un exceso, por

cuando nadie es responsable que las condiciones económicas se hayan

dado de esta manera.

Ya el Tribunal Constitucional ha precisado que:

13

Landa Arroyo, César. El derecho del trabajo en el Perú y su proceso de constitucionalización: análisis especial del caso de la mujer y la madre trabajadora. En: “Themis Revista de Derecho”. Rescato de: http://revistas.pucp.edu.pe/index.php/themis/article/viewFile/10870/11375, pp. 219-241, p. 220.

Page 56: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

56

“El artículo 22 de la Constitución Política del Perú establece lo siguiente:

“El trabajo es un deber y un derecho. Es base del bienestar social y

medio de realización de una persona”. Mientras que el artículo 27 de la

Carta Magna señala: “La ley otorga al trabajador adecuada protección

contra el despido arbitrario””14.

En ese contexto, uno de los argumentos que se ha esgrimido a favor de

una cierta discrecionalidad que podría tener el empleador para poner fin

al vínculo laboral con el trabajador, es la situación económica propia del

mercado, en el sentido que el empresario o empleador se mide en

función a sus costos laborales, siendo los trabajadores un costo que

muchas veces los empleadores no quieren asumir en determinadas

circunstancias.

Es por ello que la ley protege la estabilidad laboral, sancionando los

despidos arbitrarios, es decir, aquellos que se dan por causal que no

esté prevista en la ley.

Pero sí el gobierno es responsable de brindar las garantías de un orden

tanto político como legal en que pueda prosperar la inversión privada

que genera puestos de trabajo. Son los gobernantes los responsables

que se establezcan las condiciones de estabilidad. Ello se logra con una

legislación y un marco jurídico que genere los incentivos para la

inversión privada, tanto nacional como extranjera.

Por otro lado, no puede dejarse de mencionar el hecho de que las

demandas de contenido laboral son muchas veces aprovechadas por

sindicatos de trabajadores que politizan las demandas de la sociedad, al

extremo de violentar a la propiedad pública y privada, en función a

agendas político – partidarias de determinados grupos políticos que

tienen sus propis intereses al margen de las amplios intereses

nacionales, y especial de la clase trabajadora.

14

Sentencia del expediente 00512-2016-PA/TC.

Page 57: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

57

Es por ello de vital importancia despolitizar al derecho laboral, y

construir una agenda entre todos los sectores involucrados: Estado,

empresa privada, clase trabajadora, sociedad civil. Ello se logra

estableciendo mecanismos y puentes de diálogo entre todos los

involucrados. Correspondiéndole al Estado hacer las veces de

intermediario.

Page 58: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

58

V. MÉTODOS O PROCEDIMIENTOS

5.1. Tipo y nivel de investigación

Este estudio reúne las condiciones metodológicas de una investigación:

a. Tipo

Es descriptiva, porque en ella se define de manera detallada el

tema materia de estudio, esto es, la problemática en torno al

régimen de economía social de mercado en el Perú.

b. Nivel

Con respecto al nivel de la presente investigación, se trata de

una investigación explicativa, pues se explica la problemática

sobre el régimen de economía social de mercado en el Perú.

5.2. Método y diseño de investigación

a. Método

La presente investigación es una mezcla de lo inductivo con lo

deductivo. La inducción implica ir concluyendo las ideas

centrales de la investigación de lo particular a lo general

Mientras que la deducción implica concluir las ideas de la

investigación de lo general a lo particular. Esta mezcla de

inducción y deducción retroalimenta a la investigación, pues el

todo es la suma de sus partes, y las partes no son tales sino no

conforman un todo.

b. Diseño

Bajo un enfoque cualitativo, pues se ha realizado un análisis

subjetivo del tema investigado, esto es, la problemática en torno

Page 59: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

59

al régimen de economía social de mercado en el Perú, sobre la

base de información teórica y una variada literatura de autores

varios versados en el tema.

5.3. Técnicas e Instrumentos de Recolección de datos

a. Técnicas

Se ha recurrido a la técnica del análisis documentos, dado que

se han tenido que consultar diversos textos, entre libros,

artículos, ensayos en pdf y virtuales, relacionados al tema

investigación.

b. Instrumentos

Los instrumentos de recolección de datos han consistido en

fichas de observación, precisamente destinadas al análisis

documental, dado que el trabajo investigado ha tenido un diseño

y enfoque cualitativo respecto de la problemática en torno al

régimen de economía social de mercado contemplado en la

Constitución Política.

Page 60: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

60

VI. RESULTADOS

a. CONTRASTACIÓN DE LA HIPÓTESIS

En este estadio del presente trabajo de investigación nos avocaremos a

la contrastación de la hipótesis, recurriendo a la interpretación de la

información como técnica descriptiva.

Siendo el problema principal: ¿En qué medida el régimen de economía

social de mercado contemplado en la Constitución Política del Estado

incide en el crecimiento y desarrollo del país? La hipótesis principal a la

que se ha arribado, y que es una respuesta a tal problema principal, es

la siguiente: El régimen de economía social de mercado contemplado en

la Constitución Política del Estado incide en el crecimiento y desarrollo

del país en grado significativo.

Al respecto debe precisarse que, como consecuencia de la

implementación del régimen de economía social de mercado en la

vigente Constitución Política desde el 1 de Enero de 1994, el Perú ha

mostrado altos índices de crecimiento económico y desarrollo social.

Sin embargo, ese crecimiento no sólo se ha debido al nuevo régimen

económico, sino a un conjunto de medidas económicas y políticas

implementadas por el gobierno de entonces durante la década de los

´90, esto es, estabilización de la moneda, reducción de la hiperinflación,

agresivo programa de privatizaciones, asumiendo el Estado un rol

regulador del mercado, siendo el sector privado el motor para la

generación de puestos de trabajo y el crecimiento económico.

La tasa de crecimiento del PB per cápita del Perú durante el quinquenio

1991-1995 superó el 3%, en comparación al quinquenio 1986-1990 que

fue de -4%. Durante el quinquenio 1996-2000 apenas llegó al 1%,

habiendo mostrado una recuperación para el periodo 2001-2005 que

superó el 2%.

Page 61: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

61

En el siguiente gráfico puede apreciarse la evolución de dicha tasa de

crecimiento que comprende desde el año 1961 al 2005:

En un estudio titulado: “Panorama de la Economía Peruana 1950-2016”

del Instituto Nacional de Estadística e Informática, se aborda el período

2001-2010, que es el que nos interesa para medir el impacto de las

medidas económicas de primera generación que se implementaron

durante la década de los ´90, y que concluyeron con el fin del régimen

fujimorista, dando paso a la democracia.

Se ha sostenido la idea de que tales reformas económicas que

liberalizaron a la economía nacional no podían haberse dado en

democracia, pues se necesitaba un gobierno con autoridad y mano

dura, frente al contexto del terrorismo y la violencia social.

En el referido estudio del INEI se precisa que: “En esta década el PBI

creció 5,6% promedio anual, la tasa más alta en los decenios

transcurridos desde 1950. El PBI por habitante creció a una tasa media

anual de 4,3%, pasando de 8 mil 552 nuevos soles por persona en el

año 2000 a 12 mil 969 nuevos soles en el año 2010”15.

15

INEI. Panorama de la Economía Peruana 1950-2016. Lima, mayo 2017. Rescatado de: https://www.inei.gob.pe/media/MenuRecursivo/publicaciones_digitales/Est/Lib1424/libro.pdf, p. 47.

Page 62: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

62

Debe precisarse que en dicho periodo, ya recuperada la democracia, los

gobiernos empezaron a suscribir una serie de acuerdos comerciales con

otros países, para aperturar los mercados internacionales y diversificar

los destinos de los productos nacionales. Un factor determinante

también fue el favorable precio internacional de los minerales, siendo el

Perú un país minero.

Efectivamente, durante la década de los ´90 “(…) se implementó un

programa de estabilización y reformas, con el acompañamiento de los

organismos internacionales (Fondo Monetario Internacional, Banco

Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo), que privilegió el

mercado como institución para la asignación de recursos, reduciendo

significativamente la participación del Estado en la economía. A lo largo

de los años 90 se implementó el proceso de privatización, las

principales se realizaron en los sectores de las telecomunicaciones,

electricidad, sistema financiero, hidrocarburos, minería y la siderurgia. El

proceso de reforma estructural, significó un profundo cambio en la

institucionalidad en relación a la prevaleciente en los años 70”16.

Ahora bien, respecto de las hipótesis específicas, que son respuestas a

los problemas específicos, debe precisarse que:

El problema específico planteó la interrogante siguiente: ¿En qué

medida el régimen de economía social de mercado contemplado en la

Constitución Política del Estado incide en la garantía de los derechos de

los consumidores y usuarios? Frente a ello, la hipótesis específica

respondió: El régimen de economía social de mercado contemplado en

la Constitución Política del Estado incide en la garantía de los derechos

de los consumidores y usuarios en grado significativo.

En esa medida, debe precisarse que de conformidad con lo previsto en

la Constitución Política, en su artículo 65 se estipula que: “El Estado

defiende el interés de los consumidores y usuarios. Para tal efecto

garantiza el derecho a la información sobre los bienes y servicios que se

16

INEI. Op. cit., p. 49.

Page 63: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

63

encuentran a su disposición en el mercado. Asimismo vela, en

particular, por la salud y la seguridad de la población”.

Efectivamente, en el marco del nuevo régimen económico, el Estado

asumió un rol regulador, velando principalmente por los derechos de los

consumidores y/o usuarios, que vienen a ser la parte débil de las

relaciones de consumo.

Según Herbert Tassano, entonces Presidente del Consejo Directivo del

Indecopi: “Hay un balance positivo porque se ha generado un mayor

conocimiento de los derechos que tienen los consumidores y sobre

cómo ejercerlos frente a los proveedores Esa evolución se refleja en el

incremento de las atenciones que el Indecopi hace a los consumidores,

las cuales aumentan en promedio en un 23% cada año y un 70%

aproximado de los reclamos han sido declarados fundados, es decir

dándole la razón al denunciante”17.

Sumado a ello, es importante resaltar que la propia sociedad civil se ha

organizado en torno a Asociaciones de Defensa de los Consumidores,

velando por los derechos de los consumidores y usuarios. Si bien el

Estado tutela tales derechos, son los propios ciudadanos quienes dan

impulso a los trámites administrativos de reclamaciones ante los

organismos reguladores como el Indecopi, el Osiptel, el Osinergmin, la

Sunass, etc., en el contexto del Código de Protección y Defensa del

Consumidor.

Por otro lado, con relación al segundo problema específico: ¿En qué

medida el régimen de economía social de mercado contemplado en la

Constitución Política del Estado incide en la garantía de los derechos de

los trabajadores?, la hipótesis específica correspondiente es: El régimen

de economía social de mercado contemplado en la Constitución Política

del Estado incide en la garantía de los derechos de los trabajadores en

grado significativo.

17

Rescatado de: http://udep.edu.pe/hoy/2015/cada-ano-ejercemos-mas-y-mejor-nuestro-derecho-de-consumidores/.

Page 64: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

64

Debe precisarse que, en el contexto del régimen de economía social de

mercado, que prioriza al mercado como el escenario de asignación

eficiente de recursos y de generación de puestos de trabajo, el mercado

laboral se ha flexibilizado. Ello no significa un desamparo legal de los

derechos de los trabajadores. Si no más bien crear las condiciones de

incentivos para que los agentes económicos y la inversión privada

puedan crear puestos de trabajo.

Así, “El crecimiento económico ha permitido un mayor dinamismo del

mercado laboral urbano y rural durante el periodo 2005-2011. La tasa de

desempleo total ha pasado de 9.5% en 2005 a 5.8% en 2011. Los

ingresos laborales han seguido una tendencia creciente tanto a nivel

nacional como regional, lo que ha permitido percibir una convergencia

salarial departamental. Además, las oportunidades para conseguir un

empleo de mejor calidad han ido en aumento. La proporción de

trabajadores subempleados ha decrecido 23 puntos porcentuales en

siete años. La proporción de trabajadores informales también ha

mostrado una tendencia decreciente, que va de la mano con la mayor

proporción de trabajadores dependientes (44% a 2011)”18.

Debe recordarse que antes de la implementación del régimen de

economía social de mercado, las cifras laborales no eran muy

alentadoras. Altas tasas de desempleo y subempleo, con salarios

mínimos y derechos laborales recortados. Si bien existía informalidad

laboral, aquella se debía al alto costo que significa la formalización

laboral.

Es precisamente con la flexibilización laboral que trajo el nuevo régimen

económico, que las empresas privadas han reconocido los incentivos

para invertir y generar puestos de trabajo.

La economía social de mercado, como ha podido advertirse, debe

garantizar una serie de derechos y libertades, que son básicos, y son

sobre los cuales precisamente descansa este régimen. Estos derechos

son: propiedad privada, libertad de contratación, libertad de empresa,

18

MACROCONSULT. El Mercado laboral peruano Evolución en un periodo de crecimiento. Rescatado de: http://lampadia.com/archivos/MACROCONSULT.pdf.

Page 65: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

65

libertad de trabajo. Los agentes económicos del mercado se verían

imposibilitados de interactuar en el mercado si es que no se les

garantiza este mínimo de derechos y libertades.

De esta manera, desde el derecho y las leyes, se garantiza un orden

económico en el que la interacción espontánea de los agentes del

mercado opera de tal suerte que lo que marca la pauta es la voluntad

privada de las personas, en obligarse y ganar derechos.

La economía social de mercado no puede operar si es que al mismo

tiempo no se garantizan las libertades políticas. No es posible garantizar

solamente la libertad económica que se ejerce en el mercado, sin que

se garantice la libertad política que se ejerce en la democracia. La

libertad es una sola. Es decir, no puede haber mercado sin democracia.

En conclusión, la democracia y el mercado son dos aspectos

fundamentales del estado de derecho. Éste, es una fórmula política por

medio de la cual se garantizan hasta tres aspectos: supremacía de las

leyes, separación de poderes, y plena vigencia de los derechos de las

personas. Así mismo, no puede haber democracia sin economía de

mercado. Son dos espacios en los que las personas ejercemos, por un

lado, nuestros derechos políticos, y por otro lado nuestros derechos

económicos.

La libertad no es algo que pueda retacearse, es una sola. No se puede

otorgar solamente libertad política sin libertad económica, o solamente

libertad económica sin libertad política. De ello se debe encargar el

gobierno, de garantizarle a todas las personas, el pleno ejercicios de

sus derechos y libertades.

A nivel internacional, el caso emblemático es el de la República Popular

China. Como consecuencia de las reformas económicas, la China se

inclinó hacia el capitalismo, a la economía de mercado. Sin embargo,

carece de libertades políticas, pues no hay democracia ni estado de

derecho. A la larga, la consolidación de una clase de propietarios exigirá

elecciones y el reconocimiento de derechos políticos en democracia.

Page 66: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

66

En resumen, creemos que si bien el régimen de economía social

implementado en la Constitución Política de 1993 ha traído grandes

progresos para la sociedad, no menos cierto es que el cambio legal no

bastó, sino que debió ir acompañado de medidas económicas, entre

ellas la liberalización del mercado y su desregulación, la estabilización

de la moneda, la celebración de una serie de acuerdos de libre

comercio.

El reto sin embargo también radica que legitimar al modelo ante la

opinión pública y la sociedad, pues tantos años de sacrificios por parte

de la sociedad podrían venirse abajo, si es que no se logra que todos

los segmentos de la sociedad sientan suyos los beneficios del régimen

de economía social de mercado, para precisamente mantenerlo

sostenidamente en el tiempo.

Sin embargo, cada cinco años cuando debemos en el Perú Presidente

de la República y Congresista, saltan a la palestra candidatos

antisistema de gran raigambre popular entre los sectores excluidos por

el sistema, que proponen medidas y planes de gobierno radicales, que

significarían un gran retroceso.

A esos candidatos antisistema, que si bien es cierto compiten en

democracia por el poder, sin embargo sería beneficioso colocarles un

límites desde las leyes, para evitar que siquiera tienen el poder. El

Acuerdo Nacional podría significar una valiosa herramienta, en la

medida que obliga moralmente a todas las fuerzas políticas de la

sociedad a respetar el mantenimiento de la democracia, el estado de

derecho y el régimen de economía social de mercado.

Sea cual fuere el gobierno, y sean cuales fueren sus inclinaciones

ideológicas, debe garantizarse la continuidad en el modelo o régimen

económico de economía social de mercado, por cuanto sólo insistiendo

en el mismo y profundizando las reformas se podrán lograr los objetivos

de desarrollo económico, social y político, del que se sientan

representados todos los segmentos de la sociedad, para precisamente

lograr la legitimidad del modelo, y así neutralizar a los candidatos

antisistema que constituyen una gran amenaza, no sólo para las clases

Page 67: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

67

pudientes, como habitualmente se cree, sino principalmente a los más

pobres, porque los más perjudicados de medidas extremistas son los

excluidos.

Page 68: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

68

VII. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

a. CONCLUSIONES

Del estudio y desarrollo del tema que nos ha convocado, sobre la

problemática en torno a la economía social de mercado, pueden

arribarse a las siguientes conclusiones:

Primero.- El régimen de economía social de mercado es un régimen que

en el Perú se implementó por primera vez en la Constitución Política de

1979, pero sin embargo, con un mayor contenido social que la actual

Constitución de 1993. Se trata de un modelo ecléctico entre la

economía de libre mercado y la economía centralmente planificada.

Como experiencia, fue recogido de la Alemania Occidental después de

la Segunda Guerra Mundial.

Segundo.- El régimen de economía social de mercado implementado en

la vigente Constitución de 1993 tiene un corte más pro mercado. Es

decir, se reduce a la siguiente frase: cuanto mercado sea posible y

cuanto Estado sea necesario. Es decir, prioriza al mercado como el

escenario idóneo para la asignación eficiente de recursos y creación de

riqueza.

Tercero.- En el vigente régimen de economía social de mercado, el

Estado básicamente cumple tres funciones: (i) regular normativamente

al mercado, (ii) realizar actividad empresarial subsidiaria y, (iii) promover

y orientar el desarrollo. Todo ello en un régimen de libre competencia.

Cuarto.- Sin embargo, el contenido social del régimen de economía

social de mercado se circunscribe a que el Estado no se desentienda de

los aspectos básicos de la sociedad, como son la provisión de servicios

básicos, entre ellos educación, salud, vivienda, agua y desagua,

electricidad. Pero debe tenerse presente que, de conformidad con el

artículo 58 de la Constitución, el Estado cumple un rol subsidiario, es

decir, es en primer plano el sector privado el encargado de proveer

estos servicios en un régimen de mercado regulado, y si no lo hace

Page 69: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

69

porque quizás no le resulte rentable, lo hace el Estado

subsidiariamente, es decir, en reemplazo.

Quinto.- El régimen de economía social de mercado tiene ya cerca de

25 años implementado desde la vigente Constitución Política de 1993.

Sin embargo, si bien es cierto ha incidido significativamente en los

índices de crecimiento económico y de desarrollo, aún no ha logrado

erradicar al 100% la pobreza y el subdesarrollo.

Sexto.- El tema sensible del derecho del consumidor y el derecho de

los trabajadores, la economía social de mercado ha dado alta prioridad

a que se respeten los derechos de la parte débil de una relación de

consumo, como son los consumidores y usuarios, quienes se

encuentran en una situación de desventaja por las asimetrías

informativas frente a los proveedores. El Estado vela principalmente por

los derechos a la información y a la salud de los consumidores y

usuarios. En el plano del derecho de los trabajadores, la legislación

laboral que se ha dado, si bien ha tendido a generar los incentivos

reduciendo los costos laborales para que las empresas inviertan y

generen puestos de trabajo, ello no ha significado un desconocimiento

de los derechos laborales de los trabajadores.

Sétimo.- El reto más importante para lograr una mayor legitimidad de la

economía social de mercado implementada en la Constitución Política

vigente del Perú, es en plano de las ideologías políticas. Son los grupos

radicales de extrema izquierda los que pretenden implantar un modelo

económico en el que el Estado tenga un mayor protagonismo en la

economía, al extremo que aquel la planifique, fije los precios, realice

actividad empresarial.

Octavo.- La economía social de mercado ha logrado en cierta medida

conciliar los intereses del sector privado con los intereses nacionales.

Pues si bien las empresas privadas tienen todo el derecho de lucrar, no

menos cierto es que el Estado debe ser el garante de los intereses

nacionales o colectivos.

Page 70: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

70

Noveno.- Finalmente, al margen de los diga la Constitución en materia

económica, lo que realmente rige en el Perú, no es la economía social

de mercado sino una mezcla de mercantilismo y de populismo.

c. RECOMENDACIONES

Del estudio y desarrollo del tema que nos ha convocado, sobre la

problemática en torno a la economía social de mercado, pueden

formularse a las siguientes recomendaciones:

Primero.- Para lograr mayor legitimidad del régimen de economía social

de mercado, se recomienda que el gobierno recurra a la comunicación

con la sociedad civil para que tome conciencia de los beneficios del

régimen económico en cuestión, de las bondades, ventajas y buenos

resultados que viene dando su implementación.

Segundo.- Para lograr que el régimen de economía social de mercado

siga rindiendo sus resultados y frutos, se recomienda que el gobierno

insista con su implementación, que no caiga en el facilismo de modificar

el actual régimen, porque ello significaría un retroceso en los grandes

logros obtenidos, echando por la borda todos los sacrificios de muchas

generaciones.

Tercero.- Para lograr un mayor consenso entre la clase política en torno

al régimen de economía social de mercado, se recomienda insistir en la

suscripción de pactos políticos que comprometan a los políticos a insistir

en el régimen económico, en toda instancia de toma de decisiones

públicas.

Cuarto.- Para lograr mayor legitimidad del régimen de economía social

de mercado, se recomienda que se combata la corrupción propia del

mercantilismo y del populismo. En realidad, lo que distorsiona la buena

imagen y los buenos resultados de la economía social de mercado, son

los grandes problemas de la sociedad, como la corrupción.

Page 71: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

71

Quinto.- Para lograr la estabilidad en el tiempo del régimen de economía

social de mercado, es necesario que la clase política, con la sociedad

civil y el gobierno, suscriban una suerte de pacto o acuerdo por el cual

se comprometan a dale continuidad a las políticas de Estado en cuanto

a la economía social de mercado.

Page 72: UNIVERSIDAD PRIVADA DE ICA

72

BIBLIOGRAFÍA

1. Águila Grados, Bruno. El ABC del Derecho Constitucional. EGACAL-Editorial

San Marcos. Lima, 200.

2. Chirinos Soto, Enrique. La Nueva Constitución al alcance de todos. Editores

Importadores S. A. Lima, 1986.

3. De Soto, Hernando. El otro sendero. Orbis Ventures S.A.C. Lima, 2005.

4. Flores Nano, Lourdes. La Reforma Constitucional desde la perspectiva de

Unidad Nacional. En: “Reforma del Estado Reforma de la Constitución”.

Comisión Andina de Juristas – Konrad Adenauer Stiftung. Lima, 2005, pp. 143-

162.

5. García Belaunde, Domingo. La Constitución en el péndulo. Editorial UNSA.

Arequipa, 1996.

6. Ghersi, Enrique. Economía de la Corrupción. CEDICE. Rescatado de:

http://www.hacer.org/pdf/ghersi3.pdf.

7. Guillermo Morales, Carlos. El rol del Estado en una economía social de

mercado. En: “Temas de pensamiento político”. Fundación Konrad Adenauer

en el Perú. Instituto Peruano de Economía Social de Mercado. Lima, 2003, pp.

63-90.

8. Herrera Paulsen, Darío. Derecho Constitucional e Instituciones Políticas.

Editorial y Distribuidora de Libro S. A. Lima, 1987, págs. 144 y 145.

9. INEI. Panorama de la Economía Peruana 1950-2016. Lima, mayo 2017.

Rescatado de:

https://www.inei.gob.pe/media/MenuRecursivo/publicaciones_digitales/Est/Lib1

424/libro.pdf, p. 47.

10. Landa Arroyo, César. El derecho del trabajo en el Perú y su proceso de

constitucionalización: análisis especial del caso de la mujer y la madre

trabajadora. En: “Themis Revista de Derecho”. Rescato de:

http://revistas.pucp.edu.pe/index.php/themis/article/viewFile/10870/11375, pp.

219-241.

11. MACROCONSULT. El Mercado laboral peruano Evolución en un periodo de

crecimiento. Rescatado de:

http://lampadia.com/archivos/MACROCONSULT.pdf.

12. Quiroz, Alfonso W. Historia de la corrupción en el Perú. Instituto de Estudios

Peruano. Lima, 2013.